Está en la página 1de 15

MINISTERIO DE EDUCACIÓN

DIRECCIÓN REGIONAL DE PANAMÁ OESTE

CENTRO EDUCATIVO BILINGÜE STELLA MARÍA SIERRA


(POESÍA Y NATURALEZA)

INVESTIGACIÓN DE
CIENCIAS NATURALES

NOMBRE:
GÉNESIS DELGADO

PROFESORA:
HELMA A. HERNÁNDEZ

NIVEL:
8˚A

FECHA DE ENTREGA
11 DE ABRIL DEL 2024
TIPOS DE TEJIDOS QUE COMPONEN EL CUERPO HUMANO

Un tejido es un conjunto de células muy cercanas entre sí, que se organizan para realizar
una o más funciones específicas.

Existen cuatro tipos básicos de tejidos, definidos de acuerdo con su morfología y función:

 Tejido epitelial
 Tejido conectivo
 Tejido muscular
 Tejido nervioso

Tejido Epitelial
El tejido epitelial es un tejido de alta celularidad (gran densidad de células) que se encarga
de recubrir las superficies corporales, revestir cavidades y formar glándulas. Aunque es
avascular, se encuentra inervado. Las células epiteliales se encuentran en estrecha
aposición, formando una barrera entre el tejido conectivo y las superficies libres. Sus
superficies pueden estar orientadas basal, apical o lateralmente, y cada una de esta cuenta
con características distintivas. También existen células epiteliales especializadas.

Las superficies libres del cuerpo incluyen la superficie externa de los órganos internos, el
recubrimiento de cavidades corporales, la superficie externa del cuerpo, trompas y
conductos.

Estructura tisular
Las dos principales características del tejido epitelial hacen que se divida en dos subclases:
la forma de las células y la presencia de capas.

Forma de las células:

Escamosas - células aplanadas; pueden ser queratinizadas o no queratinizadas;


están involucradas en la protección y difusión; se encuentran en las paredes de los
capilares y la piel.
Cúbicas - células cuboidales; pueden encontrarse formando conductos en las
nefronas del riñón; involucradas en la secreción y absorción.
Cilíndricas - células rectangulares (o columnares); frecuentemente presentan cilios;
involucradas en la absorción, secreción, protección y lubricación; forman el
revestimiento interno del intestino.
Función
Una de sus funciones es proteger los tejidos internos de la acción de los elementos
medioambientales, de infecciones y agresiones de competidores (en la medida de lo
posible). Además, posee la capacidad de lubricarse y protegerse a sí misma, y se encuentra
también recubriendo el intestino delgado, en donde ayuda a la absorción de nutrientes, y
también las glándulas internas, en donde segregan algunas enzimas y hormonas.
Bibliografía
Ross, M. H. (30 de Octubre de 2011). Histology: A Text and Atlas, 6th edition, Lippincott
Williams & Wilkins. Obtenido de https://www.kenhub.com/es/library/anatomia-es/tipos-
de-tejidos.

Waxman, S. G. (2013). Clinical Neuroanatomy, 27th edition, McGraw-Hill Education . Obtenido de


https://concepto.de/tejidos-del-cuerpo-humano/#ixzz8X3AyiUMC.
Tejido Conectivo
El tejido conectivo es el tipo más abundante de tejido en el cuerpo. Consta de células,
originadas de la mesénquima, y una matriz extracelular. La matriz extracelular está
compuesta por una sustancia fundamental y fibras proteicas. Existen muchos tipos
importantes de células y tres fibras principales: colágenas, reticulares y elásticas. La
clasificación del tejido conectivo en tres tipos generales se basa en la composición de sus
componentes celulares y extracelulares, así como su función en el cuerpo.
Las células del tejido conectivo no están opuestas entre sí, sino que se encuentran
separadas por una gran matriz extracelular.
Tipos de células:
Estructurales - fibroblastos, condroblastos, osteoblastos, odontoblastos.
Inmunológicas - células plasmáticas, leucocitos, eosinófilos.
De defensa - neutrófilos, mastocitos, basófilos, macrófagos.
De reserva energética - adipocitos.

Clasificación del tejido conectivo


La clasificación del tejido conectivo se basa en dos características: la composición de sus
componentes celulares y extracelulares y su función en el cuerpo. Los tejidos se pueden
clasificar como propiamente dichos, embrionarios o especializados.

