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Hipoacusia

La hipoacusia es la patología que nos incapacita para oír en forma total o parcial, tanto en un oído,
como en ambos. La hipoacusia puede estar relacionada con la exposición a sonidos intensos como
máquinas de gran potencia, música fuerte, armas de fuego, autos con motores ruidosos, etc.

Generalmente se produce de forma lenta y se diagnostica cuando el daño ya se ha producido de


forma irreversible

Existen muchas causas de la hipoacusia, pero se pueden dividir en 2 categorías principales:

• La hipoacusia conductiva que ocurre por problemas en el oído medio (líquido


acumulado, osículos o tímpanos que no funcionan).
• La hipoacusia neurosensorial es más grave, ya que el problema radica en el oído
interno (las terminales nerviosas están lesionadas).

La acumulación de cera, objetos extraños atorados o la presencia de líquido que permanece en el


oído después de una infección auditiva, también pueden causar la hipoacusia.

Algunos consejos para evitar la hipoacusia

• Prestar especial atención a las señales de advertencia de pérdida de audición.

• Permanecer alerta ante cualquier tipo de señal o síntoma de hipoacusia.

• Tomar consciencia de los daños de usar reproductores de música y auriculares a un


volumen alto, así como de llevar a cabo prácticas poco seguras para la audición.

• No introducir objetos o sustancias extrañas. Se deben utilizar sólo productos indicados


para el oído y siempre bajo consejo médico por lo que hay que evitar el uso de aceites,
soluciones salinas, agua oxigenada, bastoncillos u otros objetos, ya que éstos últimos,
pueden empujar la cera hacia adentro y dañar el tímpano.

• Hay que prestar especial cuidado a los deportes de contacto que pueden provocar
traumatismos en la zona del oído y ocasionar problemas. En caso de golpe o traumatismo
directo en la zona del oído se recomienda consultar al especialista

• Mantén tus oídos limpios lavándolos y secándolos durante tu aseo personal, pero recuerda
que algo de cera es necesario para mantener el equilibrio del oído y protegerlo de posibles
infecciones.

• Sécate bien los oídos después de ducharte o bañarte en casa o en la piscina. Es una práctica
imprescindible para evitar la humedad en el conducto auditivo y de posibles infecciones
por hongos

¡Cuida hoy tus oídos hoy para así escuchar mañana!

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