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ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS |. Descripcién y estructura Los Pactos son el producto de un largo proceso de discusién enla Asamblea General de las Naciones Unidas, que comen- 76 cone redaccién de la Declaracién Universal de Derechos Humanos. Su adopcién en 1966 estuvo acompaniada, ade- més, por la adopcién de! Protocolo Facultative del PIDCP que dispone los mecanismos pare emisién de opiniones en quejas Individuales” Afos més tarde, en 1991, entrarfa en vigor el Segundo Protocolo Facultative del PIDCP que proscribe la pena de muerte? México ratificé el PIDCP en 1981, el Proto colo Facultative en 2002, y el Segundo Protocole Facultativo en 2007, El presente documento propone las siguientes fuentes de informacién para conocer el contenido y estructura del “15 sistema de derechos civiles y politicos: ~~ Tabla 1 Documentos bdsicos (véase Anexo) Pacto Internacional de Derechos ChullesyPolticas [1976 167 Protocolo Facultative del PIDCP 1976[ 6 Segundo Protocolo Facultative del PIDCP 991 B Reglamenta del Comité de Derechos Humanos [2001 [Direcvices consolidadas *ProiacoleFacukatio del Pacto internacional de Derechos Chiles y Poticos, UNGA Fes 2200, A(X), dc 16,1965, 21 UN GAOR Sup. (No. 16) .59,ONU Dac 4/6316 (1968, 999 UNTS 302, entrada en vigor marzo 23 de 1976, 5 Segundo Protocolo Facultative del Paco Internacional de Derechos Civlesy Politics, Destinago a Aboliria Pena de Muerte, GA Res 44/128 anne, 4 UN GAOR Supp (No 48) p. 207, 1642 UNTS 44 "Siac de femas yrafeciones de vatados maliaterales depos tados ante ol Secretaria Genera de las Naciones Unica, en htp/reaies, \nog/Pages/Teatesaspxtdaatsvbdaaslang=en ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DDEPROTECCION DE LOS OERECHOS HUMANOS 76. E1PIDCP esta dividido en seis partes. La primera fart. 1) cenmarca el Pacto en el derecho de todos los puebios {no de los individuos) a la libre determinacién, La segunda part (arts. 2.2 S)establece las condiciones generales de aplicacién del PIDCP: las obligaciones de los Estados, a igualdad de géne- 10, la suspensién y limite de las obligaciones del PIDCP La tercera parte (ats. 6 227) lista los derechos sustantivos del Pacto, La cuarta parte (arts. 29 a 45) se refiere alos aspectos insttucionales dela vigilancia del PIOCP,incluyendo el 6rga- 1no de monitoreo, su conformacién,eleccién y facultades. La quinta parte (arts. 46,y 47) explicit las salvaguardas respecto de la soberania de los recursos naturales asi como la elacién ete las obligaciones de! PIDCP y otras obligaciones de la Car- tade Naciones Unidas La tims parte (ats. 48 353) establece los aspectos de fra, entrada en vigor y modificacién Tabla 2 Partes i, Vy Videl PIDCP 1__|ubre determinacion, 2 [Obligacisn de respetary garantiza adoptando as macidas oportunas 3__[lqualdad entre hombres y muleres ISuspension de obligaciones 5) Prohibicion ce dest los derechos del PIDCP ly de reducirla proteccién de los derechos Iho incluidos en el PIDCP. 6 |Sahaguarda de recursos naturales ¥ 47 [Relacién con la Carta de Naciones Unidas, 78__[Fima, adhesion 29__[Envada en vigor 30 [Fstadosfedevaies yy [3t Fenmiendas 52 [Comunicaciones del Secretar General respacto Ide fra, ratifcaciones, adhesiones, entrada len vigor y enmiendas 53_ [Textos aurénticos ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS En la siguiente seccién haremas referencia a las dispos'- clones generales del PIDCP incluidas en las partes | I, VV. Las restantes serdn desarrolladas mas adelante. Il, Antecedentes y redaccién del PIDCP Un recuento breve de la redaccién del Pacto compone las. siguientes etapas: primero, la dacisién en la Comision de De- rechos Humanos del Consejo Econémico y Social de acom- pafiar un document declarative de derechos, de un tratado vinculante. La Declaraclén Universal y el Primer Proyecto de