Tejido conectivo propiamente dicho


El tejido conectivo propiamente dicho incluye el tejido conectivo laxo, también conocido
como tejido areolar, y tejido conectivo denso. El tejido conectivo laxo consiste en fibras de
colágeno delgadas y vagamente organizadas dentro de una sustancia fundamental viscosa.
Tejido conectivo denso o fibroso. Compuesto de colágeno, mantiene las cosas en su sitio
de manera especializada, ya sea los músculos unidos a los huesos (los tendones y
ligamentos), o ciertos tejidos separados de otros (como las cápsulas de ciertos órganos
internos).
Tejido conectivo laxo. Dotado de abundante contenido extracelular, cumple con roles
específicos dependiendo del tipo que sea: el tejido conectivo mucoso, dotado de roles
defensivos y estructurales; el tejido conectivo reticular, compuesto por colágeno y que
compone muchos ganglios y órganos linfoides; y el tejido conectivo mesenquimal, que
conforma la mesénquima embrionaria y aportan células especializadas a todos los tejidos.
Tejido conectivo embrionario
El tejido conectivo embrionario, derivado del mesodermo, es el precursor de muchos
tejidos conectivos en el cuerpo del adulto. Se clasifica en dos subtipos: mesénquima y
tejido conectivo mucoide (mucoso). La mesénquima se encuentra dentro del embrión.
Tejido conectivo especializado
El cartílago, el tejido adiposo, el hueso y la sangre son tejidos conectivos especializados.
Las células adiposas, o adipocitos, son células especializadas encargadas de almacenar
grasa y sintetizar hormonas, factores de crecimiento y algunos mediadores de inflamación.
El tejido óseo es único dado que su matriz extracelular está mineralizada. El fosfato de
calcio, en la forma de cristales de hidroxiapatita, es el responsable de la mineralización del
hueso y crea un tejido muy fuerte capaz de sostener y proteger al cuerpo.
La sangre es un fluido de tejido conectivo que transporta gases, nutrientes y productos de
desecho a través del cuerpo. El fluido de la matriz extracelular de la sangre está
compuesto por plasma, el cual constituye poco más de la mitad del volumen de este
tejido. Las células del tejido sanguíneo se clasifican como eritrocitos, leucocitos y
trombocitos.

Tejido Conectivo
Bibliografía

Editorial Etecé, Ú. e. (5 de Agosto de 2021). Tejidos del cuerpo humano. Obtenido de


https://concepto.de/tejidos-del-cuerpo-humano/#ixzz8X3lOhKfR.

Ross, M. H. (2011). Histology: A Text and Atlas, 6th edition, Lippincott Williams & Wilkins .
Obtenido de https://www.kenhub.com/es/library/anatomia-es/tipos-de-tejidos.
Tejido Muscular
Los músculos de nuestro cuerpo son los que permiten los numerosos movimientos que
realizamos a diario. Nunca se detienen; es más, ni aun cuando dormimos, ya que el
corazón, los pulmones y otros órganos siguen trabajando cuando nosotros descansamos.
El tejido muscular, es capaz de generar movimiento al contraerse y relajarse, pero para
poder hacerlo necesita de una base mecánica consistente en el músculo esquelético,
también se encarga de mover los órganos para su funcionamiento, generar calor, movilizar
y almacenar sustancias (como el glucógeno), y ayudan a mantener las posiciones
corporales. Son los músculos los que dan forma al cuerpo. Constituye del 40 al 50% del
peso corporal y son estudiados por la miología.

Función del tejido muscular


Debido a que es un tejido que se localiza en múltiples lugares del cuerpo cumple con
diferentes funciones, siendo las mencionadas a continuación las más relevantes para el ser
humano y su funcionalidad:
 Movimiento voluntario de piernas, brazos, tronco, cabeza y cuello.
 Contracción de las fibras del corazón, por lo que participa en la circulación de la
sangre.
 Funciona moviendo de manera involuntaria el músculo liso de los órganos
abdominales y pélvicos. Tal como ocurre con el movimiento peristáltico que realiza
el aparato digestivo para ejecutar la digestión y las movilizaciones del aparato
excretor que se utilizan para la micción.
 Crea una capa gruesa de tejido muscular y células que recubren a otros órganos.

Tipos de tejidos musculares


Existen tres tipos de tejido muscular:
Estriado: Es voluntario o somático controlado por el cerebro. Cuenta con
interacción neuroeléctrica (acetilcolina), química (actina y miosina) y con fuente de
energía (adenosindifosfato, ADP). Alrededor del 40% de nuestro organismo lo
movemos a voluntad. Es un músculo rojo y estriado
Liso: Es involuntario, controlado por el sistema nervioso autónomo, es pálido y liso.
Su contracción se debe a la actina y miosina. Está dispuesto en capas circulares y
longitudinales. Un ejemplo, es el aparato digestivo.
Cardíaco: Combina los dos anteriores, su característica es la capacidad de relajarse
y contraerse en sucesión rápida, solo se localiza en el corazón. Inervado por el
sistema nervioso vegetativo, su mecanismo de contracción se basa en la
generación y transmisión automática de impulsos. Es un músculo miogénico, es
decir, auto excitable.

