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Guerra espiritual: Descripción y evaluación del

movimiento contemporáneo*
(Primera de dos partes)

Prof. Oscar Arias


Estudiante de Postgrado
Seminario Teológico Centroamericano

La lucha espiritual es un tema en el que cada vez se hace más énfasis en la escena
religiosa evangélica de hoy. En este artículo, el autor describe aspectos básicos acerca de
la historia, las doctrinas y las prácticas del movimiento. Como ftientes históricas señala
al movimiento misionero histórico, el pentecostalismo y la preocupación actual por
desarrollar nuevos métodos misioneros y de iglecrecimiento. Dentro de las doctrinas, el
autor señala la transmisión de demonios a través de objetos, la transmisión de
maldiciones e influencias demoniacas entre generaciones y la existencia de espíritus
territoriales. También se menciona las principales prácticas de la guerra espiritual como
la oración guerrera, las experiencias de liberación demoniaca y la cartografía espiritual.

Spiritual conflict is a topic more and more emphasized in the evangelical religious
scene of today. In this article the author describes basic aspects about the history,
doctrines and practices of the movement. As historical sources the article points to the
historical missionary movement, to Pentecostalism and to the current concern for
developing new missionary and church growth methods. Some of the doctrines, are the
demon transmission through objects, the transmission of curses and demonic influences
between generations and the existence of territorial spirits. It is also mentioned the main
practices of spiritual war, such as warrior prayer, the experiences of demonic liberation
and spiritual cartography.

INTRODUCCIÓN

El tema de la demonologia ha tenido gran resurgimiento en los últimos


veinte años, especialmente en relación con la llamada guerra o batalla
espiritual. Abundan pastores, misioneros o creyentes en general que se

* Este articulo es un extracto de la Tesis del autor para optar al titulo de Licenciatura en
Teología en el Seminario Teológico Centroamericano. En la segunda parte, que
aparecerá en el próximo número de Kairos, el autor hace una evaluación del
movimiento.
5 0 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

refieren al tema; algunos con ignorancia, incredulidad o rechazo, otros con


gran apertura y emoción.
El movimiento de guerra espiritual tiene a lo menos dos razones para
hacer énfasis en sus doctrinas y prácticas como medio para lograr avances
espirituales significativos en la misión de la iglesia: 1) La creencia de que
se está "...penetrando una era de confrontación y de enfrentamiento
definitivo entre el Reino de Dios y el reino de las tinieblas".1 En este
enfrentamiento, se dice que gran cantidad de espíritus malignos "están
siendo lanzados para derribar a los líderes y desintegrar a las iglesias".2
2) La convicción de que las prácticas de la guerra espiritual son un medio
bíblico y necesario para lograr un evangelismo más eficaz.3
Esta concepción del mundo invisible está produciendo toda una
estrategia llamativa y novedosa, la cual se presenta como la manera en que
la iglesia debe hacer la tarea evangelística y misionera, si desea cosechar
grandiosos resultados en estos últimos días. Dentro de la novedosa
metodología misionera, el movimiento de guerra espiritual propone
doctrinas y prácticas que van más allá de la demonologia tradicional en la
teología sistemática. Temas como: demonización, espíritus territoriales,
cartografía espiritual, liberación, surgen como elementos esenciales de la
misión de la iglesia, vista ahora como un "encuentro de poderes" entre el
Reino de Dios y el reino de las tinieblas.
Para Charles Kraft, profesor del Seminario Teológico de Fuller en
California, los temas y las prácticas propuestos por la guerra espiritual
son del todo bíblicos, pero poco entendidos por aquellos que sólo
"...aceptan mentalmente la realidad de lo sobrenatural".4 Refiriéndose a los
que critican el movimiento de guerra espiritual, comenta Kraft:

Muchas cosas nos parecen bíblicas a nosotros y no a ellos porque no han


experimentado ese cambio hacia la práctica de lo sobrenatural. Ellos
sólo conceden a Satanás un papel nominal en la vida humana, mientras
que el Nuevo Testamento lo llama "príncipe" (Juan 14:30 y Efesios 2:2) y
"dios de este siglo" (2 Corintios 4:4).5

Edward Murphy, el autor más sistemático del movimiento, amplía


muy bien el contenido de la nueva teología de la guerra espiritual en el
prefacio de su voluminosa obra, Manual de Guerra Espiritual Dice así:

Hoy en día Dios parece estar despertando otra vez a su Iglesia a la clara
realidad de que estamos en guerra contra el mal. Y ese mal es personal,
no impreciso; sobrenatural, el reino de Satanás. Jesús, el Cordero (El
Salvador manso y sacrificado) y León (el guerrero Poderoso) nos llama a
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 51

salir de nuestra complacencia para convertirnos en soldados de la cruz.


Ceñidos de toda la armadura de Dios debemos vencer al maligno, desafiar
a los principados y potestades que mantienen cautivos a individuos y
naciones con la autoridad que tenemos en Cristo mediante la declaración y
la intercesión...".6

Ante todas las afirmaciones anteriores, resulta pertinente conocer los


antecedentes históricos del movimiento, así como una presentación
detallada de sus doctrinas y prácticas, tal y como las enseñan sus
principales exponentes.

ANTECEDENTES HISTÓRICOS

La guerra espiritual no es un tema totalmente desconocido en la


historia de la iglesia cristiana. Como bien lo ha dicho Edward Rommen,
"la confrontación abierta con los poderes de las tinieblas ha sido una
característica del cristianismo durante toda su historia".7
Según Rommen, en el año 252 d.C, Cornelio (obispo de Roma)
reportó la existencia de por lo menos 52 personas que se dedicaban a
expulsar demonios8, lo cual demuestra la realidad del enfrentamiento con
espíritus en esta época temprana de la iglesia. Por su parte, Justo
González informa que Gregorio el Grande, en el siglo VI d.C, fue el
primero en escribir sobre el tema de los demonios y el conflicto espiritual
de los cristianos.9 Ya en el siglo XVI son bien conocidos los episodios de
lucha espiritual de Martín Lutero, "...para quien los ataques de Satanás
eran algo muy real".10
No cabe duda que el tema de la guerra espiritual ha estado en el
pensamiento y la práctica de la iglesia a lo largo de la historia. Sin
embargo, nunca se formó, en los períodos citados anteriormente, "...un
movimiento en la iglesia respecto a estas cosas".11 Lo nuevo del
movimiento del presente siglo, son los énfasis particulares que ha recibido
el tema en relación con el crecimiento de la iglesia y el movimiento
misionero mundial.

El movimiento misionero

Claramente se puede percibir que desde 1980 comienza a escucharse


toda una nueva terminología de guerra espiritual asociada con la tarea
misionera de la iglesia.12 Especialmente algunos misioneros occidentales,
que sirvieron en países del tercer mundo, comparten testimonios similares
sobre su enfrentamiento con realidades espirituales muy diferentes a los de
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sus países de origen y para las cuales no se les había preparado.13 Estos
misioneros, "...confrontados con otras religiones y culturas, se han visto
obligados a tomar en serio la oposición espiritual"14 y, a partir de múltiples
experiencias, han tenido que redefinir su demonologia y métodos para
hacer la misión.

Las tres "olas" del Espíritu y la guerra espiritual15

Existe también una relación estrecha entre el movimiento de guerra


espiritual y las prácticas del movimiento pentecostal, puesto que "el énfasis
en lo milagroso ha sido una constante en muchos movimientos de
renovación de este siglo".16 Dentro de lo milagroso se cuentan las
liberaciones demoníacas, una de las principales enseñanzas y prácticas de
la guerra espiritual.
El movimiento de guerra espiritual contemporáneo es percibido por
muchos de sus maestros y autores como un nuevo y legítimo mover del
Espíritu Santo. El pastor costarricense Rony Chaves, conocido por sus
famosas escuelas proféticas, lo ha expresado de la siguiente manera:

Una nueva "ola" del Espíritu Santo baña hoy la tierra. Es un nuevo y
poderoso énfasis sobre la "Guerra Espiritual". Tema actual del Señor de
los Ejércitos con el cual está preparando a Su pueblo para infringirle (sic) a
Satanás la derrota más grande de la Era Moderna.17

Otro representante del movimiento lo expresa así:

En esta década de los noventa ha empezado ya el último de estos ciclos o


moveres del Espíritu de Dios. Un mover de tan poderosa magnitud que
será el que llevará a la iglesia a su máxima expresión de gloria. Un mover
que levantará al Victorioso Ejército de Dios en una tal potencia de la
manifestación del Espíritu Santo que someterá a todos los enemigos de
Jesucristo bajo el estrado de sus pies.18

Es quizás por estas razones que Edward Rommen considera a los


movimientos de renovación como uno de los cuatro antecedentes históricos
que dieron erigen a la preocupación por el tema de la guerra espiritual.19

Una nueva estrategia para las misiones

La preocupación por tener un mejor y mayor impacto misionero ha


Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 53

influido en la elaboración de nuevas estrategias para la realización de la


misión de la iglesia a finales de este siglo. Particularmente ha sido Peter
Wagner, el misiólogo, quien ha contribuido más a la elaboración de
estrategias misioneras como el "iglecrecimiento", un movimiento que utilizó
la sociología para promover el crecimiento de la iglesia.20
Después del "iglecrecimiento", se pasó al movimiento de "evangelismo
con poder", un movimiento que comenzó en 1982 en el Seminario
Teológico Fuller. John Wimber y Peter Wagner comenzaron a enseñar un
curso llamado "señales y prodigios y el crecimiento de la iglesia",
enfatizando lo milagroso como medio para el éxito evangelístico y
misionero de la iglesia.21
Por último, se levanta con mayor fuerza, en esta última década del
siglo veinte, un nuevo movimiento que enfatiza la guerra espiritual
estratégica como medio, a la par de otros, para lograr grandes resultados
en el crecimiento de la iglesia alrededor del mundo. Este movimiento
impulsa la necesidad de saber "cómo usar las armas espirituales para
mejorar la evangelización".22

DOCTRINAS PRINCIPALES DEL MOVIMIENTO

Como todo movimiento en la historia de la iglesia, la guerra espiritual


estratégica también presenta énfasis doctrinales particulares, enmarcados
dentro de una novedosa demonologia. Estos énfasis concuerdan con el
carácter pragmático del movimiento que, como se ha dicho antes, intenta
lograr resultados en la evangelización y las misiones mundiales. Cuatro
doctrinas son las que sobresalen en la nueva enseñanza de guerra espiritual:
transmisión de demonios a través de objetos, a través de maldiciones, entre
generaciones y los espíritus territoriales.

