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Devocional Especial Con Maxi Gianfelici 26-11
Devocional Especial Con Maxi Gianfelici 26-11
Introducción:
Cuando Dios me trajo a esta pequeña ciudad de la Patagonia, me dijo: “El Reino de los cielos se
construye con amigos. Más que exposición, preocúpate por relaciones, vínculos que
construyan el Reino”.
Cuando Sadrac, Mesac y Abed-nego (Daniel 3), estos amigos son echados en el horno de fuego,
se ve que en vez de tres personas había cuatro, pero cuando se abre el horno, salen solo tres…
Entonces le pregunté al Señor, ¿y dónde está el cuarto? Y me dijo: “Mira bien, no salieron tres,
salieron cuatro…”. Porque cuando Nabucodonosor los miró, sus rostros resplandecían. La gloria
del cuarto se había fundido en ellos.
Así que cuando estamos en el horno, tranquilos. Las pruebas de fuego, lo que hacen es que el
“cuarto” se funda en nosotros. Y cuando Jesús se funde en nosotros los reyes declaran que
nuestro Dios es el Dios de toda la tierra.
Este “horno” de ocho meses en el que estamos metidos toda la humanidad, está haciendo que
haya una manifestación más clara y poderosa de la vida de Cristo en nosotros.
Cuando salgamos de este horno no habrá olor a humo, sino un nuevo nivel de gloria.
Este sistema está levantando presión, la tensión va a ir en aumento, el horno está cada vez más
caliente, pero cuando esto pasa es porque estamos a punto de vivir una manifestación
extraordinaria del poder de Dios.
La noche está avanzada pero llega a su fin (Romanos 3:12), y no podemos demostrar la gloria
que portamos a través de palabras…
“Hijitos, nuestro amor no debe ser sólo de palabras, pues el verdadero amor
se demuestra con hechos”. 1 Juan 3:18, PDT
Testimonio de María Pérez y el sistema de las ciencias. Ella siente carga por la gente en este
ámbito, pero la idea es amarlos y sacarlos del sistema (acciones, no solo palabras).
Y testimonio de su hermana, María Consuelo Pérez, quien conoció a Cristo durante la pandemia,
recibió el discipulado, la Escuela de Vida online, y ahora está estudiando la carrera ministerial
en MiSion y preparándose para salir a transformar su ciudad. Toda su familia fue transformada.
Esto es lo que hace el horno, acelerar lo que Dios tenía preparado para cada una de nuestras
vidas.
1. HOGARES ENCENDIDOS.
Las Casas de Oración se transformaron en un centro de operaciones. Nos sumergimos en casas
de oración y vemos con claridad lo que nos muestra el corazón de Dios.
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DEVOCIONALES
Para poder transitar con éxito este tiempo tendríamos que apoyar nuestros hogares en cuatro
pilares.
a) AVIVAMIENTO DE INTIMIDAD
Si bien veníamos cultivando la intimidad con Dios, Él nos dijo que no alcanza. En medio de
este horno es necesario que seamos llevados a un nivel mayor de profundidad en los
hogares, en cada familia, adorando con los niños.
Logramos organizarnos en turnos de una hora por familia, por 24 horas, de manera
ininterrumpida por dos meses. Esto hizo que aviváramos la intimidad con Dios. Ya no era una
intimidad de lo secreto, sino una intimidad de puertas abiertas.
En la intimidad tuvimos que resolver cosas que antes resolvíamos en público, pero ahora las
sometimos al poder de Dios.
Esto trajo madurez en el Espíritu en las familias de la iglesia.
b) DESPERTAR A UN NUEVO NIVEL DE COMUNIÓN
Era necesario llegar a una comunión sobrenatural donde la iglesia local tuviera un valor
fundamental, donde entendimos que en ningún momento la iglesia estaba de cuarentena,
sino que la iglesia estaba de guardia.
Por eso no cerramos las puertas en ningún momento. Tuvimos influencia en el comité de
crisis local que nos permitió, aún en los peores momentos, que nuestra iglesia fuera un lugar
de refugio donde la gente pudiera asistir. Las reuniones se transmitieron desde el primer día.
Y la comunión y el amor por la iglesia local se fortalecieron.
