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Sindrome de la vaca echada El sindrome de la vaca caida es una secue- la comiin de la fiebre de la leche en el cual la vaca estuvo en dectbito esternal duran- te varias horas antes de ser tratada con cal- cio. Tras el tratamiento, la mayor parte de los hallazgos clinicos asociados con la fie- bre de la leche se resuelven, excepto que el animal es incapaz de levantarse. Clinica- mente, el animal puede estar normal, a ex- cepcién del dectibito, y habitualmente se recuperara y se pondra en pie, por lo ge- neral, en varias horas o pocos dias. La ma- yor parte de las vacas caidas comen y beben con normalidad, sus signos vitales estan dentro del intervalo normal, y la fun- cion de su aparato digestivo es normal. Sin embargo, algunas estan anoréxicas, es po- sible que no beban, muestren movimientos extranos de estar en dectibito lateral exten- diendo dorsalmente la cabeza y el cuello con frecuencia, a menudo gimen y grufen, adoptan una postura en rana con las extre- midades pelvianas, y se arrastran y se des- lizan alrededor de la casilla del establo, y pueden fallecer o sufrir ecutanasia por moti- vos humanos en pocos lias. El dilema diagnostico con estas vacas es que éste se asemeja a la fiebre de la leche, y se cues- tiona si tratarlas o no con suplementos de | sales de calcio. SINDROME DE LA VACA Echan, Etiologia. Necrosis isquéemica de los grandes musculos de las extremidades pelvianas, secundaria a un dectibito prolongado asociaco con la fiebre de la leche. Otras causas de gecibito pueden provocar tambig gindrome de la vaca caida epidemiologia. Mas comuin en vacag jecheras que han tenido fiebre de la pero son incapaces de ponerse en tratamiento con calcio. Un retarde Ahenel tratamiento de las vacag con fiebre de la leche. La hipofosfatemia y/o la hipopotasemig pueden ser factores de riesgo, Signos. Incapaz de levantarse tras e| tratamiento de la fiebre de la leche. Decubito esternal. Estado mental, signos vitales y aparato digestivo, normales. Apetito y sed, normales. La mayor parte se levantara en pocos dias, si se le proporciona una buena asistencia clinica y se reduce al minimo la necrosis muscular secundaria. Algunos casos muestran una conducta rara de decubito lateral, Posicién anormal de las piernas, quejidos, anorexia y fallecen en varios dias. Pruebas analiticas. Aumento de los niveles Séricos de creatina fosfocinasa (CPK) y aminotransferasa (AST); los niveles de fosforo ¥ Potasio pueden estar por debajo de lo Ne! mal Lesiones. Necrosis isquemica, edema Y Nun leche Ple tras ay de mas de Postradag hemorragia de los grandes musculos del Muslo Confirmacion diagnostica. Aumento de Niveles de CPK, AST, proteinuria: lesiones : "ectopsia en vacas incapaces de levantars SIN otro tipo de lesion. muslo. Confirmacion diagnéstica, Aume riveles de CPK, AST, proteinuria; | necropsia en vacas Incapaces de h sin otro tipo de lesion. Lista de diagnosticos diferenciales: + Véase diagnostico diferencial de la fie! la leche (p. 1687) y Tabla 28,1, Causas comunes de decubito en vacas lecheras, cerca del momento del Parto son: Fiebre de la leche (p. 1687). Hipomagnesemia (p. 1712). Mastitis coliforme fulminante (p. 754), Pardlisis obstétrica materna (p. 1695). Sindrome de la vaca gorda (p. 1694). Lesiones fisicas de miembros pelvianos (luxacion de la articulaciones de la cadera, rotura del mUsculo gastrocnemio, fractura de fémur). Peritonitis aguda difusa (rotura del Utero, otras causas). NS el NtO de log esiones de evantarse bre de Tratamiento. Proporcionar alimentos y agua, y una cama excelente o superficie del terreno similar a un saco de arena o tierra. Girar al animal de un lado al otro cada pocas horas. Tratamiento hidroelectrolitico, cuando sea necesario. Control. Todas las vacas lecheras recién Paridas que estén en situacion de alto riesgo Para la fiebre de la leche, han de ser observadas de cerca 12 a 24h antes y después del parto, en busca de signos de fiebre de la leche y mientras atin permanecen £N pie; si estan en decubito, no retrasar él Wratamiento mas de 1h. Se puede tratar @ todas las vacas de alto riesgo con gel de Cloruro célcico por via oral, para preven la Fiebre de la leche clinica. ETIOLOGIA Por lo general, la vaca caida €s una com la leche (1), La necrosis isquémica de los grandes mus culos de las extremidades pelvianas y las lesiones de los tejidos que rodean Ia arti- plicaci6n de la fiebre de culacion de la cadera y de los misculos obturadores, son comunes en vacas que no se han recuperado totalmente ni se ponen en pie, sino que permanecen en dectbito tras el tratamiento de la fiebre de la leche. Las lesiones también pueden producirse en vacas con sus extremida- des posteriores «despatarradas», cuando estan en posiciOn inestable durante el parto o se las fuerza a estar de pie o ca- minar sobre un suelo deslizante, inmedia- tamente antes o después del parto. La distocia debida a un ternero de tamano excesivo puede provocar un edema eXx- tenso de los tejidos pelvianos y la vulva, e incapacidad de la vaca para ponerse en pie tras el parto, Si estas vacas desarro- llan fiebre de la leche, es improbable que sean capaces de levantarse tas el trata- miento con calcio. EPIDEMIOLOGIA Presentacién La eoennesat aparece, por Io general en los 2 6 3 primeros digs después del parto, en