referencia a la definición de probabilidad entendida como el cociente entre el número de casos favorables y el número de casos posibles, cuando el número de casos tiende a infinito. • Dónde: • s: es un suceso determinado • N: Número total de sucesos • P(s): Es la probabilidad del suceso s
Intuitivamente esto se lee como el límite de la frecuencia
cuando n tiende a infinito. En palabras sencillas, el valor al que tiende la probabilidad de un suceso, cuando repetimos el experimento muchísimas veces. • Por ejemplo, una moneda. Si lanzas 100 veces una moneda puede salir 40 veces cara y 60 cruz. Eso sí, este resultado (que podría haber sido cualquier otro) no indica que la probabilidad de cara sea del 40% y la probabilidad de salir cruz del 60%. No. Lo que la probabilidad frecuencial nos indica es que cuando lancemos la moneda infinitas veces la probabilidad debe estabilizarse en 0,5. Siempre y cuando, claro está, la moneda sea perfecta. La probabilidad de un suceso S siempre estará entre 0 y 1
• En efecto, podemos demostrar este hecho, utilizando la
fórmula de arriba. Por un lado, sabemos que el suceso S siempre será menor que el número total de ensayos. Es de lógica pensar que si repetimos el experimento N veces, el máximo número de veces que ocurrirá S será igual a N. Así pues: • Es decir, partiendo de la premisa explicada anteriormente, dividimos (segundo paso) todos elementos entre N. Una vez hecho esto, llegamos a la conclusión rodeada en rojo. Es decir, la probabilidad frecuencial o frecuencia relativa de un suceso siempre estará entre 0 y 1. • Regularidad estadística: Aunque el comportamiento de los resultados concretos sea un tanto caótico, tras repetir un experimento un gran número de veces, nos encontramos con ciertos patrones de resultados.
• El concepto de límite es irreal: La fórmula propuesta para el concepto,
asume que la probabilidad de un suceso debe estabilizarse cuando repetimos el experimento infinitas veces. Es decir, cuando N tiende a infinito. Sin embargo, en la práctica es imposible repetir algo infinitas veces.
• No asume una sucesión verdaderamente aleatoria: El concepto de límite, al
mismo tiempo, supone que una probabilidad debe estabilizarse. Sin embargo, el mismo hecho de estabilizarse, matemáticamente, no permite asumir que la sucesión sea verdaderamente aleatoria. De alguna manera, indica que se trata de algo determinado.