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PRESENTACIÓN

“Los sueños son la fuerza capaz de transformar al mundo.


Las personas que sueñan, las sociedades que hacen
realidad sus sueños y el país que comparte sus sueños con todos sus habitantes,
pueden transformarse en los héroes de la historia mundial”.
Kim Woo-Choong

Un elemento distintivo del ser humano es su capacidad para soñar y a partir de sus sueños moldear su personalidad, orientar
su trabajo e incluso trazar su destino; porque los sueños contribuyen a forjar la historia de una persona, de un pueblo… de la
humanidad.

La experiencia que a continuación se presenta, nace precisamente de un sueño, un sueño colectivo que buscó impulsar la cons-
trucción de una sociedad más justa y con menos violencia y promover el tratamiento no violento de los conflictos, premisas
que poco a poco anidaron en el corazón de sus actores hasta convertirse en la guía de su accionar. Esta experiencia, es fruto de
la participación de gente que día a día mostró que es posible, cuando existe voluntad, construir un mundo mejor, para lo que
sólo se requiere mucha creatividad y voluntad. Es cierto que aún queda mucho por recorrer, aún existen injusticias, no se ha
erradicado la violencia y tampoco se puede afirmar que el tratamiento no violento de los conflictos es una práctica general, ni
siquiera en los centros educativos en los que se intervino; sin embargo, buscar que esta utopía se haga realidad, fue la brújula
que guió los pasos andados.

El Programa de Apoyo a la Gestión Pública Descentralizada y Lucha contra la Pobreza (PADEP/GIZ), desde el año 2002, ha apos-
tado por el trabajo en la gestión constructiva de los conflictos desde la educación, como ámbito potencialmente transformador
de la sociedad, con la finalidad de contribuir al fortalecimiento de la gestión gubernamental democrática y la participación
corresponsable de la sociedad. Esta tarea se vio fortalecida desde el 2007 con los aportes del Consorcio conformado por las
empresas COMO – BERGHOF – GOPA que por encargo de la GIZ, contribuyó a reconfigurar la propuesta inicial y le otorgó un
nuevo rumbo que hoy se plasma, en la incorporación del enfoque de Cultura de Paz en la política educativa en vigencia y que
trasciende de lo coyuntural hacia el cambio estructural.

Al cierre del PADEP y al concluir los procesos de asistencia técnica, se presentan las reflexiones sobre la práctica educativa desa-
rrollada. Este documento en sus seis capítulos desarrolla el diseño curricular, se exponen hechos que justifican el trabajo reali-
zado, para ello, se explicita la presencia de condiciones que generan violencia, se desarrolla un marco teórico conceptual básico
que orienta la iniciativa , contiene la propuesta educativa, el enfoque y el modelo educativo al cual se adscribe la propuesta.

El documento explica la propuesta curricular, la que se inscribe en la propuesta de Ley Avelino Siñani – Elizardo Pérez y se desa-
rrollan los fundamentos curriculares del diseño y la estructura curricular de la propuesta. Se destina a los lineamientos metodo-
lógicos, al enfoque didáctico, así como a algunos lineamientos, los recursos y la planificación de trabajo en aula y finalmente, se
desarrollan lineamientos generales para una evaluación de aprendizajes desde una perspectiva integral.

Dr. Dieter Kattermann Fernando Aramayo Carrasco


Coordinador del Programa de Apoyo a la Gestión Pública Coordinador del Componente
Descentralizada y Lucha contra la Pobreza “Transformación Constructiva de Conflictos”
(GIZ/PADEP) (GIZ/PADEP)

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INTRODUCCIÓN
Después de un exitoso proceso de pacificación entre ayllus vecinos del Norte de Potosí por un conflicto histórico de límites de
tierras, el Programa de Apoyo a la Gestión Pública y Descentralizada y Lucha contra la Pobreza (PADEP/GTZ), la Dirección Distri-
tal de Educación y un equipo conformado por docentes inicia, en 2002, una experiencia educativa que se desarrolla de forma
paulatina y participativa con el objetivo de fortalecer habilidades y destrezas en estudiantes y docentes, para resolver conflictos
tempranos sin recurrir a la violencia.

La iniciativa busca abordar las causas estructurales del conflicto, mediante el aporte al cambio de las relaciones sociales y de
comunicación y el trabajo en temas vinculados a los valores, democracia y Derechos Humanos.

Resultado de ello, el año 2007, el consorcio alemán COMO - Berghof for Peace Support – GOPA, por encargo del PADEP/GTZ,
decide apoyar el desarrollo de una propuesta de diseño curricular en Cultura de Paz, como mecanismo para institucionalizar su
práctica mediante su aplicación en el aula.

