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Inestabilidad crónica del tobillo


S. Brent Brotzman, MD  |  John J. Jasko, MD

Peters et al. observaron que la inestabilidad lateral crónica aparece Varios estudios han indicado que más de la mitad de los pacientes
en un 10 a 30% de individuos después de un esguince lateral agudo con inestabilidad crónica del tobillo tienen trastornos o lesiones
de tobillo (Peters et al. 1991). extraarticulares asociados, como daños del cartílago articular,
El dolor persistente, los esguinces recurrentes y los episodios lesiones del tendón peroneo, lesiones por pinzamiento y trastornos
repetidos de fallo del tobillo son síntomas característicos de ines­ asociados del tarso.
tabilidad crónica. La inestabilidad crónica del tobillo no solo puede
limitar la actividad, sino que también puede llevar a un aumento
de riesgo de degeneración del cartílago articular y la consiguiente TRATAMIENTO
artrosis de tobillo. Generalmente se usa primero tratamiento conservador para tra­
Se han citado factores tanto mecánicos como funcionales relacio­ tar los déficits propioceptivos y cualquier trastorno estático. En la
nados con la lesión inicial que contribuyen a inestabilidad crónica mayoría de pacientes con inestabilidad crónica del tobillo se han
del tobillo (Maffulli y Ferran 2008). identificado déficits de equilibrio (Wikstrom et al. 2010).
Los factores mecánicos son los siguientes: Un análisis sistemático halló que las intervenciones de reha-
• Laxitud patológica. bilitación funcional se asociaban con una mejor estabilidad del
• Restricción artrocinética. tobillo tanto en el control postural como en la función referida por
• Cambios sinoviales. el propio paciente en aquellos que tenían inestabilidad crónica del
• Cambios degenerativos. tobillo (Webster y Gribble 2010), mientras que un ensayo aleato­
Los factores funcionales son los siguientes: rizado controlado encontró que 4 semanas de entrenamiento del
• Alteración de la sensibilidad propioceptiva/de posición articular. equilibrio mejoraban significativamente la función referida por el
• Alteración del control neuromuscular. paciente, el control postural estático y el control postural dinámico
• Alteración del control postural. (McKeon et al. 2008).
• Déficits de fuerza. En otro grupo de pacientes con antecedentes de esguince de
La identificación y el tratamiento adecuado de la inestabilidad tobillo, el equilibrio mejoró después de 4 semanas de ejercicios de re­
crónica del tobillo son importantes para enlentecer o prevenir sistencia elástica (Han y Ricard 2009).
la progresión de una artropatía degenerativa de la articulación Los pacientes con inestabilidad principalmente funcional tienen
del tobillo. En la artroscopia de tobillo de pacientes con inestabi­ más probabilidad de beneficiarse de la rehabilitación que los pacien­
lidad crónica, Sugimoto et al. (2009) observaron que el 77% de tes con inestabilidad principalmente mecánica (Ajis y Maffulli 2006).
los pacientes tenían algún grado de lesión condral. La duración
de la inestabilidad no era un factor que afectara a la gravedad de
