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RAYMOND SOTO DÁVILA

Lucha y espacio de la
Liga Socialista Puertorriqueña:
1962-1989
Soto Dávila, Raymond
Lucha y espacios de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989
Ia ed. - Ciudad de San Juan: Ediciones Mágica, 2019
257 p.; 6" x 9”

ISBN 978-1-7330516-0-6

1.Historia Puertorriqueña. 2. Historia Política

Diseño de tapa: Iván Figueroa Luciano

Fotografía de tapa: Noemilda Vélez Mas

Todos los derechos reservados

Ediciones Mágica, 2019


Ave. Ponce de León 1013 San Juan, Puerto Rico
Web site: www.libreriamagica.com
Email: libreriamagicapr@gmail.com
ISBN 978-1-7330516-0-6
Impreso en San Juan, Puerto Rico

Este libro no puede ser reproducido total ni parcialmente en ninguna forma ni


por ningún medio o procedimiento, sea reprográfico, fotocopia, microfilmación,
mimeógrafo o cualquier otro sistema mecánico, fotoquímico, electrónico, informá­
tico, magnético, electroóptico, etc. Cualquier reproducción sin el permiso previo
por escrito de la editorial viola derechos reservados, es ilegal y constituye un delito.
A todos los que lucharon, luchan y lucharán por nuestra liberación
nacional. A la memoria de Ángel Rodríguez Cristóbal y a la
fortaleza de nuestro prisionero político Oscar López Rivera.
RaymonoSotoDávila | 6

TABLA DE CONTENIDO

Agradecimientos 9
Antecedentes Históricos II
Naturaleza de las publicaciones de la LSP 20

Expresiones artísticas y la LSP 22

Cap. 1: Década del 1960 25


Cap. 2: Década del 1970 35
Los años de 1970 a mediados del 1975 35
Los años de mediados de 1975 a 1979 53
Cap. 3: Década del 1980 73
Primeros cuatro años: 1980-1984 73
Muerte de Juan Antonio Corretjer y últimos años de la LSP 105
Notas "7
Apéndice I: Documentos <75
Estatutos de la Liga Socialista Puertorriqueña 177
Declaración del Frente Anti Electoral (tomado de Claridad,
11 al 17 de marzo de 1988, pág. 7.) 182
Apéndice II: Represión contra la LSP 189
Intentan asesinar a Corretjer y esposa 191

Memo de la Oficina de Inteligencia de la Policía de Puerto Rico,


actividad del 3 de julio de 1979 (Tomado de carpeta 23091,
primer volumen, pág. 221, entregada a Raymond Soto Dávila) 195
Apéndice III: Cátedra de militantes 201

Mensaje al estudiantado universitario de los Cuadros de la


Liga Socialista Puertorriqueña, 12 de marzo de 1970. 203
7 | Lucila y espacio pe la Liga Soi iai isla Puertorriqueña: 1962-1989

Myriam Fuentes, “Examen a la Huelga en Palmer” (Tomado de


Correo de la Quincena, Tomo VII, Núm. 112-115,15 de junio al
tro. de agosto de 1970, pág. 6-11.) 205
Ángel Rodríguez Cristóbal, “Las Elecciones de 1976 en
Puerto Rico” (Tomado de Farsa Electoral 1976, Publicaciones
Rebeldía, segunda edición 1980) 212

Carlos Noya, Juicio del Gran Jurado (Tomado de Correo de la


Quincena, Vol. XIX, Núm. 402-406, iro. de (julio) al 15 de septiembre,
de 1982, pág. 7-11.) 222

Ángel Rodríguez Cristóbal, Alocución ante la corte de Estados


Unidos en Puerto Rico, “Yo estaba allí como puertorriqueño,
Independentista y socialista” con introducción de Juan Antonio
Corretjer (Tomado de El Nuevo Día, 4 de octubre de 1979, pág. 9.) 228

Ricarte Montes García, “Presentación frente al Gran Jurado”,


Correo de la Quincena, Vol. XVIII, iro de marzo al tro de julio
de 1982, pág. 10.) 233
Apéndice IV: Entrevistas 235
Entrevista a Noemilda Vélez Mas 236
Entrevista a Ricarte Montes García 241
Bibliografía 245
Revistas, Periódicos, Boletines, “Blogs” 249
RaymondSoto Davii.a | 8

“Esto trae a mi recuerdo palabras de Ángel en un mensaje enviado


desde la penitenciaría de Río Piedras al pueblo puertorriqueño
donde hablando sobre la mujer policía que agredió a nuestra querida
Isabel Rosado aquel 19 de mayo en Vieques, nos dice: “No podemos
los pueblos ocupados e intervenidos por estas fuerzas del crimen y el
saqueo tratar de convencer a los que son sus miembros, del error que
cometen cuando se prestan a asumir semejante papel. Solo hay una
forma y Vietnam lo probó y es tratar de hacerle el mayor daño posible
en el menor tiempo posible, para así sufrir tanto ellos como nosotros el
menor daño posible. Cuando nuestras victorias sean mayores a las de
ellos, el número de derrotas los pondrá a pensar y razonar, no antes”.

Ricarte Montes García, Secretario General de la LSP


Discurso en Cíales el 2 de abril de 1989 al recordar natalicio de
Angel Rodríguez Cristóbal y citar las conocidas palabras de Ángel y el
contexto en que fueron dichas.
9 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Agradecimientos
Va mi agradecimiento más profundo a todos los que colaboraron de una forma
u otra con este proyecto. A los que respetando mi rol de autor e investigador y el
principio fundamental de que la historia no se rescribe dieron la mano facilitando
documentos, algunas revistas y comentarios además de contribuciones económicas,
va mi eterno agradecimiento. Van las gracias al personal y estudiantes que laboran
en la Sala Puertorriqueña de la Biblioteca Lázaro del Recinto de Rio Piedras de la
UPR por su infinita paciencia para con mi esposa y este servidor. Agradezco al
personal de la Biblioteca Legislativa Tomás Bonilla Feliciano de San Juan, por su
orientación. A los dos entrevistados, miembros de la LSP, maestros de escuela y
ahora retirados, Noemilda Vélez y Ricarte Montes. Agradezco a Anna Jones y a
Miguel Pagán por sus materiales. A la compañera maestra de español que ayudó
a editar parte del manuscrito y desea permanecer anónima. A mi esposa Liliana
García sin cuya ayuda no hubiera podido escribir este relato. Doy gracias a la vida
por haber conocido la LSP, a Don Juan y Doña Consuelo, a Carmín Pérez, Ángel
Rodríguez Cristóbal, Manuel Padilla, Pepito Marcano, Ricarte Montes y Carlos
Noya. Finalmente doy gracias a los que me honren con su lectura no por ser una
honra para mi persona sino por ser una honra para la LSP.
RaymondSotoDávila | to

Los esposos Corretjer a su salida del Tribunal Superior en Puerta de Tierra el 2 de octubre de 1969 a
raíz de los arrestos sufridos en ese año. Parcialmente ocultos, Julio Pinto Gandía, Pepito Marca no y el
profesor chileno, José Ma. Bulnes. Tomado de El Socialista, /\ño 111, Núm. 31, octubre de 1969, pág. 1.

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ii | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Antecedentes Históricos
Juan Antonio Corretjer (1908-1985) dejó un legado extraordinario para Puerto
Rico, patriótico, político, cultural y periodístico, del cual fluyeron múltiples aporta­
ciones. En el aspecto político, su contribución más significativa lo fue la fundación
y conducción de la Liga Socialista Puertorriqueña (LSP) junto a su esposa Consuelo
Lee Tapia. Esta organización se establece el 2 de enero de 1962 y perdura hasta al­
gunos años después de la muerte de Corretjer. 1 Toda organización se nutre de la
capacidad ideológica de sus líderes pero a su vez rebasa esos confines, demarcando
su ruta dentro de la historia más amplia de su pueblo, sus coyunturas políticas y la
formación de su militancia.

La aportación de Corretjer como fundador y líder de la Liga Socialista Puertorrique­


ña tiene como trasfondo la experiencia que ya para 1962 había acumulado Corretjer
en las luchas políticas y sociales de Puerto Rico. Para entender esa experiencia es
necesario repetir algo ya dicho muchas veces a cerca de su origen, su historia familiar
y sus experiencias tempranas. Nacido en Cíales, rodeado de la belleza exuberante de
las montañas, sus progenitores lo enriquecieron con una educación patriótica, na­
cida de la tradición oral, muy difícil de adquirir en la escuela. Fue el complemento
perfecto para el potencial intelectual y la sensibilidad que caracterizaron a Corretjer
desde muy niño. En octavo grado lo expulsaron de la escuela por organizar una pro­
testa en contra de las autoridades estadounidenses y tuvo que terminar sus estudios
en Vega Baja y luego en San Juan.2 Su gran y extensa obra literaria comienza a los
doce años con el poema “Canto a Cíales” y ya para la edad de diecisiete años, había
publicado sus primeros versos en una revista cultural muy importante de la época,
“Puerto Rico Ilustrado”.

Corretjer marchó a San Juan a los dieciocho años, desempeñando trabajos periodís­
ticos? Allí entra en contacto con varias formaciones políticas y círculos literarios, rea­
lizando para entonces sus primeras lecturas marxistas. Viajó a Nueva York dos años
después y es allí donde afronta las primeras decisiones políticas de envergadura. Se
integró a la Liga Anti Imperialista de las Américas, frente de la Tercera Internacional,
a su vez una amalgama de partidos y organizaciones comunistas de diversos países.4
Es aquí que decide colaborar con los sandinistas en contra de las intervenciones de
Estados Unidos en Nicaragua y ganar apoyo para la causa de la independencia de
Puerto Rico. Este es el periodo en que su capacitación política se nutre de la figura de
Augusto Cesar Sandino. Es en este momento que Corretjer sufrió el primer arresto,
Raymond Soto DAvila | 12

estando en la Ciudad de Nueva York, cuando comenzaba a cimentar la dimensión


intemacionalista. Se revela como gran autodidacta, haciendo numerosas lecturas y
mejorando su inglés. También comienza a probar la dimensión clandestina del tra­
bajo político precisamente con su adhesión a la causa sandinista.5

Corretjer regresó a San Juan en el 1929 por razones familiares y luego de haber pa­
sado periodos serios de estrechez económica en Nueva York, coincidiendo esto con
la conocida “gran depresión” que afectó a Estados Unidos. Es en el 1930 que publica
el artículo titulado “La vuelta del peregrino” en la revista “Gráficos de Puerto Rico”
que le representaría conocer a una figura clave en su formación política y cimera en
nuestra historia patria: Don Pedro Albizu Campos.6 Albizu y Corretjer comenzaron
una relación política muy fructífera la cual representaría para Corretjer experiencias
organizativas muy profundas dentro del Partido Nacionalista de Puerto Rico al cual
Corretjer ingresó luego que Albizu tomara la dirección de esta formación política,
hasta entonces en manos de un liderato mucho más conservador. Ya para el año 1931
dicha formación política había adquirido un carácter más contestatario destacán­
dose la denuncia pública de Albizu sobre la carta infame del Dr. Rhoads en torno a
asesinar a puertorriqueños con experimentos de cáncer.7

Los años de la década del 30 fueron años muy difíciles. La población de Puerto Rico
se empobreció con la imposición del monocultivo de la caña y la debacle económica
que sufriera Estados Unidos en el 1929. El Partido Nacionalista de Puerto Rico acudió
a las elecciones del 1932 sufriendo una derrota electoral dramática.8 La huelga cañera
de 1934 arropó la industria principal del país e hizo posible que la figura de Albizu
Campos surgiera como instrumental en los sectores más afectados y de pauperiza-
dos del proletariado de la industria de la caña, esto ante el desprestigio que se había
ganado el Partido Socialista y la llamada Coalición, en la cual varios partidos junto al
Partido Socialista ostentaban entonces el gobierno en la colonia. La colaboración de
Corretjer fue intensa y representó una coyuntura aleccionadora para los principios
socialistas que ya albergaba Corretjer desde años anteriores.9 En los años que siguen
Corretjer emprendió varios viajes con el propósito de aunar apoyo para la causa de la
independencia y estando en Cuba cae preso al vinculársele con la lucha antiimperia­
lista que se libraba en este país.10 Luego de varias semanas y de celebrársele un juicio
militar, la embajada de Uruguay le ofrece protección y regresa a Puerto Rico.

A su regreso a Puerto Rico en julio de 1935, Corretjer encontró que el clima político en
el país se había caldeado ante la ola represiva del gobierno de Estados Unidos, el cual
respondía al desasosiego de la población por la situación económica precaria, la im­
posición del inglés, el ascenso de la figura de Albizu, su verbo apasionado y el incre­
mento en la militancia del Partido Nacionalista de Puerto Rico. Entre el 1935 y el 1937
las figuras siniestras de Blanton Winship, para entonces gobernador estadounidense
designado por el Presidente de los Estados Unidos y el Coronel Elisha Francis Riggs,
ij | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

estadounidense quien fungía como jefe de la policía colonial, desataron una serie de
acciones represivas contra el Partido Nacionalista y su dirigente máximo Pedro Albi­
zu Campos. Las acciones más sangrientas fueron (1) la Masacre de Río Piedras (24 de
octubre de 1935), (2) el asesinato de los patriotas Elias Beauchamp e Hiram Rosado (23
de febrero de 1936) como respuesta del imperio a la acción revolucionaria de éstos de
ajusticiar al Coronel Riggs, responsable directo de la Masacre de Río Piedras y (3) la
Masacre de Ponce (21 de marzo de 1937).

Los años de intensa lucha en el seno del Partido Nacionalista de Puerto Rico serían
para Corretjer sumamente cruciales. Representaron para él la experiencia carcelaria
prolongada y la realización del efecto en nuestra población de las primeras trans­
ferencias federales, la PRERA (Puerto Rico Emergency Relief Administration) y la
PRRA (Puerto Rico Relief Administration) las cuales se canalizaron entre el 1932 y
1934." Esto quedaría plasmado posteriormente en una de sus obras, escrita unos po­
cos años después de la Segunda Guerra Mundial en la cual denunciaba el carácter de
soborno de las mismas.12 Curiosamente Rexford Tugwell luego de una visita a Puerto
Rico hizo algunas manifestaciones relacionados a los efectos negativos de estas ayu­
das sobre la población.” Corretjer ingresó a la cárcel el 2 de abril de 1936 por negarse
a entregar las actas del Partido Nacionalista de Puerto Rico. Estando preso se le inicia
otro proceso tanto a él como a Albizu y otros miembros del Partido Nacionalista de
Puerto Rico mediante una acusación de conspiración a través de un gran jurado. Es
con Corretjer que se inicia la resistencia al Gran Jurado federal.14 Este proceso culmi­
na en sentencias para los acusados que fluctuaban entre seis a diez años.15 Luego de
cinco años en una cárcel de Atlanta se le excarceló en el 1942 y se le condenó a cum­
plir los años restantes fuera de la cárcel en Nueva York. Cuando Albizu salió de la cár­
cel de Atlanta en el 1943 el liderato del Partido Nacionalista encomendó a Corretjer y
Julio Pinto Gandía viajar hasta esa ciudad para escoltar a Albizu. El primer punto de
descanso al llegar Albizu a Nueva York fue en la residencia de Consuelo Lee.'6 Albizu
poco después ingresó al Hospital Columbus en Nueva York donde pasaría dos años.17

Es durante los años de encarcelamiento y exilio de Albizu y Corretjer que se fundó en


Puerto Rico el Partido Popular Democrático (PPD). El mismo se inscribió por prime­
ra vez en dos pueblos de Puerto Rico el 22 de julio de 1938. Fue producto de la salida
de Muñoz Marín del Partido Liberal con un grupo que éste lideraba, cuyo nombre
era “Liberales Netos, Auténticos y Completos.18 Es significativo que apenas un año
después de iniciado ese proceso de inscripción, un día de septiembre de 1939, Corret­
jer, Albizu y un grupo de nacionalistas recibieran en la Cárcel Federal de Atlanta una
propuesta de un tal Pedro Capó Rodríguez a nombre de “su gobierno” refiriéndose al
gobierno de Estados Unidos. En resumidas cuentas, este personaje les comunicaba
que Estados Unidos había cometido un error al encarcelar a los nacionalistas y que
esa nación (Estados Unidos) necesitaba la solidaridad hemisférica para enfrentar
RaymonhSino D\\n.\ ¡ 14

una inevitable guerra mundial. Aducía preocupación por la campaña latinoamerica­


na por la independencia de Puerto Rico y les propuso resolver el problema carcelario
de inmediato si regresaban a Puerto Rico y seguían una serie de instrucciones entre
las cuales estaba declarar que la independencia no estaba en “issue” en las eleccio­
nes que se aproximaban de 1940, las cuales el Partido Nacionalista podría ganar y así
obtener los posiciones públicas. El individuo les expresó que eran los militantes del
Partido Nacionalista de Puerto Rico los merecedores de estas posiciones.19 Este epi­
sodio sirve para ilustrar y dejar patente la entonces ya establecida política de Estados
Unidos de soborno masivo hacia los puertorriqueños mediante la vía electoral.

Corretjer residió en Nueva York, separado por las circunstancias de su sentencia, del
seno del Partido Nacionalista de Puerto Rico, lo que le brindó la oportunidad de res­
catar vínculos e iniciar otros en su lucha por la independencia. Escribió en varios
medios y se hizo cargo de la maquinaria publicitaria del American Labor Party, gru­
po progresista de izquierda establecido en Harlem, uno de cuyos dirigentes era el
entonces representante de la Cámara Federal de Estados Unidos, Vito Marcantonio,
simpatizante de la idea de independencia para Puerto Rico. Junto a Consuelo Lee Ta­
pia publica el semanario “Pueblos Hispanos”, en donde se cubría temas de derecho
laboral, derechos de la mujer y de lucha por la independencia de Puerto Rico. En
este período Julia de Burgos trabaja para la revista.20 A su inauguración asistió Pablo
Neruda.21 Corretjer viajó a Cuba y desarrolló otro trabajo entre 1945 y 1946. Para en­
tonces, recién casado con Consuelo Lee Tapia, restablece comunicación en Cuba con
el intelectual marxista Juan Marinello, a quien ya había conocido con anterioridad
y a quien debía parte de su formación marxista. Para esos años Consuelo Lee estaba
vinculada al Partido Comunista de Estados Unidos.22 A su regreso a Puerto Rico a
mediados del 1946, ambos ingresaron al Partido Comunista de Puerto Rico y se vin­
cularon a las luchas de la clase obrera pero tuvieron que continuar su trabajo fuera de
dicho partido luego que los expulsaran en el 1948. Corretjer fue acusado entonces de
tener ideas nacionalistas e incurrir en prédicas de naturaleza insurreccional.23

Corretjer no rompió sus vínculos totalmente con Albizu. Para diciembre de 1947 Albi-
zu regresó a Puerto Rico luego de cumplir la sentencia y su arribo provocó de inme­
diato la histeria del imperio. El recibimiento a Albizu fue multitudinario y su verbo
apasionado continuaba intacto. A su llegada de inmediato denunció la situación eco­
nómica del pueblo, la venta de sus recursos al capital yanqui, el despojo de Vieques y
la triste emigración forzosa de los puertorriqueños al trabajo cuasi esclavo en las fin­
cas de Estados Unidos. Luego de una cruenta huelga universitaria que estalló en abril
de 1948, en la cual uno de los detonantes fue la prohibición de la entrada a Albizu, a
quien el estudiantado deseaba escuchar hablar, el gobierno colonial impuso la infa­
me Ley de la Mordaza (Ley 53) el 10 de junio de 1948, apenas seis meses después del
retorno de Albizu a su patria.24 Esta ley estuvo en efecto durante gran parte de la dé-
15 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

cada del 1950, hasta el 1957. La situación después de la Segunda Guerra Mundial lucía
muy complicada para los Estados Unidos ante el ascenso de la Unión Soviética y la
lucha anticolonial en los pueblos de Asia. Para los luchadores por la independencia
este clima era favorable a nivel internacional pero a su vez exacerbaba la necesidad
del control de la metrópoli con respecto a Puerto Rico.

Corretjer organizó la Unión del Pueblo Pro Constituyente para la segunda mitad del
1948, como respuesta al nuevo modo de control colonial que se perfilaba con el ascenso
de Luis Muñoz Marín y el Partido Popular Democrático en las elecciones a celebrarse
en noviembre de ese año. Para Muñoz conseguir la Ley del Gobernador Electivo del
1947 Que le permitiría aspirar a la gobernación, había entregado el 13 % del territorio de
Puerto Rico (la isla grande) y el 20 % de Culebra.25 Los eventos que se dieron alrededor
de esas elecciones marcaron un hito histórico para el movimiento independentista,
diversificaron la base ideológica y sentaron los fundamentos para construir experien­
cias de luchas muy disímiles. El Partido Independentista Puertorriqueño optó por la
ruta electoral cuando Luis Muñoz Marín y el recién formado Partido Popular Demo­
crático tomaron la decisión de que sus miembros no podían pertenecer al Congreso
pro Independencia del cual formaron parte.26 Son estos hechos unidos a la escalada
de militancia de parte del Partido Nacionalista de Puerto Rico a inicios de la década
del 1950 (el cual no regresó jamás al proceso eleccionario desde el 1932) lo que sentaría
los fundamentos para el trabajo de Corretjer en la década del 1950, década que fue la
antesala de la formación de la Liga Socialista Puertorriqueña.

El 20 de febrero de 1949, El Imparcial publicó un artículo de Juan Antonio Corretjer


en el cual analizó las maniobras navales de enero de ese año de la Marina de Guerra
y la OTAN (Organización del Tratado de Atlántico Norte o “NATO” por sus siglas
en inglés) en Vieques. Corretjer denunciaba estas prácticas como una expresión im­
perialista y como una reorientación política dirigida hacia la destrucción directa de
la nación puertorriqueña. El entendía que la política de “asimilación benévola” que
Estados Unidos había intentado implantar no había funcionado y el imperio consi­
deraba que el pueblo y su vanguardia nacionalista la habían derrotado.27 Reciente­
mente se había eliminado el inglés como lengua de enseñanza en las escuelas luego
de más de cuatro décadas de impuesta y solamente había quedado como una asig­
natura más. La concesión de la elección del gobernador y el espacio que había ocu­
pado el recién formado Partido Independentista de Puerto Rico (PIP) probablemente
podrían justificar el pensamiento de Corretjer de aquel entonces. Eran espacios de
aparente derrota del imperio pero que se perfilaban con la capacidad para utilizarse
como elementos divisorios. Tras la división, el imperio, era de esperarse, intentaría
imponer el colaboracionismo. Es este pensamiento, ya no tan solo independentista
o nacionalista, sino profundamente anti imperialista, lo que impregnó el trabajo de
Corretjer durante el resto de su vida.
Raymond Soro DAviia | 16

Corrctjer tenía muy claros los elementos que habían operado a favor de la victoria de
Muñoz en el 1948.28 Se mantuvo trabajando en la Unión del Pueblo Pro Constituyente
hasta agosto del 1952. En esa organización se intentaba un proyecto de constitución
que respondiera a los nacionales y a su derecho por la independencia. Corretjer pre­
veía de la tramoya imperial que se armaba para el adefesio de la instauración del
Estado Libre Asociado y luchaba por construir otra alternativa. El gobierno colonial
desató una represión encarnizada a raíz de la Insurrección Nacionalista en octubre
de 1950, la cual dejó a decenas de muertos en combate y largas condenas a muchos
nacionalistas. La Ley de la Mordaza fue utilizada con frecuencia dejando el saldo de
162 arrestados?’ El día del 31 de octubre de 1950 los patriotas Oscar Collazo y Griselio
Torresola hicieron un recorrido por la ciudad de Washington DC y se familiarizaron
con sus centros de gobierno y el primero de noviembre atacaron a tiros la Casa Blair,
hogar temporero del Presidente de Estados Unidos, Harry Truman. Griselio perdió la
vida en ese enfrentamiento.’0 Ese día Corretjer fue arrestado en Puerto Rico por inci­
tación a motín.’1 Tanto a él como a su esposa la represión les hizo muy difícil la vida.
El caso duró en litigio dos años y finalmente Corretjer cumplió seis meses de cárcel
en el 1952. Se disolvió la Unión del Pueblo pro Constituyente y Corretjer anunció en
la prensa del país de entonces que se retiraba de la política activa. Este retiro no sería
definitivo. ’2

La Insurrección Nacionalista representa un eslabón fundamental en la lucha patrió­


tica de nuestro pueblo. Para la LSP representó además el hilo conductor con la en­
señanza albizuista y la integración de esta experiencia histórica a lo que fue parte
importante de su línea de educación política. Juan Antonio Corretjer, como secreta­
rio general de la LSP hizo un profundo análisis, partiendo de una conversación con
Albizu en el 1947 poco después del regreso de Albizu de la cárcel de Atlanta. Corretjer
concluyó que la Insurrección Nacionalista tuvo sus raíces en la política estadouni­
dense durante la Segunda Guerra Mundial y tras la terminación de dicho conflicto.
Albizu y Corretjer discutieron las posibles repercusiones de esta política para la ane­
xión de Puerto Rico. Para Albizu, el acto genocida de Estados Unidos de bombardeo
atómico sobre las ciudades japonesas, Hiroshima y Nagasaki, el cual realizó en agosto
de 1945, lo obligaría, por una necesidad política, a incorporar formalmente a Alaska
y Hawaii. En otras palabras, era necesario mostrar una actitud de igualdad y supues­
ta buena fe sobre estos pueblos no caucásicos luego de un acto tan contundente de
imperialismo y racismo. Cabe recordar que Japón no poseía ni nunca ha tenido bom­
bas atómicas. Ante la pregunta de Corretjer sobre si eso podría suceder con Puerto
Rico, Albizu respondió que no lo creía, añadiendo: “pero será necesario demostrar al
mundo que en Puerto Rico existe una nación viva, con derecho a la independencia
y con voluntad de expresar ese derecho, para salvar a nuestra patria de una posible
anexión a Estados Unidos”. ” Corretjer concluyó en su análisis que para dar esta de­
mostración “Albizu tuvo que cerrar sus ojos ante el dolor que le esperaba, junto a sus


17 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

amigos y partidarios nacionalistas, con su sacrificio y la del Partido Nacionalista de


Puerto Rico para salvar a Puerto Rico de una posible disolución nacional dentro del
seno federativo del imperialismo norteamericano.” Esta interpretación de Corretjer,
articulada en su discurso de la conmemoración de la Insurrección Nacionalista el 30
de octubre de 1967 en Jayuya, pasó a formar parte de la literatura y se incorporó fir­
memente en el cuerpo político-ideológico de la LSP a lo largo de la historia de dicha
organización política.

Las apreciaciones de Albizu resultaron correctas ya que Hawaii y Alaska fueron ane­
xados como estados hacia finales de la década del 1950, ambos con la firma de un
presidente republicano de esa nación, el General Dwight D. Eisenhower. Esto de­
bería de servir de alerta a los que se empeñan en tomar en serio las escaramuzas de
Demócratas y Republicanos en el capitolio federal de Estados Unidos y los supuestos
votos que uno y otro partido puedan temer no les favorezca. Por otro lado, debemos
recordar que la agresión imperialista genocida sobre Japón aludida por Albizu, no
se circunscribió a las dos bombas atómicas. Este acto fue el más letal, sin duda, pero
no fue el único. Luego del ataque japonés a la Base Naval de Estados Unidos en Pearl
Harbor en 1941, Estados Unidos estableció campos de concentración para todos los
residentes de ascendencia japonesa independientemente de que estos fueran ciuda­
danos estadounidenses. No conforme con eso, en un acto abismal de soberbia, Es­
tados Unidos organizó una conferencia en Río de Janeiro, Brazil, en enero de 1942 a
la cual acudieron un buen número de países del hemisferio, logrando establecer un
programa de campos de concentración para los residentes de ascendencia japonesa
en muchos de esos países y estableciendo un programa de tráfico y traslado a los
campos de concentración de Estados Unidos para aquellos países que no contaran
con facilidades para establecerlos. La mayoría de los países no solamente aceptaron
sino que acordaron que para todo fin práctico estos ahora prisioneros se podían uti­
lizar en intercambio de prisioneros con los países del “Eje” (Alemania, Japón e Italia)
en conflicto con los “Aliados” (Estados Unidos, Francia, Inglaterra, la entonces Unión
de Repúblicas Socialistas Soviéticas, (“USSR” por sus siglas en inglés) o sencillamen­
te “Unión Soviética” y otros países. No exageraba Albizu al estimar la magnitud del
impulso imperialista de Estados Unidos a pesar de que se suponía que luchaba a
favor de la democracia y los “pueblos libres”. M

Durante buena parte de la década del 1950 la producción de Corretjer como poeta y
como escritor de análisis histórico y político fue abundante. Es en el 1953 que se da a
conocer el famoso poema épico “Alabanza en la Torre de Cíales”, de exquisito lirismo
patriótico. Tanto él como su esposa, Consuelo Lee, colaboraron en proyectos educa­
tivos, la construcción de varias escuelas gratuitas las cuales fueron arrasadas por la
Policía como parte de la purga luego de la Insurrección Nacionalista y la publicación
de revistas, boletines, periódicos y materiales educativos que serían la antesala a las
RmiONnSoro Dwu \ i 18

publicaciones que se producirían al constituirse la Liga Socialista de Puerto Rico.’5 A


pesar del anunciado retiro, Corretjer daba continuidad a sus contactos dentro y fuera
de Puerto Rico lo cual se evidenció en sus intervenciones en una asamblea celebra­
da en el 1956 de la entonces naciente Federación Universitaria Pro Independencia
(FUPI) y uniéndose a las actividades del Movimiento 26 de Julio en Puerto Rico. Este
último en la década del 1950, hacía trabajo proselitista en Puerto Rico a favor del
derrocamiento de Fulgencio Batista en Cuba. Estas intervenciones lo conducirían
nuevamente de lleno a la política activa a partir de la década del 1960.

La década del 1950 fue dramática en el ámbito político, militar, económico y social.
En el ámbito político el Congreso de Estados Unidos aprobó la Ley 600, manipuló
todo lo concerniente a la aprobación de la Constitución del Estado Libre Asociado de
Puerto Rico y logró que las Naciones Unidas sacaran a Puerto Rico del listado de te­
rritorios coloniales.’6 Sin embargo, la votación final de la Asamblea General en el 1953
estuvo muy lejos de ser unánime, abundaron las abstenciones además de conocerse
detalles de las presiones que Estados Unidos ejerció sobre varios países antes de dar­
i
se esa votación.’7 El heroísmo del Partido Nacionalista de Puerto Rico y su militancia
se hizo presente nuevamente con el tiroteo al Congreso de Estados Unidos el primero
de marzo de 1954 por cuatro nacionalistas, Lolita Lebrón, Irving Flores, Rafael Cancel
Miranda y Andrés Figueroa Cordero. En el ámbito militar Estados Unidos acaparaba
extensiones enormes de terrenos con bases militares en todo Puerto Rico y los puer­
torriqueños participaron en la Guerra de Corea con el servicio militar obligatorio en
vigor. Sería la Guerra de Corea lo que haría patente el discrimen, sufrido anterior­
mente dentro de las fuerzas armadas de Estados Unidos en los conflictos armados
anteriores, con el incidente de la colina Kelly y los procesos legales subsiguientes.
i Esta es la antesala a la fuerte resistencia que se desataría en el pueblo contra el Ser­
vicio Militar Obligatorio (SMO) en la década del 1960 con la Guerra de Vietnam.’8
En las postrimerías de la década del 1950 se fundó el Movimiento Pro Independencia
(MPI) el cual con el tiempo pasaría por cambios muy dramáticos. Al final de esa déca­
da también comenzó a circular “Claridad”, inicialmente como un boletín’9.

El ámbito económico y social se caracterizó por el aura populista que implantara


“exitosamente” Luis Muñoz Marín a raíz de sus victorias electorales desde el 1948.
Su proyecto conocido como “Manos a la Obra” albergaba una realidad distinta.40 La
Ley de Tierras, concebida para combatir los latifundios, no se implemento adecua­
damente ya que no se proveyó para contra restar el efecto del empuje de la industria
agrícola de Estados Unidos en el mercado puertorriqueño. Durante ese tiempo la
agricultura siguió en picada y la industria liviana no resultó suficiente para evitar la
migración del campo a la ciudad mientras que continuó la ola migratoria a Estados
Unidos fomentada por el propio gobierno colonial.41 La construcción de carreteras
y otra infraestructura, como servicios de agua y luz, se logró a base de los intereses
19 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

militares, muy fuertes de Estados Unidos sobre el territorio nacional y del interés del
gobierno colonial, bajo la dirección de la metrópoli, en proveer servicios para las in­
dustrias estadounidenses. Mientras tanto, la mafia, hasta ahora muy poco estudiada,
comenzó su incursión de lleno en la economía del país a través de la construcción de
grandes hoteles y del auge de la industria hotelera en el país?2 No hay duda que la
construcción de escuelas ayudó a reducir dramáticamente el analfabetismo lo cual
era a todas luces positivo pero el ingreso masivo de nuestra población a la educación
formal se insertó dentro de expectativas de ascenso social desarraigadas de la reali­
dad nacional, cuyos efectos han sido desastrosos en nuestra historia.

Juan Antonio Corretjer surgió en la política nacional del país nuevamente con fuerza
cuando aceptó la invitación de compañeros del Movimiento 26 de Julio a viajar a
La Habana justo cuando la revolución triunfante daba su golpe definitivo y estaba a
horas de entrar victoriosa en la capital de Cuba. Salió junto a exilados que residían
en Puerto Rico, producto del régimen de terror de Batista, en un avión que enviara
el Ejército Cubano. Inclusive viajó con una credencial de periodista de El Mundo,
periódico para el cual cubrió los actos revolucionarios.43 Corretjer se unió a Acción
Patriótica Unitaria (APU), organización cuyo propósito era desarrollar una instancia
de unidad para las organizaciones patrióticas de tradición revolucionaria con una
proyección anti electoral pero renunció a la misma cuando ya estaba en proceso la
formación de la LSP.44 En colaboración con Consuelo Lee, continuó con sus escritos
y sus contactos con luchadores marxistas y antiimperialistas lo cual daría concreción
a las condiciones que culminarían en la fundación de la Liga Socialista Puertorrique­
ña (LSP), específicamente el 2 de enero de 1962, como mencionamos al inicio.45 De
hecho, el propio Corretjer indicó que de la APU se desprendieron los creyentes en el
marxismo-leninismo y pasaron a engrosar la LSP.46

La composición de la LSP fue variada y sufrió algunas bajas y nuevos adeptos a lo


largo de su trayectoria. Los elementos más significativos fueron: (1) Obreros, profe­
sionales y estudiantes desilusionados con otras organizaciones, en particular con la
trayectoria a favor del sufragio del PIP y con las alianzas del Partido Comunista con
el PPD, (2) Los contactos previos de Corretjer y su esposa, Consuelo, tanto en Puerto
Rico como fuera de Puerto Rico y en la diáspora, (3) La efervescencia que creció rápi­
damente entre la juventud en contra del SMO y la Guerra de Vietnam y (4) El estado
de debilidad del Partido Nacionalista de Puerto Rico luego de enfrentar la intensa
represión del gobierno de Estados Unidos y del gobierno colonial de Puerto Rico,
la pérdida de vidas y el encarcelamiento de muchos de sus militantes y de su gran
líder, Don Pedro Albizu Campos, producto de sus actos heroicos a lo largo de varias
décadas.
Raymond Soto Dávi!.a | 20

Naturaleza de las Publicaciones de la LSP


La labor de difusión ideológica y de propaganda de la Liga Socialista Puertorriqueña
(LSP) se caracterizó por el énfasis en dar a conocer el pensamiento revolucionario
político-militar. El triunfo de la Revolución Cubana en 1959, su hincapié en la lucha
guerrillera y su gran influencia en América Latina tuvo un impacto profundo en la
LSP desde sus inicios. Su literatura tenía un propósito formativo dando a conocer
los principios revolucionarios a través de análisis de distintos movimientos en lucha
y de la literatura clásica del marxismo-leninismo. Los medios principales fueron el
mensuario “El Socialista” y el “Correo de la Quincena” aunque también hubo otras
publicaciones que circularon por pocos años como fue “Pabellón”. A través de estas
publicaciones se llegaba al independentismo patriótico nacional puertorriqueño y
se ponía a la disposición del pueblo general. Algunas conferencias de Juan Antonio
Corretjer anteriores al inicio de la LSP se reproducen con cierta insistencia en publi­
caciones posteriores de la LSP por su vigencia y claridad ideológica. Quizás el mejor
ejemplo es la conferencia titulada “Retraimiento”, la cual ofrece por primera vez a
los miembros de la APLJ un 9 de diciembre de 1960 y luego a la FUPI en Mayagüez
en enero de 1961. “Publicaciones de la Liga Socialista Puertorriqueña” publicó varias
veces dicha conferencia en las diferentes ediciones del libro “La patria radical”.-’7 El
pensamiento revolucionario, su naturaleza frente al pensamiento burgués y la ne­
cesidad de distinguirlos, permearon gran parte de la literatura que produjo la LSP
desde sus inicios en los primeros años de la década del 1960 y en lo cual perseveraría
hasta la década del 1980. Las publicaciones eran sencillas, en blanco y negro, de fácil
manipulación, “El Socialista” tendía a concentrar su contenido en análisis más breves
mientras que "Correo de la Quincena” tendía a ser más elaborada en los aspectos
teóricos. Los esfuerzos de la LSP inclusive se extendieron a la programación radial
por un tiempo.48

Consuelo Lee Corretjer se mantuvo como Responsable de Educación durante prác­


ticamente toda la trayectoria de la LSP. A pesar de que aparece pocas veces como
autora de artículos, la selección de lecturas sobre diversos temas y de lecturas de lu­
chas reivindicativas de otros pueblos recaía en ella. Para 1970 estuvo trabajando una
columna de “notas internacionales” en las cual redactaba noticias de luchas que se
libraban en otros pueblos. Esto se contrastaba con noticias sobre la presencia de las
luchas de Puerto Rico en las publicaciones extranjeras. Un buen ejemplo fue un nú­
mero en el cual daba noticias de legislación represiva que se proponía en Uruguay y
el establecimiento de bases de Estados Unidos en la España Franquista. Junto a estas
noticias se daba a conocer un comunicado de la agencia de noticias, SINJUA, de la
República Popular China bajo el título “Nuevo ascenso de la lucha del pueblo puer­
torriqueño contra la dominación norteamericana”. En este se narraban las manifes­
taciones de nuestro pueblo para sacar la Marina de Guerra de Culebra y las concurrí-
2i | Lucha y espacio de la LiG/\ Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

das protestas de estudiantes contra el ROTC del 4 de marzo y el 12 de marzo de 1970.


Se pormenoriza la larga lucha de los obreros contra General Electric en Palmer.49 En
otro número de El Socialista, Consuelo Lee da cuenta de un editorial de SINJUA co­
mentando favorablemente un editorial del Correo de la Quincena titulado “Culebra:
Población y Lucha Mundial”.50

A lo largo de la historia de la LSP se evidencia la consistencia expositiva en dar a co­


nocer diversos escritos de líderes revolucionarios anti imperialistas y marxistas que
formaban parte de la historia de las luchas de los pueblos en el mundo y también de
aquellos que se hacían parte de la historia en ese momento. Esta trayectoria incluye
como elemento importante el esbozar análisis alrededor de figuras y hechos en la
historia de Puerto Rico con el propósito de establecer vínculos con las figuras y he­
chos históricos que se difundieron en las publicaciones de la LSP. La figura que pro­
bablemente más atención obtuvo en estas publicaciones lo fue la de Ernesto “Che”
Guevara. Guevara renunció a sus funciones en el Gobierno Revolucionario de Cuba
en octubre de 1965 y es la LSP quien hace una repartición del texto en Río Piedras.51
Mientras Guevara estuvo en la guerrilla, la LSP continuó sus publicaciones sobre su
pensamiento y accionar político. Algunos de los escritos del propio “Che” que circu­
laron por este medio fueron: “Pasajes de la Guerra Revolucionaria”, publicación de la
LSP en el 1966, “Lucha de Guerrilla: Un método”, publicación de la LSP en el 1967 y
su último gran mensaje conocido como “Mensaje a los Pueblos del Mundo a través de
la Tricontinental” publicación de la LSP en el 1967. En el 1967 “El Socialista”, dedicó
un artículo resumiendo la relación de trabajo de la LSP con respecto a la difusión del
pensamiento guevarista.

La triunfante revolución vietnamita recibió mucha atención tanto por el valiente des­
empeño del pueblo como por ser la punta de lanza del imperialismo estadounidense
en el derramamiento de la sangre joven de nuestro país a través del Servicio Militar
Obligatorio (SMO). La LSP publicó en el 1968 la parte inicial de “Bases fundamenta­
les de la guerra popular” del General Vo Nguyen Giap, recientemente fallecido.52 La
organización también dedicó mucha atención a los clásicos del marxismo leninismo
en la formación política de su militancia y a la educación política del pueblo en ge­
neral. Era texto obligado “La guerra de guerrillas” de Vladimir Lenin, del cual la LSP
publicó un resumen en el 1967 y el texto completo en forma de antología en el ¡978.5}
La antología fue un esfuerzo de los Cuadros Estudiantiles de la LSP, quienes en la dé­
cada anterior eran conocidos como los Cuadros Universitarios de la LSP. El análisis
histórico de Puerto Rico a la luz de principios marxistas leninistas estuvo presente en
varios artículos, dos de ellos del dirigente máximo de la LSP, Juan Antonio Corretjer:
“Proyecciones históricas de Lares” (Fragmento) en el 1968 y “Entendimiento de Lares”
en el 1975?’ En esta última, el análisis clasista es contundente cuando indica: “...Lares
se distingue de las anteriores rebeliones antiesclavistas y protestas contra las libretas
Raymond Soto Dáviia | 22

de jornales. Mediante la guerra, forma la más elevada de la lucha de clases, define la


madurez histórica de Puerto Rico para pasar a la explotación asalariada, en rechazo
de las formas anteriores de explotación”.

Las luchas en que la LSP participó durante las décadas del 60 hasta el 80 fueron mu­
chas y sus publicaciones también se utilizaron para fundamentar sus intervenciones
y dar el trasfondo histórico que la prensa comercial evadía detallar. Estas luchas todas
tienen un sustrato político y pueden presentarse ante el pueblo con diversas catego­
rías tales como, anticoloniales, antimilitaristas, ambientalistas, comunitarias, obreras,
feministas, estudiantiles y otras. La década del 1960 fue sumamente álgida, destacán­
dose la lucha anti plebiscitaria del 1967, el ascenso de la lucha contra el SMO, comien­
zo de la lucha contra la “Commonwealth Oil Refining Company” (CORCO) y el pre­
dominio de las petroquímicas, el inicio de la lucha anti minera y el desarrollo de las
condiciones que llevarían a desatar una crisis en la Universidad de Puerto Rico. Hay
otros procesos operando que harían crisis en la historia de nuestro país algún tiempo
después de la disolución de la LSP, muy particularmente el ascenso de una clase me­
dia, atada mayormente al sector de servicios, ideológicamente identificada con el con­
sumo superfluo y que progresivamente comenzaría a endeudarse. ” El fundamento
material de esta “norma social de consumo” se originó en las décadas del 1950 y 1960/

Expresiones artísticas y la LSP


Este segmento lo añadimos en ánimo de no ignorar algunas de las dimensiones ar­
tísticas que acompañaron el desarrollo y trayectoria de la LSP. No tenemos como
objetivo hacer justicia a todos las contribuciones que incidieron de alguna forma en
la organización pues eso se sale de los parámetros de este relato y justamente reque­
riría de una investigación muy extensa. Pedimos excusas anticipadas por omisiones.

Las publicaciones de la LSP reflejan un apoyo consistente de algunos artistas tales


como la Orquesta Nacional Mapeyé, Brunilda García, primero con la agrupación
“Instarte”, Joaquín Collazo, Lourdes Castañeda, más tarde Brunilda García y el
Colectivo Cimarrón, José Nogueras, Américo Boschetti, Mario Cesar Ríos Escobar,
Marta (“la cieguita”) y el grupo teatral Rueda Roja?7 Desde sus propias filas contó
con el dibujante y declamador Efraín García Osorio y con el artista plástico y hoy ex
prisionero político y de guerra, Elizam Escobar. Se unieron a campañas importantes
para la LSP como fueron la anti electoral, resistencia a colaborar con acusaciones del
Gran Jurado y la de apoyo a prisioneros de guerra, dibujantes, pintores y escultores,
quienes realizaban exposiciones, murales y aportaban su arte para afiches. También
mostraron adhesión a principios defendidos por la LSP como el derecho al uso de
la fuerza. Algunos de éstos fueron Eran Cervoni, Rafael López del Campo y Rafael
Irizarry.
23 I Luí HA Y I SI’AC IO DI I X I.K.-X SlH.IAI ISI A PUERTORRIQUEÑA: I962-I989

La propia obra poética de Corretjer irrumpe en ambas direcciones, hacia dentro de


la LSP y hacia fuera, arropando al pueblo y exaltando su sensibilidad patriótica. Es
lo primero lo que destacamos en este relato por incidir en el ánimo al interior de
la organización sin por eso menoscabar el hecho de que sus miembros también se
beneficiaban de la totalidad de la obra poética tanto de Corretjer como de Consuelo
Lee y del impacto de la misma al resto del pueblo. Ambos circularon poemarios en
la década del 1970 que ilustra este ánimo hacia dentro de la organización y extendían
la exaltación poética a las luchas que defendía. En el poemario “Con un hombro
menos”, Consuelo dedica el poema “El Almendro” a la militante de la LSP y heroína
nacionalista, Carmín Pérez y el poema “El legado” al militante Manuel Padilla en el
segundo aniversario de su muerte y dos poemas a la lucha de Vietnam, “A un viet­
namita frente a la muerte a quien amo y no conocí” y “Vietnam en la paz”?8 En su
poemario-“cancionero” que circula en la década del 1970 “Canciones de consuelo que
son canciones de protesta”, Corretjer le dedica cantos de “Canciones de Palmer” a la
militante Myriam Fuentes y a Consuelo Lee, “Martiana” al militante Milton Urbina
y “Guaracha de Culebra” a Carmín Pérez, heroína nacionalista y militante de la LSP.
También escribe la inolvidable “Salva por Vieques” dedicada a lucha de Vieques.59
Sin duda, el poema que fue musicalizado y ha alcanzado un notable lugar en la sen­
sibilidad patriótica del pueblo en general lo es “Boricua en la Luna”, el cual escribe
en la década del 1980 y lo dedicó a las entonces prisioneras de guerra, Alicia y Lucy
Rodríguez.60 A nuestro juicio y experiencia, junto al fragmento “Alabanza” estas dos
obras de Corretjer, musicalizadas, están segundas sólo a nuestro himno revolucio­
nario, en cuanto a incitar fervor patriótico, formando un cuarteto patriótico junto
a “Verde Luz” (Antonio Cabán Vale) y “Monón” (Roy Brown). Algunos militantes
también abrazaron esta práctica a través de las publicaciones de la LSP, ejercitando
la vena poética para exaltar tanto el valor de otros militantes como el fervor de las
luchas.
Raymond Soto D,\vii \ | 24

I
I

25 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Capítulo i: Década del 1960


Durante los primeros años de su formación, entre 1962 y 1965, la LSP sostuvo
vínculos muy estrechos con la APU, organización que dejaría de existir en esa misma
década. Como ya hemos indicado dicha organización la componía una militancia
independentista pero ésta era variada en términos ideológicos. La militancia con in­
clinación marxista gravitaría en gran parte a integrarse a la LSP. El gran líder estu­
diantil, José Marcano dio sus primeros pasos en la APU antes de formar parte de la
LSP. Para entonces Marcano colaboraba en una publicación de la APU, “Palante”. En
uno de sus números se da cuenta de la aceptación de la Unión de Jóvenes Comunis­
tas de Cuba en establecer relaciones oficiales con el frente juvenil de la LSP, Juventud
Socialista Puertorriqueña.61 Esta relación enfrentaría problemas poco después debi­
do al bloqueo impuesto por Estados Unidos y no se mantuvo por mucho tiempo. El
representante de la juventud por la LSP entonces lo fue Carlos Padilla.

En esos años de inicio de la LSP, específicamente entre el 1962 y 1964 se da a cono­


cer una organización clandestina, “Movimiento Armado Puertorriqueño Auténtico”
(MAPA) la cual operaba mayormente en la zona oeste de Puerto Rico. Se le acusaba
de una serie de escalamientos para sufragar la lucha y se vinculaba tanto a naciona­
listas como a creyentes en el marxismo leninismo. Esta organización suspendió sus
accionamientos luego de unos arrestos a raíz de la policía descubrir un arsenal de
armas en una cueva en el barrio Rochas de Moca. En el allanamiento que hace la
policía a la cueva muere uno de los miembros, Eduardo Louis Soto Almería, luego
de su muerte la policía le imputa ser doble agente, algo que años más tarde el Partido
Nacionalista se encargó de desmentir, rindiéndole honores. Varios independentis-
tas sufrieron condenas que fluctuaban entre sentencia suspendida y cinco a nueve
años de presidio.62 Ya para entonces se perfilaba que en la lucha independentista los
grupos clandestinos, como forma organizativa de lucha, más que incidencias esporá­
dicas eran más bien una constante que con cierta regularidad se manifestarían a lo
largo de la lucha.

La LSP desarrolló “estatutos”, los cuales fueron muy rigurosos. Ver “Apéndice I: Do­
cumentos: “Estatutos de la LSP”. Este documento se compone de tres capítulos bási­
cos con sus correspondientes artículos. El Capítulo I consta del nombre de la organi­
zación, sus objetivos y emblemas. Su artículo 2 la identifica como “partido marxista
leninista, comunista, de la clase obrera puertorriqueña”. El Capitulo II trata sobre
Raymond Soto Dáviia | 26

cómo llegar a ser miembro, siendo su artículo quinto muy extenso. Se detallan las
etapas y el proceso para llegar a ser miembro, primero se pasaba por ser simpatizan­
te y luego candidato hasta llegar a ser miembro. Es de notar que hay un constante
proceso de rigor, cotejo y selección durante todas las etapas. En eso la LSP se destacó
por ser estricta y exigente. El Capítulo III es quizás el más significativo. Es aquí donde
se define a la LSP como una “suma de organizaciones”. Se expone su organización
fundamental, sus componentes directivos y las organizaciones de base. En sus tres
artículos se da a conocer la estructura funcional organizativa de la LSP. Los órganos
directivos eran su Asamblea Nacional, la cual se celebraba una vez al año y elegía
un Comité Central. Este Comité Central elegía al Secretario General quien a su vez
elegía un buró político. El Secretario General y el Buró Político ejercían las funciones
y poderes del Comité Central. Las dos estructuras que tenían más contacto directo y
seguido con el pueblo eran los “comités regionales” y las “secciones”. Las primeras se
organizaban por área geográfica (Norte, Sur, Este, Oeste, Centro) y las segundas por
un tema o problema específico (fábricas, centro de estudios, fincas, arrabales, etc.).
Estas eran sus organizaciones de base. Entre las primeras, el Comité Regional del Sur
sobresalió mucho por la coyuntura específica del establecimiento en el área sur de
Puerto Rico de lo que fue el complejo petroquímico, mientras que entre las secciones,
fueron muy militantes las que se lograron establecer en la Compañía Telefónica, la
International (ITT), en el Recinto de Rio Piedras de la UPR (Cuadros Universitarios
de la LSP) y en la barriada Clausell de Ponce, entre otros.

Para entender el medio social de aquel entonces y las supuestas respuestas que el
gobierno colonial daba a las complejidades que la rápida industrialización y el mo­
vimiento hacia las ciudades creaban, complicado aún más por el crecimiento del
problema del narcotráfico, es necesario entender cómo se articulaban los cuerpos
del llamado orden con los que enfrentaban los problemas. La Policía de Puerto Rico
se reestructuró en el 1965 y ya para entonces daba muestras del paso tortuoso que
seguiría. El Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) se creó bajo la Ley 197 el 29
de junio de 1965 con el propósito de crear una estructura sofisticada que investigara
los delitos Tipo 1 (aquellos que ponen en peligro la vida de la persona) y dejar para la
entonces oficina de detectives aquellos de menor envergadura. Era obvio que había
insatisfacción con la resolución de casos de escalamientos los cuales habían aumen­
tado vertiginosamente. Sin embargo, para presidir esa unidad se trae a un militar
de carrera de la inteligencia del ejército de Estados Unidos, un tal Eugene Hudders
Montes. No resulta creíble que se trajera este personaje para lidiar con problemas de
escalamientos en Puerto Rico. Hudders renunció poco después, asediado por proble­
mas personales pero de inmediato pasó a trabajar para Louis Puro, dueño de hoteles
en Puerto Rico y vinculado a la Mafia estadounidense. Mientras estuvo en la Policía
ocupaba nada menos que una suite en el Hotel San Juan, propiedad de Puro. Como si
la corrupción y su vínculo con el aparato militar de Estados Unidos fuera poca cosa,
27 | Lucha y espacio de la Liga Sociausia Puertorriqueña: 1962-1989

luego de la renuncia del tal Hudders, se nombra a Luis Maldonado Trinidad quien a
su vez traería a un grupo de agentes, encabezados por Alejo Maldonado, todos vincu­
lados al FBI, que serían nefastos para la vida social y política del país y más tarde se
darían a conocer como “el escuadrón de la muerte”.63 Ya para 1968 esta nueva unidad
estaba operando y no comenzaría a desmantelarse hasta entrada la década del 1980.
La LSP y todas las organizaciones patrióticas de entonces tenían en esta unidad uno
de sus peores enemigos.

Tan temprano como principios de 1965 la LSP y su máximo dirigente, Juan Antonio
Corretjer, se pronunciaron sobre el asunto del “descubrimiento” de la riqueza mine­
ral de Puerto Rico. En aquel entonces diversas fuentes acaparaban los medios con
una campaña informativa en forma de denuncias y señalamientos sobre la riqueza
mineral de Puerto Rico supuestamente desconocida hasta entonces. Dicha campaña
revelaba sobre los hallazgos de la existencia de vastos depósitos minerales de cobre,
níquel, oro, plata y otros minerales en el subsuelo puertorriqueño. En dos artículos
en su publicación principal de entonces, Pabellón, la LSP estableció que: (1) Albizu
llevaba cuarenta años predicando sobre la riqueza de recursos naturales de Puerto
Rico. (2) Es la avanzada de las luchas revolucionarias, socialistas y anticoloniales, que
se daban en el Caribe y en otras partes del mundo lo que produjo que se diera esta
admisión en forma de “descubrimiento”. La LSP adjudicó a Estados Unidos haber
designado nuestros recursos como reserva para cuando viese cerca la hora del agota­
miento de los suyos y las reservas de otros países no parecieran disponibles debido a
controversias internacionales. Esto llevaba a concurrir a la avanzada del socialismo
en el mundo con la ofensiva del imperio sobre nuestros recursos naturales. (3) La
historia de encubrir y desinformar sobre nuestros recursos naturales era muy larga,
iniciándose desde el momento de la Guerra Hispanoamericana y la invasión de Es­
tados Unidos a Puerto Rico en el 1898. Para esta faena se utilizaron los recursos del
Congreso de Estados Unidos, las agencias de su gobierno, intelectuales de la llamada
academia de Estados Unidos, sociólogos, economistas, etc. y un buen número de in­
telectuales del país que estuvieron dispuestos a cotorrear la versión interesada de Es­
tados Unidos sobre la riqueza natural del país. Esa desinformación transmitida tanto
a nuestro pueblo trabajador como a los sectores intelectuales coloniales de Puerto
Rico estuvo dirigida a profundizar los complejos de inferioridad colonial y “ahondar
el derrotismo en el alma puertorriqueña”.64 Entre los documentos más impactantes
de esa época de “descubrimiento” se pueden destacar uno de los artículos de Karl
Wagenheim y el informe a la Cámara de Representantes de la Comisión Especial con
la firma de Luis Magín Velázquez como presidente.65

En noviembre de 1966 la LSP anunció el inicio de las “sábados socialistas”, espacio


para tertulias y disertaciones con una duración de cinco horas y un intermedio con
refrigerios.66 Este nuevo espacio representaba otro medio para difundir las clarifi-
Raymond Soto Dávila | 28

caciones históricas que continuamente se hacían necesarias. Era abierta a los sim­
patizantes y su propósito principal era extender la educación política más allá de
los miembros, como un medio adicional a las publicaciones. La LSP contaba para el
1967 con militancia suficientemente ágil para desarrollar una campaña de denuncia
y orientación en torno a los complejos petroquímicos recién establecidos en la parte
sur de Puerto Rico.67 Estos estaban exentos de pagar contribuciones y representaban
la entrada definitiva de los grandes monopolios petroleros de Estados Unidos en
Puerto Rico.68 Esto era grave ya que nuestro país estaba ocupado militarmente y ata­
do a las leyes federales de Estados Unidos. En la mañana del 15 de diciembre un pe­
queño grupo de militantes de la LSP repartió propaganda socialista y revolucionaria
a los trabajadores y público en general durante la inauguración de la Phillips en Gua-
yama. Las fuerzas represivas se movilizaron, desde la jefatura del FBI hasta efectivos
de la policía, para impedir una protesta o piquete. No lograron impedir la repartición
de propaganda. La militancia de la LSP continuaba la dimensión intemacionalista
que había desarrollado Corretjer en años anteriores y también repartieron literatura
del órgano de prensa del Comité Puertorriqueño del Partido Laboral Progresista de
Estados Unidos. Esta publicación bilingüe se llamaba “Desafío” y circulaba en Puer­
to Rico y en la diáspora de Estados Unidos.

El Comité Regional del Sur de la LSP logró gran efectividad organizativa lo cual fue
evidente en las luchas para hacer valer el trabajo de los obreros. No se limitaban a las
grandes cadenas estadounidenses como lo demostraba su apoyo a trabajadores fren­
te a patronos de pequeños negocios. Un caso que ejemplifica esto fue el paro llevado
a cabo en la repostería “Sol de Borinquen” en Ponce para la reposición de un obrero
despedido.69 Por otro lado, el hecho de que la industria petroquímica se establecie­
ra durante esa década en el sur de Puerto Rico hizo a ese comité estratégicamente
imprescindible para el trabajo político de la LSP con el sector obrero del país. La
aceptación que logró la LSP en las barriadas pobres en que realizaba trabajo traería
como consecuencia una ola represiva contra su militancia a finales de esta década
como veremos más adelante.

La LSP hizo acto de presencia en la gran concentración anti plebiscitaria que se ce­
lebró en el Parque Sixto Escobar el 16 de julio de 1967 aunque no le fue posible pro­
yectarse desde la tarima. Las otras organizaciones que se unieron fueron el Partido
Independentista de Puerto Rico (PIP), el Partido Nacionalista de Puerto Rico, el MPI
y otros grupos afines incluido un sector del PPD que se autoproclamó como “sobe-
ranista”. A la luz del análisis de la LSP, el plebiscito que el gobierno colonial del PPD
se proponía celebrar tenía unos propósitos particulares para el gobierno de Estados
Unidos. Dicho propósito era levantar otro partido, de corte anexionista, para implan­
tar el modelo bipartita de Estados Unidos en Puerto Rico y acabar con la hegemonía
electoral que desde el 1944 disfrutaba el Partido Popular Democrático (PPD). El Par-
29 | Lucha y espacio de la Lig/\ Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

tido Estadista Republicano, incapaz de derrotar electoralmente al PPD, no le era útil


a Estados Unidos para esos propósitos. El partido hegemónico cuyo rol había jugado
el PPD desde el 1944 ya no era deseable para los Estados Unidos.70 En el plebiscito del
1967 el modelo del “Estado Libre Asociado” (ELA) propulsado por el PPD sale favore­
cido pero dicho partido sufre una división profunda que facilitó su derrota electoral
del 1968. El resultado luego del proceso plebiscitario fue que en las elecciones gene­
rales del 1968 sube un nuevo partido anexionista, vigorizado y amenazante contra el
independentismo nacional puertorriqueño.

La LSP lanzó una campaña educativa anti plebiscitaria muy vigorosa a través de sus
publicaciones y discursos la cual descansaba en el análisis histórico que desde sus
inicios la LSP desarrollara. En el 1966, dos años antes de la derrota sufrida por el PPD
y un año antes del plebiscito, la LSP circuló un artículo de Juan Antonio Corretjer
sobre el 30 de octubre, el cual iba dirigido a los independentistas dentro del Partido
Popular.71 Es un alerta de cuál es el único camino que históricamente ha detenido el
objetivo del imperio de anexar a Puerto Rico. Corretjer ofreció el discurso fundamen­
tándose en sus intercambios con Albizu (que ya mencionáramos en una sección an­
terior), al participar en la conmemoración de la Insurrección Nacionalista en Jayuya
en el 1967. Esto fue a pocos días de estar pautado el plebiscito 72 Hizo énfasis de por
qué fue necesaria la insurrección del 1950 lo cual fue para evitar a Puerto Rico el ca­
mino que de hecho siguieron Hawaii y Alaska. La LSP indicó en sus interpretaciones
de entonces que el nuevo partido anexionista deseable para Estados Unidos sería
en apariencia anexionista pero realmente abrazaría el ELA. Hasta el 2014 el tiempo
parecería dar la razón a dicho análisis. El FBI no escatimó gastos para reprimir el mo­
vimiento anti plebiscito como reveló una investigación de Luis Nieves Falcón (epd).7}

El ascenso de Luis A. Ferré y el entonces recién inaugurado PNP (Partido Nuevo Pro­
gresista) dejaría consecuencias en procesos electorales futuros y en otros procesos
sociales. Sobre lo primero, estableció una alternancia en el gobierno colonial entre
los dos partidos, PPD y PNP, algo que se previo como probable en el análisis de la
LSP. De forma inmediata hizo visible los intereses del exilio cubano en Puerto Rico
en la figura de Luis A. Ferré, cuyas raíces eran cubanas. El sector del exilio cubano
era para entonces muy importante para la campaña mundial anticomunista de Es­
tados Unidos.74 Estos intereses tenían corrientes muy profundas. En lo superficial se
evidenció el auge de los hoteles y legislación muy favorable para el sector hotelero. El
incremento de la actividad criminal comenzó su espiral indetenible ligada a la droga
y también aumentaron las actividades relacionadas a la prostitución. Por otro lado,
Luis Ferré fue el primer gobernador acaudalado de Puerto Rico, que se tenga cono­
cimiento. El incremento de su fortuna se relacionó con la adquisición dos décadas
atrás, mediante compra al gobierno de Puerto Rico, de cuatro de las cinco subsidia­
rias que levantara el pueblo bajo la Compañía de Fomento Industrial, entre ellas la
Raymond Soto DAvila | 30

de cemento, la más lucrativa.75 Como si esto fuera poco era dueño de un periódic0
regional que circulaba entonces en Ponce y el cual con el tiempo pasaría a ser de
distribución en todo Puerto Rico.

La LSP estuvo muy activa contra el SMO, la implantación del brazo militar de la oficia­
lidad de las fuerzas armadas de Estados Unidos en las universidades, el ROTC (“Re­
serve OíficerTraining Corps”) y la lucha estudiantil en Puerto Rico contra ese cuerpo
y contra la Guerra de Vietnam. Todos los demás grupos independentistas estaban
también solidarios con estas luchas. La LSP dio reconocimiento a la participación acti­
va de todos los demás sectores independentistas a lo largo de sus expresiones públicas
y publicaciones. Las publicaciones de la LSP divulgaron estas actividades consistente­
mente. Dos casos que recibieron mucha atención de todas las organizaciones en luch a
fueron las de los resistentes al SMO, Sixto Alvelo, acusado en el 1966 y Edwin Feliciano
Grafals, acusado en el 1969. En estas luchas resultó muy aleccionadora la convergencia
de las organizaciones y la combinación de estrategias de agitación en la calle y de pro­
cesos legales. La organización de los Cuadros Universitarios de la LSP, surgió a finales
de la década, bajo el liderato de Pepito Marcano.76 Los Cuadros Universitarios de la
LSP tendieron puentes a otros jóvenes y organizaciones y tuvieron dentro de su línea
de acción el más profundo respeto por el heroísmo y valentía de todos. Para apreciar
la rectitud y sensibilidad que los guiaba puede citarse el conciso y sentido artículo de
Marcano dedicado al joven Fefel Varona, de la juventud del MPI, quien murió víctima
de un bombardeo en Vietnam mientras participaba como invitado junto a otros jóve­
nes en un evento antiimperialista. Varona murió a consecuencia de las heridas en un
hospital de la entonces Unión Soviética en donde intentaron salvarle la vida.77

Sixto Alvelo fue el primer miembro del MPI en negarse a ingresar en las fuerzas ar­
madas por lo cual las autoridades de Estados Unidos procedieron a arrestarlo y a en­
causarlo ante la Corte Federal en el 1966. El arresto de Sixto Alvelo fue a través de
una acusación de un gran jurado justo cuando Estados Unidos invadió a la República
Dominicana/ Luego de varios meses, el fiscal Guillermo Gil solicitó el archivo, a su
regreso de un corto viaje que realizó a Washington DC. El MPI tomó este caso como
base para desarrollar su estrategia de defensa a los jóvenes resistentes. Fiel a su propó­
sito de unir fuerzas, las publicaciones de Juan Antonio Corretjer y de la LSP destaca­
ban a todos los concernidos fueran o no miembros de la LSP y algunas veces citaban
las palabras de los líderes de otras organizaciones.79 Se creó el “Comité de defensa de
Sixto Alvelo”, el cual fue un ejemplo de solidaridad y de madurez organizativa. Estuvo
al frente de éste la Dra. Piri Fernández.80 Las represalias no se hicieron esperar. Una de
ellas fue contra Sixto Alvelo, a quien le lanzaron una bomba contra su casa.81

Hubo muchas actividades que se dieron de forma coordinada entre organizaciones y


con personas no afiliadas en la lucha contra el SMO. Ese fue el caso de la “Marcha de
la Juventud” de Ceiba a Río Piedras en donde participaron alternadamente jóvenes
3i | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

que mantuvieron siempre su número en treinta entre los cuales había miembros del
MPI, LSP y no afilados. La LSP no pasó por alto en sus publicaciones el menospre­
cio de la prensa y las distintas reacciones del pueblo cuando la marcha entró a Rio
Piedras.82

La militancia de la LSP estuvo muy activa tanto en el frente estudiantil como en


apoyo a los “infractores” del SMO, entre los cuales se contaban miembros de la LSP.
Algunos nombres son Manuel Amy Valentine, Antonio Rivera Figueroa y Gabriel
Mezquida (epd). Junto a otros grupos la LSP hizo presencia en piquetes frente a las
oficinas de reclutamiento en diversos pueblos del país, tales como Guánica, Peñuelas,
Yauco, Ponce, Utuado, entre otros.85 Los Cuadros Universitarios de la Liga Socialista
de Puerto Rico tuvieron una participación intensa en el Recinto de Rio Piedras de
la UPR para fines de la década del 1960. Su líder, José “Pepito” Marcano, se destacó
en las luchas universitarias contra el ROTC, y enfrentó por ello cargos criminales y
varios arrestos que lo marcaron como “tarjeta preferida” de los cuerpos represivos. Su
estatura como líder estudiantil en las confrontaciones contra el SMO en los años de
1969 al 1971 es incuestionable.

Como sustrato de esta lucha en la UPR se dan otros procesos complejos, centrándose
en la figura de Jaime Benítez, al frente entonces de la UPR, quien era el portador de la
ideología de “casa de estudio”, propulsando un ambiente “sosegado” que realmente
buscaba el inmovilismo. Esto representaba una problemática profunda para el estu­
diantado y sus organizaciones quienes todavía carecían de experiencia como para
poder enfrentar la represión de forma unitaria y organizada. El 27 de septiembre de
1967 muere Adrián Rodríguez, quien era taxista, dentro del campus de Río Piedras,
víctima de unas ráfagas de la Policía de Puerto Rico, quienes entraron al campus para
tirotear a los estudiantes. Ese día la FUPI había protagonizado una protesta muy vi­
gorosa frente a los cuarteles de la AUPE (Asociación Universitaria Pro Estadidad) en
Rio Piedras, ya que habían acusado a la FUPI de tráfico de narcóticos.8^ Esta muerte
quedó impune como tantas otras muertes de independentistas.

La LSP denunció el asesinato de Adrián Rodríguez, la campaña de las fuerzas repre­


sivas y los elementos que jugaban un rol en ella apuntando que este contubernio se
llevaba a cabo desde el 23 de septiembre, pocos días antes de esta muerte.85 Divulgó el
historial como independentista de la víctima y señalaba que dicha muerte fue parte de
esa campaña la cual estaba coordinada por la Policía de Puerto Rico y la unidad cono­
cida como “Fuerza de Choque”. Sobre esta última denunciaba era una creación de la
CIA. La campaña se la atribuyó tanto al FBI como a la CIA. Estos cuerpos represivos se
catalogaron como perseguidores de independentistas y propulsores de la propaganda
anticomunista y contra la Revolución Cubana. De este modo la lucha estudiantil que­
daba enmarcada dentro de las políticas oficiales del imperio. El detonante que sirvió
como antesala al incremento del ambiente caldeado en el Recinto de Río Piedras de la
Raymond Soto Dávila | 32

UPR fue el juicio de Edwin Feliciano Grafals y los acontecimientos que le siguieron.
El 26 de septiembre de 1969 Feliciano Grafals enfrentó la sentencia por resistencia al
SMO en la sala del juez federal Hiraní Cancio. Lo acompañaba un nutrido grupo en el
cual había una gran cantidad de estudiantes que lo apoyaba y muchos periodistas. El
estudiantado se trasladó a Río Piedras donde lo esperaba otra gran cantidad de estu­
diantes. De ahí se movilizaron hacia los cuarteles del ROTC. La indignación era muy
intensa y la protesta culminó en asalto y quema de dichos cuarteles.

La LSP dio continuidad a su trayectoria de intérprete de los acontecimientos políticos


con una perspectiva histórica y a su rol en la educación política del pueblo mediante
la distribución, al otro día del juicio de Feliciano Grafals y el asalto al ROTC en Rio
Piedras, de una hoja suelta firmada por Juan Antonio Corretjer y José “Pepito” Mar-
cano. Corretjer firmaba en su capacidad de secretario general de la LSP y Marcano
como responsable de propaganda. En la misma se felicita a los asaltantes del ROTC
en Río Piedras por estar a la altura del Grito de Lares pero se advertía que la lucha
crecería en su alcance cuando los actos, en vez de espontáneos fueran el producto de
la organización y previsión.86 El 2 de octubre de 1969, a una semana de la repartición
de esta hoja, los firmantes de la misma y el alto liderato de la LSP fueron arrestados
bajo diversos cargos, desde conspiración a violación a la ley de armas.87 Los arrestos
se extendieron por el área metropolitana, Ponce y Mayagüez. La proporción mayor
de los arrestos recayó en la militancia del sur, indudablemente debido a su ascen­
dente activismo a favor de los obreros del complejo petroquímico. S8La LSP contó
con mucha solidaridad para enfrentar los casos, la cual se reflejó en la prestación de
fianzas, asesoría legal gratuita y múltiples expresiones públicas de apoyo.

A pocos días de ocurridos los arrestos de los miembros de la LSP, la organización


circuló una exposición sobre los hechos.89 En resumen, asevera en varios artículos
relacionados que, (1) la policía colonial siguió instrucciones del FBI para los arrestos,
(2) el apoyo a la LSP evidenciaba el respeto que se había ganado de otras organizacio­
nes independentistas, (3) el apoyo del profesor universitario chileno, Dr. José María
Bulnes, era muy apreciado por lo “raro” de su posición entre los profesores latinoa­
mericanos, la LSP alerta sobre el claustro del Recinto de Río Piedras de la UPR como
“pesebre bajito” para la buena vida de muchos profesores latinoamericanos visitan­
tes, favorecedores del imperialismo y el coloniaje. Sobre las manifestaciones de la
LSP que pudieran haber preocupado al imperio indica fueron las siguientes: (1) la
línea interpretativa marxista-leninista de la LSP, por su potencial de vincular la clase
obrera con la lucha por la independencia, y la adhesión de la LSP al pensamiento de
Mao Tse Tung (2) la denuncia del voto presidencial que hizo la LSP el mes anterior,
en un acto muy concurrido honrando a Albizu, en el sentido de que este voto era una
forma de validar el SMO, poniendo a los puertorriqueños a votar por el “comandante
en jefe” (3) la vinculación que hizo la LSP de la expansión petroquímica en Puerto
33 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Rico con el propósito ulterior de fortalecer los intereses militares del imperio sobre
otros pueblos. La LSP aprovechó la ocasión para denunciar que la Policía entraba al
campus cuando quisiera ya que así lo hizo para arrestar a José Marcano.

Hacia los últimos años de la década del 1960 surgen una serie de acciones contra
instalaciones e intereses de capital estadounidense los cuales se atribuye mediante
comunicados un grupo que se auto denominó “Comandos Armados de Liberación”
(CAL). Este grupo se mantuvo activo durante unos cuatro años. La primera de es­
tas acciones de ellos fue a los almacenes de la tienda “Kmart”. La LSP hizo su inter­
pretación de este incidente destacando el carácter hipócrita de la prensa comercial
colonial y exponiendo las ventajas económicas que devengaban estas compañías
mediante dobles seguros por incendios y la competencia desleal que representaban
para los pequeños comerciantes puertorriqueños.90 Las acciones de la CAL se han
descrito como “actividad de guerrilla urbana”.91 Sus actos, además de dirigirse contra
la inversión extranjera, básicamente de origen estadounidense, también dieron apo­
yo a los obreros en diferentes huelgas de aquella época. También existió para esos
años otra organización clandestina, el Movimiento Independentista Revolucionario
en Armas (MIRA) la cual junto a la CAL sería una organización precursora de la lu­
cha clandestina que se desarrollaría posteriormente.92

La década del 1960 cierra para la LSP con un saldo positivo para el crecimiento de
su militancia, extendiéndose por muchos pueblos de la isla, manteniendo sus pu­
blicaciones de forma regular la mayor parte del tiempo. Su dedicación y militancia
influenció ideológicamente a otras organizaciones. Sus recursos ya eran suficientes
para dar apoyo en luchas específicas de la clase trabajadora como lo era la huelga
que se llevaba a cabo en Palmer, contra la compañía estadounidense General Elec­
tric.9’ Los Cuadros Universitarios de la LSP comenzaron a repartir un boletín con
cierta regularidad en el campus de Rio Piedras, “El Socialista Universitario”.*1 Dos
estudiantes de la Universidad Católica de Ponce comenzaron a organizar los Cua­
dros Universitarios de la LSP en esa institución siendo esto un gran logro dado el
carácter conservador de dicha institución. (Ver Apéndice IV: Entrevistas: Entrevista
a Noemilda Vélez Mass.) El saldo no era todo positivo. La LSP sufrió la separación de
un grupo marxista leninista, el “Partido Socialista Obrero”, (PSO) con el cual había
trabajado de cerca y se había perfilado una posible unión.^El alto liderato de la LSP
enfrentaba cargos muy serios, otras organizaciones patrióticas también eran obje­
to de represión, particularmente el MPI, la FUPI y la FEPI (Federación Estudiantil
Pro Independencia). Esta última organización agrupaba estudiantes independentis-
tas en la escuela superior.96 Muchos jóvenes también esperaban juicio ya fuera por
resistencia al SMO o por cargos relacionados a protestas. La oposición de nuestros
jóvenes a la imposición del SMO iba en escalada hacia una confrontación donde no
habría vuelta posible.
RaymondSoto D.wii.x | 34

I
35 | Lucha y espacio de ia Liga So( iai isi \ Pi ertorriqi i ñ 1962-1989

Capítulo 2: La década del 1970


Esta década fue sumamente intensa para Puerto Rico y también lo fue para la
LSP. (Como se recordará, la LSP se inauguró luego de dos años de iniciada la década
anterior.) Esta es la única década completa en la que el LSP se desempeñará. Hemos
dividido la misma en dos lustros porque el primero se caracterizaría por grandes re­
tos económicos del gran capital, producto de sus propias contradicciones las cuales
los capitalistas intentarían resolver sobre los hombros de la clase trabajadora. Estos
intentos manifestarían la crisis en las huelgas y en la organización de los trabajadores
en Puerto Rico. El segundo lustro, aún sin carecer de los elementos anteriores, tendría
como factor predominante el proceso político y la profundización colonial. Para fines
de la LSP, el surgimiento y accionar de organizaciones clandestinas tanto en Puerto
Rico como en la diáspora, se convertiría en el punto principal ideológico político de
la LSP y de su militancia. También se relacionará muy de cerca con la el Movimiento
de Liberación Nacional “MLN”, organización progresista de boricuas y chicanos que
se funda en este periodo en comunidades hispanas en Estados Unidos. Igualmente
habría una escalada en la intensidad de la violencia en la siempre presente represión
contra el independentismo, escalada históricamente superada solamente por la re­
presión contra el movimiento nacionalista entre las décadas del 1930 y 1950.

Los AÑOS DE 1970 A MEDIADOS DEL 1975

El 4 de enero de 1970 el Comité Central de la LSP circuló un documento de varias


páginas titulado “El voto presidencial” en el cual se hace un análisis de la situación
política de Puerto Rico.97 Los firmantes fueron Juan Antonio Corretjer como Secreta­
rio General, Carmen María Pérez por el Comité Regional del Norte, Milton Urbina
por el Comité Regional del Sur, Carlos Martínez por el Comité Regional del Interior
y José Marcano por los Cuadros Universitarios. Este documento es fundamental por
varias razones, exponiendo de forma bien argumentada la tesis de que el voto presi­
dencial: (1) Es un paso hacia la anexión, necesario para Estados Unidos justificar ante
el mundo la cuota de sangre que se impone a los puertorriqueños en sus guerras. (2)
Busca obviar el presente status de Puerto Rico, producto de un tratado en donde los
puertorriqueños no fueron consultados y dar con una fórmula para convertir a Puer­
to Rico en territorio incorporado de los EE.UU. (3) Es una forma de resolver el dilema
de la ley del servicio militar obligatorio la cual se origina en la Cámara de Repre­
sentantes de EE.UU y se impone sin que los puertorriqueños tengan representantes
■ I

RaymondSoioDávila | 36

en ese cuerpo, lo cual la convierte en tiranía pues es un tributo de sangre. (4) Es una
avenida para el imperio quitar la responsabilidad del Congreso de Estados Unidos y
pasarla al presidente.

El documento hizo trizas la estrategia del gobierno de Estados Unidos con respecto al
voto presidencial al exponer los poderes cuasi monárquicos del presidente de EEUU,
el cual puede declarar guerras sin consulta al pueblo y sin el aval del Congreso y
alerta que el objetivo del imperio al potenciar las fuerzas a favor de la estadidad es
la anexión mediante territorio incorporado, status que no es revocable, contrario a la
estadidad que sí lo es. Se repite que el problema universitario no reside en la persona­
lidad del rector o administrador de turno y sí en la toma del poder de las fuerzas del
imperio y su clase dominante y serán sus ideas las que regirán la institución. Se lan­
zan dos propuestas para combatir el voto presidencial, una dirigida a los estudiantes
y jóvenes y otra dirigida a los independentistas. Se propone un magno Congreso Es­
tudiantil y un grandioso Congreso Independentista. El documento finaliza con una
exhortación de acercar la lucha por la independencia a la clase obrera. Volveremos
sobre esta exhortación.

