La Famila Que Dios Soñó Dr. Luis Alberto Del Pozo M. 054739

Luis Alberto del Pozo y Esther G.
de del Pozo
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Luis Alberto del Pozo y Esther G. de del Pozo
LA FAMILIA
QUE DIOS SOÑÓ
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LA FAMILIA
QUE DIOS SOÑÓ
Luis Alberto del Pozo

Esther G. de del Pozo
Universidad Peruana Unión

2019
5
Autores
Luis Alberto del Pozo.
Esther Gamarra de del Pozo.
Editor
Luis Alberto del Pozo Moras.
Dirección
Mza 7 lote 6 Villa Migdal Shalom - Ñaña - Lurigancho, Lima.
Teléfono
965 397 995
Correo electrónico
luchodelpozo@aol.com
Promoción y Difusión
Pedro Cordero
Teléfono
960 334 258
Correo electrónico
pedrocordero30@hotmail.com
Corrector
Luis Alberto del Pozo Moras
Tirada
1000 ejemplares.
Impreso en la Universidad Peruana Unión

en su Centro de Aplicación Editorial Unión
Km 19 Carretera Central, Ñaña, Lima - Perú
e-mail:union@imprentaunion.com
ISBN: 978-612-00-2511-6
Hecho depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú N° 2016-16963

JOB 25427-19
Impreso en Perú / Printed in Peru
Abril, 2019
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Dedicatoria
A los padres y madres que anhelan cumplir
con amor y responsabilidad la función que
Dios les ha asignado en el hogar y en la
sociedad.
7
Índice
Prólogo...................................................................................11
Capítulo 1
El matrimonio que Dios soñó......................................................14
Presentación..........................................................................15
Tema 1: Soñó con una casa propia para todos.....................19
Tema 2: ¿Me caso o no me caso? ¡Este es mi caso.............23
Tema 3: Amistad larga y noviazgo corto...............................28
Tema 4: ¿Cómo empezar y cómo terminar un noviazgo?...34
Tema 5: Los cuatro síes del compromiso matrimonial........40
Tema 6: El romance antes y después del matrimonio.........46
Tema 7: ¿Cómo se completan el hombre y la mujer?..........50
Bibliografía recomendada....................................................56
Hoja de aprendizaje..............................................................59
Hoja de compromiso.............................................................60
Capítulo 2
Los padres que DIOS yo soñé.......................................................61
Presentación..........................................................................62
Tema 1: ¡Qué padre ser padres!.............................................64
Tema 2: Enséñales a trabajar.................................................72
Tema 3: Dios soñó con el espíritu de superación de
nuestros hijos.........................................................................78
Tema 4: Saber elegir los medios de comunicación...............84
Tema 5: El divorcio que Dios jamás soñó.............................90
Tema 6: Vida sexual en el matrimonio.................................96
Tema 7: Los abuelos de bendición............................................104
Bibliografía comentada........................................................109
Hoja de aprendizaje..............................................................113
Hoja de compromiso.............................................................114
Capítulo 3
El hijo infante que DIOS SOÑÓ..........................................................115
Presentación..............................................................................116
Tema 1: Hijos desde el vientre....................................................118
Tema 2:Los tres primeros años y los circuitos sinápticos.........122
Tema 3: La infancia preescolar...................................................126
Tema 4: Niñez tardía....................................................................132
Tema 5: La disciplina del niño....................................................138
Tema 6: Estilos de paternidad y la educación de los hijos.....144
Tema 7: Cómo enseñar valores a nuestros hijos...........................149
Bibliografía comentada..............................................................157
Hoja de aprendizaje..................................................................156
Hoja de compromiso.................................................................157
Capítulo 4
EL HIJO ADOLESCENTE QUE DIOS SOÑÓ..............................................158
Presentación..............................................................................159
Tema 1: Mi hijo adolescente ¿problema o posibilidad?............160
Tema 2: La identidad en la adolescencia..................................165
Tema 3: Ya… pero todavía no...................................................171
Tema 4: Las grandes decisiones de los hijos adolescentes.....177
Tema 5: Hijos libres de anorexia y bulimia...............................182
Tema 6: La libertad responsable: Adicciones actuales............188
Tema 7: El desarrollo de la fe en los hijos adolescentes.........194
Bibliografía comentada............................................................200
Hoja de aprendizaje..................................................................202
Hoja de compromiso.................................................................203
Capítulo 5
La familia que Dios soñó....................................................................204
Presentación.................................................................................205
Tema 1: El matrimonio que Dios soñó.........................................207
Tema 2: Jesús y el matrimonio ideal...........................................212
Tema 3: Que los padres sean verdaderamente padres..............218
Tema 4: Dios soñó con una infancia amada y segura................224
Tema 5: Dios soñó con una adolescencia triunfadora................229
Tema 6: Dios tiene un sueño para tu hogar.................................234
Tema 7: De aquí a la eternidad.....................................................239
Bibliografía comentada...............................................................244
Hoja de aprendizaje.....................................................................247
Hoja de compromiso....................................................................248
Florilegio de poemas en honor al Autor de vida y del
matrimonio - Selección de Esther G. del Pozo...............................249
Epilogo............................................................................................254
prologo
Para la segunda edición de La familia que yo soñé, hemos
decidido introducir en el título una leve modificación por La familia
que Dios soñó. Somos conscientes de que las opiniones humanas
son como las arenas movedizas. Cambian de acuerdo a las
circunstancias y a las presiones que ejercen los grupos de poder
político, económico, eclesiástico, tecnológico e ideológico.
Nada parece detener la insensatez de los que pretenden
instaurar una nueva moral social para la vida familiar. Los colores
del hermoso arcoíris que eran recuerdo del pacto de Dios con
la humanidad para que no haya otro diluvio universal, y eran
promesa de la segunda venida de Cristo, han sido arrebatados por
el fanatismo LGBT. Sus adherentes proclaman que el matrimonio
cristiano, bíblico, ha muerto. Es obsoleto. El arcoíris es emblema de
la nueva moral, libérrima, matrimonios sin fronteras de sexo.
Como educadores de vida familiar no podemos abdicar a
11
nuestra responsabilidad de decir al mundo que los imperativos
divinos siguen en vigencia. Cielo y tierra pasarán, mas la Ley de
Dios no pasará. Mientras el cielo sea cielo, y la tierra sea tierra,
ni una minúscula tilde se cambiará de la Ley divina. Los Diez
Mandamientos que exaltan la santidad de Dios y la santidad
de las relaciones humanas son la suprema ley del mundo y de
universo entero. Los imperativos divinos son verdades axiomáticas,
categóricas, inmodificables, eternas y a la vez, amables, amorosas,
excelentemente buenas.
Basados en los principios establecidos por el Creador en su
Palabra, nos animamos a presentar orientaciones prácticas de la
vida familia. Nos concentramos en cinco puntos básicos: Cómo
resolver el dilema del matrimonio y la soltería, cómo desarrollar una
paternidad y una maternidad responsables, cómo instaurar valores
eternos en la niñez, cómo orientar a nuestros hijos adolescentes y
jóvenes y, finamente, cómo preparar nuestros hogares para la vida
eterna.
Tal vez nuestra pretensión es demasiado ambiciosa. Pero toda
nuestra vida hemos estado en contacto con los jóvenes y los padres
de familia. Llevamos 57 años de casados y uno de enamorados que
nos aproximan a seis décadas de ministerio docente y familiar. Pero
no crean nuestras opiniones. Crean en la implicaciones que tiene
la Palabra de Dios para conducir a nuestra familia para esta vida y
para la eternidad.
Cuando mis hijos se enteraron de que estaba en prensa
esta segunda edición nos enviaron sus testimonios filiales que los
incluimos en este prólogo, con mucha gratitud a Dios y rogándole
que los mantenga fieles y firmes hasta el mismo fin.
Mensaje de Samuel: Mis padres continúan apasionados
con la educación para los hogares y la evangelización familiar. La
familia que Dios soñó habla de un encuentro personal con Jesús,
que es el mejor remedio para las relaciones quebradas o al borde
de la ruptura. Solo en Dios hay seguridad y sosiego. [Aparte de
sus estudios de Teología, Samuel terminó sus estudios doctorales
en Illinois University, y ahora es pastor en Glendora y Pomona,
California].
12
Mensaje de Luis Benjamín. ¿Qué es el amor? En esta

pregunta se encierra el misterio y el ministerio de mis padres.
Ellos ya pasaron por la primavera de la vida, ya resistieron el calor
del verano, recogieron los frutos del otoño, soportaron los rigores
del invierno, pero para ellos no está muy distante de una eterna
primavera. [Benjamín siempre se mantuvo en Teología: licenciatura
en la UPeU, maestría en Divinidades, Andrews University, doctorado
en Ministerio, Bayola University. Actualmente es pastor en la SDA
White Memorial Church, Los Ángeles, California].
Mensaje de Grelte: Mis padres me inspiraron a formar un
hogar que se proyecta de aquí a la eternidad. A Sion caminamos es
uno de sus himnos predilectos. Este ha sido siempre su mensaje.
Dios sueña con hogares que, aunque imperfectos, se levanten
y prosigan hacia el cielo. [Grelte enseñó Psicología del desarrollo
en la Facultad de Teología de la UPeU y ahora sigue con la misma
responsabilidad en la Universidad Adventista de Bolivia. Aparte de
sus estudios en Educación, terminó su maestría en Psicología en
Andrews University].
Luis Alberto del Pozo Moras.
13
capitulo
1
El matrimonio
que Dios soñó
14
Presentación
“Las muchas aguas no podrán apagar el amor.
Ni lo ahogarán los ríos”
(Cantares 8:7)
El ruiseñor y la rosa es un relato escrito por el poeta y

dramaturgo británico-irlandés Oscar Wilde. He aquí la historia de
un extraño amor:
La muchacha que le robaba los sueños le había pedido al
joven una rosa roja. Pero no había una sola rosa roja en el jardín
del enamorado. Solo tenía rosas blancas. Entonces se puso a
llorar. Un ruiseñor que le vio, decidió ayudar al muchacho y tomó
la decisión de sacrificar su vida para teñir una rosa blanca con
su propia sangre. ¡Oh, milagro de milagros! Su rosa blanca se
había convertido en una rosa roja, viva e intensa. Con unción y
sentimiento, el joven tomó la rosa y se la llevó a la chica, pero ésta
lo rechaza con desdén argumentando que ya otros le habían dado
mejores regalos y que esa rosa roja no valía la pena. La rosa roja
fue a parar bajo las ruedas de una carroza. La muchacha insensible
no se inmutó y se marchó. Él terminó con la siguiente reflexión:
“¡Qué cosa tan necia es el amor… No es ni la mitad de útil
que la lógica, pues no prueba nada, y siempre nos dice cosas que no
van a suceder, y nos hace creer cosas que no son ciertas. De hecho,
el amor es muy poco práctico, y como en estos tiempos ser práctico
es todo, me volveré a la filosofía y estudiaré metafísica!”
En verdad, el amor no es una necedad ni una cosa poco
práctica. Vivir enamorado es vivir la vida verdadera. El amor es la
razón de ser de la vida, es la fuerza más poderosa del universo.
“Dios es amor” (1 Juan 4: 8, 16). En realidad, el amor tiene un origen
en el corazón de Dios, tiene origen celestial.
Uno sueña con un matrimonio feliz, pero muchas veces ese
sueño se trunca y se convierte en una verdadera pesadilla. Y en
15
tiempos en que el dinero y lo útil gobiernan, el sueño de Dios se
queda destrozado como la rosa del relato.
En cuestiones del amor y del noviazgo es natural soñar
o acariciar ensueños de felicidad. El filósofo Julián Marías ha
escrito una obra muy interesante: La felicidad humana. En
ella analiza las diferentes dimensiones de la felicidad desde
una perspectiva cristiana de la vida. Amor y felicidad parecieran
ser una díada inseparable. Pero otro autor, Gary Thomas, en un
libro muy provocativo, Sacred marriage, pregunta, ¿qué hay si
Dios ha diseñado el matrimonio no tanto para ser felices, sino
para ser santos? Amor y santidad parecieran ser otra díada en
la que deberíamos pensar los matrimonios cristianos. Pero si
felicidad y santidad no están en orillas opuestas, no son en verdad
excluyentes, persigamos la felicidad en santidad. Una felicidad
sin santidad sería pura vanidad o frivolidad, pura cáscara, pura
apariencia. Una felicidad en santidad sería una fórmula sencilla
y profunda para lograr que el amor conyugal que Dios ha creado
hermoso en su tiempo, se proyecte de aquí a la eternidad. Julián
Marías dice que sería una equivocación religiosa renunciar a la
felicidad. Gary Thomas plantea que el objetivo más elevado del
matrimonio cristiano es revelar el carácter de Cristo, es decir, la
verdadera santidad. Julián Marías afirma que aunque la felicidad
sea una empresa humana, su conexión con las bienaventuranzas
de la vida cristiana y su perspectiva de la inmortalidad le permiten
tener una visión amplia y trascendente de dicha felicidad. Según
Gary Thomas el matrimonio nos enseña a perdonar, a conectarnos
cada día con Dios, a respetarnos a amarnos con altruismo, a
arrepentirnos de nuestros pecados, a vivir reconciliados, a lograr
la unidad del matrimonio y la familia con fe y perseverancia, a
mantener relaciones sexuales dignas, a desarrollar una vocación de
servicio a Dios y a la humanidad.
La vida humana es temporal, pero tiene un sentido de
eternidad. El matrimonio debe tomar en cuenta no solo los intereses
16
de esta tierra, sino también los intereses del cielo. El amor es la cosa
más hermosa y más seria de la vida. Sea que consideremos las ideas
valiosas de Julián Marías o los desafíos de Gary Thomas, el manual
por excelencia de la vida matrimonial es la Palabra de Dios, una luz
perfecta que alumbra nuestro hogar como una lámpara familiar.
Un matrimonio, según el modelo divino (Génesis. 1:26), está
fundado en el amor estable, en un amor que no está originado solo
en el impulso del ser humano, sino en el corazón de Dios. Otros
fundamentos son la presencia del Creador, la heterosexualidad, la
seriedad de las relaciones sexuales.
En una época tan plagada de hedonismo, es decir, de
una búsqueda desordenada del placer, vale la pena reflexionar
en la naturaleza del romance matrimonial. Está tan teñido de
sentimentalismo que lo que debería mantenerse como un sueño
hermoso se convierte, de pronto, en una pesadilla. Los sueños no
deben empujarnos a actuar locamente.
El matrimonio pronto nos va a descubrir que el romance
no debe ser solo prematrimonial. El romance pleno y verdadero
es el matrimonial. Casados pueden abrazarse y besarse sin
impedimentos ni temores.
Si como novios soñamos con tener hijos, habría que pensar
qué pasaría si los hijos no llegaran. ¿Se podrá tomar alguna ventaja
de un hogar sin hijos? Y si los hijos llegan, ¿hasta cuántos podremos
tener? ¿Por cuánto tiempo nos acompañarán en el hogar? A veces,
sin darnos cuenta, pronto pasa el tiempo y cuando los hijos se van,
quedará el nido vacío. En el noviazgo es necesario conversar sobre
ciertas situaciones inevitables que la vida nos desafía.
Como una invitación para repasar los siete capítulos de
esta sección, consideremos los siguientes citas áureas de la Biblia
acerca del matrimonio: “Goza de la vida con la mujer que amas
todos los días de la vida vana que te son dados debajo del sol, todos
los días de tu vanidad. Esta es tu recompensa en la vida y en el
trabajo con que te afanas debajo del sol” (Eclesiastés 9: 9). “Así
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que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos
de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la
santidad, en el temor de Dios” (2 Corintios 7: 1). Los que sueñan
en el matrimonio, propónganse alcanzar no solo una felicidad
verdadera, sino también una santidad posible solo por obra y gracia
del Espíritu de nuestro bondadoso Dios.
18
tema 1
Soñó con una casa

propia para todos
“La fortaleza de una nación está
en los hogares de su gente”
(Abraham Lincoln)
Motivación
En Buenos Aires encontramos una costumbre muy saludable

entre los jóvenes que se preparan para su matrimonio: Construyen
su casa antes de casarse. Durante nuestros siete años de trabajo
en la Asociación Casa Editora Sudamericana desarrollamos el
seminario prematrimonial Las cuatro estaciones del amor.
Nuestro horario era de fines de semana, pero ellos eludían el
domingo porque, nos decían, tenemos que terminar nuestra casa
antes de la fecha del matrimonio. Tenían más que una ilusión, una
obsesión o una presión social por tener su casa lista para el día de la
boda. ¡Qué decisión tan juiciosa y sabia tenían estos jóvenes!
Creíamos que se trataba de una actitud extraordinaria de
jóvenes extraordinarios, pero nos dimos con otra grata sorpresa.
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En un seminario para casados, preguntamos cuántos participantes
tenían casa propia. Levantaron la mano TODOS. Los únicos que no
teníamos casa propia éramos los conductores del seminario de vida
familiar. ¡Qué ironía! En el contexto cultural argentino aprendimos
mucho acerca de la previsión social para el matrimonio.
El que se casa, casa quiere. Este dicho debe tener vigencia no
solo en Argentina, sino también en cualquier otro lugar del mundo.
El saberse dueño de una casa brinda no solo estabilidad no solo
material, sino también emocional, familiar y espiritual. La casa es
más que solo vivienda: residencia del hogar.
El sueño de la casa propia no es un sueño loco. El sueño
original de Dios es que todo el mundo tenga su casa propia.
Cuando el Señor creó el matrimonio le dio como regalo de bodas
el hogar del Edén. La casa del Edén debía ser un modelo para toda
la humanidad. Si el pecado no hubiera ingresado en la experiencia
humana, este mundo estaría poblado de moradas edénicas. Cada
hogar tendría su propio Edén. Pero el sueño de Dios se rompió por el
pecado. Pero cuando llegue el fin de nuestra condición pecaminosa
y corrupta, se cumplirá el sueño original de Dios. Jesucristo así lo ha
prometido (ver la hermosa promesa de Juan 14: 1-3).
Exploración
Un hogar feliz depende de un sano equilibrio entre brindar a
la familia una casa donde vivir decentemente y edificar en ella un
hogar cálido y seguro.
Los recién casados sueñan con una casa que tenga un buen
dormitorio, una sala cómoda, un comedor funcional para la familia
y las visitas, una cocina y una lavandería bien equipadas.
Un hogar sin casa es como una nación sin país. Es una
desgracia casarse y no tener una casa dónde vivir. En los Estados
Unidos es muy fácil soñar y obtener una casa propia, cuando uno
es joven con residencia legal y trabajo estable. Cuando se aprueba
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el préstamo hipotecario y de la noche a la mañana uno recibe las

llaves de la casa ya se cree dueño de ella. Sin embargo, detrás de
esta operación hay un juego de ilusiones. En realidad, el flamante
propietario nunca llega a tener el título de propiedad de la casa,
hasta que pague el último centavo del préstamo. Mientras tanto,
el verdadero dueño es el banco y el iluso propietario no es más que
un inquilino del banco.
Una vez que se tiene una casa segura, preferiblemente sin
deudas a los bancos, la familia puede construir un hogar estable,
fuerte y responsable.
El hogar se construye sobre la base del amor. En el contexto
del matrimonio que yo Dios soñó, el amor es el vínculo más
poderoso que une a la pareja con el ser supremo que es el Creador.
Así lo explica el discípulo del amor: “Amémonos los unos a los otros,
porque el amor viene de Dios… El que no ama no conoce a Dios,
porque Dios es amor” (1 Juan 4:7,8).
El notable pensador francés Paul Tournier ha escrito un libro
clásico: El mito de una sociedad sin Dios. En esta obra el autor
sostiene que nuestra sociedad no goza de buena salud. Detrás de
sus aparentes éxitos se esconde el fantasma de la crisis. Pensando
que la idea de Dios era un freno al progreso, el hombre moderno
se ha obsesionado en eliminar los valores de la conciencia y de la
fe. No es consciente de que ha salido de las manos del Creador y
que todo intento de alejarse de Él constituye un fracaso implícito o
explícito. Más que eliminar a Dios, lo que hace es reprimirlo en su
interior. En esto coincide con otro gran pensador del siglo XX, Viktor
Frankl, autor de La presencia ignorada de Dios. La represión de
la idea o de la presencia de Dios ha forjado la sociedad agnóstica,
neurótica y desorientada de nuestro tiempo.
El matrimonio que sueña legítimamente con la felicidad y la
santidad, no puede ni debe ignorar la presencia y bendición de Dios
en la casa donde moras y en el hogar que construyes en esta tierra.
Además está la promesa de que pronto volverá y nos dará el título
de propiedad en el Edén restaurado.
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Propuesta de solución
Construyamos en una casa, aunque sea sencilla, un hogar
donde reine el amor verdadero y esté bajo la bendición y protección
de Dios. La felicidad y la santidad son más accesibles en una
necesaria estabilidad.
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tema 2
¿Me caso o no me caso?

¡Este es mi caso!
“Cada uno tiene su propio don de Dios,
uno a la verdad de un modo,
y otro de otro” (1 Cor. 7: 7).
Motivación
Tanto el casarse bien como el quedarse felizmente soltero
son dones especiales de Dios. El famoso médico español Gregorio
Marañón ha dedicado gran parte de su vocación a estudiar la
naturaleza del amor, la idoneidad del hombre para tomar la decisión
del matrimonio. Él sostiene que un amor con la madurez suficiente
para casarse es exclusivo de una pareja. El don Juan es un indefinido
emocional, incapaz de seleccionar a una persona específica
para establecer con ella una relación estable. Sus interesantes
observaciones son fruto de sus investigaciones médicas.
Casarse o no casarse es una decisión importante aunque no
irrevocable. Hay personas mayores de sesenta años que finalmente
deciden casarse. Están en su derecho. Solo que se casen bien, con
una persona compatible en diferentes aspectos de la vida. Un
matrimonio honroso o una soltería digna es una bendición para la
sociedad.
23
Exploración
Pablo dice: “Bueno le sería al hombre no tocar mujer. Sin
embargo, por causa de las fornicaciones, tenga cada uno su propia
mujer, y tenga cada una su propio marido” (1 Corintios. 7: 1, 2).
El matrimonio es un remedio contra la fornicación. “Si no tienen
don de continencia, cásense, porque mejor es casarse que estarse
quemando” (1 Corintios. 7: 9). La receta moral es muy práctica y
contundente.
El matrimonio tiene sus bendiciones, pero también sus serias
responsabilidades. La soltería tiene sus bendiciones, pero también
sus grandes responsabilidades.
Si ponemos en una balanza, podemos comparar ambas
opciones:
El matrimonio La soltería
compañerismo soledad
relación sexual abstinencia sexual
bendición de tener ventajas de no tener
hijos hijos
servicio a la familia, disponibilidad
a la iglesia y a para el servicio a la
la sociedad en sociedad en completa
interdependencia ¡viva independencia. ¡viva la
el matrimonio! soltería!
El compañerismo es un remedio para la soledad. La soledad

no es una enfermedad, sino una opción de vida. El matrimonio
es vida en comunidad. La soltería es vida personal en libertad. El
matrimonio es un don, un regalo de Dios. La soltería es también un
don de Dios, una verdadera bendición.
La relación sexual es el gran privilegio matrimonial. La
continencia es un don especial que tienen algunas personas que
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viven con un gran sentido de satisfacción sin necesidad del lecho

conyugal. El problema ocurre cuando el casado quiere vivir como
soltero y el soltero quiere vivir como casado. Esta confusión echa
a perder la belleza del sueño de un matrimonio honroso y la del
sueño de vivir en una soltería honrada, noble e inspiradora.
La decisión de casarse es una de las grandes elecciones de la
vida. La decisión de no casarse también es igualmente importante
y respetable. Solo que honren su elección con dignidad.
Pablo, cuando discute el tema de la decisión de casarse o no
casarse, dice: “Preferiría que todos fueran como yo (posiblemente
soltero o viudo). No obstante, cada uno tiene de Dios su propio
don: este posee uno; aquel, otro. A los solteros y a las viudas les
digo que sería mejor que se quedaran como yo. Pero si no pueden
dominarse, que se casen, porque es preferible casarse que quemarse
de pasión” (1 Cor. 7:8,9).
Cada uno tiene de Dios su propio don: el que se casa, tiene
el don divino del casamiento. El que no se casa, tiene el don de la
continencia que lo induce a una soltería tranquila y feliz.
El don del casamiento

Reiteramos esta verdad fundamental: Casarse bien y vivir
honrosamente como una persona casada es un don o una bendición
de Dios.
El matrimonio es el mejor remedio para la soledad. Es una
protección sabia contra la inmoralidad sexual. “En vista de tanta
inmoralidad, cada hombre debe tener su propia esposa, y cada
mujer, su propio esposo” (1 Cor 7:2). El voto matrimonial demanda
la solícita unión de la pareja en la salud y en la enfermedad, en la
prosperidad y en la adversidad.
Un matrimonio seguro y estable es la mejor contribución que
la pareja puede dar a la sociedad. Un matrimonio que garantice la
llegada al mundo de hijos bien atendidos, que se preparen para las
obligaciones del mundo.
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El imperativo divino para los que deciden casarse incluye
algunas advertencias oportunas:
1. “Bebe el agua de tu propio pozo, el agua que fluye de tu propio

manantial” (Proverbios 5:15). El casamiento está ligado al
contentamiento y al respeto.
2. “No traiciones a la esposa de tu juventud” (Malaquías 2:15). El
matrimonio honroso demanda completa fidelidad.
3. “Goza de la vida con la mujer amada cada día de la fugaz
existencia que Dios te ha dado en este mundo” (Eclesiastes
9:9). La complacencia conyugal es legítima y es una bendición
divina, siempre dentro del marco de la consideración humana y
del mutuo consentimiento.
4. “Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto, lo que
Dios ha unido, que no lo separe el hombre” (Mateo 19:6). La
interdependencia vence el egoísmo y establece la solidaridad
conyugal.
5. “Sométanse unos a otros, por reverencia a Cristo” (Efesios 5:21).
Al casarte tendrás que aprender a vivir en armonía, en consulta,
en unanimidad. La renuncia voluntaria a tu individualismo te
abrirá las puertas a un saludable y necesario entendimiento.
Si prefieres vivir en forma libre e independiente no estás en
condiciones de casarte bien. El sometimiento, en el contexto
bíblico, no equivale a tiranía ni anulación de la conciencia
personal. La presencia de Cristo ennoblece la relación conyugal.
El don de la soltería
El soltero que vive bien como soltero y no tiene la urgencia de
un compañerismo conyugal, probablemente tenga el don especial
de continencia. No necesita perder su independencia. El casado
tiene que vivir en interdependencia.
El soltero, libre de las responsabilidades de la vida
matrimonial, puede dedicarse a desarrollar proyectos que, muchas
veces, los casados no pueden ejecutar. Dice Pablo. “El soltero se
preocupa de las cosas del Señor y de cómo agradarlo. Pero el
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casado se preocupa de las cosas de este mundo y de cómo agradar

a su esposa; sus intereses están divididos. La mujer no casada, lo
mismo que la joven soltera, se preocupa de las cosas del Señor, se
afana por consagrarse al Señor” (1 Corintios 7:33,34)
En cierta ocasión, cuando asistíamos a un curso de verano
en una universidad cerca de Paraná, Argentina, los compañeros
decidieron visitar el leprosorio de Entre Ríos. En ese lugar
encontramos a un sacerdote leproso que atendía espiritualmente a
sus compañeros de infortunio. Pero también estaban dos monjas
de la orden de Maryknoll. Ellas no eran leprosas. Les preguntamos
si no tenían temor de ser contagiadas. Nos dijeron que tenían su
pacto con el Señor de consagrar su vida al servicio de este centro.
Asumimos los riesgos, y estamos conscientes de nuestra decisión. Al
despedirnos del lugar, pensamos que personas casadas difícilmente
podrían cumplir esta difícil misión.
Hay proyectos de vida que pueden desarrollar las personas
solteras sin las responsabilidades propias de la vida matrimonial.
La sociedad recibe las bendiciones de las personas solteras. Por
lo tanto, merecen el reconocimiento correspondiente a su vida
altruista y abnegada.
Proyecto de solución
El casado que viva dignamente su estado matrimonial, sin
pretender tener los privilegios de los solteros.
El soltero que viva dignamente su estado social y civil, sin
pretender tener los privilegios de los casados.
Cada uno sirva a Dios y a la sociedad en el estado en que se
encuentra.
La vida social de Cristo es un paradigma inspirador para las
personas que deciden vivir en soltería.
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tema 3
Amistad larga
y noviazgo corto
Matrimonio para toda la vida.
(Jefrey y Wenona de León,
Somos novios).
Motivación
Somos novios… ¿y ahora quién podrá ayudarnos?
Con este título, Jefrey y Wenona de León destacan la relación entre
la amistad y el noviazgo: Capítulo 1: Amistad larga; capítulo 2:
Noviazgo corto; capítulo 3: Matrimonio para toda la vida.
Es exactamente lo que hemos enseñado a los jóvenes en
nuestras clases y charlas de orientación prematrimonial. La fórmula
funciona muy bien. El que tienen oídos para oír, oiga y practique lo
que ha oído.
Exploración
Una amistad larga y un noviazgo corto es una relación prudente.
Lo contrario, una amistad corta y un noviazgo largo es una relación
sumamente imprudente.
Amistad larga Noviazgo corto Fórmula prudente
Amistad corta Noviazgo largo Fórmula imprudente
28
Una amistad larga es el tiempo adecuado para que dos personas

que se aprecian se conozcan bien. El noviazgo no es tiempo para
empezar a conocerse. En el noviazgo normalmente crece el amor
comprometido. En la amistad, cuando todavía los sentimientos no
están entrelazados en forma única, exclusiva y excluyente, se puede
averiguar, en forma segura y confidencial, aspectos importantes de
la persona amiga.
Veamos las ventajas de la fórmula A

1. Una amistad larga nos permite conocer en forma
objetiva: ¿Quién es la persona amiga? ¿Qué ideas e
ideales tiene? ¿Qué clase de amistades cultiva? ¿Qué
piensa acerca de la superación académica? ¿Qué tipo de
aspiraciones inspiran su vida? ¿Es leal a sus sentimientos
o es altamente emocional? ¿Cómo va su salud? ¿Qué
ideas tiene acerca del dinero? ¿Qué piensa acerca de
las relaciones sexuales prematrimoniales? ¿Cómo es su
actitud frente a Dios y a la religión? ¿Qué valores alientan
su existencia?
2. La amistad larga es una buena plataforma para un
noviazgo juicioso y prudente.
3. Cuando los sentimientos todavía no están comprometidos
o al menos no están confesados, el juicio crítico es más
objetivo y puede ser todo lo exigente que uno aspira y
espera.
4. La amistad larga espera. Tiene paciencia. No demanda
abrazos, besos ni caricias perturbadoras.
5. Cada vez que se analizan más las ventajas de una
amistad larga, surgen más puntos a favor.
29
Veamos las ventajas de la fórmula B
1. Cuando un noviazgo se prolonga por más de dos años, la
relación tiende a complicarse y aunque tenga evidencias
de que aquello podría no resultar, no cortan por temor a
no encontrar otra persona adecuada a sus aspiraciones.
Por esta razón los noviazgos largos suelen traer más
complicaciones que los noviazgos cortos.
2. En el noviazgo prolongado el amor permisivo tiende
a intensificarse. ¿Hasta qué punto? Es predecible un
infeliz adelantamiento.
3. Si un noviazgo prologado se frustra, ¿quién cura un
corazón roto? Y un nuevo compromiso se hace difícil y
traumático.
4. En los noviazgos largos brotan espontáneamente las
conductas indecisas.
5. Los noviazgos eternos no tiene fecha fija de matrimonio
formal, legal y real. Todo se deja al azar y al vaivén de las
olas intranquilas del mar.
Advertencias de un padre a su hijo prematura-

mente enamorado
1. Hijo, te has apresurado en establecer un enamoramiento
que debía esperar. Apenas has cumplido 20 años y recién
estás iniciando tus estudios profesionales. A tu edad tuve
sueños similares a los tuyos. Pero la vida me ha enseñado
que no es prudente el camino que has emprendido. Te
sugiero que deshagas tu compromiso y vuelques tu
pasión a los estudios, por lo menos, objetivamente. Si
quieres seguir queriéndola, mantén tu fe en el amor, pero
sin obras. Es decir, no la busques, no la abraces, no la
beses, no la cites ni te dejes citar, sométete a la prueba
del tiempo, y cuando ya estés cerca de tu graduación,
30
retoma el hilo. Y si se han podido mantener intactos y

leales, podremos reexaminar el caso.
2. Hijo, te felicito porque quieres actuar decentemente y
a la luz del día y pides mi consentimiento para que ella
frecuente la casa. Pues no me siento en la necesidad ni
en la obligación de conceder tu petición. Pon tus ideas
y sentimientos en salmuera y colócalos en el cofre de la
espera y la paciencia.
3. Hijo, creo que tienes mis genes. Tienes el mismo candor
y el mismo deseo que yo tenía de ser fiel a la chica de
mis sueños. Solo que yo guardé mi admiración por ella
sin decirle nada, ni siquiera sugerente, durante tres
años. Cuando vi el horizonte más libre y despejado, ya
actué con más tranquila seguridad. De esperar, se puede
esperar. Pero hay que esperar sin desesperar. La ventaja
que yo tuve es que ella nunca supo nada de mí durante
el tiempo de la espera. Mantuve una buena amistad y
punto. Tú ya iniciaste el proceso y te va a resultar difícil
deshacer la madeja de tus sentimientos. Pero pídele a
Dios sabiduría y control emocional para seguir viviendo
en forma sabia y prudente.
4. Hablando de edades ideales para un compromiso
sentimental, hijo mío, antes de los 20, pisa freno. A los
25, suelta el freno y toma un ritmo normal. A los 30, pisa
el acelerador. En el caso de las chicas, se podría bajar
hasta dos años en cada caso.
5. Hijo, hablando de los consejos de Pablo acerca de que
mejor es casarse que quemarse, eso es verdad, porque
es un consejo inspirado por Dios. Pero como no tienes ni
fecha de matrimonio y ves tu compromiso de largometraje,
mejor no entres en terrenos prohibidos. Ojalá que así
como yo te aconsejo, alguien pueda aconsejar a la chica
de tus sueños. Si actúas con docilidad y prudencia, Dios
te va a recompensar con creces.
31
Congratulaciones de una madre a una hija que supo esperar
1. Hija, valió la pena haber sido dócil a mis consejos.
Siempre te advertía que no imites a las amigas
apresuradas y sentimentales. Ya ves que muchas de
ellas están pagando un costo penosamente alto por su
premura y sordera.
2. Te felicito porque supiste esperar, no saliste con un amigo
especial y otro superespecial. No anduviste de emoción
en emoción, de un brazo a otro brazo, de un beso a otro
beso. Te mantuviste como una flor delicada y ahora eres
la única reina del jardín de tu hogar. El amor genuino
siempre es un milagro de Dios. Y él es un caballero a carta
cabal. ¿Existen en este tiempo esta clase de muchachos?
¡Por supuesto que sí! Ahí tienes la prueba en tu propio
esposo.
3. Hija mía, lloraste muchas veces, protestaste, discutiste, te
encerraste furiosa en tu pieza, pero siempre, finalmente,
fuiste dócil. Ahora, goza de la vida con tu amado
compañero, que esa es la recompensa de las almas
nobles que viven poseídas de un alto ideal.
4. El costo que pagaste para ser una novia juiciosa y
prudente es una preciosa herencia para tus hijos y para
los jóvenes y las señoritas a quienes te toca enseñar.
Ese costo tiene un valor incalculable. El cielo pesa en su
balanza para devolverte el saldo con grandes intereses.
5. Hija, no te canses de hacer el bien. Todo don perfecto,
todo bien, son regalos de Dios en la tierra. Fuiste valiente
como la reina Ester; tus hijos te llamarán bienaventurada,
pero tú las sobrepasas a todas. Finalmente, haz lo
correcto, y deja las consecuencias con Dios.
32
Momento de reflexión
Si para comprar un auto o una casa inviertes mucho tiempo y dinero, para
adquirir un buen matrimonio dedica mucho tiempo a la reflexión, la fe, la
esperanza, la ilusión, la oración. Vale la pena dedicarle tiempo a una de
las más hermosas y difíciles decisiones de la vida.
33
tema 4
¿Cómo empezar y
cómo terminar un
noviazgo?
Más valen dos que uno, porque
obtienen más fruto de su
esfuerzo. Si caen, el uno levanta
al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quién lo levante!
(Sabio Salomón, Eclesiastés 4:9-10).
Motivación
El joven y la señorita que quieren casarse bien, tienen derecho
a albergar sueños de la más elevada inspiración. Si uno espera
casarse solo una vez en la vida, merece la pena fijarse bien en los
modelos más nobles y permanentes de la vida.
Exploración
Nuestra hija Grelte Ester y su esposo Víctor Choroco, docentes
universitarios en diferentes instituciones del Perú y del extranjero,
suelen presentar seminarios de vida familiar, entre otros el de
orientación prematrimonial bajo el título de ¿Cómo iniciar, mantener
y/o terminar una relación sentimental? Como coincidimos, o ellos
coinciden con nosotros, presentamos sus ideas principales.
34
El inicio de una relación sentimental saludable

Para un buen comienzo, aparte de la atracción física, los
pretendientes deben preocuparse por tener un buen carácter,
adornado de cualidades imprescindibles que pueden convertir a
ella en la mujer soñada y a él en el hombre suspirado.
Veamos dos casos inspiradores que nos ofrece la Biblia.
Isaac y Rebeca (Génesis 24) y Booz y Rut (Rut 2, 3 y 4)
¿Qué cualidades tenían los pretendientes? Isaac era temeroso
de Dios, respetuoso con su padre anciano, muy trabajador. Booz
era también temeroso de Dios, caballero, respetuoso, laborioso y
considerado.
¿Qué cualidades tenían Rebeca y Rut? Rebeca era servicial,
hospitalaria y trabajadora. El lector apresurado se acuerda que
Rebeca obtuvo del pozo agua para dar de beber a los diez camellos
de Eliezer (cada camello puede beber hasta 100 litros de agua),
olvidando que antes de atender a los camellos dio de beber a Eliezer
y a sus siervos.
Por su parte Rut, llamada la espigadora, era muy laboriosa,
ágil y bondadosa. Pese a su origen gentil, era sensible a las cosas
espirituales.
Gabriela Mistral ha escrito este hermoso poema, inspirado
en la historia de Rut.
Ruth
Ruth moabita a espigar va a las eras,
aunque no tiene ni un campo mezquino,
piensa que es dueño de las praderas
y que ella espiga en un predio divino…
Booz se ha sentado en la parva abundosa.

El trigal es una onda infinita,
desde la sierra donde él reposa,
Que la abundancia ha cegado el camino…
35
¡Y en la onda de oro la Ruth moabita
viene espigando, a encontrar su destino!
II
Booz miró a Ruth, y a los recolectores
dijo: “Dejad que recoja confiada…”
Y sonrieron los espigadores,
viendo del viejo la absorta mirada…
Eran sus barbas dos sendas de flores,
su ojo dulzura, reposo el semblante;
su voz pasaba de alcor en alcores,
pero podía dormir a un infante…
Ruth lo miró de la planta a la frente,
y fue sus ojos saciados bajando,
como el que bebe en inmensa corriente…
III
Ruth vio a los astros los ojos con llanto
de Booz llamándola, y estremecida,
dejó su lecho, y se fue por el campo.
Dormía el justo, hecho paz y belleza.
Ruth, más callada que espiga vencida,
puso en el pecho de Booz su cabeza.
Gabriela Mistral
El comportamiento de los pretendientes fue inobjetable.

