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Col 2:8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las

tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.
Col 2:9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, (La infinita
perfección de Dios nos la muestra Cristo a través de sí mismo)
Col 2:10 y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.

Cristo en relación a la divinidad


Col 1:15 Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. (Dios es
Espíritu, pero ese Dios que lo llena todo, se hizo carne, por amor de nosotros por eso
no temamos porque tenemos El Dios que no lo limita el tiempo el espacio. Esto nos
invita a saber que en cualquier lugar o circunstancia siendo nuestro Dios)

Cristo en relación a la creación


Col 1:16 Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay
en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean
potestades; todo fue creado por medio de él y para él.
Col 1:17 Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;

Estamos completos en Él, porque a pesar de las circunstancias, el tiempo, las


enfermedades, las dificultades, las corrientes filosóficas, las políticas, el tiempo de
violencia que se recrudece en nuestra sociedad, la degradación social, el consumo de
drogas, y la maldad que cada vez pulula con más fuerza, Jesucristo es fiel a su promesa
de estar con nosotros hasta el fin. Por eso sintámonos plenos y no temamos, antes
dependamos más de Jesús, porque como dice

Rom 8:38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni
principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
Rom 8:39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del
amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

Cristo en relación a la Iglesia


Col 1:18 y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, (C) él que es el principio, el primogénito
de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia;
Col 1:19 por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud.

La plenitud en el servicio a Dios, nacidos en Cristo para servir.


Plenitud en la eternidad, cuando nuestro cuerpos sean transformados a la semejanza de
Cristo

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