A la luz de este documento es evidente que para la LSP la represión iba tomando
unos caminos o modalidades que para muchos de los que éramos bien jóvenes en­
tonces no resultaban tan obvios o significativos. Sin embargo, diez años después (a
principios de la década del 1980) la LSP circularía de nuevo el mismo con un prólogo
en el cual se exponía un análisis bien claro de varios desarrollos de la década del 1970
y de las razones por las cuales las propuestas no se concretizaron. Ya para entonces
todo lo dicho en el documento diez años antes nos parecería no sólo evidente sino
que la gravedad de los planteamientos se nos manifestaba más profunda. Justo es de­
cir ahora que las propuestas que se hicieron entonces no se dirigían específicamente
a los trabajadores y esto podría parecer una contradicción. No creemos que lo fuera
y abundaremos en nuestras razones más adelante. Justo también es adelantar que la
década del 1970 tuvo muchos procesos sumamente difíciles los cuales a nuestro juicio
drenaron las energías de muchos militantes y de otras personas cuya formación en
ciernes probablemente se truncó.

En los primeros meses del 1970 se intensificó la lucha antimilitarista y contra el


ROTC, ganando adeptos en lodo Puerto Rico, haciéndose sentir en el nivel de escue­
la superior a través del trabajo de la FEPI, la cual recibía apoyo del MPI y que logró
abrir capítulos en un número de escuelas superiores en Puerto Rico. Desde el inicio
del semestre en el Recinto de Rio Piedras de la UPR hubo varias confrontaciones y
encontronazos entre cadetes, estudiantes antimilitaristas y la guardia universitaria la
cual corría a defender a los cadetes.9'8 Entre los antecedentes externos a la universidad
a la gran confrontación del 4 de marzo de 1970 identificamos dos: la decisión del Juez
Cancio del 23 de enero de 1970 relacionada a la sentencia anterior al joven resistente
yj | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

del SMO, Edwin Feliciano Grafals y la quema de una oficina de redacción de Clari­
dad el 3 de marzo de 1970. Con respecto a la decisión del Juez Cancio, éste recibió una
decisión en apelación del caso que lo condujo a rebajar la sentencia de un año de
cárcel a una hora de cárcel. A pesar de esto el joven se mantuvo firme en su negativa
de cumplir la misma llenando esto de orgullo y esperanza a muchos jóvenes que se­
guían el caso con mucha ansiedad. Con respecto a la quema de la oficina de Claridad
esto se interpretó como una represalia obvia de la derecha por el continuo apoyo que
dicho periódico brindaba a la lucha contra el SMO.

El 4 de marzo al medio día, las mujeres universitarias reunidas en una organización


femenina independentista conocida por sus siglas como C.A.F.U., marcharon alre­
dedor del campus cantando La Borinqueña y el himno de la universidad y a su paso
se unían otros estudiantes." Este acto terminó con un piquete frente al edificio del
ROTC. Los cadetes salieron a responder con sus consignas y luego entraron a su
edificio y muy poco tiempo después llegó la Guardia Universitaria en actitud muy
hostil. Los manifestantes se dispersaron y muchas jóvenes corrieron hacia el Centro
Estudiantil. La guardia universitaria persiguió a este grupo y penetró al Centro Estu­
diantil, generándose caos, ya que efectivos de este cuerpo entraron a los baños de las
damas. La voz se corrió en pocos minutos y una gran masa de estudiantes salió desde
todos lados hacia el ROTC intercambiándose piedras y cocteles “molotov” entre los
cadetes apertrechados en el edificio y los estudiantes. Los cadetes lanzaron un ata­
que con rifles de perdigones. Uno de los estudiantes heridos en el pecho lo fue José
Marcano. Los estudiantes lograron quemar un almacén del ROTC y penetraron el
segundo edificio en importancia del ROTC.

La confrontación de¡ 4 de marzo duró varias horas hasta el anochecer ya que la Po­
licía de Puerto Rico entró a desalojar el campus y la confrontación continuó afuera
con un grupo de estudiantes que aunque más reducido seguía siendo muy grande.
Es en ese escenario que varias jóvenes estudiantes se trasladan de un edificio donde
se hospedaban a otro edificio desde donde podían observar lo que sucedía en la ca­
lle. Una de estas jóvenes fue Antonia Martínez Lagares a quien un policía le disparó
cuando desde ese balcón le gritaron “asesino” por tener desenfundada su arma ante
estudiantes desarmados. Durante todas esas horas la Policía de Puerto Rico había
arrestado a decenas de estudiantes cuya familia desconocía su paradero.

La primera manifestación escrita de la LSP sobre el 4 de marzo fue el mensaje al estu­


diantado de los Cuadros Universitarios de la LSP que circularon como hoja suelta en
la Asamblea de Estudiantes del 12 de marzo de 1970, unos ocho días después del ase­
sinato de Antonia Martínez. (Ver “Mensaje al estudiantado universitario” en el Apén­
dice III: Cátedra de Militantes). El boletín articula los siguientes puntos: (1) Alude a
la historia de la Universidad de Córdova, Argentina, como punto de referencia de la
reforma necesaria en toda la universidad como institución. (2) Establece una relación
RaymondSotoDávila | 38

directa entre los acontecimientos dramáticos del 4 de marzo, incluido el asesinato de


Antonia Martínez y el propósito del gobierno de Estados Unidos y su instrumento el
Partido Nuevo Progresista, para imponer el voto presidencial y el territorio incorpo­
rado y así justificar el SMO. (3) Correctamente señala al Presidente de Estados Uni­
dos como el asesino de Antonia y atribuye complicidad a Luis Ferré y Jaime Benítez.
(4) Se declara a favor de una huelga estudiantil. Lo firmó José Marcano, quien para
entonces ya había sufrido varios arrestos.'00 Esta asamblea de estudiantes no acordó
una huelga sino un paro de tres días luego de lo cual celebraron otra asamblea y de­
cretaron la realización de un referéndum.

El drama que se escenificaba en el Recinto de Río Piedras de la UPR no era el único.


El panorama sindical era muy complicado y el crecimiento del sector público de em­
pleos fue acompañado de muchos conflictos y huelgas. Tanto el PIP como el MP1 pa­
saban por procesos muy intensos y se debatían al interior de ambas organizaciones
lucha de facciones muy profundas.101 Es en ese clima que las organizaciones patrióti­
cas tuvieron que enfrentar la campaña que se desató en la prensa para desmerecer la
lucha del estudiantado a raíz de los hechos del 4 de marzo y del resultado del referén­
dum estudiantil celebrado el 18 de marzo en el Recinto de Río Piedras de la UPR. Los
cuadros universitarios de la LSP no apoyaron dicho referéndum. Regresaremos a esto
más adelante cuando discutamos los antecedentes del 11 de marzo de 1971. No faltaba
valentía a los jóvenes a pesar del clima que hemos descrito. El primero de septiembre
de ese año, Juan Cosme Laureano se convirtió en el primer candidato a ingresar en la
LSP que anunciaba públicamente su resistencia a participar en el SMO.102

r El 17 de julio de 1970 Corretjer y Consuelo Lee sufrieron un atentado cuando esta­


ban a punto de llegar en su auto a su hogar en Guaynabo. Ambos produjeron un
documento el 18 de julio de 1970 firmado por Corretjer como Secretario General y por
Consuelo Lee como Responsable de Educación y circularon como hoja suelta el cual
titularon “Intentan asesinar a Corretjer y esposa”. (Ver Apéndice II: Represión contra
la LSP). En el mismo acusaron la General Electric y a la CIA del atentado.103 Los tra­
bajadores de Palmer en Río Grande libraban una larga huelga contra dicha compañía
desde el año anterior. Se puede inferir del documento que operaban elementos de se­
gundo nivel que pasaban información al sector en lucha. Se revela que la Junta Fede­
ral de Relaciones del Trabajo planteó a los trabajadores que no arreglarían la huelga
hasta que los huelguistas expulsasen a los miembros de la LSP de los alrededores. Se
denuncian otros actos de bandolerismo que se escenificaron en esas inmediaciones
con el fin de implicar a los huelguistas.104 El documento también da fe de algunos de
los principios a los cuales los miembros de la LSP se adherían tales como no poseer
propiedad privada ni tener puestos en una unión. (Ver Apéndice I: Documentos: Esta­
tutos LSP.) Sobre esta huelga y su desenlace, Myriam Fuentes, destacada militante de
la LSP para entonces, produjo un significativo artículo el cual hemos reproducido por
39 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

su claridad, sencillez, tono didáctico y profundidad de análisis. El punto más insisten­


te de la autora es que la no restitución de los obreros despedidos representó una grave
pérdida por ser ellos los más desarrollados y los dirigentes en el taller. Es emblemática
su sentencia:”Los líderes no se dan en árboles.” (Ver este artículo titulado “Examen a
la huelga en Palmer” en el Apéndice III: Cátedra de militantes.)

La LSP maduró en pocos años una militancia ágil y combativa nucleada en el Comi­
té Regional del Sur, el cual ya hemos mencionado. Esta militancia era capaz de dar
apoyo a los obreros en muchas luchas de forma tanto material como ideológica. En
el aspecto material, se proveía apoyo en la agitación en las líneas de piquete, se di­
fundía las razones del conflicto en las publicaciones de la LSP y en hojas sueltas y en
el aspecto ideológico, se esbozaba un análisis clasista con el fin de aminorar el efecto
de los personalismos y elevar el análisis acorde a la línea marxista leninista. Las pe­
troquímicas trajeron condiciones de trabajo terribles para los obreros y peligros de
salud para las comunidades cercanas además de los daños devastadores al ambiente.
Un buen ejemplo del trabajo de la LSP fue su apoyo a los obreros de la Compañía Bet-
chel. En una de las publicaciones de la LSP, Antonio Rivera Figueroa denunció tanto
las condiciones de trabajo como el sueldo de los soldadores, el cual era una tercera
parte de lo que se pagaba en Estados Unidos. La Betchel se dedicaba a hacer amplia­
ciones en las ya inmensas instalaciones de varias compañías petroquímicas y exigía
a los obreros contratados que compraran su propio equipo y proveía herramientas
defectuosas. Los supervisores norteamericanos exhibían un trato irrespetuoso y ra­
cista. Luego de un despido injustificado a un trabajador, éstos se fueron a un paro de
dos días, al final de los cuales el patrono despidió a 200 obreros. En su análisis, Rivera
Figueroa señaló las razones para la ausencia de poder de los trabajadores exhortando
a éstos a conocer los fundamentos de la LSP e ingresar a la misma.105

No era solamente en el sur del país o en huelgas sonadas como la de General Electric
en Palmer, que la LSP hizo trabajo. Su militancia lograba multiplicarse y extenderse
a otros conflictos. Fue emblemática la huelga que los trabajadores de El Comandante
decretaron el cuatro de julio. El reclamo era por el pago doble los días de fiesta. La
Unión de Empleados de El Comandante no apoyó a los huelguistas y los empleados
terminaron radicando recursos legales para la desafiliación con el objetivo de crear
otra unión. Las contradicciones de la empresa llegaron al punto de que el fundador
de la unión trabajaba con la gerencia. La LSP dio apoyo en los piquetes e inclusi­
ve desde el micrófono.106 Por otro lado, las publicaciones de la LSP acostumbraban
destacar las victorias de los trabajadores frente a los patronos como fue el caso de la
Unión Gastronómica y su Local 610 frente a la Asociación Metropolitana de Hoteles,
luego de una amenaza de huelga de parte de la inmensa mayoría de los trabajado­
res de hoteles que agrupaba, lográndose que el patrono cediera a las demandas. Sin
embargo, siempre se advertía que solamente tomando el poder la clase trabajadora
Raymond Soto DAvila | 40

se podría asegurar una vida productiva. Al mismo tiempo los militantes de la LSP
también daban publicidad a la realidad cruel que se vivía entre los desempleados en
busca de soluciones a través de los servicios que se ofrecían entonces en las oficinas
de desempleo.'07

El 23 de septiembre de 1970, Corretjer dio un discurso en Lares a nombre de la LSP


en el cual delineó de forma muy correcta los problemas que se avecinaban para el
pueblo patriota y los trabajadores.108 Entre los problemas apremiantes que asomaban
mencionó la toma de Culebra de parte de las fuerzas navales de Estados Unidos para
prácticas de cañoneo naval utilizando como excusa el paso de embarcaciones sovié­
ticas por aguas internacionales. Igualmente mencionó la proyectada explotación de
las minas de Utuado, Adjuntas y Lares. En ambas situaciones señaló la titularidad
como eje principal que debiera plantearse la nación puertorriqueña y en el caso de la
proyectada explotación minera añadió la probabilidad de gran daño ecológico. Co­
rretjer también hizo un análisis de la entonces reciente victoria del socialista Salva­
dor Allende en Chile en el cual expresó cautela a pesar de la alegría. Su análisis sobre
la diferencia entre “acercarse al poder” y “tomar el poder” resultó premonitorio y al
día de hoy sabemos que las consecuencias de lo ocurrido pesan todavía en ese her­
mano país.109 De hecho en un artículo escrito el mismo año de la victoria de Allende,
Corretjer profundizó en las raíces históricas en que fundamentaba sus dudas sobre
la elección de Allende en Chile. Utilizó como ejemplo el proceso por la vía electoral
del establecimiento de la Segunda República Española en el 1932 y las consecuencias
nefastas que tuvo el que, luego de la abdicación del Rey Alfonso XIII, no se desman­
telaran las estructuras de sostén del antiguo régimen, lideradas por militares, lo cual
llevó varios años después a la Guerra Civil y al derrocamiento de la república. El
resultado fue el establecimiento de la larga dictadura de Francisco Franco desde 1939.
Corretjer expuso estas relaciones causales como un presagio y aclaró que lo hace a
pesar de los lazos de amistad y solidaridad que tenía con Salvador Allende.110

El PNP buscaba afanosamente congraciarse tanto con su electorado y al mismo tiem­


po cumplir con aquellas condiciones que el gobierno de Estados Unidos iba diseñan­
do para acomodar su maquinaria militar y sus designios bélicos. Con esos propósitos
se celebró un referéndum en noviembre de 1970 para que el electorado decidiera si
se debía conceder el voto a los jóvenes de dieciocho años. Los resultados apoyaron
dicho voto. La LSP por voz de su cuadro joven más destacado entonces, José (Pepito)
Marcano, delineó las razones para no acudir a dicho referéndum desmontando los
argumentos patronales y denunciando el verdadero interés del gobierno de Estados
Unidos.’" Sobre lo primero, establece que el llamado a cerrar una supuesta brecha
generacional es una forma de detener el ascenso de la lucha proletaria, inducir al
sector joven a asumir el voto como método y respuesta de lucha el cual siempre será
manipulado por los patronos y la burguesía y también era una respuesta a la alarma
4i | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

del gobierno colonial ante el porciento bajo de electores que se registró para las ins­
cripciones de febrero del 1970. Se aclara que la única organización independentista
que llamo a no acudir a registrarse fue la LSP. Sobre lo segundo, establece que Esta­
dos Unidos busca allanar el camino para el voto presidencial y de esta forma legalizar
para el sector joven la imposición del servicio militar. Se citan las palabras del enton­
ces presidente de la Junta Estatal de Elecciones, Ledo. Ernesto Mieres Calimano el 2
de febrero al periódico El Imparcial, estableciendo el vínculo del voto a los dieciocho
años y “nuevos ingredientes” como el voto presidencial. Una vez se logre imponer el
voto presidencial se alerta que el Tribunal Supremo de Estados Unidos podría optar
por declarar a Puerto Rico como territorio incorporado.

Para finales del 1970 se produjeron unas inundaciones muy intensas causadas por
una vaguada de gran tamaño que se posó sobre Puerto Rico por espacio de cuatro
días. Esto tuvo un efecto desastroso empezando por la pérdida de cincuenta vidas
y luego con resultados muy negativos para diferentes renglones de la economía,
arruinando lo que prometía ser la mayor cosecha de café en muchos años. Justo una
semana antes se había anunciado un experimento para calentar artificialmente la io­
nosfera llevado a cabo con el Radiotelescopio localizado en Arecibo. Corretjer señaló
este experimento como posible causa pero advirtiendo que no había certeza. Bajo
el título “Inundaciones”, Corretjer y la LSP difundieron un artículo señalando los
factores históricos, político-económicos, sociales, científicos y ambientales que inci­
dieron en estas inundaciones, revelando una capacidad impresionante de amplitud y
síntesis, habilidad de expresión concreta, clara y sin ínfulas de erudición, con vastos
conocimientos de nuestra topografía y geografía."2 En el mismo inclusive se señaló
el sesgo clasista que ya permeaba en los medios informativos, prensa y gobierno, al
cuantificar las pérdidas haciendo énfasis en la clase media e ignorando a la clase
trabajadora de menor ingreso. Este artículo circuló en un momento en que las cien­
cias ambientales y el movimiento ambientalista llevaba pocos años en hacerse notar
en Puerto Rico. Como periodista, Corretjer nunca ignoró las denuncias de Claridad
y otras fuentes que ya expresaban preocupación por la explotación de los recursos
naturales de Puerto Rico.

El 1971 se inicia con la intensificación de la lucha antimilitarista para liberar a Cule­


bra de los ejercicios militares de Estados Unidos."’ Esta lucha la apoyaban todas las
organizaciones patrióticas siendo el P1P la organización en posición de liderato en
esta lucha. Muchos jóvenes universitarios simpatizaban con esta causa. Luego de que
se descubriera la falsedad de una serie de maniobras políticas que intentaron varios
agentes del gobierno, la legislatura y un abogado estadounidense de nombre Richard
Copaken para confundir al pueblo de Culebra, el PIP decidió invadir terrenos res­
tringidos por la Marina en Culebra. Incursionaron en los terrenos Rubén Berríos,
un grupo de compañeros del PIP, representantes religiosos y varios residentes de Cu-
Raymond Soto Dávila | 42

lebra. Este acto de desobediencia civil, el cual llevaron a cabo en la Playa Flamingo
entre el 17 y el 23 de enero, culminó en el arresto y encarcelamiento de muchos de
ellos.,q En ese momento el P1P se convertía en la vanguardia de las aspiraciones in-
dependentistas y antiimperialistas de muchos militantes. Esto dejaría un efecto en
las elecciones del 1972 donde por primera vez votaron los jóvenes de dieciocho años.
La mística de Berríos creció ante el pueblo y se hizo famosa su frase en la Corte de
Estados Unidos en Puerto Rico cuando lo sentenciaron a tres meses de cárcel: “Violar
la ley del imperio es cumplir la ley de la patria.”

La lucha estudiantil continuó en ascenso y tuvo su momento más dramático el 11 de


marzo de 1971. Para entender bien estos hechos es necesario mencionar varios fac­
tores que prepararon el camino: (1) El asesinato de Antonia Martínez Lagares, (2) El
clima de desasosiego ya generalizado a muchas escuelas superiores y universidades
privadas con respecto a la imposición del SMO y la Guerra de Vietnam, (3) La resis­
tencia y crítica del profesorado y estudiantado del Recinto de Río Piedras de la UPR
con respecto a la poca participación de dichos sectores en las decisiones internas de
la institución (4) La presencia del ROTC en el campus y (5) El tono agitado en la dis­
cusión pública sobre cuestiones que amenazaban la integridad del territorio nacio­
nal puertorriqueño, en particular la situación de Culebra y la proyectada explotación
minera en el centro de la isla."5

El 4 de marzo de 1971 el estudiantado en Río Piedras celebró una actividad para con­
memorar el primer aniversario del asesinato de Antonia Martínez. La asistencia fue
muy impresionante. La misma comenzó con una marcha a la cual siguió un acto fren­
te al ROTC. Desde el año anterior se había desatado a través de los medios de prensa
una campaña muy enconada contra los estudiantes tanto de parte de funcionarios
gubernamentales como de otros sectores conservadores e influyentes en el país.1,6
El FBI sentaba a sus agentes en las asambleas estudiantiles a escuchar ya que no
le bastaba o no confiaba en los informantes. (Ver Memo de la Oficina de San Juan
del FBI en el Apéndice II: Represión contra la LSP.) El referéndum que se celebró a
pocos días del asesinato de Antonia resultó en una “victoria” para el estudiantado,
ya que con una participación de cerca del 80% de los estudiantes, la mayoría votó a
favor tanto de la expulsión del ROTC del campus y de una reforma universitaria. El
estudiantado, sin embargo, votó a favor de la permanencia de Benítez."7 Luego de un
año de este referéndum ya era evidente que la administración no se proponía expul­
sar el ROTC del campus y que la muerte de Antonia quedaría impune algo que los
Cuadros Universitarios de la LSP habían previsto. Los resultados del referéndum es­
tudiantil también se utilizaron por los sectores mencionados para atacar en la prensa
no tan sólo a los estudiantes sino también a los profesores."8

En medio de las provocaciones del gobierno anexionista del PNP bajo Luis Ferré,
de la administración universitaria servil, y de los cadetes del ROTC, el estudiantado

43 | Luí hay i spa( iudi i \ Liga Soí iai.isia l’i i rtorriqi i ña: 1962-1989

había demostrado su firmeza y propósito de darse a respetar. Es bajo esas circunstan­


cias que se conmemoró el 4 de marzo de 1971, el primer aniversario de la muerte de
Antonia Martínez en el Recinto de Río Piedras. Los Cuadros Universitarios de la LSP
habían mostrado su intención de elevar la dimensión intemacionalista de la lucha al
invitar a la joven Victoria Vogle, estudiante de Harvard y miembro de la agrupación
estadounidense Sociedad de Estudiantes por una Sociedad Democrática, “Students
for a Democratic Society” (SDS).119 La presencia de esta estudiante internacionalizó el
acto e hizo más difícil a las agencias del gobierno la represión contra el estudiantado
universitario del Recinto de Río Piedras. El otro factor que detuvo a las fuerzas repre­
sivas fue la asistencia masiva a la actividad.

En los días previos al 11 de marzo ya se habían acumulado varios incidentes entre


cadetes y estudiantes antimilitaristas. 120 Mientras tanto también en los primeros días
de marzo un llamado “Comité ad hoc” había celebrado vistas públicas en Puerto Rico
para impulsar el voto presidencial y para el once de marzo se habían movido a Was­
hington DC con dichas vistas.121 Ese 11 de marzo comenzaron unos encontronazos en
el Centro Universitario en la mañana, y se generalizó la pelea con más universitarios
en las afueras del edificio. La Guardia Universitaria aparece y se escuchó una bocina
que los estudiantes habían estado utilizando para alertar a los niños pobres de la ba­
rriada quienes entraban al recinto a vender golosinas y la Guardia Universitaria solía
expulsarlos. De repente cientos de estudiantes corrieron desde otros puntos hacia el
Centro de Estudiantes y comenzó una refriega muy intensa entre estudiantes de un
lado y cadetes y Guardia Universitaria del otro lado. Se escucharon tiros y volaron
piedras y cocteles Molotov. La Guardia Universitaria retrocedió y los cadetes se acuar­
telaron en uno de sus edificios. Esto continuó por varias horas hasta que a las doce y
media entró la Fuerza de Choque con armas desenfundadas y disparando hacia los
estudiantes. Los estudiantes se desplegaron sin dejar de responder a la agresión de la
Fuerza de Choque. Posteriormente la Fuerza de Choque entró a Río Piedras y repartió
palos a estudiantes de escuela superior y a otras personas que estaban observando en
la calle. El saldo fue de tres muertos, dos efectivos de la policía, uno de ellos el diri­
gente de la Fuerza de Choque y un cadete del ROTC. A raíz de estos sucesos acusaron
poco tiempo después de homicidio con relación a los dos policías a dos estudiantes
universitarios, Humberto Pagán y Miguel Hudo Ricci. Volveremos sobre esto.

Pocos días después de los incidentes del 11 de marzo de 1971, la LSP publicó un bole­
tín “extra” en el cual analiza tanto los acontecimientos de ese día como los del 4 de
marzo, primer aniversario de la muerte de Antonia Martínez.122 El boletín comienza
con una declaración del Comité Central, refrendado por su Secretario General, Juan
Antonio Corretjer. En la misma la LSP respaldó y felicitó al estudiantado universita­
rio del Recinto de Río Piedras que luchó por horas manteniendo a raya a la Fuerza
de Choque, a la Guardia Universitaria y a los cadetes del ROTC. Sobre este particular
RaymondSotü Dávii.x | 44

indicó que ésta fue una acción de masas que señalaba de forma embrionaria el cami­
no de la guerra popular. Poco después Corretjer publicó un artículo en el Correo de
la Quincena profundizando en el concepto de guerra popular, el cual resulta instru­
mental para entender el camino hacia la independencia y el socialismo que proponía
y defendía la LSP.,2J

El 29 de junio de 1971 los miembros de la LSP enfrentaron la lectura de sentencia


de los casos que le habían sometido a fines de 1969. El Juez Eric Kolthoff presidió el
caso. De un total de 139 acusaciones, 62 eran por delitos graves. El jurado que decidió
sobre dichas acusaciones encontró culpable por los delitos graves a casi todos los
acusados excepto a Corretjer, Secretario General de la LSP, Carmen María Pérez y
José Marcano. El resto de los acusados y acusados fueron encarcelados en la Cárcel
Municipal del Castillo de Ponce y en la Prisión para Mujeres de Vega Alta. El caso
presentó mucha complejidad. Por un lado Consuelo Lee fue hallada culpable con
evidencia que se había utilizado en su contra en otro proceso anterior en el cual la
hallaron inocente. Por otro lado, el jurado halló inocente a Miguel Martínez, uno de
los acusados, quien no tenía relación alguna con la LSP. Martínez fue víctima de una
tramoya urdida por un testigo del gobierno y la acusación era un intento de presión
para que testificara en contra de los miembros de la LSP.12-1 Debido a la alta tensión
’ue había en sala el Juez Kolhoff decretó un receso para valerse de enviar a la cárcel
los sentenciados sin que mediaran testigos. Esto provocó que Corretjer, Carmen
srez y José Marcano, a pesar de no encontrárseles culpables por delitos graves se
negaran a seguir en libertad en protesta por lo ocurrido. El caso se tornó complejo
por la saña exhibida por el juez quien inclusive permitió que se desfilara prueba que
los acusados eran “ateos”. Se eleva una brillante apelación al Tribunal Supremo de
I Puerto Rico de los cuatro abogados, encabezados por el Ledo. Héctor Lugo Bougal,
la cual no prevalece. Sin embargo, poco después se desencadenan unos eventos que
resultaron favorables para los acusados.l25Por otro lado, Pepito Marcano renunció ese
año a la LSP aunque siguió fiel a sus principios toda su vida.126

La LSP intensificó su línea intemacionalista en la lucha estudiantil y anti militarista.


Sus cuadros más jóvenes se desplazaban a Estados Unidos con el propósito de re­
cabar apoyo antiimperialista y coordinar estrategias con la SDS y otras organiza­
ciones.12' Para el 1972 la LSP había comenzado una campaña de apoyo a Humberto
Pagán, acusado de la muerte de uno de los oficiales de la Policía de Puerto Rico en
los sucesos del 11 de marzo. Pagán había huido a Canadá y allí lo habían arrestado
y encarcelado. El gobierno de Estados Unidos había solicitado su extradición. Un
delegado de los Cuadros Universitarios de la LSP asistió a la Primera Convención
Internacional de la SDS celebrada en la Universidad de Harvard y obtuvo una
resolución de apoyo de 17 universidades canadienses y estadounidenses. El caso
de Pagán se resolvería finalmente en abril de 1972 cuando en una vista ante el Juez
45 | Ll < HA Y I SI'A(.IO DI LA LlGA SOCIALISTA PlJLRIORRIQl I ÑA: I962-I989

Honeywell, en Ottawa, Cañada, el gobierno de Estados Unidos no logró convencer


al gobierno de Cañada de extraditarlo para enfrentar cargos criminales relaciona­
dos a una de las muertes ocurridas el n de marzo.128 Aunque el fundamento de la
decisión del juez no fue de índole política la misma constituyó una victoria interna­
cional para la causa antimilitarista y la difusión del status colonial de Puerto Rico
con una brillante contribución de Corretjer ante el juez, con mérito para ser recor­
dada como vanguardia política. Corretjer esbozó que en la Universidad de Puerto
Rico se daba un combate y que su razón era política, la lucha por la independencia,
la cual no tan sólo se la negaba Estados Unidos a Puerto Rico sino que había arre­
batado derechos ya convenidos para Puerto Rico en la Carta Autonómica de 1897.
Igualmente brillante fue la exposición de su abogado, el entonces recién recibido en
esa profesión, Roberto José Maldonado. Otro triunfo resonante para la lucha anti­
militarista fue la absolución unánime de un jurado puertorriqueño el 30 de agosto
de 1972 en San Juan, de Miguel I ludo Ricci, acusado por el asesinato de uno de los
dos oficiales de la Policía que cayeron el 11 de marzo de 1971 en Río Piedras. Hudo
Ricci resultó exonerado en los dos cargos graves y hubo una decisión dividida en el
cargo menos grave.129

El 1972, año eleccionario, se caracterizó por grandes y frecuentes huelgas y escándalos


a nivel del gobierno. El gobierno del PNP lucía como incapaz de aplacar el descon­
tento general. En los primeros meses de 1972 se escenificaban huelgas en la Universi­
dad Interamericana, la Fábrica Vista Lens de Cíales y continuaba un largo conflicto
interno en la “Puerto RicoTelephone Company”, también conocida como Compañía
Telefónica pero realmente pertenecía a la “ITT” (International Telephone Telegra-
ph). Igualmente ocurrían estragos ambientales, producto de la actividad venenosa
de las petroquíminas.130 Para entonces la CORCO llevaba varios años de establecida.
Corretjer advirtió de los efectos de ese emporio para la lucha de independencia y
la clase trabajadora. Estados Unidos había logrado que los trabajadores de la caña
se organizaran bajo sindicalización yanqui, el “Congreso de Uniones Industriales”
(CIO).13' Esto no era suficiente para despejar las preocupaciones del gobierno de Es­
tados Unidos, que no subestimó el peligro real de la huelga cañera del 1934. Corretjer
consideraba que el gobierno de Estados Unidos se las había ingeniado para instalar
un sistema de actividades económicas tan variadas en Puerto Rico que el movimiento
obrero se vio obligado a trabajar mediante pequeñas uniones sin otra vinculación en­
tre ellas que la de estar formadas por trabajadores cuya fuerza era explotada pero de
forma muy disímil. Corretjer denunció la conversión de Puerto Rico en una colonia
“militar industrial”, primera y única en la historia, hasta ese momento. Igualmente
acusó al gobierno de Estados Unidos de trasladar de Panamá a Puerto Rico su centro
de adiestramiento contra los movimientos de guerrilla de América Latina refiriéndo­
se los que luchaban contra las sangrientas dictaduras de derecha.
RaymonpSoio Dávii \ j 46

Las elecciones de noviembre de 1972 marcaron la primera derrota del todavía joven
PNP y representaron un punto culminante en las tensiones internas que se debatían
en organizaciones patrióticas de entonces. Luis Ferré anunció que se retiraba de la
política. Rafael Hernández Colón y el PPD ganaron la gobernación y las dos cámaras.
El P1P logró elegir un senador (Rubén Berríos) y dos representantes (Carlos Gallisá y
Luis Ángel Torres). Sin embargo el margen de ventaja en la totalidad de votos para el
PPD no fue tan grande como en las elecciones de la época de Muñoz. La importancia
de estas elecciones fue consolidar el bipartidismo, objetivo principal del gobierno
de Estados Unidos para Puerto Rico. Puede parecer una contradicción los logros del
PIP con relación a ese objetivo ya que sería un tercer partido pero la realidad de los
hechos que siguieron demostraría la fragilidad de ese logro y el costo político para
el independentismo. La mística de Berríos se desvaneció prontamente ante las pug­
nas internas en el PIP que llevó a Luis Ángel Torres a renunciar al PIP y declararse
representante independiente, creando otra organización, el Movimiento Socialista
Popular (MSP), el cual con el tiempo se transformaría en el Movimiento Socialista
de Trabajadores (MST), organización que al presente sigue vigente. Carlos Gallisá
también renunció al PIP durante su cuatrienio como representante e ingresaría al
MPI-PSP. Realmente Berríos quedó solo como miembro del PIP en la legislatura.1’1

El MPI por su parte había comenzado un proceso de transformación el cual anunció


el primero de mayo de 1971, a solo dos meses del 11 de marzo. Para entonces habían
planteado la decisión de convertirse en el “partido de la clase obrera puertorriqueña
para la toma del poder”. ‘^Acorde a esa decisión el MPI se replanteó la cuestión elec­
toral a pesar de su trayectoria abstencionista hasta ese momento. Ya para noviembre
de 1971 celebran su asamblea constituyente. Para las elecciones del 1972 intentaron
organizar un “Frente Unido Independentista” con el cual se pretendía un junte elec­
toral entre el MPI-PSP y el PIP. Ello no resultó dado a que el PIP declinó formar parte
de este frente por sus propias razones políticas.

La LSP continuó la trayectoria anti electoral y abstencionista de Corretjer no como


un dogma político sino como un principio aprendido en el estudio concienzudo de la
historia y en el análisis clasista que define los intereses de la clase trabajadora, clase
que compone las grandes mayorías en todos los pueblos del mundo. Históricamen­
te, los fundamentos para la posición anti electoral de la LSP pueden rastrearse a la
APU. Las elecciones se crean para mantener el status quo, la potencia colonizadora,
en este caso Estados Unidos, implementa elecciones cada cuatro años en su propio
“territorio nacional”, pero jamás mediante ese proceso podrían las provincias o esta­
dos lograr la secesión. Esa misma función cumple en Puerto Rico.04 “El eslabón en la
cadena que hemos de agarrar para romper la cadena, es el sistema electoral.”1’5 Sin
elecciones es posible dirigir la lucha hacia tácticas superiores que van a llevar a la
victoria definitiva. Además de vincular las elecciones al poder imperialista, correc-
47 | Lucha y espacio de Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

lamente lo vincula a la lucha de clases al indicar “El retraimiento es una huelga de


votos.”l}6Las elecciones operan para dividir al pueblo incitándolo a las ambiciones
por el presupuesto y la falsa gloria, perpetúa el colaboracionismo con el gobierno de
Estados Unidos, valida el sometimiento voluntario de los puertorriqueños a Estados
Unidos ante el mundo ya que se vota como ciudadanos yanquis y bajo las disposicio­
nes del Congreso de Estados Unidos y finalmente erosionan toda la energía, por lo
tanto son apaciguadoras. La independencia debe construirse fuera de la vía electoral
con un liderato intelectualmente superior ya que concibe a la patria funcionando
fuera de las cadenas coloniales.137 De hecho ya para el 1973 la LSP alertaba sobre el
efecto apaciguador de las recientes elecciones de noviembre de 1972 en el movimien­
to sindical ante lo que consideraba un avance del sindicalismo que se había dado
entre 1971 y 1972.138 La historia de etapas anteriores del movimiento obrero justifica la
denuncia de un patrón de disolución de la fortaleza acumulada en las luchas cuando
se incurre en la práctica de la participación electoral y la política partidista. La LSP
achacó a una pérdida de la mentalidad militar el dejarse contar y exponerse a que el
enemigo además de ridiculizar sus números, identifique tendencias, aísle a los diri­
gentes, seleccione las formas de soborno y de represión para los que se resistan.1,9

También para el 1973 la LSP alertaba en otro editorial sobre el fraccionamiento ocu­
rrido en el sector estudiantil independentista luego del nivel de lucha alcanzado el
n de marzo del 1971.140 Aludiendo a los acontecimientos de la Masacre de Ponce, se
analizan las condiciones en que quedó el Partido Nacionalista y concluye que el paso
de esa organización a la clandestinidad hubiese sido el correcto y el pueblo lo hu­
biera entendido en ese momento ya que había mucha indignación por aquel acto
de represión brutal. La continuidad como organización en el espacio público llevó
a su aislamiento. El editorial deplora las identificaciones por organización en que se
habían enconchado muchos estudiantes que distanciaba a éstos del nivel de lucha
que se había escalonado para el 11 de marzo de 1971, en donde la unidad lograda re­
sultó esencial. Por otro lado, el 12 de marzo de 1973, explotó una poderosa bomba en
la Facultad de Ciencias Sociales que no causó muertos pero sí muchos daños. Los
Cuadros Universitarios de la LSP advirtieron en sus publicaciones que no señalaban
a organización derechista alguna sino que entendían que la maniobra era de la CIA
para justificar la entrada del FBI a la UPR.14'

En 1973, eventos como la sequía, que llevó al racionamiento del agua, se utilizaron
para denunciar ante el pueblo la actitud criminal de la administración de turno la
cual garantizaba el acceso de agua de forma continuada a las petroquímicas a pesar
del daño ambiental que causaban. En ese momento la LSP instó mediante sus pu­
blicaciones a no pagar el agua. 142 Hizo extensiva esta exhortación a otros servicios
públicos de pobre desempeño entonces como lo eran la luz y el teléfono, esto último
en manos privadas de la “ITT”. Aunque la LSP había logrado tener miembros en la
RaymondSoto Dávii.a | 48

Compañía Telefónica dedicados a elevar el nivel de conciencia de los trabajadores


y trabajadoras, el grado de violencia escaló peligrosamente en las pugnas internas
dentro del sindicato lo cual provocó un editorial de una de las publicaciones de la
LSP.’4’ Igualmente se hicieron cargo de la tarea de esclarecer las inexactitudes y erro­
res de Luis Muñoz Marín con respecto a términos como socialismo y comunismo.144
Mediante sus publicaciones la LSP contribuyó a educar al pueblo sobre el conflicto
de Indochina y la geopolítica ya que parecía prevalecer entre los puertorriqueños
una visión muy fragmentada de la Guerra de Vietnam a pesar de sus consecuencias
terribles para la juventud puertorriqueña.145

Para finales del 1973 la LSP propone al independentismo nacional los siguientes pa­
sos: (1) Intensificar la campaña contra las petroquímicas, entrando a sus espacios y
ocupándolas, (2) Montar una campaña efectiva en contra del propuesto super puerto
que el gobierno proyectaba construir por el área de La Mona y (3) Organizar un frente
anti imperialista puertorriqueño.146 Sobre el primer punto, el objetivo inmediato era
retrasar el refinamiento del petróleo que llegaba de otras partes del mundo, hacer más
difícil que ese petróleo fuera utilizado para la enorme maquinaria de guerra de Es­
tados Unidos cuyo propósito era intentar controlar a Asia, África y América Latina y
así detener el proceso de convertir a Puerto Rico en un gigantesco terraplén militar.147.
La necesidad de Estados Unidos con respecto al petróleo se agudizaba debido a que
había estallado la Guerra del “Yom Kippur” dentro del conflicto más general del Me­
dio Oriente.148 Sobre el segundo punto, el énfasis fue no permitir que llegara el super
puerto pues éste representaba la continuación de las operaciones de las petroquími­
cas, las cuales eran una “cabeza de playa” ya establecida.149 Sobre el tercer punto, la
LSP propuso que la acción unida y concertada del independentismo llevaría a conso­
lidar este frente que a su vez lograría cooptar las masas y todos los sectores productivos
del pueblo, obreros, estudiantes, científicos e intelectuales. Es de esta forma que se
concretarían las condiciones para la dirección eficaz de la lucha independentista y
socialista.

En el 1973 hubo 53 huelgas del sector público y privado, razón por la cual el gobier­
no comenzó entre el 1974 y 1975 una embestida contra el movimiento obrero tanto en
los medios, declarando cualquier sector que apoyara estas luchas como “infiltrados”,
como a través de legislación en contra de los intereses de los trabajadores.150 La dura
represión que el gobierno colonial del PPD desató entre 1973 y 1975 incluyó el uso de
la Guardia Nacional contra los obreros, particularmente los del sector público en las
áreas de energía eléctrica, bomberos y empleados de limpieza, una de las razones de
peso por lo cual el PPD perdería las elecciones del 1976. De hecho ya en el 1973, la LSP
había advertido que el uso descomunal de este despliegue de fuerzas militares (3,500
hombres con unidades de artillería e infantería, entre otras) obedecía a la necesidad
del imperio de tener una población pacificada alrededor de su base de operaciones

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49 | LUCII/X Y ESPACIO DE LA LlGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA: I962-I989

dado que Puerto Rico era una colonia militar-industrial, donde las petroquímicas y el
proyectado super puerto jugaban un papel clave.151 Por otro lado, el 1974 comienza bajo
los efectos de una recesión ya en proceso.'52 La LSP celebró el mitin del “Primero de
mayo” en Guayanilla, en atención al impacto negativo de las petroquímicas en la salud
del pueblo y la integridad territorial de Puerto Rico. Carlos Justiniano tuvo a cargo
el discurso.'51 Ese año los maestros y maestras protagonizaron una huelga intensa y
prolongada que culminó en que se legislara para instrumentalizar la representación
sindical de ese gremio a través de la Federación de Maestros de Puerto Rico (FMPR).'54

Entre julio 22 y el 3 de agosto de 1974 la LSP participó en el Festival Antiimperialista


de Irlanda gracias a las gestiones de altos directivos del Sinn Fein, su presidente, To­
mas Magiolla y el director de Asuntos Internacionales, Sean O’ Cionaith.'55 El repre­
sentante de la LSP fue el entonces Vice-Secretario General, Antonio Rivera, del Co­
mité Regional del Sur. Tanto en los actos llevados a cabo en el Cementerio Nacional
en Dublín como en el cierre del Festival en Beifast, Rivera se dirigió a los presentes y
divulgó el caso de Puerto Rico como colonia militar-industrial del imperialismo de
Estados Unidos. Rivera aprovechó para establecer algunos puntos de coincidencia
entre la lucha de Puerto Rico contra el imperialismo yanqui y su capital monopolista
con la lucha de Irlanda del Sur contra el imperialismo británico y enfatizó que 1.
derrota de ambos imperios sería una derrota para el imperialismo mundial. Rivera
fue entrevistado por el periódico “The Irish Times” lo cual provocó una carta a dicho
periódico de parte de Rivera para aclarar una serie de aseveraciones en puntos que
eran fundamentales para la línea política de la LSP.'56 Clarifica que no es “dirigente
nacionalista” ya que la LSP es una organización marxista leninista y añade que el
concepto de libertad económica y social al igual que el de libertad política pueden
únicamente concretizarse a través del establecimiento de la dictadura del proleta­
riado. Otro asunto que se aclara es la aseveración que se le adjudica que la primera
tarea era preservar a Puerto Rico como nación antes de desarrollar la lucha armada.
Rivera indica en su carta al periódico que la única manera de preservar la nacionali­
dad era conseguir la independencia pues la nacionalidad está en peligro mientras el
imperialismo norteamericano se mantenga en nuestro país, estableciendo una dife­
rencia tajante con posiciones reformistas que pudieran dar a entender que se puede
coexistir con el imperio.

Es en el ambiente caldeado de mediados de la década de 1970 que la LSP logró con­


solidar un trabajo sindical de años entre los trabajadores de la Telefónica de Puerto
Rico y servir de apoyo a los trabajadores en huelga de la Compañía General Electric,
además de establecer de forma contundente su política relacionada a las uniones.'57
Por fin la Unión Independiente de la Telefónica había logrado salir de un liderato
violento y corrupto y a la vez retener la representación sindical que le disputaba la
Unión de Tronquistas. La LSP había organizado un Comité de Base que fue instru-
Raymond Soto Dávila | 50

mental para esta lucha. En relación al apoyo a la huelga de General Electric, la LSP
fue quien alertó a los huelguistas de esa misma empresa en Estados Unidos sobre la
huelga en Puerto Rico además de moverse a organizar piquetes y mítines en Estados
Unidos y Quebec en alianza con otras organizaciones. Los trabajadores de General
Electric estaban organizados a través de una unión “internacional”. La LSP en todo
momento combatía las llamadas uniones “internacionales”, que poco tenían de “in­
temacionalistas", ya que estaban bajo el control de las leyes de Estados Unidos y de
intereses ajenos a los de los trabajadores. Este principio siempre fue un norte para la
LSP, sin embargo, cuando no había posibilidad a corto plazo de levantar una unión
independiente, la LSP utilizaba sus recursos y sus alianzas para apoyar los reclamos
de trabajadores organizados bajo estas “internacionales”, como fue el caso con Ge­
neral Electric.

La confirmación de la tesis de la LSP sobre los sindicatos “internacionales” y su vín­


culo ideológico con los patronos debió ser evidente para todos. En enero de 1975 la
AFL-CIO anunciaba una cumbre para hacer propuestas de “legislación" que ayu­
daran a Estados Unidos a salir de la crisis económica resultante de la recesión.'58
En Puerto Rico el Departamento de Instrucción Pública, ahora Departamento de
Educación, había despedido alrededor de 2,500 empleados.'59 Siempre que hay pro­
blemas los trabajadores son invitados a algún tipo de cumbre o “concertación” pero
cuando hay ganancias no hay ninguna convocatoria para decidir sobre el destino de
las mismas. Es en ese primer mes del 1975, el cual se destaca por huelgas, amenazas
de huelgas y paros al igual que por despidos y cierres patronales, que la represión
contra los independentistas da una nueva vuelta de llave y marca lo que nos parece
un nuevo ciclo en la lucha por la independencia y el socialismo.160

Algunas organizaciones patrióticas demostraron no estar ajenas a la renovada em­


bestida del imperio para mediados de esta década y sus propósitos para anular al
sector joven más consciente. Tanto la FUPI como los cuadros Universitarios de la
LSP lograron identificar y combatir el rol de la “National Security Agency” (NSA)
en los recintos universitarios para adiestrar en su especialidad, que realmente es
la especialidad de todas las agencias represivas de Estados Unidos: el espionaje.
La denuncia del estudiantado logró que la NSA cancelara una supuesta prueba
de aptitud que se proponía administrar a los estudiantes universitarios el 16 de
octubre de 1974. La cancelación de esta prueba la caracterizó el presidente de en­
tonces de la FUPI, José N. Medina en la publicación de dicha organización, como
el producto de la oposición firme del estudiantado en repudio de las intencio­
nes de dicha agencia de adiestrar estudiantes para que sirvieran de espías dentro
del recinto. Los Cuadros Universitarios de la LSP igualmente denunciaron esta
práctica de la NSA en su boletín alertando que los disgustos dentro del estudian­
tado era la brecha que aprovecharía la NSA para “penetrar, herir y matar”.16' Es
5i | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

significativo que se utilice esta advertencia cuando aún no han sucedido eventos
tan contundentes como el caso del Cerro Maravilla y la cual pudo haber parecido
desproporcionada entonces.

El 11 de enero de 1975 el MPI celebraba un mitin en Mayagüez. Varios miembros y


simpatizantes estaban departiendo en un restaurant de nombre “Central Drive Inn”,
aledaño a donde estaba programada la actividad. Adentro del mismo detonó una
bomba que mató a dos personas y dejó heridas a media docena, algunas de grave­
dad. Murieron Luis Ángel Charbonier, vinculado al MPI-PSP y Eddie Román Torres,
empleado del local. El PSP responsabilizó por este atentado a células de ABDALA,
organización terrorista del exilio cubano que operaba como parte de un conglome­
rado de exiliados de extrema derecha llamado “Frente Nacional de Liberación de
Cuba”. ABDALA contaba con coordinación y amplio apoyo de la CIA y sus agentes.'62
Era la primera experiencia, que tengamos memoria, en que la represión imperialista
actuó en Puerto Rico de dicha forma, que además de letal, indiscriminada, claramen­
te terrorista, algo que ya habían implementado con anterioridad en nuestra historia,
utilizaban algo novedoso, la dimensión secreta, de estilo de escuadrón de la muerte.
A pocos días de esto, Carlos Gallizá solicitó, en su calidad de representante, celebrar
vistas legislativas sobre la CIA. Las vistas nunca se materializaron. 163

El 24 de enero de 1975 ocurrió la explosión en la exclusiva Taberna Fraunces y el Club


Anglers en la ciudad de Nueva York, aledaños al entonces centro financiero más pode­
roso del mundo. Este operativo se lo atribuyeron las Fuerzas Armadas de Liberación
Nacional (“FALN”). En el mismo murieron cuatro personas y hubo varios heridos. El
buró político de la LSP circuló un documento sobre estos hechos aclarando que ver­
tía sus manifestaciones fundamentando su entendimiento en las declaraciones de la
prensa de Estados Unidos y de la prensa colonial sobre estos hechos.164 En síntesis se
señala que: (1) Es bajo las fuerzas armadas de Estados Unidos que comenzó el saqueo
de Puerto Rico desde la invasión de 1898. (2) El factor “sorpresa” utilizado por la FALN
es un espejo de las estrategias militares ratificado como bueno por portavoces del im­
perio mismo y resumido por uno de sus generales con la frase “la guerra es crueldad”.
(3) Los muertos eran todos altos ejecutivos, vinculados a entidades y empresas que
se lucraban con el dolor de su propia gente y con el saqueo de Puerto Rico. (4) Esta
acción golpea a la estadidad, señala al pueblo trabajador el enemigo de clase de forma
inconfundible, desviando la atención de intermediarios menores, tal como advirtió
Albizu era necesario al hacer denuncias. (5) Crea una nueva situación para los inde-
pendentistas tanto protectora como de alerta a sus propios mensajes que no deben
ser amenazas vacías y de índole puramente retórica. Ante el temor de “ganarse el odio
del gobierno de Estados Unidos” que algunos expresaron entonces, se advierte que el
odio del gobierno de Estados Unidos hacia los puertorriqueños en la diáspora no pue­
de ya aumentar porque siempre ha sido enorme dada la incapacidad de asimilamos.165
Raymond Soto Dávila | 52

Algunos meses después, en el mes de mayo de 1975, la LSP enfrentaba la pérdida


de un militante ejemplar, Manuel Padilla Miranda, luego de una penosa condición
relacionada a diabetes. Este era del Comité Regional del Centro de la LSP. 166 Sus
contribuciones fueron muy valiosas y se categorizan en tres aspectos: (1) La integri­
dad territorial, por lo cual se había dedicado a estudiar a fondo el entramado de ca­
rreteras que se construían en el centro del país y su posible utilidad para la explota­
ción minera. No solamente vio la relación de las carreteras con el establecimiento de
minas, sino que identificó los recursos de agua que estaban disponibles en nuestra
geografía y el andamiaje político- militar de bases y campamentos militares física­
mente localizados para llegar con rapidez a través de este entramado de carreteras y
sofocar cualquier resistencia del pueblo. Padilla inclusive planteó en un importante
artículo que la carretera que se proyectaba construir de Adjuntas a Ponce, conoci­
da como Carretera 10 tenía como fin “crear un medio de efectivo de comunicación
terrestre para el transporte de recursos naturales a extraerse en la explotación mi­
nera en la zona central de Lares, Adjuntas y Utuado y que afectaran los pueblos cir­
cundantes de Manatí, Cíales, Jayuya, Villalba y Juana Diaz. Las compañías mineras
encargadas de la explotación de cobre, oro, manganeso y níquel son la American
Metal Climax y la Kennecott Copper.” Padilla también advirtió sobre planes de otra
industria dañina, la industria farmacéutica, la cual planeaba establecerse en Cíales
y áreas adyacentes debido a los grandes recursos de agua con que cuentan. Esta in­
dustria también se serviría de la facilidad de transportación de la carretera central.
167 Fue a instancias de Padilla que la LSP tomó fotos de un camión que realizaba
exploración con un aparato vibrador en el subsuelo en el Barrio Cortés de Manatí.168
Su visión abarcadora de los planes imperialistas para explotar nuestros recursos lo
colocan como un precursor en la denuncia de lo que varios meses después se daría
a conocer como el Plan 2020. (2) Representación de la LSP fuera de Puerto Rico, por
lo cual viajó varias veces a Nueva York a representar a la LSP y coordinar activida­
des a pesar de su salud frágil. (3) Contribución en el plano ideológico ya que era un
destacado pensador y lector aventajado.169 Es dentro de este aspecto que se convirtió
en mentor de Ángel Rodríguez Cristóbal, orientando la primera etapa de Ángel en
la LSP luego de éste haber llegado a principios de la década del 1970 de la Guerra
de Vietnam. Sobre Ángel abundaremos más adelante. La hermosa relación entre
ambos reciprocaba las necesidades de cada uno ya que Ángel le sirvió muchas veces
de lazarillo y le leía cuando ya la visión de Manuel estaba muy deteriorada. La lucha
seguía escalando mientras la pérdida que representaba la muerte de este compañe­
ro parecía y era de hecho, inmensa.
53 I LUCHA Y F.SI’ACIU DI LA I.K.A SOCIAI.ISIA Pui.RlORRIQUFÑA: I962-I989

LOS AÑOS DE MEDIADOS DE 1975 A 1979

Hay dos huelgas cuyos resultados fueron muy aleccionadores para el carácter com­
bativo que la LSP seguía en su línea política con respecto a los trabajadores. Una de
ellas fue en la Compañía Telefónica. Entre abril y agosto de 1975 se decretó una huelga
en La Telefónica la cual fracasó porque no se detuvo de forma efectiva la entrada de
rompehuelgas a los centros de trabajo. El “Comité de Base de Obreros Telefónicos”,
con estrechos vínculos con la LSP, repartió una hoja en los talleres analizando las
causas y proponiendo la organización de “milicias obreras”, las cuales representaban
un frente de militancia más avanzado que cualquier estructura sindical y conllevaba
organizativamente, capacidad militar y en el aspecto ideológico, una profundización
de conciencia de clase.'70 Para instrumentalizar la capacitación en este aspecto, la LSP
comenzaba a complementar este paso con lecturas de Antonio Grarnsci.'7'

La segunda huelga cuyos resultados fueron muy significativos por lo desastrosos


fue la de los obreros de la fábrica de cemento en Ponce, propiedad de la familia Fe­
rré, la “Ponce Cement”. Esta huelga comenzó para inicios del 1975 y culminó luego
de mediados de año. Los obreros estaban representados por la Unión de Opera­
dores y Canteros. Como se recordará, solamente tres años antes Ferré era gober­
nador de Puerto Rico, con todas las implicaciones de poder que tal cosa conlleva.
La representación legal de la unión recaía en un miembro del PSP. El Movimiento
Obrero Unido, (MOU), organización sindical con vínculos con el PSP, prestó su mi­
litancia en apoyo a la huelga cometiendo errores que resultaron determinantes en
la derrota de los huelguistas. El Comité Regional del Sur de la LSP denunció estos
errores como: (1) pacifismo implantado en la línea de piquetes, mediante bloquear
a los trabajadores más militantes que intentaban detener a los camiones rompe­
huelgas e insistirle a los obreros a evitar confrontaciones con la policía a pesar del
rol protector que jugaba para el patrono, (2) legalismo, mediante insuflar esperan­
zas en las decisiones de las estructuras de la legalidad colonial, las cortes y la Junta
Nacional de la Relaciones del Trabajo mientras se desanimaba la combatividad en
la línea de piquete y (3) reformismo, mediante todo lo anterior se crearon las con­
diciones para que el patrono impusiera sus condiciones. Luego de varios meses se
decretaron unas elecciones sindicales donde la propia unión intentó organizar a
los rompehuelgas y terminaron en la victoria de la sindical estadounidense “Seafa-
rers International Union” (SIU) sobre la unión y el despido de 300 trabajadores. Un
factor adicional, que es tanto causa como efecto en nuestro problema colonial, fue
el uso por primera vez, que tengamos constancia, de los recién llegados cupones
con obreros en huelga y su efecto adormecedor y deformador.'72 Se supo de obreros
que a viva voz proclamaron que bajo esta dádiva estaban dispuestos a que siguiera
indefinidamente la huelga.'7’
Raymond Soto DÁvibx | 54

La lucha contra el proyecto de explotación minera continuaba en ascenso y lograba


el apoyo de muchos puertorriqueños. Es en este periodo de mediados de década que
se descubre que el proyecto de explotación minera forma parte de un proyecto mayor
que se dio a conocer como el Plan 2020, fecha en que supuestamente culminaría. Este
plan se va a poner en vigor en momentos en que se visualiza el fracaso de la industria
petroquímica. Corretjer reveló detalles de este macabro plan y afianzó las posiciones
que la LSP estableció desde el 1965 en relación a la explotación minera, en dos artí­
culos desde su columna de El Nuevo Día en septiembre y octubre de 1975.174Hay un
sentido de urgencia ante la devastación ecológica, geográfica y social que presupon­
dría este proyecto para todo nuestro país. Esta línea es la que seguirá la militancia de
LSP a diferencia de otros sectores que reclamaban oponerse al plan por considerar
que el enriquecimiento sería para las compañías extranjeras, pero la aceptaban si las
ganancias eran para el país, posición que la LSP también combatía. Juan Mari Brás
consignó el impacto de los artículos de Corretjer en uno suyo a página completa en
el semanario Claridad. A pesar de que el título del artículo de Mari alude a Corretjer
como poeta y de una serie de diferencias que deja establecidas con Corretjer, Mari
concluyó en su análisis que se debe aprender a reconocer en Corretjer “a uno de los
grandes ideólogos del independentismo puertorriqueño.”'75

Entre 1975 y 1976, los efectos de la recesión fueron amortiguados por dos factores ex­
ternos a la base productiva del país: (1) las transferencias federales conocidas como
“cupones de alimentos” dispensados a los desempleados y desempleadas y (2) la
extensión a Puerto Rico de la “Sección 936” del Código de Rentas Internas de Esta­
dos Unidos. Bajo esta segunda, las compañías norteamericanas quedaban exentas
i de pagar impuestos a su destino final mientras pagarían en Puerto Rico un “toll gate
tax” con muchos recovecos para repatriar sus ganancias a Estados Unidos y termi­
naban pagando poco o nada en Puerto Rico y nada en Estados Unidos.'76 A esto que
hemos llamado recovecos, un eminente economista puertorriqueño bautizó como
i , “creatividad contable”.177 A esto se añade los subsidios en servicios e infraestructura
que se les brindaban los cuales se cargaban sobre las espaldas del pueblo trabajador.
La Sección 936 atrajo nuevas empresas, especialmente las farmacéuticas, crearon
empleos, algunos con sueldos altos aunque la mano de obra no era el factor prin­
cipal de producción por lo tanto el número de empleos era limitado. Se entra en la
tercera etapa de desarrollo económico posterior al 1948. Por otro lado, los informes
que prepararon tanto el gobierno de Puerto Rico como el de Estados Unidos sobre
nuestra situación económica, entre los cuales se destaca el conocido como “Informe
Tobin”, lograron identificar algunos de los problemas que sufría la estructura eco­
nómica del país pero no se puso en marcha un plan para transformarla, hicieron
todo lo contrario, por razones obvias de los intereses que verdaderamente imponían
sus decisiones.178
55 I Llí.HA'i espacio de la LkíaSck lalis la I’uer iorriql;i:ñ/\: 1962-1989

La represión golpeó duramente a otras organizaciones patrióticas. Como ya había­


mos anticipado, la bomba colocada en Mayagüez a comienzos del 1975 fue el inicio de
un recrudecimiento de la política represiva del gobierno de Estados Unidos. Algunos
meses después, cuatro miembros del PSP fueron sentenciados en Humacao a largas
condenas, acusados de varios cargos y consistente con la línea de dar apoyo a otras
organizaciones, la LSP reprodujo un documento en defensa de estos acusados en una
de sus publicaciones, suscrito por el Frente Revolucionario Anti Electoral (“FRAE”)
del cual la LSP era miembro y el cual fue organizado con miras a las elecciones del
1976.179 El caso de la “¡remita” como se le conoció, dio paso a otros intentos de repre­
sión contra simpatizantes y militantes del PSP. Uno de estos casos fue precisamente
el inicio de la segunda etapa del gran jurado en Puerto Rico, al utilizarse este recurso
contra Edgar Mauri Santiago, a quien querían implicar en el caso de la “¡remita”.
Los abogados de Mauri Santiago pelearon en los tribunales por un año y finalmente
estuvo preso cinco días los cuales coincidieron con el término de tiempo de ese gran
jurado.180 En Estados Unidos se abría una segunda etapa de citaciones del Gran Ju­
rado contra el independentismo en la diáspora (al igual que contra otros grupos en
lucha en Estados Unidos como los afroamericanos) siendo la primera citada, Lureida
Torres Rodríguez, miembro del PSP y residente en la diáspora.181 En meses y años
subsiguientes el Gran Jurado citaría personas que sin ser puertorriqueñas, se asocia­
ban a grupos que eran solidarios con la causa de liberación de Puerto Rico.

El golpe más apabullante contra el PSP fue sin duda el asesinato perpetrado el 24 de
marzo de 1976, de Santiago (Chagui) Mari Pesquera, entonces de veintitrés años, hijo
mayor de Juan Mari Brás y Paquita Pesquera, por el cual se acusaría y sentenciaría
a una sola persona aunque los indicios eran contundentes que su autoría residía en
grupos terroristas de derecha del exilio cubano.182 El individuo acusado era hijo de
un cubano y luego de una serie de irregularidades en el manejo del caso se declaró
culpable de asesinato en segundo grado. Este asesinato conmovió no tan solo al PSP
sino a todo el independentismo y al pueblo en general. El reclamo fue tanto nacional
como internacional y posiblemente puso en alerta a las agencias represivas, FBI y
CIA, del profundo rechazo que la gran mayoría del pueblo sentía ante esta acción tan
cobarde.18’ La LSP se reunió de emergencia para discutir el asesinato y luego la mayo­
ría de los asistentes, presididos por Juan Antonio Corretjer se trasladaron al velatorio
a presentar sus respetos a toda la familia y al PSP. Fuimos uno de estos asistentes,
tanto a la reunión como al velatorio. En la reunión previa se dilucidó que esto parecía
una advertencia al PSP para seguir empujando esta organización hacia una reafir­
mación de la línea electoral, lo cual le garantizaría al imperio de Estados Unidos la
eventual disolución de esa agrupación. No dudamos del rol del exilio cubano de ex­
trema derecha pero si dudamos que pudiera accionar sin el aval y la coordinación de
las agencias represivas del gobierno de Estados Unidos.
Raymond Soto Dávila | 56

En septiembre de 1976, a sólo seis meses del asesinato de Chagui Mari Pesquera, el
Partido Nacionalista de Puerto Rico dio a conocer el secuestro y asesinato de Julio
Pinto Gandía. En realidad, Pinto Gandía desapareció el 18 de septiembre de su re­
sidencia en Río Piedras, y se dice que se fue o lo más probable lo raptaron, dejando
la comida sobre la mesa. Para entonces estaba activo en su partido y gozaba de gran
respeto por su historial de lucha y la brutal represión que había sufrido a manos del
gobierno de Estados Unidos.En un comunicado de prensa, Corretjer, a nombre
de la LSP, volvió a insistir en presentar el historial de lucha de Pinto Gandía luego
de varios meses de su desaparición y destacó que el Colegio de Abogados hizo ges­
tiones varias veces para su reposición desde su desaforo en el 1937. Dicho desaforo
había sido otra medida represiva de las muchas que el imperialismo utilizó en su
contra.'85 La LSP encomendó una investigación sobre la desaparición a Angel Ro­
dríguez Cristóbal, quien s su vez recabó la cooperación del historiador Juan Manual
Delgado.'86 En una declaración conjunta del “Frente Revolucionario Anti Electoral “
(FRAE), al conocerse de su desaparición, se relató su heroica trayectoria: haber so­
brevivido la Masacre de Ponce casi treinta años antes, haber estado preso dos veces
por largo tiempo y haber sufrido golpizas a mano de agentes del gobierno de Esta­
dos Unidos al punto de perder casi toda su dentadura. Al día de hoy no ha aparecido
su cuerpo. Para la LSP, el secuestro y desaparición de Pinto Gandía debe verse a la
luz de la entonces reciente formación del FRAE. El FRAE quedó organizado en ju­
nio del 1976 y lo conformaban el MSP (luego MST), el Partido Comunista y la LSP.'87
La LSP declaró que esperaba que el Partido Nacionalista se uniera una vez culmina­
ra el proceso de reorganización que se llevaba al interior de dicho partido. No hay
duda que este hecho representó un golpe fuerte al heroico Partido Nacionalista, el
cual continuó con su línea de abstención anti electoral, pero no se unió al FRAE. Por
otro lado, el clima prevaleciente en Washington DC resultaba propicio para el cri­
men político ya que tres días después de la desaparición de Pinto Gandía asesinaron
en esa ciudad a Orlando Letelier y a su asistente, la estadounidense, Ronni Moffitt.
Letelier era exilado chileno y otrora diplomático de su país bajo la presidencia de
Salvador Allende.'88

En el 1976 hubo una huelga muy significativa en la Universidad de Puerto Rico cuyo
origen fueron demandas del sector laboral y la cual fue respaldada por el sector or­
ganizado del estudiantado. Esta huelga no tuvo su origen en la lucha antimilitarista
sino en conflictos laborales. Richard Nixon, presidente de Estados Unidos, antes de
dejar la presidencia de Estados Unidos en medio de un escándalo de espionaje al
Pan ido Demócrata, escándalo conocido como “Watergate”, había firmado un decreto
en el 1975, para dejar sin efecto el SMO.,8q La huelga se había iniciado prácticamente
desde inicios del semestre académico de agosto de 1976 impulsada por la Herman­
dad de Empleados Exentos No Docentes (HEEND) y el Sindicato de Trabajadores
los cuales reclamaban un aumento salarial de 75 dólares. .,9° Según otros sectores se
57 | Lucha y i spacio ni la Lic„\ Soc i ai isi a Pi i riorriqui ña: 1962-1989

unían, en particular los estudiantes con gran presencia de la FUPI, los administrado­
res de la UPR y otros funcionarios gubernamentales se turnaban en la prensa para
lanzar amenazas. De paso vamos a indicar que esta huelga estaba en su apogeo el día
que desapareció del lugar donde vivía entonces, Julio Pinto Gandía, quien residía en
el perímetro de la Ciudad Universitaria. Hubo decenas de estudiantes suspendidos
aunque la participación de éstos ayudó a mantener a los trabajadores en huelga con
la moral alta. Los líderes de las organizaciones estudiantiles estaban entre los suspen­
didos, Ramón Bosque, Presidente Nacional de la FUPI, José Fortuño, Secretario Ge­
neral de la JIU (brazo estudiantil del PIP), Roberto Alejandro, dirigente de la Unión
de Juventudes Socialistas (brazo estudiantil del MSP-MST), además de la presidenta
interina del Consejo de Estudiantes, Mildred Braulio y Humberto Pagán, quien había
reiniciado estudios luego del paréntesis forzado que le representó la acusación rela­
cionada a los sucesos del 11 de marzo de I97i.'9'

La LSP editorializó sobre el cierre del Recinto de Rio Piedras en medio del conflicto
laboral y su reapertura bajo ocupación policiaca.'92 Los macanazos, atropellos y la
insistencia de negar los reclamos obrero-patronales que la LSP entendía podían re­
solverse era muestra de una voluntad de autoritarismo que apuntaba a su vez a una
razón más profunda. La LSP entendió que se pretendía asegurar a los bonistas y a
futuros inversionistas de su dinero. Es la primera vez, que podamos recordar, que se
hace esta interpretación sobre los intereses de los bonistas, algo que pocos años más
tarde se convertiría en tema de discusión frecuente hasta nuestros días. Sobre los
estudiantes se indica que no se dejaron caer en la terquedad como pretendía la admi­
nistración de la UPR, al celebrar la asamblea fuera del campus luego que se les negó
el permiso para realizarla en el Teatro Universitario, esperando que esta decisión in­
tensificara la polarización. La LSP señaló que una propuesta de las organizaciones
profesorales para una tregua de diez días equivalía a un truco de rompe huelga. El
editorial advirtió, en particular a los independentistas y socialistas, que este uso de
mollero en vísperas de las elecciones de noviembre de 1976 debió alertar que en las
elecciones coloniales no está envuelto el poder, el poder lo ejerce Estados Unidos con
el partido que sea que lleve mayor número de votos.

En los meses que antecedieron a las elecciones de noviembre de 1976 la LSP hizo una
militante campaña anti electoral tanto como miembro del FRAE y como organiza­
ción aparte.'93 Se destacó la actividad de Guánica del 25 de julio en repudio de la inva­
sión estadounidense, y la del 23 de septiembre en conmemoración al Grito de Lares,
ambas por su asistencia, militancia y coordinación de los integrantes del FRAE.'94
Para ese entonces la LSP contaba en muchos de sus actos con el apoyo de excelentes
artistas quienes desplegaban su arte alrededor de la obra poética de Corretjer ade­
más de interpretar toda la gama de expresiones artísticas patrióticas y de la “nueva
trova”, vedada en los medios masivos comerciales.
Raymond Soto DAvilx | 58

Los resultados de las elecciones de noviembre de 1976 llevaron al PNP al poder y llevó
a las cámaras legislativas, con mayoría en ambas, a una comparsa de ex estudiantes
universitarios de extrema derecha, que irónicamente irían a parar años después a las
cárceles de Puerto Rico y Estados Unidos por robar de diversas formas.195 Llevó a la
gobernación a Carlos Romero Barceló, cuyo legado para Puerto Ricio ha sido nefasto.
Este triunfo del PNP fue acompañado de una demostración pobrísima en las urnas
del PSP, algo que la LSP había advertido repetidas veces ocurriría.'96 Sin embargo,
el PSP insistiría al menos una vez más en la ruta electoral en las elecciones del 1980,
algo que continuaría minando su base de militantes dramáticamente. Por otro lado,
el P1P tampoco quedó bien parado aunque obtuvo casi ocho veces más votos que el
PSP. Ninguno de los dos logró elegir un solo miembro a las cámaras legislativas.197

La LSP fijó su posición sobre los resultados de las elecciones del 1976 en dos edito­
riales en una de sus publicaciones y Angel Rodríguez Cristóbal realizó un análisis de
las fuerzas sociales en la coyuntura electoral el cual la LSP publicó por separado.198
En el segundo de estos editoriales se destacaron estos puntos: Primero, la LSP indicó
de forma implícita que Estados Unidos sí desea la anexión de Puerto Rico y nunca
se inscribió en la comodidad del argumento de que si se lograra una petición de los
boricuas solicitándola, Estados Unidos la negaría. Segundo, se asevera que tenemos
recursos naturales para valernos en la independencia. Se resalta la mano de obra que
con su sudor levantó toda la infraestructura, los recursos naturales no se mencionan
en el documento pero en otras instancias la LSP ha identificado, entre otros elemen­
tos, nuestro clima, agua, agricultura además de la formación de especialistas en di­
versas ramas. Tercero, se indica que la incitación a explotar los recursos naturales,
particularmente el níquel que posee nuestro subsuelo, y el petróleo, ha traído como
f consecuencia la avaricia aún entre independentistas que se identifican a sí mismos
como anticomunistas, exponiendo a unos puertorriqueños a ser explotados por otros
puertorriqueños. Cuarto, la escala de nuestra extensión territorial no permite estas
aventuras sin un costo ambiental extremadamente alto y ni siquiera la ciencia, aún
estando disponible para beneficio de los puertorriqueños si fuésemos los dueños,
podría subsanar la destrucción que tales proyectos acarrearían. Quinto, acusa al pre­
sidente de Estados Unidos, Gerald Ford, de tener estas intenciones y alerta al pueblo
que el petróleo y la minería se utilizarían como es costumbre, para armar al gobierno
de Estados Unidos contra países que no nos han agredido en forma alguna. Es obvio
que esta posición resume razonamiento político y razonamiento de relaciones hu­
manas extrapoladas a las relaciones internacionales. Son el verdadero fundamento
para la paz. El análisis de Angel Rodríguez Cristóbal fue muy incisivo en desmenuzar
la función de desvío que cumplieron algunos grupos que se organizaron en aquella
época con la juventud con el fin de neutralizar su potencial de radicalización política.
(Ver este trabajo titulado “La farsa electoral: Las elecciones de 1976” en el Apéndice
III: Cátedra de militantes.)
59 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

La LSP se mantuvo alerta en torno al desarrollo de las dos potencias socialistas en


ese entonces y las relaciones entre éstas, la Unión Soviética y la República Popular
China. Tras el fallecimiento en 1976 de Mao Tse Tung, gran líder ideológico de la
República Popular China, la LSP publicó un editorial sobre la relevancia que esta
figura tuvo a partir de la muerte en 1953 del controversia! líder soviético, J. Stalin.*99
Destacó que Mao Tse Tung asumió un liderato ideológico inspirador en las luchas
anticoloniales que se libraban en el escenario internacional en los pueblos de Asia,
Africa y América Latina. Estas luchas se daban desde finales de la Segunda Guerra
Mundial (1939-1945). Mao Tse Tung fue el gran inspirador y jefe de la “Gran Marcha”.
Se debe recordar que esta fue una estrategia de retirada y reorganización entre el
*934 y 1935 para enfrentar dos problemas que asediaban al pueblo chino: las fuerzas
conservadoras y reaccionarias del siglo 20, presididas por el Movimiento del Kuo-
mintang inicialmente progresista porque era opuesto a las fuerzas monárquicas de
China pero ya entonces decididamente conservador y elementos aliados y la invasión
de las tropas del imperio japonés. Igualmente derrotó la política de “puertas abier­
tas” de Estados Unidos la cual pretendía mantener a China en el cuasi coloniaje que
facilitara el intervencionismo yanki. Definitivamente fue el más grande guerrero y
teórico de la guerra revolucionaria durante ese periodo. Al hacer balance de los erro­
res la LSP señaló el gran error de haberse enfrascado en la rivalidad chino-soviética
de la década del 1960 lo cual el imperialismo norteamericano usufructuó en el balan­
ce de poder político-internacional, proveyéndole anchura de espacio al capitalismo
internacional. La LSP sentenció en su editorial sobre Mao Tse Tung lo mismo que
había apuntado al morir Chou en Lai, gran diplomático chino:”Si un buen morir
honra toda una vida, también lo contrario es ley. Duele. Pero es cierto.”Acorde a este
editorial la LSP mantuvo una línea política internacional independiente de ambas
potencias socialistas. Por otro lado, ya sabemos a la altura del Siglo 21 los resultados
posteriores con respecto al desarrollo del socialismo en éstas. La LSP se concentró
en nuestra lucha nacional por la independencia y el socialismo y alentar desde sus
publicaciones a los pueblos en lucha de América Latina, África, Medio Oriente y
Asia. Para los estudiosos de este tema el editorial les recuerda que China ni siquiera
varió su política luego del golpe militar al gobierno socialista de Allende en Chile
(1973) debido a sus intereses sobre el cobre chileno e inclusive se abstuvo y fue incon­
sistente en sus posturas en el 1975 y 1976 con el caso de Puerto Rico ante el Comité de
Descolonización de la ONU.

Entre 1977 y 1978 se evidenciaría el surgimiento de varios grupos clandestinos a fa­


vor de la independencia, continuaría en ascenso la represión a patriotas y militantes
independentistas en Estados Unidos mediante el uso del Gran Jurado y el PNP de­
sarrollaría un clima de histeria contra los independentistas azuzado por la extrema
derecha de exilados cubanos con gran presencia en los medios para entonces. La LSP
abrió sus publicaciones a los comunicados de estas organizaciones clandestinas de-
Raymond Soto Dáviia | 6o

fensoras de la independencia patria, reproduciéndolos en las mismas. Hubo confron­


taciones dramáticas entre patronos y obreros. Dos de estas confrontaciones fueron el
caso del abogado patronal estadounidense Alian Randall, quien fuera ejecutado el 22
de septiembre de 1977 y era conocido por sus acciones represivas contra la Unión de
Tronquistas y la huelga que declarara la UTIER (Unión de Trabajadores de la Indus­
tria Eléctrica y Riego) en diciembre del 1977, contra la Autoridad de Fuentes Fluviales
(AFF), ahora Autoridad de Energía Eléctrica (AEE). El aumento de la criminalidad,
con los asesinatos como elemento destacado y el auge del narco tráfico se complicaba
al perfilarse las condiciones de un reino de terror, en particular la operación de un
escuadrón de la muerte dentro de la propia Policía de Puerto Rico.

El año de 1977 se desarrolló con un desánimo generalizado entre la militancia inde-


pendentista, algo que repercutió negativamente en la combatividad de la clase tra­
bajadora. Sin embargo, se contaba con avances dentro de este cuadro que parecería
desolador. La lucha contra el proyecto de explotación minera seguía avanzando y
calaba hondo en el pueblo mientras que la campaña de excarcelación por los presos
nacionalistas había cobrado impulso. Por otro lado, dado el avanzado deterioro en
su salud, Andrés Figueroa Cordero, uno de los nacionalistas presos por el ataque al
Congreso de Estados Unidos en 1954 fue liberado durante este año provocando gran
alegría para los independentistas y amplios sectores del pueblo. La LSP editorializó
su júbilo en su revista y le dedicó los actos de recordación del ataque al Congreso que
celebró el primero de marzo de 1978 en Amalia Marín, Rio Piedras, donde participa­
ron además de Corretjer, Ángel Rodríguez Cristóbal y Eduardo Escalona.200

La LSP estableció un comité anti-minero en Adjuntas y circuló buenos análisis en


I un pequeño periódico del mismo nombre, sobre la situación general de Puerto Rico,
su infraestructura y los intereses creados que no resultaban entonces obvios para
la población. Este comité reprodujo un interesante artículo en el que se analiza la
huelga de la UTIER contra la entonces Autoridad de Fuentes Fluviales (“AFF”). Se
hace un análisis de la AFF como de “uno operado por los burócratas del gobierno
colonial y financiado por bancos norteamericanos mediante emisión de bonos”. Los
bancos prestan el dinero para respaldar la emisión de bonos, cobrando intereses y se
lo cobran al pueblo mediante contribuciones y en las tarifas de luz. Llama la aten­
ción que el Comité Anti-minero señalara que la influencia de los bancos no estaba
sólo presente en la AFF sino también en industrias petroquímicas que existieron en
Puerto Rico como la CORCO, PPG y otras. Esas industrias eran también propiedad
de los bancos y esos bancos obligaban a la Autoridad a un precio por consumo muy
por debajo proporcionalmente al precio que ha pagado el pueblo puertorriqueño
por el consumo de electricidad en sus casas. Afirma el artículo que son los bancos
norteamericanos los verdaderos dueños de la AFF. Se señala el carácter justo de las
luchas de la UTIER, se alude al desarrollo histórico-social del sindicalismo y se toma
61 | Lucha y espacio de la Liga Sck i ai isla I’i i rtorriqui ña: 1962-1989

en cuenta las consecuencias negativas del reformismo sindical para el movimiento


obrero organizado. La capacidad integradora de este artículo y su estilo accesible al
pueblo son las herramientas efectivas para lograr sus propósitos educativos.201

La LSP emitió unas declaraciones sobre el caso de Alian Randall luego de la brutal
cacería de brujas que se desató contra sindicalistas que llegó a extremos inconcebi­
bles. Debido a que esto era un enfrentamiento que protagonizaban los Tronquistas,
la LSP se sintió en la obligación de hacer las siguientes declaraciones en un editorial
de las cuales citamos un extracto: “Puesto que la Unión de Tronquistas está direc­
tamente vinculada al sindicalismo norteamericano el gobierno descontó de ante­
mano la despreocupación del independentismo frente a la persecución desatada
contra la Unión de Tronquistas con la excusa de la ejecución de Randall. En cuan­
to a nosotros se refiere, se equivocan... La unión en si puede ser norteamericana;
los trabajadores afiliados son nuestros. Permanecer indiferentes ante el secuestro a
miembros de los Tronquistas y aún a la desaparición, con intuida consecuencia de
asesinato, como fue el caso de Luis Carrión y Benita Vázquez, en primera instancia;
y de Juan Rafael Caballero en la segunda, sería un acto suicida del independentismo
en el que ni la Liga Socialista Puertorriqueña ni esta revista van a caer.”202 Volvere­
mos sobre el caso Randall debido a que el desarrollo del mismo se extendió hasta
principios del 1979.