Transmisión de demonios a través de objetos

Una enseñanza básica de la guerra espiritual consiste en afirmar que


ciertos objetos, especialmente los utilizados en el ocultismo y las prácticas
de la brujería, pueden ser medios de transmisión demoníaca para las
personas que los tienen o utilizan. Estos objetos son como puentes a través
de los cuales los demonios pueden introducirse en la vida de la gente, con el
propósito de influirla o controlarla. Según Charles Kraft, se puede
discernir a "...seres sobrenaturales (como Dios, ángeles o Satanás y
demonios) como la fuente del poder que puede manifestarse a través de
palabras y objetos".23
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Es el campo de la experiencia lo que comprueba la creencia en el


contagio demoníaco a través de objetos. Los encuentros con personas
endemoniadas y las sesiones de liberación han confirmado, según los
maestros de la guerra espiritual, sus conclusiones respecto a los demonios
y la influencia que ejercen a través de objetos. Así lo expresa Kraft:

Es probable que todos nosotros, que trabajamos con personas


endemoniadas, hayamos tenido la experiencia de no avanzar nada hasta
que la persona se quite un objeto (que puede ser un collar, un anillo o una
alhaja). En la mayoría de los casos, cuando le preguntamos a la persona
acerca del objeto, encontramos que lo habían consagrado al poder satánico
o que lo había recibido de alguien relacionado con el ocultismo. En tales
casos, asumimos que los objetos han recibido cierta capacidad de transmitir
el poder del espíritu con el cual están asociados.24

Por su parte, Edward Murphy, al narrar la experiencia de opresión


demoníaca de su propia hija, comenta que la cadena usada por ella con un
símbolo ocultista "servía de amuleto y atraía a los espíritus malos a su
vida11.25 Es por eso que ella no iba a encontrar una liberación completa de
los espíritus demoníacos hasta que se quitara ese objeto y renunciara a las
fuerzas espirituales asociadas a él. 2 6
Objetos que las personas tienen dentro de sus casas pueden traer
maldición a sus vidas debido a la influencia demoníaca con la que han
estado relacionados. Hablando de los problemas que vive mucha gente por
este tipo de objetos, Ana Méndez comenta en su libro:

Hay infinidad de personas que sufren opresión demoníaca, tienen miedos


nocturnos, escuchan ruidos o ven objetos moverse en sus casas; O que por
otro lado, han sido víctimas de robos, pérdida de trabajo, constantes
situaciones difíciles en cuanto a la economía, sufren de enfermedades
dolorosas e inexplicables; Otros han padecido accidentes y hasta suicidios
de familiares; O bien rebeldía por parte de los hijos o por parte de las
personas que conviven con ellos, (sic), Porque hay objetos dentro de su
casa que están trayendo maldición a sus hogares aun no conociendo sus
características.27

Entonces son los objetos usados en la magia, la masonería y en todas


las formas de lo oculto, los que producen el poder de las tinieblas.28
Timothy Warner, profesor de misiones en el Seminario Teológico
Trinidad y promotor de la guerra espiritual estratégica, afirma: "...las
personas que se meten en prácticas ocultas corren el riesgo de invitar a
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demonios a llenar un objeto con su poder, de modo que los demonios


queden relacionados con ello".29 Esto pareciera limitar el poder de los
objetos contaminados con demonios a las personas que voluntariamente se
introducen al mundo del ocultismo, pero más adelante el mismo autor
comenta que "...los espíritus malignos utilizan tales objetos para llegar a la
gente"30, sean practicantes del ocultismo o creyentes consagrados a Dios.
Kraft presenta en su libro, Tratando con la demonización, los
siguientes ejemplos de cómo demonios se asocian a casas o edificios debido
a pecados, muertes o actividades ocultas ocurridas allí anteriormente:

Un demonio que eché de una mujer reclamó el derecho de habitar en ella


porque vivía un una casa cuyo dueño anterior había cometido adulterio...
He tenido que ver con otros demonios que reclamaban derechos sobre casas
porque allí se había realizado una actividad oculta o había habido una
muerte allí, y en una ocasión con un demonio que reclamaba su derecho
sobre una iglesia por un adulterio cometido en ella.31

Otro ejemplo lo ofrece Peter Wagner, relacionado con el poder de


objetos sobre personas que antes se involucraron en la hechicería y se han
convertido al evangelio. Hablando de Manuel Sena, hechicero de Brasil
antes de su conversión, narra lo siguiente:

Secretamente ocultó uno de sus amuletos de metal, envuelto en una tela,


dentro de una botella que guardó en una caja. Aunque era creyente, los
demonios no lo dejaban en paz. Desesperado les pidió al fin a sus
hermanos que lo ayudaran, y una noche oraron con él. Fue arrojado a
tierra por algún poder demoníaco y, mientras se hallaba en estado
comatoso, una voz extraña salió de sus labios, revelándoles a los demás el
secreto del amuleto.32

Según Wagner, la realidad de la hechicería practicada, especialmente


en países latinoamericanos, debe hacer a los evangélicos tomar con más
seriedad "...la confrontación de fuerzas entre Jesucristo y el diablo...".33
Tomar en serio las fuerzas en conflicto significa, en el caso de tratar con
personas demonizadas, echar fuera a los demonios a través de sesiones
especiales de liberación, sean creyentes o no. Es importante ayudar a los
que se han involucrado en prácticas ocultistas, aconsejándoles que
renuncien a esas prácticas y confiesen sus pecados al Señor. También será
necesario que ellos mismos, si desean ser completamente liberados, se
deshagan o destruyan todos los objetos que tengan en su pertenencia y
deshonran a Dios.34
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Transmisión de demonios a través de maldiciones

La enseñanza de la guerra espiritual sobre el tema de las maldiciones


está muy ligada al de la herencia o los problemas generacionales, así como
al de los espíritus territoriales. Sin embargo, estos temas se deben separar
para entender mejor lo que cada uno significa y cómo relacionarlos. El
común denominador de todas las doctrinas propuestas por los maestros de
la guerra espiritual es la influencia de los espíritus demoníacos sobre las
personas. En el caso de las maldiciones, la influencia demoníaca se puede
dar en un momento dado y/o heredar a través de la línea generacional.
Según la enseñanza del movimiento de guerra espiritual, las
maldiciones son declaraciones verbales, de carácter formal, que "...liberan
energía espiritual hacia la persona o el objeto maldito".35 Estas maldiciones
pueden venir de cuatro fuentes distintas: Dios, los siervos de Dios, el
mundo espiritual y las personas que sirven al Diablo.36 Hablando del
trasfondo veterotestamentario de las maldiciones, comenta Murphy:

Las maldiciones no se utilizan allí con la idea occidental de proferir


juramento o decir palabras soeces. En el Antiguo Testamento, maldecir es
un concepto de poder destinado a liberar una fuerza espiritual negativa
contra el objeto, la persona o el lugar maldito. Esto es cierto incluso
cuando Dios maldice.^

El concepto de maldecir tiene que ver entonces, con el poder de las


palabras pronunciadas por una persona hacia otra, o hacia algo, y los
efectos que pueden producir esas declaraciones verbales. Lo mismo se
podría decir del concepto opuesto a las maldiciones, es decir, las
bendiciones. Tanto lo uno como lo otro ejerce poder efectivo para bien o
paramal.
Según Kraft, las palabras que se pronucian son un elemento vital en el
campo de las maldiciones, ya que éstas "...sirven de vehículo para el poder
que se transmite a otras cosas".38 Sin embargo, en el caso de las
maldiciones que vienen por influencia de poderes ocultos, el poder de estas
maldiciones no reside "...en las palabras mismas, sino en el diablo que está
detrás de las maldiciones".39
Cindy Jacobs, maestra de la guerra espiritual estratégica y fundadora
del ministerio "Generales de Intercesión", describe las maldiciones que
trasmiten poder demoníaco como una "fortaleza del ocultismo".40 Estas
maldiciones pronunciadas por brujos, hechiceros y satanistas afectan
profundamente la vida de los hombres, pues fortalecen el poder de los
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 57

demonios sobre ellos. Incluso los pastores y líderes evangélicos son


atacados debido a los hechizos o las maldiciones que lanzan los
practicantes del ocultismo. Así lo explica Jacobs:

Los espíritus territoriales sobre una ciudad o región reciben enorme poder
mediante conjuros del ocultismo, maldiciones, rituales y fetiches... Los
líderes cristianos con frecuencia no se dan cuenta de que esto realmente
está sucediendo. Muchos pastores y líderes está bajo tremendo ataque
satánico y, o bien no se dan cuenta de lo que está ocurriendo, o están tan
vapuleados, desanimados y agotados que no pueden luchar contra la
masacre.41

A través del lanzamiento de maldiciones y hechizos, los participantes


del ocultismo atacan la vida de los cristianos, produciendo caídas en el
pecado e inmoralidad sexual, enfermedad sin causa natural, confusión en la
mente, insomnio, sueños sexuales repetidos con frecuencia, fatiga extrema
y actitudes negativas inexplicables.42
Para muchos de los autores antes mencionados, es claro que los
cristianos no están exentos del poder de las maldiciones, así como también
pueden beneficiarse de las bendiciones de Dios o de hermanos en la fe. 43
Sin embargo, pueden presentarse ciertas condiciones previas para que las
maldiciones tengan efecto sobre la vida de las personas. Como lo aclara
Kraft:

Interpreto el texto de Proverbios 26.2 en el sentido de que una maldición


sólo afectará a una persona si existe una causa interna que la justifique, así
como un pecado o una posesión demoniaca. Esto se pudo verificar en la
mayoría de las personas a las que traté y que sospechaban ser víctimas de
maldiciones. Pero hubo algunas excepciones enigmáticas. Puede ser que
hubiera algo que no llegamos a descubrir, o puede ser que Dios, como en el
caso de Job, tuviera alguna razón para que la maldición diera en el
blanco.44

Derek Prince, quien ha escrito un libro completamente dedicado al


tema de las bendiciones o las maldiciones, presenta siete indicaciones de la
presencia de una maldición en la vida de las personas. Esta Usta la ha
compilado a través de la observación y la experiencia, resultando para él
íntimamente correspondiente a las maldiciones que enumerara Moisés en
Deuteronomio 28:

1. Colapso mental o emocional, o ambos.


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2. Enfermedad repetida o crónica (especialmente si es hereditaria).