En un primer momento se construyó la primera versión del diseño curricular para la formación de estudiantes, que luego de una
etapa de validación, se ajusta en una segunda versión adaptada a los lineamientos de lo que entonces era el Anteproyecto de
Ley Avelino Siñani – Elizardo Pérez, y que hoy es una Ley en vigencia. Simultáneamente a la validación del diseño curricular para
la formación de estudiantes se construyó el diseño curricular para la formación docente, - que también es validado en la prácti-
ca-, pues se vio la necesidad de contar con maestros formados en el tema. Después de todo ese proceso, por un tema práctico,
de ordenamiento y con el fin de darle unidad, se decide fusionar ambas propuestas. Ya que si bien se habla de dos poblaciones
distintas, el diseño curricular responde a un solo fundamento, el encargo social a partir del cual se define el perfil de ciudadano
que se pretende formar con el Diseño Curricular en Cultura de Paz.

En los seis capítulos siguientes se desarrolla el diseño curricular. En el primero, se exponen hechos que justifican el trabajo en el
tema; para ello, se explicita la presencia de condiciones que generan violencia. El segundo capítulo, desarrolla un marco teórico
conceptual básico que orienta la iniciativa en tanto que el tercero, contiene la propuesta educativa, el enfoque y el modelo
educativo al cual se adscribe la propuesta.

El documento explica en el cuarto capítulo la propuesta curricular, la que se inscribe en la propuesta de Ley Avelino Siñani –
Elizardo Pérez. En este capítulo se desarrollan los fundamentos curriculares del diseño y la estructura curricular de la propuesta.
El quinto capítulo se destina a los lineamientos metodológicos, al enfoque didáctico, así como a algunos lineamientos, los re-
cursos y la planificación de trabajo en aula. Finalmente, en el último y sexto capítulo, se desarrollan lineamientos generales para
una evaluación de aprendizajes desde una perspectiva integral.

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CAPÍTULO I:
MARCO CONTEXTUAL
La propuesta curricular planteada se inscribe en una coyuntura nacional e internacional con múltiples formas de violencia.
Como señala Jarés1, la razón principal que demanda trabajar por la construcción de una Cultura de Paz tiene su origen en la
violación de los Derechos Humanos, la injusticia social, la precarización del trabajo, la pobreza y otras formas explícitas e implí-
citas de violencia. Así, los hechos que justifican el trabajo en favor de la Cultura de Paz en Bolivia, se explican en el contexto
internacional, nacional y educativo del país

1.1. Contexto Internacional

Históricamente la humanidad ha resuelto sus conflictos y diferencias mediante mecanismos violentos. Tragedias como la Prime-
ra y Segunda Guerra Mundial marcaron momentos de mucha violencia. También existen otros hechos violentos como guerrillas,
conflictos internos, actos de terrorismo y otros, que han despertado la conciencia sobre la importancia de preservar la paz.

No obstante, la humanidad también ha tenido la capacidad de cuestionar esta realidad, reflexionar sobre el tema y plantear algu-
nos mecanismos orientados a la promoción de la paz como: la Proclama del Año Internacional de la Cultura de Paz por la Asamblea
General de las Naciones Unidas; la Declaración de la Década Internacional de la Cultura de Paz y de la No violencia para los niños del
mundo2; la elaboración del Programa de Acción sobre una Cultura de Paz, con medidas para fomentar la Educación para la Paz.

En el ámbito educativo, también se han generado acciones que abonan el camino para el trabajo en Educación para la Paz. El
Informe a la UNESCO de la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI3, plantea que la educación debe funda-
mentarse en cuatro pilares: 1) aprender a conocer, 2) aprender a hacer, 3) aprender a vivir juntos y, 4) aprender a ser. El tercer
pilar constituye en fundamento para trabajar el tema de la Paz, en un marco de pluralismo y comprensión mutua.

1.2. Contexto Nacional

Con similares características, en Bolivia se desarrollan transformaciones que emergen de la necesidad de superar la violencia
estructural, producto de un Estado colonial y republicano.

De hecho, Bolivia presenta un conjunto de problemáticas de orden estructural que surge como efecto de la construcción de
un Estado poco inclusivo. La discriminación, el racismo y la exclusión han atravesado las relaciones y polarizado al país. Aún
permanecen en la memoria varios sucesos que tensionaron la convivencia y dieron lugar a hechos violentos. El año 2000, mo-
vilizaciones y protestas sociales violentas desembocaron en la denominada “Guerra del Agua”. Este acontecimiento desnudó
una crisis de Estado y el fortalecimiento de los movimientos sociales y populares. En los años 2001 y 2002 los campesinos del
altiplano de La Paz y los productores de hoja de coca del Chapare protagonizaron movilizaciones que fueron una expresión de
la resistencia al modelo vigente4. La conflictividad social se agudizó y el 2003 desencadenó un enfrentamiento entre policías y
militares. Y posteriormente el mismo año, un enfrentamiento entre militares y sociedad civil denominado “Guerra del Gas”, que
desembocó en actos de violencia que cegaron muchas vidas humanas.