vacas lecheras de alta produc- cion, inmediatamente después de [a fiebre de la leche. El ganado vacuno también puede adoptar de forma persistente un decubito por muchas razones diferentes a las complicaciones de la fiebre de la le- che, entre ellas, mastitis coliforme fulmi- nante y acumulacion de carbohidratos, Incidencia La incidencia, como complicacién de la fiebre de la leche, es alta debido a que muchos animales afectados son altos pro- ductores y de elevado valor economico. No se dispone de datos exactos sobre la incidencia a causa de las variaciones en la nomenclatura utilizada y en la exactitud de los diagnésticos. Por ejemplo, algunas observaciones informan que todos los ca- sos estén causados por una lesion nervio- sa (2). Los casos incluidos en esta clasifi- caci6n son clasificados por otros como | pardlisis obstétrica materna, pardlisis de * obturador o hipofosfatemia. Por ello, es un sindrome que carece de definicién cli- nica y comprende todos aquellos «otros casos» que no pueden clasificarse de otra forma, y cuya incidencia varia dependien- do de la agudeza clinica de cada veteri- nario, y de los diversos factores ambienta- les de las diferentes areas. Sin embargo, la incidencia parece ir en aumento, en espe- cial en zonas con industrias lecheras, aun- ion podria derivar de la que esta impres creciente necesidad de curar a animales valiosos. Una encuesta por correo de 723 reba- fios lecheros en Minnesota descubrié una incidencia de 21.4/1000 vacas, en afios de riesgo (2). El resultado global fue que el 33% se recupero, el 23% fue sacrificado y el 44% fallecid. Los propietarios observa- ron que las vacas caidas eran altas pro- ductoras (48%) o productoras medias (46%), siendo sélo un 6% bajas producto- ras. Aproximadamente el 58% apareci6 en el primer dia después del. parto y el 37% durante los primeros 100 dias de la La incidencia fue superior (39%) lactancia durante los tres meses mis frios: diciem- bre, enero y febrero, En Nueva Zelanda, la prevalencia oscila entre el 3-5% de to- das las vacas lecheras en el momento del parto (3). En un seguimiento clinico y de torio de 433 vacas postradas peripartu- rientas, en Nueva Zelanda, el 39% se re- cuperaron, el 30% fallecieron y el 32% fueron sacrificadas (3). El indice de mor- talidad fue un 11% superior en las vacas adas preparto que en las vacas pos- labora- postr: parto. Factores de riesgo Factores de riesgo del animal COMPLICACION DE LA FIEBRE DE LA LECHE. El dectibito prolongado, tras una larga de- mora en el tratamiento de la fiebre de la leche, es un factor de riesgo importante. El dectbito prolongado antes del trata- miento de la fiebre de la leche Gnas de 4- 6 h) provoca una necrosis isquémica de- bido a la obstruccion del aporte de sangre, en especial en vacas pesadas que yacen sobre una pata durante un largo periodo (4). Las vacas que desarrollan fie- bre de la leche mientras permanecen en pie en el establo, pueden resbalar hacia atras, al canal6n del establo, lo que con- duce a una presi6n extrema sobre sus ex- tremidades pelvianas, produciéndose ne- crosis isquémica. Un estudio de casos y controles para identificar los factores de riesgo para el desarrollo del sindrome de la vaca caida en los 30 dias pospatto, en 12 rebafios le- cheros, a lo largo de 2705 lactaciones, descubri6é que la hipocalcemia clinica y los nacidos muertos aumentaban 5 veces el riesgo de la enfermedad (5). Las vacas con placenta retenida y distocia tenia tam- bién una mayor probabilidad de desarro- llar el sindrome de la vaca caida que las vacas sin ningdn problema. Un fuerte aumento en los niveles de CPK, en vacas con fiebre de la leche e incapacidad para ponerse en pie tras | tratamientos repetidos, es una prueba complementaria a favor de una necrosis | isquémica asociada con el dectibito pro- longado, como causa principal del sindro- me de la vaca caida (1). Los niveles de CPK se elevan intensamente entre el pri- mer y segundo tratamiento, lo que indica que se ha producido lesién mus cular y que los niveles son més altos en las vacas que no se recuperan Desde el punto de vista experimental, el decbito forzado del ganado vacuno durante 6, 9 6 12 h, con un: posterior colocad: a extremidad a bajo el cuerpo, desen- cadena un sindrome de |, vacas afectada a vaca caida |. Las * Son incapaces de ponerse en pie y la extremidad afectada esta tume- facta y rigida, de forma midades lesionadas de pa imilar a las extre- ientes humanos con sindrome compartimental/de aplasta- miento. LESIONES TRAUMATICAS DE PELVIS Y EXTREMI- DADES PELVIANAS. Las lesignec trai, mer y segundo tratamiento, lo que indica que se ha producido lesion muscular y que los niveles son mas altos en las vacas que no se recuperan. Desde el punto de vista experimental, el dectibito forzado del ganado vacuno durante 6, 9 6 12 h, con una extremidad posterior colocada bajo el cuerpo, desen- cadena un sindrome de la vaca caida. Las vacas afectadas son incapaces de ponerse en pie y la extremidad afectada esta tume- facta y rigida, de forma similar a las extre- midades lesionadas de pacientes humanos con sindrome compartimental/de aplasta- miento, LESIONES TRAUMATICAS DE PELVIS Y EXTREMI- DADES PELVIANAS. Las lesiones traumaticas de los nervios de la pelvis y de las extre- midades pelvianas estan presentes en el 25% o mas de las vacas caidas (1). Los nervios, cidtico y obturador, son vulnera- bles a la lesion por presi6n secundaria al desplazamiento del ternero a través del canal pelviano durante el parto. En vacas recumbentes, también pueden producirse lesiones por presion de los nervios super- ficiales (radial 0 peroneal) de las extremi- dades DESEQUILIBRIOS DE ELECTROLITOS SERICOS. Los desequilibrios o los dléticit de los elec- BOLICAS trélitos séricos se pueden asociar con el dectbito prolongado tras el tratamiento de la paresia de la parturienta. HIPOCALCEMIA. En una vaca caida puede existir una hipocalcemia persistente tras e] tratamiento de la fiebre de la leche, aun- que es improbable que sea la causa prin- cipal ya que el tratamiento con sales de calcio no resuelve los signos, ni tan si- quiera temporalmente. Sin embargo, el empleo de una cantidad insuficiente de calcio para el tratamiento inicial de la fie- bre de la leche, en vacas pesadas y gran- des, puede desembocar en una respuesta incompleta y una incapacidad de la vaca Para ponerse en pie. Si a estas vacas no se las vuelve a tratar, con suficiente pronti- tud, con un cantidad adecuada de calcio, aparece una necrosis isquémica de los musculos de las extremidades que condu- cea una recumbencia prolongada. En mu- chos casos, incluso cuando a la vaca se la ha administrado cantidad suficiente de calcio, se produce un decubito prolonga- do debido a la necrosis isquemica. HiPorosratemia, Los niveles séricos de fosforo inorganico descienden por debajo de lo normal ponte nan la hinncalcemia, eee" a chos casos, incluso cuando a la vaca se la iministrado cantidad suficiente de produce un dectibito prolonga- Ja necrosis isquémica, ha adi calcio, s€ do debido a HIPOFOSFATEMIA. Los niveles séticos de fosforo inorganico descienden por debajo de lo normal, junto con la hipocalcemia, casos de fiebre de la leche. Tras el tra- en tamiento de la fiebre de la leche con bo- rogluconato calcico, los niveles séricos de calcio y fésforo regresan a la normalidad si el animal responde favorablemente y se levanta con normalidad. Después del tra- tamiento de la fiebre de la leche, algunas vacas no son capaces de levantarse, y sus niveles de fosforo sérico estan por debajo de lo normal. Esta hipofosfatemia per- sistente se ha considerado como una cau- sa del sindrome de la vaca caida asociado con la fiebre de la leche. Muchos veteri- narios reivindican que estas vacas respon- den al tratamiento con fésforo. Sin embar- go, el dectibito persistente se asocia con co, niveles subnormales de fdsforo séri que se elevan hasta la normalicad si la va- Ca se pone en pie, independientemente del tratamiento 6 no con fésforo. Las va- cas lecher, maduras pueden adquirir un decubito al inicio de la lactancia, y pue- ca existir niveles subnormales de f6sforo Serico (6). Otras vacas del rebano pueden Presentar cojera debido a la desminerali- zacion de los fi 1 de los hue 308, asociada con la de- tclencia dietética de fosforo. pIPOMAGNESEMIA. La hipomagneser; 1a. ve duradera se ha asociado con lay 4 le, Vaca acom de hipocalcemia. Aunque se suele . ani festar por un estado tetanico hiperestec: “icc caida, en especial cuando se que no es parte del sindrome de tg ttm caida, La hipopotasemia es, con |g hip. fosfatemia, la causa mas comtinmente tada, en especial en las denominadas va cas «eptantes», que estén activas y alert y mas 0 menos se arrastran, pero son incg. paces de ponerse en pie (7). HIPOPOTASEMIA. La isquemia debida al de- ctibito prolongado, asociada con la fiebre de la leche, puede aumentar la permeabi- lidad de la membrana celular de las fibras musculares y permitir la pérdida de pota- sio de la célula; esto provoca, a su vez, la miotonia que parece ser la base del sin- drome de la vaca caida. Este punto de vis ta viene apoyado por los niveles bajos de potasio sérico y muscular en las vacas cai das, Se pretende que las sales de pouasio son tiles en el tratamiento, pero est he cho ha sido dificil de evaluar (3)- as vaces La hipopotasemia aparece €P las val sealo lecheras que han sido tratadas con ace 5 (8) de isopflupredonato para la cetosis 1 : ig, Fe Los animales afectados estan debiles i; pot asemia in cumbentes y con una hipol enti ) tensa, con niveles de potasiv sere 1.4-2.3 mEq/L. oH aa i, . al das. Se pretende ae Lag 7 s vac son titiles en el tratamientg €8 de Por cho ha sido dificil de evaluar Ge Cte : La hipopotasemia aparece ), lecheras que han sido tratadas © . Vey ato para I AC isopflupre ty de isof predon: ey, ety Los animales afectados es Cetog, “AN debe a hipopotase fake tensa, con niveles de pot asio Sétig 1,4-2.3 mEq/L. cumbentes y con un: Factores de riesgo ambientales y de manejo Una superficie deslizante es UN Fact OF de nlesgo import ante. El ganado que ha de caminar por terrenos deslizantes, Puede resbalar y caer, y lesionarse los grandes musculos de las extremidades Ppelvianas, provocando una incapacidad Para estar en pie. El dectibito prolongado conduce a una necrosis isquémica y al sindrome de la vaca caida. Resumen a 2 4 Ne El sindrome de la vaca caida es una com Loe : : con lt Plicacion del dectibito asociado con F ra de 4h0 fiebre de la leche. Una demora de 4 ‘ aca con fie- Mas en el tratamiento de la vaca vip a una ne- bre de Ja leche puede conducir a! e us creer oe de Crosis isquémica de los musculos i n taunt