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El discurso capitalista1
Ficha de la cátedra: Teoría psicoanalítica escuela francesa - FHAyCS-UADER

Alberto Uboldi

Lacan propone la escritura del discurso capitalista en la conferencia Del discurso


psicoanalítico,2 en Milán 1972. El discurso capitalista es la torsión sobre el discurso del amo
que produce el capitalismo en su alianza con la ciencia.

El discurso capitalista no es un verdadero discurso, ya que si consideramos la


estructura del discurso como lo que posibilita el lazo social, el discurso capitalista promueve
la ruptura del lazo. También es un falso discurso porque no hay movilidad de los términos,
es decir, no existe un punto de imposible que permita la rotación y el cambio de discurso,
como ocurre en los otros cuatro descriptos en el Seminario 17.

En la época en que Lacan dictaba el Seminario 19…o peor3, fue invitado a dar una
serie de charlas en el hospital Saint-Anne, algunas de esas charlas fueron publicadas con el
título Hablo a las paredes4, allí dice lo siguiente: “(…) la historia muestra ese discurso
(discurso amo) vivió durante siglos de una manera provechosa para todo el mundo hasta
que en cierto desvío, en razón de un deslizamiento ínfimo que pasó inadvertido para los
mismos interesados, se convirtió en el discurso del capitalismo (…)”5 Observemos la
modificación a la que hace referencia Lacan:6

Discurso del amo Discurso capitalista

Como dijimos, el discurso capitalista es el efecto producido por la alianza entre el


capitalismo y la ciencia sobre el discurso del amo. Si observamos la modificación señalada,
hay una inversión de los términos de la izquierda, por la que el sujeto () que estaba en el
lugar de la verdad, pasa al lugar del agente y el  pasa al lugar de la verdad. A su vez, hay

1
Esta ficha de cátedra ha sido elaborada compilando y adaptando lo desarrollado en el libro: Uboldi, A.
(2018). Violencias actuales. Fundamentos psicoanalíticos y transformaciones en el lazo social. Editorial
fundación la hendija.
2
Lacan, J. (1978) “Del discurso psicoanalítico” en Lacan in Italia 1953-1978. La salamandra.
3
Op. cit.
4
Lacan, J. (2012) Hablo a las paredes. Paidós.
5
Ibíd. p. 105.
6
La escritura como aparece en la edición de Lacan in Italia 1953-1978, op. cit.
2

una modificación en la orientación de las flechas, sumada a la desaparición de la doble


barra que separaba al sujeto del objeto en el discurso del amo.

Entonces, el sujeto ya no está regulado por la autoridad del significante amo


articulado con el  como saber, es decir, ya no es el sujeto que se hace representar por un
significante para otro en la cadena, sino que es un sujeto que rechaza la verdad (flecha que
va del  al ) en el discurso.7 Si ese amo tiene alguna relación con el saber (flecha que va
del  al ) ya no es con el saber inconsciente representado por el  en el discurso amo,
sino con el saber en juego en el capitalismo, es decir, es un saber sobre la reproducción del
capital que se sirve de los objetos de la producción, las mercancías (objetos a como objetos
de la ciencia, objetos tecnológicos) que se dirigen al sujeto abarrotándolo en procura de
obturar un vacío irreductible propio de lo humano, vacío que Freud caracterizó como la
diferencia entre lo hallado y lo buscado, sustento del deseo.

El discurso capitalista, tal como podemos leer en la flecha que va del a al , empuja
al retorno del goce al cuerpo, retorno porque el goce ha sido evacuado del cuerpo por la
castración. El discurso capitalista procura eliminar el resto, se propone satisfacer la pulsión
en detrimento del deseo y por eso, desaparece allí la doble barra (que en el discurso del
amo separaba al sujeto del objeto) indicando con esto su imposibilidad de reunión. De allí,
asevera Lacan que el discurso capitalista forcluye la castración entendida como pérdida de
goce que hace lugar al deseo, forcluye las cosas del amor promoviendo un goce solitario,
autoerótico, que no pasa por el cuerpo del otro en el amor.8 Lacan va a precisar que:

Lo que distingue al discurso del capitalismo es la Verwerfung9, el rechazo hacia


afuera de todos los campos de lo simbólico, con las consecuencias que ya dije.
¿El rechazo de qué? De la castración. Todo orden, todo discurso, que se
emparente con el capitalismo deja de lado, amigos míos, lo que llamaremos
simplemente las cosas del amor. Ya ven, ¡eh! No es poca cosa.10

Todo orden o discurso emparentado con el capitalismo deja de lado la castración


entendida como pérdida de goce, es decir, todo es pasible de convertirse en mercancía que
permita acumulación de capital.

La verdad no funciona más como autoridad que instaura el inconsciente y hace al


vaciamiento del goce del cuerpo ordenando el régimen de las identificaciones. Por el

7
Desarrollado por Jorge Alemán en Cuestiones antifilosóficas en Jacques Lacan. Atuel. 1993 p. 20.
8
Kait, G. (2005) La pulsión y el rechazo de lo femenino en el final del análisis. UNR Editora.
9
Lacan se basa en el término Verwerfung utilizado por Freud para conceptualizar la Forclusión o Preclusión
«(…) la preclusión del Nombre-del-Padre en el lugar del Otro, y en el fracaso de la metáfora paterna, donde
designamos el efecto que da a la psicosis su condición esencial, con la estructura que la separa de la
neurosis.» “De una cuestión preliminar a todo tratamiento posible de la psicosis”, op. cit. p 556.
10
Ibíd. p. 106.
3

contrario,  solo, promueve el retorno ilimitado del goce al cuerpo vía los objetos plus de
gozar, en un intento de obturar ese agujero irreductible, a este amo Lacan llama amo
moderno.11 Entonces, en el discurso capitalista la inversión de los términos de la izquierda
del discurso del amo y el cambio en la dirección de la flecha (del  al ) muestra hasta qué
punto en este discurso el sujeto está sometido a la autoridad del  solo (podemos
relacionarlo con la autoridad degradada) un amo que en el capitalismo es el dinero y su
acumulación mediante los a, las mercancías.12

En fin, es después de todo lo más astuto que se ha hecho como discurso. No


por eso está menos consagrado a reventar. Es que es insostenible. Es
insostenible en un truco que podría explicarles. El discurso capitalista está allí…
una pequeñísima inversión entre el  y  barrado, que es el sujeto, eso basta
para que eso marche sobre ruedas. No puede marchar mejor. Pero justamente
eso marcha demasiado rápido, eso se consume, se consume tan bien que se
consume.13 (ça se consomme, ça se consomme si bien que ça se consume).

En esta cita, Lacan destaca la astucia del discurso capitalista, la astucia que se
observa dado que el capitalismo va a hacer uso de la estructura deseante del sujeto para
sus propios fines, es decir, para ofrecer una lluvia de objetos que se crean a partir de la
alianza con la ciencia y que alimentan la maquinaria de acumulación a partir de la plusvalía.
El discurso capitalista no tiene un límite como los otros discursos, si observamos las flechas
que lo orientan, éstas forman una suerte de “ocho” volcado, un circuito en el que no hay
ninguna pérdida, o sugerentemente el símbolo del infinito, en el que se retroalimenta y
vuelve sobre sí mismo y cada vez se acelera más, cada vez más objetos, cada vez más
acumulación, cada vez más retorno del goce al cuerpo, para un sujeto que queda como un
autista del consumo y que termina por ser consumido.

Es lo que indicaría el juego de palabras al finalizar la cita, una aceleración del


consumo que apunta al consumir-se, la característica mencionada: “destinado a estallar”
sugiere este camino para el discurso capitalista. A la vista de los acontecimientos
posteriores a los años en que Lacan lo formula, parece que el capitalismo ha conseguido
mutar para subsistir. Con el capitalismo se ha agitado la ilusión del sujeto que reniega de la
castración, se ha hecho posible “(…) que verdaderamente lleguemos a estar animados por

11
Ibíd. p. 32.
12
Kait, G. op. cit.
13
Lacan, J. Conferencia de Milán, traducción sugerida en el sitio:
http://docs.wixstatic.com/ugd/1cc484_0dbe9301e268404d987a4814f58b0dff.pdf
4

los gadgets (…),14 se propone el acceso ilimitado al goce con el artificio de los objetos de la
tecnología.