Tratado de Derechos Humanos fueron el resultado del repo 7P te que el Comité de Redaccién sometié a la Comision de De- rechos Humanos de la Asamblea General en 1947,’ En 1948, al adoptarse la Declaracién, la Asamblea General ratificé la dea de un Tratado de Derechos y solicité al Consejo Econd- mico y Social que considere: “que el plan de trabajo de la Comisién de Derechos del Hombre prevé la elaboracién de una Carta Internacional de Derechos, que deberé compren- der una Declaracién, un PIDCP relativo a los derechos del hombre y medidas de aplicacién’® Un tercer paso seria la con- clustn de un borrador, En 1950 el propio Consejo:“[trans- mite el proyecto de PIDCP de Derechos Humanos [J ala ‘Asamblea General’ con tres grandes asuntos pendientes: la pertinencia de la aplicacién del PIDC? en Estados federales rating Committee onan international ill Human Aight Fst Ses sion, Report ofthe Drafting Committee to the Commission on Human Fights E/ON4/2,01 07.1947, en hip access dds nyun crg/doc/UNDOCY CGEN/GL9/000/26/POF/GL900026 p4P>OpenElerant " Declracin Universal de Derechos !umaros, UNGA Res 217 € (i, 10121948, en toswwwun oxg/es/documents/uche? ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS y territorias no auténomas o sujetos al régimen fiduclario, la posibilidad de reconocer derechos econémicos, sociales y culturales, y la necesidad de los articulos de la aplicacién (0 implementacién}* La cuarta etapa en el desarrollo de la historia es crucial para los origenes del Pacto. En estas fases tempranas de las conversaciones internacionales existia aun la intencién de los miembros de Naciones Unidas de tener un Gnico tratado que articulara los contenidos de la Declaracién Universal. £m diciembre de 1950, la Asamblea General nuevamente se re~ firi al progreso de la Convencién y declaré que‘ disfrute de libertades econémicas civiles y paliticas, asi como los de- rechos econdmicos, sociales y culturales, estén interconec- tados y son interdependientes, asi como que“al estar priva T do de derechos econémicos, sociales yculturales el hombre ‘no representa la persona humana que la Declaracién Univer salindica como ideal de! hombre libre: Por ello“decide incluir en el Pacto de Derechos Humanos, derechos ecenémicos, sociales y culturales yel reconacimiento explicto del hombre y la mujer en derechos relacionadas, camo se establece en la Carta de las Naciones Unidas’”* La intencién de crear un solo documento encontrarla serias dificultades. Tras las discusiones en la Comision de De- rechos Humanos en 1951, la Asamblea General reconsideré el asunto en 1952 y decidié: [.1 solicita] al Consejo Econdmico y Social que pida a la Co misién de Derechos Humans que prepare dos Pactos de De- rechos Humanes, ue se sometan simulténeamente ala cons * Ecoroc Res 303 |), 0808 1950, en hcps/awwun orglevcoman? docssymbo=t/1649 "EUNGA Res 421 EQ), pr. 7 a) abr 12d 1950, ont /fdaccess dds yun org/de/RESOLUTHON/GEN/NR0/063/25/IMCIRODE3ES péODEN Element ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS deracién dela Asamblea General en su séptima ses, uno que contenga derechos cies y polices, y otto que contenga dere: has econémicos, sociales y cultuales, de manera que la Asam ‘blea General pueda aprobar ambos Pactos simultaneamente y abrilos simulséneamente a firma, debiendo contener ambos actos el mayor nimero posible de dsposiciones comunes pare enfatizarla unidad del propésito contemplado, y para garant- zara observanciayrespeto de los derechos humanos, en par- ticular respecto de las dsposiciones de informes de los Estados Partes sobre la implementacién de dichos derechos” Enel mismo acto se dispondia a integracién del derecho ala libre determinacién en ambos Pactos. Tras una nueva ronda de discusiones en la Comision de Derechos Humanos, el Consejo Econémico y Social transmi- 1i6 a la Asamblea General los proyectos de ambos