COMPROMISO Y DESPEDIDA
PRESIDENTE: En el evangelio de San
Juan 8,12 Jesús nos dice: ”Yo soy la
luz del mundo. El que me sigue no
caminara en tinieblas”.
El Señor Jesús es la luz del mundo,
pensemos cuanto necesito que esa luz
penetre en mi corazón para que me
muestre la grandeza de mi vocación.
Necesitamos que esa luz ahonde en
nuestras almas para que no quede
nada a oscuras, que todo sea
iluminado por el amor de Dios.
MONITOR: Pidámosle a Santa María
con confianza filial, que nos enseñe a
tener a su Hijo en el centro de nuestros
hogares, conscientes que es Él quien
protege a nuestras familias. Como
símbolo de ello cada familia
encenderá una velita mientras
cantamos: “Salve, salve”
Salve, salve, cantad a María,
que más pura que tú sólo Dios
y en el cielo una voz repetía:
Más que tú, sólo Dios, sólo Dios.
Con torrentes de luz que te inundan,
los arcángeles besan tus pies,
las estrellas tu frente circundan,
y hasta Dios complacido te ve.
Pues, llamándote pura y sin mancha,
de rodillas los mundos, están,
y tu espíritu arroba y ensancha
tanta fe, tanto amor, tanto afán.
¡Ay! bendito el Señor que en la tierra
pura y limpia te quiso formar,
como forma el diamante la sierra,
como cuaja las perlas el mar.
PRESIDENTE: La tristeza de los
discípulos de Emaús se convirtió en
gozo y alegría cuando reconocieron a
Jesús. Y lo reconocieron precisamente
“en el partir el pan”, es decir, allí donde
Jesús se hace real y presente en medio
de nosotros, en “la Santa Misa”.
CATEQUESIS EN FAMILIA II ETAPA
PRIMERA CELEBRACIÓN
Nos reunimos para continuar nuestra aventura,
Necesitamos cristianos a quienes se les
de seguir unidos hacia el encuentro de Jesús.
“Abran los ojos y los oídos cuando
asisten a una Eucaristía” Que puedan
exclamar “Es El”, Cristo vivo en
medio de nosotros.
Por eso nuestro compromiso en este
nuevo año y toda nuestra vida debe ser:
Participar de la Misa activamente y
reconocer a Jesús Eucaristía.
MONITOR: Que la luz de Jesús guie
siempre nuestros pasos y nos conduzca
a ser familias portadoras de esa
maravillosa luz. Que el compromiso que
realizamos no quede en palabras y que
se convierta en hechos, para que juntos
podamos llegar a la meta deseada que
es la Vida Eterna.
Digamos todos la oración que nos dejo el
Señor…
“Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre,
Padre nuestro…. allí estoy yo en medio de ellos” (Mt. 18,20)
TODOS: En el nombre del Padre y del SEGUIMOS CAMINANDO CON JESUS
Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
MONITOR: Despidámonos cantando: PRESIDENTE: ¡Bienvenidos, familia, daremos inicio a nuestra
padres, niños, joven catequista! Les celebración cantando:
“Cristo está conmigo”
damos una afectuosa bienvenida a
cada uno de ustedes, entusiasmados “Juntos cantando la alegría”
CRISTO ESTÁ CONMIGO
JUNTO A MÍ VA EL SEÑOR; de poder continuar con el proceso de
iniciación a la Vida Eucarística de sus Juntos cantando la alegría
ME ACOMPAÑA SIEMPRE
hijos que empezamos el año pasado; de vernos unidos en la fe y el amor
EN MI VIDA, HASTA EL FIN. año en el que hemos vivido momentos
juntos sintiendo en nuestras vidas
Ya no temo, Señor, la tristeza; importantes en nuestra vida de fe y de la alegre presencia del Señor.
ya no temo, Señor, la soledad; experiencia cristiana, año en el que
porque eres, Señor, mi alegría, algunos seres queridos ya no están Somos la Iglesia peregrina que El fundó,
tengo siempre tu amistad. con nosotros por esta pandemia, pero somos un pueblo que camina sin cesar,
aun en medio de todo seguimos con la y entre cansancios y esperanzas hacia
Ya no temo, Señor, a la noche, alegría de querer ser discípulos Dios, nuestro amigo JESÜS nos llevará.
ya no temo, Señor, la oscuridad; misioneros de Cristo.
porque brilla tu luz en las sombras, Hoy en este tiempo de Pascual y de Hay una fe que nos alumbra con su luz,
ya no hay noche, Tú eres luz. alegría reiniciaremos el camino, que una esperanza que empapó nuestro
nos acercará más a Jesús, el Señor de esperar, aunque la noche
la Vida, y a nuestros hermanos. nos envuelva en inquietud
MONITOR: Con la alegría que nos nuestro amigo JESÚS nos guiara.
embarga de estar juntos otra vez en

PRESIDENTE: En el nombre del Padre,
y del Hijo, y del Espíritu Santo.
TODOS: Amén.
PRESIDENTE: El Amor de Dios esté
con nosotros.
TODOS: Y con toda la comunidad.
PRESIDENTE: Estamos reunidos en
esta celebración, para darle gracias a
Dios por las bendiciones que recibimos
durante la I etapa de Catequesis en
Familia y decirle que queremos seguir
acogiendo el llamado que nos hace
Jesús, por eso, invocaremos al Espíritu
Santo, fuente de toda sabiduría, para
que guíe nuestra celebración.