Alicia Álvarez en La teoría de los discursos en Jacques Lacan15 se refiere al efecto


que produce el discurso capitalista respecto de la falta de límite:

La falta del límite que la castración inscribe nos abre un escenario de “todo es
posible”. Se trata entonces de la promoción del goce, el que podríamos calificar
incluso de incestuoso, en tanto que no hay ley que ponga coto.
Contrariamente a la ley de la estructura, encarnada en el discurso del Amo, que
impide la realización del fantasma, en esta nueva versión -que incluye una
vuelta perversa (…)- el fantasma tiende a “realizarse”.16

La castración sin efecto en el discurso capitalista, deja abierta la posibilidad de


satisfacción permanente, goce mortífero que anula el deseo y se encamina hacia a la
muerte. El discurso capitalista describe un movimiento circular sin límite que la autora
compara con la circularidad descripta por Freud respecto del superyó: “(…) la orden
superyoica a la renuncia a la satisfacción pulsional, genera más orden superyoica … Es un
circuito cerrado que hace que el superyó se torne cada vez más exigente, si más renuncia
más pide.”17 Alicia Álvarez retoma la definición que hace Lacan en 1972, allí establece que
en el discurso capitalista se produce una perversión del discurso amo. La autora va a
plantear que la modificación que Lacan denomina perversión, implica una transformación
radical del lazo social en la época actual, quedando el sujeto como agente (lugar arriba a la
izquierda) que pasa a ser instrumento “de un modo de “lazo” que supone la recuperación
del goce bajo la forma del a como plus de gozar.”18 Es un sujeto determinado por el objeto
que tiende a la realización del fantasma. Entonces, en la escritura del discurso capitalista
Lacan muestra lo que podemos llamar renegación de la castración (dado que hablamos de
perversión19 del discurso) que hace posible la reapropiación del plus de gozar.

En la escritura del discurso capitalista, al quedar invertidos los términos,


podríamos decir que queda velado que el  represente al  ante . Si el sujeto
hace caso omiso de esta determinación, parece libre de todo efecto de
enajenación, pero paga el precio, sin embargo, de no ser sino instrumento de
goce. En esta notación, su única determinación le viene del objeto ya que no
hay relación entre el agente y el Otro.20

14
Lacan, J. [1974] “La tercera” en Intervenciones y textos 2. Manantial, 2° ed. p. 75.
15
Álvarez, A. (2006) La teoría de los discursos en Jacques Lacan - La formalización del lazo social. Letra Viva.
16
Ibíd. p. 196.
17
Ibíd. p. 190.
18
Ibíd. p. 206.
19
Renegación como la operación estructurante de la perversión.
20
Ibíd. p. 209.
5

El sujeto ocupa al lugar de agente en la torsión discursiva del capitalismo, de este


modo se rompe la representación del significante  ante el Otro: . Esta “liberación” de la
determinación significante implica desconocer la castración y deja al sujeto atado al goce
como su instrumento, al modo de la perversión.21 En la torsión que transforma el discurso
capitalista, el sujeto pierde la inscripción en un linaje simbólico que habilita el estar
representado por la articulación de la cadena significante → y de este modo, también
se esfuma la ligazón con el Otro, se rompe el lazo y el sujeto queda sometido al goce por
su determinación vía el objeto a. Consecuentemente, no hay referencia a un Otro que
encarne autoridad alguna y esos otros que encarnarían de alguna manera la autoridad o el
límite, pueden pasar a ser un obstáculo hostil a eliminar.

