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79 AUTISMO TEMPRANO, NEURONAS ESPEJO, EMPATIA, INTEGRACION SENSORIAL, INTERSUBJETIVIDAD EARLY AUTISM, MIRROR NEURONS, EMPATHY, SENSORY INTEGRA- TION, INTERSUBJECTIVITY Juan Larban Vera** RESUMEN En este trabajo, el autor repasa brevemente las aporta- ciones recientes de las neurociencias, asi como de la psi- cologia y psicopatologia del desarrollo, mostrando que un didlogo es posible entre estas diferentes disciplinas, esperando que se abra camino un abordaje integrador del autismo temprano infantil. Hoy dia sabemos, gracias a los avances de a epigendmica, los recientes descu- brimientos sobre la plasticidad cerebral y las neuronas espejo, asi como los derivados del estudio de la neuro- zénesis cerebral, que el desarrollo psiquico y cerebral del ser humano es el resultado de la interaccién entre lo genético-biolégico-constitucional y el entomo psicoso- cial y socio-cultural en el que vivimos. PALABRAS CLAVE: Autismo, Integracién, Neuro- ciencias. Psicologia, Psicopatologia. ABSTRACT In this work, the author briefly reviews the recent con- tributions to neuroscience, as well as the psychology and the psychopathology of the development, showing that a dialogue is possible between these different disciplines and hoping that a pathway is opened to confronting early childhood autism in an integrative manner. Nowadays wwe know, thanks to the advances of epigenetics, the re- ‘cent discoveries about the cerebral plasticity and mirror neurons, as well as those derived from the cerebral neu- rogenic study, that the brain and mental development of the human being is the result of the interaction between the genetic-biological-constitutional and the psychoso- cial and socio-cultural environment in which we live. KEY WORDS: Autism. Integration. Neurosciences. Psychology. Psychopathology. NEUROCIENCIAS Y AUTISMO Sobre el autismo hay creencias difundidas y alimentadas por aspectos més ideol6gicos que cientificos que han logrado parasitar el pensamiento cientifico, impregnando la mentalidad de muchos profesionales de a salud mental, Creencias que habiendo arraigado en nuestra sociedad con Ja categoria de mitos, estén influyendo muy negativamente en la confrontacién adecuada del problema de los trastornos mentales, (incluido el autismo), y en su posible solucién, EI mito © creencia mitica consiste en atribuir a personas 0 cosas, una realidad de la que carecen, (Larbn, 2011). Uno de los mitos “cientificos” vigente hasta hace ‘poco, era el de que el proceso de maduracién orginica, (concepto biolégico) -en este caso del cerebro-transcurre por vias separadas y diferentes a las del desarrollo psiquico (concepto psicolégico evolutivo y relacional) + Psiguiatay Psieoterapouta de nfios, adolescents y adults, Consulta privada Direoién Postal: Pasje Castavi 3,1 2.07800 Ibiza. Islas Bale- ares. Teléfono Fax: 971 39 32 64, Correo eletnico: juan lrbanv@gmail.com Cuadernos de Peigulatta y Pscoterapia del Niko y de! Adolescente, 2012354,79-91 (© Sociedad Espafola de Psiguiatra y Psicoterapia dl nino del adolescents, ISSN: 1575-5967 80 —_Autismo temprano, neuronas espejo, empatia, integracién sensorial, intersubjetvidad del ser humano. Hoy dia sabemos, (gracias a los avances de la epigenstica, 0 mis bien de la epigensmica, los recientes descubrimientos sobre la plasticidad cerebral, asi como los derivados del estudio de la neurogenesis cerebral), que ambos conceptos son inseparables. ya que ef desarrollo psiquico y cerebral del ser humano es el resultado de Ia interaccién entre lo genético- bioldgico y el entorno psicosocial y socio-cultural en el que vivimos. Estos descubrimientos recientes de las neurociencias confirman la vie} i6n clinica de que cen gran medida, el desarrollo de una funcién, “hace”, el ‘6rgano que la produce. Es decir, los estimulos adecuados como por ejemplo los visuales, facilitan y potencian el desarrollo del érgano de Ia visién. Ast, es posible que, con un entomo proveedor de cuidados adecuados no solamente se facilite un proceso de maduracién biolégico y un desarrollo psicolégico y neuronal sanos, sino que también se pueda evita Ia aparicién de algunas alteraciones y enfermedades que se sabe hoy dia que no estén genéticamente predeterminadas. Desde que se ha conseguido el mapa genético del ser hhumano 0 su genoma, la genémica, (conjunto de cien- cias y téenicas dedicadas al estudio integral del funcio- namiento, la evolucién y el origen de los genomas), nos ‘muestra que los genes de un determinado genoma, (totali- dad de la informacién genética que posee un organismo en particular), nunca trabajan solos sino que trabajan en red, y ademés, interactuando entre ellos. Por otra parte tenemos fos avances logrados por la epigenémica, que estudia y describe al conjunto de interacciones existentes entre ef genoma de un determinado organismo y su en- torno que conducen a la expresién det fenotipo que son las manifestaciones visibles del genotipo (totalidad de la informacién genética que posee un organismo en particu- lar, en forma de ADN) en un determinado ambiente. Di- cho de otro modo; el material genético contenido en los gones, se activard, se expresaré, se manifestar,y se hard visible 0 no, en funcién de la interaccién con el medio. Es decir, la expresién genética o mas bien genémica, asi como su heredabilidad, tanto sana como patolégica, pone de relieve una vez més, la importancia de la relaci6n, asi como la influencia de los aspectos psicosociales y socio- culturales y por ende, el importante papel de la crianza y a educacién en el desarrollo del psiquismo y del cerebro humano. Desde 2003, 1 Proyecto ENCODE intenta dilucidar los entresijos del ADN secuenciado y crear un catélogo con todos los elementos funcionales que contiene el ge- noma, que cuando se mezclan constituyen la informacion necesaria para formar todos los tipos de células y érganos del cuerpo humano. Esta informacién ha ayudado a los cientificos a entender mejor cémo se regula la expresion de los genes, qué factores determinan que las proteinas se produzcan en las eélulas apropiadas y en el momento adecuado, y permitiré nuevos avances en la comprension de dolencias como la enfermedad de Crohn (del sistema inmunolégico, de origen desconocido). Los primeros resultados del proyecto ENCODE, (Enei- clopedia de los Elementos del ADN) la investigacion de mayor envergadura que en la actualidad se esta llevando a cabo en el campo de la genémica, proyecto en el que participa un equipo internacional de investigadores con participacién espafiola, nos ha permitido descubrir cémo el 80% de nuestros genes, llamados hasta ahora “genes basura” y también, genes silenciados porque no expresan st cédigo genético, permaneciendo inactivos en cuanto & la produccién de las proteinas especificas necesarias para Ja constitucién de cada 6rgano y el desarrollo de su fun- cidn, en realidad cumplen un importante papel actuando como un gran panel de control con millones de interrup- tores que regulan la actividad de nuestros genes y sin los cuales fos genes no funcionarian y aparecerian enferme- dades, “Nuestro genoma s6lo funciona gracias a los inter- ruptores: millones de lugares que determinan si un gen se enciende o se apaga. Hemos encontrado que una gran parte del genoma esti implicada en controlar euindo y donde se producen las proteinas, mas alld de simplemente fabricarlas” afirmé Ewan Bimey, coordinador del proyec- to ¢ investigador del Instituto Europeo de Bioinformati- cos de Hinxton (Cambridgeshire, este de Inglaterra), en una rueda de prensa celebrada recientemente en el Museo de Ciencia de Londres, (Diario de Ibiza, 05-09-12). El descubrimiento de la plasticidad cerebral nos mues- tra la capacidad del cerebro para estructurarse y conec- tarse en funcién de ta interaccién con el entormo. El concepto de plasticidad cerebral permite ver y compren- det las influencias que el medio ambiente ejerce sobre el cerebro, su constitucién y transformacién. El cerebro posee una extraordinaria plasticidad neuronal en cuanto a su conectividad y funcidn en todos los niveles de orga- nizacién. La plasticidad neuronal se refiere a los cambios que ocurren en la organizacién del cerebro en dreas neo- corticales y en areas relacionadas con la memoria como resultado de una experiencia. Una actividad del cerebro Cuadernos de Psguiaria y Psicoterapia del Nio y del Adolescente, 2012;58,79-91 (© Sociedad Espaiola de Psiquiatriay Psicoterapia del nifo y del adolescents, ISSN; 1575-5967 Juan Larbin Vera] asociada a una funcién determinada puede localizarse en ‘otra rea como consecuencia de una experiencia normal, de un dafio cerebral y/o de una recuperacién posterior. Este descubrimiento, permite relativizar la posicién de los que defienden que regiones determinadas del cerebro ejercen siempre unas determinadas funciones, Por otra parte, los recientes avances logrados gracias al estudio anatémico-funcional del cerebro humano nos permiten comprender que no solamente es modelable el desarrollo cerebral a través de la influencia ambiental sino que ademés, se ha descubierto que la produccién y regeneracién de las células del sistema nervioso central (neurogénesis) no es patrimonio exclusivo de la infancia y adolescencia como se crefa antes; ocurre en el adulto, y puede persistir en la vejez, Durante el desarrollo fetal el ser humano crea muchas mas neuronas de las que necesi- ta, por lo que las que funcionalmente resultan superfiuas mueren, Esta muerte neuronal puede aleanzar a entre el 25 y el 75% de las neuronas creadas. Lo que se ha visto que ocurre con el cerebro humano es el fendmeno llamado “apoptosis neuronal” que ha sido considerada como la muerte celular, programada genéticamente. Hoy dia se sabe que este fendmeno contribuye a la neurogénesis, através de lo que podriamos amar “poda neuronal” Es decir, as redes neuronales que no se utilizan durante mucho tiempo pierden su funcién y mueren, La desaparicién de redes neuronales no utilizadas se hace en beneficio de otras redes neuronales que se desarrollan més al ser mis utilizadas. Vemos que la estimulacién del entomo, segin sea la adecuada 0 no, puede facilitar 0 impedit no solamente el desarrollo psiquico de una funcién determinada en el nifio, sino tambien, el desarrollo de las redes neuronales encargadas de esa fumncién. El desarrollo del cerebro require de formas especificas «de experiencia para dar origen y promover el crecimiento de los circuitos neuronales involucrados en los procesos mentales tales como la atencién, la memoria, la emocién y la auto-reflexién. Es condicién necesaria la interaceién adecuada con los adultos cuidadores, para lograr el desarrollo de las estructuras nerviosas responsables de estas funciones en el nifio pequefi. AUTISMO, NEURONAS ESPEJO Y EMPATIA El descubrimiento de Ja existencia en el cerebro hu- mano de redes neuronales Ilamadas “neuronas espejo”, soporte biolégico de la empatia que es un concepto psi- cologico, y la estrecha interaccién entre ambos sistemas, cuyo buen funcionamiento es basico para el desarrollo de la capacidad de comunicarse y relacionarse con los demas, nos impide seguir pensando de forma disociada como haciamos antes ya que como estamos viendo, Io genético-biolégico-constitucional del ser humano se de- sarrolla en estrecha interaccién con lo psivosocial y so- ciocultural de su entomo. La investigacién en neurociencias ha puesto en eviden- cia que la capacidad de relacionarse y comunicarse con empatia con el otto, tiene su correlato anatémico-fsi- olégico en redes neuronales lamadas “neuronas espejo”, Rizzolatti, 1996; Rizolatti, 1998; Gallese, 2001), en alu- si6n a la relacién especular que se establece con el otro a través de la empatia, que seria la capacidad de ponerse en el lugar del otto sin confundirse con é1 Es como si el sujeto observador, pudiese vivir de for- ‘ma “virtual”, la experiencia del otto en ta interacci6n que mantiene con él. Gracias a esta capacidad, a la vez ncurolégica, (neuronas espejo), y psicolégica, (cmpatia), cl ser humano, en etapas muy precoces de su desarrollo psiquico, puede compartir la experiencia emocional y cognitiva con el otro asi como predecir y anticipar las in- tenciones y respuestas del otro, facilitando de esta forma, el ajuste y adaptaci6n reciprocos en la interaccién entre ambos. El acceso a la capacidad de compartir la experi- encia vivida con el oro, se ve asi enormemente facilitado ppor el desarrollo de Ia empatia que a su vez, de forma interactiva, permite un mayor y mejor desarrollo de las redes neuronales lamadas neuronas espejo y éstas a su vez, con su desarrollo, facilitan y potencian la empatia Ademés de las neuronas motoras que determinan Jo que vamos a hacer, esté el sistema de las neuronas espejo que al hacer un gesto, se activan también, dando al cuerpo la sensacién de haber hecho ese movimiento. Lo extraordinario de sus funciones es que el interlocutor atento a lo que yo digo puede captar no solamente el contenido de la informacién transmitida a nivel verbal y no verbal, sino también, el contenido consciente inconsciente. El interlocutor atento a lo que yo digo puede sentir tras las palabras to que siento y pensar To que pienso, El otto hace la experiencia virtual de participar en mi accién, Esta posibilidad y facultad, est frecuentemente ausente 0 poco presente y a veces, Cuadernas de Piguiiriay Picoterapla det Nioy del Adolescente, 2012;54,19.91 (© Sociedad Esptiola de Psiui _yPsicoterapa del niio y del adolescene, ISSN: 1575-5967 82 _Aulismo temprano, neuronas espejo, empatia, integracion sensorial, intersubjetividad también esti profundamente alterada en el nifio/a, con funcionamiento autista Este descubrimiento nos permite considerar la comu- nicacién y comprensién empstica como la base de toda interaccién facilitadora del desarrollo psiquico y cerebral del. ser humano. En 1996 cl equipo de Giacomo Rizzolatti de la Univer- sidad de Parma (Italia), estaba estudiando el cerebro de ‘monos cuando descubrié un curioso grupo de neuronas. Las eélulas cerebrales no sélo se encendian cuando el animal ¢jecutaba ciertos movimientos sino que, simple- mente con contemplar a otros hacerlo, también se vyaban, Sc les Hamé neuronas espejo 0 especulares. En un principio se pens6 que simplemente se trataba de un sistema de imitacién. Sin embargo, tos miltiples trabajos que se han hecho desde su descubrimiento, el tltimo de los cuales se publicé en Science, indican que las impl caciones trascienden, y mucho, el campo de la neurofi- siologia pura. El sistema de las neuronas espejo permite hacer propias las acciones, sensaciones y emociones de los demés. Su potencial trascendencia para la ciencia es tanta que el especialista Vilayanur Ramachandran ha llc~ gado a afirmar: “El descubrimiento de las neuronas es- pejo hari por la psicologia lo que el ADN por la biologia” Rizzolatti estuvo en Madrid