Está en la página 1de 11
UNidad T ARTICULACIONES: DESARROLLO, HISTORIA Y ESTRUCTURA Lic. Maria Andrea Negrete Para el psicoanalisis, ubicar 2 un nifio implica una diferencia fundamental entre estructura y desarrollo. Hablar desde el punto de vista estructural nos permite ir mas allé de lo cronolégico; implica descifrar la logica del sujeto que resulta de la operacién de la estructura y que esté mas alld de Ia diacronia de la edad. El que los psicoanalistas nos separemos de la nocién de desarrollo, no significa que el factor tiempo no sea tomado en cuenta o quede descartado. Mas bien implica considerar tun tiempo légico, que abrocha la estructura y cuya lectura sitia los movimientos I6gicos y sus consecuencias, en los cambios de posicién del sujeto. Es necesario también un tiempo para que el tiempo légico se despliegue y produzca sus efectos. Tener esto en cuenta no ¢s entrar en etapas evolutivas, sino considerar que el tiempo es un factor necesario para que un nifio llegue 2 adulto; es decir, un tiempo para que su relacién con el goce quede decidida, en tanto la entrada en la reproduccién sexual implica un real diferente y, por tanto, una nueva posicién frente al goce. Sabemos que el encuentro del sujeto con la sexualidad serd un mal encuentro -es algo estructural pero atin queda la forma, el momento, el tiempo del mal encuentro; algo queda a la espera, algo en relacién al goce permanecerd indecidido, a determinar, pues las respuestas de lo real en el encuentro con el Otro sexo son imposibles de anticipar. Una posicién central seré diferenciar el campo de estudio y accién del psicoandlisis con nifios y lo que corresponde propiamente al campo del desarrollo infantil y sus diversas teo 15 del desarrollo. Asi, por un lado se encuentra la nocién de subjetividad desde una mirada lacaniana y por el otro la que corresponderia a las funciones instrumentales de este sujeto y al desarrollo de éstas. Entonces, como un punto de partida para comenzar a plantear el panorama en el que est inmersa la problematica de este articulo, se abordaré lo concerniente a la constitucién subjetiva y a la nocién de sujeto en psicoandlisis con una Con el escrito «Funcién y campo de la palabra y el lenguaje en Psicoandlisis», una vez diferenciados los registros imaginario simbélico y real, y distinguidos el sujeto y el yo, Lacan abordara una vez més en términos criticos la perspectiva del desarrollo centrada en la maduracién instintiva en Psicoandli is, a partir de la antinomia “desarrollo e historia”. Si bien ambos conceptos comparten su referencia al tiempo, la antinomia se hace presente si tenemos en cuenta la diferencia radical que se establece en la distincién del sujeto situado en el registro del sentido y el individuo viviente, soporte de la maduracién de! organismo. En efecto, a nocién de sujeto constituyente presentado a partir de una dialéctica del sentido, del sujeto de 1a interlocucién, sujeto que se constituye a medida que habla, cambia completamente la funcién de la temporalidad. La oposicién desarrollo e historia resulta relevante particularmente si consideramos la progresion lineal y teleolégica que caracteriza el desarrollo para los postfreudianos, conceptualizado en una dimensién temporal que resulta ajena al campo en el que despliega la practica analitica. En este campo es otro tiempo el que esté en juego, que Lacan trata de aprehender a partir del cardcter dialéctico y retroactivo del tiempo de la histor Opone de esta manera a la mudez y acefalia del programa que organiza las secuencias de la maduracién instintiva, una temporalidad de otro orden, especifica de! proceso analitico que se produce en el interior de un esquema de comunicacién intersubjetiva. Se trata entonces de situar la génesis de la constitucién subjetiva como momentos o tiempos, escansiones del desarrollo condicionados por la estructura de fo simbélico. Este condicionamiento implica otorgar una importancia decisiva al establecimiento de lugares y términos diferenciados, cuya disposici6n y orden permiten la produccién de efectos imaginarios especificos. Lacan sitda este proceso a partir del estatuto inicial del sujeto como a-sujeto, incluso como objeto parcial en la medida en que se trata de un ser que atin no tene la palabra. En una perspectiva del desarrollo ordenado por la estructura precisa los momentos diferenciados en que los efectos determinantes de las leyes de lenguaje, metéfora y metonimia ejercen su funcién en la institucién del sujeto. Bb tance = Sey gee ihe Pires alain Sn eptiianeeg 3, tam licabaes