Isaac buscó en oración la voluntad de Dios y aceptó la intervención
de su anciano padre, quien, a su vez, halló la ayuda de un buen
consejero como Eliezer. Booz protegió a Rut cuando ésta se cobijó
a sus pies en una noche estrellada, al borde del trigal. Se abstuvo
de aprovecharse de las ventajas que le brindaban las sombras de la
noche y fue impecable en su conducta privada. Concretó el proceso
del noviazgo, observando fielmente las leyes vigentes de su tiempo.
El comportamiento de las pretendidas también fue ejemplar.
Rebeca aceptó la propuesta de Abraham e Isaac y se mudó con el
36
consentimiento y bendición de sus padres. Rut aceptó al Dios de

Israel, fue dócil a los consejos de su suegra Noemí y respetó las
costumbres culturales.
Principios para iniciar una relación de noviazgo

(a) Considerar la mayor cantidad de similitudes: religión,
edad, nivel cultural, gustos, y otros. (b) No dejarse llevar por lo su-
perfluo, vanidoso, frívolo. (c) Comunicar con claridad y sinceridad
los sentimientos. Dos son los principios no negociables: que haya
amor mutuo en la pareja y que ambos tengan la misma fe religiosa
(2 Corintios 6:14)
Conservación saludable del noviazgo

a) Considerar las diferencias naturales entre el hombre
la mujer, y las diferencias en las formas de pensamiento y
comunicación. (b) Tomar nota cuidadosa de otros principios
prácticos: No prometer lo que no se puede cumplir; evitar lugares
secretos y oscuros de encuentros; no dar rienda suelta al erotismo,
caricias y besos; mejor esperar hasta después del matrimonio;
recordar que tus padres son tus mejores aliados; tu pareja no es solo
una suma de virtudes, tiene también sus defectos. (c) La duración
del noviazgo no debe ser ni muy breve (menos de seis meses), ni
muy prolongada (más de dos años). Un buen noviazgo es vibrante,
feliz y entusiasta. Tiene fecha fijada de matrimonio. Un noviazgo
sin fecha es una flecha lanzada al viento.
El matrimonio soñado
Lo que bien se inicia, bien termina. El matrimonio soñado
llega a ser una realidad cuando ha habido fe, confianza, prudencia
y una paciente espera. Las bodas están listas para honrar a Dios,
a los padres y las familias de los contrayentes, a la iglesia y a la
sociedad.
37
El fin de una relación imprudente.
Es mil veces preferible poner fin a un noviazgo imprudente que
romper un matrimonio consumado. Si en el camino del noviazgo
se dan cuenta que han entrado en un compromiso apresurado, sin
una plena comprensión del carácter de la persona, no es prudente
seguir adelante. “Pero yo he dado mi promesa, ¿debo retractarme
yo?” La respuesta es Sí y lo más rápido que puedas. Es mucho
mejor retirar una promesa contraria a la voluntad de Dios, que
cumplirla y por ello deshonrar a Dios.
Piénsalo bien.
El amor no es un juego de ilusiones, es una decisión de

consecuencias eternas. Tomas tu decisión en base a principios, no
por impulsos pasajeros. Sé firme, pero no ofensivo u ofensiva. “¿Y
si se quiere suicidar?” No lo va hacer, pero por si acaso cuenta a su
madre de esas reacciones. Que ella cuide a su hijo. “¿Y los regalitos,
cartitas y fotos?” Haz lo que quieras, son tuyos. Nunca hables mal
de quien ayer amaste. El respeto siempre es un buen homenaje al
amor genuino.
Dios tiene un buen plan para los jóvenes y las señoritas que
actúan con limpieza y corrección. Si el Señor está en el timón de tu
embarcación, él te conducirá a buen puerto.
Piensa bien y ora mucho antes de iniciar una relación
sentimental. Piensa muy bien y ora con sinceridad antes de
terminarla. Hay sabiduría en empezar bien, y hay sabiduría en
rectificarse a tiempo. No estás obligado u obligada a cumplir
promesas imprudentes.
38
“El amor jamás se extingue” (1 Corintios 13:8).
“El amor viene de Dios. El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es
amor”
(1 Juan 4:7,8).
La pasión ciega; el amor discierne.
39
tema 5
Los cuatro síes del

compromiso
matrimonial
“Sea vuestro hablar: ´Sí, Sí,´ o

´No, No,´porque lo que es
más de esto, de mal procede”
(Mat. 5: 37).
Motivación
En la comedia clásica El sí de las niñas, el escritor español
Leandro Fernández de Moratín cuenta la historia del compromiso
matrimonial de Diego, un burgués de 59 años, con la joven Paquita,
de 16 años. Cuando le preguntan a la joven si acepta al pretendiente
o prefiere irse al convento, ella no dice que sí, tampoco dice que no.
La indecisión es signo inequívoco de rechazo. Finalmente, el viejo
acepta su desilusión porque Paquita ama a Carlos, su sobrino. El
viejo cede su lugar al sobrino, y Paquita y Carlos llegan al altar.
Un buen consejero matrimonial dijo: “El porvenir del amor
reside en la seriedad del lenguaje”. De la seriedad con que se use el
adverbio sí depende el futuro de la vida de una pareja que vive del
sueño o el ensueño del matrimonio. Pero mejor que confiar en tus
propios sueños es que confíes plenamente en el sueño de Dios para
tu futuro conyugal.
40
Exploración
El matrimonio no es un juego de niños o adolescentes. Es un
pacto de honor, un compromiso serio, un acuerdo de trascendencia
temporal y eterna.
Un pacto de semejante naturaleza no depende solo del sí de
la chica, sino de cuatro síes imprescindibles:
El sí de Dios.
El sí de los padres.
El sí del mentor o consejero.
El sí de la persona amada.
El sí de Dios
Si queremos hablar con total responsabilidad del pacto
matrimonial, debemos acudir a la fuente suprema que es el Creador.
Al hablar de los problemas de la ansiedad humana, dijo Jesús
en el Sermón del Monte: “Busquen primeramente el reino de Dios
y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas” (Mateo 6:33).
“Primero Dios”, es una fórmula de despedida entre los mexicanos.
“Nos vemos el jueves”, “Primero Dios”. Es una costumbre simpática
y excelente. En el mismo Sermón del Monte, el Maestro aconseja:
“Tú, cuando te pongas a orar, entra en tu cuarto, cierra la puerta y
ora a tu Padre, que está en lo secreto. Así tu Padre, que ve lo que se
hace en secreto, te recompensará” (Mateo 6:6)
El Creador es el alfarero. El ser humano es el barro. La
vasija no puede disputar con el alfarero. Este conoce mejor nuestra
condición de barro y nuestro corazón de carne. Y Él puede orientar
tu vida mejor de lo que puedas hacerlo tú mismo o por otros medios
humanos. El sí de Dios para proseguir adelante con las intenciones
del compromiso de noviazgo es el más importante. Tú miras lo que
está delante de tus ojos, pero el Señor conoce tu presente, tu futuro,
tu mente, tu corazón, tu voluntad. Si sientes en tu conciencia el sí
de Dios, puedes proseguir con el siguiente paso.
41
El sí de los padres
Dice Pablo: “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres,

porque esto es justo”. “Honra a tu padre y a tu madre, que es el
primer mandamiento con promesa“ (Efesios 6:1,3). Y el sabio
Salomón advierte: “Guarda, hijo mío, el mandamiento de tu padre
y no dejes la enseñanza de tu madre” (Proverbios 6: 20). “El hijo
sabio alegra al padre, pero el hijo necio es tristeza de su madre”
(Proverbios 10: 1).
Si tienes la bendición de tener padres, sobre todo si son
temerosos de Dios, consúltales acerca de las intenciones de
tu corazón, no de los noviazgos hechos o deshechos, sino del
compromiso que piensas establecer.
Padres, seamos juiciosos y amables con nuestros hijos. Si
ellos toman el valor de consultarnos, recibamos su confidencia
con mucha atención. Este es un asunto de vital trascendencia.
Atendamos las demandas y las necesidades de nuestros hijos con
solicitud y comprensión.
Los hijos deben tomar la ventaja de tener un padre y una
madre a quien pueden y deben acudir. Mucho reitera Salomón
acerca de la calidad de las relaciones de los padres con los hijos:
“El hijo necio irrita a su padre, y causa amargura a su madre”
(Proverbios 17:25). “Disciplina a tu hijo, y te traerá tranquilidad;
te dará muchas satisfacciones” (Proverbios 29:17). El trasfondo de
estos mensajes es que no hay ningún otro ser en este mundo que
esté más interesado y comprometido con el futuro de sus hijos
que sus propios padres. Son los representantes de Dios en esta
tierra. Una canción popular dice: “Corazón de madre, corazón de
Dios”. El amor de los padres a sus hijos es o debe ser incondicional,
profundo, misterioso, maravilloso.
El sí del mentor o del educador o del consejero espiritual

Si tienes un mentor espiritual (sacerdote, pastor, orientador
espiritual) acude a su oficina y exponle tu caso. Pablo aconseja:
42
“Acordaos de vuestros pastores que os hablaron de la palabra de

Dios, considerad cuál haya sido el resultado de su conducta e imitad
su fe” (Hebreos 13:7). Y más adelante el consejo se convierte en un
imperativo categórico: “Obedeced a vuestros pastores y someteos
a ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta,
para que lo hagan con alegría, y no quejándose” (Hebreos 13:17). La
intervención oportuna del mentor espiritual puede producir frutos
de valor incalculable. Están en juego la felicidad y la santidad del
compromiso matrimonial.
El consejero espiritual, que es bueno tener en la vida, se siente
honrado cuando acudes a él en busca de orientación y diálogo
abierto. Tienes mucho que ganar y nada que perder.
Es una gran tragedia cuando un grupo de personas carece
de la orientación moral y espiritual de un pastor o un sacerdote
o un consejero espiritual. Dice el profeta Zacarías: “¡Y el pueblo
vaga como rebaño agobiado porque carece de pastor!” (Zacarías
10:2). Pero es una gran bendición para los jóvenes o los padres o la
gente en general cuando hay un pastor que dé la voz de advertencia
para poder andar en los caminos rectos del Señor, como los vigías
o atalayas que tocan la trompeta para hacer despertar al pueblo
frente a la amenaza o los peligros: “Les daré pastores que cumplan
mi voluntad, para que los guíen con sabiduría y entendimiento”
(Jeremías 3:15). Y a falta de pastores hay otros guías espirituales:
ancianos, diáconos, dirigentes juveniles, médicos, psicólogos,
educadores que se identifican con la problemática juvenil y ofrecen
su liderazgo y orientación para la vida con abnegación y sacrificio.
La mentoría espiritual es una función docente ineludible.
El sí de ella
En el caso de Rebeca y sus padres, se registra esta escena:
• --Llamemos a la joven, a ver qué piensa ella.
43
Así que llamaron a Rebeca y le preguntaron:
• --¿Quieres irte con este hombre?
• -Sí, respondió ella” (Génesis 24: 57,58).
De ese bendito sí dependió toda su vida, su parentela y toda

la nación. Un simple sí puede cargarse de gran trascendencia y
valor.
En realidad, el pacto matrimonial tiene cuatro dimensiones
importantes relacionadas con los cuatro síes que acabamos de
comentar: la divina (pacto con Dios), la familiar (pacto con los
padres), la social (pacto con la iglesia y la sociedad) y la personal
(entre él y ella). Cuando se rompe este serio compromiso no es un
asunto solo de la pareja, sino también de la sociedad, de la familia
y, sobre todo, de Dios.
Respetar el compromiso matrimonial con todas sus cuatro

dimensiones. Debe entenderse que a mayor privilegio hay más altas
responsabilidades. Esta fórmula nos ayudó muchísimo en nuestra
experiencia personal, docente y pastoral. Nos vamos aproximando
a los sesenta años de vida de casados y cada año damos gracias
a Dios porque nos dio en su Palabra (Génesis 24), esta fórmula
extraordinaria. Y cuando en diferentes ámbitos donde nos cupo el
honor de enseñar y predicar, nos encontramos con matrimonios
estables, tranquilos, duraderos, nos dicen: “Maestros, la fórmula
funcionó muy bien. La pasamos y la repasamos con nuestros hijos y
con nuestros nietos, porque es un tesoro precioso de la vida familiar.
Gracias, muchas gracias”. En realidad, nosotros no merecemos las
gracias, sino el Autor de la vida y del matrimonio.
44
No haremos progresar nuestros planes matrimoniales sin las debidas
consultas.
Es mejor construir sobre la roca firme de las convicciones bien
fundamentadas, y no sobre la arena movediza de la moral liberal y libertina
que pretende introducir ideas engañosas, completamente contrarias a la
ética divina.
El modelo divino para el noviazgo de los hijos de Dios de cualquier
tiempo se encuentra en Génesis 24. Estudia cuidadosamente todos los
principios implicados en esta historia. El contexto patriarcal no disminuye
su importancia en el contexto actual.
45
tema 6
El romance antes y
después del matrimonio
“Goza de la vida con la mujer amada cada día

de la fugaz existencia que Dios
te ha dado en este mundo”
(Salomón, Eclesiastés 9:9).
Motivación
“El amor mutuo será emocionante –dice Chapman en Los
cinco lenguajes del amor—más allá de lo que sentimos alguna vez
cuando nos enamoramos”. Entre el romance antes del matrimonio
y después de él, debe haber una solución de continuidad, no el
cortocircuito del encanto al desencanto.
¿Por qué el joven enamorado es capaz de esperar una hora
para que la joven de sus sueños aparezca por su ventana y le dé
apenas un saludo de gracia y una fugaz mirada enigmática pero
llena de amor? ¿Y por qué después de casados pareciera que el
tiempo para el romance se hubiera esfumado?
Exploración
El romance no es solo emoción y erotismo. El romance es la
expresión de un amor juicioso e inteligente.
46
El romance no es asunto solo de jóvenes enamorados. Es

privilegio también de los casados. El amor juvenil es germinal y
floreciente. El amor conyugal es creciente y no tiene que dejar de
ser floreciente. El amor debe ir creciendo, con el correr de los años,
en intensidad y profundidad.
Si antes el joven podía esperar una hora por una mirada
condescendiente, ahora que ya están felizmente casados ¿por qué
ya no encuentran una hora, media hora, diez minutos o un minuto
para seguir platicando como enamorados? ¿No será que el amor y
el eros en el noviazgo eran solo un sueño sin plenitud del éxtasis
sexual? ¿Y ahora que ya están casados, con el lecho conyugal bien
abastecido, ya no hay tiempo para la ansiosa espera o para el amor
romántico y las caricias?
Para que se mantenga vivo el romance matrimonial, Gary
Chapman sugiere practicar sus conocidos cinco lenguajes del amor.
1. Palabras de afirmación.
2. Tiempo de calidad.
3. Regalos.
4. Actos de servicio.
5. El toque físico.
Estos lenguajes del amor, sencilla y pedagógicamente

explicados por el autor, son prácticos, útiles y eficaces. Los
esposos John y Millie Youngberg los han empleado mucho en sus
seminarios Encuentro de vida familiar. Ellos hacen notar que
hace falta un lenguaje más que le daría mayor valor profundidad al
amor genuino: la comunicación espiritual o devocional, la oración
personal y conyugal. La presencia de Dios en la intimidad del hogar
le da tal toque de gracia que el amor se vuelve firme, sólido y estable.
47
Tengamos en cuenta la relación que hay entre el amor y el
eros. Como dice Octavio Paz, el eros sin amor es completamente
vacío y altamente comercializable. El eros es legítimo solo como
expresión del amor legítimo y exclusivo de la pareja conyugal.
En estos tiempos de una educación para una sexualidad
prematrimonial libre y libertina hace falta promover la educación
para una sexualidad prematrimonial responsable y seria. Octavio
Paz dice que la mejor vacuna contra el sida es la abstinencia. Esta
declaración de un autor tan libre y humanista merece un gran
aplauso.
Por lo menos, pongamos en práctica los cinco lenguajes
del amor. No descuidemos ninguno de ellos, y, con la bendición
de Dios, involucremos a la lista de Chapman la sugerencia de los
esposos Youngberg .
El amor ANTES del matrimonio:

Era una ilusión, una canción, una brisa, una risa, una sonrisa…
después
Mucha desilusión, una canción apagada, un viento, pura prisa, pura
discusión…
Antes
Cortesía, caballerosidad, generosidad, oídos atentos.
Después
Descortesía, confianza indebida, egoísmo, sordera.
Y las comparaciones pueden extenderse muy fácilmente.

Pero en una relación de un amor genuino cristiano, las cosas deben
ser totalmente diferentes:
Si antes había ilusión, respeto, consideración, delicadeza y cortesía,
después deberían profundizarse todas estas virtudes, y volverse
48
más idealistas, más respetuosos, más corteses, más atentos. Y

el cambio positivo debería ser afán y preocupación de los dos
cónyuges. Muchas veces todo se complica porque en el fondo del
ser está agazapado el egoísmo y el orgullo y no quieren ceder su
terreno a la mansedumbre y a la humildad. Todo esto depende de
una vida seria de comunión con Cristo. “De hecho, en ningún otro
hay salvación, porque no hay bajo el cielo otro nombre dado a los
hombres mediante el cual podamos ser salvos” (Hechos 4:12).
Sin una relación correcta y continua con Cristo, seremos como
los pámpanos desligados de la vid. Pero con Cristo en la familia,
el hogar se ilumina como el día con el sol del amanecer. “Todo lo
puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13). Solo la gracia y
la presencia bienaventurada de Jesús en nuestros hogares pueden
producir el milagro del florecimiento del amor. Con Cristo hay
crecimiento, maduración, profundización y tierna consideración.
49
tema 7
¿Cómo se completan
el hombre y la mujer?
“Amémonos los unos a los otros,
porque el amor viene de
Dios, y todo el que ama ha nacido de
él y lo conoce. El que no ama no
conoce a Dios,
porque Dios es amor”
(1 Juan 4:7,8)
Motivación
Cierta vez los escribas especialistas en divorcio, le preguntaron
al Maestro:
“--¿Está permitido que un hombre se divorcie de su esposa
por cualquier motivo?
“--¿No han leído –replicó Jesús-- que en el principio el Creador
´los hizo hombre y mujer´, y dijo: ´Por eso dejará el hombre a su
padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser
un solo cuerpo´? Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto,
lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre” (Mateo 19:3-6).
Parece que siempre ha habido tensión o controversia entre
los especialistas en divorcio y los defensores de la teología del
matrimonio que respetan el plan original de Dios: un matrimonio
heterosexual, basado en un amor permanente y que tiene el
50
privilegio de la relación sexual como el símbolo de la fusión de dos

vidas en una sola, dos cuerpos en uno solo.
Exploración
Los que aceptan las enseñanzas del Maestro, especialmente
las referidas al matrimonio, están persuadidos a reconocer que Dios
es la verdadera fuente suprema del amor y que él es el creador y
originador o diseñador del matrimonio. Las formas alternativas
del matrimonio que implanta la “nueva moral” bajo el tristemente
célebre lema LGTB (lesbianas, gays, transexuales y bisexuales),
llama a lo bueno, malo; y a lo malo, bueno.
Felizmente la ética cristiana nunca ha sido democrática, sino
teocrática. No depende de las mayorías ni de las encuestas, sino
de la soberanía de Dios. La santidad de las relaciones sexuales
dentro del matrimonio heterosexual está claramente establecida en
el séptimo mandamiento del Decálogo: “No cometerás adulterio”
(Éxodo 20: 13) que Jesús lo magnificó en su famoso Sermón del
Monte: “Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio. Pero yo
os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya
adulteró con ella en su corazón” (Mateo 6: 27, 28). El matrimonio
entre un hombre y una mujer, única forma santificada por el Creador,
es honrosa (Hebreos 13: 4). El casarse hombre con hombre o mujer
con mujer es absolutamente deshonroso. Y decir esto y enseñarlo es
tildado de homofóbico. Esto es simplemente una graciosa o, mejor,
una grandiosa ironía.
Dios como fuente suprema del amor conyugal es la base
para construir un matrimonio santo y feliz. Detengámonos en
algunos versículos áureos: “El amor es de Dios”, dice enfáticamente
Juan, el discípulo del amor. ¿Qué es el amor? Es la pregunta más
trascendente que padres, mentores y jóvenes enamorados deben
plantearse. El amor es un sentimiento noble y profundo que liga el
corazón del hombre con el corazón de dios y le permite amar a la
51
mujer soñada con un sello indeleble.
“Grábame como un sello sobre tu corazón;
llévame como una marca sobre tu brazo.
Fuerte es el amor, como la muerte,
y tenaz la pasión, como el sepulcro.
Como llama divina es el fuego ardiente del amor.
Ni las muchas aguas pueden apagarlo, ni los ríos pueden
extinguirlo” (Salomón, Cantares 8:6,7, NVI). El amor es llama divina,
en hebreo shalhebetyah que puede descomponerse en shalhebet
(llama o fuego) y yah (forma abreviada de Yavéh o Jehová). El
Cantar de los cantares, libro poético de la Biblia que exalta las
bellezas y privilegios del amor conyugal, llega al clímax del amor
humano entre esposos al señalar que el amor es un sello de Dios,
una potente flama atizada por Dios.
Este es el verdadero amor que viene de Dios y liga el corazón
del hombre y de la mujer en el sagrado pacto de un matrimonio
bien pensado y bien decidido. Sin Dios, el amor no pasa de ser
una pasión arrolladora, una atracción erótica, un sentimiento
sentimental, fugaz y pasajero.
Dios como originador del matrimonio

El Maestro desencantó a los especialistas en divorcio y a los
abogados que lo defienden recordándoles que, en el principio, el
Creador hizo al hombre y a la mujer para que se amen y vivan para
siempre en un matrimonio agraciado y feliz. Y su conclusión es
un canto de victoria del amor conyugal: “Por tanto, lo que Dios ha
unido, que no lo separe el hombre”.
Lo que Dios hizo en el Edén, Jesús lo reselló en Caná de

Galilea. Y mientras el cielo sea cielo y la tierra sea tierra, ni una
jota, ni una tilde pasará de la santidad del matrimonio. Y en la
nueva tierra prometida permanecerá para siempre el hogar de los
redimidos bajo la bendición del amor eterno de Dios.
52
Frente a la megatendencia del divorcio, frente a las vanas
pretensiones de dar muerte al matrimonio establecido por Dios,
está el modelo de Génesis 1 y 2 y está el final glorioso anticipado en
Apocalipsis 21 y 22.
Mejor que asumir una actitud pesimista, acudamos al autor
de la vida y del amor, del hogar y el matrimonio para obtener fuerza,
aliento, gracia y bendición para proseguir con la gran batalla de la
vida.
El hombre y la mujer
El hombre es la más elevada de las criaturas.
La mujer es el más sublime de los ideales.
Dios hizo para el hombre un trono; para la mujer un
altar.
El trono exalta; el altar santifica.
El hombre es el cerebro.
La mujer el corazón.
El cerebro fabrica la Luz; el corazón produce el Amor.
La Luz fecunda; el Amor resucita.
El hombre es fuerte por la razón.
La mujer es invencible por las lágrimas.
La razón convence; las lágrimas conmueven.
El hombre es capaz de todos los heroísmos.
La mujer de todos los martirios.
El heroísmo ennoblece; el martirio sublimiza.
El hombre tiene la supremacía.
La mujer la preferencia.
La supremacía significa la fuerza; la preferencia
representa el derecho.
El hombre es un genio.
La mujer un ángel
53
El genio es inmensurable; el ángel indefinible.
La aspiración del hombre es la suprema gloria.
La aspiración de la mujer es la virtud extrema.
La gloria hace todo lo grande; la virtud hace todo lo
divino.
El hombre es un código.
La mujer un evangelio.
El código corrige; el evangelio perfecciona.
El hombre piensa.
La mujer sueña.
Pensar es tener en el cráneo una larva; soñar es tener
en la frente una aureola.
El hombre es un océano.
La mujer es un lago.
El océano tiene la perla que adorna; el lago la poesía
que deslumbra.
El hombre es el águila que vuela.
La mujer es el ruiseñor que canta.
Volar es dominar el espacio. Cantar es conquistar el
alma.
El hombre es un Templo.
La mujer es el Sagrario.
Ante el Templo nos descubrimos; ante el Sagrario nos
arrodillamos.
En fin: el hombre está colocado donde termina la tierra.
La mujer donde comienza el cielo.
Víctor Hugo
54
1. ¿Qué mentalidad debe gobernar mi vida en relación con el
matrimonio que yo soñé: el secularismo o el cristianismo? ¿Por
qué?
2. ¿Qué debe interesarme más, la legislación del divorcio o la
teología del matrimonio?
3. ¿Qué corriente debe definir el rumbo de mis decisiones: las
opiniones de los hombres o el sueño divino para la familia
humana?
55
Bibliografía comentada
Ofrecemos, al final de cada capítulo, algunas fuentes
que recomendamos para que los padres realmente interesados
en la educación y orientación de sus hijos puedan cumplir
adecuadamente su deber. Un libro bien seleccionado es un valioso
agente de transformación.
Bibliografía básica
Santa Biblia (1999) – Nueva Versión Internacional (NVI).
Miami, Florida: Editorial Vida.
La Biblia es el mejor recurso de orientación familiar. Es
la lumbre del hogar. He aquí algunos pensamientos: “Antes que
nada, consultemos al Señor” (1 Rey. 22:5). “Cuando falta el consejo,
fracasan los planes; cuando abunda el consejo, prosperan” (Prov.
15:22). El asunto del noviazgo es un pacto sagrado (Mal. 2:14; Prov.
2:17). Antes de prometer el amor para siempre o dar el sí, hay que
considerar la naturaleza seria de este compromiso.
Para una orientación inspirada por el Creador del
matrimonio, el pasaje bíblico de Génesis 24 resulta fundamental.
En él encontramos el paradigma válido aun para nuestros días:
Dios dirige las circunstancias para el encuentro de la pareja; los
padres intervienen para aprobar y bendecir el noviazgo; el consejero
o mentor cumple su deber; el novio interesado y la mujer elegida
actúan en forma juiciosa y exclusiva.
White, Elena (1989). Carta a jóvenes enamorados. Buenos
Aires, Argentina: Asociación Casa Editora Sudamericana.
Una importante colección de 16 cartas dirigidas por una
madre amorosa y educadora familiar a sus hijos y a los jóvenes
que le solicitaron sus consejos oportunos. La autora es una de
las escritoras más prolíficas de la historia editorial de los Estados
Unidos. Los jóvenes, naturalmente, sueñan con un matrimonio
feliz. La lectura de cada una de estas cartas podrá ser de gran
utilidad para mirarse en el espejo de otras experiencias y obtener
56
las conclusiones más oportunas para actuar con prudencia y

sagacidad.
Bibliografía complementaria
De León, Jefrey y Wenona (1996). Somos novios. Y ahora…
¿quién podrá ayudarnos? Miami, FL. Editorial Unilit.
En forma amena presentan la fórmula de un matrimonio
prudente e inteligente.
Balabarca, Yván (2013). Hablemos de noviazgo. Lima:
Universidad Peruana Unión, Difusión Cultural.
El autor, profesor de teología y vida familiar en la Universidad
Peruana Unión, ofrece en lenguaje compatible con la juventud de
nuestros días, una valiosa orientación para el matrimonio con una
cosmovisión bíblica de la vida. Otros títulos que ha publicado el
mismo autor y que están disponibles en forma impresa y electrónica
son: Noviazgo de éxito (2011), 50 preguntas sobre noviazgo (2011),
La persona que amo es adicta (2011), Tópicos sobre noviazgo (2012),
El sexo no viene solo (2012). El sitio donde se pueden encontrar los
textos completos en PDF es http://es.scrib.com/marbala.
Chico Robles, Arnulfo (2010). Lo que usted debe saber
antes de dar el sí. Lima, impreso por la Universidad Peruana
Unión en su Centro de Aplicación Editorial Imprenta Unión.
Lectura didáctica aplicable para un curso de preparación
para el matrimonio. El autor es docente de la Universidad Peruana
Unión en el área de vida familiar.
Frankl, Víctor (1995). La presencia ignorada de Dios.
Barcelona, Editorial Herder.
El famoso pensador austríaco plantea que el ser humano es
espiritual y tiene necesidad de creer en alguien supremo o superior
a sí mismo. Frente a la realidad de Dios el ateo niega su existencia,
el agnóstico la ignora. Hay una especie de represión de Dios que
pugna en el hombre contemporáneo. La logoterapia parte de la
realidad espiritual del hombre para entender integralmente su
problemática. Mediante la trascendencia de la conciencia el ser
humano puede encontrar sentido a la existencia.
57
Marañón, Gregorio (1947). Don Juan. Madrid: España Calpe.
Para el endocrinólogo y escritor español Gregorio Marañón,
el don Juan encarna al hombre que pretende ser monógamo, pero
vive en condición de amante libre y libertino. Su falta de sentido de
exclusividad linda con el afeminamiento. La inmadurez del don Juan
puede deberse a carencias bioquímicas que ponen en entredicho la
hombría del seductor o conquistador de muchas mujeres.
Paz. Octavio (1993). La doble llama. Amor y erotismo.
Barcelona: Editorial Seix Barral
Según Octavio Paz el erotismo de nuestro tiempo se ve
explotado por el mercantilismo, el lucro y la publicidad. La licencia
sexual y la moral permisiva “ha degradado el eros, ha corrompido
la imaginación humana, ha resecado las sensibilidades, y hecho
de la libertad sexual la máscara de la esclavitud y de los cuerpos”.
Con rarísima y extraordinaria sensatez dice que la abstinencia es la
mejor vacuna contra el sida e implícitamente contra las tristemente
célebres ETS (enfermedades de trasmisión sexual). Para Paz los
grandes enemigos del amor son la promiscuidad que lo convierte
en un pasatiempo y el dinero que lo convierte en servidumbre.
El verdadero amor, el amor conyugal, demanda reciprocidad y
exclusividad. Vale la pena revisar este interesante ensayo del
laureado mexicano y llegar a ciertas conclusiones compatibles con
la ética cristiana.
Gema
“El amor es un sentimiento tan sagrado que muy pocos
saben lo que realmente es. Es un término que se utiliza, pero que
no se comprende. El cálido resplandor del impulso, la fascinación
que un joven siente por una señorita no es amor; no merece
ese nombre. El amor verdadero tiene una base intelectual, un
conocimiento profundo del objeto amado” (White: Cartas a
jóvenes enamorados”, p. 36).
58
Hoja de refuerzo de
aprendizaje, 1
Encierra en un círculo la mejor alternativa
1. Tener un hogar es más importante si no
que tener una casa
2. Si no me caso tengo que vivir mi vida si no

en frustración y amargura
3. Siempre es mejor tener una si no

amistad corta y un noviazgo largo
4. En el noviazgo debe interesarme si no

exclusivamente el sí de ella
5. Siempre es mejor terminar un mal si no

noviazgo en buenas relaciones
6. El amor romántico y admirativo

debe continuar cultivándose en la si no
vida matrimonial
7. El sexo puede ser determinado por

elección libre y voluntaria De la si no
persona
8. Dios es el autor y diseñador del si no

verdadero matrimonio
Para tu autoevaluación
sí 2. no 3. no 4. no 5. sí 6. sí 7. no 8. sí
59
Hoja de compromiso, 1
(Para los jóvenes)
Yo……………………………………………………………………
con la gracia de Dios y mi esfuerzo personal me comprometo a que si
me caso, viva bien casado, y si no me caso, viva bien soltero.
...................................... .....................................
Fecha Fima
(Para los padres, maestros y otras personas mayores que intervienen

en la educación o en la orientación familiar)
Yo ……………………………………………………………………
con la gracia de Dios y mi esfuerzo personal me comprometo a ejercer
una buena influencia para que mis hijos o mis alumnos o mis jóvenes
amigos se casen bien, o no se casen, pero que lleven una vida digna
y ordenada.
...................................... .....................................
Fecha Fima
60
capitulo
2
Los padres
que Dios soñó
61
Presentación
Los padres siempre serán una sombra protectora para el
hogar. “Tan compasivo es el Señor con los que le temen como lo es
un padre con sus hijos” (Salmos 103: 13). Un padre por ser padre
parece que debería ser compasivo. Que no lo sea sería una negación
a su condición, pero que lo sea, sirve de punto de referencia para
saber cómo es Dios el Padre. David lloró por su rebelde que lo quería
matar. El padre del hijo pródigo hizo fiesta cuando el hijo perdido
volvió a casa oliendo a porkilandia. El corazón de un padre puede
reflejar, aunque sea débilmente, el corazón de Dios.
Una madre que nunca descansa es un poema al amor
abnegado. En Salmos 128 se usan dos hermosas metáforas para
presentar la persona de una madre: la vid y el olivo. La madre con
su dulzura y su suavidad conquista a sus hijos para esta vida y para
la eternidad. Corazón de madre, corazón de Dios. A la madre que
queda en casa se le dice que no trabaja. ¡Qué ironía! Ella no tiene
tiempo para descansar, no tiene vacaciones ni día libre. No tiene
sueldo en la planilla. Gracias a las manos laboriosas de una madre,
la casa es un verdadero hogar. El desayuno está servido. La sopa
está caliente cuando vuelven el esposo y los hijos. Su obra de arte
de la mesa bien servida se destruye en pocos minutos.
Al casarnos con la posibilidad o la expectativa de tener
hijos, indudablemente soñamos con llegar a ser buenos padres,
progenitores de hijos bien amados y bien disciplinados, trabajadores,
estudiosos, que siempre ostenten el apellido con honra y dignidad.
Pero para que los hijos salgan buenos, los padres tenemos que
servirles de ejemplo e inspiración. El modelaje es el mejor recurso
para educar a los hijos.
Un hogar seguro y estable es la mejor herencia que podemos
dejar a nuestros hijos. Es absurdo y muy doloroso ofrecer a
nuestros hijos un hogar dividido y destrozado por las rencillas, las
62
separaciones y los divorcios. Un hogar estable y seguro afronta

vientos, tempestades, inundaciones porque está asentado sobre la
roca. “Esa roca era Cristo” (1 Corintios 10: 4).
Más tolerable que el divorcio es la viudez. Hemos encontrado
a lo largo de la experiencia de la vida que los viudos y las viudas
son ciudadanos de una patria desconocida para el común de los
mortales. Muchas de estas personas viven con una fe extraordinaria
y una gran esperanza: el reencuentro feliz, anhelado, suspirado y
soñado con el cónyuge amado.
Finalmente, en este capítulo damos el salto de la paternidad
a la abuelidad ¿Te gustaría disfrutar de una “abuelidad” honrosa y
honrada? Que tus hijos y tus nietos se beneficien de la experiencia
que te ha dado la vida. Las fuerzas físicas podrán disminuir, pero
las espirituales se podrán incrementar hasta el mismo ocaso de la
vida.
Este capítulo pretende ser un conversatorio beneficioso para
ejercer nuestra paternidad, como una gran bendición familiar.
63
tema 1
¡Qué padre
ser padres!
“Mi padre duerme. Su semblante
augusto figura un apacible corazón,
está ahora tan dulcesi hay algo en él
de amargo, seré yo…Y mi madre
pasea allá en los huertos
saboreando un sabor ya sin sabor.
Está ahora tan suave,
tan ala, tan salida, tan amor”
(César Vallejo, Los pasos lejanos).
“Tu nombre viene lento como las músicas humildes,
y de tus manos vuelan palomas blancas
(Carlos Oquendo de Amat, Madre).
Motivación
Un aspecto humano, noble y enternecedor de la poesía de
Vallejo es el de la evocación familiar. Recuerda con mucho cariño y
respeto a su padre, a su madre, a sus hermanos. Se identifica con
los sentimientos más delicados y con las actitudes más definidas de
la vida cristiana.
Una de las joyas de la literatura universal dedicadas al ser
que nos trajo a este mundo es Madre de Carlos Oquendo de Amat.
Merecería ser impresa con letras indelebles no solo en el papel sino
en el corazón de los hijos.
¡Qué padre ser padres! Es una expresión bien mexicana que
expresa un aprecio superlativo por la condición de ser padres. Pero
64
el llegar a ser padres muchas veces es fruto de la improvisación y de

la imprevisión. De pronto somos padres y no estamos preparados
para esto. Nadie nos ha exigido ir a una escuela para padres antes
de ejercer esta función importantísima de nuestra vida terrenal.
Para suplir esta carencia, dediquemos tiempo y atención a los
planteamientos de este tema. Desarrollaremos solo el abc de la
paternidad responsable.
Una metáfora hermosa compara al esposo con el sol de la
madrugada que se levanta decidido a emprender la jornada y sale
a buscar el pan de cada día con su calor y su alegría (Salmos 19:4-
6). Dios le concede valor, fuerzas, optimismo, fe y resolución de no
volver a casa con las manos vacías. Dichoso el esposo que come y
da de comer a su familia del fruto de sus manos, aun exponiéndose
a mil peligros (Sal. 128: 1, 2). Para la esposa hay otra metáfora
significativa: la de la vid y los pámpanos. “En el seno de tu hogar, tu
esposa será como vid llena de uvas alrededor de tu mesa; tus hijos
serán como vástagos de olivos” (Salmos 128:3). Ella da su savia a
los hijos para que estos tengan la dulzura de las uvas y la suavidad
de los olivos.
Exploración
Si en la literatura universal se encuentran poemas de
resonancia familiar que elogian al padre o la madre, ocurre lo
mismo, en una jerarquía más elevada, con la literatura bíblica. El
hermoso salmo 128 es un poema que resalta la grandeza de un
padre, luego de una madre y remata con la mención al abuelo.
Elogio al padre
“Bienaventurado todo aquel que teme a Jehová,
que anda en sus caminos.
65
Cuando comas el trabajo de tus manos,
bienaventurado serás y te irá bien”
(Salmos 128: 1, 2).
Bendito es el padre temeroso de Dios. No le faltará honra
y valor en su vestidura. Estará ceñido de sana alegría y será leal
a su esposa y a sus hijos. Como la luz a la aurora, como la altura
al cielo, así será un padre madrugador. En él no hay sombras que
oscurezcan sus caminos porque tiene la mente limpia y las manos
limpias. Sus ojos reflejan el amor por Dios y por su familia. No se
cansa de implorar al cielo la ayuda que necesita para cumplir su
deber. El Invisible se hace visible para él. Siente su aliento, su voz,
y siempre lo toma en cuenta para avanzar con pasos decisivos y no
vacilantes. Está acostumbrado a ser dirigido por el Santo Espíritu de
Dios. Su mayor recompensa es el deber cumplido.
El padre responsable trae el pan con la ofrenda generosa de
su sudor. Su vida cotidiana es un himno al trabajo. Los hijos que
engendró y la esposa que tomó, no pueden dejar de comer mientras
crecen al calor de su nido. Por el padre responsable el hogar vive
tranquilo, porque la benevolencia de Dios cuenta con sus manos
recias. El Señor se ve a sí mismo en la compasión que siente un
padre por sus hijos (Salmos 103: 13). Dios le da fuerzas renovadas,
le da salud, le da vida. Al padre le toca labrar la parcela de felicidad
y de santidad que el Creador le ha entregado para que lo cultivara.
La casa de un padre responsable siempre estará bien abastecida y
sus hijos no caerán en la estrechez. “Joven fui y he envejecido, y no
he visto justo desamparado ni a su descendencia que mendigue
pan” (Salmos 37: 25).
Bendita la madre virtuosa cuyo valor excede al de las piedras
preciosas (ver Proverbios 10: 10-31 y su magnífico comentario
exegético en La perfecta casada del inolvidable Fray Luis de León).
“Tu mujer como la parra fértil a los flancos de tu casa, tus hijos
como vástagos de olivo en torno a tu mesa” (Salmos 128: 3). Madre,
tú eres la vid, y tus hijos los pámpanos. Si alguien ofende a tus hijos,
66
mejor le fuera toparse con una osa furiosa, mejor le fuera hundirse
en el mar atado a una piedra de molino, porque te vuelves como
fiera cuando tienes que proteger o defender al bendito fruto de tus
entrañas. Si te arrancan a un hijo, tienen que arrancarte de raíz,
porque tú sufres sus sufrimientos, tú lloras sus pesares, y quedas
desgajada retorciéndote al viento. Tú eres la vid que ves crecer a
tus hijos en la dulzura de tu alegría, en el espíritu y la letra de tus
canciones, en la fragancia de tu huerto sellado. Eres también el
olivo de tu propio olivar y echas tus vástagos para entregarlos al
Señor como ofrenda de suave fragancia con tus manos temblorosas.
Madre vid, madre olivo, madre de tu propia casa, madre del huerto
del Señor, tú verás a tus hijos sirviendo en esta vida a la humanidad
doliente y finalmente salvados para toda la eternidad. Tú vales,
madre, muchísimo más de lo que crees. Sin ti, ¿qué sería el mundo?
La paternidad extendida es la bienaventurada abuelidad.
Termina Salmos 128 con estos hermosos versos: “Bendígate el Señor
todos los días de tu vida/ y veas a los hijos de tus hijos./ ¡La paz sea
sobre Israel!” (vers. 5, 6). Bienaventurado el abuelo que puede ver a
los hijos de sus hijos y recibir como el arroyo nuevas fuerzas hasta
convertirse en río de aguas cuanto más profundas, más quietas y
apacibles. Cómo no querer a los nietos si ellos son la corona de
nuestra alegría, nuevos gajos de nuestro rosal, nuevos motivos
para vivir cantando los mismos cantos de cuna antes de dormir, y
no perder nunca la alegría de vivir, tal vez cansados, pero siempre
contentos. El amor de los abuelos es simple y desinteresado;
aplaude pero no corrige, goza pero no se responsabiliza, acuna a
ratos pero no se desvela; para todo eso están sus padres, es su
turno en la ronda de la vida.
Nunca olvidemos el mensaje del salmo 128. Es un cántico a la
paternidad. Junto con su gemelo, el salmo 127, nos afirman el valor
profundo de la vida familiar.
El padre y la madre responsables brindan todo lo que son y lo
que pueden hacer para construir un hogar estable y seguro
67
donde se desarrollen los hijos. Estos se hacen acreedores
al elogio no solo literario, sino también a la permanente gratitud
familiar. Contemplando la otra cara de la moneda, el padre y
la madre irresponsables llenan el mundo de dolor y confusión.
Padres que engendran hijos y los abandonan, que dejan madres
solteras, que se separan o se divorcian sin importarles victimizar
y abandonar a sus hijos producen heridas abiertas en el corazón
de la sociedad. Este es un panorama desalentador. En el Perú,
tristemente el consumo de cerveza se va incrementando año tras
año en detrimento del consumo del alimento que garantiza la salud
de la familia. Qué gran transformación ocurriría si se clausuraran las
fábricas de cerveza y se convirtieran en fábricas de pan de cebada.
Hay mucha desolación y confusión en los hogares donde el padre
se vuelve necio cada vez que se marea o se emborracha. “El vino
es escarnecedor, la cerveza alborotadora; y cualquiera que en ellos
yerra, no será sabio” (Proverbios 20: 1, Biblia Jubileo 2000). “El vino
lleva a la insolencia, y la bebida embriagante al escándalo; nadie
bajo sus efectos se comporta sabiamente” (Proverbios 20: 1, NVI).
Paternidad responsable
Una paternidad responsable se evidencia por las siguientes
características:
1. El padre es el sustentador moral y económico de su