para participar en el sim- posio EI Sustrato de la Sociedad del Conocimiento: El Cerebro, Avances Recientes en Neurociencia organizado por el Instituto Pluridisciplinar de la Universidad Com- plutense y por la Fundacion Vodafone. ‘Transcribimos a continuacién la entrevista que se le hizo a Giacomo Rizzolatti, neurobiélogo y descubridor Junto con su equipo de investigacién de las neuronas e3- pejo, en el periddico “El Pais”, el 19-10-2005, Pregunta. {Qué le parece el hecho de que se comparen las neuronas espejo con el ADN? Respuesta, Es tn poco exagerado, pero quiz Ramach- andran tenga razén porque el mecanismo de espejo ex- plica muchas cosas que antes no se comprendian, P. :Qué explica? R. Por ejemplo, la imitacién, ,Cémo podemos imitar? ‘Cuando se observa una accién hecha por otra persona se codifiea en términos visuales, y hay que hacerlo en tér- ‘minos motores. Antes no estaba claro cémo se transferia Ja informacién visual en movimiento, Otra cuestién muy importante es la comprensién, No s6lo se entiende a otra persona de forma superficial, sino que se puede compren- der hasta lo que piensa. Fl sistema de espejo hace precisa mente eso, te pone en el lugar del otro, La base de nuestro ‘comportamiento social es que exista la capacidad de tener ‘empatia e imaginar lo que el otro esté pensando. P. gSe puede decir que las neuronas espejo son el centro de la empatia? R. El mensaje mas importante de las neuronas espejo es que demuestran que verdaderamente somos seres 50- ciales. La sociedad, la familia y Ia comunidad son valores realmente innatos. Ahora, nuestra sociedad intenta negar- lo y por es0 los jovenes estan tan descontentos, porque no crean lazos. Ocurre algo similar con la imitacién; en oc- cidente esta muy mal vista y sin embargo, es la base de la cultura, Se dice: “No imites, tienes que ser original”, pero es un etror. Primero tienes que imitar y después puedes ser original. Para comprenderlo no hay més que fijarse en Jos grandes pintores P. Uno de los hallazgos més sorprendentes relaciona- dos con este tipo de neuronas es que permiten captar las intenciones de los otros {Cémo es posible si se supone que la intencién de algo esté encerrada en el cerebro del préjimo’ R, Estas neuronas se activan incluso cuando no ves la accién, cuando hay una representacién mental. Su puesta ‘en marcha se corresponde con las ideas. La parte ms im- portante de las neuronas espejo es que es un sistema que resuena, El ser humano esti concebido para estar en con- tacto, para reaccionar ante los otros. Yo creo que cuando la gente dice que no es feliz y que no sabe la razén es Porque no tiene contacto social P. Pero para que el sistema de espejo funcione es nece- sario que exista previamente la informacién en el cerebro que refleja, No es asi? R. En el itero de la madre se aprende el vocabulario ‘motor bisico, 0 sea que ya tenemos ese eonocimiento, el bisico, que es puramente motor. Mas tarde, al ver a otras personas, el individuo se sitia en su propio interior y comprende a los dems. La visién es la que proporciona él vinculo con el ott. P. :Hacia dénde irdn ahora sus investigaciones? R. Queremos estudiar las bases neuronales de la en patia emocional en animales. Me gustaria ver si las ratas, (Cuadernos de Psiguiatria y Poicoterapia del Nio y del Adolescente, 2012;54,79-91, (© Sociedad Espaiols de Psiquatia y Pscoteapia del no y del adolescente, ISSN: 1575-5967 Juan Larbin Vera 3 al igual que los monos en los que se han identificado ya varios tipos de neuronas espejo, tienen el sistema de es- pejo porque en ese caso, las podriamos utilizar para la in- vestigacién médica, porque los monos son animales de- masiados preciosos como para hacer este tipo de trabajos. P. ¥en humanos? R. Estoy convencido de que los trastornos basicos en el autismo se dan en el sistema motor. Estos pacientes tienen problemas para organizar su propio sistema mo- tor y como consecuencia no se desarrolla el sistema de neuronas espejo. Debido a esto no entienden a los otros, porque no pueden relacionar sus movimientos con los que ven en los demas y el resultado es que un gesto sim- ple es para un autista una amenaza Para G. Rizzolatti en el autismo hay un déficit en el sistema de neuronas espejo. La investigacién antes mencionada que culminé con el hallazgo casual de las redes neuronales lamadas neuro- nas espejo tuvo lugar entre las décadas de los afios 1980- 1990 y fue llevada a cabo por los investigadores, Giaco- ‘mo Rizzolatti, Leonardo Fogassi y Vittorio Gallese en la Universidad de Parma, en Italia. Localizaron un grupo de neuronas en la corteza premotora FS del mono y en érea PF parietal, que denominaron neuronas espejo, porque parecian “imitar”, reflejando en el cerebro del observador las acciones del otro, Investigaciones realizadas utilizando IRMF, es decir, cl «studio neurorradiolégico de imagenes cerebrales obteni- «das por Resonancia Magnética Funcional, comprobaron la existencia de sistemas neuronales similares en el ser humano. Estos se encuentran en la corteza frontal infe- rior, cerca del drea de Broca, regién del lenguaje. Las neuronas espejo se activan cuando el sujeto ejecuta una aceién con una meta determinada y cuando observa a misma accién realizada por otro (agarrar para comer), Se activa tanto cuando se visualiza como cuando hay una representacién de una accién, Al observar una accién he- cha por otra persona, se codifica en términos visuales, auitivos y sensoriales y se realiza en términos motores, Este sistema de neuronas espejo tiene la capacidad de proporcionar un mecanismo para comprender la accién, categorizarla, aprender por imitacién y 1a simulacién imitativa (por identificacién) del comportamiento de los demas. Estudios efectuados las vinculan con la compren- sién de objetivos e intenciones. No solo se entiende a otra persona sino que se puede comprender lo que piensa. Este sistema nos pone en el lugar del otro, es un sistema ue nos hace resonar emocional y cognitivamente con el otro. El sistema de las neuronas espejo esti implicado en el entendimiento de estados emocionales trasmitidos a través de expresiones faciales. La observacién de una cara expresando emociones activa las areas somatico- sensoriales que corresponden al observador. Estudios re- cientes sugieren la existencia de que este sistema permite la deteccién de las emociones y posibilita imitar-reflejar las emociones de quiénes nos rodean. De esta forma, y debido a que existe una red neuronal como esta, €8 po sible la observacién y deteccién de las emociones desde ‘muy temprano en la vida del ser humano. Este sistema revela cémo el cerebro es capaz de integrar conocimiento perceptivo con accién motora, para crear las representa- ciones internas de los estados intencionales y emociona- lesen los otros. Utilizamos el contenido de nuestra mente para entender lo que ocurre en la otra persona, Recientes hallazgos sugieren que la empatia radica en tuna simulacién mental o imitacién (més bien identifi- cacién) con lo que le ocurre a los otros. La percepcién y representacidn de ciertos estados emocionales del otro hhacen resonar estados equivalentes en nosotros y provo- can una mimica similar (“contagia”, “entona”). A través del mecanismo espejo, (“mirror matching mechanism”) es posible la comunicacién y la “lectura mental” de los demas. Este mecanismo especular, de reflejo, puede ser tun mecanismo general implicado en la regulacién del comportamiento emocional. En