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Carirero 20 Utilice sus propios sentimientos como informacién Una delas tareas més importantes dela terapiaes pres- tar atencidn a nuestros sentimientos ms inmediatos, dado ‘que representan datos de mucho valor ‘Si en la sesin se siente aburido,iritado, confundido, exctado sexualmente o excuido por su paciente considere ‘esos fentimientos como una feente importante de informs ‘in. Precisamente por esto hage hincapie en que ls tera- putas también hagan terapia. Si uno desarrolla un conoci- ‘miento profundo de sf mismo, climina la mayorta de los puntos cegos y tiene una buena base de experiencia coma paciente, comenzaré a distinguir cuanto del aburrimiento 0 Ta confusion es suya y eudnto producto del paciente. Es in portante hacer esa distinién porque ses el paciente quien trace st aburrimientoen In seston de terapis,entonces po- ‘demos suponer con bastante seguridad que también resul- ‘a aburrido para otros en otra stuaciones. De modo que en ver de desanimarse por el aburrimi to, acéptelo de buena gana y busque una manera de volver lovana ventas terapéutia, Cusndo empezd? (Ove eso que Ingce exactamente el pacionte que leaburre? Cuando me en- frento con el aburrimiento tal vz diga algo de este esto: —Mary, permitame que le diga algo. Noto que durante Jos alimos minutos me he sentido desconectado de us: ted, algo distanciado. No estoy seguro de por qué, pero sé que me siento mae distante ahora que al principio de la sesién cuando me estaba describiendo su sensacion den haber obtenide demi lo que buscaba ola sesion ppasada, cuando me hab mas desde el corazén. Me pre {unto cusl es su nivel ce conexign conmigo hoy. Trate- mos de entender qué ests sucediendo, Hace algunos aos tat Martin, un comerciant exito- s0, que tenia que hacer wn vaje de negocios el din de a tera pia y me pidis que le cambiara el horario para otro dia de la emana, No podia hacerlo sn perturbar mis horarios yeh je que tendriamos que perder Ia sesion y vernos ala hora de ‘Sempre la semana siguiente, Pero luego cuando pensé al es- ecto, me di cuenta de que no habria dudado en modificar this horarios por cualquier otro de mis pacientes. ‘or qué no podia hace por Martin? Era porque no sentia ganas de verlo. Habia algo relacionado con su mez {quindad que me habia desgastado. Criticaba incesante Inente mi persona, los muzbles de mi consultorio, a falta {de estacionamiento, mi se:retaria, mis honorarios,v ene ralmente comenzaba la sein reiriéndose a mis errores dela semana anterior Esta sensacién mia dedesgaste causada por Martin te fa vastas implicaciones.Iniialmente habia empezado te ‘pia debido tuna serie defrustraciones en sus relaciones Con las mujeres, ninguna de las cuales, sega pensaba, le habia dado lo suficiente: nnaguna della habia estado nun- ca lo suficientemente bier cispuesta a compartir las even tas de restaurantes 0 de almacén o a darle regaos de eur pleatios equivalentes en vslor a los que é es habia dado a fllas (no hay que olvidar qu ss ingreso era varias veces petior al de ellas). Cuando hacian viajes juntos, él insists en que eada uno pusiese Is misma cantidad de dinero en un asco de viaje” y que todos Ios gastos, incluyendo la nal ta, elestacionamiento, el nantenimiento del auto, las pro- pinas y hasta los diaros, fuesen pagados con ese dinero, 8s Ademés, se quejaba « menudo porque sus novlas no cum: plan con su parte del mancj, del planeamiento del viaje © 4el lee los mapas, Al final falta de generosidad, su ob- ‘sesidncon Is justia absolutay su infatigable eiticatermi- rnaban por agotar a la mujer que hublese en su vida. ;¥ es. taba haciendo exactamente lo mismo conmigo! Era un ‘buen eemplo de una profecta autocumplida:enia tanto te rrora que lo desewidsran que st comportamiento termina ‘ba provocando exactamente eso. Fue el haber reconocido este proceso lo que me permitioevitar responder de mane ‘erica (es deci, tomarlo personalmente) y darme cuen ta de que era un patron que habia reptido muchas veces ‘gue, enel fondo, queria cambiar 86 Captruto 21 Sea cuidadoso al formular sus comentarios sobre el “aqui y ahora” Hacer comentariassobrsel “aqui y