Está en la página 1de 136
LOUIS PROTO CURACION POR LA MENTE Use su mente para curar su cuerpo BOLSILLO~} EDAF Indice Pgs AGRADECIMIENTOS -...2..62006c00c00006 UL PREFACIO ... ins we B NOTA DELAUTOR ......- 18 PROLOGO de Louise L. Hay ..sssseesseeree2 17 INTRODUCCION settee 2 PriweRa are: ENFERMEDAD 1 1. Lanaturaleza de la enfermedad ....20.0.6, 35 2, Negatividad y enfermedad 35 3, Energia y enfermedad eausesesese 71 4, El significado de la enfermedad... 85 ‘ ‘SeOUNDA PARTE: CURACION: 5. Antes de comenzar 7 6. Alive tensiones 101 17. Desintoxicar el cuerpo 211 8. Alimentar el sistema inmunolgico 137 9. Blevar la energéa vital 149 10. Deshacerse de lo negativo sesgapire 171 10 _mrnopucciON Pas. 1 Afirmar lo positivo 181 12, Viswalizar Ia salud y un bilan futuro... 19% 13, Amamos a nosotros mismos cada vez més ..- 201 14, Escuchar a nuestro ser interior... we 25 Tencea parte: BIENESTAR 15, Estarbien 249 16, Aceptar nuestros sentimientes y manifestaries . 273 BIBLIOGRAF{A swsenai 283 APENDICE: CITAS ¥ DIRECCIONES ........ 285 Agradecimientos UISIERA DARLAS GRACIAS: Pat Pilkington, cofundado- ra del Bristol Cancer Help Centre, por haberme alent ‘doy apoyado, y por haberme dejado citar una de sus ertas dirigides a mi a Louise Hay, por haber sido una fuente cconstante de inspracin; a Caroline Myss, por haberme des- cubierto una forma completamente nveva de mirar la enfer- ‘medad, y haberme hecho reir con ganas durante este proce: $0; a Martin Brofman, por haberme permitido usar genero samente su gréfico de los chakras y haberme ensefado a courarme a través de los mismos; a Gabrielle Pinto, por hhaberme aclarado los puntos ms sutiles de la homeopatia; a Tsabel Maxwell Cade, por los gréficos que muestran los ‘esquemas de las ondas ceebrales alfa y beta; al Bach Centre de Inglaterra, por haberme dejado amablemente Ia publice cin de los Bach Remedies; y ls siguientes editores, por Ihaberme permitdo citar sus libros: Century Hutchinson (EI ‘amor, la medicina y ls milagros, de Bernie Siegel, y Elpro- ‘gram Bristol, de Penny Brodin); Gateway Books (Maxima Jnmmunidad, de Michael Weiner; CW Daniel Company Ltd, (Ca energia sui, de John Davidson); Bantam Books Inc. (Wolver a estar bien, de Cal Simonton, Stephanie Mathews- ‘Simonton y James L. Creighton); Arkana (Autocuracin: Mi vida y mi visién, de Meir Scheider). Prefacio NDIA, BSTANDO SENTADO EN MI JARDIN, al ado de Ia ps ina (no una piscina de nada, sino un bonito y peque= fo estanque para peces), mientras pensaba en la manera de estructura este libro me sentia muy desanimado por la can= tidad de mis apuntes, me encontré con una observacién que hizo Simon Martin en su prélogo al libro de John Davidson, Energta suil, Decia ash: ‘Nunca hemos endo acceso como ahora a tanta infor- imacién sobre el fucionamiento de nuestro cuerpo y de ruesra ment... Ahora tenemos datos masque suficientes pare transforma totalmente nuestro modo de vida, nesta. falud ye planeta que nos sstene, para conseguir eta evo. lucid elevada para aque reo que estarnos hethos. El pro blema dela gente no es a fel de informaci: ea fala de alguien que sepa snttisar las grandes centidades de informacion que tenemos, sumarlas y después sinplificar las para los medioe de comnicacin» (Las cusives son. mi) Gracias, Simon, por estas palabras que han trnsformado- ni trabajo en un trabajo de amor. ¥ muy a propiito, ya que. encestoconsise, en el fondo, curarse a s{ mismo. Nota del autor 18 EsTe Linko se emplean afimaciones y visualizaco- nes, Si usted no las ha practicado antes, puede que le ‘sea itil paar alas pias 181-189 después de ler Ia into duce. Debo recalcar que la informacién dada en ese libro no pretende de ningin modo susituir el tratamiento impuesto ‘por un prefesional de la medicina. Es més bien una forma de compartir con usted las experiencias de ottos enfermos, f veces ruy graves, y que estin encontrando una franca ‘mejorfa, yen muchos casos Ia remisién © curacién de sus enfermedades, Han legado a ello por medio de la autocura- cién, en unién con su tratamiento médico. Sumédico debe- ‘a estar informado de que usted est intentando ayudarie en su propio proceso curativo, para aumentar I eficacia delta tumiento que le haya dado o para minimizar sus efectos secundarios, Bn caso de dudas, hay que consular al médico. Prélogo de Louise L. Hay Cue Dis ote, uno de mis etre, me pide que escribiera un prologo para La curacién