un articulo de la revista Nature Neuroscience del 2007, se firma que nuestro cerebro siente el dolor de los otros debido a la activacién de estas neuronas, cuando se observa a los otros suftir. Usando IRM funcional se determind que se activan las mismas zonas del cerebro, {a insula anterior bilateral (AD), a corteza cingular rostral, anterior (ACC), el tronco cerebral y el cerebelo, tanto si ‘experimentamos nuestro propio dolor como ante el dolor del otro. En ottos estudios realizados con IRMF se detectaron ‘emociones positivas y las estructuras cerebrales correspondientes con esta conducta, En un grupo de madres que miraban fotografias de sus propios hijos y Cuadernos de Psguiaria y Pscoterapia del Nito y del Adolescente, 2012:54,79-91 1© Sociedad Espatola de Psguiatea y Psicoterapa del nifio y del adolescent, ISSN: 1575-5967 84 —__Autismo temprano, neuronas espejo, empatia integracion sensorial, intersubjetvidad Jas de un niffo extrafo, frente al estimulo del hijo propio se observé la activacién de una red neuronal que incluye Ja amigdala, el cuerpo paracingulado anterior, la insula, el surco temporal superior y la corteza orbito frontal. Este fenémeno fue llamado “el efecto amor maternal o de apego matemo” y esta red se la denomin6, circuito de la deteccién de emociones positivas. Los estudios electroencefalogrficos de los sujetos con ‘rastomos del espectro autista (TEA) proporcionan algu- nos indicios sobre los aspectos funcionales del cerebro en esta patologia, Bl ritmo “mu” (onda eléetrica cere- bral visible en el electroencefalograma) puede ser reac- tivo (supresién mu) a los propios movimientos y a los ‘movimientos llevados a cabo por ottos. Se considera que estas reactividades estin relacionadas con la actividad de las neuronas espejo, Los sujetos con TEA muestran una supresién “mu” significativa a sus propios movimientos, pero fallan al reaccionar a los movimientos realizados por otras personas, Estos hallazgos apoyan la hipdtesis de un sistema de neuronas espejo disfuncional en los indi- viduos con TEA. Ademiés, la disfuncién de las neuronas espejo podria relacionarse con las alteraciones sociales y comunicativas, los déficit cognitivos y la alteracién de las habilidades de imitacién asociados con los TEA, (Palau- Baduell, 2011). tras investigaciones de Barén Cohen relacionan una deficiencia en la construccién y desarrollo de la “Teoria de la Mente” ¢ incapacidad de empatia, en un trastorno como el autismo, Estudios de neuroimagen han de- mostrado la existencia de un sistema neural subyacente a la “Teoria de la Mente”. El acceder a la Teoria de la Mente implica el desarrollo de la capacidad de compren- der las acciones de otros a través de Ia identificacién, Numerosos grupos estudian ahora las neuronas espejo. Se han encontrado como hemos visto, también en el hom- bre, y en casi las mismas Areas cerebrales que en los ma- cacos, aunque no con registros de actividad de una sola neurona, algo no factible en humanos, sino con téenicas no invasivas de registro de actividad cerebral (mediante electroencefalograma 0 resonancia magnética). Se sabe ya que estas neuronas se activan no sélo a través de es- timulos visuales, sino también auditivos. Por ejemplo, una neurona de mono que se activa cuando él mismo ras- ‘2a un papel, se activard cuando vea a una persona u otro ‘mono rasgar un papel, pero también cuando sélo escuche el sonido. Cuadernos de Psiguiar [© Sociedad Espa Por eso se ha postilado que una de las funeiones de este sistema podria ser ayudar a interpretar las acciones de los demas. También se ha visto que, dentro del sistema de neuronas espejo, algunas de las eélulas podrian estar cespecializadas en detectar intencionalidad, para predecit las acciones siguientes del sujeto observado. Y se ha analizado mucho la relacién del sistema con las emocio- nes, estudiando la actividad cerebral de sujetos mientras observaban 0 imitaban expresiones faciales y corpora- les asociadas a distintas emociones. Los resultados han mostrado la existencia de interconexiones entre el siste- ma de neuronas espejo y varias estructuras en el cere- bro profundo implicadas en las emociones, el Hamado sistema limbico, Ademés, como sefialan Marco lacoboni y Mirella Da- pretto, investigadores de la Universidad de California, (Los Angeles, EE.UU,) en un reciente articulo publicado en Nature Reviews Neuroscience, (lacoboni, 2010) “la actividad en toda la red de interconexiones entre neu- ronas espejo y estructuras limbicas aumenté durante 1a imitacién de las conductas, como se ha demostrado ha- biualmente en las dreas donde estén las neuronas espejo, al realizar otras acciones no relacionadas con la emociGn” ‘Tanto la capacidad de predecir intencionalidad como la de reconocer ¢ interiorizar el estado emocional de los demas son habilidades consideradas necesarias para la socializacién. De ahi la idea de un posible vinculo entre un sistema de neuronas espejo dafiado 0 poco desarrollado y el autismo, trastorno psiquico caracterizado por la tendencia hacia el aislamiento social de quien lo padece. «Lahipétesis de la relacién entre neuronas espejo y au- tismo ha sido desarrollada en profundidad sugiriendo que el sistema de neuronas espejo permite crearse un modelo del comportamiento de otras personas, a través de un me- canismo de representacién interna de estados corporales asociados a acciones y emociones», escriben lacoboni y Dapretto, Esta representacién interna proporeionaria una forma directa de experimentar lo que sienten los demi Esta presuncién se esti poniendo a prueba mediante distintos abordajes. Por ejemplo, un reciente estudio con resonancia magnética de Mirella Dapretto midi directa- mente la actividad del sistema de neuronas espejo en ni- fios mientras observaban ¢ imitaban expresiones faciales que reflejaban distintas emociones. «Los nifios con un espectro de autismo demostraban menos actividad en el 5 Psicoterapia del Nit y de! Adolescente, 2012;54,79-91 a de Psiquatriay Pscoterapia del no y del adolescete. ISSN: 1575-5967 Jum Larbin Vera 5 sistema de neuronas espejo en comparacién con los ni fios con desarrollo normal», explica Dapretto. «Es mas, la actividad medida durante las tareas en neuronas espejo de nifios con autismo se correlacionaba con el grado de gravedad del trastorno, medido con las escalas usadas ha- bitualmente en la clinicay. Estos datos apoyan la idea de que tun mal funcionamiento en el sistema de neuronas es- pejo es un problema importante en el autismo, afirma Da- pretto. Y sugiere, ademas, que el registro de la actividad de las neuronas espejo en tareas de imitacién o sociales, podria usarse como biomarcador del grado de profundi- dad del trastorno, (Pfeifer, 2007) Estos estualios no tienen s6lo un interés basico. Si hay tun defecto funcional en una estructura cerebral se plan- tea también la posibilidad de actuar sobre él. Una posible via, sugieren los expertos, es la imitacién-identificacién, «Las evidencias acerca del papel del sistema de neuro- nas espejo en el autismo, y los vineulos entre este mis- imo sistema y la “imitacién”, sugiere que ésta podria ser usada como forma de tratamiento efectivo en nifios con autismo», eseribe Tacoboni en su libro sobre las neuro- nas espejo, (Iacoboni, 2009). Este experto recuerda que existen ya estudios de comportamiento que apoyan esta idea. Un ejemplo de ello es un trabajo en el que un adul- to imitaba las acciones de un grupo de nifios, mientras