ahora” es um aspec= to muy particular de ls relacin terapéutica. Existen pocas Stuaclones humanas en las que Se permita, y mucho me- fos salient, el hacer comeatarios sobre la conduct nme: ta del oto, Esto produce una sensacién de liberacion, {ncluso de exaltscion es precsamente por eso que la expe eneia de los grupos de encventro fue tan exits, Pero uno también siente que es arrieado, porque no estamos acos: tumbrados a un nivel tal de retroalimentacisn en nuestras relaciones. ‘os terapeutas deben aprender a envlver sus coments rios de un modo tal que resltenafectuososyaceptabls pe: Fa sus pacientes, Analicemos por ejemplo la retroaliment {én sobre el aburrimiento que realicéen el timo conseo, Evite utilizar Ia palabra “aburrido" con mi pacinte: no SEique los nuevos pacientes que me consultaran podeian ‘reacuparse par el hecho de que eseribiera sobre ello. De El que les aseguro sobre la confidencialdad y les aclaro {gue jams he escrito sobre ningin paciente sin obtene® a tes su permiso y sin disfravar por completo su identidad Pero con el tiempo he obserrado que las preocupactones de Jos pacientes son muy diferentes: en general estaban menos preocupados por el hecho ce que esribiera sobre ellos ue por no tesultar lo suficlentemente interesantes como pars ‘er seleccionados. cartruco 24 (Qué mentiras me ha dicho? Con frecuencia, durante el curso de Ia terspia, los po cientes desriben ejemplos de engafios que han cometido fen su vida, alggn ineidente en el que oeultaron 0 dstorsio- hnaron informacion sabre ellos mismos. Las grandes orejas ‘de conejo me permiten aprovechar esas excelentes oport- nidades para preguntar qué mentiras me han dicho duran. tee curso de fa terapia, Siempre hay un ocultamiento, al guna informacién que se ha retenido por verguenza o por 1 modo particular en que desean que yo los considere, La dliscusion de tales ocutamlentos cas invariablemente pro- ‘voca un dislogo fractifero en Ia terapi a menudo ua r= ‘sign de la historia dela relacdn terapéutleay una opor- ‘unidad para retrabajary afinar mejor no sélo la relacién sino oltos temas importantes que hayan emergido previa- mente en a terapia La estratepia general de las grandes orcas de conejo es revisar todo el material de la sesin en busca de las impli- ‘mite, entregsindose aun “anslisis mutua"- un formato en el ‘que él y una de sus pacientes (una psicoterapeuta que ha fg certo tiempo que analizaba) altemaban las sesiones ps ‘ianalizatse entre si ‘Alfinal Ferencz se desanimé y abandoné el experimen to por das preocupaciones principales: 1) Ta eonfidencal dad —todo un problema porque un verdadero compromi- ‘so requeria que compartiese cualquier pensamiento ive Te ‘Viniera por libre asocincion acerea de us os pacientes— ¥y2)los honorarios: Ferenc se quejabs acerca del pago. 2uign debia pagar quién? ‘Su paciente no comparté el desinimo de Ferenc. Ells sintis que el pracedimiento habisfclitado la terapia y que Ferencri no estaba dispiest 9 seguir porque temiarecono- cerqu estaba enamorado de la. Ferenc sostenss una opi- hid contraria. "No, no, no", afirmaba a verdadera rezén era que se resistiaaexpresar el hecho de que la odiaba. Tas reacciones negativas de Ferenedi a su intento de au ‘ospertura parecen arbitrarias y may anticuadas. Mi novela Desde el div intent traer su experimento ala terapia con- ‘temporines. El protagonist, un psiguatrs, decide ser total ‘mente transparente con un paciente que, segin sucede enes- ta ficeidn, vive consagrado a la duplicidad. Una de mis principales intenciones en la novela es afimar que la auten- 'idad del terapeuta seré en ultima instanciaredentora in cluso bajo las peorescircunstancas, sea, un encuentro cl rico conn poeudopacicnte que conepirs en au contra. carirure 26 ‘Tres clases de apertura del terapeuta Es contraproducente qte el teapeuta permanezca ope coy oculto frente al paciene.Existen mil rzones para mos {rare al pacientey ninguna buena razén parse ocultamien: to. Sin embargo, cada ver qe me dijo alos terapeutns ‘Sobre este tema, observe pr incomodidad, ue provene en parte de a imprecision del rmino augpertura. La apert Frdelterapeuta noes una enidad nia sino un conjunto