estratégicos de los recursos políticos Alfredo Joignant Profesor Titular, Universidad Diego Portales Investigador Principal, COES Ponencia presentada en el Congreso “Elites y liderazgo en tiempos de cambio”, Salamanca, 10 y 11 de junio de 2015 El “capital político”: una noción que no tiene nada de obvio “Hillary Clinton siempre se ha beneficiado del legado de su esposo para su propio capital político” (www.cheatsheet.com, 6 de abril 2015) “En este enrarecido ambiente político, el capital político de Michelle Bachelet acusa también el impacto de 12 meses de intenso debate programático” (www.bbc.co.uk, 6 de abril 2015). Una palabra con demasiado poder metafórico para representar socialmente al mundo político: “poseer” capital político y disponer de “suficiente” capital político, expresiones que suponen una materialidad y métricas. La necesidad de desterrar la definición substancialista de la noción de “capital político”: la pesada creencia de que los agentes con capital “valen”, “pesan” y “cuentan”. No existe una métrica del “capital político”(a diferencia del capital cultural que es medible según el nivel de diplomas): éste opera de modo simbólico y se calcula de modo práctico, lo que a su vez supone un sentido práctico del juego (como el fútbol: en el fútbol argentino se dice de un jugador sobresaliente que “tiene presencia”, del mismo modo que en política se dice que un político relevante “tiene peso”). El capital político no es directamente observable: este tipo de capital es discernible a través de sus encarnaciones en agentes políticos, lo que a su vez supone estudiar sus trayectorias. Objetivando la noción La noción de “capital político” no es totalmente pensable en términos abstractos: “estar en el cargo” ≠ “estar en el poder” (Bennister, T’Hart y Worthy, 2014) El capital político está vinculado “al poder posicional del político (…), enraizado en estructuras institucionales del orden político” (Nee y Opper, 2010) ¿Cómo estudiarlo?: como un recurso que es invertido en un espacio diferenciado y autonomizado de cargos y posiciones, el que es habitado por agentes profesionales que disponen de una competencia política que los lleva a moverse en este espacio como pez en el agua, es decir con un sentido práctico del juego en el campo, de lo que allí se juega, de cómo se juega y de los recursos (“capitales”) con los que se juega Ese espacio es el campo político: en coyunturas electorales, este campo adopta una configuración de mercado de posiciones electivas. No es el mismo tipo de capital que es invertido cuando el espacio de inversión es el campo político central (ministros, subsecretarios, posiciones parlamentarias…) o periférico (posiciones y cargos sub-nacionales) Capital y campo político central Mi propuesta es entender las formas, el valor y las dinámicas del capital político en el contexto del “campo político central” (Gaxie): presidentes y primeros ministros, ministros, subsecretarios, senadores y diputados. Las ambigüedades de la noción de capital político: * sugiere la idea que es atesorado y apropiado a partir de la actividad que tiene lugar en el campo político; * el uso espontáneo de la noción no considera la posibilidad de que el capital se origine en otros campos y sea objeto de reconversión de su valor; * suele confundirse con atributos de naturaleza más subjetiva, de valor instantáneo en el campo político: reputación de un apellido, oratoria y astucia, etc. (que entendemos no como capital, sino como activos (assets) que pueden ser rápidamente invertidos, lo que significa que el agente que posee activos puede perfectamente carecer de capital) Una definición provisional del capital político Un conjunto variado de recursos que se originan tanto al interior del campo político como fuera de él, que son reconocidos prácticamente como valiosos por los agentes que habitan el campo y por quienes analizan y comentan la vida política. Pero al mismo tiempo, precisamente porque son recursos que se invierten de modo práctico, no son fácilmente verbalizables: se les reconoce en el lenguaje de la “experiencia” o de la trayectoria, y particularmente cuando el agente es individualizado como parte de algún “tipo”. El capital político es generalmente el fruto de un trabajo largo de adquisición, atesoramiento y valorización por agentes individuales o instituciones. Los tres modos de existencia del capital político (las “formas” del capital