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losTITULO

El Museo de la Ciudad de México como espacio de discursos para la Ciudad.

Introducción

Hoy en día la Ciudad de México es una de las ciudades con mayor oferta cultural en
Latinoamérica y el mundo, su centralidad es importante para entender la configuración
del espacio y cómo es que se sitúa la cultura en el contexto urbano en los momentos
actuales.

De tal manera, que es importante saber el papel de los museos en estas dinámicas
espaciales y sociales para entender cómo se vinculan los habitantes y visitantes del
Museo de la Ciudad de Méxicoy qué tipo de interacción tienen con los espacios de
exposición en general, la información arrojada por las encuestas de prácticas y
consumo culturales elaboradas por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes
(Conacultaen 2002, 2004 y 2012,) demostraron que la población mexicana en general
mostró un escaso interés por la cultura y, en especial, la historia.Dicha información
revela que los museos tienen muy poca o casi nula asistencia de la sociedad, un lugar
muy por debajo de los primeros lugares en asistencia por parte de la sociedad en 2002,
no figuran los museos; en 2004, solo 23% asistieron una vez durante ese año; y en
2012, 62% de los encuestados acudieron a un recinto cultural, pero no especificaron de
qué tipo.

En este sentido el trabajo de investigación que se pretende desarrollar es


novedosodesde la perspectiva históricacomo una nueva mirada a la magnificencia que
constituye el Museo de la Ciudad de México y que pocos trabajos abordan este aspecto
investigativo.

EL PROBLEMA
La sociedad está inmersa en una profunda crisis que la identifica dentro de un
cambio de era, la cual implica sustitución de esquemas, valores y principios a una
velocidad vertiginosa que la humanidad debe estar preparada para asimilar. Por lo
tanto, para una interpretación correcta de estos cambios profundos de época se hace
necesario abrir una vía en la que cada individuo maneje bajo su responsabilidad toda la
información, todo el conocimiento que pueda sobre sí mismo y sobre lo que acontece
en su mundo. De allí que, en las circunstancias y el momento necesario deberá decidir
inteligentemente con el apoyo de la información aportada por el sistema educativo y
reforzada por el sistema museístico, entre otros, su transformación y crecimiento
personal como su participación efectiva en la transformación de su sociedad.

De tal manera, que para lograr este propósito el sistema museístico en México como
espacio no sólo se ha transformado de manera física, sino también ha sufrido una
evolución sustancial con la llegada de las tecnologías de la información y la
comunicación, además con la entrada a una sociedad de la información, muchos de los
museos alrededor del mundo, y sobre todo en los países más desarrollados, han
aprovechado este estatus social para incorporar en sus salas de exposiciones
diferentes equipos tecnológicos a través de los cuales se muestran documentales,
videos, líneas cronológicas con fotografías, infografías interactivas, entre otras, que
complementan, dan vida y contextualizan los espacios.

Al respecto, Pérez (2016) afirma que el museo sigue la pauta de la preservación y


conservación de objetos y materiales importantes para conocer la trascendencia
histórica de la humanidad, tanto en el ámbito cultural y científico como natural. Es una
actividad que se puso en marcha desde hace décadas atrás y que debe su importancia
al hecho de que generaciones han tenido la oportunidad de conocer el significado
histórico de la actividad humana desde diferentes perspectivas, y que debido al carácter
conservacionista del patrimonio se han creado espacios alrededor del mundo, donde se
pueden observar y participar de exhibiciones.