3. Esterilidad, tendencia al aborto o problemas femeninos relacionados.
4. Desintegración del matrimonio y distanciamiento familiar.
5. Continua insuficiencia económica.
6. "Propensidad a los accidentes".
7. Una historia de suicidios y muertes prematuras o antinaturales.45

Los maestros de la guerra espiritual consideran que gran cantidad de


creyentes son víctimas de maldiciones pronunciadas por gente involucrada
en prácticas ocultistas o satánicas. Murphy, por ejemplo, opina que estas
maldiciones son eficaces, pueden implicar demonización y, aunque "...no
son siempre permitidas por Dios, a menudo él las autoriza" 4 6 Puesto que
las maldiciones "...son elaboradas con invocaciones a los espíritus y magia
satánica para hacerlas más poderosas, sólo pueden ser vencidas por el
poder superior de Dios". 47 Es aquí donde entra enjuego la importancia de
la liberación y la oración de guerra espiritual para deshacer las obras del
enemigo.
Murphy concluye su sección sobre las maldiciones en el mundo
espiritual con el siguiente párrafo desafiante para la iglesia:

Esto nos llama de nuevo a reconocer que estamos en guerra. Debemos


aprender a movilizar a los creyentes para la oración de combate a fin de
romper esas maldiciones demoníacas. No debemos permitir que la verdad
bíblica de la derrota de los principados y potestades satánicos nos
adormezca en una complacencia altiva e indiferente diciéndonos que no
nos puede suceder. Esto sería ingenuidad bíblica e histórica.48

Este llamado de los que enseñan la guerra espiritual estratégica es,


según ellos, urgente, especialmente para la iglesia en América Latina. La
realidad de las maldiciones, las consultas a los brujos, la astrologia, las
curaciones ocultistas, etc., hacen necesario ima respuesta profundamente
espiritual de parte del pueblo de Dios. 49 Todas estas realidades confirman
que "la iglesia está en lucha con esos seres invisibles, conocidos como
demonios o espíritus inmundos, que intentan dominar y controlar vidas y
circunstancias".50
Harold Caballeros, pastor guatemalteco y coordinador de "Red de
Guerra Espiritual" para América Latina, presenta un acercamiento distinto
al tema de las maldiciones. Para él, son las decisiones de los hombres las
que también producen bendiciones o maldiciones sobre su vida o sobre una
nación. Como ejemplo utiliza la desobediencia de Adán y Eva a las
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 59

indicaciones divinas en Génesis 2:15-16, como la puerta de entrada de las


maldiciones a la experiencia humana y terrena.51
Puesto que el hombre decidió voluntariamente seguir el camino de
Satanás, comienza el reino de tinieblas sobre el mundo; un reino
caracterizado por las maldiciones y la opresión. Así lo explica:

El verdadero fondo de la guerra espiritual es que ahora se plantea la


posibilidad de que realicemos nuestras propias decisiones: decidir entre el
camino de Dios, o escoger el camino del pecado. Cada decisión tiene
resultados para siempre y crea un tejido espiritual que forma la cubierta de
tinieblas sobre una nación.52

Entonces son las decisiones pecaminosas de los hombres las que


también producen maldiciones sobre individuos o naciones, causando
daños aún a través de las generaciones. Estas maldiciones deben ser
enfrentadas y destruidas, ya que "una nación entregada al satanismo, la
idolatría y los caminos distintos a los de Dios, crea maldición sobre toda
esa tierra y le da poder y dominio a los principados y potestades".53
Algo nuevo mencionado por Caballeros es la posibilidad de que las
acusaciones o criticas de los cristianos sobre otros creyentes tengan poder
de maldecirlos, causándoles daños físicos o espirituales. Para él, "los
creyentes sufrimos depresiones, ataques y aun enfermedades por causa de
la acusación de otros creyentes, ya que se crea encima de nosotros una
cubierta de tinieblas".54 Aunque no lo menciona directamente, Caballeros
da a entender que los mismos creyentes, con sus maldiciones, pueden
convertirse en agentes directos de Satanás para causar daño a otros
creyentes.
La nota dominante en el tema de las maldiciones, así como en todos los
demás, no es de un pesimismo atemorizante. Al contrario, cada enseñanza
tiende a descubrir las artimañas del enemigo y proveer las armas necesarias
para vencerlo. Así lo expresa la misionera brasileña Neuza Itioka,
animando a la iglesia a participar en la guerra espiritual:

Esta guerra, este conflicto en que estamos metidos, es una guerra que ha
sido ganada y conquistada por el Señor. Es la guerra del Señor. Él quiere
que seamos partícipes en lo que ya fue conquistado. Por tanto,
involucrémonos en ella como iglesia de Jesús, llenos de la presencia viva
del mismo Señor resucitado, discerniendo las artimañas y estrategias de
Satanás y ejerciendo la autoridad que nos ha sido dada para liberar a
millares de personas del cautiverio y dominio de los principados y
potestades.55
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Transmisión de demonios entre generaciones

La doctrina de la transmisión generacional de demonios está en intima


conexión con la de las maldiciones, ya tratada anteriormente. La idea
básica de esta doctrina es que los demonios pueden ser transmitidos en una
familia de generación en generación, debido a maldiciones, pecado o al
involucramiento de los padres en la hechicería y las prácticas ocultistas.
Para René Peñalba, pastor y promotor de la guerra espiritual en
Honduras, las maldiciones, por ser declaraciones verbales de la gente,
hacen daño a las generaciones subsiguientes.56 Este daño puede consistir
en opresión demoníaca o enfermedades sobre una familia, una iglesia o una
nación. Es por eso que se hace necesario identificar la causa de la opresión
y orar por la liberación, reprendiendo todas las maldiciones.57
Hablando del "pecado generacional", Murphy declara la posibilidad de
que los padres, debido a pecados cometidos, transmitan demonios a sus
hijos. Por medio de la liberación a personas con problemas espirituales, ha
podido comprobar que "...los demonios parecen identificarse con el linaje,
lo cual produce su transmisión de padres a hijos, su carácter hereditario y
la demonización general en potencia.58 El autor, así como otros escritores
de esta línea, se refieren a Éxodo 20:5 como apoyo bíblico para la
enseñanza sobre la transmisión generacional de demonios. Sin embargo,
aclara cuál es el carácter del pecado que causa problemas en la herencia:

El contexto en que se dan dichas advertencias es muy claro: ciertos cabezas


de familia, por lo general varones, se han rebelado contra Dios y Él dice
que le aborrecen (Éxodo 20.5). Esto implica un abandono deliberado del
Señor y, por lo general, si no siempre, el servir a otros dioses; negando a
Yahvé el amor y la obediencia que su señorío único y absoluto exige
(Éxodo 20.5,6; Deuteronomio 5.9b, 10; 18.9-14).59

Él concluye diciendo que "el ministerio a personas afligidas por


demonios que han sido transmitidos a través del linaje familiar, siempre
corrobora este punto".60 Es decir, él relaciona el pecado de rebelión contra
Dios con la opresión demoníaca que sufren los hijos de padres que se
involucraron en idolatría y rebelión.
Kraft apela a su experiencia en el ministerio de liberación como un
argumento convincente de la transmisión generacional de demonios. Así lo
explica:
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 61

...con frecuencia he tenido que echar demonios, provenientes de la


masonería o de otros movimientos no cristianos. Dentro de la masonería,
hay personas que se dedican a sí mismas y a sus descendientes a Lucifer.
En algunos casos, hubo contacto familiar con la persona que hizo la
dedicación. Pero, en muchos otros casos, se trataba de un abuelo con el
cual el contacto era mínimo; me parece, entonces, que la única explicación
plausible es la transmisión generacional de demonios.61

Él ha tratado con personas endemoniadas que no estaban bajo un


estado de pecado o de rebelión, pero que "...eran víctimas de los pecados de
otros".62 Por esto es necesario, según Kraft, que los pastores y consejeros
se esfuercen por investigar y descifrar las causas de la intromisión satánica
en la vida de las personas a quienes ministran.63
Para romper con el poder demoníaco sobre las generaciones, Murphy
recomienda la confesión de los pecados en el linaje familiar, a la manera de
Nehemias 1.4-9 y 14.20, como una manera para destruir la transmisión de
demonios "...en las vidas de aquellos nuevos convertidos que proceden de
familias no cristianas".64 Él mismo aconseja a los padres adoptivos que
procuren la liberación de sus hijos en una sesión especial para ello. 65
Caballeros, usando también Éxodo 20:5, comenta que, especialmente
la idolatría, produce una maldición generacional sobre las personas. Para
él, una persona, aún sin saberlo, puede enfrentar problemas espirituales por
haber tenido "...un tatarabuelo, bisabuelo o abuelo idólatra".66 Estos
problemas se dan por la transmisión de "espíritus generacionales" que,
según Kraft, penetran en la vida de las personas por medio de la dedicación
o la maldición de un antepasado de estos. 67 Luego ofrece la siguiente
ilustración:

Los espíritus generacionales tienden a provocar los mismos problemas de


una generación a otra. En un caso, descubrimos que tres generaciones
sucesivas de mujeres necesitaron histerectomías casi a la misma edad. Eso
no probó la existencia de un espíritu generacional, pero sí nos advirtió
acerca de su posible presencia.68

Es obvio que la guerra espiritual debe incluir, como parte del


ministerio de liberación, la investigación de detalles generacionales en la
vida de los individuos. Esto se hará con el fin de descubrir si ha habido un
contagio de demonios que deben ser confrontados y echados fuera. Sólo de
esta manera, las personas que manifiestan problemas serios y repetitivos
pueden ser liberadas para vivir a plenitud la vida cristiana normal.69
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Espíritus territoriales

