Ninguno de nosotros es perfecto y todos fallamos, particularmente en las relaciones humanas.
¡Qué fácil es esperar más de otros cristianos de lo que esperamos de nosotros mismos!. Rompe hielos. Se le llama santo a San Martín de Porras, pues logró, que perro, gato y pericote vivan juntos y en buenas relaciones. Es todo un milagro aprender a vivir en armonía. ¿Cómo o qué necesitamos para aprender a vivir tal como nos pide el Padre celestial? ¿Qué es soportar? Sostener o llevar sobre sí una carga o peso. Significa llevar una carga o peso. También significa sufrir, como lo hizo Jesús llevando su cruz. La palabra soportar viene del latín supportare compuesta de: El prefijo latino sub- (de abajo a una superficie más alta, servir de apoyo), como en subir, socorrer y subsidio. 1.- Perdonándoos los unos a los otros. El perdón es divino, es grandioso, el poderoso, es liberador, nos sana, nos da descanso Para aprender a perdonar es necesario experimentar el perdón de Dios, luego del arrepentimiento. Col_3:13 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. El Señor llamó a los doce con distintos temperamentos, costumbres, clases sociales y hasta se odiaban entre ellos, les dijo que deben perdonar a los que los ofenden, así como ellos fueron perdonados, es la oración del Padre nuestro Mt 6:12 2.- Amaos los unos a los otros. La marca distintiva de un verdadero cristiano es amar, pues Dios nos ama y nos ordena amarle a él y a nuestro prójimo y aún al enemigo. No es fácil soportar al prójimo, no es fácil ser comprensivo, no es sencillo ser empático, se requiere una gran dosis de amor para soportar sobre todo a los insoportables. Ef 4:2 Jesús mismo nos pide diríamos soportar, comprender, por amor aún a los enemigos Mt 5:43.44 Solo podemos amar hasta al enemigo si tenemos el amor de Dios, derramado por él mismo. Rom_5:5 y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado Y justamente la gente conocerá que somos de Cristo o verdaderos cristianos si amamos Jua_13:35 3.- Ayuda del Espíritu Santo para la paciencia Necesitamos mucha paciencia para aguantar al otro, algunas veces a nuestro propio cónyuge, a los hijos, a tus prójimos, a tus compañeros, a tus amigos, a tus hermanos de la iglesia. Pablo nos manda y dice: Soportándoos con paciencia. Efe_4:2 Y la paciencia no es algo que se vende en un supermercado, es el fruto de Espíritu. Gál 5:22 4.- Mirar cualidad y no debilidad. Todos tenemos debilidades, espinas, aristas y cosas que nos les gustan a los demás, es decir todos tenemos algo de insoportables San Pablo les escribe una carta a una iglesia y les dice que sean gentiles, recomienda también a dos hermanas que sean de un mismo sentir, en ése contexto y para mejorar las relaciones interpersonales, dice que debemos aprender a mirar o pensar en las cualidades de los demás en lugar de mirar las debilidades o defectos. Flp_4:8 5.- Somos parte de un cuerpo glorioso. Los cristianos debemos entender que somos parte de un solo cuerpo, el cuerpo de Cristo, de modo que debemos aprender a vivir amándonos, comprendiéndonos, soportándonos con amor, paciencia y humildad. 1 Cor 12:4,12,27 Por otro lado para tener un matrimonio, sano, durable, ejemplar debemos aprender a soportarnos con mansedumbre y paciencia. Si queremos edificar una familia, iglesia, empresa fuerte, unida, debemos aprender a interrelacionarnos con los demás, en otras palabras obedecer lo que se nos pide: Soportándoos los unos a los otros. 1 Cor 12:21,22,26 Todos tenemos habilidades y debilidades, cualidades y defectos, pero si aprendemos a sobrellevarnos y apoyarnos tomando lo mejor de cada uno, haremos una gran obra. Ilustración.- contar sobre el cajón de herramientas, entre ellos no se soportaban, es más se criticaban, hasta que vino el carpintero, tomó la madera, el serrucho, el cepillo, el tornillo, el martillo, la lija, el metro y construyó un lindo mueble. Se dieron cuenta que juntos y mirando sus cualidades, antes que sus debilidades, podían hacer algo, grande, útil y valioso. Conclusión.- Todos tenemos defectos, debilidades, espinas, pero con Cristo y en Cristo podemos aprender a soportarnos los unos a los otros y juntos apreciando y valorando quizá las pocas cualidades que tenemos podemos hacer algo grandioso y trascendente. Podemos edificar un matrimonio bendecido y ejemplar, una familia fuerte, sana, unida; así mismo una iglesia unida y llena de la presencia de Dios.