Propiedades del tejido muscular


Los músculos poseen propiedades que les dan características propias, gracias a ellas se
contribuye a la homeostasis y buen funcionamiento del tejido muscular. Entre sus
propiedades están las siguientes:
Poseen excitabilidad eléctrica: los músculos en su interior tienen un gradiente eléctrico
que al ser estimulado cambia su carga eléctrica y la célula se contrae. Esto se da gracias a
cambios químicos, a la trasmisión de neurotransmisores, o incluso genera sus propios
estímulos eléctricos.
Tienen extensibilidad: los músculos tienen la capacidad de poder “estirarse” sin sufrir
daño, ya que se pude contraer de forma intensa incluso de forma rápida y sin sufrir daño.
La contractilidad se da cuando el músculo recibe un estímulo eléctrico que hace que se
genere un potencial de acción y por consecuencia el músculo se contrae, puede ser que la
contracción sea tan intensa que también genera movimiento.

Tejido muscular esquelético


Lo constituyen haces de células alargadas llamadas fibras (forma filiforme) musculares
altamente especializadas. A las fibras le rodea una fina membrana de tejido conjuntivo
llamada endomisio. Varias fibras se agrupan en fascículos, al cual les rodea para
mantenerles juntos una capa de tejido conjuntivo de nombre perimisio. Un conjunto de
fascículos forma el músculo, que se encuentra cubierto por una lámina gruesa de tejido
conjuntivo denominada epimisio. Éste último componente al continuarse con el tejido
fibroso da lugar a un cordón robusto conocido como tendón. O si el recubrimiento fibroso
se extiende a manera de una hoja plana y ancha de tejido conectivo se le
llama aponeurosis.

Tejido muscular liso


Al igual que el tejido muscular cardiaco, el tejido muscular liso es involuntario, es decir,
genera sus propios impulsos eléctricos. Está presente en las paredes de las vísceras y
estructuras como los ojos y los vasos sanguíneos. Sus fibras musculares están conectadas,
de tal forma que, cuando se genera un impulso eléctrico para su contracción, ocasionado
por una hormona, estímulo eléctrico o un neurotransmisor; esta contracción de la fibra
muscular se propaga a todas las fibras musculares vecinas, de tal forma que el estímulo de
una fibra muscular se propaga a todas las demás y hace que se contraigan de forma
uniforme.

Fisiología del músculo liso


El músculo liso, al igual que el estriado, tienen los mismos principios de contracción con
algunas diferencias, entre las que podemos encontrar que la contracción en el músculo
liso se desarrolla de forma más lenta, debido a que el calcio llega de forma más lenta a los
filamentos, lo que retarda su contracción, debido a ello aumenta también la duración de la
contracción al salir también de forma lenta los iones de calcio.

Tejido muscular cardiaco


El tejido muscular cardiaco básicamente es el mismo que el tejido muscular esquelético,
en su mayoría tienen los mismos componentes, las pequeñas diferencias que encontramos
son que entre sus fibras musculares hay un sistema de conducción diferente que hace que
el corazón genere sus propios estímulos eléctricos. Esto le permite realizar sus
contracciones de forma involuntaria, es decir, nosotros no tenemos control sobre sus
contracciones, las cuales genera de forma normal entre 60 a 100 latidos por minuto.

Tejido Muscular
Bibliografía
Tortora, G. J. (2006). Principios de Anatomía y Fisiología (11 ed.). Obtenido de
https://blogs.ugto.mx/rea/clase-digital-9-el-tejido-muscular/.

