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Introducción

En un mundo caracterizado por la creciente demanda de energía y la necesidad de reducir las emisiones
de gases de efecto invernadero, la búsqueda de fuentes de energía eficientes y sostenibles se ha vuelto
imperativa. Entre las diversas alternativas que han surgido, la energía termoeléctrica ha emergido como
un campo de investigación y desarrollo prometedor en la generación de electricidad. Esta forma de
energía se basa en la conversión directa de calor en electricidad, aprovechando las diferencias de
temperatura entre dos puntos. A medida que el mundo enfrenta desafíos energéticos y ambientales
cada vez más apremiantes, comprender a fondo la energía termoeléctrica se vuelve esencial para
avanzar hacia un futuro energético más sostenible.

La energía eléctrica es un pilar fundamental de la sociedad moderna, impulsando la industria, el


transporte, las comunicaciones y prácticamente todas las actividades humanas. La constante expansión
de las necesidades eléctricas y la conciencia creciente sobre los efectos adversos del uso intensivo de
combustibles fósiles han dirigido la atención hacia soluciones innovadoras y respetuosas con el medio
ambiente. En este contexto, la energía termoeléctrica ha capturado la atención de científicos, ingenieros
y responsables políticos, ofreciendo la posibilidad de convertir el calor residual de procesos industriales
en electricidad utilizable.

A lo largo de este informe, exploraremos en detalle la energía termoeléctrica, analizando su definición y


funcionamiento, su papel en la sociedad moderna, sus ventajas y desventajas, su impacto ambiental, su
integración en la red eléctrica y el método subyacente para su generación. Al comprender plenamente
los aspectos técnicos, ambientales y socioeconómicos de esta tecnología, estaremos mejor preparados
para evaluar su potencial como parte integral de una futura matriz energética sostenible.

La energía termoeléctrica nos brinda una perspectiva única sobre cómo aprovechar el calor como fuente
valiosa de electricidad, reduciendo la dependencia de los combustibles fósiles y contribuyendo a la
mitigación del cambio climático. A medida que nos adentramos en los detalles y consideraciones de esta
tecnología, descubriremos tanto sus promesas como sus desafíos, allanando el camino hacia una
sociedad más energéticamente eficiente y ambientalmente responsable.

Definición de Fuente de Electricidad y Energía Termoeléctrica

Fuente de Electricidad

Una fuente de electricidad es un recurso o proceso mediante el cual se puede generar electricidad. En la
sociedad moderna, la electricidad es esencial para prácticamente todas las actividades humanas, desde
iluminar hogares hasta alimentar complejos sistemas industriales y tecnológicos. Las fuentes de
electricidad pueden ser diversas y se clasifican en dos categorías principales: fuentes convencionales y
fuentes renovables.

Las fuentes convencionales de electricidad incluyen la generación a partir de combustibles fósiles, como
el carbón, el petróleo y el gas natural, así como la energía nuclear. Estas fuentes son ampliamente
utilizadas debido a su capacidad para generar grandes cantidades de electricidad de manera continua.
Sin embargo, su explotación conlleva impactos ambientales significativos, como la emisión de gases de
efecto invernadero y la producción de residuos radiactivos.
Las fuentes renovables, por otro lado, aprovechan recursos naturales que son inagotables o se regeneran
rápidamente, como la energía solar, eólica, hidroeléctrica y geotérmica. Estas fuentes han ganado
atención debido a su menor impacto ambiental y su contribución a la reducción de las emisiones de
gases contaminantes.

Energía Termoeléctrica

La energía termoeléctrica es una forma de generación de electricidad que se basa en la conversión


directa de calor en electricidad utilizando el efecto Seebeck. Este efecto, descubierto en el siglo XIX por
Thomas Johann Seebeck, se refiere a la generación de una diferencia de potencial eléctrico en un
conductor cuando se aplica un gradiente de temperatura a lo largo de su longitud.

En un dispositivo termoeléctrico, se utilizan materiales termoeléctricos diseñados específicamente para


explotar este efecto. Estos materiales son seleccionados debido a su capacidad para conducir
electricidad de manera eficiente mientras minimizan la conducción de calor. La clave para la generación
de electricidad en un dispositivo termoeléctrico es mantener una diferencia de temperatura entre dos
puntos, conocidos como la unión caliente y la unión fría. Cuando se aplica calor a la unión caliente y se
disipa en la unión fría, se crea un flujo de electrones que genera una corriente eléctrica.

