Caroline Rose es todo un personaje, una intelectual recién convertida
a la fe católica que empieza a oír el tintineo de una máquina de escribir invisible, seguido de voces. ¿Es una experiencia religiosa o se está volviendo loca? Según la propia autora, –y según el prólogo de Ali Smith a la presente edición, muy recomendable, pero para leer después de haber concluido la lectura de la novela–, la idea del "espíritu de las teclas" que persigue a Caroline surge de las alucinaciones que Spark sufrió en su piel cuando siendo una escritora aún no publicada tomaba dexedrina en una época de trabajo intenso, conversión al catolicismo, pobreza y grave malnutrición.
Las voces es la primera novela, divertidísima y muy profunda, de la
genial Muriel Spark, una de sus veintidós novelas escuetas, irreverentes, inteligentes, truculentas, llenos de guiños autobiográficos, situaciones disparatadas, reflexiones filosóficas y buenas dosis de metaficción, como sucede en Las voces. No dejéis pasar otras tres novelas de Spark, La entrometida, que ya recomendamos el verano pasado y Los solteros y Las señoritas de escasos medios, ambas publicadas recientemente en Impedimenta.