extremidades pelvianas. La lesi6t ia nel tica de los mtisculos de la pata © a | nl ento del par oO, O cuando la vaca 1 esta a inestable y 5° cae durante la etapa pri ra de la fiebre de la leche, tanibids oot yocara una incapacidad de la vaca Pro- jevantarse tras el tratamiento de Ia hebre re de la leche. pATOGENIA Diversos factores primarios o enfermeda: des, diferentes, pueden conducir al dect: bito. Decubito prolongado antes del tratamiento Un re ‘Sy “ae en el tratamiento de la fiebre a eche puede producir una lesion por presid: ac igui ny la consiguiente incapacidad pa- o de la en- olonga- ra levantars . antarse, tras el tratamient ermedz ri j dad primaria. El dectibito pr esion, que do por Pp rc + j yrovoca una lesion pot pr fac- aparec . areCe > 7 tor de forma secundaria y es un comtin z : min a todos los casos (2) causa, el de- Ind ependi pendientemente de la diversos cabit <> re prolongado conduce a 4 de los grr poste- miten- Rrados tiores , 08 de las extremidades ding... _ particular del musculo se we = oo agudale: un retardo en el tratamiento de jg fieb, dela leche puede producir ung lesion ‘ p resion Y la consiguiente incapacidad a ra Jevantarse, tras el tratamiento ri e & fermedad primaria. El dectibito fy i do provoca una lesion por Presi6n, ha aparece de forma secundaria Y es un fae. tor comtin a todos los casos ( 2) Independientemente de la Causa, el de. ctibito prolongado conduce a diversos grados de necrosis isquémica de log gran- des musculos de las extremidades Poste- riores, en particular del mtisculo semiten- dinoso y de los mitisculos caudales a Ig babilla. La compresion prolongada del musculo conduce a una anoxia tisular, da- fio celular e inflamacion que causa tume- faccion; la tumefaccién produce un au- mento adicional en la presién, que limita la perfusion tisular y provoca una cascada perjudicial de acontecimientos. Los grue- sos limites fasciales del mUsculo semiten- dinoso impiden la expansion, lo cual tiene como resultado un sindrome comparti- mental inducido por presi6n. También se produce una lesion del nervio ciatico por la presin, y puede contribuir al sin- ica caida. La compresi6n drome de la externa experimental de la extremidad pelviana de Ja cabra, para simular una compresion de extremidad, en la va Cumbente, produce una intensa reduccion a, nerviosa de la velocidad de conduccion nervie del nervio peroneo que se asocid COM una disfuncion de las extremidades, lini ervio pe- menu- Mente manifiesta. La lesion del voneo causara una hiperflexion del aq sea capaZ illo, siempre y cuando la vaca sea cap culos Y a de los mus i idlia- los nervios de las extremidades, inme tamente antes es del parto 0 en el mo Mento del par pare. puede conducir a un dectibitc ro i p ongado y la consiguiente lesion po presion (1), ™ Decubito esternal experimental Desde el punto experimental, el dectibito esternal inducido con una extremidad posterior colocada bajo el cuerpo para si- mular el dectibito prolongado, conducira a una extremidad rigida tumefacta en 6-9 h (9). Tras la lesion de las células muscu- lares, los niveles séricos de CPK se elevan intensamente hacia las 12 h después del inicio del dectbito. Entre las 12 y 36h después del inicio del decibito prolonga- do, aparece proteinuria y, en algunos ¢a- sos graves, mioglobinuria, debido a la li- beracion de mioglobina por los musculos as vacas que fe ro no pueden i , alizan eS~ lesionados. En | alizan levantarse Pe fuerzos por OSs continuados conseguitlo, esos esfuerZ una rotura de las fibras muscu- increment provocan i 4ndose la lares Y hemorragia, oravedad. | 2 a se puede | grave itis focal aguda se P a paens. #esionados. En la ; que realizan ea. Aigiiee S vacas que realizan por levantarse Pero n in conseguirlo, esos esfuerz ra, s ‘O08 conti wen : inuad fi ” una rotura de las fibras mu: sits ah : ‘as iscu- y hemorragia, incrementand gravedad. Set La miocarditis focal aguda se pued am la se puede oy en cerce entar en cerca del 10% de los casos endo causa de taquicardia, arritmia y una respuesta desfavorable a las sales de pr calcio IV observada en algunos casos. Se desconoce la causa de la lesién miocardi- ca, pero se ha sugerido la administraci6n repetida de sales de calcio (1). Las vacas caidas con un mal prondstico también tie- nen una funci6n suprarrenal enormemen- te aumentada (7). El dectibito prolongado puede ser cau- de complicaciones adicionales como, mastitis aguda, tlceras por sa por ejemplo, dectibito y lesiones traumaticas de las ex- tremidades. togenia de la vaca caida, n' ce (10). La mayoria han te- al de fiebre de la le- La pa 0 aler- ta, no se CcOno' nido un episodio inici ro no responden favorablemente. che pe En 1 6 2 dias, afectadas mues- las vacas ) lateral Y tran preferencia por el dectibitc exhiben quejidos respiratorios Y gruniclos Representan cerca del 2% de todos los ct sos de fiebre de Ja leche Hipocalcemia protongada experimental longada experimental alcemia PFO! a hipoc eg aabr aaah ar algunas claves sobre puede proporcion la patogenia del sindrome de la vaca cai- da, como complicacion de la fiebre de la leche. La infusion prolongada de Acido te- traacético de etilenediamina (EDTA) en Ovejas, durante 18 h, a una velocidad para inducir hipocalcemia y mantener la re- cumbencia, produce periodos prolonga- dos de postracion que oscilan entre 36-64 h