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Carrera:

Psicología clínica

Materia:

Percepción humana

Docente:

Chabeli Encarnación

Estudiante:

Arleny Beatriz Ramirez Herrera

Matricula:

SM-2022-00505

Tema
Sistema auditivo y el sentido del tacto.( Sentido, químico) unidad 3 y 4)
Importancia de la audición en la comunicación:La audición es la vía habitual
para adquirir el lenguaje, uno de los más importantes atributos humanos. El lenguaje
permite a los seres humanos la comunicación a distancia y a través del tiempo y ha
tenido una participación decisiva en el desarrollo de la sociedad y sus numerosas
culturas.

El sonido:Cuando hablamos de sonido, nos referimos a la propagación de las


ondas mecánicas originadas por la vibración de un cuerpo a través de un fluido o un
medio elástico. Dichas ondas pueden o no ser percibidas por los seres vivos,
dependiendo de su frecuencia.

Existen sonidos audibles por el oído humano y otros que solo perciben ciertas
especies de animales. Se trata de ondas acústicas producidas por la oscilación de la
presión del aire, que son percibidas por el oído y transmitidas al cerebro para ser
interpretadas. En el caso del ser humano, este proceso es esencial para la
comunicación hablada.

Frecuencia:La frecuencia es una magnitud que mide la cantidad de repeticiones


que puede tener un suceso por unidad de tiempo.
El SI (Sistema Internacional de Unidades), que es el sistema de unidades utilizado
por la mayoría de los países del mundo, dice que la frecuencia debe ser medida
mediante hercios (Hz).

Un hercio es la frecuencia de un suceso periódico cuya repetición se da una vez por


segundo, entendida esta unidad también como ciclo por segundo (cps). La
derivación de hercio se da en honor al físico Heinrich Rudolf Hertz.

La amplitud:Amplitud es un término físico que se refiere al tamaño de un fenómeno


de vibración o de onda, como una onda eléctrica o una onda de sonido. En este
contexto, la amplitud se define a menudo como la máxima excursión o intensidad de
la onda.
Estructura del sistema auditivo:

El oído, también conocido como órgano vestibulococlear, actúa como un filtro en el


que los estímulos sonoros se transforman en información que posteriormente el
cerebro decodifica. Por tanto, las principales tareas que desempeñan son detectar,
transmitir y convertir los sonidos en impulsos eléctricos.

Oído externo: formado por el pabellón auricular o auditivo y el conducto auditivo


externo. Éste último recibe el sonido para trasladarlo hacia el oído medio gracias al
tímpano o membrana timpánica, flexible y circular, que empieza a vibrar a medida
que las ondas sonoras lo impactan.

Oído medio: contiene la cadena de huesecillos, tres huesos minúsculos que


reciben el nombre de martillo, yunque y estribo (éste último es el hueso más
pequeño del cuerpo humano). Los tres forman un puente entre el tímpano y la
entrada del oído interno a través de la ventana oval que recubre la cóclea. Además,
para oír correctamente y equilibrar la presión de ambos lados del tímpano existe un
estrecho tubo aproximadamente de 3,5 cm de largo que está conectado con la parte
posterior de la nariz denominado trompa de Eustaquio que actúa como válvula de
escape.

Oído interno: incluye la cóclea, que tiene una forma parecida a un caracol y
conforma un laberinto óseo con varias secciones membranosas rellenas de unos
fluidos llamado endolinfa y perilinfa. Cuando estos líquidos se mueven provocan una
oscilación en las células ciliadas de la cóclea. Finalmente, el órgano de Corti
transforma esta energía mecánica de las ondas sonoras en energía nerviosa
convirtiéndola en impulsos eléctricos que se envían al cerebro a través del nervio
auditivo o vestibulococlear.
Cuando no recibimos esos impulsos eléctricos en el cerebro es porque el oído se ve
afectado o dañado y nos advierte de que algo no está funcionando correctamente
en nuestro órgano de la audición.
En algunos casos de hipoacusia o pérdida auditiva, el entrenamiento del oído puede
ayudar a percibir de nuevo los sonidos y restaurar con mayor fluidez la comprensión
del lenguaje. Por ejemplo, centros auditivos como Audífonos, ofrecen a los clientes
sencillas instrucciones para poder realizar una serie de ejercicios de reeducación
auditiva en casa, denominado entrenamiento auditivo domiciliario para ayudar al
oído a reconocer frecuencias y aumentar así su rendimiento.