La energía termoeléctrica presenta un enfoque único para la generación de electricidad al aprovechar el


calor residual de procesos industriales, fuentes geotérmicas y otras fuentes de calor, lo que aumenta la
eficiencia energética y reduce el desperdicio de calor. Además, a diferencia de las fuentes renovables
intermitentes, la energía termoeléctrica puede generar electricidad de manera constante, lo que la
convierte en una opción valiosa para la estabilización de la red eléctrica. Sin embargo, la eficiencia actual
de los dispositivos termoeléctricos es relativamente baja en comparación con otras tecnologías de
generación de electricidad, lo que plantea desafíos en la mejora de su rendimiento.

En el siguiente segmento de este informe, exploraremos la importancia de las fuentes de electricidad en


la sociedad moderna, así como las ventajas y desventajas específicas de la energía termoeléctrica.

Importancia de las Fuentes de Electricidad en la Sociedad Moderna

La electricidad es un elemento fundamental en la sociedad moderna, desempeñando un papel crucial en


todas las esferas de la vida. Desde el funcionamiento de la tecnología cotidiana hasta la operación de la
industria y la prestación de servicios esenciales, la electricidad es un pilar central que impulsa el
desarrollo y el bienestar. La importancia de las fuentes de electricidad en la sociedad moderna es
evidente en varios aspectos clave:

1. Desarrollo Industrial y Económico

La electricidad es la columna vertebral de la actividad industrial y económica. Los procesos de


fabricación, la maquinaria, la automatización y la logística dependen en gran medida de un suministro
eléctrico confiable. Las fábricas, las plantas de producción y las cadenas de suministro modernas se
basan en la electricidad para operar de manera eficiente y competitiva en un entorno globalizado.

2. Avances Tecnológicos

La sociedad moderna está impulsada por la innovación y la tecnología. Desde dispositivos electrónicos
personales hasta sistemas de comunicación avanzados y la infraestructura de la información, todos
dependen de la electricidad para funcionar. La capacidad de cargar dispositivos, mantener centros de
datos en funcionamiento y garantizar la conectividad en línea es esencial para el progreso tecnológico y
la interconexión global.

3. Vida Cotidiana

En los hogares de todo el mundo, la electricidad es esencial para una vida cómoda y funcional.
Proporciona iluminación, calefacción, refrigeración, electrodomésticos y sistemas de entretenimiento. La
electricidad también es esencial para la preparación de alimentos, la comunicación y el acceso a
servicios básicos como la atención médica y la educación en línea.

4. Infraestructura y Servicios Públicos

La infraestructura pública, como sistemas de transporte, redes de agua y alcantarillado, hospitales y


edificios gubernamentales, depende de fuentes de electricidad confiables para funcionar. Los sistemas
de transporte público, por ejemplo, utilizan electricidad para la operación de trenes y tranvías, así como
para el suministro de energía en estaciones y paradas.

5. Sostenibilidad y Medio Ambiente

Las fuentes de electricidad también desempeñan un papel clave en la transición hacia un futuro más
sostenible y respetuoso con el medio ambiente. La adopción de fuentes de electricidad renovable, como
la solar y la eólica, contribuye a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la
mitigación del cambio climático. La búsqueda de soluciones energéticas más limpias y eficientes es
esencial para garantizar la sostenibilidad a largo plazo.

En resumen, las fuentes de electricidad son un pilar esencial de la sociedad moderna, impulsando el
desarrollo económico, tecnológico y social. Su disponibilidad constante es vital para mantener el
funcionamiento de la vida cotidiana y para abordar los desafíos ambientales actuales. La diversificación
de las fuentes de electricidad y la promoción de tecnologías energéticas sostenibles son pasos cruciales
para garantizar un futuro energético seguro y sostenible. En el siguiente segmento, examinaremos
detenidamente las ventajas y desventajas específicas de la energía termoeléctrica como una alternativa
en esta matriz energética diversificada.

