Catequesis de confirmación

“JESUS se hizo presente y

Anuncio el reino de Dios”

 JESUS NOS INVITA A ESCUCHAR SU PALABRA

Juan fue informado de todo esto por sus discípulos y, llamado a

dos de ellos, los envió a decir Señor « ¿Eres tú el que ha de venir
o debemos esperar a otro? ». Cuando se presentaron ante él, le
dijeron: «Juan el Bautista nos envió a preguntarte: “¿Eres tú el
que ha de venir o debemos esperar a otro?”». En esa ocasión
Jesús curo mucha gente de sus enfermedades, de sus dolencias y
de los malos espíritus, y devolvió la vista a muchos ciegos.
Entonces respondió a los enviados: « ¿vayan a contar a Juan lo
que han visto y han oído: los ciegos ven, los paralíticos caminan,
los leprosos son purificados y los sordos oyen, los muertos
resucitan, la Buena Noticia es anunciada a los pobres. ¡Y feliz
aquel para quien yo no sea motivo de escándalo!». (Lc. 7.18-23).

 JESUS NOS INVITA A COMPRENDER SU PALABRA

A orillas del Jordán, antes de iniciar su ministerio público, Jesús,

siendo ya un hombre adulto de aproximadamente treinta años de edad,
quiso ser contado entre las filas de los pecadores, a pesar de no serlo,
y fue a orillas del Jordán para ser bautizado por Juan. El bautista
predicaba en aquel lugar, invitaba a la conversión y a quienes
aceptaban este mensaje los bautizaba con agua. Jesús descendió, pues,
a las aguas de este rio y con el hizo descender nuestros pecados y
santifico las aguas con las que ahora nosotros somos bautizados.
Aquel día, mientras el hijo era bautizado, el Espíritu descendía
sobre Él como si fuera una paloma y el Padre se regocijaba
proclamando la identidad de este Hijo.

 DIFICULTADES EN EL SERVICIO
Jesus no estubo esento de dificultades, desde un inicio las
autoridades religiosas de Israel no lo vieron con buenos ojos y le
acusaron de muchas cosas falsas, por que sus obras y palabras
resultaban incomodas y fueron signo de contradiccion para quienes
estaban lejos del Reino de Dios. En el fondo, la fidelidad a su
proyecto de vida le condujo a la muerte en la cruz.
Jesus se mantuvo fiel hasta el final y esto es buena noticia para
todos nosotros, que habitualmente nos desanimamos ante el
primer obstaculo que encontramos en nuestros proyectos.
El misterio o servicio publico que jesus ejercio estuvo marcado
por estos dos temas:
- La necesidad de conversion.
- La inminencia del Reino de Dios.

 JESUS NOS INVITA A LA CONVERSION DEL CORAZON

Jesús inicio su ministerio predicando que el reino de Dios estaba

cerca y que era necesario convertirse. Esta enseñanza será reiterativa
durante su ministerio público que duro tres años. Así, por ejemplo, los
fariseos le acusaron de comer con los pecadores y Él respondió:
“habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por
noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento” (Lc. 15,
7).

 Jesús anuncio el Reino de Dios

Las primeras comunidades cristianas guardaron en su memoria,

según sus necesidades, lo que ellas comprendieron del proyecto
de Jesus. Y este proyecto fue reunir a todos los hombres en el
Reino de Dios.
Él mismo se desplazo de aldea en aldea, para llegar a los mas
abandonados, los que sufrian bajo el peso de la vida o de sus
pecados y para lograr que tambien ellos entren en la reunion.
Dirigio su invitacion a los individuos que encontro por su camino,
pero tambien a las ciudades y pueblos tomados en conjunto,
extrañandose en muchos casos de una repuesta negativa.
Manifesto una paciencia a toda prueba y alento a sus discipulos para
que hiciera lo mismo. Después de que Juan Bautista fue puesto en la
cárcel, Jesús fue a Galilea a anunciar las buenas noticias de parte de
Dios. Decía “Ya se cumplió el plazo señalado, el reino de Dios está
cerca.
Vuélvanse a Dios y acepten con fe sus buenas noticias. Y en la
oración del Padre Nuestro, nos enseñó a pedir la llegada de este
reino. ¿Qué significa este reino de Dios que constituyo el centro de
su mensaje? El nunca definió lo que es este reino, nos habló de Él
con gran sabiduría por medio de las palabras y con signos
maravillosos.
 TODOS ESTAMOS INVITADOS

sus palabras estuvieron acompañadas de signos

maravillosos que anunciaron la llegada de un tiempo
nuevo de paz, justicia y amor.
A todos nos invito a formar parte de este reino, a nadie
discrimino.
Todos: hombres y mujeres, niños y adultos, justos y
pecadores, judios y no judios.
Todos estamos invitados al banquete del reinado, pero
quien lo acoja de corazon debe ponerse el traje nuevo de
fiesta, es decir, debe morir al hombre viejo y nacer al
hombre nuevo hecho a la estatura de Cristo.
Y cuando este reino sea consumado, la situacion del hombre ante Dios se transfigurara
totalmente, por que los pecados quedaran perdonados y se restituiran la gloria a los
hombres, los elegidos que andaban dispersos se reuniran y los hijos de Dios se encotraran
en la casa paterna, toda hambre y toda sed seran saciadas y desbordara la alegria de la
liberacion.
En definitiva el triunfo del bien sobre el mal y un nuevo orden de cosas.
El Reino de Dios se parece… se parece siempre a un suceso.
Porque no se trata de un lugar, ni una cosa, ni una organización imponente.
Es un reino que no está circunscrito geográficamente, ni institucionalmente, ni siquiera
puede decirse con precisión que la iglesia sea el reino de Dios.
Este es un acontecimiento, es algo que sucede en cualquier parte dentro de este mundo.
Lo único que hace falta es acogerlo con amor y convertirse de corazón. En definitiva, el
reinado es Jesús mismo.

 JESUS NOS INVITA A ACTUAR A LA LUZ DE SU PALABRA

A través de todo su ministerio, Jesús explico que requiere del hombre, siendo su mensaje
central la predicación del reino de Dios.
Hoy Jesús nos invita a tomar parte en esta tarea. Todos estamos llamados a tomar parte
del misterio que realizo Jesús y este debe ser nuestro compromiso. Todos podemos hoy
hacer algo con Jesús y extender la gracia de su reino. Tu ¿Qué puedes hacer?
Podemos hablar de Jesús, esta semana a tres amigos o familiares, así estamos llevando el
mensaje del Reino de Dios.