El discurso amo escribe la legalidad como regulación de lo pulsional habilitada por


la castración, la que establece condiciones para la represión y también para las
identificaciones. Al modificarse la relación al  en el discurso capitalista, se modifica la
eficacia de la castración, debilitando las condiciones para las identificaciones que refieren
al linaje simbólico y ubican al sujeto como historizado. Por la tanto, nos preguntamos por
el efecto paulatino de este discurso sobre las subjetividades, discurso dominante que en la
actualidad ha acelerado su omnipresencia de la mano de las nuevas tecnologías
comunicacionales.

Es importante aclarar que cuando Lacan formula: “Lo que distingue al discurso del
capitalismo es la Verwerfung (...)”22 se refiere a la forclusión en el discurso, no está
hablando de las psicosis como forclusión en la estructura subjetiva, sino de la forclusión de
la castración que opera en el lazo social. Pero ¿cuál es el efecto respecto de los sujetos que
se constituyen en el contexto de esta forclusión de la castración que opera en el lazo social?

Ya desde los primeros tiempos de su enseñanza, Lacan planteó que la castración


abre la vía de las identificaciones estructurantes, simbólicas y ubica al sujeto en un linaje
simbólico. Consideramos que de manera paulatina se va produciendo una ruptura del linaje
simbólico, en lo que respecta a la transmisión intergeneracional. Podemos observar ciertas
consecuencias de esta ruptura en las manifestaciones violentas actuales.

En la actualidad, se ha acelerado la masividad de objetos y desde esa infinitud se


procura obturar el deseo. El acortamiento del tiempo, dado que la velocidad de la
comunicación virtual no deja espacio a la espera, diluye al sujeto en un zapping ilimitado.
La narcosis actual tiene una sustancia virtual soportada por la imagen, sustancia infinitizada
que ubica como único límite para el sujeto el agotamiento o la muerte.

21
Lacan habla del lugar de instrumento que ocupa el perverso respecto del goce en “Kant con Sade”. Escritos
2. (1985). Siglo veintiuno editores XIII ed.
22
Lacan, J. Hablo a las paredes. op. cit. p. 106.
6

Si el discurso capitalista promueve la ruptura del lazo social en el discurso, la


persistencia y globalización del mismo, sumados a la capacidad de penetración cultural
favorecida por los nuevos medios de comunicación, ha acelerado su incidencia en la
constitución de subjetividades. El discurso dominante contemporáneo produce
subjetividades afines a esta lógica: el goce en el consumo como modalidad que reniega de
toda limitación. La incidencia de estos valores de satisfacción en el consumo, potenciada
por su llegada cada vez más temprana y permanente en la vida de los niños y jóvenes, va
aplastando otros valores, ideales y tradiciones relacionados a lo familiar y regional. La
globalización comercial y comunicacional tiende a la imposición del valor de consumo y la
acumulación como modos universales de satisfacción en detrimento de otros ideales
transmitidos de una generación a otra.

Noviembre de 2021

Bibliografía

Alemán J. (1993) Cuestiones antifilosóficas en Jacques Lacan. Atuel.


Álvarez, A. (2006) La teoría de los discursos en Jacques Lacan - La formalización del lazo
social. Letra Viva.
Kait, G. (2005) La pulsión y el rechazo de lo femenino en el final del análisis. UNR Editora.
Lacan, J. (1978) “Del discurso psicoanalítico” en Lacan in Italia 1953-1978. La salamandra.
Lacan, J. (2012) Hablo a las paredes. Paidós.
Lacan, J. [1969-1970] Seminario 17 El reverso del psicoanálisis. Paidós.
Lacan, J. [1971-1972] Seminario 19…o peor. Paidós.
Lacan, J. [1974] “La tercera” en Intervenciones y textos 2. Manantial, 2° ed.
Lacan, J. [1972] Conferencia de Milán, traducción en: http://docs.wixstatic.com/
ugd/1cc484_0dbe9301e268404d987a4814f58b0dff.pdf
Lacan, J. (1985) “Kant con Sade”. Escritos 2. Siglo veintiuno editores XIII ed.
Uboldi, A. (2018). Violencias actuales. Fundamentos psicoanalíticos y transformaciones en
el lazo social. Editorial fundación la hendija.

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