familia (Salmos 128: 1, 2). Él es temeroso de Dios y como
tal vela para que no falte el pan, la ropa, la casa, el
médico, la educación de los hijos y el plan de superación
de la esposa.
2. Él es eje de autoridad. Él representa la voz oficial del
concilio conyugal y familiar. En el gobierno del hogar,
tiene el mando representativo.
3. Líder espiritual de la familia. En cierto sentido, todo padre
es un verdadero sacerdote o pastor de su propia familia.
68
La vida espiritual y religiosa del hogar es el punto clave

de toda paternidad responsable. Primero Dios, y todo lo
demás vendrá por añadidura. Si hay hijos que no tienen
ningún interés en asuntos religiosos, aun su desinterés
está bajo la responsabilidad del padre.
4. Valores conectados directamente con el papá. El padre
tiene que ocuparse de los valores más austeros de la
vida familiar: el orden, el respeto, la limpieza, el amor al
trabajo, el amor al estudio y a la superación, la honradez,
la utilidad, la laboriosidad, la diligencia, la perseverancia,
la veracidad, el honor, la simpatía entre hermanos, el
sentido de solidaridad. Una educación familiar sin
valores no tiene una verdadera dirección.
Maternidad responsable
1. Sustentadora moral y docente de su familia. Ella vela

para que los hijos crezcan bien educados, porque es la
principal maestra de su hogar. El blanco más elevado
que le toca alcanzar es la formación de un carácter sólido
y bien formado en sus hijos para esta vida y para la
eternidad. Muchas veces se subestima esta tara como
algo doméstico y sin mucho valor y se piensa que si ella
no trae un segundo sueldo no sirve como buena esposa
y madre. Y en la vida actual, la mujer trabaja no solo en
su casa, sino también en el mundo laboral y profesional.
2. Eje de afectividad. Tal vez podría tener alguna carencia
en autoridad, sobre todo si el papá está presente en la
vida familiar, pero nunca deben fallar en afectividad. La
dulzura de la vid y la suavidad del olivo son inherentes a
ella (Salmos 128: 3, 4).
3. Líder docente de la familia. Ella es la responsable de
conducir la escuela del hogar. En el gobierno de la
69
1. educación y la cultura en valores, ella tiene el mando más
elevado.
2. Valores directamente conectados con la mamá. La
madre tiene que ocuparse de los valores más humanos y
delicados de la vida familiar: la fe, la reverencia, la pureza,
la misericordia y compasión, la sencillez, la cortesía, la
amabilidad, la bondad y otros. Una educación con un
carácter bien estructurado tiene trascendencia para la
vida presente y la eternidad.
La paternidad y maternidad deben llegar a ser fuentes de
revalorización de nuestro hogar. La paternidad debe asegurar el
amor protector, la seguridad, la previsión y la responsabilidad. La
maternidad debe garantizar el amor compasivo, la unidad familiar
y el compañerismo.
La paternidad y la maternidad no son funciones en conflicto,
sino en complementación sabia y armoniosa.
La paternidad está ligada al varón, al caballero, al ish (ser
humano masculino, en hebreo), y la maternidad es inherente solo
y exclusivamente a la mujer, la dama, a la ishshah (ser humano
femenino, en hebreo). No hay manera legítima ni teológica ni
filosófica ni científica de borrar o eliminar esta diferencia. Lo que
ha establecido Dios no lo niegue ni lo distorsione el hombre. Cada
hombre y cada mujer respete el género que el Señor le concedió.
Las nuevas correntadas de la llamada ideología del género están
minando las bases éticas de la paternidad y de la maternidad. Su
retórica es el elogio a la locura de los tiempos posmodernos.
70
Piensa con cuidado y sinceridad tus respuestas:
1. ¿Soy un buen papá responsable, sustentador, protector, eje de
autoridad y un líder moral y espiritual de mi familia? (Si dices sí, Dios
te bendiga; si dices no, pídele a Dios que te ayude a recuperar tu
dignidad perdida).
2. ¿Soy una buena mamá, responsable, educadora, forjadora del
carácter de mis hijos, eje de afectividad y buena compañera de mi
esposo? Si se da el caso y apremia la necesidad ¿asumo también mi
responsabilidad laboral y profesional? (Si dices sí, Dios te bendiga;
si dices no, pídele al Señor que te ayude a mantener o recuperar tu
dignidad de mujer cristiana).
71
tema 2
Enséñales
a trabajar
“En la escuela del hogar se les

debe enseñar a los niños
a cumplir con los deberes prácticos
de la vida diaria”.
(E. G. White, Conducción del niño, p. 109).
Motivación
Soñé con un hogar que fuera el taller del artesano. Siempre
me han llamado la atención las pinturas que muestran la carpintería
de Nazaret con los dos ebanistas más famosos de la historia: José
y Jesús.
Se nota, en la mirada de José, el gran interés de que su hijo
llegue a ser un buen carpintero. Vuelca todo su amor y experiencia
en esta labor. En realidad, es un himno al trabajo. El padre, el
modelo; el hijo, el aprendiz; el padre, el experto; el hijo, el alumno
dócil. ¡Qué combinación tan bella e inspiradora! Lo mismo ocurre
con la madre que modela bien a sus hijas y a sus hijos. La escuela
72
del hogar debe ser también un taller de trabajo, un centro de utilidad

y “emprendedorismo”.
Exploración
El hogar de los padres responsables es un verdadero taller de
artesano. En términos contemporáneos, un verdadero laboratorio
de emprendedorismo, una escuela de laboriosidad.El hogar es
una microempresa. Siguiendo el modelo de los carpinteros de
Nazaret, muchos padres inspiran a sus hijos a seguir su ocupación
o profesión.
Uno de los grandes desafíos del hogar contemporáneo es
formar hijos con mente útil y productiva. Por lo tanto, necesitamos
grabar en la mente algunos conceptos bien claros:
1. El hogar es una microempresa. Siguiendo el modelo de

los carpinteros de Nazaret, muchos padres inspiran a sus
hijos a seguir su ocupación o profesión.
2. El hogar es un taller de “emprendedorismo”. Este es un
neologismo que apunta a estimular la iniciativa para el
trabajo útil y productivo. Los expertos que hablan de
emprededorismo son, mayormente, del mundo de las
finanzas, pero, por extensión, se aplica también a otras
actividades profesionales y laborales.
3. ¿Cómo enseñar a los hijos a amar al trabajo? El modelaje
es el mejor recuerdo. “De tal palo, tal astilla”. “Mira a
la hormiga, perezoso, observa sus caminos y sé sabio”
(Proverbios 6: 6). El movimiento se demuestra andando.
Necesitamos asociarnos con nuestros hijos en la escuela
del trabajo útil y provechoso.
4. Lecciones de valores prácticos. Ligado al emprendedorismo
están los valores prácticos de la utilidad, la laboriosidad,
73
1. la economía, el ahorro y el dinero. Mente abierta y manos
ocupadas son ideales que debemos perseguir como
padres responsables.
2. No abusar del trabajo infantil. Una advertencia: No
debemos sobrecargar a los hijos con tareas excesivas,
que pongan en riesgo su salud. Pero, por otra parte, no
hay que criar hijos flojos, ociosos, inútiles e indolentes.
Los indolentes, por lo general, se vuelven insolentes y
terminan siendo insolventes.
3. Los hijos emprendedores son hijos triunfadores. Cuanto
más pronto enseñemos los padres a los hijos a llevar las
cargas de la empresa familiar, serán ellos más sensibles
y más comprensivos con sus padres. De esta manera
serán nobles, útiles y con una mentalidad de gratitud y
de triunfo frente a las dificultades de la vida.
4. La diligencia. Ver el ejemplo de las hormigas.
“¡Anda, perezoso, fíjate en la hormiga!

¡Fíjate en lo que hace, y adquiere sabiduría!
No tiene quien la mande, ni quien la vigile ni gobierne;
con todo, en el verano almacena provisiones
y durante la cosecha recoge alimentos”.
(Salomón, Proverbios 6:6-11, NVI)
La verdadera sabiduría consiste en que los padres enseñen

a sus hijos a ser trabajadores y no ociosos. El trabajo es el único
medio legítimo y decente para resolver los problemas de la vida.
Los juegos de azar y los casinos, que están invadiendo las ciudades,
deben ser evitados como una plaga o una enfermedad contagiosa.
Confiar en la buena suerte y maldecir la mala suerte es una actitud
típica de la gente necia e insensata
74
5. Otros valores de la vida práctica. La abnegación, la

generosidad y la previsión. Sin estos valores, la utilidad
puede degenerar en utilitarismo y se puede abrir las
compuertas del materialismo y de amor al dinero. Hay
gentes que tienen en la mirada el signo del dólar.
6. Compartir. El bien que no se comparte, se corrompe.
Comparte tu mesa, extiende las estacas de tu tienda, es
decir, comparte tu techo y el dinero de tus ganancias.
Cuando un hijo empieza a ganar algún dinero con su
trabajo, debe enseñársele a ahorrar para su propio
beneficio y a colaborar, aunque sea con un porcentaje
pequeño, en la economía del hogar. Hay que vigilar para
que, junto con el amor al trabajo, no entre el amor al
dinero. El dinero no es un fin en sí mismo, sino un medio
para aliviar nuestra necesidad y la de los demás.
7. Define el trabajo como una prioridad ineludible. Las

realidades de la vida demandan un plan definido de
trabajo útil para todos los integrantes del hogar.
Cuando los padres ponen en práctica estos diez

conceptos o principios de la vida práctica, educan a sus
hijos para llevar una vida útil y solidaria. Formar hijos
emprendedores y amantes del trabajo es una bendición
para sí mismos, la familia y la sociedad. Tener hijos
caprichosos, dependientes, demandantes y gastadores
sin que les cueste nada es un peligro terrible y una
desgracia moral y social. No generan ningún ingreso,
pero se sienten con el derecho de recibir todo sin aportar
nada. La mente desocupada y las manos ociosas son un
gravísimo peligro. La mente ocupada en la superación y
las manos laboriosas son una gran bendición.
75
Pensamientos inspiradores para animar a que los padres
a que eduquen a sus hijos con mente emprendedora:
“Lo que ganes con tus manos, eso comerás; gozarás de

dicha y prosperidad” (Salmos 128:2)
“¿Has visto a alguien diligente en su trabajo? Se codeará

con reyes, y nunca será un don nadie” (Proverbios
22:29). “Si fueres flojo en el día de trabajo, tu fuerza será
reducida” (Proverbios 24:10, RV 1960)
“¿Por qué gastan dinero en lo que no es pan, y su salario
en lo que no satisface?” (Isaías 55:2). Hay que saber
ganar dinero, y luego hay que saber gastarlo en forma
prudente y juiciosa. “Cuídense de no echar a perder el
fruto de nuestro trabajo; procuren más bien recibir la
recompensa completa” (2 Juan 8). Hay que saber cuidar
el fruto del trabajo. Cuando los hijos aprenden a ganar
con esfuerzo y sacrificio, valoran mejor el trabajo de sus
padres y crecen con una mente útil y servicial. El trabajo
viene entretejido con muchas bendiciones presentes
y futuras. La mejor herencia que les podemos dar los
padres a los hijos es el amor al trabajo y un espíritu de
emprendedorismo. El trabajo ennoblece; la ociosidad
envilece. Si las hormigas trabajan por instinto, nuestros
hijos deben trabajar por un amor distinto. “Al que
madruga, Dios le ayuda”. Hay que levantar temprano
a los hijos y recibirán muchas bendiciones, cuando se
levantan con espíritu de amor y colaboración.
Trabajar es una bendición; trabajar con gratitud es doble

bendición. Los hijos deben compartir, con alegría, las
cargas de la vida con sus padres. “Dulce es el sueño del
trabajador”. El trabajo y el baño diario son las mejores
76
píldoras para dormir. El cansancio es el resultado normal

del trabajo. Nunca se debe despilfarrar la energía juvenil
de nuestros hijos.
Ama el trabajo y te irá bien en la vida. Nunca te va a faltar

dinero en el bolsillo, ni alimento en tu casa. Serás cabeza y no cola.
Prestarás tú y no pedirás prestado. El acreedor es el amo, el deudor
es el esclavo. No debas a nadie nada, es una propuesta de solución
efectiva (Ver Romanos 13: 8).
El trabajo es ley de Dios. La ley se cumple, no se debate.
1. ¿Qué me enseña el taller de carpintería de José y Jesús?
2. ¿Cómo convertir mi casa en un taller de emprendedorismo?
3. ¿Cómo ser un buen espejo para mi hijo?
4. Jesús, con fidelidad y buen ánimo, llevó su parte de las cargas
de la casa. Él consintió en ser un siervo voluntario, un hijo
amante y obediente, aprendió un oficio y con sus propias ma-
nos trabajó en la carpintería con José. Con el trabajo de sus
manos, cuando ya no estaba José, en su hogar de Nazaret,
sustentó a su madre viuda. ¿En qué forma este noble ejemplo
puede dirigir mi vida y la de mis hijos?
77
tema 3
Dios soñó
con el
espíritu de
superación de
nuestros hijos
“Te podrá Jehová por cabeza
y no por cola; y estarás
encima solamente, y
no estarás debajo!”
(Deut 28:13).
Motivación
El ser humano está diseñado para aprender. El cerebro está
en condiciones de establecer millones de conexiones neuronales.
Esta capacidad nos permite soñar con una superación constante
y tener el mismo anhelo de Jorge Chávez: “¡Arriba, siempre arri-
ba, hasta alcanzar las estrellas!” Si nuestros hijos completaron sus
estudios primarios, que avancen al nivel secundario, luego al ciclo
profesional. Ahora los estudios de posgrado abren nuevas puertas
a la superación personal.
La revolución cultural más importante del siglo XXI es la de-
mocratización de los estudios de nivel universitario o de educación
superior. No hay pugna entre la educación presencial y la educación
virtual. Las diferentes modalidades están accesibles y al servicio
78
de la sociedad. Claro que en medio de semejante revolución hay

una sed desmesurada por el beneficio lucrativo, el mercantilismo, la
explotación. La solución no solo es legal, sino profundamente moral
e intelectual.
Exploración
El ser humano puede superarse constantemente mientras
vive. Nadie podrá decirle: Alcanzaste tu máximo potencial.
Como padres responsables, necesitamos fijar algunos conceptos
sumamente importantes:
1. Padres, espejo de superación para los hijos. Si queremos

que nuestros hijos crezcan con el deseo y el propósito
de superación, seamos el espejo donde puedan ver el
camino que deben seguir. Una pareja se casó solo con
una licenciatura en Educación. Con el correr del tiempo,
él logró, con el apoyo de la esposa, obtener una maestría
y finalmente un doctorado en su especialidad. A su vez, el
esposo le apoyó a ella para que también consiguiera una
maestría. Siguiendo las huellas de sus padres, los tres
hijos se esforzaron por obtener su maestría. Dos de ellos
continuaron por la senda de la superación y alcanzaron
el doctorado. La tercera todavía está considerando
convertir su maestría en un doctorado. Un estudio revela
que la mayor parte de doctores son hijos de doctores.
Cuando los padres siguen la senda de la superación,
están predicando con el ejemplo que ese es el camino
por donde deben transitar.
2. No a la vanidad, sí al servicio. El ideal del espíritu de

superación no es halagar al yo, sino ser más útiles para
el servicio a Dios a la humanidad. El compromiso con el
79
1. servicio es un antídoto contra el egoísmo, el orgullo y el
enriquecimiento ilícito.
2. La superación de los hijos es prioritaria. Si hay conflicto

entre obtener una casa propia y apoyar el plan de
superación de los hijos, hay que preferir la necesidad de
los hijos. La mejor herencia es el espíritu de superación.
3. La elección de la escuela. Los padres no debemos

escatimar ningún esfuerzo por conseguir la mejor
escuela posible para nuestros hijos. Debemos elegir una
escuela no solo por el costo, sino también por la calidad
de enseñanza.
4. La escalera de la superación. Si nuestros hijos pudieron

terminar su primaria, que se vayan a la secundaria. Si ya
tienen secundaria, que se lancen al grado profesional. Si
lograron su licenciatura, que avancen hacia una maestría.
Y sigamos alentándolos para que logren, si es posible, el
doctorado. Cuando ya comprendan que están escalando
por la escalera de la superación, les espera el siguiente
peldaño.
5. La superación intelectual no está reñida con el desarrollo

de un carácter equilibrado. Pueden ser brillantes
profesionales y su vida estar arruinada por un mal
carácter. Muchas veces es preferible un artesano
honrado, íntegro y cabal que un médico afanado solo por
el lucro y no tanto por la salud de sus pacientes.
6. El peligro de la deserción. Que no se pierdan nuestros

hijos por los callejones peligrosos de la deserción. La
escuela de la calle y la amenaza de la delincuencia los
80
espera con los brazos sospechosamente abiertos.
7. No solo la profesión es la vía de la superación. La sociedad

necesita no solo profesionales, sino también buenos
servidores ocupacionales, profesionales de mando
medio, carpinteros, gasfiteros, hojalateros, técnicos
en computación, auxiliares de enfermería, artesanos,
y otros semejantes. Estos llevan el peso del desarrollo
económico de la nación.
Cuando los padres convertimos estos conceptos en

principios guiadores para la conducción de nuestro hogar,
lograremos que la fuerza vital de nuestros hijos alcance su
máximo potencial de superación. Nuestro mayor compromiso
familiar es velar y trabajar por el espíritu de superación de
todos los integrantes del hogar. El modelo de los padres
es muy importante y también el ambiente que estimula
al desarrollo. Una buena biblioteca con libros y revistas
adecuados, búsqueda útil y positiva de fuentes de internet,
estudios a distancia, en fin; estamos viviendo tiempos de
oportunidad que nos llevan a la senda de la superación
continua… o de la perdición.
Pensamientos alentadores e inspiradores

El espíritu de superación en nuestros hijos es el anhelo
más profundo del corazón. Es necesario que los padres seamos
un verdadero ejemplo de superación moral, espiritual e intelectual
para nuestros hijos.
• Educa muy bien al primer hijo y estarás educando aun

inconscientemente a los demás hijos.
• “Si a alguno de ustedes el falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se
la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar
81
• a nadie” (Santiago 1:5). En realidad, la Biblia es la gran
educadora de los pueblos y de los hogares.
• Cuando Ana, mujer de Elcana, quería tener un hijo, Dios se lo
concedió y le otorgó sabiduría para formarlo como a un gran
educador y dirigente de su pueblo. Cuando la mujer de Manoa
pidió a Dios un hijo, se lo concedió y le puso el nombre de
Sansón. También a estos padres, el Señor les instruyó cómo
debería ser la educación del hijo. No siempre los hijos hacen
lo mejor, pero los padres tienen la ventaja de contar con una
guía confiable y segura. Los padres debemos hacer lo correcto
y dejar las consecuencias con Dios.
• Cuando José y María se vieron en la perplejidad de cómo educar
a Jesús, el Señor les instruyó para que, tanto José como María,
como padres humanos del Salvador, pudieran darle lo mejor
que sus fuerzas y su inteligencia pudieran dar.
• Cuando Loida y Eunice, abuela y madre del joven Timoteo,
tuvieron que educarlo como líder moral y espiritual del pueblo,
ellas se dejaron guiar por las Escrituras: “Desde tu niñez
conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría
necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.
Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para
reprender, para corregir y para instruir en justicia, a fin de que
el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena
obra” (2 Timoteo 3:15-17).
• Cuando los padres acudimos al Señor pidiendo sabiduría para
encaminar a nuestros hijos por el sendero de la superación,
Dios está comprometido con la misión de la educación continua
y la escalera del desarrollo integral, tanto en lo físico como en
lo espiritual, en lo mental como en lo afectivo, en lo personal y
en lo social y familiar.
• No podemos cansarnos de ser padres. No podemos descansar
hasta no ver a nuestros hijos bien educados para esta vida y
la eternidad, y bien casados como buenos cónyuges y padres.
82
Esta es la misión más importante que debemos cumplir en

nuestra terrena existencia.
• La medida especial de la superación no es el dinero ni los éxitos
sociales o académicos, sino el desarrollo de un carácter sólido,
firme y bien equilibrado, un carácter cristiano que refleje el
carácter manso y humilde de Cristo y encontraremos descanso
para el alma (ver Mateo 11:28,29).
• En los tiempos peligrosos que nos toca vivir, busquemos que la
verdadera superación de nuestros hijos no caiga en la pendiente
de la corrupción moral y espiritual.
El espíritu de superación en nuestros hijos es el anhelo
más profundo del corazón. Es necesario que los padres seamos
un verdadero ejemplo de superación moral, espiritual e intelectual
para nuestros hijos.
1. ¿Estoy velando, trabajando y rogándole a Dios por el desarrollo
del espíritu de superación de mis hijos?
2. ¿Estoy invirtiendo suficiente tiempo y dinero en el plan de
educación y superación de mis hijos?
3. ¿Qué clase de herencia quiero dejar a mis hijos?
83
tema 4
Saber elegir
los medios
de comunicación
“El que hizo el oido¿no oirá?
El que formo el ojo,¿no verá?”
(Salmo 94:9)
Motivación
Los medios de comunicación nos conectan con el mundo
simultáneamente en tiempo real. Están en todas partes. No son
en sí mismos buenos o malos. Pueden ser útiles y formativos, si se
los emplea con discernimiento, balance y sabiduría; o muy nocivos,
si se los usa indiscriminadamente y, peor aún, si son sustitutos de
los padres.
Exploración
Es importante que los padres tengan criterios correctos para
seleccionar la información y los medios de comunicación.
Es importante que, como padres, tengamos siempre en

cuenta los siguientes preceptos:
84
1. Fijen horarios. No dejen que sus hijos pasen tardes

enteras de entretenimiento con videojuegos, televisión
o internet. Fijen, como padres, las normas adecuadas
para el empleo correcto de estos medios. No permitan
que los hijos gobiernen la situación. No interfieran los
horarios de las comidas con programas de televisión.
Los estímulos visuales no armonizan con el proceso de
la digestión.
2. Definan la ubicación. Analicen con cuidado dónde deben
estar ubicados los aparatos electrónicos. Si dejan que
cada hijo tenga su televisor y su computadora, reducirán
notablemente las oportunidades de estar en familia.
3. Confronten valores. Muchos programas y materiales
de internet transmiten valores reñidos con los que se
enseñan en su hogar. Dialoguen sobre ellos después
de ver algún programa o algún videojuego. El trasfondo
ético-moral tiene un gran impacto en la formación de la
personalidad.
4. Busquen otras alternativas. No permitan la robotización
de sus hijos con el predominio arrollador de los medios
electrónicos. Los deportes, la natación, las caminatas,
los estudios de una segunda lengua, la jardinería y las
actividades artísticas ofrecen a la familia contemporánea
muchísimas alternativas. Busquen un equilibrio
adecuado para lograr una educación integral.
5. No descuiden las actividades de lectoescritura. Mucho
más provechosa que la influencia de la televisión, en
la formación de nuestros hijos, es la de las actividades
de lectura y escritura. Estas estimulan el poder de la
imaginación y del razonamiento.
6. TVeo o no TVeo. Si deciden tener TV en casa, edúquense
a sí mismos y eduquen a sus hijos para que aprendan
a ver los programas de buen contenido informativo
85
y formativo. No les permitan ver TV solos. Acuerden
un horario funcional y realista. Juzguen qué canales y
programas van a ver. En un hogar, el televisor tenía un
letrero llamativo: Clausurado por ladrón. Al pedirle su
explicación al padre de familia, este dijo: Este aparato
estaba robando nuestro tiempo; era motivo permanente
de discordia porque mis hijos querían ver su programa
favorito; yo, el mío; mi esposa, el suyo.
7. Internet. Enséñeles a sus hijos a usar la red. Hay
sobreinformación conveniente e inconveniente.
Enséñenles también a chatear. Vigilen, no se confíen
en que sus hijos saber discernir lo que debe o no deben
hacer. Establezcan límites razonables y fijen normas
apoyadas en principios.
8. Videojuegos. Consumen mucho tiempo, y conllevan las
ganas de aplastar al contrincante. Mejor evitarlos.
9. Micrófonos abiertos. Los medios abren cada vez más
sus micrófonos al público. Enséñenles a sus hijos a
comunicarse con los programas.
10. Una televisión celestial. La Biblia ofrece al hogar 66
canales de cablevisión. Tiene una programación selecta.
Balance y orientación
Hablando específicamente del uso del televisor, podemos
destacar los valores que se han detectado:
1. La información no llega solo con palabras, sino también

con imágenes, movimientos, combinación de colores y
sonidos. Todas estas ventajas deben capitalizarse en un
uso adecuado de este medio.
2. La TV puede usarse como un elemento educativo
no necesariamente a través de la programación
86
comercial, sino con el uso de devedés, vídeos, materiales

instruccionales de cursos, documentales, charlas,
conferencias, eventos culturales, recitales de música
y poesía, programas divulgados por sistemas tipo You
tuve (sitio web en el cual los usuarios pueden subir y
compartir vídeos musicales, instrumentales, culturales,
fotográficos, pero también todo lo contrario: pornografía
y obscenidades)
3. La TV puede prestar un servicio valioso en los informativos
bien seleccionados.
4. Las familias funcionales saben hacer un uso adecuado y
selectivo de lo que es recomendable y no recomendable
ver.
5. Bajo un control de tiempo, hora y lugar, la TV puede servir
de elemento recreativo para toda la familia.
Asimismo, debemos advertir acerca de sus riesgos:

1. La TV suplanta y empobrece la vida familiar, limita la
comunicación personal y personalizada.
2. La TV es una mala maestra, permisiva, no discrimina lo
bueno respecto de lo malo.
3. Una excesiva exposición a la TV produce un efecto
perjudicial a toda edad: niños, jóvenes, adultos y viejos.
Ninguna edad se salva del poder deletéreo y destructivo
de la TV.
4. La TV explota indiscriminadamente la violencia, el
materialismo y el sexo. En cuanto a lo moral sexual, la
TV presenta el tercer sexo como algo respetable en la
vida contemporánea. A todos los críticos que se animan
a hablar contra los matrimonios homosexuales se los
acusa de homofobia.
5. La TV es nociva porque reduce mucho la capacidad de
87
imaginación y raciocinio.
6. El efecto adictivo de la TV predispone a aceptar
automáticamente el fondo de los mensajes y a volverse
en esclavos del consumismo.
7. El efecto del sedentarismo, que se deriva de estar
contemplando por horas la TV, predispone a la obesidad
infantil, inclusive al estrés y a la automatización de la
conducta.
8. Los mensajes de la TV comercial son huecos, fofos,
insulsos, con muy mal gusto aun para el humor, con una
proverbial pobreza lingüística que el pobre oyente queda
más pauperizado que antes.
9. La proliferación de televisores en una casa muestra el
poco juicio de sus dueños: en el dormitorio, roban el sueño
tranquilo; en el escritorio, no dejan concentrarse; en el
comedor, no permiten disfrutar el sabor de los alimentos,
ni en el baño quedan bien. Mejor instalarlos en la azotea
para que cueste algún trabajo a sus usuarios.
10. Los efectos hipnóticos de la TV automatizan la conducta
de la gente. La violencia social y la corrupción moral son
casi actos reflejos de una sociedad que convive con la TV
descontrolada.
Adquieran, con toda seriedad, el compromiso de velar y
trabajar para que su familia se beneficie con los adelantos de la
tecnología actual y que adquiera los hábitos de autodominio. Por
esto, es muy importante que en la infancia se haya enseñado a los
niños hábitos de obediencia, respeto, reverencia y dominio propio.
88
1. ¿Seré capaz de educarme a mí mismo para educar a mis hijos?

2. ¿Tomaré el control de los medios de comunicación para evitar
que la televisión, la red y los videojuegos me reemplace como
padre o madre?
3. ¿Se acordarán más mis hijos de los programas de TV y de You
tube que de la asociación personal que tuve con ellos?
89
tema 5
El divorció
que Dios jamás
soñó
“Ayer naciste, y morirás mañana.
Para tan breve
ser, ¿quién te dio vida?
¿Para vivir tan poco estás lúcida?
Y, ¿para no ser nada estás lozana?”
(Luis de Góngora, A una rosa).
Motivación
Cuando me casé, nunca soñé con el divorcio. Pero parece
que el divorcio ha adquirido carta de ciudadanía y, de pronto,
estamos asistiendo a un escenario en el que están produciéndose
más divorcios que matrimonios. A nadie parece interesarle que la
tendencia se revierta. Podríamos aplicar al divorcio lo que Góngora
le canta a una rosa.
Exploración
Dios jamás soñó con el divorcio. No estuvo en su plan original
que la gente se case hasta que el divorcio los separe. Todo lo que
viene de Dios tiene sentido de eternidad: su amor, la felicidad, la
santidad, el matrimonio. Todo en el sueño o en el ideal de Dios
tiene proyección imperecedera. Ni la muerte destruye la belleza y la
eternidad del matrimonio. Más fuerte que la muerte es el amor. La
muerte va a morir. El amor, nunca jamás.
El divorcio es la ruptura más traumática de la experiencia
90
humana. La angustia, impotencia y desesperanza que acompañan

al divorcio alcanzan un nivel más intenso que una viudez. Como
padres responsables, debemos retener en nuestra mente las
siguientes realidades no siempre deseadas.
1. Los divorcios ocurren a menudo porque la gente
raramente discute sus expectativas antes del matrimonio
y son menos deseosos de trabajar después.
2. La gente que viene de hogares divorciados tiende a
divorciarse más que la gente que viene de hogares
estables y felices.
3. La gente que se casa, entre los 23 y 27 años, tiende a
tener matrimonios más duraderos, que la gente que se
casa antes de esa edad.
Las siete razones que se han detectado son:
1. La falta de una buena comunicación. La buena

comunicación se caracteriza por la sinceridad y la
integridad, la cortesía y la amabilidad, el cariño y el amor
altruista, la espiritualidad y la fe en Dios. Cuando estas
características están presentes en la vida conyugal, las
sombras del divorcio jamás amenazarán la estabilidad
del hogar.
2. La infidelidad. La fidelidad es la lealtad a Dios y al
prójimo. La infidelidad es una crisis cuyas raíces son de
una naturaleza profundamente espiritual. Cuando se
olvidan las promesas del pacto matrimonial, en realidad
no se está ofendiendo solo a la pareja, sino a Dios que ha
atestiguado y presidido tu matrimonio. Si eres fiel a Dios,
nunca ofenderás a tu cónyuge.
3. El maltrato físico, psicológico o emocional. Es una
cobardía sin nombre maltratar físicamente a la mujer de
mi pacto. A la mujer no se la maltrata ni con el pétalo de
una flor. Hay mujeres también que parecen tigresas, que
91
usan las uñas con terrible eficacia. El maltrato psicológico
o emocional, las palabras hirientes, los insultos, el olvido
y el silencio lapidario zona veces más dañinos que el
maltrato físico. A semejante esclavitud no nos llamó Dios
a la vida matrimonial. El trato siempre cortés o que sabe
pedir perdón y perdona alejará toda amenaza de divorcio.
4. Las finanzas mal llevadas. Huye de las deudas como de
la lepra. NO uses tarjetas de crédito. Usa solo tarjetas
de débito. Las finanzas desordenadas y presionadas por
el consumismo comercial general más divorcios que la
infidelidad sexual. Gasta solo que ganas y entrénate en
un presupuesto sabio y prudente y alejarás el divorcio de
tu tienda.
5. La incompatibilidad sexual. Mucho de la incompatibilidad
sexual es simplemente fruto de la torpeza impaciente. La
relación sexual no es fast food, no es comida rápida ni chatarra.
Cuando hay mutua consideración, el amor y el interés mutuo
remedia mucho de la llamada incompatibilidad sexual.
Y para casos realmente patológicos, están los servicios
profesionales y especializados.
6. Al aburrimiento en el matrimonio. Cultiva el amor admirativo
por tu cónyuge como se cultiva una rosa blanca, un príncipe
negro, una violeta delicada, un tulipán perfumado. Aprende
del jardinero a quitar la mala hierba, a regar, recortar, cuidar
con diligencia. Un jardín florido y floreciente te recrea. Eso
es un milagro de cada día. Entonces el aburrimiento nunca
se asomará a tu puerta y comprobarás que no hay sitio bajo
el cielo más dulce que tu hogar.
7. Las diferencias religiosas y culturales. Había que considerar
estas incompatibilidades antes de casarte. Si no te has
casado todavía, rompe tus relaciones imprudentes. Si ya
estás casado, trabaja por tu cónyuge para armonizar con los
principios inspirados en la palabra de Dios. El Señor aborrece
u odia el divorcio (Malaquías 2:16), pero, evidentemente,
ama al divorciado. A una mujer que había tenido cinco
92
maridos, la constituyó como su mensajera ante sus

paisanos samaritanos (Juan 4:1-30)
Los efectos del divorcio son frustrantes para la pareja y

devastadoras para los hijos.
Si las situaciones del divorcio son irreversibles, el consejo de

Pablo es que se divorcien, pero que no se vuelvan a casar o que se
reconcilien con su cónyuge. El matrimonio no debe ser un encubrimiento
vergonzoso de abusos y maltratos. A semejante esclavitud no nos
llamó Dios.
Haz de tu hogar un nido de amor. Mira a los pajarillos, cuánta
diligencia ponen, por ejemplo, las golondrinas. Cuidan del nido,
alimentan a los pichones con la comida predigerida en su buche tibio,
el macho cuida a la hembra con toda diligencia. Tú vales mucho más
que los pajarillos. Los osos, las águilas y los pingüinos son monógamos.
Pero nosotros valemos mucho más que los animales. Tenemos el sello
y la imagen del Creador.
Diálogo con personas divorciadas
Cuestiones que surgen en el seminario No tan solos con el

grupo de divorciados.
1. Aprovechando que ella es mujer me maltrata con uñas,
dientes, bofetadas y objetos contundentes. Me defendía
sin agredir, hasta que un día le tomé las manos agresivas
y mirándole a los ojos llenos de rabia contenida, a pesar
de mi advertencia, se allanó rápido el camino del divorcio.
Mucho hablan del abuso masculino, pero casi nunca del
abuso femenino. Sería bueno que incluyan este asunto
en sus seminarios.
93
Muchas gracias por la sugerencia. La hostilidad ya había
llegado a su máxima expresión. Dios no nos ha llamado
a semejante esclavitud (Ver 1 Corintios 7:15). La mujer es
el vado más frágil y, normalmente, debe ser amparada,
cuidada y protegida. Pero eso no es una autorización para
ser violenta y agresiva. Ya se han divorciado. El camino
que tienes por delante e son volver a casarte con otra
mujer o reconciliarte. Es una disyuntiva difícil; pero si, a
pesar del consejo de Pablo, te vuelves a casar, asegúrate
de pedir perdón a Dios por tus faltas personales y actúa
con una prudencia extremada.
2. Puedo competir con otra mujer para que no se robe a
mi esposo, pero no puedo competir con un hombre que
parece que le gusta mi marido. Dije: “Hasta aquí llegó
nuestro amor”, y el muy fresco se fue con otro hombre.
Es un hecho de ética actual. Busca desacreditar más y
más la moral cristiana, las claras enseñanzas bíblicas y
quiere satisfacciones antinaturales. Rehaz tu vida sobre
bases más sólidas y firmes. Nadie conoce el trasfondo
de tu drama, pero sí Dios te dará una vida limpia y una
nueva oportunidad.
3. Mi esposo cometió adulterio y con dolor y en mi angustia,
me divorcié. Si con él la vida era difícil, sin él me resulta
más difícil todavía. Con mis dos hijos, ni pensar en
volverme a casar, aunque han aparecido pretendientes
un poco apurados al verme sola. Pero yo les pongo a mis
hijos por delante. Prefiero luchar sola que caer en manos
de una vida sexual libertina. Que se vayan a freír monos.
Muy bien. Has dado la respuesta muy clara y contundente,
que no necesita más comentarios.
4. Me he divorciado, pero sigo fiel a mi Señor y a mi iglesia.
Es una sabia decisión. No te apartes de tu Dios, quien es el
amparo de toda persona sola y en dificultad. Si ya te divorciaste
de tu pareja complicada, no te compliques la vida divorciándote
de Dios.
94
¿Merecerán los hijos el castigo del divorcio de sus padres?
¿Por qué no celebrar el matrimonio por cada año de un nuevo
aniversario?
Nuestro matrimonio puede ser un motivo de celebración del amor, en
lugar de ser una gotera de la letanía del divorcio. A semejante tragedia no
nos llamó Dios.
¿A quién seguir, al autor del divorcio o al autor del matrimonio?
¿Por qué?
95
tema 6
Vida sexual
en el
matrimonio
“Bebe el agua de tu
propia cisterna”
(Prov. 5: 15)
Motivación
La relación sexual es el privilegio matrimonial para conjugar
la felicidad con la santidad. Honroso es en todos el matrimonio, pero
el lecho sin mancilla, declara Pablo en Hebreos 13: 4. Las relaciones
sexuales conyugales no hacen perder ni la pureza moral ni la
castidad. Lo que atenta contra éstas es el adulterio, la fornicación.
Antes del matrimonio, no. Fuera del matrimonio, tampoco no.
Dentro de matrimonio, sí, pero con honra y sin mancilla. Es decir,
el privilegio matrimonial es un regalo de Dios para tratarlo con
delicadeza y respeto. No hay relación humana más profunda y
elevadora a la vez que las relaciones de la intimidad conyugal.
Cuando el Señor dijo que los casados se unieran en una sola
carne, no estaba reduciendo la relación a su dimensión física, sino
a la totalidad del ser: cuerpo, mente, corazón, voluntad libre para el
mutuo consentimiento, sociabilidad y espiritualidad. Los animales
se aparean por instinto. Los seres humanos somos libres para
gobernar el instinto con dominio inteligente, con caballerosidad y
96
dignidad. Sobre todo con la fuerza superior de Espíritu de Dios. En

la intimidad sexual de la pareja no se pierde o no debe perderse la
espiritualidad. Sin embargo, la pulsión sexual es tan fuerte en el
lado masculino, que fácilmente se pierden el control y la dignidad.
Bajo el manto del lecho conyugal se esconden abusos inconfesables.
Debemos recordar como esposos los alcances y los límites del
privilegio matrimonial. La satisfacción inmediata no debe hacernos
olvidad que el dador del privilegio matrimonial es el Creador.
Exploración
La felicidad nunca debe estar reñida con la santidad.
Si no hay libre consentimiento, el privilegio se convierte en un
abuso inaceptable.
Goza de la vida con la persona que amas en tu relación
conyugal en forma exclusiva y excluyente.
Las hormonas no gobiernan la conducta humana ni los
genes definen la moral. Dios ha dado al ser humanos su imagen
y semejanza para que viva con su libre albedrío en formal sana y
saludable.
La vejez no está excluida de ninguna manera del privilegio
matrimonial. Al contrario, se puede disfrutar mejor de la sexualidad
admitiendo que disminuye la frecuencia, pero aumenta la calidad y
la satisfacción. Ya no hay interferencia ni la ansiedad propia de las
etapas anteriores de la vida.
Acerca de este último punto que aparece como inquietud no
muy rara en los seminarios matrimoniales, necesitamos afirmar
algunos conceptos no siempre precisados:
1. Un estereotipo negativo: Los viejos ya no piensan ni

deben pensar en las relaciones sexuales.
Este es un prejuicio infundado. Con la vida menos agitada,
97
ellos pueden atender mejor sus relaciones sexuales.
2. Otro estereotipo: La vejez y la libido están completamente
disociadas o desconectadas
No existe ningún fundamento científico para sustentar
semejante creencia. El desgaste fisiológico y la
disminución hormonal, que son evidentes, se compensan
con lo mental, lo emocional, lo social y lo espiritual.
Aunque cese la ovulación, las suprarrenales siguen
supliendo las hormonas femeninas.
Lo que sí es evidente es que las enfermedades
degenerativas o las dolencias crónicas pueden afectar
la calidad de las relaciones sexuales en la vejez: la
artritis, diabetes, alta presión, las enfermedades
cardiovasculares, la hiperplasia prostática, y otras que se
conocen y discuten el consultorio de los especialistas. La
artritis hace que la actividad sexual sea incómoda. Las
enfermedades del corazón crean temor al compromiso
sexual. La diabetes altera el flujo de la sangre hacia las
terminaciones nerviosas y pueden causar la sequedad
vaginal y la disfunción eréctil en los varones. El cáncer
y su tratamiento impacta negativamente en la función
sexual.
3. Ventajas. La libertad asociada con la ausencia de
embarazos crea un margen de gran satisfacción. El
tiempo más flexible para estar juntos fomenta la
intimidad, el romance, la evocación, la evaluación del
pasado y la posibilidad, aunque sea tardía, de subsanar
pequeños o grandes descuidos que se pudieran haber
cometido. Es saludable formar el hábito, desde la
iniciación del matrimonio, de hacer evaluaciones
periódicas semanales, mensuales o como acuerden, para
hacerlos ajustes necesarios respecto al desarrollo de la
comunicación de intimidad de la pareja.
98
4. Principios para tener una vida sexual saludable.

