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Ce SC Rad2004 N1558
Ce SC Rad2004 N1558
CONSEJO DE ESTADO
El señor Ministro, luego de una exposición sobre los temas, formula varios
interrogantes, los cuales conviene agrupar según que se refieran a las situaciones
de lesiones personales o a la de muerte, así:
CONSIDERACIONES
Para tener claridad sobre los temas planteados, la Sala procede a su desarrollo en
el siguiente orden:
1. El problema de fondo.
2. Normatividad.
2.1 Marco constitucional.
2.2 Marco legal.
2.2.1 Sobre el tema de las lesiones.
2.2.2 Sobre el tema de la muerte.
3. El procedimiento administrativo de reconocimiento de prestaciones por lesiones.
3.1 La actuación administrativa por lesiones.
3.1.1 Primera etapa. El informe administrativo por lesiones
3.1.2 Segunda etapa. La calificación Médico-Laboral. Dos instancias
3.1.3 Tercera etapa. El acto administrativo definitivo
3.2 La naturaleza jurídica del Informe Administrativo por Lesiones.
3.2.1 Modificación del Informe a petición de parte.
3.2.2 La modificación oficiosa del Informe Administrativo. Improcedencia de la
revocatoria directa.
3.3 La naturaleza jurídica de las decisiones de las Juntas Médico-Laborales
Militares o de Policía.
3.4 La naturaleza jurídica de las decisiones del Tribunal Médico-Laboral de
Revisión Militar y de Policía. Su irrevocabilidad.
4. El proceso administrativo de reconocimiento de prestaciones por muerte.
4.1 La actuación administrativa.
4.1.1 Primera etapa. El informe administrativo por muerte.
4.1.2 Segunda etapa. El acto administrativo definitivo
4.2 La naturaleza jurídica del Informe Administrativo por Muerte.
5.0 La Sala responde
1. El problema de fondo.
Se busca con ella determinar si los Informes Administrativos por Lesiones o por
Muerte constituyen actos administrativos, el procedimiento aplicable para su
expedición, si proceden en su contra los recursos de la vía gubernativa y si son
susceptibles de revocatoria directa.
2. Normatividad.
Para tener una visión de conjunto de los temas, es conveniente citar diversas
normas constitucionales y legales relacionadas con la consulta, sobre las cuales la
Sala desea destacar en negrilla algunos de sus apartes.
En relación con el asunto de las lesiones, la consulta alude a varias normas del
decreto ley 1796 del 14 de septiembre de 2000, cuyo epígrafe dice: "Por el cual se
regula la evaluación de la capacidad sicofísica y de la disminución de la capacidad
laboral, y aspectos sobre incapacidades, indemnizaciones, pensión por invalidez e
informes administrativos por lesiones, de los miembros de la Fuerza Pública,
Alumnos de las Escuelas de Formación y sus equivalentes en la Policía Nacional,
personal civil al servicio del Ministerio de Defensa Nacional y de las Fuerzas
Militares y personal no uniformado de la Policía Nacional vinculado con
anterioridad a la vigencia de la Ley 100 de 1993".
Ahora bien, resulta oportuno observar, con base en el texto del epígrafe y el
artículo 1° del mencionado decreto ley, que en el caso de las lesiones, el ámbito
de aplicación del decreto comprende a las siguientes personas:
Es de anotar que auncuando el inciso segundo del artículo 1° del decreto 1796 no
diga explícitamente que el campo de aplicación se extiende al mencionado
personal civil o no uniformado, el epígrafe sí lo dice, con lo cual se despeja
cualquier duda que pudiera existir sobre el particular.
Con todo, aquí debe precisarse que el personal que se vincule como civil o no
uniformado, a partir de la vigencia del decreto 1796 (14 de septiembre de 2000,
art. 50), debe cumplir los requisitos de aptitud sicofísica exigidos para el
desempeño del cargo en este decreto, conforme a lo dispuesto por el parágrafo de
su artículo primero.
Las normas del decreto ley 1796 de 2000 relacionadas con la consulta, son las
siguientes:
1
Declarada exequible por la Corte Constitucional, en la Sentencia C-665 del 28 de noviembre de 1996.
“Artículo 14.- Organismos y autoridades médico-laborales militares y de
policía.- Son organismos médico-laborales militares y de policía:
1. El Tribunal Médico-Laboral de Revisión Militar y de Policía.
2. La Junta Médico-Laboral Militar o de Policía.
Son autoridades médico-laborales militares y de policía:
1. Los integrantes del Tribunal Médico-Laboral de Revisión Militar y de
Policía.
