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INSTITUTO DE EDUCACIÓN SUPERIOR TECNOLÓGICO

PÚBLICO NAVAL – CITEN

CURSO
INVESTIGACIÓN FORMATIVA

MONOGRAFIA
PORTE Y USO DE ARMAS DE FUEGO EN EL PERSONAL
CIVIL Y PERSONAL DE MARINA DE GUERRA DEL PERÚ

AUTORES
ALUM 2 ART CHANAMÉ ALVAREZ JUNIOR ALEXIS
ALUM 2 ART CHUMAN RAMOS JULIO ALEJANDRO

DOCENTE
ING. VALERIANO FERRER GONZALES ARTURO
DEDICATORIA

Dedicamos nuestro trabajo a todos nuestros compañeros que estudian para


formarse como futuros Oficiales de Mar, conscientes de la importancia de
nuestra carrera, así como el conocimiento de nuestra realidad en la Marina
de Guerra del Perú. A nuestros docentes e instructores que con su esfuerzo y
dedicación contribuyen en nuestra formación, aquí en esta alma mater,
CITEN.
RESUMEN EJECUTIVO

Las armas ligeras son armas de fuego que pueden ser transportadas y
descargadas por una persona, al contrario que las armas de artillería. Por
extensión, también se incluyen en esta categoría las armas automáticas que
se desarrollaron a partir de las portátiles como las ametralladoras, que usan
la misma munición que los fusiles militares o como las ametralladoras de
mayor calibre. Dado que la frontera entre las armas cortas y la artillería es
tan difusa, cada uno de los cuerpos militares define un calibre arbitrario a
partir del cual se habla de artillería. Los límites cambian con el tiempo.
Estas armas no tienen una definición estricta pero por lo general incluyen
rifles, pistolas, revólveres, fusiles, ametralladores ligeras y ametralladoras.

ÍNDICE

Caratula......................................................................................................................................... 1
Dedicatoria................................................................................................................................... 2
Resumen ejecutivo....................................................................................................................... 3

INTRODUCCIÓN
Las armas de fuego están presentes en las sociedades hace muchos años.
No se sabe con exactitud qué persona y qué país las inventó, pero se cree
que en el siglo XI, los chinos ya hacían uso de las mismas. Los europeos y
los árabes empezaron a utilizarlas en los siglos siguientes. De todas
maneras, las armas de fuego, se crearon con la finalidad de atacar y destruir
a otros seres humanos, animales, edificios y demás.

Al respecto, la RAD1 expresa que las armas pequeñas y ligeras son las
verdaderas armas de destrucción masiva y que todos los años generan más
de medio millón de muertes a nivel mundial y esto se debe a su pequeño
tamaño, su fácil acceso, su bajo precio y su poder letal. En la misma línea,
Adrián Marcenac2 , también miembro de la RAD, manifestó en el
programa “Intratables” de América TV (2016): “El arma tiene un objetivo,
y más allá de que muchas veces le podamos buscar alternativas para su uso,
el arma está hecha para matar”. En la actualidad, las armas generan un
sentimiento variado en las sociedades. Hay personas que valoran los
armamentos en cuanto a lo bélico, otros que lo repudian, algunos que los
utilizan para autodefensa, el deporte o la caza y otros que se hacen con las
armas para poder sustentar al crimen organizado.

La ONU, desde la oficina que lucha contra el crimen organizado en


América Latina y el Caribe, explicita que la trata de personas, el
narcotráfico y el lavado de dinero, son delitos imposibles sin las armas de
fuego. Son estos artefactos el punto en común que utilizan todos los
criminales para respaldar sus actividades delictivas y defenderse de otras
bandas criminales y de la policía.

En dicho contexto, nos encontramos con la problemática del uso de armas


de fuego en manos de la sociedad civil. Bandeira (2012, p.3) en “Armas
pequeñas y campañas de desarme. Matar los mitos y salvar las vidas”
explica que a pesar de la cultura o educación que se tenga, hay momentos
en la vida en que la gente se descontrola. En esas situaciones lo emocional
le gana ampliamente a lo racional y el tener un arma al alcance de la mano
hace la diferencia. Si no se tiene un arma, la violencia se puede hacer
presente de otras formas, como por ejemplo, una pelea, que provoca, en
menor medida, la muerte. En cambio, la irreversibilidad de un tiro
determina un fin trágico, el cual conduce a un drama para las familias de la
víctima y del agresor. En la misma línea, Fleitas & Dergougassian (2006)
manifiestan: "Evidentemente los problemas de la violencia o el delito
tienen múltiples causas y no se pueden explicar solo por las armas de
fuego. Sin embargo, su proliferación y el fácil acceso a ellas hacen posible
o agravan hechos de violencia. Por ejemplo, una tentativa impulsiva de
suicidio de un adolescente, una pelea familiar entre vecinos o en la vía
pública, en muchos casos no terminarían en una muerte sin la
disponibilidad de un arma de fuego." (Fleitas & Dergougassian, 2006, p. 4)
3 A su vez, los ciudadanos saben que las bandas criminales están armadas,
que la inseguridad está muy presente en el mundo.