La enseñanza sobre espíritus territoriales es quizás la más nueva y la


que más énfasis recibe en las enseñanzas del movimiento. El resultado
práctico de esta doctrina ha sido la elaboración de una estrategia novedosa
para hacer guerra espiritual, llamada "cartografía o mapeo espiritual", algo
considerado por Peter Wagner como "...una de las cosas más importantes
que el Espíritu le está diciendo a las iglesias en la década de los noventa".70
Antes de presentar la doctrina de los espíritus territoriales es
importante saber que la guerra espiritual, según los maestros del
movimiento, se da en tres niveles distintos, pero muy íntimamente
relacionados. Apoyándose en tres capítulos del libro de Hechos (13, 16 y
19), Wagner, por ejemplo, enseña que:

Tres niveles de guerra espiritual se pueden discernir claramente, todos


relacionados el uno al otro por medio de las intrincadas obras del reino de
las tinieblas: (1) la guerra espiritual de nivel básico, que es echar
ordinariamente a los demonios fuera de las personas; (2) la guerra
espiritual a nivel de lo oculto, que involucra el poder satánico de magos,
adivinos, brujos, canalizadores de la Nueva Era, shamanes y similares; (3)
la guerra espiritual de nivel estratégico, que tiene que ver con los
principados, con los poderes y espíritus territoriales.71

La doctrina de los espíritus territoriales encaja dentro del tercer nivel


de guerra espiritual, denominado "guerra espiritual estratégica". Según
Peter Wagner, este tipo de acercamiento al tema de la guerra espiritual es
una parte del evangelismo con poder, algo que parece no ser muy bien
comprendido por la iglesia.72
Para Harold Caballeros, la doctrina de los espíritus territoriales "se
refiere al poder de ciertas entidades espirituales que ejercen poder y
dominio exclusivamente en un área geográfica específica".73 La base
bíblica para apoyar estas ideas surge de algunos textos del Antiguo, así
como del Nuevo Testamento. El texto más usado para apoyar la idea de
demonios dominando lugares es Daniel 10:12,13,20. Los textos dicen así:

Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que


dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios,
fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido. Más el
príncipe del reino de Persia se me opuso durante veintiún días; pero he
aquí Miguel, uno de los principales príncipes, vino para ayudarme, y quedé
allí con los reyes de Persia. Él me dijo: ¿Sabes por qué he venido a tí?
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 63

Pues ahora tengo que volver para pelear contra el príncipe de Persia; y al
terminar con él, el príncipe de Grecia vendrá.

La interpretación común que hacen los maestros del movimiento es


que el "príncipe de Persia" se refiere a una entidad espiritual que dominaba
esa región particular, un demonio poderoso contra el cual el ángel de Dios
tuvo que pelear antes de llegar a Daniel.74 Por su parte, Kraft utiliza
Efesios 6:12 y la realidad de ciertos pecados en lugares distintos para
probar la territoriedad de los demonios. Así lo explica:

Efesios 6.12 indica que existe una jerarquía del poder satánico. Se puede
deducir, por tanto, que se les asignan demonios a ciertos grupos de
personas o naciones. El hecho de que haya regiones enteras que se
caracterizan por cierto tipo de pecado refuerza tal idea.75

Luego añade: "Se debe mencionar también los experimentos hechos en


Argentina, en los que se contrarrestó el poder satánico sobre territorios o
grupos étnicos, con resultados evangelísticos muy positivos".76
Rita Cabezas, quien ha estado involucrada por años en un ministerio
de liberación en Costa Rica, ofrece el texto de Marcos 5:10 como otra
comprobación bíblica de la asignación territorial demoníaca. El texto se
refiere a la confrontación y expulsión de demonios por Jesús al hombre de
Gadara. Según la autora, los demonios le rogaban a Jesús que no los
enviara de aquella región porque "...les asustaba la idea de ser enviados a
otro territorio y de lo que podía sucederles si eran encontrados fuera de la
región asignada".77 Además de esto, según Cabezas, su experiencia en la
liberación de gente endemoniada le ha confirmado lo que enseña el texto de
Marcos 5. En sus propias palabras:

Me ha pasado muchas veces que los demonios me ruegan que no los saque
de una persona porque sus superiores los castigarán por perder la batalla.
Esto podría tener relación con el ser enviados fuera de su territorio. Un
espíritu de alto rango me dijo: Jesús dice que tengo que irme de este país,
al este. No puedo regresar aquí.78

Como puede verse, así como en otros temas, los maestros de la guerra
espiritual afirman que la Escritura y la experiencia comprueban la
veracidad de sus enseñanzas.
El trabajo de los espíritus territoriales sobre un grupo étnico o nación
no sólo se limita a mantener su dominio sobre los no cristianos, sino
también a estorbar la obra de los creyentes, llenándolos de conflictos
6 4 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

internos que no los dejan mirar la realidad espiritual de sus problemas. Así
lo presenta Neuza Itioka al hablar acerca de la experiencia en una iglesia
brasileña:

Cuando comenzaron a orar y a estudiar la Palabra de Dios juntos, el Señor


les mostró que la lucha no era de unos con (sic) otros, sino contra
principados y potestades, contra gobernadores de las tinieblas que
dominaban áreas geográficas específicas. Eran ellos los que promovían la
confusión, al punto de llevarlos a un odio profundo y a un deseo de
separarse, maximizando las diferencias. Después de una genuina
reconciliación, todos decidieron como individuos y como iglesia,
humillarse bajo la poderosa mano de Dios. Usando su autoridad espiritual,
colocaron un sector específico de la ciudad bajo el señorío de Jesucristo,
desafiando a los principados y potestades de la región y comprometiéndose
a resistirse a éstos hasta que todos fuesen ahuyentados.79

Como consecuencia del entendimiento sobre la dimensión territorial de


los demonios y la ofensiva espiritual de los creyentes, Itioka comparte los
resultados sorprendentes que se dieron en aquella iglesia de Brasil: la
conversión de una líder del centro de Macumba y la confesión pública de fe
en Jesucristo de más de 70,000 personas en ima cruzada internacional.80
Para John Dawson, el dominio de las tinieblas sobre territorios
específicos comenzó debido a la caída del hombre, ya que Satanás se
convirtió en el "dios de este siglo" a partir de aquel momento. Sin
embargo, opina que a partir del nacimiento de la iglesia es cuando se puede
apreciar "...un flujo y reflujo de poder satánico en lugares específicos en
tiempos específicos".81 Dawson afirma haber identificado, mediante
oración y "palabra de ciencia", al principado dominante sobre la ciudad de
Manaus en Brazil: un espíritu dominante y contencioso. Luego añade
que "...bajo ese principado había espíritus de miedo a la autoridad,
desconfianza, quebrantadores de pactos, sensualidad, hechicería,
desesperación, orgullo regional, jactancia y tradición religiosa".82
Dean Sherman, otro maestro y escritor del movimiento, opina también
que demonios específicos son asignados a regiones y gente específica.83
Para él, los espíritus no sólo dominan sobre territorios, sino también sobre
grupos de personas particulares. Hablando sobre esta estrategia de
Satanás, comenta:

Él tiene planes para todo grupo humano. Tiene una estrategia específica y
espíritus asignados para los refugiados, los policías, las esposas
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 65

maltratadas, los telefonistas, los ciegos, los hombres de negocios y cada


uno de los incontables, pequeñísimos y distintos grupos de la humanidad.84

Explicando más sobre la manera como Satanás intenta dominar la


tierra, Sherman amplía:

Al igual que los de cualquier buen general, los planes de Satanás de


gobernar la tierra han comenzado con buenos mapas. Él ve al mundo en
sectores, ve imperios, naciones, regiones, ciudades, barrios y vecindarios.
Él considera la densidad de la población urbana y rural. Conoce bien las
razas, las nacionalidades, las tribus, los clanes y hasta las familias.
Satanás también es un estudioso de los grupos de idiomas, dialectos, de la
herencia cultural y del linaje étnico. Él conoce toda sociedad, organización
y asociación. Satanás conoce su campo de batalla. Él conoce a su
enemigo, y está bien preparado para la lucha.85

La manera para destruir el dominio de Satanás sobre ciudades,


barrios, grupos étnicos, familias, etc., como los descritos por Sherman, es
a través de la oración guerrera y lo que se ha denominado como
"cartografia espiritual11. Es la nueva forma, según Wagner, en que la
iglesia puede participar en la desaparición de los problemas sociales,
físicos, económicos, políticos y espirituales que agobian a las naciones.86

Conclusión

De las enseñanzas doctrinales de la guerra espiritual, hasta aquí


descritas, se podrían derivar las siguientes conclusiones:
1) Existe cierto apoyo bíblico para las enseñanzas del movimiento,
aunque cada texto debe estudiarse a fondo. Sin embargo, la mayoría de las
propuestas doctrinales surgen de la experiencia de sus exponentes, .
mayormente en el área de la liberación demoníaca.
2) Las cuatro doctrinas mencionadas se prestan para interpretar que
toda la realidad existente está infestada de demonios, dándole al mundo de
las tinieblas un lugar demasiado importante en la vida y experiencia
humana.
3) Aunque algunos autores del movimiento reconocen otras posibles
causas para los problemas humanos, sus enseñanzas tienden a considerar lo
demoníaco como fuente primaria de las enfermedades (físicas o
emocionales), los accidentes, las dificultades económicas, etc, lo cual
resulta en un reduccionismo de la realidad espiritual.
6 6 KAIROS N°22/EneroJunio 1998

4) Los énfasis doctrinales del movimiento están dirigidos a definir la


guerra espiritual principalmente como un enfrentamiento necesario y
exitoso contra los espíritus demoníacos.

PRÁCTICAS DE LA GUERRA ESPIRITUAL

Toda enseñanza conlleva, no sólo a la adquisión de posturas y


patrones mentales de carácter doctrinal, sino también a la práctica de
actividades que concuerdan con esas maneras de pensar. Como se dijo
antes, la guerra espiritual significa, para los del movimiento
contemporáneo, una confrontación directa entre el Reino de Cristo y el de
Satanás, entre la verdad y la mentira y entre ángeles y demonios.87 En
esta confrontación el creyente y la iglesia tienen a su disposición recursos
espirituales para pelear y vencer.
El movimiento de guerra espiritual, como una nueva concepción del
mundo espiritual, propone a lo menos tres maneras en que la iglesia puede
hacer frente a los principados y potestades demoníacas: oración guerrera,
liberación demoníaca y cartografía espiritual.