las lesiones condrales encontradas. Los factores de riesgo para el Vendaje funcional y férulas
aumento de gravedad de las lesiones condrales eran aumento de para la inestabilidad crónica del tobillo
la edad, una mayor inclinación del astrágalo e inclinación en varo
del plafón tibial. La eficacia del vendaje funcional y las férulas sigue sin determinar,
y algunos estudios no comunican beneficios, mientras que otros
comunican cierto efecto de estabilización (Gribble et al. 2010, Dela­
DIAGNÓSTICO hunt et al. 2009).
La evaluación de un paciente con inestabilidad crónica del tobillo
comienza con una anamnesis cuidadosa del paciente para valorar Reconstrucción quirúrgica
el síntoma de manifestación, el mecanismo de lesión, el nivel de en la inestabilidad crónica del tobillo
actividad y la gravedad de la discapacidad. La exploración clínica
puede revelar solo equimosis e inflamación mínimas a lo largo de la Si el tratamiento no quirúrgico no consigue aliviar los síntomas, está
línea articular. Las pruebas de laxitud ligamentosa son más fáciles indicada la cirugía. Aunque se han descrito numerosos procedimien­
en pacientes con inestabilidad crónica que en pacientes con lesio­ tos para el tratamiento de la inestabilidad crónica del tobillo, todos
nes agudas, porque el miembro es menos doloroso. Las radiografías son de dos tipos básicos: reparación (o reconstrucción) anatómica
simples y la resonancia magnética (RM) son útiles para excluir otras y estabilización con tenodesis (reparación no anatómica). La repa­
posibles causas de dolor e inestabilidad del tobillo, como fractura, ración anatómica tiene como objetivo restablecer la anatomía normal
pinzamiento, lesiones osteocondrales o lesión del tendón peroneo. y la mecánica articular, y mantener la movilidad subastragalina y
La utilidad de las radiografías de estrés es controvertida, y los del tobillo. Waldrop demostró que tanto los túneles óseos como
estudios más recientes indican que tienen un valor cuestionable. los anclajes de sutura pueden utilizarse con una resistencia inicial
Debido a la gran variabilidad de laxitud normal del tobillo, gene­ equivalente y con resultados funcionales (Waldrop et al. 2012).
ralmente se necesitan proyecciones del lado no lesionado para Si los ligamentos laterales están demasiado dañados o atenuados,
comparación. Aunque las cifras manejadas por los médicos varían, históricamente se ha usado la estabilización con tenodesis. Los
generalmente se considera un hallazgo positivo 3 a 5° más de laxitud injertos con tendón local, más a menudo una porción de los ten­
que en el lado no lesionado o un valor absoluto de 10°. dones peroneos, se usaron para restringir la movilidad sin reparar
Una parte importante de la evaluación de los pacientes con ines­ los ligamentos lesionados. Sin embargo, estos procedimientos de
tabilidad crónica del tobillo es la identificación de patología asociada. tenodesis no eran anatómicos y alteraban la biomecánica del tobillo
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276 SECCIÓN 4  Lesiones del pie y el tobillo