por la mente, he 4e confesar que no me entusiasmé demasiado. Debido« mis conferencias, a mis propios proyectos de redaccién, y a la labor daria de drigir una editorial, me queda poco tiempo para ler un libro, y no digamos nada para eseribir un pro Jogo para un libro del que no sé nade, Sin embargo, Dan no me lo pidié asf de golpe. Con ‘mucha prudencia, dej6 el manuserito encima de mi mesa, donde sabia que yo lo ibaa coger enseguda, porque no me sista tener Ia mesa desordenada, Poco después, esa misma tarde, empecé a hojear el mac ‘nuserito —al principio con rapidez, después mis despacio.. ‘cada vez més despacio, hasta que empecé a leerlo palabra Por palabra. Louis Proto ha escrito in libro maravlloso ‘nformativo para toda persona inteesada en los principios e la autocuracin. jHa hecho una Inbor de busqueda y métodos altemativos de curacién y los he reunido er un libro magnifico! ¥ ahora aqui estoy escribicady el prologo. He dicho muchas veces que soy una mujer sencilla con ‘un mensaje sencillo: émate a ti mismo, sana ta vida. Cuando ‘alguien actde a mf con un problema, cualquiera que sea, s6lo hay una cosa que siempre le recomiendo: dmate a ti 18 (CURACION POR LA MENTE iy are PH tos mcpaos Yt nrtnmoe iy Ce soot dh teste te > pores fer cone mn ek Yee I Tepe decoy pecan a rode peso mila tye po on are Se eer ne snd dt (manne snp x yay ele) 8 Came pode bce ence? En piner gare que nunca cs demasido are pata emperors «nomen mismo a como cas Saale gio Ames monte mins sign tant ccachar oqo noe dice met cep, Gund then cao et cfsno aoe no gs gov mal; hay algo que hemos descuidado y a nosotros nos Conesponde mvrgar Io que hae Tog haga fa pore ecoper S ‘imc ne dagnoicron wn fast de agin, hie lo que nel manoface on na stain ee Op ice soe eps de aber exert yn io, aber endo n ctor de habe ado una see concen Despts de tanuliamns enpecé a ver mi ener como mn opr de demtene yf mi gi ttrocuie finsenn. He cori oe cue Pb thecl cre cs na casedo por afd go qe Be pomameci af duane moco tempo hasta gue ‘lent empl evr cep Sabian qo coef pcea devia psd douse ony sxe Ie Essigit utente fn rn tao Coste a mi medio pra. qs me sun men do sempoy empend un impontsino vi vie ha elimi demi ism sé vain bolas y ome feos os tos que habia selene. ef ine fei bari hans bose elma Leto PROLOGO 19 ‘cuanto pude sobre la materia, despnés me pase a explorar Jas terapias que sab que me iban a beneficiar ms, Trabajé ‘on un experto en reflejos del pie, con un dicts yun espe- Cialista de colon, Encontré un buen terapeuta que me ayudé ‘a descargar mi enfado golpeando almohedasy gritando con ria CConforme iba creciendo mi inerioridad, yo me daba ‘venta cada vez ms de las quejas que habia Nevado dentro durante tanto tiempo. La culpa, poco a poco, fue convitgn- ‘dose en compasién y mi cincer desapareci6, Al cabo de seis ‘meses, mi médico confirmé lo que yo ya sabia, Que ya no tenia céncet Habja elegido la altemativa corecta para mi. Hoy por hoy, Ia gente viene a peirme una terapia que funcione para su siuaci6n conereta de sald. ‘Yo puedo dar consejos y explicarclaramente lo que ha funcionado conmigo, pero al final cada persona tiene que asumir su propia responsabilidad y saber que la slterativa ‘que ha elegido es la mejor para ein. [La medicacién es una forma maravillosa de conectar con ‘nuestra interioridad y hallarrespuestas a las preguntas que ‘buscamos. Sinos toméramos la molestia de escuchamos por dentro més a menudo, no tenemos ni idea de lacantidad de problemas que podirfamos resolver por nosotrs mismos. En La curaci6n por la mente, Louis Proto faclita« los lectores los instrumentas que necesitan para levara cabo su propio viaje al interior. La meditacién, la vsualzacién, la Aesintoxicacién, los complejos vitaminicas, el masaje, la reflexologfa, la acupuntura, la acupresin, los remedios de la flor de Bach, as afirmaciones positivas el tabajo con los ‘chakras y, por supvesto, mi remedio favorit, amamos a ‘nosotros mismos: todas estas cosas estin escrapulosamente ‘epresentadas en su texto. Lea las diferentes teapias que tiene a su disposicién y averige cudles son ls que més le me ‘CURACION POR LA MENTE. cenvienen, Usted sabe cules son. Limitese a escuchar esa vececita que estf dentro de su cabeza y haga lo que le dice, ‘Busque, busque, y no pare de buscar! ‘Recuerde que no hay nunca una sola manera de hacer alzo. Yo he Hlegado muchas veces a la conclusién de que ‘hay