La huelga de la UTIER se extendió desde diciembre de 1977 a abril de 1978. Fue suma­
mente álgida. La LSP dio apoyo amplio, Corretjer exhortó a estudiantes universita­
rios de Río Piedras en una conferencia en febrero de 1978 a movilizarse a favor de esta
huelga además de divulgar aspectos de la huelga en las revistas y boletines de la LSP.
Se destacaron tres cosas en los planteamientos: (1) Esta huelga estaba orquestada des­
de Washington y sus agencias represivas, (2) Se intentaba desbancar de la presidencia
de la Unión de Tronquistas a Luis Lausell, por ser miembro del PSP y sustituirlo por
alguien sumiso y (3) La AFF era parte del engranaje necesario para la producción
de los intereses de la industria militar industrial operando en Puerto Rico y de ahí
el interés de tener bajo control todo lo relacionado a su fuerza de trabajo.20’ Por otro
lado, el caso Randall se complicaba y complicaba también la huelga de la UTIER. (Se
debe recordar que se trata de organizaciones distintas; la UTIER es una organización
independiente y no estaba organizada bajo la Unión de Tronquistas.) En un docu­
mento, la LSP condenó duramente la conspiración del Pentágono y Wall Street para
liquidar la UTIER, la detención arbitraria del dirigente tronquista Miguel Cabrera
en el caso Randall, adjudicando como propósito distraer la atención de la huelga de
la UTIER, los intentos de relacionar en un aura de mafia al movimiento obrero y el
comienzo del desmantelamiento de la Unión de Tronquistas. 204 El documento va
atrás a la historia al recordar el desmantelamiento de la CGT para allanar el camino
a la producción de la operación “Manos a la Obra” y relaciona los hechos que se
Raymond Soio Davila | 62

daban alrededor de la huelga de la UTIER y el caso Randall con una nueva etapa de
la producción que el gobierno de Estados Unidos planeaba. Esta nueva etapa giraba
alrededor de la explotación de los recursos de níquel y el petróleo para lo cual pre­
tendería otro tipo de reorganización de la fuerza trabajadora. La huelga de la UTIER
se perdió y como en otras anteriores, la LSP identificó las causas como las prácticas
reformistas, la ausencia de vínculo de la huelga con los propósitos antiimperialistas
o sea que atajaran el uso de la producción de energía para los fines imperialistas y la
reculada del auge del independentismo.205

El caso Randall tuvo dos efectos casi inmediatos: (1) Trajo a la conciencia del pueblo
la certeza de la existencia de un escuadrón de la muerte dentro de la Policía de Puerto
Rico. (2) Evidenció sin lugar a dudas la utilización de todo el sistema de justicia co­
lonial, desde el Departamento de Justicia hasta sus cortes, para fabricar casos contra
el sector obrero organizado y el pueblo trabajador en general. Este sería uno de los
muchos legados tenebrosos que dejaría el mandato colonial del gobernador Carlos
Romero Barceló el cual se extendería por ocho años, como veremos más adelante.
A partir de la ejecución de Randall, el gobierno de Estados Unidos hizo una serie
de movidas que no lograba disimular el vínculo incuestionable de esta persona con
las agencias represivas, en particular con la CIA. Este vínculo fue una de las muchas
cosas que el comunicado que dejó el grupo que se proclamó responsable, alegó sobre
este individuo.206 Miembros del escuadrón de la muerte, lo cual quedaría evidencia­
do ampliamente años después, secuestraron a dos sindicalistas y una secretaria de la
Unión de Tronquistas (ya mencionados al citar el comunicado de la LSP), con tal de
obtener información sobre el caso Randall y torturaron y asesinaron a uno de ellos,
Juan Rafael Caballero. La selección de Caballero que lo marcó como “tarjeta”, se re­
monta a otro ángulo tenebroso. Un amigo muy cercano al cabecilla del escuadrón
de la muerte había tenido una inquina de larga duración contra Caballero, quien
llevaba años combatiendo militantemente como Tronquista a favor de los trabaja­
dores.207 La presión pública de las uniones y otras organizaciones impidieron que
se consumara el asesinato de los dos sobrevivientes. Como si todo esto fuera poco,
se fabricó un caso disparatado y perverso contra otro sindicalista, Miguel Cabrera,
cuyos detalles sobrepasan la imaginación de un Alfred Hitchcock.208 Si se pudiera
cerrar esta canallada con broche de oro habría que darle el privilegio a la judicatura.
La misma juez, Blanca Iris Bonilla, quien pocos años antes exoneró al policía iden­
tificado como el asesino de Antonia Martínez Lagares, ocurrido frente a decenas de
testigos, declaró causa probable contra Miguel Cabrera, fundamentado en evidencia
cantinflesca, y a quien finalmente un jurado de puertorriqueños exoneró.209 A modo
de reflexión sobre la inutilidad de recurrir a la justicia colonial, luego de la Unión de
Tronquistas haberse negado a entregar información alguna a las autoridades y haber
reclamado la intervención de un panel investigador independiente, sorpresivamente,
entregó el material con consecuencias muy negativas. Al otro día, el Departamento
63 | LUCHA Y ESPACIO DE L\ LlGA SüCIAI ISI \ Pul RTORRIQUI ÑA: I962-I989

de Justicia exoneró a la Policía y siguió esta acción poco después con la radicación de
cargos y la fabricación de caso que ya relatamos?10

La LSP se esmeró a través de los años en crear entusiasmo y adhesión a la celebración


del primero de mayo. Ese año del 1977, Antonio Rivera del Comité Regional del Sur
de la LSP, escribió un artículo haciendo el recuento del restablecimiento de esa fecha
entre el sector organizado y las organizaciones patrióticas luego de un periodo de
muchos años de abandono. Este resurgimiento se inició precisamente en un mitin
de la LSP en Río Piedras el primero de mayo de 1967. La LSP con regularidad lleva­
ba a cabo mítines alusivos a la celebración del primero de mayo en comunidades
pobres, particularmente en Clausells y Cantera, en Ponce, en las cuales la militan-
cía realizaba trabajo. Este artículo también resalta las numerosas huelgas del área
sur y la participación de la LSP, alentando, dando apoyo e integrando los piquetes
en algunas de ellas. El tono enérgico y optimista denota la intención de levantar los
ánimos, algo necesario para el espíritu revolucionario. Se levantan como banderas
de lucha, la defensa de los recursos naturales y la oposición a la explotación minera
y al voto presidencial.2" Este artículo resultó un anticipo de lo que Corretjer esbozó
ese primero de mayo ante el Comité Central de la LSP en Cantera, Ponce. Sintetizó
brillantemente el pensamiento de Betances y defendió la postura de que el procer no
organizó su lucha dentro de la legalidad, por el contrario, la organizó para la acción
clandestina y es por esto que Betances nunca entró a las filas del Partido Autonomis­
ta. 2,2 Corretjer fue a defender este pensamiento ante hombres y mujeres del Comité
Central, sesionando en un pequeño local ubicado en un sector de extracción social
trabajadora y muy pobre, porque precisamente en Puerto Rico bajo el coloniaje espa­
ñol los libertos esclavos nunca pudieron contar con la vía legal para su emancipación
y es la historia la mejor maestra. Se establece que fue el Grito de Lares lo que forzó a
España a enfrentar el reclamo abolicionista.

La LSP como parte del “Frente Anti Imperialista” (FRAI) convocó, para un acto pro­
testa en Guánica el 25 de julio de 1977 al cual precedieron otras actividades. Luego de
celebrarse el acto de Guánica de ese año el FRAI tuvo problemas en seguir funcio­
nando. La dirección nacional no lograba reunirse debido a la ausencia continua de la
representación de una de las organizaciones integrantes y de que el sector no afiliado
no crecía. La LSP tuvo como meta que el FRAI lograra abrir camino a una unidad de
pueblo con potencial revolucionario, unidos en la acción y no en la palabra y cuyo
objetivo en la unidad era la conformación de un Frente de Liberación Nacional.20
Se disolvió en marzo del 1978 y no hay dudas de que la LSP consideró la urgencia de
trabajo y la necesidad de reagrupamientos que verdaderamente funcionaran.2*4 Ese
año de 1978 fue sumamente dramático en donde arreció tanto la militancia de grupos
que operaban abiertamente como de grupos que operaban en la clandestinidad. La
represión fue sumamente violenta aunque no tanto en la cantidad de acciones como
Ra^monp Soro Davii.x | 64

en la intensidad de éstos. La celebración de Grito de Lares de 1978 contó con la par­


ticipación en actos sucesivos de muchas organizaciones patrióticas ante un público
multitudinario. En actos que se sucedieron inmediatamente, Juan Mari Brás, repre­
sentando el PSP y Juan Antonio Corretjer, representando la LSP, abordaron el tema
del desarrollo de un criterio y de la acción revolucionaria clandestina, el primero
esbozó crítica y el segundo, apoyo incondicional?'5

En el 1978 la lucha antimilitarista comienza a intensificarse cuando grupos organi­


zados realizaron actos de protesta por la ocupación y maniobras de la Marina de
Guerra de Estados Unidos en Vieques. Esto llevaría al inolvidable militante y héroe,
Ángel Rodríguez Cristóbal, agricultor, nacido en Cíales y miembro de la LSP, a des­
empeñar un rol de apoyo en esa lucha como parte de sus funciones. A partir de la
muerte de Manuel Padilla, su mentor y amigo entrañable, comienza una etapa de
intensificación de sus roles en la LSP mientras junto a su esposa levanta una familia
con dos niños. Era un luchador por la cultura con amplio reconocimiento en el Ba­
rrio Pozas de Cíales de donde era oriundo siendo clave en organizar grupos de tra­
bajo en su pueblo a favor de la cultura. Fue colaborador cercano al historiador Juan
Manuel Delgado.216 Para ese entonces, daban la lucha en ese momento por Vieques
la “Cruzada pro Rescate de Vieques”, la “Asociación de Pescadores”, y el “Comité
Nacional Pro Defensa de Vieques”, la LSP era miembro de este último.2,7 Durante
ese año comienzan a salir de la cárcel algunos de los sentenciados por resistir el Gran
Jurado en Estados Unidos, puertorriqueños y chicanos. La LSP asume un rol de van­
guardia en la divulgación de estos casos y en la educación política sobre los concep­
I tos de clandestinidad y lucha armada, tanto a través de sus publicaciones como en
discursos en actividades.2'8 Se establecen puntos fundamentales sobre la definición
de clandestinidad y se vincula la teoría y la praxis al reproducir un escrito sobre este
término de precisamente una organización clandestina la cual circulaba una revista.
Se enfatiza que la clandestinidad es “en lo fundamental un planteamiento de segu­
ridad estrechamente ligado con enfrentar aparatos represivos del régimen.” No es
sinónimo de lucha armada. Es un “método” y se opta por este método dependiendo
del análisis que se haga de la tarea a realizarse y las fuerzas opresivas del estado que
la opondrían. Se publicaban también los abusos y atropellos que continuaban reci­
biendo los citados por el Gran Jurado luego de excarcelados2'9 Corretjer se unió a las
actividades en Boulder, Colorado, del “Comité contra la represión del Gran Jurado de
unidad chicano-mexicano y puertorriqueña”, llevados a cabo en mayo de ese año y
facilitó que Pedro Archuleta y el boricua en la diáspora, Julio Rosado, ambos recién
excarcelados luego de cumplir cárcel por negarse a colaborar con un gran jurado, se
presentaran y hablaran en las actividades de Jayuya del 30 de octubre.220

Julio Rosado destacó en su discurso la importancia de la figura de Griselio Tórresela


para la lucha por la independencia de Puerto Rico contra el colonialismo impuesto
65 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

por el imperio. Hizo un recuento histórico del desarrollo de la organización clandes­


tina MIRA fundada en Nueva York entre 1967 y 1968. Esta organización usaba el nom­
bre emblemático de este héroe nacionalista en sus comunicados. Fue en los arrabales
de boricuas en ciudades de Estados Unidos que se nutrió y creció el movimiento
independentista que para entonces, al tomar como punto de partida los heroicos he­
chos del 1950 y luego del 1954, contaba con 28 años hasta darse el arresto de William
Guillermo Morales.221 La lucha por los derechos democráticos de los puertorrique­
ños en la diáspora y los derechos humanos y civiles del pueblo afroamericano y la
represión que confrontaban por mejorar sus condiciones de vida no dejo más salida
que refugiarse y potenciar estas luchas en la clandestinidad. MIRA deja de ope­
rar temprano en la década del 1970 y para mediados de esa década surge las FALN
(Fuerzas Armadas de Liberación Nacional). Contrario a MIRA, cuyas acciones se
limitaron mayormente a la Ciudad de Nueva York, la actividad de las FALN se des­
plegó a través de un espacio más amplio en Estados Unidos. Rosado conceptualizó
la lucha por la independencia dentro de una fuerza más amplia, un frente antiimpe­
rialista que conjugara las luchas de chicanos, afroamericanos, blancos norteameri­
canos. Mencionó el surgimiento en Estados Unidos del “Movimiento de Liberación
Nacional” (MLN).222

La MLN tuvo vínculos muy estrechos con la LSP quizás para la LSP los más estrechos
de todas las organizaciones patrióticas, incluidas las de Puerto Rico, desde la segunda
parle de la década del 1970 hasta poco antes de la disolución de la LSP. La MLN fue
fundada en el 1977 Por chicanos y puertorriqueños en la diáspora luego de la oleada
de acusaciones del Gran Jurado contra estos dos grupos nacionales. Sus propósitos
eran (1) conservar la identidad cultural de cada grupo, (2) acabar con la ocupación
militar de Puerto Rico y del territorio mexicano que le fuera arrebatado a México, (3)
recuperar el territorio nacional perdido estableciendo el rechazo al Tratado de París
(1898) en el caso de Puerto Rico y el de Guadalupe-Hidalgo (1848) en el caso de Méxi­
co (4) y finalmente establecer la república independiente y socialista de Puerto Rico
y la reunificación socialista de México. Como se puede ver no eran meros propósitos
paliativos para mejorar las condiciones de vida dentro de Estados Unidos, lo cual
encendió la alarma de las fuerzas represivas.223

La LSP siempre estuvo consciente de la limitación de información en Puerto Rico


sobre las luchas de otros pueblos ya que todo llegaba filtrado a través de la ideología
del imperialismo. Consistente con la línea de las publicaciones de la LSP en dar a
conocer esas luchas, se publicó una traducción de un capítulo de un folleto “Irán, la
lucha desde adentro” de Amiz Parviz Pouyan, luchador marxista quien murió en 1971
combatiendo la sangrienta dictadura del Shah de Irán, apoyada por Estados Unidos.
En dicho capítulo se discute la “teoría de la sobrevivencia”, teoría que resultaba opor­
tunista, derrotista y liquidacionista pues postulaba de abstenerse de llevar acciones o
Raymond Soto Dávila | 66

tomar la ofensiva que el autor entendía era la negación de todo intento de construir
condiciones para las alternativas revolucionarias. Este artículo profundizaba en la re­
presión del estado y los modos de encararla. La LSP daba paso al mismo no solamen­
te para dar a conocer la lucha de Irán desde una perspectiva vedada por los medios
en Puerto Rico sino como un alerta a la lucha del independentismo y la disyuntiva
que se presentaba con los movimientos clandestinos recién surgidos en esos años y
las acciones como la toma del consulado de Chile.224

Los Cuadros Estudiantiles de la LSP publicaron una antología de escritos que versa­
ban sobre el tema de las guerrillas y el de la guerra popular en el Siglo 20. El primer
escrito era uno ya publicado con anterioridad de la autoría de V. I. Lenin el cual trata
sobre el uso de las guerrillas en la Rusia zarista durante la lucha revolucionaria de
1905. Dicho escrito fue consistentemente publicado por la LSP como escrito intro­
ductorio, como conocimiento y estudio de la guerrilla y como método de lucha revo­
lucionaria para los independentistas, marxistas y pueblo trabajador. Otros escritos
eran de Moisés Moleira, Regis Debray, Abrahan Guillén y Juan Antonio Corretjer,
discutiendo los temas de guerra popular, guerrilla e insurrección. Sin desmerecer
■ a los otros autores, en esta antología se destaca como más notable y profundo el de
Abraham Guillén considerado el padre moderno de la guerrilla urbana en América
Latina. Español de nacimiento, sufrió cárcel por sus actividades y tuvo que irse clan­
destino y protegerse de la dura represión por muchos años. Debido a su experiencia
en diversos países de América Latina, sus escritos fueron ignorados inicialmente para
luego ser censurados y proscritos para evitar su difusión. Se incluye un extracto de
una introducción suya a una edición postuma del Che Guevara, “Guerra de Guerri­
llas”, en la cual se analiza brillantemente los errores tácticos que llevaron a su derro­
ta. La LSP intentaba a través de sus círculos de estudios desarrollar un pensamiento
crítico y abarcador sobre las luchas en ascenso de otros países. En esa antología tam­
bién se destacan las notas al calce de los Cuadros Estudiantiles de la LSP, muy en
particular en el escrito de Moleiro, “La Guerra como estrategia”.225 Como veremos
más adelante a esta antología seguiría otra de temática similar recopilada por Carlos
Noya en el 1980.

Los dos acontecimientos más impactantes de ese año de 1978, año que a la distancia
de cerca de tres décadas y media ahora nos parece interminable, fueron sin duda, la
toma del consulado chileno entre el 3 y 4 de julio por dos luchadores independentis-
tas, Nydia Cuebas y Pablo Marcano y el entrampamiento y asesinato en el Cerro Ma­
ravilla, en VilJaiba, de dos jóvenes independentistas, Arnaldo Darío Rosado y Carlos
Soto Arriví el 25 de julio. Carlos Soto Arriví solamente contaba con dieciocho años.
Era hijo del escritor Pedro Juan Soto. En ambos casos la prensa comercial demonizó
a los independentistas, destacándose la saña de El Vocero.226 Esto lo hacía la prensa o
supuesta prensa, a pesar de que en el caso de la toma del consulado, nadie salió heri-
67 | Lucila y espacio de la Liga Soc iai isi.a Plu riorriqui ña: 1962-1989

do y en el caso del Cerro Maravilla, el nefasto agente encubierto, Alejandro González


Malavé, salió herido en un dedo por un disparo de la propia policía y los dos jóvenes
independentistas fueron asesinados y no tenían armas consigo. Es famosa la frase
del entonces gobernador, Romero Barceló, declarando “héroes” a la Policía de Puerto
Rico el mismo día de los hechos. Arnaldo Darío Rosado fue un compañero militan­
te independentista, quien estuvo un tiempo activo en la LSP pero para entonces ya
no militaba en la organización. Era un buen conocedor de la historia, autodidacta y
muy articulado en aquella parte de la historia respecto a la “fruta madura” (Cuba y
Puerto Rico) que forzosamente tenía que caer en las manos de Estados Unidos. Nos
impresionó con su conocimiento y exposición de esa teoría imperialista. Era militan­
te fogoso y ferviente creyente en la independencia de Puerto Rico. No hay duda que
el ejemplo de su abuelo, Pablo Rosado Ortiz, nacionalista y quien estuvo preso con
Albizu y Corretjer en Atlanta, fue fuente de inspiración. Algo que podemos dar fe y
que admiramos es que Arnaldo Darío no utilizaba esta relación para abrirse paso en
los grupos o en discusiones. El 14 de agosto de 1978 la LSP, a tres semanas del doble
asesinato, hace a ambos jóvenes miembros honorarios de la LSP. En el caso de Arnal­
do Darío González, el Buró Político de la LSP mandato una reinscripción mientras
que en el caso de Carlos Soto Arriví mandato una inscripción.117

El caso del Cerro Maravilla tardaría en desmontarse unos cinco años a lo largo de los
cuales se darían tantos episodios que dejaría pequeño el caso Randall. Se descubriría
un vínculo común entre estos casos: la participación en un caso y el conocimiento y
complicidad en el otro de parte del llamado Escuadrón de la Muerte. La LSP hizo
múltiples expresiones de repudio en los medios y correctamente editorializó sobre
este doble asesinato identificando el verdadero origen en las agencias de espionaje e
inteligencia de Estados Unidos, particularmente el FBI, además de señalar la respon­
sabilidad correspondiente de la policía colonial. Estableció un paralelismo con los
muertos que producía la odiosa dictadura de Anastacio Somoza en Nicaragua.*’18 Para
entonces en Puerto Rico se organizaba un comité de apoyo a Nicaragua. Por otro lado,
pocos días después del doble asesinato la Policía arrestó otros independentistas por
acusaciones sostenidas por el propio González Malavé de un tiroteo a la residencia
del ex gobernador Muñoz Marín y de otra acción contra la Guardia Universitaria de
la UPR. Los acusados fueron: Enrique Escalona, Leoncio Figueroa, Erich Rodríguez,
John Sounders, Guillermo Segarra, Ramón Serrano y Samuel Quiñónez Bonilla. El
Vocero también se refería a ellos como “terroristas”.119 Como si fuera poco, entre el
primero y 29 de agosto de ese mismo año el Departamento de Justicia de Puerto Rico
alegó haber hecho una investigación en el cual se validaba la versión oficial de la
defensa propia levantada por la Policía de Puerto Rico.1’0 Este sería el primero de una
serie de investigaciones que mantendría a la prensa y al pueblo en jaque sobre este
doble asesinato político.
Rayniond Soto D,\vii.a | 68

La LSP dio todo su apoyo a la defensa de los acusados en la toma del consulado y
utilizó este caso para profundizar en la discusión de las formas de lucha.2’1 Corretjer
estimó como un acierto de internacionalismo revolucionario esta valerosa acción en
la cual se conjugó la denuncia de la sujeción colonial de Puerto Rico al seleccionar
la fecha del cuatro de julio con la protesta contra la dictadura militar de Pinochet en
Chile, punto contra el cual coincidía todo el espectro de izquierda y hacer el acto de
denuncia en suelo de Puerto Rico vuelca la atención sobre el punto desde donde el
imperialismo de Estados Unidos lanza su ofensiva hegemónica sobre los otros pue­
blos del mundo. El apoyo de Corretjer y la LSP hacia la acción de protesta en el con­
sulado chileno contrastó con el silencio de otras organizaciones independentistas al
punto que el historiador Juan Manuel Delgado calificó la voz de Corretjer como “soli­
taria y valiente”.2’2 Una excepción fue la entonces recién iniciada revista Pensamiento
Crítico, la cual editorializó a favor de Nydia y Pablo.2” El apoyo de la LSP se tradujo
tanto en las publicaciones como en actos y esfuerzos por concertar una estructura
dedicada a defender a las víctimas de la represión y con participación de otras organi­
zaciones patrióticas y sectores afines. Esto se lograría, como veremos, un año y medio
más tarde, a inicios del 1980. El 22 de septiembre de ese mismo año, estos compañe­
ros recibieron largas sentencias.2” La rapidez con que se dispensaban las sentencias
a los luchadores patrióticos contrastaba con la lentitud de las investigaciones sobre
atentados contra los independentistas. Esto ha sido una constante en la historia de
la lucha patriótica. Mientras tanto, el Comité Pro Libertad de Presos Nacionalistas en
Puerto Rico, liderado por Nelson Canals, ganaba empuje y numerosas adhesiones
tanto dentro como fuera de Puerto Rico coronándose esos esfuerzos con la liberación
de los cuatro nacionalistas en el 1979. Salieron Lolita Lebrón, Rafael Cancel Miranda,
Oscar Collazo e Irvin Flores. (Recuérdese que Andrés Figueroa Cordero fue liberado
en el 1977 y falleció el 9 de marzo de 1979, no logrando ver a sus compañeros libera­
dos). Llegaron el 12 de septiembre a Puerto Rico en medio de la alegría más sublime
del pueblo. Su recibimiento fue multitudinario. La LSP atribuyó la quiebra de la vo­
luntad represiva del gobierno de Estados Unidos a dos fuerzas: El Comité Nacional
Pro Liberación de los Presos Nacionalistas en Puerto Rico y las FALN.2,5

Si el año de 1978, como ya mencionamos, nos pareció interminable, el año 1979 lo


recordamos con un grado de intensidad emocional difícil de describir. Tanto antes
como después de la grata bienvenida a nuestros héroes nacionalistas ese septiembre,
el 1979 tuvo desarrollos muy dramáticos para el pueblo de Puerto Rico y estremece-
dores para la LSP. El año comienza con varias demostraciones militantes contra los
ejercicios de la Marina en Vieques y se extenderían intermitentemente desde enero
hasta mayo. La militancia de la LSP estaba muy activa en esta jornada, además de An­
gel Rodríguez Cristóbal se destacaban, Lourdes Santana y Carlos Noya entre otros.
Durante esos meses también se daban a conocer comunicados de grupos clandesti­
nos en apoyo a la lucha anti marina en Vieques.2’6 En las demostraciones contra la
69 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Marina de ese enero, la Asociación de Pescadores con el emblemático Carlos Zenón


a la cabeza, lograron un triunfo resonante con la colaboración del PSP y de Juan Mari
Brás.237 Estos tuvieron que enfrentar la Corte Federal de Estados Unidos en San Juan.
Esta lucha continuó hasta mayo de ese año con la militancia de varios grupos y ope­
rativos de organizaciones clandestinas en apoyo a Vieques. La LSP celebró la bravura
de Zenón desde sus publicaciones oficiales. Volveremos sobre los arrestos en mayo.
238 Otro de los acontecimientos que contribuyó a la intensidad de ese año fue la de­
manda que Pedro Juan Soto y familia y Ángela Rivera e hijo radicaron en el Tribunal
de Estados Unidos en Puerto Rico por violación de derechos civiles contra la Policía
de Puerto Rico. Esta demanda tardaría muchos años en resolverse pero fue dejando
ver muchas contradicciones que se compartían con la prensa sobre la versión oficial
del gobierno colonial con respecto al caso del Cerro Maravilla.239

Antes de la jornada de desobediencia civil de mayo que dejaría grandes huellas en


la LSP, se daría en abril un rudo golpe a un sector del exilio cubano, mayormente
jóvenes, que llevaban unos pocos años intentando reabrir el diálogo con la Cuba so­
cialista y no pocos mostraban un grado de simpatía hacia la revolución cubana. Este
golpe también demostraría la profundidad de la relación colonial de nuestro país
con Estados Unidos y su sujeción a los testaferros de regímenes a los cuales Estados
Unidos era afecto y apoyaba. En pleno día, el 28 de abril, asesinaron a Carlos Muñiz
Várela, joven cubano quien ya era padre de familia, produciéndose un comunicado
de un llamado “Comando Cero” adjudicándose el crimen y advirtiendo que no tole­
rarían intento alguno de nadie en dialogar con la Cuba socialista.240 Muñiz Várela era
reconocido también como independentista, además de como activista para reabrir el
diálogo con Cuba habiendo llegado a Puerto Rico a los siete años e identificándose
con nuestras luchas como también con las de Cuba. Este asesinato se lleva a cabo en
nuestro territorio nacional y al día de hoy no se ha acusado a persona alguna. Esta im­
punidad, cargada en los hombros por todos los que por los medios de comunicación
y la prensa regurgitaban el discurso de la guerra fría, también contribuían a crear
el clima favorable para que la lucha de Vieques cayera en oídos sordos en nuestra
población para ese entonces, proveyendo una aprobación tácita a la insolencia tanto
de los asesinos de la extrema derecha del exilio cubano como para los desmanes de
la Marina y su perro guardián la Corte Federal de Estados Unidos en Puerto Rico.24'

La jornada de desobediencia civil de mayo de 1979 tuvo un efecto muy significativo en


la lucha por sacar la Marina de Estados Unidos del territorio viequense y marcó ade­
más el inicio de la etapa final de la vida y la heroica militancia de Ángel Rodríguez
Cristóbal en la LSP. Hubo varias actividades simultáneas que lograron detener los
bombardeos. En Bahía Salinas la policía militar arrestó a Carlos Zenón, líder de los
pescadores, Ileana Carrión, portavoz del Comité Nacional pro Defensa de Vieques,
y a la periodista Wilda Rodríguez aunque finalmente los dejaron ir. Otros arresta-
Raymond Soto Dáviia | 70

dos en ese grupo fueron el Reverendo Alberto González, Carlos R. Ventura, Luis A.
Medina, Dimas David Muñoz, Pablo Torres, Aníbal Corcino, David Feliciano, Jesús
Ventura, Severino Ventura y José Iván Meléndez. Se realizaron dos piquetes marinos
en donde las lanchas de pescadores nuevamente retaron las lanchas de la Marina.14*’
La actividad más prolongada fue la de Playa Chivas en la cual 200 personas ocuparon
la misma, retando las disposiciones de la Marina de Guerra y permaneciendo allí
durante cinco días hasta que se producen 21 arrestos y el desalojo general. Parti­
ciparon varios miembros de la LSP, entre los cuales la Marina arrestó a Lourdes
Santana y a Ángel Rodríguez Cristóbal.743 Como se recordará uno de estos arrestos
fue el de la heroína nacionalista Isabel Rosado cuya foto le dio la vuelta al mundo.
Los otros arrestados fueron Ismael Guadalupe, luchador viequense, dirigente de
la Cruzada pro Rescate de Vieques y entonces del PSP, Antulio Parrilla, sacerdote
católico, Andrés Trevathan, sacerdote episcopal, Judith Berkam, abogada, Diego
Ledée, Ramón Antonio Alicea, los últimos dos del Comité Nacional pro Defensa
de Vieques, Pedro Baigés, del PSP, Wilfredo Vélez, ministro, Emilia Rodríguez, José
Acosta, León Martínez, José Pereira y Mildred Martínez, esta última del Comité
Nacional Pro Defensa de Vieques.

En su alocución ante la Corte Federal de Estados Unidos el 26 de septiembre de 1979.


cuando fue enjuiciado, Ángel Rodríguez Cristóbal hizo adhesión a la tesis de la nu­
lidad del Tratado de París y a que las circunstancias del arresto por autoridades mi­
litares lo convertían en un prisionero de guerra. (Ver dicha alocución en el Apéndice
III: Cátedra de los militantes). Esta posición fue lo que le costó la vida siendo asesi­
nado en la cárcel federal deTallahassee, Florida, el 11 de noviembre de 1979, mientras
cumplía seis meses de sentencia por un delito “menos grave”, representando esto un
golpe brutal para la LSP y conmoviendo tanto al independentismo como al pueblo
en general. Nadie sensato en Puerto Rico dudó, luego de verse el aspecto físico del
cadáver y conocerse otros detalles, que se trató de un asesinato político.244 Fueron
significativas y no deben caer en el olvido las declaraciones que en esos días dieron
Wilfredo Vélez y Carlos Zenón.245 Vélez presenció el arresto de Ángel y vio como lo se­
paraban del resto del grupo e intentaron ponerle cargos diferentes. Zenón indicó que
la noche del asesinato ocurrieron cosas fuera de lo común en Vieques ya que apare­
ció un camión cargado de “marines” armados en el pueblo y justo al otro día, fuera de
época de ejercicios y sin mediar anuncio como se supone, aparecieron tres barcos de
desembarco de la Marina, los cuales se fueron luego de intentar provocar por un rato
a los pescadores. Las exequias de este inolvidable valiente fueron multitudinarias.246

El 14 de noviembre numerosas organizaciones encabezadas por la LSP firmaron un


comunicado repudiando el asesinato y vinculando el mismo a los numerosos asesi­
natos que el gobierno de Estados Unidos había perpetrado históricamente desde su
invasión a nuestro país. Para que se entienda la proyección de Ángel en su Cíales na­
71 I LlK HA Y l-Sl’ACIO DI L\ LlG \ So( IAIISTA Pul R IORRIQUI.ÑA: I962-I989

tal se debe tomar nota de las agrupaciones culturales que lo firmaron: Sociedad Cía­
les Histórico, Proyecto Historiadores de Barrios del Municipio de Cíales, Sociedad
Arqueológica e Histórica Guayacán de Cíales, además del Comité Cialeño de Apoyo
a Vieques. Firmaron organizaciones nacionales, entre otros, el Partido Nacionalista
de Puerto Rico, el Partido Socialista Puertorriqueño (PSP), y el Movimiento Socia­
lista Popular (MSP) y firmaron del extranjero, entre otras, el Partido Canadiense del
Trabajo, el Movimiento de Liberación Nacional (MLN, con sede en Estados Unidos),
Comité de Defensa Popular de México y el Partido Comunista Chileno en el Exilio.
Este comunicado circuló como hoja suelta con la autoría de Juan Antonio Corretjer y
Consuelo Lee bajo el titulo “A nuestro pueblo, Puerto Rico”. Por otro lado, solamente
dos semanas y media después, a finales del mes de noviembre, Lourdes Santana Me­
lecio de la LSP, ingresó a una cárcel de Estados Unidos para extinguir una condena
de tres meses.247

El 3 de diciembre, veintidós días después del asesinato de Ángel Rodríguez Cristóbal,


se da en Sabana Seca, cerca de la estación naval, un operativo donde emboscan a un
grupo de marines, con el resultado de dos marines muertos y una decena de marines
heridos. La autoría la reclaman tres organizaciones, siendo esta la primera vez que
se conoce de un comunicado conjunto: Organización de Voluntarios por la Revolu­
ción Puertorriqueña (OVRP), las Fuerzas Armadas de Resistencia Popular (FARP) y
el EPB-Macheteros. La advertencia era clara: No se continuaría tolerando la matanza
de puertorriqueños, luchadores por su patria. La LSP produjo una declaración sobre
este comunicado y sobre la acción revolucionaria que estas organizaciones desplega­
ron.248 Es significativo que Corretjer imputara a la CIA durante las exequias de Ángel
dicho asesinato adjudicándole el propósito de “provocar una reacción impensada de
los grupos clandestinos en Puerto Rico”.249 Por otro lado, casi veinte años después y
a raíz de la muerte del viequense David Sanes, el 19 de abril de 1999, víctima de los
bombardeos de la Marina, el recuerdo de Ángel se alzó emblemático y su presencia
simbólica fue determinante en la fuerza moral que levantó la jornada, que entre 1999
y 2003, lograría el cierre del polígono de tiro de la Marina en Vieques. Esto a su vez
fue precursor del cierre de la enorme base naval Roosevelt Roads en Ceiba.

Sorpresivamente el 21 de mayo de 1979, a unos días de haberse producido la jorna­


da viequense de mayo que hemos relatado, William Guillermo Morales se fugó de
forma espectacular de una unidad especial para presos en el Hospital Bellevue, en
Nueva York, donde presumiblemente estaba recibiendo tratamiento para las heridas
sufridas en el rostro y las manos. William Guillermo había sido sentenciado a 89 años
de prisión y acusado de pertenecer a las FALN. No se sabría más nada de William
Guillermo hasta el 1983.250 La LSP fue muy consistente en retar la definición de “te­
rrorista”, y levantar una jornada de educación política a través de sus publicaciones,
prensa, reuniones y actividades, sobre los términos “lucha armada”, “clandestinidad”

i
RaymondSofü Dáviia | 72

y “prisionero de guerra”.25' Estos términos ya se habían tratado con anterioridad pero


la LSP intensificó la discusión de estos conceptos a partir de estos tres asuntos: el ase­
sinato de Ángel Rodríguez Cristóbal, el caso de William Guillermo Morales y la insis­
tencia del Gobierno de Estados Unidos de encarcelar a independentistas mediante el
uso del Gran Jurado Federal. Ángel continuó su militancia luego de su arresto por la
Marina el 19 de mayo hasta el día de su juicio e inmediato encarcelamiento, el 26 de
septiembre. El 3 de julio fungió como orador principal en un piquete convocado por
la LSP frente al Correo Federal de Estados Unidos en San Juan para conmemorar el
primer aniversario de la toma del consulado de Chile y protestar el encarcelamien­
to de Pablo Marcano y Nydia Cuevas. La asistencia fue muy reducida, ninguna otra
organización se unió a la protesta pero el piquete fue muy militante. El grado gene­
ralizado de vigilancia imperante se evidenció en un memorando sobre la actividad
en el primer volumen de la carpeta #23091 entregada a Raymond Soto Dáviia, que le
levantó la entonces División de Inteligencia de la Policía de Puerto Rico. (Ver dicho
memorando en el Apéndice II: Represión contra la LSP.)

La década del 1970 cerró para la LSP con un saldo mixto para el desarrollo de su
militancia. Había ganado muy buenos militantes pero había perdido otros, producto
de discrepancias y también de la necesidad de empleo que forzaba a la emigración.
El Comité Regional del Sur fue muy afectado con esta circunstancia. En lo político,
como puede verse por lo discutido hasta ahora, la LSP enfrentaba retos enormes y sin
duda, las repercusiones del asesinato de Ángel Rodríguez Cristóbal.
73 I LlJ( HA Y l.SPAt IO 1)1 l.\ Lk.A StX lAl.lSJA I’lJÍ KIDRKIQUI.ÑA: 1962-1989

Capítulo 3: Década del 1980


Hemos dividido la década del 1980 en dos secciones. La primera cubre los cuatro años
en que Corretjer seguió siendo su secretario general. La segunda comienza partir de la
muerte de Corretjer. Esta división responde a la centralidad e impacto de la figura de
Corretjer en la Liga Socialista Puertorriqueña y en la lucha nacional como también a
desarrollos dramáticos ocurridos el mismo año que muere Don Juan los cuales indu­
dablemente tuvieron un efecto tanto en el independentismo como en la LSP.

Primeros cuatro años: 1980-1984


La LSP circuló nuevamente el escrito “El Voto Presidencial” el primero de marzo de
1980 añadiéndole un prólogo. La fecha es emblemática pues recuerda el ataque de
los nacionalistas al Congreso de Estados Unidos en 1954. Esos días también tuvieron
otro significado para la LSP pues para el 27 de febrero, tres días antes, había regresado
de cumplir su sentencia por haber hecho desobediencia civil en Vieques, Lourdes
Santana Melecio. La razón más obvia para abordar el tema fue la sustitución del voto
presidencial por celebración de primarias en Puerto Rico de los dos partidos hegemó-
nicos de EEUU, cuyo fin seguía siendo la anexión de Puerto Rico. La actitud del inde­
pendentismo ante esta nueva movida anexionista se perfilaba igualmente débil es­
cuchándose de algunos líderes argumentos leguleyos relacionados a la Constitución
de Estados Unidos sobre la poca viabilidad de este recurso. También se escuchaba el
argumento del poco entusiasmo y escasa participación de los puertorriqueños como
justificación para desvalorizar el impacto de esta nueva práctica. La LSP argumentó
en su prólogo que: (1) históricamente, Estados Unidos está preparado para ignorar su
propia constitución y menciona como ejemplo el caso de la respuesta de Thomas Je-
fferson en relación a la anexión de Florida y (2) el propósito del gobierno de Estados
Unidos no es masificar de inmediato esta práctica sino imponerla como costumbre y
hacerla parte de lo establecido dentro del accionar político en Puerto Rico.

Las dos convocatorias de la LSP propuestas en el documento para combatir el voto


presidencial que circuló en el 1970 no se materializaron. La convocatoria hecha a los
estudiantes de un “magno congreso estudiantil” enfrentó un problema de concen­
tración de energía en dos luchas muy álgidas, contra el SMO y específicamente en
la UPR, también contra la presencia del ROTC. Las organizaciones patrióticas de
entonces que comenzaban a atraer una buena parte del estudiantado no canaliza-
Rumonp Soto Dávii \ | 74

ron esfuerzos hacia combatir el voto presidencial lo cual tampoco ayudó a que se
cuajara la propuesta. En torno a la convocatoria que se hizo al independentismo en
general de un “Congreso Independentista” tenemos varias observaciones. Primero,
la LSP no convocó específicamente a la clase obrera y no era una contradicción de
su parte. Armados con el bagaje histórico de la huelga cañera de la década del 1930,
los miembros de la LSP que habían procedido del Partido Nacionalista y estudiaron
profundamente el desarrollo de sus luchas reconocieron el problema ideológico que
todavía prevalecía en grandes sectores del pueblo trabajador y en particular dentro
de sus filas más marginales y vulnerables en las cuales la propaganda colonial-ane-
xionista surtía efectos muy significativos. También se reconocía el problema organi­
zativo en el independentismo y de identificación con intereses pequeño burgueses
que tendían a obstaculizar la construcción de proyectos unificadores en los cuales la
vanguardia del sector más progresista del pueblo trabajador pudiera configurar su
liderato. Sin embargo, se entendía en la LSP que debía ser este sector progresista el
que precisamente pudiera sentirse atraído a una convocatoria del independentismo.
Segundo, la convocatoria no se dio porque gran parte del independentismo optó por
la vía electoral, representando esto diversos puntos de tensión, tanto entre los que
competían por los votos como en contraposición ideológica con los que afirmaban la
línea de abstención electoral. Tercero, el desarrollo de tácticas noveles de la represión
sembró un clima de desasosiego que impidió que se desarrollara comunicación efec­
tiva dentro del independentismo en general aunque no impidió que se dieran gran­
des batallas. Es de notar que la LSP da una muestra de fortaleza al re circular este
documento y añadir el prólogo y es significativo que no formula propuestas. De esta
forma enfrenta esta nueva década. Década que abrió con la explosión de una potente
bomba en el Colegio de Abogados en San Juan el 7 de enero como represalia por su
postura a favor de la lucha de Vieques. Los tres individuos que fueron identificados
como responsables salieron absueltos en la Corte de Estados Unidos en San Juan.-’52

El 20 de enero de 1980 se celebró una asamblea en donde se establecieron las bases


para el funcionamiento de un nuevo comité para la lucha contra la represión y para
la defensa de los prisioneros políticos, concebida como organización amplia y unita­
ria. Aunque se constituyó inicialmente con organizaciones independentistas e inde-
pendentistas sin afiliación se proponía extenderse hasta los sectores del pueblo más
amplios e inclusive se velaría por los derechos de personas presas en cárceles dentro
y fuera de Puerto Rico. De esta manera se cerraba el ciclo del Comité Nacional Pro-Li­
bertad de los Presos Nacionalistas luego de haber cumplido la misión de excarcelar
a los cinco nacionalistas y comenzaba el Comité Unitario contra la Represión y Para
la Defensa de los Prisioneros Políticos (CUCRE)2”. La junta directiva la componían
seis organizaciones, la LSP, el Movimiento Socialista Popular, Partido Nacionalista
de Puerto Rico, la Liga Intemacionalista de los Trabajadores, el Partido Comunista
de Puerto Rico y el Partido Socialista Revolucionario. Contaba con líderes sindicales
| I.LCILX Y I.SI’At IO Dlí LA LlGA SoClAl.ISDX Pui.KIORRIQl I N \: 1962-1989

Agustín de Jesús (epd) y Federico Cintrón Fiallo, el entonces estudiante de la UPR,


Hilton Fernández y también con varios abogados. El Comité lo presidía Nelson Ca­
ñáis quien también presidió el antiguo comité. Todos los ex presos nacionalistas pa­
saron a formar parte de este esfuerzo al igual que varios miembros del anterior comi­
té. A poco tiempo de iniciarse, el CUCRE se comprometió con dar apoyo a la familia
sobreviviente de un desalojo en el sector Tocones del barrio Medianía Alta de Loíza,
donde la Policía de Puerto Rico asesinó de un escopetazo a Adolfina Villanueva el 6
de febrero de 1980 y dejó herido en ambas piernas a su esposo.254 Como se podrá apre­
ciar, la LSP no estaba de brazos cruzados a pesar de no haber originado propuestas al
re circular el documento “El Voto Presidencial” en marzo del 1980.

A principios de marzo de 1980 se hizo realidad lo que la LSP y otras organizaciones


patrióticas también advirtieron aunque la LSP fue la más insistente. Las citaciones
del Gran Jurado, que se estaban utilizando con independentistas en Estados Unidos,
se aplicaban con fuerza contra independentistas en Puerto Rico. El primer citado
fue Carlos Rosario Pantojas inicialmente junto a otras tres personas. Se buscaba in­
formación sobre el operativo de Sabana Seca.255 El caso de Rosario Pantojas fue un
tanto tortuoso. Al comienzo del caso acató algunas de las solicitudes del Gran Jurado
y luego se negó a seguir cooperando. Por otro lado, su único vínculo conocido era
con el PSP, al aparecer como funcionario en un colegio electoral en las elecciones
del 1976.256 Estuvo preso 18 meses, siendo el primer independentista en estar todo ese
periodo de tiempo en prisión por una citación de gran jurado, ya que luego de cum­
plir varios meses otro gran jurado lo citó y de nuevo se negó a cooperar. Cumplió en
la Penitenciaria Estatal de Rio Piedras y ya faltando poco para expirar el término lo
trasladaron a una prisión en Ponce, donde no tenía familia, a todas luces otro intento
de represión. Sobre este caso, la LSP editorializó que el independentista que habita­
ba al interior de Pantojas Rosario lo hizo reaccionar prontamente y por eso optó por
suspender cualquier colaboración con el Gran Jurado.257

El 4 de abril de 1980 se dio a conocer la noticia de la captura de once integrantes de


las FALN en Evanston, Illinois. Estos eran Carlos Alberto Torres, su esposa, María
Haydee Beltrán, Adolfo Matos, Dylcia Pagán, esposa de William Guillermo Morales,
Ricardo Jiménez, Carmen Valentín, Luis Rosa, Alicia Rodríguez, Ida Luz Rodríguez,
Elizám Escobar y Alfredo Méndez. (De este último se abundará más adelante.) Eli-
zám Escobar era miembro de la LSP pero se había mudado a Estados Unidos en los
últimos años.258 Todos los arrestados se declararon “combatientes por la liberación
de Puerto Rico”, “capturados por el enemigo” y “prisioneros de guerra”.259 Este hecho
movilizaría muchos de los recursos de la LSP ya que los casos se verían todos en Esta­
dos Unidos. Cónsono con su línea política de apoyo a la lucha política-militar, la LSP
destaca dos elementos: (1) Que la captura se produce por un hecho fortuito y no por
información de la inteligencia estadounidense y (2) Que la defensa se va a establecer
Raymond Soto Dávila | 76

a través de varias organizaciones a foros internacionales al amparo del derecho in­


ternacional. Para el 9 de abril Corretjer viajó a Chicago, logró entrevistarse con todos
los once arrestados, expresar la solidaridad de la LSP por lo cual todos los acusados
autorizaron a la LSP a hablar a su nombre. Sorpresivamente, el gobierno de Estados
Unidos separó el juicio de María Haydee Beltrán del resto del grupo y la trasladó de
Chicago a Nueva York donde la sometieron a maltrato y tortura. Carlos Justiniano,
entonces Secretario de Organización de la LSP, viajó a Nueva York para unirse a un
acto de solidaridad el día antes del comienzo del juicio. El 19 de mayo se celebró el
primer día de juicio realizándose frente a la Corte Federal en Hato Rey un concurri­
do piquete en su apoyo. Luego de ser declarada culpable, a María Haydee Beltrán la
trasladaron a una prisión a West Virginia, de nuevo bajo condiciones inhumanas.

Como “increíble coincidencia” se puede calificar que solamente tres semanas des­
pués de los arrestos en Evanston, el Departamento de Justicia de Estados Unidos en
Washington DC cerraba una investigación, que resultaría ser la primera, de veinte
meses, sobre el doble asesinato en el Cerro Maravilla sin producir acusaciones.’60
Los acontecimientos dejaban pasmados al pueblo pues dos meses después en oca­
sión de tomársele una deposición a Romero Barceló, el juez federal Juan Pérez Jimé­
nez impuso una ley de mordaza muy amplia al caso civil que llevaban los familiares
de los jóvenes independentistas asesinados en el Cerro Maravilla. Sin embargo fue­
ron las declaraciones en una conferencia de prensa del policía corrupto, Julio An-
drades en septiembre de 1980 lo que nuevamente trajo noticias relevantes al pueblo
y provocaría que se reabrieran las investigaciones tanto en el Departamento de Jus­
ticia de Puerto Rico como en el de Estados Unidos. Estas investigaciones durarían
i varios meses pero ambas se cerraron nuevamente a principios del 1981 sin producir
acusaciones.

La LSP continuó dedicando muchos esfuerzos en mantener la comunicación con los


prisioneros de guerra. En junio y antes de que hubieran trasladado a María Haydee
a la otra cárcel, Consuelo Lee y Brunilda García visitaron y animaron con canciones
a los diez prisioneros restantes que quedaban en Chicago. Consuelo Lee participó
en una entrevista radial como parte de la campaña de apoyo. Luego viajó a Nueva
York e intentó entrevistarse con María Haydee pero no recibió permiso indicándose­
le que el juez Knapp, había autorizado visitas a la familia inmediata consanguínea,
a si mismo, y a miembros de las fuerzas armadas de Israel. Todo esto es tan extraño
que solamente podemos especular que se trató de una represalia por el interés in­
ternacional que el caso había despertado. El día del juicio hubo una protesta impre­
sionante en Ciudad Juárez convocada por los Comités de Defensa Popular frente a
la embajada estadounidense. Igualmente hubo manifestaciones en el Canadá y en
muchas ciudades de concentración hispana en Estados Unidos. En esos momentos
varias organizaciones se movilizaban para presentar un documento preparado por
77 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

los prisioneros de guerra ante varias instancias de las Naciones Unidas y presentar el
caso de los compañeros en la próxima sesión a celebrarse ese agosto ante el Comité
de Descolonización de la ONU/61

En agosto de 1980 la LSP acudió a las Naciones Unidas y en vísperas de las presen­
taciones se llevó a cabo una velada en la cual Juan Antonio Corretjer estrechó la­
zos de solidaridad con organizaciones de luchadores a favor de la independencia de
Quebec, algo que rendiría frutos para la lucha de Vieques a principios de 1981, como
veremos más adelante. Esa noche se dirigieron a los presentes además de Corretjer,
el entonces recién liberado héroe nacionalista Oscar Collazo. Por los canadienses de
Quebec se dirigieron Clara Tose y Gerald Larose. Este último era presidente del Con­
sejo de la Central de Montreal de la Confederación de Sindicatos Nacionales. Fue
sumamente acertado el paralelismo que esbozó Larose entre la lucha de Quebec por
liberarse del yugo de Canadá y la lucha de Puerto Rico por liberarse de Estados Uni­
dos. Los franceses que poblaron Quebec fueron sojuzgados por la fuerza por los in­
gleses y desde entonces la metrópoli canadiense con el apoyo británico ha aplastado
con saña los levantamientos de los “Quebecuas”, quienes continúan hablando fran­
cés como lengua materna. A las palabras de Larose no hay mucho que añadir pues
la historia es familiar a la luz de la nuestra: “El curso de esta historia no ha sido otra
que una de hostigamientos, explotación y de humillación para la nación quebecuá
que se vio relegada al estado de mano de obra barata para los intereses capitalistas
“canadienses” y los imperialistas americanos”.262 Ese año participaron con ponencias
a favor de Puerto Rico la Comisión mexicana de la MLN por voz de Ricardo Romero
y la República de Nueva Afrika por voz de Ahmed Obafemi.26’ Estas organizaciones
eran sumamente progresistas ya que reclamaban sus causas no dentro de mejoras
en el seno federativo de los Estados Unidos sino el derecho a establecer sus propias
naciones en territorios que dejarían de ser parte de Estados Unidos. En Puerto Rico
los medios y llamados analistas invariablemente ignoraban el apoyo de estos grupos.

El año 1980 no concluiría para la LSP sin otro golpe represivo. El segundo citado del
Gran Jurado en Puerto Rico lo fue Carlos Noya, miembro del Comité Central de la
LSP, quien había terminado estudios universitarios y se destacaba por ser lector voraz
e intelectual.264 Carlos Noya junto a Juan Antonio Corretjer fueron las últimos en vi­
sitar a Ángel Rodríguez Cristóbal, el día antes de su muerte.265 Para el arresto de Noya,
ya Rosario Pantojas estaba preso e igual que en su caso, este Gran Jurado también
investigaba el operativo de Sabana Seca. La LSP editorializó extensamente a favor de
ambos, consistente con su trayectoria de defender a los luchadores independentistas
fueran o no de la LSP.266 Noya fue citado a mediados de octubre, lo “excusan” con algún
tecnicismo, y lo citan nuevamente el 30 de octubre. Esta fecha no pasa desapercibido
en el editorial, dada la significación de la misma para los patriotas independentistas.
Al no colaborar lo envían a presidio al MCC de Nueva York. Poco después, la LSP,
Raymond Soto Dávila | 78

representada por Corretjer, Lourdes Santana y Eduardo Escalona, en una concurri­


da rueda de prensa, anuncian una campaña nacional e internacional para repatriara
Noya contando con apoyo del Comité Puerto Rico-Cañada, y de grupos solidarios de
puertorriqueños y chicanos en diversas ciudades de Estados Unidos hasta la capital
de México. Había preocupación por la seguridad personal de Noya dado el asesina­
to de Rodríguez Cristóbal sin haberse cumplido el año completo del mismo.267 Noya
cumplió todo el periodo carcelario en el exilio pero su vida fue respetada.

Puerto Rico enfrentó en noviembre de 1980 un proceso eleccionario que fue memo­
rable por lo escandaloso y descarado.268 A las 2:30 AM de la madrugada del 5 de no­
viembre, Romero Barceló se declaró ganador sin que la Comisión Estatal de Eleccio­
nes (CEE) lo hubiese proclamado ganador. Rafael Hernández Colón, candidato del
PPD, no aceptó la derrota, calificó lo sucedido como “un golpe de estado” y llamó a
defender las papeletas ante un nutrido grupo de seguidores que estaban visiblemen­
te indignados. A las 8:00 PM de la noche anterior y luego de varias horas de trabajo,
la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) anunció una falla en las computadoras, algo
que casi nadie creyó fuera accidental ya en ese momento iba al frente en el comeo
Hernández Colón. A esto seguirían varias semanas de recuento en donde los insultos
serían la orden del día. Finalmente se proclamó ganador a Romero Barceló por un
margen de apenas tres mil votos. El PPD copó las dos cámaras legislativas lo cual
permitiría durante ese cuatrienio que el Senado de Puerto Rico llevara a cabo una
investigación que finalmente destaparía mucho de lo sucedido en el Cerro Maravilla
y revelaría otros ángulos tenebrosos relacionados a la Policía de Puerto Rico. Volve­
remos sobre esto.

A inicios del 1981 la LSP da a conocer su análisis sobre las elecciones de 1980 en un
documento extenso y muy significativo pues es uno de los últimos documentos de la
LSP en vida de Corretjer con respecto a unos comicios electorales.269 Los elementos
principales que destacó fueron los siguientes: Primero, desde 1976, la “Trilateral” ha
venido organizando las fuerzas políticas en Puerto Rico que convergen en las elec­
ciones de 198o.270 Segundo, Ronald Reagan y el Partido Republicano habían ganado
las elecciones en Estados Unidos y es probable que no tan sólo simpatizaban con la
permanencia de Carlos Romero Barceló en la gobernación y el robo de las elecciones
sino que lo verían como más idóneo para empujar la estadidad la cual en aquel mo­
mento podría asegurar a Estados Unidos la utilización de Puerto Rico como enclave
de refinerías petroleras e inclusive como productor de petróleo, si se encontraba el
petróleo. Tercero, el PPD había utilizado la carta del puertorriqueñismo, lo cual his­
tóricamente nunca le fallaba. Cuarto, el efecto subjetivo de las organizaciones clan­
destinas impregnaba en el pueblo la idea de la lucha armada manifestada o dirigida
contra el efecto más lesivo de Estados Unidos contra Puerto Rico, su aparato militar.
Este accionamiento de las organizaciones clandestinas en ese entonces fue suficien-
79 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

teniente convincente para que los precandidatos presidenciales de Estados Unidos


de ambos partidos no se presentaran a avalar las llamadas primarias que se celebra­
ron en Puerto Rico.

En el análisis de la situación política de Puerto Rico luego de las elecciones del 1980,
la LSP argumentaba que a pesar de la efectividad que las acciones clandestinas ha­
bían tenido en esos últimos años, hay una “semblanza de prematurez” en el incipien­
te desarrollo de la lucha armada.271 Toda lucha debe ganar pueblo, añadir adeptos,
hasta que logre madurar todos los factores decisivos para el triunfo. Se planteaba que
en Puerto Rico, tanto el soborno masivo a la población indigente a través de cupones,
como el soborno a estudiantes a través de las becas, soborno que ni siquiera el estu­
diantado había detectado, hacía mucho más difícil ese factor subjetivo necesario para
adelantar el camino. Se vislumbraba un recrudecimiento de la crisis económica y el
Presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan había anunciado recortes. La necesi­
dad del imperio en mantener pacificada la población hacía dudar que esos recortes
se aplicasen en todo su vigor a Puerto Rico. Se concluye que las luchas más prome­
tedoras en ese momento para elevar la conciencia del pueblo y suscitar el elemento
emocional eran la de expulsar la Marina de Vieques y la lucha anti minera, mientras
que todo voto por candidatos presidenciales o por pre candidatos de primarias de
Estados Unidos debía repudiarse tajantemente. El accionamiento de las organizacio­
nes clandestinas en Puerto Rico continuaba siendo un elemento importante para la
LSP. Este análisis apuntaba a que la progresiva intensificación de los operativos que
realizaban las diversas organizaciones político-militares de ese entonces debían ver­
se como un proyecto de “guerra prolongada”. Esto conllevaba un proceso paulatino
de acercarse a la población y como se mencionara anteriormente, recabar su apoyo,
simpatía y finalmente lograr su adhesión.

Corretjer realizó un análisis adicional en su columna en el Nuevo Día, a una semana


de los comicios electorales quizás más enfocado en el aspecto de alertar al públi­
co más amplio y de menor conciencia política.272 La primera advertencia es que el
alboroto de las elecciones había servido para disimular ante el pueblo el acuartela­
miento en el Fuerte Alien en Juana Díaz de 800 infantes de marina bajo el Almirante
Knoizen. Esto a su vez serviría como guarnición a los planes de explotación minera.
La segunda advertencia es que esta presencia también responde al problema militar
que creó Estados Unidos en el pueblo de Juana Díaz al mantener en un campo de
concentración a un gran número de haitianos que emigraron sin documentos. Corre­
tjer tenía pleno conocimiento del repudio de la mayoría del pueblo puertorriqueño
al tratamiento de los haitianos y su advertencia va en la dirección de que es un error
del gobierno colonial argumentar en las cortes de Estados Unidos sobre dicho campo
de concentración y propone que la respuesta está en la calle. La tercera advertencia
es al gobierno de Estados Unidos y su uso del Gran Jurado como afrenta a la dignidad
Raymond Soto Dávil\ | 8o

de los luchadores independentistas. El concepto de dignidad del imperialismo les


permite encarcelar personas sin una acusación documentada y privarlos de un abo­
gado. Esc no es el concepto de la dignidad de los puertorriqueños y concluye de ahí
que Carlos Noya y Rosario Pantojas hayan elegido la no colaboración pues el intento
de “transplante cultural” no funciona.

El 12 de enero de 1981 el Ejército Popular Boricua (Macheteros) llevó a cabo un ope­


rativo espectacular en el cual destruyeron nueve aviones de la Guardia Nacional de
Estados Unidos en Puerto Rico. Este operativo fue una de las razones por lo cual en el
documento de la LSP que hemos detallado en los párrafos anteriores se elaboraron
planteamientos sobre estas organizaciones y la escalada que representaban para la
lucha por la independencia. Veinticuatro horas después del operativo de la Base Mu-
ñiz, la LSP había preparado su posición en otro documento, específicamente sobre
dicho operativo.27’ En la misma: (1) enumeraba los cinco operativos que entendía de
mayor importancia y las organizaciones clandestinas que realizaban esta campaña
de lucha armada, (2) hizo hincapié en el señalamiento de los comunicados de las or­
ganizaciones clandestinas sobre su lucha por dos objetivos ambos de carácter milita­
rista: Sacar la Marina de Guerra de Estados Unidos de Vieques y derrotar el SMO, (3)
argumentaba la falsedad de la acusación de “terroristas” precisamente por el carácter
político militar de los operativos y los objetivos seleccionados, golpeando intereses
militares y no intentando “aterrorizar” a la sociedad puertorriqueña. Por otro lado, a
pesar de que la LSP era la organización política que más consistentemente y muchas
veces de forma solitaria, apoyaba la lucha clandestina, ya para 1981 hay otro sector
que plantea no solamente apoyo sino crítica a algunas organizaciones patrióticas
cuyas posturas son debilitantes para el accionamiento clandestino. La revista “Pen­
samiento Crítico” editorializó en torno al operativo de la Base Muñiz clasificándolo
como “un certero accionar de propaganda armada”.274 En un artículo relacionado,
elabora un análisis detallado del accionar clandestino el cual no era completamente
acorde al de la LSP pero probablemente era más cercano al compararse a las de otras
organizaciones independentistas de aquel entonces.275

En enero de 1981 son acusados de robo a banco tres independentistas: Norberto Cin­
tren Fiallo, Adalfredo Santos Mercado y Jorge Albizu Orta.2'6 Tanto el arresto que
equivalió a un secuestro como el manejo subsiguiente del caso y la intromisión del
FBI apuntaba a un caso fabricado con intención de persecución. El CUCRE asumió
la defensa de todos. Norberto Cintrón Fiallo era un reconocido líder sindical, hijo de
madre dominicana, una reconocida literata y padre puertorriqueño, quien era nacio­
nalista. Había militado en varias organizaciones independentistas en Puerto Rico. Su
trayectoria sindical era muy larga. Su hermano, Federico Cintrón Fiallo, también se
destacaba como líder sindical y militaba entonces en el CUCRE. Santos Mercado era
un trabajador que en ese momento era miembro del Centro Cultural Andrés Figue-
81 | Luí ha 'i i si-,\( lo ni i \ Luía Soí iai isi \ l’i i riorriqi i ña: 1962-1989

roa Cordero en Ponce. Albizu Orta era dominicano, trabajador de construcción y se


identificaba con causas progresistas. Este caso se tornaría muy álgido pero finalmente
solamente sentenciarían a Albizu Orta. El CUCRE asumió continuar su apoyo ya que
entendía el caso era político.277 Este caso es muy importante porque en mayo de ese
mismo año, luego de su absolución en enero, el Gran Jurado acusaría y encarcelaría a
Norberto Cintrón Fiallo, quien se resistió a colaborar. Por otro lado fue en ese mismo
mes de mayo que las autoridades en Estados Unidos arrestaron y encarcelaron a Os­
car López Rivera, acusado de conspiración sediciosa.278 Al momento que escribimos
esto para la segunda parte del 2014, Oscar López ha estado preso treinta y tres años.

A pesar de los escollos que enfrentaban las acciones clandestinas para que pudieran
ganar pueblo y las cuales la LSP había analizado, se daban procesos muy interesantes
en la base del pueblo que quizás no han sido estudiados a profundidad. Elizam Esco­
bar, entonces preso en Estados Unidos, da a conocer una carta que recibió de Carlos
I. Torres Iriarte, preso en Puerto Rico, líder legendario de los “Netas”, organizador y
destacado defensor de los derechos de los confinados. (Estos no eran sus verdaderos
apellidos pero todos continuaron llamándole de esta forma.) Para ese entonces, los
Netas llevaban seis años organizados y Carlos se había convertido en una especie de
ídolo para los jovencitos de las capas más pobres del país y su gesto con los dedos
para simbolizar la organización era muy popular. En esta misiva, Carlos “La Sombra"
como era popularmente conocido, le expresa a Elizam la admiración por los actos
revolucionarios y la lucha por la liberación de Puerto Rico.279 Torres Iriarte indica que
“si me expreso así es porque quiero inculparme junto a ustedes”. No hay duda de que
estaba consciente del riesgo que se corría. Torres Iriarte fue asesinado el 30 de marzo
de 1981 de un tiro en la cabeza en el patio de la Penitenciaria Estatal de Río Piedras.280
Había escrito la carta el 3 de octubre del año anterior. Elizam envía su misiva el 10 de
abril a la LSP, con copia de la carta de Carlos “La Sombra” y expresa su pesar por no
haberla contestado. Otra carta que enviara Carlos en el 1979 a las militantes por la
desobediencia civil en Vieques a la cárcel de Alderson en Virginia, sugiere también
la identificación con las causas patrióticas.281 Torres Iriarte había comenzado un pro­
ceso de profundización en su concienciación política años antes al escuchar a Carlos
Gallizá de visita al presidio cuando el liderato y militancia del PIP estaba preso para
197o.282 Sin embargo, ya había adquirido algunas nociones durante la década del 1960
al entrar en contacto con nacionalistas presos en la cárcel La Princesa. La emboscada
del grupo rival que le causó la muerte sin ninguna intervención efectiva de las auto­
ridades de la cárcel dejó muchas dudas sobre esta lamentable muerte. Carlos recibió
varias heridas con arma blanca y un tiro en la cabeza. Su asesino también murió
asesinado unos seis meses después.28*

En febrero de 1981, Linda Marsha Justiniano de la LSP, viajó hasta Canadá para ade­
lantar la causa de Vieques. A través del Comité Quebec-Puerto Rico, presidido por
R.mmondSoioDávil\ | 82

la Sra. Amelia Philpot, se logró una conferencia de prensa muy exitosa ya que atrajo
a la prensa de Montreal. Ambas deponentes lograron transmitir el asedio de Vie-
ques y denunciar la presencia de una escuadra naval canadiense la cual incluía, entre
otras naves, siete “destroyers”. La Sra. Philpot exigió el retiro de la misma y que se
extendieran excusas al pueblo de Puerto Rico. La conferencia fue tan efectiva que
el Almirantazgo canadiense respondió al próximo día explicando que acudían a di­
chas prácticas “por invitación” de Estados Unidos y mencionando que Puerto Rico
era un “protectorado” de Estados Unidos. Quedaba de manifiesto la complicidad en
las maniobras de guerra contra Vieques y el engaño político de llamar a Puerto Rico
“protectorado”, esto último debe haber sido un baño de agua fría para muchos que
creyeron la patraña del reconocimiento al Estado Libre Asociado.284

Durante los años que siguen la LSP intentó hacer más trabajo político desde comités
unitarios, algo que resultaría muy positivo en el caso del trabajo anti minero con el
establecimiento del Taller de Arte y Cultura, el cual ayuda a fundar junto a Alexis
Massol y Tinti Deyá, en Adjuntas, para 1980. (Ver Entrevista a Noemilda Vélez Más
en el Apéndice IV: Entrevistas.) Sin embargo, otros comités no correrían igual suer­
te. En particular, el Comité Nacional pro Defensa de Vieques arrastraba conflictos
internos y de relaciones con el Comité de la Cruzada de Vieques que fueron minan­
do su efectividad desde el 1980 en adelante. Hubo intentos re organizativos que no
lograron subsanar dicha situación.285 El conflicto principal giraba alrededor de la
consigna y la amplitud deseada. La consigna antiimperialista se percibía por algu­
nos, como restrictiva y poco atrayente para ampliar la base de apoyo. La LSP tenía
como posición que éste era el concepto correcto y que esto era comprensible para
el pueblo. A esto siguieron algunos encuentros en donde para todo propósito se
pretendía desmantelar el comité y crear otro. La estructura que quedó no alzó vuelo.
286 Sin embargo, el Comité había hecho mucho trabajo de divulgación a través de
su boletín “Bieque” y aportado militancia a la desobediencia civil tanto por orga­
nizaciones como la LSP como por personas sin afiliación.287 Por otro lado la lucha
en Vieques continuó con varias organizaciones y viequenses que circularon por un
tiempo un boletín llamado “Zafarrancho”.

El CUCRE también experimentó desacuerdos a su interior aunque no alcanzó la di­


mensión de los experimentados por el Comité Nacional de Apoyo a Vieques. Para
algunas organizaciones representadas en el CUCRE, la línea a seguir era más bien
apaciguadora como por ejemplo, no quemar banderas en las manifestaciones y uti­
lizar argumentos al ser visitados por el FBI que rompían con la línea de no hablar
nada. Uno de los asuntos que creara mayor desacuerdo era el concepto de “prisione­
ro de guerra” al cual se adherían todos los arrestados del 4 de abril de 1980 en Estados
Unidos.288 Debido a que la necesidad de presencia política del caso era urgente la LSP
y personas sin filiación establecieron el Comité de Defensa de Prisioneros de Guerra
83 | Lucha y i si-ac io di: i,\ Liga Soc iai is i a I’uí riorriqui ña: 1962-1989

el cual encabezó Consuelo Lee. La LSP continuó trabajando en ambos comités. La


LSP utilizó sus publicaciones para continuar educando al pueblo sobre la distinción
entre “prisionero político” y “prisionero de guerra”, uno de los recursos fue publicar
artículos de las organizaciones clandestinas sobre este tema al igual que sobre otros
temas. Estas organizaciones también circulaban sus propios boletines y la LSP re­
producía algunos de sus artículos. Ese fue el caso de un artículo de los Comandos
Revolucionarios del Pueblo con relación a los once compañeros de las FALN que
reclamaban ser tratados como prisioneros de guerra.289 Se enfatizaba en los funda­
mentos: (1) histórico, dada la ocupación militar sufrida por Puerto Rico desde 1898,
(2) del reconocimiento del estado de guerra por el propio imperio, (3) de derecho
internacional, el cual confiere a las colonias el “derecho” a utilizar los medios a su
alcance para liberarse del yugo colonial. Este artículo criticó fuertemente a dos or­
ganizaciones patrióticas por condicionar su apoyo a estos compañeros solamente
si aceptaban la definición de preso político. Nos parece obvio que un prisionero de
guerra es un preso político pero incluye dimensiones que ya expusimos que no es­
tán presentes en un preso político. Un preso político puede optar por luchar su caso
dentro de la legalidad vigente en ese momento aunque siempre podría acudir a fo­
ros internacionales pero el prisionero de guerra fundamentalmente necesita que su
caso se vea en los tribunales especializados donde haya participación de organismos
competentes internacionales.

Los últimos meses del 1981 fueron un presagio para lo que ocurriría en 1982 en la co­
munidad de rescatadores conocida como Villa Sin Miedo. El primero de noviembre
de 1981 la prensa da a conocer que el Juez Ángel Rossy del Tribunal Superior de Ca­
rolina había desestimado el último recurso de los residentes dando luz verde de esta
forma al desalojo.290 Esta decisión no provocó el desalojo de inmediato pero era obvio
como se movían las fichas en contra de esta comunidad que ya contaba con un año
de inaugurada y algunas ciento veinticinco estructuras muy humildes. Los terrenos
eran de la Autoridad de Tierras ubicados en Río Grande, por tanto en teoría eran del
pueblo de Puerto Rico. Durante los últimos meses del 1981, el gobierno de los Estados
Unidos, comenzando por el propio Presidente de EE.UU, Ronald Reagan, aceptaba
que la economía de Estados Unidos había entrado en recesión.29' El Presidente de Es­
tados Unidos dispuso recortes sustanciales en muchas áreas. La prensa planteaba in­
terrogantes sobre la marcha de la economía estadounidense a la luz de las altas tasas
de interés y la fuerte restricción del gasto gubernamental. Los economistas estaban
divididos sobre la gravedad y el tiempo que podría durar la recesión. El desempleo
aumentó dramáticamente. Las transferencias federales, que habían ayudado a paliar
la crisis de la década del 1970, disminuyeron considerablemente en lo que respecta
a programas dirigidos a la juventud, destacándose el famoso “Plan Ceta”(Compre-
hensive Employment and Training Act, 1973) con fondos federales administrado por
los municipios y mermaban los fondos de asistencia nutricional, salud, deportes y

1
Raymonp Soto Dáviia | 84

recreación. En contraste con lo anterior, aumentaba significativamente las transfe­


rencias para gasto militar y el fortalecimiento del complejo militar-industrial.292 Sin
embargo, no dejaban de haber señales de la vigorosa economía subterránea.29’ Igual­
mente se afianzaban las condiciones para el predominio del capital financiero sobre
el capital productivo/industrial como eje de la actividad económica interna.294

En Puerto Rico, dos acontecimientos del sector público ocurridos en la segunda mi-
tad del 1981, ambos de carácter económico, un paro estudiantil en la Universidad
de Puerto Rico y una huelga en la Autoridad de Energía Eléctrica, harían patente
la crisis del gobierno. La respuesta brutal del imperio se comenzaría a ver en la cita­
ción del Gran Jurado al abogado sindical independentista, Jorge Farinacci (epd) así
como la orden a dos uniones a presentar todos sus documentos.295 Se hizo evidente
el progresivo endeudamiento bajo la premisa de atraer capital extranjero, amarrado
a las políticas de Washington y adoptando esta política sin una relación directa con
nuestros recursos y necesidades reales. Por otro lado, se vuelve a aplicar la solución
ya conocida de cargar al pueblo con los costos de esta política. La LSP proveyó en sus
publicaciones artículos orientadores sobre la crisis económica y sus manifestaciones
tanto en Puerto Rico como en las luchas en Centro América, el Medio Oriente y otras
regiones. Se delineaban las contradicciones que el gran capital y sus transnaciona­
les enfrentaban con los procesos de producción dispersos en diferentes países con
grados muy disímiles en el desarrollo de sus fuerzas productivas. Se advirtió que la
penetración del gran capital a países de menor desarrollo en particular en la manu­
factura hacía imposible todo proyecto autónomo capitalista en la periferia.296 En uno
de los artículos escritos por Héctor Olivieri, de la LSP, se exhortó a imprimir en las
luchas desatadas como producto de las contradicciones, un carácter propio de clase
y no conceder a las reivindicaciones económicas inmediatas un papel central como
fin en sí mismo.297 Esto se logra imprimiendo una ideología política que permita que
las masas desarrollen sus propios objetivos y métodos de lucha. Ya en este artículo la
LSP previene de la idea de canalizar la lucha a través de estructuras coloniales, como
el Senado de Puerto Rico, donde no sólo va a ser derrotada sino que se crean fal­
sas ilusiones en el pueblo. Esta situación de confusión dentro de la misma izquierda
planteaba la necesidad de desarrollar y fortalecer el polo revolucionario ya iniciado
por las organizaciones clandestinas. Abogaba porque se considerara la independen­
cia y el socialismo como un solo proyecto y sostuvo que la economía industrializada
y su componente proletario en Puerto Rico proveían las condiciones necesarias. Esta
posición es importante para entender la perspectiva de la LSP sobre los dos procesos
que se dieron en el paro estudiantil de la UPR y en la huelga de la UT1ER. Estos dos
procesos fracasaron en sus reclamos.298

El paro estudiantil del 1981 al cual también se le ha llamado huelga estudiantil co­
menzó desde inicios del segundo semestre del 1981 a raíz de un aumento en matrícula
85 I Lucha y espacio de u\ Liga Sociaiisia Puertorriqueña: 1962-1989

anunciado para todos los estudiantes. Los estudiantes reclamaron que se revocara el
aumento o se redujera sustancialmente y que se implantara la matricula ajustada a
los ingresos.’99 Debido a la crisis económica y a los desmanes y corrupción guber­
namental del gobierno de Romero Barceló, los reclamos del estudiantado lograron
captar la simpatía del pueblo y de los diferentes componentes de la UPR. El líder in­
discutible de esa huelga lo fue Roberto Alejandro de la Unión de Juventudes Socialis­
tas, (UJS) vinculado al MSP. Entre las organizaciones estudiantiles que se insertaron
por primera vez de forma obvia en los conflictos de la UPR estaban organizaciones
religiosas. Como en tantos otros paros estudiantiles, hubo decenas de suspensiones
y palos a granel de parte de la Guardia Universitaria. El conflicto se inició desde el 3
de septiembre y ya para el 30 de septiembre se decretaba el tercer cierre administra­
tivo con amenazas de parte de las autoridades universitarias de un cierre definitivo
por el resto del semestre.500 La fuerza de choque entró dos veces a la universidad a
desalojar a los estudiantes lo cual repercutió a favor de la acción estudiantil de que
no se dieran clases. Sin embargo, la represión que se desató contra los estudiantes
al intentar celebrar una asamblea el 25 de noviembre fue el punto culminante. El
Tribunal Supremo decidió a favor de que se realizara la asamblea que había sido
interrumpida a palo limpio y el estudiantado ratificó el paro estudiantil. Antes de
cerrar ese semestre la represión sobre los estudiantes se perfilaba descomunal con
61 estudiantes suspendidos, once dirigentes estudiantiles bajo interdicto, 23 mocio­
nes de desacato a estudiantes en procesos de corte, dos líderes de trabajadores sus­
pendidos y cuatro escuelas graduadas amenazadas de cierre. Para colmo las fotos
de los apaleados en la prensa como fue el caso del joven Heriberto Martínez no
dejaba dudas del profundo desprecio del gobierno de Romero Barceló hacia el sec­
tor estudiantil.501 Desprecio que tampoco disimularía hacia otros sectores como los
rescatadores de terrenos.

Los Cuadros Estudiantiles de la LSP produjeron un documento en el cual explican


su participación y su análisis sobre esta huelga estudiantil y entran brevemente en la
huelga de la UTIER.502 En síntesis expresan lo siguiente y aclaran que habían hecho
planteamientos en reuniones de estudiantes sobre estos aspectos: (1) El estudiantado
respaldó el voto de huelga dado al Consejo General de Estudiantes con espíritu de
lucha y no los dejó solos como entendían hizo la UTIER a su matrícula luego de
aprobar el voto de huelga. (2) Desde sus inicios la huelga se limitó a los reclamos
economicistas y no elevó la conciencia de clase en el estudiantado, algo que inclusive
se reflejaba en las consignas, se mantuvo a la defensiva sin tomar la ofensiva. (3) El 25
de noviembre las fuerzas represivas se combinaron en un asalto brutal que los estu­
diantes no pudieron responder porque ni su tratamiento teórico ni el práctico estaba
a la par con la gesta del once de marzo del 1971. (4) Mientras los estudiantes eran
apaleados y gaseados por la Fuerza de Choque, el FBI se aparecía en las casas de di­
rigentes independentistas del MSP-PSR y lo atribuyen a que esas dos organizaciones
Raymond Soto Dáviu | 86

estaban fusionadas y vinculadas a la UJS, organización a la cual pertenecía Roberto


Alejandro. Se concluía que esto era señal inequívoca del papel del FBI como gestor
de la embestida de la Policía contra la asamblea estudiantil ese 25 de noviembre. (4)
Lo acontecido el 25 de noviembre logró suscitar gran simpatía hacia el estudiantado
pero el apoyo de las organizaciones independentistas no se tradujo en acciones con­
cretas debido a sus posiciones reformistas y electoreras. (5) Las organizaciones clan­
destinas no tomaron parte debido a las constantes críticas que recibían de esos mis­
mos dirigentes pero los Macheteros sí atacaron la planta de la AEE que sirve al sector
de El Condado y se concluye que esto evitó que el gobierno recurriera al asesinato.