de fonducias algunas dels cuales invariablemente facitan la terapia mientras que otras son probleméticas y potencal mente contraproducentes, aver podamos aportar un poco tdeclriad delineando is apertura dl terapeuta en tres este rs 1) el mecanismo de la terapa; 2) los sentimientos del hquty ahora” y 3) a vida personal del terapeuta. Examine mos ahora una de esta eer por ez Cartro10 27 El mecanismo de la terapia: Sea transparente gran inguisdor de Los hermanos Karamazo, de Dos ties, proclamaba que los hombres siempre han quer lo magia, misterio y autordad. A lo largo de toda la his toris, los sanadores han sabido esto y han revestido sus prictcas curadoras con un manto de secreto, La instr: ‘in y Ta prctica de los chamanes siempre han estado ve lads por el misterio, mientras que los médicos occidenta- les durante siglos han utilizado accesorios, ereados para inspirar una profunda admirscion y maximizar as elefec- to de placebo: ropas blancas, paredes cubiertas de prest sos diplomas y prescripciones escritas en latin ‘Yo propongo una vision dlametralmente apuesta del proceso curatvo a lo largo de todo este libro. El estableci miento de una rlacin con los pacientes, por su misma turuleza, exige que renunciemos al poder del triunvirato de rata, misterio yautoridad. La psleaterapia estan robus ta itrinsecamente que gana muchisimo con la revelacién tonal del proceso y de la logiea del tratamiento, Todo un. corjunto persuasivo de investigacign psicoterapéutica de rmurstra que el terapeuta deheria preparar cuidadosamen tea los nuevos pacientes informandoles acerca dela psco terapia us supuesto bisios, st explicacién yla que cada uno puede hacer para masimizar su propio progres, ‘Los pacientes ya soportan el peso de a ansiedad prima: ria que los trae ala terapia y tiene poco sentido sumergir Tosen un proceso que puede prodcir una ansiedad sec aria, la ansiedad proict de a exposicion ana stuackin pci ambigua sin ineamientos para una conducta 0 una Farscipacion adecuadas, Por To tanto es mis sensato pe parara los pacientes sisteméticamente para el proceso dé fa psicoterapin ‘La preparacidn de los nuevos pacientes es especalmen- tw efectiva en la terapia de grupo porque la situacion de in teraceldn grupal es intrinsecamente extranaeintimidante {Los nuevos miembros de un grapo, en particular aquellos fh previa experiencia, a menido se vuelve ansiosos por el poder del pequetio grupo: a presin de grupo el grado de Tntimidad, la intensidad general. La provision de una es tructura la clarifcacin de las gulas bisicas son abso tamente esenciales en este tipo de trap ero la preparacin pala psicoterapia individual tam- bign es esencal. Aunque es probable que los indviduos ha yan tenido experience derslaiones intensas, es improbe He que hayan estado en wna relacién que les exigiese conflar enteramente, evesr todo, no guardarse nada, ex Shinar todos Tos matices de sus sentimientos hacia el otro ¥ recibir aceptacion sin juzgamiento. En las entrevista in: tales me dedico alas replas de base ms importantes, “dyendo la confidencialidad, Ia necesidad de una apertura {otal laimportancia de los unos, la necesiad de pacien. ta. Dado que el enfoque en el “aqut y ahora” puede res far extrano a los pacientes les explico su ligica. Si un nue to paciente ha descripto relaciones difciles(y eso quiere decir précticamente el cien por ciento de los pacientes), ‘puedo decir por ejemplo algo como lo siguiente: —Estd claro que una de as dreas que necesitamos tr bejares su relacin con los demas. Es dif params ber sobre le naturalezsexacta de sus dificultades en as relaciones poraue, por supuesto, s6lo conozco a las ftras personas gue ay en #1 vida através de sus ojos 3 ‘Awoves sus descripciones puoden ser inintencionalimen te parcales y be descubierto que puedo serle de mas ayuda si nos enfocamos en la dinia relacion de fa que poseo informacion exact: Ia relacion entre usted y yo, Es por estarazén que a menudo le pediré que examine To que sucede entre nosotros dos. En una palabra le sugiero una apertura total con res ecto al mecanismeo de In terapia. eartrore 28 La revelacién de los sentimientos del “aqui y ahora”: Utilice