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INTRODUCCION

Presionar un simple botón o en algunos casos dar una


orden de encender a una televisión es algo cotidiano que
realizamos diariamente en nuestra vida
Quien no recuerda, llegar después de un día agotador y
estresante, sentado 6 horas en una silla, llegar a casa, tirar
la mochila al sofá y prender la televisión para ver nuestro
programa favorito como dragón Ball, el increíble mundo de
Gumball, etc.

Nunca podríamos olvidar como esos momentos, en dónde


viendo una simple pantalla con colores nos ayudaba a
sobrellevar un día cargoso y estresante

El problema es que nosotros no poseemos control de los


contenidos de los cuales observamos y eso causa
adicciones, lenguaje inadecuado, pensamientos
estereotipados, malos hábitos, etc.

Por eso hoy vamos a eliminar esas actitudes que generan


dichas consecuencias.
DESARROLLO:

Pablo. _
Me acuerdo de que a los 12 años de edad había regresado
de la escuela, me encontraba muy estresado por lo que
encendí aquella televisión para ver mis programas
favoritos. Sucede que después de 30 viendo mis dibujos
animados me aburrí de ver las caricaturas. Entonces
empecé a buscar otros canales hasta que encontré un
programa, este se llamaba ¨Acapulco shore¨. El problema
es que este reality show poseía contenido sexual y lenguaje
inadecuado lo que termino volviéndome adicto ya que
buscaba canales que tengan similares contenidos a lo
mencionado, no me permitía concentrarme en mis clases
ya que siempre me imaginaba como seria tener esas
experiencias y por ello terminaba sacando malas notas,
notaba que me volvía más antisocial porque me quedaba
en mi cuarto todo el día. Un día sucedió que mi Madre me
descubrió viendo este tipo de contenido y entonces me
castigo quitándome el televisor de mi cuarto. Esa situación
fue la mejor ya que pude dar más atención a muchas cosas
importantes como mis deberes, tareas de la escuela, la
socialización, alimentación, mi físico y gracias a ello pude
mejorar y evitar tener esas actitudes las cuales
empeoraban mi salud. Sobre todo, entendí lo importante es
que aprendí a pensar en el contenido al que nos
exponemos y como este puede repercutir en nuestra
identidad y salud.
Andree._
Mi mama siempre decía que yo era un niño muy, no,
demasiado imperativo no podía quedarme tranquilo o
calmado, siempre estaba lleno de energía, era muy travieso.
Eso causo que mi mama sufriera para cuidarme a lo que
ella y mi papa pensaron que una forma de poder
controlarme mejor sería comprar un televisor para que así
yo estuviera enfocado y evitara estar tan activo. Tenían
mucha razón porque apenas prendieron el televisor y
pusieron un programa me quede sentado y mirando como
en aquella caja tan pequeña aparecían figuritas, personas,
animales y otro tipo de personajes los cuales no sabía que
existían. Sin duda alguna aquella impresión que me lleve
fue muy asombrosa y única para mí. Con el tiempo fui
creciendo, viendo aquellos programas y la mayoría del día
lo pasaba viendo la televisión, aquello hizo que fuera
desarrollando una vida sedentaria y no saludable, lo que
llevo al deterioro de mi apariencia física y de mi salud. A la
vez que eso ocurría cada vez más me volvía inseguro de mi
cuerpo, hasta el punto de que empecé a odiarlo. Durante la
pandemia eso empeoro y llegue a un punto en donde mi
autoestima estaba por los suelos. Pero entonces descubrí
que la televisión tiene lados positivos y en vez de estar
utilizándola para ver por horas mis programas favoritos
podría estar utilizándolo para el cuidado de mi salud, viendo
videos de rutinas de ejercicio o videos acerca de la buena
alimentación para poder tener una vida saludable. Al pasar
los días, meses y años empecé a notar cambios en mi vida
y también a descubrir que, si utilizamos inadecuadamente
las TIC, especialmente en este caso el televisor, podría
causar un mal habito en nuestras vidas perjudicando
nuestra salud física y emocional. Pero por otro lado si las
usamos adecuadamente podría promover una vida sana en
nosotros desde muy temprana edad

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