Las palabras que nunca te dije.

- John M.
 El Café De Tus Ojos
En el autobús, nuestras miradas se cruzaron,
Un encuentro fugaz que el destino nos regaló.
Ella se bajó, pero en mi mente se quedó,
Sus ojos, tan bellos, como el café oscuro que yo tomo.

El color de sus ojos, profundos y cautivadores,

Como la taza de café que sostengo todas las mañanas.
En cada sorbo, revivo aquel instante efímero,
Donde dos almas se encontraron, aunque no dijeran palabras.

Un amor pasajero, pero eterno en mi memoria,

Cada mañana, busco su reflejo en mi taza de café.
El aroma me transporta a aquel instante de euforia,
Donde el amor se asomó, aunque no pudimos hablar.

En cada sorbo, imagino su sonrisa y su voz,

El deseo de encontrarla, aunque sea solo un eco.
El tiempo pasará, pero el recuerdo permanecerá,
Un amor de un instante, que en mi corazón siempre estará.
- John M.
 Lo Que Mi Alma Grita
En el silencio de la noche, mi alma grita,
Susurra palabras que el viento recita.
Se desborda en emociones, en anhelos profundos,
Buscando liberarse, como un ave en el cielo inmundo.

Grita por los sueños que aún no se han cumplido,

Por las pasiones que han quedado escondidas.
Grita por el amor que se fue sin razón,
Por las heridas que dejó en mi corazón.

Mi alma grita por la libertad perdida,

Por las cadenas que atan, la vida limitada.
Anhela volar alto, sin miedo al fracaso,
Romper las barreras, alcanzar lo que trazo.

Grita por la esperanza que se desvaneció,

Por las ilusiones rotas, por lo que se perdió.
Grita por la felicidad que aún no ha llegado,
Por las lágrimas que han sido derramadas.

En cada suspiro, en cada latido, mi alma grita,

Buscando encontrar su verdadera vida.
Anhela ser escuchada, ser comprendida,
Y encontrar la paz que tanto necesita.
 Así, en cada verso, en cada rima escrita,
Expreso lo que mi alma grita.
En cada palabra, en cada verso que fluye,
Libero mis pensamientos, mi esencia que se diluye.
- John M.
 Y Si Solo Nos Quedamos Aquí
Contemplándonos En Silencio
En el eco del silencio, nos encontramos tú y yo,
Sin palabras, sin gestos, solo el susurro de nuestro amor.
Nos miramos profundamente, en un instante eterno,
Enlazando nuestras almas en un abrazo tierno.

En el silencio compartido, se revelan nuestros secretos,

Los miedos, los anhelos, los sueños más completos.
No hacen falta palabras para entender lo que sentimos,
Nuestros ojos hablan, nuestros latidos se entrelazan con ritmo.

Los suspiros se convierten en versos silenciosos,

Que se entrelazan en el aire, como hilos amorosos.
Las miradas hablan un idioma propio, sin traducción,
Un lenguaje que solo tú y yo conocemos en esta unión.

En el silencio, nuestros corazones se sincronizan,

Latidos que resuenan en perfecta armonía divina.
Nos perdemos en el laberinto de nuestros pensamientos,
Explorando los rincones más profundos de nuestros sentimientos.

Y si solo nos quedamos aquí, contemplándonos en silencio,

Será suficiente para llenar el vacío de cada desencuentro.
En ese espacio sagrado, donde nuestras almas se encuentran,
El amor se hace presente, sin palabras, sin barreras.
 Así, en el silencio compartido, encontramos la plenitud,
La conexión más pura, la verdadera actitud.
Nos basta con mirarnos, entendernos sin hablar,
Porque en ese silencio, nuestro amor nunca dejará de brillar.
- John M.
 Lo Que El Corazón Calla
En el silencio de la noche, en la quietud del alma,
Se ocultan los secretos que el corazón guarda con calma.
Palabras no dichas, sentimientos enmudecidos,
Historias que solo el corazón ha vivido.

En lo más profundo, en el rincón más escondido,

Se encuentran los suspiros, los anhelos no compartidos.
El corazón calla, pero sus latidos hablan sin cesar,
Un idioma sublime, difícil de descifrar.