muchos radios que conducen al centro de la rueda>. Lo mismo opino de nuestra salud. Somos, cada uno de nosotros, expresiones dnicas y divinas de Ia vids, y todos tenemos rwestra propia manera nica y divina de afrontar nuestra salud. Hay algunos que pueden decir, como hice yo, hacer todo el trabajo de curacién por s{ mismos. Otros puede que pefieran confiarinicamente en las maravillas de a medic ‘ng modema, Y ots, tal vez, elijan un término medio y ccombinen las dos cosas. Personalmente, nunca digo a las personas que dejen a su médico. Hay mucha gente que no esté preparada para eso, ‘Al contario, es digo que trabajen en colaboracién con su ‘médico y saquen el mejor partido de ambes medicins. Pero, lo que es més important, insisto en que tienen que participar con el tratamiento que estén recibiendo y sentir ‘agusto.con él. Tienen que creeren su poder Superior, ése es ‘ltratamiento corecto paraellos. En el captulo cuatro de este libro, Louis Proto escribe: ‘Decidiraceptar nuestra parte de responsabilidad en Ia for- macién de la enfermedad en nuestro cuerpo, srve, de echo pra salir de nuestra situacién de vieimas y-recuperar el poder de curamos. Lo que podemos hacer, podemos decidir dejar de hacerlo». Las cursivas son mates. Lo que puntuali- zac sefior Proto es muy importante, y es algo que merece Ja pena repetir: Lo que haces, puedes deshacerlo. Yo creo firmemente en eso, ee CCuanto més poder reconozcamos en nosotros mismos, 1s confianza tendremos en nuestras capacidades persona les. ¥ con esta confanza crecerin nuestra propia estima y PR6LOCO a rusiro propio amor. Cuando estamos a gusto con nosotros ‘mismos, estamos bien Uilce ta La curacién por 1a meate como un eatalizador para explorar las opciones de salud que tiene a su disposi- cin, Higase responsable de su salud. Aprenda a confiar en su salud. Y, por encima de todo, ane su salud, cualquiera ‘que sea. Después, observe Ia cantidad de milagros que se ‘van a producir para usted. y congratiles, Louse L. Hay Hay Howse Noviembre 1989 Introduccién NC RY Semenaons euias, Tato ope Jcurar. Que eso es aslo demuestra el ejemplo de pe. sonas que han tenido el valor de aceptar un diagnéstico terrible como un desffo y no como una sentencia de muer: te, un apasionado deseo de seguir viviendo, una voluntad de ‘cambiar los esquemas que las habfan sentenciado, la deter- rinacién de partcipar en su propia curacin y de aprender ‘hacerlo, y la suficiente fuerza vital que quedaba en su ‘cuerpo para darles Ia capacidad de dar un giro de 180 gra- «os en dreccién hacia la recuperacin de su salu. +e aquf algunos ejemplos de personas que han sobrevi vido a enfermedades catastsficas. Louise Hay Tenia cfncer de vagina. Recibié la noticia de su diagnés- tico «con un pénico totals: posteriormente procedié a cam- tar su dieta, deshaciéndose de su antigua queja que tenia, ‘que ver con los abusos que habta recibido de nif, y utli- ‘and el poder de su mente para cura su cuerpo, Al cabo de sis meses la curacign era total, Ahora eenseda metaisican 1 California y, a través de sus libros y cintas, enseia a * ‘CURACION POR LA MENTE ‘muchas otras personas « «deshacer los ssquemas signifiea Aeshacer el mal, Martin Brofman Antiguo ejecutivo de Wall Street, En 1975 le diagnost- caron un cncer de gargatay le dieron pocos meses de vida. Se curs a sf mismo aprendiendo a trabqar con la energia 8 nivelessutiles Ahora.es un curador concede internacional- ‘mente que lleva a cabo intensas curaciones en todo el mundo, Penny Brohn En Gigantes benignos (véase Bibliografa) cuenta cémo, ‘en 1979, desilusionada con su tratamiento convencional, sdnuf de Inglaterra com una herida purulentay toruradora en cl seno, una bolsa de gasas esterilzadas y el terrible diag- néstico de un carcinoma» para raver al doctor Josef Issels Ringhergklinik. Es cofundador, junto con Pat Pilkington, del Bristol Cancer Help Centre, que ha inaugurado el «tra tamiento suave conta el ences» mediaate el método holis- tico * que describe en El Programa Brisol(véase Biblio- rain), Katherina Collins Ha sido uno de los muchos «triunfos» del Bristol Cente. ‘Un clésico ejemplo de la relacin existent entre una péedi- Del giego hélo = stadon.