Ventajas y Desventajas de la Energía Termoeléctrica

La energía termoeléctrica, al aprovechar el calor residual y convertirlo en electricidad, presenta una serie
de ventajas y desventajas que deben considerarse en su evaluación como fuente de energía. Estas
características impactan en su viabilidad, eficiencia y contribución al desarrollo sostenible. A
continuación, se detallan las principales ventajas y desventajas de la energía termoeléctrica:

Ventajas:

Aprovechamiento de Calor Residual: La energía termoeléctrica permite convertir el calor residual, que de
otro modo se perdería, en electricidad utilizable. Esta característica es particularmente valiosa en
procesos industriales, como la generación de calor en plantas de energía y la producción de acero.

Generación Continua: A diferencia de las fuentes de energía renovable intermitentes, como la solar y la
eólica, la energía termoeléctrica puede generar electricidad de manera constante, proporcionando una
fuente de energía confiable para la red eléctrica.
Independencia de Condiciones Climáticas: La generación de energía termoeléctrica no depende de
condiciones climáticas específicas, lo que la hace adecuada para regiones con climas variables o en
aquellos momentos en que las fuentes renovables pueden no estar disponibles.

Potencial para Eficiencia Energética: La recuperación de calor residual mejora la eficiencia energética
global de los procesos industriales y reduce el consumo total de energía, lo que a su vez puede disminuir
las emisiones de gases de efecto invernadero.

Estabilización de la Red Eléctrica: La capacidad de generar electricidad de manera constante y


controlable puede contribuir a la estabilidad de la red eléctrica, especialmente cuando se integra con
fuentes intermitentes como la solar y la eólica.

Desventajas:

Baja Eficiencia de Conversión: A pesar de sus ventajas, la eficiencia de conversión de la energía


termoeléctrica es relativamente baja en comparación con otras tecnologías de generación de
electricidad. Esto puede limitar su capacidad para competir en términos de costo y eficiencia.

Impacto Ambiental: Aunque aprovecha el calor residual, la generación de energía termoeléctrica puede
contribuir a la liberación de gases contaminantes y al cambio climático si no se implementan tecnologías
de captura y almacenamiento de carbono.

Consumo de Agua: Algunos sistemas de generación termoeléctrica requieren cantidades significativas de


agua para la refrigeración, lo que puede afectar los recursos hídricos locales y la vida acuática.

Dependencia de Fuentes de Calor: La eficiencia y la viabilidad de la generación termoeléctrica dependen


de la disponibilidad de fuentes de calor, lo que puede limitar su aplicabilidad en ciertas regiones o
industrias.

Necesidad de Mejoras Tecnológicas: Para aprovechar plenamente el potencial de la energía


termoeléctrica, se requiere una investigación y desarrollo continuos en nuevos materiales
termoeléctricos y enfoques de diseño para mejorar su eficiencia y rendimiento.

En conclusión, la energía termoeléctrica ofrece ventajas significativas, como el aprovechamiento de calor


residual y la generación continua, pero también enfrenta desafíos en términos de eficiencia, impacto
ambiental y necesidad de innovación tecnológica. Su integración en una matriz energética sostenible
dependerá de la capacidad de superar estas desventajas y maximizar sus beneficios en diferentes
contextos. En la próxima sección, exploraremos el impacto ambiental de la energía termoeléctrica y las
consideraciones ambientales clave que deben abordarse para su implementación exitosa.

Impacto Ambiental de la Energía Termoeléctrica

La generación de energía termoeléctrica, aunque ofrece ventajas en la conversión de calor residual en


electricidad, también plantea preocupaciones significativas en términos de su impacto ambiental. La
liberación de emisiones contaminantes y el consumo de recursos naturales pueden tener consecuencias
negativas para la calidad del aire, el cambio climático y la disponibilidad de agua. A continuación, se
detallan los principales aspectos del impacto ambiental de la energía termoeléctrica:

Emisiones de Gases Contaminantes


En los sistemas de generación termoeléctrica que utilizan combustibles fósiles, como el carbón y el
petróleo, se liberan emisiones de gases contaminantes al ambiente. Estos incluyen dióxido de azufre
(SO2) y óxidos de nitrógeno (NOx), que pueden contribuir a la formación de smog y la lluvia ácida,
afectando la calidad del aire y la salud humana. Estas emisiones también pueden dar lugar a problemas
respiratorios y cardiovasculares, y tienen impactos negativos en ecosistemas terrestres y acuáticos.