Fig. 41.2  Aumento de la reparación de Broström con retináculo exten-


sor (modificación de Gould).

Fig. 41.1  Imbricación de los ligamentos laterales del tobillo (procedi-


miento de Broström). A, Técnica en pantalón sobre chaleco tensando
los ligamentos. B, Reparación completa.

y el retropié (p. ej., movilidad del retropié limitada) en pacientes


con poco tejido ligamentoso restante. Una mejor opción quirúrgica
cuando es imposible la reparación anatómica es la reconstrucción
anatómica con colgajos invertidos de periostio peroneo; injertos
autógenos de músculo plantar, recto interno, semitendinoso; o aloin­
jertos. Característicamente utilizamos aloinjerto o autoinjerto de
isquiotibiales o tendón que se lleva a través de las zonas originales de
origen e inserción del ligamento peroneoastragalino anterior (LPAA)
y el calcaneoperoneo (LCP), usando el sistema de biotenodesis
de Arthrex (Naples, FL, 2003). Esto permite una reconstrucción
anatómica con buena isometría y sin efecto de tenodesis. Esto puede
intensificarse mediante un colgajo invertido de periostio peroneo o
del retináculo extensor.

Técnicas quirúrgicas frecuentes


para el tratamiento de la inestabilidad
lateral crónica del tobillo
Fig. 41.3  Procedimiento de biotenodesis con aloinjerto de tipo Bros-
La reparación anatómica puede consistir en lo siguiente: tröm usando aloinjerto de tendón del tibial anterior o isquiotibiales.
• Imbricación de los ligamentos laterales del tobillo (procedimiento A, Incisión cutánea. B, Reconstrucción con injerto de tendón con tornillo
de Broström) (fig. 41.1). interferencial de tenodesis para fijar en el sitio. C, Refuerzo de la repa-
ración mediante retináculo extensor.
• Aumento de la reparación de Broström con retináculo extensor
(modificación de Gould) (fig. 41.2).
• Biotenodesis con aloinjerto (Arthrex): procedimiento de tipo
Broström usando aloinjerto de tendón del tibial anterior o isquio­ miento, cuerpos libres, osículos dolorosos, adherencias y osteofitos.
tibiales si hay poco tejido local (fig. 41.3). Se han desarrollado técnicas artroscópicas para la reparación y
• Colgajo perióstico invertido de periostio peroneo para aumentar reconstrucción de tendones (Lui 2007).
la reconstrucción previa del ligamento con el procedimiento de Independientemente de la técnica quirúrgica, la movilización
Broström. precoz y la rehabilitación funcional han demostrado producir
En general, las técnicas de reparación anatómica han producido mejores resultados que 4-6 semanas de inmovilización (de Vries
mejores resultados que las técnicas de tenodesis (p. ej., Watson-Jones et al. 2009).
o Chrisman Snook). Un estudio comparativo comunicó un 80% de Se ha demostrado que los protocolos agresivos son seguros y
resultados de buenos a excelentes con reconstrucción anatómica y han reducido considerablemente el tiempo de vuelta al deporte
un 33% de resultados de buenos o excelentes con el procedimiento (Miyamoto et al. 2104).
de Evans (Krips et al. 2002). El Protocolo de rehabilitación 41.1 muestra un protocolo de
Se suele realizar la artroscopia para identificar y tratar trastornos rehabilitación postoperatoria después de reconstrucción tipo Bros­
intraarticulares, como lesiones astragalinas osteocondrales, pinza­ tröm del ligamento.

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PROTOCOLO DE REHABILITACIÓN 41.1    Tras reconstrucción del ligamento del tobillo de Broström
modificada
Protocolo de Hamilton modificado Semana 6
Días 0-4 • Comience actividades propioceptivas/de equilibrio.
• Coloque el tobillo en flexión dorsal neutra en una bota de marcha • Equilibrio unilateral en intervalos de tiempo.
que se puede quitar y dé el alta al paciente con carga del peso • Equilibrio unilateral con claves visuales.
según tolerancia (CPST) con la bota y muletas. • Equilibrio sobre una pierna cogiendo #2 pelotas pliométricas.
• Elevación máxima y crioterapia. • Tabla deslizante, aumentando la distancia.
• Retire muletas a los 7 a 10 días, bota de marcha solo • Actividad en Fitter, cogiendo una pelota.
con CPST. • Salto bilateral de un lado a otro (progrese a unilateral).
• Salto bilateral de delante hacia atrás (progrese a unilateral).
Días 4-7 • Patrones diagonales de salto.
• Progrese en la CPST con bota de marcha que se puede quitar • Footing en minicama elástica.
y retire muletas el día 7 a 10. • Prensa y rebote de la pierna en lanzadera, bilateral y unilateral.
• Deceleración positiva, eversiones del tobillo, Kin-Com.
Semana 4 • La rehabilitación completa de los peroneos es esencial.
• Retire bota de marcha a las 4 a 6 semanas. • Los bailarines deberían realizar ejercicios peroneos en flexión
• Aplique entablillado inflable para protección, para llevar durante plantar completa, la posición funcional en estos deportistas.
6 a 8 semanas después de la cirugía. • Los ejercicios de descarga en piscina pueden ser beneficiosos
• Comience ejercicios suaves de amplitud de movimientos precozmente en la rehabilitación.
del tobillo. • Los bailarines deberían realizar ejercicios de flexión plantar/
• Comience ejercicios isométricos de fortalecimiento peroneo. eversión con un cinturón con peso (1-10 kg).
• Evite la aducción e inversión del tobillo hasta las 6 semanas Semanas 8-12
del postoperatorio.
• Comience bicicleta estática y natación ligera. • El paciente puede reanudar el baile o la actividad deportiva si la
fuerza peronea es normal y simétrica con el miembro no afectado.

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© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.

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