Narrador: Érase una vez una ratita muy coqueta y presumida
que un día, barriendo la puerta de su casa, se encontró una moneda
de oro.
Ratita: - ¡Qué suerte la mía! -dijo la ratita, y se puso a pensar-:
¿En qué me gastaré la moneda? La gastaré, la gastaré, ¡En caramelos y gomitas! No no… que harán daño a mis dientes. La gastaré, la gastaré, ya sé, la gastaré en ¡bizcochos y tartas muy ricas!! No no… que me darán dolor de tripa. La gastaré, la gastaré… ya sé, la gastaré en ¡un gran y hermoso lazo de color rojo! Con su moneda de oro la ratita se fue a comprar el lazo de color rojo y luego, sintiéndose muy guapa, se sentó delante de su casa para que la gente la mirara con su gran lazo.
Narrador: Y vino un Gallo.
Gallo: -Ratita, ratita que guapa que estas, ¿te quieres casar conmigo?
Ratita: -¿Y por las noches qué aras?
Gallo: -Kokoroko -cantó el gallo con su imponente voz. Ratita: -No, no, que me asustarás. Narrador: Luego, apareció el perro. Perro: -Ratita, ratita, ¿te quieres casar conmigo? Ratita: -¿Y por las noches qué aras? Perro: -Guau, guau, guau -ladró el perro con mucha seguridad. Ratita: -No, no, que me asustarás. Narrador: Luego, apareció un ratón. Ratón: -Ratita, ratita, ¿te quieres casar conmigo? Ratita: -Vete y no me molestes más. Narrador: Luego, apareció un gato. Gato: -Ratita, ratita que guapa que estas, ¿te quieres casar conmigo?
Ratita: -¿Y por las noches qué aras?
Gato: -Miau, miau, miauuu -ronroneó el gato con dulzura. Ratita: -Que dulce que eres sí, me casare contigo. Narrador: Y así los dos se hicieron novios y un día se fueron a merendar y entonces la gatita no vio la comida y le pregunto a su novio.
Ratita: -Mi amor en la cesta no hay nada que vamos a comer.
Gato: -Pues la comida eres tú. Narrador: Y por poco lo comió, pero vino el ratón y cogió un palo con fuego, le quemo la cola y el gato se fue corriendo.
Ratita: -¿Y por las noches qué aras? Ratón: -Dormir y callar. Ratita: - Pues contigo me casaré. Narrador: Y se casaron y vivieron muy felices comieron perdices y colorín colorado este cuento se ha acabado.