tratados en 1954, Considerando los sucesos posteriores, pareceria, que fue éste el momento en el que comenzé la verdadera batalla ideolégica que impidis, durante afos, la conclusién. de los tratados. En 1952, una vez que se evidenciaban las dificultades para la redaccién de un solo PIDCP que hiclera realidad la positivizacién de los derechos de la Declaracién, la represen- tante de Estados Unidos, la seora Roosevelt, en la Comision, de Derechos Humanos ditia que Los Pactos de Derechos Humanos son parte de un esfuerzo In termacional diseSado para fariliarizar al mundo con las ideas de lalibertady la necesidad vital de su preservaciény extensi, Tal esfuerzo es indispensable actualmente cuande los concep TUNGA Res 43 v9, 05 02.1952 en hrp/fdaccess-des-nyunorgldoct ESOLUTION/GEN/NROVO7 1/1 9IMGINRGO7! 19pdPOpenElement "feosoe es 54 81 OV, pt 1, 071954, en hind owners! comunvdocs?symbol2654 ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS 10s totaltarios se dfunden vigorosamente no slo porlos comu nistas sino por los remanentes del nazismo. La campafa de las Naciones Unidas para promover las derechos humanes debe continuarse y desarollarse con éxito para preservar nuestro modo de vida libre” Enel momento en que la representante de Estados Uni- dos hacia estas afrmaciones, se hacian algunas modificacio- nes menores a los derechos del PIDCP.Por ejemplo, se afia- dira e| adverbio“arbitrariamente' a la proteccién conta la privacién de la vida, la delegacién soviética propondria que [as libertades se limitaran‘en el interés de a democraciat™ ‘Mas importante, el consenso en la Comisin era en el senti- cdo de que e! PIDCP no tendria un carécter auto ejecutable, es decir, que se requeririan las acciones estatales para integrar- los al derecho interno.” La inclusién de la libre determina i6n fue rechazada por la delegacién norteamericana, en relacién con la soberania permanente sobre los recursos naturales. Esta clavsula quedaria incluida come el aticulo 1 en la itima versién del tratado.'* En la década de los cincuentas ! fore internacional dis uta intensamente sobre las implicaciones de los derechos del PIDCP. Moses Moskowitz sefialaba en 1959 que si el tra- tado se abriera a firma en ese momento seria dificil plticar mente para un pa's no ratficarlo por considerar que los de- rechos alll incluidos na estuviesen ya protegidos en su orden juridico.” Con gran tino, sin embargo, destacé el mis Tit an James Simsrian “Progress in drafting two covenants on hu ‘man fights inthe United Nations. p 710. "bid p73 "id p74 "id 718 "loses MaskowitThe Covenants of Human Rights. Basi sues of Substance’ pp. 230-23, ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS ‘mo autor la importancia de haber permitido un lenguaje que limitara los derechos en ciertas circunstancias, para permitir la accién gubernamental.* En a misma vena critica, Mosko- wiz sefialaba el cardcter estatico de os contenidos del PIDCP en el sentido de que se derivan, en la mayoria de los casos, de lege lata de los paises miembros de las Naciones Unidas; ademés de que al no impulsar un avance respecto del statu guone alterarian la posicién del incividuo frente a Estado. Moskowitz destacé también la negativa de la Comision de Derechos Humanos para integrar al texto del PIDCP el tér- mino “sociedad democritica’—presente en la Declaracion Universal y propuesto por la Unién Soviética— porque’“las Naciones Unidas sencillamente no podrian reunir la autori- dad moral pare definir las metas y propésitos de todos los gobiernos:* igualmente, quedaria pendiente el derechode “ZT peticién 0 mecanismo de implementacién de los Pactos:" En 1963, nueve afios después de la entrega del primer proyecto, la Asamblea General invitaria alos Estados a con- siderar los textos de los Pactos. Tres afios mas tarde, en 1966, mediante la Resoluicién 2200 A (XX), a Asambiea General adoptaria por unanimidad, 106 votos, el texto de ambos Pac- 105. Los mismos entrarian en vigor 10 aftos mas tarde, en 1976, con dos meses de diferencia 1. LA UNIDAD Y LA DMISION DE LOS DERECHOS La verdadera disputa ideolégica parece haber iniciado una vez que los proyectos de tratados estaban frente a la Asam- bblea General. Los tratados normalmente se identifican con "bid, p22, "ibid, po. 232-733. See 233. eid p 234. ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS dos columnas de proteccién de los derechos: los denomi- nados derechos “de primera generacién’ contenidos en el PIDCP, que se distinguen de aquellos del Pacto Internacional de Derechos Econémicos, Saciales y Culturales, denomi- nados de “segunda generacién’ Esta nomenclatura resulta oscura si se recuerda que ambos tratados tienen su origen en el mismo documento: la Declaracién Universal de Dere- cchos Humanos. Parece, mas bien, que la ‘primera genera ciGn’ se refiere a los derechos protegidos narmalmente en las Declaraciones de Derechos y Constituciones del siglo XVI, mientras que la “segunda generacién’ se refiere a los dete- cchos sociales que apareciaron en algunos textos juridicos en el siglo XIX. En todo caso, no puede ignorarse que los dere cchos que asociamos normalmente con la “primera genera ci6n‘ no incluyen ottos derechos relacionados con la desi- gualdad y la pobreza que aparecen en tradiciones culturales muy antiguas” EIPIOCE codifica las disposiciones de la Declaracién Uni- versal, Sin embargo, la separaci6n entre derechos civiles y politicos, por un lado, y econémicos, sociales y culturales, por otro, es generalmente precisa, pero no completa. Existen componentes de ambos derechos que se encuentran pre- sentes en ambos Pactos. En el caso del PIDCP, tenemos tres excepciones dignas de observar* —No discriminacién. —Libre determinacién —Proteccién de las minorias. ‘Mas atin, normalmente se supone que los derechos civi- les son esencialmente negativos, mientras que los derechos Samuel Moy The Lost Utopia: Human Rights in History p17 23artin Schenin, “the international Covenant on Cl and Pala Aighsp 48. ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS econémnicas son esenciaknente positivos. Esto significa, se- tin la descripcién comtin, que los deberes del Fstado en materia de derechos civiles se cumplen normalmente porno interferr con a lbertad del sujeto, mientras que los derechos econémicos requieren una accién para satisfacer una nece- sidad. Nuevamente, esta distincién puede ser itil en mu- hos casos, pero no permite iluminar el hecho de que los de rechos civiles también requieren de la accién de! Estado, Por ejemplo, se requiere de inversi6n publica para proveer de infraestructura adecuada en el sistema de justicia, para pre veri investigarysancionar las violaciones alas derechos del rpc. A pesar de ciertos aspectos de unidad conceptual os Pactos tienen algunas disposiciones de diferencias clave. Pr- mero, se cefieren alas obligaciones contraidas. El PIDCR en elarticulo 2 establece que el Estado debe tespetar y garan- tizar"los derechos del Pacto sin discriminacién, asf como la necesidad de que exista un recurso efcaz fente a las viola- ciones de! tratado. A diferencia de esta cldusula, el Pacto in- ternacional de Derechos Econémicos, Sociales y Culturales establece una obligacién de “garantizar el ejercicio de los derechos" aunque cada Estado pueda decidir el acceso que pueda garantizar@ los derechos* La diferencia en el alcance del texto en estas dsposicio- res generales se ha interpretado en el siguiente sentido, los derechos del PIOCP son de vigencia inmediata solamente con algunas excepciones®*“tomardn las medidas apropiadas para asegurar Ia igualdad de derechos y de responsabilda- pace Internacional de Derechos Ecandmicos, Sociales y Cultures, [AG. Res. 22004 OX UN, GAOR Supp (No. 18), . 48, ONY Doc. 6318, (1966) 993 UNITS. 