que con el grupo control se relacionaba con ellos pero no hacia tarcas de imitacién; los nifios cuyas acciones cran imitadas mostraban una mayor tendencia a iniciar interacciones sociales en sesiones posteriores, en. com- paracién con el grupo de nifios que no habian sido “imi- tados” por el adulto, La investigacién del sistema de neuronas espejo no ha hecho mds que empezar. E1 equipo liderado por Caro- line Catmut, de la Universidad de Oxford (Reino Unido), ha descubierto recientemente que el funcionamiento del sistema de las neuronas espejo no es innato, y que puede ser alterado con un entrenamiento adecuado. Los autores cemplearon una técnica de estimulacién trans-craneal para analizar la corteza motora de voluntarios mientras mira- ban el video de una mano, Cuando los voluntarios vefan moverse el dedo indice, los investigadores pudieron ‘comprobar que la actividad en el misculo abductor de su propio dedo indice era mayor, y lo mismo ocurria en el dedo mefiique cuando este dedo se movia en la pantalla. Este fenémeno es atribuible a las neuronas espejo, aseguran Ios autores. Pero entonces, a la mitad de los voluntarios se les pidié que extendieran su dedo meftique cuando la imagen mostraba el dedo indice en movimiento, y viceversa. La otra mitad de los sujetos debian mover el mismo dedo que apareefa en pantalla. Tras los ensayos, los autores observaron un cambio en la respuesta espontinea a las imagenes (sin mover los dedos). Los sujetos que movieron el indice cuando en pantalla se mostraba el meiique y viceversa mostraban ahora ‘mayor actividad en los misculos del dedo distinto al que ‘veian, 10 que indicaria que la respuesta del sistema de neuronas espejo se habria revertido. Los investigadores concluyen con este estudio que las propiedades del siste- ‘ma no son innatas, sino que “pueden ser entrenadas a través de la experiencia sensorial y motora”. Este hallazgo implica que una interaccién social in- suficiente y las consiguientes experiencias sensoriales alteradas podrianinfuiren el desarrollo del sistema de neuronas motoras, por ejemplo, en nifios con autismo, sei sefilnn los investigadore, (Catmur, 2007). Estos descubrimientos esperanzadores en cuanto a la prevencién y tratamiento temprano del autismo infantil implican, que con intervenciones precoces y adecuadas en la interaccién entomo cuidador-bebé se pueda modifi- car el estilo interactivo autistizante, faciitando en el bebé Ja constitucién y el funcionamiento del sistema de las neuronas espejo y por tanto, la capacidad de comprensién y comunicacién empitica asociada asf como un adecuado ajuste interactivo con el otro, y consecuentemente, una mayor y mejor adaptacién e integracién social AUTISMO, EMPATIA INTERACTIVA, INTEGRACION SENSORIAL, INTERSUBJETIVIDAD, Y DESARROLLO PSiQUICO-CEREBRAL EI grado de empatia que tiene y desarrolla un sujeto determinado no es constante y depende ademas, de la Personalidad e historia del sujeto. La persona sana tiene en mayor 0 menor grado esa capacidad de empatia. Dé- ficits de empatia, sobre todo emocional mas que cogni- tiva, asi como de intersubjetividad, se dan en el autismo, y también, en trastornos psiquidtricos de base narcisista como ocurre con las personalidades psicosomiticas, las personalidades limite o fronterizas y las psicopaticas 0 caracteriales, también llamadas disociales o antisociales. Cuademos de Peiguiatria y Pricotorapia del Nio del Adolescente, 2012;$4,79-91 (© Sociedad Esptiola de Psiquistra y Psicoterapia dt ni dol adolescente. ISSN; 1575-5967 86 _Autismo temprano, neuronas espejo, empatia, integracién sensorial, intersubjatividad Para acceder a la intersubjetividad, es decir, lograr la comunicacién intersubjetiva con el otro percibido como separado y diferente de si mismo, es necesario conseguir previamente Ia integracién sensorial de los diferentes es- timulos que le Hegan al bebé a través de canales sensoria~ les diferentes en la interaccién con su cuidador. Ningin objeto puede ser experimentado como exterior 4 si mismo, mientras no sea aprehendido por al menos, dos modalidades sensoriales simultaneas, lo que subraya la importancia de la comodalizacién perceptiva entre el bbebé y su cuidador. Esta modalidad perceptiva compar- tida, permite Ia puesta en comin, mediante Ia sintoni- zacién afectiva, de ritmos interactivos que sean congru- entes y compatibles entre la presentacién y la retirada de estimulos entre el bebé y su cuidador, A su vez, este acuerdo perceptivo posibilita en el bebé, la reunién de las diferentes percepciones que emanan del objeto-sujeto relacional, facilitindole la percepcién transmodal, que permite el desplazamiento de lo percibido por un canal sensorial como el téctil de la succién a otro canal, el vie sual, con la capacidad de identificar visualmente la tetina habitual a través de las sensaciones tictles de suecién Todo esto, lo consigue el bebé cuando esti ensimismado en el momento de tomar el pecho o el biberén, y también, ‘cuando cierralos ojostras una interacciénemocionalmente intensa_con quien le cuida, Estos momentos de ensimismamiento con desvinculacién transitoria de la interaccién con el otro pero en presencia del otro, son fundamentales para que el bebé vaya consiguiendo la necesaria integracién sensorial de los estimulos que le llegan desde diferentes canales sensoriales para hacerse tuna imagen mental global (base de la experiencia que deja tuna huella corporal, neuronal y psiquica, fundamental ‘en el desarrollo de la capacidad de aprendizaje) de la realidad percibida. Para ello, tan importantes son las, palabras y caricias tranquilizadoras de la persona que ‘jerce la funcién matema ante un ruido inesperado que asusta al bebé -para que pueda integrar el ruido pereibido por el canal sensorial auditivo con el tono de las palabras, del cuidador, con su mirada, (canal sensorial visual), y con las caricias, (canal sensorial téctil), en un contexto no amenazante y tranquilizador-, como el permitirle que a través de su ensimismamiento pueda desarrollar la percepcién interoceptiva, (visceral, fundamental para la autorregulacién psicosomética y Ia integracién mente- cuerpo), asi como interiorizar ¢ integrar la experiencia vivida como algo interactivo-emocional, no amenazante y tranguilizador, en un contexto pereibido como no hhostil. De esta forma, el bebé va comprendiendo lo que estd pasando y viviendo, no solamente con respecto al exterior y/o interior sino también y fundamentalmente en su interaccién, primero emocional, y Inego cognitiva con el otro, captando su sentido, (antes de comprender su significado) y situandolo en su contexto, Como vemos, la comodalizacién perceptiva o acuerdo perceptivo, entre el bebé y su cuidador es un elemento esencial para lograr la integracién sensorial y como consecuencia de ello, el acceso a la intersubjetividad. La integracién y disociacién perceptivas estin presentes durante un tiempo en el bebé que se desarrolla normalmente; no ocurre lo mismo con el bebé autista que no puede lograr de forma satisfactoria la integracién sensorial, No hay acceso posible a la intersubjetividad sin comodalidad perceptiva, de ahi la importancia del ‘amamantamiento y de los otros equivalentes interactivos ‘como “situacién de maxima atraceién consensuada” entre el bebé y st cuidador. No hay comodalidad perceptiva posible sin Ia voz de la persona que ejerce la funcién ‘matema, la expresién de su rostro y su “holding”, como organizadores de