antes de que el animal sea capaz de le- vantarse (11). También hay descensos en el sodio plasmatico, el potasio plasmatico y el potasio eritrocitario, y un aumento prolongado en el valor hematécrito, lo que sugiere que el tratamiento de reposi- cién de liquidos puede estar indicado en el ganado vacuno con decibito prolonga- do asociado con hipocalcemia (12). Una infusion IV de EDTA, durante 4 h, en va- cas lecheras con un potasio eritrocitario alto y un potasio eritrocitario bajo causa un descenso en el f6sforo inorganico plasmatico y en el potasio plasmatico que atin permanece por debajo de lo normal al cabo de 24 h (13). La AST, la CPK y el valor hematocrito y los recuentos de leu- cocitos también esta elevados 24 h des- pués. E] magnesio plasmatico, y el sodio y el potasio eritrocitarios, descendian, pe- ro dicho descenso no era retarcdado. El au- mento en el valor hematécrito cra mas pronunciado en vacas con potasio eritroci- tario bajo, lo cual podia proporcionar al- gunas claves sobre la patogenia del sin- drome de la vaca caida. Algunas vacas pueden tener un aumento mas precipitado en el valor hematécrito debido a la peérdi- da de volumen plasmatico y a una incapa- a ERECT AS COM Ul pOolasiO entrocitano alto y un potasio eritrocitario bajo causa un descenso en el f6sforo inorganico plasmatico y en el potasio plasmatico que atin permanece por debajo de lo normal al cabo de 24 h (13), La AST, la CPK y el valor hematdécrito y los recuentos de leu- cocitos también esta elevados 24 h des- pués. El magnesio plasmitico, y el sodio y el potasio eritrocitarios, descendian, pe- ro dicho descenso no era retardado, El au- mento en el valor hemat6crito era mas pronunciado en vacas con potasio eritroci- tario bajo, lo cual podia proporcionar al- gunas claves sobre la patogenia del sin- drome de la vaca caida. Algunas vacas pueden tener un aumento mas precipitado en el valor hematécrito debido a la pérdi- da de volumen plasmatico y a una incapa- cidad para movilizar el calcio. Como ba para estudiar los efectos de las soluciones hipertonicas con el fin de corregir estas anomalias en animales caidos, se puede administrar en ovejas una solucion IV de 200 mL de 10 g de cloruro sddico y 0.5 g de cloruro potasico, con seguridad, duran- te un periodo de 4-8 min (14). DATOS CLINICOS EI sindrome de la vaca caicla puede presentarse independientemente, ©. tras el trata- arente recuperacion Wi fiebre de la leche, excepto una ay miento de la Ja postracion prolongada. sués del tratamiento de la pare- En el caso por tipico, de: sia de Ja parturienta, no hacen ningtn esfuerzo por levantarse afectadas vac: SeS__"_ = na ENFERMEDADES METABOLICAS paces de ello. Gerca del 30% de 0 son incay las vacas tratadas por fiebre de la leche no se van a poner en pie hasta las 24 h del tratamiento. Aquellas que son incapa- ces de levantarse después de 24 hh y tras ‘an como vacas dos tratamientos, se clasil caidas. Generalmente estan activas y aler- ta, y, aunque sti apetito esti reducido, la y bebe moderadamente bien come La temperatura es normal y It frecuencia normal o estar elevada cardiaca puede set hasta 80-100 Ipm. En algunas vacas apare- , en especial in- ce taquicardia mediatamente después de la adminis Gon del calcio IV, y puede producirse muerte stibita. Generalmente, no se afecta la respiracion, La defecacin y la miccion son normales, pero es comén la proteinu- ria, que si es intensa puede indicar lesin muscular extensa. Puede que algunas va hagan ningin esfuerzo por ponerse en pie. Otras realizaran intentos frecuentes pero serin incapaces de extender por completo sus extremidades pelvianas y sus cuartos traseros se deslizarin mis de 20-30 cm del suelo. Estos intentos fre- cuentes por levantarse provocan movi- mientos de -arrastre- 0 -deslizamiento- por el suelo con ambas patas traseras en una posicién parcialmente flexionada y des- plazada hacia atras (actitud de patas de rana). Sobre una superficie antideslizante (suelo desnudo, bolsa de arena o cama espesa) algunas vacas son capaces de po- nerse en pie con cierta ayuda, tirindolas de la base de la cola o mediante el uso de un cabestrillo de cadera. Las va¢ y arritm 5 afectadas no que no hacen esfuerzos por levantarse, g mente, no pueden permanecer en pie ni lan siquiera con ayuda, y si se las sujeta con cabestrillos de cadera, no suelen re lizar ningan esfuerzo por ca rear peso en ninguna de sus patas traseras o delante- ras, Las extremidades se muestran rigidas, doloros : © se niegan a cargar peso. Lat lesion del nervio peroneo suele estar presente cu do hay una hiperflexi6n de las articuta nes del menudillo, que se pone de mani- apaz de ponerse en pie y cargar peso sobre las cextremidades posteriores En algunos casos, las extremidades posteriores estin extendida: de los lados de la vaca y legan hasta los $0 entumecidas, y son incapa fiesto siempre y cuando Ia vaca sea is a cada uno respectivos codos. En esta posicién, la va. ca esti soportando un peso considerable sobre la musculatura medial del musio que sufre la necrosis. Esta posicién anor. mal de las patas puede deberse también a a luxaci6n de una o ambas anticulaciones de la cadera, con o sin rotura del ligamen- to redondo. Independientemente de la la vaca prefiere esta posicién de las patas a la posicion anormal cuando se la coloca en su posi algunas va cau ci6n normal. 