3, entrada en vigor 3 2 enero de 1976, Diario Oficial de la Fedracién, 12 da mayo de 1991, a. 23. fobert Siar “Inernationa Protection of Human Aight and the Unit ed Nations Covenants pp 63,856 ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS des de ambos esposos en cuanto al matrimonio’? promo- verdn el ejercicio del derecho de libre determinaclon’”" La diferencia entre obligaciones inmediatas y las destina- das a tomar medidas de cumplimiento, recuerda la diferencia original entre la Declaracién Universal y un Proyecto de Tra~ tado de Derechos en el seno de Naciones Unidas. Asi, pa~ receria que el Unico tratado con obligaciones claramente exigibles seria el PIDCE, mientras que los derechos econémi- 05, sociales y culturales quedarian sujetos a esténdares alos que los Estados aspirarian, Las distinciones en el grado de exigibllidad de los derechos petmanectan, a pesar de haber concluido el proceso de redaccién de los documentos. El debate refleja ecos de la primera escuela de abogados y profesores internacionalistas contemporéneos a la redac- ign de la Declaracién Universal, quienes insistian en la nece- sidad de que el catélogo de estandares de cumplimiento” contenidos en la Declaracién recibiera la adecuada forma Juridica de un tratado, una regla propiamente vinculante>* . LA FUERZA VINCULANTE DE LOS DERECHOS {Eranecesario el esfuerzo pare lograr la fuerza vinculante de los derechos humanos? Hoy esta pregunta pareceriaires- ponsable, pero hace 60 afos as posiciones del foro de abo- dgados no reflejaban entusiasmo Las expectativas y objeti- vos de la redacci6n del PIOCP han cambiade a través de la historia reciente para el foro de abogados dedicados al de- recho internacional para a opinién publica. Aunque el discur- paca nvernscional de Derechos CivlesyPoticos,UNGA Res 2200.4 (omc. 16 1966, 21 UN GAOR Supp (nim, 16), p52,UN Doc 63161955, 999 UNTS 171, envigor desde 23 de marzo de 1976, art. 23 (4 Ped, an 1 28a. Hersch Lavteypach, international aw and Human Rights ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS s0 de los derechos humanos tiene distintas consecuencias endiferentes regiones del mundo parece claro que, como.en todos los campos del derecho, la existencia de reglas no tie- ne Un impacto claro sobre la vigencia de los derechos." En realidad, el consenso sobre la fuerza vinculante de la idea de los derechos era escaso ene! foro de abogados dela época." Las circunstancias cambiarian con el tiempo, Ademas de ser na realidad que la soberania del Estado no cederia fécil mente e! paso a los derechos, la Guerra Fria se impondria como una condicién en todos los asuntos internacionales. En particular, la condicion de los derechos individuales 2 los derechos sociales en la Constitucién de Stalin, de 1936, seria Identificada en las negociaciones de los afios cuarentas y incuentas como un factor de divsién casi insuperable” Ya en los afos cincuentas, habiendo enfrentado los dilemmas de la redaccién de la Declaractén el foro de abogados vela con profundo escepticismo el efecto que un ratado pudiera tener ena vigencia de los derechos. Incluso,a fines de los afios sesentas ios académicos norteamericanos, que después se- rian fos grandes impulsores del movimiento de los derechos humanos, expresaban serias dudas sobre la plausibilidad de realizar el proyecto de Lauterpacht, de traer al individuo al centro del derecho internacional, incluso con poder de ac- ién contra los Estados priadna Hever, ‘A Latin American Soci Policl Conceptuaiation of Human Rights p ZC Moye, The ast Utopia. 