Hay amores que se guardan en cajas de cristal,

Escondidos en el tiempo, sin atreverse a revelar.
Sentimientos que se ocultan en susurros al viento,
Mientras el corazón se mantiene en silencio.

Las palabras pueden ser fugaces, efímeras y vanas,

Pero los latidos del corazón revelan las verdades más humanas.
En cada palpitar, se esconde una historia sin contar,
Un cúmulo de emociones que el corazón no deja escapar.

A veces, el silencio es la mejor forma de expresión,

Cuando las palabras no alcanzan a describir la pasión.
El corazón calla, pero sus latidos son el lenguaje universal,
Que traspasa fronteras y llega directo al alma, sin rival.
 Lo que el corazón calla, es un tesoro escondido,
Un universo de emociones que solo el alma ha conocido.
No importa que las palabras no puedan ser pronunciadas,
El corazón sigue latiendo, en cada historia guardada.

Así, en el silencio del corazón, se revelan las verdades,

Los suspiros, los deseos, las ilusiones más intensas.
Lo que el corazón calla, es la esencia más pura del ser,
Un refugio sagrado, donde el amor nunca deja de florecer.
- John M.
 El Atardecer De Tus Ojos
En el horizonte de tus ojos se tiñe el cielo,
Un atardecer eterno que me envuelve en su vuelo.
La calidez del sol se refleja en tu mirada,
Un destello de amor que me deja sin palabras.

El atardecer de tus ojos, un espectáculo sin igual,

Donde los colores se funden en un abrazo celestial.
El naranja se mezcla con el dorado y el carmesí,
Un lienzo perfecto que solo tus ojos pueden describir.

En cada puesta de sol, encuentro la paz y la calma,

El refugio donde mi alma encuentra su propia palma.
Tu mirada es el faro que guía mi camino,
En ese atardecer de tus ojos, me siento vivo.

En tus ojos, el cielo se tiñe de melancolía,

Una nostalgia dulce que me envuelve cada día.
El atardecer es testigo de nuestros encuentros,
Momentos compartidos, eternos y llenos de sentimientos.

En el atardecer de tus ojos, puedo ver el universo entero,

Las estrellas que se encienden en un brillo sincero.
La magia se despliega en cada destello luminoso,
Es un paisaje divino que me deja asombrado y gozoso.
 En el atardecer de tus ojos, encuentro la inspiración,
La musa que despierta mi imaginación.
Cada rayo de luz me cuenta una historia,
Un relato de amor y gloria.

Así, en el atardecer de tus ojos, me pierdo sin control,

En ese horizonte infinito, donde el tiempo se hace sol.
Tu mirada es el refugio, el poema más hermoso,
En el atardecer de tus ojos, encuentro mi reposo.
- John M.
Sólo Sé Que Te Amo Sin Condiciones
Sólo sé que te amo sin condiciones,
Un amor puro, sin restricciones.
No importa lo que pase o lo que vendrá,
Mi amor por ti siempre perdurará.

En cada latido de mi corazón,

Siento la fuerza de esta pasión.
Eres mi razón de ser, mi inspiración,
El motor que impulsa mi existencia, mi canción.

No importa tus fallos o tus errores,

Mi amor por ti no tiene límites ni temores.
Acepto tus imperfecciones con amor y compasión,
Porque en tus debilidades encuentro mi redención.

Eres mi refugio en los días oscuros,

Mi luz en los momentos más duros.
Tu amor me envuelve como un abrazo cálido,
Y en tus brazos encuentro el amor verdadero y sagrado.

No necesito razones ni explicaciones,

Sólo quiero amarte sin condiciones.
Eres mi todo, mi vida entera,
Y en cada instante mi amor por ti se acelera.
 A través de las tormentas y los desafíos,
Mi amor por ti siempre prevalecerá, sin desvíos.
Eres mi compañero de vida, mi eterno amor,
Y juntos enfrentaremos cualquier temor.