Entonces, surge la duda sobre la concepción que tienen las personas acerca
de las armas de fuego: ¿Armas sí o armas no? ¿El crimen se combate con
armas de fuego? ¿Armas en pro de la legítima defensa? ¿Se deben usar las
armas para resolver conflictos interpersonales? Estas preguntas, varían
ampliamente en los distintos países. Hay algunos, como EE.UU., que
tienen muy instalado dentro de la sociedad la compra y uso de armas, a tal
extremo, que se venden armamentos en concesionarias de autos,
supermercados, tiendas de películas y en otros tantos lugares. En la
Argentina existe una importante tradición en relación con la libertad de uso
de las armas de fuego.

En el relevamiento poblacional realizado en agosto de 1810, por orden de


la Junta Provisional Gubernativa, inspirado por el Dr. Mariano Moreno, se
conoce que existían diez armas cada mil habitantes. Nuestra extensa y
deshabitada geografía hizo que la caza, para subsistencia primero y deporte
o actividad comercial después, se constituyera en una de las razones
fundamentales que impulsaba a la población de aquellas épocas a adquirir
armas de fuego. En general, en América Latina las armas de fuego en poder
de civiles no había sido considerado como un problema hasta la década de
los años setenta, donde varios factores políticos y sociales incidieron para
la proliferación de armas pequeñas en la sociedad civil. Bandeira (2012,
p.3) explica que en Latinoamérica todavía sigue pisando fuerte el modelo
del hombre guerrero, un prototipo que asocia a la masculinidad, entre otras
cosas, a las armas de fuego. Y este concepto refuerza una concepción de la
violencia arcaica. Como consecuencia del desarrollo industrial y
tecnológico hubo un crecimiento urbano importante y con él aumentó la
criminalidad, el uso de armas de fuego y la inseguridad de la población.
CAPÍTULO

Aprueban el reglamento de Ley que norma la fabricación, comercio,


posesión y uso por particulares de las armas y municiones que no son de
guerra

DECRETO SUPREMO Nº 007-98-IN

CONCORDANCIAS: R.M. Nº 1683-2005-IN-1701 (Aprueban Directiva


que establece Normas Complementarias para la aplicación de la Ley Nº
28397, sobre amnistía y regularización de tenencia ilegal o irregular de
armas, municiones, granadas o explosivos).
R.M. N° 707-2006-DE-CCFFAA (Aprueban Directiva que dicta Normas
Complementarias para autorizar la renovación de licencias de armas de uso
restringido para seguridad personal).

R.M. N° 1234-2008-IN-1706 (Aprueban Directiva “Normas


Complementarias para la Expedición de Licencias de Posesión y Uso de
Armas de Fuego de Uso Restringido para Seguridad Personal”)

EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA

CONSIDERANDO:

Que, por Ley Nº 25054, del 19 de junio de 1989 se norma la fabricación,


comercio, posesión y uso por particulares de las armas y municiones que no
son de guerra.

De conformidad con lo establecido en el numeral 2 del Artículo 3 del


Decreto Legislativo Nº 560 - Ley del Poder Ejecutivo, y en el inciso 8) del
Artículo 118 de la Constitución Política del Perú; y,

ARMAS DE USO CIVIL


Artículo 8.- Son armas de fuego de uso civil, aquellas que por sus
características, diseño, procedencia y empleo, son autorizadas por el
presente reglamento para defensa personal, seguridad, vigilancia armada,
caza, deporte y colección.

Las armas de fuego autorizadas para dichas actividades, sólo deben tener
cadencia de tiro por tiro y una capacidad de munición de acuerdo al
siguiente detalle:

a. Armas Cortas o de Puño

1) Revólver

Con capacidad de tiro de hasta ocho (8) cartuchos en el tambor.

2) Pistola

Con capacidad de tiro de hasta quince (15) cartuchos en la cacerina.

b. Armas Largas
1) Escopeta tipo Bombeo

No será mayor de ocho (8) cartuchos con alojamiento tubular.

2) Carabinas

Con capacidad de tiro de hasta quince (15) cartuchos en la cacerina.

Artículo 10.- Son armas autorizadas para seguridad personal, aquéllas


destinadas para la protección a personalidades, que ocupen puestos políticos
o empresariales, públicos o privados, considerándose en éstas a las pistolas
del tipo MGP-84 mini o similares, con capacidad de disparar sólo en la
modalidad de tiro

a. Escopeta de Repetición. (*)

De uno (1) o dos (2) cañones hasta el máximo calibre de doce (12) GAUGE,
con cañón de longitud mínima de dieciocho pulgadas (18") y con cañón de
longitud máxima de veintiocho pulgadas (28"), para uso fuera del radio
urbano.