la discreci6n Pera entraren una relacién genuina con el paciente, es ‘esencialrevelar ls propos seutiniontos hacia el paciene en lpresenteinmediato, Pero la apertura dal aquty ahora" no tbe ser indiseriminada; ne debe buscars la transparencia por sf misma. Todos los comentarios deben pasar una pre: br: Esto quc estoy por revdar es en beneficio del paciente? ‘Una y otra ve alo largo de este texto enfatizaré que su fuer te de informacion mas valiosa son sus props setimienos. ‘Si urante tna sesidn usted siente que su paciente est ds ante, timid, que coquetea, que esté desprecatva, teme rosa, desafiante, infantil o que exhibe una miriada dedi rentes conductas que una persona puede tener con otra tentonces todo eso son datos, datos muy vallososy usted de be buscar una manera de transforma esa informacion en tuna venta terapéutiea, core se vo en los ejemplos en don- de revelaba que me sentia exciido por un paciente, o mis tcerean e involucrado, 0 itado por la repetidas excusas par haber movido una cajade paftelos de papel. ‘ustracién clinica. Un pcientehabitwalmente describia {ncidentes problemtices en su vida pero rara ver me brin« aba un seguimiento de esas incidentes. A menudo me sen- ‘Me preguntas qué alia oeurido, por ejemplo, euan- 4o habia enfrentado al jefe para solcitarle un aumento, 105 Cull habia sido ta reacclén de su amigo cuando rehuss presarleel dinero que le habia pedo? ¢Habia sepuido con pln de invitarasalira la companera de cuarto de ss ex ‘novia? Tal vex parte de mi curiosidad fuera voyeuristica, orignada por mi deseo de sabere final de as historias. Pe ro también sentia que mis reacciones contentan informs: ign importante sobre el paciente,¢No se ponia munca en mi Ligar? ¢No pensaba jams que yo pauia sentir curios: dad por su vida? Tal ez sentia que no me importaba. Ta, vez pensaba en mi como en una miquina sin curiosidad o eseos propios. 1A final discut todos esos sentimientos ( conjeturas) y smi spertura lo lev a revelarsu referencia de que yo no fe ‘una persona ea, porque tema descubrir mis posibles fa lencissy como consecuencia perder le confianra en mi ‘usraci clinica, Un paciente sonia que le invada una profunda sensacin de ilegitimidad y verguenza en todas sus tansacciones personales y de negocios. Enel “aqul y hora” de las sesiones de terapia su culpa generalizada 3 ‘menudo aparecia cuando se hostigaba asi misma por s falta de autenticidad en su modo de comportarse en nee tra rlacién. Odiaba la forma en que trataba de impresio- nnarme con su sagacidad y su inteligeneia, Por ejemplo, le ‘gustaban mucho los idiomas y aunque el inglés erm su Se ‘gunca lengua, le fascinaba manejar sus matices y confess ba que a menudo antes de a sesin habia buscada ene dic: cionario palabras esotérieas para usar en nuestra chara, Yo ‘me sentia consternado por su autohostigamiento, Por un ‘morrento,pude experimentar la fuerza de su culpa y sa tocriica dado que yo era su eémplice: siempre me habia de- leitado mucho su juego con la palabras y sin duda yo h bia slentado esa conducta. Le confesé eso yluego dij pars los dos: “Pero no pienso entrar en eso. Después de todo, sul es el crimen? Estar tabaando ben jatony ane i ay en que distrtemee de neestro juego neta” ‘Un tlentove terete (Peter Lomas) describe as te itraccidn con unpaciente que commen a sein, Fey de comune, hablalo de ua vanes retain de [tperancada acerea de soled “Texareur: —eNo plensa que yo también podria sentir: tne solo? Estoy agi seado con usted en este cuarto y {sted est ensimismade ydistanciado de mt, ¢No se da fuenta de que yo no giro esto, que quiero poder co rnovetio melor? aciexre: No, ¢por qué querria hacerlo? Nolo reo, Usted es autosufciente, No me necesita “Terarrtia:—cOu le hece pensar que soy autosuicien- te? cPor qué seria distiro de usted? Necesito la gente tomo usted. ¥ necesito que deje de mantenersealejado dems Pactere: —Qué podria dare yo? No puedo imaginar- Jo. Me siento tan nad Jams hago nada en mi vida. ‘Teearevts; —Pero de (ndas maneras a uno no le gust la gente s6lo por sus logros sino por lo que es. cA us ted no? ‘PrceTe: —Si, en lo que se reficrea mi es verdad "Tenareuta; —Entonces, por qué