Emisiones de Gases de Efecto Invernadero

La generación termoeléctrica también puede contribuir a las emisiones de gases de efecto invernadero,
como el dióxido de carbono (CO2), que son responsables del calentamiento global y el cambio climático.
Aunque la energía termoeléctrica puede utilizar calor residual para generar electricidad, en sistemas que
utilizan combustibles fósiles, la liberación de CO2 sigue siendo un problema. Estas emisiones pueden
agravar el cambio climático, lo que a su vez tiene impactos en patrones climáticos, niveles del mar y
biodiversidad.

Consumo de Agua

Muchos sistemas de generación termoeléctrica requieren grandes cantidades de agua para la


refrigeración, lo que puede tener consecuencias significativas para los recursos hídricos locales. La toma
de agua y la liberación de agua caliente en ríos, lagos o estuarios pueden alterar los ecosistemas
acuáticos y afectar la vida acuática. Además, la competencia por el agua entre la generación de energía y
otros usos puede generar conflictos y problemas de escasez en áreas con recursos hídricos limitados.

Necesidad de Tecnologías de Captura y Almacenamiento de Carbono

Para abordar el impacto de las emisiones de gases contaminantes y de efecto invernadero, se han
propuesto tecnologías de captura y almacenamiento de carbono (CAC). Estas tecnologías buscan
capturar el CO2 emitido durante la generación de energía y luego almacenarlo de manera segura.
Aunque prometedoras, las tecnologías de CAC aún enfrentan desafíos técnicos, económicos y
regulatorios para su implementación a gran escala.

Consideraciones Ambientales y Sostenibilidad

Para mitigar el impacto ambiental de la energía termoeléctrica, es esencial adoptar enfoques sostenibles
y considerar cuidadosamente las consecuencias ecológicas. Esto implica la implementación de
tecnologías de control de emisiones, la búsqueda de alternativas de refrigeración que reduzcan el
consumo de agua y la promoción de la investigación en materiales termoeléctricos más eficientes y
respetuosos con el medio ambiente.

En resumen, aunque la energía termoeléctrica puede aprovechar el calor residual de manera eficiente,
su impacto ambiental en términos de emisiones contaminantes y de efecto invernadero, consumo de
agua y competencia de recursos es una consideración clave en su adopción. La implementación exitosa
de tecnologías de mitigación y una gestión ambiental sólida son esenciales para maximizar los beneficios
y minimizar los riesgos asociados con esta forma de generación de energía. En la siguiente sección,
exploraremos la integración de la energía termoeléctrica en la red eléctrica y su contribución a la
estabilidad y diversificación de la matriz energética.

Integración de la Energía Termoeléctrica en la Red Eléctrica


La integración exitosa de la energía termoeléctrica en la red eléctrica es esencial para aprovechar su
potencial como fuente de generación de electricidad y garantizar su contribución efectiva a la estabilidad
y diversificación de la matriz energética. La generación termoeléctrica puede desempeñar un papel
valioso en la red eléctrica al proporcionar una fuente continua de electricidad y complementar otras
fuentes intermitentes, como la solar y la eólica. A continuación, se detallan los aspectos clave de la
integración de la energía termoeléctrica en la red eléctrica:

1. Estabilidad y Fiabilidad

La generación termoeléctrica ofrece una ventaja en términos de estabilidad y fiabilidad de la red


eléctrica. A diferencia de las fuentes de energía renovable intermitentes, como la energía solar y eólica,
que dependen de condiciones climáticas variables, la generación termoeléctrica puede mantener una
producción constante de electricidad. Esto ayuda a estabilizar la red y garantiza un suministro continuo,
lo que es esencial para mantener el equilibrio entre la oferta y la demanda.