esta comodalidad perceptiva, El concepto de intersubjetividad —segin Colwyn Trev- arthen, investigador briténico de las competencias del bebe y de sus primeras interacciones- implica un proceso en que la actividad mental, incluyendo la conciencia, motivacién ¢ intenciones, cognicién y emocién, es trans- ferida entre mentes. Se manifiesta como la capacidad de resonancia con sentimientos, conciencia y propésitos in- teligentes en a interaccién con los otros. Es transmitida especialmente por la cara, cuerdas vocales y manos, adap- tadas para transmitir de forma inmediata informacion vi- sual, auditiva o téctil sobre propésitos,intereses, emocio- nes y simbolismos activos en las mentes de los sujetos. En ella asienta el aprendizaje cultural, la creacién de la “realidad social”, de las creencias, los lenguajes, los ritu- ales, las tecnologias. La educacién esta enraizada en la intetsubjetividad preverbal y gestual. El didlogo humano, en el sentido lingiiistco, también descansa en ella La intersubjetividad primaria (didlogo interactivo madre-bebé) se activa muy pronto después del nacimien- to, dandose progresivamente el juego “protoconversacio- nal” Este término comprende tanto la sutil bisqueda de respuesta del nifio como la aceptacién por parte de los progenitores de que el bebé esta tratando de expresaral- Cuadernos de Psiguiatria y Pslcoterapia del Ni y del Adolescente, 2012;54,79-91 (© Sociedad Espaiola de Psiquiatriay Psicoterapia del nifo y del adolescents. ISSN; 1575-5967 Joan Larbin Vern] ain tipo de mensaje, Ciertos comportamientos del nifio son objeto de una interpretacién por parte de sus padres y toman asi un significado en el seno de los intercambios {que se inscriben entonces en el campo de una intenciona- lidad comunicativa consciente o inconsciente, El proceso de atribucién de sentido y significado a os comporta- mientos del bebé corresponde asf @ una transformacién gradual de un cierto némero de indicios en signos, gra- cias al trabajo psiquico de interpretacién de los adultos ue se ocupan del bebé. El ejemplo més clisico de este proceso es la transformacién de la sonrisa beatifica, que tiene valor de indice del confort interno del bebé, a ta sonrisa-respuesta, (sonrisa intencional o social) que tiene el valor de signo dirigido a un interlocutor. Subrayemos que esta transformacién no es posible sino gracias a la anticipacién matemna, descrita bajo el térmiino de ilusién anticipadora. Vemos que el trabajo psiquico de los cui dadores del bebé es esencial, en la medida en que per- mite al nifio poner en marcha sus propios procesos de simbolizacién, atribuyendo también sentido y significado 2 lo que vive en Ia interaccién con el otro. No es sino sracias a las intenciones interpretativas que quienes le cuidan tienen respecto al bebé que éste puede progresiva- ‘mente organizar las intenciones dirigidas hacia él Posteriormente se desarrolla una intersubjetividad se- ‘cundaria tendente a desarrollar una capacidad de compar- tir propésitos de accién con el otro. El lenguaje y otras convenciones simbélicas, desde esta perspectiva, en- riquecen la intersubjetividad, generando ilimitadamente significaciones y estrategias de pensamiento, pero sin constituir las bases del conocimiento en lo interpersonal, La intersubjetividad como formacién innata motivacional y primordial, esté ligada a estructuras limbicas y subcor- ticales cerebrales, que embriolégicamente son anteriores al desarrollo de Ia corteza cerebral, funcionando como reguladoras del desarrollo neural. De sus vicisitudes en el encuentro con el ambiente, donde en primer lugar estén Jos otros humanos, nace la capacidad de representarse a si mismo y a los otros, os sistemas motivacionales, el ac- eso al lenguaje en sus diferentes modalidades, asi como os_grandes avances posibles del ser humano, (Aiken, Ks Trevarthen, C. 1997; Trevarthen, C.; Aiken, K. 1994) ‘Trevarthen conceptualiza niveles progresivos de inter- subjetividad. Las tres facetas fundamentales de las mo- tivaciones y las emociones son el si-mismo, el otro, y el objeto Mientras que la “intersubjetividad primaria” se refiere la coordinacién del si-mismo y el otro, basada en correspondencias de forma, sincronia ¢ intensidad, la “intersubjetividad secundaria” incluye a un objeto y se refiere ala inter-coordinacin del si-mismo, el otro, y el ‘objeto, basada en el intercambio cooperative de gestos referenciales Aunque cierto tipo de conciencia del otro ests presente desde los comienzos de la vida extrauterina, es sobre todo hacia final del primer alo que una auténtica percepeién de si mismo y del otro se desarrolla. Daniel Stern ha ‘mostrado que el sentido de si mismo, presente desde el nacimiento, diferente del sentido del otro, desarrolléndose durante el segundo semestre, evolucionan hacia un sentido de si mismo con el otro, permitiendo de esta forma el acceso a estados mas complejos de la conciencia de si mismo y del otro La intersubjetividad y como consecuencia de ella la empatia, se activa y desactiva en funcién de la intencio- nalidad de uno misino y del otro asi como de la investidu- radel objeto de atencidn y del contexto. La desactivacién de la intersubjetividad que hoy dia se sabe tiene también tuna base neuronal, sirve para poner limites la empatia, evitando asi verse desbordado, inundado por el otto, y confundido con éL La empatia, necesaria para el desarrollo del ser hu- ‘mano como sujeto, con subjetividad propia, posibilita el acceso a la intersubjetividad, facilitando el acceso a la ccapacidad de reproducir en nuestro propio psiquismo los sentimientos, los movimientos, las intenciones 0 motiva- ciones del otto y también, tomando como base y vehiculo de transmisién las emociones, los pensamientos y repre- sentaciones asociados, sean conscientes 0 inconscientes, (Simas, 2008). Las dificultades persistentes de comunicacion y ‘comprensién empiticas, asi como de expresividad emocional por parte del cuidador hacia el beb€ objeto de sus cuidados, suponen para este iltimo un serio y a veces insuperable obsticulo para lograr el acceso a la comunicacién intersubjetiva con el otro. La investigacién yelestudio deestas dificultades de comunicaciénempética por parte de los padres hacia su hijo, tanto en el periodo prenatal como postnatal, podria proporcionamos unos signos de alerta muy valiosos y titiles para Ia deteccién primaria y secundaria del trastomno autista temprano, Cuadernos de Poiguiatria y Pricoteropa del Niko y del Adolescente, 2012:54,79-91 (© Sociedad Espaola de Psiquiatris y Psicotrapia dt nino y del adolescente, ISSN: 1575-5967 88 __Autismo temprano, neuronas espejo, empatia, ntegracién sensorial, intorsubjatividad asi como para modificar precozmente y terapéuticamente ciertos estilos interactives que constituyen factores de riesgo evolutivo del nifio hacia un posible funcionamiento autista, Se podria decir que la capacidad de intersubjetividad -que responde a una necesidad psicologica y bioldgica del ser hu- mano-, permite regular la intimidad del sujeto en su relacién ‘con el otro y reforzar el sentido de pertenencia grupal. No es solamente diddica sino también grupal como muestran Jos estudios sobre el hecho de compartir los afectos y ex- periencias en a familia, (Stem, 2005; Fivaz-Depeursinge, 2005). Sino hay experiencias compartidas con el otro, con 10s otros, si no hay encuentro interactivo empatico acompa- fiado de separacién diferenciacién con el otro, no hay po- sibilidad