Oración guerrera

Uno de los énfasis en el movimiento de guerra espiritual es la oración


o intercesión como principal "arma" en la confrontación contra Satanás y
sus huestes demoníacas. Es a través de la oración, como dice Itioka, que
"...luchamos contra las potestades".88 Pero no se trata de cualquier
oración, sino de la "oración de guerra", aquella "...diseñada para sacar a
los incrédulos de las tinieblas a la luz y del poder de Satanás a Dios... Se
le conoce también como "atar al hombre fuerte".89
Para Wagner el significado de "atar" en Mateo 12:29 y Lucas
11:21,22 tiene que ver con la tarea evangelística. Así lo expresa al enseñar
sobre el texto de Lucas:

Obviamente, en este contexto el "hombre fuerte" se refiere a Beelzebú o


algún otro principado de alto rango. ¿Cuáles son los "bienes" que los
principados y los poderes de las tinieblas guardan en forma tan celosa?
Indudablemente hay muchos, pero ninguno les resulta más valioso que las
almas perdidas. Siempre y cuando la armadura del hombre fuerte esté
intacta, tiene a las almas perdidas en donde quiere.90

Según esta enseñanza, la iglesia debe "atar" en oración al hombre


fuerte (el Diablo o cualquier espíritu demoníaco), utilizando así las llaves
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 67

del Reino a fin de que el imperio del mal no obstruya la edificación de la


iglesia de Cristo aquí en la tierra.91 Es necesario, según Peñalba,
investigar dónde se encuentran las fortalezas demoníacas en cada
comunidad y orar contra ellas, hacer una oración de guerra bien planeada a
fin de que "...se rompa el velo que tiene a la gente atrapada en el error".92
Hablando sobre la oración guerrera, Mark Bubeck comenta que este
tipo de oración "...representa una de las más grandes necesidades de
intercesión en estos días".93 Para él, la oración de guerra es un arma
importante y poderosa para la liberación de la gente que vive atada por el
Diablo, pero poco usada por los creyentes. Aún el mismo Satanás, en
palabras de Bubeck, "...hará todo lo posible para desviar al creyente de la
oración combativa".94
Dean Sherman opina que la oración de guerra debe hacerse también
para contrarrestar el poder de las tinieblas sobre las relaciones entre
creyentes y para que la obra de Dios no sea estorbada en ellos. Por
ejemplo, cuando surjan situaciones que amenacen la reconciliación entre
creyentes, Sherman aconseja decir a Satanás: "...te reprendo. No tendrán
mi matrimonio, mis hijos, mi amigo, mi líder. Te resisto y te ato en el
nombre de Jesús".95 Para él es imprescindible que los creyentes, si desean
detener la influencia del mal, se dirijan "...a Satanás y a los poderes de las
tinieblas, directamente, reprendiéndolos, y verbalmente negándoles el
acceso... a sus vidas.96
Según Murphy, la manera en que los creyentes deben "resistir al
diablo", como lo enseña Santiago 4:7, es a través de una confrontación
verbal basada en la Palabra de Dios. Para él hay momentos de crisis o
ataque satánico en la vida del cristiano en que se debe seguir el ejemplo de
Jesús en Mateo 4:1-11 y encarar al diablo mediante un "choque de
verdad".97 Para Murphy, la resistencia contra Satanás se debe realizar en
forma enérgica y hasta burlona. Así lo expresa y practica:

Los demonios son malos, mentirosos, engañadores y asesinos, y así se lo


digo a ellos. Están condenados a arder en el infierno por toda la eternidad,
y se lo hago saber con pleno desdén y menosprecio. Este enfoque les crea
dificultades a algunos creyentes, quienes afirman que no deberíamos
reprender al diablo o a sus espíritus inmundos.98

Otro de los aspectos más enfatizados por el movimiento de guerra


espiritual es la necesidad de intercesión, no sólo a favor de los incrédulos,
sino especialmente por los líderes y pastores y todos lo que están en el
frente de la batalla. La intercesión a favor de los líderes es vista como una
6 8 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

arma de guerra en la batalla espiritual, a fin de que éstos puedan


desarrollar un ministerio eficaz."
La oración guerrera es un estilo de oración que debe acompañar la
vida de todos los creyentes en la batalla espiritual. Junto a este concepto,
se proponen otras actividades en donde la oración juega un papel
importantísimo para el avance de la iglesia contra las huestes del mal.
Cuatro maneras de orar resaltan como principales actividades cristianas
para los años noventa: marchas de alabanza, caminatas de oración,
expediciones de oración y viajes de oración.100
Las marchas de alabanza por la ciudad son cuando creyentes de
diferentes denominaciones se unen para caminar por la ciudad, orando por
ella y alabando a Dios. Estas marchas, según Wagner, producen "un
cambio en la atmósfera espiritual de la ciudad"101, ya que con ellas se
ayuda a cumplir el deseo de Dios, de que su multiforme sabiduría sea dada
a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los
lugares celestiales" (Ef. 3:10).102
En el movimiento de guerra espiritual, la alabanza es considerada
como un tipo de oración y un arma de guerra para hacer callar a Satanás
de sus acusaciones contra los creyentes.103 Al ir marchando y orando a
través de la alabanza, los creyentes pelean con sus bocas, declarando la
derrota y callando a las huestes del mal. La alabanza que sale del pueblo
de Dios es "una de las mejores maneras de tratar con estas
104
potestades...".
Otra actividad de oración guerrera son las "caminatas de oración",
"...una forma abierta de guerra espiritual".105 Consisten en caminatas de
oración concentradas en los vecindarios, que no sólo "ayudan a derribar las
murallas entre la iglesia y la comunidad", sino también a destruir las
fortalezas del enemigo.106 Como se verá más adelante, las caminatas de
oración vienen a enriquecerse con la estrategia más reciente, conocida
como cartografía o mapeo espiritual.
Las "expediciones de oración" consisten en la unión de varios
creyentes para orar enfocando sus esfuerzos en las regiones, cubriendo una
extensión de tierra particular.107 El propósito principal de las expediciones
es "abrir espiritualmente una región para el Reino de Dios"108 puesto que
algunas áreas se encuentran bajo el dominio claro de principados y
potestades territoriales.
Por último, dentro del contexto de oración y guerra espiritual, están los
"viajes de oración" que consisten en el envío de creyentes "a otra ciudad o a
algún punto estratégico con el propósito de orar en el lugar".109 Según
Peter Wagner, existen dos clases de viajes de oración: los "viajes de
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 69

oración intercesora" y los "viajes de oración profética". Aunque las dos


clases de viajes están dirigidos a atacar las "fortalezas" del mal, el de
oración profética conlleva la aplicación de "actos de oración profética".110
Entre estos actos están: el ungir con aceite, la libación, el uso de piedras,
sal, granos, y cuanta cosa el Señor dirija a hacer.111 El apoyo bíblico que
se usa para esta clase de actos es aquellos pasajes del Antiguo Testamento
donde Dios ordena a sus profetas realizar actos que parecen extraños.
Wagner enumera:

Ezequiel tuvo que acostarse sobre su lado izquierdo por 390 días, y luego
en su derecho por 40 días (véase Ez 4.4-6). Tuvo que cocer tortas de
centeno utilizando excremento humano como combustible (véase Ez
4:12,13). Jeremías tuvo que enterrar sus interiores y luego desenterrarlos
(véase Jer 13.1-7). Oseas tuvo que casarse con una prostituta (véase Os
1.2). Y así por el estilo.112

Luego comenta: "Sus actos de oración profética deben haber parecido


irracionales y bizarros en ese momento, pero sabemos por la Escritura que
en realidad fueron instrucciones del Señor".113
Puede que existan otras formas de hacer guerra espiritual por medio de
la oración, pero las que se han mencionado están presentes en ministerios o
iglesias que han enfatizado la guerra espiritual como un método importante
para la misión.

Liberación demoníaca

Una segunda práctica común en el movimiento de guerra espiritual es


el identificar y echar fuera demonios de las personas, cosas o lugares.
Aunque esta practica ha sido común en el movimiento pentecostal desde
sus inicios, hoy se ha convertido en un ministerio casi especializado.
René Peñalba, siguiendo la clasificación de Wagner, afirma que la
guerra espiritual se da en tres niveles distintos, llamándole "nivel humano"
a la liberación o el echar fuera demonios de las personas.114 Según Frank e
Ida Hammond, la liberación tiene un valor que la iglesia debe recuperar en
estos días aunque no es una solución para todos los problemas. Sin
embargo, consideran que "es una parte importante de lo que Dios está
haciendo en el presente avivamiento de la iglesia".115
El hecho de la posesión demoníaca es un problema espiritual que
pocos creyentes pueden negar, sin importar su postura teológica. Lo
conflictivo es la manera de determinar si alguien está influenciado o
poseído por demonios y cómo se debe hacer la liberación. Y aún más
7 0 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

conflictivo es hablar sobre la posibilidad de que verdaderos creyentes


puedan tener demonios y necesiten ser igualmente liberados.116
El asunto de cómo entran los demonios a las personas es algo que
ocupa bastante espacio en los escritos de los que ministra liberación
espiritual. Además de la transmisión de demonios a través de objetos, las
maldiciones y la herencia, los escritores y practicantes de la guerra
espiritual proponen otras maneras en que los espíritus malignos pueden
entrar a la vida del hombre. Hablando sobre el tema, los esposos
Hammond comentan a manera de aclaración:

Los demonios entran por medio de puertas abiertas, si reciben una


oportunidad. Deben hallar alguna abertura. En otras palabras, no se coge
un demonio al andar por la calle, y toparse accidentalmente con alguno que
ande buscando "casa".117