1s los signos pueden ser intensos y extrafos, incluida una ten- dencia a yacer en dectbito lateral con la beza echada hacia atrs. Cuando se las y apoya en dectibito esternal, estas vacas parecen casi normales pero, cuando se las deja solas, al poco tiempo vuelven a la posicion de decitbito lateral. En casos atin mas graves, presentan hiperestesia y las extremidades pueden estar ligeramen- te rigidas, aunque solo cuando la vaca ya- ce en dectibito lateral. Estos casos graves, en que las vacas suelen negarse a comer y beber, se describen como vacas -caidas y no alertay, ya se cree que padecen una lesion cerebral que no se ha documenta- do (10). Las complicaciones en el sindrome de la vaca caida son comunes y, a menudo, conducen a la muerte o la necesidad de eutanasia. La mastitis coliforme, la Gleera por deciibito, especialmente en la promi- nencias del corvej6n y la articulacién del codo, y las lesiones traumdticas alrededor de la tuberosidad coxal causadas por los son comunes. Cuando se presentan estas complicaciones en las etapas iniciales de la enfermedad, coménmente interfieren con cualquier Progreso que pueda realizarse y se Com vierten en el foco de la atenci6n clinica E riable Y depende de la naturaleza y extension de las lesiones y de la calidad de la asistencit ala vact mi coloc cabestrillos de cadera, curso de kt enfermedad es y el bien ur que se proporcione Cerca del 50% durante los primeros de las vaeas caidas se pondnin en pie er 2s, con los cuidaclos adecua- aquellas 4 dias o met dos, El pronéstico es malo par que agin estén recumbentes tras 7 dias, aunque algunas vacas afectadas han estado tumbadas durante 10-14 dias y, a continua clén, se han levantado y recuperado. 18 muerte se puede producir en 48-72 h tras €! inicio, y se suele asociar con miocarditis. PRUEBAS ANALITICAS Los niveles sanguineos de inagnesioy glucosaestn dey mites: normales y los rey Mk eximenes hematologlos suelen ss rentes con lo hallados en yao aque han patio rectentemente 2, tle GPK y AST stelen estar igen Ms clevados hacia ts 18-24 h de dectbito, y siguen elevindose pie siguientes. La elevacion contindag niveles de CPK indian lesién moat continuada. En el dectbito ind perimentalmente en vacas, Jos ee CPK permanecieron dentro de los es de normales durante las primeras 6h, Sn ‘i bargo, hacia las 12 h habia un ens, acusado hasta valores medios de 12 4 UI/L, ascendiendo hasta 40.000 UI. had las 24 h. Puede haber una cetonuria mp derada, Ademis, hacia las 18-24 h del ig. cio de la postracién, s€ stele poner de manifiesto una proteinuria intensa. La pro. teinuria puede persistir varios dias o eter ausente alos pocos das. En casos gaves, la orina puede ser pardusca y tubia por tuna mioglobinuria grave. En algunos an males se han observado presiones ate les bajas y_electrocardiogramas (EC0) anormales. Las elevaciones en la urea sérica, bs enzimas musculares y los signos de labo- ratorio de inflamacién se considera ls mejores indicadores pronésticos de ura recuperacion no favorable (3). Las vies con un nivel de urea sérica superior 8% mmol/L y niveles ce creatinina sériea st periores 130 mmol/L tienen un mal PP: nostico, El indice de recuperacion ie IF con una_relsion 30 inferior & 10! vac at bas (3). bos nivel pretar en relicion ferior en las vacas proteina total:fbrinége y signos de neutropenia, des izquierda, 0 PK se han de int if fos dias de postaeion en el mane ia tom dela eat, Low oes na de ka mueste be ser inicialmente mis € o de referent cs fa hasta 50 veces ef range normal alto) y recluciese # 10 vee fg0 normal a os 7 das de posse HALLAZGOS DE NECROPSIA & Las hemorragias y-el edem™ ent tigen traumético son comune’ i x cipales cambios anatomopat0}8 sisten en hemorragias y degenetacion de Jos musculos mediales del muslo, Las he- morragias alrededor de la articulacion de la cadera, con 0 sin rotura del ligamento redondo, también son comunes, Las reas de necrosis isquémica de la musculatura (misculos gracilis, pectineo y aductores) aparecen a la altura del borde anterior de la sinfisis pelviana (1). Se ha des rito la infiltracion eosinofila de los misculos ne- croticos rotos del muslo de las v; ‘acas cai- das (15). Las hemorragias y el edema de los nervios de las extremidades (obtura- dor, isquiatico, peroneo, radial) también son comunes y suelen asociarse con le- sion muscular grave. El cor On esta dila- tado y flojo, e histologicamente hay una miocarditis fo ul. Hay degeneracion grasa del higado y las glindulas suprarrenales estan hipertrofiadas. Desde el punto de vista histolégico, también hay cambios degenerativos en el epitelio glomerular y tubular de los rifiones DIAGNOSTICO DIFERENCIA\ El diagnéstico diferencial del sindrome de la Vaca caida se realiza una vez se han eliminado todas las otras causas conocidas de Postracion en una vaca que ha padecido fiebre de la leche y ha sido incapaz de ponerse en Pie a las 24 h, tras dos cursos sucesivos de tratamiento. Las otras causas comunes de decubito prolongado se describieron €nteriormente en el diagnéstico diferencial de 'a fiebre de la leche (Tabla 28.1), Resulta dificil ¥ Costoso en tiempo realizar un examen ‘completo a una vaca caida para eliminar todas 'as otras causas de postracién. Sélo mediante Un examen clinico repetide y esmerado, el Olinico podra evitar el desconcierto por fracasar a la hora de detectar la presencia de Una mastitis coliforme, una pata fracturada 0 una cadera luxada, TRATAMIENTO TRATAMIENTO Tratamiento hidroelectrolitico Se han empleado, sin un éxito constante, muchos tratamiento consistentes en inyec- ciones de sales de magnesio, fosfatos, corticosteroides, tonicos estimulantes y Vi- lamina E y selenio. Se ha recomendado el uso de soluciones parenterales que con- tengan potasio, calcio, magnesio y fosforo (7), pero no existen pruebas cientificas de que estos electrélitos, aparte de los que probablemente . ablemente ya se haya administrado a EE SEIMIEDADES DE PRODUCCIO'N [ELA aS la vaca, estén indicados © tei quier valor beneficioso. 