CONCEDENOS EL DON DEL
DISCERNIMIENTO, PARA QUE NO
DEJEMOS QUE NUESTRAS
ACCIONES SE GUIEN POR
PERJUICIOS Y FALSAS
CONSIDERACIONES.
CONDUCENOS A LA UNIDAD EN TI,
PARA QUE NO NOS DESVIEMOS DEL
CAMINO DE LA VERDAD Y LA
JUSTICIA, SINO QUE EN NUESTRO
PEREGRINAJE TERRENAL NOS
ESFORCEMOSPOR ALCANZAR LA
VIDA ETERNA
ESTO TE LO PEDIMOS A TI, QUE
OBRAS EN TODO TIEMPO Y LUGAR,
EN COMUNION CON EL PADRE Y EL
HIJO POR LOS SIGLOS DE LOS
SIGLOS. AMEN.
JOVEN CATEQUISTA:
La llamada es clara y viene de DIOS,
ponernos en camino juntos, con
Cristo y en Cristo, para vivir esta
experiencia sinodal. Somos invitados
a escucharnos mutuamente, a
reconocernos en nuestro ser Iglesia,
descubriendo el valor y la urgencia
de la comunión y la fraternidad
ORACION PARA EL SINODO
ESTAMOS ANTE TI ESPIRITU SANTO
REUNIDOS EN TU NOMBRE.
TU QUE ERES NUESTRO VERDADERO
CONSEJERO VEN A NOSOTROS,
APOYANOS, ENTRA EN NUESTROS
CORAZONES.
ENSEÑANOS EL CAMINO,
MUESTRAMOS COMO ALCANZAR LA
META.
IMPIDE QUE PERDAMOS EL RUMBO
COMO PERSONAS DEBILES Y la Eucaristía encontramos el consuelo
PECADORAS.
NO PERMITAS QUE LA IGNORANCIA
NOS LLEVE POR FALSOS CAMINOS.
Eco Bíblico : Mc 3,13-19
JOVEN CATEQUISTA: Dialoguemos
1.- En la propia Iglesia local, nuestra
parroquia, ¿Quiénes son los que
“caminan juntos”?
2.-Cuando decimos “nuestra Iglesia”,
¿Quiénes forman parte de ella y
quienes no, y por qué son dejados al
margen?
3.-¿Cómo nos habla Dios a través de
voces que a veces ignoramos.
JOVEN CATEQUISTA:
SINTESIS DE LA SECION
POR UNA IGLESIA SINODAL :
COMUNION
PARTICIPACION
MISION
LITURGIA DE LA PALABRA
PRESIDENTE: Queremos seguir
caminando con Jesús, deseamos
profundizar en el seguimiento del
Señor, a la luz de este encuentro
quisiera que ustedes compartan con
nosotros que acontecimientos han
vivido en este último tiempo, ¿cómo
estuvieron sus vacaciones, han
experimentado la presencia de Jesús
en este tiempo?, ¿extrañaron la
catequesis?, ¿han participado de la
Eucaristía, de la vida de oración?
MONITOR: Ahora escucharemos la
Palabra de Dios, que nos vivifica y
nos anima a mirar nuestra vida a la
luz del Señor. Lo haremos con un
corazón atento y dispuesto.
Cantemos todos: “Tu Palabra me
da vida, confío en ti, Señor. Tu
Palabra es eterna, en ella
esperare”.
Lector 1: Del Evangelio según
San Lucas: 24,13-35
TODOS: Hacemos la señal de la
cruz y decimos: “Gloria a Ti
Señor”
Terminada la lectura decimos:
“Gloria a Ti, Señor Jesús”
PRESIDENTE: Haremos unos
minutos de silencio para que la
Palabra de Dios penetre en nuestro ser.
MONITOR: Dialoguemos
1.- ¿Qué frases me han llamado más
la atención del evangelio?
2.- ¿He descubierto al Señor en mi
vida durante la Primera Etapa de
Catequesis?
3.- ¿Qué cosas ha hecho por mí el
Señor y por qué le doy gracias?
PRESIDENTE: Los discípulos de
Emaús, cuando caminaban con sus
dudas y bajo la tentación del
desánimo, escucharon las palabras
consoladoras de Jesús. Cristo les hizo
ver que, en muchas ocasiones, sus
caminos no son los nuestros, por eso,
es necesario vivir con una fe profunda
y luminosa que nos lleve a la
aceptación amorosa de la voluntad de
Dios en nuestra vida. Justamente en
y la fuerza para seguir luchando aún
en medio de las dificultades y
contrariedades de la vida.
MONITOR: Cantemos:
DANOS HOY HAMBRE DE DIOS,
ALIMÉNTANOS, SEÑOR,
Y QUE EL FRUTO DE TU AMOR
LIMPIE EL RENCOR, NOS DE LA PAZ,
TRAIGA EL PERDÓN.
Hacia Emaús iban dos amigos,
sintiendo gran tristeza por Jesús;
y no supieron que el mismo Cristo
era quien iba en su camino.
La noche está muy avanzada dijeron los
amigos de Emaús; y cuando vieron el pan
partido, reconocieron a Cristo vivo.
El pan que todos compartimos
en una misma comunión,
es el encuentro con Cristo hermano,
que dio su vida para salvarnos.
Yo soy el pan que da la vida,
nos dijo a todos el Señor,
y aquella noche, mientras comían
el pan de vida, se dio en comida.