de desarrollar la capacidad de establecer una rel- acién intersubjetiva con el otro, es decir, de relacionarse con la subjetividad del otro, de los otros, desde nuestra propia subjetividad. El bebé tiene que asumir una vez mas en este aso, otra curiosa paradoja en el sentido de Winnicott: “Para separarse hay que ser uno, para ser uno hay que separarse”” (Winnicott, 2002), En la balanza interactiva, tanto los excesos de empatia que Hlevan a una fusién-confusién con el otro, potenciando la dificultad de poder diferenciarse y separarse, como los defectos de empatia, que ocasionan desencuentros interactivos trauméticos, dolorosos y frustrantes, que cuando son frecuentes, repetitivos, duraderos, y no reparados, ponen ‘en marcha como proteccién y defensa -por ambas partes, de Ia interaccién- mecanismos de desconexién emocional y conductas de evitacién de la relacién y comunicacién, suponen para el miembro mas necesitado y dependiente de la interaccién, un factor importante de riesgo evolutivo hacia un funcionamiento autista, En el primer easo de exceso de empatia, el exceso de es- timulacién inadecuada por parte del entorno cuidador (es- timulos que tienen que ver més con el mundo interno de quien tos emite que con el de quien los recibe), la persona necesitada de su ayuda puede sufrir un intenso malestar generado por la confusién, la desorganizacién y desborda- miento que ello le ocasiona, La necesidad biologica y psicolégica que tiene el ser hu- mano de un espacio-tiempo de soledad, de suefio, de des- canso relacional, de ensimismamiento, -necesaria para la autorregulacién y equilibrio psicosomaticos, para Ia unién menté-cuerpo, asi como para Ia integracién sensorial de los estimulos (internos y extemnos) percibidos, y para a con- siguiente regulacién de la interaccién con el otto- puede verse perturbada, y convertise en una necesidad de desvin- culacién duradera, de aislamiento con retirada relacional y ‘emocional, en personas muy sensibles-, con respecto al otto participe de la interaccién, “La necesidad de estar solo tiene fundamentos psicolégicos y biolégicos y es vital para el ser humano, Si la necesidad de un espacio de soledad y de un lugar de paz, no existiese, el bebé, que tiene tan poca memo- ria del otro, no tendria ningin medio de tranquilizarse sea en el stem 0 despierto. Tendria todo el tiempo la impresion de impotencia y estaria constantemente reclamando al cui- dador. En lugar de eso, la naturaleza nos ha hecho capaces a la vez de tejer vinculos sociales y de estar solos. El amplio tiempo de suetio sin interrupcién que necesitan los bebés, y que queda como necesario a lo largo de ta vida, constituye una proteceién natural de la necesidad de soledad. Incluso en momentos de vigilia, la necesidad de desvinculacién del bebé es evidente” (Buchholz, 2000). En el segundo caso de defecto de empatia, de déficit de aporte deestimulos adecuados y necesarios paracel desarrollo como puede ser el caso de una desconexién emocional duradera y tepetitiva del cuidador principal, la necesidad biolégica y psicolégica de establecer una vinculacién de apego seguro (Bowlby, 1998, 1972) -que regula la curiosidad y el miedo- con el otro que le cuida, corre el riesgo de no producirse o de hacerse muy débilmente en personas muy sensibles y dependientes del otro, con Io cual, el miedo inhibirfa la curiosidad exploratoria natural del nifio. La retirada relacional y emocional de la interaccién con el cuidador tendria como objeto en Tos casos mencionados, el protegerse de los efectos traumaticos ocasionados por el suftimiento no asimilado por el otro y del otro, asf como defenderse del suftimiento generado por los desencuentros interactivos duraderos y repetitivos vividos, mediante con- ductas de evitacién y rechazo de Ia interaccién, (mirada, ct- expo, suefio excesive) buscando refugio compensatoria en la autoestimulaci6n sensorial y en el suefo, Danicl Stem, profesor honorario de Psicologia de la Universidad de Ginebra, profesor adjunto del departamento de Psiquiatria de la Escuela de Medicina de la Universidad de Comell y conferenciante del Centro de Docencia ¢ Investigacion del Psicoandlisis de la Universidad de Columbia, y. destacado investigador de la interaccién temprana padres-bebé, nos muestra que el bebé funcions como un organismo individualizado desde el nacimiento y disponiendo de tres sistemas inmediatamente operacionales, Cuadernos de Psguiairiay Psicoterapia del Nio y del Adolescente, 2012;84,19-91 © Sociedad Espaiola de Psiguiatsa yPsicoterapia de no y del aolescente, ISSN: 1575-5967 Juan Larbin Vera 1 saber, la pervepcién, Ia memoria y la actividad de representacién. La construccién de los modelos de apego por parte del bebé, se basa en la puesta en marcha de Jo que Stern Mama representaciones de interacciones generalizadas on el seno de las cuales, Ia ausencia, la diferencia, y la separacién, ocupan un lugar central, (Stern, 1978, 1991, 2002). El bebé, muy tempranamente, todo vabien en su desarrollo-es capaz de captar el estilo interactivo de su cuidador de referencia, diferencidndolo del de otras personas de su entomo, y ajustarse a ese estilo interactive. Para lograrlo, el bebé, extrae de sus diversas experiencias interactivas una especie de media, de resultante ficticia, jams cumplida como tal, pero sin embargo, profundamente inscrita en su psiquismo como una especie de abstraccién del estilo interactivo de sus cuidadores de referencia, si entendemos bajo el término de abstraccién una actividad de extraccién de constantes. Después de cada encuentro interactivo efectivo en su realidad externa, el nifo, mide de alguna manera la distancia existente entre lo que él vive en ese instante y la representacién dinémica y prototipica que se ha construido del adulto, distancia que le informa acerca del estado emocional de éste, -segin las modalidades de concordancia afectiva o de armonizacién de afectos- remitiéndole de hecho a la cuestin del tercero, es decir “al otro del sujeto-objeto relacional” La forma como la madre, presente en la interaccién con su hijo, contiene al padre en su pensamiento como un tercero, modula en cierto sentido, su estilo interactivo. LA DETECCION DEL PROCESO AUTISTICO EN EL BEBE, Para una adecuada y eficaz deteccién del proceso in- teractivo autistizante y defensivo-autistico del bebé, en ‘su primer afio, o antes de los 18 meses de vida, y cen- trandonos en los factores de riesgo interactives entre el bebé y su entomno cuidador, no podemos basarnos en los criterios diagndsticos de las clasificaciones internaciona- les como el DSM-IV o CIE-10, itiles para detecciones y diagnésticos mas tardios. La referencia a utilizar para la deteccién y diagnéstico tempranos tendria que ser a mi juicio el desarrollo de la capacidad -por parte del bebé- de acceder a la intersubjetividad, es decir, de establecer relaciones intersubjetivas con el otro cuidador y por ex- tensién, con su entorno. Esto supone que el bebé, gracias a.una interacci6n facilitadora de dicho proceso de comu- nicacién y relacién intersubjetiva pueda constituirse pro~ gresivamente como sujeto, con su propia subjetividad, y siendo capaz de interactuar progresivamente con el mun- do subjetivo del otro a través de su propia subjetividad. Actualmente, el autismo es considerado como un con- junto de condiciones que perturba en primer lugar el de- sarrollo de la comprensién interpersonal y las acciones cooperativas con el otro, (Volkmar, 