62 et pp. 191-183, pa Inexperiencia europea de los derechos en rine del aifcacin del Con vero Europe para la Poteccn de as Derechos Humanosy as Libertaes Fundamentals, de noviembre de 1950, ented en vigor el3 de septiem rede 1953, 59 ck L Goldsmith y El A Posne, The Lis ofltemationa ow. 21M, The Last Utapa...9p 183-186 ibid. p18. ea, p18, bid po. 185198 ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS Frente alos elementos de esta narrativa de la historia de la redaccién de los Pactos, se ha dibujado un cuadro de com- bate entre dos ideologias irreconciliables en medio de la Guerra Fria. Algunos autores recientes, sin embargo, insisten en la necesidad de tejer con mas detalle esta rama, con el fin de anreciar que no existia una alineacién perfecta entre los bloques occidental y soviético sobre los derechos de los, Pactos En realidad, mientras la Unin Sovietica emoujaba [a unidad de los derechos, algunos paises occidentale insis- tian en la separacién de dos mundos aparentemente irecon- Giliables. Entre numerosos intercambios de posiciones, pa- rece que la Guerra Fria no habia congelado la discusién de los derechos sino que habia dotado a los Estados de las he- rramientas juridicas para sostener los debates planteados.” A lado de la Guerra Fria —y para algunos autores, por encima de ella— el debate central en el desarrollo de las obligaciones juridicas,vinculantes sobre fos Estados, pas6 porelrechazo al colonialismo en la misma época. Lynn Hunt con toda claridad afirma que la discusién de los derechos ten el seno de las Naciones Unidas tomé el asiento de atrés* frente al debate de la descolonizacién.™ Ya en la redaccién de le Declaracin el colonialisma habia dividido a los paises Enel desarrollo de los Pactos la libre determinacién adauir'- ria una posicién central, enmarcando todos los derechos. De cierta forma, el ingreso de la libre determinacién como un derecho de los pueblos echaria por tera el proyecto cos- mopolita de la Declaracién de los Derechos Humanos de * Jennifer Amos, “Embracing and Contesting The Soviet Union and the Universal Declaration af Human Rights 1948-1958 p49, ib, p 151 p65 28 unt inverting Human Rights... oP sp 206 9G endo Suga "René Cass, es dots de homme and universality of humo rights 194-°866% 9113, ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS generar una ciudadania global. Los derechos exigibles que- darfan vinculados a una nacién, un pueblo. nla conferencia de aceptacién del Premio Nobel, en 1968, René Cassin —ac- tor cental en la redaccién de la Declaracién Universal— se refiré al fenémeno de descolanizacién como le consecuen- cia necesaria de los valores liberales y, al mismo tiempo, co- ‘mo a preeminencia de las entidades politicas sobre losindi- Viduos en el discurso de los derechos. Este seria el marco de aplicacién del PIDCE, una ver vigente, ocho anos después: Es importante observar en este contexto que la libre deter- rminacién recibié la sancién de la Corte Internacional de Jus- ticia en términos definitivos, incluso antes de que los Pactos entraran en vigor, airmando el carécter consuetudinario y perentario de [a obligacién de respetar este derecho" Incluso después del logro monumental de redactar los dos Pactos Internacionales y abrirlos a fma en 1966, pasarian 10 afos antes de que 35 miembros de la comunidad inter nacional los ratcaran. En este lapse de casi 20 afos entre la Declaracién y la entrada en vigor de los primeros documen- tos vinculantes de derechos humanos, los profesionales bus- caron un argumento para solidificar le fuerza vinculante de la propia Declaraciény para desarrolar un régimen extracon- vencional el derecho consuetudinarto Desde mediados de los afios sesentas se encuentran re- ferencias para reforzar el valor de la Declaracién como un documento juridicamente relevante apelandio a las Gitimas versiones de Lauterpacht sobre dicho asunto, © trayendo ied p18 Cl, Révsory Opinion Concerning the Legal Consequences of the Construction of Wallin the Occupied Tettories of Palestine, (Cl Reports 2004, p. 13, pat 89; CU, Adisry Opinion concerning the Lega Conse {quences for Sates of the Continued Presence of South Afica in Namibia {South est