Thibodeau, G. A. (2007). Anatomía y Fisiología (6ª ed.). . Obtenido de


https://blogs.ugto.mx/rea/clase-digital-9-el-tejido-muscular/.
Tejido Nervioso
El tejido nervioso, es un tejido básico y deriva embriológicamente del ectodermo,
específicamente del llamado Neuroectodermo.
El tejido nervioso, se organiza formando los componentes del Sistema Nervioso Central
(encéfalo y médula espinal), así como del Sistema Nervioso Periférico (nervios y ganglios
asociados) y se extiende en la estructura histológica de los órganos del resto de los
sistemas corporales, asociándose íntimamente, con los otros tejidos básicos.
De acuerdo con las funciones que tienen las células estas se clasifican en dos tipos
principales, las neuronas y las neuroglias. Las cuales se localizan en lugares distintos del
sistema nervioso. Por lo que se describen a continuación de forma separada:
1. Neuronas, son células nerviosas que se conectan mediante sus prolongaciones
para enviar el impulso nervioso de una neurona a otra. Se sitúan en el cerebro,
cerebelo, tronco encéfalo, hipocampo, médula espinal, corteza cerebral, entre
otras.
2. Neuroglia, se subdividen en otras dependiendo de la función de cada una. Pero en
general se encargan de nutrir y sostener los nervios, médula espinal, ganglio
espinal, cerebro y cerebelo.
Las neuronas y las neuroglias, que componen al tejido nervioso se localizan en distintos
lugares del sistema nervioso central, así como también en el periférico. Los cuales son
sistemas que se componen de estructuras como el cerebro, cerebelo, tronco encéfalo,
médula espinal, nervios espinales y los pares craneales que se dirigen hacia la cara,
cabeza, cuello y parte del tronco.
Entonces, son células que se ubican tanto en la parte central del cuerpo como en las
extremidades, cabeza y cuello.
Las neuronas, pueden recepcionar estímulos del medio y conducirlos, gracias a las
propiedades de irritabilidad y conductividad, que dependen a su vez de las características
eléctricas de su membrana plasmática. De este modo, en la zona receptora de la neurona,
la célula es capaz de convertir un estímulo eléctrico, térmico o mecánico, en un impulso
nervioso.
Entre las neuronas, se forman redes de comunicación a través de las cuales, se transmiten
estos impulsos nerviosos hacia zonas definidas del sistema nervioso, donde la información
procesada, genera respuestas que son conducidas a su vez, como impulsos nerviosos hacia
otras neuronas o células efectoras (musculares o secretoras), que finalmente ejecutaran la
acción de respuesta al estímulo entrante.
La complejidad en las distintas funciones del sistema nervioso es consecuencia de la
interacción que ocurre entre las distintas redes neuronales, y la coordinación apropiada
entre las distintas neuronas resulta en el buen funcionamiento del sistema.
Las neuronas son células de forma y tamaño variable, lo que se relaciona con la función
que ellas cumplen.
En cada célula neuronal se destacan las siguientes zonas:
• Soma o cuerpo celular.
• Dendritas.
• Axón.
• Terminal axónico.
La ubicación de las distintas partes de la neurona en el sistema nervioso central y/o
periférico, permiten reconocer las siguientes organizaciones dentro del tejido nervioso:
• En el sistema nervioso central, SNC, los cuerpos neuronales y dendritas, forman la
sustancia gris ubicada periféricamente en cerebro y cerebelo, y más profundamente en la
médula espinal. En cambio, las fibras nerviosas se organizan en cordones, formando la
sustancia blanca de distribución profunda en cerebro y cerebelo, y periférica en médula
espinal. No hay componentes de matriz extracelular asociados a las neuronas.
• En el sistema nervioso periférico, SNP, los somas de las neuronas que se encuentran
fuera del SNC, están organizados en acúmulos dentro de estructuras compactas llamadas
ganglios nerviosos. Las fibras nerviosas correspondientes a axones de neuronas motoras y
sensitivas se organizan en el SNP en agregados de haces o fascículos de fibras nerviosas,
que en conjunto son llamados nervios.

Las Neuroglias Corresponde al conjunto de células que se asocian a las distintas porciones
de la neurona, otorgándole protección, nutrición, soporte y estabilidad funcional.

En el SNC las células de la glía comprenden: astrocitos, microcitos, células ependimarias y


oligodendrocitos. SNP comprenden; células satélites y células de Schwann.
• Astrocitos (astroglia),
• Microcitos (microglia)
• Células ependimarias
• Oligodendrocitos (oligodendroglía)
En el SNP comprenden; células satélites y células de Schwann.
• Célula de Schwann

 Células Satélites

Función del tejido nervioso


El tejido nervioso mediante las neuronas funciona enviando sus impulsos nerviosos
mediante las prolongaciones que la componen (axón) y gracias al cuerpo celular que tiene
cada neurona.
Y en cuanto a la neuroglia estas, aunque son más numerosas no trabajan directamente
como las anteriores, sino que más bien son las encargadas de activar funciones para que
cada neurona pueda cumplir con sus funciones respectivas en el cuerpo. Por lo que entre
sus tareas destacan:
 Producen mielina lo cual ayuda a que se transmita de manera más rápida y efectiva
los impulsos eléctricos.
 Tienen trabajos específicos con respecto al transporte, producción y absorción del
líquido cefalorraquídeo.
 Funcionan como un soporte para los lugares donde se encuentran.
 Destruyen sustancias mediante la fagocitosis.

Tejido Nervioso
Bibliografía

Roberto e Iñiro Junquera, C. t. (s.f.). El Tejido Nervioso. Obtenido de


https://www.fisioterapia-online.com/glosario/tejido-nervioso.

Morfología Humana. (s.f.). Obtenido de


https://www7.uc.cl/medicina/cursos/Anatomia/SWCursos/kinesiologia/pdf/
micro_p2cap4.pdf.

También podría gustarte