El papel histórico del FBI no tomaba de sorpresa a la LSP pero probablemente resul­
tó inesperado y sorpresivo a un estudiantado despolitizado. Consciente del daño físi­
co que los estudiantes estaban enfrentando casi desde el mismo inicio de la huelga,la
LSP en una de sus publicaciones reprodujo de forma gráfica unas medidas elemen­
tales de autodefensa del boletín “El Martillo”, órgano de la organización clandestina
los Comités Obreros Revolucionarios (COR).,O} Por otro lado, es importante señalar
que aunque los Cuadros Estudiantiles de la LSP tenían visiones encontradas con el
liderato de Roberto Alejandro, mantuvieron bien claro quién era el enemigo, algo
muy presente en la trayectoria de Corretjer y la LSP, por lo cual arremeten contra la
acción del FBI declarando que el FBI fue a tocar con sus “manos sucias” a esas puer­
tas de esos dirigentes, caracterizando a los del FBI como “pandilla de policías extran­
jeros”. Para los Cuadros Estudiantiles, el polo de orientación en las luchas se puede
apreciar en las antologías ya mencionadas, producida una por los propios Cuadros
Estudiantiles en el 1978 y la otra por Carlos Noya Murati en el 1980. La integración de
todos los conceptos alrededor de estas luchas las proveyó de forma más condensad»
la entrevista a Corretjer que realizara la revista Pensamiento Crítico en el 1981 y la
cual detallaremos en el próximo párrafo. La interpretación de la coyuntura específica
que la crisis socio económica planteaba en ese momento se ilustra en el artículo que
ya hemos mencionado de Héctor Olivieri. Por último, la crisis de Polonia en el 1981
con el rol del sindicato “Solidaridad” retando un gobierno comunista fue sin duda un
acontecimiento desmoralizante para los sectores progresistas y estudiantiles. Luego
se sabría que la crisis de Polonia estaba completamente penetrada por el imperia­
lismo y sus agencias reflejando esto un paralelo extraordinario con la ofensiva que
el gobierno de Estados Unidos desplegó contra la huelga estudiantil en Puerto Rica
Otro aspecto paralelo es la incursión de grupos religiosos de forma prominente en
ambos acontecimientos. Sin embargo en la UPR, estos sectores estudiantiles religio­
sos se comportaron de forma más progresista aunque todavía distantes de lo que re­
quería el momento. Volveremos sobre el caso de Polonia más adelante por su notable
influencia en las posiciones de la LSP en los años subsiguientes y en particular en las
ponencias presentadas en la ONU entre 1982 a 1984.
87 I LüCIU Y ESPACIO DE LA LlGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA: I962-I989

El 1981 cierra con retos mayores en el aspecto de la defensa de la LSP a las organiza­
ciones clandestinas, tanto por el arresto de Oscar López Rivera como por el rol que
asumió Freddie Méndez, uno de los arrestados del 4 de abril de 1980, quien se con­
virtió en delator contra los demás acusados. Es esta última circunstancia el primer
asunto que trata Juan Antonio Corretjer en una extensa entrevista que le realizara la
revista Pensamiento Crítico para finales del 1981.,<M En ella Corretjer discute una serie
de asuntos sobre la lucha independentista y socialista que serán el eje de gran parte
de las actividades que desarrollará la LSP hasta su disolución. Estos temas fueron (1)
el caso de Freddie Méndez, (2) el rol histórico del “autonomismo”, (3) la participación
de la LSP en las vistas del Comité de Descolonización de la ONU, (4) la unidad en
el independentismo, (5) el rol de la lucha armada y los grupos clandestinos y (6) las
relaciones con la izquierda “blanca” de Estados Unidos. Corretjer había analizado
en otros escritos recientes el caso de Freddie Méndez, a quien los federales even­
tualmente desaparecieron con una nueva identidad luego de obtener una supuesta
confesión que resultaba muy perjudicial para sus compañeros.,05 Méndez había des­
aparecido por tres meses de la última cárcel en que estuvo y reapareció en el juicio
de Oscar López para inculparlo. Allí mismo aceptó que existía la oferta sobre cambio
de identidad. Corretjer planteó que la deformación de este individuo se logró por
procesos químicos y señaló la correspondencia del caso de Freddie Méndez con la
política de Ronald Reagan y las aseveraciones en la prensa de funcionarios del go­
bierno colonial. Reagan había sustituido la retórica de Cárter de derechos humanos
por la de la lucha “antiterrorista”, siendo terrorista todo lo que se le opusiera a los
intereses de Estados Unidos. Corretjer hizo hincapié en los recursos utilizados por
el imperialismo para lograr esta transformación y se mantuvo firme en que Freddie
Méndez no era el enemigo a combatir sino todos aquellos, desde el presidente de
Estados Unidos, sus agencias represivas hasta los médicos y psiquiatras, que se pres­
taron a acorralar a un puertorriqueño de veintisiete años y condenarlo a un cambio
de identidad para toda la vida, alejándolo de todo lo conocido por él y convirtiéndolo
en un ser sin identidad.

La entrevista de Pensamiento Crítico ilustró varios puntos en los que la LSP no ad­
mitiría medias aguas. Corretjer rechazó de plano cualquier alianza con autonomis­
tas y repitió que de ello sólo se podía esperar la traición y un nuevo triunfo para el
imperialismo. Igualmente rechazó de plano los intentos unitarios sin dilucidar las
diferencias que son el nudo que precisamente debe enfrentarse tanto en la lucha
ideológica como en la lucha armada y finalmente se resolverían a favor de la causa?06
Expuso que la lucha político-militar es indicativa de la indisoluble relación entre am­
bos planos y que es a través del trabajo político que se hace viable la acción armada
clandestina que a su vez va ganando adeptos dentro del fragor revolucionario hasta
fortalecerse lo suficiente para diluir lo político dentro de su esfera de acción y no lo
contrario. Es un proceso y no una fórmula donde se adjudica un rol a una y la otra de
Raymond Soto Dávila | 88

forma estática. Se necesita una cara pública, una organización, que aunque de forma
riesgosa, pueda dar continuidad al mensaje de estas acciones clandestinas y ese rol
es el que la LSP ha tomado sobre sus hombros. Este rol ya Corretjer y la LSP lo había
anunciado con anterioridad, lo que creemos fue nuevo, al menos públicamente, es
su aseveración en la entrevista de que la LSP está preparada para disolverse en otra
organización si se entienden los puntos que ha elaborado sobre la lucha armada y
las organizaciones clandestinas. En torno a la alianza con los grupos de izquierda de
“blancos” norteamericanos, Corretjer aludió para el distanciamiento de la LSP tanto
a experiencias habidas en la década del 1970 con estos grupos como a la indiferencia
con la cual trataron a la implacable persecución que desataron las agencias represi­
vas del Gobierno de Estados Unidos contra las Panteras Negras (“Black Panthers”),
grupo afroamericano que luchaba por sus reivindicaciones y los cuales fueron ase­
sinados por decenas?07 Punto y aparte merece la pregunta sobre el “Gran Jurado”.
Corretjer indicó que este cuerpo represivo ha continuado persiguiendo independen-
tistas porque la respuesta del independentismo ha sido muy liviana. Corretjer va más
lejos e interpreta que parece haber cierta fe de parte de muchos independentistas en
la palabra del imperio y contrapone el asesinato de Ángel Rodríguez Cristóbal (como
recordaremos bajo custodia “federal”) como prueba de la incapacidad del imperio de
tener palabra alguna cuando usa sus recursos represivos contra los que se le opongan.

Hemos dejado para lo último el rol que Corretjer y la LSP adjudicaron a las Naciones
Unidas ya que nuevamente surge el rol de las organizaciones clandestinas y la figura
de Oscar López Rivera?08 En esta entrevista Corretjer aclaró que la LSP ha compare­
cido algunos años pero no en todos ya que entiende que la ONU es un frente de lucha
secundario y por lo tanto se analizaba cada comparecencia a la luz de si había algo
nuevo que decir. Es muy interesante que en ese año de 1981 y a pocos meses de haber
sido arrestado y encarcelado, Oscar López enviara una carta desde la cárcel al Comi­
té de Descolonización de la ONU declarándose prisionero de guerra y solicitando
remedios acorde a esta definición, específicamente los derechos conferidos bajo el
Derecho Internacional a los combatientes capturados. Ya la historia se encargó de
demostrar los oídos sordos de dicho comité con respecto a esta solicitud. Esta cana
fue publicada íntegra en el Correo de la Quincena?09 Por otro lado, en la entrevista
ya citada Corretjer hizo alusión a lo que parecía entonces una decisión tomada por el
Comité de Descolonización: enviar el caso de Puerto Rico de regreso a la Asamblea
General de la ONU. La inminencia de ese curso de acción no se ha materializado
aún hoy en el 2014. Sin embargo, Corretjer cerró sus palabras sobre este asunto ase­
verando que “lo único ocurrido desde el 1980 en Puerto Rico” era el operativo de
la Base Muñiz, reafirmando con esto su visión del rol de las acciones clandestinas
en la lucha por la independencia. Este concepto de lucha político-militar, muy de­
batido en la izquierda, lo esbozó de forma sencilla y hermosa Dylcia Pagán en una
carta dirigida a Consuelo Lee: “Muchas mujeres en la cárcel me han preguntado si
89 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

nuestros hijos estudian como ser revolucionarios, implicando que desde pequeños
son sometidos a una disciplina rígida político-militar. Les contesto solamente que en
nuestras escuelas les enseñan el amor revolucionario y quién es el verdadero enemi­
go. El futuro de nuestros hijos no se puede predecir pero si podemos establecer en
ellos una conciencia revolucionaria, un amor a nuestra patria y un orgullo eterno de
ser puertorriqueño.”310

El 1982 representaría para la LSP un reto mayor por su peligrosidad ya que para ese
entonces algunos perseguidos por el Gran Jurado particularmente del sector sindical
presentaron lo que se llamó una “tercera alternativa” para enfrentarlo. Para evitar la
encarcelación esta alternativa proponía el dar alguna evidencia que se juzgara como
poco importante o que se creyera ya las autoridades poseían. Evitar la encarcelación
no es posible con los mecanismos ilimitados del cual el Gran Jurado está provisto. Lo
que lo ha evitado es la resistencia total a colaborar unida a la militancia de repudio
que se haya generado en el pueblo. Carlos Noya Murati sale de la cárcel federal del
Metropolitan Correctional Center a finales de marzo de ese año para alegría de la
LSP y se integra de inmediato al trabajo. Esta situación es suficientemente urgente
como para que poco después de su salida ese mismo año, Noya produjera un análisis
sobre este asunto el cual fue publicado en el Correo de la Quincena y por su claridad,
solidez de argumentos y referencias históricas lo hemos incluido en el Apéndice III:
Cátedra de Militantes, “Juicio del Gran Jurado”. Noya y la LSP respondían también
a un planteamiento que hiciera la revista Pensamiento Crítico para discutir las posi­
ciones que existían en torno a las tácticas para enfrentar la represión del Gran Jurado
a raíz de los acontecimientos que siguieron al caso de la citación del Gran Jurado a
Jorge Farinacci?" Sin embargo, a estas razones se unió otra muy poderosa pues la
LSP fue nuevamente golpeada por el Gran Jurado ya que uno de sus miembros des­
tacados, el maestro de historia, Ricarte Montes García, fue visitado por agentes del
gobierno de Estados Unidos en su escuela en Cíales la misma semana en que ocurrió
el criminal desalojo de la comunidad Villa Sin Miedo en Río Grande y justo cuando
la LSP se embarcaba en una militante campaña internacional de mensajes de tele­
gramas a favor de Villa Sin Miedo.3'2 Pocos días después de esa visita lo buscaron en
Ciales y le entregaron una citación. Montes fue encarcelado el 2 de junio en el Oso
Blanco al negarse a colaborar con dicho cuerpo represivo y un mes después lo deste­
rraron al Metropolitan Correctional Center. (Ver Apéndice IV: Entrevistas, Entrevista
a Ricarte Montes García)

El desalojo de Villa Sin Miedo fue brutal y no son pocos los que recuerdan esto como
si fuera una escena de la Guerra de Vietnam. Los residentes se defendieron lo mejor
que pudieron, levantando una barrera con gomas ardiendo. Esto no detuvo las co­
lumnas por varios flancos de los efectivos policiacos. La policía entró a las estructuras
y les pegó fuego a las mismas, incluyendo a los animales.3'3 Las personas; niños, mu-

1
Raymond Soto Dávila | 90

jeres y hombres, fueron llevados afuera como si fueran un rebaño y algunos fueron
golpeados mientras contemplaban el horror de las llamas y la pérdida de sus pocas
posesiones. Los policías desenfundaron sus armas ante la gente horrorizada. En me­
dio de esa barbarie cae herido y muere uno de los agentes. Esta comunidad había re­
cibido amplio respaldo de organizaciones patrióticas y de organizaciones defensoras
de los derechos humanos, entre otras. La prensa estuvo presente debido al intenso
interés que esta causa había generado y lo sucedido pudo verse en los televisores ese
mismo día. Sin embargo, ni siquiera la presencia de la prensa logró evitarlo. La poli­
cía entró y arrancó una bandera de Puerto Rico que flotaba sobre una estructura y se
atrevió poner la suya. Esta conducta es muy parecida a la que Ricarte Montes había
descrito como una necesidad de exhibirse y mostrar poder. (Ver Apéndice IV: Entre­
vistas, Entrevista a Ricarte Montes.) Sin embargo, esa “necesidad” rebasó los límites
concebibles ese día.3'4 Esta comunidad tenía buenas razones para no aceptar las ofer­
tas del gobierno colonial para re localizarse.3'5 Corretjer y otros miembros de la LSP
habían estado en el lugar ofreciendo apoyo, dando ánimo, desarrollando actividades
culturales y abriendo las páginas de sus publicaciones a esta causa. No eran pocos los
que le dedicaban poemas incluido el propio Corretjer.3'6 El semanario Claridad des­
tacó que una de esas actividades logró reunir en la tarima por primera vez en muchos
años a representantes de P1P, PSP y la LSP.3'7 Luego de esta vil fechoría las manifesta­
ciones a favor de los desalojados se incrementaron. Poco tiempo después el CUCRE
desarrolló una campaña de apoyo a favor de Julio Cesar Vellón a quien se pretendía
encausar por la muerte del policía que murió de un balazo en medio del desalojo.’1’

El caso de Villa Sin Miedo dejo dos ángulos políticos que no deben caer en el olvido:
(1) El Comité Anti Minero del Área Metropolitana denunció la existencia de un estu­
dio que demostraba la presencia de metales pesados estratégicos en la sedimentación
del Río Espíritu Santo el cual nace en El Yunque y advirtió de los planes del gobierno
colonial de comenzar una operación de exploración de metales en dicha zona.’19 (2)
Romero Barceló arremetió ante la prensa contra los “movimientos izquierdistas” que
se mantuvieron solidarios con la comunidad de Villa Sin Miedo para inculparlos de
que dicho desalojo resultara en violencia pero cuando le preguntaron alegó que se
trataba de los Macheteros, quienes supuestamente le habían hecho llegar una carta
amenazante.’-’0 Nos parece que esta mención de Romero de los Macheteros probable­
mente tuvo la finalidad de abrir camino a un clima que propiciara una embestida del
gobierno de Estados Unidos contra posibles integrantes de esta organización ya que
esa fue la “escuelita” que aprendió con el caso del Cerro Maravilla.

El año 1982 también se caracterizó por un intento, tanto del gobierno de Romero
Barceló como de sus jefes desde Estados Unidos, de paliar la profunda crisis eco­
nómica con demagogia sobre las bondades de la 936 y la aceleración de los planes
para la explotación minera. Sobre lo primero, Romero se atribuía haber salvado las
9i | Lucha y espacio de la Liga Soi i\i isi \ l’ii riorriqui ña: 1962-1989

936 de una nueva legislación en Washington DC que se proponía ponerlas a pagar


impuestos al tesoro de Estados Unidos. La LSP desenmascaró todo esto atribuyendo
la poca modificación que sufrió la 936 al miedo de Washington DC sobre los efectos
de una agudización de la crisis en Puerto Rico si se trastocaban. Sin embargo, las
compañías más beneficiadas no eran intensivas de mano de obra, en particular, las
farmacéuticas y otras, continuaban llevándose los trabajos al sureste de Asia y otros
lugares donde podían aumentar la super explotación.321 Se concluyó que todo esto
era una cortina de humo para disimular la carrera que llevaban para concretizar el
proyecto de explotación minera. Otros proyectos igualmente nefastos que se denun­
ciaron fueron el de la explotación intensiva del agro por capital sionista yanqui y la
expansión de petroquímicas con la intención de refinar petróleo.322 Por otro lado, en
conferencia de prensa el 8 de septiembre, el Taller de Arte y Cultura de Adjuntas y
el Comité Anti Minero Metropolitano presentaron el mapa de túneles proyectados
alrededor de toda la isla y la LSP se hace eco en sus publicaciones de la denuncia por
la prensa de un contrato concedido a tres compañías para construir un túnel en la
represa Cerrillos de Ponce.323

El 25 de julio de 1982 en Guánica, en los actos de afirmación nacional y repudio a la


invasión de Estados Unidos, Alexis Massol, a nombre del Taller de Arte y Cultura,
de Adjuntas, denunció desde la tribuna los planes de minería y la destrucción que
representaban para la integridad física de nuestro país. En esos actos también parti­
ciparon José López del MLN de Estados Unidos, quien denunció el trato inhumano a
los palestinos, y se reafirmaron en la defensa de los once prisioneros de guerra varias
organizaciones. El CUCRE se dirigió a los presentes, por voz de su nuevo portavoz,
Federico Cintrón, quien sustituyó a Nelson Canals por razones de enfermedad. Cin-
trón trajo a colación los casos de los once prisioneros de guerra y otros prisioneros
políticos. También se dirigió a los presentes Ángel de Jesús de la LSP por el Comité
de Defensa de los Prisioneros de Guerra Puertorriqueños. Corretjer, por su parte,
denunció la ofensiva patronal contra los sindicatos e intentó esbozar un futuro espe­
ranzados La preocupación de Corretjer no era sólo por la represión contra los líderes
sindicales sino probablemente también por las posiciones asumidas al ser citados
por el Gran Jurado.324 Por otro lado, debemos recordar que estaba preso por resistir el
Gran Jurado, otro miembro de la LSP, Ricarte Montes.

La alocución de Ricarte Montes frente al Gran Jurado en junio de 1982 trajo a colación
la figura de Ángel Rodríguez Cristóbal como figura fiscalizadora, de este modo no tan
sólo exaltando su figura sino atribuyéndole el rol de acusador a nombre del pueblo
sobre los acusadores del imperio, ahora convertidos en acusados. Es esta atribución
de roles lo que hace imposible cualquier colaboración con el imperio: “Si bien es
cierto que comparezco aquí sin abogado, y ningún abogado guarda mis espaldas des­
de el zaguán a cuyo lugar despreciativamente ustedes lo colocarían, me acompaña

I
Raymond Soto Dávila | 92

un Fiscal. Ese fiscal es mi compueblano Ángel Rodríguez Cristóbal, mi amigo de toda


la vida y mi compañero en las honrosas y valientes filas de la LIGA SOCIALISTA
PUERTORRIQUEÑA. Su egregia figura simbólicamente evocada fija en ustedes su
mirada acusadora.” (Ver Apéndice III: Cátedra de militantes: Alocución de Ricarte
Montes ante Gran Jurado.)

La LSP produjo un Correo de la Quincena que cubrió un periodo largo, (de septiem­
bre del 1982 a abril de 1983) y dedica una buena parte del mismo a tratar el tema de la
represión, las respuestas a la misma y vuelve sobre la figura del Gran Jurado?” Es el
propio Corretjer quien escribe sobre la naturaleza del “gran jurado insular”, y hace
las debidas clarificaciones históricas. Ese “gran jurado insular” fue un cuerpo que el
gobierno de Puerto Rico convocó bajo una ley existente entonces para investigar los
asesinatos en el Cuartel General de la Policía de Hiram Rosado y Elias Beauchampal
estar bajo custodia policial, tras el ajusticiamiento del Coronel Francis Elisha Riggs
en el 1936. Corretjer contrapone a esto la naturaleza del gran jurado federal, cuerpo
represivo que se rige por el ordenamiento legal de Estados Unidos y el cual Albizu
siempre combatió contrario al insular el cual apoyó. Albizu compareció ante el gran
jurado federal solamente en capacidad de abogado de Corretjer en una época en que
a los abogados se les permitía estar más cerca de los citados durante el proceso. Este
dato histórico lo ofrece Corretjer “como aportación, como testigo de época” al ser
parte del inicio de un proceso trascendental contra el Partido Nacionalista ese mis­
mo año. Junto a Corretjer estaban acusados otros miembros del Partido Nacionalista.
Este número del Correo de la Quincena respondió tanto a nuevos encarcelamientos
en ese periodo de tiempo, como veremos más adelante, como también a una posición
expresada en el órgano oficial del PRTP-EPB Macheteros, la Voz Obrera. En la misma
se defiende la tercera alternativa que ya explicamos. La LSP editorializó sobre esta
posición y exhortó a los Macheteros a reconsiderar?26

Para finales del 1982 y principios del 1983 fueron citados y encarcelados Alberto de
Jesús y Raymond Soto Dávila. De Jesús, joven trabajador vinculado al PSP aunque no
t?! militaba de forma regular, para ese entonces residía en Wisconsin y lo investigaba el
Gran Jurado en relación a los hechos de Sabana Seca del 1979. Su mudanza a Wiscon­
sin obedecía a un intento de poner distancia del acoso represivo y seguimiento que
recibía en Puerto Rico?27 Soto Dávila era investigado por otro gran jurado en relación
a un robo al Supermercado Conchita, atribuido a los Macheteros pero no reclamados
por éstos y a daños en instalaciones militares. A la sazón Soto Dávila recién estaba a
cargo en el CUCRE de la propaganda a favor de la excarcelación de Pablo Marcano
y Nydia Cuevas y había sometido una ponencia en vistas públicas del pueblo de Ad­
juntas en septiembre de 1982 relacionada al Plan 2020 y a la incursión del capital sio­
nista-estadounidense en el agro puertorriqueño. Esta ponencia fue reproducida en
el Correo de la Quincena íntegramente y a su publicación ya Soto Dávila estaba pre-
93 | Luc ha y i si-ac 10 de la Liga Sociai isi a Puf riorriqli-ña: 1962-1989

so.’*’8 Luego de transcurridos ¡os primeros meses del 1983 el CUCRE y la LSP de nuevo
serían golpeados ya que el portavoz del CUCRE, Federico Cintrón Fiallo sería citado
por otro gran jurado en la Ciudad de Nueva York que investigaba a las FALN mientras
que Carlos Noya Murati, quien además de ser miembro de la LSP, representaba su
organización en el CUCRE, también sería citado por el mismo gran jurado represen­
tando para éste la perspectiva de cárcel a solo un año de haber salido de prisión. El
recurso esta vez fue desacato criminal, mucho más dañino que el desacato civil que
se había aplicado hasta entonces. Dentro del proceso de desacato criminal se celebra
un juicio y se dictan sentencias a discreción del juez. En otras palabras, el desacato
civil, proceso hasta entonces utilizado a los que se negaran a colaborar contra el Gran
jurado meramente encarcelaba a los resistentes hasta un periodo de dieciocho meses
o hasta que caducara el Gran jurado que entendió en el asunto. El desacato criminal
ordena un juicio de inmediato una vez la persona citada se ha negado a colaborar.
Para estos dos luchadores el proceso tomó tiempo antes de finalmente ir presos.

El 1983 trajo noticias agridulces. En mayo reaparecería William Guillermo vivo y sano
en México pero su captura costó vidas y le traería grandes complicaciones legales.
Por otro lado el Senado de Puerto Rico comenzaría unas vistas televisadas ese verano
sobre el caso del Cerro Maravilla, que serían interrumpidas varias veces y las cuales
revelarían por fin, el 21 de noviembre de ese año, sin lugar a dudas, el doble asesinato
perpetrado contra Carlos Soto Arriví y Arnaldo Darío Rosado.’29 No tan sólo quedó
evidenciado el doble asesinato sino que se comprobó que el chofer que los jóvenes
raptaron (Don Julio Ortiz Molina, epd) y que llevó a los dos jóvenes y al encubierto al
Cerro Maravilla siempre dijo la verdad y que hubo otros testigos que también escu­
charon las dos ráfagas. Igualmente quedó evidenciado que tanto las investigaciones
del Departamento de Justicia de Puerto Rico como las dos investigaciones “federales”
los ignoraron. En el caso de William Guillermo, representaba para la LSP la reactiva­
ción de una campaña de apoyo para evitar la extradición a Estados Unidos que dicho
gobierno solicitó de inmediato y en el caso del Cerro Maravilla el dolor reactivado
por el asesinato de un joven, Arnaldo Darío Rosado, que por un tiempo militó en la
LSP. Sin embargo, la acumulación de otros eventos dramáticos en esa primera mitad
del año fue apabullante para el independentismo pero muy particularmente para la
LSP. El 29 de junio de 1983 fueron capturados otros cuatro boricuas en Chicago, Illi­
nois, acusados de pertenecer a las FALN, Alejandrina Torres, Edwin Cortés, Alberto
Rodríguez y José Luis Rodríguez.”0 Alejandrina Torres estaba casada con el Revdo.
Torres y era madre de crianza de Carlos Alberto Torres, hijo del Revdo. Torres. Por
otro lado, Carlos Noya de la LSP junto a Federico Cintrón (CUCRE), estaban a la es­
pera de enfrentar procesos judiciales en Brooklyn, barrio de la ciudad de Nueva York,
con la finalidad de declararlos culpables y encarcelarlos desterrados. La LSP temía
que Ricarte Montes de la LSP enfrentara la renovación de término con otro gran ju­
rado a su fecha de salida para septiembre de 1983. Como si todo esto fuera poco des-
Raymond Soto Dáviu | 94

de 1982 un grupo de boricuas y chicanos vinculados ai MLN enfrentaba citación del


Gran Jurado en Estados Unidos, algunos por segunda vez y esto también mantenía a
Corretjer viajando a dar apoyo y a la LSP con las manos llenas.

Carlos Noya y Federico Cintrón Fiallo fueron a juicio en agosto del 1983 por desacato
criminal pero el jurado no se pudo poner de acuerdo. En octubre les celebraron otro
juicio con el mismo fiscal y el mismo juez en el cual los encontraron culpables. No
fueron sentenciados de inmediato, culminando el caso en el 1984.”' No todo fueron
malas noticias para la segunda parte del 1983 ya que de los tres resistentes encarcela­
dos por el Gran Jurado, dos lograron salir el 25 de septiembre ya que la fiscalía federal
no convocó un nuevo gran jurado para renovarles el periodo de encarcelamiento. Es­
tos fueron Ricarte Montes de la LSP y Raymond Soto Dávila del CUCRE. ”2 Sin em­
bargo, Alberto de Jesús enfrentó otro cargo poco antes de esa fecha, el uso incorrecto
o ilegal del Seguro Social y lo mantuvieron encarcelado. No fue hasta el 12 de octubre
que logró salir luego de una reducción de fianza que inicialmente fue por la ridicu­
la suma de dos millones.El gobierno de México encarceló a William Guillermo
Morales y lo acusó de varios cargos a raíz de los acontecimientos de su captura. Juan
Antonio Corretjer se convirtió prácticamente en el portavoz de su caso comenzando
con aclarar los hechos que la prensa de Puerto Rico comunicaba de forma poco con­
fiable.”-’ No tan sólo los aclaró para Puerto Rico, también tomó esta responsabilidad
ante la comunidad internacional y le dedicó un segmento de su extensa ponencia
ante el Comité de Descolonización de la ONU en agosto de 1983. Corretjer expuso
ante el Comité de Descolonización que en el enfrentamiento un amigo mexicano lo
defendió con su vida y cayó abatido. Su nombre era Abelario Diapando Contreras.
En ese enfrentamiento a tiros cayó un policía mexicano que Corretjer advirtió estaba
bajo el mando de las agencias estadounidenses que campeaban por su respeto den­
tro de territorio mexicano: la CIA y el FBI. Luego fueron y asesinaron en su casa a
una amiga mexicana, Judith Birrio Angiano e hirieron a un joven adolescente de gra­
vedad, del cual no se conocía su paradero luego de que lo hospitalizaran. Corretjer
pidió un minuto de silencio. Otros detalles de esta ponencia los comentaremos más
adelante. ”5 William Guillermo enfrentaba dos procesos: el juicio por los cargos que
le levantaron las autoridades mexicanas y una posible vista de extradición a insisten­
cia del gobierno de Estados Unidos.

El acontecimiento internacional que más repercutió en las filas del independentis-


mo ese año fue la invasión de Estados Unidos a Granada el 25 de octubre de 1983 en
un operativo que fue denominado “urgent fury”. La isla de Granada, la cual es más
pequeña que Puerto Rico, es una de las Antillas Menores y queda al norte de Vene­
zuela, se le localiza entre las islas de San Vicente y Trinidad y Tobago. Para el 1983
Granada tenía un gobierno de izquierda encabezado por el joven abogado Maurice
Bishop. Este gobierno llevaba cuatro años y en esos momentos se evidenciaba unas
95 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriquf n 19^2-1989

pugnas muy agrias al interior del gobierno y del movimiento New Jewel que había
llevado al poder a Bishop. Casi de forma simultánea una facción depone a Maurice
Bishop y lo asesina y también a otros compañeros. Estados Unidos con Ronald Rea
gan a la cabeza reclama sin mucha evidencia que los ciudadanos de Estados Unidos
que residían allí, mayormente estudiantes de medicina, estaban en peligro e invade
violentamente esta isla.”6 Los asesinatos de Bishop y sus compañeros permanecieron
confusos por algún tiempo en gran medida por la necesidad de Estados Unidos y sus
medios de prensa de inventar patrañas para justificar el acto tan cobarde de la inva
sión. Para ese entonces Cuba aportaba muchos trabajadores en la construcción de
un aeropuerto el cual Granada necesitaba urgentemente. El reconocido historiador
estadounidense Howard Zinn (epd) probablemente proveyó la mejor síntesis de esa
agresión de Estados Unidos al indicar que las acciones en el Caribe siempre respon
den a adelantar los intereses de los grandes capitalistas.”7 Este autor cita un informe
del Wall Street Journal el cual indica que para 1991, a ocho años de la invasión, ya se
evidenciaba una invasión tal de bancos extranjeros en la capital de St. George que la
había convertido en un paraíso fiscal y la describe como la “Casablanca del Caribe .

La invasión de Granada cobró suma importancia por tres elementos: (1) Se relacionó
a la Marina de Estados Unidos y sus ejercicios en Vieques con el ensayo a la invasión a
Granada que se había iniciado desde 1981 en unos ejercicios que entonces se denomi
naron “Ocean Venture 81” (2) Los Macheteros respondieron a esta injuria a Granada
y realizaron un operativo el 30 de octubre contra las oficinas del FBI en San Juan. (3)
Provocó un repudio mundial y una reacción tan contundente en el ¡ndependentismo
en Puerto Rico que para abril de 1984 se realizó una marcha en contra del militaris^
mo, convocada por el PIP que resultó multitudinaria, de dimensiones poco vistas.
La respuesta machetera se analiza en un artículo de Corretjer en el Nuevo Día en e
cual vincula el acto con la heroica fecha de la insurrección nacionalista de 1950 en
Jayuya y la tradición bolivariana.”' En la marcha la LSP circuló un mensaje en la cua
aclara las razones para su participación en la misma: (1) Es una afirmación de que e
derecho a la lucha armada y el surgimiento de los grupos clandestinos constituyen a
manifestación nacional más eficaz en contra del militarismo de Estados Uní os. (2)
Es una muestra de agradecimiento al PIP por su espaldarazo a la campaña contra a
extradición a Estados Unidos de William Guillermo Morales y a la participación e
Ledo. Rubén Berríos como testigo defensor a favor de Carlos Noya Muratti y Federico
Cintrón Fiallo en una vista que se celebró en esos mismos días de abril de 1984 en
Brooklyn. (3) Es un llamado de alerta de que el respaldo a la lucha armada no e e
ser visto como apoyo a una tendencia militarista en donde las acciones se deci an en
detrimento o independiente de la conducción política de la lucha.

El año 1984 se inició con un triunfo moral para Juan Antonio Corretjer y la LSP pues
ese 3 de enero de 1984 William Guillermo Morales probó sin lugar a dudas en un
Raymond Soto Dávila | 96

careo con el jefe de la Interpol de México, Miguel Aldana, que su arresto se produjo
en violación a la soberanía de México al no seguir disposiciones en su Constitución
y la Ley de Extradición. El juicio no pudo seguir por esta razón aunque William Gui­
llermo Morales continuó preso?41 Corretjer logró entrevistarse dos veces con William
Guillermo Morales para finales de febrero y principios de marzo y es durante estas
conversaciones que se compromete con Corretjer a no intentar entrar a territorio de
Estados Unidos ni a Puerto Rico si lograba su excarcelación y el asilo político. El reco­
nocido periodista mexicano Manuel Buendía (epd) publicó en la primera semana de
marzo un excelente artículo sobre el caso de William Guillermo en la primera plana
del periódico Excelsior, de gran influencia en la capital mexicana, el cual representó
una contribución notable a favor de su caso. Luego de describir a Corretjer como
el poeta nacional de Puerto Rico y la figura política más respetada en nuestro país,
Buendía relata parte del contenido de las conversaciones entre los dos puertorrique­
ños y concluye que podrían afectar los planes del FBI y la CIA con respecto a Mora­
les. Es en este artículo donde se divulga el nombre de Gordon como el del agente de
la CIA a cargo del caso. Corretjer también dio a conocer la decisión de Morales de no
intentar huir del reclusorio ni de aceptar ningún plan a esos efectos. Buendía asevera
que esto es un “seguro de vida” ante cualquier intento de entrampamiento so color
de una fuga y raptarlo y llevarlo a Estados Unidos o darle muerte?4’ Buendía lleva­
ba varios años investigando temas sumamente peligrosos tales como la corrupción
gubernamental, el narco tráfico, el trasiego de armas y las actividades de la CIA, ex­
tendiéndose a otros países además de México. Su advertencia sobre el peligro que se
cernía sobre la vida de Morales podría parecer a algunos que desconocen su historia
i como poco balanceado para un periodista. Nada de eso. Buendía fue asesinado dos
i meses después de ese artículo, tiroteado por la espalda. Conocía muy bien el elemen­
to criminal que prevalecía tanto dentro de la Policía Federal Mexicana como dentro
de las agencias intrusas de Estados Unidos. Esto fue un duro golpe para la LSP?44

En el 1984, Raymond Soto, luego de dialogar con Corretjer, escribió para una de las
publicaciones de la LSP un ensayo sobre la independencia de la India con el propó­
sito de ubicar en su contexto histórico la jornada de desobediencia civil de Mahat-
ma Ghandi.ws Se observaba en muchas personas una desubicación de la figura de
Ghandi y de la desobediencia civil que podía repercutir en una posición pacifista.
Los aspectos más significativos que se destacaron en el proceso de independencia
de la India entre 1907 a 1947, fecha en que obtuvo su independencia del Reino Unido
fueron: (1) El Congreso Nacional de la India y el liderato de Bal Gangadhar Tilak en
el cual hubo una combinación de tácticas, lucha armada sin descartar la resistencia
pacífica y la defensa de la religión hindú como arma de diferenciación cultural, (2)
Mohandas Karamchand Ghandi y su gran movimiento pacifista con su campaña en
contra de las Actas de la Sal, leyes que establecieron un monopolio sobre la sal para
favorecer los intereses británicos, (3) La Segunda Guerra Mundial y la intensificación
97 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962 -1989

del movimiento independentista indio frente a un Reino Unido atrapado y debilita­


do ante el avance de Japón a partir de diciembre de 1941. A la insistencia de la India de
no tomar parte en esta guerra sin haber obtenido su independencia, el Reino Unido
respondió con gran represión a la cual el pueblo contestó con una insurrección don­
de proliferaron las acciones violentas. Son todos estos hechos los que conformaron
el camino de la independencia de la India y fue este último aspecto la verdadera an­
tesala de su independencia que obtuvo solamente dos años después de la conclusión
de la Segunda Guerra Mundial.

Los cinco del MLN finalmente son encarcelados luego de un largo proceso de corte
de casi dos años para cumplir tres años por desacato criminal. Los puntos de coin
cidencia con los casos de Noya Muratti y Cintrón Fiallo no deben pasar desaperci
bidos.”6 Algunos de los elementos que resumo ya constaban en el análisis de otras
fuentes”7. (1) Los cinco de la MLN ingresaron a las cárceles de Estados Unidos a so­
lamente un día de diferencia de la vista que se celebró en Brooklyn en abril a Noya
Muratti y Cintrón Fiallo. (2) El caso de todos ellos comenzó como desacato civil y en
el transcurso del mismo se les acusó de desacato criminal. (3) A todos se les dispersó
a través de todo el territorio de Estados Unidos para mantenerlos lejos de sus familias
y sus comunidades. Es típico de Estados Unidos utilizar castigos políticos mientras
se niega el carácter político de la lucha del acusado o acusada. La finalidad de esta
contradicción es deshumanizar a la persona ante todos pues el imperio, habiendo
deshumanizado a sus propios agentes, proyecta esta característica en sus enemigos
con el fin de tratar de impregnarlos de las características deshumanizantes para final
mente nlanipularlos. (4) Se intentaba romper los lazos de solidaridad entre chicanos
y boricuas y el apoyo mutuo a sus luchas y también romper la solidaridad de otros
grupos hacia la causa de la independencia. La LSP entendiendo todas estas razones
se mantuvo activa en el trabajo de divulgación y apoyó muchas actividades políti­
co-culturales en la diáspora a favor de estos cinco luchadores.

A mediados de 1984 fueron encarcelados y desterrados Carlos Noya Muratti y Fede


rico Cintrón Fiallo. Ambos se mantuvieron firmes en la no colaboración como un
triunfo para el independentismo y criticaron la sugerencia de Romero Barceló de
crear un gran jurado de Puerto Rico como un gran retroceso.”8 Cintrón Fiallo fue
encarcelado en junio y Noya en julio?49 El caso de Noya fue muy doloroso ya que lo
asignaron a la cárcel de Tallahassee, Florida, donde mismo asesinaron a Angel Ro
dríguez Cristóbal en el 1979 y habiéndolo visitado Noya junto a Corretjer, el día antes
de su muerte?50 Los imperios siempre han hecho de la tortura un arte y el gobierno
de Estados Unidos es un ejemplo muy ilustrativo de esta práctica, en este caso la
tortura mental?5' La LSP recibió un golpe adicional ya que Noya y su esposa, Lourdes
Santana, renunciaron a la LSP por discrepancias internas casi al mismo tiempo en
que Noya iba a ingresar a la cárcel?52 El caso de Cintrón Fiallo tampoco estaba exento
Raymond Soto Dáviia | 98

de mucho dolor pues era el segundo hijo que marchaba a la cárcel en poco tiempo
para su señora madre?” (Recordemos que Norberto Cintrón, hermano de Federico,
estuvo preso año y medio por desacato civil al Gran Jurado.)

El análisis crítico que hizo la LSP sobre la situación surgida en Polonia en el 1981 fue
consistente con su postura crítica hacia las potencias socialistas de entonces, Repú­
blica Popular China y USSR, lo cual ya hemos discutido y sigue la norma estricta
del marxismo-leninismo en hacer las diferenciaciones.’54 Para la LSP, los errores del
Partido Unificado Obrero (partido comunista polaco) y la embestida imperialista de
Estados Unidos en dicho país provocaron una crisis que llevó a la implantación de la
Ley Marcial lo cual evitó males mayores. La voz cantante del descontento la llevaba
el sindicato “Solidaridad”, el cual se denunciaba como manipulado por los intere­
ses imperialistas. Estados Unidos apostaba a una profundización de la crisis y a una
intervención directa de la USSR que justificara una guerra anticomunista que se ex­
pandiera con Estados Unidos a la cabeza y el apoyo del papa polaco anticomunista»
Juan Pablo II. Aunque la LSP no entra en detallar los errores del gobierno polaco
insistió en que hubiese sido un error mayor solicitar o permitir una intervención de
la USSR. Menciona que hay “buenos” y “malos” comunistas y se conocen por sus de­
cisiones. Hay un tono crítico hacia la alta jerarquía católica, en particular hacia Juan
Pablo II. Se considera la elección de dicho papa como una provocación a la USSR?”
Por otro lado, se hace referencia a nuestra propia historia para desenmascarar la cam­
paña anticomunista de entonces en Puerto Rico utilizando el caso de Polonia y se
recuerda la aplicación sin decreto de la Ley Marcial en Puerto Rico bajo el régimen
colonial. El primero fue desde octubre de 1935 hasta la destitución de) General Wins-
hip en 1939 y luego varios meses a partir de la Insurrección Nacionalista en octubre
de 1950. El editorial concluye que todo gobierno colonial responde a la metrópoli y
no al pueblo y que el régimen colonial instaurado desde el Tratado de París equivale
a una Ley Marcial a perpetuidad sin ser declarada como tal.

Una vez se toman en cuenta los acontecimientos principales tanto nacionales como
internacionales ocurridos entre el 1982 y 1984 se puede entender lo que puede pa­
recer una contradicción. Luego que Corretjer indicara en la entrevista a la revista
Pensamiento Crítico de 1981 que anteriormente resumimos, que consideraba las Na­
ciones Unidas como un “frente de lucha secundario”, la LSP comparece en el 1982,
1983 y 1984 y también comparece el Comité de Especial de Apoyo a los Prisioneros de
Guerra Puertorriqueños, organizado por la LSP. Puede parecer extraña la poca reso­
nancia de argumentos en las ponencias de la LSP con las que presentaba Cuba en
dicho Comité a favor del caso de Puerto Rico. Es en el 1982 precisamente, que en la se­
gunda edición ampliada del reconocido libro de Corretjer, “Futuro sin falla”, el autor
le añade un prólogo en el cual deja fijada su posición sobre Cuba. En el mismo esta­
blece que el “futuro sin falla” que anuncia la Confederación Antillana está pospuesto
99 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

como objetivo político porque es irrealizable mientras exista el gobierno imperialista


de Estados Unidos. Cuba está imposibilitada de acompañarnos en descuartizar el es­
tado federal yanki debido a los vínculos estrechos entre la Unión Soviética y Cuba en
aquel entonces y la política de apaciguamiento que había tomado esta potencia ha­
cia Estados Unidos. Son las naciones presas dentro de Estados Unidos, las minorías
nacionales oprimidas y los pueblos que están contiguos a sus fronteras tanto México,
como nacionalidades cautivas de Canadá, a los que percibe con potencial para dar
esa lucha. Sin embargo sobre Cuba aclara dos cosas: Su proyecto socialista es una
contribución innegable a la futura Confederación Antillana y cualquier discrepancia
con los cubanos es “diferencia entre hermanos”.

La ponencia que presentó Corretjer a nombre de la LSP ante el Comité de Descolo­


nización de la ONU en el 1982, es muy extensa y estructurada. (,57) La misma se divide
en sub temas que van encaminados a ¡lustrar la inevitabilidad de la lucha armada,
su subtema final. El resto de los sub temas según su orden de presentación fueron:
el proyecto de explotación minera, prisioneros de guerra, presos políticos, represión
más reciente, el problema militar y la nueva ofensiva imperialista. En la lucha contra
la explotación minera se destaca el trabajo del Taller de Arte y Cultura ubicado en el
centro de la isla y donde se asevera ya la oposición al proyecto de explotación es ma­
siva. Las minas no son aceptables debido al inmenso daño ambiental independiente­
mente de un cambio político. Sin embargo, la LSP por voz de Corretjer va más lejos e
identifica otras dos razones poderosas: la solidaridad con los pueblos hermanos que
sufrirían ya que los metales se utilizarían para equiparse (militarmente) para hacer
daño y la solidaridad con el proletariado tanto en Estados Unidos como internacio­
nal ya que el Pentágono igualmente utilizaría estos recursos estratégicos para hacer
daño y someterlos. Sobre los prisioneros de guerra se establece la necesidad de apli­
car las leyes que rigen las relaciones beligerantes. (El Convenio de Ginebra, los Proto­
colos Adicionales de la Conferencia Diplomática y las resoluciones de las Naciones
Unidas al respecto.) Se denuncia la dispersión que se les somete a través de todo el
sistema carcelario de Estados Unidos. Se repudia el Gran Jurado como arma repre­
siva al servicio del FBI. En ese momento se denuncia el encarcelamiento y destierro
a una cárcel en Nueva York del Profesor Ricarte Montes de la LSP y el líder sindical
Norberto Cintrón Fiallo. Igualmente se denuncia el encarcelamiento y destierro para
entonces por cuatro años, de Nydia Cuebas y Pablo Marcano.

La presentación del subtema de “la represión más reciente” demuestra fielmente la


filosofía de Corretjer y la LSP de reconocer la importancia de todos sus miembros
fueran o no conocidos y de todo luchador aunque no fuera de la LSP. Se describen
los atentados que a manos de la Policía de Puerto Rico que sufrieron Juan Lebrón
y Efraín García Osorio ambos de la Seccional de Santurce de la LSP. Igualmente se
denuncia el seguimiento y registro del carro del historiador Juan Manuel Delgado,
Raymond Soto Dávila | 100

luego de visitar las oficinas de la LSP en compañía de Aníbal Gerena Lafbntaine. Es


todavía más significativo que antes de Corretjer mencionar estos casos, comienza el
subtema con un relato de los registros del FBI al hogar de miembros del MST ocu­
rrido justo en los mismos días cuando encarcelaban a Ricarte Montes. Se trataba del
dirigente Luis Ángel Torres, de otro militante, y un dermatólogo, Dr. Raúl Morales.
Se destaca la continua represión política y social en Puerto Rico con el caso de Villa
Sin Miedo. Los dos subtemas que siguen, “el problema militar” y “la nueva ofensiva
imperialista” proveen una síntesis apretada de la invasión y subsiguiente ocupación
militar de Estados Unidos sobre Puerto Rico, la legislación federal que se impuso a
través del tiempo (Ley Foraker (1900), Acta Jones (1917) y Ley de Relaciones Federales
de 1952 o “ley 600”. Se menciona la lucha del pueblo, en particular las respuestas
heroicas del Partido Nacionalista de Puerto Rico, su debilitamiento debido a la dura
represión y la nueva respuesta del pueblo a través de la resistencia al SMO y el sur­
gimiento de las organizaciones clandestinas. La transición de la ocupación militar
es de una política de guarnición a una que combina un escenario de base de ope­
raciones militares desde donde se practican las agresiones a pueblos hermanos con
Vieques como punta de lanza. La ofensiva imperialista para imponer la explotación
minera con fines bélicos se fundamenta en “coberturas” que le proveen las campañas
de los dos partidos coloniales, el PPD y el PNP, los cuales van dirigidos a la misma
entrega con discursos que pueden parecer diferentes pero en el fondo no lo son.

El status se discute presentado un argumento jurídico-legal por lo cual el “autono-


mismo es imposible para Puerto Rico dado la función del estado central federal en
Estados Unidos, se rechaza la opción de las Islas Marshall y se insiste de que la única
opción para descolonizar a Puerto Rico es la independencia nacional. El argumento
del autonomismo se denuncia como muy peligroso por el arraigo tradicional que
tiene en la población puertorriqueña pero históricamente ha probado ser engañoso»
entreguista y como asumiendo una “insuficiencia” de parte del pueblo para adelan­
tarse hacia una independencia?*8 Finalmente la ponencia señala la necesidad de la
lucha armada como respuesta a la agresión imperialista y denuncia la ofensiva de la
CIA, el FBI, la Marina de Guerra, La Guardia Nacional y la policía colonial contra
estas organizaciones y la intervención de la Rand Corporation y los Sandia Labora­
tories en preparar esta ofensiva. (La Rand Corporation y los Sandia Laboratories son
frentes de los llamados think tanks” del imperialismo de Estados Unidos.)

La ponencia que presentó Corretjer a nombre de la LSP ante el Comité de Desco­


lonización de la ONU en el 1983 es una de las más extensas. }59 Se establecen dos
puntos centrales: la tradición de la lucha armada en la trayectoria de Puerto Rico y la
solidaridad intemacionalista latinoamericana como experiencia histórica de nuestro
pueblo. Como ejemplos que evidencian la primera, se trae la guerrilla patriótica de
José Maldonado ( Águila Blanca ) saliendo al paso a los invasores estadounidenses
¡oí | Lucha y espacio dela Liga Sociaijsi \ l’i i riokkhu i \ x: 1962-1989

que entraron por el puerto de Guánica, al sur de Puerto Rico, el 25 de julio de 1898.
Ante la continuidad de la ocupación militar se lleva la tradición de lucha armada a
su máxima expresión en las acciones de Pedro Albizu Campos y el Partido Nacio­
nalista. Se destaca el tiroteo al Congreso de Estados Unidos en el 1954, centro desde
donde emana toda la legislación que se impone a Puerto Rico, incluida el tributo
de sangre a través del SMO. Desde la década del 1960 esta tradición la retoman las
organizaciones clandestinas hasta llegar al 1983, en que están activas al menos cin­
co: OVPR, FARP, CPR, EPB “Macheteros” y las FALN. La solidaridad con Nicaragua
desde Cesar Augusto Sandino en las décadas del 1920 y 1930 hasta la triunfante Re­
volución Sandinista en el 1979 y con los hermanos salvadoreños, son dos ejemplos
que ilustran el segundo punto. La reciprocidad con Puerto Rico se ha evidenciado
en las luchas de pueblos hermanos contra el imperialismo. Se trae la pertinencia de
Puerto Rico a la tesis bolivariana a propósito del bicentenario de Simón Bolívar. La
lucha de Vieques trae la mención de la famosa frase de Albizu, en el sentido de que
en Vieques ensaya Estados Unidos la vivisección de la patria. El punto culminante
de esa lucha se ejemplifica en la figura de Ángel Rodríguez Cristóbal. Corretjer esta­
blece que la merma en esa lucha no fue consecuencia de la represión y sí del proceso
eleccionario del 1980.

La LSP por voz de Corretjer trae los detalles que ya hemos discutido relacionados a la
captura y arresto de William Guillermo Morales ante el Comité de Descolonización.
Es importante notar que se establecen tres puntos que los hechos confirmarían tiem­
po después: (1) El arresto de William Guillermo violaba la legalidad constitucional de
México y su soberanía. (2) El pueblo de México siempre apoyó y seguiría apoyando la
lucha por la independencia de Puerto Rico. (3) La tradición de México se distinguía
por no entregar perseguidos políticos a sus países de origen. Por otro lado, se detallan
otros dos acontecimientos represivos de gran envergadura: (1) El traslado del caso de
desacato criminal a Brooklyn por no colaborar con el gran jurado contra los lucha­
dores independentistas, Carlos Noya y Federico Cintrón Fiallo representando esto
una modalidad de exilio que ni siquiera España aplicó a los independentistas mien­
tras los juzgaba. (2) El arresto de otros cuatro luchadores de Chicago, Alejandrina
Torres, Edwin Cortés, Alberto Rodríguez y José Rodríguez, acusados de pertenecer
a las FALN. Se desarrolla la tesis del “delito imposible” que ya hemos mencionado,
ya que la conspiración sediciosa implicaría separarse de algo a lo cual no se está uni­
do. Los “estados” tampoco pueden intentar separarse por lo tanto no pueden auto
determinarse” pero en el caso de Puerto Rico, como posesión colonial, se trata de
liberación no de “secesión”. Se denuncia el trato inhumano y la tortura a la cual se
somete a Alejandrina Torres, a quien asignaron a la sesión de hombres en la cárcel.
Es impresionante por lo atinada a la luz de acontecimientos en dicho país que se han
dado posteriormente (como las matanzas en las escuelas), una de las declaraciones
finales en donde se califica el estado mental de la población de Estados Unidos como

1
RaymondSoioDáviia | 102

de confusión, bordeando la locura y se asevera que el “tercer mundo” puede salvarse


aunque en su lucha salga maltrecho.

La ponencia de Corretjer y la LSP ante el Comité de Descolonización de la ONU en


el 1984 debe verse en contexto con la que presentó ese año Ramón Calderín (epd) a
nombre del Comité Especial en Defensa de los Prisioneros de Guerra Puertorrique­
ños, de la LSP.,6° Esta es la última ponencia que presentará Corretjer. En la misma se
elaboran argumentos para demostrar "el grosero y mendaz despotismo” con el cual
Estados Unidos impone su poder colonial y alude a una cita de Abraham Lincoln,
“dominación de un pueblo por otro pueblo es despotismo". Alude al concepto de
moralidad en la política internacional ejemplificado en la famosa cita de Albizu en
la cual aseveraba que si bien no tiene Puerto Rico poder material para echar a pique
su flota, tiene poder moral para hundir su prestigio en el mundo. Corretjer advierte
que esta aseveración debe revisarse ante la invasión de Estados Unidos a Granada
bajo el gobierno de Ronald Reagan en octubre del año anterior (1983). Las acciones
del gobierno de Estados Unidos y de su presidente, con su actitud de colonizador, son
indicativas que de ellos no puede esperarse nada porque no les importa la opinión de
nadie ni la moralidad internacional. Establece que a pesar de no contar con ejércitos
las Naciones Unidas son “una fuerza moral organizada”. Se recurre a ese foro para
contar con esa fuerza moral y se denuncia a las elecciones coloniales de cada cuatro
años como otra fuente de inmoralidad cuyo anzuelo es el presupuesto multimillona­
rio que se disputan los partidos coloniales. (Aquí debemos recordar que el 1984 es un
año eleccionario.) Enfatizó que se vota como ciudadanos norteamericanos, no como
4 puertorriqueños.
r El recuento histórico de la participación de Estados Unidos en la Segunda Guerra
Mundial, luego de la derrota de los alemanes en Stalingrado (Volgogrado), y en Corea
y Vietnam, los posiciona realmente como “perdedores” y recuerda de nuevo en esta
ponencia el ataque al Congreso de EEUU por los nacionalistas en 1954. Se denuncia
la invasión a Granada, isla minúscula en el Mar Caribe, que le produjo gran rechazo
internacional a Estados Unidos y que generó en Puerto Rico un movimiento antimi­
litarista y antiimperialista. Acto seguido Corretjer utilizó el resto del tiempo para leer
un comunicado de los Macheteros, cediéndole simbólicamente el espacio a esta or­
ganización clandestina. Es una constante en las tres ponencias de la LSP de esos tres
años la denuncia de que Estados Unidos solamente cree en las guerras de agresión y
sigue una línea similar para enfrentar la oposición dentro de su territorio nacional,
sus colonias y sus neo colonias. Granada es la quinta esencia de esta política. Y por
fin, Corretjer, en su última ponencia a nombre de la LSP, trae con su lectura de este
comunicado a los que representan la contraparte en guerra con la guerra perma­
nente del imperio: las organizaciones clandestinas, ejemplificada en los Macheteros,
quienes en su comunicado solicitan ser reconocidos como parte beligerante. En efec-
10 J | Ll < HA Y I SI’A( K) DI LA Ll(.A S(X IAI ISIA I’CI RWRRIQl 1 ÑI962-!989

(o, la LSP ha demostrado que la lucha por la independencia la libran los nacionales
y que el rol de las Naciones Unidas es reconocer el hecho para el mundo. La LSP ha
cerrado el círculo ideológico que fue armando a través de sus años de apoyo a las
organizaciones clandestinas. El fruto lo veríamos en esa última etapa de la LSP, ya de­
bilitada luego de la muerte de Corretjer, fruto madurado en el triunfo representado
en el caso de William Guillermo Morales. Creemos que el independentismo todavía
y a pesar de los años no ha aquilatado a cabalidad ese triunfo.

El Comité Especial de Apoyo a los Prisioneros de Guerra presentó una ponencia por
voz de Ramón Calderín (epd) que complementa y también eleva la contundencia a la
ponencia de la LSP en la ONU con respecto al caso de William Guillermo Morales.
Se presenta el argumento de la guerra comenzada por Estados Unidos tras la inva­
sión y contestada de inmediato por Águila Blanca (José Maldonado) y las partidas
sediciosas. Se detalla el tratamiento de “bestia de corral” que reciben los once prisio­
neros de guerra y se señala que el gobierno de Estados Unidos los delimita a la esfera
de lo criminal y no de lo militar en donde aplicarían los estatutos de prisionero de
guerra ya mencionados en las ponencias de la LSP. La ponencia hace hincapié en
el historial del caso de William Guillermo Morales, entonces preso en México, co­
mienza desde el momento de su captura en Estados Unidos, su fuga espectacular, su
estadía en México por más de dos años hasta su secuestro por vía de órdenes de la In-
terpol de Washington a la Interpol de México y de la intervención de la embajada de
Estados Unidos en la capital mexicana. El operativo de secuestro para transportarlo
a Estados Unidos como un criminal se frustra porque los acompañantes de William
Guillermo lo defienden y uno da su vida, provocando esto la intervención de las au­
toridades mexicanas. Calderín denunció valientemente el nombre del agente a cargo
del secuestro (“Gordon”) y además de mencionar que en entrevista con Juan Antonio
Corretjer, William Guillermo se comprometió a no regresar a Estados Unidos ni in­
tentar entrar a Puerto Rico en caso que lograra el reconocimiento de prisionero de
guerra y obtuviera asilo en uno de los países que ya entonces habían manifestado
esa inclinación.361 Estos datos se sabían por voz de Corretjer en Puerto Rico pero es
Calderín con esta ponencia el que los informa a la comunidad mundial representada
en la ONU.

Otros dos comités que presentaron ponencias ante la ONU en el mismo carril que
la LSP fueron la del CUCRE y la del Taller de Arte y Cultura de Adjuntas. La del
CUCRE, como en años anteriores hizo hincapié en la represión desatada contra in-
dependentistas a través del Gran Jurado y el tratamiento abusivo que recibían los
compañeros encarcelados de las FALN en crasa violación a sus derechos humanos.
(**) Se denuncian una serie de actividades y decisiones de diversas agencias repre­
sivas de Estados Unidos, CIA, FBI, Servicio Secreto y otras adscritas a las ramas de
las Fuerzas Armadas, para utilizar a la Interpol en tareas de represión contra inde-

i
Raymond Soto Dávila | 104

pendcntistas y magnificar aun más el proceso de criminalización de la lucha por la


independencia. Como ejemplo de este rol que se atribuye a la Interpol se trae el caso
de William Guillermo Morales y el rol de dicha agencia en su arresto en México. Se
reconoce la solidaridad de compañeras norteamericanas perseguidas por negarse a
hacer declaraciones a un gran jurado que investigaba el movimiento independentista
puertorriqueño. Estas eran Sylvia Baraldini, Shelley Miller y Pamela Faden. (’6’) La po­
nencia ese año la llevó Raymond Soto Dávila, quien para entonces había sido libera­
do, en sustitución del portavoz, Federico Cintrón Fia!lo, quien para entonces ya estaba
encarcelado y era quien había llevado las ponencias del CUCRE en años anteriores.

El Taller de Arte y Cultura de Adjuntas comparecía por tercer año consecutivo y su


portavoz era Alexis Massol (,íq). Hizo un excelente recuento histórico de la utiliza­
ción del gobierno de Estados Unidos de los recursos naturales de Puerto Rico para
sus fines militares y de expansión económica y para su política de agresiones contra
pueblos hermanos, describió la respuesta de resistencia del pueblo y sus organiza­
ciones patrióticas y la represión del imperio y sus maniobras pacificadoras. Producto
i
de esos fenómenos los cuales entran en contradicción en la década del 1970, Estados
Unidos enfrentó una crisis y su respuesta para Puerto Rico es el Plan 2020 al cual ya
hemos aludido. La ponencia documentó detalladamente el itinerario de ese plan, su
carácter secreto y la involucración tanto de agencias de Puerto Rico como de Estados
Unidos que demuestran lo acelerado de dicho proyecto sin el consentimiento de los
puertorriqueños, imponiéndose la voluntad de la metrópoli como potencia coloniza­
dora en violación a los derechos del pueblo puertorriqueño. Un puntal de este “Plan
2020 era desarrollar once parques industriales cada uno de 500 cuerdas localizados
a través de todo nuestro territorio nacional. Para que se pusieran en operación, se
separarían muchos otros terrenos, se utilizarían inmensos recursos de agua, reser­
vación de playas y se dispondría de una infraestructura de servicios que levantarían
limitaciones de movilidad y del uso y disfrute de los puertorriqueños de los recursos
de su territorio nacional. El Taller de Arte y Cultura realizaba además una vigorosa
campaña de divulgación en el pueblo. Se le solicitó al Comité que hiciera esfuer­
zos para que el gobierno de Estados Unidos y el gobierno colonial de Puerto Rico
desistiesen del proyecto de explotación de los recursos naturales no renovables.

El análisis de la LSP en el año eleccionario de 1984 se centró en la denuncia de que


toda la administración de gobierno de ELA estaba en manos de la CIA y que las elec­
ciones cumplían el propósito de hacer funcionar al gobierno colonial. Esta visión
se recoge en un editorial que se tituló “Las elecciones de la CIA” en el Correo de la
Quincena.166 El editorial hace un recuento histórico de los sucesos relacionados a la
lucha antimilitarista, los arrestos a numerosos miembros de la LSP en 1969, el ase­
sinato de la estudiante Antonia Martínez en el 1970 y los sucesos del 11 de marzo de
1971 con la caída de tres efectivos del régimen, dos policías, uno de ellos el jefe de la
105 l-l ( HAY ESPA( IOD1 I A I IG\So( IAIISIA l’l IRIORRIQl I ÑA: I962-I989

fuerza de choque de la Policía de Puerto Rico y un cadete del ROTC. Se concluye que
luego de la renuncia forzada de Abraham Díaz González, abogado liberal y entonces
rector del Recinto de Río Piedras de la UPR para cuando se dieron los sucesos del n
de marzo de 1971, la CIA tomó control de la UPR y del resto de las dependencias del
gobierno de ELA. En particular, los hechos del 11 de marzo ilustraron para el gobier­
no de Estados Unidos la capacidad de lucha del pueblo si la fusión que se dio de los
diferentes sectores que se unieron en los sucesos del 11 de marzo se expandía hacia el
resto del independentismo. El editorial exhorta a confiar en nuestras propias fuerzas
y a dirigir la lucha a la agitación de las masas al calor de una creciente actividad de
las organizaciones clandestinas.
El descontento generalizado hacia el gobierno de Carlos Romero Barceló era muy
intenso y hacía muy difícil un nuevo triunfo electoral para su partido. A la luz de las
advertencias del editorial ya mencionado la CIA se preparaba para timonear el go­
bierno del ELA con el Partido Popular pero necesitaba igualmente enfocar al pueblo
en el gobierno de Estados Unidos como centro de retribución de justicia y levantar
su credibilidad. Dentro de esta línea de acción de parte del imperio puede interpre­
tarse el artículo sobre el caso del Cerro Maravilla de la revista “Life”, entonces una
revista de amplia circulación en Estados Unidos, el cual publicó a unos dos meses
de las elecciones de noviembre de 1984.’67 El artículo desplegó fotos de escenas con
modelos a casi página completa, recreando las dos versiones sobre los hechos, la
oficial, de defensa propia y la del doble asesinato y se da a entender que es esta úl­
tima la correcta. Esto se le dice al pueblo de Estados Unidos luego de que en Puerto
Rico quedara muy poca gente que convencer ante la contundencia de pruebas que
ya llevaba desfilándose desde el año anterior en las vistas del Senado de Puerto Rico.
Era una forma subliminal de fortalecer la idea de que es desde los centros pensantes
del poder de Estados Unidos que se validan las interpretaciones no importa cuán
irrefutables ya sean y de paso fortalecer el camino a las cortes “federales” como ins­
trumentales para esa validación.’68

Muerte de Juan Antonio Corretjer y últimos años de la


ORGANIZACIÓN
Juan Antonio Corretjer fue hospitalizado desde los primeros días de enero de 1985.
Su gravedad duró varias semanas?69 En la noche del sábado del 19 de enero de 1985,
hace casi treinta años al momento que escribo, falleció Juan Antonio Corretjer en
el Hospital Oncológico en San Juan, Puerto Rico. Su deceso fue por causa de una
condición cardiaca. ,7° Su cuerpo se veló en el Ateneo Puertorriqueño en San Juan a
donde acudió una multitud incluyendo muchas personas reconocidas en Puerto Rico
en diferentes ámbitos, político, social y cultural a honrar al insigne patriota, revolu-
Raymono Soto D.\\ IIA | 106

cionario, periodista y poeta. Los servicios fúnebres se dieron el martes, 22 de enero de


1985. El cortejo fúnebre partió a las 8:30 AM frente al Ateneo Puertorriqueño, escol­
tado por la Policía y llegó a la plaza de Cíales alrededor de las 11:40 AM. Luego de su
salida del Ateneo Puertorriqueño unos 150 vehículos acompañaron el féretro por las
Avenidas Ponce de León y Muñoz Rivera y se detuvieron frente al portón principal de
la UPR donde una concurrencia de cientos de personas que esperaba la procesión,
estudiantes, profesores y trabajadores rindieron homenaje postumo a Corretjer. En
esa parada, entonaron “La Borinqueña” revolucionaria y algunos de los presentes
manifestaron breves mensajes. Durante todas las exequias fue una constante entre
los presentes la referencia a los Macheteros.

El féretro de Don Juan se colocó en una carpa en una esquina de la plaza de Cíales
donde conocedores señalaron fue en ese lugar donde Don Juan pronunció su primer
discurso a favor de la independencia de Puerto Rico. Allí una fila interminable de
personas pasaron frente al féretro para rendir sus respetos. Durante varias horas se
desarrolló en la glorieta de la plaza un concurrido acto político cultural con una am­
plia participación de muchos artistas. Entre las expresiones políticas de ese día fue
significativo el mensaje de la heroína nacionalista Lolita Lebrón (epd) quien expresó
categóricamente sobre Corretjer que es “el tercer patriota en jerarquía de la lucha
por la redención de nuestro pueblo cautivo. Ninguno, después de Betánces y Albizu
está antes de Corretjer.” De los mensajes que llegaron del exterior se destacaron el
del gobierno sandinista de Nicaragua y otro que se atribuye a William Guillermo
Morales entonces recluido en una cárcel en México. Ya en el momento de levantar el
féretro para continuar para el cementerio, Consuelo Lee le dio una emotiva despedi­
da y colocó la bandera machetera sobre el cuerpo. La procesión recorrió varias calles
del pueblo de Cíales, pasando por el Residencial Berdecía. Durante el recorrido un
grupo de niños portaron retratos de Lenin, Marx, Betánces, Albizu, Che Guevara,
Sandino y Mao Tse Tung. Se dirigieron a los presentes en un momento de la trayecto­
ria el héroe nacionalista Rafael Cancel Miranda, José López (MLN) y Ricarte Montes
(LSP). Este último asumiría la posición de Secretario General interino y de portavoz
de la organización hasta la disolución de la LSP, según se destaca en documentos y
partes de prensa, los cuales citaremos más adelante. Estuvieron a cargo del duelo
I final el héroe nacionalista Oscar Collazo y el líder independentista Juan Mari Brás
con ayuda de Norberto Cintrón Fiallo quien fungió como maestro de ceremonias. Ya
era de noche cuando se procedió a bajar el féretro.

La LSP circuló un número de El Socialista poco después del fallecimiento de Corre-


tjer el cual dedica a Corretjer y a reafirmar el compromiso de la LSP. La sección que
titularon “Nuestra posición” se caracterizó por su contenido profundamente político,
en el cual destaca la inmensa contribución de Corretjer a la lucha, el propósito de
continuar apoyando los principios de la LSP y de enfrentar el reto histórico que el
107 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962 1989

vacío de la ausencia de Corretjer representa. Correctamente se hace un análisis de­


tallado de las circunstancias históricas que enfrenta la lucha para liberar a Puerto
Rico y se fija la posición con respecto a éstas. 371 Se sostienen en la defensa de los
prisioneros de guerra, en la abstención electoral, en la lucha armada como vehículo
de liberación, se une a los patriotas que exhortan a la unidad y siguen ofreciendo
la LSP como difusores de los comunicados clandestinos. En los aspectos concretos,
denuncia el genocidio que lleva a cabo Estados Unidos contra Centro América y el
acoso al gobierno revolucionario Sandinista de Nicaragua y se reafirma en seguir la
lucha contra el proyecto de explotación minera.

El 3 de marzo de 1985, día del natalicio de Corretjer, circula El Socialista (Edición


extraordinaria) dedicado a su memoria y en un formato más grande. Este es el se­
gundo número de El Socialista desde el fallecimiento de Corretjer. Se reproducen
muchos mensajes de entidades gubernamentales desde el gobernador para abajo y
organizaciones privadas. Se da amplio despliegue a los mensajes de condolencia de
organizaciones clandestinas, prisioneros de guerra y prisioneros políticos, los cuales
fueron centrales en encarnar los principios que defendió Juan Antonio Corretjer y la
LSP. Se reproducen los mensajes de la OVPR y las FARP, de Guillermo Morales, Ha-
ydee Torres, Carmen Valentín, Elizám Escobar, Alicia Rodríguez, Federico Cintrón
Fiallo y Ricardo Romero, este último firma como Coordinador Nacional del MLN
mexicano. El MLN estuvo un periodo de tiempo constituido por puertorriqueños y
chicanos pero luego se separan aunque continuaron los vínculos solidarios. Es muy
impresionante la carta del Ledo. Alfonso Vélez Pliego, Rector de la Universidad Autó­
noma de Puebla por su conocimiento del historial de lucha de Corretjer e indica que
su recuerdo es una invitación para solidarizarse con la causa de la independencia de
Puerto Rico y apoyar la petición de asilo político para William Guillermo Morales en
la cual Corretjer tuvo una participación de vanguardia. Otros mensajes que destaca­
mos por la confluencia que representan en las luchas de Corretjer y la LSP fueron de:
Amhed Nomafemi del New Afrikan People’s Organization (ÑAPO), Ken Stone, del
Partido Laboral Canadiense, de Casa de las Américas (Cuba), Ileana Carrión, lucha­
dora por la causa de Vieques, Carlos Gallizá, Comité Central PSP y el Movimiento
Popular Dominicano.
Las tres aportaciones de mayor peso político en este número a nuestro juicio son:
“Nuestra posición”, reproducida del número anterior de El Socialista y la cual ya
resumimos, el discurso de José López del MLN-PR en el sepelio de Corretjer y del
Reverendo José Torres, en la velada en memoria de Corretjer que se celebró en Chi­
cago.372 López habla a nombre de los 25 prisioneros políticos y de guerra encarcela­
dos entonces y declara que Corretjer combinó de manera dialéctica la pluma y el
rifle, advirtiendo que serán muchos los que pretenderán distorsionar su vida y su
obra y citó como ilustración un extracto de la obra Estado y Revolución de Lenin:
Raymond Soto Dávila | 108

“...Durante la vida de los grandes revolucionarios, las clases opresoras los some­
ten a constante hostigamiento y persecución, acogen sus doctrinas con la rabia más
salvaje con el odio más furioso, con una campaña más desenfrenada de mentiras y
calumnias. Luego, después de su muerte se intenta convertirlos en iconos inofensi­
vos, canonizarlos, por decirles así, rodear sus nombres de una aureola de gloria para
“consolar” y engañar a las masas oprimidas, castrando el contenido revolucionario
de su doctrina, mellando su filo revolucionario, envileciéndola.” Por otro lado, las
palabras del Rev. José A. Torres tocan el aspecto sicológico que debe acompañar a
un buen revolucionario cuando dice sobre Corretjer: “Ya a los dieciocho años había
definido su vocación primaria y secundaria: Patria y poesía. De sus 76 años, con diez
meses y 16 días Juan Antonio dedicó más de 60 años a escribir poesía y toda su vida
a ser soldado de la patria puertorriqueña. Vida determinada, vida lúcida, vida inte­
gral: de una sola pieza.”

El único Correo de la Quincena que se publica posterior al fallecimiento de Corretjer


y cuya editora es Consuelo Lee, se dedicó totalmente a su memoria, está repleto de
poemas y mensajes, muchos repetidos en el número de El Socialista (Edición ex­
traordinaria) que ya citamos y carece de un espacio dedicado a contenido político
orientado a las luchas de entonces. Esto a pesar de haber ya pasados dos meses y
medio del deceso de Corretjer y de estar precedido de dos números de El Socialista
que habían cubierto en detalle las exequias.373 Aparece el mensaje completo de Lolita
Lebrón y mensajes de prisioneros o ex prisioneros políticos que no se mencionaron
en los números anteriores como fueron los de Julio Rosado (MLN), los prisioneros de
guerra puertorriqueños, Oscar López, Carlos Alberto Torres, Lucy Rodríguez y Ale­
jandrina Torres. Se repiten mensajes de organizaciones clandestinas y se añade a los
Comandos Revolucionarios del Pueblo. Aparecen mensajes del Comité del PSP de
Hartfort, Connecticut, del CUCRE, del Comité Andrés Figiteroa Cordero y luchado­
res desde Chicago y México, entre otros. Se reproduce un artículo del “The San Juan
Sun de Tom Dorney, activista de causas progresistas, en el cual identifica a Ricarte
Montes como sucesor de Corretjer.374

Estos años que restan de la década del 1980 fueron muy agitados y repletos de golpes
■ represivos y de controversias en torno a la represión. Por un lado se comenzaría a
hablar de listas de subversivos y de carpetas confeccionadas por la Policía de Puerto
Rico, con participación del FBI como pudimos comprobar más tarde, pero estos do­
cumentos no se repartieron a las víctimas hasta la década del 1990. 375 Por otro lado,
los independentistas sufrirían nuevos arrestos tanto en Puerto Rico como en la diás-
pora. En particular el CUCRE se vio con las manos llenas. Entre 1985 y 1986 se arres­
taron y encarcelaron a más de una docena de Macheteros mientras que en Chicago
habría nuevos arrestos en el 1986 de miembros destacados del MLN y un gran golpe
represivo al prisionero de guerra, Oscar López Rivera.
109 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puf rtorriqi i ñ a: 1962-1989

El 30 de agosto de 1985 el FBI arrestó a catorce independentistas, once en Puerto Rico


y tres de ellos fuera de Puerto Rico, bajo la acusación de haber participado en un
robo de siete millones a la Compañía Wells Fargo en Hartfort, Connecticut en el 1983.
Los arrestados fueron: Filiberto Ojeda Ríos, Juan Enrique Segarra Palmer, Jorge Fa-
rinacci, Ivonne Meléndez, Isaac Camacho, Hilton Fernández, Elias Castro, Orlando
González Claudio, Luz Berríos, Ángel Díaz Ruiz, Norman Ramírez Talavera, Carlos
Ayes Suárez, Luis Colon Osorio y Anne L. Gassin. Gassin, nacida en Francia y esta­
blecida en Estados Unidos, se volvió informante del gobierno de Estados Unidos.
M Otros tres para los cuales había orden de arresto se fueron a la clandestinidad,
Norberto y Avelino González Claudio, hermanos de uno de los arrestados y Víctor
Gerena. Dicho operativo represivo se caracterizó por el uso de helicópteros y nume­
rosos agentes federales. El operativo también incluyó un allanamiento abusivo a las
oficinas de la revista Pensamiento Crítico.,77 Nueve meses después, el 21 de marzo de
1986, continuaron con los arrestos por este caso. Arrestaron dos personas en Puerto
Rico: al licenciado Roberto José Maldonado, quien gozaba de mucho prestigio en la
izquierda y Antonio Camacho, hermano de uno de los arrestados el 30 de agosto del
año anterior. En Massachussets arrestaron al estadounidense Paul Winberg. Como
era de esperarse hubo mucha represión. A pesar de no haber pérdida de vidas en
el caso imputado, mantuvieron presos y sin fianza a muchos de ellos por 16 meses.
El caso de Filiberto fue significativo. Se le concedió fianza y luego de varios meses
se le encarceló por casi tres años sin celebrársele juicio ya que se alegaba había re­
sistido el arresto y puesto en peligro a los llamados agentes federales, en realidad le
querían achacar intento de asesinato. En su caso le esperaban dos juicios, uno por
los alegados hechos durante el arresto y otro por la alegada participación en el robo
a la Wells Fargo en el 1983. Cuando por fin se le enjuicia en la Corte Federal en San
Juan en el 1989 por lo primero, salió absuelto siendo esto una victoria moral para
el independentismo. Al poco tiempo de salir con un grillete y otras condiciones en
espera del juicio por el robo, Filiberto Ojeda se fue a la clandestinidad?78 Como se
sabe, centenares de agentes del FBI con ayuda de agencias coloniales lo asesinarían
en Hormigueros en el 23 de septiembre de 2005. El gobierno de USA no aceptaba la
categoría de preso político pero no aplicaba los procedimientos esperados para los
llamados delitos comunes. Finalmente y luego de varios años terminaron por fin los
casos en corte. El único con fallo absolutorio fue Ayes Suarez. Las sentencias variaron
mucho aunque para algunos el tiempo de encarcelamiento no fue prolongado. El
independentista que más tiempo cumplió fue Juan Segarra Palmer quien llegaría a
salir luego de veinticuatro años preso y el segundo fue Antonio Camacho quien llegó
a cumplir alrededor de 17 años y que no aceptó la jurisdicción de la corte de Estados
Unidos ni estableció defensa legal alguna en ninguna etapa de su cautiverio.

El caso de Jaime Delgado, Dora García y Viola Salgado fue un intento de hacer un
espectáculo ante el pueblo estadounidense, probablemente para contrarrestar el
Raui )nd Soto Davii a ¡ no

efecto del caso de William Guillermo en los agentes represivos y otros elementos de
extrema derecha y asegurar una extensión de la condena a Oscar López Rivera. Los
acusaron de conspirar para la fuga de Oscar. Esto les dio una excusa para trasladarlo
a la prisión de máxima seguridad de Marión. Los arrestos de estos tres activistas de
Chicago fueron en vísperas del cuatro de julio, fecha celebrada en Estados Unidos
y la cual coincidía con el centenario de la Estatua de la Libertad. Los voceros de las
agencias represivas hicieron muchos aspavientos ante la prensa y dijeron muchos
disparates. Hablaban de un gran operativo en donde se iba a atacar un fuerte militar,
entrar a la cárcel dentro de ese fuerte y liberar a dos prisioneros (Oscar López Rivera
y el afroamericano Kojo Bomani-Sababu) y llevárselos en helicóptero, todo con un
número muy reducido de participantes que fluctuaba entre cuatro o cinco. Además
de la fuga, el FBI alegaba que iban a transportar armas y explosivos a través de Esta­
dos Unidos. Los tres acusados estaban empleados en sus comunidades y realizaban
trabajo político. Jaime Delgado era coordinador nacional del Comité Nacional para
la Libertad de Prisioneros de Guerra (National Committee to Free Puerto Rican Pri-
soners of War) y Dora García era esposa de José López, Coordinador del MLN-PR y
cuñada de Oscar López Rivera. El 19 de julio les declararon causa probable aunque
la juez comentó la debilidad de la prueba. Increíblemente ese mismo día se anuncia
que hay un gran jurado investigando todos estos hechos con el aparente propósito de
que no colaboraran y los pudieran meter presos por esa vía. Eventualmente a Viola
Salgado le retiraron los cargos y quedaron solamente Jaime Delgado y Dora García, a
quienes el gobierno de Estados Unidos tenía mayor interés en reprimir?79 En realidad
el FBI lo que ejecutó fue una purga de los independentistas de Chicago pues a los
I arrestos añadieron allanamientos y destrucción del Centro Cultural Puertorriqueño
y la escuela alternativa Pedro Albizu Campos, instituciones progresistas que se ha­
bían levantado en la comunidad boricua en Chicago. Esto recuerda la destrucción
de escuelitas que levantaron Corretjer y Consuelo Lee en el 1950 que fue parte de
la ola represiva contra la insurrección nacionalista. Mientras se juzgaban estos ca­
sos en Chicago, también se juzgaban a los Macheteros, arrestados por el caso de la
Wells Fargo en Hartfort, Connecticut. }8° Finalmente a Jaime Delgado lo sentenciaron
a cuatro años de cárcel y a Dora García a tres, cada uno con varios años adicionales
de probatoria. Oscar López fue sentenciado a quince años adicionales y Kobo recibió
cinco más. Los dos alegados informantes que estaban dentro de la prisión recibieron
credibilidad total y los cuentos de diversos agentes encubiertos en la presunta venta
de armas también. Por la supuesta venta estaban fugitivos entonces dos estadouni­
denses solidarios con causas progresistas, Claude Marks y Donna J. Willmott.,Sl

Entre las muchas agresiones que enfrentaba el pueblo de parte de los grandes intere­
ses imperialistas con el respaldo del gobierno colonial estaban además del proyecto
de explotación minera, el proyecto conocido como “Voz de América” (VOA) y un plan
de manejo de la agencia federal que ocupa el Yunque para talar cerca de una sexta
III | LlX H A Y I SI'AÍ IO DE [.A LlG.A SOCIALISTA Pl I RIORRIQUF NA: 19621989

parte en beneficio de la industria maderera estadounidense. Sobre esto último, una


vez se tuvo conocimiento, el pueblo en general presentó mucha resistencia mientras
el gobierno colonial daba las respuestas ambivalentes acostumbradas?82 Este rechazo
se fortalecía con el repudio de amplios sectores del país a que se hubiese utilizado el
Yunque y otros bosques de Puerto Rico como centro de entrenamiento militar de los
“Contras”?83 Este era un “ejército” que Estados Unidos pretendía armar para invadir
y derrotar al gobierno sandinista revolucionario de Nicaragua. ’8-’ Este operativo de
los “Contras” estaba a su vez rodeado de un escándalo mayúsculo de acciones turbias
tanto de la CIA como de diversos funcionarios del gobierno de Estados Unidos, para
allegar fondos para toda esta campaña contra Nicaragua: vendieron armas secreta­
mente a Irán, un supuesto enemigo entonces de Estados Unidos y vendieron droga
a diversas comunidades del oeste de Estados Unidos, particularmente en California,
siendo las comunidades de afroamericanos las más afectadas.185 Fueron premonito­
rias las palabras de apoyo a las organizaciones clandestinas en “Nuestra posición”.
Poco antes de una gran marcha que Caminantes por la Paz había anunciado para
protestar la tala del Yunque, el EPB-Macheteros, la OVRP y la FARP realizaron unos
operativos contra instalaciones militares en Puerto Rico y en Estados Unidos dejando
un comunicado que advertía contra la tala y otros abusos. Advertían además que el
pueblo no estaba indefenso, como podrían creer los aliados al imperio, tras la muerte
de Corretjer y los arrestos masivos del FBI a los Macheteros el 30 de agosto del 1985.
Inmediatamente después de este operativo clandestino, voceros de diversas agencias
indicaron que se cancelaba el proyecto de tala. De cualquier forma la marcha de Ca­
minantes por la Paz, a la cual asistimos, se dio bajo estricta vigilancia policiaca como
pudimos comprobar en nuestra carpeta política.386

La LSP tomó parte en la denuncia sobre el proyecto “Voice of America” (VOA), cono­
cido como la “Voz de América” y es la organización primer firmante de un extenso
e importante documento publicado en 1986, con el endoso de otras tres organizacio­
nes, el Partido Socialista Puertorriqueño, Pensamiento Crítico y el Taller de Forma­
ción Política?87 El documento da a conocer el origen, el entramado de agencias de
Estados Unidos que lo impulsan, y detalla su alcance para Puerto Rico, en la salud,
actividad económica, integridad ambiental e integridad física para las comunidades
aledañas. Igualmente da a conocer los objetivos de naturaleza militar e imperialista
que persigue el gobierno de Estados Unidos con respecto a los países de Centro y Sur
América y del Caribe. Este proyecto surge en la Segunda Guerra Mundial y lo desa­
rrolla la agencia “United States Information Agency” dependencia del Departamen­
to de Defensa (Pentágono). La USIA lo que realmente proponía era una expansión
de dicho proyecto utilizando a Puerto Rico. El objetivo siempre fue la utilización de
las comunicaciones para adelantar los objetivos del rol de policía exterior de Estados
Unidos sobre la región. El Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos hizo
la solicitud para enajenar 2000 cuerdas del sureste de Puerto Rico, impactando Cabo
Raymond Soto Dávila | 112

Rojo y Lajas. Se proponía una estación radial, nueve transmisores de alta potencia y
12 sistemas de antenas. Las características de toda esta infraestructura se estimaba
perjudicial para la salud por sus emisiones electromagnéticas de onda corta. Dicho
proyecto conllevaba instalar servicios que algunas comunidades no tenían como al­
cantarillado y teléfono, y con esto se pretendía comprarlas. Estos servicios eran res­
ponsabilidad del gobierno de Puerto Rico. La oposición de las comunidades fue muy
militante ya que entendieron la amenaza contra la salud, la agricultura, la industria
de turismo, la flora y la fauna y la integridad física de las comunidades.

