INSTITUTO DE MEJORAMIENTO PROFESIONAL DEL MAGISTERIO EXTENSIÓN ACADEMICA VALENCIA
“QUINTA LA CONCEPCIÓN”
Tutor Académico: Autor:
MSc. Eduardo Salguero. Adriana E. Rojas V.
C.I.: 11.521.963.
Educación Primaria.
Valencia, Abril 2023
La Quinta la Concepción, ubicada en Yagua, parroquia del municipio Guacara del Estado Carabobo, es considerada parte del acervo histórico de ese municipio, pero ha estado abandonada y en estado de deterioro durante varios años. Sin embargo, en fechas recientes, específicamente el 22 de Enero del 2022 y por iniciativa del Lic. Carlos Criollo junto a la comunidad organizada, mediante jornadas de limpieza, eliminación de escombros y acondicionamiento de los espacios y áreas verdes, llevando a cabo el proyecto de rescate y restauración de este patrimonio.
Esta propiedad de grandes espacios y amplios terrenos, construida en el año
1919, guarda historias de luz y de sombras. Sus primeros dueños fueron los Wallis, familia adinerada proveniente de Italia, pasando luego a manos de Antonio Pimentel. Lo más emblemático es su arco, que data del año 1900, en donde están grabadas en un escudo las iniciales “AP”, símbolo de Antonio Pimentel, y el año 1930, la fecha en que la quinta pasa a ser de su propiedad.
Su fachada, ha sufrido diversas modificaciones, manteniéndose en gran parte
su estado original. Según datos testimoniales y elementos característicos de la edificación, en su diseño o remodelación intervino el Arq. Carlos Raúl Villanueva. Los árboles de caoba que allí prevalecen son centenarios. En su jardín, se proyectaban películas de forma gratuita, antes de su presentación en Caracas, trabajadores de la quinta y público en general tuvieron el privilegio de disfrutar de los estreno de la época. Siendo uno de los primeros cines a cielo abierto en Yagua.
Entrando a la quinta, en lo alto de su pasillo se conserva intacto un mosaico de
la Virgen de la Inmaculada Concepción, obra de arte de más de 100 años que el paso del tiempo no ha podido deteriorar, considerándose un hermoso tesoro. Una gran sala con tres entradas, (dos de frente y una lateral), una de las cuales llegaba al despacho de Pimentel. Con dos escaleras: una de caracol (única en la época) para invitados que no tenían relación con Pimentel, y una de madera (la cual aún se conserva) para él y sus invitados especiales, ya que Pimentel era muy elitista.
Cada detalle del diseño de la quinta es peculiar y lujoso: arabescos, columnas,
capiteles, puertas ojo de camello, ventana con vitrales, techo de madera a dos aguas, ventanales, grandes salones cada uno con mosaicos diferentes en sus pisos, los cuales han permitido saber la totalidad de salones que habían, baño angosto con balcón (algo extraño), corredores conectados a otras áreas, cocina, túnel (entrada sellada) cuya salida llegaba al rio (no se sabe si será cierto o no).
Otra particularidad especial de la Quinta la Concepción es el Templete
ubicado en la terraza, diseñado con acústica, escenario para las diversas celebraciones que allí hacían, donde el sonido de la música se expandía por los alrededores debido a la acústica que se generaba en ese lugar. Y en los espacios abiertos de la terraza estaba el salón de baile. Cuando Pimentel comía, había músicos que le tocaban, y que su compadre Juan Vicente Gómez visitó la quinta en varias oportunidades; “vístanse de gala porque viene el general a Yagua”, decían las abuelas.
En 1935 a la muerte de Gómez, la quinta fue saqueada y destrozada. En el año
1960 modifican algunos de sus espacios: división de salones y oficina, para crear la Escuela Técnica o Artesanal. Pasando a ser de uso educativo para otras instituciones.
Actualmente, la quinta es utilizada por diversas agrupaciones que hacen vida
en sus espacios, niños, jóvenes y adultos reciben clases de canto, coral, ajedrez, karate, bailoterapia, yoga, y donde artistas y cultores de yagua hacen sus presentaciones.
A modo de conclusión, la Quinta la Concepción ha pasado por varios
procesos: Los Wallis, Antonio Pimentel y momentos educativos. Dentro de sus espacios y alrededores existen infinidades de vivencias y cada uno de los detalles que la conforman son particulares. Este patrimonio histórico y sentido de pertenencia de los yagueros, es digno de rescate y restauración, para que todos, propios y visitantes, incluyendo a las futuras generaciones, puedan conocer esa joya arquitectónica, percibir sus maravillas y preservar su historia.