CONFORT TÉRMICO

Entendemos por confort térmico cuando las personas que lo habitan no experimentan

sensación de calor ni frio, o, dicho de otro modo, cuando las condiciones de humedad,

temperatura y movimiento de aire es agradable y adecuado a la actividad que se realiza en su

interior.

¿Cómo se consigue el confort térmico?

En la construcción de un edificio el confort térmico debe ser tenido en cuenta como uno de

los parámetros más importantes a respetar. Para ello se adoptan distintas soluciones de diseño

y constructivas que garantizan el ansiado bienestar:

Aislamiento de fachadas: la superficie exterior del edificio es la que se somete a las

inclemencias del tiempo, por lo que un aislamiento bien conseguido puede ahorrar muchos

quebraderos de cabeza en la búsqueda del confort térmico.

Elección de materiales: tener en cuenta el clima en el que se va a ubicar el edificio nos

ayudará a escoger: la piedra y el ladrillo se han de utilizar en climas cálidos, y la madera en

climas mucho más fríos.

Correcta colocación de ventanas y puertas: además del aislamiento de fachadas, la correcta

colocación y elección de puertas ventanas y otros elementos resulta fundamental para

mantener un correcto aislamiento térmico. La correcta instalación, que evite la aparición de

puentes térmicos, garantizará una temperatura interna regulada con menor consumo de

energía.

Ventilación garantizada: los estándares de calidad del aire con frecuencia tienen que ver con

una correcta ventilación. Evitar acumulaciones de CO2 y de humedad que pueda propiciar la
aparición de mohos son solo otras de las ventajas de garantizar la ventilación (que no las

corrientes de aire) de una estancia o vivienda.

Valoración de la orientación del edificio: Aunque puede ser algo difícil de modificar, lo

cierto es que colocar ventanas, toldos o balcones debe ser una decisión tanto estética como

técnica, ya que no todos los puntos cardinales nos ofrecen el mismo grado de calor, frío o

vientos dominantes.

Las variables del ambiente térmico son seis

Cuatro variables que dependen del entorno:

 Temperatura del aire entre 10 Cº y 30 Cº.

 Temperatura radiante media entre 10 Cº y 40 Cº.

 Velocidad del aire entre 0 m/s y 1 m/s.

 Presión del vapor de agua entre 0 y 2700 Pa.

Dos variables que dependen del individuo:

 Tasa metabólica comprendida entre 46 y 232 W/m² (entre 0,8 met. y 4 met).

 Aislamiento de la ropa entre 0 y 0,31 m² K/W (0 clo. y 2 clo).

(Ocupacional, 2016)

(Rayo)

(Galacho, 2022)

Bibliografía
Galacho, J. O. (2022). ÍNDICE WBGT REVISIÓN DEL MÉTODO.

Ocupacional, I. N. (2016). Exposición ocupacional al calor y ambientes calurosos. DHHS(NIOSH).

Rayo, J. C. (s.f.). Valoración del riesgo de estrés térmicoíndice"WBGT".