2. Complementariedad con Fuentes Renovables

La energía termoeléctrica puede complementar las fuentes de energía renovable intermitentes al


proporcionar una fuente constante de electricidad. Durante los períodos en los que la generación solar o
eólica es baja debido a la falta de luz solar o viento, la generación termoeléctrica puede llenar la brecha y
garantizar un suministro continuo. Esta complementariedad contribuye a una gestión eficiente de la red
eléctrica y reduce la dependencia exclusiva de una sola fuente de energía.

3. Integración con Generación Distribuida

La generación termoeléctrica también se puede integrar en sistemas de generación distribuida, donde se


aprovecha el calor residual de procesos industriales para alimentar dispositivos termoeléctricos. Esta
integración puede mejorar la eficiencia energética de las instalaciones industriales y reducir la demanda
de electricidad de la red central, al tiempo que genera electricidad adicional.

4. Flexibilidad Operativa

La generación termoeléctrica puede operar con flexibilidad para ajustar la producción de electricidad
según las necesidades de la red y la demanda. Esta capacidad de ajuste puede ayudar a abordar los
desafíos de la variabilidad en la demanda y la oferta de electricidad, contribuyendo a la estabilidad de la
red eléctrica.

5. Planificación de la Red y Almacenamiento

La integración de la energía termoeléctrica en la red eléctrica también puede influir en la planificación y


el desarrollo de sistemas de almacenamiento de energía. Los sistemas de almacenamiento, como las
baterías, pueden utilizarse para capturar el exceso de electricidad generada por la energía termoeléctrica
durante los períodos de baja demanda y liberarla cuando sea necesario. Esto mejora aún más la
capacidad de respuesta de la red y facilita la gestión eficiente de la energía.

En resumen, la integración de la energía termoeléctrica en la red eléctrica puede mejorar la estabilidad,


la confiabilidad y la eficiencia de la red, al tiempo que complementa las fuentes de energía renovable
intermitentes. Su capacidad para generar electricidad de manera constante y controlable la convierte en
una opción valiosa para abordar los desafíos de la variabilidad en la demanda y la oferta de electricidad.
Sin embargo, esta integración debe ser cuidadosamente planificada y gestionada para maximizar los
beneficios y minimizar los impactos en la operación y la infraestructura de la red eléctrica. En la siguiente
sección, exploraremos en detalle el método de generación de la energía termoeléctrica y cómo se
aprovecha el efecto Seebeck para convertir el calor en electricidad.

Método de Generación de Energía Termoeléctrica

El método de generación de energía termoeléctrica se basa en la explotación del efecto Seebeck, un


fenómeno físico que permite convertir directamente el calor en electricidad utilizando materiales
termoeléctricos. Este proceso se lleva a cabo a través de dispositivos termoeléctricos, también conocidos
como módulos termoeléctricos, que consisten en una serie de elementos termoeléctricos conectados en
serie para generar una corriente eléctrica continua. A continuación, se describe en detalle cómo
funciona el método de generación de energía termoeléctrica:

1. Efecto Seebeck

El efecto Seebeck, descubierto por Thomas Johann Seebeck en 1821, se basa en la generación de una
diferencia de potencial eléctrico en un conductor cuando se somete a un gradiente de temperatura. En
otras palabras, cuando un conductor se calienta en un extremo y se mantiene más frío en el otro
extremo, se genera una corriente eléctrica debido al flujo de electrones desde el punto caliente al punto
frío. Este flujo de electrones es lo que constituye la electricidad generada por el efecto Seebeck.

2. Materiales Termoeléctricos

Los materiales termoeléctricos desempeñan un papel crucial en el proceso de generación de energía


termoeléctrica. Estos materiales están diseñados específicamente para maximizar el efecto Seebeck y
minimizar la conducción de calor. En otras palabras, deben ser buenos conductores eléctricos pero malos
conductores de calor. Esto permite mantener un gradiente de temperatura entre la fuente de calor y la
fuente fría, lo que impulsa el flujo de electrones y, por lo tanto, la corriente eléctrica.