(N del) TRODUCCION 25 dda y una enfermedad catastrofice; se le diagnostics un cén- cer de mamma un poco después de que muriera su mari tras ‘una enfermedad que habia durado seis afos,y durante la cual ella fe habia estado cuidando, Se prepars para Ia curacién twansformando completamente su deta, sus actitudes men- tales y sus relaciones, Una de las cosas que tuvo que abando- ‘ar fue su obsesiGn por ser siempre «pulcra», y otra de las ‘cosas que tuvo que aprender fue a aceparel amor. Katherine fest mejorando ya y frecuenta su grupo de apoyo de Londres que cuenta ahora con 600 miembros. Estin reco- Biendo fondos para edificar una casa en la zona este de Londres y convetila en un verdadero Centro de Ayuda contra el Cicer, Norman Cousins Fn 1964 se le diagnostics una espondilits anquilopeyé- tica*, una enfermedad dolorosa, imposible de tata, y que deja al enfermo lisiado. En su xbestseller» Anatomia de ‘una enfermedad (vase Bibliografi) describe cémo se curs «si mismo: con la rsa y con doss elevadas de vitamina C. Fur entonces cuando decidis que las dosis masivas de sedantes pesertas por el médico 26 aspirinasy 12 pasties de fenilbutazona*® al dia) no le estaban sentando bien y ‘mand que le trajeran videos de Candid Camera y las vie- js pelculas de los Hermanos Marx, y empez6 a recuperar- se de la que le habfan dicho era una enfermedad incurable, ~ Angola dei colina veal debi 4 as pegueas atslaciones, obra acai. (V- dela T) ** Desivado sinc depron, dota deactvidnd ant sic, iia y antiflogatica, empleado e a sferiones reams yentins (def 7) um procera de as ‘spesialente en el x0 26 ‘CURACION POR LA MENTE William Calderén Es el primer enfermo de SIDA cuya curacién hi sido registra, En 1982 le dagnosticaron la enfermedad y le dieron seis meses de vida. Fl tenfa el sarcoma de Kaposi, tuna forma agresiva del cdncer de piel, un resultado comin del colapso del sistema inmmunolégico del cuerpo. Tras un period de depresin y desesperacin total, se enteré del tra- bajo que Ievaban a cabo los Simonton curando pacientes de cfncer mediante imaginaciones mentales. Empez6 a inten- tarlo por sf mismo, practicé la meditacia y aleanz6 la paz ‘de su espttu mejorando su’ amistad con la familia y perdo- ‘nando a quienes alguna vez le ofendieron, También se ocup6 de su cuerpo, con una buena alimentacién, refuerzos ali- rmenticios y ejercicio, Su sistema inmurol6pico empez6 a responder mejor y sus lesiones KS empezaron a desapare~ cet Al eabo de dos afos del diagnéstico incial, Calderén ya no tenia el SIDA. Louis Nassaney |A Louis Nessaney se le diagnostcé un sarcoma de ‘Kaposi en mayo de 1983. Tn site meses identificéndose ‘con su papel de evictima del SIDA», entpez6, con el apoyo ‘desu padre y Ia gufa de Louise Hay, a participa en su pro- pia curacién mediante un tratamiento a base de vitaminas, ejercicio, acupuntura,visualizaciGn,afirmaciones postiva, relajacién profunda y meditacién, Cuaro meses después, sus lesiones empezaron a remiti yen octubre de 1984 una biopsia revel6 tan s6lo tejido muerto ciatrizado. Se le declaré wen remision completa», y estvo visjando por todo cl pats, evando mensajes de esperanza a otras evictimas» del SIDA, tRopucctON n Meir Schneider Naci6 ciego. Fue sometido a cinco operaciones en los ‘ojos, sin éxito, y fue declarado incurable —y oficialmente— iego aos siete aos. Diez afios después, decid ver, empe- 26 apractcar unos ejercicos,téenias respirators eimagi- naciones mentales, para tratar de curarse asf mismo. Ahora lee sin gafas y trabaja como curador. Ha fundado el Centro para la Visién Consciente en San Franciseo, en 1977, y el Centro para la Autocuracién en 1980, Su trabajo se basa en Ja toma de poder de la persona y en el estimulo de los pode- res naturales de curacin del cuerpo. En su libro La autocu- racién, mi vida y mi vsidn (véase Bibliografia) cuenta los relatos detallados de notables mejorias que se han produci- doen «enfermedades incurables», He aqu algunos, Rachel ‘Una mujer de 40 affos afectada desde hacfa un afo por luna esteoarttis * en todo el cuerpo, enfermedad que titi- ‘mamente se habia concentrado en una rodilla, La rodilla se hhabiahincbado tanto que abutaba més del doble que la otra, ‘Unos meses después de cambiar de diets, practica Ia respi- racin profunda, el masae y la visuaizacién, el dolor y la hhinchaz6n de 1a rodilla habfan bajado. Al cabo de seis ‘meses, su artis era imperceptible Lit Lili, cinco afios, manifest los primeros siatomas de dis- twofia muscular a los dieciocho meses y apenas podta ‘Aas eon lesin innamazoa os extremes ose oe forma leant, 30 CCURACION FOR LA MENTE cer yel SIDA uno esté