Deficiencia en la audición:
El término deficiencia auditiva se refiere a cualquier grado de pérdida de audición,
de leve a grave, y puede ocurrir cuando hay un problema en una parte del oído, ya
sea el oído interno, medio o externo, o en los nervios involucrados en la audición.

El sentido del tacto:


El sentido del tacto es aquel que permite a los organismos percibir cualidades de los
objetos y medios como la presión, temperatura, textura y dureza. En la piel se
encuentran diferentes clases de receptores nerviosos que se encargan de
transformar los diferentes tipos de estímulos del exterior en información susceptible
para ser interpretada por el cerebro. La piel se divide en tres capas: epidermis, que
es la capa superficial, la dermis y la hipodermis que es la capa más profunda. La
epidermis está constituida por tejido epitelial y en su estrato basal o germinativo
encontramos la denominada melanina, que es el pigmento que da color a la piel, y la
dermis por tejido conjuntivo.

La piel:
La piel es el órgano más grande del cuerpo. Lo cubre completamente. Además de
servir como protección contra el calor, la luz, las lesiones y las infecciones, la piel
también.

Regula la temperatura del cuerpo.

Almacena agua y grasa.

Es un órgano sensorial.
Impide la pérdida de agua.

Impide el ingreso de bacterias.

Actúa como barrera entre el organismo y el entorno.

Tipos de piel : Delgada y gruesa

Gruesa:La piel gruesa se localiza en las plantas de los pies y en las palmas de las
manos, también en los labios. Esta se caracteriza por ser más una piel áspera y
resistente. En muchas ocasiones, esta necesita ser hidratada para evitar lesiones,
sobre todo en los labios ya que es muy propensa a estas.

Delgada:La piel fina es una piel cuyas capas, sobre todo la epidermis, son más
delgadas de lo normal, por eso tiene una apariencia más pálida y traslúcida. Como
la dermis también es más delgada y los vasos sanguíneos son más frágiles por eso
los hematomas son más frecuentes en estas pieles.

Capas de la piel: Epidermis, dermis , y tejido subcutáneo.

La dermis es la capa más gruesa y profunda de nuestra piel. Formada por tejido
conjuntivo con funciones que hacen de la piel un órgano muy dinámico, constituye el
sostén de la epidermis. La dermis está a su vez dividida en dos capas: la papilar y la
reticular.

Epidermis

Es la capa superior de la piel, localizada justo encima de la dermis. Es el


revestimiento del cuerpo y lo cubre casi en su totalidad. Las células que la
componen se crean en la parte más profunda de la epidermis y se van llenando de
queratina hasta que llegan al exterior.

Subcutáneo
La capa de grasa subcutánea es la capa más profunda de la piel. Consta de una red
de colágeno y células de grasa. Ayuda a conservar el calor del cuerpo y protege el
cuerpo de lesiones al actuar como absorbedor de golpes. Esta capa también
contiene células que pueden ayudar a regenerar la piel después de una lesión.

Los corpúsculos de pacini:


Los corpúsculos de Pacini son uno de los cinco tipos de mecanorreceptores que
existen: en concreto, son receptores sensoriales de la piel que responden a las
vibraciones rápidas y la presión mecánica profunda. Poseen una cápsula de tejido
conectivo más desarrollada y tienen varios milímetros de longitud. Los corpúsculos
son elipsoidales y poseen una cápsula compuesta por numerosas capas de células
de tejido conectivo aplanadas. Cada capa o lámina está separada de las demás por
fibras de colágeno y material amorfo. La cápsula rodea un espacio central.Cada
corpúsculo recibe una fibra nerviosa gruesa mielínica, que pierde su vaina de
mielina y penetra la piel en el espacio central donde también pierde su vaina de
Schwann. El axón desnudo recorre el espacio central sin ramificarse y forma un
engrosamiento terminal.

Tipos de tacto:

Sensibilidad protopática. La más primitiva y poco diferenciada, responde a las


sensaciones más gruesas y amplias, como el dolor, el frío o calor extremo. Es la
primera en aparecer luego de lesiones en los nervios.

Sensibilidad epicrítica. La más fina, localizada y exacta, permite apreciar


estímulos de poca intensidad, permitiendo reconocer formas y tamaños.

Sensibilidad termoalgásica. Aquellas que se vinculan con la temperatura y el


dolor.