Luego mencionan tres maneras por las que pueden entrar los
demonios: el pecado, las circunstancias de la vida y la herencia.
Usando el ejemplo de Ananias y Safira en Hechos 5, los Hammond
opinan que estos dos creyentes, a causa de su pecado, "abrieron puertas
para ser llenos de los espíritus de codicia, de mentira y de engaño".118
Esto enseña, según ellos, que lo mismo le puede suceder a todo el que peca
voluntariamente. Según las experiencias en la liberación, la mayoría de los
escritores se refieren a la identificación de demonios con el nombre de
cualquier tipo de pecado, enfermedades o problemas emocionales que
pueda manifestar el hombre.119
En cuanto al cómo saber si una persona tiene demonios, Sherman
opina que es una cuestión simple: "sólo tenemos que preguntarle a Dios si
hay una atadura sobrenatural en una situación dada".120 Para los
Hammond, se requiere del don de discernimiento de espíritus, así como
descubrir cuestiones del pasado en la vida de las personas, especialmente la
niñez. Además, mencionan los siguientes "síntomas" más frecuentes que
detectan la presencia de demonios en las personas: problemas emocionales,
mentales, sexuales, del habla (mentira, maldición, blasfemia, crítica, burla,
chisme), adicciones, enfermedades y errores religiosos.121
Por último, la cuestión específica sobre el cómo liberar a las personas
con demonios es tratada en pocos libros. Lo que sí abunda en estos
escritos son los casos particulares de liberación y de los cuales se han
aprendido lecciones. Los Hammond hablan de "siete pasos para la
liberación", incluyendo la necesidad de "...usar como armas la sumisión a
Dios, la sangre del Señor Jesús, la Palabra de Dios, y el propio testimonio
como creyente".122
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 71

Además de estas cosas, para Rita Cabezas es importante preguntarle a


los demonios su nombre, para saber con quién se trata y usar esa
información como herramienta efectiva en el proceso de liberación.123 La
información recibida por demonios en sesiones de liberación puede incluir:
conocer el nombre del demonio124 (o demonios), saber qué areas dominan
en la vida de la persona125 y otros detalles que puedan servir en la lucha
espiritual en todos los niveles.

Cartografía espiritual

La cartografia o el "mapeo" espiritual es uno de los temas más


recientes en el movimiento de guerra espiritual. Wagner mismo afirma
haberlo escuchado por primera vez en el año 1990 en ima reunión pequeña
de la organización "Red de Guerra Espiritual" en California.126 En los
años posteriores, los maestros de la guerra espiritual ya no están
debatiendo si es necesario hacer el mapeo espiritual, sino que concentran
sus esfuerzos en saber cómo hacerlo bien.
Harold Caballeros define la cartografia espiritual como una... "técnica
por medio de la cual se puede discernir las fiíerzas o poderes que están
dominando sobre un territorio determinado".127 En la guerra espiritual, la
cartografia es una herramienta que ayuda a "ver al mundo como en
realidad es, no como lo que parece ser".128 George Ottis amplía un poco
más la definición, diciendo:

La cartografia es un medio por el cual podemos ver lo que está por debajo
de la superficie del mundo material; pero no es nada mágico. Es subjetivo,
en el sentido de que es una habilidad que brota de la correcta relación con
Dios y de un amor por su mundo. Es objetiva, en el sentido de que puede
ser verificada (o desacreditada) por la historia, la observación sociológica y
la Palabra de Dios.129

El punto de partida para la cartografia es la creencia en el concepto de


fortalezas espirituales en ciertos grupos de personas y naciones, es decir,
los espíritus territoriales. Si esto es así, hoy en día se hace necesario
descubrir quiénes y dónde están concentrados esos espíritus, a fin de lidiar
con tales fortalezas.130
Puesto que la presuposición básica de la cartografia espiritual es que
la realidad es más de lo que parece ser en la superficie, Wagner aplica este
concepto al mundo espiritual de la siguiente manera:
7 2 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

Las cosas visibles de nuestra vida diaria: los árboles, las personas, las
ciudades, las estrellas, los gobiernos, los animales, las profesiones, el arte,
los patrones de conducta, son cosas de todos los días y se las da por
sentado. Sin embargo, detrás de los aspectos visibles del mundo que nos
rodea puede haber fuerzas espirituales, áreas invisibles de la realidad que
tal vez tienen más significación final que lo visible.131

Para apoyar estas ideas cita textos como 2 Cor. 4:3,4 y 4:16,17.
Luego afirma que una comprensión clara entre el mundo visible e invisible
"...es un componente importante en el plan total de la batalla para romper
la opresión que el enemigo ha impuesto sobre las almas perdidas y que
perecen".132
Según Wagner, la intención de la cartografía es ofrecer a los
intercesores una herramienta que descubra las fortalezas satánicas que
dominan sobre un lugar geográfico específico. Esto ayudará, según él, a
"...que nuestras oraciones por una ciudad, un vecindario o una región
puedan enfocarse de manera más precisa".133 Sin embargo, es necesario
que a la oración se le añada_Ja_información_jsobre todos los asuntos
relacionados con la historia, la cultura, o cualquier asunto que arroje luz
sobre la realidad invisible de determinado lugar. 134 Entonces la oración y
la información son complementos en la cartografia que ayudan para el
éxito en la guerra espiritual estratégica.
Un segundo propósito de la cartografia, según Caballeros, es "...abrir
la puerta para la evangelización eficaz y al cambio social positivo".135
Para él, la experiencia de su propia iglesia en Guatemala pone en evidencia
el valor de la cartografia como método exitoso para el evangelismo. Así lo
narra:

En noviembre de 1990 nuestra iglesia envió pequeños grupos a las


capitales de cada uno de los 22 departamentos (condados o provincias) de
Guatemala, para ayunar, orar y buscar la dirección del Señor a fin de
identificar al principado sobre cada departamento... Dios nos permitió
tener resultados extraordinarios y vimos, por primera vez, una especie de
radiografia, un verdadero mapa espiritual de la situación en las regiones
celestes sobre nuestra nación. Nuestra guerra espiritual se tornó mucho
más eficaz y pudimos ver resultados de nuestro esfuerzo espiritual mucho
más abundantemente de lo que jamás habíamos imaginado.136

En cuanto a la metodología para hacer cartografia espiritual, se


ofrecen varias alternativas. Caballeros, por ejemplo, propone la
formación de tres grupos distintos de personas que se dediquen a: 1. El
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 73

factor espiritual (personas maduras que sepan orar y oír para recibir
información directa de Dios), 2. El factor histórico/cultural (los que
investigan en documentos la historia y la cultura del lugar, ) y 3. El factor
fisico (los que salen a las calles a caminar y buscar información sobre
lugares de pecado y centros de ocultismo o hechicería).137 Ninguno de los
grupos debe comunicarse entre sí hasta el fin de la investigación, con el
propósito de buscar una confirmación final y definitiva. Sin embargo,
según Wagner, "...no hay una manera única de levantar la cartografía
espiritual1'.138
Algunas conclusiones derivadas de las prácticas de la guerra espiritual
contemporánea son:
1) La oración juega un papel importantísimo en este movimiento. No
cabe duda que han logrado motivar a la iglesia, ofreciéndole maneras
prácticas y creativas para ejercer este privilegio que otros pueden haber
descuidado.
2) La oración guerrera, como el atar y reprender demonios,
corresponde a una concepción elevadísima de la autoridad del cristiano
sobre las huestes del mal. Este acercamiento a la oración es aparentemente
apoyado por la Escritura, pero más por la experiencia de aquellos que
ministran la liberación demoníaca.
3) Aunque los maestros del movimiento utilizan ciertos textos bíblicos
para probar la validez de sus prácticas, muchas de las actividades
propuestas pueden verse como resultado de su cosmovisión sobre la guerra
espiritual y su alta capacidad creativa.
4) Aunque no se diga directamente jen sus escritos y conferencias, los
maestros del movimiento dan a entender que los creyentes deben andar
buscando demonios para derrotarlos. Esto se puede deducir de ciertas
prácticas en la liberación demoníaca y la filosofia que hay detrás de la
cartografía espiritual.
7 4 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

Notas

1
Ana Méndez De Luca De Tena, Las potencias de los cielos serán conmovidas
(México: Editorial Aval, 1995), pág. 10.

2
Ibid.9 pág. 11.

3
Harold Caballeros, "Guerra espiritual, intercesión y mapeo espiritual", Seminario
de Guerra Espiritual, Iglesia "El Shaddai", Guatemala, 1995. (Grabación), cassette num.
1, 90 minutos. Los ejemplos sobre el éxito evangelístico y misionero son abundantes en
los escritos y grabaciones de los exponentes del movimiento. Para un ejemplo, ver el
libro La destrucción de fortalezas en su ciudad, ed. por Peter Wagner (Miami, Florida,
USA: Editorial Caribe, 1995). Este libro contiene gran cantidad de testimonios sobre el
avance del evangelio en aquellos lugares donde se ha hecho guerra espiritual a nivel
estratégico.

4
Charles H. Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión:
Debate sobre la guerra espiritual en América Latina (Costa Rica: INDEF: 1997), pág.
46.

5
Ibid. En su argumentación, Kraft sostiene que la cosmovisión occidental de los
primeros misioneros ha jugado un papel importante en la formación de una concepción
escéptica hacia lo sobrenatural. Según él, esto ha producido "...un cristianismo que no
sabe cómo confrontar el mundo de los espíritus". Ver págs. 44 y 45.

6
Edward F. Murphy, Manual de guerra espiritual, trad, por Juan Sánchez Araujo
(Miami, Florida, USA: Editorial Betania, 1994), pág. vii.

7
Edward Rommen, "Introducción", Poder y Misión: debate sobre la guerra
espiritual en América Latina (San José, Costa Rica: INDEF, 1997), pág. 7 y 8. Según
Rommen las experiencias de la iglesia en la historia deben ser estudiadas "...con cuidado
porque, sin duda, nos ofrecerá muchas lecciones".

*Ibid, pág. 8.

9
Justo González, Historia del pensamiento cristiano, Tomo Π: Desde San Agustín
hasta la Reforma Protestante (Buenos Aires, Argentina: Methopress, 1992), págs. 72-75.

10
Alan Perdomo, "Misiones, Guerra y Poderes", notas de la clase de Angelologia,
Antropología y Hamartiología, Seminario Teológico Centroamericano, Guatemala, 1998,
pág. 1. La letra del famoso himno Castillo Fuerte, escrito por Lutero, evidencia la
conciencia y parte de la teología de guerra espiritual de este gran reformador.