enfermo a un nivel mucho més pro- fundo, y por tanto, para curarse, tiene que trabajar més intensamente {Qué se entiende por holistice? Ver ala persona como un todo y no simplemente como un cuerpo con unos sintomas {de los que hay que lbrars, Ver la presencia de la salud ola ‘ausencia de Ia misma en términos de energia: si tenemos ‘bastante energa, si tenemos una energia equilibrada y fii- da, o si éstaestd Dloqueada y estancada, La curacin (en contraste con la mera erradicacin de los sfntoras que se ‘han manifestado en el cuerpo como resultado de un desequi- librio y un bloqueo de Ia energia) es la restauracién de la ‘armonia a todos los niveles: mental, fisico, emocional y spiritual. ¥ el tipo de curacin descrito en este libro —que funciona con la energfa— no es espectfico: no importa el tipo de enfermedad que trata. Cambia el esquema de Iaener- ‘fa y cambiars a enfermedad que es su manifestacién, Desde un punto de vista homeopético, a utlizacion de métodos drsticos paralibrarse de los sntomas (que son los signos de dolor del cuerpo) sirve para matar al mensajero que trae malas noticias. A veces en stuaciones graves 0 que ‘ponen la vida en peligro, puede que sea necesario recur & Jos antibiétcos o a la cirugia simplemente para mantenerse con vida. Pero es ms necesaio, sila enfermedad no ha le= ‘gndo tan hondo en nuestros sistemas, que vaya a salir ala superficie mis tarde, y tal vez deforma més violenta. Si la enfermedad ha llegado tan hondo, ya que esté més alld del aleance de las medicinas ode a cirugia, se ha convertido en lo que entendemos por enfermedad «incurable». Ente libro leva a explicar de qué modo puede usted par- ticipar en su propio proceso curativo, si esté enfermo, y ‘cémo puede conseguir estar bien, sino lo esté. De ningsin ‘modo pretende suplantar el tratamiento médico convencio- nal, Es mds bien un intent de dar a conocer cmo otras per- etropuecisy a Sonas han complementado estos ttamientos convencions- Jes con nics autocuratvis que los hacen ser més eft ‘vos minimizan tos efectos secundatios y hacen que el paciente se encuentre muchisimo mejor alo largo del proce- $0. Aqui, como siempre, es custién de equilib, y nosores hemos de encontrar el nuest. Su médico deberia esta it formado de que usted et watando de ayudar sf mismo & estar bien y haba que pedi su consejo cada ve que hub ‘adda o preguntas Hay que reconocer que hoy or hoy ‘mayerfa de os médicos estin comprendiendo el valor d= ‘na buena alimentacin, dela elaacién, de las actividades Postvas y de la reduccion del esos, y extn empezando a conocer ls factorespsicosométicos que hay detrs de ‘nda enfermedad, Hay algunos que también son expertosen ‘scupunturay homeopaia. Lea este libro, pues, como un eompentio de ténicas sutocurativas que esté demostrado que funciona con muchas personas. Uselo para encontrar las tenicas que ‘mejor funcionan con usted: para curar su enfermedad o con svar y mejorar su salud. Escoja del «mento que se le offe- ce la que vayan a alimental. La autocuracién es ua as to intensamente personal. Confe ens inticin. Aun ive eterminado, sempre sabemos lo que tenemos que hacer para cures. LL PRIMERA PARTE ENFERMEDAD Después de todo, para no caer enfermos, | {o que tenemos que hacer es amar. Pan) 1 La naturaleza de la enfermedad ‘outs PasTEUR era realmente un gran hombre, Una pare desu grandeza, y no la més pequefia fue su honrades ‘en admitir que se habfa equivocade. Pasteur crefa que los microbios eran la causa de la enfermedad, pero Claude ‘Bemard le contest6 que si el cuerpono era «terreno abona- do» para le invasion de bacteria, los microbios no tentan, poder alguno. En otras palabras l factor significativo en la ‘génesis de Ia enfermedad no eran ls gérmenes, sino la dis- ‘minucién de Ia resistencia. Al final ce su vida, Paster mur- ‘urs a sus amigos, reunidos junto a su lecho de muerte: « llevar a cabo Tas reparaciones necesarias cuando las cosas vvan mal. LA DOBLE NATURALEZA DE LA ENFERMEDAD: CON ALGUNOS ACIERTA, ‘CON OTROS FRACASA. ‘Segdn la teorfa de los gérmenes, las personas tienen ¢ clera si estén expuestas a la bacteria vibrio choleras, y tifus si estin expuestas a la salmonella Typhi- En 1982, sin embargo, se demostr6 de forma radical que no siempre e5 ast, El cientfico bévaro Max von Pettenkofer desafié a Robert Koch, que aseguraba haber descubierto el microbio ‘causante del e6lera, Pettenkofer guardé una muestra del