Mi día de rutina comienza cuando me levanto a las seis, despido a mi novio en el trabajo

y salgo a pasear al perro Poker. Vuelvo al apartamento a las siete y media, le lavo las
patas al perro y le doy de comer. Luego me ducho y me visto.

A veces, por la mañana, tomo té con un sándwich o papilla. A continuación en el horario

tengo clases. En clase, escribo, leo, completo varias tareas y respondo preguntas. Las
clases suelen terminar a la una y media.

Voy a almorzar. Normalmente como solo. Si no quiero cocinar, me maquillo y voy a un

café con mi amiga. Dejo el perro con el abuelo de mi vecino, a menudo el saca con al
pero.

Luego a las cinco asisto a clases de estiramientos. Trabajo individualmente o en grupo.

Después de los estiramientos, visito a una esteticista porque cuido mi piel.

Suelo llegar a casa a las ocho de la noche, recoger al perro y empezar a preparar la cena,
mientras escucho música o audiolibros. Mi novio regresa del trabajo a eso de las nueve
de la noche. Cenamos juntos y luego sale a pasear con Poker, y yo voy a hacer la tarea.

Suelo estudiar hasta las once de la noche. Luego me ducho, me lavo el maquillaje y me
acuesto. Tengo suerte de que mi novio camine con Poker por la noche.

Y a la una y media de la primera noche nos dormimos todos.