3. Dispositivos Termoeléctricos

Los dispositivos termoeléctricos, o módulos termoeléctricos, se componen de elementos


termoeléctricos conectados en serie y dispuestos entre una fuente de calor y una fuente fría. Estos
elementos pueden ser del tipo P (positivo) y N (negativo), que se diferencian en sus propiedades de
carga y conducción. Cuando se aplica calor a un extremo del módulo (unión caliente) y se disipa el calor
en el otro extremo (unión fría), se genera una diferencia de potencial eléctrico entre las uniones P y N.
Esto provoca el flujo de electrones a través del circuito eléctrico externo, generando corriente eléctrica y,
por lo tanto, energía eléctrica utilizable.

4. Eficiencia y Desafíos

La eficiencia de los dispositivos termoeléctricos se mide por su capacidad para convertir eficazmente el
calor en electricidad. Actualmente, la eficiencia de los dispositivos termoeléctricos comerciales es
relativamente baja en comparación con otras tecnologías de generación de energía. Esto se debe a las
limitaciones en las propiedades termoeléctricas de los materiales disponibles y los desafíos en la
disminución de la pérdida de calor en el proceso.
Para mejorar la eficiencia de la generación termoeléctrica, se están investigando nuevos materiales
termoeléctricos y enfoques de diseño que permitan una conversión más efectiva del calor en
electricidad. La búsqueda de materiales con propiedades termoeléctricas optimizadas es esencial para
aumentar la eficiencia y la viabilidad económica de esta tecnología.

En resumen, el método de generación de energía termoeléctrica se basa en el efecto Seebeck, que


permite convertir directamente el calor en electricidad utilizando materiales termoeléctricos y
dispositivos específicos. Aunque actualmente enfrenta desafíos en términos de eficiencia, la
investigación continua en nuevos materiales y enfoques de diseño ofrece perspectivas emocionantes
para mejorar el rendimiento y la viabilidad de la generación termoeléctrica en el futuro. En la próxima
sección, concluiremos este informe con un resumen de los puntos clave y una visión general de la
importancia de la energía termoeléctrica en la búsqueda de soluciones energéticas sostenibles.

Conclusión

La energía termoeléctrica ha surgido como una innovadora y prometedora solución en el panorama de la


generación de electricidad. Al aprovechar el efecto Seebeck y convertir el calor residual en energía
eléctrica utilizable, esta tecnología ofrece una serie de ventajas y desafíos que deben ser
cuidadosamente considerados en su integración en la matriz energética global.

En un mundo donde la demanda de energía es insaciable y la necesidad de abordar los desafíos


ambientales es apremiante, la energía termoeléctrica se destaca por su capacidad para aprovechar el
calor desperdiciado en procesos industriales y otras fuentes de calor, reduciendo así la dependencia de
los combustibles fósiles y contribuyendo a la mitigación del cambio climático. Su capacidad para generar
electricidad de manera continua y su potencial para complementar las fuentes renovables intermitentes
la convierten en una herramienta valiosa para la estabilidad y la fiabilidad de la red eléctrica.

Sin embargo, la energía termoeléctrica también enfrenta desafíos significativos, como su baja eficiencia
de conversión, las emisiones contaminantes y de gases de efecto invernadero asociadas con ciertos
métodos de generación, y el consumo de recursos hídricos en sistemas de refrigeración. La necesidad de
tecnologías de captura y almacenamiento de carbono y la continua investigación en materiales
termoeléctricos más eficientes son esenciales para superar estas desventajas y maximizar su
contribución al desarrollo sostenible.

En última instancia, la energía termoeléctrica ilustra la importancia de la innovación constante y el


equilibrio entre las ventajas y desafíos en la búsqueda de soluciones energéticas más limpias y eficientes.
A medida que las tecnologías y enfoques evolucionan, la energía termoeléctrica podría desempeñar un
papel crucial en la transición hacia una matriz energética más sostenible, en la que se optimice el
aprovechamiento de recursos y se minimicen los impactos ambientales.

En un mundo en constante cambio y con crecientes demandas de energía, la energía termoeléctrica se


presenta como un recordatorio de que la diversidad de enfoques y la búsqueda continua de avances son
fundamentales para enfrentar los desafíos energéticos y ambientales del siglo XXI. Con la colaboración
entre la ciencia, la industria y la sociedad, la energía termoeléctrica podría desempeñar un papel crucial
en el logro de un futuro energético más sostenible y resiliente.

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