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Porqué es importante cuidar el

vínculo entre la salud física y la


emocional
Tendemos a pensar que cuidarse por fuera es sinónimo de estar sano pero lo cierto
es que va más allá: la buena salud es la combinación de la salud física y la salud
emocional. Y, trabajar estos dos niveles de forma conjunta, es la base para sentirnos
mejor.

Nuestro estado de ánimo o salud emocional tiene un efecto sobre el cuerpo


porque el cerebro está conectado al sistema inmune y afecta, de forma negativa o
positiva, sobre él.

4 consejos para mejorar tu bienestar emocional

Nuestra colaboradora nos ofrece 4 aspectos que debemos cuidar para mejorar
nuestra salud emocional:

• La autoestima o autoconfianza: No nos vemos siempre como nos ven los


demás. Es importante conocerse, saber cuáles son tus limitaciones,
aceptarlas, y sobre todo potenciar tus capacidades. Para ello pregunta a las
personas que mejor te conocen, familia, amigos... para que te indiquen que
es lo que más aprecian de ti, y con esa información que obtienes potenciar
los campos que ellos destacan.
• No dejarte llevar por los estados de ánimo negativos: Trabaja la
respiración consciente, inhalar profundamente y exhalar de manera
controlada. Este tipo de ejercicios respiratorios nos ayuda a relajarnos.
• Proyectar la serenidad mental al estado físico: Detectar los momentos en
los que la tensión nos afecta físicamente, lo que se conoce como conciencia
corporal, para que a través de técnicas como el yoga encontrar el equilibrio
evitando que el estado de la mente afecte al cuerpo o que la tensión sufrida
en nuestro cuerpo nos afecte a nuestro estado mental.
• Participar en actividades solidarias: Nos sentimos mucho más felices si
estamos abiertos a los demás. Te sentirás mucho mejor si te centras hacia
fuera, escuchando, ayudando, colaborando con los demás, que
centrándonos en ti mismo.

• Da importancia al descanso: Un buen descanso nos ayuda a nuestra salud


emocional y física. La mayoría de la gente necesita de 7 a 8 horas al día.
• Alimentación saludable: aunque te parezca mentira, los alimentos que
ingieres en tu dieta afectan tanto a tu bienestar emocional como a tu estado
físico. Seguir buenos hábitos alimenticios puede evitar incrementar la
ansiedad y el estrés.
• Ejercicio físico o deporte: moverse para estar saludable. Uno de los
consejos más habituales para tener bienestar emocional es la practica
continuada de ejercicio físico o deporte. Es aconsejable realizar 30 minutos
al día de actividad física.
• Deja los malos hábitos: el tabaco, alcohol y otras sustancias nos hacen
sentir bien a corto plazo, pero a la larga nos causan malestar y problemas de
salud.

Así que ya sabéis, si queréis estar sanos y cuidar el vínculo entre salud emocional
y física, debéis trabajar desde el cuerpo y la mente, a través de hábitos de vida
saludables y ejercicio físico.

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