2. Los integrantes de las Juntas Médico-Laborales.
3. Los médicos generales y médicos especialistas de planta asignados
a Medicina Laboral de las Direcciones de Sanidad de las Fuerzas
Militares y Policía Nacional”.
De la misma manera, el parágrafo 2° del artículo 21 del decreto ley 1796 remite
expresamente al decreto ley 94, en lo relacionado con el funcionamiento del
Tribunal Médico-Laboral de Revisión Militar y de Policía, con lo cual éste mantiene
su vigencia en dicho punto y además, adquieren importancia los artículos 27, 28 y
29, sobre los cuales aparecen dos interrogantes de la consulta.
Y la siguiente, precisa:
En cuanto al Informe Administrativo por Muerte, el decreto ley 1211 del 8 de junio
de 1990 “Por el cual se reforma el estatuto del personal de Oficiales y Suboficiales
de las Fuerzas Militares”, dispone lo siguiente:
Las aludidas normas distinguen entre la “muerte en combate”, “en misión del
servicio” y “simplemente en actividad”, asignando prestaciones diferenciales y en
cuanto a la “muerte en combate” establece, además, el ascenso en forma
póstuma.
Cabe anotar que el decreto ley 1211 fue derogado por el decreto ley 1790 del 14
de septiembre de 2000 (art. 154), con excepción de varias de sus normas, entre
las que se encuentran las del Título V, al cual pertenecen los artículos antes
citados.
Para la Policía Nacional existen normas similares. En efecto, el artículo 166 del
decreto ley 1212 de 1990 “Por el cual se reforma el estatuto de personal de
Oficiales y Suboficiales de la Policía Nacional”, no derogado por el decreto ley 41
de 1994 (art. 115), ni por el decreto ley 1791 de 2000 (art. 95), establece:
2
Cabe anotar que respecto de los Agentes de la Policía Nacional hay una norma similar al mencionado
artículo 166, en el artículo 124 del decreto ley 1213 de 1990, no derogado por los decretos leyes 262 de 1994
(art. 47) y 1791 de 2000 (art. 95), con una adición consistente en que la modificación de la calificación de las
circunstancias en que ocurrieron los hechos, por parte de la Dirección General, procede cuando aquellas
“sean contrarias a las pruebas allegadas”.
3
Es de observar que la norma actual (art. 24 dec. 1796/00) emplea los verbos “describir” e “informar”,
mientras que la anterior (art. 35 dec. 94/89) hacía alusión a “calificar” los hechos por parte del Comandante o
Jefe respectivo.
a) En el servicio pero no por causa y razón del mismo, es decir, enfermedad y/o
accidente común.
La Junta tiene un plazo de noventa (90) días, contados a partir del recibo de los
conceptos médicos definitivos que determinen las secuelas permanentes
(parágrafo art. 16), para producir su dictamen, el cual se notifica al interesado
conforme al artículo 30 del decreto ley 94 de 1989.
Se consulta si ese término de cuatro meses rige también para las Direcciones de
Sanidad, que son dependencias de las Fuerzas Militares y de la Policía, que
igualmente están facultadas para pedir la convocatoria del Tribunal y a las que no
menciona expresamente el artículo 29. Al respecto, la Sala considera que el plazo
de cuatro meses opera también para las Direcciones de Sanidad, porque vencido
ese término sin que se haya impugnado, debe entenderse que la decisión de la
Junta Médico-Laboral queda en firme y el expediente pasa a liquidación de las
prestaciones y expedición del acto definitivo de reconocimiento.
Sin embargo, la norma especial contenida en el inciso segundo del artículo 26 del
decreto ley 1796 de 2000, otorga un recurso sui generis, o mejor, un derecho
especial de impugnación, a favor del lesionado, quien puede interponerlo dentro
de los tres (3) meses siguientes, a partir de la notificación del Informe.
4
Eduardo García de Enterría y Tomás-Ramón Fernández. Curso de Derecho Administrativo I. Civitas
Ediciones S.L., Madrid, 2001, pág. 540.
5
José Antonio García –Trevijano Fos. Los Actos Administrativos. Editorial Civitas S.A., 2ª edición, Madrid,
1991, págs. 96 y 97.
