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¿QUÉ ES EL PERFIL DE LÍPIDOS? ¿PARA QUÉ SIRVE REALIZARLO?

El perfil de lípidos es una prueba de laboratorio en la que se realiza una medición del
nivel total de triglicéridos y de los distintos tipos de colesterol que circulan en la sangre.
Esto con el objetivo de confirmar o descartar la existencia de dislipidemia (elevación de
los niveles sanguíneos de lípidos potencialmente dañinos), ya sea por triglicéridos
elevados (hipertrigliceridemia), por colesterol elevado (hipercolesterolemia) o por ambos.

Todas las personas tienen ciertos niveles de lípidos (partículas especiales de grasa
necesarias para el organismo, incluyendo colesterol y triglicéridos) circulantes en la
sangre. La elevación de estos en niveles excesivos o por mucho tiempo, sin embargo,
puede resultar en el desarrollo de enfermedades importantes como hipertensión, infarto
cardiaco, derrames cerebrales, fallo renal, fallo cardiaco y pancreatitis. Usualmente, la
existencia de hiperlipidemia no suele producir síntomas hasta que se desarrollan
complicaciones, por lo que es recomendable el evaluar sus niveles en ciertos casos y cada
cierto tiempo.

Esto es principalmente cierto en personas con enfermedades como diabetes, hipertensión


u obesidad, personas que han sufrido infartos o derrames cerebrales previos, personas
con historia de consumo excesivo de alcohol, personas con pancreatitis, personas con
VIH y personas con familiares que sufran o hayan sufrido de colesterol o triglicéridos
elevados (especialmente si esa elevación inició desde su juventud).

La realización de un perfil de lípidos forma parte esencial de una evaluación completa de


la salud del sistema cardiovascular (o sea, del corazón y los vasos sanguíneos), por lo que
se recomienda que sea realizado periódicamente, por lo menos 1 vez al año, en pacientes
mayores de 50 años o con alguna condición que haga más probable el desarrollo de
hiperlipidemia.

 
¿QUÉ ES LO QUE SE EVALÚA AL REALIZAR UN PERFIL DE LÍPIDOS?

En el perfil de lípidos se evalúan los niveles sanguíneos de las siguientes sustancias:

Colesterol: Es un tipo de molécula de grasa de apariencia viscosa y consistencia sólida a


temperatura ambiente. Esta forma parte esencial de la membrana de las células de todo
el cuerpo y es utilizada por las mismas células con otros objetivos, como ayudar en la
producción de hormonas y otras moléculas.

La mayor parte de colesterol en el cuerpo es producido naturalmente por las células del
hígado, mientras que una menor proporción proviene de los alimentos que ingerimos,
tales como huevos, carnes, quesos, leche y otros productos animales, así como en
productos vegetales como la margarina y algunos tipos de aceite.

Dependiendo de cómo se encuentren compuestas las partículas que transportan las


moléculas de colesterol, este puede ser clasificado como Colesterol de Alta Densidad
(también llamado HDL o “colesterol bueno”, por sus efectos positivos sobre la salud
cardiovascular) y Colesteroles de Baja Densidad (también llamados LDL y VLDL o
“colesteroles malos”, por sus posibles efectos negativos en la salud cardiovascular).
En un perfil de lípidos, los niveles de colesterol en la sangre son indicados por el
Colesterol Total, el cual es la suma de los niveles de colesterol de alta densidad y ambos
colesteroles de baja densidad.

Colesteroles de Alta Densidad: También llamado Lipoproteínas de alta densidad, HDL o


“colesterol bueno”, estas son partículas formadas por proteínas producidas en el
organismo y por el colesterol encontrado en los vasos sanguíneos y órganos distintos al
hígado e intestino. Estos tienen la función de transportar el colesterol acumulado en los
vasos sanguíneos y otros órganos hacia el hígado, permitiendo que sea eliminado o
convertido en otras sustancias.