En este sentido, los museos constituyen parte fundamental de la cultura de todo


ciudadano por diversas razones, por ejemplo, ocio, difusión de las ciencias,
conservación del patrimonio o como una herramienta para afianzar los conocimientos
que se adquieren en la escuela, como parte de ese desarrollo social de la población.
Uno de los aspectos más actuales y apasionantes de la evolución del museo, es la
aplicación de las tecnologías del momento. Este proceso que involucra el de la
globalización y la introducción de nuevas tecnologías de información y comunicación
(TIC), en todas las esferas culturales, como lo es la virtualidad, tomando en
consideración los museos,

Al respecto, las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) permiten que


las personas puedan acceder a información sobre ciertos conjuntos patrimoniales
culturales y naturales a los que de otra manera no lograrían conocer. En opinión de
Alderoqui (2008), el uso de las TIC como los multimedia dentro del museo permite
además la dinamización del espacio museístico, pudiendo aplicarse sobre la misma
exposición permanente como recurso expresivo transitorio; permite la adecuación del
medio de comunicación con el público (ya sea infantil o adulto, acostumbrado a "ver").
Finalmente, la estructuración de varios contenidos semánticos expositivos en función de
distintos niveles de educación y preparación del visitante.

Por lo tanto, el uso de las TIC irrumpe en todas las esferas de la vida social, incluidas
las prácticas desarrolladas por los museos, porque muestra de forma virtual las
diferentes etapas e historia de los grupos sociales hasta llegar a la actualidad, cobrando
un papel importante al ser un agente activo, esta institución no sólo es la encargada de
preservar, restaurar y exponer los bienes materiales históricos y patrimoniales del
hombre, sino también como espacio de socialización donde convergen y albergan
múltiples datos e historia del Continente. De allí que, los museos buscan trasmitir el
conocimiento histórico y educar sobre la historia de una región o de una época en
particular con la exhibición de objetos, y este propósito se ha cumplido cabalmente en
los últimos años.

Es importante destacar la opinión de diferentes teóricos al señalar que del museo se


tiene la concepción de ser una institución no lucrativa, que acopia, conserva, investiga,
comunica, interpreta y representa el conocimiento, el patrimonio cultural y natural con
fines educativos sobre la historia o de entretenimiento.
Zubiaur Carreño (2004) presenta la siguiente definición

El museo entendido como “aquella institución permanente sin fines de


lucro, al servicio de la sociedad y su desarrollo, abierta al público, que
adquiere, conserva, investiga, difunde y expone los testimonios
materiales del hombre y su entorno para la educación y deleite del
público que los visita” se ha convertido en un instrumento de atención y
uso para fines o intereses propios, de esta forma ha aumentado su
atracción entre algunos sectores determinantes del mundo de los
negocios, finanzas y relaciones públicas

Vale acotar que las primeras definiciones oficiales surgieron en este siglo a raíz del
nacimiento del Consejo Internacional de Museos (ICOM) en 1946, como institución
encargada de la promoción y protección del patrimonio cultural, natural, material e
inmaterial, de la humanidad y que en su estatuto de 1947 en el artículo 3 enunció que
se reconoce la cualidad de museo a “toda institución permanente que conserva y
presenta colecciones de objetos, de carácter cultural o científico con fines de estudio,
educación o deleite.

Al respecto, Serrat (2005), afirma que durante aproximadamente diez siglos los
museos fueron casi desconocidos por la mayoría de la población: eran espacios fuera
del alcance y del interés de las clases sociales medias y bajas. Pero, por ser el mismo
una institución que, a lo largo del tiempo ha desarrollado formas particulares de
comunicación y ha generado diversos conocimientos y estrategias para divulgarlos le
ha permitido mantenerse presente en el desarrollo y evolución de la humanidad.

De igual manera, en esta situación de cambios, se debe tomar en consideración la


participación del personal que labora en estos espacios y la preparación que tienen
para afrontar dichos cambios, siendo la clave del éxito para subsistir ante las
adversidades que se han presentado en estos dos últimos años.Los museos, como
contenedores patrimoniales, precisan de un personal especialista en tratar tanto a los
temas como a los bienes, los cuales son objeto de estudio que movilizan saberes,
proporcionan información y en general conocimiento más allá de sí mismos.
Hoy los museos, como espacios interactivos y no contemplativos pueden emplearse
tanto fuera como dentro del mismo: como medio didáctico, como medio de proyección
al exterior y como medida de competencia. Aunado a esto, sirven de apoyo a los
programas escolares oficiales, además son espacios de interacción social que permiten
aprender, entender y reforzar la identidad nacional como herencia cultural.