bacilo procedente de un caso let la eché en un vaso de agua y se le tragé en presencia de testigos médicos, al 38 ‘CURACION POR LA MENTE y no cogis el temido e6lera, to tnico que tuvo fue una ligera diarrea. Su experimento fue repetido mas tarde por otros, con idéntico resultado, Fata demostracién espectacular no deberia sorprender nos, si tenemos en cuenta que nuestro ambiente (y nuestro cuerpo) se enfrentan continuamente con organismos poter- cialmente peligrosos. Sencilamente, no hay manera de que ‘podamos evita laexposicin constane als gérmenes, no Ser que queramos encerramos en una burbuje de pléstico cesterilizada durante el reto de nuestra vic Sir Macfarlane Buret, ganador del premio Nobel por su trabajo sobre inmunologia, ha declarado que en nuestro ‘cuerpo podria haber cada dfa haste 100,000 eélulas que pue- den volverse cancerosas, pero nuestro sistema inmunolégi- co as destrye. Se ha insinuado que legamos a infectarnos (en vez de producir sntomas) con un resfriado el menos una vezal mes. La pregunta que tenemos que hacemos no es si las bac- teria y los virus causan ta enfermedad, sino spor qué cau- san enfermedad en algunas personas y en otras no? {Por qué en una oficina hay empleados que cogen el estriado, o un bicho que «anda por ahi, y otros no? {Por qué hay clientes de una prostituta infectada que contraen enfermedades venéreasy otros n0? Por qué hay personas HIV-positivas ‘que cogen el SIDA y otras no? Sila simple exposicin a los rene fuera suficiente para producir enfermedades, hace ‘mucho tiempo que los mayores suntuarios curatives del mundo estarian cerrados. Desde que Bernadette tuvo las visiones de la Virgen Marfa en Lourdes, en 1858, millones de peregrinos, muchos de ellos enfermos terminales, y algu- ‘nos con llagas abjertas y lesiones, se han bafado en Ia ‘misma agua de manantil de a grata curative, No ba labi- {do nunca un solo easo de nadie que se infectara LANATURALEZA DELLA ENFERMEDAD 9 EL SISTEMA INMUNOLOGICO [La llegada det SIDA ha servido para ituminar Ia impor- tancia capital de las defensas de nuestro cuerpo y de los ‘mecanismosautocuativos que nos mantienen vivos y anos. ‘Ahora nos vemos obligados a aprender cada vez ms cosas sobre la naturaleza de esas defensa intemas, 6mo funcio- nan, y qué es lo que is fortaleceo las mina. Y lo maravillo- snmente complejo, ineligente y astuto que es ese sistema. ‘Bajo un microscopio, una gota de sangre tomada a uns ‘persona sana revela su contenido en un 99 por 100 de gl6- balos rojs y el I por 100 restante de globulos blancos (un promedio de $.000.000 de gldbulos ros y 7.000 glabulos blancs por milimetro cibico de sangre de muestra) Estos _l6bulosblancos son los «soldados» del sistema inmnol6- ico, Como verdaderos soldados, su misién es la de vi si aparece el enemigo (ls microbios invasores), localizario y desturio, Una vez ms, se trata de un verdadero ejrcito, ‘con un cuerpo especilizado de inteligencia, coma nes, arillerfa, et. y su aportaci6n ala maniobra completa ¢ distinta,segtin la funcin. Por ejemplo, nuestro sistema inmunolégico contieneeélulas B, células Ty micr6fagos. ‘Tanto las clas B como las eétulas C se engenciraron en ruestzo higado cuardo todavia estfbamos en el vientre ‘Desde alt se diigieron hacia la médula 6s Las céllas B se han quedado allf resistencias «Br para «lo que procede {de la dala dsea>), pero las clulas T han emigrado hacia la glindula timo, que estésituada en la parte superior del trax (resistencias «7») para «lo que procede de la gléndu- la timo»), Las células B producen anticuerpos para neutralizar, de manera muy concrea, a todo invasor antigeno o extafo, Los antigenos podrian ser no solamente las bacteria y los, ‘iru, sino tambiéa el polvo, las hongos, el plea, los pro= 40 ‘CURACION FOR LA MENTE uctos quimicos dafinos: en definitiva, todo aquello que hhace que se dispar el sistema de alam La célulasT inflayen en Ja otras oulas del cverpo, Por «jemplo, las cétulas T auxiiadora inducen a las o6lulas B a ‘responder ante el antigeno, mientras que las eélulasT repre- soras, como su nombre indica, «desconectan» la actividad de la cétula para evitar que siga matando cuando el peligro ‘ha pasado. Actualmente se considera que la proporcién entre las Trepresoras y las Tauxiliadoras indica el grado de salud del sistema inmunolégieo. Normalmente, la propor- cin es de 1.8 células auxiiadoras por cada célula represo- a (J,8:1). Una