6
Este artículo fue declarado exequible por la Corte Constitucional, en Sentencia C-339/96.
aspectos, el procedimiento especial bajo estudio se aparta de la disposición
general del artículo 44 del C.C.A., pues ordena notificar un acto preparatorio,
cuando la regla general es que sólo se notifican los actos que ponen fin a una
actuación administrativa. La Sala observa que cuando la ley otorga esta especial
garantía al lesionado busca que las pruebas y demás elementos de juicio se
controviertan dentro de la actuación administrativa, lo cual permite un mejor
cumplimiento del derecho fundamental al debido proceso.
El inciso primero del artículo 26 del decreto ley 1796 de 2000, otorga a los
Comandos de Fuerza y la Dirección General de la Policía Nacional, la facultad
especial de modificar de oficio el Informe Administrativo por Lesiones, cuando sea
“contrario a las pruebas allegadas”. La Sala entiende que esta especial
competencia no puede ser discrecional, sino de obligatorio cumplimiento cuando
se constate la contraevidencia de las conclusiones del informe frente a las
pruebas recaudadas.
Sin embargo, la norma especial del artículo 29 del decreto ley 94 de 1989, le
confiere al interesado el recurso o derecho especial de solicitar la convocatoria del
Tribunal Médico-Laboral de Revisión Militar y de Policía para que éste analice y
determine si confirma o modifica la decisión de la Junta. Es importante anotar que
la modificación, revocación o confirmación de las decisiones de la Junta,
solamente son posibles mediante el ejercicio del derecho especial de petición de
convocatoria del Tribunal, pues como ya se dijo, no son susceptibles de
revocatoria directa y tampoco facultó la ley a autoridad alguna para modificar o
revocar de oficio las citadas decisiones de la Junta.
Sin embargo, por una excepción expresa a lo que dispone el art. 135 inc. 1 del
C.C.A., contra los actos del Tribunal Médico-Laboral sí procede la acción de
nulidad y restablecimiento del derecho. En efecto, el artículo 22 del decreto ley
1796 de 2000 establece que las decisiones, del mencionado Tribunal son
“irrevocables”, con lo cual está disponiendo tácitamente que no son susceptibles
de los recursos por vía gubernativa ni de revocatoria directa, y expresamente
afirma que contra ellas “sólo proceden las acciones jurisdiccionales pertinentes”.
Con todo, no sobra señalar que como se trata de un acto preparatorio que da
soporte a la decisión administrativa de reconocimiento prestacional, podría ocurrir
que de adelantarse la demanda contencioso administrativa de nulidad y
restablecimiento del derecho contra esta decisión del Tribunal Médico-Laboral de
Revisión Militar y de Policía, no se produzca la decisión administrativa de
reconocimiento de las prestaciones correspondientes hasta tanto haya
pronunciamiento judicial sobre su legalidad, de forma tal que el interesado y
afectado no tenga compensación económica alguna en mucho tiempo. Por ello, la
lógica podría indicar que una vez producido el pronunciamiento del Tribunal, debe
darse la decisión administrativa de la autoridad competente que reconozca las
prestaciones médico asistenciales correspondientes a esa definición médico-
laboral y se adelantaría el juicio contencioso contra esta decisión y la decisión del
Tribunal Médico-Laboral de Revisión, pero habiéndose reconocido parte del
derecho económico del afectado.
Finaliza con el Informe Administrativo por Muerte, el cual tipifica los hechos en
una de las tres modalidades señaladas por la ley: muerte en combate, en misión
del servicio o simplemente en actividad, en el caso de Oficiales y Suboficiales de
las Fuerzas Militares, de acuerdo con los artículos 189, 190 y 191 del decreto ley
1211 de 1990, o muerte simplemente en actividad, en actos del servicio o en
actos especiales del servicio, para los Oficiales y Suboficiales de la Policía
Nacional, de conformidad con los artículos 163, 164 y 165 del decreto ley 1212 de
1990.
Si bien las normas no señalan por qué motivo, debe entenderse analógicamente
con la norma del Informe Administrativo por Lesiones (inc. primero art. 26 dec.
1796/00), que sea cuando la calificación resulte contraria a las pruebas allegadas
sobre la forma como ocurrieron los hechos.
1 y 2.
Los Informes Administrativos por Lesiones son actos administrativos
preparatorios y solo pueden ser objeto de una especie de recurso o derecho
especial de impugnación denominado “solicitud de modificación”, que debe
presentarse por el interesado dentro de los tres (3) meses siguientes a su
notificación.
5. El término de cuatro (4) meses fijado por el artículo 29 del decreto ley 94 de
1989, para presentar la solicitud de convocatoria del Tribunal Médico-Laboral
de Revisión Militar y de Policía, corre tanto para el interesado como para las
Direcciones de Sanidad.