2003). Las investiga- ciones que se estin realizando actualmente sobre el au- tismo temprano del bebs, algunas de ellas basadas sobre el estudio de filmaciones familiares antes del diagnésti- 0, de cuyos resultados con este método han hecho una revision exhaustiva Palomo y colaboradores, (Palomo, 2006), asi como el estudio de la literatura reciente sobre los bebés en situacién de riesgo autistico, (Zwaigenbaum, 2005) demuestran que la falta de relacidn intersubjetiva (compartir la experiencia vivida en la interaccién con el ‘tro) es el mejor indicio para prevenir precozmente el au- tismo de los nifios. Los iltimos descubrimientos sobre el proceso de maduracién biolégica del cerebro a partir del nacimiento ¢ incluso antes, hacen pensar que en el cas0 del autismo, las dificultades intersubjetivas han impedido la creacién de conexiones normales en Ia red neuronal compleja cuyo desarrollo depende especialmente de la experiencia, El autismo temprano del bebé estaria caracterizado por dificultades primarias en la habilidad para implicarse en interacciones que impliquen sefiales emocionales, gestos motores, y acciones comunicativas dirigidas ha- cia los otros, pudiendo considerarse por tanto como la consecuencia de un trastorno de la intersubjetividad pri- ‘maria (interaccién basada en cl didlogo cuidador-bebé) y secundaria, (interaccién cuidador-bebé basada en la ‘atencién compartida hacia un objeto extero), (Muratori, 2008, 2009, 2012). HACIA UNA COMPRENSION INTEGRADORA DEL AUTISMO Desde hace varios afios observo con preocupacién cémo por cuestiones ideolégicas, muy alejadas del pensamiento y actitud considerado cientifico, se confunden las consecuencias con las causas en el caso de Ia investigacion etiolégica o causal de los trastornos, rmentales. Los importantes descubrimientos que se estén haciendo en el campo de las neurociencias son interpretados “interesadamente” por un sector de los profesionales de la salud mental que se proclaman portadores (con actitud intolerante y excluyente de lo diferente) de la “verdad cientifica”. Esta tendencia a la sacralizacién de la ciencia leva a un cientificismo en el Cuadernos de Psquiariay Pscoterapa del Nio y del Adolescente, 2012;54,79-91 (© Sociedad Espatiola de Psguiatra y Psicoterapa del nito y del adolescent, ISSN: 1575-5967 90 _Autismo temprano, neuronas espejo, empatia, integracién eencoral, intersubjetvidad que la ciencia asi concebida pasa a ser un dogma, sus, divulgadores los nuevos sacerdotes, y sus resultados, la tinica esperanza, (Peteiro, 2010). Del imperialismo de lo psicoldgico, se esti pasando en los iltimos aiios, a través de un movimiento pendular a los que el proceso hist6rico nos tiene acostumbrados, a un imperislismo de Io biolbgico, Estudios experimentales muestran la atraccién seductora de las explicaciones neurocientificas, es decir, su magnetismo. Se ha visto que explicaciones irrelevantes se juzgan més favorablemente si contienen Jjerga_neurocientifica. Independientemente del estatus ientifico y de su relevancia, las explicaciones neurocientificas influyen en la gente, més alla de lo que la evidencia puede sostener, (Pérez-Alvarez, 2011 a). La ‘cultura popular ha asumido el cerebrocentrismo como algo natural y Ia divulgacion neurocientifica alimenta tha tendencia ignorando que la plasticidad cerebral, segiin la cual el cerebro es capaz de modificarse en funcién de la experiencia, muestra que més que de las, neuronas, dependemos de la conducta y de la cultura, (Pérez-Alvarez, 2011 b). La confusién interesada y alejada del pensamiento ntifico se manifiesta por ejemplo, interpretando que un descubrimiento “X”, que muestra a través de la reso- nancia magnética u otra téenica de neuro-radio-imagen, que algunas regiones cerebrales tales como el Lébulo ‘Temporal Superior, (LTS) -de adultos o niios ya de cierta edad con funcionamiento autista-, presenta alteraciones anatémicas 0 funcionales, es un claro e inequivoco signo de que la causa del autismo es de etiologia orginica 0 genética, excluyendo la importancia de la interaecién de To genético-constitucional con el ambiente que incluye lo psico-social del ser humano. Esta actitud, omite el hecho de que en el momento de la investigacién, y dada Ia edad del colectivo investigado, las perturbaciones precoces en Ia interaccién entomo cuidador-bebé ya han podido al- terar, tanto el proceso de maduracién del cerebro y del sistema nervioso central, como el adecuado desarrollo de sus multiples y complejas funciones, asi como el proceso de constitucién y desarrollo del psiquismo temprano del nifio, Golse y Robel, en un interesante articulo a propo: to de la investigacién en psicoandlisis y abordando el de~ bate entre el psicoandliss, la psicopatologia cognitiva y las neurociencias, nos muestran que el I6bulo temporal superior del cerebro se encuentra hoy dia en el centro de las reflexiones en materia de autismo infantil, trastomo Psicopatolégico que representa el fracaso del acceso a Cuadernos de Priguiatria y Peicoterapia del la intersubjetividad con la imposibilidad de integrar el hecho de que el otro existe en tanto que otro, (Golse, 2009), Los trabajos de investigacién de los cognitivistas nos han mostrado que un objeto no puede ser percibido como exterior a si mismo si no es aprehendido a la vez por al ‘menos dos canales sensoriales, (Streri, 1991, 2000). Este proceso de acceso a la intersubjetividad parece implicar al lébulo temporal superior del cerebro humano debido a las diferentes funciones que en él se encuentran localiza- das; reconocimiento de los rostros, (gyrus fusiforme del LTS) reconocimiento de la voz humana, (surco temporal superior del LTS) analisis de los movimientos del otro (ona occipital del LTS) y sobre todo, la articulacién de los diferentes flujos sensoriales que emanan del objeto- sujeto relacional (surco temporal superior del LTS) per- mitiendo que éste pueda ser percibido como exterior a si mismo. En el momento en que el abordaje psicoanalitico y el cognitivo (teoria de la mente) se juntan para considerar la intersubjetividad como el fruto de la integracién del flujo sensorial percibido que proviene del objeto-sujeto relacional, estudios recientes de neuroimagen cerebral revelan anomalias anatémicas y funcionales del 16bulo ‘temporal superior en los nifios de cierta edad y en adultos ‘con funcionamiento autista. Un didlogo es pues posible centre estas diferentes disciplinas, esperando que se abra ‘camino un abordaje integrador del autismo infantil en el ‘cual el l6bulo temporal superior podria ocupar un lugar central, no como el lugar de una hipotética causa primaria del autismo, sino como un eslabén intermediario y como reflejo del funeionamitento autistico temprano del nifio, CONCLUSIONES A través de este breve recorrido por las diferentes di ciplinas procedentes de Ia genética, de la neurobiologia del desarrollo, asi como de la psicologia y psicopatologia evolutivas, he intentado mostrar que el modelo relacional de comprensién y abordaje del autismo temprano infantil nos puede ofrecer una perspectiva integradora, siempre y ‘cuando las diferentes interveneiones tempranas utilizadas para su deteccién, diagndstico y tratamiento, incluso si sson de tipo instrumental, se integren en la dindmica rela- cional subyacente io y del Adolesceme, 2012:84,79-91 (© Sociedad Espariola de Psiquiatia y Psicoterapia del nfo y del adolescent. 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