Estos se aplican para todas las etapas de la vida
matrimonial, pero tienen especial importancia en la
vejez: (a) Ambos tiene el mismo derecho para tomar la
iniciativa; (b) el ambiente físico debe ser un aliado de la
intimidad de los esposos; (c) la confianza mutua es la
base para llegar a conjugarse en un solo ser.
El privilegio matrimonial no es patrimonio exclusivo de la
juventud. Se extiende por todas las etapas del matrimonio, y aun
incluye a la vejez o a la senectud. Pero es evidente que no en vano
pasan los años. Las hormonas sexuales femeninas progesterona
y estrógeno disminuyen sensiblemente a partir de la menopausia.
La hormona sexual masculina testosterona disminuye un poco
más lentamente a partir de los 65 años. Sin embargo, el deseo
sexual y la participación en las actividades sexuales no se anulan ni
desaparecen.
Al considerar este tema tan especial y delicado, no podemos
ignorar que hay muchos estereotipos y prejuicios que debemos
despejar.
La vejez no está excluida de ninguna manera del privilegio
matrimonial. Al contrario, se puede disfrutar mejor de la sexualidad
admitiendo que disminuye la frecuencia, pero aumenta la calidad
y la satisfacción. Ya no hay interferencia ni la ansiedad propias de
las etapas anteriores de la vida.
Necesitamos afirmar nuestros conceptos acerca de este asunto:

1. Un estereotipo negativo: Los viejos ya no piensan ni
deben pensar en las relaciones sexuales.
Este es un prejuicio infundado. Con la vida menos agitada,
ellos pueden atender mejor sus relaciones sexuales.
99
2. Otro estereotipo: La vejez y la libido están completamente
disociadas o desconectados.
No existe ningún fundamento científico para sustentar
semejante creencia. El desgaste fisiológico y la
disminución hormonal, que son evidentes, se compensan
con lo mental, lo emocional, lo social y lo espiritual.
Aunque cese la ovulación, las suprarrenales siguen
supliendo las hormonas femeninas.
Lo que sí es evidente es que las enfermedades
degenerativas o las dolencias crónicas pueden afectar
la calidad de las relaciones sexuales en la vejez: la
artritis, diabetes, alta presión, las enfermedades
cardiovasculares, la hiperplasia prostática y otras que se
conocen y discuten en el consultorio de los especialistas.
La artritis hace que la actividad sexual sea incómoda. Las
enfermedades del corazón crean temor al compromiso
sexual. La diabetes altera el flujo de la sangre hacia las
terminaciones nerviosas y pueden causar la sequedad
vaginal y la disfunción eréctil en los varones. El cáncer
y su tratamiento impacta negativamente en la función
sexual.
3. Ventajas. La libertad asociada con la ausencia de

embarazos crea un margen de gran satisfacción. El
tiempo más flexible para estar juntos fomenta la
intimidad, el romance, la evocación, la evaluación del
pasado y la posibilidad, aunque sea tardía, de subsanar
pequeños o grandes descuidos que se pudieran haber
cometido. Es saludable formar el hábito, desde la
iniciación del matrimonio, de hacer evaluaciones
periódicas semanales, mensuales o como acuerden, para
hacer los ajustes necesarios respecto al desarrollo de la
100
comunicación de intimidad de la pareja.
4. Principios para tener una vida sexual saludable.

Estos se aplican para todas las etapas de la vida
matrimonial, pero tienen especial importancia en la
vejez: (a) Ambos tiene el mismo derecho para tomar la
iniciativa; (b) el ambiente físico debe ser un aliado de la
intimidad de los esposos; (c) la confianza mutua es la
base para llegar a conjugarse en un solo ser.
Para no perder prematuramente las ventajas de la sexualidad
en la vejez, los cónyuges deben velar por su comunicación personal
y de intimidad. La buena comunicación en la vejez abre el romance
a sorpresas de nuevos descubrimientos, nuevas posibilidades
de desarrollo personal, tienen mayor libertad para participar en
actividades culturales, sociales y recreativas. Tal vez han quedado
en la agenda promesas pendientes que se descuidaron u olvidaron.
La práctica regular de ejercicios físicos, caminatas, salidas a
escenarios de belleza natural, aumentan las endorfinas, potencian
las ganas y la alegría de vivir, y mejora notablemente la imagen
corporal.
Las visitas a los centros comerciales, librerías y bibliotecas
atendiendo las preferencias de él o de ella crean una buena disposición
personal para cederse y concederse atenciones mutuas. El sentido de
humor es un magnífico ingrediente de una buena salud emocional.
Diálogo con personas de la ‘abuelidad’. Cuestiones que
surgen en el seminario para abuelos.
Las bendiciones de ser abuelos:
101
1. Mi esposo de 80 años no respeta mi reumatismo y
demanda relaciones sexuales muy frecuentes. Yo no sé
qué decirle. No sé si se le podría hablar a solas.
Si él acepta conversar sobre este asunto, se puede

intentar. El impulso sexual es casi normal en ciertos
abuelos que no quieren entrar en desuso. Pero su
demanda puede tener efectos contraproducentes porque
está desgastándose anticipadamente, está acortando su
vitalidad a pesar de ser un respetable octogenario. Por
lo demás, conocemos a su esposo, tiene un buen estilo
de vida, se mantiene activo, camina todas las mañanas
y es vegetariano. Sin embargo, debe ser prudente con su
intensidad sexual.
2. El flómax y otros medicamentos para la prostatitis me

han anulado el deseo sexual. ¿Hay cómo eliminar este
efecto negativo?
Respetar un estilo de vida sano y saludable. Entrevistarse

con el especialista y comentarle el efecto de los
medicamentos que está tomando.
3. ¿Puede seguir profundizándose el amor aunque ya no

haya relaciones sexuales?
Por supuesto que sí. Que el amor envuelva a toda la

persona, tanto en lo físico, lo mental, lo emocional, lo
social y lo espiritual. Una disminución en la frecuencia
de las relaciones sexuales y una vida de abstinencia no
tienen que dañar la profundización del amor.
102
4. ¿Qué hay del viagra u otros productos para optimizar la

vida sexual de la vejez?
Todo lo artificial y artificioso es camino de ociosidad

de víctimas incautas e ingenuas de los comerciantes
del pansexualismo. No debemos llegar a ser clientes
dependientes del bombardeo mercantilista y hedonistas
de los medios de comunicación.
1. ¿Cómo se involucra todo el ser en la relación sexual con el cónyuge
en la vejez?
2. ¿Cómo gozar de otros aspectos de la vida si tenemos la bendición de
llegar juntos a la vejez?
3. ¿Cómo mantener viva la llama del amor en el invierno de la vida?
103
tema 7
Los abuelos
de bendición
“La corona del anciano son sus nietos;
el orgullo de los hijos son sus padres”.
(Salomón, Proverbios 17:6)
Motivación
En los seminarios de la abuelidad responsable que solemos
realizar, algunos abuelos dicen que hubiesen preferido ser primero
abuelos y después, padres.
Los abuelos tenemos la alegría de ver a los nietos con la

experiencia de haber sido padres y ya no vivimos tan ansiosos como
los padres. A veces los abuelos nos damos la libertad de malcriar a
los nietos, porque ya no sentimos el peso de la responsabilidad que
está sobre los hombros de los padres.
Exploración
Cuando nos llamarón por primera vez, ¡abuelos!, nos
quedamos perplejos o sorprendidos. Parece que ya nos están
empujando hacia una senectud prematura. Pero, en realidad,
llegar a ser abuelos jóvenes es un asunto de honra. Así dice el sabio
Salomón. La corona del anciano son sus nietos. Corona de alegría,
104
de gozo y de entusiasmo. En otro momento, dice el mismo autor:

“Las canas son una honrosa corona que se obtiene en el camino de
la justicia” (Proverbios 16:31). Vivir para ver crecer a los nietos se
consideraba una gran bendición. El anciano Jacob le dijo a su hijo
José: “Ya había perdido la esperanza de volver a verte, ‘y ahora, Dios
me ha concedido ver también a tus hijos!” (Génesis 48:11).
La ‘abuelidad’ es una paternidad extendida, que tiene sus
propios riesgos y privilegios. La ‘abuelidad’ es una condición de la
que poco se habla. Pero desde que somos abuelos nos interesa el
tema por su valor humano.
Vamos a explorar el asunto en dos dimensiones: la abuelidad
responsable y la responsabilidad de los hijos y de los nietos frente
a los abuelos.
La abuelidad responsable.
La abuelidad responsable ya no se refiere tanto a la ayuda

material o económica que deben dar los abuelos a los hijos y a los
nietos, sino al aporte moral, ético y espiritual.
El apoyo económico que pueden brindar los abuelos siempre
será bienvenido, aunque sea algo más simbólico que efectivo. Por
supuesto que los hijos pueden contar con el auxilio oportuno de los
abuelos, porque tiene la confianza que pueden ser auxiliados.
Si los abuelos no tienen oro ni plata, tienen algo más valioso
que dar: cariño, respaldo moral, palabras de ánimo, orientación,
consejo. El abuelo es el patriarca del hogar y la abuela la joya más
preciosa de la casa.
Dice el conocido psiquiatra y educador francés Maurice Porot:
“Los abuelos poseen numerosas maneras de ayudar útilmente al
hogar. Junto a los matrimonios muy jóvenes, desempeñan un
indiscutible papel de sostén, tan delicado como necesario”. Y añade
que sus consejos mesurados y juiciosos regalan el beneficio de su
experiencia.
105
La voz del abuelo es la voz de una familia en transición, para
una nueva generación cuya tarea es conquistar y construir una
nueva familia, una nueva sociedad con nuevos horizontes. Con
sus relatos, historias familiares, anécdotas y costumbres de la
generación anterior es el eslabón intergeneracional.
Los abuelos necesitamos recordar que nuestra autoridad en
la casa de los hijos es complementaria, no sustitutoria.
Sostiene el profesor y psicoterapeuta Joel Peña, de la
Universidad Peruana Unión: “Los abuelos sirven de puente para
unir el vacío entre los padres y sus hijos, particularmente con los
nietos que en su rebeldía buscan la independencia por estar en
desacuerdo con sus padres. El rol ideal de los abuelos es el de ser
árbitro imparcial”.
“Los abuelos son consejeros. Los nietos prefieren escucharlos
a ellos en lugar que a sus padres quienes, después de todo, son
coautores de las peleas cotidianas. Su objetividad y no parcialización
los hace mediadores en los conflictos de los padres con sus hijos.
“Los abuelos son también padres y suegros. Esto puede ser
un tema de conflicto en sí. Sin embargo, todavía es válida la idea
de que tanto los padres como los abuelos quieren lo mejor para sus
hijos. Claridad del rol de un evitará cualquier fricción y pondrá un
estado de armonía”.
La responsabilidad de los hijos y nietos.

Es deseable que los abuelos tengan su casa propia y estén
accesibles a los hijos, pero no para sobrecargarles de tareas,
especialmente de atención de nietos infantes, niños o adolescentes.
Ya no tiene energía suficiente para asumir el rol de padres.
El cuidado de los padres ancianos es un privilegio de los
hijos. Generalmente las hijas mujeres tienen mejores condiciones
de relación con sus padres para hacerles sentir en casa. Los hijos
varones tienen más dificultades para asumir las mismas funciones.
106
Los hijos deben enseñar a sus hijos a ser amables, cariñosos,

saludadores, compañeros de los abuelos. A veces los abuelos
tienen que ser los que se esfuerzan para abrazar a los nietos y a las
nietas. Hay abuelos que parecen mendigos del cariño de los nietos.
El privilegio de velar por los abuelos no cesa nunca, mucho más
cuando pasa el tiempo. El amor hacia los abuelos y el de ellos hacia
los nietos no se borra por los años ni por la distancia.
He aquí algunas recomendaciones del doctor Joel Peña para

ejercer una ‘abuelidad’ responsable:
Recuerden que ustedes nos son los padres de los niños. No
interfieran con temas sensibles como la discusión sobre los estudios
a menos que sean invitados. Eviten tomar partido delante de los
niños.
Los abuelos son buena fuente de la historia familiar para las
generaciones nuevas. Pueden proveer la razón y la historia de cada
costumbre familiar. Las historias generan emociones en términos
de risa, crean interés, despiertan creatividad, transmiten sabiduría
e imparten valores.Enseña a los nietos cómo es la etapa de la
tercera edad.
Conversa con tus nietos. Habla sobre las cosas que les
interesa. Evita hacer de ti el centro de la conversación. Comparte
tus sentimientos tanto positivos como negativos, hazles saber que
eres “real”. Escucha por los sentimientos que sus palabras e ideas
transmiten.
Pon límites. Recuerda que no eres el padre/la madre. Puede
dolerte ver que tus nietos son afectados por los errores de sus
padres, pero ellos tiene el derecho a ser padres como lo tuviste tú.
Algunas lecciones son aprendidas solo por las consecuencias de las
malas elecciones. Resiste la tentación de contradecir a tu propio
hijo/hija en presencia de los nietos. De esta manera tú mismo te
107
pones límites.
El ejemplo es más poderoso que las palabras. Imagínate que
tus nietos puedan aprender sobre bondad, perdón. Oración, amor
a Dios, compromiso y otros valores viendo encarnado todo eso en
ti mismo.
108
Bibliografía comentada
Santa Biblia (1999) – Nueva Versión Internacional. Miami,
Florida: Editorial Vida.
La lectura completa de la Biblia desde el punto de vista

parental nos descubre tesoros inigualables para el ejercicio
de una paternidad o una maternidad noble y responsable.
Pasajes significativos: Deuteronomio 6:1-12 señala el deber

y el privilegio de educar a nuestros hijos todos los días
de nuestra vida. Aquí está la base para la formación de
caracteres aprobados por el cielo. Dos salmos gemelos para
la responsabilidad de los padres y los abuelos son el 127
y 128. Aquí los progenitores aparecen como constructores
del hogar bajo la dirección del Arquitecto divino. El libro de
Proverbios es el más extraordinario manual de disciplina con
que contamos los padres. Mateo 5:27-32 presenta el Señor el
asunto del adulterio y el divorcio con la ética cristiana válida
para todo tiempo y lugar (Isa. 40:8). Mateo 19:1-11 contrasta
la teología del divorcio con la teología de matrimonio y amplía
los conceptos de Mateo 5. De las epístolas paulinas podemos
destacar la importancia de 1 Corintios 7, por sus principios
aplicables al divorcio, la separación, los matrimonios mixtos
y el propósito de una vida matrimonial honrosa y digna
delante de Dios y de los hombres. Otro pasaje iluminador
para las relaciones conyugales es el de Efesios 5:22-33 que
se suele repetir en las ceremonias nupciales. De las epístolas
petrinas podemos subrayar 1 Pedro 3:1-12 que nos explica con
sencillez que el sometimiento de las esposas a los esposo y
109
viceversa no es asunto de guerra de sexos, sino aprender a
armonizarse y convivir conyugalmente en amor.
White, Elena (1990). El hogar cristiano. Buenos Aires, Asociación

Casa Editora Sudamericana.
El paradigma del hogar cristiano está claramente delineado

en esta obra básica en la biblioteca de todo padre que siente
el compromiso moral de preparar hijos para este mundo y
la eternidad. NO hay manera de perder una sola página
de esta cobra fundamental. Para una buena preparación
para el matrimonio y para el ejercicio parental eficaz, esta
obra resulta imprescindible. Con mucha razón se dice en el
prefacio: “Este libro, El hogar cristiano, es la a vez que una
especie de manual para los padres atareados, un modelo ideal
de lo que el hogar puede y debe llegar a ser” (White, p. 5); y
se añade: “Nunca en la historia del mundo se ha necesitado
tan urgentemente como se necesita esta ahora. Nunca han
anhelado tanto los padres y los hijos la respuesta correcta
a los problemas que los preocupan. Nunca han estado los
hogares en tanto peligro como ahora” (White, p. 6).
Bentson, Keith (2001). Hasta que la muerte nos separe.
Miami: Vida Editorial.
Más fuerte que la muerte es el amor. Frente a la cosmovisión

bíblica de la vida hasta la muerte no es un límite fatal para
la vida verdadera. La muerte es temporal. La vida que viene
de Dios es eterna. Ojalá fueran este el tema de discusión. Lo
que se plantea en realidad es el asunto del divorcio y el nuevo
casamiento.
110
Chaij, Enrique (1990). La dicha y armonía en el hogar.

Buenos Aires: Asociación Casa Editora Sudamericana.
Un libro muy profundo en su sencillez.
Chapman, Gary (1996). Los cinco lenguajes del amor.

Colombia. Unilit.
Sugerencias prácticas para consolidar el amor admirativo

entre los cónyuges.
Clarke, David (2000). Los hombres son ostras, las mujeres

palancas. Colombia: Unilit.
Naturalmente el hombre es una ostra que soluciona sus

problemas más absoluto silencio. La mujer habla, frita,
protesta, reclama un auditorio para resolver un caso.
Cortés, Félix (2006). Sexo con amor no hay nada mejor.

Colombia: Asociación Publicadora Interamericana.
El sexo es el privilegio matrimonial. No antes, no fuera del

matrimonio. Solo es legítimo en el lecho conyugal, y esto con
respeto y dignidad.
Estrada, Antonio (2003). Paternidad, un compromiso con

el futuro. México: Impresiones Alfa y Omega.
El autor, docente de la Universidad de Montemorelos, México,

presenta las serias implicaciones sociales y morales de una
paternidad responsable.
111
Fromm, Erich (1992). El arte de amar. Buenos Aires, Paidós.
Un buen aporte filosófico y psicológico.
Gray, John (1994). Los hombres son de Marte, las mujeres

son de Venus. Buenos Aires: Editorial Atlántida.
Una guía práctica para que se entiendan mutuamente los

esposos. A partir de este éxito editorial han surgido muchos
estudios acerca de la diferencia entre hombres y mujeres.
112
Hoja de refuerzo de
aprendizaje, 2
1. Dios se complace cuando soñamos
con ser buenos padres
si no
2. No es bueno que nuestros hijos

trabajen mientras están estudiando
si no
3. La mejor herencia para nuestros

hijos es el espíritu de superación
si no
4. Los padres debemos intervenir

en la selección de lo medios de
comunicación que usan nuestros
si no
hijos
5. Como hay tanto divorcio será mejor

preparar a nuestros hijos para el si no
divorcio
6. Las relaciones sexuales constituyen

un privilegio exclusivo del matrimo- si no
nio
7. Debemos respetar a las viudas y a

los viudos en su decisión si no
8. Los abuelos tienen que ser

considerados como una carga si no
pesada para toda la familia
sí 2. no 3. no 4. no 5. sí 6. sí 7. no 8. sí
113
(Para los papás y esposos)
Yo, ……………………………………………………………………
con la gracia de Dios y mi esfuerzo personal me comprometo a
cumplir fielmente a ser líder social, moral y espiritual de mis hijos y a
ser un buen sustentador de mi familia.
Prometo también que nunca maltrataré a mi esposa ni a mis hijos, ni
física ni emocionalmente.
...................................... .....................................
Fecha Fima
(Para las esposas y mamás)

Yo, ……………………………………………………………………
con la gracia de Dios y mi esfuerzo personal me comprometo a cumplir
fielmente como lideresa, docente y forjadora del carácter de mis hijos
y a ser una influencia ennoblecedora del carácter de mi esposo.
Prometo ser fiel a Dios, a mi esposo y a mi familia. Prometo
también que nunca maltrataré a mi esposo o a mis hijos, física ni
emocionalmente.
...................................... .....................................
Fecha Fima
114
capitulo
3
El hijo infante
que Dios soñó
115
Presentación
¿Quiénes son nuestros hijos?
Son fruto del dolor y del amor. Vivimos en un mundo tan
complicado que cuando traemos a un hijo o a una hija a
este mundo, tenemos que afrontar la ansiedad, el temor y
los riesgos. ¿En qué condiciones nacen nuestros hijos? ¿Qué
significa para una madre los trabajos de parto? ¿Cómo se
cumple esta sentencia: “Multiplicaré tus dolores en el parto,
y darás a luz a tus hijos con dolor? (Génesis 3:16). ¿Cómo
se convierte la tristeza en alegría? “La mujer que está pro
dar a luz siente dolores porque ha llegado su momento, pero
en cuanto nace la criatura, se olvida de su angustia por la
alegría de haber traído al mundo un nuevo ser” (Juan 16:21).
El costo del dolor
No todo es gozo y alegría con el hijo infante que yo soñé.
Los padres tenemos que pagar el costo del dolor. Antes del
nacimiento, durante el nacimiento y después que ya tenemos
en los brazos a ese milagro de Dios que es cada criatura,
hay que pagar el presupuesto del dolor. Cada hijo cuesta
mucho dolor y… dinero. Dolores de embarazo, dolores de
parto, peligros de posparto, velar por la salud de la madre
y del nuevo ser, especialmente en su infancia y niñez; todo
esto es una gran responsabilidad. Y hay que contar con los
recursos suficientes para que ese fruto del dolor no venga a
sufrir privaciones ni enfermedades. Se necesita dinero para
el pan, la vivienda, los gastos pediátricos.
El costo del amor

Pero mayor que el dolor es el amor. Los padres que aman
entregan su ser, su tiempo, su abnegación y sacrificio para ver
116
crecer a su hijo o hija, especialmente en su delicada infancia

y sorprendente niñez. Estas son las etapas más decisivas del
desarrollo humano.
Si un jardín hermoso y bien cultivado demanda el cuidado
permanente del jardinero, el jardín de la infancia y la niñez
demanda mucho más atención que las flores fragantes que
adornan el hogar.
Invitación
Extendemos una cordial bienvenida a todos los participantes
del presente estudio. Educadores, psicólogos teólogos y
especialistas en salud de la Universidad Peruana Unión han
brindado su colaboración en diferentes aspectos de los temas
que presentamos en este material.
Queridos padres, actuales y futuros, tomemos con mucho
cariño y atención las lecciones desarrolladas, pensando en
ustedes.
117
tema 1
Hijos desde
el vientre
“Tú creaste mis entrañas, me formaste
en el vientre de mi madre… Tus ojos vieron
mi cuerpo en gestación; todo estaba ya
escrito en tu libro”
(Salmos, 139: 13, 16).
Motivación
En el gran poema de David dedicado a los hijos desde el
vientre, el salmista exclama: “¡Te alabo porque soy una creación
admirable! ¡Tus obras son maravillosas, y esto lo sé muy bien!”
(Salmos 139:14).
Al considerar tantas maravillas que se producen durante la
gestación, los padres debemos reconocer que la mente superior del
Creador guía todo este complejo y formidable proceso.
Uno se queda asombrado con cualquier aspecto de la
gestación. Por ejemplo, si nos detenemos en la gametogénesis,
cómo se originan los elementos que dan origen al nuevo ser,
veremos que en el lado femenino se llama la ovogénesis y en el
lado masculino, la espermatogénesis. Para que un óvulo llegue
a estar maduro y listo para ser fecundado, pasó por un proceso
complejo de selección y eliminación de miles de ovocitos. Para que
un espermatozoide llegue a ser tal, pasó también por un complicado
proceso de selección y eliminación de millones de espermatozoos.
118
Y quedan millones listos para emprender la carrera de la gestación

y solo uno, el campeón, llega a fecundar al óvulo que espera.
Exploración
La vida intrauterina es digna de ser estudiada y comprendida,
por lo menos, en un nivel de divulgación general, para que los
padres y las madres actuemos con plena conciencia del valor de
una nueva vida.
Influencias prenatales.
Muchos padres no prestamos la atención que merece este
tema. La herencia que trasmitimos a los hijos se refleja no solo en los
rasgos físicos, sino también en los psicológicos y espirituales. Esto
tiene que ver con los hábitos personales, aun antes del embarazo.
Los padres necesitamos recordar que la forma cómo tratamos
a la esposa, durante el embarazo, tendrá mucho que ver con la salud
y el carácter que el hijo desarrolla, durante toda su vida.
Aspecto físico.
La profesora Marcia de Azevedo de la Universidad Peruana
Unión sostuvo, en una Escuela de Padres, lo siguiente:
“En el proceso del desarrollo de una nueva vida ocurren
diferentes cambios previsibles en el cuerpo de la madre. Todas las
madres pasan por una secuencia progresiva de transformaciones,
pero cada madre tiene su propia historia”.
“El embarazo no es una enfermedad, sino un proceso, pero
exige un cuidado específico y acompañamiento médico. ¡Prevención
es la palabra clave! Para un embarazo saludable, hay que minimizar
las complicaciones”. Entonces recomendó que los padres pongan
en práctica las siguientes recomendaciones:
1. Ejerzan la paciencia, la templanza y el dominio propio.
119
2. No descuiden el chequeo médico completo. En casos de
enfermedades genéticas, con antecedentes familiares,
deberían pasar por una consejería genética.
3. Que la mamá evite vacunas durante el embarazo,
especialmente los tres primeros meses, pues pueden
tener efectos contraproducentes en el bebé en gestación.
4. Que la mamá se sométa a un chequeo dental. Las
infecciones en la boca pueden producir parto prematuro.
5. El consumo de 400 microgramos de ácido fólico, durante
las primeras semanas de embarazo, ayudan a prevenir
defectos relacionados con la médula espinal. Necesitan
consulta médica periódica, bien planificada.
6. Nutrición. El cuerpo del bebé, su cerebro, su piel, sus ojos,
su cabello se desarrollan a partir de los nutrientes que
mantienen la vida de la madre. La dieta balanceada,
sin frituras ni condimentos, tiene un lugar especial en la
planificación durante el embarazo.
7. Practica de ejercicios al aire libre en forma regular. Tiene
efectos saludables, tanto físicos como espirituales.
Aspecto psicológico que debes tener en cuenta como mamá

1. Como madre gestante, debes escuchar música tranquila
y suave. Evita la música estridente y estresante.
2. Observa tu personalidad y tus rasgos de carácter.
Optimiza tus potencias y minimiza tus debilidades.
3. Dedica tiempo especial a la lectura informativa, formativa,
creativa y recreativa. Este tiempo tiene gratificaciones
inapreciables. Los hábitos de la madre predisponen en la
misma dirección al hijo.
120
Aspecto espiritual
1. La preparación para la formación moral y espiritual de

nuestros hijos empieza con la preparación de los padres.
2. El desarrollo espiritual de nuestros hijos debe ser
cuidadosamente planificado, examinado e implementado
antes, durante y después del embarazo. Como padres
debemos hacer una autoevaluación, afirmar las virtudes
y luchar contra los defectos y debilidades.
3. Nuestra experiencia de fe, de oración, gratitud y alabanza
a Dios, de paciencia y perdón, se van a reflejar en la vida
de nuestros hijos.
Puesto que la gestación es una etapa muy importante,

tanto para los padres como para los hijos, los padres necesitamos
mantenernos unidos para afrontar la responsabilidad de traer hijos
a este mundo.
1. ¿Por qué es necesario que los padres recibamos una preparación seria
para asumir las sagradas responsabilidades que nos corresponden?
La Escuela de Padres que deberían desarrollar las instituciones
educativas, las iglesias y los medios de comunicación sería una buena
solución.
2. Si los cimientos de una casa definen la fortaleza y firmeza de la misma,
¿cuánto más importante será poner los cimientos de una nueva vida?
121
Enc
tema 2
Los tres
primeros años y
los circuitos
sinápticos
“La vida se juega en minutos,
mas el niño sonríe
y siente confianza
y tranquilidad”
(Danitza Montalvo,
Arroyos de caridad).
Motivación
Si la gestación es un proceso crítico de la máxima importancia
para establecer un sólido fundamento de la vida humana, los tres
primeros años que constituyen el siguiente período es crítico para
asegurar la calidad de los cimientos de la vida.
La firmeza de una casa depende de sus cimientos y sus
columnas: las piedras, el cemento, el grosor de los fierros. Y todo
eso queda enterrado y no se ve. Así ocurre con la gestación y los
tres primeros años de la vida de un niño o una niña. Lo que se hace
o deja de hacer en esta etapa repercute en el futuro de la vida de
un ser humano, tanto en lo físico y lo psicológico, como en lo social
y lo espiritual.
122
Una alimentación deficiente durante los tres primeros años

de vida puede producir hijos débiles físicamente, deficientes o
retrasados mentalmente, desequilibrados emocionalmente, e
inseguros espiritualmente.
¿Para qué traer hijos al mundo, a quienes no se les puede
brindar amor de padre y madre, protección, seguridad, buena
alimentación, ayuda médica y asistencia espiritual?
Los libros de educación familiar, de psicología infantil
y de pediatría ponen a disposición de los padres abundantes
informaciones y recursos para saber actuar como padres
responsables. Pero un aspecto del que no se ha hablado todavía
con suficiente claridad es el desarrollo neuronal y los circuitos
sinápticos en los tres primeros años de vida.
Exploración
Las neuronas y la formación de los circuitos sinápticos en la
primera infancia.
¿Qué son las neuronas?

Son las células que integran el sistema nervioso. Cada
neurona tiene sus dendritas o puntitas estrelladas, su cuerpo y
su núcleo, y su axón o cola como de un renacuajo, como se puede
observar en los esquemas fácilmente ubicables por internet.
Todo el sistema nervioso que cubre desde el cerebro hasta las
extremidades conecta todos los órganos con el centro de control de
mando que es el cerebro.
El recién nacido no tiene conexiones bien establecidas porque
todavía no tiene ningún patrón de conducta, no tiene hábitos
aprendidos. Lo único que tiene es una carga genética heredada de
sus padres y un cuerpo que se puede desarrollar bien o se puede
atrofiar. Es un gran potencial y gran riesgo a la vez.
123
Todo depende de la forma cómo lo eduquen o atiendan. El
recién nacido tiene que aprender todo de todo. Todo aprendizaje se
registra o se graba en el sistema neuronal.
Los aprendizajes básicos de la conducta humana se producen
en los tres primeros años de vida. Lo que ocurre en esta etapa es
más decisivo que lo que pasa en el resto de la vida.
Muchas veces se descuidan estos años porque los infantes
son enteramente dependientes de sus padres y no hay quien
reclame o proteste por ellos. No se conocen sindicatos de niños
que salgan a llorar o gritar por las calles reclamando sus derechos.
¿Qué son los circuitos sinápticos?
Se sabe que los actos repetidos forman hábitos. Estos

hábitos se graban o registran en el cerebro, desde donde se envían
estímulos eléctricos a través de las neuronas que se van conectando
con todo el sistema.
Los recién nacidos tiene miles de millones de células
cerebrales (formadas durante la vida intrauterina), pero carecen casi
completamente de conexiones neuronales. Están como renacuajos
sueltos en un tanque de agua. El cerebro del recién nacido es como
un paradero de buses que no saben dónde ir porque no hay vías o
carreteras construidas.
Puesto que los circuitos sinápticos son tan importantes en los
primeros años de vida del infante que Dios soñó, debemos atender
a nuestros bebés en forma personal y bajo la orientación de
educadores y otros profesionales especializados en salud familiar.
124
1. ¿Cuánto sabemos y cuánto debemos aprender acerca de los circuitos
sinápticos para cuidar mejor el desarrollo integral de nuestros hijos?
2. ¿Qué debemos hacer al enterarnos que el desarrollo cerebral es
mucho más acelerado en la etapa prenatal y en los tres primeros años
de la infancia que en cualquier otra etapa de la vida?
125
tema 3
La infancia
preescolar
“Las lecciones que aprende el niño en los
primeros siete años de
vida tienen más que ver
con la formación de su carácter que todo lo que
aprende en los años futuros”.
(E. G. de White,
Conducción del niño, p. 177).
Motivación
“Instruye al niño en el camino correcto, y aun en su vejez no
lo abandonará” (Proverbios 22:6). Si tu hijo o hija no ha soplado
ya las siete velitas en el día de su cumpleaños, todavía hay tiempo,
papá o mamá. Hay un tiempo precioso para echar los sólidos
fundamentos físicos, mentales, emocionales, volitivos, sociales y
espirituales de tus hijos.
Exploración
Los educadores, psicólogos, pediatras y orientadores
espirituales están persuadidos de que los primeros siete años de
la vida de los hijos es la edad de oro de su formación. Los circuitos
sinápticos están completamente abiertos, los brazos de los niños
esperan los abrazos de los padres, especialmente de la madre; el
126
sentimiento de apoyo de padres e hijos es muy fuerte y espontáneo;

los padres, en cierto sentido, son la mente y la conciencia de los
hijos. Los infantes son muy receptivos. El brillo de la inocencia de
sus ojos es lo más hermoso que se puede ver en el rostro humano.
Sus primeras palabras son el abecedario del amor. Su risa nos
enseña la alegría de vivir.
Si no aprovechamos esta edad de oro para construir, estaremos
obstruyendo o destruyendo el futuro de nuestros hijos. Los daños
producidos en la infancia han sido minuciosamente estudiados por
el psicoanálisis. El origen de los traumas o de los complejos, de los
miedos y fracturas de la personalidad se encuentra en la actitud de
padres descuidados, insensibles, indiferentes y maltratadores.
Pongamos en lista las nociones básicas que los padres
tenemos que grabar en la mente, y practicar religiosamente con
mucho amor y con gran sentido de responsabilidad.
Salud física
1. Cuidar la salud de la madre para que la lactancia materna
sea el medio más adecuado para la alimentación del
infante y crezca con la protección inmunológica debida.
2. Aprender el programa nutricional del infante y de la
familia en general. Que no falten las fuentes proteicas,
lácteos de origen animal o vegetal (leche de soya,
almendras o arroz); cereales integrales (trigo, quinua,
kiwicha, avena; cuidado con los cereales refinados,
azucarados, estimulantes de la obesidad infantil y de las
caries dentales); vitaminas y minerales presentes en las
frutas y verduras. Debemos alimentarlos en la forma más
sencilla y natural posible, enseñándoles con el ejemplo.
La verdadera medicina está en las ollas y en la cocina, y en

la preparación de alimentos sanos sencillos y saludables.
El mejor medicamento es un buen alimento.
127
Salud mental
1. Estimular el desarrollo de la inteligencia con un lenguaje
apropiado, rico y variado. ¡Hablen con los niños, por
favor! Vocalicen bien, incrementen su lenguaje. Cada
nueva palabra amplía la mente del niño. Cada palabra
nueva activa muchas zonas del cerebro: la que capta la
imagen visual, la que registra la imagen auditiva, la que
repercute la emoción, la que archiva la memoria. Es decir
un fenómeno muy complejo que se produce en fracciones
de segundo. La palabra humana es la evidencia de que
el ser humano fue creado a imagen y semejanza de Dios.
2. El desarrollo cognitivo viene más por los juegos y las
actividades al aire libre, que por las actividades de
aprestamiento de lectoescritura.
3. Evitar gritos y peleas de los padres. Estos perturban y
entorpecen el desarrollo normal de los niños.
Salud emocional
1. Llena la copa del amor. La mayor necesidad del niño es
sentirse amado y estar seguro.
2. El amor, don de dones, es la fuente más poderosa para la
salud emocional.
3. La atención personal y personalizada de la madre, para el
hijo o la hija, tienen más alto precio que el pago de una
sustituta.
Salud espiritual
1. La noción de quién es Dios y cómo es él, la aprenden del
padre humano.
2. El amor, la fe, la confianza, la esperanza, la paz, el
consuelo y el perdón son los ingredientes básicos de la
128
salud espiritual. La devoción personal, familiar y eclesial

forman el triángulo perfecto.
Puesto que hay tantas ventajas en la educación precoz de los
niños en su etapa preescolar, cómo vamos a descuidar una bendición
tan grande. No demos caer en el descuido ni en la indiferencia.
Debemos estar atentos a lo que encontramos en la lectura de las
buenas fuentes. La voluntad de los padres debe armonizar con la
fuente suprema de la vida, del amor y del conocimiento.
Diálogo con los padres

Preguntas que suelen formular los padres en las actividades
de Escuela de Padres:
1. ¿Será una ventaja mandar a mis hijos a la escuela sabiendo

leer y escribir?
¿Qué respuesta te parece más razonable? Fundamenta tu
respuesta:
a. Mandarlos a la escuela sabiendo leer y escribir me da

orgullo y prestigio familiar.
b. Que primero crezcan sanos y felices; el nervio óptico
todavía no está bien desarrollado para la lectura antes
de los seis años.
c. Quiero que mis hijos sean precoces y no atrasados.
(Recomendamos la opción b)
2. ¿Qué hago si mi hijo es inapetente y toma la sopa con la
cuchara volteada?
a. Le impongo la norma de que no debe quedar nada en
129
los platos. Lo que está servido, debe ser consumido.
b. Reviso cuidadosamente sus hábitos: ¿Está muy
sedentario y dependiente de la televisión? ¿Bebe agua
suficiente? ¿Juega al aire libre? ¿Está muy limpio y
bañado antes de ir a dormir? Un buen plan de vida le
mejorará el apetito.
c. Le busco en la farmacia estimulantes del apetito y
suplementos y vitamínicos que me aseguren el normal
desarrollo de mis hijos.
(Otra vez, nuestra recomendación es la opción b)
3. Mi hijita llora mucho porque se queja de no tener amiguitas,

y a veces no puede dormir con este problema sin resolver.
a. Le digo que cuando vaya a la escuela va a tener muchas

amiguitas y que espere.
b. Le busco amiguitas en el vecindario mediante un trato
ventajoso para mis vecinas.
c. Le permito que vea bonitos programas de televisión
que, de paso, a mí también me gustan y me siento a su
lado para disfrutarlo juntos.
(Volvemos a recomendar la opción b. Las otras opciones
son más objetables)
130
El consejo del sabio Salomón (Proverbios 22: 6) es “instruye” al niño. No
dice “sermonea” al niño. ¿Quiere decir que la educación no es meramente
verbal, de repetir palabras, preceptos, normas, sino más comprometida
con el ejemplo y la dedicación de la vida? ¿Quién nos ayudará a ser
buenos padres para nuestros niños? ¿Otros padres? ¿Los especialistas?
¿Dios y su palabra?
131
tema 4
Niñez tardía
“¡Gloria, gloria al maestro

de escuela, que en el
campo feraz de las almas, va
dejando semillas
de amor!”
(Canto escolar peruano).
Motivación
En la primera infancia, o niñez temprana, los padres eran los
héroes de sus hijos, sus modelos, espejos o paradigmas. La voz de
sus padres era, prácticamente, su conciencia moral.
En la segunda infancia, o niñez tardía se cambia el escenario
del hogar a la escuela. A los ojos de los niños crece, se agiganta
la imagen del maestro. Lo que ha dicho el maestro o la maestra
se convierten en normas indiscutibles. Los padres sabios necesitan
estar atentos a este cambio de paradigma.
El hogar y la escuela se convierten en los agentes educativos
más poderosos y eficaces en la educación de los niños. El sueño
original de Dios era que el hogar fuera también escuela. Viendo la
educación de los niños como Dios la mira, la escuela no sustituye al
hogar sino la complementa. Ambos agentes deben estar al servicio
del mismo proceso.
132
Para completar el triángulo de la educación de la niñez está

la intervención de la iglesia.
Exploración
La segunda infancia o niñez tardía (de 6 a 11 años) se
caracteriza por una creación de circuitos sinápticos mucho más
escasos y lentos que en la etapa anterior; el crecimiento físico
también disminuye en velocidad, pero mejoran notablemente las
habilidades psicomotrices. Los psicólogos señalan también que
disminuye el egocentrismo. El aspecto intelectual está dominado
por el pensamiento operacional concreto, según la nomenclatura de
Jean Piaget, y el surgimiento de la moralidad convencional, según
las investigaciones de Kohlberg. Este desarrollo cognitivo estimula
el desarrollo religioso de manera importante.
Las habilidades de la memoria y el lenguaje se vuelven más

eficientes.
Al final de esta etapa, los compañeros y los pares van
asumiendo una importancia decisiva. En la adolescencia se acentúa
esta tendencia.
En esta etapa necesitamos recordar, como padres, que
el hogar sigue siendo el agente educativo más importante en el
desarrollo integran de los hijos, por varias razones que pasamos a
enumerar:
1. La transmisión de valores morales y espirituales sigue a

cargo del hogar. El 70% corresponde al hogar, el 20% a
la iglesia, y solo el 10% a la escuela.
2. La escuela se ocupa, básicamente, del aspecto
instruccional, cognitivo, evalúa mayormente el
aprendizaje de conocimientos.
3. Los maestros ocupan un lugar de mayor prestigio social
e intelectual, pero los padres siguen ocupando el podio
133
moral y espiritual.
4. El hogar modela la vida total; la escuela se deja absorber
por la vida laboral y profesional.
5. Los horarios de atención de la escuela tienden a
reducirse en extensión. El tiempo libre queda bajo la
responsabilidad del hogar.
Por todo lo expuesto, los padres deben ser cuidadosos
en la elección de la escuela. Para los padres creyentes, es
importante elegir escuelas donde predomine la influencia
religiosa, donde no se reprima ni menosprecie la fe reverente.
La labor mentora del maestro debe reforzar y complementar
pero no suplantar la labor de los padres.
Considerando la importancia de la niñez tardía, debemos
tomar conciencia de que, aunque la escuela ocupa un lugar
de prestigio social y cultural, el hogar sigue cumpliendo un rol
protagónico en la educación integral de los hijos. Los padres no
debemos descargar la responsabilidad de la educación solo a la
escuela. Idealmente hogar, iglesia y escuela deben formar la triple
alianza para lograr el equilibrio deseado.