1
kommen, "Introducción", Poder y Misión, pág. 8.
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 75

12
Harvie M. Conn, "Spiritual Warfare in the City", Urban Mission, vol. 13/2,
(Philadelphia, USA: Westminster Theological Seminary, Die, 1995), pág. 3.

13
Tal es el caso de Peter Wagner, Edward Murphy y Charles Kraft, entre otros,
quienes ahora promueven la guerra espiritual estratégica como un medio efectivo de
hacer evangelismo y misiones.

14
Rommen, "Introducción", Poder y Misión, pág. 9.

15
Peter Wagner afirma que en el siglo veinte se pueden apreciar tres
manifestaciones del poder del Espíritu Santo, a las cuales, siguiendo la clasificación de
David Barret, llama "oleadas". Así lo explica: "La primera oleada fue el comienzo del
movimiento pentecostal propiamente dicho, que se inició a principios de este siglo. La
segunda fue el movimiento carismàtico que se inició a mediados de siglo. La tercera,
surgida en el último cuarto del siglo, es una manifestación del poder milagroso del
Espíritu Santo en iglesias e instituciones que, por diversas razones no desean verse
incluidas entre los pentecostales o los carismáticos". Ver el libro de Pedro Wagner,
Avance del Pentecostalismo en Latinoamérica, trad. Benjamín Mercado (Miami, Florida,
USA: Editorial Vida, 1987), pág. 6.

16
Rommen, "Introducción", Poder y Misión, pág. 10.

17
Rony Chaves, "Prólogo", Las potencias de los cielos serán conmovidas, pág. 3

18
Méndez, Las potencias de los cielos serán conmovidas, pág. 7.

19
Rommen, "Introducción", Poder y Misión, pág. 10.

20
Ibid., pág. 9.

2
Wagner, Avance del Pentecostalismo en Latinoamérica, págs. 7,25.

22
Rommen, "Introducción", Poder y Misión, pág. 9.

23
Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión, págs.
47,48.

24
Ibid., pág. 55. Esta declaración la hace el autor a pesar de que, en un párrafo
anterior, había afirmado lo siguiente: "Nunca decimos que...el mero contacto con carne o
casas lo hace a uno vulnerable a demonios... o que los demonios necesitan objetos para
ejercer su poder sobre las personas".

25
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. x.
7 6 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

26
Ibid.

27
Méndez, Las potencias de los cielos, pág. 53. En el apéndice 2 de su libro, la
señora De Tena ofrece la siguiente lista de objetos que, por estar contagiados con
demonios, pueden traer maldición a la vida de las personas: Medallas e imágenes de
santos, rosarios, incensarios, candelabros con imágenes. Objetos de la suerte, como
elefantes con la trompa para arriba, colas de conejo. £1 símbolo del Ying-Yang,
fotografías con catedrales o imágenes idolátricas, objetos prehispánicos de dioses o
sacerdotes, animales como ranas, iguanas, serpientes, muerciélagos, buhos, juguetes
caricaturescos como pitufos, gatos Garfield, Batman, libros de ocultismo, fotografías de
muertos, etc. Ver págs. 251-253. A esta lista, cualquiera puede añadir cosas como:
monedas, billetes, sellos postales, etc.

2
*Ibid., pág. 168.

29
Timothy Warner, citado por Priest, Campbell y Mullen en "El sincretismo
misionológico: el nuevo paradigma animista", Poder y Misión, (San José, Costa Rica:
INDEF, 1997), pág. 17.

™Ibid

3
Charles Kraft, citado por Priest, Campbell y Mullen en "El sincretismo
misionológico", Poder y Misión (San José, Costa Rica: INDEF, 1997), pág. 17.

32
Wagner, Avance del Pentecostalismo en Latinoamérica, pág. 100.

33
Ibid.

34
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, págs. xi,xii. En las notas 2 y 3 de la
introducción, en la pág. 613, Murphy afirma que la acción de destruir estos objetos es un
"...desafío intencionado al mundo espiritual... que se denomina'choque de poder'". Para
él es claro que creyentes verdaderos, como su hija Carolyn pueden llegar a estar
demonizados y, al ser liberados, se convierten en personas que pueden discernir la
presencia de demonios en personas, casas, tiendas, etc.

35
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. 517.

36
Ibid

37
Ibid.

38
Kraft, citado por Priest, Campbell y Mullen en "El sincretismo misionológico",
Poder y Misión, pág. 34.
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 77

39
Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión, pág. 55.

40
Cindy Jacobs, "Cómo lidiar con las fortalezas", La Destrucción de Fortalezas, ed.
por C. Peter Wagner, trad, por Miguel A. Mesías (Miami, Florida, USA: Editorial
Caribe, 1995), págs. 89-92. La mayoría de maestros de la guerra espiritual opinan que
las "fortalezas" mencionadas por Pablo en Π Cor. 10:5 se refiere a estructuras satánicas
que deben ser derribadas espiritualmente por medio de la intercesión estratégica.

4l
Ibid, págs. 89,90.

42
Jacobs, "Cómo lidiar con las fortalezas", La destrucción de fortalezas, págs.
89,90. La autora reconoce que los síntomas mencionados pueden tener otro origen. Para
ella la manera de saber si el problema es por alguna maldición es que "...cuando el poder
queda roto los síntomas desaparecen rápidamente". Ver pág. 91.

43
Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión, págs.
55,56.

44
* Ibid, pág. 56.

45
Derek Prince, Bendición o Maldición, !Ud. puede escoger!, trad, por Alicia
Valdés (Miami, Florida,USA: Editorial Carisma, 1995), pág. 45. Como lo hizo también
Cindy Jacobs al hablar de las señales de una maldición, Derek Prince ofrece el siguiente
párrafo aclaratorio: "La presencia de un solo o dos de estos problemas no sería
necesariamente suficiente, de por sí, para establecer conclusivamente la presencia de una
maldición. Pero cuando varios de estos problemas se presentan, o cuando cualquiera de
ellos tiende a repetirse, la probabilidad que sea una maldición aumenta
proporcionalmente. En último recurso, sin embargo, es el Espíritu Santo quien puede
proporcionar un "diagnóstico" acertado. Ver. pág. 46.

46
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. 519.

47
Ibid.

48
J¿irf.,pág. 521.

49
Wagner, Avance del Pentecostalismo en Latinoamérica, pág. 27.

50
Neuza Itioka, "La misión de la iglesia y la confrontación con la opresión
espiritual y las prácticas demoníacas", La Misión de la Iglesia, una visión panorámica,
ed. por José María Blanch (San José, Costa Rica: Visión Mundial, 1992), pág. 218.
7 8 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

5
Harold Caballeros, "Guerra Espiritual, Intercesión y Mapeo Espiritual",
Seminario de Guerra Espiritual, Iglesia "El Shaddai", Guatemala, 1995. (Grabación),
cassette num. 3, 80 minutos.

52
- Ibid

53
Ibid

^Ibid. Caballeros ilustra, como ejemplo de esta enseñanza, el dolor abdominal


profundo que sufrió Dekek Prince al encontrase impartiendo unas conferencias en
Inglaterra: "El dolor que sintió Derek se produjo porque dos creyentes de su equipo lo
estaban criticando desde Estados Unidos...".

55
Itioka, "La Misión de la Iglesia y la Confrontación con la opresión espiritual y las
prácticas demoníacas", La Misión de la Iglesia, una visión panorámica, pág. 233.

56
René Peñalba, "Entendamos la Guerra Espiritual", cassette num. 3: "Cómo hacer
Guerra Espiritual". Conferencia impartida en la iglesia "Amor Viviente", Tegucigalpa
Honduras (s.f). Grabación, 60 minutos.

57
Como ejemplo de una maldición que trajo problema generacional sobre una
ciudad, Peñalba afirma que Tegucigalpa vive su problematica particular debido al pecado
de adulterio del presidente que la fundó. Entonces el pecado de los que "forjan la
historia" es el que también trae maldición sobre todas las generaciones subsecuentes.

58
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. 511.

59
Ibid

60
Ibid.

61
Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión, pág. 56.

62
Ibid.

63
Ibid, pág. 57.

64
Murphy, Manual de Guerra Espiritual (1994), pág. 512.

65
Ibid., pág. 513.

66
Caballeros, "Guerra Espiritual, Intercesión y Mapeo Espiritual". El autor
atribuye a espíritus demoníacos el hecho de que mujeres con padres alcohólicos se casen
con un hombre alcohólico.
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 79

67
Kraft, citado por Priest, Campbell y Mullen en "El sincretismo misionológico: el
nuevo paradigma animista", Poder y Misión, pág. 21.

™Ibid.

69
Neil Anderson, Rompiendo las Cadenas, s.t, Audiovisuales para América Latina
(Puebla, México: Editorial Aval, 1991), págs. 13-18.

70
Wagner, La destrucción de fortalezas, pág. 11.

71
C. Peter Wagner, Extendiendo el Fuego, Vol. 1: Hechos del Uno al Ocho, trad,
por Guillermo Vásquez (Miami, Florida, USA: Editorial Unilit, 1995), pág. 217.

72
Wagner, Avance del Pentecostalismo en Latinoamérica, pág. 27.

73
Caballeros, "Guerra Espiritual, Intercesión y Mapeo Espiritual", cassette num. 1.
90 minutos.

74
Ibid.

75
Kraft, "¿Animismo cristiano o la autoridad de Dios?", Poder y Misión ,pág. 57.

76
Ibid.

77
Rita Cabezas, Lucha contra principados demoníacos: descubriendo la jerarquía
demoniaca (Miami, Florida, USA: Editorial Carisma, 1995), pág. 35.

™Ibid.

79
Itioka, "La Misión de la iglesia", La misión de la Iglesia (1992), pág. 217.

*°Ibid, pág. 218.

81
John Dawson, La reconquista de tu ciudad: estrategias para derribar las
fortalezas espirituales del diablo, trad. Hugo Zelaya (Miami, Florida, USA: Editorial
Betania, 1991), pág. 129.