1 con grandes cantidades de tiples electrolitos, por via oral o parente ral, esta indicado para lis vacas que no estén tomando cantidades agua. Si cual. tratamiento liquide y mat. ras que no. normales. de esta bebiendo con norma. lidad, se pueden aiad clectr6litos ili ples al agua de bebida. Lecho y cuidados clinicos ¢s procurar a la vaca el lecho mas confor- aspecto mas importante del tratamiento table posible y volverla de un lado a otro varias veces al dia, para minimizar la ex- tensién de la necrosis isquémica y la pa- raanalges derivada del decabito prolon- Jo, Con un cuidado concienzudo y la provisién de un buen lecho, alimentos palatables y cantidades generosas de is tratardin agua, la mayor parte de las de levantarse, con cierta dificultad y ayu. da, en 24h, y se pondrin en pie, sin ayu- o dos des- da y con normalidad, un d pués, Un fardo de arena 0 lodo es la superficie ideal que facilita a caida trata de evan: puesta en) pie cuando una tarse (9), Sia las vacas afectadas se las de- ja en una superficie deslizante, no realiza- ran ningin esfuerzo por levantarse, y Se debe or- empeoraran progresivamente defar a las vacas con normalidad y man- ubres limpias, lavando con jabon y aplicando del ordeno. tener las germicida antes del ordeno, duchas a los pezones despué Alzamiento asistido para ayudar ala puesta en pie El clinico y cl granjero han de afrontar co- manmente las cucstiones de si levantar 0 no a una vaca postrada que no ha tratado de ponerse en pie, pocas horas despues into de la ficbre de la leche. El ja conducta de del tratamiet principio guia debers ser h fa vaca, Si la vaca realiza agin estu por ponerse en pie, por si misma o me Biante algan estimulo, como, por ejem plo, un codazo suave en las costs, 9 In deberd ayudar a levantarse, garantizan- do un buena superficie no deslizante © Tewantando la base de la cola cuando (r= te de ponerse en pie. Se debert girara ka vraea de un Jado a 0tr0 cada poets Hors, y se las deberd animar part que s© pon- en pie unas pocas veces al dia, Con gan un buen culdade clinica, Ja mayor pare de las vacas con la forma no complicads de sindrome de Ja vaca caida secundario rehe, Jevantaran en V2 pre de ba Aparatos elevadores Se han empleado diferentes tipos de apa ratos clevadores de vacas con el fin de bo ayudar a la vaca caida a levanta clevadores de cadera, que se ajustan y y los tensan sobre la tubcrosidad cox: cabestillos corporates, a modo de arne- ses, estdn dischados para ajustarse alsede animal. dor del abdomen y el trax dk a la vaca Estos aparatos pueden ayuc caida a levantarse si realiza algan esfuer- zo por si misma, y parece que “si se la su- ministra alguna ayuda, puede ponerse en ie. Para estas vacas que realizan algin cesfuerzo por levantarse, se pueden aplicar adores 0 cabestrillos de cadera yar al animal a la posicién de pie. Si el animal soporta peso en las cuatro patas. se la podré permitir estar en pie con la los ele ayuda de aparatos, durante 20-30 min, y. 4 continuaci6n, bajarlas. Este procedi- ¢ deberd repetir varias veces al miento § dia. En la mayor parte de los casos, dichas vacas caidas se pondrin en pie por si mi mas en pocos dias, Mientras la vaca esti en pie, se la puede ordenar y se pueden practicar otras exploraciones clinicas. Los elevaclores de cadera pueden pro- ticas en los tejidos vocar lesiones traumi que rodean Ia tuberosidad coxal, si no se emplean juiciosamente. A los animales que no realizan ningtin esfuerzo por le vantarse ¥ Gargar peso por si mismos, no se les deberd dejar suspendidos en el ele- IS quE Pocos MinUoS, sino que vacor ma ajar de inmediato, Si tos se les deberi clevadores de cadera no se aplican con cuidado, el animal puede resbalar fuera del aparato mientras se le esti levantando, Jo que suele provocar una lesion tisula ak rededor de la tuberosidad coxal; incluso uiras coxales. A me- cibicas se han producide fra sts lesiones pa contribuyen a una de fa extension de las nude, asain clesap clinicament persistente y li ¥ 2 pone dem esiones se pone de a aarsonelevadores deen ger utilizados, con cuidado, Por Perso- nal experimentado. bito verdad wanifiesto en la ne- Los cabestrillos corporales que se ajustan alrededor del abdomen y el t6rax del animal parecen ser el selevador an mal ideal, debido a que distribuyen el peso en varios sitios, al contrario que los elevadores de cadena, que concentran el peso sobre Ia tuberosidad coxal, Sin em- argo, los cabestrillos corporales son vo- luminosos para aplicatlos un animal re- cambente, y requieren mis tiempo. y personal experimentado p: garantizar una aplicacion adecuada, Cuando los ca bestillos se aplican de forma adecua parece