Como consecuencia, el HDL disminuye el riesgo de desarrollo de enfermedades del


sistema cardiovascular, incluyendo infartos, derrames cerebrales e hipertensión. Los
niveles de HDL suelen ser más bajos en personas con dietas elevadas en grasas y carnes
rojas, con un estilo de vida sedentario (o sea personas que realizan poca actividad física
todos los días), en hombres, en mujeres después de la menopausia (debido a la
disminución natural de las hormonas femeninas), en personas con diabetes mellitus, en
algunas personas con enfermedad renal y, en raras ocasiones, en personas con dificultad
para formar estas moléculas debido a enfermedades genética

Colesteroles de baja densidad: Estos corresponden a dos tipos de partículas llamadas LDL,


o lipoproteínas de baja densidad, y VLDL, o lipoproteínas de muy baja densidad. En
conjunto, ambos son conocidos por algunas personas como “colesterol malo”. Estas se
forman en el hígado a partir del colesterol obtenido en la dieta y colesterol formado por
las células del hígado, en adición a proteínas especiales que permiten que el colesterol
sea transportado en la sangre. Estas tienen la función de transportar el colesterol desde
el hígado hacia otros órganos a excepción del intestino, por lo que cumplen funciones de
extrema importancia, al proporcionar colesterol a las células para formar y reparar sus
membranas y para producir distintas hormonas y moléculas.

En caso se encuentren elevadas en niveles significativos o por un tiempo prolongado, sin


embargo, las lipoproteínas de baja densidad en la sangre suelen acumularse en los vasos
sanguíneos, por lo que aumentan el riesgo de desarrollo de hipertensión, infarto,
insuficiencia arterial, derrame cerebral, fallo cardiaco y fallo renal. Los niveles de VLDL y
LDL suelen encontrarse elevados en personas con obesidad, dietas altas en grasas,
hipotiroidismo, diabetes, fallo renal, VIH y, en ocasiones, personas con distintas
enfermedades genéticas.

¿Qué es un análisis de sangre?


Un análisis de sangre es cuando se saca una muestra de sangre para analizarla en un laboratorio.
Los médicos mandan análisis de sangre para evaluar cosas como la concentración de glucosa, la
hemoglobina o los glóbulos blancos en sangre. Esto puede ayudar a detectar problemas, como una
enfermedad o una afección médica. A veces, los análisis de sangre les pueden ayudar a saber lo
bien que está funcionando un órgano (como el hígado o los riñones).

¿Qué es un perfil lipídico?


Un perfil lipídico, también conocido como "panel de lípidos", mide las concentraciones de distintos
tipos de grasas en la sangre.

 El colesterol total es la suma de los distintos tipos de colesterol. El colesterol es una sustancia grasa que el
cuerpo necesita en cierta medida. Pero un exceso de colesterol puede causar problemas.
 La lipoproteína de alta densidad, o colesterol HDL (por sus siglas en inglés), se suele llamar colesterol
"bueno". El colesterol HDL ayuda al cuerpo a librarse del colesterol que le sobra.
 La lipoproteína de baja densidad o colesterol LDL (por sus siglas en inglés), se suele llamar colesterol
"malo". El colesterol LDL que se acumula en el torrente sanguíneo pueden obstruir vasos sanguíneos e
incrementar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.
 Los triglicéridos almacenan energía hasta que el organismo la necesita. Si el cuerpo acumula demasiados
triglicéridos, se pueden obstruir vasos sanguíneos, lo que puede provocar problemas de salud.

¿Por qué se hace esta prueba?


El perfil lipídico permite indicar el riesgo de una persona a desarrollar enfermedades cardíacas o
aterosclerosis (el endurecimiento, estrechamiento u obstrucción de las arterias). Normalizar las
concentraciones de lípidos lo antes posible puede reducir el riesgo de padecer enfermedades
cardíacas y aterosclerosis más adelante.