Por lo tanto, si los museos presentan discursos incluyentes de la diversidad, en


todos los sentidos, e incorporan también versiones alternativas de las historias; tal cual
lo plantea Giménez (2009), muy seguramente permitirán valorarla positivamente,
estimulando la autoestima, la creatividad, el orgullo de pertenencia, la solidaridad
grupal y la voluntad de autonomía, construyendo así identidades fuertes. De lo contrario
la percepción negativa de la propia identidad seguirá generando frustración,
desmoralización, complejo de inferioridad, insatisfacción y crisis. De allí que, los
museos están revisando y ampliando sus discursos, reconociendo los sesgos de sus
contenidos y perspectivas, y las exclusiones que éstos suponen, a fin de incluir una
mirada más abierta y plural sobre los conocimientos que difunden

Es importante resaltar que el museo como espacio donde se construyen discursos


históricos es también un lugar en el cual se da una retroalimentación, es el puente e
intérprete entre el artista y el público. Para Hernández (1992) el museo es un medio de
comunicación de masas en donde la información se comparte de manera rápida y
eficiente que lo orientan a desempeñar un papel significativo en la democratización de
la cultura en este contexto global.

Cada vez más, los museos deben ofrecer un servicio que realmente merezca la visita
del público, convirtiendo la satisfacción del visitante en el factor generador de
audiencias más significativaspara la construcción de la identidad individual de
mexicanas y mexicanos. Al respecto, Touraine (2003) plantea que los museos no
pueden continuar siendo un mausoleo que guarde las mejores obras de la humanidad y
de la naturaleza, su misión debe ir mucho más allá.

Por lo tanto, toda la labor generada por el Museo de la ciudad de Mexico (MCM) para
dotar de significado a los espacios encargados de salvaguardar el patrimonio ha
permitido la generación de sustentos teóricos que abren espacios para comprender al
museo en su totalidad, y con ello forjar un desarrollo de él como institución en todo el
mundo. Dentro de una visión más práctica, la visión del museo hoy en día permite al
hombre relacionarse con su realidad sin obviar su historia. El asunto central es
constituir un discurso museográfico en el que participen de manera retórica, narrativa y
verosímil, los objetos de la exposición que componen una gramática de reconocimiento
y participan de una actividad interdiscursiva.

Por su parte Alderoqui, (obcit) se orienta a definir que el museo es un organismo vivo
que no deja de desarrollarse y nunca está completo. Una institución permanente no
lucrativa, al servicio del desarrollo de la sociedad y abierta al público, que adquiere,
conserva, investiga, comunica, y exhibe con fines de estudio, educación y
entretenimiento, la evidencia material del hombre y su ambiente. Bajo una concepción
estructuralista, el museo funge como un interlocutor social.

Es innegable referir que los museos son un fenómeno de comunicación donde se


construyen discursos históricos y va más allá de ser un espacio que resguarda y exhibe
objetos antiguos los cuales reflejan el pasado y marcan los acontecimientos realizados
que permiten comprender el presente y proyectar un futuro. Por consiguiente, el museo
es y ha sido considerado siempre un espacio de gran importancia territorial, en donde la
confluencia social y la toma de decisiones gubernamentales han incidido en temas
culturales y urbanos significativamente.

Todo lo antes descrito, conlleva a plantear las siguientes interrogantes:

¿Cuál es la importancia de la difusión y promoción de la información recopilada referida


al museo como espacio de discursos históricos en México?, ¿Es necesario conocer las
funciones que cumple el museo en México?, ¿Es importante demostrar que a través de
la promoción y difusión del museo los ciudadanos tendrán la oportunidad de mejorar su
relación con la historia?