En un diálogo abierto con los padres solemos conservar
sus preguntas e inquietudes que nos formulan. He aquí algunas
tomadas al azar:
Gracias por la oportunidad para sugerir las siguientes pautas:

1. ¿Qué recomendaciones nos pueden dar para que nuestros
hijos, en edad escolar, aprovechen las ventajas del hogar y
de la escuela?
Gracias por la oportunidad para sugerir las siguientes pautas:
134
a. Que los hijos sientan que la educación es una tarea

que debemos compartir padres y maestros.
b. Nunca hablar mal de la escuela o los maestros;
cualquier observación u objeción hay que presentarla
en forma personal y privada al maestro o a las
autoridades correspondientes.
c. Asistir fiel y puntualmente a las reuniones de padres
programadas por las autoridades escolares.
d. Enviar a tus hijos a la escuela que respeta tu fe religiosa
y tus creencias personales.
e. Coordinar con la escuela respecto a las loncheras,
lo que se recomienda llevar o no llevar, así como los
horarios del comedor escolar (si se ofrece este servicio)
f. Colaborar con las campañas de la escuela y fomentar
una estricta participación.
g. La educación no solo es información (típicamente a
cargo de las escuelas) y formación moral y espiritual
(típicamente a cargo del hogar y de la iglesia)
h. Colaborar con los horarios de la escuela y fomentar
una estricta puntualidad.
i. Elaborar, con los hijos, un buen horario de actividades
que haga de ellos buenos estudiantes en la escuela y
buenos hijos en la casa.
j. Observar un fiel seguimiento de tareas y evaluaciones
del maestro.
k. Entablar relaciones coordinales entre padres y
maestros.
2. ¿Qué valores debo enseñar a mis hijos?
Los mejores valores, de la vida cristiana, se encuentran

contenidos, por lo menos, en tres fuentes que valen oro:
a. Los Diez Mandamientos que nos enseñan a honrar a
135
Dios y a nuestros padres, familia y semejantes.
b. El libro de Proverbios, con 31 capítulos maravilloso,
tiene consejos prácticos para cultivar los valores más
elevados de la vida.
c. El Sermón del Monte predicado por Jesús, está
registrado en el evangelio según San Mateo 5 al 7.
Esta obra cumbre señala ampliamente los valores
fundamentales para la vida, presente y eterna.
Nota: En el siguiente himno escolar se resalta la tarea del

maestro de escuela.
“Himno al Maestros”
Coro
Gloria, gloria al Maestro de escuela,
incansable y tenaz sembrador,
que en el campo feraz de las almas
va dejando semillas de amor.
Estrofas
El Maestro es heraldo que anuncia
el sublime evangelio del bien,
ese nuevo evangelio que empieza
con su canto inmortal A.B.C.
El Maestro es soldado aguerrido

de la gran avanzada de amor;
la palabra es el alma que esgrime
y el ejemplo su escudo mejor.
Vencedor en contiendas terribles,

no se cansa jamás de luchar
136
ni reclama tampoco esos lauros

que en sus triunfos logró conquistar.
El Maestro es así tan modesto,

que parece en verdad sembrador
¡y pensar que también el maestro
es un hombre y fiel guiador!
Ántero Víctor Rosadio López
¿Por qué es importante la educación moral, cultural y espiritual de los
padres (primera infancia o niñez temprana), la de los maestros (segunda
infancia o niñez tardía) y la participación de la iglesia?
¿Por qué debo preocuparme por la educación que reciben mis hijos antes
de ir a la escuela y antes de ingresar a la adolescencia?
137
tema 5
La disciplina
del niño
“Al que madruga, Dios le ayuda”
(Sabiduría popular).
Motivación
Provengo de una familia de once hermanos. Desde que
tengo uso de razón, recuerdo que mi parte nos levantaba a todos
a las 5 de la mañana. Faltando 5 minutos pasaba la voz cuarto
por cuarto y nombre por nombre. A las 5 en punto nos abría las
puertas. Ya debíamos estar fuera de la cama y listos para saludar
y recibir órdenes. Los deberes de mis hermanas eran asignados
por mi madre y, de nosotros varones, por mi padre. Mi padre era
el disciplinario y mi madre era la dulce dulcificadora. De alguna
manera se complementaban para gobernar semejante batallón de
hijos.
Creo que por el simple hecho de madrugar, pensando en
la agenda diaria de los hijos, mis padres recibieron la ayuda de
Dios para implantarnos el saludo respetuoso (a los padres y a
138
los hermanos mayores); asimismo, el amor al trabajo, al estudio,

a la cooperación mutua. Los valores familiares han quedado
profundamente impregnados e identificados en la vida ulterior.
Cuando me encuentro con mis hermanos que están
esparcidos por el mundo (Perú, Argentina, Estados Unidos, Canadá
y Europa) evocamos, con mucho cariño, los días de nuestra infancia
y juventud. Todos nos miramos en el mismo espejo porque hemos
sido formados y disciplinados por el mismo patrón de conducta.
Exploración
La obra de los padres, con respecto a la disciplina de los
hijos, debe comenzar antes de la infancia temprana y en el horario
temprano de cada día.
Es un error fatal descuidar la educación temprana de los
hijos, la formación de los primeros hábitos (registrados en el
sistema neurológico mediante los circuitos sinápticos) y el dejar de
madrugar para anticiparse a la agenda diaria de nuestros hijos.
¿Qué es la disciplina?
Etimológicamente la palabra “disciplina” proviene del latín
discípulus y esta de discere o disco (aprender), o sea, que una persona
disciplinada es la que aprende y se deja enseñar.
Disciplina y discípulo provienen del mismo verbo latino disco,
que tendría derivación del griego didasko. Entonces vemos que
hay parentesco entre disciplina y discípulo, y podría decirse que
disciplina es el proceso para llegar a ser un buen discípulo. Así,
disciplinar sería sinónimo de discipular.
Para su entendimiento lingüístico actual, podemos recurrir
al diccionario Webster: “Entrenamiento que corrige, moldea o
perfecciona las facultades mentales o el carácter moral”. Entonces,
semánticamente, la palabra disciplina está identificada con
corrección o formación moral del carácter.
139
Para su aplicación práctica en la vida familiar, disciplinar
es formar hijos respetuosos, amables, de buen carácter, buenos,
sensibles, misericordiosos, responsables, laboriosos, corteses, útiles
y serviciales.
Hay dos maneras de enfocar la disciplina: la preventiva y la
remedial o correctiva.
Disciplina preventiva/correctiva
Pongamos ambas perspectivas en contraste:
Disciplina preventiva Disciplina correctiva

Remedia cuando falla la
Se anticipa a los problemas
prevención
Ayuda al niño a dirigirse a Ayuda al niño a corregirse con
sí mismo y a reconocer la el auxilio de los padres y la
intervención del Espíritu Santo intervención de Dios
Hace uso de la razón para que Refuerza el uso de la razón para
guíe su voluntad que guíe su voluntad
Orienta para perseverar en el bien Corrige para alejarlo del mal y
para que vuelva al bien
Es constante, progresiva y Es instantánea, puntual e
mediata inmediata
No deja que el árbol se tuerza Poda el árbol torcido
¿Cuál es la conclusión de esta somera comparación?

Indudablemente es mejor prevenir que lamentar, formar que
reformar, construir que reconstruir, fundar que refundar. Más
vale un gramo de prevención que un kilogramo de corrección. Es
recomendable gastar el ochenta por ciento o más en la disciplina
preventiva y el veinte por ciento o menos, en la correctiva. Para
ejercer bien la disciplina preventiva hay que armarse de mucha
140
paciencia, dominio propio, amor y compasión, y estar de acuerdo

entre los padres.
Para ejercer bien la disciplina correctiva, hay que pensar bien
en el presente y en el futuro.
Principios de la disciplina
Enumeramos selectivamente los siguientes:
1. La disciplina empieza temprano

2. El hogar es la fuente principal de disciplina. La disciplina
empieza temprano
3. El descuido de la disciplina temprana deja que la mala
hierba malogre el jardín del corazón de hijos y padres.
4. Se logra el objetivo de la disciplina, cuando el niño se deja
guiar a muestra su disposición a corregirse.
5. Los padres debemos demostrar que la disciplina deseable
proviene de la autoridad de Dios.
6. El respeto a los padres implanta el respeto a las
autoridades y a Dios.
Puesto que es mucho mejor la disciplina preventiva que la
correctiva, los padres debemos entrenarnos en los fundamentos y
los métodos de la disciplina verdadera.
Cuando está en juego el principio de autoridad, recordar la
instrucción divina: “Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes
de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios” (Éxodo
20:12). Y Pablo enfatiza: “Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres,
porque esto es justo” (Efesios 6:1). Este mandamiento divino no
puede leerse al revés: “Padres, obedezcan en el Señor a sus hijos”,
como pareciera la tendencia de una educación paidocentrista muy
permisiva.
141
1. ¿Qué quiere decir “al que madruga, Dios le ayuda”, en
relación con la disciplina que debo aplicar a mis hijos?
Hay otro dicho: “Al camarón dormido, se lo lleva la

corriente”. A los padres no les queda otra cosa sino
madrugar, encomendarse a Dios y tomar la ventaja de
amanecer para ayudar a los hijos a levantarse, y así tengan
tiempo para su devoción personal, tomar agua en la
madrugada, participar en la devoción familiar, y empezar
el día con un buen desayuno, para luego continuar con
un programa de vida equilibrado, sano y saludable. Este
plan es la base para instalar la disciplina desde la más
tierna infancia. Si nos dormimos en nuestros laureles
podemos ser arrastrados por los vientos, las tormentas y
las tempestades.
2. ¿Qué diferencia hay entre disciplina y corrección?
La disciplina es formar buenos ciudadanos para esta

tierra y para la eternidad, la verdadera disciplina es una
tarea preventiva.
La corrección es remedial y curativa. Es necesaria para
suplir lo que no se pudo o no se quiso hacer a su debido
tiempo.
Pero, en conclusión, es mejor prevenir que lamentar; es
mejor ser proactivo que reactivo.
142
1. ¿Cómo afecta la disciplina el futuro de nuestros hijos, su vida presente
y eterna?
2. ¿Cómo influye la disciplina en el carácter de nuestros hijos?
3. ¿Cómo puedo lograr, como padre o madre, una disciplina amorosa y
firme a la vez?
143
tema 6
Estilos de
paternidad y
la educación
de los hijos
“Con sabiduría se construye la casa;
con inteligencia se echan los
cimientos. Con buen juicio se llenan
sus cuartos de bellos y
extraordinarios tesoros”
(Proverbios 24:3).
Motivación
Cuenta la historia del Imperio Romano que en el siglo
II a.C. surgieron a la vida pública dos hermanos que se hicieron
famosos: Tiberio y Cayo Graco, hijos de Tiberio Sempronio y
Cornelia. Sempronio murió dos meses antes del nacimiento de
Cayo. Cornelia, hija de Cornelio Escipión el Africano, vencedor de
Aníbal, quedó como una joven viuda que podía haberse casado,
pero decidió consagrar su vida a la educación de sus hijos.
Los hermanos Graco llegaron a ser grandes tribunos que
tuvieron la osadía de luchar por las leyes agrarias que limitaban
la extensión de los latifundios y permitía que los pobres pudiesen
adquirir su parcela. Su influencia quedó profundamente grabada
en la memoria no solo dela Roma imperial, sino también en la
historia social de la humanidad.
Los tesoros de Cornelia y Sempronio eran sus hijos. Aparte de
144
Tiberio y Cayo, engendraron 10 hijos a quienes cuidaron y educaron

con cariño y devoción. Se sabe que la viuda joven Cornelia rechazó
muchas propuestas matrimoniales, incluso una del rey Tolomeo VIII
de Egipto.
Una anécdota cuenta que, en una reunión de amigas, una de
ellas le preguntó a Cornelia, por qué se vestía con modestia y sin
joyas. Entonces salió de la habitación y volvió a entrar llevando a
sus hijos. Los señaló y dijo: “Estas son mis joyas”.
Exploración
Los padres que educan a sus hijos con esmero son catalogados
Apoyo intenso
(calidez)
Autoritativo Permisivo
• Límites consistentes • Límites inconsistentes

• Firme y paciente • Disciplina blanda e
• Cálida relación con el niño inconsistente
• Cálida relación con el
niño
Control intenso Control escaso
(restrictivo) (permisivo)
• Excesiva fuerza y • Ignora al niño

castigo • Indiferente
• Duro y dictatorial • No hay compromiso
• Antipático y frío con el niño
Autoritario Negligente
Apoyo escaso
(hostilidad)
145
como padres diligentes. Lamentablemente hay otras conductas
paternas que reciben otras nomenclaturas.
Dona Habenicht, en su libro Enséñales a amar, menciona
cuatro estilos de paternidad, y los esquematiza de la siguiente
manera:
Estilos de paternidad
Estilo autoritativo. Al padre autoritativo se le puede llamar
diligente. Este es el único estilo al que deben aspirar los padres
responsables. Los hijos necesitan el apoyo cálido de sus padres para
desarrollar su máximo potencial, y requieren un control exigente y
restrictivo para no caer en las conductas indeseables, en los vicios y
en los hábitos perniciosos.
Los otros modelos de paternidad tienen desequilibrios que
afectan negativamente el desarrollo de sus hijos.
Estilo permisivo. Un apoyo afectivo intenso pierde su valor
con un control pobre o escaso. Tolerar las actitudes y conductas
objetables tiene efectos negativos.
Estilo negligente. Es la antítesis del estilo autoritativo o
diligente. Es el estilo más desastroso que se puede constatar en la
vida real. Sin apoyo afectivo y sin control, el hijo se educa a la deriva
y puede ser movido por el viento y las malas influencias. Con este
estilo, los padres no educan, deseducan.
Estilo autoritario. También tiene sus problemas. Un control
intenso, con poco o escaso apoyo afectivo, puede lograr eficacia y
respeto, pero basado en el temor o el miedo.
La tarea de educar a nuestros hijos, con la diligencia que
demanda la paternidad responsable, es la misión más importante
que está asignada a los padres.
Analizar cuál es nuestro estilo de paternidad y rectificarnos
146
enseguida, si estamos lejos del único estilo aceptable y

recomendable: el autoritativo o diligente.
Preguntas que suelen plantearse en la Escuela de Padres.

1. ¿Qué diferencia más clara y sencilla existe entre una paternidad
autoritaria y la autoritativa?
Podemos decir que la autoritaria es arbitraria, mientras
que la autoritativa es diligente y ejerce sus facultades con
dignidad, firmeza y bondad. Por ejemplo, un padre autoritario
suele decir: “Yo soy tu padre y debes respetarme porque yo soy
yo, y tú eres tú”. Es decir, no ofrece razones sino impone su voz.
En cambio, el autoritativo tranquilamente dice: “Soy tu papá y
estoy decidido a ayudarte en lo que tú necesites. Sin embargo,
hay límites que debemos respetar”.
2. ¿Por qué el padre negligente es peor que el permisivo, el

autoritario y el diligente?
Porque ni apoya ni controla, ni es frío ni caliente.
Es indiferente y deja que se le pasee el alma. Se le puede
aplicar el dicho peruano: “Ni chicha, ni limonada”. Ejemplo:
Cuando un hijo le pide un libro que necesita para estudiar, el padre
negligente le dice: “Ese es tu problema. Resuélvelo”. El negligente
no está en condiciones de ser padre. Tiene que cambiar de raíz,
por amor a Dios y elemental respeto a la sociedad.
3. ¿Cuáles son las condiciones para ser el padre diligente?
Ejercer su liderazgo espiritual con amor y
responsabilidad, ser un buen proveedor y sustentador, dar
órdenes claras, sencillas y reiteradas, no dejar para mañana
lo que tiene que hacer hoy. Esta es solo una lista esencial y
muy selectiva. El que ya es padre, no puede dejar de ser un
buen padre.
147
4. Un último consejo, por favor
Una vez padre, siempre padre. No te canses de ser
padre y te irá bien en la vida.
Acróstico
Por
Amor a
Dios
Resuelve ser un
Ejemplo digno
“Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará,
pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie. Pero
que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar”
(Santiago 1:5,6). Con la ayuda de Dios será posible explorar medios y
métodos deseables para lograr una educación sana y equilibrada de mis
hijos.
“Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá.
Porque todo aquel que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que
llama, se le abre” (Jesús en el Sermón del Monte, Mateo 7:7,8).
148
tema 7
¿Cómo enseñar
valores
a nuestros hijos?
“En el hogar es donde ha de empezar la
educación del niño. Allí está u primera escuela.
Allí, con sus padres como maestros,
Deben aprender las lecciones que han de guiarlo a
través de la vida: Lecciones de respeto,
obediencia,dominio propio.Las influencias
Educativas del hogar son un poder
decidido para el bien o para el mal”
(Elena de White, Conducción del niño).
Motivación
La fortaleza de una casa depende de sus cimientos. Cuando
decidimos construir nuestra casa en el vecindario de la Universidad
de Montemorelos, donde ejercíamos la docencia, el arquitecto
nos explicó que el presupuesto para los cimientos era tres veces
más caro que el valor del primer piso. El terreno es bueno para
la agricultura, pero no para la arquitectura. Hay que cavar hondo
hasta encontrar roca firme. Si no quieren que la casa nueva se les
resquebraje pronto y sufra inesperados deterioros, atiendan esta
necesidad primero.
El incidente anterior nos hizo pensar que lo más importan-
te de una casa son los cimientos que no se ven. Entonces entendi-
149
mos mejor la enseñanza de Jesús al finalizar el Sermón del Monte:
El necio construye sobre la arena y con los vientos y las tempestades
la casa se cae. Mas el prudente construye sobre la roca y la casa
soporta los embates de la lluvia y las inundaciones. Magnífica mo-
tivación para hablar de los valores.
Exploración
La educación no es simple trasmisión de conocimientos. Es,
fundamentalmente, trasmisión de valores. La escuela se encarga
de los conocimientos: pero el hogar es responsable de los valores.
¿Qué son los valores? Desde una perspectiva cristiana, los
valores son los ideales de Dios para la vida humana. Estos ideales
se traducen en las Sagradas Escrituras como imperativos divinos
que se encuentra, por ejemplo, en los Diez Mandamientos:
I – No tener dioses ajenos – Respeto

II – No adorar a Dios con imágenes – Reverencia
III – No tomar su santo nombre en vano – Respeto y
reverencia
IV – Acordarse del sábado para celebrar la creación –
Obediencia
V – Honrar a los padres – Santidad del hogar
VI – No matar – Santidad de la vida
VII – No cometer adulterio ni fornicación – Santidad del
sexo
VIII – No robar – Respeto a la propiedad ajena
IX – No mentir – Santidad de la verdad o veracidad
X – No codiciar – Pureza de la intención
Aquí tenemos los padres, los maestros, los pastores una

sencilla pero fundamental tabla de valores. ¿Quiénes son los
responsables de cimentar estos valores en los hijos? Ineludiblemente
150
los padres, con el respaldo complementario de los maestros de

escuela y los líderes espirituales de iglesia. El hogar es el crisol de
valores. No hay tarea más noble y trascendente que la de establecer
y afirmar los valores cristianos en la vida de nuestros niños.
Aparte de los Diez Mandamientos, hay otras fuentes
preciosas para descubrir los imperativos divinos o los valores que
necesitamos fomentar en la vida del hogar: el libro de Proverbios,
El Sermón del Monte, las parábolas del Maestro. Los imperativos
divinos o los valores cristianos no están ofrecidos para ser debatidos,
cuestionados o modificados de acuerdo con las tendencias
culturales o sociales. Lo que manda el Señor es para obedecer sin
dudas ni murmuraciones. Si somos necios, oímos y no obedecemos.
Si somos sabios y prudentes, oímos y obedecemos o practicamos.
El gran problema de nuestro tiempo es cómo enseñar
valores cristianos a nuestros hijos en medio de una generación en
la que campea la corrupción, la maldad, la inseguridad, la violencia.
Necesitamos pensar en una urgente y eficaz solución.
En nuestra experiencia docente hemos llegado a descubrir
que la fórmula más sencilla y eficaz para cimentar valores cristianos
a nuestros hijos tiene cuatro aspectos fundamentales:
1. El modelaje. El mejor método para trasmitir valores a
nuestros hijos es vivir lo que enseñamos. Si queremos
tener hijos veraces, digamos siempre la verdad.
2. La imaginación santificada. La imaginación en sí no es
mala. Depende de cómo se la use y para qué. Cuando
nuestros hijos eran pequeños, se aburrían fácilmente
cuando enfatizábamos la parte instructiva o informativa
de la Biblia. Pero exigían más cuando ofrecíamos la parte
biográfica, los relatos, las experiencias de los hijos de
Dios. Las bellas historias de la Biblia surgieron inicialmente
151
como un plan familiar de Arturo Maxwell para celebrar el
culto familiar con sus cuatro inquietos hijos. Ahora esa
colección se ha convertido en un tesoro inapreciable de
la educación para trasmitir valores a la nueva generación.
3. La pedagogía positiva. Necesitamos eliminar de nuestra
pedagogía familiar todo insulto, todo grito, toda palabra
negativa o desalentadora. Es mejor abundar en palabras
de afirmación, de cariño, de bondad, de paciencia.
4. La reiteración. Un clavo no penetra de un solo martillazo.
Se requiere paciencia y buena voluntad para el ejercicio
del refuerzo.
Aquí tienen a su alcance la fórmula más simple y eficaz
de la pedagogía familiar. Si la practican, les va bien. Si
no la practican, no esperen resultados alentadores. Todo
lo valioso que hay en la vida necesita el ejercicio de dos
presupuestos: de tiempo, y de dinero.
Con la gracia de Dios, deicidimos como padres:
1. Educar a nuestros hijos en los valores cristianos de la vida.

2. Poner en práctica la sencilla metodología de ejemplificar, imaginar,
usar una pedagogía positiva y reiterar los valores que deben quedar
firmemente establecidos en la mente, el corazón y la voluntad de
nuestros hijos.
3. Pedirle al Señor que nos ayude a formar hijos con valores cristianos
útiles para esta vida y la eternidad.
4. No cansarnos de hacer el bien a nuestros hijos, porque son hijos de
Dios.
152
Bibliografía recomendada
La Biblia es el primer texto por excelencia para la educación

del niño infante que Dios soñó. En ella se encuentra el valor
de los hijos desde el vientre de la madre (Salmos 139:13-17);
la importancia de los cuidados prenatales (Juec. 13:1-6, como
en el caso de Manoa y su esposa) Luc. 1:5-25, que presenta
las instrucciones dadas a Elisabet para la educación de Juan
el Bautista); la educación temprana de los hijos que tiene
repercusiones para toda la vida (Prov. 22:6); la conjunción
de madres y abuelas en la educación infantil (2 Tim. 3:15-17)
Es importante la educación prescriptiva y restrictiva que

nos ofrecen los mandamientos, órdenes y reglamentos que
contiene la Palabra de Dios (los Diez Mandamientos, los
Proverbios, el Sermón del Monte), pero también hay que
apreciar el aspecto inspirador, emulador, cautivante que
ofrecen las bellas historias de la Biblia; familiarizarse con
las vidas nobles de Moisés y su familia, José y sus hermanos
alborotados, David y sus grandiosas aventuras, Daniel y sus
amigos, el niño de los panes y los peces y casos similares.
Un ejemplo vale más que cien preceptos. El precepto nos
da el punto final de llegada, pero el ejemplo nos brinda la
mejor metodología para llegar con bien al destino soñado y
anhelado.
White, Elena (1990). Conducción del niño. Buenos Aires,

Asociación Casa Editora Sudamericana.
153
Este es el mejor manual conocido en nuestros tiempos para
ayudar a los padres a cumplir adecuadamente su función de
papás y mamás. En el prefacio se lee esta breve descripción:
“Este libro es amplio en su enfoque de los factores más
importantes de la correcta pedagogía infantil. Sus 19
secciones, que abarcan 83 capítulos, seguramente serán
leídas ávidamente por padres y educadores” (White, p.
11). Contiene una lista de oro de 31 valores que los padres
debemos inculcar en los hijos y cuán importante es trabajar
con cada uno de ellos.
Campbell, Ross (1992). Si amas a tu hijo. Nashville, TN:

Editorial Caribe-Betania.
Válido para la niñez y la adolescencia.
Habenicht, Donna (2000). Enséñales a amar. Santa Fe de

Bogotá, Colombia: Asociación Publicadora Interamericana.
La autora, profesora emérita de Andrews University,

especializada en psicología educacional, nos ofrece un cuadro
muy claro y didáctico de estilos de paternidad y la clase de
relaciones que deben mantener los padres con los hijos.
_______________ (2004). Diez valores cristianos que todo

niño debería conocer. Buenos Aires: Asociación Casa
Editora Sudamericana.
Resuelve el tema de cómo ayudar a los niños a que

desarrollen valores cristianos en un mundo secular. Es muy
útil compenetrarse con la metodología para instaurar valores
en nuestros hijos.
154
Gessell, Arnold (1997). El niño de 1 a 5 años. Buenos Aires,

Editorial Paidós.
Esta obra contiene uno de los más valiosos estudios acerca

del desarrollo infantil y está accesible a la comprensión de
los padres. Se puede elaborar un cuadro pormenorizado de
lo que ocurre en el desarrollo psicológico integral del niño
año por año. Completa su estudio con los demás años hasta
llegar a la adolescencia.
Kuzma, Kay (2006). Los primeros 7 años. Paternidad con

valores firmes y un toque tierno. Buenos Aires: Asociación
Casa Editora Sudamericana.
Permite que los padres comprendan la importancia del

potencial que tienen los hijos durante la infancia. Lo que
se hace durante los primeros siete años del niño modela
dramáticamente el resto de su vida. Los que se deja de
hacer o se hace mal tiene un efecto desastroso. Todo padre
encontrará, en este texto, una guía segura para el desarrollo
afectivo de los hijos.
Papalia, Diane E. (2004). Psicología del desarrollo: de la

infancia a la adolescencia. México, Interamericana, S.A.
Es un tratado docente acerca del desarrollo integral del niño

y del adolescente. Muy útil en la escuela de padres.
155
Hoja de refuerzo de
aprendizaje, 3
1. Los hijos ya tienen un destino eter-
no desde el vientre de la madre
si no
2. Los circuitos sinápticos se graban

en el sistema neurológico por
la repetición de los actos que si no
permiten la formación de los
hábitos
3. En la infancia preescolar los padres

son los héroes de los hijos
si no
4. En la infancia escolar los maestros

son los héroes de los alumnos
si no
5. Hay que disciplinar al niño o a la

niña cuando empieza a asistir a la si no
escuela
6. La disciplina es igual a castigo si no

7. La paternidad diligente (mucho
control, mucho apoyo) es el estilo de si no
paternidad ideal
8. Educar desde temprano a los

hijos en el trabajo es la mejor
salvaguardia de la vida presente y
si no
futura de ellos
1.sí 2. sí 3. sí 4. sí 5. no 6. no 7. sí 8. sí
156
(Para los padres y cónyuges)
Yo,……………………………………………………………………………
………………………………. y ....................................................................
con la gracia de Dios y nuestro esfuerzo personal nos compromete-

mos a cuidar fielmente a nuestros hijos en su infancia preescolar para
que sean bien cuidados y bien educados para la honra de Dios, de la
familia y de la sociedad.
...................................... .....................................
Fecha Fima
157
capitulo
4
El hijo adolescente
que Dios soñó
158
Presentación
En contraste con la niñez, dulce y tranquila, la
adolescencia es sorprendente e inusitada. Se acabó esa
edad dúctil y receptiva del niño infante. Ahora tenemos que
afrontar otra realidad.
Una gran verdad que no debemos descuidar los padres
es que una infancia bien vivida y atendida, va a darnos como
resultado una adolescencia más normal y tolerable. Los
cambios y desafíos vendrán inevitablemente, pero los límites
estarán bien establecidos. El amor constante brindado
durante la infancia será un buen capital de reserva para
gastarlo durante la adolescencia. El afecto y la seguridad
que inspiramos como padres a nuestros adolescentes
serán el apoyo que más necesitan para que los desafíos
a la autoridad de los padres no se conviertan en riesgos
peligrosos de explorar sendas extraviadas.
Si aun con la infancia bien atendida se presentan
dificultades serias con los hijos adolescentes, cuánto más
problemática es la situación de una infancia descuidada o
delegada a personas no idóneas para atender a nuestros
niños. Pero si fuera nuestro el caso de no haber prestado
mucha atención a la infancia y tenemos que resolver los
desafíos de la adolescencia, nunca es tarde cuando nos
aplicamos para el bien. Una conducta enmendada es mejor
que una actitud desconectada.
No nos cansemos de ser padres. Esta función es
irrevocable e intransferible. Hagamos lo correcto, dice un
buen consejo, y dejemos las consecuencias con Dios. “Si a
algunos de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y Él se la
dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar
a nadie”. (Santiago 1:5)
159
tema 1
Mi hijo
adolescente:
¿problema o
posibilidad?
“Hijo: Espantado de todo, me refugio en ti.
Tengo fe en el mejoramiento humano… en la
utilidad de la virtud, y en ti”.
(José Martí, Ismaelillo, prólogo).
Motivación
Los versos del poeta cubano José Martí dedicados a su hijo
único, José Francisco, bajo el título de Ismaelillo, son hermosos
y conmovedores. Los mejores versos son para nuestros hijos.
O nuestros hijos son nuestros mejores poemas. En ellos nos
refugiamos y ellos necesitan el refugio de los padres, sobre todo en
la adolescencia, la edad de oro de las grandes decisiones de la vida.
Los hijos, en su adolescencia, son la mayor motivación que

tenemos los padres para pelear la gran batalla de la vida. En este
tema nos concentraremos, en la intrigante etapa de la adolescencia.
160
Exploración
El notable historiador peruano Jorge Basadre escribió
un ensayo clásico: Perú, problema y posibilidad. Lo que él dice de
las experiencias del Perú y su historia, puede aplicarse al hijo
adolescente, cuya edad se presenta no solo como un problema, sino
también como una posibilidad.
El hijo adolescente como problema
El adolescente ingresa, consciente o inconscientemente, a

una edad crítica, de cambios acelerados, notables e inevitables. La
rapidez de los cambios puede llegar a ser una fuente de conflictos
intrapersonales e interpersonales.
Cambios físicos y fisiológicos. Crecimiento y desarrollo de
algunos caracteres sexuales secundarios como la aparición del
vello pubiano y axilar; aumento de actividad de las glándulas
sudoríparas, cuya falta de drenaje produce el acné, más frecuente
en los muchachos que en las chicas. Hay también un rápido
crecimiento del pene y los testículos del muchacho, y los senos de
la chica, iniciando un desarrollo que dura alrededor de tres años.
Los responsables de estos cambios son las hormonas o
sustancias químicas producidas por las glándulas hormonales.
La ubicación estratégica de estas glándulas está en la cabeza, la
garganta y el vientre del cuerpo humano. En consulta con el médico,
deberíamos interesarnos, por lo menos, en conocer la ubicación y
el funcionamiento del hipotálamo y la hipófisis (cabeza), tiroides
y paratiroides (garganta), páncreas, suprarrenales, ovarios y
testículos (vientre).
En la adolescencia se inhibe la acción de la hormona del
crecimiento, y entran en acción las hormonas sexuales que permiten
el ensanchamiento puberal en las chicas y de los hombros, en los
161
muchachos. Las suprarrenales (en la parte superior de los riñones)
dicen ¡presente! y empiezan a producir el estrógeno para las damas
y la testosterona para los varones. Las suprarrenales coordinan su
accionar con los ovarios (en la zona ventral) de la mujer para la
ovulación y la menstruación, y los testículos (en la zona puberal) del
muchacho para la producción de espermatozoides y la eyaculación.
Cambios psicológicos. Junto con los cambios físicos advienen
los psicológicos (mentales, emocionales, volitivos), sociales y
espirituales, que repercuten muy notablemente en la adolescencia.
Según Piaget, a partir de los once años, se desarrolla la etapa
de las operaciones formales de la mente, en contraste con la
etapa de las operaciones concretas del niño. El aprendizaje en la
adolescencia entra en un proceso de reorganización cognitiva. En
esta etapa es importante comprender los conflictos cognitivos o las
contradicciones cognitivas. El aprendizaje también se vuelve más
interactivo. Los adolescentes necesitan la cooperación, colaboración
e intercambio de ideas, emociones, decisiones con sus padres. Los
compañeros juegan un papel muy importante.
La vida emocional del adolescente se siente atraída por
el interés en el sexo opuesto. Los niños en sus juegos excluían
normalmente a las niñas. Los adolescentes las quieren en sus
grupos. Los cambios físicos e intelectuales los colocan en un nuevo
escenario de vida. Los cambios volitivos son también notorios.
Cuestionan la autoridad porque quieren ensayar el ejercicio de
su propia voluntad. Entonces el adolescente rompe las buenas
relaciones con sus padres, sus maestros y, a veces, con la iglesia y,
con Dios. Sus amigos son sus héroes.
Cambios morales. En la adolescencia se mueve mucho el
deseo de agradar, de ser queridos y aceptados. Entonces, hacer lo
correcto es cumplir con las expectativas de las personas próximas
a uno mismo. Esta etapa es la de las expectativas interpersonales.
Cambios espirituales. El adolescente tiende a cuestionar las
formas externas de la religión, pero se intensifica su espiritualidad.
162
Esta tensión no se la entiende y se puede caer en un terreno

conflictivo. Su objeción y rechazo a los ritos y liturgias no significan
necesariamente ausencia de espiritualidad. Más allá de la lógica,
hay que entender las contradicciones o las paradojas de los
adolescentes.
El hijo adolescente como posibilidad
Llegada la adolescencia, los hijos se plantean en algún

momento qué van a hacer con Dios. El tipo de relación con el padre
influye poderosamente en su noción y relación con Dios Padre.
El otro gran asunto es qué quieren ser en la vida. La gran
decisión vocacional depende, en gran parte, de la voz profética
de los padres que les dan pautas y aspiraciones que los hijos han
escuchado desde su niñez. Depende también de la influencia de
los maestros, y, en no menor grado, de sus pares o amigos. En la
adolescencia, pues, se define el rumbo profesional y ocupacional de
los hijos. La adolescencia es la edad de los sueños. En ella se fijan
las ideas e ideales más trascendentales de la vida. ¿Quién soy?
¿Por qué, cómo y para qué vivo? ¿Les intereso a mis padres? ¿Cuán
importante es ganarme algún dinero con mi trabajo?
Otra gran cuestión que aparece en la adolescencia es cuando
se pregunta: ¿Por qué, de pronto, me interesan las chicas? ¿Por
qué me gusta conversar acerca de ellas con mis amigos? ¿Cuán
importante es tener éxito en mis estudios para tener mejor
aceptación de ellas? ¿Alguna vez me casaré?
Estas y otras preguntas similares abren el gran abanico de
posibilidades que el adolescente tiene por delante. En estos trances
de definición, la familia adquiere la máxima importancia. Si en
ella encuentra apoyo y comprensión, tiene el camino expedito para
triunfar. Si carece de ella, el hijo o la hija adolescente, tendrá
barreras muy difíciles de sortear.
163
Antes que llegue la adolescencia, los padres debemos
redoblar nuestros esfuerzos para que esta edad sea la edad de oro y
no de barro. Depende de cuánto valor asignemos a nuestros hijos.
Con todas sus crisis y turbulencias, nuestros hijos adolescentes han
llegado al momento más decisivo de su existencia.
Si los padres amamos a nuestros hijos , sin duda quien los ama
muchísimo más es Dios. Él ama tanto a los hijos dóciles como a los
rebeldes. Pasar exitosamente por el callejon oscuro de la adolescencia
es un milagro que Dios obra cuando los padres suplicamos su ayuda.
164
tema 2
La identidad en
la adolescencia
“Es tu privilegio, querido joven, glorificar a Dios

en la Tierra. Para hacerlo, debes elevar la mente
de las cosas superficiales, frívolas y sin importancia,
y dirigirla hacia las que son de valor eterno”
(Elena G. de White, Solo para jóvenes.
Secretos para aprovechar lo
mejor de la vida).
Motivación
Mi hijo adolescente, ¿es o ya no es? ¿Sigue siendo él mismo
o está procurando ser diferente a lo que era?, ¿tendrá sentido la
búsqueda de su propio ser? “Estancia soleada, / ¿a dónde vas, mirada?
A estas paredes blancas, clausura de esperanza”, escribe el poeta
chileno Vicente Aleixandre. Como padre de mi hijo adolescente,
pregunto: ¿A dónde vas, hijo mío? Los padres tenemos que aceptar
esta simple verdad: El adolescente es una caja de sorpresas. Es
como cuando llega la primavera y cambian los paisajes con una
luz distinta. Otro gran poeta, el cubano José Martí, decía: “Con la
primavera / viene la canción, / la tristeza dulce / y el galante amor. /
Con la primavera / viene la ansiedad / de pájaro preso / que quiere
volar” (Con la primavera). No falta la inspiración de los poetas frente
a la realidad intrigante de sus hijos adolescentes. ¿Qué hacer para
que ellos plasmen el sueño de Dios en sus ilusiones y esperanzas?
¿Cómo ayudarles a que ellos se miren como Dios los mira?
165
Exploración
Identidad en la adolescencia parece que fuera una
contradicción. Él es y no es a la vez. Los cambios notorios que
llegan a esta edad nos obligan a aceptar que dejaron la niñez, como
el “pájaro preso que quiere volar”.
¿Será que el adolescente sufre modificaciones no esenciales,
aparentes, pero, en el fondo no deja de ser el que es? Tal vez este es
un anhelo más de los padres que de los hijos. Queremos los padres
que nuestros hijos actúen como “nuestros hijos”, identificados
firmemente con sus padres.
Sin embargo, los adolescentes tienen su propio derrotero.
Se lanzan en la búsqueda de sí mismo. Cuando eran niños se
complacían en ser como sus padres. En la adolescencia, ya no.
Podemos abordar el problema de la identidad del hijo

adolescente desde diferentes perspectivas: Mírate como te miras
(autoestima), mírate como te miran tus padres (estimación
parental), mírate como te miran tus amigos o como tú los miras
a ellos (estimación social), mírate como Dios te mira (estimación
espiritual)
Mírate como te miras