Sensibilidad en hombre y mujeres:


La fina piel de las mujeres se caracteriza por una mayor sensibilidad al tacto y al
peso debido a que posee sensores unas diez veces más sensibles que los de los
hombres. Las mujeres tocamos más y sentimos con mayor intensidad el contacto de
los demás, y percibimos mejor las emociones de los otros a los que tocamos.

El dolor:
El dolor es una señal del sistema nervioso de que algo no anda bien. Es una
sensación desagradable, como un pinchazo, hormigueo, picadura, ardor o molestia.
El dolor puede ser agudo o sordo. Puede ser intermitente o ser constante.

Componentes del dolor:


La sensación de dolor comprende dos componentes distintos: el discriminativo-
sensorial y el componente afectivo.

Adaptación al dolor:
Comprender y analizar la experiencia de vivir con dolor crónico benigno en el
envejecimiento desde la perspectiva del modelo de adaptación de Callista Roy.
Metodología. Estudio descriptivo exploratorio utilizando para el análisis herramientas
de la teoría fundamentada con los criterios de Strauss y Corbin. Se emplea como
estrategia la entrevista en profundidad a diez adultos mayores residentes en
Medellín, Antioquia, y Chía, Cundinamarca (Colombia) quienes presentaron dolor
crónico benigno. Resultados. En los adultos mayores se identificaron
comportamientos que fueron secundarios a la presencia de dolor y que son
consecuencia de la capacidad de adaptación a su experiencia, logrando hacer
modificaciones en el ambiente a través del uso de recursos internos y externos que
les permitieron controlar los estímulos generadores de dolor en los modos de
adaptación del ser humano basados en el Modelo de Adaptación de Callista Roy.

Control del dolor:


Es el uso cuidadoso de tratamientos para reducir el sufrimiento. Toda persona tiene
derecho a que se le alivie el dolor. El objetivo principal del control del dolor en los
cuidados paliativos es mejorar la calidad de vida.

El ruido:
El ruido es la sensación auditiva inarticulada, generalmente desagradable. En el
medio ambiente, se define como todo lo molesto para el oído o, más exactamente,
como todo sonido no deseado. Desde ese punto de vista, la más excelsa música
puede ser calificada como ruido por aquella persona que en cierto momento no
desee oírla.

Unidad (4)

Definición del sentido químico

son básicamente el olfato y el gusto, estos nos permiten interactuar directamente


con las moléculas que podemos encontrar a nuestro alrededor o en el ambiente. El
gusto puede clasificarse en dulce, amargo, salado, agrio y umami que hace
referencia a algo sin nada de sabor.

Sentido del olfato

El sentido del olfato, al igual que el sentido del gusto, forma parte del sistema
quimiosensorial, es decir, de los sentidos químicos. La capacidad para oler viene de
células sensoriales especializadas, llamadas neuronas sensoriales olfativas.

Estructura del sistema olfatorio


Se define como corteza olfatoria primaria a todas las regiones cerebrales que
reciben información directa desde los bulbos olfatorios. Estas estructuras incluyen la
corteza piriforme, el tubérculo olfatorio, el núcleo olfatorio anterior, el complejo
amigdalino y la corteza entorrinal.

Adaptación del sistema del sentido del olfato. También conocida como «nose
blindness» (ceguera de la nariz) puede definirse como una «exposición prolongada
o repetida a un odorante que conduce típicamente a una reducción de la intensidad
percibida de un olor y a un incremento del umbral de detección.

Reconocimiento y discriminación de olores.


Discriminación de olores: Medida de la capacidad individual para discriminar olores
con independencia de la habilidad para identificarlos.
Cada neurona olfatoria tiene un receptor olfativo. Las moléculas microscópicas
liberadas por sustancias a nuestro alrededor, ya sea el aroma del café o los pinos
del bosque, estimulan estos receptores. Una vez que las neuronas detectan estas
moléculas, envían mensajes al cerebro, y éste identifica el olor.

Influencia de los olores sobre el comportamiento

El olor afecta al comportamiento provocando todo tipo de emociones, según algunos


investigadores las percepciones olfativas se procesan en el sistema límbico,
responsable de controlar las emociones, la conducta y el almacenamiento en la
memoria en la que se recrean lugares o momentos pasados de la vida.

Feromonas y animales inferiores


Esta sustancia cumple con diferentes funciones, como es el caso de influir en el
comportamiento sexual, alertar sobre situaciones de peligro e incluso hacer más
eficiente la comunicación entre animales de la misma especie. Las feromonas tienen
una influencia considerablemente mayor en los animales que en el caso de los
seres humanos; especialmente cuando se trata de una especie más pequeña y las
hormonas generan cambios mucho más radicales.