La magnitud de la Iglesia de Cristo, eterna y perfecta que Él viene a buscar se refleja en el
lugar donde te congregas. Tienes que aferrarte y amar tu iglesia local, y todos los recursos
que has recibido en este tiempo son para elevarte a un nuevo nivel de comunión, donde ya
no soy yo quien demanda de mi iglesia lo que quiero que me den, sino que yo soy el impulso
para mi congregación local. Seremos de incomodidad, pero una bendita incomodidad.
c) NUEVO NIVEL DE COMPASIÓN
Todo lo que se parte se multiplica. No asistimos socialmente a la gente, sino que literalmente
partimos el pan, y cuando hacemos esto suceden cosas sobrenaturales. Donde no
alcanzaba, alcanza, pero también hay efectos poderosos porque no somos un centro de
asistencia a los necesitados, sino que damos de lo que tenemos, abrazamos, llegamos a
donde nadie más puede llegar.
A medida que empezamos a luchar con esta enfermedad en la congregación, comenzamos
a entender el valor de compartir el pan. Los grupos pequeños, la asistencia, la gente hacían
visitas, llevaban lo que cada familia necesitaba, abrazaron, amaron, adoraron. Cuando te
quedas sin aire en la madrugada y no puedes respirar, enciendes la tele y en cada altar de
adoración hay otro ámbito que se mete en tu casa en medio de ese momento y transforma
el ambiente en tu familia y respirabas el aire del cielo.
Armamos también un protocolo espiritual para la pandemia, donde le decíamos a la gente
que ante ciertos síntomas en medio de la madrugada, se conectaran a los altares de
adoración.
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DEVOCIONALES
2. CASAS DE AVIVAMIENTO.
Si un hogar encendido con estos cuatro pilares se queda en la comodidad de su historia, se
pierde.
El segundo paso de un hogar encendido es transformarse en una casa de avivamiento.
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DEVOCIONALES
Dale gloria a Dios por las limitaciones, porque las resistencias que vayas a encontrar son la
mejor oportunidad para ver manifestación de ángeles, para ver el poder sobrenatural de Dios,
para ver la gloria de Jesús obrando de manera sobrenatural.
No tengas temor. Enfrenta la resistencia sabiendo que Dios está obrando. (Testimonio del
vendedor de tela para el sillón).
La resistencia produce milagros sobrenaturales. Aunque no veas frutos y aunque no tengas palabras
tienes que creer. La marca de una casa de avivamiento es la resistencia. La marca de una casa de
avivamiento es la tensión.
En la historia de los avivamientos de toda la humanidad hay un común denominador: la oposición.
Es hora de clamar: avivamiento o nada. Dios nos llama a transformarnos en casa de avivamiento.
3. HOGARES ANTORCHA.
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DEVOCIONALES
“Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio
a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”. Mateo 24:14
La palabra testimonio viene de testigo (Hechos 1:8), y la raíz de la palabra testigo es “mártir”.
Es decir que el Evangelio será predicado a todas las naciones de la tierra a través de los mártires,
que darán testimonio, y entonces vendrá el fin.
Testimonio de Richard Wurmbrand (Libro “Torturados por Cristo”).
Estuvo preso por 14 años, y fue torturado hasta sus límites. En los peores momentos el cielo se
manifestó en medio de esa cárcel. Pero lo más impactante es que él amaba a sus torturadores.
Cuando lo dejaron libre, volvió a la cárcel para predicarles y muchos se convirtieron. Esto es
otro nivel. Él es un hogar antorcha.
Creo que, a través de todo lo que estamos viviendo en este tiempo, Dios nos está impulsando
a ese nivel de entrega.
Lo cierto es que me puse a pensar, y si en verdad la Iglesia va a pasar la tribulación, no estamos
preparados; nuestros hijos no están preparados. Entonces, además de un montón de recursos,
Dios nos regaló una hermosa pandemia. Y creo que ninguna otra generación tendrá la
oportunidad que estamos teniendo nosotros de ser formados y preparados para convertirnos
en hogares antorcha, que atravesando este tiempo sembrarán sus vidas en las naciones para
dar testimonio de Cristo en cada rincón de la tierra… entonces el Amado vendrá.
Que todo lo que has adquirido en este tiempo te lleve a un mayor nivel de entrega en sacrificio.
Que el fuego que el Espíritu encendió en nosotros revele a Jesús
y que Él despierte en nosotros una pasión por el sacrificio y la entrega.
Que estemos dispuestos a ser esos hogares antorcha, que han adquirido recursos,
que tienen profundidad, pero que están listos para ser sometidos a la tormenta.
Que no se van a apagar.
Cuando el Amado venga en medio de la noche más oscura, el camino será tan claro porque seremos
una generación que arde con el fuego del Espíritu.