Objetivos

General
Generar mediante la recopilación de información una reflexión en torno al contexto
actual del Museo de la Ciudad de México como espacio que construye discursos
históricos para la Ciudad de México.

Particulares

1.-Analizar la información recopilada referida al museo de la Ciudad de México como


espacio de discursos históricos en de la Ciudad de México.

2.-Describir las funciones que cumple el museo de la Ciudad de México.

3.-Demostrar que a través de la promoción y difusión del museo de la Ciudad de México


los ciudadanos tendrán la oportunidad de mejorar su relación con la historia.

JUSTIFICACIÓN

La noción de museo que en el siglo pasado se manejaba ha cambiado con la llegada


de nuevos aprendizajes junto a la tecnología y variadas formas de presentar la
información, y al igual que la sociedad evoluciona el concepto de Museo lo hace
también, pues; ya no se le considera un espacio frio y distante, que sólo la elite visita.
De acuerdo a Touraine (Obcit) refiere que se debe percibir al museo como una
institución amplia de múltiples arista que facilita la adquisición de conocimientos, un
lugar de aprendizaje que radica su importancia en el acercamiento entre el sujeto y la
información que fluye no solamente en lo expuesto sino en el accionar biunívoco, sujeto
- museo.

En los actuales momentos, la Secretaría de Educación Pública en México lo concibe


como un recinto de extensión educativa, que apoya la educación formal de los
estudiantes mexicanos, lo que plantea una relación intrínseca e indispensable con el
sector educativo del país (Secretaría de Educación Pública, s.f.); sin embargo, la
función del museo traspasa la educación formal impactando en toda la población que lo
visita.
De este modo, se percibe al museo como un contexto de aprendizaje no formal y
posibilita que el visitante adquiera conocimientos, habilidades y destrezas; desarrolle
una comprensión crítica; aumente su interés y fomente actitudes de protección y
cuidado de la herencia cultural por la historia además se vea reflejado en las acciones
realizadas por los antepasados que marcaron el accionar de esta nueva generación

Es por ello que la presente investigación se hace relevante desde el ámbito académico:
la misma busca participar en los estudios referentes al Museo de la Ciudad de México,
estimar su presencia en el ámbito de las comunicaciones y así generar mediante la
recopilación de información una reflexión en torno al contexto actual del Museo de la
Ciudad de México como espacio que construye discursos históricos de la Ciudad de
México, con el propósito de establecer pautas a seguir para la divulgación de los
resultados que se obtengan.

Otro aspecto que justifica el abordaje del tema en cuestión es la necesidad de


analizar, describir y demostrar que a través de la promoción y difusión del museo de la
Ciudad de México los ciudadanos tendrán la oportunidad de mejorar su relación con la
historia. Además, la investigación busca formar a las personas desde los derechos
humanos y sociales que tienen todas las personas sin distingo de género, raza o clase
social.
Por último, este estudio pretende ser punto de referencia para futuras investigaciones
donde se promueva la participación de la población mexicana fortaleciendo los vínculos
sociales,sus componentes y todas las capacidades cognitivas que le puede
proporcionar la información histórica recibida.

Querido Carlos,

La propuesta es interesante y pertinente, pero requiere un planteamiento en donde el


problema que has detectado con respecto a las formas contemporáneas de concebir los
museos sean explicada en relación al recinto de la Ciudad de México. Es decir,
necesitas desarrollar un proyecto de investigación que te permita, desde la justificación,
el planteamiento de la hipótesis y los objetivos, demostrar, analizar y explicar la
problemática que te interesa resolver.

En principio necesitas decidir qué es lo que quieres hacer, una tesis, una tesina, un
ensayo o un artículo especializado; dependiendo de ello, tendrás que desarrollar un
protocolo con todas las partes que requiere; de ello dependerá la resolución más
adecuada para tu investigación y aportará no sólo en el conocimiento de las propuestas
actuales para los museos, si no, específicamente en el de la Ciudad de México.

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