no cree que podria agradar alos demés par como es? El terapeuta informe que esta interaccidin disminuy6 de manera drdstica la brecha anreély el paciente. Este ermi- fi la sesin diiendos "Es un mundo diffe", pero su afi tmacin estaba enunciada no en el sentido de “pobre de mi, soy tan desgraciado", sino en el sentido de “es un mundo fife, coo es cierto? paraustedy para mi, para used, pa ra miy para todos los demas que viven en é” 107 cartruco 29 La revelacion de la vida personal del terapeuta: Sea cauteloso Laapertura en las dos primeras esferas —el mecanismo de ia terapia yel“aquiy ahora" formulado adecuadamen- te}— parece simple yno problemética. Pero en torno al te~ cer tipo de apertura, a vida personal del terapeuta, parece beitarse una gran controversia, Si ubiese de graduarse a apertura del trapeuta en un ticia) Friedrich Nietsche y Jost Brewer hacen recipeocs mente de paciente yterapent, Creo que es algo comin que ls pacientes ayuden a sus ‘erapeutas. Jung a menudo hablaba de a patenciada efi cla del sanador herido.Inclasoafirmabo que la terapia Fur clonaba mejor cuando el paciene trata el balsamo perfec Ja herida del terapeuta y que si el terapeuta no a, entonees el pacientetampoco cambiabs. Tal vez los sanadores heridos sean eectivos porque iene na Ms ns ‘yor eapacidad de empatizar con las heridas del pacient; ‘quizases porque partcipan mas profunda y personal te del proceso curative ‘Séque en innumerabes ocasiones he comenzado una se ‘sion en un estado de intranquiidad personaly la he term nado sinténdome mucho mejor sin hacer expliitamente ning comentario sobre mi estado interior. Creo que he cibido ayuda de muchas maneras diferentes. veces es si plement el resultado de ser competente en mi trabajo, de Ssentirme mejor conmigo mismo tras haber utlizado ms bilidades y mi experiencia para ayudara otro, A veces res ‘adel hecho de ser sacado de mmismoy-de entablar un con- ‘acto con otro, Lainteraccién intima siempre es sda En particular, he experimentada este fenomen ent mi prictia de terapia de grupo. Muchas veces he comenzado una sesién con un grupo sintiéndome turbado por alsin tema personal y he terminado la reunién sintiéndome bas tantealiviado. Elambiente intimo de curacién de un buen trupo de terapia es casi tangible y gcurren cosas buenas ‘cuando uno entra en esa ara, Scott Ruta, un eminent te rapeuta de grupo, una vez comparé la terapia de grupo con lun puente construido durante una batslin. Aunque pueda hhaber algunas bajss durante la etapa de construccion (es decir aquellos que abandonan), el pene, una vez levanta do, puede transportara mucha gente hacia un lugar mot [Estos son efectos secundatios del hacer propio del s rnador, momentos en los que el sansdor subrepticiemente toma un poco de esa buens medicina que es a terapia. A veces la terapia del sanador es mas expliitay transpar te, Aunque el paciente no est allt para tratar al terapeuta, puede haber momentos en los que éste se vea abrumado or pesaresdifcles de ocultar: La pérdida de un ser quer do er quiads ol dolor mis comiin de todos, y ucla pa cientes han tratado de dar énimo al alma de un terapeuta ‘en duclo, como en el elemplo que eté anteriormente de ls a4 ‘También recuerdo a cada uno de mis pacientes que hut ppamente se acercé s mien ese momento, no slo pars fsyudarme a recomponerme de manera que pudieraaten derlos de manera mis eficiente ‘Tras la publicacin de Verdugo del amor recib una et tiea adversa en el The New York Times Book Review y una positiva mas tarde, la misme semana, en el New York Times. Varios de mis pacientes me dejaron mensajes o comenza ron la sesin siguiente preguntandome si habia visto la bue ta erica yconmisersndome por la adversa, En otra opor tunidad, tras una entrevista particularmente maliciosa de tn diario, on paciente me record quela gente usar cl da Fio para envolver peseado a dia siguiente Se dice que Harry Stack Sullivan, un psiquiatranortea- mericano my influyente, wna ver deseribiola psicoterapia ‘como una discusién de temas intimos entre dos persons, una de ellas més ansiosa que a otra. Y sielterapeuta desa- ‘olla més ansiedad que el aaciente, emtonces€l se vuelve dl