Todos esos eventos reflejaron una situación de convivencia tensionada en la que emergieron situaciones invisibilizadas o en-
mascaradas en situaciones de aparente pasividad. Entre estas se puede mencionar los altos índices de pobreza, desempleo,
terciarización de la economía y otro tipo de efectos.

1 Jarés, Xesús, R. Educar para la paz después del 11/09/09. Bilbao. Cuadernos Bakeaz. 2002.
2 www.unesco.org/cpp/sp/proyectos.
3 Jacques Delors. La Educación encierra un tesoro. Ediciones UNESCO. Santillana. 1996
4 Ibidem.

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Por otra parte y en esos momentos, existía una relación asimétrica entre personas del campo y ciudad, y entre quienes se
consideran indígenas, mestizos o extranjeros. Esto se muestra en la discriminación a la que han estado sometidos los pueblos
indígenas, que a pesar de ser 62% de la población, según el Censo de Población y Vivienda de 2001, históricamente han estado
excluidos de las políticas públicas.

En síntesis, en Bolivia la violencia estructural y cultural forma parte constitutiva de su historia. Sin embargo, ahora cuando hay
una nueva Constitución Política del Estado, promulgada en 2009, el contexto boliviano es más propicio para trabajar por la Paz,
ya que nuestra Carta Magna otorga rango constitucional al trabajo por la Cultura de Paz.

Artículo 10º. I de la CPE: Bolivia es un Estado pacifista, que promueve la cultura de la paz y el derecho a la paz, así como la coopera-
ción entre los pueblos de la región y del mundo, a fin de contribuir al conocimiento mutuo, al desarrollo equitativo y a la promoción
de la interculturalidad, con pleno respeto a la soberanía de los estados.

Este marco normativo justifica la promoción de la Cultura de Paz; no obstante, hace falta avanzar en la materialización de esos
principios.

1.3. Contexto Educativo Boliviano

Con la Ley Nº 1565 de Reforma Educativa (1994), Bolivia se adhirió a los intentos por garantizar una educación para todos. Sin
embargo, pese a los recursos invertidos, no se logró los resultados esperados; no sólo respecto a la solución de problemas
educativos de orden histórico, sino al mejoramiento de la calidad educativa. Actualmente, con la Ley de Educación Avelino
Siñani - Elizardo Pérez se vive una reformulación profunda como parte de los cambios impulsados con la Constitución Política
del Estado5.

Las características del contexto educativo también muestran la necesidad de superar una realidad excluyente y discriminatoria
y justifican la necesidad de trabajar una propuesta de Educación para la Paz. Algunos aspectos característicos de la realidad
educativa muestran6:

− Altos índices de deserción escolar, aún mayor en área rural, condicionados por causas vinculadas a problemas
pedagógicos y pobreza. Las tasas de abandono escolar alcanzan a 7% en área rural y 5,5% en área urbana7.
− Baja calidad educativa, que pone en desventaja a los estudiantes del sistema fiscal frente al sistema privado, a
los de área rural frente a los de área urbana.
− Un sistema educativo excluyente, que marca una clara división entre educación de primera, de segunda y hasta
de tercera clase.
− Relaciones de género desiguales, vinculadas a los roles tradicionales de género que la escuela reproduce y que
sitúan a la mujer en situación de desigualdad y que contribuyen al acceso inequitativo a la educación entre
hombres y mujeres.
− Relaciones de poder desequilibradas, determinadas por relaciones de coerción y violencia contra los estudian-
tes, cuyo trato con los demás actores de la escuela es desigual.

Todo esto se resume en la falta de igualdad de oportunidades para el acceso, la permanencia, conclusión y la calidad en el siste-
ma educativo nacional, aspectos que reforzaron la situación de exclusión de determinados sectores de la sociedad.

5 La Asamblea Legislativa del Estado Plurinacional ha promulgado Leyes Fundamentales: Ley del Órgano Electoral, Ley del Órgano Judicial Plurina-
cional, Ley Marco de Autonomías y Descentralización, Ley del Órgano Electoral Plurinacional y Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional.
6 Primer avance de la Propuesta Curricular para la Formación Escolar: Componente 4/PADEP/GTZ (2008)
7 Plan Nacional de Desarrollo: Bolivia Digna, Soberana, Productiva y Democrática para el Vivir Bien. 2006.

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