Acorde con su postura anti electoral la LSP siguió en la divulgación de su posición y


en la campaña educativa para fundamentarla. Para las elecciones coloniales del 1988,
Ricarte Montes como su representante endosó un documento del FAE junto a otras
organizaciones y personas en su carácter individual. Dicho documento es histórico
ya que aparece como portavoz el héroe nacionalista Oscar Collazo y lo retomaremos
más adelante. (Ver Apéndice I: Documentos, “Declaración del Frente Anti electoral:
Mensaje al Independentismo”) La LSP dio continuidad en su trabajo político en estos
años a la tradición patriótica de acudir a Guánica el 25 de julio en acto de protesta por
la invasión de Estados Unidos por su costa el 25 de julio de i898.’rs La LSP participó
en las efemérides del Grito de Lares el cual los independentistas celebran cada 23 de
septiembre. En esos actos de fechas conmemorativas Ricarte Montes representaba la
LSP.’89 La LSP fue una de las organizaciones que participó de los actos de bienvenida
el 17 de julio de 1985 al patriota liberado Pablo Marcano en la cual se distinguió la pre­
sencia de Consuelo Lee.’90 La publicación El Socialista, continuó en su defensa de las
organizaciones revolucionarias clandestinas como lo hizo con el caso del ataque que
llevaron a cabo los OVPR contra un oficial del ejército de Estados Unidos, Michael
Snyder en noviembre de 1985.’91 Igualmente utilizó sus páginas para dar apoyo a los
Macheteros que enfrentaban cargos por el robo a la Wells Fargo en Connecticut. La
LSP también dio continuidad a la tradición de defender independentistas reprimi­
dos como fue el caso del historiador Juan Manuel Delgado.’92 Apoyó y participó en
actos para honrar patriotas como Andrés Figueroa Cordero y Ángel Rodríguez Cris­
tóbal y mantuvo su solidaridad con el proyecto de construcción de “Museo Biblioteca
Juan Antonio Corretjer”.’9’
!
Hay tantos factores internos como externos para que una organización política se
disuelva. En el caso de la LSP, los factores internos son procesos que le pertenecen
a su militancia y por tanto no vamos a entrar en ellos. Los factores externos en
lo que compete a la realidad nacional deben de discutirse. No lo hacemos en el
ánimo de dar a entender que inclinaron la balanza hacia su disolución ya que este
juicio necesitaría del análisis de los factores internos los cuales ya indicamos no
discutiremos. La excepción que hacemos es la del fallecimiento de sus fundadores
como factor interno. El fallecimiento de Don Juan Antonio Corretjer y la fragilidad
ii3 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Pueriorriqueña: 1962-1989

de salud de Doña Consuelo en los cuatro años que siguieron al fallecimiento de


Don Juan hasta que ella fallece, el 28 de junio de 1989, fueron indudablemente dos
pérdidas contundentes que representaron un golpe para la LSP y también para la
lucha de liberación nacional de nuestro pueblo.’94 La pérdida de Consuelo quedó
plasmada en estas palabras de Filiberto Ojeda Ríos: “Fuiste la Consuelo de Juan
y el consuelo de los luchadores patrióticos en momentos difíciles. Pero no fue el
consuelo tradicional que se traduce en resignación sino aquel que profundiza la
conciencia, aumenta la comprensión y fortalece el espíritu para luchar aun más
contra la adversidad.”

Hay dos factores externos a la LSP, que fueron procesos que se dieron en el inde-
pendentismo que representaron mucha dificultad para la sobrevivencia de la orga­
nización y para la consecución de dos postulados que fueron puntales en su lucha
política: la posición anti electoral o de retraimiento en las elecciones coloniales y
plebiscitos y la no colaboración con el Gran Jurado y como extensión la no crimina-
lización de la lucha. Un tercer factor que aunque de menor peso también contribu­
yó a hacer más difícil la continuidad de la LSP fue el efecto amortiguador del PPD,
el cual se mantuvo en el gobierno colonial desde las elecciones del 1984 hasta las
elecciones del 1992 cuando pierde de nuevo ante el PNP. Sin embargo, en el plano
internacional hubo un rotundo triunfo para las posiciones de la LSP con la libe­
ración de William Guillermo Morales, sobre lo cual abundaremos más adelante.

El mensaje que publicó el FAE y el cual firmó Ricarte Montes y la LSP en marzo de
1988 enfrentó un proceso inverso al que se adhería la LSP, ya que varias organiza­
ciones independentistas se manifestaron en camino a abrazar el proceso electoral
y dar su apoyo al PIP en las elecciones de 1988.’9’ Algunas de estas organizaciones
ya habían entrado en ese proceso en elecciones anteriores pero otras nunca antes
lo habían hecho y parecían estar en una posición que aunque no era idéntica a la
de la LSP se percibían con cierta proximidad, en particular los Macheteros y Pensa­
miento Crítico. El caso de los Macheteros fue muy complicado por varias razones:
(1) A esta organización Corretjer y la LSP cedieron simbólicamente el espacio en el
Comité de Descolonización de la ONU en el 1984» última ponencia que presentó
Corretjer. (2) La organización había sufrido una división muy profunda antes de los
arrestos masivos y surgieron dos organizaciones apartes, el Partido Revolucionario
de los Trabajadores Puertorriqueños (PRTP) y el Ejército Popular Boricua (EPB).
(3) De esas dos organizaciones es una la que avala el proceso eleccionario en ese
momento (PRTP) mientras que la otra (EPB) no toma una decisión al respecto pero
indica su inclinación por métodos de lucha que adelanten la consecución de la in­
dependencia nacional y considera necesario desarrollar las posibilidades de la gue­
rra del pueblo. (4) Los casos que se dilucidaban en corte contra los arrestados del
30 de agosto de 1985 y los otros arrestados posteriormente, todos vinculados a los
Raymond Soto Dáviia | 114

Macheteros, tomaron mucha centralidad y probablemente diluyeron las energías


para implementar un debate profundo y consecuente sobre esta coyuntura.

El documento del FAE firmado por la LSP en el 1988 y al cual ya aludimos, está divi­
dido en seis partes: (1) la independencia y las formas de lucha, (2) las elecciones como
elemento de dominación, (3) las elecciones como mecanismo de legitimación, (4) las
elecciones como elemento de división, (5) las elecciones como elemento desmorali­
zador y (6) y la propuesta de, ante la farsa electoral, la huelga electoral. Como hemos
visto ya, estos planteamientos son frecuentes en la literatura independentista anti
electoral de las organizaciones que sostienen esta postura como la LSP y el Partido
Nacionalista. Cada parte es concisa y analiza cada componente político-ideológico
de las elecciones en Puerto Rico, su razón de ser dentro del régimen colonial y los
diversos efectos políticos sociales en el pueblo puertorriqueño. El ánimo sociológi­
co aunque no era extraño a los documentos de la LSP, aquí se hace más evidente.
Se señala en cuanto a la cuestión electoral que “es necesario centrarse sobre si tal o
cual formas de lucha ayuda a adelantar un objetivo estratégico general”. El proceso
revolucionario de Puerto Rico busca la independencia nacional y el socialismo y se
visualiza lo primero como única vía para la construcción de un orden político, eco­
nómico y cultural que logrará lo segundo. En el documento se destacan las dos in­
fluencias que fueron esenciales para la LSP: la influencia socialista revolucionaria de
Juan Antonio Corretjer y el pensamiento antiimperialista de Pedro Albizu Campos.
El documento señala la necesidad de rescatar la enseñanza albizuista sobre la ¡legali­
dad de la intervención militar de Estados Unidos desde la Guerra Hispanoamericana
en 1898 y el Tratado de París del mismo año. Se cita un señalamiento de Corretjer
el cual alude a los factores subjetivos necesarios en las mentes y ánimos del pueblo
para poder romper con el dominio ideológico imperialista: “Nuestra revolución ha­
brá triunfado sobre el enemigo extranjero tan pronto haya triunfado en la cabeza de
los puertorriqueños.”

La LSP, desde sus inicios, nunca se caracterizó por tener una militancia masiva, sino
que siendo de carácter marxista-leninista, era selectiva en su militancia, la cual era
muy trabajadora y sumamente organizada. El carnaval electorero representó una
muralla para poder continuar desarrollando su línea ideológica más aún cuando un
sector independentista que hasta entonces no había asumido la postura de acudirá
elecciones, se involucró en participar. Como ya indicamos, otro aspecto que hizo di­
fícil la comunicación necesaria con los diversos sectores dentro del independentismo
fue el proceso legal en las defensas de muchos de los Macheteros arrestados el 30 de
agosto y arrestos subsiguientes y las opiniones que dicho proceso generaron en el
corazón del independentismo. Estos compañeros correctamente no negaron el ca­
rácter político de sus acciones pero aceptaron negociar algunos cargos, declarándose
culpables y de esta forma allanar el camino a sentencias más livianas. La perspectiva
ii$ | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962 1989

de sentencias largas, lo cual de hecho ocurrió en algunos de los casos, pareció un di­
suasivo que no dejó de tener repercusiones políticas en la lucha anti imperialista. En
este aspecto escribió Norberto Cintren Fiallo en Claridad lo siguiente: “¿Qué signifi­
ca para el enemigo llegar a unos “acuerdo o negociaciones” con aquellos que son juz­
gados por violar las leyes del sistema? Simplemente criminalizar la lucha arrastrando
consigo un derecho que tiene todo revolucionario de utilizar los métodos de lucha
que entienda necesarios y estén a su alcance para asestar un rudo golpe al sistema
opresor.”396 Juan Antonio Corretjer dio una voz de alerta algunos años antes sobre la
postura de la “tercera opción o alternativa” en lo que concernía a enfrentar el Gran
Jurado en su artículo “Macheteros a la carga” y el cual ya discutimos. 397 Ya para inicios
de 1989, Elizam Escobar, prisionero de guerra y quien militó en la LSP, denunciaba en
Claridad, tanto a Claridad como a Pensamiento Crítico, de ejercer censura sobre las
voces que representan la disidencia en la propia izquierda.398 Sobre Claridad, luego
de admitir que el periódico ha abierto su espacio para dar a conocer a los prisioneros
de guerra, dice: “Sin embargo, esto se ha dado casi exclusivamente al nivel de dar a
conocer nuestras condiciones carcelarias. En cuanto respecto a ofrecernos un espa­
cio para expresar nuestras voces ha sido completamente distinto. Es aquí donde se da
la censura sutil y se da la selectividad, en cuanto a cuales voces y discursos de estos
prisioneros (o de los que están en vías de serlo) se dejan escuchar y se toleran”. Es en
el momento en que ya la LSP lleva tiempo que no circula sus publicaciones que esta
situación se denuncia con la urgencia que el artículo refleja.

Punto aparte y merecida posición de cierre otorgamos en este relato a la liberación


de William Guillermo Morales lo cual ocurrió el 24 de junio de 1988, día en que fue
excarcelado y tomó un avión rumbo a Cuba. Los cargos que pesaban por lo ocurrido
en su arresto en México se le rebajaron y se consideraron cumplidos luego de unos
cinco años de prisión. El gobierno de México no le concedió la extradición a Esta­
dos Unidos, comprobando los dos puntos restantes en que fundamentó Corretjer su
optimismo: México respetaría su tradición de no entregar prisioneros políticos a sus
países de origen y daría continuidad a su solidaridad histórica con nuestra lucha por
la independencia. Un mes antes a William Guillermo le otorgaron la medalla “Roque
Dalton” del Consejo de Cooperación con la Cultura y la Ciencia de Ciudadanos de El
Salvador en México. Ante la negativa de su solicitud de extradición el gobierno de Es­
tados Unidos armó el consabido berrinche y mandó a buscar a su embajador.399 Pablo
Marcano, entonces ex prisionero político, en un escrito sobre el caso de William Gui­
llermo Morales, reconoció a todas las organizaciones patrióticas que velaron por este
desenlace, además de la LSP, mencionó el PIP, PSP, MLN, “etc”. Igualmente establece
que el triunfo de esta lucha se debió al infatigable esfuerzo de las dos abogadas mexi­
canas, Carmen Merino y Pilar Noriega, a quien Juan Antonio Corretjer, el CUCRE,
el MLN y el Comité de Apoyo de Prisioneros de Guerra encomendaron su defensa y
las cuales le cerraron todos los caminos al gobierno de Estados Unidos en la solici-
Raymond Soto DAvila | 116

tud de extradición. Se reconoce que hubo una gran contribución en las actividades
que llevaron a cabo organizaciones como el CUCRE y CASEP en Puerto Rico y otras
organizaciones fraternas mexicanas que lograron comprometer al pueblo mexicano
con la libertad de William Guillermo. Marcano correctamente interpreta que este es­
pacio que se ha conquistado debe significar para el movimiento de liberación nacio­
nal uno desde donde adelantar la lucha por nuestra soberanía nacional y la libertad
incondicional de nuestros prisioneros políticos y de guerra. Son memorables estas
palabras de Marcano: “...el atrecho de libertad que representa William Guillermo
Morales es el camino por donde debemos y haremos transitar al resto de nuestros
prisioneros.” -’00 Este fue el camino que la LSP defendió como principio. El resultado
del trabajo en los espacios de lucha de Corretjer como Secretario General de la LSP
quedó excelentemente expresado en las palabras de Josefina Rodríguez, madre de
Lucy y Alicia Rodríguez, ex prisioneras políticas y de guerra, cuando indica sobre
los mexicanos: “Oiga esa gente amaba a Don Juan Antonio Corretjer. Lo amaban con
pasión esos mexicanos.”401

La LSP se disolvió en el 1989. (Ver Apéndice IV: Entrevistas: Entrevista Ricarte Mon­
tes.) Hemos relatado aquí lo que fue su lucha y lo que fueron sus espacios.
II ; | Ll ( HA Y 1 SI'A( IO DI l.\ Ll(.A SOC.IAI ISI \ P( I RTORRIQl I ÑI962-I989

NOTAS
1 Ver El Socialista (número especial) enero de 1985, Liga Socialista de Puerto Rico, Santurce,
Puerto Rico. Ver Consuelo Lee Tapia, Con un hombro menos, Instituto de Cultura Puertorri­
queña, julio, 1977, pág. 89. Ver Marcos Reyes Dávila, Cronología de Corretjer, Mairena, invierno,
Número 15,1983, pág. 132. Contrario a las fuentes anteriores citadas, Reyes establece la fecha de
fundación de la Liga Socialista de Puerto Rico como 1964.

2 Ver El Socialista, (número especial) enero de 1985, Liga Socialista de Puerto Rico, Santurce,
Puerto Rico.

3 Comunicación personal a Raymond Soto Dávila.


4 Ver G. D. H. Colé, Historia del pensamiento socialista, Vol. 2., Fondo de Cultura Económica,
México, D.F., |Traducción de Rubén Landa], 1964, pág. 90-131 y 167. La Tercera Internacional
Comunista fue precedida de la Primera y Segunda Internacional las cuales se habían disuelto
debido a múltiples problemas. La Primera Internacional se llamó “Asociación Internacional
de Trabajadores” la cual se constituyó en el 1864 y fue producto mayormente de los sindica­
tos obreros de Gran Bretaña y Francia. Se disolvió en el 1871 en medio de la violencia de los
hechos que se suscitaron en la Comuna de París. Ver G. D. H. Colé, Historia del pensamiento
socialista, Vol. 2., Fondo de Cultura Económica, México, D.F., (Traducción de Rubén Landa],
1964, pág. 410. La Segunda Internacional se organizó en 1889 bajo el impulso del Partido Social
Demócrata Alemán y otras fuerzas como los anarco-marxistas y los “Blanquistas , también
anarquistas. Los tres países fundamentales fueron Francia, Gran Bretaña y Alemania y los exi­
lados marxistas de diversos países. Se disolvió en el 1917» desacreditada en medio de los hechos
que rodearon la Primera Guerra Mundial. La posición ante la guerra se tomó fundamentán­
dose en intereses nacionales chauvinistas y no en los intereses intemacionalistas de la clase
trabajadora. La delegación del Partido Comunista (Bolchevique) de Rusia la integró Lenin,
Vorovski, Checherin, entre otros. Ver Vladimir Lenin, Obras escogidas en tres tomos, Tomo 3,
(traducción) Editorial Progreso, Moscú, 1966, pág. 827, Nota 73. El Primer Congreso de la Ter­
cera Internacional Comunista se celebró del 2 al 6 de marzo de 1919 en Moscú. Estuvo bajo la
dirección de Vladimir Lenin. Para preparar dicho congreso se reunieron en conferencia en
enero de 1919 representantes de varios partidos comunistas, grupos comunistas y socialistas. Al
Primer Congreso de la Internacional Comunista asistieron 52 delegados de partidos comunis­
tas y grupos de izquierda de 32 países, 34 de ellos con voz y voto, 18 con voz pero sin voto. La de­
legación del Partido Comunista (Bolchevique) de Rusia la integró Lenin, Vorovski, Checherin,
entre otros. Se planteó el problema de la democracia burguesa y la dictadura del proletariado.
Este último concepto, marxista, lo reafirmó Lenin y fue aprobado por el Congreso. Crearon
dos organismos directivos, un comité ejecutivo y un buró político de cinco miembros electos
por el comité ejecutivo. La importancia de la Tercera Internacional radicó en sus esfuerzos por
restablecer y reforzar los vínculos entre los trabajadores de diversos países. Respondió a las
nuevas condiciones que se formaron después de la Primera Guerra Mundial. Estableció una
serie de principios comunes de propaganda y agitación de las ideas del comunismo y defendió
la doctrina marxista-leninista contra la tergiversación y el envilecimiento de los oportunistas y
demás enemigos. Su trabajo tuvo un gran impacto en las luchas de las décadas del 1920,30 y 40.
La presidencia del comité ejecutivo con la aprobación de todos los partidos comunistas acordó
disolver la Tercera Internacional en el 1943, debido al efecto desestabilizador que representó
para la Unión Soviética la invasión de Alemania desde el 1941* La Tercera Internacional no
logró identificar otro centro desde donde trabajar.
RmmondSotoD^ila | 118

5 Ver Ramón F. Medina López, Juan Antonio Corretjer: Poeta Nacional Puertorriqueño, Cua­
renta años de Poesía (1927-1967, Instituto de Cultura Puertorriqueña, San Juan, 1984, pág. 15-16.

6 Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 17-19.

7 Ver Pedro Aponte Vázquez, Crónicas de un encubrimiento, Publicaciones René, San Juan,
2001.

8 Ver Miñi Seijo Bruno, La Insurrección Nacionalista en Puerto Rico, Editorial Edil, Río Piedras,
1989. Ver Juan Antonio Corretjer, La lucha por la independencia de Puerto Rico, Publicaciones
de la Liga Socialista de Puerto Rico, San Juan, Puerto Rico, 1968, pág. 62-66. Corretjer hace un
análisis del rol de cada partido que acudió a las elecciones y adjudica al Partido Liberal haberse
apropiado de mensajes cuasi nacionalistas para arropar los votos que consiguiera en esa fecha-

9 Ver Juan Antonio Corretjer, op cit., pag. 68-71. Ver Juan Antonio Corretjer, El Líder de la des­
esperación, Guaynabo, Puerto Rico, 1972, pág. 41-49. Corretjer explica las razones por las cuales
la gran gesta movilizadora de Albizu entre los obreros de la caña en huelga no progresó a un
planteamiento ideológico y de acción política que posicionara a los obreros como centro de la
lucha por la independencia. El pensamiento de Albizu todavía no había progresado lo sufi­
ciente hacia una interpretación marxista-leninista.

10 Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 22-23.

11 Ver Edwin Irizarry Mora, Economía de Puerto Rico: Evolución y perspectivas, Thomson Edi­
tores, S. A. de C. V, México, 2001, pág. 50 (nota al calce). Coincidieron con estos programas
federales, el “Plan Chardón”, un plan de ayuda del cual el autor indica lo siguiente: “...Carlos
Chardón, un científico y académico puertorriqueño estaría al mando de la Comisión Puer­
torriqueña de Normas, que redactaría el plan aludido. Luis Muñoz Marín había sido elegido
senador en las elecciones de 1932 por el Partido Liberal. Aunque Muñiz Marín no era miembro
de la Comisión, tendría influencia en el contenido del plan al igual que Tugwell, quien era
secretario auxiliar de Agricultura. Tanto Tugwell como Muñoz Marín serían gobernadores de
Puerto Rico. Tugwell, nombrado por el presidente de Estados Unidos en 1941 gobernaría hasta
1946; y Muñoz Marín, primer gobernador elegido por el pueblo en 1948, gobernaría hasta 1964-

12 Ver Juan Antonio Corretjer, La Lucha por la Independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 67-
68. Dicho libro tuvo su primera edición en 1949. Ya para entonces Corretjer había descubier­
to además del carácter de soborno de las transferencias federales y su efecto negativo en la
I población, las implicaciones nefastas para la lucha por la independencia. Corretjer analiza
también el efecto divisorio que produjeron esas transferencias entre diversos sectores políticos
de entonces. Puso a pelear a la Coalición de partidos anexionistas con el Partido Liberal y den­
tro del Partido Liberal impulsó a Muñoz Marín como supuesto líder de los independentistas
dentro de dicho partido. Esto desmovilizó a muchos independentistas a ingresar al Partido
Nacionalista.

13 Ver Francisco A. Cátala Oliveras, Promesa rota: Una mirada institucionalista a partir de Tu­
gwell (znda. Edición), Ediciones Callejón, San Juan, 2013, pág. 67-68. El autor cita manifesta­
ciones de Tugwell relacionadas a estas ayudas las cuales le parecen atinadas desde el punto
de vista económico. Básicamente, Tugwell lamenta que estas ayudas no se han vinculado al
desarrollo de una base productiva, se concentraron en algunos desarrollos de obras públicas
que luego serian una carga para mantener y redundaba en beneficios para empresas privadas
119 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

con las cuales se había bloqueado todo intento de interferir con ellas. Es importante notar
que Tugwell no alude a un intento de soborno, como lo hace Corretjer, ya que Tugwell estaba
probablemente consciente de que dichos programas sociales eran necesarios para apuntalar el
coloniaje dentro del contexto de la Gran Depresión del 1929 y aplacar los efectos desestabiliza­
dores de la pobreza aguda que se experimentaba en Puerto Rico.

14 Ver Halperin Morton H., Jerry J. Berman, Robert L. Borosage, Christine J. Marwick, The
lawless State: The crimes of the US Intelligence Agencies, Penguin Books, New York, 1976, p.
209-219,310-311. Ver “Who invented the Grand Jury?” The Straight Dope, En htpp://sraightdope.
com/mailbag/mgrandjury.html recuperado el 23 de agosto de 2007. Ver “Lavonne Luquis,
“Grand Jury concept carnes forth long tradition”, The San Juan Star, May 19,1991, p. 16. Muchos
estudiosos de la historia del Gran Jurado Federal señalan sus orígenes en el Gran Jurado inglés
desde el año 1066 cuando Inglaterra fue invadida y conquistada por los normandos. (Norman-
día es hoy parte de Francia.) Los normandos impusieron sus instituciones políticas, económi­
cas, culturales y jurídicas, entre estas últimas, la Gran Inquisición normanda. Es específica­
mente desde 1164, bajo el reino de Enrique II (1154-1189) que comenzó un largo proceso en
etapas en el desarrollo del Gran Jurado inglés. En ese proceso sirvió a los intereses del rey
frente a los señores feudales y a la Iglesia Católica. En su etapa de jurado acusador tuvo am­
plios poderes incluyendo la prueba de tormento. Ya para el Siglo 17 algunos de sus poderes se
modificaron. De ahí en adelante, el énfasis del Gran Jurado inglés fue en el poder investigativo.
El Gran Jurado también paso por varias etapas luego de comenzar la colonización inglesa en lo
que es hoy Estados Unidos. Al independizarse de Inglaterra el gobierno de Estados Unidos lo
adoptó a su cuerpo jurídico y desde entonces también ha pasado por varias etapas. La constan­
te siempre fue su uso para la represión política contra la disidencia. Bajo la administración
presidencial de Richard Nixon en el 1970 se añade el Gran Jurado Federal “especial”, presunta­
mente dirigido al crimen organizado, siguiendo la ley conocida como “RICO Act”. De ahí en
adelante se aplicó a todos los sectores de disidencia política y social en Estados Unidos,
afroamericanos, chicanos, indígenas americanos, feministas, periodistas, abogados y a lucha­
dores independentistas tanto en Puerto Rico como en comunidades boricuas en Estados Uni­
dos. Un Gran Jurado Federal está integrado por entre 16 a 23 personas, ciudadanos de Estados
Unidos. Ningún gran jurado puede convocarse sin un quorum mínimo de 16 personas según la
reglaó(a) (1), de las Reglas Federales de Proceso Criminal. El quorum de 16 personas es el núme­
ro mínimo requerido para realizar la investigación. Se supone que los procesos investigativos
del Gran Jurado Federal buscan establecer si hay actividad criminal organizada o si se han co­
metido graves delitos federales. Nombran un presidente y vicepresidente para administrar las
juramentaciones a los testigos que testifiquen ante el Gran Jurado, presidir las sesiones y ase­
gurar que haya el quorum requerido. Dado a que los procedimientos del Gran Jurado son se­
cretos, este se reúne en áreas que no son accesibles para el público general como las salas reser­
vadas de la Corte Federal. El Gran Jurado tiene un poder investigativo de extraordinario
alcance y poder de intimidación. Puede radicar órdenes de subpoena para recoger evidencia y
usarla en la investigación de crímenes o delitos graves bajo la juridicción federal. Puede consi­
derar como evidencia un simple rumor y requerir sus huellas digitales, muestras de pelo, escri­
tura, ir a una rueda de identificación, dar testimonio, etc. sin que medie acusación alguna ini­
cialmente. Luego esa evidencia que se recoge puede utilizarse contra el testigo en un
procedimiento posterior. La persona citada comparece ante un gran jurado sin derecho a estar
acompañado de un abogado. Se enfrenta totalmente solo, a la merced del Gran Jurado y de la
fiscalía federal. El abogado del citado permanece fuera de la sala y el citado debe pedir permi­
so para salir y consultar a su abogado dondequiera que lo hayan ubicado si desea consultarlo
sobre un requerimiento. La faena represiva del Gran Jurado federal la utilizó la fiscalía federal
Raymond Soto DAvila | 120

y el FBI en el caso de Puerto Rico desde el 1936, fecha en que arremetió contra el Partido Nacio­
nalista de Puerto Rico y su entonces Secretario General, Juan Antonio Corretjer. Treinta y nue­
ve años después, en 1975, volvieron a usar el Gran Jurado contra el movimiento independentis-
ta puertorriqueño tanto en Puerto Rico como en Estados Unidos. Entre 1975 y 1989 hubo varios
Gran Jurados federales convocados, con el resultado de más de veinte independentistas encar­
celados. En los años que siguieron al asesinato de Filiberto Ojeda Ríos cometido por el FBI en
el 2005, el Gran jurado cito a tres jóvenes independentistas pero los casos no progresaron. El
Gran Jurado Federal tiene dos clasificaciones: el Gran Jurado Federal y el Gran Jurado federal
especial. El primero tiene un término básico de 18 meses, que lo pueden extender por seis
meses para un total de 24 meses. Este tipo de Gran Jurado Federal escucha y examina la eviden­
cia que presenta la fiscalía federal y considera la posible radicación de acusaciones por delitos
o crímenes en la juridicción federal. El Gran Jurado Federal especial se creó en 1970 bajo la
administración presidencial de Richard Nixon. El término básico de este tipo de gran jurado es
de 18 meses y lo pueden extender otros 18 meses. Se puede encarcelar a cualquier persona que
se niegue a cumplir con una exigencia o requerimiento del Gran Jurado hasta que colabore o
se extinga el periodo del Gran Jurado. Dado a que el Gran Jurado es de carácter investigativoy
oficialmente no tiene poder judicial coercitivo para ordenar un encarcelamiento es el juez del
Tribunal Federal quien se encarga de ordenarlo a solicitud del Gran Jurado Federal. El encar­
celamiento puede darse por vía del desacato civil o del desacato criminal. En el desacato civil a
la persona citada se le puede encarcelar durante el término que le resta al Gran Jurado Federal
o hasta un máximo de 18 meses. En el desacato criminal, el proceso requiere un juicio por jura­
do para determinar si el citado ha desacatado luego de lo cual el juez puede imponer una pe­
nalidad de cárcel que varía pero puede ser más de 18 meses, como ya ha ocurrido. Al presente
es incierta la etapa en que puede encontrarse la institución del Gran Jurado, luego de que Es­
tados Unidos pasara la ley “Patriot Act”, la cual es más abarcadora en su autoridad y suspen­
sión de derechos ciudadanos y humanos. La tradición de no colaboración con el Gran Jurado
que iniciara Juan Antonio Corretjer y el Partido Nacionalista en el 1936 la siguieron muchos de
los citados y citadas de la causa independentista en la década del 1970 y 1980, tanto en Puerto
Rico como en la diáspora y se extendió a luchadores de otras nacionalidades solidarios con
nuestra causa. Residían fuera de Puerto Rico al ser citados y resistieron Lureida Torres, María
T. Cueto, Raisa Nemikin, Julio Rosado, Andrés Rosado, Luis Rosado, José López, Roberto Cal­
dero, Ricardo Romero, Pedro Archuleta, Steven Guerra, Silvia Baraldini, Michelle (Shelly) M¡-
11er, Mariano Viera, Pamela Faden y Robert Lederer. Algunos de ellos enfrentaron dos citacio­
nes y hubo casos de desacato civil y de desacato criminal. En Puerto Rico fueron citados dos
veces y resistieron Norberto Cintrón Fiallo, Carlos Rosario Pantojas y Carlos Noya (epd). Este
último enfrentó un desacato civil y un desacato criminal. Resistieron una citación Federico
Cintrón Fiallo, la cual fue por desacato criminal y Ricarte Montes García, Alberto de Jesús Be-
rríos y Raymond Soto Dávila por desacato civil. Ver Michael E. Deutsch, “The Improper Use of
the Federal Grand Jury: An Instrument for the Internment of Political Activists”, Journal of
Criminal Law & Criminology, Winter, 1984. Recuperado de www.lawcollective.org/article.
php?id=i7 en 2 de diciembre de 2013. Ver Judith Berkam, The Federal Grand Jury: introduc-
tion to the institution, its historical role, its current use and the problems faced by the target
witness, Revista Jurídica de la Universidad Interamericana de Puerto Rico, Vol. XVII, Núm. 2,
enero-abril, 1983, pág. 103-150.

15 Ver Félix Ojeda Ríos, Vito Marcantonio y Puerto Rico: Por los trabajadores y la Nación, Edi­
ciones Huracán, Río Piedras, 1978, pág. 47. Este congresista estadounidense de trayectoria pro­
gresista le envía carta a Corretjer el 15 de mayo de 1939 informándole que había logrado que se
destituyera a Winship del cargo de gobernador de Puerto Rico.
121 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Pli riorriqlt.ña: 1962-1989

ló Ver Marisa Rosado, Las llamas de la Aurora, Editora Corripio, República Dominicana, 1992,
pág. 168-169.

17Ver Miñi Seijo Bruno, op cit., pág. 19. Los nacionalistas entrevistados por la autora describen
a Albizu como casi moribundo. Ver Pedro Aponte Vázquez, Yo acuso y lo que pasó después,
Publicaciones Rene, San Juan, 1998, pág. 129. No se debe confundir esta reclusión hospitalaria
con otras reclusiones que tuvo Albizu y hechos relacionados. Albizu estuvo recluido en dos
ocasiones para un total de ocho años (entre 1956 y 1964) en el Hospital Presbiteriano (ahora
Hospital Ashford) en calidad de preso político pues lo habían encarcelado desde el 1954 en la
Cárcel La Princesa de San Juan luego del ataque al Congreso de Estados Unidos por cuatro
nacionalistas. Es en la cárcel La Princesa que Albizu sufre las quemaduras compatibles con
irradiación. Muchos años antes, en enero de 1931, Albizu, sin embargo, había denunciado a la
prensa el escándalo del Dr. Cornelius P. Rhoads en el Hospital Presbiteriano y sus trasplantes
de cáncer a puertorriqueños y fue a ese mismo hospital al cual transfirieron a Albizu como
preso, (pág. 4). Ver también Pedro Aponte Vázquez, Crónicas de un encubrimiento, op cit.

18 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, Editorial Edil, Río Piedras, 1980,
pág. 283.

19 Ver Juan Antonio Corretjer, La Lucha por la Independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 104-
105.

20 Ver Juan Antonio Corretjer, 1898-1998: 21 textos para too años de lucha, Casa Corretjer, Cía­
les, 1998, pág. 98.
21 Ver Elsia Luz Cruz Torruella (9 de marzo de 2011) A la sombra de Juan Antonio Corretjer:
Consuelo Lee Tapia, Escribiendo en voz alta. Recuperado de siluz.blogspot.com/.../la-sombra-
de-juan-antonio-corr en el 20 de octubre de 2013. Ver El Alfabeto Patriótico por Consuelo Lee
Corretjer, Los Cien Años de Consuelo - Puerto Rican Cultural Center. Recuperado en prcc-ch-
go.org/.../Pairiotic-Alphabet-2004-small.pdf en el 20 de octubre de 2013.

22 Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 27.

23 Ver Ramón F. Medina López, op cit. pág. 29.


24 Ver Ivonne Acosta, La palabra como delito, Editorial Cultural, Río Piedras, Puerto Rico, 1993»
pág. 11. Esta ley estatal declaraba “delito grave” fomentar, abogar, aconsejar o predicar la nece­
sidad, deseabilidad o conveniencia de derrocar, paralizar o destruir por medio de la violencia
al gobierno de Puerto Rico o cualquiera de sus dependencias. Se prohibía el material impreso
y organizar grupos con esos fines. N de A: Recuérdese que en Estados Unidos en la década del
1950 se dio la purga “Mac Carthista” contra miembros o simpatizantes del Partido Comunista
en Estados Unidos.
25 Ver Arturo Meléndez López, La batalla de Víeques, Editorial Edil, Río Piedras, Puerto Rico,
2000, pág. 75.

26 Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op cit., pág. 337.


27 Ver Arturo Meléndez López , op cit. pág 92-94. Se reproduce una gran parte del artículo
Raymond Soto Dávila | 122

de Corretjer, publicado por El Imparcial, domingo 20 de febrero del 1949, pág. 22 y 31. No se
incluye el título.

28 Ver Juan Antonio Corretjer, La lucha por la independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 34

29 Ver Che Paraliticci, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, Ediciones Puerto, San Juan, Puerto Rico, 2004. La cifra de arrestados por la Ley
53 se obtuvo haciendo un comeo del listado nombre por nombre que se encuentra en el libro.

30 Ver Miñi Seijo Bruno, op cit. pág. 209-210.

31 Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 30. El autor cita como referencias varios artículos
del periódico El Mundo entre los días iro. de noviembre al 8 de noviembre de 1950 (nota 49).

32 Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 30-31. El autor cita como referencias para el anun­
cio del retiro de Corretjer, El Mundo, 19 de agosto de 1952 y El Mundo, 29 de agosto de 1952
(nota 50).

33 Ver Juan Antonio Corretjer, Discurso del 30 de octubre, Publicación de la Liga Socialista
Puertorriqueña, 1967.

34 Ver Michi Nishiura Weglyn, Years of infamy: The untold story of Americas concentration
camps, University of Washington Press, Seattle, (updated edition), 1996, p. 58-59. Para convocar
esta reunión de ministros de exterior, Estados Unidos creó una agencia interamericana espe­
cial, “Emergency Committe for Political Defense”. Participaron alrededor de quince países de
Centro y Sur América y el Caribe. Los dos países que se negaron a desarrollar los campos de
concentración del plan hemisférico propuesto por Estados Unidos fueron Chile y Argentina.

35 Ver Elsia Cniz Torruella, op cit. Ver El Alfabeto Patriótico de Consuelo Lee Corretjer, op cit.

36 Ver Manuel Maldonado Denis, Puerto Rico: Una interpretación histórico-social, Siglo Vein­
tiuno, Distrito Federal, México, 1969, pág. 183-185. La Ley 600 recogía gran pane de las dos leyes
anteriores impuestas por Estados Unidos a Puerto Rico desde la invasión de ese país al nuestro
en el 1898, conocidas como Ley Foraker (1900) y Ley Jones (1917). El Congreso de Estados Uni­
dos aprobó esta ley el 3 de julio de 1950, apenas año y medio de haber sido electo gobernador,
Luis Muñoz Marín en las elecciones de finales del 1948 cuando por primera vez Estados Unidos
permitió a Puerto Rico elegir un gobernador. La Ley 600 disponía (1) la celebración de un “refe­
réndum” para decidir si se deseaba organizar un gobierno con una constitución propia, (2) Del
voto resultar mayoritariamente afirmativo se “autorizaba” a la legislatura colonial de entonces
a convocar una “Convención Constituyente”, (3) Esa “Convención Constituyente” redactaría
dicha constitución y (4) El Presidente de Estados Unidos la presentaría al Congreso de Estados
Unidos para su aprobación. Esta aprobación del Congreso de Estados Unidos dependería de
que la Constitución de Puerto Rico no contraviniera los derechos que sobre Puerto Rico la
propia Ley 600 se reservaba de antemano.

L
37 Ver Vicente Geigel Polanco, La farsa del Estado Libre Asociado, Editorial Edil, Río Piedras,
1981, pág. 188-196. Luego de redactada la llamada Constitución de Puerto Rico y la Ley 600 que
reglamenta las relaciones federales para Puerto Rico, el gobierno de los Estados Unidos le no­
tificó a las Naciones Unidas que no seguiría enviando informes sobre Puerto Rico como estaba
obligado porque ya Puerto Rico había alcanzado gobierno propio. La Comisión de Informa­
ción sobre Territorios Dependientes de la ONU no aceptó esto y determino que la Asamblea
123 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña; 1962-1989

General de la ONU era el foro adecuado para decidir. Luego el caso pasa a la Cuarta Comisión
de la Asamblea General donde se discuten una serie de enmiendas liberalizadoras de las que
hasta entonces se consideraban como factores para decidir si un país había alcanzado la ple­
nitud del gobierno propio. En esa votación la independencia del territorio salió favorecida.
Luego de muchas otras enmiendas votadas, la Comisión votó a favor por un estrecho margen
que Estados Unidos cesara el envío de informes: 22 a favor, 18 en contra y 19 abstenciones. Fi­
nalmente presentan la resolución al pleno de la Asamblea General resultando en 26 a favor, 16
en contra y 18 abstenciones. Durante todas las instancias del proceso Estados Unidos presiono
a través de la persuasión la ayuda económica y la presión diplomática para que diversos países
que inicialmente no favorecían la resolución cambiaran su voto o se abstuvieran. Algunos de
los que cambiaron el voto fueron Honduras, El Salvador, Bolivia y el bloque árabe. Este último
se abstuvo porque temía repercusiones en los casos de las colonias que todavía tenían como
Yemen y Argelia. Se mantuvieron firmes a pesar de las presiones México, Guatemala e India,
siendo la participación de la delegada de la India brillante y valiente. El autor expresa descon­
cierto de que el Dr. Fernós Isern declaró ante la ONU que Puerto Rico era un estado libre, no
sujeto a autoridad superior.

38 Ver Juan Antonio Corretjer, La sangre en huelga: Notas de la resistencia al Servicio Militar
Obligatorio, Guaynabo, Puerto Rico, 1966; Ver Che Paralitici, No quiero mi cuerpo para tambor:
El Servicio Militar Obligatorio en Puerto Rico, Ediciones Puerto, San Juan, 1998. Ver Juan An­
gel Silén, Hacia una visión positiva del puertorriqueño, Editorial Antillana, Rio Piedras, 1976,
pág. 123-126.

39 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op cit., pág. 427-428.

40 Ver Edwin Irizarry Mora, op cit., pág. 72. A partir del 1948 este autor identifica tres etapas:
(1) Industria liviana (1948-1965) El énfasis era en ropa, textiles, productos enlatados y otras si­
milares. Su factor principal de producción fue la mano de obra. (2) Industria pesada y semi
pesada (1965-1982) basada en la industria de refinación de petróleo y en el establecimiento de
industrias satélites del renglón de las petroquímicas. Su factor principal de producción ya no
era la mano de obra, la cual era menor, sino el capital, a través de complejas instalaciones de
maquinaria y equipo especializado. (3) Alta tecnología, en traslapo con la anterior (1976 hasta
el presente). Las industrias principales son la electrónica, farmacéutica y otros químicos, in­
dustrias de interés científico y otras intensivas en el uso de tecnología sofisticadas. Igual que
la anterior, el factor principal no es la mano de obra sino la utilización intensiva maquinaria y
equipo especializado. Esta etapa inicia con la aprobación de la Sección 936.

41 Ver Manuel Maldonado Denis, op cit., pág. 147-156. La Ley de Tierras limitaba la tenencia a
500 acres. Su propósito fue fomentar la agricultura de pequeñas fincas pero adolecía de la ca­
pacidad económica para competir con el desarrollo industrial que ya se daba en Estados Uni­
dos y su efecto fue hacerlas más débiles. Maldonado Denis concluye a base de otras opiniones
que cita, que la opción que debió tratarse fue la nacionalización.

42 Ver Luis A. López Rojas, La Mafia en Puerto Rico: Las caras ocultas del desarrollo, Isla Negra,
San Juan, 2004.

43 Ver Ramón F. Medina López, op. cit pág. 32.

44 Ver Ramón F. Medina López, op. cit. pág. 36-37.


Raymonii Soto D.ávila | 124

45 Ver El Socialista Extra, Edición Extraordinaria, 3 de marzo de 1985, pág. 3. Ver Ramón F.
Medina López, op cit. pág. 32-34. A finales de la década del 1950, a partir del triunfo de la Re­
volución Cubana, Corretjer viaja frecuentemente a diversos países y toma parte en diversas
actividades encaminadas a buscar apoyo para la independencia de Puerto Rico y en apoyo a la
Revolución Cubana. Conoce a Che Guevara estando de visita en Cuba luego de varios meses
del triunfo de la Revolución Cubana, en agosto de 1959. Ver El Socialista, Año XVIII, Núm.
98, pág. i, ver Correo de la Quincena, Tomo II, 24 de agosto al 8 de septiembre de 1965, pág. 2
y ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 36. Sus viajes le trajeron una respuesta represiva
del imperio, inclusive fuera de territorio estadounidense ya que Corretjer fue encarcelado en
México en 1962 para supuestamente proteger al Presidente Kennedy, en ocasión de una visita
de Kennedy a ese país y dando como excusa la intromisión de Corretjer en asuntos de México.
N. de A. El asesinato de Kennedy dentro de territorio estadounidense ocurrido en 1963 todavía
es objeto de controversia. Ver Ramón F. Medina López, op cit., pág. 32-33. Corretjer conoció en
viajes a partir del 1960, a Lázaro Cárdenas de México, a Juan José Arévalo de Guatemala y a
Velasco Ibarra de Ecuador, todos los cuales lo apoyaron. Hizo gestiones en Bolivia y Chile. La
experiencia con Venezuela fue mixta. Llegó en ocasión de celebrarse el Segundo Congreso de
Libertad y Democracia en Caracas en abril de 1960. Corretjer no logró el apoyo de figuras tan
emblemáticas como Rómulo Gallegos. Estados Unidos intentaba maniobrar para conseguir
una resolución condenatoria contra la Revolución Cubana contando aparentemente con el
apoyo de figuras identificadas con la “izquierda democrática”. Corretjer logró ser admitido en
el Congreso con el apoyo de la delegación venezolana. La numerosa representación de Estados
Unidos no logró la resolución contra Cuba pero Corretjer sí logró una resolución en apoyo a
la independencia de Puerto Rico. A dicho congreso asistieron Salvador Allende, Eduardo Freí,
ambos futuros presidentes de Chile y Chedi Jagan, figura importante en la descolonización de
Guyana. Por otro lado, el interés por Venezuela continuaría a través de los años y se reflejaría en
las publicaciones de la LSP. Ver por ejemplo, “Entrevista a Elias Manuit”, Correo de la Quince­
na, 24 de noviembre al 24 de diciembre de 1966, pág. 2. Se da a conocer la historia de Venezuela
y el desarrollo de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN) de Venezuela, y a uno
de sus fundadores, Elias Manuit Camaro y presidiendo el Comandante Douglas Bravo el frente
guerrillero, José Leonardo Chirinos.

46 Ver Juan Antonio Corretjer, “Allende, un fanático de la legalidad", Correo de la Quincena,


Volumen IX, Números 185-188, tro. de agosto al 15 de septiembre de 1973, pág. 3C.

I 47 N. de A.: “La patria radical” es un conjunto de conferencias y escritos de Juan Antonio Corre­
tjer que versan sobre las elecciones, el proceso electoral y el origen e intención del plebiscito.
La más temprana edición de la que hemos tomado conocimiento es del 1971, auspiciada por el
Comité Regional del Sur de la LSP, le sigue otra edición de 1975, y una cuarta edición ampliada
■I en 1976. Por otro lado bajo el título de “Advertencia revolucionaria” en el 1971 se publican varios
escritos con la misma temática.

48 Ver Correo de la Quincena, tomo 1, Núm. 4,8 de enero de 1964. En dicho número se anuncia
programa radial por WKFE, “Radio Bandera”, los domingos de 12:30 a 1:00 PM.

49 Ver El Socialistael, Año IV, Núm. 37, septiembre de 1970, pág. 6-7.

50 Ver El Socialista, Año IV, Núm. 38, octubre de 1970, pág. 8.

51 Ver El Socialista, Año IV, Núm. 37, septiembre de 1970. En el artículo “Aquí está el Che" se
menciona que la LSP distribuyó en Rio Piedras el 11 de octubre de 1965 la primera versión puer-
125 | Licha y eseaí iu de la Liga Sik iai isi \ Pt 1 rtorriqueña: 1962-1989

torriqueña de la carta de renuncia del Che dirigida a Fidel.


52 Ver General Vo Nguyen Giap, Bases fundamentales de la guerra popular (extracto), reprodu­
cido en Correo de la Quincena, tomo V, Núm. 93, tro. de mayo de 1968, pág. 3-4.

53 Ver Lenin: La guerra de guerrillas, El Socialista, Año 1, Núm. 19, diciembre de 1967, pág. 3.

54 Ver Juan Antonio Corretjer, “Proyecciones históricas de Lares”, La Historia que gritó en La­
res, Guaynabo, Puerto Rico, pág. 75-86. Es interesante que el análisis hace hincapié en la dife­
rencia en el por ciento de tierras de cultivo entre Cuba y Puerto Rico para estimar a su vez el ni­
vel de descontento. El 91 por ciento era de propietarios en Puerto Rico mientras que solamente
el 43.5 por ciento en Cuba la administraban los dueños. El porciento de arrendamiento entre
las dos islas era bien diferente, siendo en Puerto Rico el 7 porciento mientras que en Cuba era
524 porciento. Ver Juan Antonio Corretjer, “Entendimiento de Lares", EL NACIONAL, Núm.
i> 9/1975 San Juan, Puerto Rico. Es interesante que esta publicación que circulaba entonces el
Centro Nacional de las Artes editorializa a Corretjer como un periodista que estaba dentro de
la línea hostosiana.

55 Ver Manuel Maldonado Denis, op cit., pág. 158.

56 Ver Miriam Muñiz Várela, “La crisis económica y las transformaciones sociales en Puerto
Rico: 1973-1983", Adiós a la Economía: seis ensayos sobre la crisis, Ediciones Callejón, San Juan,
2013, pág. 43. La autora establece que durante esas décadas hubo un periodo sostenido de in­
tensa acumulación de capital combinado con aumentos en los salarios reales.

57 Ver El Socialista, Año X, Núm. 72,1976. Ver El Socialista, Año 10, Núm. 74,1976.

58 Ver Consuelo Lee Tapia, Con un hombro menos, Instituto de Cultura Puertorriqueña, San
Juan, julio de 1977.
59 Ver Juan Antonio Corretjer, Canciones de consuelo que son canciones de protesta, Guay­
nabo, Puerto Rico, 1971. En “Notas", Corretjer aclara que “Las canciones de Palmer” se refieren
a la larga huelga de los trabajadores de Palmer contra General Electric y se dedica a Myriam
Fuentes por su militancia a favor de los huelguistas y a Consuelo Lee, quien junto a Corretjer
sufrió un atentado producto de la militancia de la LSP a favor de los huelguistas.

60 Ver Carlos Quiles, Memorias de Josefina, Publicaciones Gaviota, Rio Piedras, 2005, pág. 202-
203.

61 Ver Palante, Año i, Núm. II, 1965.


62 Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit pág. 195-198.
\Ver Luis A. López
63 t Rojas, La Mafia ” i en Puerto Rico, op cit., pág. 72-73. Ver Guillermo Villa-
blanca, “La corrupción en la Policía no comenzó ayer”, Pensamiento Crítico, Año VI, Núm. 34,
1983, pág. 9-11.

64 Ver “Escritores norteamericanos ocultan la riqueza de Puerto Rico”, Pabellón, Año 1, Núme­
ro 5, pág. 4 y 9. Se debe recordar que Corretjer además de historiador fue miembro del Partido
Nacionalista y conocía a cabalidad los planteamientos de Albizu. En este artículo se denuncian
RaymondSoio Davii.a | 126

intelectuales encumbrados que se prestaron a definir a Puerto Rico como carente de recursos
naturales.: el Profesor Walter Hamilton, de la Universidad de Yale, el sociólogo, Kingsley Davis,
el economista John K. Galbraith y el científico Harvey S. Perloff. Ver “Defensa de Puerto Rico:
Elogio de Albizu Campos”, Pabellón, Año 1, Número 5, pág. 4. Se reproducen las palabras de
Che Guevara ante la ONU al excarcelarse a Albizu Campos. Guevara tilda el acto de excarce­
lación como un acto "hipócrita” dado el estado avanzado de deterioro de la salud de Albizu.
N de A: Son palabras como éstas los que daba al gobierno de Estados Unidos la justificación
para amarrar todos los recursos de Puerto Rico y evitar cualquier avance del bloque socialista
y otros enemigos de sus ansias imperialistas.

65 Ver Karl Wagenheim, “Copper: The billion dollar secret”, San Juan Review, Vol. 1, No. 12,
January, 1965, p. 5-8. Se cita un informe del US Bureau of Mines del 1941, el cual admitía que
existían recursos minerales en Puerto Rico, y que afirmaba que de haber estado en otras tie­
rras, se hubiesen explorado. Indica que ya hay dos compañías explorando, dos subsidiarias
de compañías matrices mineras estadounidenses, American Metals Climax, Inc y Kennecott
Copper. Se pregunta cómo es que los "expertos estadounidenses” no leyeron este informe y
concluye que sería nada menos que una “falta ética” nacionalizar el proyecto de explotación
minera luego que estas compañías han invertido millones en explorarlas. Ver “Informe de la
Comisión Especial” de la Cámara de Representantes fechado el 7 de julio de 1965. El mismo
(1) No hace ni una mención de los costos ambientales y de salud de este proyecto, (2) Dice que
según la “Ley de Minas” al que le hayan ofrecido el permiso de la exploración le deben con­
ceder el permiso de explotación y da por bueno que le toque a las dos compañías subsidiarias
existentes, (3) Aconseja crear profesionales en ramas de la producción minera sin reconocer el
hecho de que esto lo va a sufragar el erario público, (5) Recomienda a tres entidades del ELA (
Autoridad de Carreteras, el Depto. De Obras Públicas y la Junta de Planificación) a clasificar las
carreteras según la prioridad para la actividad minera sin mencionar las consecuencias para
la actividad productiva y las necesidades de movilidad del pueblo y (6) No hace recomenda­
ción alguna para el conflicto de interés en que incurrió el poderoso bufete McConnel.-Valdés,
Kelley al representar a la misma vez a una entidad creadaspor el gobierno para proteger los in­
tereses del pueblo como lo fue la Comisión de Minería y a una de las subsidiarias, lo cual hizo
durante más de un año. Sin embargo a la subsidiaria contratante del bufete se le recomienda
ser premiada con renovación de permisos. N de A: Para los que crean que el cinismo de los
"neoliberales” es reciente, tomen nota.

66 Ver Correo de la Quincena, 8 al 24 de octubre de 1966, Tomo III, Núm. 71, pág. 1.

67 Ver El Socialista, Año 1, Núm. 12, diciembre de 1967.

68 Ver Manuel Maldonado Denis, op cit., pág. 177.


!
69 Ver El Socialista, Año 3, Núm. 28, abril, 1969.

70 Ver El Socialista, Año 2, Núm. 22, octubre de 1968.

71 Ver Juan Antonio Corretjer, “El 30 de octubre de 1950”, Correo de la Quincena, 8 al 24 de


octubre de 1966, Tomo III, Núm. 71, pág. 2-4.

72 Ver Juan Antonio Corretjer, “Discurso del 30 de octubre”, op cit.

73 Ver Luis Nieves Falcón, Un siglo de represión política en Puerto Rico 1898-1998, Ediciones
i2j I Lucha y espacio de ia Liga Socialista Puertorriqueña; 1962-1989

Puerto, San Juan, 2009. En el Apéndice Número 3: “El asesinato político en Puerto Rico: Fili-
berto Ojeda Ríos y la complicidad oficial”, pág. 261, se cita un documento en el cual se revela
que el FBI incurrió en crear grupos, falsificar documentos y enviar cartas anónimas con el fin
de desestabilizar al movimiento independentista y ami plebiscitario de 1967. Entre los grupos
que crearon, uno se llamó “Grupo para uso voto MPI” y otro “Comité contra la dominación
extranjera de la lucha por la independencia”. Las cartas anónimas se enviaban a independen-
listas con el fin de destruir reputaciones de otros independenlistas y los documentos filtrados
se falsificaban de forma tal que ciertos independistas o líderes sindicales parecieran que eran
agentes.

74 Ver Luis A. López Rojas, op cit., pág. 74-80.


75 Ver Francisco A. Cátala Oliveras, Promesa Rota: Una mirada institucionalista a partir de
Tugwell (anda Edición), Ediciones Callejón, San Juan, 2013, pág. 96-118. La venta la realizó Jesús
T. Pinero, nombrado gobernador por el presidente de Estados Unidos y quien gobernó desde
septiembre de 1946 hasta 1948. Las cinco subsidiarias se crearon entre el 1942 y ¡946. La de ce­
mento fue una herencia de la PRRA que el gobierno continuó desarrollando por unos cuatro
años, bajo la recién creada Compañía de Fomento en el 1942, hasta vendérsela a la Familia
Ferré a quien también le vendieron otras tres, la Corporación de Vidrio, la Corporación de
Papel y Pulpa y la Corporación de Arcilla. Solamente vendieron a otros intereses la Compañía
de Zapatos y Cuero.

76 N. de A. A esta organización perteneció Raymond Soto Dávila.

77 Ver José Marcano, “La muerte de Varona”, El Socialista, Año 2, Núm. 15, marzo de 1968, pág. 3.

78 Ver Pedro Juan Rúa, Resistencia nacional y acción universitaria, Editorial Edil, Río Piedras,
1988, pág. 12. La invasión a la República Dominicana se programó desde Ramey Field en Agua-
dilla, Puerto Rico y tuvo como propósito aplastar la insurrección popular en la República Do­
minicana de aquél entonces.
79 Ver Juan Antonio Corretjer, La sangre en huelga: Notas de la resistencia al Servicio Militar
Obligatorio, op cit., pág.39-41.
80 Ver Juan Antonio Corretjer La sangre en huelga: Notas de la resistencia al Servicio Mili­
tar Obligatorio, op cit., pág. 40. Corretjer advirtió que la composición de este comité era de
tal magnitud que era una advertencia al imperio sobre cuán grave era la herida de la imposi­
ción del SMO al pueblo. Ver Juan Angel Silén, Hacia una visión positiva del puertorriqueño,
Editorial Antillana, Rio Piedras, 1976, pág. 192. El comité estaba organizado en diez distritos y
multiplicidad de municipios. Su presidenta era la Doctora Piri Fernández y contaba con figu­
ras como la Dra. Isabel Gutiérrez del Arroyo, Dra. Margot Arce de Vázquez, Dr. Manuel Mal-
donado Denis, Dr. José Ferrer Canales, Leda. Nilita Vientos, René Marqués y Antonio Torres
Martinó. N. de A. Sabemos que hubo otras figuras de mucha aceptación en Puerto Rico que
trabajaron en esta estructura.
81 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op. cit. pág. 481.

82 Ver Juan Antonio Corretjer, La sangre en huelga: Notas de la resistencia al Servicio Militar
Obligatorio, op. cit., pág. 52-53. Corretjer indica que: “La prensa, la radio, la tv, no pudieron ha­
cer una miniatura más miniatura de esa significativa actividad de nuestra juventud... Sobre las
RaymondSoio Dáviia I 128

reacciones del pueblo Corretjer indica que la marcha “fue recogiendo los altos sentimientos y
las vivas expresiones de afecto de su pueblo... y el reservado, respetuoso silencio de aquellos no
menos conscientes de la razón patriótica de la protesta pero sí más sensitivos a la omnipresente
posibilidad de la represalia.”

83 Ver El Socialista, Año 1, Núm. 5,1 de mayo de 1967. Se relata la actividad en el pueblo de
Guánica. Ver El Socialista, Año 1, Núm. 2,15 de mayo de 1967. Se relata la actividad en Guaya-
nilla. Ver El Socialista, Año 1, Núm. 3,1 de junio de 1967. Se relata las actividades en Peñuelasy
en Santa Isabel. Ver El Socialista, Año 1, Núm. 5,1 de julio de 1967. Se relata las actividades de
Juana Díaz, Villalba y Coamo. Ver El Socialista, Año 1, Núm. 7,1 de agosto de 1967. Se relatan
actividades en Poncey Adjuntas. Ver El Socialista, Año 1, Núm. 8, del 15 de agosto de 1967. Se re­
latan actividades en Utuado. Ver el Socialista Año 1, Núm. 9, i de septiembre de 1967. Se relatan
actividades en Ponce y San Juan.

84 Ver Manuel Maldonado Denis, op cit., pág.175.

85 Ver El Socialista, Año 1, Núm. 10, octubre de 1967.

86 Ver El Correo de la Quincena, Tomo Vil, Núm. 109, primero de mayo de 1970, pág. 15. Se re­
produce la hoja suelta distribuida al otro día de los hechos relacionados al juicio de Edwin Fe­
liciano Grafals como resistente al SMO y la protesta, toma y quema de los cuarteles del ROTC
casi inmediatamente después de conocerse los resultados del juicio. Para la fecha de este nú­
mero se celebraba juicio por estos hechos contra 23 estudiantes, entre los cuales figuraba José
Marcano. Luego de una cita de Betances, la hoja termina con una exhortación que relaciona­
mos con las consignas de la Batalla de Ayacucho, Perú, “¡Paso de vencedores!”

87 Ver El Socialista, Año iii, Núm. 31, octubre de 1969. En total once miembros de la LSP sufrie­
ron arrestos, cuatro de ellos en sus centros de trabajo. Además de Corretjer y Marcano, sufrie­
ron arrestos Consuelo Lee, Carmen María Pérez González, quien había estado anteriormente
muchos años presa por su militancia en el Partido Nacionalista de Puerto Rico, Millón Urbi-
na Díaz, Antonio Rivera Figueroa, Manuel Amy Valentín, Alejandro Santiago, Carlos Acosta
Fahetón, Rubén Rivera Rentas y Luis Santiago.

88 Ver Salen de la cárcel directivos socialistas ponceños”, El Socialista, Año iii, Núm. 31, octu­
bre de 1969, pág. 4. De once arrestados de la LSP, siete eran del área sur.

89 Ver El Socialista, Año 111, Núm. 31, octubre de 1969. Se detallan también las manifestaciones
de apoyo para con José Marcano de parte del claustro, del estudiantado y de las organizaciones
estudiantiles, la FUPI y la JIU. El estudiantado aprobó una resolución unánime en asamblea
haciendo extensivo el repudio a todos los arrestos de los miembros de la LSP. Por otro lado, en
esta publicación la LSP reconoce que la FUPI tenía un rol histórico de liderato en la lucha que
se libraba contra el ROTC y el SMO.

90 Ver Arrestan a 19 y ocupan armas, (viernes, 3 de octubre de 1969) El Día, pág. 1. Ver Arrestan
Corretjer, esposa y tres más, (viernes 3 de octubre de 1969) El Día, pág. 2. Ver El Socialista, Año
ii, Núm. 13, enero de 1968. La LSP denuncia que la preocupación que alega la prensa por los
empleados no es creíble ya que sus condiciones laborales no son prioridad para la prensa.
Ver Manuel Maldonado Denis, op cit pág. 153-161. Para 1967 había comenzado el programa
Fomento de Puerto Rico. Este se fundamentó en dar todo tipo de ventajas a los inversionistas
de capital estadounidense además de que se habían regalado haberes del pueblo como el ce-
¡29 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

mentó y la fábrica de botellas a intereses privados. Esto potenció el ascenso de una burguesía
más acomodada en Puerto Rico que sería contraria a la independencia por razones obvias.
A los inversionistas estadounidenses se ofrecía una infraestructura trabajada con el sudor de
obreros puertorriqueños, exenciones contributivas de todo tipo y mano de obra barata. Se per­
mitía que se fabricaran artículos que se fueran de Puerto Rico ya prácticamente terminados y
regresaran como importaciones más caras para el pueblo. Es en este clima que surge los CAL.
Por otro lado, la migración del campo a la ciudad continuaba haciendo una realidad la necesi­
dad urgente de empleos.

91 Ver Juan Angel Silén, op cit., pág. 498.

92 Ver “Editorial III: MIRA”, Correo de la Quincena, Vol. XV, 15 de noviembre al 15 de enero de
1978, Núm. 312-317, pág. 7-8.

93 Ver David Rodríguez Graciani, ¿Rebelión o protesta? : La lucha estudiantil en Puerto Rico,
Ediciones Puerto, Rio Piedras, 1972, pág. 35.

94 El primer número circuló el 3 de noviembre de 1969. Daba su base organizativa como los
cuadros universitarios de la LSP y su organización nacional como la LSP. Indicaba su base
teórica como el marxismo-leninismo. En este primer número se da las gracias al estudiantado
por recoger “vellón a vellón” el dinero requerido para poner en libertad provisional a Florencio
Merced y José Marcano, presidente de la FUPI y líder de los Cuadros Universitarios de la LSP
respectivamente, quienes habían sido arrestados y conducidos a la Penitenciaria Estatal por
actos relacionados al primer asalto al ROTC en 1969.

95 Ver El Socialista, Año 3, Núm. 28, abril 1969, pág. 4.

96 Ver Juan Angel Silén, op cit., pág. 478. A pesar de tener pocos años de organizada la FEPI
tuvo mucho éxito en abrir capítulos a través de todo Puerto Rico y sus dirigentes también su­
frieron arrestos en muchas ocasiones.

97 Ver Juan Antonio Corretjer,” El Voto Presidencial”, Publicación de la Liga Socialista de Puer­
to Rico, Santurce, Puerto Rico, 1980.

98 Ver David Rodríguez Graciani, op cit., pág. 62-63.

99 Ver David Rodríguez Graciani, op cit, pág. 65-70. Ver El Universitario Socialista, Año 2,
Núm. II, 3 de febrero de 1971.

too Ver Archivo de Carpetas del Negociado de Investigaciones (FBI) Serie de Liga Socialista de
Puerto Rico, SJ-105-6921, Vol. 8, # 1020, b7-D, En Biblioteca Legislativa Tomás Bonilla Feliciano,
San Juan. Las agencias represivas de Estados Unidos vigilaban a Pepito Marcano de forma muy
intensa. En las carpetas que el FBI levantó a la LSP se encuentra un documento fechado el 15
de marzo de 1970 en el cual se identifica exclusivamente a José (Pepito) Marcano como el que
provocó el asalto al ROTC del 4 de marzo de 1970 y se indica lo hizo junto a otros miembros de
la LSP los cuales no se identifican.

tot Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op. c¡L, pág. 494-497.

102 Ver El Socialista, Año IV, Núm. 37, septiembre 1970, pág. 10. Este joven repartió hojas sueltas
frente a Fort Brook, en San Juan, en la cual comunicaba su decisión y las razones para ello.
Raymond Soto Dávila | 130

103 Ver “CIA dirige actual campaña anticomunista”, Claridad, Año 11, Núm. 207, 21 de diciem­
bre de 1969, pág. 1 y 3. Meses antes de la denuncia de Corretjer, Claridad había alertado sobre el
desarrollo de una campaña anticomunista promovida por la CIA para eliminar el movimiento
patriótico puertorriqueño.

104 Ver “Policía atropella obreros de Rio Grande", Claridad, Año 11, Núm. 207, 21 de diciembre
de 1969, pág. 1 y 10. Desde sus inicios esta huelga desató el hostigamiento de las fuerzas represi­
vas y el uso de rompehuelgas en colaboración con la Policía de Puerto Rico. Claridad también
sufrió ataques a su personal y equipo mientras cubría la huelga.

105 Ver Antonio Rivera Figueroa, “Despido en masa en la “Betchel”, El Socialista, Año IV, Núm.
38, octubre 1970, pág. 4.

106 Ver Myriam Fuentes, “Deciden continuar huelga”, El Socialista, Año IV, Núm. 37, septiem­
bre 1970, pág. 3.

107 Ver Manuel Amy Valentín, “Ceden patronos ante firmes demandas de los trabajadores de
hoteles", El Socialista, Año IV, Número 34, junio 1970, pág. 11. Ver Elizam Escobar, “Mis expe­
riencias en el Negociado de Desempleo del Departamento del Trabajo”, El Socialista, Año IV,
Número 34, junio 1970, pág. 4.

108 Ver Myriam Fuentes, “Corretjer en Lares: Define posiciones Liga Socialista”, El Socialista,
Año IV, Núm. 38, octubre 1970, pág. 6-7.

109 Ver Juan Antonio Corretjer, “Allende, un fanático de la legalidad” Correo de la Quincena,
Volumen IX, Números 185-188, iro. de agosto al 15 de septiembre de 1973, pág. 3C. Es en el I97J»
luego del derrocamiento y muerte de Allende que Corretjer reveló haber sido invitado a la
toma posesión de Allende en el 1970 y las razones para haber declinado. Corretjer previno
I los problemas con un triunfo por la vía electoral y estimaba que la victoria de Allende insufló
esperanzas electorales en el proceso eleccionario de noviembre de 1972 en Puerto Rico, en par­
ticular al PIP y el MP1 con resultados nefastos para la escalada de la lucha lograda en Puerto
Rico hasta los inicios de la década del 1970.

no Ver Juan Antonio Corretjer, "Las elecciones chilenas”, El Socialista, Año IV, Núm. 37, sep­
tiembre 1970, pág. 5. Corretjer afirma que el entonces reciente triunfo electoral de los parti­
darios de la República Española llevó al Partido Nacionalista de Puerto Rico a optar por la
vía electoral en el 1932 con los resultados desastrosos ya conocidos. Igualmente afirma que al
estallar la Guerra Civil en España en 1936, este “ruido” sirvió de distractor para que el gobierno
de Estados Unidos metiera preso a Albizu ese año ya que ese conflicto ahogó los gritos que en
! Puerto Rico ya comenzaban a llamar la atención internacional.

ni Ver José Marcano, “El voto a los 18 años”, El Socialista, Año IV, Núm. 38, octubre, 1970, pág. 3-

112 Ver Juan Antonio Corretjer, “Las inundaciones", El Socialista, Año IV, Núm. 38, octubre,
1970, pág. 12-13.

113 Ver Correo de la Quincena, Tomo VII, Núm 108,15 de abril de 1970. La LSP repartió una de­
claración pública en apoyo los residentes de Culebra en ocasión de una protesta en San Juan,
firmada por el Comité Central de la LSP y por su Secretario General, Juan Antonio Corretjer.
En este número se reproduce la misma y se incluye un artículo titulado “Culebra: Defensa de
la integridad territorial.” Se detalla la secuencia de intentos por parte de Estados Unidos desde
I3¡ | Lucha y espacio de la Liga Sociai is i \ Pi ERTORRlQi i1902-1989

1866 en adelante, para adquirir de España las islas de Culebra y Culebrita. Se incluye en la
cronología los intentos de comprar otros territorios en el Caribe ofreciendo a cambio dinero,
armas y municiones, revelando esto la larga trayectoria guerrerista y mercenaria de Estados
Unidos.

114 Ver David Rodríguez Graciani, op cit. pág. 92-95. Ver Che Paralittici, Sentencia Impuesta,
100 años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, op. cit. pág. 255. Los encar­
celados fueron: Rubén Berríos, Hiram Lozada, Humberto Tapia, Francisco Rodríguez, Nicolás
Pagán Serrano, Luis Abalo, Luis Alonso, Luis Rivera Pagán y Dan Balderston.

115 Ver Luis Nieves Falcón, Pablo García y Félix Ojeda, Puerto Rico: Grito y mordaza, Ediciones
Librería Internacional, Rio Piedras, 1971, pág. 11-18 y pág. 20-24. Se asevera que la discusión de
los ejercicios militares en Culebra y la proyectada explotación de recursos minerales crearon
tensión en sectores significativos del país los cuales vigorizaron sus esfuerzos para preservar la
nacionalidad. También se examina la Ley de la Universidad del 1966 y sus limitaciones para la
participación de profesores y estudiantes.
116 Ver David Rodríguez Graciani, op cit. pág. 69. Se denuncian los numerosos editoriales de los
dueños de medios los cuales se unen a los sectores gubernamentales y elementos conservado­
res en esta condena a los estudiantes sin analizar las causas.
117 Los Cuadros Universitarios de la LSP circularon un boletín el 18 de marzo de 1970 con la
firma de José Marcano y Alberto Curet, anunciando que no apoyaban el referéndum por ser
un medio seleccionado por el enemigo diseñado para desmovilizar. Hacen una diferenciación
entre otras universidades en países soberanos y la universidad dentro de una colonia en donde
el primer deber de un estudiante es luchar por la independencia.
118 Ver Liliana García Arroyo, “Antonia Martínez Lagares: A treinta años del recuerdo , Clari­
dad, 25 de febrero a 2 de marzo del 2000, pág. 6. La autora cita El Imparcial, 9 de marzo de 1970,
donde el Dr. Fladio Montalvo Durand, entonces presidente de la Asociación Médica, felicitó
a la Policía, ignoró el asesinato de Antonia y culpó a los estudiantes de todo. Se citan otras
fuentes donde autoridades universitarias imputaron a los profesores independentistas haber
influenciado en el juicio de los estudiantes al votar en el referéndum.

119 Ver El Socialista Extra, Año V, febrero-marzo, 1971.

120 Ver David Rodríguez Graciani, op ciL pág. 101-123.


121 Ver “Hearings before the Ad Hoc Advisory Group on the Presidential vote for Puerto Rico”,
US Government Printing Office, Washington, 1971, p. 555.

122 Ver El Socialista Extra, Año V, febrero-marzo, 1971.


123 Ver Juan Antonio Corretjer, “Problemas de la Guerra Popular en Puerto Rico”, Correo de la
Quincena Tomo VIII, Núm. 145-146,15 de octubre al a 13 de noviembre de 1971, pág. 26-32., Co­
rretjer desmonta algunos argumentos relacionados a la desproporción de fuerzas entre Puerto
Rico y Estados Unidos utilizando un razonamiento de estrategias adaptables a territorios de
pequeña extensión y combinando éstas con el empuje que se lograría a través de la solidaridad
tanto de la clase trabajadora puertorriqueña en la diáspora como de la clase trabajadora de
otros grupos nacionales en Estados Unidos. Ver Juan Antonio Corretjer, Mejor que Prólogo,
“Problemas de la Guerra Popular en Puerto Rico”, Publicaciones de la Liga Socialista de Puerto
Raymond Soto Dávila | 132

Rico, 1977. En esa sección se reproduce parte de una carta de Abraham Guillén felicitando a
Corretjer por esta obra. Dicha carta está fechada en Buenos Aires el 28 de septiembre de 1973-
Guillén también felicita a Corretjer por el ensayo “Albizu: El líder de la desesperación”.

124 Ver El Socialista Extra, Año V, junio-julio, 1971. Los abogados defensores fueron Héctor
Lugo Bougal, Graciany Miranda Marchand, Francis Díaz de Marcano y Delia María Auífani
Lugo Bougal calificó el juicio como uno “medieval”. Por otro lado la LSP criticó el silencio de
la prensa comercial e independentista en torno al juicio. En este número sobresale el articulo
“Represión contra la Liga ¿Por qué?" de Annie Velázquez, donde se señala el carácter proletario
de las luchas del LSP como el causante de la represión del imperio.
125 Ver “Moción para fijación de fianza”, Correo de la Quincena, Tomo Vil I, Núm. 134-142,15de
mayo a 15 de septiembre de 1971, pág. 26-32.

126 Ver Ludmilia Rivera, “Encarcelado Pepito Marcano”, Claridad, 15 de marzo de 1975, pág. >
A Pepito Marcano se le acusó de portación ilegal de armas en los días de lucha contra el ROTC
para el 1970. El caso había durado cinco años. Lo condenan a seis meses de cárcel los cuales
cumple ya que rechazó un ofrecimiento de probatoria la cual era contrario a sus principios
pues era aceptar culpabilidad. Para entonces ya era psicólogo e iba a iniciar su doctorado. Pepi­
to luego ganó fama como psicólogo pero murió lamentablemente todavía joven.
127 Ver El Socialista, Año vi, Núm. 51, abril, 1972. El delegado a la Convención Internacional del
SDS fue Carlos Justiniano.

128 Ver Correo de la Quincena, Volumen IX, Núm. 159-160,15 de junio al 15 de julio de 1972, pág.
23-24.

129 Ver Miguel Hudo Ricci y Luis R. González Argüeso (relator), Hudo Ricci, carpeta 2704 ¡Ino­
cente!, Editores Argüeso-Garzón, Bogotá/San Juan, 2009, pág. 195-196.

130 Ver El Socialista, Año vi, Núm. 58,1972. Se denuncia un escape de clorín de la PPG de Gua-
yanilla que requirió que cientos de vecinos necesitaran ser atendidos en diversos hospitales
del área.

131 Ver Juan Antonio Corretjer: El líder de la desesperación op cit., pág. 13-16.

132 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op cit., pág. 525.

133 Ver Wilfredo Matos Cintrón, Breve historia del Partido Socialista de Puerto Rico: Manual
del Afiliado (2ndo de una serie), pág. 25-28.

134 Ver “¿Y después de las elecciones, qué?, Diálogo para militantes de la independencia APU
(Extracto) En Juan Antonio Corretjer, La patria radical, (Cuarta edición ampliada), Publicacio­
nes de la Liga Socialista Puertorriqueña, 1976, pág. 58-62.

135 Ver Juan Antonio Corretjer, La patria radical, (cuarta edición ampliada) op cit pág. 31.

136 Ver Juan Antonio Corretjer, La patria radical, (cuarta edición ampliada) op cit. pág. 22.

137 Ver Juan Antonio Corretjer, “Las elecciones coloniales y el boicot electoral”, La patria radi­
cal, (cuarta edición ampliada) op cit. pág. 50-52.
133 I Lucha y espacio de ia Liga Soc i xi is i \ Pi ¡ rtorriqi i ñv 1962-1989

138 Ver “El primero de mayo y el movimiento sindical (Editorial 1), El Correo de la Quine ,

por el PPD. Estos movimientos se hicieron en las huelgas bravas y se deshicieron al optar po
el camino electoral.

139 Ver Editorial I: “Tránsito de un disparate", Correo de la Quincena, Volumen IX, Núm. 168-
¡73, iro. de noviembre de 1972 al tro. de febrero de 1973, pág.3- 4.
140 Ver “Unidad nacional, unidad estudiantil” (Editorial II), Correo de la Quincena, Volumen
IX, Núm. 174-179,15 de febrero al primero de mayo de 1970, pág. 4.

141 Ver “Bomba: Detonación al ridículo”, El Socialista, Año VII, Núm. 64,1973» pág- 7* Los cua­
dros de la LSP aludieron a la advertencia que ya había hecho Corretjer luego del triunfo del
PPD en noviembre de 1972. Con ese triunfo la actividad contra independentistas de la policía
colonial disminuiría y aumentaría la del FBI.
142 Ver “Liga Socialista exhorta: ¡No pagar el agua!”, El Socialista, Año VII, Núm. 62,1973, pág. 3.