a ieieaie ga: ak outs mitogen anette, sexe sate | isa jd seveba ee ee ee Emicai 4} aoteonG bow 62 Box pergmine Frpgecne sor ~ beriies ore Fo grtchoes ee 1B vant Pooh Br Rae ye ensure thet ey ae rmibe) —P a? Sn cmap qomieynien s Biumebeohe © ee a a eee En este proceso es necesario contemplar en primer lugar la metéfora natural o metéfora primordial con la que Lacan aborda el pasaje de la necesidad biologica por los desfiladeros del significante: es la teoria de la demanda, como demanda articulada, que al ejercerse sobre la necesidad, la fragmenta y desnaturaliza. Lacan sitda de esta manera a la madre como objeto simbélico desde el origen, en la medida en que juega un papel en la introduccién de la existencia del significante muy precozmente, por la via de interpretar las necesidades del nifio como demandas articuladas, funcién de interprete que desnaturaliza su respuesta e introduce la instancia del significante como una nueva realidad que se interpone en toda relacién con el organismo viviente. Es justamente por esto que desde el origen, el nifio no tiene simplemente relacién con un ‘objeto que lo satisface 0 no, sino que se encuentra insertado en una configuracion triangular en que lo sitda el deseo de le madre. La génesis estaré asi planteada a partir de la estructura, contemplando la funcién primordial del deseo de la madre en una primera ubicacién del sujeto, como nifio deseado 0 no deseado, ubicacién que resulta para Lacan fundamental, en tanto es el significante que “constituye primordialmente al sujeto en su ser, Ill. Conclusiones Sobre la constitucién subjetiva, se dird que el sujeto tiene posibilidad de advenir, por las palabras fundadoras que lo envolvieron, significéndolo, en un primer momento. Jerusalinsky (1997), hace el pertinente sefialamiento de que estas palabras que estén en el campo de lo simbélico y del significante, no son comprendidas por el bebé sino que llegan hasta éste porque "todo acto que se cumple en relacién con él esté capturado en un discurso; discurso que se expresa en los movimientos esbozados, en las actitudes del otro, con quien el nifio se identifica orientado por el deseo materno” (pp.11). Hay pues una alienacién cor ua del bebé con respecto al Otro que lo instaura como tal, pues ahi encuentra cada individuo sus puntos de referencia, la razén de su existencia, siendo el deseo el que lo engendra (deseo en tanto lazo que lo une al Otro que lo instaura). Atn cuando en un primer momento la supervivencia del recién nacido dependerfa - 2 arsaeiee 1 apy te Were A. Ce Ton ars Sh ates oF * i Htpeenmtie in bs Wolpe oa Rani chees or Bimugbaee wiper 0 hh apie Renae Ge Bc. 2 Ye! Sse Bie A eben jreesam aE te woes 2 ge enteramente del cuidado exterior, que se relaciona con el hecho fortuito de ser amado {condicién a partir de la cual surge el deseo), se diré que la operacién del desarrollo y de la constitucién subjetiva se sitda en el nivel del significante. El individuo de la especie humana es un deficiente stintivo, pues nada en su sistema genético-neurolégico le define el objeto capaz de calmar su malestar (Jerusalinsky, 1995), entonces, el bebé humane quede expueste @ sus necesidades sin recursos suficientes pere definir ni con qué ni cémo satisfacerlas. Cuando se trata de estimulos externos, los que producen el malestar, una "accién especifica” basta para evitar sus efectos, sin embargo cuando se trata de estimulos internos, alli el bebé, s6lo a través de la relacién transubjetiva con otro ser humano tutelar, podr operar una tentativa de resolucién, es or eso que al objeto humano lo constituye el Otro, y lo que define a este objeto es su ‘campo de alteridad y, por tanto, la alienacién del sujeto respecto a él. “Este objeto en lo imaginario se constituye como idealizado, y en lo Real como imposible, en su lugar para representarlo aparece el significante” (Jerusalinsky, 1995: 26). Finalmente, y de manera esquematica se diré sobre la relacién entre constitucién subjetiva y desarrollo lo siguiente: 1. El desarrollo del bebé no opera debido a un automatismo biolégico, asi mismo los estimulos externos no son el motor de su desarrollo, es decir el primer esbozo de sujeto encarnado en un cuerpo, no se organiza por sus funciones musculares 0 fisiologicas sino por las marcas simbélicas que lo afectan. 2. Lo que marca el ritmo del desarrollo es el deseo del Otro que opera sobre el nifio a través de su discurso, siendo que lo madurativo y el sustrato biolégico (lo real de! cuerpo) se mantiene como limite pero no como causa. 