No importa lo que la vida nos depare,

Mi amor por ti siempre estará a tu lado, sin cesar.
Sólo sé que te amo sin condiciones,
Y juntos construiremos nuestras propias tradiciones.
- John M.
 Te Amo, Aunque Ya No Estés

En el silencio de la noche, mi voz susurra tu nombre,

Aunque ya no estés aquí, mi amor sigue siendo el mismo.
Atravieso los recuerdos, reviviendo cada instante,
Y en cada pensamiento, mi amor por ti se enciende.

Aunque el tiempo haya pasado y la distancia nos separe,

Mi corazón sigue latiendo con un amor que no puede desvanecerse.
Tu ausencia es una herida que nunca cicatriza,
Pero el amor que siento por ti nunca se desvanece, nunca se desliza.

Cierro los ojos y te veo, como si estuvieras aquí,

Tu sonrisa ilumina mi mundo, aunque ya no estés junto a mí.
Los momentos compartidos se aferran a mi alma,
Y en cada latido, mi amor por ti se calma.

Aunque ya no estés físicamente a mi lado,

Mi amor por ti no se ha desvanecido, no se ha apagado.
Eres parte de mí, en cada pensamiento y suspiro,
Y aunque no estés presente, mi amor por ti sigue vivo.

Las palabras no pueden expresar lo que siento,

Pero mi amor por ti trasciende el tiempo y el viento.
Aunque ya no estés aquí, mi amor nunca se irá,
Y en cada amanecer, mi corazón contigo estará.
 Te amo, aunque ya no estés, mi amor perdura,
En cada susurro del viento y cada estrella que fulgura.
Eres mi eterna inspiración, mi eterno amor,
Y en el rincón más profundo de mi ser, siempre estarás en flor.
- John M.
Dejaré Que Me Devore La Oscuridad
En el abismo de la noche, me sumerjo sin temor,
Dejaré que la oscuridad me envuelva, sin resquemor.
Mis pensamientos se desvanecen, como sombras en la penumbra,
Y me entrego al silencio, dejando que la oscuridad me alumbre.

Las luces se desvanecen, los colores se desvanecen también,

En este océano oscuro, encuentro paz en el vaivén.
Las sombras me susurran secretos, me susurran verdades,
Y me envuelven en su manto, en su eterna lealtad.

Dejaré que la oscuridad me devoré, sin resistencia,

Encontraré la belleza en su aparente malevolencia.
En cada sombra, encuentro un refugio, una fortaleza,
Y en la oscuridad encuentro mi propia grandeza.

La oscuridad me consume, pero no me consume por completo,

Pues en su abrazo encuentro la libertad, el renacimiento.
Dejo atrás las cadenas de la luz, las expectativas y el temor,
Y me sumerjo en lo desconocido, en lo que aún no puedo ver ni explorar.

En la oscuridad encuentro mi voz, mi esencia más profunda,

Me conecto con mis miedos, mis sueños y mi lucha.
Dejaré que la oscuridad me devore, pero no me consumirá,
Pues en su voracidad encuentro la fuerza para transformar.
 En la oscuridad, encuentro la verdad de mi ser,
Y aunque pueda asustar, no dejaré de crecer.
Dejaré que me devoré la oscuridad, sin titubear,
Pues en su abrazo encuentro la claridad, el renacer.
- John M.
Hasta Que Tú Me Vuelvas A Necesitar
En el silencio de la noche, espero paciente,
Hasta que llegue el momento en que me necesites nuevamente.
Mis pensamientos te envuelven, como un abrazo en la distancia,
Y mi amor por ti se mantiene, sin importar la circunstancia.

Cada día que pasa, mi corazón te extraña más,

Aunque el tiempo nos separe, mi amor no se desvanece jamás.
Estoy aquí, esperando en las sombras, listo para volver a brillar,
Hasta que tú me vuelvas a necesitar, hasta que vuelvas a confiar.

Puedes contar conmigo, en los momentos de alegría o dolor,

Seré tu refugio seguro, tu apoyo incondicional, tu amor.
Aunque ahora te encuentres lejos, mi amor no tiene fronteras,
Y estaré aquí, dispuesto a brindarte todo lo que tú necesitas.

Mis brazos esperan ansiosos, el momento de abrazarte otra vez,

De ser tu refugio, tu confidente, tu paz, tu fortaleza, tu ser.
No importa cuánto tiempo pase, ni los obstáculos que enfrentemos,
Mi amor por ti es eterno, y siempre a tu lado me mantendré, lo prometo.