143 Ver “Solución a crisis en Telefónica PR está en control de unión por base , El Socialista,
Año vii, Núm. 62,1973, pág. 8.
144 Ver Efraín García Osorio, “Rumbo al comunismo”, El Socialista, Año VII, Núm. 62,1973,
pág. 7. Muñoz había dicho que se podía ser socialista sin ser comunista. El autor aclara que el
socialismo es una fase que debe desembocar en comunismo.
145 Ver Raymond Soto, La guerra aérea en Indochina, Correo de la Quincena, Volumen IX,
Núm. 168-173, iro. de noviembre de 1972 al tro. de febrero de 1973, pág.21-25. Se señaló la capaci­
dad tecnológica destructiva militar que se lanzó sobre los pueblos de Indochina (Laos, Cam-
bodia y Vietnam), no sólo contra dichos pueblos sino contra la ecología e integridad ambiental
de esos países. Me Donnell-Douglas, Lockheed, Textron y Olin encabezaban a las compañías
transnacionales estadounidenses vinculadas al complejo militar-industrial con enormes ga­
nancias billonarias por los contratos de “Defensa”. Se calculaba que entre 1966 a 1971 la guerra
aérea había costado 33 billones de dólares.

146 Ver El Socialista, Año vii, Núm. 60,1973.


147 Ver Manuel Amy, “La lucha dentro de las petroleras”, El Socialista, Año vii, Núm. 64,1973,
pág. 2.
148 Ver Noam Chomsky, Peace in the Middle East? Reflections on justice and nationhood,
Vintage Books, New York, 1974, pág. 142-152. El 6 de octubre de 1973 estalló la “Guerra de Yom
Kipur”. Las fuerzas armadas conjuntas de Egipto y Syria bajo Anwar Sadat y Hafez Asad, res­
pectivamente, iniciaron operaciones con el objetivo de recuperar los territorios árabes ocupa­
dos por Israel desde la guerra de 1967 entre Israel de un lado y Egipto, Syria y Jordania del otro.
Luego de los logros iniciales de Egipto y Syria en dicha guerra, Estados Unidos armó a Israel,
logrando una contraofensiva que hizo retroceder los avances de Egipto y Syria. Ante la embes­
tida de Israel la Unión Soviética comenzó a dar pasos para intervenir. El ambiente de tensión
fue muy intenso en la región y Estados Unidos y la Unión Soviética acordaron una tregua. Esto
traería consecuencias pues los países de la O.P.E.C. usaron el petróleo como arma política con­
tra Estados Unidos y todos los países con economías dependientes del petróleo, disparándose
Ravmoni) Suio Dáviu\ | 134

el precio del petróleo de forma exorbitante con consecuencias muy serias para la economía
capitalista global pero muy en particular para Estados Unidos.

149 Ver “!A1 combate contra el super puerto!”, El Socialista, Año vii, Núm. 64,1973, pág. 3. En la
conmemoración del 30 de octubre de 1973, Antonio Rivera Figueroa, Vicesecretario General de
la LSP explica el razonamiento táctico de la LSP en torno al super puerto y advierte al indepen-
dentismo el error de esperar a que llegara el super puerto para entonces combatirlo.

150 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op cit., pág. 535.

151 Ver “El Gobierno y las huelgas” (Extracto), Correo de la Quincena, Volumen IX, Núm. 180-
184,15 de mayo al 15 de julio de 1973, pág.19-21.

152 Ver Edwin Irizarry Mora, op. cit., pág. 7}-Tl- Esta recesión se le conoce como la primera rece­
sión del periodo moderno, la cual ocurrió entre 1973 y 1975, arropando a gran parte de los países
capitalistas. Hubo variables externas e internas que se señalan como causantes de la caída de la
producción real en Puerto Rico. Entre las externas, la principal fue el aumento drástico en los
precios del barril de petróleo. En el caso de Puerto Rico su efecto era aun más grave, ya que las
termoeléctricas establecidas dependían de la quema de aceites derivados del petróleo para la
generación de electricidad. Toda la transportación del país también dependía del petróleo. En­
tre las causas internas se destaca el elevado nivel de endeudamiento público. (N. de A.: En otras
palabras no eran asignaciones de fondos federales lo que sufragaba los costos de infraestructu­
ra.) De acuerdo a Irizarry Mora, no todos los economistas dividen el periodo de recesión en las
mismas fechas. Para algunos economistas esta recesión fue continua hasta el 1984 y otros plan­
tearon que fue por etapas, y que luego del 1975 se experimentó una recuperación hasta el 1981.

153 Ver Carlos Justiniano, “Saber que luchamos por el futuro de la humanidad nos hace inven­
cibles”. El Socialista, Año VIH, Núm. 66,1974, pág. 4 y 6-7.

154 Ver Juan Angel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op. cit., pág. 535.

155 Ver Editorial III: “Verde Erin, Roja Erin”, Correo de la Quincena, Volumen XI, Núm. 206-215,
15 junio al 30 de octubre de 1974, pág. 10. Ver en ese mismo número también “Mensaje de la Liga
Socialista al Festival Antiimperialista de Irlanda leído en el Cementerio Nacional”, pág. 11-12 y
“Discurso de clausura en el Festival Antiimperialista en Belfast”, pág. 13-15.

156 Ver Antonio Rivera, “Correo de la Quincena, Volumen XI, Núm. 206-215,15 junio al 30 de
octubre de 1974, pág. 16-17.

157 Ver el editorial “Señal: Tronquistas y Telefónicos”, El Socialista, Año IX, Núm. 69,1975, pág.
2 y 6.

158 “Cimera" AFL-CIO será en enero”, Claridad, 10 de enero de enero, 1975, pág. 4.

159 Debido a la reducción del presupuesto producto de la crisis económica, se cesantearon


cerca de 2,500 trabajadores, la mayoría maestros y maestras. Ver Claridad, 10 de enero de 1975.
Pág. 3.

160 Ver Claridad, 3 de enero de 1973, pág. 3. Un largo conflicto de los camioneros termina en un
cierre patronal. Ver Claridad, 3 de enero de 1975, pág. 3. Se decreta voto de huelga en el Hotel
Sheraton. Ver Claridad, 10 de enero de 1975, pág. 11. Se realiza paro en los muelles. Ver Claridad,
B5 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

11 de enero de 1975, pág. 7. Hay huelga en la RCA de Barceloneta. Ver Claridad, 15 de enero de
*975. pág- 3- Se realiza paro en el Hotel Americana. Ver Claridad, 20 de enero de 1975, pág. 5.
Hay voto de huelga en muelles. Ver Claridad, 26 de enero de 1975, pág. 3. “Fibers”, productora
de fibras de nylon, anunció cierre dejando fuera a 1,250 trabajadores. Esta compañía adujo re­
ducción en ventas lo cual se entendió como un efecto de la crisis económica. Ver Claridad, 21 de
enero de 1975, pág. 9. Gerald Ford, Presidente de Estados Unidos, había anunciado un pago de
licencias o impuesto sobre el petróleo exportado que afectaba toda la producción dependiente
del petróleo o sus derivados.

161 Ver PODER ESTUDIANTIL, Año II, Número 5, 23 de octubre al 6 de noviembre de 1974,
pág. 8. Ver El Socialista Universitario, Número 23,19 de marzo de 1975.

162 Ver “Terroristas asesinan a dos trabajadores”, Claridad, 13 de enero de 1975, pág. 3. Ver Cla­
ridad, 26 de abril de 1976, pág. 12-13. Se hace un resumen de los atentados y fechorías de ABDA-
LA. La CIA prefería esta organización porque supuestamente hacía mejor uso del dinero con
el cual la financiaba que otras organizaciones de exilados que consideraba de “charlatanería .
Esta organización no tan solo realizaba y planeaba atentados contra el pueblo y la Revolución
Cubana y sus intereses dentro y fuera de Cuba, también atentaba contra otras organizaciones
o individuos en otros países que mostraran favorecer el socialismo. Se denuncia específica­
mente el rol del agente de la CIA, Bob Dynes, quien operaba para abastecer explosivos y en ese
momento estaba en misiones relacionadas con Chile. La CIA tenía pleno conocimiento de los
contactos de ABDALA con la junta chilena que se estableció tras el derrocamiento de Salvador
Allende. Por otro lado, ABDALA estaba enfrascada en asesinar otros contra revolucionarios
cubanos que según su apreciación, no habían dado el grado. El resumen se apoyó en buena
parte en las confesiones efectuadas en La Habana de un joven exilado y ex agente de la CIA de
nombre Manuel de Armas.

163 Ver “Gallizá pide vistas sobre CIA”, Claridad, 17 de enero de 1975, pág. 5.
164 Ver “Acto de guerra de las FALN en Nueva York”, Correo de la Quincena, Volumen XII,
Núm. 216-236,15 noviembre de 1974 al 15 de septiembre de 1975, pág. 15-17.
165 La FALN dejó un comunicado sobre estos hechos el cual fue traducido del New York Times,
sábado 25 de enero de 1975, pág. 10 y reproducido en el Correo de la Quincena, Volumen XII,
Núm. 216-236,15 noviembre de 1974 al 15 de septiembre de 1975, pág. 17.
166 Ver “Marchó valientemente hasta el final por el camino largo, duro y estrecho , El Socialis­
ta, Año IX, Núm. 69,1975, pág. 4-6.
167 Ver Manuel Padilla Miranda, “Plan capitalista para saquear y destruir centro de Puerto
Rico”, El Socialista, Año VIII, Núm. 66,1974, pág. 5,7-8.
168 Ver Figura y circunstancias: Homenaje a Manuel Padilla Miranda, Publicaciones de la Liga
Socialista Puertorriqueña, 1977, pág. 3. Estos camiones estaban protegidos por la policía militar
yanqui.
169 Ver “Marchó valientemente hasta el final por el camino largo, duro y estrecho , El Socialis­
ta, Año IX, Núm. 69,1975, pág.4-6.
170 Ver Marsha L. Waterson, Norma Rodríguez, Lisandro Rivera, “Las Lecciones de una huelga
pasmada” (Hoja suelta). Reproducida en Correo de la Quincena, Volumen XIII, Núm. 237-247,
RaymondSolo Dávila | 136

30 de septiembre de 1975 al 29 de febrero de 1976, pág. 18-19.

171 Ver Correo de la Quincena, Volumen XIII, Núm. 237-247, 30 de septiembre de 1975 al 29 de
febrero de 1976, pág. 6-9.

172 Ver Linda I. Colón Reyes, Sobrevivencia, pobreza y “mantengo”, Ediciones Callejón, San
Juan, 2013, pág. 89. Los cupones se extendieron por completo a Puerto Rico entre 1974'1975-
Estos son conocidos como “PAN”. Responde a las siglas de Programas federales de Asistencia
Nutricional aunque es más correcto llamarlo “Programa de Cupones de Alimentos Federal".
Este programa va dirigido a los alimentos y no cubre otras necesidades como techo, ropa, me­
dicinas. En el periodo inmediatamente anterior, 1973-1974, solamente el 3% de la población re­
cibía ayuda del gobierno de Estados Unidos mientras que en el periodo 1974-1975, aumentó
dramáticamente a casi el 45% de la población. Por otro lado, los antecedentes de las ayudas
federales se remontan a programas que se establecieron en la época de la depresión de los
años de la década del 1930, inspiradas por las formulaciones del economicista británico, John
Keynes (pág. 70.) En Puerto Rico se ha mantenido constante que estos fondos los reciben las
mujeres solteras que encabezan familias y la proporción con respecto a su población es mayor
en los pueblos del centro, pertenecientes al área agrícola, (pág. 90). Por otro lado, aunque San
Juan puede aportar el número más alto de recipientes, cuando se compara a su población, sola­
mente el 15% recibe estos beneficios, (pág. 92). El PAN no debe confundirse con otro programa
conocido como “TANF” o “Temporary Assistance for Needy Families” cuya aplicación o al­
cance porcentual en la población puertorriqueña es mucho menor y tiene otros antecedentes
históricos (pág. 203-207).

173 Ver “Interioridad de un descalabro”, Correo de la Quincena, Volumen XIII, Núm. 237-247,30
de septiembre de 1975 al 29 de febrero de 1976, pág. 10-13. Ver también Miguel Pagan, “Pacifismo,
rompehuelgas y chotas”, El Socialista, Año XI, Núm. 75,1977, pág. 2.

174 Ver Juan Antonio Corretjer, “Puerto Rico 2020", El Nuevo Día, 2 de septiembre de 1975, pág.
19. Ver Juan Antonio Corretjer, “Puerto Rico hacia un porvenir de enormes sufrimientos”, El
Nuevo Día, 13 de octubre de 1975, págs. 16 y 29.

175 Ver Juan Mari Brás, “Habló el poeta”, Claridad, 15 de octubre de 1975, pág. 12. Las diferencias
que Mari establece con Corretjer se fundamentan en visiones sobre política organizativa, pos­
turas respecto al PIP y al PSP e interpretaciones sobre política internacional en particular la
pugna que se daba entre las dos grandes potencias socialistas de entonces, China y Rusia. N. de
A. Sobre esto último ya Corretjer y la LSP observaban a ambas potencias de forma muy crítica.

176 Ver Edwin Irizarry Mora, op. cit. pág. 75-76.

177 Ver Francisco A. Cátala Oliveras, op. cit., pág. 143.

178 Ver Edwin Irizarry Mora, op. cit. pág. 74-75. Los informes coincidían en varios puntos pero
no todos llegan a las mismas conclusiones. James Tobin, Premio Nobel de Economía, confirmó
la preocupación sobre la capacidad de endeudamiento del gobierno de Puerto Rico, asunto
que ha terminado por ser en el 2014 un tema muy dramático para el país. Ver Francisco A.
Cátala Oliveras, op. cit. pág. 136. Además de los factores como el crecimiento del endeudamien­
to, financiar infraestructura, dar incentivos contributivos a las empresas foráneas y cobrarles
poco o ningún impuesto y desarrollar el empleo público como respuesta al desempleo sin un
vínculo claro a la base productiva, en muchos casos este último factor iba acompañado de la
\yj | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

deformación de la gestión pública a través de una crasa y repugnante compra de votos y de


conciencia.

179 Ver “Documento II: Sobre la condena de los compañeros del PSP en Humacao”, El Correo
de la Quincena, Volumen XIV, Núm. 264-271,15 de noviembre de 1976 al 1 de marzo de 1977, pág.
18. Se trataba de Adela Acevedo, Edwin Meléndez, Elias Castro y Luis Medina. Ver Che Parali-
ticci, Sentencia impuesta: too años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico,
pág. 276-279. Los cargos eran por violación a ley de explosivos, armas, y tentativa de asesinato
por un incidente donde supuestamente hubo tiroteo. El caso tuvo un curso complicado ya que
el FBI radicó cargos a dos de ellos además de varias apelaciones que los abogados radicaron
durante el proceso. Se pretendía relacionarlos con ¡remita robada dos años antes en Manatí.
Finalmente todos cumplieron sentencias suspendidas, luego de haber estado presos por varios
meses, dichas sentencias fueron muy largas y con condiciones severas con el fin de apartarlos
de la lucha.

180 Ver Che Paraliticci, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit. pág. 284-289. Otros militantes del PSP que sufrieron muchos intentos de
represión fueron José Antonio Laboy y Ramón Duchesne, ambos de la zona este y en el caso de
Laboy, empleado de Impresora Nacional. Laboy estuvo preso por dos años luego de enfrentar
un juicio donde alegó defensa propia ante un intento de asesinato en su contra por parte de la
policía.

181 Ver Che Paraliticci, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit. pág. 322-324.
182 Ver “Condena mundial asesinato Mari", Claridad, 5 de abril de 1976, pág. 10. Ver CMC
condena asesinato Mari", 1 de abril de 1976, pág. 8. Ver Julieta Muñoz, “Marcha solemne en
UPR”, Claridad, 30 de marzo de 1976, pág. 5., Ver Rafael Anglada López, “Indignación en ONU
por asesinato”, Claridad, 30 de marzo de 1976, pág. 5. Ver “Nuevas voces condenan el asesinato ,
Claridad, 27 de marzo de 1975, pág. 2. Ver "Declaración de la FUPI”, Claridad, 26 de marzo de
1976, pág. 2.

183 Ver Rosa M. Mari Pesquera “Ponencia sobre el caso del asesinato de Santiago Mari Pes­
quera ante la comisión de lo Jurídico del Senado de Puerto Rico, el 23 de enero de 2002. Re­
cuperado de www.verdadyjusticia.net el 12 de diciembre de 2012. Indica la deponente que la
fiscal Crisanta Rodríguez, antes de ser relevada de la investigación del asesinato de Chagui
Mari, hizo un informe donde afirma que Henry Coira no pudo haber actuado solo, según se
desprende de las circunstancias del crimen. Otro dato sorprendente es que el Coronel Alejo
Maldonado, posteriormente convicto por varios asesinatos y vinculado al “Escuadrón de la
Muerte” dentro de la Policía de Puerto Rico, fue quien dirigió todo lo relacionado a este arresto.
A Coira finalmente lo sentenciaron a cumplir de de 10 a 15 años por el delito mayor de asesinato
en segundo grado y de 1 a 3 años por un delito menor relacionado al uso ilegal de armas. Fue
inicialmente declarado no procesable por razones mentales y luego declarado procesable tras
un cambio de psiquiatras una vez Romero Barceló gana nuevamente la gobernación a finales
del 1980. Ver “Invitan a Mari Brás hablar del Escuadrón”, Claridad, 7 de abril de 1976, pág. 2.
A dos semanas de Mari perder a su hijo mayor, el director de la División de Investigaciones
Especiales (DIE) lo invitó para que hablara lo que supiera cuando fue el propio jefe del Escua­
drón de la Muerte quien dirigió el arresto del presunto asesino de Chagui. Esto era reflejo de
una descomposición muy profunda en ese cuerpo. Ver Raúl Álzaga Manresa, “Terrorismo de
derecha en Puerto Rico”. Recuperado de www,verdadyiusticia.net el 15 de marzo de 2014. Se
Raymond Soto Dávila | 138

hace un excelente recuento de la intersección del terrorismo del exilio cubano en Puerto Rico,
el aparato policiaco bajo el gobierno colonial y las agencias de Estados Unidos. El asesinato
de Chagui Mari se enmarca en una etapa donde los atentados de la extrema derecha habían
disminuido pero eran más letales.

184 Ver “Documento I: Sobre el asesinato de Julio Pinto Gandía”, Correo de la Quincena, Volu­
men XIV, Núm. 264-271,15 de noviembre de 1976 al 1 de marzo de 1976, pág. 8.

185 Ver “Reiteran duelo Pinto Gandía”, Claridad, 20 de enero de 1977, pág. 9.

186 Ver Juan Manuel Delgado, Mártires de la Nación Puertorriqueña, Biblioteca de Historia
Nacional, Número 2, 2001, pág. 162. La búsqueda se concentró por la zona central durante se­
manas pero no se consiguió evidencia sobre su paradero. N. de A. Como se puede apreciar Án­
gel Rodríguez Cristóbal ha entrado en una etapa muy intensa y de grandes responsabilidades
en la LSP, a un año de la muerte de su maestro y compañero de lucha, Manuel Padilla.

187 Ver “Declaración conjunta: FRAE”, El Socialista, Año X, Núm. 72,1976, pág. 6. Ver pág. 3 del
mismo número donde se detallan aspectos internos del FRAE, se hace énfasis en lo deseable
de la presencia del Partido Nacionalista y se invita a otras organizaciones patrióticas a unirse,
en particular al PSP y al PIP, quienes ya habían proyectado participar en las elecciones. Esta
organización también daba la bienvenida a individuos en su calidad personal.

188 Ver “Asesinan en Washington ex canciller chileno”, El Nuevo Día, miércoles, 22 de sep­
tiembre de 1976, pág. 8. Ver “Entrevista con Isabel Letelier”, AREITO, Volumen III, Numero
2-3, ¡976, pág. 10-16. Según relatara la viuda de Orlando Letelier, once días antes del asesinato,
se había reunido una multitud de cinco mil personas en el Madison Square Garden para un
concierto de Joan Baez y Pete Seeger y donde Leterier era esperado para hacer uso de la pala­
bra. Fue en ese concierto que Letelier se enteró que el gobierno de Chile le había privado de
su nacionalidad.

189Ver José (Che) Paralitica, “Desmilitarización y educación”, En Anita Yudkin Sulivares, Uni­
versidad y antimilitarismo: Historia, luchas y debates, Universitarios por la desmilitarización,
pág- 87.

190 Ver Corre peligro el semestre” El Nuevo Día, 17 de septiembre de 1976, pág. 3. Ver “Esperan
respuesta administrativa”, Claridad, 22 de septiembre de 1976, pág. 2. Ver Emy E. Martínez, “Le
cierran el paso a los huelguistas”, El Nuevo Día, 23 de septiembre de 1976, pág. 4. Ver Néstor E.
Concepción Confian abrir la UPR el lunes”, El Nuevo Día, 23 de septiembre de 1976, pág. 4-
-i
191 Ver Gloria Alonso “Suspenden a ¡9 más”, Claridad, 16 de septiembre de 1976, pág. 3. Ver
5 Interditcto contra suspendidos", Claridad, 22 de septiembre de 1976, pág. 2.

192 Ver Editorial I: La ocupación policiaca de la UPR, El Correo de la Quincena, Volumen XIV,
Núm. 248-263,15 de marzo al 30 de octubre 1976, pág. 2-3.

193 Ver El Socialista, Año X, Núm. 72,1976. Entre las actividades de la LSP: Corretjer dictó cua­
tro conferencias a estudiantes universitarios entre febrero y marzo, se celebró mitin en Amalia
Marín en abril, homenaje y acto anti electoral en Cíales dedicado a Manuel Padilla, ya falleci­
do, mitin precedido por marcha en la Barriada Clausell en Ponce el primero de mayo, donde
el orador principal fue Antonio Rivera Figueroa, responsable del Comité Regional del Sur. EL
MST y la LSP llevaron a cabo un intento de tomar simbólicamente los consulados que partid-
139 | Lucha y espacio de la Liga Sociai ista Puertorriqueña: 1962-1989

paban en una llamada “Conferencia Cumbre” orquestada por el gobierno de Estados Unidos.
No lograron ocuparla pero lograron llamar la atención del rol cómplice que estos consulados
jugaban con su participación en apoyar el status colonial de Puerto Rico.

194 Ver El Socialista, Año X, Núm. 73,1976, pág. 5,6,7.

195 Ver Raúl Álzaga Manresa, “Terrorismo de derecha en Puerto Rico” op. cit. Fueron electos
para 1976 Granados Navedo, Edison Misla Aldarondo y Freddy Valentín, todos serían enjuicia­
dos y convictos por diversos delitos de corrupción años más tarde.

196 Ver Editorial: "De Lares al Superpuerto” Ver Correo de la Quincena, Volumen IX, Núm.
185-188, iro. de agosto al 15 de septiembre 1973, pág- 4- En este editorial que es extenso, se cubre
el tema del descalabro del P1P en las elecciones del 1972 y se advierte al MPl-PSPcon tres años
de anticipación de las elecciones del 1976 con las siguientes palabras: “ Este 23 de septiembre,
un año después, tras el descalabro pipiólo, el MPI-PSPanda en proceso de contrita inscripción
electoral. Eso se lo habíamos desinteresadamente predicho en Asamblea de Caguas en 1960
y ahora volvemos a advertirle patrióticamente como esperamos que el desatino iniciado se
detenga a tiempo y no concurra a las aún más peligrosas elecciones de 1976."

197 Ver Juan Ángel Silén, Historia de la nación puertorriqueña, op cit., pág. 539

198 Ver “Editorial I Las eleciones del 1976”, Correo de la Quincena, Volumen XIV, Núm. 264-
271,15 de noviembre de ¡976 al 1 de marzo del 1977 pág. 2. Ver “Editorial II: Toma de posición”,
Correo de la Quincena, Volumen XIV, Núm. 264-271,15 de noviembre de 1976 al 1 de marzo del
1977 pág. 14-46.

199 Ver “La muerte de Mao Tse Tung”, El Socialista, Año X, Núm. 73,1976, pág. 3.

200 Ver “Editorial 2: Andrés Figueroa Cordero”, Correo de la Quincena, Volumen XIV, Núm.
280 287, l5 de julio al 30 de octubre de 1977, pág. 5. Ver “Primero de marzo con Andrés en Puerto
Rico”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 288-295,15 noviembre de 1977 al primero de
marzo de 1978, pág. 6.

201 Ver “Adjuntas”, Año 2, Volumen 14, 22 de enero de 1978, reproducido en Correo de la Quin­
cena, Volumen XV, Núm. 288-295, *5 de noviembre al iro. de marzo de 1978, pág. 24-25.

202 Ver “Editorial 1: Ejecución de Randall", Correo de la Quincena, Volumen XIV, Núm. 280-
287,15 julio de 1977 al 30 de octubre de 1977, pág. 4-5.

203 Ver Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 288-295,15 de noviembre de 1977 al primero
de marzo de 1978, pág. 5,7-8.

204 Ver “Documento 1: Liga Socialista condena", Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm.
288-295,15 de noviembre de 1977 al primero de marzo de de 1978, pág.17-18.

205 Ver “UT1ER: Post huelga”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 296-304,15 de marzo
al 15 de julio de 1978, pág. 19.

206 Ver Guillermo Villablanca, “La quiebra de la justicia”, Pensamiento Crítico, Año 1, Núm.
5 y 6,1978, pág. 2-10. Este individuo se hacía apellidar Randall pero su verdadero apellido era
judío, “Rosov”. No era meramente un abogado patronal sino todo un estratega el cual deci-
Raymond Soto Dáviia | 140

día un sinnumero de cosas para cobrar su sueldo y asfixiar a los trabajadores en huelga. Una
de las cosas que decidía era cuando tirar encima una unión extraña a retar la representación
mientras se llevaba a cabo una huelga. Contaba con el apoyo de una organización tenebrosa
conocida como “Security Associates", la cual fungía como rompe huelga. El artículo establece
los intentos de intervenir en el caso Randall de agencias federales como el FBI, CIA y en parti­
cular la de Servicio Secreto, esta última se supone tome parte solamente cuando la “seguridad
nacional” de Estados Unidos está en juego.

207 Ver Santos Abril, “Se cae fabricación criminal Tanco-Randall”, Pensamiento Crítico, Año
2, Núm. 14, marzo, 1979, pág. 8-14. El amigo cercano era Braulio Mercader y el cabecilla aludido
del “escuadrón de la muerte” resultó ser Alejo Maldonado, algo que se conocería tiempo des­
pués. Braulio Mercader era un dueño de camiones que se dedicaba a fungir de rompehuelgas,
luego de haber sido alto oficial de la Unión de Tronquistas por muchos años, cargo al cual
renunció en el 1966 para dedicarse a traicionar a sus ex compañeros de trabajo. Recibía protec­
ción de la policía y murió sorpresivamente durante un pasadía en yate con Alejo Maldonado,
supuestamente por comer una picúa envenenada. N. de A. El caso Randall realmente nunca
fue resuelto en la vía legal.

208 Ver Guillermo Villablanca, La quiebra de la justicia, Pensamiento Crítico, Año 1, Núm. 5 y
6» 1978» pág- io-ii Entre otros detalles disparatados, se utilizó un convicto, Angel M. Hernández
Tanco ("Tanco”), quien convenientemente se evadió de la cárcel junto a otros, y luego apareció
para testificar de detalles muy profundos sobre una supuesta conspiración para matar a Ran­
dall, que involucraba a Cabrera y otras dos personas, ninguna de las tres se conocían entre ellos
y achacar el posterior asesinato de Caballero a uno de los tres porque supuestamente éste iba a
confesar el crimen y delatarlos. Una huella dactilar que se alegaba poseía la fiscalía comenzó a
saltar de una pieza de evidencia a otra, la cual se conoció como “huella saltarina”.

209 Ver Guillermo Villablanca, La quiebra de la justicia, Pensamiento Crítico, Año 1, Núm. 5 y
6,1978, pág. 2.

210 Ver Guillermo Villablanca, La quiebra de la justicia, Pensamiento Crítico, Año 1, Núm. 5 y
6,1978, pág. 10.

211 Ver Antonio Rivera, “La Liga Socialista y el primero de mayo”, El Socialista, Año XI, Núm.
75» >977» pág. 2 y 4-5. Se mencionan las huelgas de la Ponce Cement, las petroquímicas, la Cene-
cena Corona y la Telefónica, entre otras.

212 Ver Betances y la ilegalidad", Correo de la Quincena, Volumen XIV, Núm. 272-279,15 de
marzo al primero de julio de 1977, pág. 29-30.

213 Ver Editorial: Del Primero de mayo al 25 de julio”, Correo de la Quincena, Volumen XIV,
Núm. 272-279,15 de marzo al tro. de julio de 1977, pág.19-21. Se establece que la LSP adoptó la
posición expresada en el libro “La Lucha por la independencia” de Juan Antonio Corretjer, su
Secretario General. El editorial indica la necesidad de un movimiento clandestino que con su
golpeo revolucionario será lo que logre esa unidad en el espacio público.

214 Ver Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 296-304,15 de marzo al 15 de julio de 1978,
pág. 7. El FRAI lo componían en ese momento el MSP, la LSP, representado por Juan Antonio
Corretjer y el sector no afiliado, entonces representado por Federico Cintrón Fiallo. El repre­
sentante del MSP, Luis Ángel Torres no asistía debido a enfermedad y el delegado suplente
141 I I-L( HA Y ! SP.ACIO nr. i.\ LigaSoí iaiista PlU-RTORRlQUI ña: 1962-1989

no cumplía con asistir. El FRA1 había impulsado al FRAE, cuya finalidad era la campaña de
abstención electoral y educar sobre el efecto negativo de esta práctica en la lucha. El FRAI, por
otro lado, debía cumplir otros propósitos más amplios en la lucha.

215 Ver “Lares: 110 aniversario”, El Socialista, Año XII, Núm. 79,1978, pág. 6.

216 Ver Rafael Anglada López, “Fue un luchador por la cultura", Claridad, 16 al 22 de noviem­
bre de 1979, pág. 2.

217 Ver “El Año 1978”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre al 15
de enero de 1979, pág. 36-37.

218 Ver” Clandestinaje, revolución y lucha annada”, tomado de Revista Urayoán y reproducido
en Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre al 15 de enero de 1979,
pág. 19-22. Esta revista era de las Fuerzas Armadas de Resistencia Popular” (FARP). Se abordan
los conceptos de clandestinidad y lucha armada y se intenta desmitificarlos. Se asevera que
ha habido grupos clandestinos que han trabajado para impulsar derechos desde la legalidad.
Por otro lado se toma como ejemplo el Partido Nacionalista y su acción política en el espacio
público lo cual facilitó toda la información necesaria al estado para su acción liquidacionista.
Al presentarse una organización al espacio público lo frecuente es que el estado permita esta
participación para beneficiar su trabajo represivo. Se diferencia entre las acciones represivas
del estado y la acción represiva de los aparatos de inteligencia. Estos últimos se encargan de
asesinatos y encarcelamientos. El estado precisamente “facilita” la vida pública de la organi­
zación y va identificando cuadros, tendencias y los posibles reemplazos al liderato, etc. Como
ejemplo de la fragilidad de presentar un frente público de movimiento fuerte para supuesta­
mente frenar la represión se recuerda lo sucedido en Chile, donde se ganaron unas elecciones
y la represión en Indonesia donde el Partido contaba con un millón de afiliados. Se concluye
que el fortalecimiento de las organizaciones clandestinas demarcarán el camino al pueblo
para organizarse garantizándole las estructuras necesarias. Ver Editorial: “Lucha armada en
Puerto Rico”, Correo de la Quincena, Volumen XVI, Núm. 318-324, tro. de febrero al tro de mayo
de 1979, pág. 7-8. Se establece la diferencia entre estrategias de los grupos clandestinos y el Par­
tido Nacionalista. Se enfatiza que ninguna guerra se lleva a cabo con la misma estrategia que
otra guerra y se utilizó como ejemplo la diferencia entre la estrategia del General Sandino y la
del Frente Sandinista de Liberación. Los nacionalistas dieron ejemplo de valor en el combate,
los grupos clandestinos se enfrascan en una guerra prolongada de golpes sucesivos que logre
hacer fracasar la estrategia militar imperialista de liquidar a Puerto Rico. El concepto de guerra
prolongada es parte consubstancial del cuerpo teórico del marxismo. Este editorial advierte de
críticas que se oyen desde la izquierda contra la lucha que libraban los grupos clandestinos lo
cual además de injusto contribuía a aislar a los grupos clandestinos de la conciencia del pueblo
tal como lo deseaba la policía.

219 Ver “Bandidaje policial en Chicago”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 296-304,15
de marzo al 15 de julio de 1978, pág. 27. José López, quien había sido excarcelado más temprano
en el año, sufrió serias agresiones físicas de parte de la policía de Chicago al igual que otras
personas, su esposa y una familia compuesta por Juan Rivera y su esposa con su bebé, cuando
se quedaron solos y recogían el salón donde se había celebrado una reunión de representantes
de minorías cuyo fin era discutir precisamente la brutalidad policiaca.

220 Ver “El Año 1978”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre al
15 de enero de 1979, pág. 36-37. En los dos primeros meses salieron de la cárcel, María Cueto,
RaymondSoto Dáviux | 142

Raisa Nemekin (Nueva York), Ricardo Romero, Roberto Caldero y José López (Chicago). Todos
presos por negarse a colaborar con el Gran Jurado en su investigación de la FALN. En mayo
salieron Pedro Archuleta y los hermanos Julio, Luis y Andrés Rosado (Nueva York). Presos por
la misma razón.

221 Ver “William Morales: Prisionero de Guerra”, El Socialista, Año XI1, Núm. 79,1978, pág. 8.
Miembros de la LSP visitaron a William en prisión el 31 de agosto de 1978 en compañía de Dyl-
cia Pagan, su esposa, y pudieron aquilatar su espíritu recio y valeroso y observar las heridas.
Ver “El Año 1978”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre de 1978
al 15 de enero de 1979, pág. 37. William fue arrestado el 12 de julio de 1978 en un apartamento de
Nueva York. Salió con heridas muy serias en el rostro y en las manos presuntamente al estar
manipulando piezas para armar bombas. Lo acusaron de una larga lista de delitos aunque el
único herido era el propio William. Su posición al declararse prisionero de guerra conlleva no
levantar defensa ni refutar prueba hasta que se cumplan condiciones de naturaleza legal que
el Gobierno de Estados Unidos no estaba dispuesto a conceder.

222 Ver “Tareas de la retaguarda: Discurso de Julio Rosado en Jayuya”, Correo de la Quincena,
Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre al 15 de enero de 1979, pág. 31-33.

223 Ver Documento: “A nuestros compatriotas que radican al sur de la frontera impuesta”,
MLN, publicado en el Diario de Juárez, martes, 15 de diciembre en Ciudad Juárez y reprodu­
cido en Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 384-392,15 de noviembre de 1981 al 15 de
febrero de 1982, pág. 13-14. Ver Editorial II: Un paso adelante en México ocupado, Correo de la
Quincena, Volumen XVII, Núm. 384-392,15 de noviembre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág.
15-17. Ver “On principies of no collaboration” Recuperado de www.freedomarchives.org/search,
phpTview collection=i8 el 18 de Julio de 2014.

224 Ver Amir Parviz Pouyan, “Refutación de la teoría de la sobrevivencia” (traducción), Irán: la
lucha desde adentro, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 312-317,15 de noviembre al 15
de enero de 1977, pág. 27-30. El autor fue miembro de la Organización de la Guerrilla Fedayee
del Pueblo Iraní. Este fue un trabajo muy serio sobre la construcción de un partido marxista de
la clase obrera y la lucha política- ideológica en su desarrollo.

225 Ver “De la guerrilla a la guerra popular", Publicación de los Cuadros Estudiantiles de la
Liga Socialista Puertorriqueña, Santurce, Puerto Rico. La introducción de Abraham Guillén a
la cual se alude en el texto es el artículo titulado en la recopilación de la LSP “La Guerrilla con­
tra el capitalismo”. La edición del libro del Che Guevara de la cual se extrajo es hoy una joya de
colección, Emerto “Che” Guevara, Guerra de Guerrillas, Provincias Unidas, Montevideo, 1967.

226 Ver “Cuatro terroristas se apoderan de Consulado de Chile” (En portada), El Vocero, mar­
tes, 4 de julio de 1978, Ver “Cónsul de Chile dice: esto no fue un secuestro”, El Vocero, jueves,
6 de julio de 1978, pág. 6. En el texto del artículo que no lleva firma se identifica por nombre
al cónsul y a una periodista quien entrevistó al cónsul y ninguno utilizó ese epíteto. El autor
invisible nuevamente lo utiliza.

227 Ver Juan Antonio Corretjer, Fusilamiento en “Maravilla”, Publicación de la Liga Socialista
de Puerto Rico, Guaynabo, Puerto Rico, agosto, 1978.

228 Ver “Editorial II: Monte Maravilla”, Correo de la Quincena, Volumen XV, Núm. 304-311, >5
de julio al 30 de octubre de 1978, pág. 11-13. ^er Juan Antonio Corretjer, “Enfrentamiento y con-
143 l.l ( II \ 1 I >1 \< h > DI I \ Í.I'.X Sol I \| ls I \ l’l IR I- JRRIQl ¡ Ñ19^9

traste”, El Nuevo Día, lunes, 31 de julio de 1978, pág. 21. En su columna a pocos días del asesinato
Corretjer hila y establece un contraste entre los métodos de lucha de las organizaciones clan­
destinas, tomando como ejemplo un operativo de la Fuerzas Armadas de Resistencia Popular
(FARP) en meses recientes donde se toma por asalto un cuartel de Montebello en Manatí, y se
da un mensaje y nadie sale herido, la toma de! consulado por dos independentistas ese tres y
cuatro de julio para dar un mensaje sobre la situación colonial y nadie sale herido y la acción
policiaca en el Cerro Maravilla que califica de fusilamiento y recuerda que ese cuerpo es en­
trenado por el FBI. Era obvio que Corretjer y la LSP ya habían analizado la versión oficial y no
la habían creído. Por otro lado, Corretjer aprovecha para traer el historial familiar de Arnaldo
Darío Rosado y sus raíces nacionalistas.
229 Ver por ejemplo: “Arrestan seis terroristas” (En portada) y “No reclaman el cadáver de terro­
rista”, El Vocero, viernes, 28 de julio de 1978, pág. 6.

230 Ver Manuel “Manny" Suárez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in
Puerto Rico and the Federal Government cover up, Editorial de Instituto de Cultura Puertorri­
queña, San Juan, 2003, pág. 79.

231 Ver Juan Antonio Corretjer, “El cuatro enchilado”, Correo de la Quincena, Volumen XV,
Núm. 296-304,15 de marzo al 15 de julio de 1978, pág. 11-13.
232 Ver Juan Manuel Delgado, Juan Antonio Corretjer (Semblanza), Editorial Guazábara, Co-
merío, 1985, pág. 47. Ver Carlos Carrera Benítez, “Juan Antonio Corretjer: Semblanza”, Correo
de la Quincena, Volumen XVII Núm. 355-360,15 de agosto al 30 de octubre de 1980, pág. 22-23.
En ocasión de conmemorarse el Grito de Lares en el Colegio de Abogados, el 20 de septiembre
de 1980, el Ledo. Carreras en su extensa semblanza a Corretjer también señaló la soledad que
muchas veces acompañaba a Corretjer al defender a luchadores como, Pablo, Nydia, William
Guillermo, los Macheteros y otros diciendo, “Juan Antonio jamás condenó ni abandonó a los
buenos."

233 Ver "La toma de! consulado”, Pensamiento Crítico, Año i, Núm. 7, agosto, 1978, pág. 3.
234 Ver “El Año 1978”, op. cit., pág. 37. Pablo Marca no fue condenado a vientidos años y Nydia
Cuevas a doce años. Habían tecnicismos en la larga sentencia de Pablo aunque finalmente
cumplió el mismo tiempo que Nydia.

235 Ver El Socialista, Año XIII, Núm. 81,1979, pág. 1 y 5.


236 Ver “El Resumen Año 1979”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 330-346, tro.
de agosto de 1979 al iro. de abril de 1980, pág. 40. Los pescadores logran detener las ejercicios
navales entre el 21 y 23 de enero del 1979. En febrero nuevamente grupos organizados lograron
detener las prácticas. Ver editorial “Se impuso temeridad", El Mundo, 22 de enero de 1979, pág.
6-A. Los planteamientos son acorde a los intereses de la Marina y el razonamiento es acorde
a la Guerra Fría. Es disparatado ya que además de la traición hacia los puertorriqueños que
representa esta opinión, se alega que la Unión Soviética utiliza a Cuba para cualquier clase
de ejercicio y los pescadores no permiten la misma cosa a Estados Unidos, desconociendo a
Guantánamo. Igualmente adjudica arbitrariamente que no hay “valentía" de pane de los pes­
cadores porque la Marina no iba a ponerlos en peligro. Ver Arturo Meléndez López, La Batalla
de Vieques, op cit. pág. 106-108 y también alocución ante Corte Federal de Estados Unidos de
Ismael Guadalupe el 14 de octubre de 1979, en la cual relata con nombres las víctimas de los
Raymond Soto Dávila | 144

asesinatos de los marinos, pág. 151-154. Este razonamiento es profundamente colonizado y des­
conoce lo que había sido la práctica criminal de la Marina en Vieques tanto de forma directa a
través de asesinar personas, reforzar la práctica de la prostitución c incurrir en asaltos sexuales
a menores, como en sus prácticas contaminantes contra la población y el ambiente. Ver “Resu­
men Año 1979" op. cit., pág. 40. Las organizaciones clandestinas M.A.R. y O.V.P.R. (Movimien­
to Armado Revolucionario y Organización de Voluntarios por la Revolución Puertorriqueña,
respectivamente) colocaron bombas con comunicados en apoyo a la lucha viequense en varias
instalaciones militares entre enero y febrero de ese año. No hubo víctimas. En marzo los CRP
(Comandos Revolucionarios del Pueblo) colocaron bombas y comunicados en empresas de
comunicaciones sospechosas de estar vinculadas a la tecnología de telecomunicaciones con
propósitos militares.

237 Ver Luis A. Cabán, "Pescadores Vieques y miembros del PSP invaden terrenos prácticas de
la Marina”, El Mundo, 21 de enero de 1979, pág. 3-A.

238 Ver “Vieques contra la Marina”, Correo de la Quincena, Volumen XVI, Núm. 318-324,1 de
febrero al 1 de mayo de 1979, pág. 23.

239 Ver Manuel “Manny” Suarez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in
Puerto Rico and the Federal Government cover up, op cit. pág. 85.

240 Ver Raúl Álzaga Manresa, “Carlos Muñiz Várela”, Recuperado de www.verdadyiusticia.net
el 15 de marzo de 2014. Ver Pablo Rodríguez, “Conexión senador Nogueras y el terrorismo”,
Pensamiento Crítico: Documentos, Año V, Núm. 28, marzo/abril, 1982, pág. 1-32. Ver Marta G.
Sojo (Febrero, 2004) Raúl Álzaga Manresa, director de Viajes Varadero en la isla borinqueña,
habla para BOHEMIA. Recuperado en http://www.latinnmericanstudies.org/dialogue/alzaga»
htm en el 10 de diciembre de 2012.

241. Ver “Resumen de Año 1979”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 330-346, iro.
de agosto de 1979 al tro. de abril de 1980, pág. 40. Este caso fue discutido al interior de la LSP e
incluido en su resumen para ese año.

242 Ver “Trece arrestados en desafio a Marina", Claridad, 18 al 24 de mayo de 1979, pág. 2. Ver
“Marina entrega carta "advertencia”, Claridad, 18 al 24 de mayo de 1979, pág. 2. La Marina entre­
gó cartas en donde notificaba las violaciones a leyes federales y también tomó fotos y huellas
dactilares. (Esta costumbre se extendería de ahí en adelante a todos los desobedientes civiles
que penetraran terrenos restringidos por la Marina.)

243 Ver “Resumen de Año 1979”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 330-346, iro.de
agosto de 1979 al iro. de abril de 1980, pág. 40-41. Ver El Socialista Extra, 81-A, diciembre de 1979*
Los 21 arrestados fueron sentenciados por el juez Torruellas a varios términos y condiciones,
sentencias suspendida para algunos y términos de cárcel para otros. Ángel Rodríguez Cristó­
bal fue sentenciado, el día 26 de septiembre por el juez Torruellas, y ese mismo día lo encarce­
lan en Bayamón y se lo llevan dos días después a Tallahasee, Florida, donde lo asesinaron el 11
de noviembre de 1979.

244 Ver Rafael Anglada López, “Asesinato rodeado de interrogantes” Claridad, 16 al 22 de no­
viembre de 1979, pág. 2-3. Ver Anuro Meléndez López, La batalla de Vieques, op cit. pág. 164-168.
Se reproducen artículos de Wilda Rodríguez (El Nuevo Día) y de Rafael Anglada (Claridad) en
torno a la herida profunda que mostraba el rostro de Ángel, la negativa de las autoridades
145 | Lúe ha > i spa( io di i a Liga So< iai isla Pi i RTORRiql i ñ a: 1962-1989

carcelarias que se entrevistara a otros reclusos o dar información sobre fotos de la escena y
otros detalles tales como la practica carcelaria de no proveer sábanas en ese tipo de celda aun­
que alegaban fue con una sabana que se había ahorcado Angel. Otro detalle fue la admisión
de haberle inyectado Toracin, un anti psicótico. Wilda Rodríguez indica en su artículo que
Carlos Zenón apuntó durante el velatorio en Cíales que “después de ver a Ángel no hay que
ser patólogo para determinar que fue ejecutado”. Ver “FBI encubre asesinato Ángel Rodríguez
Cristóbal”, Pensamiento Crítico, Año II, Núm. 17, enero-febrero, 1980, pág. 11-12. Se reproduce
una carta de un grupo de confinados de Tallahassee, Florida, los cuales se firman como Pri­
sioneros latinoamericanos”, en la cual aluden a una primera carta que dicen hicieron llegar
al periódico Tallahassee Democrat y a Baltasar Corrada del Río, Comisionado Residente de
Washington para esa fecha. La presente tiene fecha del 30 de noviembre y se envió a la prensa
y llegó a Pensamiento Crítico. En la misma se relatan algunos pormenores de la noche en que
murió Ángel y se nombra a un confinado y su número de preso, el cual se dice escuchó ruidos
fuertes y golpes contra la pared en la celda continua, donde se encontraba Ángel. El nombre
no es latino: Danny Charles Sheppard. En ambas cartas se relata el prejuicio, malos tratos y
continuas represalias contra los presos latinos.

245 Ver Antonio R. Gómez, “Reaccionan ante asesinato”, Claridad, 16 al 22 de noviembre de


1979» pág. 5-

246 Ver Ramón Rodríguez, “Realizan sepelio en Cíales de líder Liga Socialista , El Mundo,
viernes, 16 de noviembre de 1979, pág. 13-A. Se calculó la asistencia en ocho mil personas. Ver
Miñi Seijo Bruno, “Miles asisten a sepelio patriota asesinado”, Claridad, 23 al 29 de noviembre
de 1979, pág. 2.

247 Ver Wilda Rodríguez, “A la cárcel otros seis”, El Nuevo Día, pág. 4. El 29 de noviembre,
apenas dos semanas y media del asesinato de Ángel Rodríguez Cristóbal, Lourdes Santana de
solamente 23 años fue enviada por tres meses a una cárcel federal de Virginia. Ese día fueron
condenados a diferentes términos, entre dos a seis meses, Mildred Martínez, Emilia Rodríguez,
Reverendo Wilfredo Vélez, León Martínez y José Acosta. Ninguno reconoció juridicción a la
Corte Federal. Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la
independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 304.

248 Ver El Socialista Extra, 81-A, 5 de diciembre de 1979. Además del operativo en Sabana Seca,
en este número también se comenta lo concurrido de un acto de protesta que se celebró ante
la base naval Roosevelt Roads convocado por el Comité Nacional pro Defensa de Vieques y se
observa que a pesar del reciente asesinato de Ángel Rodríguez Cristóbal, la militancia no se
replegó.

249 Ver Antonio R. Gómez, “Reaccionan ante asesinato", Claridad, 16 al 22 de noviembre de


1979» pág. 5.

250 Ver “Carta de William Guillermo Morales", Correo de la Quincena, Volumen XVI, Núm.
318-324, tro. de febrero al tro. de mayo de 1979, pág. 30. William Guillermo hace llegar esta carta
a Juan Antonio Corretjer estando en el Hospital Bellevue de donde se escaparía poco después.
En ella indica que la corte estatal lo ha sometido a un segundo juicio con los mismos cargos
que ya fue enjuiciado y condenado en una corte federal. Relata que pudo expresarse por la
televisión el día anterior y aunque le sorprendió que se lo permitieran logró dar a conocer la
larga lista de asesinatos cometidos por el gobierno de Estados Unidos contra los independen-
listas.
Raymond Soto Dávila ¡ 146

251 Ver Juan Antonio Corretjer, El líder de la desesperación, op cit. pág. 33-39.E11 este segmento
del libro que titulara “terrorismo", Corretjer hace un análisis de las acciones que se han cali­
ficado como terroristas a lo largo de la historia de Puerto Rico hasta los inicios de la década
del 1970. Se circunscribe a la definición marxista de distinguir si una acción es terrorista por
su efecto en las masas y si esa acción aleja o las acerca al proceso revolucionario. Entre los
ejemplos que analiza está el del ajusticiamiento en el 1936 que hicieron los nacionalistas Elias
Beauchamp e Hiram Rosado al Coronel estadounidense Elisha Francés Riggs, responsable de
los asesinatos de la Masacre de Rio Piedras en el 1935. Este acto dirigido hacia el opresor y por
lo cual ofrendaron sus vidas estos dos héroes nacionalistas tuvo como consecuencia inmediata
una asistencia muy reducida a la ceremonia que se efectuó para honrar a Riggs de cuerpo
presente mientras que las despedidas y entierros de los dos nacionalistas fueron sumamente
concurridas.

252 Ver Manuel “Manny" Suarez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in
Puerto Rico and the Federal Government cover up, op. cit., pág. 114. El trío lo componían el
teniente de la Marina de Guerra de Estados Unidos, Alex La Zerda, destacado en la Base Naval
de Roosevelt Roads de Ceiba, junto a otros dos individuos, uno, exilado cubano de la extrema
derecha y el otro, un puertorriqueño de posición política ultra conservadora. Se les acusaba
también de conspirar para colocar otra bomba en la Oficina de Servicios Legales, la cual sirve
a la población indigente y se nutre de fondos del Gobierno de Estados Unidos. El jurado los
absolvió a pesar de escuchar una grabación en la cual La Zerda le informaba a un agente del
FBI sobre ambas cosas.

253 Ver Francés Díaz, “El Comité Unitario contra la Represión”, Pensamiento Crítico, Año 111,
Núm. 18,1980, pág. 12-13. ^r “Grupo tramitó liberación de presos nacionalistas tendrá acto de
clausura", El Mundo, domingo, 20 de enero de 1980, pág. 6-A.

254 Ver Manuel “Manny" Suarez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in
Puerto Rico and the Federal Government cover up, op cit. p 127.

255 Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit. pág. 377-378. (unto a Carlos Rosario Pantojas fueron citados Lucia Berrios
De Jesús, José A. Rosario Figueroa y José Luis Reyes.

256 Ver Rafael Anglada, "Gran Jurado EU investiga sucesos Sabana Seca”, Claridad, 14 al 20 de
marzo de 1980, pág. 2. Carlos Gallizá, para entonces presidente del PSP, repudió de inmediato
la utilización del Gran Jurado adjudicando la autoría al FBI y a las llamadas agencias federales.

257 Ver Editorial II: FBI y “Gran Jurado”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 355*3^°’
15 de agosto al 30 de octubre de 1980, pág. 7-8.

258 Ver Elizam Escobar, “Nota Autobiográfica”, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm.432.
25 de julio de 1984, pág. 7-8.

259 Ver “Hermanos Boricuas: Prisioneros de Guerra”, Correo de la Quincena, Volumen XVII,
Núm. 347’354.15 de abril al 31 de julio de 1980, pág. 2-4.

260 Ver Manuel “Manny” Suarez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in
Puerto Rico and the Federal Government cover up, op cit. pág. 114. Esta investigación supuesta­
mente incluyó un gran jurado. Ver pág. 116, La orden de mordaza en el caso civil de la demanda

!
147 I Lucha y espacio di la Liga Sociai isia Puertorriqueña: 1962-1989

de familiares incluyó a la prensa y a los familiares. Ver pág. 121-12, Julio Andrade estaba a punto
de ser acusado de varios crímenes y su credibilidad era muy poca. Ver pág. 125-133. El Secretario
de Justicia del Departamento de Justicia de Puerto Rico asignó al mismo fiscal que investigó el
caso de la muerte de Adolfina Villanueva y el ataque a tiros a su esposo, Agustín Carrasquillo
en el desahucio en la comunidad de Tocones en Loiza sin que se produjeran acusaciones. El
apellido del fiscal también era Villanueva. La investigación sobre el caso del Cerro Maravilla
terminó solamente dos semanas después que el Departamento de Justicia de Estados Unidos
anunciara que esta vez no suspendía sino que cerraba la suya. Ambas terminaron en enero de
1981 y habían comenzado a raíz de las declaraciones del policía corrupto Julio Andrades en
septiembre del año anterior. El desfile de testigos que declaraban que habían oído dos ráfagas
de tiros aumentaba con cada investigación pero sus testimonios caían en oídos sordos.

261 Ver “Hermanos Boricuas: Prisioneros de Guerra”, Correo de la Quincena, Volumen XVII,
Núm. 347-354,15 de abril al 31 de julio de 1980, pág. 2-4. La LSP y el CUCRE preparaban compa­
recencias a la ONU. Por otro lado, en Estados Unidos, el Comité Nacional Pro Libertad de los
Prisioneros de Guerra se hallaba muy activo en presentar el caso a foros internacionales y en
Puerto Rico se organizó en ese momento el “Comité de Apoyo y Defensa a los Once Prisioneros
de Guerra" para llevar a cabo los trabajos necesarios en esta tensa situación.

262 Ver L’OUVRIER, Vol. 12, No. 7, octubre de 1980. Reproducido y traducido en el Correo de la
Quincena, Volumen XVII, Núm. 355-360,15 de agosto ai 30 de octubre de 1980, pág. 28-31.

263 Ver “Declaración ante el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas por Amhed
Obafemi, Representante de la República de Nueva Afrika”, De Pie y en Lucha, (Organo teórico
del MLN), otoñoi98o, pág. 15-16 y 29. Este grupo expresa solidaridad con Puerto Rico y pasa a
hacer sus reclamos. La República de Nueva Africa estaba compuesta por varias organizaciones
de afroamericanos estadounidenses y reclamaban un territorio nacional para ellos dentro del
propio Estados Unidos. El programa COINTELPRO criminalmente y vilmente acabó con mu­
chos de sus integrantes. Ver “Declaración ante el Comité de Descolonización de las Naciones
Unidas por Ricardo Romero, Representante de la Comisión chicano/mexicana del MLN , De
Pie y en Lucha, (Organo teórico del MLN), otoño 1980, pág. 17-19. Romero expresa su solidari­
dad con Puerto Rico y aprovecha para ventilar los reclamos sobre la tierra que Estados Unidos
arrebatara a México en el 1848 con el Tratado de Guadalupe-Hidalgo y el efecto nefasto sobre
la población mexicana.

264 Ya para esa fecha Carlos Noya había recopilado un compendio de escritos de autores co­
nocidos titulado “La Guerrilla Urbana”, con prólogo de Juan Antonio Corretjer. (Este com­
pendio es a modo de continuación del compendio” “De la guerrilla a la guerra popular , de
los Cuadros Estudiantiles de la Liga Socialista de Puerto Rico, op cit. La recopilación de Noya
es mayormente de otros escritos de los mismos autores en la recopilación de los cuadros es­
tudiantiles. Estos autores son Abraham Guillén, Carlos Marighella, Juan Antonio Corretjer y
Massoud Alhmadzadeh. Este último, de nacionalidad iraní realizaba una crítica a las posicio­
nes de Regis Debray, entonces muy debatidas.

265 Ver Carlos Noya, “Mensaje a mi pueblo”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 355-
360,15 de agosto al 30 de octubre de 1980, pág. 10.
266 Ver Editorial II: FBI y “Gran Jurado”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 355’360,
15 de agosto al 30 de octubre de 1980, pág. 7-8.
Raymono Soto Dáviia ¡ 148

267 Ver “Campaña por Carlos Noya”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361-373, iro.
de noviembre del 1980 ai de mayo de 1981, pág. 19-20.

268Ver Jorge L Pérez, “Unas elecciones para la historia”, El Nuevo Día (versión digital), 6 de
noviembre de 2011. Recuperado de http://www.elnuevodia.com/unaseleccionesparalahisto:
r1a-m3367.html en el 30 de marzo de 1214. Este recuento histórico, luego de tres décadas de
ocurrido este proceso eleccionario, es muestra de cómo quedó fija en la memoria del pueblo
y los políticos de entonces el proceso eleccionario de 1980. Todos los políticos entrevistados
aceptaban que pudo ocurrir el fraude aunque no todos estaban de acuerdo sobre el modo en
que ocurrió, si durante el conteo de papeletas o en los votos adelantados, además de reclamos
de paquetes de papeletas votadas que no se contaron. Se citaron para ese artículo declaracio­
nes a la prensa que a través del tiempo dieron David Noriega, entonces comisionado electo­
ral de PIP, Héctor Luis Acevedo, entonces comisionado electoral del PPD y Rafael Hernández
Colón, candidato “derrotado" del PPD. Ver Manuel "Manny” Suarez, Two lynchings on Cerro
Maravilla: The pólice murders in Puerto Rico and the Federal Government cover up, op ciL,
pág. 130. Las disputas por puestos legislativos y por puestos de municipios tardaron año y me­
dio en resolverse.

269 Ver "Puerto Rico en presente”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361-373, ¡ro. de
noviembre del 1980 ai de mayo de 1981, pág. 4-16.

270 Ver Sklar, Holly, “Founding of the Trilateral Comission” en Holly Sklar (Ed), Trilateralism:
The Trilateral Comission and elite world management, South End Press, Boston, 1980, pág.
76-82. El precursor de la Comisión Trilateral lo fue Zbigniew Brzezinski quien expuso sus ideas
que proveyeron la racionalidad para la trilateralidad en el libro “Between two ages: Americas
role in the technetronic era". Se exhortaba a crear una "comunidad” entre las llamadas nacio­
nes desarrolladas, Estados Unidos, las naciones de la Europa occidental y Japón. Desde 1970
se comenzaron a dar pasos para concertar esta comunidad para lo cual era necesario fraguar
vínculos desde dentro de estas naciones hacia cada una de las otras porque se consideraba
estaban en la vanguardia científica y tecnológica. En esa primera fase se pretendía incluir a
Australia, Israel y México. Luego se planeaba extender los vínculos en una segunda fase a los
países comunistas considerados avanzados, Yugoslavia y Rumania. Esto forzaría a la entonces
Unión Soviética a aliarse con la Trilateral o arriesgarse a ser derrotada en la competencia de
juego ideológico, tecnológico y económico por los países capitalistas desarrollados con respec­
to a los países menos desarrollados del “tercer mundo”. Con tal de desarrollar un consejo con­
sultivo que pudiera estudiar y discutir los diversos problemas que allanaran el camino para la
“cooperación global”, Brzezinski, entonces profesor de la Universidad de Columbia, organizó
los estudios tripartitas del Brookings Institute de Washington DC. A través de estos estudios
lograron intercambios significativos con otros institutos similares en países europeos y Japón.
Fueron estos estudios los que convencieron al opulento David Rockefeller a iniciar el proceso
formal para la creación de la Comisión Trilateral. Estos estudios rindieron fruto y se establece
la Comisión Trilateral en julio de 1973 inaugurándose oficialmente en Japón bajo los auspicios
de Rockefeller y el Chase Manhattan Bank. Ver en el libro ya mencionado, Holly Sker y Ros
Everdell, “Whos who on the Trilateral Commission", en Holly Sklar (Ed), Trilateralism: The
Trilateral Comission and elite world management, pag. 90-131. Ver también Hugo Assmann
(Ed.) Cárter y la lógica del imperialismo, Tomo I, Editorial Universitaria Centro Americana,
(EDUCA), Primera Edición, Costa Rica, 1978.

271 Ver “Puerto Rico en presente”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361-373, iro.de
noviembre del 1980 ai de mayo de 1981, pág. 4-16.
149 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

272 Ver Juan Antonio Corretjer, “El transplante no funciona”, El Nuevo Día, jueves, 11 de no­
viembre de 1980, pág. 35.
273 Ver Juan Antonio Corretjer, "La Liga Socialista ante el ataque a la Base Muñiz”, Correo de
la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361-373, tro. de noviembre del 1980 al 1 de mayo de 1981,
pág. 30-31.El documento enumera los operativos siguientes como los de mayor importancia,
realizados en los últimos tres años a partir del 1978: ataque en Ceiba, ataque en Fuerte Alien
en Juana Díaz, emboscada en Sabana Seca, ataque en Avenida Domenech y ataque a la Base
Muñiz. Las organizaciones que se nombran son: la Organización de Voluntarios por la Revolu­
ción (OVPR), las Fuerzas Armadas de Resistencia Popular (FARP), el Ejército Popular Boricua
(Macheteros) y los Comandos Revolucionarios del Pueblo.
274 Ver Editorial: “La Unidad y Base Muñiz”, Pensamiento Crítico, Año IV, Núm. 23, mar­
zo-abril, 1981, pág. 1. En este editorial hace mención del llamado de Oscar Collazo, héroe nacio­
nalista excarcelado luego de más de un cuarto de siglo preso por su participación en el ataque
a la Casa Blair, de la necesidad de la unidad del pueblo patriota al dirigirse al público en la
celebración del Grito de Lares el 23 de septiembre de 1980.

275 Ver José Luis Hernández, “El ataque a la Base Muñiz”, Pensamiento Crítico, Año IV, Núm.
23, marzo-abril, 1971, pág. 6-9.
276 Ver “El caso Norberto Cintrón”, Pensamiento Crítico, Año IV, Núm. 23, marzo-abril, 1981
pág. 15-17. El FBI alegaba tener un informante que había participado en la planificación de
dicho robo pero no sabía identificar donde estaba el dinero. Igualmente alegaba que dicha
planificación había tomado varios meses. Nada de esto lo pudo evidenciar.
277 Ver “Editorial III: Miserables”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 374’383» 15 de
mayo al tro. de octubre de 1981, pág. 9. Este editorial denuncia la larga condena que recibiera
Albizu Orta, la cual fue producto del FBI haberse aprovechado del racismo ponceño y el mal­
trato que siguió ya que fue sacado de inmediato que finalizara el juicio a Estados Unidos, sin
ninguna muda de ropa y se le llevó de cárcel en cárcel hasta dejarlo en una cárcel de Atlanta en
donde estaría a expensas de las actitudes sumamente racistas, el editorial se refiere a Atlanta
como la “capital mundial del racismo”. Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de
encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, op cíl pág. 471. Albizu Orta estuvo 8
años preso. Su verdadero nombre era Julio A. Veras Delgadillo. Ver “Autobiography of Julio
Antonio Veras y Delgadillo (Formerly known as Jorge Albizu Orta)”, LIBERTAD (Ofiícial organ
the National Committee to free Puerto Rican prisoners of war), Special edition, Vol. V, No. 1,
(1984), p. 26.
278 Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independen­
cia de Puerto Rico, op cit. pág. 379-380. Oscar llevaba cinco años en la clandestinidad ya que
pesaba sobre él una acusación por explosivos. Su captura fue fortuita, ya que lo detuvieron por
una violación de tránsito.

279 Ver “Carta de Elizam Escobar”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361*373» 1ro-
de noviembre del 1980 ai de mayo de 1981, pág. 28-29. Elizam escribe una carta sobre la carta
de Carlos “La Sombra” en la cual lamenta no llegara a responder. Se reproducen ambas cartas.
Carlos indica en su carta que: “Total, todos los oprimidos en las prisiones estamos de su parte
a participar con orgullo en cualquier gestión revolucionaria que ustedes estimen conveniente .
R.AYMONn SOTO DAVII.-X | 150

280 Ver Lillian Marrero, “Asesinan a Carlos “La Sombra”, Claridad, 3 al 9 de abril de 1981, pág.4.

281 Ver “Carta de Mildred Martínez del 13 de diciembre de 1979”, Bieque, Año 2, Número 4, pág.
4-A. La carta la envía Mildred Martínez a Ileana Carrión portavoz del Comité Nacional Pro
Defensa de Vieques. En esta carta Mildred solicita se de seguimiento a la respuesta de ella a
la carta de Carlos La Sombra que recibieron en la cárcel de Virginia y que ha sido de todas las
cartas la “más que la conmovió”.

282 Ver “La Sombra sigue vivo entre confinados”, Noticel, 27/03/2011. Recuperado de www.nQ:
ticeLcom/.../la-sombra-sigue-vivo-entre-confi/.../ el 30 de abril de 2014. Ver “Editorial: “La som­
bra” no ha muerto”, Claridad, 3 al 9 de abril de 1981, pág. 4.

283 Ver P. Luis Barrios, “ Puerto Rico: Despertando conciencia de corazón”, Latinoamérica-
na-online, Recuperado de www.latinoamerica-online.info/soco3/chiese27.03.html_ el 8 de
mayo de 2014. El Padre Barrios realiza un excelente análisis del ajusticiamiento de uno de los
asesinos de Carlos La Sombra y concluye que el sistema de opresión ha logrado dividir a los
pobres para que se identifiquen entre ellos como enemigos lo cual revierte al viejo lema:”D¡-
vide y vencerás".

284 Ver Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 361-373, tro. de noviembre del 1980 ai
de mayo de 1981, pág. 21. Se reproduce el comunicado de prensa de la LSP dando cuenta de la
conferencia de prensa en Canadá.

285 Ver “La lucha en Vieques y el Comité Nacional pro Defensa de Vieques”, Pensamiento
Crítico, Año IV, Núm. 23, marzo-abril,, 1981, pág. 20-23.

286 Ver Editorial:”Vieques”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 330-346, tro. de agos­
to del 1979 al tro. de abril de 1980, pág. 6. La reunión se da mientras Carlos Zenón y Pedro Saadé
están encarcelados por la causa de Vieques. El Comité Cruzada de Vieques proponía organizar
un comité en la isla grande bajo el control directo del Comité Timón de dicha organización.
Líderes y miembros del PSP apoyaban esta propuesta. (N. de A. Estuvimos presente en dicha
reunión, la cual fue muy extensa y acalorada y además de la desaprobación de la LSP, esta
propuesta tampoco fue aceptable para otras organizaciones allí representadas.)

287 Ver “Carta de Mildred Martínez del 13 de diciembre de 1979”, Bieque, Año 2, Número 4,
pág. 4-A. En dicha carta dirigida a Ileana Carrión, portavoz del Comité Nacional Pro Defensa
de Vieques, Mildred Martínez le relata diversos aspectos del proceso carcelario que en ese mo­
mento experimentan ella, Emilia Rodríguez y Lourdes Santana a raíz participar en los actos de
desobediencia civil en Vieques, mostrando gran compenetración con los trabajos del Comité.

288 Ver Editorial: “Polémica enana”, Correo de la Quincena, Volumen XVII, Núm. 347-354. >5
abril al 31 de julio de 1980, pág. 28-30.

289 Ver “Apoyemos a los prisioneros de Guerra”, De pie y en lucha, Vol. 3, Núm. 2, junio 1980,
reproducido en Correo de la Quincena, Vol. XVII, Núm. 347- 354,15 de abril al 31 de julio de
1980, pág. 13-19. Sobre el segundo punto, se fundamenta en las medallas tipo púrpura que el
Almirante Knoizen otorgó a los caídos en el operativo de Sabana Seca, condecoración reser­
vada para los heridos en combate. Se detallan las fuentes que conforman el derecho inter­
nacional: Los Protocolos Adicionales (I y II) de la Convención de Ginebra del 12 de agosto de
1949 amplían los principios para proteger a las personas que luchan contra el colonialismo y
151 I LU( HA Y I SI'AC (OI». I A Ll(.\ So( IAI 1SIA PUERTORRIQUEÑA: I962-I989

la dominación extranjera. Estos protocolos fueron adoptados en la Conferencia Diplomática


sobre la Reafirmación y Desarrollo de la Ley Humanitaria Internacional Aplicable al Conflicto
Armado de 1976. Estos protocolos tienen en sus artículos definiciones de los conflictos y los
alcances de las protecciones. En la Conferencia Diplomática de 1974 se v°tó a favor del Artículo
I y el caso del movimiento de liberación puertorriqueño se admitió como aplicable al inter­
pretar su texto. El artículo 45 dispone que un combatiente deberá ser considerado prisionero
de guerra” hasta que un tribunal competente determine su status. Las organizaciones que se
criticaron en el boletín fueron el PSR y el MST. En síntesis se argumenta que los casos como El
Salvador son casos de guerras civiles generadas en la lucha de clases y en los casos coloniales
se trata de una potencia colonizadora en contra de una nación que intenta liberarse, es entre
dos naciones. Es por eso que en el primer caso se aplica el término “preso político y en el
segundo, “prisionero de guerra”.
290 Ver Domingo Olavarría, “Desalojan desde mañana a los de Villa Sin Miedo , El Nuevo Día,
domingo, 1 de noviembre de 1981, pág. 4-5. El Senado de Puerto Rico intentaba pasar legislación
favorable a esta comunidad y muchos grupos religiosos también se unían a su defensa. Por
otro lado se dejaba ver a través de rumores que los residentes estaban armados y resistirían el
desalojo.
291 Ver Perspectiva: “¿Recesión económica breve?”, El Nuevo Día, domingo, 1 de noviembre de
1981, pág. 41-45. Ver Leonard Silk, “Puede ser peor de lo previsto”, El Nuevo Día, domingo, i de
noviembre de 1981, pág. 42.
292 Ver Miriam Muñiz Varela, Adiós a la economía, op cit., pág. 57-62. Sobre el desempleo la
autora señala que hubo reducciones en todas las categorías, de cuello blanco, profesionales, de
cuello azul, de producción. Esta misma autora, al igual que otros analistas, había alertado que
desde el 1960 el desarrollo urbano en Puerto Rico se había implantado alrededor del triángulo
de la urbanización, el centro comercial y la autopista. (N. de A.: Debemos recordar que estos
factores en su conjunto develaban el motor propulsor del endeudamiento tanto público como
privado.)

293 Ver John Simón, “Hacia el dominio de los carros japoneses”, El Nuevo Día, domingo, 1
de noviembre de 1981, pág. 2-3. Es significativo que en el mismo número que se “anuncia la
recesión, el periódico publicara un artículo sobre el éxito y gran satisfacción de los portavoces
de la industria de carros japoneses en relación al desplazamiento en ventas de la industria
estadounidense automotriz en Puerto Rico por los carros japoneses.

294 Ver Miriam Muñiz Varela, Adiós a la economía, op. cít, pág. 60.

295 Ver Lillian Matrero, “Gran Jurado” la emprende contra movimiento obrero , Claridad, 4 al
10 de septiembre de 1981, pág. 2. Las uniones emplazadas eran la Unión Nacional de Trabajado­
res y la Unión Internacional de Trabajadores del Aeropuerto (UITA). Por otro lado, Jorge Farin-
acci había sido abogado de la Unión de Tronquistas para el 1977 y se pretendía relacionarlo con
un robo bancario de ese año. Al momento de ser citado por el Gran Jurado en el 1981, Farinacci
trabajaba en un bufete laboral.
296 Ver Héctor Olivieri, “Crisis económica internacional”, Correo de la Quincena, Volumen
XVIII, Núm. 393-401, tro. de marzo al tro. de julio de 1982, pág. 5-10.

297 Ver Héctor Olivieri, “Crisis y política socialista”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII,
Raymond Soto Dávila | 152

Núm. 384-392,15 de octubre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág.6-8.

298 Ver José Luis Hernández, “Las huelgas, la UTIER y la unidad sindical”, Pensamiento Críti­
co, Año V, Núm. 27, enero/febrero, 1982, pág. 18-23. Se hace un extenso análisis de la huelga de la
UTIER. Se concluye que se continúan cometiendo los mismos errores desde que se perdió la
huelga de los canteros de la Ponce Cement, propiedad de la familia Ferré. Se resalta y se detalla
la enorme estructura paralela que el gobierno ha desarrollado para romper las huelgas de la
UTIER y la poca preparación del liderato y de los cuadros intermedios para enfrentar esta
estructura. Una de las causas que discute es la ausencia de un instrumento de lucha política
como por ejemplo un partido obrero revolucionario.

299 Ver Roberto Alejandro, “Universidad 1981: comentarios para un balance”, Pensamiento Crí­
tico, Año V, Núm. 27, enero/febrero, 1982, pág. 15. El autor admite que las demandas principales
no se alcanzaron pero enumera como otras demandas que se alcanzaron varias asignaciones
presupuestarias en beneficio de los estudiantes, el compromiso de ayuda para los pagos res­
tantes a los estudiantes acogidos a prórrogas y compromisos tanto de la Universidad como de
la Legislatura de crear comisiones y de futuras asignaciones de fondo.

300 Ver Wilda Rodríguez, "Cierran UPR con piedras, palos”, El Nuevo Día, 30 de septiembre
de 1981, pág. 2. Ver José Castrodad, “Faena de histeria en el Recinto”, El Nuevo Día, 30 de sep­
tiembre de 1981, pág. 4. Ver José Rafael Reguero, “Un herido y dos arrestos”, El Nuevo Día, 30
de septiembre de 1981, pág. 4.

301 Ver Luis Fernando Coss,” Represión abierta y selectiva en UPR”, Claridad, 11 al 17 de diciem­
bre de 1981, pág. 2. La represión selectiva del movimiento estudiantil se revela en los siguientes
estudiantes suspendidos: Roberto Alejandro, Presidente del Concejo General de Estudiantes,
José Rivera Santana, Presidente FUPI, Eva García, líder de la Juventud Acción Católica, Eliezer
Valentín, Presidente de Estudiantes Evangélicos, Iván Maldonado Cotto, Portavoz del Comité
contra el Alza en la Matrícula y pro Nueva Ley Universitaria, José Javier Colón, Presidente de
la Asociación de Estudiantes de Derecho, Juan Carlos García, líder estudiantil de la Facultad
de Estudios Generales, Héctor Ríos Maura, líder juvenil del PIP y José Luis Quiñones, portavoz
de la UJS-MSP/MST. Los dos líderes de trabajadores suspendidos eran los presidentes de la
HEEND y de la APPU. Las escuelas graduadas amenazadas con cierre eran las de Leyes, Plañí-
ficación, Trabajo Social y Comunicación.

302 Ver Documento: La Huelga Universitaria”, El Socialista Estudiantil, de los Cuadros Estu­
diantiles de la LSP, enero, 1982, reproducido en Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm.
384-392,15 de octubre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág. 26-27.

303 Ver Documento: Publicación de los Comités de los Obreros Revolucionarios”, Correo de
la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 384-392,15 de octubre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág.
28-33. Ver Juan Antonio Corretjer, “Historia es historia”, Correo de la Quincena, Volumen XVI-
II, Núm. 384-392, 15 de octubre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág.22-24. Corretjer hace un
recuento histórico del papel del FBI como sustituto en la persecución de independentistas del
Coronel Elisha Francis Riggs, luego de que este fuera ajusticiado por los nacionalistas en el
1936 por los asesinatos de la Masacre de Rio Piedras en el 1935 en las inmediaciones de la UPR.
Se pregunta no la autoría de la represión a la asamblea estudiantil del 25 de noviembre la cual
adjudica sin dudas al FBI, pero sí la selección de la fecha. Corretjer se había enterado que el
gobierno de Reagan proyectaba una manifestación pública a favor de la estadidad para Puerto
Rico y para esos fines había consultado a los gobiernos de casi todas las naciones recibiendo
153 I Lucha y espacio de la Liga Sociaiis) \ Pin RTORRlQUí ña: 1962-1989

un rechazo. El operativo de los Macheteros a las instalaciones de la AEE en el Condado proba­


blemente fue el otro detonante para el operativo feroz contra los estudiantes.

304 Ver “Entrevista: Juan Antonio Corretjer", Pensamiento Crítico, Año IV, Núm. 26, octu­
bre-noviembre, 1981, pág. 3-10.
305 Ver “Guánica 1981: Discurso”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 374-383 >5 de
mayo de 1981 al tro. de octubre de 1981, pág. 10-13.
306 Ver “Entrevista: Juan Antonio Corretjer", Pensamiento Crítico, op. cit. En aquellos días tres
héroes nacionalistas se daban a la tarea de organizar los comités unitarios de independentistas
lo cual según Corretjer, recibían grandes elogios, a lo cual no se oponía como personas de
gran valor patriótico que eran pero señalaba el contraste a la reacción hacia Lolita Lebrón, que
había optado por reingresar al Partido Nacionalista de Puerto Rico y había recibido grandes
críticas. Esto Corretjer lo interpretaba como un alerta de lo que los grupos más conservadores
que elogiaban estos comités realmente buscaban.
307 Ver “Declaración ante el Comité de Descolonización de las Naciones Unidas por Amhed
Obafemi, Representante de la República de Nueva Afrika”, De Pie y en Lucha, (Organo teórico
del MLN), otoñoi98o, pág. 15-16 y 29. Ver Howard Zinn, A Peoples History of the United States,
Perennial Classics, New York, 2001, p. 460-467.
308 Ver Juan Antonio Corretjer, “El comunicado clandestino”, El Nuevo Día, sábado, 22 de
agosto de 1981. Es en su columna en el periódico de El Nuevo Día, de amplia circulación, Co­
rretjer comenta el comunicado conjunto de las FALN, EPB-Macheteros, FARP y OVPR. Corre­
tjer cita varios puntos del comunicado el cual trata sobre el rol histórico de la ONU desde sus
inicios en el caso de Puerto Rico a partir del 1945 en adelante y afirma que las organizaciones
clandestinas le han cantado claro las verdades a la ONU sobre su responsabilidad en el caso
de Puerto Rico. El recorrido histórico sirve el propósito de preservar la memoria y bloquear las
posiciones oportunistas de aquellos que iban reclamando otras alternativas de autodetermi­
nación” que son falsas, siendo la única posible y genuina la de independencia nacional. Un se­
gundo propósito es legitimar en la acción el rol de las organizaciones clandestinas en el plano
político desde donde realmente crecen al aportar a la educación política del pueblo. Desde la
muerte de Corretjer y la disolución de la LSP entendemos que no ha habido otra instancia des­
de donde esta legitimación pueda catapultarse. Ver Documento: “El caso de Puerto Rico ante la
ONU”, Correo de la Quincena, Volumen IX, Núm. 162-164, tro. de agosto al 15 de septiembre de
I972» pág. 20-22. Desde el 1972, cuando se comenzó a presentar el caso de Puerto Rico al Comité
de Descolonización de la ONU, la LSP advirtió lo inaceptable del término autodeterminación
y de la llamada autonomía como alternativa descolonizadora. Sobre el primer término se in­
siste ningún país ocupado puede decidir o “auto determinarse’, para hacerlo primero debe
cesar el poder colonial.
309 Ver: Oscar López Rivera, “Carta al Comité de Descolonización de las Naciones Unidas ,
Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 374-383. *5 de mayo de 1981 al tro. de octubre de
1981, pág. 14-15. Ver Reproducida de LIBERTAD (órgano oficial del Comité Nacional Pro Liber­
tad Prisioneros de Guerra Puertorriqueños, Chicago) septiembre, 1981, Volumen II, Número 5,
pág. 5. Ver Luis Nieves Falcón, Un siglo de represión política, op cit, pág. 249-251. El 12 de octu­
bre de 1970, la Asamblea General concluye que la ulterior continuación del colonialismo es un
crimen y constituye una violación a la carta de las Naciones Unidas, a la Declaración Sobre la
Concesión de la Independencia a los Países y Pueblos Coloniales y a los Principios de Derecho
=
Raymond Soto Dávii.a | 154

Internacional. Sostiene el derecho de los pueblos coloniales a luchar por todos los medios
necesarios a su disposición en contra del poder colonial. El colonialismo, como el apartheid y
el genocidio pasa a ser considerado como crimen contra la humanidad. Estos medios que se
reconocen como defensa ante el poder colonizador incluyen la lucha armada. En los puntos
#3 y «4 de la Resolución 3103 de la Asamblea General de las Naciones Unidas se extiende a
los combatientes contra el colonialismo el status legal concedido a combatientes en conflictos
armados internacionales de la Convención de Ginebra de 1949 y también se aplica el status de
prisionero de guerra al ser capturados. Ver Nota 289 en la cual Juan Antonio Corretjer abunda
sobre los documentos y protocolos referentes al derecho internacional en caso de las colonias.
N. de A. Son este conjunto de declaraciones y resoluciones de las Naciones Unidas lo que da
fundamento a la carta de Oscar López Rivera.