excesiva cantidad de oslulas represoras ‘Puede significar que el sistema inmunoldgico esté siendo sdesconectado>, y los enfermos de SIDA manifiestan a ‘menudo una proporcién de I: © menos. ‘demas de las oflulas B y‘T, nuestro sistema de defensa intemo posee grandes células blancas, producidas una vez ‘més en Ia médula espinal, amadas macr6fagos, Una vez, que ha sido identficado un aniigeno, ells van y loengilien, Otro de los istintos components del sistema inmunolé- ico es el sistema linfético, y sus érganos principales son la ‘iédula espinal y el timo. La gléndula imo ha sido recono- cida ya como una gléndula decapitalimportanciaen la con- versacién de nuestra inmunidad ante la enfermedad. CCuriosamente, después dela infancia empieza a encogerse ¥¥ por consiguiente disminuye su tamaso respecto al peso {el cuerpo, Otro hecho signiticaivo —y muy alentador— para nuestro estudio de Ia autacuracién es que el cerebro estépara controlar el funcionamiento del sistema inmunol6- ‘ico. Analizarerios cémo se pruduce esto en la II Parte de cet libro, y aprenderemos a estimular el timo y aevitar que se siga encagiendo, Esté més allé de Ia finaidad de este resumen del sste- ‘ma inmunol6gico analizar les funciones de los érganos LEANATURALEZA DELA ENFERMEDAD 4 secundatios de inmunidad: os ganglios linfétios, el bez0, Ins amigdalas, el apéndice, las placas de Peyer y loe gan lio linféticos especializados en las membranas intestins les, Por ahora, nos basta haber comprendido por qué los ‘gérmenes encuentran en realidad dificultades para atrave- sar nuestras defensas naturales y ponemos enfermos. A no ser que, por ejemplo, estemos sometidos a un estrés ex- Elestrés ya inmunidad Que el estrés debilita In inmunidad esté ya suficiene- ‘mente documentado para que se ponga en duda. El cientifi- co americano Michsel Plaut ha estado investigando los efectos del estrés sobre el sistema inmunol6gico de os rato- nes, y ha descubierto que, exponiéndolos a una combina- cin de Iuces billantes y repetidas descargas elétricas, st disminucién de anticuerpos disminufa notablemente, Los ratones que habian sido aislados de sus compaiieros mostra- ‘ban tambin una inmunidad dafada. Hicia la mitad de los aflos setenta, Veron Riley, de la ‘Seattle Pacific North West Research Foundation, descubrié {que en unos experimentos sobre ratascrindas pra ser sus- ceptibles al cénicer de mama era capaz de varir la propor- cin del céner del 7 al 92 por 100, simplemente con variar su exposicién al estés. (En 1956, en su trabajo pionero EI estrés de la vida, sir Hans Selye, profesor de Medicina Experimental de la Universidad de McGill de Montreal, Aescribié co el misculo cardiaco de ls rata, sometido & extés en Iaboratoro,sufrfa a misma aguda desintegracién ue se habia encontrado en autopsias de seres humanos que Ihabian muerto por ataques cardiacos después de haber sido sometidos a estes) 42 CURACION POR LA MENTE En febrero de 1986, una investigacin que habia sido le- vada a cabo alo largo de cuatro ails sobre 2,163 mujeres que se habian sometido a la mamografia descubrié que el cncer de mama estaba estadistcamente vinculado al estes, ‘Ya-en 1926, Elida Evans, una analistajungiana que estaba investigando en el céncer y sus causes, se habia quedado ‘mpresionada por e! hecho de que todas sus pacientes que tenfan cénicer de mama habfan sufrido recientemente una pérdida de una pessona importante en su vida, En 1957, el iryjano consultor del hospital Guy de Londres, sir Heneage Cpilvie,sorprendié a sus colegasafirmando que el hombre feliz nunca tiene cincer». Su afirmacién hace eco a la de sit James Paget, que en el siglo pasado expuso su opinién de ‘que la verdadera causa del céncer era Ia frstraién, De todos los acontecimentos importantes de la vida, se ‘ha descubierto que el més estresante es: Ia muerte de un ‘cényuge el divorcioo la seperacién matrimonial. En 1981, los investgadores del hospital de Westminster escubrieron que los enfermos de arts reumatoidea fempezaron a tene: su primer ataque inmediatamente des- pds de la pérdide de un ser queido, del divorcio o de Ia pérdida del trabajo. En Mount Sinaf, Nueva York, Stephen, Soliefer y sus colegas declararon que un grupo de viudos tenia su sistema iamunolégico més debilitado dos meses después de Ia muerte de sus mujeres, comparado con Ins pruebas inmunol6gicas que se habfan hecho antes de la pét- dda de su ser