pacientey el paciente, el erapeuta, Ademés, Ia sutoesti- ma del pacientese ve aumentada de manera radical al ser de ayuda para el erapeuta. He tendo la oportunidad en va- ras ocasiones de cuidar a fguras importantes en mi vida Enun caso pide brindar consuelo a un mentor desespers do y luego me llamaron para que trataraa su hij. En otra ‘oportunidad, ofect en varias acasiones consejo y consuelo un antiguo terapeuta mayor, lo vi durante una larga en fermedad y tuve el privlegio de estar a sw lado en el mo mento de su muerte. A pesar de haberme revelad Ins fr pilidad de los mayores, ests experiencias sirvieron para ‘enriquecerme y fortalecerm: | cariruie 36 Fomente la apertura del paciente La apertura es un ingrediente absolutamente esencial dela pscoterapia, Ningn paciente aprovechs la terapia st fo hay una apertura dest parte, Es uno de esos aconteci Trento autométicos de a terapla que notamos silo cuan Uo faltn, Mucho de lo que hacemos enla terapia —proveer linentceno seguro, establecr Ia confianza, explora ls fam tesla los suetos —sirve al propésto de la apertura ‘Cuando un paciente abe, deja expuesto un teritorio nuevo y significative, yreela algo asta ese momento des ‘onocido, algo particularmente diffi de hablar —algo po- {enclalnenteembarazoso, vergonzante,oincriminatoriom, Jams dejo de concentrarme tanto en el proceso del conte ido como en el contenido mismo, (Recuerde que el proce ose refiee ala naturaleza de la relacén entre las perso- thas dentro de la iteraceién.) En otras palabras, en alin momento, a menudo después de una discusidn total del Contenido, me aseguro de enfocar mi atencin al acto de lt Spertura del paciente, Primero me tomo el cuidado de trax tar tal accion con ternura y comentar lo que sito acerca ‘ela buena voluntad del paciente de confiar en mi. Lueg0 stuelwo mi atencion a la decision de compartir ese material ‘conmigo en ese moment. Tateoria de la “apertura vertical versus la apertura ho- zontal” puede ayudar a clarficar este punto, La apertura ‘Vertical se refiere a una apertura en profundidad acerea del ‘omtenido de la revelacign. Sila apertura iene que ver, por jemplo, con la estimulacién sexual que Te produce al ps ciente vestirse com ls ropa delsexo opuesto,entonces te fapeuta puede fomentar la apertura vertical indagando teerca del desarrollo histércp del cambio de ropa ode los ‘detalles y circunstancia particuares de Ia practica, es de- tir, que ropa ust el paciente, que fantasia liza, silo prac- tiea solo olo comparte con alguien, etcetera ‘Ea apertura horizontal, por el owe lado, es Ta aperture sobre el acto mismo dela apertura, Para facta la pert ‘horizontal formalamos preguntas tales como: ¢Que hizo posible hablar de eso hoy? (Cuan dificil fue para usted? {{Quiso compartir esto antes en otras sesiones? ,Qué lo de- {uvo? Dado que solo estamos usted y yo aqui, me imagino ique debe de tener algo que ve: con cémo supuso que yore ponderfa. (Los pacientes por lo general estan de acuerdo Com esta verdad autoevidente) ¢Cémo supuso que reacco- rnaria? (Qué respuesta vio hoy de parte mia? ¢Hay alguns pregunta acerca de mi respuesta que le gustaria hacerme? in terapia de grupo, el proceso de apertura entra den tro de un fovo particularmente agudo dado que as diferem ‘ere los miembros del grupo son muy evidentes.Es- tos pueden evaluat, con un censenso bastante notable asus ‘compaferos de grupo de acterdo con el grado de transpa Fencia. A le larga los grupos se wielven muy impacientes fon los miembros may cerrados ya falta de una buena dis- posicion a abrrse se vuelueuna cvestién importante den- tro del gp. ‘A menuido los miembros responden con impaciencia a las aperturas demorada."jAhora nos cuentas esa historia aque tienes desde hace tres sos! dicen 2Y todo eso deo {que nos hieste hablar durante los tims seis meses? Era ‘puro euento? Mira el temps que nos has hecho perder, 10> Gas esas reuniones en las que supusimos que tu matrimo- hia se estaba derrambando excusvamente por la frildad de tu mujer y su desinterés yor bi". Este proceso exige ain tervencin del teapeuta porque los pacientes no deben sr ut

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