310 Ver Dylcia Pagan Morales, “Mensaje para Doña Consuelo”, Correo de la Quincena, Volu­
men XVIII, Núm. 374’383» 15 de mayo de 1981 al tro. de octubre de 1981, pág.18. Esta carta la firma
Dylcia Pagan a nombre de los once prisioneros políticos y fue leída el 26 de julio de 1981, en
ocasión de re dedicarle a Consuelo Lee el Centro Infantil, el cual era parte del Centro Cultural
Puertorriqueño en Chicago.

311 Ver “El caso Jorge Farinacci”, Pensamiento Crítico, Año V, Núm. 28, marzo-abril, 1982, pág. 3.

312 Ver “Destierran a Ricarte Montes García”, Claridad, 9 al 15 de julio de 1982, pág. 1. Ver Correo
de la Quincena, Volumen XVII1, Núm. 393-401, tero, de marzo al tero, de julio de 1982, pág. 10.
Ver “Exigimos alto a la agresión contra VILLA SIN MIEDO”, El Socialista, Año XV, Núm. 89,
mayo 1982, pág. 4. La LSP se enfrascó en una campaña de telegramas a favor de Villa Sin Miedo
la cual alcanzó al menos 300, desde diversas ciudades de Estados Unidos, les fueron enviados a
Romero Barceló como gobernador y Corrada del Rio como el entonces comisionado residente
en Washington DC. Desde Canadá se enviaron al menos cincuenta y desde México al menos
diez. La LSP coordinó este esfuerzo con sus diversos contactos internacionales, MLN (Estados
Unidos), Partido Canadiense del Trabajo (Canadá) y Comité de Defensa Popular en México.

313 Ver El ocaso de un drama: Muerto un policía en el desalojo de Villa Sin Miedo”" (Portada),
El Nuevo Día, 19 de mayo de 1982. Ver Wilda Rodríguez, “En fuego y humo desaparece Villa
Sin Miedo , El Nuevo Día, Miércoles, 19 de mayo de 1982, pág. 2-3. Ver Antonio R. Gómez, “No­
venta minutos de terror”, Claridad, del 21 al 27 de mayo de 1982, pág. 3. Ver “Indignado el país
con terror policiaco , Claridad (Portada). Una foto ilustra claramente un efectivo de la policía
apuntando con su arma.

314 Ver Editorial: Mirada por el retrovisor”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm.
393’4°L tero, de marzo al tero, de julio de 1982, pág. 4. En este editorial se destaca que en los
últimos años se habían visto más de una docena de rescates, con las muestras de poder de
los propietarios por un lado y por el otro, la defensa de los policías a favor de los propietarios
arremetiendo contra los rescatadores. Se puntualiza que en Villa Sin Miedo esa confrontación
llegó más lejos, hasta el punto de ver los hogares arder algo nunca visto, llevada hasta la locura.
Se interpreta que es una página inconclusa de la lucha de clases, enfrentando a la clase propie­
taria por la tierra siendo la usurpación del asta la señal de los tiempos. Se concluye que la lucha
armada es lo único que podrá abrir el camino.

315 Ver Domingo Olavarría, “Desalojan desde mañana a los de Villa Sin Miedo”, El Nuevo Día.
domingo, 1 de noviembre de 1981, pág. 4-5. Los ofrecimientos a otro terreno el cual llamaban
Villa Realidad ’ no eran satisfactorios para los que habían ido hasta el lugar porque eran inun-
155 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

dables y requerirían de la construcción de un puente. /\ “Villa Realidad" algunos residentes la


habían bautizado como “Villa Traición”.

316 Ver Juan Antonio Corretjer, “Canciones de Villa Sin Miedo”, El Socialista, Año XV, Núm.
89, mayo, 1982, pág.i. El 7 de mayo de 1982, a menos de dos semanas del desalojo, se celebró una
actividad en el Centro Cultural Villa Sin Miedo en la cual participó Corretjer y leyó un poema
de su inspiración. Otros que participaron fueron Ángela María Dávila (epd), Joserramón (Che)
Meléndez, Pedro Pietri y Luis Antonio Rosario Quites. Ver Juan Antonio Corretjer, “Canciones
de Villa Sin Miedo”, Correo de la Quincena, Volumen XVIII, Núm. 393-401, tero, de marzo al
tero, de julio de 1982, pág. 11. Son diferentes letras, todas dedicadas a Villa Sin Miedo y a líderes
que se destacaban como Ada Rivera y Julio Cesar Vellón.

317 Ver Rosi M. Mari, “Villa Sin Miedo se queda”, Claridad, del 22 al 29 de abril, pág. 12-13. Par­
ticiparon organizaciones políticas, culturales, religiosas y estudiantiles y una gran variedad de
artistas pasaron por la tarima, uno de ellos fue el inolvidable Padre William Loperena (epd),
quien tocó el acordeón. Asistió también Rafael Cancel Miranda, héroe nacionalista.

318 Ver “En apoyo de Julio Cesar Vellón”, El Socialista, Año XVI, Núm. 92, septiembre, 1982,
pág-4-

319 Ver “Metales estratégicos en zona Villa Sin Miedo”, Claridad, 14 al 20 de mayo de 1982, pág.
3. La conferencia la dirigió el Ingeniero Eduardo García. El estudio lo realizó el Centro de Estu­
dios Energéticos y Ambientales de la Universidad de Puerto Rico.

320 Ver Ismael Fernández, “Romero culpa a los instigadores”, El Nuevo Día, 19 de mayo de
1982, pág. 5.

321 Ver “¿Se salva Puerto Rico con las 936?”, El Socialista, Año XVI, Núm. 92, septiembre, 1982,
pág.2.

322 Ver “S.O.S. El capital envenena. Hay que dar el antídoto!” El Socialista, Número 92, sep­
tiembre, 1982, pág.i. Otros problemas que denunció la LSP y otras organizaciones patrióticas
de la época fueron las de salud, muy en particular la muerte de infantes en un hospital de
Bayamón y los casos de telarquía, un desajuste hormonal muy grave.

323 Ver El Socialista, Año XVI, Núm. 92, septiembre, 1982, pág. 5. Una de estas compañías sería
de ingrata recordación por sus construcciones mal hechas, Redondo Construction,de cubanos
exilados. Las otras dos compañías eran American Mine Services y Constructos CM.

324 Ver Victoria Maysonet Pérez, “Protesta en Guánica, 1982”, El Socialista, Número 92, sep­
tiembre, 1982, pág. 3.

325 Ver Juan Antonio Corretjer, “Albizu y el Gran Jurado”, Correo de la Quincena, Volumen
XX, Núm. 407-419,30 de septiembre de 1982 al tro de abril de 1983, pág. 17-18. Los otros dirigen­
tes nacionalistas acusados eran Luis F. Velázquez, tesorero nacional del Partido Nacionalista,
Erasmo Velázquez y Olmedo, Clemente Soto Vélez, Julio Héctor Velázquez, Juan Gallardo San­
tiago y Pablo Rosado Ortiz, abuelo paterno de Amaldo Darío Rosado. Corretjer estaba preso
por desacato al Gran Jurado por no entregar las actas del Partido Nacionalista y le comienzan
otro proceso por conspiración sediciosa. En ese mismo número del Correo de la Quincena ver,
“Debate en torno a la represión”, pág. 19-36 y “Polémica que no debió sen Nuestra posición
sobre cómo enfrentar el Gran Jurado Federal”, pág. 37-41*
RaymondSoto Dw ii \ | 156

326 Ver Editorial II: “Macheteros: A la carga!”, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-
419, 30 de septiembre de 1982 al tro de abril de 1983, pág. 8. En este editorial se menciona que
están presos Ricarte Montes, Alberto de Jesús y Raymond Soto y que Carlos Noya y Federico
Cintrón Fiallo se les requiere trasladarse a Nueva York a enfrentar el desacato criminal. Son
muy conmovedoras estas palabras: “Doloroso se hace contestar a los Macheteros. Una cosa es
bregar con los ansiosos de las urnas y otra con los veteranos de Sabana Seca.". Ver Editorial
IV: “El cuatro de abril”, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-419, 30 de septiembre
de 1982 al tro de abril de 1983, pág. 10. Se menciona la orden de subpoena de un juez federal
en Brooklyn, Nueva York. Juan Antonio Corretjer va a unirse a las actividades de la MLN en
Chicago para recordar el tercer aniversario de la captura de los once prisioneros de guerra
mientras que el CUCRE anunciaba una actividad en esa fecha en Río Piedras para protestar las
dos órdenes de subpoena emitidas a Carlos Noya y Federico Cintrón Fiallo.
327 Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit. pág. 343-345.
328 Ver Raymond Soto Dávila, “Ponencia ante religiosos y cívicos de Adjuntas, septiembre del
1982", Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-419, 30 de septiembre de 1982 al iro. de
abril de 1983, pág. 11-14.

329 Ver “FALN leader is captured in México: 2 die, The San Juan Star, May 28,1983, pág. 1 y 16.
Ver Manuel “Manny” Suarez, Two lynchings on Cerro Maravilla: The pólice murders in Puerto
Rico and the Federal Government cover up, op cit. p. 194.

330 Ver “4 alleged FALN plotters held”, The San Juan Star, June 30,1983, pág. 1 y 20. Todas las
alegaciones del Departamento de Justicia de Estados Unidos y del FBI giraban alrededor de
hechos que supuestamente planeaban contra instalaciones militares en Chicago el 4 de julio
y de asaltar la Autoridad de Tránsito para financiar sus operaciones. Supuestamente también
planeaban traer a William Guillermo desde México para que los ayudara. Ver Che Paralitica,
Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, opcit.
pág. 380-381. El único que salió sin una larga condena fue José Luis Rodríguez quien obtuvo
una sentencia suspendida luego de declararse prisionero político pero no prisionero de guerra
como el resto de los otros. Por otro lado, Freddie Méndez, quien se había vuelto testigo del Go­
bierno de Estados Unidos también testificó contra estos luchadores independentistas.

331 Manolo Coss, “Comienza nuevo juicio contra Cintrón y Noya", Claridad, 14 al 20 de octubre
de 1983, pág. 2. Manolo Coss,” Imponen limitaciones a Cintrón y Noya”, Claridad, 21 al 27 de
octubre de 1983, pág. 2. El juez limitó los temas que los dos acusados podían traer al hacer uso
de la palabra en corte Ninguno podía traer argumentos del uso del Gran Jurado como instru­
mento de persecución política. A Noya se le prohibió hablar de su periodo de encarcelamiento
anterior mientras que a Cintrón Fiallo se le prohibió hablar del encarcelamiento a que fuera
sometido su hermano, Norberto Cintrón Fiallo. Ver Rafael Anglada López, “¿Se acerca una
nueva jomada represiva?”, Claridad, 28 de octubre al 3 de noviembre de 1983, pág. 33. El 21 de
octubre de 1983 el jurado los declaró culpables luego de deliberar poco más de media hora.

332 Ver “Montes, Soto, arrive in Puerto Rico, get welcome,” The San Juan Star, Monday, Sep-
tember 26,1983, portada. Ver "2 freed men home, 1 held”, The San Juan Star, September 26,
1983, p. 2.
333 Ver Antulio Parrilla Bonilla, “El largo precio del valor y la dignidad”, Claridad, 30 de sep-
157 I Lucha y i si’AUO de i.\ Liga Sociai ista Pi i riorriqli ñ 1962-1989

tiembre al 6 de octubre de 1983, pág. 30. Ver “Trasladan a Alberto de Jesús”, Claridad, 14 al
20 de octubre de 1983, pág. 2. El CUCRE denunció que luego de la fianza de dos millones las
autoridades carcelarias anunciaron un traslado el cual se temía fuera sumamente mal tratante
y provocador a la luz de un traslado anterior durante el cual lo sometieron a condiciones inhu­
manas. Ver Che Paralitica, "Más apoyo para Alberto de Jesús”, Claridad, 18 al 24 de noviembre
de 1983, pág. 9. El Comité de Amigos y Familiares de Alberto de Jesús lo dirigía Margarita Pérez,
quien informó De Jesús tenía el apoyo de la comunidad católica de Green Bay en donde era
conocido. El sacerdote de la parroquia era quien estaba a cargo del comité de apoyo de De
Jesús en esa localidad.

334 Ver “FALN leader is captured in México: 2 die", The San Juan Star, May 28,1983, pág.i y 16.
Alice Ms Gilí ion, portavoz de la Policía de Nueva York, colocaba a la mujer muerta en la escena
del tiroteo que se suscitó en la captura del William Guillermo y decía que era un hombre aun­
que reconocía que su nombre era de mujer.

335 Ver “Documento: Ponencia de la LSP ante el Comité de Descolonización de las Naciones
Unidas, Sesión 13 de agosto de 1983, presentada por el Secretario General, Juan Antonio Corre-
tjer”, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-419, 30 de septiembre de 1982 al tro. de
abril de 1983, pág.io-iy. Ver William Morales espera vista judicial, Claridad, 9 al 15 de septiem­
bre de 1983, pág. 4. Corretjer informa a Claridad sobre la petición de vista de extradición del
gobierno de Estados Unidos contra William Guillermo para en ese momento no había fecha
señalada y se mostró optimista de que la tradición del gobierno de México de no entregar per­
seguidos políticos prevaleciera. Ver “William Morales: Example of patriotic consciousness in
arms”, LIBERTAD (Oíficial organ of the National Committee to free Puerto Rican prisoners of
war), Special edition, Vol. V, No. 1,1984, p. 7-9.
336 Ver Jaime A. García, “Invasión armada a Granada”, Pensamiento Crítico, Año VI, Núm. 35,
octubre-diciembre, 1983, pág. 13-16. Ver Glen Ford, “Remember the Grenada invasión: Greña-
das real threat was ideológica!”, Global Research. Recuperado de http://www.globalresearch.
ca/remember-the-grenada-invasion-grenadas-real-th reat-was-ideological/www.globalre-
search.ca el 15 de junio de 2014. Ver “Discurso pronunciado por el Comandante en Jefe Fidel
Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central Partido Comunista de Cuba Y Presidente de
los Consejos de Estado y de ministros, en el acto de despedida de duelo a los héroes caídos en
desigual combate frente al imperialismo yanki en Granada, celebrado en la Plaza de la Revolu­
ción, el 14 de noviembre de 1983, “Año del XXX aniversario del Moneada . Recuperado de www.
cuba.cu/gobierno/discursos/i983/.../fi4ii83e.ht... el 15 de junio de 2014.

337 Ver Howard Zinn, A Peoples History of the United States, op cit., p. 588-589.

338 Ver Jaime A. García, “Invasión armada a Granada", Pensamiento Critico, Año VI, Núm. 35,
octubre-diciembre, 1983, pág. 13-16. Estados Unidos y los países de la OTAN realizaron simula­
cros bélicos denominados Ocean Venture 81. Dentro de la fase caribeña de esos ejercicios uti­
lizaron el nombre clave de “Ambar” y “Ambardina” lo cual aludía a Granadas y las granadinas
acondicionando un área del sur de Vieques y cayos cercanos para parecerse a las islas granadi­
nas Carriacou y Petit Martinique. Ver “Pentágono: Puerto Rico realizó papel en la invasión. , El
Mundo, 15 de octubre de 1983, pág. 15-A. Ver “Marina confirma Puerto Rico fue base de invasión
a Granada", Claridad, 13 al 19 de enero de 1984, pág. 1.

339 Ver Ramón Rodríguez, “Explosión en el edificio federal", El Mundo, 31 de octubre de 1983,
pág. 1 y 19-A. Ver Ruth Merino Méndez, “FBI identifica el arma usada en atentado”, EL Mundo,
Raymond Soto Dávila | 158

1 de noviembre de 1983, pág. 3-A. Los portavoces del FBI describieron el arma como un “lan­
za morteros" capaz de perforar vehículos blindados de unos 60 milímetros de espesor y cuyo
alcance de efectividad es de 300 metros contra tanques.” Ver “Macheteros: en solidaridad con
Granada”, El Mundo, 1 de noviembre de 1983, pág. 3-A. El comunicado de esta organización in­
dicaba que el ataque a las oficinas del FBI era un acto de “fraternal solidaridad” con el pueblo
de Granada.

340 Ver “La opinión mundial condena la invasión de EU a Granada”, El Mundo, 27 de octubre
de 1983, pg. 14-A. Ver "Juan Marrero, "Repudio mundial a la invasión”, Granma, reproducido en
Claridad, 4 al 10 de noviembre de 1983, pág. 5. Ver Documento II: “Contra el militarismo, por la
independencia y el socialismo”, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm. 432,25 de julio de
1984, pág.13. Ver Rosita Marrero, “Contundente manifestación patriótica contra el militarismo",
Claridad, 4 al 10 de mayo de 1984, pág. 12 y 27. La masividad en la asistencia se comparó a la que
se produjo en la marcha en repudio a la visita de los gobernadores de Estados Unidos en el 1971.
A esta marcha convocada por el P1P se unieron el PSP, la LSP, el Partido Comunista, el MSTy
Los Macheteros mediante comunicado. Se constató también la participación de independen-
listas sin afiliación.

341 Ver Juan Antonio Corretjer, “Por Granada y para Bolívar”, El Nuevo Día, 9 de noviembre
de 1983, pág. 45.

342 Ver LIBERTAD (Official organ of the National Committee to Free Puerto Rican prisonersof
war), Special edition, Vol. V, No. 1,1984, p. 20. Las autoridades mexicanas nunca obtuvieron una
orden de arresto a pesar de la fiereza con que se fue a arrestar a William Guillermo. La Interpol
de Washington reclamaba su detención desde tres meses antes.

343 Ver “Testamento: Notable periodista mexicano escribe sobre William Guillermo”, Correo
de la Quincena, Volumen XXI, Núm. 432,25 de julio de 1984, pág. 1-2.

344 Ver “Editorial Visitante: Asesinato en México”, Correo de la Quincena, Volumen XXI,
Núm. 432, 25 de julio de 1984, pág. 1. El editorial sostiene que la denuncia a las intromisio­
nes de la CIA, su campaña sistemática contra la política intervencionista de Estados Unidos
en Centroamérica y su sostenida defensa a favor de William Guillermo Morales fueron los
tres elementos precipitantes para el asesinato de Buendía. Ver Edgar González Ruiz, "Manuel
Buendía: A treinta años de su asesinato”, Voltairenet.org, Recuperado de www.vol tai renet.org/
article184092.html el 28 de junio de 2014. Por su asesinato, ocurrido el 30 de mayo de 1984, se
condenó a dos personas las cuales no cumplieron la sentencia completa aunque estuvieron
presas cerca de diecinueve años. Uno de ellos, José Antonio Zorrilla Pérez, era para entonces
jefe de la Dirección Federal de Seguridad, brazo de inteligencia de la Policía Federal Mexicana.
Los implicados probablemente eran muchos más, de acuerdo al análisis de muchos periodis­
tas mexicanos.

345 Ver Raymond Soto Dávila, “Notas críticas sobre la independencia de la India”, Correo de
la Quincena, Volumen XXI, Núm. 432,25 de julio de 1984, pág. 15-20. Para Corretjer y la LSP era
importante que se destruyera el mito de la no violencia como el método que logró ganarle a la
India su independencia. En una nota editorial aclaratoria en la página 3 de la revista, se anun­
cia y se recomienda este artículo y se señala que desde 1949 ya este tema se había tratado pero
se consideró necesario retomarlo a través del presente artículo.

346 Ver “Use of Grand Jury for political internment increases!” LIBERTAD, Vol. I, No. II, pág.
159 | 1-lA H\ > I S!’A( IO DI LA I.ll.A S()( IAI ISLA Pl I RIOKRIL'LI ÑA: I962-I989

4*5-Ver "Noya and Cintron offto jail!”, Libertad, Vol. I, No. II, pág. 5. Ver Che Paralittici, Senten­
cia impuesta: too años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, op. cit. pág.
351-353.
347N.de A. Me refiero a artículos que para esos años de 1983-1984 se publicaron en LIBERTAD
los cuales no llevaban firmas y otros en Claridad bajo la firma de Che Paralitticci.
348 Ver Rosita Marrero, “Posponen encarcelación a Noya Murattti y Cintrón Fiallo Claridad,
8 al 14 de junio de 1984, pág. 14.
349 Ver Che Paralitticci, “CUCRE exigue repatriación de presos políticos” Claridad, 29 de junio
al 5 de julio de 1984, pág. 6. Ver Che Paralitticci, “Su padre lo acompaña a la prisión: Noya Mu-
ratti comienza a cumplir sentencia”, Claridad, 20 al 26 de julio de 1984, pág. 9.
350 Ver Rosita Marrero, “Posponen encarcelación Noya Muratti y Cintrón Fiallo’, Claridad, 8
al 14 de junio de 1984, pág. 9. La primera cárcel asignada fue una en Minnesota. Ver Che Para­
litticci, “Su padre lo acompaña a cumplir sentencia”, Claridad, 20 al 26 de julio de 1984, pág. 9.
La cárcel a la cual ingresa es la de Tallahassee, Florida. Ver Che Paralitticci, “CUCRE exigue
repatriación de presos políticos”, Claridad, 29 de junio al 5 de julio de 1984, pág. 6. La abogada
de Noya había solicitado una cárcel más cerca del los familiares y la respuesta del imperio fue
asignarlo a la de Tallahassee, Florida. El CUCRE a través de su portavoz, Rita Zengotita, quien
sustituyó a Cintrón Fiallo, denunció a la prensa que Tallahassee es la cárcel donde asesinaron
al patriota Ángel Rodríguez Cristóbal, cinco años antes. Ver Che Paralittici, Sentencia impues­
ta: too años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, op. cit pág.296 y 299.
Zengotita era a su vez una militante muy comprometida con la causa independentista y a su
vez víctima de la represión. En el 1979 perdió su empleo como trabajadora social y junto a otros
dos independentistas sufrió cárcel por unas acusaciones de robo y armas que no pudieron
probarle. Los otros independentistas eran Jorge Delgado, entonces estudiante universitario y
Félix Avilés.

351 Ver Luis Rosa, “Fabricado en USA: Tortura sicológica", En Rojo, Claridad, 23 al 29 de junio
de 1988, pág. 23. Este artículo, el cual apareció bajo el tema de “Alejandrina Torres , es una
excelente denuncia sobre la dependencia histórica del gobierno de Estados Unidos en aplicar
diversas torturas a confinados políticos con el propósito de eliminar cualquier disidencia a su
interior. Rosa era entonces un prisionero de guerra.
352 Ver “Documento III: Carlos Noya Muratti renuncia a la LSP”, Correo de la Quincena, Volu­
men XXI, Núm. 432,25 de julio de 1984, pág. 14.

353 Ver Rosita Marrero, “Es una persecución injusta”, Claridad, 1 al 7 de junio de 1984, pág. 2.
Se entrevistan a las Sras. Irmabel Muratti y Thelma Fiallo, madres respectivamente de Carlos
Noya y Federico Cintrón. Ambas relatan la angustia y el dolor que provoca el encarcelamiento
de ellos pero afirman un sentido de orgullo ante la valentía que demuestran y los principios
que sus hijos defienden.

354 Ver Editorial III: La cuestión polaca, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 384-392,15
de octubre de 1981 al 15 de febrero de 1982, pág. 19-21.
355 Polonia era para entonces un país independiente con un gobierno comunista el cual se
organizó luego de ser liberado del dominio de la Alemania nazi al concluir la Segunda Guerra
Raymond Soto Dávila [ 160

Mundial en el 1945. Era considerado por Estados Unidos como uno de los países satélites de
la entonces Unión Soviética. Históricamente siempre había sido mayori tainamente católico.
Los años inmediatos que precedieron a la crisis de Polonia del 1981 se caracterizaron por una
serie de circunstancias que mueve a la suspicacia y que sigue dos carriles: la política exterior
de Estados Unidos y la alta jerarquía del Vaticano. Los dos presidentes de Estados Unidos para
esos años, Jimmy Cárter y luego Ronald Reagan perseguían atajar la influencia de la Unión
Soviética en Europa, Cárter con una política persuasiva de "detente" y luego Reagan con una
más abiertamente de confrontación. En el 1978 es electo como papa Albino Luciani, cuyo nom­
bre pasó a ser Juan Pablo I. A este papa lo encontraron muerto en su cama a los 33 días de su
elección. El Vaticano no permitió que se realizara una autopsia. Para ese entonces el consejero
de seguridad del entonces presidente Jimmy Cárter era Zhigniew Brzeinsky, de origen pola­
co. Brzeinsky representó a Estados Unidos en las exequias y se quedó todo el tiempo hasta la
elección del sucesor quien resultó no ser italiano sino polaco y reconocido anticomunista. Por
su nacionalidad se rompía una tradición muy larga de la Iglesia Católica de elegir un papa de
origen italiano. Su nombre era Karol Josef Wojtyla y pasó a ser Juan Pablo II cuyo papado duró
27 años. Ver Marius Heuser y Peter Schwarz, Pope John Paul II: A political obituary, World So-
cialist Web Site, 6 April, 2005, recuperado de www.wsws.org/en/articles/200s/od/pope-aQ6htlnl
el 9 de septiembre de 2014. El sindicato “Solidaridad” agrupaba varios sectores de trabajadores
los cuales vociferaban el descontento del alza en precios que el gobierno alegaba no podía evi­
tar. Igualmente había quejas sobre corrupción y excesiva burocracia. Su líder fue el emblemá­
tico Lech Walesa. El sindicato se organizó para 1980 con los estibadores como centro y buscaba
operar en completa independencia del Partido Comunista en el poder. Su predecesor inme­
diato fue la agrupación que se conoció como el “Comité de Defensa de Trabajadores” al cual
se sumaron varias uniones independientes. La Iglesia Católica apoyó activamente al sindícala
Sin embargo el dato más revelador resulta ser la admisión del gasto de 50 millones para soste­
ner dicha unión por todos los años que estuvo proscrita a partir de la violenta confrontación a
finales del 1981. Ese dinero salió de las arcas de El Vaticano y varias otras fuentes, los manejos
de la CIA y la AFL-CIO. Ver Cari Bernstein, Cover story: The Holly Alliance, Magazine Ani­
eles, recuperado de www.carlbernstein.com/magazine holly alliance.php el 10 de septiembre
de 2014. Ver John Cornwell, The dark face of the papacy, Socialism Today, 94, September, 2005,
recuperado de www.socialismtoday.org/94/pope.html el 10 de septiembre de 2014.

356 Ver Juan Antonio Corretjer, Futuro Sin Falla (segunda edición ampliada), Editorial El Co-
qui, Chicago, 1982. En el Prólogo, Corretjer expresa estas ideas.

357 Ver La LSP ante la ONU 1982, Publicación de la Liga Socialista Puertorriqueña, 1982, pág.
3-19.

358 Ver Juan Antonio Corretjer, “Duelo y rectificación”, El Nuevo Día, 27 de julio de 1982, pág. 31.
Corretjer le hace una exhortación directa a Raúl Roa, de visita en Puerto Rico para esos días de
julio de 1982 para que como embajador y encargado de dirigir la política del gobierno cubano
en la Misión de las Naciones Unidas rechace la nefasta teoría autonomista para Puerto Rico.

359 Ver “Documento: Ponencia de la LSP ante el Comité de Descolonización de las Naciones
Unidas, Sesión 13 de agosto de 1983, presentada por el Secretario General, Juan Antonio Corre­
tjer”, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-419, 30 de septiembre de 1982 al tro. de
abril de 1983, pág.10-17.

360 Ver Documento I: “Macheteros en la ONU: Ponencia presentada al Comité de los 24 de las
Naciones Unidas por la Liga Socialista de Puerto Rico y leída por su Secretario General Juan
16i | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña; 1962 -1989

Antonio Corretjer”, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm. 433,23 de septiembre de 1984,
pág- 3'5- Ver Ramón Calderín, Documento II: “Ponencia al Comité de los 24 de la ONU del Co­
mité Especial de Apoyo a los Prisioneros de Guerra Puertorriqueños”, Correo de la Quincena,
Volumen XXI, Núm. 433,23 de septiembre de 1984, pág. 6-7.

361 Ver “Editorial Visitante: Asesinato en México”, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm.
432,25 de julio de 1984, pág. 1. Recuérdese que es Manuel Buendía quien da a conocer en Méxi­
co el nombre de Gordon como el del agente de la CIA encargado del arresto ilegal de William
Guillermo en México.

362 Ver “Ponencia presentada por el CUCRE ante el Comité de Descolonización de la ONU
en 1984", Ponencia ante la ONU: 1983 (y) 1984, Comité Unitario contra la Represión y para la
Defensa de los Presos Políticos.
363 Ver “State put on trial during proceedings: Shelley Miller and Silvia Baraldini convicted!"
LIBERTAD, Special Edition, Vol. V, No. I., 1984, p. 5-6. Miller y Baraldini eran de organizacio­
nes diferentes pero ambas fueron citadas por un gran jurado que investigaba a las FALN. No
testificaron y las acusaron de desacato criminal. Miller era del “New Movement in Solidarity
with Puerto Rican Independence and Socialism” y Baraldini, de ascendencia italiana, era de
una organización comunista, “May I9th Communist Organization”. Baraldini ya estaba pre­
sa en espera de juicio por cargos relacionados a su apoyo al movimiento negro en Estados
Unidos y el “Black Liberation Army”. Para el juicio en la corte se erigieron unas paredes de
cemento con la obvia intención hollywodense de impresionar al jurado y otros observadores
sobre la supuesta peligrosidad de las acusadas. Al juicio celebrado en Brooklyn compareció
Nelson Canals del CUCRE quien testificó sobre el repudio de los puertorriqueños hacia el
Gran Jurado y el impacto de las vistas del Cerro Maravilla. Los medios en Puerto Rico ignora­
ron estos casos ya que representaba un mal ejemplo que norteamericanas apoyaran la lucha
por la independencia de Puerto Rico. Este juicio contó con testigos de defensa solidarios con
el “New Afrikans Independence Movement", como lo fue Eve Rosahn, quienes luchaban para
establecer una nación africana dentro de Estados Unidos como nación independiente. (N de A:
Estos son los grupos en lucha con los cuales Corretjer y la LSP entendían se debía ensamblar
la lucha armada.) Ver Che Paral i ticci, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la
independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 353-356. El Juez Sifton sentenció a Miller y Baraldini
a tres años por desacato criminal. Miller terminó su sentencia en el 1987 mientras que Baraldini
estuvo muchos años presa debido a la sentencia de los otros casos. Llevaba quince años presa
cuando el gobierno de Estados Unidos accedió a su traslado a Italia donde luego de un periodo
de cárcel en Italia pasó a cumplir el resto de la sentencia en arresto domiciliario. (N. de A. Al
día de hoy Baraldini ya está libre y pudo visitar Cuba en el 2014.) Ver Correo de la Quincena,
Volumen XXI, Núm. 432, 25 de julio de 1984, portada y pág. 20. Pam Fadem era también de la
organización “New Movement in Solidarity with Puerto Rican Independence and Socialism" y
fue citada para testificar sobre las FALN. Fadem se presentó en la ON U y dejó una carta para el
Secretario General con un funcionario de la Comisión de Derechos Humanos. A su salida de
los predios la arrestaron. La LSP la felicitó por su arrojo y honró a su organización en su porta­
da con una foto del portaviones, “Intrepid”, anclado en un muelle del Navy Yard en Nueva York
como pieza de museo, y desde el cual flotaba en ese momento la bandera de Puerto Rico y un
mensaje en letras grandes que leía “Free Puerto Rico”. Este era un acto de protesta que realiza­
ron militantes de dicha organización a favor de Puerto Rico. Ver Che Paral¡ticci, Sentencia im­
puesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia de Puerto Rico, op cit. pág. 353-356.
Fadem fue condenada por desacato criminal a una sentencia suspendida de tres años de cárcel.
Raymond Soto Dávila | 162

364 Ver Alexis Massol González, Documento III: Ponencia del Taller de Arte y Cultura ante la
ONU, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm. 433, 23 de septiembre de 1984, pág. 7-10. El
Plan 2020 se refería a la fecha en que el mismo supuestamente habría de culminar. A la luz de
las investigaciones en que se fundamenta esta ponencia se asevera que este plan comienza con
un plan interino de planificación a desarrollarse entre 1975 y 1985, el cual estaba en curso enton­
ces y establece la base legal y toda la estructura del diseño, a esto seguiría la ejecución del plan
entre 1985 y el 2020. El primer documento que se menciona es un “Plano Regulador de Usos de
Terrenos para Puerto Rico” el cual fue financiado por una agencia federal (Departamento de
Vivienda Federal, “HUD”) establece todos los terrenos a congelarse para la explotación minera
y para usos militares. Todos los nueve documentos que se presentan van precisamente dirigi­
dos a dar paso a las disposiciones para el desarrollo del escenario necesario en cuanto al uso
de terrenos, la explotación de minerales, propuestas para procesar minerales de otros países,
hacer disponible la estructura geológica de nuestro lecho marino, estudios de propuestas para
una infraestructura de agua y construcción de represas ya en curso en el momento de esta
ponencia con la consecuencia de desalojos de comunidades. Toda la integridad de Puerto Rico
estaba comprometida. Algunas de las oficinas bajo agencias de Estados Unidos que aparecen
haciendo estas disposiciones eran: US Bureau of Mines, US Geological Services, el Cuerpo
de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos, y el Departamento de Vivienda Federal (HUD),
entreoirás.

365 Ver Documentos: “El Plan 2020: Nueva estrategia económica para Puerto Rico”, Taller de
Arte y Cultura, Pensamiento Crítico, Año Vil, Núm. 40, septiembre-octubre, 1984. [Separata]
Esta publicación aumentó notablemente el alcance del excelente trabajo de divulgación que
realizaba el Taller de Arte y Cultura. Ver “Plan 2020: ¿Mito o realidad?”, El Socialista, Año XVI-
111, Núm. 99,1985, pág. 3-4. La LSP continuó divulgando los diferentes aspectos del Plan 2020,
de la Voz de América y la práctica de esterilización el cual califica como “plan genocida de
control poblacional”. VerTinti Deya Massol, “A genocida! plan for birth control”, LIBERTAD,
Vol. VI, No. IX, August, 1985, p. 15-16. Esta destacada miembro del Taller de Arte y Cultura hace
un recuento histórico de los varios métodos de control de la natalidad que ha utilizado el go­
bierno de Estados Unidos con nuestra población, incluido el infame “Proyecto Pincus”, para
denunciar la planificación ajustada al Plan 2020 que el gobierno de Estados Unidos estaba
implementando desde el 1974 y el cual se dirige a toda la población puertorriqueña. Entre otras
cosas se denuncia que las esterilizaciones se recomendaban sin importar edad, algo que se
consideraba hasta entonces como factor importante y además las trabajadoras sociales se ha­
bían unido a estas recomendaciones, hasta entonces en manos de los médicos.

366 Ver “Editorial IV: Las elecciones de la CIA”, Correo de la Quincena, Volumen XXI, Núm.
431, tero, de mayo de 1984, pág. 7-8.

367 Ver “Two political radicáis are killed in Puerto Rico”, LIFE, V0I.7, No. 10, September 1984,
pág. 78-84.

368 Ver Manuel “Manny” Suárez, op cit., pág. 205 y 228. En el 1985 diez policías (ocho de la en­
tonces División de Inteligencia y dos de la División de Arrestos Especiales) fueron declarados
culpables en la Corte Federal de Estados Unidos en Puerto Rico de la mayoría de los cargos
por perjurio que le levantaron en su contra recibiendo condenas que fluctuaron entre seis a 30
años. Ver pág. 245-246. En el 1986 los cargos que levantó el Departamento de Justicia de Puerto
Rico por asesinato contra seis policías y Alejandro González Malavé fueron archivados. Tam­
bién en el 1986, un jurado por decisión dividida declaró inocente a González Malavé en otro
proceso donde el Departamento de Justicia de Puerto Rico lo acusó por secuestro.
i63 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña; 1962-1989

369 Ver “Corretjer convalece”, Claridad, 18 al 24 de enero de 1985, pág. 5. Consuelo Lee indica
que Corretjer llevaba tres semanas hospitalizado.
370 Ver El Mundo, miércoles, 22 de enero de 1985, pág. 4. Ver Claridad, 25 al 31 de enero de 1985,
portada, pág. 2-3.

371 Ver “Nuestra posición”, El Socialista, Año XVIII, Núm. 98, 1985- Ver Efraín García Osorio,
“Con estas cosas cuento”, El Socialista, Núm. 98,1985.
372 Ver José E. López, “Juan Antonio- El rifle y la pluma”, El Socialista (Edición extraordinaria),
3 de marzo de 1985, pág. 4-5. Ver Rev. José A. Torres, “Hasta siempre, Corretjer”, El Socialista,
(Edición extraordinaria), 3 de marzo de 1985, pág. 10.
373 Ver Correo de la Quincena, Volumen XXII, Núm. 434, 8 de abril de 1985, pág. 17, 20, 21, 25,
28,31.

374 Ver Tom Dorney, “A final verse for Don Juan- legend and legacy”, The San Juan Sun, toma­
VerTom
do de Correo de la Quincena, Volumen XXII, Núm. 434, 8 de abril de 1985, pág. 12-13. El autor
era un ex sacerdote católico, su prosa en este artículo resulta poética.
375 Ver “Revelador informe de Comisión de Derechos Civiles: 90 años de persecución al inde-
pendentismo”, Claridad (Portada), 17 al 23 de marzo de 1989.
376 Ver Che Paralitica, Sentencia impuesta: 100 años de encarcelamiento por la independencia
de Puerto Rico, op cit. pág. 391-398.
377 Ver “Diez años de Pensamiento Critico”, Pensamiento Crítico, Año X, Núm. 56, septiem­
bre-diciembre, 1987, pág. 3.
378 N.de A. Como es de público conocimiento, centenares de agentes del FBI con ayuda de
agencias del gobierno colonial, se presentaron a Hormigueros el 23 de septiembre de 2005,
le apagaron la luz a la comunidad circundante de Plan Bonito donde estaba el hogar donde
residía clandestino Filiberto Ojeda Ríos y su esposa, Elma Beatriz Rosado, la raptaron a ella y
no permitieron la presencia de la prensa, tirotearon a Filiberto para luego dejarlo que se desan­
grara. Los agentes del FBI mataron a la mascota del matrimonio, una perrita.
379 Ver “Jaime, Dora and Viola out on bond-Govemment turns to Grand Jury witch hunt!
LIBERTAD, Vol. VII, No. VIII, August, 1986, p. 3-6. Ver “National demonstrations set for Sep-
tember 9*h!” LIBERTAD, Vol. VIII, No. VIII, July/August, 1987, p. 3 Y 5-
380 Ver Michael Deutsch, “The National Lawyer’s Guild Work Defending Independentistas
in the U.S.”, People’s Law Office, tomado de www.peopleslawoflice.CQni/the4egal~WQlk~dcfelk
ding-independentistas-in-the-... recuperado el 1 de septiembre de 2014.
38iVer Federal Repórter, Second Series > Volume 891» law.justia.com recuperado el 1 de sep­
tiembre de 2014.
382 Ver Marcos Pastrana Fuentes, “Agencia federal insiste talar el Yunque , Claridad, 3 al 9 de
octubre de 1986, pág. 3. Ver “Hernández Colón apoyó plan de deforestación de el Yunque”,
Claridad, 7 al 13 de noviembre de 1986, pág. 3. La administración anterior de Carlos Romero
Barceló (PNP) conocía de este plan al igual que la de Rafael Hernández Colón (PPD) goberna-
Raymond Son) Dávila | ¡64

dor en ese entonces. Ninguna de las administraciones se oponía.

383 Ver Cándida Cotto, “Crece oposición a entrenamiento “Contras”, Claridad, 5 al 11 de di­
ciembre de 1986, pág. 30. Ver Cándida Cotto, "Grupos religiosos apoyan pueblo nicaragüense”,
Claridad, 5 al 11 de diciembre de 1986, pág. 30.

384 Ver “EPB-Macheteros: Nuestras acciones son contra los opresores”, Claridad, 7 al 13 de no­
viembre de 1986, pág. 5. En este comunicado se repudia el entrenamiento a los Contras y se
establece que los operativos del grupo clandestino no van dirigidos contra el pueblo ni siquiera
contra la policía colonial sino contra los opresores.

385 Ver Howard Zinn, op cit., p. 585-588, y 593. Luego del desastre de la Guerra de Vietnam el
Congreso de Estados Unidos pasó una ley que hizo más difícil el uso de dinero para interven­
ciones armadas contra otras naciones. Esto le dio una “justificación” a la CIA para realizar estas
acciones secretas.

386 N. de A.: En la carpeta 23091, Vol. 2, folio 407, levantada por la Policía de Puerto Rico a
Raymond Soto Dávila se hace desglose de un documento con fecha de 16 de diciembre de 1986
en el cual se cita un memo fechado el 20 de noviembre de 1986 resumiendo la actividad de
protesta contra la tala de El Yunque que convocara “Caminantes por la Paz” el 19 de noviembre
de 1986. Hay 90 personas mencionadas, muchos son militantes reconocidos de aquella época
y también periodistas y artistas.

387 Ver Documentos: “Manifiesto sobre la Voz de América”, Pensamiento Crítico [Separata],
Año IX, Núm. 50, julio-agosto, 1986.

388 Ver “¿Por qué queremos ir a Guánica?”, El Socialista, Año XVIII, Núm. 99,1985, pág. 1-2. Ver
Claridad, 25 al 31 de julio de 1986, pág. 2. Se publica un anuncio de casi media página en el cual
se invita a un acto unitario en Guánica el 25 de julio a las 12:30 PM y convocan el PSP, la Liga
Socialista, el Partido Nacionalista, CUCRE y el Comité de Amigos y Familiares.

389 Ver “Lares unitario, un compromiso patriótico”, Claridad, 12 al 18 de septiembre de 1986,


pág. 2. Se anuncian los portavoces de las organizaciones que se esperan participen en el acto
político del Grito de Lares, además de Ricarte Montes por la LSP, se anuncia a José (Pepe)
Rivera Sotomayor, Partido Nacionalista, Carlos Gallizá, PSP, Rita Zengotita, CUCRE y Jorge Fa-
rinacci, uno de los arrestados del 30 de agosto de 1985. Ver Juan Otero Garabía, “Lares: Compro­
miso patriótico y voluntad unitaria”, Claridad, 26 de septiembre a 2 de octubre de 1986, pág. 29.

390 Ver “The return of a patriot”, LIBERTAD, Vol. VI, No. IX, August, 1985, pág. 8. La actividad
la organizó el CUCRE. Participaron además de la LSP, el PSP, Partido Nacionalista de Puerto
Rico, Partido Comunista, MST, y el Centro Caribeño de Justicia y Paz. También participaron
organizaciones sindicales y religiosas y contó con la presencia de muchos patriotas naciona­
listas como Oscar Collazo, Irvin Flores, Rafael Cancel Miranda, Lolita Lebrón, Isabel Rosado,
Rosa Collazo, Carmín Pérez, y Don Pepe Rivera Sotomayor.

391 Ver “Militar tiroteado”, (tomado del boletín local del Comité Pro Libertad Prisioneros de
Guerra Puertorriqueños del 16 de noviembre de 1985), El Socialista, Año XVIII, Núm. 101, pág.3.

392 Ver “Carta abierta al Ledo. Femando Agrait, Presidente de la UPR, en apoyo a Juan Manuel
Delgado”, Claridad, 6 al 12 de noviembre de 1987, pág. 8. Como se recordará Juan Antonio Co-
rretjer había denunciado en la ponencia de 1982 ante el Comité de Descolonización de la ONU
i65 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

la persecución contra este luchador independentista. La carta denuncia y repudia ios procedi­
mientos para separar de sus funciones docentes a Juan Manuel Delgado en el Colegio Univer­
sitario de Humacao. De 101 firmas de organizaciones y personas, la LSP es la firma número 27.

393 Ver “Por un Museo”, El Socialista, Año XVIII, Núm. 101, pág. 2. Se reseña brevemente una
actividad en pro del Museo Biblioteca Juan Antonio Corretjer celebrada el 21 de noviembre de
1985 en el Teatro de Universidad de Puerto Rico, la cual se describe de gran calidad artística.
“Natalicio del poeta Corretjer”, En Rojo, Claridad, 26 de febrero al 3 de marzo de 1988, pág.
22. Se anuncia una jornada de político-cultural de tres días, organizada por el Comité 3 de
marzo”, con el propósito de recaudar fondos para el Museo Corretjer. Se anuncian oradores,
organizaciones, actividades variadas y una pléyade de artistas. Ver En Rojo, Claridad, pág. 14.
Se anuncia el programa completo de la celebración del natalicio de Juan Antonio Corretjer.
Rafael Cancel Miranda se dirigiría a los presentes ante la tumba. El programa político anun­
ciaba además de Ricarte Montes por la LSP, a Doña Laura Albizu por el Instituto Pedro Albizu
Campos, Irvin Flores, Comité Unitario Independentista, Rita Zengotita, CUCRE y Humberto
Pagán, FAE. Ver “Conmemoración”, El Socialista, Año XVIII, Núm. 101, pág. 4. Se anuncia la
conmemoración del natalicio de Andrés Figueroa Cordero el 20 de noviembre en Aguada y
se exhorta a asistir. N. de A. Los números 100 y 101 de El Socialista no tienen el año pero se
entienden son del 1985.
394 Ver Filiberto Ojeda Ríos, “Consuelo”, En Rojo, Claridad, 21 al 27 de julio de 1989, pág. 16. Al
fallecimiento de Doña Consuelo, Filiberto Ojeda está preso en la cárcel de la Corte Federal en
San Juan y envía una sentida carta dirigida a ella en la cual revela que poco antes de la muerte
de Don Juan, éste quería hablar con él pero el encuentro no pudo darse. Ojeda se despide con
estas palabras: “Mi abrazo último; fuerte, firme, abrazo Machetero, abrazo de puertorriqueños
libres, como libre será la patria, nuestra patria, la tuya, la de él.” N. de A. Las exequias para
Doña Consuelo fueron muy concurridas aunque no alcanzó el nivel multitudinario de las de
Don Juan. Durante el duelo se dieron cita muchos artistas y diferentes personas con reconoci­
miento en Puerto Rico, además de muchos luchadores independentistas.
395 Ver “Manifiesto al pueblo puertorriqueño”, En Rojo, Claridad, 30 de septiembre a 6 de
octubre de 1988, pág. 20-22. Firman el documento el PSP, Revista Pensamiento Crítico, Taller
de Formación Política, y la FUPI. Se hace una radiografía de la situación puertorriqueña y se
defiende el espacio pre eleccionario como útil para discutir y organizar al pueblo. Ver Ma­
cheteros apoyan PIP en elecciones”, Claridad, 29 de abril al 5 de mayo de 1988, pág. 2. En este
comunicado del PRTP se indica que el acudir a las elecciones no significa que se haya aban­
donado la lucha armada como método principal de lucha. Ver “EPB-Macheteros aclara posi­
ción”, Claridad, 20 al 26 de mayo de 1988, pág. 2. En este comunicado originalmente circulado
el primero de mayo de 1988, el EPB aclara tres cosas: (1) No ha asumido posición alguna sobre
las elecciones y este asunto sigue bajo estudio, (2) Considera al PIP una oi^anización patriótica
la cual apoya en aquellos actos que considere adelantan la lucha de liberación nacional y (3)
No tiene relación alguna con el PRTP. Ver “PRTP-Macheteros responde", Claridad, 20 al 26 de
mayo de 1988, pág. 2. En este comunicado originalmente circulado el 8 de mayo, el PRTP indica
que la división de los Macheteros se dio luego de un proceso de discusión entre 1983-1984. Se
acordó que ambos sectores podían utilizar el nombre “Macheteros”. El PRTP aclara que utiliza
la categoría de “Partido” en su nombre porque considera que en un partido revolucionario el
sector militar debía estar supeditado al partido.
396 Ver Norberto Cintrón Fiallo, “Ser o no ser”, Claridad, 26 de enero al 1 de febrero de 1989»
Pág. 32.
RaymonoSoio Dávh \ | 166

397 Ver Editorial II: “Macheteros: A la carga!”, Correo de la Quincena, Volumen XX, Núm. 407-
419, 30 de septiembre de 1982 al tro de abril de 1983, pág. 8.

398 Ver Elizam Escobar, “Por qué no envié un mensaje navideño a Claridad”, Claridad, 2 al 8
de febrero de 1989, pág. 34.

399 Ver “Victory: William Guillermo Morales está libre en Cuba”, THE 1NSURGENT: Newsle-
tter of the Committee to Fight Repression, Vol. 4, No. 2, Summer, 1988, p.3.

400 Ver Pablo Marcano García, “...De la capital de México a La Habana”, Claridad, 16 al 21 de
julio de 1988, pág. 34.

401 Ver Carlos Quiles, Memorias de Josefina, op cit., pág. 196.


i67 | Lucha y espacio de la Liga So< iai ista Pul rtorkiqui ña: 1962-1989

Antonio A. Rivera, dirigente del Comité del Sur de la LSP, en venta de libros durante la «¡eb^n
del Grito de Lares, 23 de septiembre de 1968. Detrás, a la izquierda, se aprecia a nnque g
Foto cortesía de Noemilda Vélez Mas.
Raymond Soto Dávila | 168

Carmín Pérez, Corretjer, Pepito Marcano y Consuelo Lee (al frente) al salir del Tribunal de Ponce,
luego de una segunda ronda de acusaciones en octubre de 1969. Se aprecian atrás los Ledos. Gra-
ciany Miranda Marchand y Jorge L. Landing y el profesor chileno, José Ma. Bulnes, quienes dieron
apoyo. Tomado de El Socialista, Año III, Núm. 31, octubre de 1969, pág. 3.

Tomado de El Socialista, Año VI, Núm. 58,1972, portada.


i69 | Lucha y espacio de l\ Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Corretjer abraza a Rafael Cancel Miranda en ocasión de su visita desde la prisión federal para as
al funeral de su padre en Mayaguez, circa i977- (Tomado de Correo de la Quincena, Vol. XIV, Num.
280-287,15 de julio al 30 de octubre de 1977, Foto cortesía Miñi Seijo.)
RaymondSoio Davii.x | 170

k
Actos de conmemoración de la Insurrección del 30 de octubre de 1950, llevados a cabo en Jayuya el 30
de octubre de 1978. Se dirige a los presentes Pedro Archuleta, chicano mejicano y resistente del Gran
jurado. A su derecha se aprecia a Juan Antonio Corretjer y a su izquierda el héroe nacionalista, José
(Don Pepe) Sotomayor. Foto cortesía Ricarte Montes García.

Ángel Rodríguez Cristóbal, una


compañera chicana y Juan An­
tonio Corretjer en ocasión de un
viaje a una comunidad en Esta­
dos Unidos, circa 1977. Foto corte­
sía de Noemilda Vélez Mas.
ri Lucha y ispaí iodb la Liga S iaiisi•• l’i i rtorriqi i ña: 1962 1989

El agradecimiento al sacrificio heroico de


Ángel se eternizó frente a la Playa de La Es­
peranza mediante el homenaje de los pesca­
dores de Vieques a raíz de la jornada de lucha
contra la Marina de EEUU de 1999-2003.

Juan Antonio Corretjer se dirige a la comunidad de Villa Sin Miedo en una de las ocasiones en que
la LSP hizo acto de presencia y dio apoyo durante la lucha de más de un año de esta comunidad para
no ser desalojada, circa 1981. Foto cortesía de Noemilda Vélez Mas.
Raymond Soto Dáviu | 172

Ricarte Montes sale arrestado el 2 de julio de


1982 de la Corte de EEUU en Puerto Rico hacia
su encarcelamiento y destierro al negarse a co­
laborar con el Gran Jurado Federal. Foto toma­
da del Correo de la Quincena, Vol. XVIII, Núm.
393-401, tero de marzo a ¡reo de julio de 1982.

II Tw’

14a u
COMITE UNITARIO cz I FBI
CONTRA LA REPRESION R if VCflANJVMN

Carlos Noya Murati al frente, a la izquierda, en una reunión del CUCRE, donde representó a la LSP
durante algunos años, circa 1983. Foto cortesía de Rita Zengotita.
173 I l.l l ha Y ESPAC IO DE LA LlC.A SüC lAl ISIA Pl'l R1ORRIQUEÑA: 1962-1989

Sepelio de Juan Antonio Corretjer el 22 de enero de 1985- Se aprecian con uniforme de la LSP,
Efrain García Osorio al frente y a su derecha Ricarte Montes García, ambos de la LSP. Más atrás,
Raymond Soto Dávila, también uniformado, ex miembro de los Cuadros Universitarios de la
LSP y entonces de el CUCRE. Foto cortesía Ricarte Montes García.
Raymond Soro Dávila | 174
| Lucha y espacio de la LiG/\ Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Apéndice I
DOCUMENTOS
R.aymond Soto Dáviia | 176
¡77 | Lucila y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

ESTATUTOS DE LA LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA

Capítulo I
Hombre, Objetivos, EmbIemas:

Artículo 1 E1 nombre de la organización que se regirá por estos


ESTATUTOS es LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA, y su sede de dirección
central radica en San Juan de Puerto Rico.

Artículo 2 La LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA es el Partido mar-


x I s ta-ilcn i n i s ta , comunista do la clase obrera de Puerto- Rico, y
se organiza para luchar por la Independencia y el socialismo, y
establecer ambas partiend' de la lucha de clases hacia ia toma
revolucionarla del poder y el establecimiento de la dictadura del
proletarí ado.

Artfculo 3 La LSP es una organización de trabajadores que aspira


a adiestrar en las Ideas comunistas a todos los trabajadores para
que ellos mismos logren los objetivos señalados en el Artículo an-

Artículo ¡i La LSP tiene los siguientes símbolos: una bandera


rectangular enteramente roja; una bandera roja con un pequeño
triángulo azul y una estrella roja al centro de éste y las letras
LSP en los tres ángulos. El triángulo está colocado cercano a la
esquina superior izquierda del paño.

Cap I tu I o I I
Hembrec fa :

Artículo 5 - Toda persona que cualifique con los requisitos de


estos estatutos, no menos de 10 años, puede aspirar a ser miembro
miembros serán calificados en dos ca­
de la LSP. Los aspirantes a .miembros
tegorías ascendentes: primero: simpatizantes; segundo: candidatos.

SIMPATIZANTES - Para entrar en la categoría de simpatizante de Ia


LSP el aspirante debe mostrar en su act i tud:

a) Fé en la
I a Independencia
I ndependencI de Puerto Rico, en el socialismo
como primera etapa de 1 'común I smo y en la L'SP cono instru­
mento de trabajo para llevar a cabo esas tareas.

b) Lo demostrará llevando a cabo tareas simples y públicas


de la organización, entre otras vender literatura publica­
da por la LSP y publicaciones de organizaciones fraterna­
les en otros países.
Raymond Soto Dávila | 178

c) Concurriendo a los actos públicos de la organización y par­


ticipando en las sesiones abiertas de la LSP-, asistiendo
a las clases; discutiendo las pub1I cae Ionc$, estudiando
la línea poIí11ca-de 1 a organización y trabajando bajo la
dirección de un organismo de la LSP.

d) Defendiendo los Intereses de la clase obrera y a la LSP


frente a todos los enemigos de clase.

El período de. .s Impa t I zan te durará no menos de tres meses al cabo


de los cuales el organismo responsable evaluará, el trabajo del simpa­
tizante y considerará elevarlo a Va categoría de candidato a..miembro.

CAHDIDATOS A MIEMBROS: Para entrar en la categoría de candidato


a miembro oí aspirante aceptará cumplir con todos los deberes de
un miembro sin disfrutar de los. derechos inherentes a la membre*-
cía. La permanencia en esta categoría durará no menos de tres
meses, de acuerdo a la evaluación que el organismo corrospondI en­
te haga parp Ingresarlo como miembro y su ratificación con el
organismo superior Inmediato.

MIEMBROS : ... Para


F„ ser mjembro de I a LIGA•SOCI AL ISTA PUERTORRIQÜEflA
se requerirá, _, a mas de edad de 18 artos , las siguientes condlclo-
nes y compromlso*:'

a) Será una persona discreta, lo mismo en palabras que en


movimientos, Justa y respetuosa de los demás. No hará uso
Injustificado de I enguaJq . Improp1 o y evitará llamar la
atención por su manera de vivir, hablar y vestir.

b) Será persona de alta moralidad proletaria en su vida prl-


vadp y púb(lea. Luchará contra el Individualismo burgués
que engendra el egoísmo. v ■

c) Ho puede ser dueño de propiedad privada, ni vivir de


trabajo ajeno.

d) Ho podrá ser empleado del gobierno, excepto a niveles


humlI des.

o) Ho pertenecerá a las 7_.fuerzas rapresl.vas '7 ’'1 .


(fuerzas militares,
guardia nacional, policía, guardias privadas o patronales).

f) Hó trabajará en nivel alguno en los programas fede rales o


coloniales de carácter soc I a 1 - I mpe r I a I I s t a , de soborno.,,
masivo y perversión política de la Juventud, tales como
los titulados "Vespra", "Guerra Contra la Pobreza",
"ASPIRA", y otros por el estilo.

O) Ho pertenecerá a ningún otro


c partido político, ni hará
trabajo alguno para Inscribir
_ ”-’í partidos
r--'- '-‘.s o cualquiera otra
tarea que contribuya la participación electoral en Puer-
to« R I co.

h)-lio. per tenace rá a ninguna sociedad, fraternidad, club, logia,


etc., que exlga lealtad por encima de la LSP.
179 | Luch,\ y espacio de Liga Sociai isia Pi ertorriqui ña: 1962-1989

3
I) lio saldrá del país sin
s I n consentimiento de la organización,
n i toma rá decisión de importancia sin consultar a la or­
ganización.

J) Ho aceptará ningún trabajo o empleo en el que sus obligú­


clones como tal lo hagan participar en hechos de opresión-
social, tales como reposesión
reposes fon o cembargo
' de bienes muebles
I o inmuebles.

k) los miembros de I a LSP combatirán el chauvinismo en codas


sus forma s.

Artículo 6 Todos los miembros de la LSP tienen los siguientes debe-


res y derechos :

a) Cumplir y hacer cumplir estos Estatutos. Pertenecer


a un o rganIsmo de la LSP, hacer trabajo político,
concurrir dé su Sección o Comité y cotizar.

b) Luchar con fIrmeza para llevar a cabo el programa


de la LSP.

c) Dominar cada día más la teoría marxista - I en I nIsta


y probarla constantemente en la práctica, como guía
para la acción.

d) Pract i car la crítica y la autocrítica como necesidad


vital pora el desarrollo colectivo e individual de
la LSP.

e) Expresar su opinión sobre los diversos problemas de 1.a


organiaación por medio de la palabra oral y escrita,
lo cual debe hacerse s i empre en el seno de la orga-
nlzación, así como la crítica de la actividad de
los comltás dirigentes y dn los miembros indlvidual-
mente.

f) Elegir a los dirigentes de su organización o ser ele-


g i do para un cargo de dirección, en cuyo caso se to-
ma r á en consideración lo siguiente:
* S u amo r a la LSP y su lealtad a la causa de
la independencia y el socI a 1 i smo.
* Su valor, abnegación y responsabilidad en el
cumplimiento de las tareas.

g) Recibir Informes periódicamente sobre la actividad


do los organismos superiores; asistir con voz y voto
a las Asambleas y participar en la discusión de los
i n f ormes.

h) Presentar querellas por violación de acuerdos o vio*


loción a los Estatutos. En este caso, el querellado
tiene derecho a participar persona Inente en la dis­
cusión cuando se trata de su act.uación o conducta en
su organismo.
RaymonpSoto Dávila | 180

ii

Artículo 7 SANCIONES:

La LSP podrá Imponer sanciones que Irán desde advertencias o amo­


nestaciones en presencia de todos los miembros del oroanismo que impone
l a sanción, destitución del cargo responsable y prohibición temporal
de ocupar otro, suspensión temporal de su matrícula en la LSP, hasta
la expulsión como última medida. Antes de imponer cualquier sanción
el organismo responsable debe llevar a ccabo una ampIFa , Inves11gación
de todos los hechos. La expulsión sólo debe I levarse a cabo en caso
de traición y luego que los resultados de la Investigación Justifiquen
la expulsión. La expulsión es un hecho irrevocable y debe ser comunl-
cada inmediatamente a) Buró Político. El Buró Político notificará a
la LSP.

Capítulo III

Estructura Orgánica:

Artículo 0 la LSP es una suma de organizaciones, una unidad orgánica


de ideología y voluntad; tiene una dirección y una disciplina férrea y
única, que funciono reñid a por el centralismo democrático.

El centralismo democrático con I leva:


a)) la subordinación del mili tantc a I a organI>ac ión,
b)' de la minoría a la mayoría,
c) del nivel inferior al superior,
d) de toda la LSP al Comité Central.

Esto rqquI ere:


Todos los organismos de dirección son electos de abajo
hacia arriba y están obligados a rendir cuenta periódicamente an­
te sus respectivas Asambleas, reuniones y actividades, pudlendo
ser revocados por los votos que los eligieron. La LSP se basa en
el principio de dirección colectiva. La autoridad de la organiza­
ción es el colectivo. Todos los problemas deben ser analizados
colectivamente por los organismos. Pero existe también la res­
ponsabilidad social de cada miembro en cuanto al cumplimiento
de las tareas acordadas. Ho es compatible con la dirección co­
lectiva el hábito Individualista de dar órdenes a granel y tam­
poco la existencia de grupos o facciones que pretendan suplantar
al colectivo tomando decisiones que no le corresponden.

La LSP se apoya en la crítica y la autocrítica como mé­


todo de corregir y superar los errores, las deficiencias y las
debilidades y como estímulo al desarrollo de los camaradas y de
la organización toda, asta se hará en el seno de la organización
exclusivamente. La discusión de los asuntos internos de la orga­
nización con extraños es Indisciplina, indlscresión y dcslealtad.

Artículo 9 - El órgano supremo de dirección de la LSP es la Asan-


blea ’.'aclonal, que debe celebrarse ordinariamente cada año; y entre
cada Asamblea el Comité Central electo en Asamblea. En casos exccn-
clónales el CC puede anticipar o aplazar la celebración de la Asam­
blea. El Comité Central elige al Secretarlo General y éste al Puro
Político. En los Intervalos entre las sesiones plcnarias de| CC (que
181 | LlK.IIX Y l.SPACIO I)í L\ I.K,A SO( IA1JSIA Pl f KIORRIQUFNA: 1962-1989

5
deben celebrarse cada tres meses o en casos excepc I onaIcs cuando las
llame ol Duro Político), el Curó Político ejerce las funciones y pode­
res del Comité Central. El Secretarlo General presidirá las reuniones
de la Asamblea, del Comité Central y del Buró Político. Cajo la dire­
cción del Secretarlo General y del Curó Político se establecerán algunos
órganos que se Juzguen necesarios, indispensables, selecoos y eficaces
para atender de manera unificada el trabajo cotidiano de la LSP. El
Secretario General dirige la línea política de la LSP.

Organizaciones de Base
Artículo 10 Las organizaciones de base de la LSP se dividen en dos
categorías: Secciones y Comités Regionales.

Se organiza un sección en1 fábricas, fincas, estabIecImI entos comer-


cíales, centros de enseñanza, empresas, arrabales, caseríos públicos,
parcelas, haciendas, centrales, Las elecciones para dirigentes de
secciones se efectúan cada año, excepto en casos excepcionales, cuando
se podrán anticipar o aplazar, de acuerdo a las necesidades de la sección.

Los Comités Regionales estarán organizados sobre bases geográficas:


del llorto, Sur, Este, Oeste, Centro, I os cuales derán aumentados dentro
de!las mismas_ demarcaciones según lo vayan requiriendo las circunstan-
cías. Coordinarán estosj la actividad de I as secc i ones en:

a ) dirigir a los miembros y las masas en el estudio y la aplicación


viva del ma rx i smo-lonlnlsmo.

b) educar constantemente a los mí emb ros y a las masas traba Jadoras


— de_ clases,. I a I ucha por la Indepen­
en el espíritu de la lucha
• —, y la confrontación entro el marxismo-
dencla y el socialismo,
leninismo y el revisionismo moderno, condiciéndoI os a combatir
contra el Imperialismo y contra todos los enemigos de clase.

c) difundir y cumplir la política de la LSP, aplicar sus reso Iu-


clones y llevar a cabo todas las Jareas asignadas.

d) Vincularse estrechamente con las masas, escuchar de manera cons­


tante sus opiniones y demandas y desplegar dentro de la LSP
una activa lucha ideológica para que su vida se mantenga vigo­
rosa.

e ) Reclutar nuevos militantes, aplicar la disciplina de la organl-


zación; consolidar constantemente I o ganado , deshechar lo viejo
y asimilar lo nuevo para mantener la pureza de núes tras filas.

f) Coordinar la actividad de las Secciones que caen bajo su res-


ponsabilidad y representar ante el CC a las Secciones bajo
su responsabilidad.

Las elecciones para dirigentes de los Comités Regionales se IIeva-


rán a cabo de Igual forma que los dirigentes seccionales y en el seno
del Comité Regional.
Raymond Soto D.ávila | 182

D-clar.-xfián rinl Fronte Anti-Eléctarii!

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A continuación se reproduce el documento para su lectura.


183 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Declaración de Frente Anti-Electoral


Mensaje al independentismo
Las organizaciones y compañeros abajo firmantes, miembros del FRENTE AN-
TI-ELECTORAL (FAE) deseamos presentarle al independentismo nuestro análisis
sobre el proceso electoral en Puerto Rico y nuestra posición ante las elecciones a cele­
brarse en noviembre de este año.

LA INDEPENDENCIA Y LAS FORMAS DE LUCHA


Toda discusión sobre la cuestión electoral en Puerto Rico tiene que ubicarse den­
tro del contexto general del análisis de las formas de lucha para alcanzar nuestros
objetivos. Por tal razón, lo que determina la corrección de utilizar una forma de lucha
es si la misma contribuye a adelantar o no los objetivos estratégicos de nuestro proceso
revolucionario.
Para el FRENTE ANTI-ELECTORAL el objetivo estratégico de los revolucionarios
puertorriqueños es la conquista de la Independencia Nacional como única vía para la
construcción de un orden político, económico y cultural superior: el Socialismo. Defi­
nido nuestro objetivo estratégico toda forma de lucha debe subordinarse al criterio de
que el mismo contribuya a adelantar dicho objetivo.
Partiendo de esta premisa, entendemos que la verdadera independencia nacional
no se conquistará mediante las elecciones. Reconocemos el carácter violento y repre­
sivo del estado capitalista y particularmente del estado imperialista norteamericano,
el cual no renunciará voluntariamente a su dominio colonial. Toda la represión po­
lítica contra el independentismo: la Masacre de Rio Piedras, la Masacre de Ponce, el
encarcelamiento de Don Pedro Albizu Campos y de todo el liderato nacionalista, los
ficheros y listas de subversivos, los asesinatos, el Gran Jurado, el Cerro Maravilla, el
encarcelamiento de militantes y combatientes independentistas tanto en Puerto Rico
como EEUU, las torturas a que son sometidos nuestros prisioneros de guerra, los
arrestos del 30 de agosto y un sinnúmero de casos más nos demuestran que EEUU no
gastan millones de dólares en sus agencias represivas para regalarnos flores, sino para
reprimir cualquier movimiento que atente en contra de su dominio sobre Puerto Rico.
La experiencia latinoamericana nos demuestra que el gobierno “respeta” las elec­
ciones sólo cuando estas responden a sus intereses. Los golpes de estado contra el
gobierno popular de Jacobo Arbenz en Guatemala (1954) y contra el gobierno de Uni­
dad Popular de Salvador Allende en Chile (1973) al igual que el intento de sabotear las
elecciones en Nicaragua (1988) son sólo algunos ejemplos del poco respeto que tienen
los EEUU a las elecciones que no le son favorables.
Por otro lado, la invasión de Cuba (1961), República Dominicana (1965), Grenada
(1983), el apoyo a los contras en Nicaragua así como el apoyo a la Junta Militar asesina
Raymond Soto Dávila | 184

y el fraude electoral en Haití, demuestran sin lugar a dudas que el imperialismo no


cede sus privilegios pacíficamente.
Con este historial, entendemos que es ilusorio pensar que los EEUU permitirá vo­
luntariamente un triunfo electoral independentista, y mucho menos observará tran­
quilamente la construcción del socialismo en Puerto Rico.
Pero si las elecciones en Puerto Rico no sirven para conquistar la independencia...
¿para qué sirven entonces?

LAS ELECCIONES COMO ELEMENTO DE DOMINACION


La opresión colonial en Puerto Rico se implementa de dos maneras diferentes pero
complementarias: mediante la coerción y el consenso.
La coerción, ejercida por el estado (que posee el monopolio de la violencia) se di­
rige no solamente contra los sectores más avanzados del independentismo sino tam­
bién contra toda manifestación de lucha popular (huelgas obreras y estudiantiles) y en
contra de las comunidades pobres. De esta manera se golpean ambos sectores; el más
avanzado y las reservas potenciales de cambio social y político.
Sin embargo, la opresión no puede sostenerse única y exclusivamente sobre la
coerción. El imperialismo también necesita obtener la imposición y control ideoló­
gico sobre los oprimidos para obtener la paz social e industrial indispensable para
explotar impunemente la clase obrera puertorriqueña. La dominación ideológica del
imperialismo para obtener la aceptación de los explotados se ejerce desde institucio­
nes sociales tales como la escuela, la universidad, las iglesias, la familia, los clubes
sociales y a través de los medios masivos de comunicación (radio, televisión, cine, pe­
riódicos, agencias noticiosas, publicidad comercial, etc.). Mediante estos mecanismos,
el imperialismo va formando entre los puertorriqueños una mentalidad colonizada
que es una mezcla de docilidad, dependencia, individualismo, machismo, consumis-
mo y de impotencia y resistencia al cambio. Todos estos mecanismos de transmisión
se articulan en torno al proceso electoral como expresión máxima de “democracia
puertorriqueña.
En Puerto Rico el proceso electoral es uno de los pilares fundamentales sobre los
cuales se sostiene la dominación ideológica del imperialismo sobre nuestro pueblo.
Las elecciones son el instrumento a través del cual se organiza el consenso social que
permite la existencia ‘pacífica” del régimen de explotación capitalista. De esta manera
se fomenta la ilusión de que a través de los mecanismos electorales los trabajadores
podemos encontrar solución a los graves problemas que nos aquejan.
Por otro lado, las elecciones aportan estabilidad al régimen, al canalizar el descon­
tento del pueblo por vías pacíficas aceptables al imperialismo. Ante cualquier proble­
ma, sea individual o grupal, el consenso social prevaleciente repudia como solución
la organización y lucha, planteando por el contrario mecanismos tales como acudir al
alcalde, al legislador, o hasta el propio gobernador para que sean estos los que resuel­
van el problema. Si éstos no resuelven la única alternativa es votarles en contra en las
|S', | LlJl IIAYI SI’Al IO DI I \ LlG.A StK IAIISI \ l’l I RWRRIQl I ÑA: I962-I989

próximas elecciones.
El FRENTE ANTI-ELECTORAL plantea que la tarea principal de los revolucio­
narios puertorriqueños es romper la dominación ideológica del imperialismo. Como
bien dijera el Comandante Juan Antonio Corretjer; “Nuestra Revolución habrá triun­
fado sobre el enemigo extranjero tan pronto haya triunfado en la cabeza de los puer­
torriqueños”.
Para romper la dominación ideológica del imperialismo tenemos que organizar a
nuestro pueblo trabajador para la lucha, no en las urnas sino en la calle que es don­
de tenemos verdaderas posibilidades de triunfo. Una lucha guiada por una estrategia
basada en el desafio militante de la legalidad burguesa e imperialista. Una estrategia
revolucionaria que reivindique la experiencia del desafio a la propiedad privada que
realizan los rescatadores de terrenos, el desafio a la prepotencia militarista que han
realizado valientemente los pescadores viequenses y que desarrolló la juventud con­
tra el servicio militar obligatorio, y el desafio a la legalidad imperialista que representa
la no-colaboración con el FBl-Gran Jurado.

LAS ELECCIONES COMO MECANISMO DE LEGITIMACION


La celebración periódica de elecciones en Puerto Rico es la mejor manera de legi­
timar la intervención norteamericana en nuestra Patria. Cada elección que se celebra
en Puerto Rico significa un nuevo mandato para la continuación de la ocupación nor­
teamericana, y se convierte en una excelente arma de propaganda en manos de los
voceros imperialistas. En cada foro internacional, los EEUU pueden señalar con gran
satisfacción que en Puerto Rico se celebran elecciones libres cada cuatro años, y que
el pueblo vota abrumadoramente a favor de los partidos colonialistas (PPD-PNP) y en
contra de la independencia.
El FRENTE ANTI-ELECTORAL sostiene que debemos rescatar las enseñanzas
de Don Pedro Albizu Campos sobre la ilegalidad de la intervención norteamericana
en Puerto Rico. Dicha ilegalidad ha sido reconocida por múltiples resoluciones de la
Organización de Naciones Unidas condenando el colonialismo como un crimen con­
tra la humanidad.
Ante esta realidad la tarea de los independentistas puertorriqueños no es la de
continuar validando el colonialismo mediante la participación electoral. Nuestra ta­
rea, si es que vamos a ser consecuentes con nuestra prédica, es desenmascarar el or­
den colonial. El deber de los revolucionarios es destruir un sistema de explotación y al
sistema se le comienza a destruir al restarle la legitimidad y respetabilidad falsas que
le proveen las elecciones.

LAS ELECCIONES COMO ELEMENTO DE DIVISION


Las elecciones dividen al pueblo trabajador evitando así que podamos presentar
un frente unido contra los explotadores. Mientras que una política antiimperialista y
revolucionaria tiene que basarse en la unidad de los trabajadores y sectores afines, las
Raymond Soto Davii.a ¡ 186

elecciones sólo sirven para dividirnos más.


A medida que se acercan las elecciones, observamos cada día más a menudo las
disputas sobre preferencias electorales entre compañeros de trabajo o entre vecinos
de comunidades marginadas. Las elecciones fomentan el triste espectáculo de poner
a luchar a puertorriqueño contra puertorriqueño obrero contra obrero, pobre contra
pobre, mientras los imperialistas y sus lacayos coloniales se lucran impunemente del
régimen de explotación colonial.
El FRENTE ANTI-ELECTORAL sostiene la necesidad de la unidad de los opri­
midos en la lucha contra los opresores, de forma tal que podamos "unir a los muchos
para derrotar a los pocos”. Por tal razón promovemos una política de apoyo a todas las
luchas populares que, a diferencia de las elecciones sirvan para unir a los explotados
y adelanten los objetivos revolucionarios.

LAS ELECCIONES COMO ELEMENTO DESMORALIZADOR


Cuando un partido independentista entra en la contienda “electoral”, enfrenta no
sólo a los partidos colonialistas y sus presupuestos millonarios, sino también a toda la
ideología burguesa dominante y la dependencia psicológica que produce el colonia­
lismo entre las masas del pueblo. Estos elementos conllevan el fracaso de toda gestión
independentista a nivel electoral. Al aceptar las pautas del enemigo y sus reglas del
juego, el independentismo se coloca en una posición defensiva que conduce solamen­
te a la derrota. Por otro lado, el ilusionismo que generan las campañas electorales in-
dependentistas siempre termina chocando contra la dura realidad de los resultados
electorales, produciendo frustración, desmoralización y cinismo entre grandes secto­
res de la militancia patriótica.
La frustración y desmoralización que han surgido a raíz de los fracasos electorales
del independentismo han procreado toda una generación de independentistas confu­
sos, marginados y apáticos. Gran parte se ha alejado de toda actividad política mien­
tras que otros se dedican a votar por el PPD para “alejar la estadidad”.
Y es que difícilmente puede ser de otra manera. Organizar partidos electorales
para perder las elecciones cada cuatro años es la mejor manera de desmoralizar al in­
dependentismo y de frenar el desarrollo de un verdadero movimiento revolucionario.
Contra la frustración y desmoralización que produce el electoralismo, el FRENTE
ANTI-ELECTORAL promueve la organización y la lucha del independentismo para
la victoria. La Huelga Electoral saca y libera al independentismo de las amarras im­
puestas por el imperialismo. Nos permite organizar y dirigir al pueblo en un terreno
favorable porque somos nosotros y no ellos los que ponemos las reglas y escogemos el
lugar y la hora de las batallas.

ANTE LA FARSA ELECTORAL: LA HUELGA ELECTORAL


Por las razones anteriormente expuestas el FRENTE ANTI-ELECTORAL propo­
ne al independentismo puertorriqueño el desarrollo militante de una campaña de
187 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Huelga Electoral.
No promovemos la simple abstención electoral, consigna desmovilizado™ y pasiva
que puede ser producto de la frustración individual o colectiva, del sectarismo o de
debilidad político-organizativa de algún sector.
Promovemos una Huelga Electoral: un boicot activo y militante que saque la lucha
por la independencia y el socialismo de las urnas a la calle. Una Huelga Electoral que
representa un rompimiento con el legalismo y reformismo y que reivindique las en­
señanzas revolucionarias de Ramón Emeterio Betances, Pedro Albizu Campos y Juan
Antonio Corretjer.
La Huelga Electoral no es un delito; es un derecho verdaderamente democrático
que puede y debe ejercerse colectivamente como expresión de fuerza y organización
de un movimiento del pueblo trabajador con una verdadera vocación de triunfo y con­
fianza en la victoria. A nivel político-organizativo, la Huelga Electoral es un elemen­
to aglutinador que contribuirá al desarrollo de un polo revolucionario que oriente
nuestra lucha. Llevada a su máxima expresión, la Huelga Electoral ¡legaliza el régimen
colonial y es la antesala de la revolución.
Para adelantar esta propuesta es que se organiza el FRENTE ANTI-ELECTORAL
como organización unitaria anti imperialista y socialista, comprometida con el desa­
rrollo de) potencial revolucionario de nuestro pueblo pobre y trabajador.
Hacemos un llamado a todas las organizaciones y compañeros independentistas a
que apoyen nuestra gestión unitaria y se integren a este FRENTE ANTI-ELECTORAL
para que nuestra campaña sea más militante y efectiva.

ES LA HORA DE LA DETERMINACION ¡Afrontemos las tareas del momento!


ANTE LA FARSA ELECTORAL ES UN DERECHO NO VOTAR
¡NO VOTES! ORGANIZATE Y LUCHA PARA VENCER

Oscar Collazo
Portavoz
FRENTE ANTI-ELECTORAL

Organizaciones

Juan Antonio (Papo) Castillo


COMITÉ DE APOYO A LOS PRISIONEROS DE GUERRA

José Torres
FRENTE INDEPENDENTISTA MOROVEÑO

Ricarte Montes García


LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA
RaymondSoio Davii.a | 188

José López
MOVIMIENTO DE LIBERACION NACIONAL (EEUU)

Humberto Pagan Hernández


COLECTIVO DE LA REVISTA GRAFITI

Rafael Marrero
TALLER DE EDUCACION POLITICA

Compañeros en su carácter individual

Antonio Camacho
Juan Manuel Delgado
Alexis Massol
Carlos Noya
William Pintado
Rosalinda Soto
Rita Zengotita
189 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Apéndice II
REPRESIÓN CONTRA LA L.S.P.
Raymond Soto Dávila | 190
19» | Lucha y espacio de ia Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

J jxJT5jxJTAjxJ AS5SJ jW
A COjlfirTJAn
\
A SU
DENUNCIA DE PLAV CRIMINAL CONTRA HUELGUISTAS

DE GENERAL ELECTRIC PRODUCE EL ATENTADO.