3. EI Otro, que por un lado le ofrece al nifio una imagen en la que reconocerse (el moi), al mismo tiempo interrumpe esta identificacién preguntndose por su destino (acepta el no saber sobre este nifo). Jerusalinsky (1995) sefiala que en este vaivén entre el moi y el je bascula la autoimagen; pendulacién entre un saber postura lacaniana, mostrando desde esta particular lectura que lo que se desarrolla son las funciones instrumentales del sujeto y no el sujeto como tal , ya que la constitucién de éste no tiene cronologia, ni una progresién evolutiva, sino que el sujeto es el “efecto de la obra del lenguaje; como tal esté anticipado en el discurso parental. Lo que se desarrolla es Ja capacidad del nifio de apropiarse de estas instancias y, consecuentemente, del uso de los sistemas simbélicos que organizan sus relaciones de objeto en el campo fantasmético y, por efecto de éste, en el campo de la realidad (Jerus sky, 1995:32). El sujeto atin desde su prematuridad, -haciendo alusién a la insuficiencia constitucional de! cachorro humano aunque nazca a término -, se encuentra anticipado en una estructura dada. Asi, "el bebé es tomado en una red significante que estructuralmente lo tiene ‘acabado, aunque no contenga, por supuesto, las contingencias del deslizamiento de esta estructura en los avatares del destino de ese sujeto." (Jerusalinsky, 1995: 35). Ahora bien, el sujeto en ciemes y sus funciones se encuentran muy relacionados, pero es importante distinguir que s6lo desde el armado de un cuerpo en una posicién imaginaria a partir de un ordenamiento simbélico operado por un Otro, es que las funciones instrumentales (por ej. cognicién, lenguaje, motricidad, etc.) se desarrollan; asi, aunque un cachorro de la ‘especie humana nazca sano -y con integridad neurolégica- no es suficiente para garantizar la constitucién en él de un sujeto psiquico, y por ende el desarrollo de sus funciones. Siguiendo a Jerusalinsky (1995), las funciones instrumentales del sujeto, si bien tienen un correlato fisico y madurativo, sus caracteristicas y organizacién estén dadas a partir de sistemas representantes del cuerpo, -dimensién propiamente psiquica-, y el funcionamiento de éstos en relacién al medio. De todo esto se extrae la conclusién de que el desarrollo de! bebé humano no opera por Un simple automatismo biolégico, 0 por considerar a los estimulos externos como su motor, sino que el primer esbozo de sujeto encarnado en un cuerpo se organiza por las marcas simbélicas que lo atraviesan y lo que marca el ritmo del desarrollo es el deseo del Otro que opera sobre el nifio a través de su discurso; lo madurativo se mantiene simplemente como limite, pero no como causa. aotitlduie “Ryans 3 Suit ody anther nani woe = Beis paper © nthe ctige 24 ) us Fe one ie Res puiee’ bh ebaooker yaernauymetleucale os Gain: i hag ee (WmaNR Ky NUS Len) MibieoRTE gtk Gas nlimtrrar TS 4 AHL pater seseene OB imaginario y Ia ignorancia radical que lo afecta; oscilacién que le causa angustia, la necesaria para agresivizar su relaci6n al Otro e intentar apropiarse de sus insignias y sus significaciones. Esto transforma al nifio desde la pasividad y la indiferenciacién inicial hasta la postura de querer conocer, armado de interrogaciones acerca de lo que aparece como un agujero lleno de promesas, cuyo cumplimiento demanda al Otro. 4, El sujeto es el efecto de la obra del lenguaje; como tal est anticipado en el discurso parental. Lo que se desarrolla es la capacidad del nifio de apropiarse de estas instancias y, consecuentemente, del uso de los sistemas simbélicos que orgenizan sus relaciones de objeto en el campo fantasmitico y, por efecto de éste, en.el campo de la realidad. Referencias bibliogréficas Freud, S. (1900) "La interpretacién de los suefios". En S. Freud, Obras Completas Vol. V Buenos Aires: Amorrortu Freud, S. (1905) "Tres ensayos sobre una teoria sexual" En S. Freud, Obras Completas Vol. VIl Buenos Aires: Amorrortu . Freud, S. (1908) "Sobre las teorias sexuales infantiles" En S. Freud, Obras Completas Vol. IX Buenos Aires: Amorrortu . Freud, S (1908). "Anélisis de la fobia de un nifio de 5 afios". En S. Freud, Obras Completas Vol. X Buenos Aires: Amorrortu . Jerusalinsky, A. (1995) "Psicoanélisis en problemas del desarrollo infantil" Bs As: Nueva Visién Lacan, J. (2003) "El estadio del espejo como formador de la funcién del yo tal como se nos revela en la experiencia psicoanalitica" en Lacan, J. (2003) Escritos I. México: Siglo XI Mannoni, M. (1997) "El nifio, su enfermedad y los otros" Bs As: Nueva Visién

También podría gustarte