ser que permiten que el anima zado esté en pie, de forma confortable, durante 30 min o ma cuperacién al- . ¥ favorecen la re- El alzamiento de vacas que no reali- za ningiin esfuerzo por ponerse en pie por si mismas, no suele tener éxi- to. Cuando se las alza no suelen cargar ningin peso importante. Se ha diseiado un tanque de flo- tacién de agua para el manejo de vacas caidas (16). Un prototipo consta de una bafera metilica, con unas dimensiones internas de 234 cm de largo, 109 cm de ancho y 130 em de profundidad. El ma ste 8 econémico, portitil, duradero, efectivo y de uso simple. Se introduce a la vaca caida en la bafera sobre una estera y los extremos de la bafiera se cierran ra hacer un contenedor hermético de agua con una abertura superior a modo de bafiera. Tras mantener la cabeza de la vaca sujeta con un cabestro, se lena la bahera con agua a 37.7-39 °C lo mis rapi damente posible. Las vacas en dectibito lateral se colocarin en decibito esternal cuando el contenedor tenga 15-30 em de agua, y habitualmente tratarin de ponerse en pie cuando Ia bafera esté lena por la mitad 0 los dos tercios. A las vacas se las deja de pie en el agua durante 6-8 h, Si la temperatura del agua cae por debajo de se vacia el agua y se abre el extremo de la baer, lo que permite « la vac minando, preferentemente, sl "ampo o comuni una superficie con hierba. Se cado una tasa de éxitos del 46% (16) Sin embargo, la tasa de éxito podria ser n elevada si la selecci6n de casos para flota- ci6n se realizara con mayor rigurosicad. Las vacas con roturas tendinosas, frac- fis turas, articulaciones.coxofemorales luxq. das, poliantitis séptica y otras lesiones f. sicas, no son buenas candidatas a la flota. ci6n. El caso més adecuado para Nlotacion parece ser la vaca caida como secuela de una fiebre de Ia leche. Cuestiones de bienestar animal El sindrome de Ia vaca caida es una cuestin de blenestar animal y el veter. nario deberit mostrarse activo para resolver el problema. La sociedad esti preocupada por como han de cuidarse y manejarse los animales caidos, y por los métodos emple- ados para ello (17). Si la recuperacién no acontece en pocos dias, el pronéstico es inciento y el propietario y el veterinario de- berdn decidir si continuar proporcionando cuidados clinicos a la vaca caida o si se de- berfa sacrificar al animal para aprovecharlo ose le deberi realizar eutanasia. La matan- za comercial de ganado vacuno postrado para consumo humano representa una im- portante fuente de ingresos para los pro- ductores de ganado vacuno y otros, en la industria cirnica. En Estados Unidos, en 1990-1992, 117 301 vacas postradas fueron sacrificadas en mataderos dle inspeccién fe- deral. Muchos consumidores creen que la care procedente de cualquier animal que no pueda permanecer en pie no es sana. Sin embargo, mucho ganado vacuno pos- trado, sacrific ado para carne comestible, lO esti contaminado por bacterias, pero las visceras, en especial el higado, pueden fepresentar un problema de seguridad ali- mentaria por los focos multiples de hepati- tis (18), Las agencias reguladoras gubernamen- tales de salud animal, las asociaciones ga- naderas y ciones de veterinarios estin involucraclas actualmente en la reali- zacion de un borrador de regulaciones S0- bre el cuidado y manejo de animales pos trados no ambulantes, como la vaca caida 19). Los principios det movimiento huma- no de anin 50 les postrados son: 1, No arrastrar al anit algiin tipo de trineo. Usar rampas en lugar de hacer sal animal. 3. No mezclarlos con otros animales. 4. Trasladar a los animales directamente al matadero y aturdirlos antes de des- cargarlos en el matadero, CONTROL La detecci6n y el tratamie fiebre de la leche failed PreCOr de y gravedad del sindrome de ht En condiciones ideales, debed i ost Ja vaca durante la primera etapa “ae A bre de la leche, antes de que San - cumbentes. Una vez que la vaca re cumbente, deberd ser tratada lo ie posible y sin una demora superior a 1 (s ra. Las vacas con fiebre de la leche debe- ran encamarse con cantidades generosas se a un terreno blando. yyudar a la vaca postra- levante, si € posible, des- pués del tratamiento de la fiebre de la lee che. Si €S incapaz de estar en pie, se la debera girar de un lado 4 otro, cada pocts horas, siemP sible. General resul de paja © trasladar: se debe alentar y a da para que s© mente, del es tenet el buen lec el mismo hasta, # del parto ¢? el ca una fiebre de la Jeche- ppLIOGRATIA CONSL TADA we Cox, V5 (988) Nonsystem sbaN pol ner cow syndrome ver, elit Nor “anim, Pract ® 413-433 al (REFERENCIAS ai a) Cox, V: cagss) Ver Anim emic et in nor? prach, 4 4989) etal. (19 ab an. ne a a Ire lado a otro son ee - frecuen. CA ESatiog i es de la necro: sis isquémica, tning antes del patto, se | A las va ean te Se las d CaS Ia un leb Che compattimiento del era He Fas CStablg buen le cho, y se las debera ma ~ a a el mismo h asta, al inten » al menos, 48 h tea nh ‘Sf del parto p en el caso de que ge le Cesar, lle una fiebre de la leche BIBLIOGRAFIA CONSULTADA Cox, V. S. (1988) Nonsystemic causes of ner cow syndrome. Vet. Clin. North ce Anim. Pract, 4, 413-433. il REFERENCIAS (1) Cox, V. S. (1988) Ver Clin North Am.: Food Anim Pract, 4, 413. Cox, V. S. etal (1986) Prev. Vet. Med., 4, 249. (3) Clark, R. 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