en el lenguaje de Pierre Bourdieu, 1986): * incorporado (in-corporado) * objetivado * institucionalizado El poder de penetración del capital político en el campo: el problema de las barreras de entrada La inconsistencia entre la igualdad retórica de la teoría democrática (“querer es poder”) y la desigualdad empírica (“no basta con querer”) “El reclutamiento real es un acontecimiento altamente improbable” (Best y Cotta, 2000). “El misterio del ministerio” (Bourdieu): ¿cómo explicar que un puñado de individuos logren franquear las barreras de entrada del campo político? Un puzzle de difícil resolución, que supone dar cuenta de la eficacia de las barreras de entrada al campo político, pero también de su vulnerabilidad: * las lógicas institucionales de las barreras de entrada: las primeras elecciones institucionales (sistemas electorales, incompatibilidades de oficios, etc.) congelan el campo; * las lógicas culturales de las barreras de entrada: el caso de los sesgos de género (operan al inicio: Fox y Lawless (2004) y Achin y Levêque (2007); * las lógicas sociales de las barreras de entrada: el problema de los orígenes sociales y de las formas de apropiación social de las posiciones y cargos del campo: la redefinición del trabajo de representación; * las lógicas económicas de las barreras de entrada: la regla de mayoría y su incidencia en la construcción de monopolios políticos (Tullock, 1965 y Wolgemuth, 1999) La naturaleza fáctica de las barreras de entrada: la clausura del campo resulta de las propias prácticas de los agentes que, al competir, se ajustan a la lógica del campo político y reproducen su organización y orden. Es a través de la inversión de capitales que los agentes puedan franquear las barreras de entrada del campo y habitarlo. Especies y orígenes del capital político y tipos de agentes - “Especies” (y no tipos ni formas) del capital: más allá de los modos de adquisición y atesoramiento. La literatura comparada en cinco países (Estados Unidos, Francia, México, Brasil y Chile) sugiere que las especies de capital no son infinitas. Mi propuesta identifica nueve especies y las asocia a tipos de agentes (tipos ideales weberianos): * Capital familiar Heredero * Capital universitario Líder universitario * Capital político militante Hombre de partido * Capital político oligárquico Político profesional * Capital tecnocrático pragmático Tecnócrata pragmático * Capital tecnocrático político Tecnócrata político * Capital tecnopolítico Technopol * Capital de notoriedad Celebridad * Capital carismático Líder carismático - El campo político estaría poblado por este tipo de agentes en un hipotético momento originario: no necesariamente por todos, y en proporciones variables. Aplicaciones: tiempo cero del campo y el caso del capital familiar El interés del tiempo cero de los campos: el caso de las transiciones a la democracia (apertura originaria del campo y cierre de sus fronteras). El capital político familiar: al menos un vínculo de parentesco cercano (hasta primos) que se desempeñe o se haya desempeñado en una posición electiva en el mercado político central o periférico, o en un cargo de primera línea en el gobierno (ministro o subsecretario) El objeto de estudio: las elecciones parlamentarias de 2013, a través del índice Herfindal-Hirschman, con el cual intento medir concentraciones de dos mercados de posiciones electivas en dos momentos distintos (a nivel de oferta de candidatos y a nivel de electos). El capital político familiar y la concentración del mercado de posiciones electivas: el momento de la oferta El capital político familiar y la concentración del mercado de posiciones electivas: el momento de los resultados Del enfoque estático al enfoque dinámico de los capitales El campo como espacio de lucha e inversión de capitales Una vez que se ingresa al campo, los agentes invierten y reconvierten capitales, produciendo condiciones de metamorfosis de los agentes: de allí la importancia de estudiar sus trayectorias en el campo. En el tiempo cero del campo, es posible observar su estructura capitalística, es decir la importancia relativa de las distintas especies de capital: ese es el momento más apropiado para un enfoque estático. El desafío es analizar la evolución de la estructura capitalística del campo a lo largo del tiempo, es decir dinámicamente. Atesoramiento de especies múltiples de capital y metamorfosis de los agentes