¿Cómo nos debemos preparar para un perfil lipídico?


Es posible que pidan a su hijo que deje de comer y de beber durante 8 a 12 horas antes de hacerse
el análisis de sangre, y que no haga ejercicio físico durante las 12 a 14 horas previas a la prueba.
Informe al médico de su hijo sobre cualquier medicación que esté tomando porque hay algunos
medicamentos que pueden influir en los resultados de la prueba.

El hecho de que su hijo lleve puesta una camiseta de manga corta el día del análisis puede facilitarle
las cosas; también pueden llevar encima un juguete o un libro para que se distraiga.

¿Cómo se hace?
En la mayoría de los análisis de sangre, se extrae una muestra de sangre a partir de una vena. A tal
efecto, un profesional de la salud:

 limpia la piel
 coloca una goma (torniquete) alrededor del área para que las venas se hinchen de sangre.
 inserta una aguja en una vena (generalmente en el brazo, sea en la cara interna del codo, o bien en dorso de
la mano)
 introduce la muestra de sangre en un frasco o una jeringa.
 extrae la goma y retira la aguja de la vena

En los lactantes, la sangre se puede extraer a partir de una punción en el talón. Después de limpiar
el área, el profesional de la salud hará una pequeña punción en el talón del bebé con una pequeña
aguja (o lanceta) para recoger una pequeña muestra de sangre.

La extracción de una muestra de sangre solo provoca molestias de carácter temporal y lo único que
se siente es un breve pinchazo.

¿Puedo estar con mi hijo durante la prueba?


Los padres se suelen poder quedar con sus hijos durante los análisis de sangre. Intente que su hijo
se relaje y dígale que se quede muy quieto porque unos músculos tensos pueden dificultar la
extracción de sangre. Es posible que su hijo prefiera apartar la mirada de la aguja cuando se la
claven en la piel y cuando le saquen la sangre. Ayude a su hijo a relajarse haciendo respiraciones
profundas o cantando su canción preferida.

¿Cuánto dura la prueba?


La mayoría de los análisis de sangre solo duran unos pocos minutos. En algunas ocasiones, puede
costar mucho encontrar una vena, de modo que el profesional de la salud puede tener que probarlo
más de una vez.

¿Qué ocurre después de la prueba?


El profesional de la salud extraerá la goma y la aguja, y después cubrirá el área con un algodón o
una tirita para que deje de sangrar. Después de la extracción, es posible que aparezca un pequeño
hematoma, que debería desaparecer en pocos días.
¿Cuándo estarán listos los resultados?
Las muestras de sangre se procesan utilizando una máquina, y los resultados pueden tardar de unas
pocas horas a un día en estar listos. Si los resultados de la prueba indicaran un posible problema, el
médico pediría otras pruebas para averiguar en qué consiste el problema y cómo tratarlo.

¿El perfil lipídico se asocia a algún riesgo?


El perfil lipídico es un procedimiento seguro con unos riesgos mínimos. Algunos niños se marean o
se desmayan cuando les sacan sangre. Unos pocos niños y adolescentes tienen mucho miedo a las
agujas. Si su hijo está ansioso, hable con su médico antes de hacerle la prueba sobre formas de
hacer el procedimiento más sencillo.

Es habitual que aparezca un pequeño hematoma y/o un dolor muscular leve en la zona del pinchazo,
que puede durar unos pocos días. Pida ayuda médica si el malestar o las molestias de su hijo
empeoran o duran más tiempo.

Si tiene alguna duda sobre el perfil lipídico, hable con el médico de su hijo o con el profesional que
vaya a hacerle la extracción de sangre.

Perfil lipídico

Prueba Subóptimo
(mg/dL)

Niños y
Colesterol
adolescentes (2- 170 - 199
total
18 años)

Colesterol
120 - 144
no-HDL

Adultos jóvenes Colesterol


190 - 224
(19-24 años) total

Colesterol
150 - 189
no-HDL

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