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En el caso del divorcio contencioso, una de las partes solicita el divorcio y el otro
cónyuge puede oponerse o no estar de acuerdo.
El artículo 185 del Código Civil de Venezuela establece las causales de divorcio
en el país. Según este artículo, las causales de divorcio son las siguientes:
Adulterio: Cuando uno de los cónyuges comete adulterio, es decir, tiene relaciones
sexuales fuera del matrimonio.
Abandono voluntario y continuado: Cuando uno de los cónyuges abandona al otro
de manera voluntaria y continua, sin motivo justificado.
Maltrato grave o lesiones graves: Cuando uno de los cónyuges maltrata física o
psicológicamente al otro de manera grave.
Conducta inmoral: Cuando uno de los cónyuges tiene una conducta inmoral que
afecta gravemente la vida en común.
Enfermedad mental incurable: Cuando uno de los cónyuges padece de una
enfermedad mental incurable que imposibilita la vida en común.
Condena a pena privativa de libertad: Cuando uno de los cónyuges es condenado
a una pena privativa de libertad por un tiempo mayor a seis años.
Separación de hecho por más de cinco años: Cuando los cónyuges han estado
separados de hecho, sin cohabitar, por un período continuo de más de cinco años.
Es importante destacar que estas causales no son taxativas, lo que significa que
cualquier cónyuge puede solicitar el divorcio por estas causales o por cualquier
otra situación que considere que impide la continuación de la vida en común,
siempre y cuando sea en los términos establecidos por la jurisprudencia y la
interpretación constitucional del artículo 185 del Código Civil
Es importante destacar que el divorcio por el artículo 185-A del Código Civil se
aplica cuando los cónyuges han estado separados de hecho durante un período
prolongado de tiempo, y no requiere la existencia de causales específicas de
divorcio como en otros casos
El divorcio por desafecto es una figura legal en Venezuela que permite a los
cónyuges solicitar el divorcio basado en la falta de afecto o amor hacia el otro
cónyuge. Esta figura se encuentra contemplada en el ordenamiento jurídico
venezolano y ha sido reconocida por la jurisprudencia.
El divorcio por desafecto se basa en la idea de que el matrimonio debe ser una
relación basada en el amor y el afecto mutuo, y que la falta de estos elementos es
suficiente para poner fin al vínculo matrimonial. A diferencia de otras causales de
divorcio, el divorcio por desafecto no requiere la demostración de conductas
específicas o causales específicas de divorcio.
En el proceso de divorcio por desafecto, el cónyuge que solicita el divorcio debe
presentar una solicitud ante el tribunal correspondiente, indicando que la falta de
afecto o amor hacia el otro cónyuge es la razón para solicitar el divorcio. El tribunal
evaluará la solicitud y, si considera que se cumplen los requisitos legales,
decretará el divorcio.
Es importante destacar que cada caso de divorcio por desafecto se evalúa de
manera individual, y el tribunal tomará en cuenta las circunstancias particulares de
cada pareja. Además, es recomendable buscar asesoramiento legal para
comprender completamente los requisitos y procedimientos específicos del
divorcio por desafecto en Venezuela.
La sentencia No. 1070, emitida por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia de Venezuela el 9 de diciembre de 2016, establece que el desafecto
consiste en la falta de afecto o amor hacia el cónyuge y puede ser considerado
como una causal de divorcio. Según esta sentencia, cuando uno de los cónyuges
manifiesta la incompatibilidad de caracteres o el desafecto hacia el otro cónyuge,
el procedimiento de divorcio no requiere un contradictorio, ya que es suficiente el
deseo de no seguir en matrimonio por parte del cónyuge solicitante para que se
decrete el divorcio, en armonía con los preceptos constitucionales
La sentencia No. 693, emitida por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia de Venezuela el 2 de junio de 2015, establece que las causales de
divorcio contempladas en el artículo 185 del Código Civil venezolano son
enunciativas y no taxativas. En esta sentencia, se interpreta el artículo 185 del
Código Civil y se determina que los cónyuges pueden solicitar el divorcio no solo
basándose en las causales específicas mencionadas en dicho artículo, sino
también por cualquier otra razón que consideren que impide la continuación de la
vida en común.
La sentencia reconoce el derecho de los cónyuges a poner fin al matrimonio
cuando existen circunstancias que afectan negativamente la relación y hacen
imposible la convivencia. Además, se exhorta al Poder Legislativo a revisar la
regulación vigente en materia de divorcio para sistematizar los criterios
jurisprudenciales establecidos por la Sala Constitucional.
Es importante tener en cuenta que esta sentencia tiene carácter vinculante y
establece un precedente legal en relación con las causales de divorcio en
Venezuela
La sentencia No. 1070, emitida por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia de Venezuela el 9 de diciembre de 2016, establece que cuando la causal
de divorcio se basa en el desamor, el desafecto o la incompatibilidad de
caracteres, el procedimiento a seguir es el de la jurisdicción voluntaria. En este
procedimiento, no es necesario presentar pruebas ni realizar un contradictorio, ya
que basta con la manifestación de la voluntad de disolver el matrimonio por parte
de uno de los cónyuges para que se decrete el divorcio.
La sentencia reconoce que el desafecto y la incompatibilidad de caracteres
pueden ser motivos válidos para poner fin al matrimonio, y que la valoración
subjetiva del juez sobre la razón del solicitante no debe ser determinante. Además,
se establece que esta causal de divorcio no requiere la intervención del Ministerio
Público.
Es importante destacar que esta sentencia tiene un efecto vinculante y establece
un precedente legal en relación con el divorcio por desafecto en Venezuela.
La sentencia No. 1070, emitida por la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de
Justicia de Venezuela el 9 de diciembre de 2016, establece que el divorcio por
desafecto puede ser solicitado a través del procedimiento de jurisdicción
voluntaria. En este tipo de divorcio, no es necesario presentar pruebas ni realizar
un contradictorio, ya que basta con la manifestación de la voluntad de disolver el
matrimonio por parte de uno de los cónyuges para que se decrete el divorcio.
La sentencia reconoce que el desafecto y la incompatibilidad de caracteres
pueden ser motivos válidos para poner fin al matrimonio, y que la valoración
subjetiva del juez sobre la razón del solicitante no debe ser determinante. Además,
se establece que esta causal de divorcio no requiere la intervención del Ministerio
Público.
Es importante destacar que esta sentencia tiene un efecto vinculante y establece
un precedente legal en relación con el divorcio por desafecto en Venezuela.