•Encofrado es el molde en el que se vierte el hormigón húmedo para darle forma. El término encofrado incluye el contacto material real con el hormigón y toda la estructura de soporte asociada necesaria. Hay diferentes tipos de encofrados disponibles para diferentes propósitos.
•Por lo general un encofrado está hecho de madera o acero (pueden usarse
ENCOFRADO otros materiales para aplicaciones especializadas), y la superficie en contacto con el hormigón se selecciona para dar el acabado requerido. La resistencia del encofrado y la cimbra asociada deben ser suficientes para soportar el peso del hormigón húmedo sin sufrir una distorsión significativa.
•El encofrado se ha estado usando desde el comienzo de la construcción de
hormigón. Generalmente se elimina una vez que el hormigón ha conseguido suficiente resistencia (encofrado temporal), aunque en algunas circunstancias puede dejarse en su lugar (encofrado permanente). USO DE ENCOFRADO • Suelen utilizarse productos desencofrantes (barnices antiadherentes y preparados a base de aceites solubles en agua) para simplificar el desencofrado y si son de madera se humedecerán con anterioridad para impedir que absorban agua del hormigón. • El encofrado necesita de elementos auxiliares que permitan soportar, entre otras, las acciones del hormigón fresco: cimbras, puntales, celosías y tensores. Además, para que el encofrado cumpla con su misión, se le deben requerir algunas características como seguridad, estanqueidad y facilidad de montaje, entre otras. El encofrado supone, aproximadamente, un tercio del coste de una estructura de hormigón, siendo muy importante la partida de mano de obra. El número de usos y si el paramento va a quedar visto son factores que van a influir fuertemente en el coste económico. La estructura soporte debe dimensionarse teniendo en cuenta las acciones siguientes:
Peso del hormigón fresco más el peso del propio
encofrado como peso muerto.
Sobrecargas de uso, entre las que tenemos las
originadas por personas, equipos, medios auxiliares, incluyendo impactos.
Cargas horizontales, tales como viento, las
originadas por soportes inclinados, arranques y paradas de equipos, etc. Materiales para encofrar • En edificación, los materiales para encofrar suelen ser metálicos o de madera. • Las chapas de encofrar metálicas presentan la ventaja de que son de fácil montaje y duran más. Sin embargo, son piezas de una forma determinada difíciles de adaptar a formas irregulares. Al unirse, dejan marcas en el muro o pilar endurecido. • Los tableros de encofrar, en cambio, son más ligeros y se pueden trabajar para adaptarlos a las formas irregulares del hormigón. Según el tipo de madera utilizado, se consigue un acabado diferente. Como contraindicaciones, se degradan más fácilmente y hay que tener cuidado en su mantenimiento y montaje. • Para la elevación de pilares, se suele utilizar tubos de encofrar de cartón. Actualmente existen el mercado una gran variedad de tubos de diferentes medidas, formas (pilares circulares, cuadrados, esquineros…) y acabados. Se caracterizan por ser desechables, de fácil manejo, colocación y retirada.
• En todos los casos, las principales características son de los materiales
para encofrar son:
• Rigidez y resistencia, para soportar el peso del hormigón y conseguir la
forma deseada. • Estanqueidad, las juntas deben ser herméticas para que no haya fugas de hormigón ni defectos en la superficie de la estructura. • Resistencia a la acción del agua, los aditivos y otros componentes del hormigón. • No adherencia fuerte al hormigón una vez seco, para que se puedan extraer fácilmente. • Los puntales son elementos auxiliares pero imprescindibles en los trabajos de encofrar. Son unas barras de hierro que actúan temporalmente de apoyo o soporte de la estructura de chapas o tablros de encofrar hasta que el hormigón fragüe y se sostenga por si mismo.