querido. Se ha descubierto que la separacién yl divorcio aumentan el indice de mortalidad por tubercu- losis y neumonfa en ambos sexos. En Ia Universidad del Estado de Ohio se ha descubierto también que hay més veasos de herpes 2n mujeres recientemente separadas 0 -divoreiadas, Al parecer, cuanto més han amado estas muje- ses asus maridos, més grande es el dao que ha recibido st sistema inmunogico. La misma universdad afi que se LANATURALIZA DE LA ENFERMEDAD 48 ddaban mis casos de herpes y menos reactividad inmanol- ica en los que habfan estado sometidos al estrés de los exé- ‘menes que entre 1os que no lo aban estado. Una excesiva cantidad de estrés puede provocar cualquier cosa, desde un restiado hasta un cdncer, desde una jaqueca hasta lo que se ha dado en llamar un «agotamiento nervioso». En 1958, una investgacién que se lev6 acabo en la Univer sidad de Mac Gill revel6 que, de los 40 enfermos de escle- ‘osis miltiple, todos menos cinco habian estado sometidos ‘un estrés prolongado antes de que se manifestara su enfer- rmedad, y después de un nuevo estés normalmente st pro- _sprendanos a focilitar musta propia respuesta de elajacion todos los nivel, mental, emocionaly espritual, no se lament isioo—. Pres, la medic yelyopa son uncs instruments tn poderosos para la curacén. Una vez que Jescojae gusto fe jan hasta la frecuencia lf, a 1961, en Nueva Delhi el doctor B,K. Anand regis Jos mismos aumentos de actividad de las ondas cerebraes alfa en los yoguis, y lo mismo fue descubierto cinco afes despoés eve los practcantes de la meditacin zen por les doctores Kasamatsu e Hic, de la Universidad de Tokyo. ny 1976, Gurucharan Singh Lhls fandador del Instituto de lavestigacin Kundalini de Boston, confirms que la me- , aunque parezce lo contraio. El doctor Peter Nixon, consultor de cardiologia en el hos- pital Charing Cross, junto eon el doctor David Peters, un 'médico de cabecera de Hayes, han insistdo en la importan- cia de prestaratenciGn a las sefiales del cuerpo cuando esta- ‘mos en este limite entre estar bien y no haber fraguado to- davia una enfermedad concreta. John Davidson atribuye este «malestar» general a Ja di- sonancia creada en las energias celular, molecular, subat6- ‘mice, emocional y mental. En su lbeo Energ( sui (véase Bibliogaffa,afirma que, tanto si se trata de la medicina ‘modema convencional y de la cirugia como si se trata de formas més esotéricas de curacién, la terapia aplicada lo ‘nico que hace es reajustar los esquemas de energia del ‘cuerpo, de la mente y de las emociones, para crear Ia armo- fay la salud. ‘MANIFESTACION DEL SINTOMA. El malestar, pues, es siempre precedido por el «mal-es- tar», por una desarmonia en nvestras energias més sutiles (0 el aura, como Ia descubci6 Kirlian) que, si estamos lo sufi- cientemente sintonizados con nosotros mismos, podemos cexperimentar como una especie de indisposicién o tensién en nuestra consciencia. Hay una parte de nosotros, nuestra sabiduria intema, que nos dice cudndo las cosas no van del todo bien. Pero, para off su vor, tenemos que estar & la es- crucha, Estamos casi siempre demasiado acupados, dem sido aturdidos por lo que pasa fuera de nosotros para dar- nos cuenta de lo que nos ocurre por dentro. De mado que no ENERGIA Y ENFERMEDAD n prestamos atencién a los mensajes que reeibimos para mo- erar a marcha, para conservar Ia energi para alimentat- nos mejor, para deshacernos de lo que nos tenemos que des- hacer, y seguimos acumulandsestés hasta que los sfntomas visibles se manifesta, No siempre esté muy claroel motivo por el cual el cuer- po manifiesta unos sintomas determinados en unos sitios , La resistencia que tenemos ante el ato de una persona 0 su comportamiento puede hacemos apretar los ‘myisculos de tal manera que nos haga experimentar nuestra interacein lteralmente como un «dolor en el cuello», 0 in Elamor, la medicinay ls milagros (véase Bibliogafia) ‘Cuanto més enérgica sea nuestra voluntad de vivir, dé aceptar el desafio, de hacerlo que haga falta para curarnos, ELSIONIFCADO DELAENFERMEDAD 1 en ver de desesperamos y decir «pobre de mis (0 «por qué yo?»), mis probabilidades tendremos de poder reconstruir las piezas de nuestra vida rota y reunirla en una nueva ges- ‘alt, una nueva y més saludable manera de se Una y otra vez, hay «enfermos terminales» que consi ‘quen remitir en contra de las expectativas de sus médicos,

También podría gustarte