Es la búsqueda del adolescente de sí mismo. ¿Quién soy?
¿Valgo algo o no valgo nada? ¿Interesa a alguien mi vida y mis
problemas o soy una carga pesada para los demás? ¿Por qué tengo
más relaciones con mis amigos que con mis padres o mis hermanos?
Son cuestionamientos relacionados con la autoestima. Las
respuestas positivas a estas preguntas construyen la personalidad
de nuestros adolescentes sobre bases firmes. Cuando nuestros
hijos han sido bien estimados en su infancia y niñez, pasan mejor
por las turbulencias de la adolescencia. Cuando los adolescentes
cuentan con sus padres, normalmente tendrán una autoestima
166
alta. Es la mejor plataforma y el mejor escenario para nuestros

hijos adolescentes. Enfrentarán la vida con seguridad.
Mírate como te miran tus padres
Cuando nos armamos profundamente de mucho amor y

expresamos mucha paciencia para respaldar a nuestros hijos,
podemos animarlos a que tomen en cuenta nuestras expectativas,
ideas e ideales, nuestro apoyo permanente, nuestro interés en
sus necesidades, entonces, aunque ensayen sus desafíos, tendrán
una estimación parental positiva. Si los adolescentes no cuentan
con el involucramiento de sus padres, les sobrevienen los vacíos
existenciales, la orfandad de cariño y de sentimientos, el sentido de
abandono y soledad. Entonces se vuelven vulnerables y fácilmente
pueden caer en caminos equivocados.
Mírate como te miran tus amigos

En la adolescencia los padres y los maestros ya no somos los
héroes de nuestros hijos. Todo eso pasó cuando dejaron la niñez.
Los amigos son los nuevos héroes de nuestros adolescentes.
La imitación llega a tener gran importancia. Se impresionan con
los modelos. La empatía, la simpatía, el contagio mental y la
proyección juegan roles importantes. Surgen los modelos de vida.
Por ejemplo, Maradona es conocido en el mundo por su magia
futbolística y millones lo tienen como un ídolo indiscutible. Pero hay
otro Maradona argentino, el doctor Esteban Laureano Maradona,
médico de humildes, atendió a aborígenes, leprosos, pobres en
Formosa, Argentina. Una figura noble e inspiradora. ¿Pero quienes
conocen a este importante personaje? Es un solemne desconocido.
Ojalá que hubiese millones que lo admiraran apasionadamente4.
Hay que trabajar para que nuestros adolescentes tengan buenos
modelos de vida.
167
Mírate como Dios te mira
La autoestima es muy importante. La valoración de los
amigos tiene también su impacto en nuestros hijos adolescentes.
Sin embargo, el factor de mayor trascendencia, la búsqueda de su
identidad. es la relación con Dios. Una lectura muy provechosa
para los jóvenes y padres es la obra de Josh MacDowell, Mírate como
Dios te mira. Cuando el adolescente se encuentra con Dios, cuando
se siente que es un hijo de Dios, es depositario de su amor y, por lo
tanto, avanza con pasos más seguros en la vida
.Solución del problema

Aceptar que nuestros hijos tienen la necesidad de encontrar
su propia identidad. Las leyes del desarrollo humano así lo exigen.
Por lo tanto, como padres debemos tener una actitud que favorezca
la construcción de una autoestima positiva, el respaldo de la
confianza y el amor de los padres, el interés en los amigos y, sobre
todo, la relación con Dios.

Preguntas que suelen formular los padres en reuniones de
orientación familiar.
1. Antes mi hijo me decía que él quería ser como yo, ahora me

dice lo contrario: “Yo no soy como tú, no pienso como tú, ni
quiero serlo tampoco”.
¿Cómo afronto esta situación aunque la esperaba, pero no

tan repentinamente?
Responde con paciencia y buen ánimo. Alégrate que tu hijo
está dejando normalmente de ser niño, para convertirse
en un joven o una señorita que ahora va apareciendo su
168
identidad propia. Es parte de su desarrollo.

2. Mi hijo me dice: Tu música clásica ya me aburrió. ¿No puedes
traer otra clase de música a este hogar?
Tal vez te llegó la oportunidad de oro para ampliar tu

repertorio. Dialoga con él y pregúntale qué clase de música
preferiría y por qué. Es bueno orientar sus gustos en forma
cautelosa. Si se trata de ritmos alocados y muy pesados, hay
que ser amablemente firmes.
Ten la confianza de que la música clásica que predominó en

su infancia le va a quedar como una valiosa herencia para
toda su vida. El resto va a ser un tanteo o una curiosidad
propia de su edad de cambios.
3. ¿Qué nos toca hacer a los padres para cuidar una valoración
alta en la estima personal de mis tres hijos adolescentes?
Afirmarlos en las cosas buenas que hacen. Felicitarlos por

sus logros y ayudas. Animarlos en sus proyectos personales.
No desalentarlos en sus fracasos. Cuidar el nivel de
confianza con sus padres. Nunca ridiculizarlos ni criticarlos
como método correctivo. Hacerles observaciones en forma
personal y en privado.
4. Hay una confusión grande en la educación escolar de mi hija

adolescente: le enseñan que la identidad sexual es fruto de
una elección voluntaria y no necesariamente de una condición
con la que venimos a este mundo. ¿Cómo convencerla de que
no hay realmente un tercer sexo?
Física y fisiológicamente hay solo dos sexos en este mundo: el
masculino y el femenino. El esqueleto humano es de hombre
o de mujer. No se ha encontrado nunca el esqueleto de un
169
ser humano que pertenezca a un tercer sexo. La confusión
viene del campo psicológico, por influencias o ideas que
hablan de posibles relaciones homosexuales o lesbianas. Por
este motivo, el mundo actual debate implantar una nueva
concepción de los matrimonios. Al matrimonio heterosexual
y tradicional que aparece en el modelo bíblico, se lo quiere
suplantar por modelos alternativos. En este terreno, la
suplantación es fruto de una degradación moral y espiritual
del ser humano.
1. ¿Cómo podemos colaborar los padres con la identificación de nues-
tros hijos adolescentes en forma positiva y eficaz?
2. Si nuestros hijos están muy identificados con falso ídolos del mundo
deportivo, artístico o musical, ¿cómo podemos actuar para corregir
estas actitudes riesgosas?
170
tema 3
¡Ya… pero
todavía no!
“…no despertéis ni hagáis velar al amor,

hasta que quiera”
(Cantar de los cantares 8:4).
Motivación
El adolescente ya puede engendrar hijos a partir de los 13 ó 14
años. Las chicas lo pueden hacer con uno o dos años de anticipación.
El embarazo de las adolescentes ya se ha instalado en la sociedad
actual como una megatendencia. A pesar de las campañas de
educación sexual que enfatizan el uso de métodos anticonceptivos,
el problema va en aumento, con dos características: el promedio de
edad de las adolescentes embarazadas va descendiendo, mientras
que la maternidad de las adolescentes va aumentando.
Conectada con esta problemática está la recurrencia de los
abortos y prácticas abortivas.
Cuando llegan nuestros hijos o hijas a la adolescencia,

salieron de la estación de la infancia y entonces descubren que
han penetrado en la estación de las rosas, en la fragancia de unas
171
manos de azucena, en la mirada furtiva y el rubor intenso del rostro.
Junto a este despertar emocional estalla la atracción heterosexual.
En este contexto será muy oportuno el consejo sabio de Salomón:
“No despertéis ni hagáis velar al amor, hasta que quiera”.
Exploración
Aunque la fisiología hormonal diga al adolescente ¡Ya!, la
inteligencia cognitiva, la responsabilidad social y económica, y,
sobre todo, la conciencia moral le advierte: ¡Todavía no!
El apareamiento sexual entre los animales es cíclico,

automático e instintivo. Están en condiciones biológicas de
engendras y engendran. Todo depende del reloj biológico que declara
al macho y a la hembra, expeditos para engendrar una nueva vida.
No interviene para nada el razonamiento, las incompatibilidades
de raza, origen y cultura. Ignoran totalmente lo que la persona
humana sabe, y proceden al acto sin otra consideración que la
reproducción de la especie.
La sexualidad humana es abismalmente diferente. No
todo es el reloj biológico ni el impacto hormonal. La sexualidad
humana es consciente, con sentido, no consentido, diferente al
comportamiento animal porque el ser humano no es animal,
es persona. Solo el ser humano es portador de valores eternos:
la verdad, la belleza, la justicia, el honor, el respeto y otros. Los
estudios de axiología –estudio de valores- dicen que el ser humano
es ético y estético. A los animales no les importa la tabla de valores.
No se ha visto nunca a un perro solicitar permiso a los padres de
la perra. Son animales y están en un nivel incompatible con el ser
humano. No hay idoneidad entre hombres y animales. Solo los
evolucionistas los emparentan usando una fe llamada científica,
que mueve montañas de la razón y del espíritu.
Los seres humanos valemos muchísimo más que los animales.
Necesitamos ver desarrollarse a nuestros hijos con una orientación
172
clara y responsable.
La profesora Rosa Alfaro, directora del Departamento de
Psicología de la Universidad Peruana Unión, recomienda a los
padres las siguientes pautas:
1. Las relaciones amistosas entre los 10 y los 14 años de

edad son una experiencia positiva cuando se llevan a
cabo en grupo, sin que se formen parejas que se aíslen
de los demás.
2. El enamoramiento, en esta fase, es un vano intento por

adelantar etapas, por compensar la propia seguridad y
sentirse “grandes”.
3. A los padres y madres les corresponde guiar el afecto de

sus hijos e hijas adolescentes.
4. La orientación sexual de los hijos debe guiarse por

principios de pureza, nobleza, bondad e integridad con
la verdad.
5. Fomentar, en la adolescencia, la amistad sin

compromiso sentimental. La amistad, en esta etapa, es
la forma más importante y hermosa de amar.
6. Hablar de sexualidad no debe reducirse a embarazos no

deseados y uso de anticonceptivos. Debido a este pobre
entendimiento de la sexualidad, las conversaciones
entre padres e hijos se convierten en discurso repletos
de advertencias y regaños.
7. Cuando los padres dialogan con sus hijos acerca de la
sexualidad, los jóvenes deben aprender de la experiencia
de los padres sin sobresaltos.
173
8. Debe diferenciarse la sexualidad de la genitalidad. La
sexualidad tiene que ver con la forma de ser varón o mujer,
encierra todos los sentimientos y comportamientos de
ser varón o mujer.
9. Los padres deben comprender que el despertar de las

necesidades sexuales se convierte en un problema que
angustia y atormenta a los jóvenes. No todo es hormonal.
Hay aspectos psicológicos implicados.
10. No se debe negar ni reprimir que exista atracción sexual;

cuando Dios creó al hombre, puso en su corazón el anhelo
de relacionarse (Génesis 2:18)
Planteamiento de la solución
La intimidad física es una manifestación de la sexualidad
humana, pero es el matrimonio donde puede expresarse esa
intimidad con honra y dignidad. Antes del matrimonio, ¡no! Fuera
del matrimonio, ¡no! Hay que saber esperar hasta el matrimonio
(Hebreos 13:4)

Preguntas frecuentes en nuestras reuniones de orientación familiar.
1. ¿Qué hago si sospecho que mi hijo se está masturbando?

a. Si no has hablado de este tema desde la niñez, es
tiempo de rectificarse y darle información correcta y la
formación moral y espiritual correspondientes.
b. Advertirle de las consecuencias dañinas que esta
práctica produce en su organismo, sobre todo cuando
el hábito se establece en forma persistente.
174
c. Hay un debilitamiento notorio en su capacidad de

concentración.
d. Es una forma equivocada de satisfacción sexual.
e. Los especialistas advierten que la masturbación, sobre
todo la habitual, priva al cerebro de las sustancias
necesarias para el normal funcionamiento del
organismo. ¿De qué sustancia se está hablando? Una
de las más importantes es el zinc
Su deficiencia afecta la capacidad de la memoria y
el razonamiento. Es factor importante en la anorexia,
depresión, hipertrofia prostática, fatigas y salud mental.
Antes las voces de alarma eran de los moralistas; ahora,
son de los psicobiólogos, neurólogos y nutricionistas.
La recuperación del zinc no se soluciona con tan
solo ingerir alimentos o suplementos, sino que hay
procesos orgánicos implicados que aún se encuentran
en estudio.
2. ¿Cómo se puede disfrutar normalmente de la sexualidad en la
adolescencia?
a. En primer lugar, hay que distinguir entre sexualidad y

genitalidad. La sexualidad abarca el comportamiento
masculino o femenino de toda la persona. La
genitalidad se refiere funcionamiento de los órganos
sexuales.
b. Refiriéndonos al sentido general de la sexualidad, se
necesita que el abanico de amistades del sexo opuesto
esté bien abierto y que el hijo o hija adolescente disfrute
del calor de la amistad que es muy emocionante.
c. Participar en actividades recreativas, culturales
(recitales, conciertos, etc.), espirituales (grupos de
testificación, seminarios, cursillos, etc) con personas
del sexo opuesto, y así desarrolle una hermosa
sociabilidad.
175
d. No con todas las amistades se puede confidenciar al
mismo nivel, pero con un número reducido se puede
llegar a cierta intimidad confidencial. Pero cuando
entre adolescentes ya quieren relaciones exclusivas
de pareja, es recomendable refrenar los impulsos y
tendencias juveniles, hasta alcanzar una edad más
adecuada (mínimo 20 años)
3. ¿Cómo se puede recuperar la inocencia perdida?
Dijo el maestro: “¡Vete y no peques más!” Si se le

obedece en lo más íntimo dela vida, se puede
restituir tu inocencia.
1. Somos persona, no animales. Somos libres del instinto para ser
responsables de nuestros actos (Viktor Frankl).
2. “Alégrate, joven, en tu juventud; deja que tu corazón disfrute de la
adolescencia”. ¿Qué significa esta invitación?
3. ¿Sexo premarital o pureza? ¿Qué conducta moldeará la vida de mis
hijos?
176
tema 4
Las grandes
decisiones de mis
hijos adolescentes
“Dios quiere que los jóvenes lleguen a ser
hombre de mente seria, a estar preparados
para la acción en su noble obra”.
(Elena G. de White, Fundamentos
de esperanza).
Motivación
En la adolescencia se suelen tomar las grandes decisiones
de la vida.
Pasamos nuestra adolescencia en Talavera de la Reina, un

pueblo de la sierra sur del Perú. Nos juntamos seis amigos de 13 y
14 años y decidimos hacer algo por la cultura del pueblo.
Solicitamos al alcalde del pueblo autorización para recolectar

fondos destinados a comprar un equipo de amplificación para
ofrecer charlas culturales al pueblo en audiciones que llamamos
sabatinas, porque eran planificadas para los sábados de noche.
Entre los seis amigos nos repartimos los temas culturales sobre la
historia y geografía del hermoso valle del Chumbao. Se adhirieron
177
a la programación muchachos cultores de la música folklórica. El
pueblo nos apoyó y tuvimos un éxito increíble. Se sumaron conjuntos
musicales de los pueblos vecinos, Andahuaylas y San Jerónimo.
En ese fervor adolescente, se definieron nuestras vocaciones
profesionales. Comprobamos, en carne propia, que la adolescencia
es la edad de las grandes decisiones.
Exploración
El adolescente tiende a mirar con un ojo el presente y con
otro el futuro. Se enfrenta con las realidades concretas de su vida y
las realidades abstractas de sus sueños e ideales. Los padres y los
educadores necesitamos comprender esta doble perspectiva de los
adolescentes.
Interesa al adolescente qué es lo que quiere ser en la
vida. Con la ayuda de sus padres y maestros define sus metas y
propósitos. Por esto es fundamental que aprendan a planificar, a
elaborar un proyecto de vida con un mapa de ruta que muestre sus
anhelos para el futuro.
La profesora Rosa Alfaro, de la Universidad Peruana Unión,
define los requisitos para elaborar el proyecto de vida.
1. Conocerse a sí mismo. Antes de iniciar la planificación debe

conocerse: (a) cuáles son mis habilidades y limitaciones
(por ejemplo, tengo habilidad para hacer diseños, y tengo
dificultad para realizar investigaciones); (b) cuál es el sentido
de mi autoeficiencia, es decir, mi capacidad para resolver con
éxito una tarea determinada; (c) cuál es mi forma de pensar
y sentir o determinar mis valores, preferencias y decisiones
para lograr mis propósitos.
2. Fijar metas. Una adolescente sin metas es una vida sin sentido.
Es pasible a enredarse en planes negativos o destructivos.
Las metas que padres y maestros debemos ayudar a definir
178
pertenecen a las áreas: (a) vocacional, estudios y desempeño

laboral; (b) afectiva, relaciones personales, convivencia con los
amigos y amigas (por ejemplo, pensar en el tipo de persona
que le gusta para formar una pareja, el tipo de hogar que le
gustaría, etc.); (c) espiritual, el desarrollo de la fe, la tensión
entre religiosidad (formas culturales) y espiritualidad.
3. Toma de decisiones. Se examinan alternativas y qué

decisiones concuerdan con nuestros valores personales,
familiares y espirituales. El adolescente debe ser consciente
de las ventajas, desventajas y posibles resultados de su
elección.
Los adolescentes pasan por el período más importante para

tomar otra de las grandes decisiones de su vida: su relación
con Dios y con la religión. ¿Se identificarán con la religión
de sus padres o explorarán otras alternativas? Mientras
que suelen cuestionar las formas externas de la religión, la
liturgia y las ceremonias, tienen la tendencia de acrecentar
su espiritualidad. Esta dinámica persona la tenemos que
entender y atender los padres y docentes. Es vital para su
sentido de trascendencia de la vida.
Fomentar un ambiente de apoyo y comprensión para conducir,
a mi hijo o hija adolescente, a una toma consciente de decisiones.
Para que el ambiente sea de apoyo, necesito mantener una
comunicación abierta con el hijo o la hija.

Preguntas que suelen formular los participantes en la Escuela de
Padres:
179
1. ¿Cómo puedo estimular el espíritu de superación de nuestros
hijos adolescentes?
Una manera muy práctica es incorporar a nuestros

adolescentes en actos de graduación académica de familiares
y amigos. Destacar estos acontecimientos como grandes y
dignos de elogio. Algo positivo va quedando en el sustrato
del alma juvenil para imitar eso que está viendo con sus
propios ojos. Hay que destacar también el costo del esfuerzo
desplegado tanto por el graduando como por sus padres
2. ¿Cómo pueden tener metas claras mis hijos adolescentes

cuando están en una edad de confusión de ideas y de
sentimientos?
La confusión en los adolescentes es como la oscuridad del

amanecer. Pronto pasa y ya va a llegar la luz de la aurora.
La vocación es un despertar a veces lento pero seguro e
inevitable
3. ¿Por qué ser un ingeniero de sistemas, enfermera, educador,
asistenta social, y otras opciones?
Estas preguntas deben despejarse en la mente del
adolescente, porque esta etapa es la más decisiva para la
definición vocacional.
4. Soy un padre que lucha la vida como chofer. No me avergüenzo

de serlo, pero como padre quiero que mis hijos sean mejores
que yo, que lleguen a ser buenos profesionales. Les digo a
mis tres hijos adolescentes que se miren en mi espejo: difícil
encontrar trabajo, poco sueldo, pocos recursos. Les digo que
yo no tuve ni apoyo familiar ni orientación profesional. Pero
ustedes cuentan conmigo y con la abnegación de mamá, que
les atiende personalmente. Les digo que no desperdicien
180
su adolescencia y hago todo lo posible para que4 a ellos les

vaya mejor. Felizmente el mayor ya está encaminándose
como técnico de motores Dieses; el otro quiere ser profesor
y predicador; el tercero es callado y no dice nada, pero es
romántico y bien aficionado por el sexo opuesto. Mi esposa
los conoce muy bien, es amable y firme. Les incorpora en una
empresa de trabajo que se puede hacer en casa, les vigila el
estudio y las amistades, les compra instrumentos musicales
y ya han formado un trío muy activo en la escuela y en las
iglesias adonde los invitan. Les lleva a la escuela y, por lo
menos, una vez por semana, al gimnasio. Eso es todo.
Tú y tu esposa merecen un doctorado por la manera cómo

están ayudando a sus hijos a tomar las grandes decisiones. Ustedes
podrían hacer un enorme bien dando su maravilloso testimonio a
los padres que no saben qué hacer con sus adolescentes. Somos
testigos de excepción porque conocemos directamente tu caso.
Tienes una familia ejemplar e inspiradora.
1. ¿Cómo apoyar o canalizar los sueños, planes y proyectos de mis hijos
o hijas adolescentes?
2. ¿Cómo conjugar la autoridad paterna y la afectividad materna en la
turbulencia de mis adolescentes ?
181
tema 5
Hijos libres de
anorexia
y bulimia
Si los médicos no son los
nutricionistas de hoy,
los nutricionistas de hoy serán
los médicos de mañana.
(Letrero en el Sanatorio Naturista
de Canoas, México).
Motivación
Si los padres no somos los expertos en la nutrición de nuestros
adolescentes, ellos serán sus propios nutricionistas. Mucho más
cuando los padres estamos ausentes de la mesa en la que comen
los hijos, no hay el desayuno, el almuerzo o la cena en familia. Los
padres comen solos, los hijos comen solos. Fácilmente aparecen
los trastornos de alimentación. Muchos hogares modernos se
convierten en centros nerviosos de puro estrés. El papá es el
televisor y la mamá es la refrigeradora. Solo que el papá es muy
dictatorial y la mamá, muy fría.
Exploración
Se han puesto de moda en nuestros días dos trastornos de
alimentación y de conducta en los adolescentes que están causando
muchos estragos: la anorexia y la bulimia.
Veamos de qué se trata y cómo se trata.
182
Anorexia
Este trastorno consiste en rechazar la comida que se debe
ingerir por el miedo obsesivo a engordar. Este es un riesgo típico
de las adolescentes.
El término “anorexia” viene del griego an, negación; y órexis,
apetito o hambre. Describe el estado de inapetencia que en la
adolescencia resulta completamente contradictoria, porque a esa
edad, el cuerpo demanda más proteínas, carbohidratos, minerales
y vitaminas para atender su normal desarrollo. Fisiológicamente
hay una aceleración de la necesidad extra de alimentos, y
psicológicamente hay una desaceleración del apetito. Es como un
coche que necesita más combustible y se le pone menos gasolina
y se le engaña añadiéndole agua. Previsiblemente el motor va a
fallar.
La anorexia nerviosa es un trastorno psicofisiológico
caracterizado por una pérdida autoinducida de peso para
conservar una imagen esbelta y atractiva. En el fondo, el ideal de
la adolescente es muy bueno, excelente, pero los medios que usa
privándose de una alimentación sencilla, sana y equilibrada, son
absurdos y contraproducentes.
¿Cuáles son las consecuencias de la anorexia? La desnutrición,
la anemia, la disminución inmunológica, la amenorrea (pérdida de
la menstruación). Es decir, se ve seriamente comprometida la salud
integral de la hija adolescente.
Bulimia
Este trastorno consiste en la excesiva ingestión de alimentos,

seguido de métodos inapropiados para controlar el peso como
el vómito autoinducido, el abuso de laxantes o diuréticos y la
realización excesiva de ejercicios.
183
La combinación de anorexia con bulimia se llama bulimarexia.
Parece una curiosidad lingüística interesante, pero en la vida
real y cotidiana de nuestros hijos se convierte en una realidad
horriblemente indeseable.
¿Cuáles son las consecuencias de la bulimia? Alteraciones

digestivas: colon irritable, reflujo gastrointestinal, hernia hiatal,
rotura gástrica, pancreatitis; alteraciones metabólicas: descenso
de glucosa, cloro, calcio, potasio en la sangre, deshidratación;
alteraciones cardiacas: arritmia, afecciones de la válvula mitral; otra
alteraciones pueden ser afecciones genitales, óseas o renales.
Tratamiento
Un secreto simple y sencillo se encuentra en el siguiente
consejo inspirado: “Dios bendecirá tu pan y tu agua. Yo apartaré de
ustedes toda enfermedad” (Éxodo 23:25)
Nuevamente presentamos las recomendaciones de la

profesora Rosa Alfaro:
1. Alimenta a tu familia en familia. Antes de ingerir los
alimentos ricamente preparados por la experta madre,
pidan la bendición del Señor.
2. Joven o señorita, tú eres responsable de tu cuerpo, te
pertenece, los demás no tiene derecho a desmerecerte
por tu aspecto físico.
3. Si te preocupa mucho tu imagen corporal, vas a tener
lo mejor revisando un plan balanceado en lo que comes,
en tu hábito de descanso y en tu programa de ejercicios.
Una buena comida, un descanso adecuado (acostarse
temprano y levantarse temprano) y un buen plan de
ejercicios te garantizan un cuerpo ágil y esbelto)
4. Haz una lista de las partes de tu cuerpo y mirándote al
espejo di: Yo soy especial, soy hermosa, soy única.
184
5. Es muy importante tu familia. Pasa más tiempo en el

hogar especialmente en el horario de las comidas.
6. Busca amigos que te acepten como eres.
7. No te guíes por los estereotipos de los medios de
comunicación, ni por amigos que tienen ideas exageradas
o desvirtuadas.
Padres, acompañemos a nuestros hijos, especialmente en
la mesa familiar. Se disfruta no solo la fruta, sino también todo
alimento sano, sencillo y equilibrado.

Preguntas seleccionadas en los encuentros de Escuela de
Padres:
1. ¿La anorexia es solo fruto de la vanidad de lucir un cuerpo

delgado o esbelto, o es una enfermedad que está más
allá de un control libre y voluntario?
a. Es difícil establecer límites a estos problemas

personales que afrontamos como hijos
adolescentes o como padres interesados.
b. Hay que considerar los dos aspectos: la influencia
social y el estereotipo de la belleza femenina
impuesto por los medios de comunicación y la
enfermedad psicológica con secuelas en la salud
física. Los padres tenemos que contrarrestar los
efectos de la vanidad mediante la autoridad y la
afectividad que ejercemos, y también debemos
contar con el auxilio profesional de los médicos y
185
de los psicólogos en quieres tenemos confianza
por su idoneidad profesional.
2. ¿Cuáles son los recursos más prácticos para combatir

la anorexia y la bulimia?
Para las personas que padecen estos trastornos

de alimentación y conducta, lo más sencillo y eficaz
es observar un estilo de vida sano y saludable que
responde a tres cuestiones elementales: ¿Cómo comes,
cómo descansas o cómo duermes, y cómo te activas?
3. ¿Cuáles son los síntomas más comunes de la anorexia?
a. Miedo a subir de peso

b. Rehusar comer aun lo normal
c. Negar que tiene hambre
d. Realizar ejercicios en exceso sin considerar que
no tiene suficientes reservas de carbohidratos
4. ¿La anorexia y la bulimia son exclusivas de la

adolescencia?
a. De ninguna manera
b. Afectan también a personas jóvenes y adultas
c. Una gran ignorancia nutricional es la puerta
de entrada para estos trastornos que pueden
producir enfermedades que requieren
tratamiento.
5. ¿Cuáles son los factores que predisponen a la anorexia

o a la bulimia?
a. Carencia de afectos
186
b. Rasgos psicológicos de obsesión por la

apariencia y miedo a la obesidad
c. Sentimientos de rechazo de la familia, amigos y
colegas.
1. Cuando pedimos al Señor el pan nuestro de cada día no pensemos
solo en el pan material, sino también en el pan horneado en el corazón.
2. La estimación de los padres a los hijos y de los hijos a los padres pro-
ducen salud y bienestar.
187
tema 6
La libertad
responsable:
adicciones actuales
“Somos libres para ser responsables”
(Victor Frankl, El hombre doliente)
(Erich Fromm, Del tener al ser).
Motivación
Hoy existe una gran preocupación de los padres de niños y

adolescentes con relación al uso de tecnologías novedosas como
los videojuegos, los celulares cada vez más sofisticados, los i-pods,
i-phones, Facebook, twiter y otros. Una verdadera inundación
tecnológica que altera la vida privada de nuestros hijos.
¿Deben quedar en libertad para desarrollar su responsabilidad?
¿O en libertad libre, sin exigirles ninguna responsabilidad?
Libertad sin responsabilidad degenera fácilmente en el libertinaje.
Responsabilidad sin libertad degenera en dictadura. La fórmula ideal
es mantener el equilibrio necesario entre libertad y responsabilidad.
Los desafíos son inéditos. El sorprendente avance de la
ciencia y de la tecnología nos deja casi sin respirar. La generación
electrónica del siglo XXI trata a padres y abuelos, por lo general, de
analfabetos electrónicos. Los expertos son los hijos y los nietos.
188
Ellos saben de todo. Lamentablemente las novedades

garantizan la cantidad de los inventos, pero no garantizan la calidad
de vida de los consumidores. Este fenómeno amerita que los padres
y los educadores elaboremos estrategias de protección e instrucción
para el uso adecuado de las tecnologías.
Exploración
Necesitamos identificar las características de las tecnologías
modernas y concientizarnos acerca de los riesgos que pueden
generar procesos adictivos, perjudiciales para la salud física, mental,
emocional, social y espiritual. Los peligros tienen efectos cascada.
Arrastran, subyugan, obsesionan y, adicionalmente, contagian a los
demás.
Las nuevas tecnologías de comunicación y entretenimiento
tiene grandes beneficios y, a la vez, grandes riesgos, tal como
presenta la profesora Rosa Alfaro:
Riesgos Beneficios
Dispersión de atención
Favorecen el aprendizaje coo-
No hay margen para procesar la
perativo, el desarrollo de nuevas
información recibida.
habilidades, el constructivismo, la
Muchas estimulación sensorial y
creatividad y el descubrimiento de
poca reflexión
nuevas fronteras del conocimiento.
Convierten las relaciones virtuales Favorecen la comunicación y las

en relaciones reales. relaciones sociales.
Pueden producir aislamiento, Acortan las distancias y el tiempo
soledad y depresión. para las comunicaciones y la
resolución de tareas.
En este contexto se comprenden las adiciones no solo como
189
el consumo de sustancias nocivas como las drogas, sino también
como la dependencia de medios electrónicos que pueden traficar
con el sexo (pornografía), violencia, competición (ganas de aplastar
al rival)
Algunos síntomas de las conductas adictivas de estas
tecnologías son:
• Los videojuegos pasan a ser el centro de toda actividad.
• Esto se refleja en sus conversaciones y hábitos.
• Obsesión sobre las novedades y aplicaciones en el uso de
estas tecnologías.
• Seguir jugando en la cama mientras que se supone que el
hijo adolescente o la hija está durmiendo plácidamente.
(Un abuelo le preguntó al nieto si se había metido una
luciérnaga a su cama y el nieto tuvo que explicarle que se
trataba de su i-pod).
• Irritabilidad y ansiedad antes o después de estar
“conectado” o jugando.
• Dar preferencia a los contactos virtuales antes que a los
contactos reales.
• Sensación de incapacidad o impotencia frente a la lucha
por abandonar la “sesión” de interacción o de juego.
• Pérdida de noción de tiempo y espacio cuando se hace
uso de estas tecnologías.
Frente al reconocimiento de esta problemática, los padres

tenemos que estar conscientes para adoptar la conducta más
eficiente que ayude, a l hijo adolescente, a usar estas tecnologías
para su beneficio y no para autodestrucción.
Planteamiento de la solución
Incentivar el uso de las nuevas tecnologías de comunicación
y entretenimiento bajo un horario controlable y controlado. No es
190
saludable dejar la decisión al libre albedrío del adolescente.

Convertir a la familia en un facto o ente protector frente a
esta invasión de influencias.
Lamentablemente ocurre que el mayor problema radica
en hábitos imprudentes de los padres frente a estos medios
tecnológicos.

Seleccionamos algunas preguntas que solemos contestar a
viva voz en la Escuela de Padres:
1. ¿Por qué las drogas son tan irresistiblemente atractivas

para los adolescentes?
a. La curiosidad es una trampa mortífera.

b. La presión de grupos pequeños con líderes de
malas prácticas que incluyen el consumo de las
sustancias dañinas.
c. Las primeras experiencias vigiladas y estimuladas
por el grupo de presión sirven de bienvenida a un
mundo artificial y artificioso, tan excitante como
peligroso.
d. Lo más insidioso del consumo de las drogas es que
tiene efectos que inhiben la acción de las neuronas
de los lóbulos frontales del cerebro (donde se
producen las funciones más nobles de la vida
inteligente: el razonamiento, el juicio crítico, las
decisiones, los actos de conciencia, las valoraciones
morales, etc.) y cuando el adolescente se ve libre
del control del cerebro superior, predominan las
emocionales y los impulsos. A los adolescentes les
complace esta doble acción: liberar del control de
191
la inteligencia y dar rienda suelta a las emociones y
a los impulsos, particularmente sexuales.
e. Los adolescentes que ya se han iniciado en las
drogas son desinhibidos, emocionales, excitables,
insinuadores, contagiosos; basta que les llegue
una observación o una contradicción para que se
vuelvan violentos y atrevidos, y también agresivos.
f. En la proporción que se adhieran a las drogas, se
sienten despectivos con las normas y reglamentos
que usan los centros de enseñanza y los hogares.
Estalla el conflicto abierto o disimulado. El mal
es perverso pero sugestivo y engañosamente
atractivo. EL bien es constructivo, noble y generoso.
Los adolescentes bien formados nunca caen en la
trampa. Son vivaces y despiertos.
2. ¿Por qué a los drogadictos les gusta las emocionales de

las aventuras excitantes?
a. Por la explosión de emociones y suspensos que

demandan mucha adrenalina, que es la hormona
del estrés.
A más emociones e impulsos descontrolados vienen,
en fila india, las otras actividades del ciclo vicioso:
libertinaje sexual, masturbación compulsiva,
ruptura con la autoridad de padres y maestros. Se
suman los efectos indeseables.
b. Otra vez entran en acción los grupos pequeños de
influencia del mal. La presión del grupo se convierte
en una verdadera prisión psicológica y moral.
192
1. ¿Qué es la vida? ¿Un sueño? ¿Una fantasía? ¿Una ilusión virtual?
O es una oportunidad para resolver problemas reales.
2. ¿Cómo hacer para que el ejercicio de la libertad no atente contra
la responsabilidad?
193
tema 7
El desarrollo
de la fe en los
hijos adolescentes
“Ahora bien, la fe es la garantía
de lo que se espera, la certeza de lo
que no se ve… En realidad, sin fe es
imposible agradar a Dios…
(Pablo, carta a los Hebreos 11:1,6).
Motivación
Según los estudios del desarrollo dela fe, de James Fowler,
una de las autoridades más lúcidas en este terreno, la realidad nos
indica que la adolescencia es la edad clave en que se toman las
decisiones con relación a la fe. Las dudas, los cuestionamientos,
e
la profundización de la fe e incluso el abandono de la misma son
frecuentes. Desde la perspectiva de la trascendencia, el adolescente
se ve enfrentando con la más grande decisión de la vida (clarificación
de relaciones y valores): ¿Qué tengo que ver con Dios? ¿Existe? Si
es así, ¿debo andar en sus caminos? ¿Quién es Jesús? Aprendí que
es el Verbo de Dios, que no es un hombre común. Es Dios mismo
y que por Él fueron hechas todas las coas, y sin Él nada de lo que
ha sido hecho fue hecho. Y que ese Verbo de Dios se hizo carne y
que nació en Belén como un niño pobre e indefenso. Vivió y creció
y enseñó cosas maravillosas. Sin embargo, lo crucificaron como a
un malhechor.
194
Pero resucitó y ahora vive. A los que lo aceptan y lo reciben,

les da el privilegio de ser hechos hijos de Dios. Quiero ser un hijo de
Dios. ¿Qué hago con Jesús? ¿Y qué hago con su iglesia? ¿Seguiré el
ejemplo que me dan mis padres? ¿Y qué hay si no me dan un buen
ejemplo? ¿O seguiré mejor lo que hacen mis amigos? Pero si no
tengo relación con ninguna iglesia, ¿me debo interesar en alguna
de ellas, o no?
Exploración
Las cuestiones y cuestionamientos de fe de nuestros
adolescentes nos convencen, a los padres, de que nuestros hijos
están pasando por una crisis existencial. Y muchas veces no los
entendemos, ni los atendemos. Los dejamos luchar solos y no
nos involucramos en sus dudas y creencias, en sus angustias y
esperanzas. Muchas veces las crisis de fe de nuestros hijos son
crisis de fe de los padres, que no entendemos la naturaleza del
problema espiritual de nuestros hijos.
Las investigaciones de Alexander Astin y Parker Palmer, acerca
de la espiritualidad en los adolescentes y jóvenes secundarios y
universitarios de los Estados Unidos, nos revelan que mientras el
joven tiende a profundizar su espiritualidad, sin embargo, tienden
a rechazar la religiosidad.
Veamos el contraste entre ambos fenómenos, íntimamente
conectados con la vida de la fe.
Religiosidad Espiritualidad
Pertenece al dominio objetivo de Señala nuestra vida subjetiva.
una conducta observable.
Se adhiere a un conjunto de Envuelve nuestras experiencias
creencias y doctrinas afectivas.
195
Tiene que ver con las prácticas Tienen que ver con los valores que
(ritos, ceremonias, celebraciones) más queremos
que más acostumbramos.
Define nuestro sentido de Define nuestro sentido de quiénes
pertenencia social y eclesial somos, de dónde venimos, hacia
dónde vamos.
Abre la mente y la convicción Abre la mente y el corazón,
convicción y afectividad.
Da sentido de conectividad social Da sentido y propósito del trabajo
e identificación grupal y de la vida
Hay otros aspectos relacionados Hay otros aspectos no tan fáciles
con la vida cultural, litúrgica y de definir como la intuición, la
participativa. inspiración, lo misterioso y lo
místico.
Autenticidad social Autenticidad personal.
Fuente: Alexander W. Astin, y otros. Cultivating the Spirit, San

Francisco, Jossey Bass, 2011.
(Ver también Parker Palmer, The heart of higher education, San
Francisco, Jossey Bass, 2010)
La gran tarea que nos corresponde a los padres es comprender

la naturaleza de los conflictos que pueden estar afectando a nuestros
hijos y ayudarles con todo lo que podemos para dar mensajes claros,
armoniosos respecto a la vida espiritual y religiosa. Una vida sin
coherencia, una vida pública prestigiosa y una vida privada pobre
y miserable son los detonantes más perturbadores en la vida de
nuestros adolescentes.
Resolución del problema

Examinar mi vida personal interior para ver si tengo autoridad
moral y ascendiente sobre mi hijo o hija adolescente, y guiar el
196
desarrollo de la fe por precepto y por ejemplo.
Armonizar, en la vida real, la experiencia religiosa con la vida

espiritual.
Velar para que no haya discrepancia entre la teoría y la
práctica, entre la predicación y la vivencia, entre la forma social y la
vida privada familiar.
Darle importancia prioritaria a la vida de la fe. Solo en Dios

y en su Palabra se puede encontrar un verdadero sentido a la vida.
Las dudas y perplejidades de nuestros adolescentes tienen un
camino más expedito, cuando su vida de fe se profundiza.