Hasta que tú me vuelvas a necesitar, estaré aquí esperando,

Dispuesto a darte todo mi amor, sin ningún tipo de engaño.
No importa cuánto tiempo pase, ni las vueltas que dé la vida,
Mi amor por ti es constante, y siempre en ti confía.
Así que no importa cuánto tiempo tome, ni las distancias que nos separen,
Siempre estaré listo para ti, para cuidarte y amarte sin cesar.
Hasta que tú me vuelvas a necesitar, seré tu apoyo incondicional,
Porque mi amor por ti es eterno, y siempre será inquebrantable.
- John M.
 Vivamos El Momento
En este instante, dejemos que el tiempo se detenga,
No pensemos en el pasado ni en lo que vendrá después.
Abracémonos con fuerza, sintiendo cada latido de nuestro corazón,
Dejemos que el presente sea nuestro refugio, nuestra canción.

Enredados en un abrazo, perdámonos en la magia del ahora,

Sin preocuparnos por el futuro, sin mirar hacia atrás, sin demora.
Cada suspiro, cada caricia, cada palabra susurrada al oído,
Nos sumergimos en un mar de sensaciones, de amor compartido.

Vivamos el momento, sin temor a equivocarnos,

Dejemos que nuestras almas se encuentren, sin barreras ni engaños.
Cada mirada, cada sonrisa, cada gesto sincero,
Nos envolvemos en una danza de emociones, en un vínculo verdadero.

Olvidemos las preocupaciones, los problemas y el estrés,

Centrémonos en lo que importa, en nuestra felicidad y bienestar.
Disfrutemos de cada segundo, de cada instante de complicidad,
Vivamos el presente con intensidad, sin miedo a la vulnerabilidad.

En este momento, seamos dueños de nuestra propia historia,

Dejemos que el amor y la pasión sean nuestra guía, nuestra memoria.
Cultivemos la felicidad en cada encuentro, en cada experiencia,
Vivamos el momento con plenitud, con amor y con paciencia.
 Así, juntos, construiremos recuerdos inolvidables,
Llenos de risas, aventuras y momentos invaluables.
Vivamos el momento, sin importar lo que el futuro traiga,
Porque lo único que tenemos seguro es este instante, esta chispa que nos cautiva.
- John M.
 Y Solo Te Fuiste
Y solo te fuiste, dejando un vacío en mi corazón,
Sin explicaciones ni razones, sin ninguna explicación.
Me quedé preguntándome qué había pasado,
Por qué de repente te alejaste, sin mirar atrás, sin haberlo esperado.

Quedaron en el aire palabras sin decir,

Promesas quebrantadas, sueños por cumplir.
Me duele recordar los momentos compartidos,
Cuando éramos felices, cuando todo parecía haberse resuelto.

Intenté buscarte, traté de entenderte,

Pero solo encontré silencio y ausencia en mi mente.
Me quedé con el corazón roto, sin poder comprender,
Cómo pudiste marcharte sin siquiera quererlo entender.

Me pregunto si fui yo quien falló,

Si hubo algo que no vi, algo que no noté.
Pero la verdad es que nunca sabré la respuesta,
Solo me queda aceptar que te fuiste, sin ninguna promesa.

Aunque duela, debo seguir adelante,

Sanar las heridas y dejar de lado el desencanto.
Porque la vida continúa, y yo merezco ser feliz,
Aunque en mi corazón siempre quede un rastro de lo que fuimos tú y yo.
 Y solo te fuiste, dejando un vacío en mi existir,
Pero sé que con el tiempo aprenderé a vivir.
Aprenderé a cerrar ese capítulo y abrir nuevos caminos,
Aprenderé a amarme y a encontrar mi propio destino.
- John M.
 Me Hizo Mal Amarte
Me hizo mal amarte, eso debo admitir,
Pues entregué mi corazón sin pensar en sufrir.
Creí en tus palabras y en tus promesas de amor,
Pero al final, solo encontré dolor y desilusión.