(*) Denominación sustituida por el Artículo 1 del Decreto Supremo Nº 007-


2000- IN, publicado el 16-07-2000, cuyo texto es el siguiente:

"b. Escopeta de tiro por tiro."

b. Carabina, fusiles o rifles semiautomáticos

Hasta punto cuarenticuatro pulgadas (0.44") para uso fuera del radio urbano,
con excepción del calibre .223 (5.56 x 45mm.) en cualquier marca o
modelo, por ser de uso exclusivo de las FFAA y PNP. (*)

(*) Denominación sustituida por el Artículo 1 del Decreto Supremo Nº 007-


2000- IN, publicado el 16-07-2000, cuyo texto es el siguiente:

"c. Carabina, fusiles o rifles semiautomáticos hasta punto cuarenta y


cuatro pulgadas (0.44”), para uso fuera del radio urbano en la
modalidad de tiro por tiro."

c. Combinación Carabina - Escopeta

Que no exceda las especificaciones indicadas para ambos casos.


CAPITULO II

Municiones de uso civil


Artículo 16.- Son municiones de uso civil, los cartuchos compuestos por el
casquillo, fulminante, pólvora o carga de proyección y la bala (proyectil) o
perdigones, que se abastecen a las armas de fuego, para las actividades
autorizadas por el presente reglamento; y tienen la siguiente clasificación:
a. Para armas de defensa personal

Los cartuchos con proyectil de plomo o aleación con éste, del tipo
encamisetados (Full Metal Jacket) y semi-encamisetados (Semi Jacket) y de
punta blanda (Soft Point), que desarrollen una energía cinética en boca de
cañón no mayor de cuarenta Kilográmetros (40 Kgm)
b. Para armas de seguridad personal

Cartuchos con proyectil de plomo o aleación con éste del tipo encamisetados
(Full Metal Jacket) y semiencamisetados (Semi Jacket), de

punta ojival, plana o blanda y con munición de jebe que desarrollen una
energía cinética en boca de cañón no mayor de ochenta kilográmetros (80
Kgm). Están prohibidas las municiones 9mm.PB. (peso de proyectil 124
grains),.357 Magnum, 40 S&W, 45 ACP. y similares.
c. Para armas de vigilancia armada
1) Cartuchos permitidos para armas de defensa personal.
2) Cartuchos cargados con munición de jebe.
3) Cartuchos permitidos para caza, excepto las del tipo expansivo
(Hollow Point).

Licencias.

Artículo 89.- Las licencias a que se refiere la ley y el presente reglamento, son
documentos expedidos por la DICSCAMEC, donde consta la autorización para
el ejercicio de una actividad y/o la posesión y uso de armas y municiones de
uso civil, con sujeción a la ley y a los procedimientos y requisitos exigidos en
el TUPA.
Artículo 90.- Las licencias tienen una duración de dos (2) años prorrogable,
excepto las especiales (de uso temporal), el vencimiento de las licencias de
posesión y uso de armas de fuego coincidirá con la fecha de nacimiento del
usuario a excepción de las de uso temporal y aquellas correspondientes a las
Empresas de Seguridad y Vigilancia Armada cuyo término será la fecha de
vencimiento de la autorización de funcionamiento.

Artículo 94.- Para la renovación de la licencia de posesión y uso de arma de


fuego de uso civil, se debe cumplir con los requisitos mencionados en el
TUPA; su trámite deberá efectuarse treinta (30) días antes del vencimiento de
dicho documento.(*)
(*) Artículo sustituido por el Artículo 1 del Decreto Supremo Nº 0110-2001-
IN publicado el 29-12-2001, cuyo texto es el siguiente:

“Artículo 94.- Para la renovación de la licencia de posesión y uso de arma de


fuego de uso civil, se debe cumplir con los requisitos mencionados en el
TUPA; su trámite deberá efectuarse treinta (30) días antes del vencimiento de
dicho documento.
Su incumplimiento constituye infracción y se hará acreedor a una sanción
pecuniaria que establecerá la DICSCAMEC.”
Artículo 99.- Las licencias de posesión y uso de ARMAS PARA
VIGILANCIA ARMADA, serán otorgadas previa justificación, al personal

de las Empresas de Vigilancia Privada y de los Servicios de Protección Interna


de las empresas autorizadas por la DICSCAMEC. Este tipo de Licencia
autoriza el uso de las armas sólo para el cumplimiento de las funciones, bajo
responsabilidad compartida con el propietario del arma.(*)
(*) Artículo derogado por el Artículo 2 del Decreto Supremo N° 015-2002- IN,
publicado el 11-11-2002.
Artículo 100.- La posesión de armas autorizadas para Seguridad y Vigilancia
Armada, sólo permite la tenencia como máximo de hasta tres (3) licencias para
una misma arma.(*)

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