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Dominio:

Un dominio es la dirección única y legible por humanos que se utiliza para acceder a un sitio
web en Internet.

Es una parte fundamental de la identidad en línea de un negocio o una persona. Los dominios
están compuestos por dos partes principales: el nombre del dominio y la extensión del dominio.
Por ejemplo, en www.ejemplo.com, “ejemplo” es el nombre del dominio y “.com” es la
extensión del dominio. Al elegir un nombre de dominio, es importante
seleccionar uno que sea relevante, fácil de recordar y esté relacionado
con el propósito del sitio web.

Existen diferentes tipos de extensiones de dominio, cada una con su


propósito y uso específico. Algunos ejemplos comunes son:

1. Genéricos de nivel superior (gTLD): Son extensiones de dominio ampliamente


utilizadas, como .com (comercial), .org (organización), .net (red), .edu (educación) y
.gov (gobierno).

2. Dominios de nivel superior de código de país (ccTLD): Son extensiones de dominio


asociadas con países o regiones específicas, como .us (Estados Unidos), .uk (Reino
Unido), .de (Alemania), entre otros. Estos dominios suelen utilizarse para empresas o
sitios web con un enfoque local.

3. Nuevas extensiones de dominio (new gTLD): Son extensiones de dominio más recientes
y específicas, como .tech, .store, .blog, .app, que se introdujeron en los últimos años
para ofrecer más opciones a los propietarios de sitios web.

Registro de dominios:

Para utilizar un dominio, es necesario registrarlo a través de un registrador de dominios. Estas


son empresas autorizadas que permiten a los usuarios adquirir y administrar nombres de
dominio. Durante el registro, se proporciona información sobre el titular del dominio y se paga
una tarifa anual para mantener la propiedad del dominio.
Hosting:

El hosting, o alojamiento web, se refiere al servicio que permite que


un sitio web esté disponible en Internet.

Cuando una persona accede a un sitio web, su navegador envía una


solicitud al servidor de hosting para obtener los archivos del sitio y
mostrarlos en el navegador.

Hay diferentes tipos de hosting disponibles:

1. Hosting compartido: Es el tipo de hosting más común y


económico. En un servidor compartido, varios sitios web
comparten los recursos del mismo servidor. Esto significa que los
recursos, como el espacio en disco y la potencia de
procesamiento, se dividen entre los sitios web alojados en el
servidor. Es una opción adecuada para sitios web pequeños o de
tamaño medio con un tráfico moderado.

2. Hosting dedicado: En este caso, se alquila un servidor


completo para un solo sitio web. Esto proporciona un mayor
control y flexibilidad, ya que los recursos del servidor no se
comparten con otros sitios web. Es una opción adecuada
para sitios web grandes con un alto volumen de tráfico y
que requieren un mayor rendimiento y seguridad.

3. Hosting en la nube: Este tipo de hosting utiliza una red de servidores


interconectados para alojar un sitio web. Los recursos se escalan
automáticamente según sea necesario, lo que permite una mayor
flexibilidad y capacidad

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