“Tejido Constitucional: La Tríada

que define a Uruguay”

El artículo 1 de la Constitución uruguaya establece los elementos fundamentales del Estado
uruguayo, los cuales son la República, la Democracia y la Justicia. Veamos un análisis de
cada uno de estos elementos:

1.República:
La República es la forma de gobierno adoptada por Uruguay, lo que implica que el poder
emana del pueblo y es ejercido por representantes elegidos mediante el voto popular. Este
principio republicano resalta la importancia de la
participación ciudadana en la toma de
decisiones políticas. Además, el término
"República" sugiere la existencia de un orden
legal y constitucional que organiza y limita el
ejercicio del poder.

2.Democracia:
La democracia, como segundo elemento,
enfatiza la participación directa del pueblo en el
gobierno y la protección de los derechos
individuales. En Uruguay, la democracia se
manifiesta a través de elecciones libres y justas,
donde los ciudadanos tienen la oportunidad de
elegir a sus representantes y participar en la
toma de decisiones políticas. Este principio
democrático también implica el respeto a la
diversidad de opiniones y la garantía de derechos civiles y políticos para todos los
ciudadanos.

3.Justicia:
El tercer elemento, la Justicia, destaca la importancia de un sistema legal equitativo y
justo. En el contexto de la Constitución uruguaya, se espera que el Estado garantice la
igualdad ante la ley y proteja los derechos individuales. La Justicia también implica la
existencia de un sistema judicial independiente y imparcial, encargado de aplicar y
salvaguardar la ley de manera equitativa.
En conjunto, estos tres elementos del Estado delineados en el artículo 1 de la Constitución
uruguaya reflejan los principios fundamentales que guían la organización política y social del
país. La combinación de República, Democracia y Justicia busca establecer un marco que
promueva la participación ciudadana, el respeto a los derechos individuales y la aplicación
imparcial de la ley.

Artículo 82:
El artículo 82 de la Constitución uruguaya es fundamental para entender el tipo de gobierno
que rige en el país. En virtud de esta disposición, Uruguay adopta un sistema de gobierno
presidencialista. En términos prácticos, esto implica que el Presidente de la República no
solo ostenta la máxima autoridad ejecutiva, sino que también desempeña el papel de jefe de
Estado y de Gobierno.

La elección del Presidente y del Vicepresidente se realiza mediante el voto directo de la

ciudadanía. Este proceso de elección no solo determina quién ocupará el cargo
presidencial, sino también quién asumirá la posición de Vicepresidente. Este último, elegido
en la misma fórmula que el Presidente, actúa como su sustituto en situaciones de ausencia
o incapacidad.

El sistema presidencialista, delineado en el

artículo 82, destaca la autonomía e
independencia del Poder Ejecutivo. A diferencia
de sistemas parlamentarios, donde el jefe de
gobierno es elegido por el parlamento, en
Uruguay, el Presidente es directamente
designado por la voluntad popular. Esta
característica confiere al Presidente un mandato
directo del pueblo, otorgándole una legitimidad
única en la toma de decisiones ejecutivas.