El sentido del gusto


El gusto es uno de los cinco sentidos del ser humano. Permite mediante los
receptores gustativos la detección de sustancias químicas disueltas en la boca,
procedentes generalmente de los alimentos. El sentido del gusto depende de la
estimulación de los botones gustativos, los cuales se encuentran en las papilas
gustativas situadas en la lengua, órgano musculoso ubicado dentro de la boca o
cavidad oral.El sabor se define como la sensación que causa un alimento u otra
sustancia al introducirse en la boca. En el sabor influye el sentido del gusto, pero
también el olfato y la textura.

Estructura del sistema del gusto


El gusto consiste en registrar el sabor e identificar determinadas sustancias solubles
en la saliva por medio de algunas de sus cualidades químicas. Aunque constituye el
más débil de los sentidos, está unido al olfato, que completa su función. Esto,
porque el olor de los alimentos que ingerimos asciende por la bifurcación
aerodigestiva hacia la mucosa olfativa, y así se da el extraño fenómeno, que
consiste en que probamos los alimentos primero por la nariz. Una demostración de
esto, es lo que nos pasa cuando tenemos la nariz tapada a causa de un catarro: al
comer encontramos todo insípido, sin sabor.

Adaptación del gusto


La adaptación a un sabor disminuye la sensibilidad a ese mismo sabor y suele
alterar la correspondiente a otros sabores. El gusto presenta un importante
componente emocional que lleva al sujeto a preferir o rechazar determinados tipos
de alimentos, variables según la situación particular del organismo.

Interacción del gusto y el olfato


El olfato y el gusto están estrechamente relacionados. Las papilas gustativas de la
lengua identifican el sabor y las terminaciones nerviosas de la nariz identifican el
olor. Ambas sensaciones se comunican al cerebro, el cual integra la información
para que los sabores puedan ser reconocidos y apreciados.

Estudio del desarrollo perceptual en los niños


El desarrollo de la percepción se refiere a la manera en que los niños empiezan a
captar, interpretar y entender la información sensorial. La percepción permite que
los niños se adapten a su ambiente y se relacionen con ello mediante el uso de los
sentidos.

Visión de la infancia
Al nacer el bebé tiene una visión limitada a 20-30 cm, solo percibe las sensaciones
de claro y oscuro, la movilidad del ojo es muy reducida y la agudeza visual también.
Las caras humanas atraen enormemente su atención, en especial la de sus padres,
siendo los límites del pelo los que ayudan más a su reconocimiento.

Audición en la infancia
En el período entre el nacimiento y los tres años, llamada la primera infancia, el niño
recibe estímulos auditivos inmensos, su música es intuitiva y, en particular, hace
hincapié en que la dimensión afectiva está presente en todas sus experiencias en
esta fase (2-4).

La visión y la audición en el adulto Maduro y el anciano


Con el envejecimiento llegan cambios progresivos en cuanto al funcionamiento de
nuestros sentidos, principalmente el de la audición y visión. Estos sentidos, que nos
proporcionan información acerca del mundo que nos rodea, se vuelven menos
agudos con el paso de la edad, afectando a la calidad de vida.

Los problemas de audición y visión en personas mayores, alteran la forma de


comunicarse con los demás y disfrutar de múltiples actividades. Por esto, las
alteraciones sensoriales pueden conducir al aislamiento del mayor. Ante estos
desafíos, es preciso que los familiares y/o cuidadores se mantengan pendientes
ante cualquier cambio en las capacidades visuales y auditivas de la persona mayor.

Ante la aparición de algún signo de alarma será necesario acudir al médico, a fin de
obtener un diagnóstico para poner en marcha el tratamiento más adecuado.

Pérdida de visión en personas mayores


Los problemas derivados de una visión alterada tienen como consecuencia no poder
observar con nitidez, desencadenando caídas, situaciones de dificultad para
interactuar con el entorno o salir a la calle. Generando un sentimiento de aislamiento
en el anciano y posiblemente desencadenando cuadros depresivos. A fin de
prevenir y curar enfermedades de la visión propias de la vejez, es recomendable
que la persona mayor se someta a revisiones oftalmológicas de forma periódica.

¿Por qué se pierde la vista con la edad?


A partir de los sesenta y cinco años, alrededor de un 30 por ciento de las personas
tienen problemas de visión, aunque solo unos pocos sufren alteraciones lo
suficientemente importantes como para limitarlo en sus actividades diarias.

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