82
Dawson, La reconquista de tu ciudad., pág. 132. De igual manera, Dawson
afirma haber identificado otros espíritus territoriales que dominaban sobre ciudades como
Menphis y Saint Louis en los Estados Unidos. Usando Daniel 10:13 y Apocalipsis 20:14
enseña que "la Biblia, generalmente, identifica a un espíritu maligno por su territorio o
su característica principal, por ejemplo: el príncipe del reino de Persia o la muerte y el
Hades".
8 0 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

83
Dean Sherman, Guerra Espiritual: Las armas y la estrategia para triunfar en la
lucha contra el mal, trad, por Hugo Zelaya (Miami, Florida, USA: Editorial Betania,
1991), pág. 94.

84
J6/¿, pág. 97.

85
Sherman, Guerra Espiritual, pág. 97.

86
Wagner, La destrucción de fortalezas, pág. 18.

87
Roger Greenway, "Missions as Spiritual Warfare", Urban Mission, 13/2
(Philadelphia, USA: Westminster Theological Seminary, Die, 1995), pág. 19. La misma
idea expresa Caballeros en su serie de conferencias "Guerra Espiritual, Intercesión y
Mapeo Espiritual". (Grabación), cassette no. 2. 80 minutos.

88
Itioka, "La Misión de la Iglesia", La Misión de la Iglesia, pág. 229.

89
Peter Wagner, Iglesias que oran, trad, por Javier Quiñones (Miami, Florida,
USA: Editorial Caribe, 1995), pág. 141.

90
Wagner, Iglesias que oran, pág. 141..

9l
Ibid.

92
René Peñalba, "Entendamos la Guerra Espiritual", cassette num. 1: "¿En qué
consiste?", 40 minutos.

93
Mark I. Bubeck, El Adversario, el cristiano frente a la actividad demoniaca, trad,
por María Caro (USA: Editorial Portavoz, 1988), pág. 100.

9A
Ibid. Bubeck ofrece el siguiente ejemplo de una oración de guerra por un
paciente en un hospital: "Reclamo el terreno que en su vida él ha dado a Satanás por
creer el engaño del enemigo. En el nombre del Señor Jesucristo resisto toda la actividad
de Satanás para mantener a (Juan) en ceguera y oscuridad. Ejerciendo mi autoridad que
me es dada en mi unión con el Señor Jesucristo, derribo las fortalezas que el reino de las
tinieblas ha formado en contra de (Juan). Aplasto y rompo y destruyo... Destruyo en
oración la ceguera y sordera espiritual que Satanás mantiene sobre él...".

95
Sherman, Guerra Espiritual, págs. 69,70.

96
Ibid.t pág. 87.

97
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. 606.
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 81

"ibid., pág. 608.

99
C. Peter Wagner, Escudo de Oración, trad, por Javier Quiñonez (1995), págs. 35-
38. Todo el libro está dedicado al tema de la intercesión, especialmente para motivar y
orientar a los creyentes a orar "por pastores, líderes cristianos y otros creyentes que
ocupan la primera línea en la batalla espiritual".

100
Wagner, Iglesias que oran, pág. 150.

m
Ibid.,pág. 171.
l02
Ibid, pág. 173.

103
Derek Prince, La Guerra Espiritual, s.t. (Miami, Florida, USA: Editorial
Carisma, 1987), pág. 89 y 92.

l04
Ibid., pág. 93.

105
Wagner, Iglesias que oran, pág. 181.

i06
Ibid, págs. 175,176. Wagner comparte el testimonio de una iglesia en Uruguay
que, a través de caminatas de oración, logró cerrar un centro espiritista Macumba y
crecer numérica y espiritualmente como iglesia.

107
Ibid., pág. 198. Para entender mejor de qué se tratan las expediciones Wagner
comenta: "La expedición más extensa y mejor organizada que conozco al momento de
escribir fue la organizada en 1992 por el equipo londinense... que cubrió una ruta de
1200 milas desde Londres a Berlín con la participación de intercesores de 6 naciones".
Para más detalles ver págs. 201-203.

108
Wagner, Iglesias que oran, pág. 210.

109
Wagner, Iglesias que oran, pág. 224.

110
7&/£/.,pág.232.

11
*Méndez, Las Potencias de los cielos, págs. 173-179.

112
Wagner, Iglesias que oran, pág. 233.

113
/oiY/..pág.232.

114
Peñalba, "Entendamos la Guerra Espiritual", cassette no. 1.40 minutos.
8 2 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

115
Frank e Ida Mae Hammond, Cerdos en la sala: guía práctica para liberación,
trad, por Pablo Barrete (Bogotá, Colombia: Libros Desafío, s.f.), pág. 36.

116
Para la mayoría de maestros de la guerra espiritual es claro que creyentes
verdaderos pueden tener demonios viviendo dentro de ellos, necesitando la liberación
espiritual si desean vivir victoriosos contra la carne, el mundo y Satanás. Por ejemplo,
Murphy afirma que aún creyentes llenos del Espíritu manifiestan que "...ciertas áreas de
su vida están esclavizadas a sentimientos, pensamientos y prácticas no compatibles con
su fe cristiana. Saben que algo anda mal, pero pocos sospechan la dimensión
expresamente demoníaca de su problema". Ver la "Introducción "del Manual de Guerra
Espiritual, pág. xvi. Murphy, al igual que otros, opina que el creyente no puede ser
poseído, ya que la palabra posesión indica propiedad y control absoluto. Para él, aún los
creyentes desobedientes pertenecen a Dios y no a Satanás. Sin embargo, afirma que un
creyente puede estar "demonizado", es decir, "...que Satanás, a través de sus demonios,
ejerce un control parcial directo sobre una o más áreas de la vida de un cristiano". Ver
pág. xii. La evidencia bíblica ofrecida por Murphy es la siguiente: 1 Tim. 3:6,7 donde se
advierte al cristiano que no "caiga en la condenación del diablo". También 1 Tim. 5:15
habla de creyentes que "se han apartado en pos de Satanás". Otra lista de ejemplos
bíblicos, según el autor son: £1 caso del rey Saúl (1 Samuel 9-31), la misma nación
rebelde de Israel (Oseas 2:13,17; 9:1,7), los judíos en el NuevoTestamento que asistían a
las sinagogas (Me. 1:21-28; 39), el caso de la hija de Abraham (Le. 13:10-17), Ananias y
Safira (Hch. 5:1-10), etc. Para un detalle de los ejemplos ver págs. 361-368 y 503 a 510.
Una discusión parecida se puede encontrar en el libro Cerdos en la Sala de Frank e Ida
Hammond, págs. 9-18, aunque todo el libro asume la misma postura de Murphy y habla
de liberación no sólo a incrédulos, sino también a creyentes.

117
Hammond, Cerdos en la Sala., pág. 40.

118
Hammond, Cerdos en la sala., pág. 41. Murphy comparte la misma opinión que
los Hammond. Para una comparación sobre el tema ver Manual de Guerra Espiritual,
págs. 511-541.

n9
Ibid. Para un ejemplo de la identificación de demonios con pecados,
enfermedades o problemas emocionales ver las págs. 132-137 de libro Cerdos en la Sala.
También en la novela de Frank Peretti Esta Patente Oscuridad, trad. Miguel A. Mesías
(Miami, Florida, USA: Editorial Vida, 1986), págs 272-89, se narra el caso de un
muchacho del cual expulsan los siguientes demonios: adivinación, confusión, locura,
odio, brujería, lujuria, violación, etc.

120
Sherman, Guerra Espiritual, pág. 179.

121
Hammond, Cerdos en la Sala, págs. 44-47.

l22
Ibid, pág. 50.
Guerra Espiritual: Descripción y evaluación del movimiento Contemporáneo 83

123
Cabezas, Lucha contra principados demoníacos, págs. 35,37. La base bíblica
para tal práctica, según Cabezas se encuentra en Marcos 5:9.

l24
Ibid., págs. 9-11.

125
Murphy, Manual de Guerra Espiritual, pág. 36. El autor opina que a los
demonios se les puede obligar a decir la verdad. Ver también la pág. 35.

126
Wagner, La destrucción de fortalezas, ed. por Peter Wagner, pág. 12.

127
Caballeros, "Guerra Espiritual, Intercesión y Mapeo Espiritual", cassette num. 6,
80 minutos.

128
George Ortis, "Un vistazo general a la cartografía espiritual", La destrucción de
fortalezas, ed. por Peter Wagner (Miami, Florida, USA: Editorial Caribe, 1995), pág. 32.

l29
Ibid, pág. 33.

130
Ottis, "Un vistazo general", La destrucción de fortalezas, págs. 34-36.

13 Wagner, "Lo visible y lo invisible", La destrucción de fortalezas, pág. 49.

l32
Ibid, pág. 50.

133
Wagner, Iglesias que oran, pág. 205.

134
Kjell Sjoberg, "Cartografía espiritual para acciones de oración profética", La
destrucción de fortalezas, págs. 100,101.

135
Caballeros, "Cómo derrotar al enemigo con la ayuda de la cartografía espiritual",
La destrucción de fortalezas, pág. 139

l36
Ibid. La idea de que la cartografía espiritual es un medio de guerra para la
evangelización efectiva está presente en los escritos de todos los exponentes del
movimiento. Para otro ejemplos más de este acercamiento, ver la exposición de Víctor
Lorenzo en "Cómo evangelizar una ciudad dedicada a las tinieblas", La destrucción de
fortalezas, ed. por Peter Wagner, págs. 175-198.

137
Caballeros, "Guerra Espiritual, Intercesión y Mapeo Espiritual V", cassette num.
6. 45 minutos. Otras maneras de cartografíar un lugar las ofrecen Bob Beckett en "Pasos
prácticos para la liberación de la comunidad espiritual", La destrucción de fortalezas,
págs. 149-174 y, en el mismo libro, Mark MacGregor y Bev Klopp en "Cartografía y
discernimiento en Seattle y Washington" (Miami, Florida, USA: Editorial Caribe, 1995),
8 4 KAIROS N°22/Enero-Junio 1998

págs. 202-228, así como Peter Wagner en "Cómo cartografiar su comunidad", La


destrucción de fortalezas, págs. 229-237.

138
Wagner, "Cómo cartografiar su comunidad", La destrucción de fortalezas, pág.
229.
^ s
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