Está en la página 1de 2

EL JUGADOR

El baloncesto es un juego que ha conquistado el corazón de muchos, pero para


algunos se ha convertido en su forma de vida. Al crecer en las calles, en el
Residencial Luis Llorens Torres, este jugador de baloncesto tuvo que enfrentar
numerosos desafíos y obstáculos antes de poder hacerse un nombre en el deporte.
Sin embargo, a pesar de todas las probabilidades en su contra, perseveró y logró
un gran éxito. Hoy puedo decir que me siento orgulloso de mi amigo, que, aunque
ya no hablamos mucho ni tenemos la misma comunicación de antes, me hace sentir
muy feliz hasta donde ha llegado. Estoy consciente que si algún día le faltara algo
puede contar conmigo porque para eso están los amigos.

Superando numerosas luchas y dificultades, este jugador pronto se convirtió en una


inspiración para otros que estaban luchando como él. Tristemente, muchos de los
compañeros y amigos que le rodeaban no pudieron o no quisieron salirse de las
calles por el dinero, la ambición o simplemente la necesidad de tener que llevar
comida a la mesa. Gracias a Dios, pero sobre todo a su familia y amigos cercanos
que lo apoyaron en todo para que se saliera de las calles y encontrara otro rumbo
en la vida para sobrevivir y vivir de ello, logró salirse de las calles. Con su dedicación
y arduo trabajo, pudo superar sus circunstancias y convertirse en uno de los mejores
jugadores de baloncesto del país. Sus logros incluyen ganar múltiples campeonatos
y ser reconocido como uno de los jugadores más habilidosos del juego.

Sin embargo, con el éxito a menudo viene la envidia de quienes te rodean.


Tristemente, en la vida de las calles atraes enemigos, personas que quieren verte
mal porque eres del bando contrario. Un día, se metieron a la casa de la madre del
jugador y le robaron todo, y dejaron una nota en la casa dejándole saber a el jugador
quienes habían sido, él quiso tomar venganza pero por suerte una de las personas
más importantes de el “caserío” se enteró de la situación y fue rápido a donde el
advirtiéndole que no hiciera nada y que siguiera con su vida, que él ya tenía un
nombre en las canchas y ya tenía la vida hecha y ellos no, ellos eran unos buenos
para nada que querían verlo sufrir, querían que el estuviera a la misma altura que
ellos, no más grande. Este jugador enfrentó numerosas amenazas y ataques de
personas que estaban celosas de su éxito. Tuvo que estar constantemente atento
a su seguridad y se vio obligado a cortar los lazos con muchas personas que alguna
vez consideró amigos. Sin embargo, a pesar de estos contratiempos, continuó
perseverando y concentrado en lograr sus objetivos. Hoy, no solo es conocido por
sus increíbles habilidades en la cancha, sino también como un modelo a seguir para
los jóvenes atletas que buscan seguir sus pasos.
A pesar de que se salió de las calles y sigue con su vida en el deporte, en el deporte
también hay malas personas y experiencias con las que tiene que lidiar. En el
deporte, al igual que en las calles y en la vida cotidiana, reina la envidia. Lo envidian
porque tiene más talento, porque le quitó un lugar en el equipo a alguien, o
simplemente porque ahora la atención está en él. Eso no lo detiene ni lo desenfoca,
y sigue concentrado en jugar lo que más le apasiona y más ahora que está formando
una familia con una gran mujer que lo ha apoyado desde el principio y él no puede
permitirse descarrilarse y seguir con su vida que tanto trabajo le ha costado llegar
hasta donde está. Hoy día, familiares y amigos celebran sus logros como si fueran
suyos porque saben todo el sacrificio que se ha hecho para guiarlo por el buen
camino y sacarlo de las calles.

La vida de las calles no es buena, si tienes una oportunidad de salirte de ellas no la


desaproveches, no sabes la paz que encuentras fuera de ellas. Este jugador estuvo
en las calles desde joven, gracias a Dios que siempre fue un prospecto en el
baloncesto y tuvo una oportunidad de salir, no quiero pensar que hubiera pasado si
no hubiese cogido esa oportunidad. Yo veo la vida a lo mejor diferente a los demás,
lamentablemente siempre con malicia y alerta a todas las personas porque no se
sabe quién verdaderamente es el bueno o quien es el malo. Hoy lo analizo desde
mi perspectiva y desde lo vivido y siempre voy a dar gracias porque mi amigo se
salió de las calles y encontró una vida fuera de ellas y que mejor que haciendo lo
que más ama, El Baloncesto, y ahora trato de no perderme ningún juego de él y
celebrando cada vez que encesta en el canasto. Hoy por hoy me atrevería a decir
que hay muchos fanáticos apoyando a ese Jugador.

También podría gustarte