Aca}, Nowwthstanding Securiy Counc Resolution 276 (1970, ICAReponts 1971, 039 ‘COLECCION DEL SISTEMA UNIVERSAL DE PROTECCION DE LOS DERECHOS HAMANOS fuerza de las tesoluciones de Naciones Unidas en relacién con el régimen colonial’? Quizé més sorprendente es el efec- to que tuvo el impulso de Henkin para acumular el interés y le fuerza del*movimiento de derechos humanos, un térrnino éempleado por él por primera vez en el New York Times, en 1977." En ese momento, quien fuera profesor de la Univer sidad de Columbia, aera ala vida de os abogados interna cionales un nueve campo de trabajo libre del escepticismo y la ncredilidad caractersticos del asunto durante 30 aos. La férmnula de Henkin seria unificaren la conciencia popula idea de los derechos humanos internacionales y los valores de la democracia americana, Califcaria el PIDCP como un “asombroso tributo a los valores occidentales faue] ha he- cho de nuestra ideologia la norma internacional Estas pa- labras iban claramente dirigidas a ejecutar una estrategia: acercar la poltica exterior estadounidense a la posibilidad de ratifcar el Pacto abierto afrrna 11 afios ats. Henkin ten dria éxito tres afios mas tarde.® Doctrinas contemporéneas buscarian infundir fuerza a la Declaracién Universal con una narrativa sobre su impacto en el derecho internacional general, en cierta forma, para lle- nar elvacio legal que dejabe la ausencia de ratficacin de los Pactos. Theador Meron fue un importante proponente de este discurso* Aunque hoy es claro que algunos de los dere- "Moyne as Utopia... pct. 199.Reltalaitrodccin en el foro de este argumento par Scho en 963, ‘Sethe case or U.S Ratification’ ew York Times, 20.04.1877, cen Moyr The Last Utopia. 0p tp. 205. “Moy, Meas Utopia... op ct. 206. *an-Toterraional Protection. opt, pp. 83, 867-8, dentica ‘ba diferencias del PIOCP con los derechos enla Consttucén norteamet «ana: () libre determinacién; i) compensscion por detencién abit (il compensacin par miscariage of justice (i) benefcis retroactive de reduccién dla pera) prohibicn de propaganda de quera) derechos deal y i derechos de“rinoras! “Moy, The as Utopia... op ct. 207 ELPACTO INTERNACIONAL De DERECHOS CIES ¥FOLICOS cchos de la Declaracién farman parte del derecho general, ain continda siendo importante la ratificacién del PIDCP para la vigencia de esos derechos en el tertitorio y la jurisdicci6n de los Estados Partes.” Con el Pacto en vigor, al lado de otros numerosas instru mentos de derechos humanos, atender ala historia de su nacimiento ne es solamente un detale introductorio. En reall- dad, el proceso de creacién del instrumento refleja las tensio~ res y los limites en la intencién de! texto, No sugiero con ello ue el PIDCP deba ser interpretado a la luz de la intencién original de los redactores, sine que sea una linea de reserva para tener presentes los alcances de las realidades politica El trecho por avanzar en la vigencia de los derechos atravie~ sa atin la voluntad de las entidades politcas responsables del cumplimiento de los deberes en los tratados, Ademas, como. hhan seftalado algunos autores, la historia delos derechos no 29 comienza con la vigencia del PIDCP u otras tratados. €s im- portante reconstruir en la medida de lo posible este trayecto para tener una perspectiva critica hacia el futuro Ill, Los derechos garantizados por el PIDCP Los derechos que el PIOCP protege estén asociados a las lt bertades fundamentales que se incluyeron en las cartas de derechos de finales del siglo XIX: lz proteccién contra la ar- bitrariedad en la aplicacién de la ley; la igualdad —ya que por primera vez la igualdad seria verdaderamente univer- sal y las litertades de conciencia, de expresién y de aso- ciacién. “7Sra Joseph y Joanna Xyakats,“The UN and human sights. “ex por ejemplo, Hunt, venting Human Rights... 02 cit

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