Preguntas seleccionadas de los participantes de la Escuela de
Padres:
1. ¿Cómo se desarrolla la fe de mis hijos adolescentes?

a. Con la actitud de los padres frente a las dificultades de
la vida.
b. Los problemas reales se resuelven mejor con fe,
oración, trabajo y unidad familiar.
c. Animar a los hijos a poner en práctica lo que se les ha
enseñado.
2. ¿Por qué se dice que en la adolescencia disminuye la

religiosidad, pero aumenta la espiritualidad? ¿No son ambos
términos sinónimos?
a. En general el adolescente huye de la formalidad y

el formalismo y se lanza a la búsqueda de su propia
identidad en la que predomine la autenticidad.
197
b. En su propia búsqueda puede llegar a tener un
encuentro personal con un Dios personal. Ya no se
trata del Dios que le enseñaron en su infancia; ahora
se trata de un Dios confidente, amigable y confiable.
c. Al Dios personal, con quien empieza a tener una
relación más íntima, no lo encuentra en la liturgia ni
en las formas externas de la religión. Su religión se
espiritualiza.
d. En la religiosidad domina la objetividad, la vida
corporativa o colectiva. En la espiritualidad predomina
una fe viva y activa.
e. El adolescente es un gran necesitado de espiritualidad.
Sus dificultades con su actitud contestaria puede
llevarlo a falsas conclusiones.
f. Hay que atender más su vida interior, sus necesidades
profundas y su devoción personal.
g. Es muy importante que no haya un divorcio terminante
entre religiosidad y espiritualidad. Puede haber
conflictos que, más bien, son periféricos y no tan
radicales.
h. El adolescente es como la piña, tosco y hostil por fuera,
pero muy dulce y necesitado de amor y simpatía por
dentro.
i. Su espiritualidad, debidamente entendida, le ayudará
a ser un activo participante de su fe religiosa y con un
sello especial de autonomía.
3. Si la fe es la garantía de lo que se espera, ¿Qué espera el

creyente? Si es la certeza de lo que no se ve, ¿qué es lo que no
se ve? ¿Y por qué es imposible agradar a Dios?
a. Lo que espera el creyente es el fiel cumplimiento de

las promesas de Dios, entre otras, la de su regreso
198
inminente (Juan 14:1-3)

b. Lo que no ve es el reino de Dios en este mundo. Puede
verlo en el presente con los ojos de la fe, pero no el reino
venidero del Señor. Este se encuentra en el futuro, pero
pronto la vida temporal se va a convertir en vida eterna
y eternal. También no ve un reino de paz y amor, pero
espera.
c. Sin fe es imposible agradar a Dios porque la fe es una
relación viva entre Dios y el ser humano. La fe no es
inherente al hombre, es dependiente de su relación
personal con Dios.
1. Si mi hijo o hija adolescente tiene que tomar la más

grande decisión de su vida porque tiene que ver su
relación con sus semejantes, sino con su Creador,
¿cómo puedo ayudarlo(a) y orientarlo(a)?
2. Si soy un estorbo o un impedimento en el normal
desarrollo de fe de mi hijo o hija adolescente, ¿cómo
debo resolver mi crisis de padre, antes de pretender
ayudarlo o ayudarla?
199
Como guía firme y segura para educar a los hijos

adolescentes, la Biblia no tiene parangón. “Padre mío, amigo
de mi juventud” (Jer. 3:4), o en otras versiones “guiador”. La
juventud es un tesoro preciso ante Dios. El libro de Proverbios
es el mejor manual que se registra en la bibliografía para
la orientación juvenil. Aparte de este libro bíblico, está el
discurso a los adolescentes y a los jóvenes en Eclesiastés 11:9,
10 y 12: 1-8. Los paradigmas de una juventud auténtica se
encuentran en las vidas inspiradoras de José (Gén.37-50),
David (1 Sam. 16), David y Jonatán (1 Sam. 18-20), Daniel y
sus amigos (Dan. 1-3), y otros.
White, Elena ( 2008 ). Mensajes para los jóvenes. Buenos Aires,
Asociación Casa Editora Sudamericana.
Una compilación básica de los mensajes de esta notable

escritora dedicados a la juventud cristiana que necesita
forjar un carácter firme para afrontar los desafíos y peligros
de la vida actual y tener idoneidad aun para la eternidad. La
obra es un manual útil para ser estudiado y analizado por
padres y jóvenes.
Dobson, James (2002). Cómo criar a los varones. Miami,
Florida: Unilit.
200
Consejos prácticos para padres que forman la próxima

generación de hombres.
_____________ (2010). Cómo criar a los hijos. Miami, Florida:
Unilit.
Consejos prácticos para madres que forman la próxima

generación de muchachas,
Gessell, Arnold (19747). Adolescente 10 a 16 años. Buenos

Aires: Editorial Paidós.
Con su conocida solvencia en los estudios de desarrollo
humano, el autor presenta los perfiles y rasgos psicológicos
de la adolescencia. Los padres necesitamos conocer,
comprender y orientar a nuestros hijos adolescentes. La
etapa de la adolescencia es una edad de cambios notorios
en todos los aspectos de la vida. Este autor y su equipo de
investigadores brindan un manual muy útil para el estudio y
la discusión clarificadora entre los padres.
McDowell, Josh (2006). El padre que yo quiero ser. El Paso,
Texas: Editorial Mundo Hispano.
El padre que Dios soñó se encuentra en un punto decisivo

cuando se trata de la adolescencia.
Melgosa, J. (2007). Para adolescentes y padres. Madrid,

Editorial Safeliz.
Las relaciones entre padres e hijos suele tener sus grandes
dificultades. Hace falta tratar este punto desde una
cosmovisión bíblica de la vida familiar. Este es el aporte de
este educador.
Papalia, Diane E. (2004). Psicología del desarrollo de la
infancia a la adolescencia. México, Interamericana, S.A.
Tratado acerca del desarrollo integral del niño y del
201
Hoja de refuerzo de
aprendizaje, 4
1. La adolescencia siempre es un gran
problema, no una posibilidad ni si no
una gran promesa
2. En la adolescencia el ser humano

busca su identidad
si no
3. Los chicos adolescentes ya pueden

engendrar hijos
si no
4. El adolescente vive sin preocuparse

de su vocación religiosa, si no
profesional o social
5. La anorexia y la bulimia pueden

prevenirse con hábitos sencillos
de alimentación desde la niñez si no
y brindando a nuestros hijos un
cálido ambiente familiar
6. Es suficiente instruir al adolescente

acerca de los peligros de las
adicciones modernas para librarlos
si no
de estas
7. El mal uso del dinero que se le

regala a los hijos fomenta el si no
consumismo
8. En la adolescencia aumenta
la religiosidad y disminuye la si no
espiritualidad
1.no 2. sí 3. sí 4. no 5. sí 6. no 7. sí 8. no
202
Yo, ……………………………………………………………………………
………………………………. y ……………………………………………..
con la gracia de Dios y nuestro esfuerzo personal nos compromete-

mos a cuidar de nuestros hijos adolescentes y jóvenes para que sepan
tomar las más grandes decisiones de su vida (frente a Dios, a su vo-
cación profesional u ocupacional y a su condición social.
...................................... .....................................
Fecha Fima
203
capitulo
5
La familia
que
Dios soñó
204
Presentación
En la presente segunda edición cambiamos el título de La familia
que yo soñé por este otro La familia que Dios soñó por dos sencillas
razones: primera, porque un año después de haberse publicado la
primera edición con el título de La familia que yo soñé (2016), apareció
otro libro con el título casi idéntico: La familia que soñé cuyos autores
son muy apreciados y dilectos colegas nuestros: Mario Pereyra,
Arnulfo Chico, Laura Oro, Pamela Sicalo. Nos alegramos que una
misma inquietud nos mantenga vivos en las filas de la educación
familiar y de la evangelización pública. Pero como muchos lectores,
estudiantes y participantes de nuestros seminarios de vida familiar
nos hicieron notar este detalle, decidimos cambiar levemente el
título para esta segunda edición. Ahora, la más importante razón
es que deseamos poner énfasis especial no tanto en el mundo de
los sueños del ser humano, sino en el sueño de Dios para la familia
humana. Mis pensamientos, dice el Señor, son más altos que los de
ustedes. Luego añade: “Así como la lluvia y la nieve descienden del
cielo, y no vuelven allá sin regar antes la tierra y hacerla fecundar
y germinar para que dé semilla al que siembra y pan al que come,
así es también la palabra que sale de mi boca no volverá a mí vacía,
sino que hará lo que yo deseo y cumplirá con mis propósitos” (Isaías
55:10,11).
La Palabra de Dios contiene las más hermosas y los más altos ideales
que surgieron en la mente de Dios; los más nobles sentimientos del
corazón del Creador; y los más preciosos imperativos divinos de su
santa voluntad.
Todo lo dicho se puede resumir en los siguiente puntos:
1. Dios soñó con un matrimonio humano que fuera siempre santo

y feliz. Reiteramos esta verdad: No hay o no debe haber ninguna
incompatibilidad entre la santidad y la verdadera felicidad.
205
2. Dios soñó con un hogar donde los padres sean verdaderamente
padres.
3. Dios soñó con una infancia amada y segura, que crezca al
amparo del hogar útil para esta vida y la eternidad.
4. Dios soñó también con una adolescencia que demanda mucho
apoyo y mucho control de parte de sus padres.
5. Dios tiene un sueño para tu hogar. Pero este es infinitamente
superior a los más extraordinarios sueños humanos.
6. Los sueños de Dios son más altos que los cielos sobre la
tierra. Son como la buena lluvia que desciende sobre la tierra
y la fecunda, hace germinar la semilla y la convierte en una
hermosa vid.
7. Los sueños de Dios se registran fielmente en las Sagradas
Escrituras y constituyen la genuina guía de orientación familiar.
A manera de resumen y conclusión, resaltamos los temas de este

capítulo final.
206
tema 1
El matrimonio
que Dios soñó
“Esta sí es hueso de mis huesos
y carne de mi carne.
Se llamará ‘mujer’, porque del
hombre fue sacada”.
(Génesis 2:23).
Motivación
Todo joven de buen corazón quiere tener el matrimonio de sus
sueños. Un joven universitario, en la institución donde laborábamos,
un día se presentó a mi oficina y me dijo:
--Profesor, usted ha sido mi mentor y consejero durante

todos mis años de estudio. Acabo de graduarme y usted nos
ha dicho en clase que lo ideal es que nos vayamos al campo de
trabajo bien casados. Usted conoce a mi novia que es también
mi compañera de graduación. Ya tenemos dónde trabajar; en este
momento salimos sin deuda, pero no tenemos dinero para la boda.
Quiero casarme como Dios manda, honrar al Señor, a mis padres,
a mi familia, a la iglesia y a la sociedad. Sueño con un matrimonio
edénico. ¿Qué me aconseja?
--Bien, muy bien. Tendrás el matrimonio edénico de tus sueños;
207
dinos la fecha y la hora y tus profesores nos haremos cargo del resto.
Efectivamente, nos pusimos en acción. Los colegas, muy
contentos, asumieron las responsabilidades financieras.
En el jardín de mi casa había papiros, dalias y jazmines.
Alistamos el escenario con reflectores fluorescentes, pusimos sillas
en el césped. Los papiros se convirtieron en el altar de la bendición.
El ministro apareció con la Santa Biblia, la novia con sus padres,
el novio con los suyos, y con el trasfondo musical de la orquesta
universitaria se consumó esa boda edénica. Hasta las campanas
del templo repicaron en el momento oportuno.
Exploración
El registro bíblico relata la hermosura impresionante de la
boda original. Dios creó al novio de la arcilla (que es lo que significa
Adán, el arcilloso) a quien le dio la facultad de dar nombre a los
animales. El hombre original no vino del pithecanthropus erectus,
sino directamente de las manos del Creador: hermoso, erecto,
inteligente, con capacidad de amar, hablar y decidir. Toda esta
realidad se desprende de la fórmula: “A imagen y semejanza de
Dios” (véase Génesis 1:26-28)
El novio cumplió su asignación de dar nombre a los animales.
En el lenguaje más arcaico de la humanidad nominó a cebras y
caballos, a elefantes y monos, a cabras y ovejas, en fin, a todos
los animales que desfilaron a su vista. Fue la parada más bella
de la historia. Pero el varón no salía de su asombro al contemplar
las parejas de animales. Sintió una soledad existencial. Para
remediarla, del hombre (ish), el Señor le creó una mujer (ishshah),
una compañera digna y adecuada. “Entonces Dios el Señor hizo que
el hombre cayera en un sueño profundo y, mientras este dormía,
le sacó una costilla y le cerró la herida. De la costilla que le había
quitado al hombre, Dios el Señor hizo una mujer y se la presentó al
hombre” (Génesis 2:21,22).
Con el sueño profundo del hombre se conjugó el sueño
208
de Dios para el matrimonio humano. Faltaba la novia y esta fue

suplida por el Creador. Más resplandeciente que una estrella, más
graciosa que una gacela, más elegante y delicada que una rosa
surgió la novia de los sueños.
Entonces Dios mismo celebró la primera boda de la historia
de la humanidad. Como todavía no había templo ni capilla, la
ceremonia se realizó en el jardín del Edén. Un escenario inolvidable:
delicados pastos de verdor lozano, flores de exquisita fragancia,
fuentes de aguas vivas y riachuelos cristalinos, música selecta de
origen celestial, vuelo de avecillas tiernas y confiadas.
Sin embargo, lo más importante no era el escenario, sino las
características distintivas del sueño de Dios para el matrimonio,
válidas y normativas para toda la humanidad.
1. Un matrimonio bendecido por Dios. El matrimonio es un pacto

sagrado que la pareja celebra delante de Dios. No es un
contrato social, ni una obligación legal. Es todo esto y mucho
más. Es un convenio religioso moral y espiritual delante del
Creador.
2. Un matrimonio monógamo. Como el hombre y la mujer unidos en

matrimonio reflejan la imagen de Dios, la monogamia refleja
el monoteísmo: un solo Dios, aunque haya tres personas
distintas. El primer acto polígamo que registra el Génesis es
el de Lamec (4:19). Triste antecedente de cómo se pueden
romper tan fácilmente los sueños de Dios.
3. Un matrimonio heterosexual. El sexo no es una elección, es una

realidad anatómica y fisiológica establecida por Dios. Hay un
esqueleto masculino, y otro femenino. No hay un tercer tipo
de esqueleto. Los matrimonios “gay” o lesbianos, en el fondo,
son desviaciones del plan original del Creador.
209
4. Un amor imperecedero. . “El amor nunca deja de ser” (1 Corintios
13:8). El amor conyugal debe reflejar el amor divino. “Con
amor eterno te he amado” (Jeremías 31:3). Más fuerte que la
muerte es el amor. La muerte va a morir. Pero el amor, que
en realidad, se origina en Dios (1 Juan 4:7) permanecerá por
toda la eternidad.
5. Un amor interdependiente.“Por eso el hombre deja a su padre y a

su madre, y los dos se funden en un solo ser” (Génesis 2:24).
La interdependencia protege y salva el matrimonio. Eva se
olvidó de este cerco protector y cayó, y con ella su esposo y
la humanidad. La más firme interdependencia es fruto de la
comunión con Dios.
6. La relación sexual como un privilegio exclusivamente matrimonial. Un

solo ser o una sola carne es privilegio única y exclusivamente
del matrimonio. Antes del matrimonio, no. Fuera del
matrimonio, no. Dios juzga estrictamente toda inmoralidad
sexual (Hebreos 13:4)
7. La bendición parental. “Sean fructíferos y multiplíquense”

(Génesis 1:28). Dios colocó el matrimonio como medio
legítimo de procreación. Pro-creación significa colaborar con
el plan del Creador y de la creación.
El respeto fiel a estas siete características asegura que el
sueño divino para el matrimonio humano se cumpla en toda
su dimensión. Toda desgracia humana puede resolverse con
la gracia divina. Pero hablando estrictamente del sueño de
Dios nuestro matrimonio o el de nuestros hijos deben volver
al principio, al matrimonio del Edén.
210
Proyecto de solución
En asuntos de cómo conducir nuestro matrimonio y cómo
orientar a nuestros hijos en su decisión matrimonial, tengamos en
cuenta el modelo que el Señor ha establecido en el Edén el cual fue
confirmado por Jesús en el milagro de las bodas de Caná.
1. Cuando nos alejamos del plan original de Dios y ensayamos los

planes alternativos que ha inventado el hombre, ¿cuánta desgracia
sembramos en el hogar?
2. La presencia permanente de Dios en el hogar puede convertir
nuestro hogar en un refugio seguro del amor conyugal y una garantía
plena de la felicidad de nuestros hijos.
211
tema 2
Jesús y el
matrimonio ideal
“Al tercer día se celebró una

boda en Caná de Galilea, y la
madre de Jesús se encontraba allí”
(Juan 2:1).
Motivación
Así como en el Edén, al final de la creación, Dios estableció
el matrimonio, Jesús bendijo con su presencia una ceremonia
matrimonial.
A los novios o a sus familiares se les ocurrió la feliz idea de
invitar al Señor, a su familia y a sus discípulos. “La madre de Jesús
se encontraba allí” (Juan 2:1). “Después de la fiesta de bodas, Jesús
bajó a Capernaún con su madre, sus hermanos y sus discípulos,
y se quedaron allí unos días” (Juan 2:12). Se trataba de una gran
celebración familiar. Y hubo muchos invitados del pueblo. “Había
allí seis tinajas de piedra, de las que usan los judíos… En cada una
cabían unos cien litros” (versículo 6=). Como se duplicó la provisión,
hubo alrededor de 1200 libros a disposición de los asistentes.
212
Si se hubiese tratado de un vino fermentado y embriagante, el

primer milagro del maestro hubiera sido una tremenda borrachera.
La palabra oinos que aparece en el texto original en griego, puede
traducirse como vino embriagante, pero también como jugo fresco
de uvas. Dios condena el consumo de vino embriagante: “El vino
lleva a la insolencia, y la bebida embriagante al escándalo; nadie
bajo sus efectos se comporta sabiamente” (Proverbios 20:1).
Por otra parte, la Palabra de Dios advierte que los borrachos no
entrarán en el reino de los cielos: “¿No saben que los malvados no
heredarán el reino de Dios? ¡No se dejen engañar! Ni los fornicarios,
ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los sodomitas, ni los pervertidos
sexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los
calumniadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios” (1
Corintios 6:9,10). Por lo tanto, el vino de Caná debe ser entendido
como jugo fresco de uvas.
¿Qué hubiera pasado si Jesús no hubieses estado presente
en las bodas de Caná? La alegría se habría convertido en una
vergüenza pública y una terrible confusión.
Exploración
El primer milagro del ministerio público de Jesús consistió en
respaldar con su presencia la santidad del matrimonio. Las bodas
de Caná reafirman la plena vigencia y validez del matrimonio del
Edén.
Del Edén a Caná

En el Edén, el matrimonio celebrado por Dios culmina la
semana de la creación. En las bodas de Caná santificado por Jesús
se inicia la obra de la redención.
Al tercer día de la semana de la creación, Dios hizo las plantas

(Génesis 1:11-13) que incluye los árboles frutales, los viñedos y las
213
uvas. Al tercer día de su ministerio público en Caná de Galilea, Jesús
celebró las bodas de Caná (Juan 2:1), donde convirtió el agua el jugo
de uvas. Al tercer día Jesús resucitó. Desde entonces, el jugo de las
uvas es un recordatorio del sacrificio de Cristo en la cruz del calvario
que culmina la obra de la redención.
Jesús se refirió al matrimonio del Edén como el único modelo
del imperativo divino.
Cuando los fariseos le preguntaron a Jesús si está permitido

que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier motivo, él les
contestó: No han leído –replicó Jesús- que en el principio el Creador
“los hizo hombre y mujer”, y dijo: “Por eso dejará el hombre a su
padre y a su madre, y se unirá a su esposa, y los dos llegarán a ser
un solo cuerpo”. Así que ya no son dos, sino uno solo. Por tanto, lo
que Dios ha unido, que no lo separe el hombre” (Mateo 19:4-6)
Para que la fiesta del matrimonio no termine en la desgracia

del divorcio, se necesita el poder de Cristo para convertir el agua
común y corriente de la vida en vino, en jugo fresco de uvas. ¿Qué
clase de proceso se requiere para cambiar el agua en vino? Si la
industria vitivinícola descubriera el secreto, la explotaría al máximo.
Pero ni la ciencia, ni la industria tienen la fórmula secreta. Solo
Cristo tiene el poder para realizar el milagro. Solo en Cristo hay
un poder inigualable para mantener vivas las bendiciones del
matrimonio y para alejar el vino amargo yu fermentado del divorcio.
Necesitamos vincular en el matrimonio la idea dela creación
y la de la redención. La creación del matrimonio en el Edén nos
da el poder y la confianza de construir la felicidad del hogar. La
redención del matrimonio, en el primer milagro de Cristo, nos da
la seguridad reconstruir la felicidad perdida. Las aguas comunes
214
se pueden convertir en el vino de la restauración. NO hay problema

tan difícil o complicado que Cristo NO pueda solucionar.
Momentos de meditación
La dulzura del noviazgo suele cambiar en la amargura del
matrimonio. ¿Por qué se enturbia tan fácilmente el agua de nuestra
vida diaria? Pareciera que pasada la ilusión y la novedad de las
bodas, despertáramos a la rutina del egoísmo y del orgullo.
Surgen los rasgos más indeseables de nuestro carácter.
Entonces nos viene bien la invitación del maestro: “Vengan a
mí todos ustedes que están cansados y agobiados, y yo les daré
descanso.
Carguen con mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy apacible

y humilde de corazón y encontrarán descanso para su alma. Porque
mi yugo es suave y mi carga es liviana” (Mateo 11:28-30).
El primero y más urgente de los milagros de Cristo en nuestro
hogar es la transformación de nuestro carácter. Solo así podemos
llegar a ser mansos y humildes de corazón, suaves y apacibles.
Nuestras aguas se habrán convertido en vino celestial. El milagro
es un proceso que dura toda la vida.

Preguntas seleccionadas de los encuentros de orientación
prematrimonial o matrimonial:
1. ¿Cómo se fundamente que el vino no sea el fermentado que
parece tan saludable para asentar la comida?
a. El primer milagro de Jesús no podía ser una gran

borrachera. Esto contradiría la misión docente y
salvadora del Maestro de los maestros.
215
b. El primer milagro, que consistió en convertir el agua
en vino, “fue la primera de sus señales… así reveló
su gloria” (Juan 2:11). La palabra “señal” enfatiza que
detrás del milagro hay un significado más profundo:
el vino es “señal” de la sangre que derramaría en el
Calvario, y al “tercer día” resucitaría. La vitoria sobre
la muerte reveló admirablemente su gloria. La “señal”
se celebra en la Cena del Señor: “Después de cenar,
(Jesús) tomó la copa y dijo: ‘Esta copa es el nuevo
pacto en mi sangre; hagan esto, cada vez que beban
de ella, en memoria de mí. Porque cada vez que comen
este pan y beben (vino) de esta copa, proclaman la
muerte el Señor hasta que él venga” (1 Corintios 11:25).
A ningún ministro, sacerdote o pastor, se le ocurriría
celebrar esta ceremonia con vino fermentado. Sería
una ofensa que quebrantaría el sentido natural del
mensaje del Señor.
c. Si la fiesta de las bodas de Caná ocurrió al final de
otoño del primer año del ministerio público de Jesús, el
vino podía y debía ser jugo fresco de uvas.
d. Los que se empeñan en decir que el vino es saludable y
está respaldado por el primer milagro de Jesús, quieren
justificar su complacencia con una práctica dañina y
que conduce al vicio.
2. ¿En qué se parece el matrimonio del Edén al de Caná de

Galilea?
a. En ambos se revela la naturaleza divina y sagrada del

matrimonio.
b. No se trata de una simple ceremonia civil, social o familiar.
Es una ceremonia religiosa y espiritual de la naturaleza
más solemne y sagrada de la vida humana.
216
c. Jesús reconfirma las características del verdadero y

auténtico matrimonio.
Solo Cristo tiene el poder de convertir las aguas comunes de nuestro
matrimonio en el jugo fresco de sus bendiciones.
217
tema 3
Que los padres sean

verdaderamente
padres
“Tan compasivo es el Señor con

los que le temen
como lo es un padre con sus hijos”
(Salmos 103:13).
Motivación
Dios soñó con un hogar donde los padres sean verdaderamente
padres. Un padre compasivo con sus hijos es la mejor referencia
de lo que es Dios con los suyos. La parábola del hijo pródigo bien
podría llamarse la parábola del padre compasivo. El hijo exige su
herencia sin esperar que muera el progenitor. Abandona su hogar
y malgasta toda su fortuna. En su angustia consigue un empleo
como cuidador de cerdos. “Tanta hambre tenía que hubiera querido
llenarse el estómago con la comida que daba a los cerdos, pero
aun así nadie le daba nada. Por fin recapacitó y se dijo: “¡Cuántos
jornaleros de mi padre tienen comida de sobra, y yo aquí me muero
de hambre!” Tengo que volver a mi padre y decirle: Papá, he pecado
contra el cielo y contra ti. Ya no merezco que me llames tu hijo
trátame como si fuera uno de tus jornaleros’ Así que emprendió el
viaje y se fue a buscar a su padre.
218
“Todavía estaba lejos cuando su padre lo vio y se compadeció

de él; salió corriendo a su encuentro, lo abrazó y lo besó” (Lucas
15:16-20). Durante la penosa ausencia del hijo insolente, el padre
auscultaba el horizonte suspirando por el retorno del hijo amado.
El padre compasivo hizo fiesta. Música alegre y comida abundante
sellaron el conmovedor reencuentro.
Que una madre se olvide del Hijo de su vientre es un absurdo
in extremis. El amor de la madre es la ilustración más próxima al
tierno y compasivo amor de Dios. Podrán secarse los ríos en el
desierto, pero nunca el amor de una madre por sus hijos. Una
madre moribunda se incorporó en su lecho de agonía y tomándonos
la mano de mi esposa y la mía, nos dijo: “Les encomiendo a mi
Juancito”, y murió.
Exploración
Ser padres es el privilegio más honroso, digno y elevado que
Dios concede al matrimonio. Peor cuanto más alto es el privilegio,
más serias son las responsabilidades.
Bendiciones y responsabilidad de la paternidad

Al papá le compete ser el líder espiritual de su hogar. Él es,
en primer lugar, el verdadero sacerdote o pastor de su familia.
“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda ut alma y con
todas tus fuerzas. Grábate en el corazón estas palabras que hoy te
mando. Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas
cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te
acuestes y cuando te levantes” (Deuteronomio 6:5-7). El padre tiene
que madrugar para dirigir el altar familiar e invocar la bendición
matutina para toda su familia. Noes prudente salir de la casa sin
la protección divina. Y al final de la jornada cotidiana, es prudente
y juicioso agradecer por sus misericordias y despedirse antes de
descansar diciendo. “En paz me acuesto y me duerno, porque solo
tú, Señor, me haces vivir confiado” (Salmos 4:8). NO es el último
219
noticiero de televisión el mejor plan para irse a dormir. Dulce es el
sueño del papá trabajador y temeroso de Dios.
El padre es el sustentador y protector de su familia. Como el
sol de las madrugadas, el esposo se levanta decidido a emprender
una nueva jornada: Velar que no falta en la mesa familiar el pan
material y el espiritual. El Señor le concede valor y calor, fuerzas
optimismo, fe y resolución para no volver a casa con las manos
vacías, sino en con el sueldo completo para que se reparta aunque
sea en mil pedazos (ver Salmos 19:5,6)
Dichoso el esposo y padre que come y da de comer a su familia
con lo que gana con sus manos (Salmos 128:2) aun exponiéndose a
mil peligros. Cuando vuelve a casa, si es que vuelve, su gratificación
es dar gracias por todo, por haber vuelto sano y salvo, por la esposa
que lo recibe, por los hijos que van aprendiendo a entonar el himno
al trabajo. La porción más hermosa que tocará, en parte, a cada
hijo será, sin disputa, ese amor al trabajo que el papá ha cultivado
desde la aurora de la juventud hasta el ocaso de la senectud.
El padre es el responsable de la salud familiar. Las tres
grandes fuentes de la salud del hogar son los hábitos físicos
(relacionados con agua, descanso, ejercicio, luz solar, aire libre,
nutrición, temperancia, esperanza y que fácilmente se puede
recordar con el anagrama ADELANTE); los factores psicológicos
como el clima emocional de la familia (amor, seguridad, paz,
tranquilidad, estabilidad, optimismo y otros), y finalmente, los
recursos de la vida espiritual (fe, confianza, consagración, perdón
y otros). El padre debe velar por el equilibrio del bienestar físico,
psicológico y espiritual de la familia. Y, adicionalmente, que no falte
el dinero para los remedios que receta el médico.
No es tarea muy simple ser un verdadero padre delante de
Dios, del hogar y de la sociedad.
Bendiciones y responsabilidades de la madre

La madre es el centro de la afectividad familiar, e la educa-
dora por excelencia de los hijos, la forjadora del carácter de ellos, y
la ennoblecedora del carácter del cónyuge.
220
Dios elogia a la madre buena y responsable en los siguientes

versos:
Mujer ejemplar, ¿dónde se hallará?

¡Es más valiosa que las piedras preciosas!
Su esposo confía plenamente en ella
y no necesita de ganancias mal habidas.
Ella es la fuente de bien, no de mal,
todos los días de su vida.
Anda en busca de lana y lino,
y gustosa trabaja con sus manos.
Es como los barcos mercantes
que traen de muy lejos su alimento.
Se levanta de madrugada,
da de comer a su familia.
Esta mujer, tan elocuentemente elogiada por la inspiración

divina, asume la responsabilidad del magisterio del hogar, la for-
mación y trasmisión de valores (reverencia, respeto, amor, confian-
za, dominio propio y otros), la fundamentación y estructuración de
la conciencia. Como la primera educadora de los hijos, la madre
contemporánea está enfrentando el desafío de hacerse cargo tam-
bién de la educación escolarizada, por lo menos del nivel básico y
primario. Frente a los peligros morales que amenazan aun la vida
de los hijos, se entrena como maestra del novedoso plan de escola-
rización en el hogar.
En el ajuste final de cuentas, de una madre delante de Dios,

el factor determinante no será el estatus social y profesional, el se-
gundo sueldo, los bienes materiales adquiridos, sino que clase de
carácter ha forjado en la vida familiar. El carácter transformado a
imagen y semejanza de Jesús será lo único válido para la salvación
eterna.
221
Cuanto más elevados son los privilegios asignados por Dios
a los padres, más determinantes son sus grandes y trascendentes
responsabilidades.
Ser padres demanda mucho amor abnegado y gran sentido de
responsabilidad.
Se necesita un auxilio más que humano para ejecutar
eficientemente la misión que Dios asigna a los padres.
En resumen, podemos decir que un padre es un buen padre,
cuando cumple sus funciones de líder espiritual en su familia. Y
una madre será buena madre, cuando cumple las funciones de
compañera y madre responsable (Proverbios 31:10-31). Y los hijos
serán buenos hijos, cuando cumplen sus funciones de colaboradores
de sus progenitores, obedientes y sujetos a ellos.
1. ¿Puedo suplicar a Dios que me capacite para actuar como un padre
realmente compasivo con mis hijos?
2. ¿Puedo implorar al Señor que me habilite como madre para ser la
verdadera educadora de mis hijos?
222
tema 4
Dios soñó con una

infancia amada
y segura
“Cuando Adán llegó a la edad de ciento

treinta años, tuvo un hijo a su imagen
y semejanza, y lo llamó Set”
(Génesis 5:3).
Motivación
El hijo es engendrado a imagen y semejanza de su padre sin
dejar de tener, como ser humano, la imagen y semejanza de Dios
(Génesis 1:26,27). Desde Adán todo niño que viene a este mundo
es portador de una doble imagen y semejanza: la divina, como hijo
de Dios, y la humana, como hijo de su padre terrenal. Cada hijo es
un milagro de Dios.
El salmista David expresa su admiración acerca del proceso
de gestación:
Tú creaste mis entrañas;