Tu presencia fue un bálsamo para mi alma herida,

Pero también fue la causa de mi caída.
Me envolviste en un torbellino de emociones intensas,
Pero al final, me dejaste con cicatrices inmensas.

Cada momento a tu lado era un deleite,

Pero también fue una trampa en la que caí de lleno.
Me entregué sin reservas, sin dudar ni un instante,
Pero tú solo jugabas conmigo, sin importarte.

Me hizo mal amarte, porque te convertiste en mi adicción,

Y sin ti, me sentía perdido, sin dirección.
Me hundí en un mar de tristeza y desesperación,
Pero ahora sé que debo encontrar mi propia redención.

Aprendí la lección de amar sin perderme a mí mismo,

De no aferrarme a alguien que solo me causaba abismo.
Aunque me haya dolido, me hizo más fuerte,
Y ahora sé que merezco un amor sincero y verdadero.
 Me hizo mal amarte, pero ahora es tiempo de sanar,
De dejar atrás el pasado y de aprender a confiar.
No permitiré que una mala experiencia me defina,
Porque merezco un amor que me eleve y me ilumine.

Así que me despido de ti y de todo lo que fuimos,

Agradezco los momentos buenos, aunque hayan sido pocos.
Pero ahora es momento de seguir adelante y crecer,
Porque me hizo mal amarte, pero estoy listo para renacer.
- John M.
 Entre Matemática y Física
Entre fórmulas y ecuaciones, mi corazón se debatía,
Un amor matemático, con la física se entrelazaba.
Dos disciplinas distintas, pero en mi ser se unían,
Una combinación perfecta, que en mi mente surgía.

La matemática me enseñó a calcular y a medir,

Las probabilidades de un amor que no pude prever.
Mientras que la física me mostró las leyes del universo,
Y cómo los cuerpos en movimiento pueden causar un averso.

Pero en medio de estos conocimientos científicos,

Mi corazón se encontraba en un caos romántico.
Sumas y restas, fuerzas y movimientos,
Intentaba descifrar los sentimientos.

Ecuaciones complicadas, como el amor y el desamor,

Derivadas de emociones, sin solución ni valor.
Intenté resolver el problema, encontrar la respuesta,
Pero en este juego de números, me perdí en la maleza.

La matemática y la física me enseñaron mucho,

Pero en el amor, no hay teorema que funcione como un escudo.
A veces, las ecuaciones no tienen solución exacta,
Y el resultado es el dolor de una historia abstracta.
 Así que aprendí a aceptar que el amor es incalculable,
Que las leyes del corazón son impredecibles e inquebrantables.
Y aunque la matemática y la física me ayudaron a entender,
El amor es un misterio que no puedo resolver.

En medio de esta dualidad entre la ciencia y el amor,

Aprendí que no todo se puede explicar con rigor.
Y aunque aún sigo buscando respuestas en fórmulas y teorías,
Sé que el amor es un enigma que desafía todas mis leyes.
- John M.
Si nos volvemos a encontrar
Si nos volvemos a encontrar, querida,
quiero que sepas que no guardo rencor en mi vida.
Aunque me dejaste hecho pedazos,
los buenos momentos aún en mi corazón abrazo.

Nuestro camino se bifurcó, es cierto,

pero no quiero guardar ningún reproche en mi pecho.
A pesar del dolor que me dejaste al partir,
los recuerdos felices aún me hacen sonreír.

Tuvimos momentos llenos de risas y complicidad,

un amor que brilló con intensidad.
Aunque el destino nos separó en su camino,
guardo en mi ser los instantes que fueron divinos.

Aprendí tanto de ti, de lo que vivimos juntos,

crecí como persona en cada uno de esos puntos.
No puedo negar que me dolió el adiós,
pero valoro lo que me diste, sin ningún reproche atroz.

Si nos volvemos a encontrar en algún lugar,

espero que el pasado no nos impida avanzar.
Porque, aunque nuestras vidas tomaron caminos distintos,
los buenos recuerdos permanecen como tesoros infinitos.
Así que, si nos volvemos a encontrar algún día,
desearía poder decirte con alegría:
Gracias por los momentos que compartimos,
a pesar del final, en mi corazón aún existen.
- John M.