Me formaste en el vientre de mi madre.
223
¡Te alabo porque soy una creación admirable!
¡Tuis obras son maravillosas
Y esto lo sé muy bien!
Mis huesos no te fueron desconocidos

cuando en lo más recóndito era yo formado,
cuando en lo más profundo de la tierra
era yo entretejido.
Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación:

todo estaba ya escrito en tu libro;
todos mis días se estaban diseñando,
aunque no existía uno solo de ellos.
¡Cuán preciosos, oh Dios, me son

tus pensamientos!
¡Cuán inmensa es la suma de ellos!
(Salmos 139:13-17)
Exploración
Dios soñó con una infancia amada y segura. El Señor dio
instrucciones bien precisas para cuidar a la madre gestante y al
niño desde el vientre de la madre.
“El ángel del Señor se le apareció a ella (la esposa de Manoa)
y le dijo: … cuídate de no beber vino ni otra bebida fuerte, ni
tampoco comas nada impuro, porque concebirás y darás a luz un
hijo” (Jueces 13:3-5). Así ocurrió con los padres de Sansón.
Dios tiene planes bien definidos con cada ser que viene a
este mundo. “Así dice el Señor, el que te hizo, el que te formó en
el seno materno” (Isaías 44:2). “El Señor me llamó antes de que yo
naciera, en el vientre de mi madre pronunció mi nombre” (Isaías
49:1). “Antes de formarte en el vientre, ya te había elegido; antes de
224
que nacieras, ya te había apartado” (Jeremías 1:5). “Dios me había

apartado desde el vientre de mi madre y me llamó por su gracia”
(caso de Pablo, registrado en Gálatas 1:15).
La vida tiene valor y sentido desde antes de nacer. Lo que
ocurrió con Sansón, Isaías, Jeremías y Pablo es válido para todos los
que llegan a este mundo. Por eso la paternidad y la maternidad son
asuntos sumamente delicados, de gran trascendencia y significado
delante del Creador. A veces, ya estando en este mundo, andamos
por caminos extraviados. Pero nuestra responsabilidad como padres
e hijos es preguntarle a Dios: “Señor, ¿qué quieres que haga?”.
De los niños es el reino de los cielos. Esta reiterada
declaración de Cristo (Mateo 18:2; Marcos 9:36; Lucas 9:37) nos
abre el panorama del sueño de Dios para la más tierna infancia.
“Les aseguro, (dice el Señor), que a menos que ustedes cambien
y se vuelvan como niños, no entrarán en el reino de los cielos. Si
alguien hace pecar a un pequeño que cree en mí, más la valdría que
le colgaran al cuello una gran piedra de molino y lo hundieran en lo
profundo del mar” (Mateo 18:3,6)
Pablo nos exhorta: “No sean niños en su modo de pensar.
Sean niños en cuanto a la malicia”. (1Corintios 14:20). Hay que
respetar la inocencia espontánea de los niños.
No hay que perturbarla con la malicia de los adultos.
Ellos tienen derecho al cuidado y a la protección, no al
maltrato ni la agresión.
En la cosmovisión bíblica los hijos son herencia del Señor,

flechas en manos del guerrero, racimos de vida, vástagos de olivo (ver
Salmos 127:3; 128:3). El padre temeroso de Dios tendrá descendientes
que heredarán la tierra (Salmos 25:12,13). “He sido joven y ahora
soy viejo, pero nunca he visto justos en la miseria, ni que sus hijos
mendiguen pan. Prestan siempre con generosidad; sus hijos son una
bendición” (Salmos 37:25,26). “Dichoso el que teme al Señor, el que
halla gran deleite en sus mandamientos. Sus hijos dominarán el país;
225
la descendencia de los justos será bendecida” (Salmos 112:2).
Los padres temerosos de Dios siempre serán muy cuidadoso
de poner en práctica el imperativo divino: “Instruye al niño en el
camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará” (Proverbios
22:6). Sus resultados son temporales y eternos. Dominarán la
tierra y heredarán el cielo. Una infancia bien cuidada rinde frutos
excelentes. A Amram y Jocabed les bastó educar a sus hijos Moisés
durante los doce primeros años de vida para ofrecer un gran líder de
Israel. Él guió a su pueblo hasta las fronteras de la Canaán terrenal,
y estuvo en el monte de la transfiguración como demostración que
habrá resurrección para la vida eterna. “Desde tu niñez conoces
las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria
para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús” (2 Timoteo 3:15).
Nuestros hijos pueden llegar a ser “herederos de Dios, y coherederos
con Cristo, pues si ahora sufrimos con él, también tendremos parte
con él en su gloria” (Romanos 8:16,17). Esta es la recompensa final
del trabajo fiel y abnegado delos padres que velaron por sus hijos
desde la más tierna infancia.
Propuesta de Solución
Si hay instrucciones detalladas y precisas para cuidar a
nuestros hijos desde la gestación, no nos queda otro camino que
una consagración plena a la causa de nuestros hijos.
Velar y orar, llorar y ayunar, y trabajar fervorosamente por
nuestros hijos y hallaremos descanso para nuestras almas.
Ayudemos a nuestros niños desde su más tierna infancia para que
estén completamente preparados para esta vida y la eternidad.
Preguntas seleccionadas de las reuniones de orientación familiar

con los padres:
226
1. ¿Cómo se logra tener una infancia bien segura? Lo peor

sería criar hijos inseguros.
a. Satisfaciendo las necesidades físicas, emocionales y
espirituales de mis hijos desde su más tierna infancia.
b. Que todo lo que haga por mis hijos sea solo fruto del
amor.
c. Creando un clima familiar positivo, evitando crear
miedos de separación divorcios y situaciones
semejantes.
d. Tratando a mi cónyuge con cordialidad y cortesía.
e. Sabiendo pedir perdón por algún descuido que se
comete como esposos o como padres.
2. ¿Cómo se logra tener una infancia bien amada?
a. Cumpliendo las responsabilidades como padre con

calidez, integridad, cariño y energía.
b. Evitando expresiones de fastidio y aburrimiento en el
hogar que puedan crear sentimientos negativos y culposos
en los hijos.
Dios grande, en la hermosura de tu creación te dignaste hacer las flores
para sustentar el rocío. Mis hijos serán el rocío de los prados divinos y se-
rán una bendición para ti, Señor, y para la humanidad. “Nada me produce
más alegría que oír que mi hijo practica la verdad” (3 Juan 4). “La mujer se
salvará siendo madre y permaneciendo con sensatez en la fe, el amor y la
santidad” (1 Timoteo 2:15).
227
tema 5
Dios soñó con una

adolescencia triunfadora
“Padre mío, amigo de mi juventud”
(Jeremías 3:4).
Motivación
Al Señor le complace en sumo grado el trato de “amigo”.
Abraham fue conocido como “Amigo de Dios”, Jesús era “Amigo de
publicanos y pecadores” (Mateo 11:19). Dios es, de manera particular,
amigo de la juventud.
Exploración
Dios siempre ha contado con la adhesión firme y perseverante
de adolescentes y jóvenes de corazón íntegro y sincero.
Los doce años, en la perspectiva divina, constituyen un punto
fronterizo entre la infancia y la adolescencia.
“Los padres de Jesús subían todos los años a Jerusalén para
la fiesta de la Pascua. Cuando cumplió doce años, fueron allá según
era la costumbre. Terminada la fiesta, emprendieron el viaje de
regreso, pero el niño Jesús se había quedado en Jerusalén, sin que
sus padres se dieran cuenta… Al cabo de tres días lo encontraron en
el templo, sentado entre los maestros, escuchándolos y haciéndoles
preguntas. Todos los que le oían se asombraban de su inteligencia
228
y de sus respuestas. Cuando lo vieron sus padres, se quedaron

admirados” (Lucas 2:41-48)
Jesús, a los doce años, es el paradigma de la adolescencia.
Su padres terrenales condujeron diligentemente su infancia. El
fruto de sus esfuerzos lo vieron en el templo.
Otro caso impactante de la historia de Israel es el de Moisés.
“Ya crecido el niño, se lo llevó al a hija del faraón, y ella lo adoptó
como hijo suyo” (Éxodo 2:10). Su infancia estuco a cargo de sus
padres verdaderos –Amram y Jocabed—y en su adolescencia y
juventud pasó a la tutela de la corte faraónica. Sus estudios formales
lo condujeron a las universidades más prestigiosas del antiguo
Egipto. Sin embargo, en su adolescencia y juventud mantuvo su fe
íntegra en Dios. “Por la fe Moisés, ya adulto, renunció a ser llamado
hijo de la hija de Faraón… Consideró que el oprobio por causa del
Mesías era una mayor riqueza que los tesoros de Egipto, porque
tenía la mirada puesta en la recompensa. Por la fe salió de Egipto
sin tenerle miedo a la ira del rey” (hebreos 11:24-27).
Otros adolescentes y jóvenes que consagraron su vida a
Dios a la sociedad desde la aurora de su edad fueron: Isaac quien
frisando los 17 años, no opuso ninguna resistencia a su anciano
padre para ser sacrificado en el monte Moria (ver Génesis 22);
José, quien también alrededor de los 17 años, fue vendido por
sus hermanos (ver Génesis 37:12-36), y propuso en su corazón
mantener su amistad íntima con Dios; “¿Qué más voy a decir? Me
faltaría tiempo para hablar de Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David,
Samuel… los cuales por la fe conquistaron reinos, hicieron justicia
y alcanzaron lo prometido; cerraron bocas de leones, apagaron
la furia de las llamas y escaparon del filo de la espada; sacaron
fuerzas de flaqueza; se mostraron valientes en la guerra y pusieron
en fuga a ejércitos extranjeros” (Hebreos 11:32-34). Toda una galería
de jóvenes extraordinarios a la que se podrían agregar nombres no
menos famosos como los de Daniel y sus amigos (transportados
a Babilonia alrededor de sus 17 años de edad); Jonatán, el amigo
de David; Eliseo, cuando sucedió a Elías; el joven Salomón, cuando
229
sucedió a su anciano padre David. En el Nuevo Testamento aparece
una lista de jóvenes excelentes que vivieron una vida noble e
inspiradora: Juan el discípulos amado de Jesús; Juan el Bautista,
primo de Jesús y precursor del mismo; Juan Marcos, amigo de
Bernabé y autor de uno de los evangelios; Timoteo, creado en el
temor de Dios bajo la tutoría de su abuela Loida y su madre Eunice,
“hijo amado” de Pablo (1 Corintios 4:17; 1 Timoteo 1:2,18); Tito,
“verdadero hijo” de Pablo (Tito 1:4); los jóvenes de Emaús, quienes
tuvieron el privilegio de conversar con Jesús resucitado, y cuando
lo reconocieron, se dijeron entre ellos: “¿NO ardía nuestro corazón
mientras conversaba con nosotros en el camino y nos explicaba las
Escrituras? (Lucas 24:32)
Los jóvenes en la perspectiva divina son un verdadero tesoro.
Exclusivamente para ellos está dedicado el siguiente mensaje:
“Alégrate, joven, en tu juventud;

deja que tu corazón disfrute de la adolescencia.
Sigue los impulsos de tu corazón
y responde al estímulo de tus ojos,
pero toma en cuenta que Dios te juzgará pro todo esto.
Aleja de tu corazón el enojo.
y echa fura de tu ser la maldad,
porque confiar en la juventud
y en la flor de la vida es un absurdo.
Acuérdate de tu Creador
en los días de tu juventud,
antes que lleguen los días malos
y vengan los años en que digas:
“No encuentro en ellos placer alguno”
Acuérdate de tu Creador
antes que se rompa el cordón de plata
y se quiebre la vasija de oro”….
(Sabio Salomón, Eclesiastés 11:9, 10; 12:1,6).
230
El Señor elogia y a la vez exhorta a los adolescentes y a los

jóvenes. Cuando los jóvenes son dóciles a la voluntad de Dios,
logran realizar lo increíble.
Infelizmente hubo jóvenes llamados a ser luminarias en el
firmamento de Dios que perdieron el rumbo de su vida. El joven
Sansón no tenía por qué haber perdido los ojos. Una vida sexual
desordenada lo llevó a la ruina (Jueves 13-16). Veintitrés mil jóvenes
perdieron la vida en Baal Peor, justo en las fronteras de la Canaán
terrenal. Cayeron también en la inmoralidad sexual (Números 25).
Cuando Roboam sucedió en el trono a Salomón, Jeroboam e Israel
se presentaron solicitando alivio debido a las exigencias del trabajo
forzado que habían padecido durante los últimos años de Salomón.
Roboam pidió consejo a los ancianos. Ellos recomendaron ser
comprensivos con la petición. Luego pidió la opinión de los jóvenes.
Estos temerariamente recomendaron ser drásticos con semejante
solicitud. Roboam siguió la recomendación de los jóvenes. Entonces
se selló la división del reino: Judá a Israel. Un desastre histórico por
privilegiar a una juventud impulsiva e inexperta, y subestimar la
prudencia de la senectud.
Propuesta de Solución
Si Dios puso su fe y confianza en los adolescentes y los jóve-
nes, como padres e hijos debemos sintonizar nuestros propósitos
con los de Dios.
El Señor es el gran amigo de los jóvenes. Esta relación es la
mejor plataforma para realizar los sueños y propósitos del Creador.
Consejos de Dios para una adolescencia triunfadora
3. “Qué nadie te menosprecie pro ser joven. Al contrario, que los
creyentes vean en ti un ejemplo a seguir en la manera de hablar,
en la conducta, y en amor, fe y pureza” (1 Timoteo 4:12)
4. “Alégrate, joven, en tu juventud; deja que tu corazón disfrute de
la adolescencia. Sigue los impulsos de tu corazón y responde al
231
estímulo de tus ojos, pero toma en cuenta que Dios te juzgará
pro todo esto. Aleja de tu corazón el enojo, y echa fuera de tu
ser la maldad, porque confiar en la juventud y en la flor de la
vida es un absurdo” (Eclesiastés 11:9,10)
5. “Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes
que lleguen los días malos y vengan los años en que digas: No
encuentro en ellos placer alguno” (Eclesiastés 12:1)
6. “Acuérdate de tu Creador
Antes que se rompa el cordón de plata

Y se quiebre la vasija de oro,
Y se estrelle el cántaro contra la fuente
Y se haga pedazos la polea del pozo” (Eclesiastés 12:6)
1. Como padres debemos ver a nuestros hijos como Dios los mira.
2. La adolescencia y juventud conforman la edad de oro para una vida
de servicio abnegado, fervoroso, entusiasta que son características
notables de la juventud.
3. Los riesgos de la inexperiencia juvenil no pueden ser ignorados. Hay
que acompañarlos especialmente en su itinerario con el Señor.
232
tema 6
Dios tiene un
sueño para
tu hogar
“Mis caminos y mis pensamientos
Son más altos que los de ustedes”
(Isaías 55:9).
Motivación
Dios soñó con darnos un hogar para construir o reconstruir la
felicidad en esta tierra.
En mi niñez trepaba con mis amigos les cerros más altos

que rodeaban mi pueblo, pensando que podríamos llegar a tocar
el hermoso cielo azul. Creíamos que el horizonte donde se
encontraban el cielo con la tierra estaría al alcance de nuestras
manos. Cuando finalmente llegábamos a la cumbre, descubríamos
nuevas alturas del cielo azul.
Así con los caminos y los pensamientos del Señor, ¡más altos
que los cielos sobre la tierra! Cuánto más ascendemos a las cumbres
de las más elevadas montañas, descubrimos nuevas dimensiones
de la inmensidad de los sueños de Dios.
233
Exploración
Los sueños de Dios, asombrosos y admirables, se registran
fielmente en las Sagradas Escrituras. En la Biblia se junta el cielo
con la tierra. Cuánto más lo estudiamos, nuevos rayos de luz
aparecen en el horizonte.
Detengámonos en cinco sueños de Dios para la familia
humana.
1. Dios soñó que la familia humana refleje la imagen y semejanza de

la familia divina.
“Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza…

y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de
Dios. Hombre y mujer los creó” (Génesis 1:27). “Hagamos”
revela una realidad plural de la Deidad. Esta pluralidad se
identifica con tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo
(mateo 28:19; ver también Mateo 3:16,17; Juan 14). Pero no
son tres dioses, sino enfáticamente un solo Dios: “Escucha,
Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor” (Deuteronomio
6:4). “Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios
y los hombres, Jesucristo hombre” (1 Timoteo 2:5). Entonces
percibimos que hay una realidad triunitaria en la familia
de la Deidad. La triunidad de la familia divina es un gran
misterio. “No hay duda de que es grande el misterio de la
fe” (1 Timoteo 3:16) y se refiere a la encarnación del Hijo,
por voluntad del Padre y acción del Espíritu Santo. Este es el
primer megamisterio de que habla la Biblia. Tres personas
distintas, un solo Dios verdadero, unido en el vínculo del
amor eterno. “Dios es amor” (1 Juan 4:8,16). Aquí puede
estar la clave para entender la imagen y semejanza de Dios.
234
El segundo megamisterio del cual habla la Biblia es el de

matrimonio. “Por esto dejará el hombre a su padre y a su
madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne:
Grande es este misterio” (Efesios 5:31,32, RV 60). En el griego
popular que se usa en el Nuevo Testamento es megamisterio.
Entonces, podemos ver el matrimonio como una realidad
triunitaria: el esposo, la esposa, unidos en amor a Dios.
Cuando el matrimonio humano refleja la imagen y semejanza

de la familia divina, podemos confirmar que solo el amor de
Dios nos da fuerza y constancia para construir o reconstruir
la felicidad de nuestro hogar.
2. Dios sueña que tu hogar sea un centro de salvación para la vida

presente y para la eternidad.
Nuestros hijos son herencia de Dios (Salmos 127:3). AL

engendrarlos asumimos la responsabilidad de velar por
ellos para que se preparen adecuadamente y se defiendan
exitosamente en este mundo y estén listos para la salvación
eterna ofrecida por Dios. “He aquí yo y los hijos que Dios
me dio” (Hebreos 2:13). “El Señor tu Dios marcha al frente
y peleará por ustedes” (Deuteronomio 1:30). Como padres
no estamos solos. EL Señor mismo ofrece estar a nuestro
lado. “Nada me produce más alegría que oír que mis hijos
practican la verdad” (3 Juan 4).
Como padres amamos entrañablemente a nuestros hijos y
queremos verlos triunfar en esta vida y en la eternidad. Pero
el Señor los ama muchísimo más y Él quiere que padres e
hijos, juntos, alcancen la eterna redención.
3. Dios sueña que tu hogar sea un recinto sagrado. El hogar, en

el ideal de Dios, es una pequeña manada (Lucas 12:32), una
235
hermosa grey (Jeremías 13:20). Al padre coloca Dios como
un ministro, sacerdote o pastor. Ocupa un lugar de mucha
responsabilidad. Su deber es dar fiel orientación espiritual a
toda su familia en forma diaria, al levantarse y al acostarse
(ver Deuteronomio 6:1-2). Junto con el liderazgo espiritual
del padre está la misión docente de la madre. En el recinto
sagrado del hogar ella vela por la fiel instrucción de los
hijos, como hizo María, paradigma excelente de una madre
responsable (Lucas 2:48-52)
4. Dios sueña que tu hogar sea un centro misionero, preparado para

servir a Dios y a la humanidad.
La historia bíblica enfatiza la bendición de Dios sobre los

padres y su descendencia, la consagración de padres e
hijos. En el caso de Aarón fueron dedicados él y sus cuatro
hijos (ver Levítico 8). Infelizmente dos salieron mal (Nadab
y Abiú); en cambio, los otros dos salieron bien (Eleazar e
Itamar). No siempre ocurre lo mejor, pero a los padres que
sintonizan¿ sus sueños con los de Dios, les dice: “Persevera;
bástate mi gracia”. No nos cansemos de hacer el bien. La
mayor recompensa de los padres es ver a sus hijos viviendo
para servir. De los hogares misioneros salen los mejores
misioneros. La mejor metodología es el modelaje.
5. Dios sueña que tengamos un lugar especial en el hogar de los

redimidos.
La más hermosa promesa que Jesús nos dejó antes de

ascender a los cielos la registró Juan, el discípulo amado:
“No se angustien.
Confíen en Dios, y confíen también en mí.
En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas;
236
si no fuera así, ya se lo habría dicho a ustedes.

Voy a prepararles un lugar.
Y si me voy y se lo preparo,
vendré para llevármelos conmigo.
Así ustedes estarán donde yo esté.
“Ustedes ya conocen el camino
para ir adonde yo voy”.
(Juan 14:1-3)
Juntemos nuestros sueños con los sueños de Dios para la
familia humana.
Dios sueña que el centro de tu hogar sea su Hijo amado
Jesucristo. Él es el único mediador entre Dios y los hombres (1
Timoteo 2:5), entre el cielo y la tierra. Lo que para el hombre es
imposible, para Dios es posible.
Dios sueña que en el mejor lugar de tu casa esté el altar
familiar con la televisión celestial de los 66 canales, cablevisión
operada por los agentes de Dios (La Biblia)
Dios sueña que tu casa sea casa de Dios y puerta del
cielo. Dios sueña que tu casa sea casa de oración, paz, perdón y
reconciliación.
Dios sueña que te desarrolles como persona, alcances tus
objetivos en la vida y que sea feliz en este mundo y bien dispuesto
para esperarlo en las nubes de los cielos.
1. Dios sueña que el hogar cristiano sea un reflejo del hogar celestial.
2. Señor, permite que nuestro hogar terrenal sea una preparación para
el hogar celestial.
237
tema 7
De aquí a
la eternidad
“Y todo lo hizo hermoso en su tiempo;

y ha puesto eternidad en el corazón
de ellos”
(Sabio Salomón, Eclesiastés
3:11, RV 60).
Motivación
Agradecemos profundamente al Señor nuestro Dios porque
nos ha regalado 57, años de casados. El primer año celebramos las
bodas de papel; el décimo, de aluminio; el vigésimo, de porcelana;
trigésimo, de perla; el cuadragésimo, de rubí. Veinte años servimos
como docentes en el Perú y treinta, en el extranjero.
No sabemos cuántos aniversarios más nos permitirá celebrar
nuestro bondadoso Padre celestial. Por la gracia de Dios, en las
bodas de rubí nos encontrábamos en Michigan, Estados Unidos,
nuestros tres hijos con sus respectivos cónyuges y nuestros cuatro
nietos. Los hijos nos llevaron a un hermoso hotel residencial en
Niles. De pronto, toda la familia cupo en el ascensor, y mientras
ascendíamos, dijimos: Así quisiéramos estar juntos cuando venga
Jesús en las nubes de los cielos, y todos, como familia, podamos
ascender al cielo con Jesús. Entonces, la mejor celebración sería la
de las bodas celestiales.
238
Frente a estas, empalidecerían las de diamante, a los sesenta

años de casados; las de brillantes, a los setenta y cinco; las de roble,
a los ochenta; las de granito, a los noventa; y las de hueso, a los
cien.
Lo importante es que avancemos de aquí a la eternidad. Es
el salto cualitativo más extraordinario que puede dar la humanidad
redimida. Fue emociónate contemplar el primer salto del hombre
en la luna. Pero el primer salto del ser humano en el cielo será
glorioso.
Exploración
Siempre ha preocupado a la humanidad, ¿cómo será la vida

eterna? ¿Cómo será la vida familiar en la eternidad? ¿Hay noción de
tiempo en la eternidad, es decir, habrá días, semanas, meses, años,
estaciones en la eternidad? Estas y muchas preguntas similares se
dirigen hacia la vida futura, más allá de la vida presente, más allá
de la muerte. ¿Podremos romperá las barreras del “non plus ultra”?
El texto de Eclesiastés 3:11 nos abre el camión para explorar

el sentido final de la vida. En todo el libro de Eclesiastés se declara
que la vida es solo vanidad de vanidades. “Lo más absurdo de lo
absurdo –dice el Maestro-, lo más absurdo de lo absurdo es que,
¡todo es un absurdo! ¿Qué provecho saca el hombre de tanto
afanarse en esta vida?” (Eclesiastés 1:2,3). Esta expresión “lo más
absurdo de lo absurdo”, o “vanidad de vanidades” se repite 35 veces
en este libro escrito por Salomón en su senectud.
Los sinónimos de vanidad son lo absurdo, la frustración,

la futilidad, el sinsentido. Así es la vida, llena de frustraciones,
fracasos y futilidades. La última mención está en relación la muerte.
“Volverá entonces el polvo a la tierra, como antes fue, y el espíritu
volverá a Dios, que es quien lo dio. Lo más absurdo de lo absurdo,
¡todo es un absurdo!” (Eclesiastés 12:7,8)
239
Pareciera que el viejo Salomón está tan decepcionado de la
vida que la describe como vana y absurda. La palabra en el texto
hebreo es hevel, literalmente “un vapor que pasa”, una metáfora
muy similar a otras que resalta la transitoriedad de la existencia:
“¿No son nuestros días como los de un asalariado?” (Job 7:1)

“Mis días se van más veloces que una lanzadera” (Job 7:6)
“Mi vida es un suspiro” (Job 7:7)
“Como nubes que se diluyen y se pierden, los que bajan al
sepulcro ya no vuelven a subir, nunca más regresan a su casa;
desaparecen de su lugar” (Job 7:9,10)
“Nuestros días en este mundo son como una sombra” (Job
8:9). “¿Acaso mis contados días no llegan ya a su fin? Déjame
disfrutar de un momento de alegría antes de mi partida sin regreso”
(Job 10: 20,21)
Pero el viejo Salomón no se ocupa solo de la fugacidad de la
vida presente, sino también de la vida verdadera, de la imperecedera,
que depende única y exclusivamente del Dios soberano, del autor
de la vida.
“Dios hizo todo hermoso en su tiempo” (Eclesiastés 3:11).

Dios soñó con el hogar del Edén como morada permanente de la
familia humana: una casa rural con toda clase de árboles hermosos
que daban frutos buenos y apetecibles, el árbol de la vida para
garantizar la perpetuidad de la existencia, fuentes naturales de
aguas cristalinas con toda clase de piedras preciosas a sus orillas
(ver Génesis 2:8-12)
El jardín del Edén debía ser la casa modelo para poblar la
tierra. Lamentablemente ingresó en el corazón humano la necia
futilidad del pecado absurdo. Se perdió el Edén. El sueño original
de Dios quedó roto, pero no anulado. Después de la historia del
pecado el Señor restaurará el Edén.
240
El pecado es temporal: empezó y será desarraigado; pero

el amor de Dios es eterno. Por amor a la humanidad redimida
el Seño hará cielos nuevos y tierra nueva, la Nueva Jerusalén
descenderá del cielo, “procedente de Dios preparada como una
novia hermosamente vestida para su prometido” (Apocalipsis 21:2).
En el último capítulo de la Biblia se ofrecen vislumbres
gloriosas del nuevo Edén que tenía un río de agua de vida: “A cada
lado del río estaba el árbol de la vida… y las hojas del árbol son
para la salud de las naciones. Ya no había maldición” (Apocalipsis
22:2,3). Lo que no se cumplió con el primer Edén, se completará
con el segundo. El Edén perdido será el Edén recuperado.
Dios “puso en la mente humana el sentido del tiempo”

(Eclesiastés 3:11). Esta expresión “sentido del tiempo” corresponde
a la palabra original hebrea olam, que se traduce en griego como
aion, “para siempre”, “por los siglos”, “eternidad”, “perpetuidad”.
Entonces el mensaje de Eclesiastés 3:11 es que Dios ha puesto en
la mente o el corazón del ser humano un sentido de eternidad. No
todo en la vida es pura vanidad transitoria y fugaz. La vida también
es una oportunidad para alcanzar la eternidad.
Resolución del problema
Si nuestra vida presente es la única oportunidad para

alcanzar la eternidad vivíamos en nuestro hogar en familia como
verdaderos hijos de Dios.
241
Vislumbres de la eternidad
Se alegrarán el desierto y el sequedal;

se regocijará el desierto
y florecerá como el azafrán.
Florecerá y se regocijará:
¡gritará de alegría!
Se le dará la gloria del Líbano,
y el esplendor del Carmelo y de Sarón.
Ellos verán la gloria del Señor,
el esplendor de nuestro Dios…
Se abrirán entonces los ojos de los ciegos
y se destaparán los oídos de los sordos;
saltará el cojo como un ciervo,
y gritará de alegría la lengua del mundo.
Porque aguas brotarán en el desierto,
y torrentes en el sequedal.
La arena ardiente se convertirá en estanque,
La tierra sedienta en manantiales
Burbujeantes.
Las guaridas donde se tendías los chacales,
Serán moradas de juncos y papiros.
(Isaías 35:1,2,5-7)
1. Lo mejor está por llegar. “Amén ¡Ven, Señor Jesus!”
2. Nuestra vida terrenal es una oportunidad para ganar la eternidad.
Pensemos en esta hermoza realidad.
242
Bibliografía recomendada
Santa Biblia (1999). Nueva Versión Internacional. Miami,
El hogar original se encuentra en Génesis 1 y 2. Estos

capítulos muestran el fundamento bíblico de lo que fue el
paradigma divino para la familia humana. Todo se trastornó
con la entrada del pecado en el mundo. Se perdió el Edén y
el mundo de felicidad permanente. Desde Génesis 3 hasta
Apocalipsis 20 se da cuenta de la historia de la humanidad.
El Edén restaurado que es el destino final de la humanidad se
halla en Apocalipsis 21 y 22. El paradigma divino fue mellado
por la historia del pecado, pero no anulado. Siempre ha
existido la fe y la esperanza de un mundo distinto y mejor.
Esta es la visión que se brinda en la Biblia.
El sueño de Dios para la familia humana permanece vigente
para nuestros días. La visión es clara. Falta que cumplamos
con la misión de preparar a un pueblo bien dispuesto para la
venida del Señor (Mal. 4:4-6; Luc. 1:17).
White, Elena (2007). El conflicto de los siglos. Buenos

Aires, Asociación Casa Editora Sudamericana.
La historia de la humanidad está en su etapa culminante.

Toda la gente, cultos e incultos, pobres y ricos, todo sin
excepción hablan de una crisis final. Vivimos entre la
angustia y la esperanza. Ante esta encrucijada, la presente
243
obra expone una respuesta autorizada para dar luz ante la
confusión.
Desde la perspectiva de la familia, resulta importante

contrastar el sueño del ser humano con el de Dios. Finalmente
prevalecerá el paradigma divino. El Señor ha instalado el
sentido de eternidad en el corazón del hombre (Ecl. 3:11). La
vida presente es apenas el inicio de lo que será la eternidad.
La vida sin trascendencia eterna se pierde en la oscuridad
del vacío.
Del Pozo Moras, Luis Alberto (2005). Hacia una escuela
para padres. Fundamentos para capacitar a los padres
como educadores familiares. Montemorelos. Nuevo León,
México: Publicaciones Universidad de Montemorelos.
El autor, docente de la Universidad Peruana Unión y de

la Universidad de Montemorelos, ha sido un promotor
entusiasta de la escuela de padres. En este texto presenta los
fundamentos bíblicos y teológicos del matrimonio y la familia.
La escuela de padres: un imperativo divino, el bibliocentrismo
de la escuela de padres, la revelación del Padre celestial, de
Cristo y del Espíritu Santo en el hogar, la obra de los ángeles,
la realidad de la persona humana, la realidad del pecado, el
hogar como centro de salvación, el hogar como una pequeña
grey, la misión del hogar y la escatología y la familia.
Maldonado, Jorge, ed. (1995). Fundamentos bíblico-

teológicos del matrimonio y la familia. Grand Rapids,
Michigan.
244
Una discusión de especialistas en vida familiar. Su

presentación es evangélica e interconfesional. Pone énfasis
en la naturaleza de la persona y la sociedad y como la imagen
y semejanza de Dios se da no solo en el plano personal, sino
también en la relación conyugal. Abre las puertas a una
consideración bíblica soteriológica y eclesiológica. Es un
poco débil en la perspectiva escatológica.
Melgosa, J. (2008), Para la pareja, una relación estable

para toda la vida. Madrid, Ed. Safeliz.
Una reflexión cristiana de los fundamentos de la vida familiar.
Miranda, José Miguel (2006). Tres para el matrimonio.

Bogotá: Ed. San Pablo.
Cómo aproximarse al ministerio triunitario de la familia

cristiana.
Rock, Calvin (2008). El matrimonio y la familia, en

Fundamentos bíblicos de nuestra fe. México: Gema
Editores, AsociaciónPublicadora Interamericana, t. 7, pp. 41-
95 (9 t.).
Una teología del matrimonio desde la perspectiva de los

adventistas del séptimo día. Según el autor, “cómo las
estructuras familiares de los días de la Biblia fueron con
frecuencia distorsiones del plan original de Dios, uno no
puede tomar todas las familias de la Biblia como modelo. Es
necesario diferenciar los absolutos del propósito divino, y las
aproximaciones relativas que se desarrollaron después del
pecado. No obstante, la persona que estudia con devoción los
principios de la Escritura en cuanto a la familia encontrarán
una guía pertinente y eficaz”. (Rock, 41, 42)
245
Hoja de refuerzo de
aprendizaje, 5
1. El matrimonio que Dios soñó es mo-
nogámico y heterosexual
si no
2. Las enseñanzas de Jesús acerca del

matrimonio y la familia son la más si no
alta fuente de consejería
3. Los padres y las madres de las

familias contemporáneas deben
cumplir funciones iguales e
si no
igualitarias
4. Dios nos va a pedir cuenta de los

hijos que nos dio
si no
5. El adolescente puede hacer lo que

quiera, pero Dios lleva la cuenta de si no
sus decisiones
6. Dios nos propone modelos de vida

familiar difíciles o imposibles de si no
cumplir
7. Las personas que no se casan son

incompletas si no
8. Los hogares actuales pueden y

deben ser una buena preparación si no
para el hogar de los redimidos
1.sí 2. sí 3. no 4. sí 5. sí 6. no 7. no 8. sí
246
(Para todos)
Yo, ……………………………........................................………….
con la gracia de Dios y mi esfuerzo personal me comprometo a luchar

para que el sueño de Dios para mi vida personal y familiar se cumpla
fielmente en mi caso.
Por sobre todas las cosas, prometo prepararme para ejercer mi vida fa-
miliar en esta tierra y para ser participante de las bendiciones del hogar
de los redimidos.
...................................... .....................................
Fecha Firma
247
Florilegio de poemas en honor al Autor de la vida y del matrimonio
Selección de Esther G. de del Pozo
¡La alegría de dar!

¿Olvidaste el reír?
¿Aprendiste a llorar?
Será que no conoces la alegría de dar…
Podemos con tan poco disipar el sufrir,
Y empezar nuevamente a aprender a reír…
¡Ah, sí tú conocieras la alegría de dar!
Mira, es la forma más hermosa
de amar que reciben los otros.
Ser la fuente generosa para que todas puedan beber:
reconocerse agua y darse sin pensar,
pues las almas son como plantas,
a las que hay que regar.
Benditos y felices los que logren decir:
“Hoy me he dado todo”
…merecen la dicha de vivir.

¡Tanto se puede dar! ¡Tanto se puede
A ese niño que pasa, tú lo puedes querer,
a la mujer que sufre la alienta tu reír,
al hombre que trabaja lo anima tu cantar.
y tú puedes cantar y reír y querer.
¿Ves que fácil tarea?...
Sí, la puedes hacer…
Olvida tu sufrir y olvida tu llorar:
¡Regálate a ti mismo la alegría de dar!
Isabel Reyes Carrillo
248
El placer de servir
Toda la naturaleza es un anhelo de servicio;
sirve la nube, sirve el aire, sirve el surco.
Donde haya un árbol que plantar, plántalo tú;
donde haya un error que enmendar, enmiéndalo tú;
donde haya un esfuerzo que todos esquiven, acéptalo tú.
Sé el que aparta la piedra del camino, sé el que aparte el odio
entre los corazones
y las dificultades del problema.
Existe la alegría de ser sano y de ser justo; pero hay, sobre todo,
la hermosa, la inmensa alegría de servir.
¡Qué triste sería el mundo si todo en él estuviera hecho,
si no hubiera un rosal que plantar, una empresa que acometer!
Que no te atraigan solamente los trabajos fáciles:

¡Es tan bello hacer lo que otros esquivan!
Pero no caigas en el error de que sólo se hace mérito
con los grandes trabajos; hay pequeños servicios
que son buenos servicios: Adornar una mesa, ordenar unos libros,
peinar una niña.
Aquél es el que critica, éste es el que destruye, sé tú el que sirve.
Gabriela Mistral
249
Gracias, señor
Gracias, Señor, por el suave perfume de las rosas,
por el aire que mece la palmera,
por la lluvia que cae en la prader a
donde vuelan las alegres mariposas
desplegando su color.
Gracias, Señor.
Por las flores que arreglan el camino,

por la promesa de un hermoso cielo,
por el agua que cae en el riachuelo,
donde apagan su sed los peregrinos
que te alaban con amor.
Gracias, Señor.
Por los pájaros el canto,

por los verdes bosques y collados,
por venir a lavar nuestros pecados
con la sangre de tu cuerpo santo.
Gracias, Señor.
Por el hogar, por la familia,

por los triunfos y los fracasos.
Gracias, muchas gracias, Señor.
Roberto Blandón
250
Servir
Solo tengo una vida, una vida nomás.
¿En qué habré de emplearla,
en odiar o en amar?
Odio, ya hay bastante en el mundo,
bastante rencor:
¿Por qué habré de emplearlo
si lo que falta es amor,
mucho amor?
Si alguno me ofende,
si alguno procura mi mal,
hay al menos algo que no puede causarme
y es hacerme odiar.
Si tan solo pienso en el bien de los otros

y me olvido de mí,
no hay ninguna ofensa que me pueda herir.
La vida es tan corta

y hay tanto de bueno que hacer,
que no tengo tiempo sino para amar.
La vida es tan breve

que hay tanto de bueno que hacer,
que no tengo tiempo
sino para ayudar y servir.
Yo no quiero riquezas
ni gloria ni poder para mí.
Solo quiero el placer
de poder amar, ayudar y servir.
Gonzalo Báez Camargo, mexicano.
251
Manos de cristo
Manos de Cristo, manos de carpintero,
yo no imagino aquellas manos forjando lanzas, forjando espadas,
ni diseñando nuevos modelos de bombarderos,
aquellas manos, manos de Cristo,
fueron las manos de un carpintero.
Manos de Cristo encallecidas

labrando cunas, haciendo arados, labrando vidas,
yo no imagino aquellas manos
entretenidas entre cañones, entre granadas.
Aquellas manos encallecidas
se encallecieron labrando vidas.
Manos de Cristo, manos divinas de carpintero,

yo no imagino aquellas manos
brutalizando tareas humanas
sino forjando labor creadora.
Aquellas manos, manos de obrero
edificaron hora tras hora.
Entre las manos febriscitantes

que hacen cruceros y bombarderos
¡no están las suyas!
Las suyas llevan marcas de clavos,
son manos heroicas de sacrificio.
Aquellas manos, manos sangrantes,
fuertes, nervudas, manos de acero
son manos recias de carpintero
que quietamente labran nuestras vidas.
Francisco E. Estrello, español
252
Epílogo
Comentario acerca de la primera edición
El libro La familia que yo soñé del doctor Luis Alberto del

Pozo, se editó en Lima a fines del año pasado (2016) y en breve lapso
no quedó un ejemplar para la venta. Su singular éxito se explica por
la riqueza de su contenido, la hondura de su análisis, el acierto de
sus sugerencias y el certero enfoque desde la perspectiva de los
valores cristianos. Todo ello dentro de un lenguaje transparente,
didáctico y sumamente ameno.
El autor y su esposa Esther (coautora del libro) subrayan
desde el prólogo que el matrimonio y el hogar están sumergidos
en una crisis deplorable: parejas que se juntan pero subestiman la
necesidad de casarse por la ley civil y por la iglesia; el crecimiento
alarmante de embarazos en adolescentes; la explotación del
meretricio juvenil y hasta infantil; los hogares que en lugar de ser
pedazos de cielo se convierten el rincones del infierno; la oleada de
matrimonios que terminan estallando en los arrecifes y acantilados
del divorcio, el abandono indolente que sufren los abuelos. Y en
otro párrafo aluden así mismo a la increíble pretensión de algunos
grupos que buscan otorgar estatuto de hogar y de matrimonio
a relaciones que, por decoro, necesitan del eufemismo para ser
nombradas.
El libro analiza el hogar y el matrimonio desde la óptica del
253
amor y de la cordura. “El amor no es un juego de ilusiones”, dicen
los autores, “es una decisión de consecuencias muy serias para esta
vida e incluso para la eternidad”. Por eso aconsejan a los jóvenes
casaderos tomar conciencia plena de que el acierto o el desacierto
en la elección del futuro cónyuge gravitarán inexorablemente en
su futuro para bien o para mal. Y, además, desarrollan sugerencias
muy sensatas con respecto a que deben valorarse los atributos
que determinan la calidad humana de una persona y que son
permanentes, pues el tiempo no los deteriora como ocurre con lo
meramente físico. Señalan también la conveniencia de considerar
la mayor cantidad de similitudes: religión, formación hogareña,
gustos, sensibilidad, y no dejarse llevar por lo superfluo, vanidoso,
frívolo.
Pero también analizan aquellas diferencias entre la mujer y
el varón que –lejos de ser motivos de divergencia- son más bien
factores de atracción, rasgos del otro sexo que nos fascinan. Ilustran
este punto con los recordados versos de Víctor Hugo (que son exactos
en lo referente a las virtudes femeninas, aunque los atributos del
varón se exageren algo con hipérboles propias del romanticismo).
Dice Hugo: El hombre es la más elevada de las criaturas. La mujer
es el más sublime de los ideales. El hombre es el cerebro. La mujer
es el corazón. El cerebro fabrica la Luz; el corazón produce el Amor.
La Luz fecunda, el Amor resucita. El hombre es un genio, la mujer,
un Ángel. El hombre es fuerte por la Razón; la mujer es invencible
por las lágrimas. El hombre es un código; la mujer, un Evangelio. El
código corrige; el evangelio perfecciona. El hombre piensa; la mujer
sueña. El hombre está colocado donde termina la tierra; la mujer,
254
donde comienza el cielo.

Un estudio atento de los convincentes argumentos que
La familia que yo soñé expone, así como los casos ilustrativos
que acompañan sus reflexiones, nos muestran que la causa más
recóndita pero también la más gravitante en esta crisis, proviene de
la falta de espiritualidad, del creciente materialismo, y de la cada
vez más generalizada amoralidad que subrepticiamente ha ido
ganando terreno bajo el antifaz de “liberalismo”. En nuestros días
cualquier tendencia o práctica, por aberrantes que sean, reclaman
carta de ciudadanía bajo el antifaz de “ideología”, o de “rasgo
cultural” o de apertura a la llamada “posmodernidad”.
Y este fenómeno se agrava porque sus efectos sobre las
nuevas generaciones son terriblemente nocivos. La desatención o la
excesiva permisividad con los hijos determinan que estos, sin haber
logrado aún la madurez necesaria, tomen decisiones irreflexivas que
más tarde nublan su vida de amargura, desorientación y dolorosas
frustraciones.
En síntesis, el libro que comentamos contiene esclarecedores
consejos para el noviazgo, el matrimonio, la crianza, educación y
orientación de los hijos en las diversas etapas de su vida, desde la
infancia hasta su juventud. Potencian el valor estético y humano
de estas páginas la certera inserción de poemas de Amado Nervo,
Rubén Darío, Gabriela Mistral, San Francisco de Asís, Isabel Reyes
Carrillo, Gonzalo Báez Camargo, Roberto Blandón, Francisco Estrello,
Agustín Ruíz, Margot Guezúgara. Y la hondura de sus reflexiones y
consejos se enriquecen con esclarecedores citas de Eclesiastés, los
Proverbios, El Cantar de los cantares, los Evangelios y otros textos
255
del Antiguo Testamento.
El libro recoge el bagaje de experiencias que Luis del Pozo y
su esposa han vivido durante más de cinco décadas analizando el
tema de la familia a lo largo del continente, desde Michigan hasta
Buenos Aires.
Doctor Luis Rivas Rivas, docente de la

Universidad Santo Toribio de Mogrovejo,
Sede Chiclayo
256

La Famila Que Dios Soñó Dr. Luis Alberto Del Pozo M. 054739

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Luis Alberto del Pozo y Esther G.

Luis Alberto del Pozo

Universidad Peruana Unión

Impreso en la Universidad Peruana Unión

Hecho depósito legal en la Biblioteca Nacional del Perú N° 2016-16963

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8. Dios es el autor y diseñador del si no

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1. El hogar es una microempresa. Siguiendo el modelo de