La noche <iei viernes 17 de julio, aproximadamente a las 10:40, el Secretario Ge­


neral de la LIGA SOCIALISTA FUBRTORRIQUSá’A, camarada Juan Antonio Corretjer, y su es­
posa, la camarada Consuelo Lee de Corretjer, fueron atacados a tiros en el kilómetro
cinco, hectdmetro’4, de la carretera 2^, electamente a la entrada de au residencie.
Corretjer acostumbra - ha vivido en ese mismo Aitio^des.de hace quince años - detener
su automóvil a la derecha de la carretera: permitir el paso a los automóviles que se
dirigen hacia Guaynabo, y, una vez libre su paso, cruzar la carretera para entrar a
su casa. Exactamente esa misma maniobra había empezado a hacer. Detuvo su automóvil
a la derecha, y dos o tees, de los automóviles que en dirección e Guaynabo corrían
tras él, nasaron, al hacerles Corretjer seña con la mano para que tal hicieran. Al
nasar el tercero, mientras Corretjer aún miraba por el retrovisor para asegurarse que
tenía vía franca y podía cruzar, ese tercer automóvil detuvo la marcha y uno, de tres
hombres cuo tripulaban dicho carro, hizo un disparo de revolver hacia la cabeza de
nuestro dirigente. Un leve movimiento hacia delante de su automóvil, que estaba pren­
dido y en el cambio de marcha, hizo oue la bala pasara a centímetros detrás de su ca­
beza y de la de su esposa. El cristal de la ventana derecha delantera, junto a la
cual estaba sentada Doña Consuelo, fue hecho trizas por la bala.

El automóvil de los agresores partió a toda velocidad. Apenas un minuto después,


Corríetjer, convencido oue su esposa no había sido herida, partió traa los agresores,
siempre acompañado de su esposa, persiguiéndolos hasta la luz de tránsito de la in­
tersección- entre la carretera veinte y la carretera de Caguag, perdiéndose los agre­
sores en dirección de esa ciudad.

Debido a la inmediata ventaja tomada por los agresores, a la obscuridad1, al he­


cho de oue otro automóvil se interpuso casualmente entre Corretjer v los agresores,
no fue nosible alcanzarlos mientras atravesaban Guaynabo o tomar su tablilla. A la
salida de Gua.ynabo, frente al edificéo do correos, estaba detenida una patrulla de
la policía. En los násmos momentos en oue Corretjer se aproximaba a ese lugar, el au­
tomóvil de la policía echó a andar, saliendo lentamente del lado de la acera, hacia
el centro de" la carretera. Al Corretjer tocar re.'etidasento la bocina, pidiendo paso,
el natrullero se echó a la derecha nre.vuntando Is razón del apremio. Doña Consuelo ■
le gritó que desde un automóvil en la delantera les habían disparado. .
Raymond Soio Dáviu\ | 192

Corretjer siguió,a le mayor velocidad posible, pero su automóvil, de ma's de cin­


co años de uso y cuy trabajado, no nudo dar alcance a sus agresores. Tuyo adeiás que
detenense porque aproximándose a la Kuda,de Caguas, el patrullero, tocando la sirena,
le pasó, v detuvo el automóvil de unos jovenes - muchachos y muchachas - creyendo que
eran los agresores. Corretjer se detuvo, ¿jritó a la nolicía aclarando la situación, y
siguió hesta la intersección de la carretera 20 y la de taguas, lugar llamado La Hu-
. da.

Allí se detuvo^ brillándose a la derecha, habiendo instantes después llegado la


policía- el natrullero va mencionado v otro mas. Un individuo que había estado en e-
se sitio momentos entes informó haber visto nesar un automóvil? anarentemente de mar­
ca Chevrolet, azul obscuro, pasar a «rran velocidad, a tal velocidad que de haber en­
contrado la luz roja habría tenido oue cruzarla, cuisiéralo o no.

Estoe son los hechos. ¿Que razón ha podido haber para perpetrar un atentado a
mansalva contra un hombre, oue, en ese instante, además, llevaba a su lado a su es­
posa, poniendo en peligro de muerte no-sóbo-al-hómbre a quien.se quiso asesinar, sino
también a su espose?

Nosotros poneros en conocimiento del país los siguientes hechos generales y a-


demás, algunos otros, específicos.

Los generales son más o .menos del conocimiento del país. Una campaña general de
agresión ha sido desatada por Washington contra el indeoendentismo puertorrioueño. E-
sa campaña se ha ido intensificando’en toda la América Latina, Puerto Rico íncluaive,
durante los rasados seis años;'fosó tros, los de la LIGA SCCIAI/ISTA PUERTORRIQUEÑA,
jonás nos hemos Quejado de persecuciones. Ha sido siembre nuestro criterio que del
enemigo no rodenos esperar flores. Hemos dedo por descontado, nue según el indépen-
dentisio se ha ido rehaciendo de sus pasados quebrantos, la acometida liquidecionis-
ta del imperialismo se ha de acentüar. Eso es perfectamente entendible. Dentro*, de e-
39 marco general de la opresión imperialista todo lo hecho contra nuestro partido
constituyen variantes de una misma agresión.

Pero dentro .de esa generalización hay también ciertas cuestiones específicas que
es indispensable ahora - no por nosotros, sino noroue hay envueltos intereses y per­
sonas valiosas que no somos nosotros.

Nos referinos a la magnífica huelga ^e los trabajadores de la General Electric


en Palmer. La LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA desde hace muchos meses ha dado aliento
constante a los abnegados huelguistas de la General Electric. 3se es el movimlénto
huelgario más inoortante organizado en Puerto Rico en .muchísimos años. Es la huelga
de mayor duración en nuestra historia. Tienez un contenido histórico y de moral pro­
letaria que trasciende a las motivaciones reas o menos inmediatas oue 10 produjeron,
que va mas allá de los huelguistas, de los dirigentes de ls Unión, y más allá de no­
sotros. Tn Palmer se ha probado oue unos huelguistas, con unidad de pensamiento y de
voluntad, apoyados por su derecho v pos sus propios recursos, pueden enfrentarse du­
rante tiempo indefinido a toda la maquinaria imperialista-colonial aliada y confabu­
lada con la ennresa, dando un ejemplo moral de gran altura c tcdos los trabajadores
do Puerto Rico, unionados y no unionados.

Percatados hace varios meses de la importancia de esa huelca, lá LIGA SOCIALISTA


FU sRTGRRIQUTflA se inpuso el deber de darles el mayor aliento posible. Le hemos lle­
vado buena lectura; los hemos acompasado en las horas más azarosas de su lucha. Y
henos logrado romper su aislamiento.
193 I Lu.IIA Y 1 SI’A( IO 1)1 I A Lk,\ SociALisi/X Pci.rtorriquiíña: 1962-1989

- 3 -

La LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA ha llevado hasta el movimiento obrero de Esta­


dos Unidos - a sus obreros, a su gente de fila, se entiende - el caso hernoso de los
huelguistas de la General Electric en Palmer. Los trabajadores aísnoa de la General
Electric en Estados Unidos ignoraban que tal huelga de sus hernar.os de clase en Puer­
to Rico estuviese ocurriendo. Hace meses que esa situación quedó salvada, gracias a
las gestiones de amigos nuestros en Estados Unidos cerca de los puertorriqueños y 0-
tros latinoamericanos aue en aquel país trabajan para la General Electric.

El terroriscio oficial de aeter miedo a los huelguistas porque nosotros soaos so­
cialistas, ha fracasado en Palaer, no porque los huelguistas piensen políticamente co­
mo nosotros sino porque han vivido la sinceridad de nuestra conducta frente a su pro­
hiena. Pensar oue los camaradas de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA iban a salir co­
rriendo a la vista de grandes concentraciones policiacas era, claro está, soñar des­
pierto, y la empresa lo sabía y lo sabe.

Psnsar que los cacaradas de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA ambicionen suplan­


tar a los actuales dirigentes de la Unión, sería locura. Lo prohíben nuestros Estatu­
tos, uno de cuyos artículos prohíbe terminantemente a sus miembros aceptar puestos
en una unión, ni remunerados ni no remunerados. Pensar que pueden sobornar a un ciem-
bro de Ja LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA es no daber que un artículo ospecífico de
nuestros Estatutos prohíbe a todo mieabro de la LIGA poseer propiedad privada o vivir
del trabajo ajeno.

Pero la empresa de la General Electric, respaldada por funcionarios de la Junan


Federal de Relaciones del Trabajo pudo inventarse otro truco. Desde hace cas de dos
semanas; desde que los trabajadores rechazaron el grotesco proyecto de convenio que
la empresa les presentara, la Jun.ta, respaldando a la General Electric, ha plantea-
do que mientras lós huelguistas acepten la presencia de miembros de la LIGA SOCIALIS-
TA en los alrededorésTé-í¿ planta, nó arreglarán la huelga; que la empresa transará
oon-los'huélguistás inmediatamente nue expulsen de los alrededores de la planta a los
auxiliantes miembros de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA. Es un embuste para romper
la unidad de los trabajadores.

Hace exactamente 7 días que la LICA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA circuló en Palaer -


en todo Palmer - una hoja suelta denunciando un plan criminal contra los huelguistas
desarrollado en las altas esferas de la General Electric con la ayuda de la CIA. Se­
ñales evidentes: una noohe,personas desconocidas tirotean el Cuartel de la Policía
en Palaer; otro día aparecen bombas en el Pueblo del Niño, cercano a la planta de Pal-
®er; luego, cuando la noticia ha hecho todo el daño posible, se alega que no fue en
el Pueblo del Niño pero siempre en lugar aledaño a las filas de piquetes de los huel­
guistas.

La «apresa de la General Electric tiene perdida la huelga en Palaer , debido a


sus propios errores además de no tener ninguna razón. Y porque tiene perdida la huel­
ga se empecina en destruir la unión, en romper la huelga, en agredir y encarcelar a
los huelguistas.

Los mismos nue tirotearon el Cuartel policiaco de Palaer; los aismos que pusie­
ron las bombas; los mismos que ordenan la agresión v el er.carcelaaiento de los huel­
guistas, ordenaron el atentado contra nuestros camaradas en Guaynabo. A ellos le de­
ciaos lo mismo nue Corretjer dijo a los natrulleros de la Policía esa noche:
- NADIE SUEÑE CON QUE’ NOS VA A ÍÍETER HIEDO - . -
Raymond Soto Dáviux | 194

- 4 -

Corretjer ha dicho estes palabras: - "Los jefes somos pararrayos y es natural,


que se dispare contra nosotros. Pero al aceptar una posición dirigente dentro de la
LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA todas nuestras mujerés, asumen la responsabilidad de
que el enemigo a ellas también las tirotee.
La depredación capitalista oue hechos como el que denunciamos revela, proclama
su decadencia y profetiza el triunfo próximo y definitivo de la independencia y el
socialismo.
Por ese camino, la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA renueva lealtad total a la
clase obrera puertorriqueña, luchando sin tregua hasta alcanzar la victoria.

a 18 de julio de 1970 -
Por el Buró Político de la LIGA SOCIALIS-
’ TA PUERTORRIQUEÑA.

- Refrendado: Juan Antonio CORRETJER, Consuelo Lee de Corretjer,


Secretario General. Responsable de Educación.
195 I Lucha Y espacio de L\ Liga Soc lai isla Pi irtorriiji es 1962-1989

ASC/2/2/860 3 de julio de 1979

r -u •• TÍ'-'' r>

MEJORANDO A Candte. Angel L. Pérez Casillas


Director, Oficina Inteligencia

CE

Ágté. José M. Lozano


Agte. Mareelino Avilés

ASUNTO PIQUETE LIGA SOCIALISTA EN


CALLEqRECTNIO SUR, FRENTE
AL-CORREO FEDERAL
c
Fecha actividad 3 de julio de 1979
Lugar actividad Calle Recinto. Sur, frente Correo
Federal n»'.
Ebtivo actividad Solidaridad con los presos Pablo
Marcano y Lydia E. Cuevas
Hora eopezó 12:00 M.
Hora terminó 1:30 P.M.
Descripción actividad Piquete
Asistencia 20 personas
Maestro ceremonia Juan Antonio Corre tjer
Oradores Angel Rodríguez Cristóbal
Propaganda distribuida Periódico El Socialista, Vol. 80
y dos (2) hojas sueleas
CarteIones alusivos a Los presos nacionalistas y a
Pablo Marcano y Lydia E. Cuevas
Ocurrió novedad No

Personas identificadas:
1. Juan Antonio Corretjer
2. Carlos E. Noya Maurati I ORADOS
3. Carlos Justirriano
000221
Ray.mondSoto Davila | 196

-2-

ASC/2/2/860 2 de julio de 1979

47 Am John Gurncte
5. Angel Rodríguez Cristóbal
6. Raymond Soto DlviLa /
7. Iris Martínez
8.. Linda Marsha
9. Efrafn Lísandro Rivera
10. Ilesna Carrión. Maldonado
11. Ivelisse Carrión Maldcnado
12. Hermane Pablo Marceno
_ CtaTnín Pérez .
13.
14 ~ Ricarte Mantés García
15. Slxta Rivera Qulles
16. Herlbia Enid Corchado
17. Lourdes Sun tana Melecio
18. Dionisio Pérez Montea

Autos identificados:
57-H?780,.. .
35 X 210
38 T 251
81 X 620

• • i? :

V
]

197 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueñ a: 1962-1989

FO333 (Rev. 12^)9-67)

FEDERAL. BUREAD OF 1NVESTIGAT1ON


o* t e _ I" 1100
orricc op origim
JUN 3 0 1970 I 4/17 - 6/22/70
SAN JUAN SAN JUAN
Títle of case OI

LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA


jPUERTO RICAN SOCIALIST LEAGUE)
IS PRN

REFERENCES;
San Juan report of SA EDWARD G. SUERIDAN, 1/28/70

LEAD; ALX INFORMATION CONTAINED


SAN JUAN

AT SAN JUAN, PUERTO RICO.

Will continué to follow and report acti.vlti.es of LSP.

ACCOMPLI SHMENTS CLAIMED (—) NONE


i. I______ riwti I IAVINO»
ACTQAUu'd
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Raymond Soto DAvila | 198

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Jfcw York, Kew Yorl SJ 105-6921-1039

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infaraatlon fumlshcd üy SJ T-l through. _JSJ T—6, the unantho-
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ard thi&.be detrljsfcntal to thelr futura uffactívenles.
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and Ke» TorK City.
An Infoim-alion cc>>y of tais report le balng furolahed
to Chicago, in vle* of Vmt office'« continuad interést in Putrtí

B
Cover Page
199 I Lucha y espacio de lx Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

sj 105-6921

Rlcan pro-lndependence activities.


The student aseembly at the ünlversity of Puerto
Rico (UPR) on 5/13/70, which waa Jointly sponsored by the FUPI,
JIU, and the LSP, was obaerved by SAs GORDON W. MC GINLEY and
JOHN J. KSWMAN.
Prosecutlve action againot LSP membera for the arresto
mentioned In detalla of referenced report is beinff followed and

A11 LSP me rabera mentloned lo detalla of _thi5_


7C are elther
RaymonoSoio Dáviia | 200
201 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Apéndice III
CÁTEDRA DE MILITANTES
Raymond Soto Dávila | 202

J
203 I Lucha y espacio de ia Liga Socialista Puertorriqueñ a: 1962-1989
í

MENSAJE AL ESTUDIANTADO UNIVERSITARIO,


DE LOS CUADROS UNIVERSITARIOS DE LA LIGA SOCIALISTA HT.71T0RP.IQUES1
Conpañeros:
Hoj>y se cumplen 67. años de la fundación de la Universidad de Puerto Rico, Es
cierto, Pero no es menos cierto que desde su fundación, la universidad ha sido y
será - hasta el día de la independencia de la Patria -, un espejo en el que se
mirarán siempre con mal<'.os ojos la conciariqia puertorriqueña y la usurpación ¿nortea-
mericana. '

Hoy, cuando aún humean en la memoria de todos, las ruinas de buena parte de los
cuarteles del ROTC, blanco y objeto de la indignación estudiantil universitaria; hoy,
citando aún no han cicatrizado las heridas do muchos de los compañeros; hoy, cuando
aún no han marchitado las coronas de flores sobre la tumba de la compañera Antonia
Martínez, asesinada .por la polioía; comparecemos una vez más anta ustedes afirmando
lo que en inmortal Manifiesto el 15 de jimio do 1913 proclamaran ante el mundo los
estudiantes da la Universidad de Córdova,. Argentina, cuando señalaban que " Los do­
lores que quedan son-las. libertades que .faltan"', que "El chasquido del látigo sólo
puede rubricar el silencio denlos inconscientes' o de los cobardes" y que " la única
puerta o.ue nos oueda abierta a la esperanzjB es el destino heróico de la juventud."

El Puerto Rico de hoy es hijo del plebiscito de junio do 1967. Ese plebiscito
■ 5?tea la etapa actual da la si.tuacióiy-puer'corriqueña, etapa- que el imperialismo norte­
americano tiene la"decisión de" llevarla hacia la restiracd-’órP'-dot cíeferénáum sobre- ••
el Voto Presidencial, con el propósito deliberado de legalizar la imposición de la
Ley de Servicio Militar Obligatorio y la declaración sobre esta base de Puerto Rico
cono Territorio Incorporado de los Estados Unidos.

El tiempo de la universidad es el tiempo de esta maniobra imperialista dirigida


contra todos los puertorrioueños y es el tiempo en el que el imperialismo norteame­
ricano ya decidió producir el desarrollo de un movimiento asioilista como factor
predominante de su política colcnial en Rierto Rico.

El tiempo actual de la universidad es el tiempo de la ofensiva del Partido hue­


vo Progresista para tomar para sí a la Universidad de Puerto Rioo aplastando el mo­
limiento estudiantil, burlando los reclamos del Senado Académico y el estudiantado
sobre el ROTC, y es el tiempo dol bochornoso e irresponsable deshaucio penopeísta
contra el ex rector Abraham Días González.

EL i DE MARZO
Los hachos del miércoles 4 de marzo tienen como marco escénico los factores ya
señalados, la situación colonial de Puerto Rico, y cono raiz inmediata, el auge de
reacción do extrema derecha en Estados Unidos, bajo la presidencia de Richard Nixon.

Sabemos que en la etapa actual, es principalísimo objetivo del imperialismo nor-


teaicoricano en Puerto Rico.. 1a liquidación del independen ti. seo.

Puerto Rico sin indepondentisno er Alaska, es Eaxaii.- No lo será.

Sabemos que el campus.universitario ha sido lugar preferido de los servicios


de inteligencia para emboscar al independentisco.

Y sabemos que los provocadores al servicio del imperialismo quo luego del pi- -
cuete de señoritas frente a los cuarteles del ROTO propiciaron el encuentro entre los
estudiantes y la Guardia Universitaria, buscaban allanar el camino que hiciera
ostensible la aplicación del auge represivo contra los estudiantes y el independen-
ti eme unívio. • •
RaymondSoio D/\vn.\ | 204

-2-
A I03 intentos de emboscada del enemigo, el estudiantado respondió en contra­
ofensiva con el asalto.
Ya ‘Iniciada la lucha del estudiantado en respuesta a los provocadores del im-
. perialismo y del ROTC, en respuesta a los abusos y desmanes de la Guardia U'niversi-
l taria, loaVeotudiantes*reclamaron la presencie de los CUADROS UNIVERSITARIOS de la
LIGA SOCIALISTA FJ.ERTORR IQPE2<A en le acción. En inmediata respuesta a esta ineludi­
ble demanda y en cumplimiento con sus deberes de fraternidad estudiantil, patrística
7 revolucionarte; los CUADROS UNIVERSITAhIOS de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA se
trasladaron al lugar do la acción. Y combatimos consecuentemente junto al estudian-
hado.
DISCURSO DE BENITEZ
El discurso ante el país pronunciado en la noche del martes, per el rector inte­
rino y presidente de la Universidad, Jcime Benítez, es 9] discurso • aunque parece
lo contrario -, de un hombre inteligente. Es una inteligencia al servicio del cal y
de la esclavitud. Fuede llamároele el discurso de la paloma, Ec básicamente uh dis­
curso no académico dirigido a los padres de los estudiantes a quienes el señor Presi­
dente de la U.P.R. presume unos brutos. Dentro de la onda de ese discurso dice Be-
nítezque de su parte no hay rencores.

Más sabe el diablo por viejo que por atablo. SI Ledo. Benífez habla de paz para
hacer la guerra. El sentido de su discurso es el apaciguamiento necesario para pro-
-ducir celadas y emboscadas.

Quedarám. los policías sin uniformes y la cano sobre el teléfono de un hombre


que.hoy en la rectoría quiere ser un Trujillo cargado de libros.

HUELGA GENERAL
Ante el •proyecto
- * - —de Huelga
——-— General
A J.los
vo CUADROS UNIVERSITARIOS
KJ \J a. a r.»> de le LIGA ~SOClA-
-
LISTA PUERTORRIQUEÑA sostienen que si el estudiantado y les otras organizaciones pa­
trióticas proclaman la consigna de Huelga General, los CUADROS UNIVERSITARIOS de
la L.S.P. apoyaremos la huelga.

ADVERTENCIAS DE ASESINATO
Anto las diversas advertencias hechas por amigos sobre los múltiples rumores
-----------
de que lu reacción imperialista del Partido Nuevo Progresista ha decidido asesinar
al camarada'Joaé Kárcano y otros camaradas de los CUADROS UNIVERSITARIOS, nosorros
a.lrmamos que entendemos onta circunstancia-ooeó la última novedad en el esfuerzo
para sacar a los CUADROS UNIVERSITARIOS de la LIGA SOCIALISTA fuera del campus
universitario.
HORRA T CONDENA
la LIGA SOCIALISTA so honran en pertenecer a la
Los CUADROS UNIVERSITARIOS de la-LIGA
primera organización marxista-leninista-(la LIGA SOCIALISTA .’VN.RTVRÍO.UEPa) que en
la historia de Puerto Rico es llevada a cortes (más de 100 acusaciones contra 11 diri­
gentes) per su vinculación con la lucha por la independencia. Nos sentimos igualmen­
te honrados por compartir este momento de lucha junto al estudiantado universitario.

Marchamos*al futuro libre y socialista de la Patria, esperanzados y decididos.

Y junto al estudiantado universitario mirados hacia.atrás, contemplando en


nuestro antes de ayer el cadáver de núestra'compañera Antonia Martínez', insepulto
en las maños ensangrentadas de su asesino el presidente de Estados Unidos: y a
LuiST-Eerrá y Jaime Benítez cubriendo su complicidad tras la Sandera norteamericana.

Por Ion CUADROS UNIVERSITARIOS de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA, . -


a’12 de marzo de 1970. jOs¿ K<rcano.
-- —---- ----- ------ —
205 | Lucha y esp

- 6 -

:®^3íjííXí3 ¿$i
5jkJ PALíiO Por Kyriaa FUENTES
-V^ -^elga de los obreros de la Circuit Breakers y la Caribe General Electric en
-aluey finalizó el 26, de junio, sin ai e se obtuviese la principal .demanda de los huei-
EUlstas que era la reposición de todos los “pobreros despedidos, al .fincarse al acuerdo
(r'^J “a 7 Ia üriión Internacional de iHaquiriístas y Trabajadores Aeroospaciales

31acuerdo¿p¿oyqó tan sólo un aumento de 12 centavos por hora en. el salario .bási-
do I03 obreros
-jreres y mayor aportación'dé'!fá empresa en los gastos del plan médico P«^a
loa ttraba
■ jadqreq,. En_cambio de esto la compañía rehusó firmar la cladsula de segur a
de enpleo
□pleo y res títuir'al taller la.mitad dé los obreroo (26) $ie por‘su cilitancia en
el taller
---- - y en la huelga habían sido, despedidos; 1
Los obreros de la G.E. habían expresado durante los nueve meses de. mi litante huel­
ga que nq,aceitarían ningún, contrato donde no se garantizara la reposición el trabajo
átí la; totalidad, dó Ipá.-obreros despedidos.
Qe

La IAM expresó a través de su líder Juan Xaldonado <jie el convenio acordado cons­
tituye un triunfo para los obreros de la G.E. y para él movimiento obrexp en general. .

La razón principal de que los obreros de la G.E. se mantuvieran on huelga por nue­
ve meses y la. razón específica por la cual se negaron a aprobar el convenio tentativo
d«J 7:de j/qnio (ué.qué ia empresa s'a rehusaba destituir al trabajo los huelguistas n¿s
“llitantes, quienes
líderes de la huelga. AI expresar áúa imoresiones-sobre el • primer acuerda tentativo,
los huelgufiotas lo catalogaron de "trampa patronal". Puesto que, según lo expresado
Por los obreroo de aceptarse finalizar la huelga sin la restitución .otal de los obre­
ros despedidos , la compañía obtendría vía franc? para la ofensiva patronal, <?ie re­
futaría en la disolución de la unidad y la decapitación de la unión.
4 ’ P9r. U>- tanto/la': demanda náa importante, y de ésto.'los huelguistas estaban cons­
cientes qra, la total restitución sin penalidad?» de‘los cónpafteros_djspedidos, quienes
eran los obréroL-^-désirrtllados y •niáS"dia^Utór“a'-IicKir contra al patrono.

Los huelguistas, sabían que lo importante en esa lucha no era conseguir tan sólo
un aumento salarial o un mejor plan médico, sipo salir’de testa lucha con una unión
fortalecida que pudiera librar futuras batalla» en favor de los obreros. Para esto e-
r® necesario que se consiguiera que todos los obreros en huelga, sobre todo los mas
ailitantea, retornaran al taller. »
0OO0

r0rl£EpaCÍe^tO-que’en’ «otos-términos,.,1a IAM alcanzó a través de este convenio una vie­


obr.rw^. > ¿órlco¿..¿u.n=i. ?«-’• »• «“*«
ja? .Veamos.

La UM alega auc el conveimío fui un-trluafo para los obreros, 'puesto que la W.
e—r ’
aaoia expresado ant'eriornen te que no aceótAría ni uno sólo de los obreros despedidos,
¿Es cierto
erto estp?

En artículo oublicado en el periódico "El Mundo" del 4 de marzo de 1970, titula­


do "NO VEN SOLUCION PARO DE TRABAJADORES DE G.E. se lee lo siguiente:
RaymonpSoto Davh.x | 206

- 7 -

"El paro contra la C.E., oue comenzó a gestarse desde principios de octubre, cuan-
lo la compañía despidió, a ocho empleados luego de celebrarse elecciones para decir si
Los enpleados de la compañía deseaban ser representados por la Unión Internacional de
dequinistas y Trabajadores Aeroespaciales."

"Esa elección fué favorable para la unión... La compañía apeló el resultado ante
la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo. Mientras se aguardaba la decisión de la
junta, la compañía despidió a los ocho empleados alegando que ellos constituían un
riesgo para la empresa." (Riesgo por aué, precisamente porque eran líderes en el ta­
ller y estaban dedicados a organizar y fortalecer la unión.)

"La unión recurrió de inmediato al Departamento del Trabajo y se iniciaron las


gestiones para lograr la reposición de los empleados despedidos, pero mientras se de­
sarrollaban esos esfuerzos la compañía desdidió a 20 empleados más, complicándose en­
tonces el problema."

"La Secretarla del Trabajo intervino entonces personalmente y tras conversacio­


nes con representantes de la unión y la compañía, la empresa accedió reponer algunos
de los 28 empleados despedidos, pero ese arreglo fue rechazado por la unión."

testa ese momento la unión que no había decretado huelga, inició un oaro cor
los alegados desoídos en masa y pare reiterar su demanda de reconocimiento como re­
presentante de los enpleados de la G.E." (Los subrayados son oíos.)
□ios.)

¿Cuantos obreros aceptaba entonces la compañía reponer? ¿La mitad, diez, cinco?
Por menos que hubiesen sido, es seguro que no se hubiesen quedado en la calle 26 mi­
litantes. ¿Si entonces era inaceptable dicho acuerdo, como en verdad lo era, ¿por qué-
después de nueve meses de militante huelga, de la gran demostración de fuerza y moral
obrera que caracterizaron a los obreros durante estos meses , después que la compañía
estaba casi vencida H_junta_.aXfl_.tuvo oue preparar un_atentado contra dos dirigentes
de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA-; después que el movimiento obrero organizado en
PuérfcFRico había'organizado üña~Har cha~masfV'a"eñ-sóirdaridad con los huelguistas de
la’ C,E. - la cual hubiera puesto, de llevarse a cabo, en difícil situación a esto pa­
trono frente a la opinión pública; por qué después de que se acumularon todas estas
fuerzas a favor de los huelguistas, tuvo la IAM que aceptar un conveniente—a^todas
luces no os favorable para los obreros de la G.E.?

La Junta Nacional de Relaciones del Trabajo había decidido «favor de la<fJ®X


'a total sin pe-
Es obvio entonces aue la huelga continuaba por la demanda de repósl^ión
calidades de los obreros despedidos. / RT.lHTúDE
, H DKAS

¿Cuáles fueron Iqs errores? %


Los huelguistas conocían e cabalidad la importancia de que es\¿Ai^lga ter^ív^X
ra en victoria total de los obreros. Por el bien de ellos y de la c 1 a^e¿^^?a^p*!rer-
torricueña en general. Después de que esa huelga estallo', Puerto Rico ha experimen­
tado un brote de huelgas que se debe principalmente al hecho de que la explotación
<a Fuepto H¿co~e3~~cada día más insoportable. Pero én' esto' la“HÜéIga" de ía G.E. jugó
su pórte. Loo obreros de la O.E. con su militanoia, dedicación y-sacrificio sentaron
un ejemplo para,ser seguido por la clase obrera puertorriqueña. Fueron ejemplo has-
^^pSr5*~l<T5~~Ó&re^ro s de la Hotpoint, G.E. e~u Cnicago quienes'al saber de la huelga de
exíT'nb'rñañés^de clase en Puerto Kico~'én 'fO'ro"orrganizado por el PARTIDO LABORAL PRO­
GRESISTA (XL) de loa Estados Unidos y la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA (ML), envia­
ron mensaje de solidaridad y recogieron dinero para los huelguistas de Puerto Rico.

Esta huelga debía y podía haber constituido un triunfo rotundo pare la clasé
obrera puertorriqueña* Loa huelguistas habían alcanzado tal nivel de desarrollo pro­
207 I Lucha y espa

— 8 -
letarto durante esta lucha oue estaban dispuestos a luchar hasta el final. Hasta la
victoria total», Durante nueve meses le hicieron frente a pl hambre, la necesidad eco­
nómica, la represión policiaca, las acusaciones criminales, las -trampas tendidas por
la enpresa, el juego irresponsable de los politices’ de la colonia, y de todo ésto sa­
lían cada día más templados, más dispuestos a luchar. . i.~ ¡
'. * *" ’

¿Cuáles fueron entonces los errores cometidos? ¿Quiénes fueron los responsables?

U\- El 27 do octubre, un día antes de que comenzará la huelga en Palmer,.. 100,(XX)


obreros de la G.E, en los Estados Unidos se fueron a la huelga. Esta duró tres meses f
y medio. Por tros meses y medio los patronos de la G.E. se enfrentaron a una enorme y .
militante-' huelga de los obreros en Estados Unidos y Puerto Rico. La G.E. se enfrenta- ;
ba al hecho de que sus enormes ganancias ( hechas a costa de la explotación de obreros
en escala internacional) se veían amenazadas por estas dos huelgas. ¿Por qué la IAM no
buscó apoyo y solidaridad de los huelguistas en Estados Unidos para los huelguistas en
Puerto Rico? Esto hubiese sido muy beneficioso para los huelguistas de ambos países. .
No fué-sino hasta que el PARTIDO LABORAL PROGRESISTA y la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUE­
ÑA organizaron un foro para los obreros de la G.E. en Chicr.go que algunos o—
breros en Estados Unidos supieron de la huelga en Puerto Rico.

La G.E. -es un monopolio internacional que explote obreros en todos los rincones ,
--
del 'mundo. Es lo tanto deseable que todos los obreros explorados por la G.E., nó---
por
importa su nacionalidad, unifiquen sus esfuerzos para derrotar eeta ongreído patrono.

Una de las ventajas que alegan tener las uniones internacionales para los obreros
puertorriqueños es el hecho de que estas uniones pertenecen a 1c ¿PL-CIO que cuenta
con oientos de miles de obreros uníonados en Estados Unidos, qie significan un apoyo
phra los obreros puertqrriqueños. ’ Pero la IAJJ, unión internacional, no hizo la menor
^i’ll'Sencia para adquirir apoyo efectivo de los obreros en huelga de la,G.E. en estados
Unidos, ni de los otros obreros que' cuenta en sus filas en los Estados Unidos y Puer­
to Rico. • •
Después que las uniones UIE y UE vendieron la huelga de los obreros de la G.E. en
Estados Unidos, miles de obreros que no estuvieron de .¿cuerdo con el convenio ven-ido
,uxw.Q;... de
de los falson líderes de las UIEjf UÉ, tomaron la iniciativa r_ decretar paros en di-
gerentes plantas de la G.E.: 3,500 en la planta de York),, 4,500 en
Schenactady (Mueva-York)
* Schenáctady
EKendale^íCincinatu), 12,000 "obreros en'Lodisville (Kentuckyí, etc. Pero ni ante esto
ixqvjxad
los obreros de la G.S. en-Palmer. ¿Por.qué0
la IAM se decidid a buscar solidaridad para 1-.
¿ o se atrevió la lAíí enfrentarse a los falsos líderes de la CIE y la UE que vendieron
la huelga en los Estados Unidos?'

<náa e p, a G‘E" tiene


más nn^P,,^ tlene aparta plantas en
de las dos plantas
aparta de en Palmer, por lo menos 17 plantes
Palmer, por
- T*n tuerto D<Rico. Los
*“_ T problemas-y sufrimientos de los obreros
z? ---viloa obreros en estas 17 plantas
n.V ‘ 03 m^3m°a que los de los obreros oue estaban en-huelga. Su experiencia con la su-
axP oración de la G.E. loX"hacía receptivos aesta huelga. ¿Por qué no buscó des-
0".Ee —■SrinciTtiq el liderato.de. la IAM- cualquier clase de apoyo de los obreros de la
les*d0D>laa D^antas no unionadas? Cualquiera podía ver que este era el- talón de -Rqui-
vení G’ 4 C*E/ en ^uerto ®Í.CP« La resistencia a reconocer la unión‘y a negociar el con-
ra 0 7 más aun, a reponer..a-los despedidos, se debía al miedo 'de que esta huelga fue-
’ecfa1' Q seguir por los obreros de las plantas no unificadas. ¿Por qué no apro-
ta3?° la esta debilidad de la empresa para fortalecer la posición de los huelguis-

#3- Uno de los mas grandes accionistas de la G.2. lo es la fexilia yanki Morgan,
quien es • también dueña de la Coca Cola. Les obreros ¿3 la Coca Cela Sottling Companj
ostuvúrdh en huelga por casi cinco meses. Esta huelga tuvo lugar al mismo tiempo que
la de la C.E, La IAB tampoco intentó hacer actividades conjuntas de cualquier tipo an-
Raymond Soto Dáviia | 208

. - 8 -
letario dudante esta lucha que estaban dispuestos a luchar hasta el final. Hasta la
victoria total4. Durante nueve meses le hicieron frente, a el hambre, la necesidad eco­
nómica, la represión policiaca, las acusaciones criminales, las trampas tendidas por
la empresa, el juego irresponsable de los políticos de ’ la oolónia, y de todo esto sa­
lían cada día más templados, nás dispuestos a luchar.

¿Cuáles fueron entonces los errores cotatidos? ¿Quiénes fueron los responsables?

#1- El 27 de octubre, un día antes de que comenzará la huelga en Palmer,.. 100,000


obreros de la G.E. en los Estados Unidos se fueron a la huelga. Esta duró tres meses
y medio. Por tres meses y medio los patronos de la G.E. se enfrentaron .a una enorme y u
militante-huelga de los obreros en Estados Unidos y Puerto Rico. La G.E. se enfrenta- ,
ba al hecho de que sus enormes^ ganancias ( hechas a costa de la explotación de obreros
en escala internacional) se veían amenazadas por estas dos huelgas. <,?or qué la IAM no
buscó apoyo y solidaridad de los huelguistas en Estados Unidos para los huelguistas en
Puerto Rico? Esto hubiese sido cuy beneficioso pera los huelguistas de ambos países.
No fué -sino hasta que el PARTIDO LABORAL PROGRESISTA y la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUE­
ÑA organizaron un foro para los obreros de la G.E. en Chic.-.go que algunos o-
breros en Estados Unidos supieron de la huelga en Puerto Rico.

-La G.E. es un monopolio internacional_-que explote obreros» en todos los rincones


del cundo. Es por lo tanto deseable que t__ — los
todos --------- explorados por la G.E., no-
L__ obreros
importa su nacionalidad, unifiquen sus esfuerzos para derrotar asta engreído patrono.

Una de las ventajas que alegan tener las uniones internacionales para los ob£e.ros
puertorriqueños es el hecho de caíe estas uniones pertenecen a la ¿PL-CIO que cuenta
cón cientos de miles de obreros unío'nados en Estados Unidos, q-ie significan-un apoyo
pÁra los obreros puertorriqueños.•Pero la TAH, unión internacional, no hizo la menor
diligencia para adquirir apoyo efectivo de los obreros en huelga de la,G.E. en Estados
Unidos, ni de los otros obreros que cuenta en sus filas en los Estados Unidos y Puer­
to Rico.

‘Después que las uniones UIE y UE


UL vendieron la huelga de los - ---------- --de--la G.E. en
« obreros 7
7 •* . < _______ J- —
astados Unidos, niles de obreros que no estuvieron de .acuerdo con el convenio vendido
de los falsos líderes de las UIE'jf UÉ, tonaron la iniciativa de decretar paros en di- di­
ferentes plantas de la G.E.: 3,500 en la planta
r de (Nueva-York), 4,5ÓO en
_j Schenactady (Nueva»York),
Eyendale_ICincinatti.), etc ~
), 12,000 obreros en’Xcüisville (Kentucky), etc. Pero ni ante esto,
" en-Palmer. ¿Por.qué?
lá IAM se decidid 71buscar solidaridad para los obreros de la ~G.E.
¿No se atrevió la lAlí
“ enfrentarse
* i a los falsos líderes de la UIE y la UE que vendieron
la huelga en los Estados Unidos?'

F2- La G.E. tiene aparte de las dos plantas r en Palmer, por lo menos 17 plantas
máa en Puerto Rico. Los problemas-y-sufrimientos áe los obreros en estas 17 plantas
son los mismos que los de los obreros oue estaban en~huelga. Su experiencia con la su-
per-éxpTótación de la G.E. lo^'hacía receñid.vos a esta huelga. ¿Por qué no buscó des-
1 J J_____ .___ _ T1U ... _____ - _________
dé el orinci-njo ©1 liderato (de. la IAM- cualquier clase de apoyo de 1loa obreros dé la
G7E. en las plantas no unionadas? Cual culera podía ver que este era ‘el''talón de Aqui­
las de la G.E. en Puerto Rico. La resistencia a reconocer la unión-“y a negociar el con­
venio y más aún, a reponer..á -los despedidos, se debía al miedo'de que esta huelga fue­
ra un ejemplo a seguir por los obreros de las plantas no unidnadas. ¿Por qué no apro­
vechó la IAK esta debilidad de la empresa para fortalecer la posición de los huelguis­
tas? . -' ';'

#3- Uno de los más grandes accionistas de la G.E. lo es la familia yanki Morgan,
quien es ■ también .dueña de la Coca Cola. Les obreros da la Ceca Cola Bottling Compás?
estuvtertfn en huelga por casi cinco meses. Esta huelga tuvo lugar al mismo tiempo que
la de la G.E, La IA5 tampoco intentó hacer actividades conjuntas de cualquier tipo en-
209 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

- 9 -

re'íos obreroa do la G.E. y de la Coca Co’.a con el fin de debilitar la resistencia


obreroo de
e'esté común enemigo.

#4- Otro grave orrór de la IAM fué permitir que las negociaciones se llevaran en
xan párté en ''Washington. Be esta manera los huelguistas no podían tener conocimiento
iario-y control sobro las negociaciones. Las negociaciones debieron llevarse a cabo
•n su totalidad en Puerto Rico. Si alguién tenía que vía jar, debían haber sido los em-
iresarios de la G.E. Si ellos pueden venir a explotar a los obreros puertorriqueños,
meden venir también a encararse con ellos en momentos de huelga.

Debió también mantenerse a los huelguistas al tanto de los pormenores de las ne-
fociaoió'nes; después'de todo lo que se estaba negociando' era el sudor Y el trabajo de
Loa:-húel¡jülstas.' Cuando- los obreros pedían información sobre los resultados de las ne-
jociaciónes, todolo'oue se les decía era: "Todo va bien". Paitaba preguntar: ¿Bien
jara quién? Esto, lógicamente, creaba dudas y minaba la unidad de los huelguistas pues­
to que se'estaba decidiendo el futuro de la huelga dn un ambiente dé secretividad y
oisterio. No había o no debía haber nada que los huelguistas no pudieran saber. Esto
fue negativo e innecesario.
I ■

'#5- La LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA estuvo dando todo su apbyo a los huelguis-
tas. Llavamos literatura para los obreros; nos propusimos roeper el aislamiento, que
sufría la huelga por cedió de nuestro oeriódico ‘.'Él Socialista" y. el de nuestro fra­
terno PARTIDO LABORAL PROGRESISTA, "Challenge-Desafío". Les aconsejamos durante la ,
huelga; aprendimos de ellos. Estuvimos con .ellos en la línea de piquetes dispuestos
a correr con ellos la misma suerte; Conseguimos apoyo de los obreros de la Hotpoint,
G.E. en Chicago. Repartidos una hoja en las comunidades de Palmer y Río Grande aler­
tando a los obreros y a las comunidades sobre ’el-.plan criminal que intentaba llevar
a cebo el patrono con el fin de llevar los obreros a-una provocación y conseguir con
esto destruir la huelga. Esta hoja desmovilizó los planes criminales de la conpañía.
Eué esto lo que provocó el intento, de asesinato a los camaradas dirigentes, Juan An->
tonio Corretjer y su esposa, Consuelo -Lee. de Corretjer.

La participación de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA y..la confianza que los ca­


maradas que iban a la linea de piquetes obtuvieron de. los obreros llego a tal punto
de desarrollo,.que la compañía-se dió cuenta-de lo indispensable de separar a los huel­
guistas de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA para poder lograr sus fines. La G.E. ini­
ció entonces su chantaje an ti-comunista y anti.-independenti.sta. Exigió que para que
continuasen las negociaciones, la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA tenía que retirarse
de los piquetes. Si el patrono exigía esto era para su beneficio y no para el bien de
los huelguistas. La excusa risible que utilizó la compañía fue .que se estaba haciendo
política con la huelga. Cualquiera puede percatarse de la hipocresía de dicho plantea­
miento.'

La G.E. hace más política que roda la política que haya pedido hacer la LIGA SO­
CIALISTA PUERTORRIQUEÑA en aus años de existencia. .Es por los intereses establecidos
en Indochina (incluyendo los de la G.E.) que el imperialismo yanki obliga a les hi­
jos de la clase obrera puertorriqueña y norteamericana a ir a catar obreros y campe­
sinos en Vietnan, Laos y Canboya.

Uno de los cayotes accionistas de la G.E. lo es Nelson Rockefeller quien es al


qísqo tieta.no gobernador de Hueva lorie.

La marina yanki está en Culebra junto -con el resto de las fuerzas arcadas que <
cupan nuestra nación, precisamente para proteger por la fuerza de las arcas las su-
perganancias que los monopolios yankis como la G.E. obtienen en puerto Rico a costa
de la super-explotación del obrero puertorriqueño. ,
Raymond Soto Dávila |2[o

- TO - ., .. . .

■ La G.E. en Puerto Rico tiene el visto -bueno del gobierno colonial y todas sus'.a-
gencias. Para qué la G.E. pueda obtener todas "las ganancias posibles el gobierno le e-
xime de pagar contribuciones, le construyen los edificios, donde radican, sus operacio­
nes, no le cobran el agua utilizada en la producción, le consiguen, quezal-^Icalde de
Visques se encargue de nue los obreros de Visques .nuúca- se organizarán''y cúando los o-
brerps se van a la huelga.le envía la fuerza de choque de-la Policía para reprimir a
los huelguistas. > .*• •••% r vT'
Si 'esto no es política, ¿qué es entonces? ',*•••
La diferencia entre la política de la G.E. y la de la LIGA-SOCIALISTA HJERTORRI-,.
QUENA es que la G.E. hace política anti-obrera v que el gobierno colprp.aí^]?atronal es
eu instrumento de opresión contra la clase obrora puertorriqueña, "iííentras >que le LI­
GA SOCIALISTA PUERTORZIQUERa ea el partido de la clase obrera,que'aspira'dirigir la .
clase obrera puertorriqueña en su lucha por la toma del poder poli tico V económico. Y
que espera preparar a la clase obrera para cue ejerza la dictadura de lia mayoría (los
trabajadores) sobre la minoría explotadora (los patronos).
Pero a la G.E. no le gustó que los huelguistas se acercaran a íps ^camaradas de la.
LIGA SOCIALISTA, y les escucharan. Esto no le convenía a la-G.E. Quis'ó'.por'esto imponer
sus condiciones, sus chantajes Demás esta decir que los huelguistas no procedieron con­
tra la LIGA SOCIALISTA, como hubiese desaado el patrono. Pero el liderato de la IAM ca­
yó en-.este juego anti-comunista y anti.-obrero. Permitió que la empresa impusiera las
regí es ‘ i cual era permitir que loa obreros lucharan como a la empresa le
la • lucha. iLo
conyenxa: ,en jél i^ren<io de lucha del patrono, donde éste tenía la seguridad de ganar.

.Tt'JíL*. •
#6- Otro errbr'Tué fomentar lae ilusiones sobre el Departamento•del Trabajo y la
Junta do Relaciones del Trabajo; éstos son organismos patronales y ninguno de éstos
iba a interferir verdaderamente a favor de los huelguistas. Se llego al punto de fo-
□itentar..ilusiones sobra la policía. Se le pedía, por ejemplo, a los huelguistas en car-
ta (dirigida &ci<35 obreros y a la comunidad, fechada el 5 de Junio y firmada por la IAM,
que’ en-caso
en. caso de. Lser molestados
decaer nolestados por la gerencia o .sus.representantes informaran inmedia-
tamente
:ento a la í po-li.cía. ;Increíble! ¿No fué la policía qüién estuvo atropellando y arres-
tando a- los
- l- ‘_ huelguistas en la. línea de piquetes? El superintendente de la policía, Luis
Torres
— Mássa, le. dijo .^a*
personalmente
o.vLiu.u'iu ve a uu grupo uc
a un róbreros,
de- yU4CXV a, ws»v«»vn»«» —se
"Ustedes a fastidiar".
— »van, —
(La palabra usada fué otra.')' ¿A quién se le ocurre esperar ayuda del enemigo?

- #7- El último verror fué eliminar la marcha de,solidaridad con los huelguistas or­
ganizada por, el movimiento obrero a-la cual hubieran asistido miles de obreros que
tenían grandes esperanzas en está huelga y sentían la necesidad de apoyarla. Este e-
vento pudo haber sido un gran factor en el debilitamiento de la resistencia patronal
y una. gyan-, oportunidad de conseguir él favor de toda la opinión pública. Una buena for­
ma 'de fortalecer la demanda de reposición total de los obreros despedidos. Pero la IAM
decidió cambiar esta gran oportunidad por las migajas ofrecidas por la:-G.E.
0OO0

'La Justificación que la/lAM dio al hecho de que 26 obreros quedaran en la cáí}.e
fué*'que estos obreros tuvieron. que sacrificarse por el bien, del resto de la matrícula,
que ía minoria debe sacrificarse pór el bien de- la mayoría'. Esto no fué cierto en es­
te caso. Este sacrificio nó beneficia a-los obreros de la G-E. Los obreros que se que­
daron en 1^ calle fueron precisamente los que la G.E. no quería en él taller por su
lucha a favor de sus'compañeros. Fueron los verdaderos líderes de la huelga quie’nes
quedaron en la calle. ;La G.E. adquirió,nediahte el convenio, el derecho a escoger los
26 obreros que tenían qué oometerae-a arbitraje, o lo que es lo mismo, quedarse en la
calle.
2ii | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962 1989

-11-
Aunque la IAK anunció que a los obreros que quedaron fuera se les daría ayuda e-
conóaica y se les buscaría otro1 empleo, esto no cambia la .situación, No la cambia por­
que éstos eran los 'dirigentes en el taller. Eran los elementos £as desarrollados y más
dedicados a luchar por los intereses de todos. Esto no se consigue fácilmente. Se re­
quiere largo tiempo de dedicación y esfuerzo para que surjan líderes oapaces de renun­
ciar al bienestar personal en aras del bienestar colectivo. Los líderes no se dan en
árboles. Es preciso, por lo tanto, saber preservarlos para futuras batallas. Esto si
que es en bien de lá mayoría. El que estos obreros quedaran fuera del taller no resul­
taré
tará en bien de la mayoría. Por el contrario'ésta quedará sin liderato por el momento.

¿ Qué Hacer ?

A pesar de los errores cometidos por la IAH, los obreros demostraron una gren ca
pacidad y decisión de lucha al mantenerse en huelga por nueve meses frente a con -o otes
adversas, frente a la violencia patronal y la intriga gubernamental. Egto es una mues­
tra' de lá gran fuerza potencial de la clase obrera.

C.E. son
' El sacrificio, valor y dedicación proletarios de los huelguistas de la G.E.
inspiración para la explotada y abusada clase obrera puertorriqueña.

La clase obrera aprende en la luoha; desarrolla a plenitud su conciencia de cla­


se •*—■
frente a ■la ____ 2___________________
realidad de la explotación y violencia patronal. Descubre en.la tosa de
conciencia'que la salida final a L_ —r-------------- - y las condiciones inhumanas a que le
la explotación
somete la burguesía es el socialismo y la dictadura del proletariado.

Los obreros de Palmer también han aprendido en esta lucha. Desde ahora
pararse para futuras batallas. Desde ahora deben crear comités
□lento huelgario en la Isla, de esta forma desarrollarán le adhesión del resto de la
clase obrera para sus futuras batallas.

Deben desde ahora empezar a acercarse a los obreros de las otras plantas de la
G.E. ’y ayudarlos a organizarse. Esto es una forma do aumentar sus uer^ns.

Se
se deben preparar comités que funcionen todos los días del año para brega- co
los problemas diarios del taller.

Y finalmente es necesario que no permitan que el anti-coaunisco y


dentismo patronal les distraiga la atención del verdadero enemigo, y «lalf-dr
necesario trazar una línea clara entre los enemigos y los amigos. : ay que
el anti-comunismo,. que sólo beneficia al patrono l-------- •

Resistan ahora y trenzan. Esta es lucha de clases. Y en la lucha de


clases ya la úhioa que puede vencer es la clase obrera. USTEDES. <
El marxismo-leninismo es una ciencia y la cieutla
ciencia no fallar-y
—-- rTcironDc i ~cr'<5ua"it-1~A
esta ciencia la que asegura que es la clase obrera,USTEDES,
vencerán. Los dueños de la General Electric, lo mismo que
los que son ahora dueños de todas las fábricas, son dueños dil P-0“( .. 1
RE. INÍ O¿-
sentó. Los obreros, USTEDES, son los dueños del porvenir . ’j -■
t^ta ra 1O h | DKA5
MIRIAM FUENTES, en hoja mienta
los obreros de la G.E. elub.de
junio de'1970, a nombre de;’”'
mi té Obrero de la LIGA, SOC. ■

TA PUERTORRIQUEÑA. -
Raymond Soio Dáviia | 212

LAS ELECCIONES DE 1976 EN PUERTO RICO


A muchos sorprendió el resultado de las elecciones de 1976
en Puerto Rico. Parecía que el Partido Popular tuviera el respaldo
del Departamento de Estado de los Estados Unidos y por tánto de­
bía oanar las elecciones del 2 de noviembre pasado. Después de
todo el liderato del Partido Popular siempre ha obedecido las ór­
denes de sus amos, los imperialistas yankis. Sin embargo los
yankis maniobraron para llevar al PNP a la gobernación colohiaj.
Para los que trataq de buscar, de atribuir el triunfo del PNP a
causas internas, es decir surgidas dentro del pueblo, por voluntad
del pueblo, les decimos que sueñan. Del seno del pueblo sólo
saldrá la lucha armada para hacer posible la revolución, la única
que realmente expresa la voluntad .del pueblo. Y ésta solo será
posible cuando el colaboracionismo electorero de los independen-
tlstas termine y se constituya en vanguardia del pueblo puertorri­
queño con la ideología de los trabajadores como guía. Mientras
tanto sueñan los que creen que los E. U. van a dejar que sus YC
presentantes directos en la colonia sean elegidos sin intervención
directa por parte de ellos. Sufren de amnesia quienes se olvidan
que los E.U no solamente ha intervenido en países africanos como
Angola, Guinea. Bissau' y Mosambique; y en países sémicoloniales
como todos los países latinoamericanos, Chile, el último de ello.'
para mencionar sólo los más recientes, y asiáticos como Vietnam.
baos, Camboya y Tailandia, sino que ha intervenido directamente
en Italia para evitar que el Partido Comunista (revisionista) Italia ­
no asuma el gobierno en dicho país.Si esto sucede en Italia, una
de las potencias capitalistas del mundo, no sabemos cómo al­
guien que tengp dos dedos de frente pueda pensar que en la co­
lonia militar-industrial que es Puerto Rico, los puertorriqueños pue­
dan elegir libremente sus mayordomos coloniales. En un país
donde el’ 85 por ciento de la economía está en manos ypnkis,’ en I
donde el 12 por ciento de la tierra cultivable puertorriqueña utili­ I
zada como base de operaciones de las furzas armadas de los E. U..
base de operaciones que incluye desde la base atómica de Roose-
velt Roads en Ceiba y el comando de proyectiles dirigidos que
está en El Yunque, hasta los llamados bosques forestales que en
la práctica no son otra cosa que campos de entrenamiento contra­
guerrilla. Estos bosques eran antes bosques nacionales del De­
partamento de Agricultura Federal, pero luego han sido transferido
a otra agencia federal como lo es el ELA, pero su uso sigue siendo
el mismo. es decir para entrenar las fuerzas armadas yankis. En­
tre estos bosques se encuentran los bosques de Carite en la ju-

— 4
213 Lu< II \ Y ESPACIO 01 LA I.IGA SOCIALISTA Pül RIORRIQl I ÑA: 1962-1989

risdicclón de Ciales-Orocovis-Villalba-Adiuntas-Jayuya. En el cos­


que de Toro Negro la Guardia Nacional yankl establecida en i
to Rico, en conjunto con la Fuerza de Choque de la Policía co mia!
y un batallón de rangers (léase asesinos) traídos de Ir bat e de
las Fuerzas Armadas yankis en la zona del Canal de Panamá, es­
tuvieron entrenándose durante todo el verano pasado. ¡Tamañae
contribución de los puertorriqueños y sus bosques a la causa pa­
nameña! Los entrenamientos incluyeron saltos nocturnos en pa­
racaídas. (Ojos y oídos Ornar Torrijos, la bestia acecha).
Los que creen que los puertorriqueños pueden elegir mayor­
domos por cuenta propia olvidan; el establecimiento de grandes
industrias pesadas y semipesadas que han venido estableciéndose
aquí durante los últimos años. Bastaría con mencionar las refine­
rías de petróleo establecidas en Guayanllla y Cataño para que nos
demos cuenta que los yankis nunca le confiaran ni al más fiel de
sus cipayos la administración de la colonia y mucho menos con­
fiaran al pueblo su elección. A esta importante Industria tenemos
que añadirles las grandes instalaciones de la industria química que
ya llegan a 25 y van desde la Ireco Corporation, fabricantes de ex­
plosivos ubicada en Manatí, hasta la Ortho Pharmaceuticals, fabri­
cantes de pastillas anticonceptivas en Dorado pasando .por la Du-
pont que dice fabricar tintes para pinturas en Manatí, pero que fuo
una de las principales productoras de bombas de napalm; que des­
pués de ser bendecidas por la Iglesia Católica Americana eran arro­
jadas sobre la población civil del interior de Vietnm destruyendo
toda la vida que encontraba a su paso con su gelatina incendiaria.
Dicho sea de paso esta industria ya ha causado estragos en el Río
Manatí al arrojar sus desperdicios en éste. Esto tipo de industria
requiere una gran inversión de dinero y unas complicadas y deli­
cadas instalaciones que dificulta el traslado de ésta a territorio •
yanki cuando la. revolución puertorriqueña tenga fuerza suficiente
para arrojar los explotadores de nuestro suelo. Esta industria con­
trasta con las llamadas fábricas de bolsillos, industria liviana pri­
mera en establecerse aquí, y que los patronos yankis quemaban y
cobraban a las compañías aseguradoras cuando no les iba bien el
negocio. Esta industria no podría mudarse a los E. U. sin incurrir
en enormes gastos para reducir la contaminación de sus plantas
y para proveerles la enorme cantidad de$gua que éstas necesitan,
y que aquí obtienen gratis, gracias al soborno de las agencias y
funcionarios que dicen velar por la preservación del ambiente. El
incentivo mayor que tienen estas industrias para establecerse aquí
es el que no tendrán que preocuparse mucho por la destrucción
del ambiente que causen, pues simpré encontraran algún irrespon-

— 5 —
Raymond Soto Dávila | 214

sable colono quo por unas cuantas pesetas permitirá y justificará


la destrucción de nuestro país. A todo esto hay que añadirle la
mano de obra barata y éntrenada que el gobierno colonial les ofre-'
/ce. La proliferación de colegios regionales y escuelas técnicas
vocacionales obedece a esto. Otra razón para los yankis interve­
nir en el proceso electorero es la existencia de enormes yacimien­
tos de minerales en nuestro subsuelo y en la plataforma marítima
de Puerto Rico. Estos minerales van desde el cobre en la reglón
central de Lares-Utuado-Adjuntas, el nickel y la bauxita en Cabo
Rojo y Mayagüez, que unidos a la posible existencia de petróleo
en la Costa Norte forman un atractivo muy especial para los mo­
nopolios banqueros de Wall Street, su mano derecha los militares
del Pentágono, y los suplidores de material de destrucción para
la guerra que son los grandes monopolios Industriales’norteameri­
canos. El petróleo se supone debe encontrarse en algún punto
de la Costa Norte entre Isla Verde y Manatí,, posiblemente frente
a la Laguna Tortuguero en Vega Baja. Debemos de tener en cuen­
ta que el precio del cobre subirá como la espuma durante los pró­
ximos anos de acuerdo con los pronósticos que han hecho los
economistas, y que los E. U. no tienen nickel ni bauxita, materiales
que son muy necesarios para la construcción de aviones y moto­
res por ser el nickel muy liviano y la bauxita muy resistente. La
dependencia de E. U. con respecto al nickel es tal que está en la
lista de materiales estratégicos y está prohibida la venta de éste
a países extranjeros. Como si todo lo antes dicho no fuera su­
ficiente tenemos que Puérto Rico constituye el cuarto mercado más
grande del hemisferio para el comercio exterior de los E. U. be­
bemos tener en cunta que la mayoría de los productos que nos
obligan a comprar los yanquis a través de su enorme maquinaria
propagandística podrían ser conseguido más baratos y de una me­
jor calidad ert cualquier mercado capitalista.
Los altos costos de producción de la industria yanki lo ponen
en desventaja frente a la industria japonesa, alemana, francesa,
etc., etc.)
Leios de ser los puertorrriqueños los que se morirían de ham­
bre sí terminara la intervención Imperialista de los E. U. en Puer­
to Rico, serían los yankis los que se verían en aprietos para poder
colocar sus productos en otros mercados, a no ser que .hagan co­
mo han hecho en el pasado en que han recorrido el giobo piso­
teando soberanías, obligando al mundo a comprarles y venderles
a punta de bayoneta, con el agravante que el mundo de hoy no es
el que fue ayer y ya ellos no pueden seguir matando y saqueando
sin que haya fuerzas que los detengan desde dentro como desde

— 6 —
2¡5 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueñ a: i962 -1989

fuera de su territorio nacional. Todo lo que aquí se ha expuesto


es para dejar claro en la colonia militar industrial que es hoy
Puerto Rico, los yankis no van a dejar que los puertorriqueños de
cidan nada importante sin la aprobación previa por parte de ellos.
Dentro de muy poco Puerto Rico tendrá desde el petróleo qye pro­
veerá el combustible y los lubricantes para mover su maquinarla
de guerra (gracias a las refinerías ya establecidas aquí) hasta as­
tilleros y hangares para la reparación y construcción de barcos y
de aviones. Recientemente se ha anunciado en los medios noti­
ciosos que el gobierno federal se propone subsidiar la construc­
ción en Guánica y Ponce, que junto a la ya hace tiempo
anunciada planta siderúrgica en Guayama nos ayudan a tener cla­
ro la importancia militar de dichos proyectos, a no ser que algún
sabihondo colonial alegue que el propósito de este proyecto es
proveerle reparaciones y mantenimiento necesario a nuestras mal­
trechas navieras. Con este cuadro de fondo ya podemos tener
una idea de por qué las elecciones en Puerto Rico las decide Wr
shington y no los puertorriqueños, si las eleccciones en Puerto Ri­
co pudieran decidir algo en favor de los puertorriqueños sencilla­
mente no permitirían que se celebrasem. En un proyecto de la mag­
nitud y la envergadura de Puerto Rico para la política yanki, único
de su tipo en la historia, ellos no van a dejar que sucedan cosas
1
que pueden acercar su derrota que podría fácilmente con­
vertirse en el desmembramiento del estado federal. En estos mo­
mentos Puerto Rico es el eslabón más débil del imperialismo a
nivel mundial y ellos mejor que nadie tratarán de que dicho esla­
bón no se rompa. También explica por qué hay líderes dentro del
independentismo que le han ofrecido pagarle a los yankis sus in­
versiones si les conceden la independencia de papel. Conociendo
lo difícil y dura que ha sido y será la lucha por la independencia
de Puerto Rico, reflejan su impotencia de clase y falta de confianza
en el pueblo para que éste genere desde su seno la fuerza capaz de
librarlo de la explotación que sufre. Ante esta situación prefie­
ren hacer toda clase de maromas ideológicas, ejercicios teóricos
y cabriolas insinuantes para que el raquítico pensamiento liberal
norteamericano se fije en ellos y los considere como una posible
salida fácil de la difícil lucha a muerte entre el imperialismo y el
pueblo de Puerto Rico. De esa manera el reformismo tambalea
y obstruye el desarrollo de las fuerzas revolucionarias que si pue­
den dirigir con paso firme la lucha por la liberación de Puerto Ri­
co y por el socialismo. Habiendo explicado por qué no es posible
que los puertorriqueños elijan sus gobernadores de embuste que
residen en Fortaleza nos corresponde pasar a explicar cómo fue

— 7—
Raymond Soto Dávila | 216

que los yankis movieron los resortes para llevar el PNP a la gober-
nación y a controlar ambas -cámaras coloniales.
Básicamente se debió a una campaña antlcomunista muy bien
disfrazada y éscondida por el terror religioso. Alrededor de esta
campaña han podido converger todas las fuerzas reaccionarias de
la sociedad puertorriqueña y de la humanidad en alianza con los
nunca firmes y siempre vacilantes liberalotes del país. La Igle­
sia Católica Americana en Puerto Rico fue la principal vía para oa.
nalizar esta campaña, pero no estuvo sola, estando también todas
las iglesias protestantes y su última versión los Cristo Viene y
Catacumbas. También participó un grupo de jóvenes depravados,
amorales que distribuyeron literatura religiosa del tipo terrorismo
espiritual y que se hacen llamar los Hijos dé Dios. A éstos se les
veía con frecuencia en las intersecciones y avenidas; las jóvenes
a veces semidesnudas. En esta campaña no podemos pasar por
alto el trabajo del semanario oficial de la Iglesia Católica Ameri­
cana en Puerto Rico,-llamado “El Visitóte” periódico abiertamente
anexionista y reaccionario, que debe su nombré y su formato al
periódico yankl "The Visitor" y cuyo director en Puerto Rico es el
conocido anexionista a ultranza y directoría los Cursillos de Cris­
tiandad de la Iglesia Católica Americana en Puerto Rico y que se
llama Leslié Highley. Otra campaña de la Iglesia Católica fue la
llamada “Cruzada de Oración en Familia”, que básicamente es una
campaña basada en el miedo espiritual, que infunde un gran temor
en el pueblo. Esta campaña ha sido llevada a todos los rincones del
país e incluye una serie de películas. Si tomamos en cuenta que
estas son las únicas películas que muchos católicos ven y el úni­
co perlódido que leen se darán cuenta de la importancia de estos
medios de propaganda para deformar la conciencia y para influir
en las decisiones de los que leen y ven estas películas. Si re­
cordamos que la movilización para cierre de campaña del PNP se
llamó, “El Encuentro de la Familia Puertorriqueña", podemos ver
la alianza hasta én sus consignas. Desde Gorrada del Río hacia
abaio hasta los presidentes de barrio, casi todo el liderato cató­
lico es a la vez liderato del PNP. Debemos recordar también que
la Iglesia Testigos de Jehová a pesar que dice que no votó, celebró
una serle de conferencias que duraron más de una. semana en los
Parques Juan Ramón Loubriel de Bayamón e Isidoro García
de Mayaguez en que condenada al nacionalismo como el
causante de todos los males que sufre hoy la huma-
nidad. Esta Iglesia mantiene -una cantidad de personas di­
fundiendo su .propaganda casa por casa. Casi cualquier día de
la sémana podemos encontrarnos con algunos de sus propagandis­
tas én casi cualquier comunidad de trabajadores. Son conocidos

— 8 —
2i7 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puer'iop.rk -i i ñv 1962-1989

Jos estrechos lazos do esta seota con la compañía constructora


Daniel Constructlon. todos los ejecutivos de esta compañía en
Puerto Rico son ex-oficlales-de ¡as Fuerzas Armadas de los E.U.
y están organizados en la misma forma que se organiza una’unidad '
militar para combate. También llama la atención esta cómpañía
por ser ésta la única que ha construido las facllldade's de las plan­
tas químicas en Puerto Rico y sigue obteniendo las subastas de
cuanto proyecto importante de construcción surge en Puerto Rico.
Junto a la campaña de miedo de las iglesias tenemos el cine, Ja
radio, la televisión y los periódicos. En el cine vamos a mencio­
nar la película, Tiburón y Terremoto. # Estas obligan a la gente a
pensar en las catástrofes bíblicas y que coaccionan la forma de*
pensar y actuar de los trabajadores al extremo que ios hace sen­
tir culpables y egoístas frente a los’ patronos, por sus Justas de­
mandas salariales y de mejores condiciones de trabajo. A tra­
vés de Ja radio nos llega una de las campanas que más miedo in­
funde a los que la oyen. Hay un evangelista que dicho sea ‘do
paso tiene prohibido entrar en Venezuela por que fue sorprendido
in fraganti tratando de devolverle la vista a unos ciegos que a pe­
sar de tener muy buena vista no pudieron ver a los oficiales de la
policía venezolana que los pusieron de patitas en la cárcel por
complicidad para cometer fraude. Dicho farsante cuenta con una.
emisora de radio propia a través de la cual realiza “curaciones”
y fomenta el terror espiritual. Entre los periódicos debemos de
señalar aquéllos que siempre tienen alguna noticia de alguna ima­
gen que llora, o algún ñame o batatas que gotea sangre por haber
sido sacado en semana santa. Recordemos también aquellos set
dos reportajes sobre los vampiros de Moca o los platillos volado­
res de Adjuntas. A esto tenemos que añadir el despliegue grá­
fico que se le da a los crímenes que a diario ocurren en esta so­
ciedad, sociedad que está basada en la violencia y el crimen sis­
temático para poder neutralizar la violencia de los que no aceptan
la explotación y se rebelan en diversas formas contra ésta. • Lo
último en sectas es el grupo que cree en los seres extraterres­
tres, que niega la lucha de clases y la evolución de las especie'
negándole a la sociedad esclavista las imponentes obras de arqui­
tecturas de la antigüedad, como las pirámides y atribuyéndoles és­
tas a seres extraterrestres. Creyeron que si encontraban vida en
el planeta Marte tendrían un argumento para sostener que la vida
en Marte no evolucionó de la misma forma que en la tierra, y que
por tanto la teoría de evolución de las especies es Incorrecta. De­
más está decir que este argumento es uno de tipo mecanlcista
porque aplicar una teoría relativa a la evolución de las especies

— 9 —
RaymowiSoto Dávii.a | 218

en la tierra y trata de hacer de ésta una teoría absoluta de aplica­


ción a todo el universo. Fracasaron estrepitosamente.
Hasta aquí hemos explicado cómo se instrumentó en Puerto
Rico esta campaña de miedo para llevar el PNP a la jefatura co­
lonial. Nos falta por señalar cómo las agencias represivas nor­
teamericanas como el FBI y la CIA les suministraron información
a los líderes del PNP para que éstos hicieran públicos los escán­
dalos y desmanes administrativos de los populares en las agen­
cias coloniales del gobierno, dándose el caso, en que estas agen­
cias represivas se robaron informes de la oficina del contralor que
todavía no eran informes oficiales, pues eran borradores de infor­
mes que posiblemente no se hubieran dado a conocer hasta des­
pués de las elecciones y por tanto no hubieran tenido peso polí-
tico en las elecciones. Estas agencias, el FBI y la CIA han lo­
grado penetrar toda la organización interna del PPD á través de
los jóvenes voluntarios de VESPRA y los llamados Cuerpos de
Paz organizados por el gobierno yanki en Puerto Rico y que se de­
dican a neutralizar y canalizar ol descontento y al espionaje polí­
tico eñ las comunidades donde operan. En el arrabal Cantera de
Ponce, estos jóvenes adscritos a VESPRA se dedicaron a vigilar
y espiar al local de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA (LSP)
en dicho arrabal, como resultado poco tiempo después fueron
arrestados varios miembros de la organización y después de fa­
bricarles sendos casos fueron puestos en la cárcel sin fianza, lle-
(fundi-gano a cumplir hasta días de cárcel antes que se le permi­
tiera salir. Algunos de estos casos están pendientes de apela­
ción en las cortes después que varios de ios acusados fueran sen­
tenciados a más de 400 años de cárcel. Esto es uno de los casos
más notables pero hay más. La manipulación de estos proara-
mas por parte de las agencias represivas le quitan autonomía a los
municipios y le dan la oportunidad de mantener una enorme red de
espionaje que pone en peligro toda la comunidad. VESPRA, CUER­
POS DE PAZ, el Plan Z son sólo algunos de los programas que sos­
tienen los Imperialistas yankis en Puerto Rico y que funcionan in­
dependientemente de los municipios y son administrados directa­
mente por ellos. A los que no entienden como es que el PNP de
ideología tan antipuertorriqueña y anexionista ha logrado penetrar
los pueblos del centro de Puerto Rico, donde hay un fuerte senti­
miento nacionalista y que tradicionalmente votaban por el PPD les

I diremos que es exactamente ahí donde meior están organizadas


los organismos como VESPRA y la Iglesia Católica y donde toda­
vía quedan grandes vestigios feudales.
En fin podemos decir que las elecciones de 1976 las ganó el

— 10 —
2¡9 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

imperialismo y las perdió el pueblo como siempre, pero esta vez


a base de una campaña tan anticomunista y reaccionaría que a
nivel mundial ha ubicado a gobiernos nada progresistas como el de
Méjico y República Dominicana en la izquierda y que en- Puerto
Rico han ubicado el PPD en la Izquierda a pesar de su largo his­
torial represivo contra las fuerzas Independentistas y obreras. És­
ta alianza de fuerzas reaccionarlas pretende crear gobiernos a ima­
gen y semejanza del de Pinochet en Chile y terminar con la fuer­
za de la democracia burguesa. Los máximos exponentes de esta
campaña antícomunista en Puerto Rico no son los pichones de
fascistas de la Asociación de la Libre Empresa, y sí la gusanera
cubana al servicio de las agencias represivas yankis que llevaq
la m^s abarcadora campaña anfl-comunista y anti-intependentlsta
y que vr desde la colección de bombas contra los independentis-
tas como en Mayagüez en que Junto con la derecha de la derecha
puertorriqueña asesinaron a dos independentistas puertorriqueños,
hasta su más reciente fechoría contra el avión de la Agencia Cu­
bana de Aviación en que murieron 73 personas y el asesinato del
ex-embajador de Chile en E:U., Alfonso Leteriel. " La agitación an­
ticomunista por parte de los cubanos, es una campaña de 24 ho-.
ras diarias.
El partido político a través del cual los imperialistas canaliza­
ron su política en Puerto Rico fue el PNP, que por su origen y com­
posición podemos decir que es el Partido Acción Cristiana, nombre
que llevo el primer jntento del Imperialismo de romper él dorttrol
numérico que tenía el Partido Popular sobre el electorado puer­
torriqueño y que elección tras elección apabullaba el asimillsmo
político puertorriqueño representado entonces por el viejo,PER. Si
bien fallaron en el 1964, pues su Partido Acción Cristiana solo
obtuvo 26,000 • votos, suma ridicula que obviamente no paso'de
ser una pequeña acción católica dirigida por • el obispo • Mac-
Manus de Ponce. Dicha maniobra politiquera por poco divide la
Iglesia Católica Americana en P. R. en dos. Para calmar un poco
los ánimos de los católicos puertorriqueños se sustituyeron los
obispos yankis por obispos puertorriqueños pero no menos lea­
les a sus amos los imperialistas yankis.—’------------- --------------------------
La enorme campaña en favor del voto mixto llevada a cabo
por los liberalotes anexionistas es otra maníogra de los imperia­
lista, el Partido Demócrata y el Partido Republicano. Esto es un
paso hacia la estadidad pues va dirigido a la domesticación del
pensamiento político puertorriqueño como dijera Juan Antonio Co-
rretjer recientemente.
Nos queda por explicar porque de esta maniobra imperlalis-

— 11 —
Rwmosd Soto D.ávila | 220

ta que ha llevado a despreciar al Partido Popular y al gobernador


Hernández Colón cuando este siempre obedeció la política contra
P. R. y los puertorriqueños ordenada por ellos. La razón principal
es que el capitalismo se enfrenta a la peor crisis de su existen­
cia y va en pos de asumir su forma mas cruel de gobierno que
es la dictadura fascista echando a un lado el disfraz de la demo­
cracia representativa. Esto se le hace necesario pues la política
de coexistencia pacífica va tocando a su fin y lo que avanza a
pasos gigantes es el enfrentamiento con los países socialistas
G y los países capitalistas del tercer mundo que se niegan a seguir­
les vendiendo sus materias primas a los precios ridículos que ellos
estaban acostumbrados a pagar. El mejor ejemplo de esto es ac­
tualmente la creación por parte de los países exportadores de
petróleo de una agencia para fijar los precios del petróleo y re­
gular el mercado de este. Demás esta señajar la importancia que
tiene esto para la política imperialista de los E. U. Y de. las de­
mas potencias capitalistas* del mundo. Detrás de OPEP, (Organi­
zación de los Países Exportadores de Petróleo) vendrán otras
asociaciones de países productores de materias primas y que le
causaran más problemas a las potencias capitalistas. Para los
países socialistas, para los países capitalistas en desarrollo y para
buena parte de la clase trabajadora de los países Imperialista
la explotación de estos por parte de los Imperialistas se les hace
ya casi Insostenible. No hay forma de sostener teóricamente Iq
explotación a través de los medios ordinarios de comunicación
como la radio, prensa y televisión. Dicho medios de comunicación
empiezan a funcionar en contra de los que los crearon para be­
neficio propio y ya son muchos los trabajadores que se ríen
cuándo aparece alguien por uno de estos medios diciendoles “que
Is patronos tienen derecho a vivir mejor porque trabajan mas que
los obreros y no botan como estos lo que se ganan en juegos
y en bebelatas”. Tratar de sostener las bases teóricas del capi­
talismo frente al pueblo trabajador es motivo de risas y chistes,
ly más aún cuando el pueblo sabe que gran parte de los males
Jque sufre se los debe a los patronos y su sistema' de explota­
ción. Otra cosa es que los medios de comunicación masiva ordi­
narios, como todas las instituciones burguesas coloniales están
desacreditándose^ a pasos agigantados. Teoóricamente Indefendi­
ble, en la práctica estancado y en deterioro, mientras la ideología
socialista avanza, tiene que reagrupar a todas las fuerzas reaccio­
narias de la humanidad para hacer frente al avance del socialismo.
E. U. 'quiere establecer regímenes fascistas en America Latina: i
Algunas de estas fuerzas como la Iglesia, fueron sus opresores

— 12 —
22i | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

durante él feudalismo y sobre ellos pa^ó victoriosamente, durante


la étapa ascendente del capitalismo, es decir, en lo que es su ya
muerta expresión revolucionarla. Acorralados por sus propias con­
tradicciones los imperialistas yankis llevan a cabo el flnancia-
miento de la más grande campaña anticomunista, derechista, fas­
cista, reaccionaría y antihumana que pocas veces se ha vieto.
Para llevar a cabo esta campaña cuentan con todas las Iglesias,
e instituciones cívicas que' por * mucho' tiempo han estado tra­
tando de asociar el fin del capitalismo con el fin del mundo físico
en que vivimos. A través (fe la prédica dél miedo sistemático y
organizado hacen .que el pueblo se sumerja dentro de un ínmq-
vilismo derrotista que lo lleva a dudar de su capacidad para re­
solver sus problemas y aceptar los males que lo afligen como ma­
les irremedaibles inherentes a la sociedad humana. Desposeído
el hombre de voluntad para luchar y vencer opta por tomar siem­
pre las decisiones más fáciles y menos metódicas posibles, con­
fiando sú suerte a Ja sociedad capitalista a ver si se poga con
algo, como cuando juega el dinero de la compra a ver si se pega
y compra la casita ansiada por mucho tiempo. De esta manera es­
tas instituciones van taladrando la conciencia de los trabajadores,
llevándolos a posiciones de camplacencia y conformismo que solo
benefician a los patronos explotadores que sí se aprovechan de
de esta situación pues saben que el fin del capitalismo llegara
solo cuando los trabajadores cobren conciencia de clase y si
estos llegan a la conclusión de que da igual luchar y no luchar
por que el fin del mundo físico esta cerca {los patronos sí man­
tendrán el mundo para ellos por mucho tiempo! Esto se refleja
cuando uno habla con alguna gente que le atribuyen las catástro­
fes naturales como los terremotos a la Ira de dios y permane­
cen inmóviles cuando la ira de los capitalistas causa catástrofes
como los 150 millones de muertos que dejó el Naclsmo o los mi­
llares de muertos que causó los E.U. al arrojar sus bombas ató­
micas viciosamente sobre Hiroshima y. NagasakL
Las fuerzas que llevaron a Cárter a la presidencia de los
E. U. son las mismas que llevaron el PNP en P. R. a la goberna­
ción y que mantienen un cordón umbilical muy conocido a tra­
vés de los medios Informativos. Son. las mismas que se aliaron
con Hitler, Mussolini, Franco y su más reciente creación Pino-
chet en Chile.
Ahora bien, el solo hecho que los yankis hayan tenido quedis-
frazar a un espécimen colonial de puertorriqueño y echarlo a an­
dar en una veguita bebiendo aoua en cacharros oor los camoos
de Puerto Rico, refleja que hasta para ser mayordomo colonia! hay

— 13 —
RAYMüNnSoiO DáVII \ | 222

que disfrasarse ,de. puertorriqueño y ubicarse dentro de la rea­


lidad que'es la-nación puertorriqueña. Esto de por'sí sólo refleja
que hoy.déspu*^; de 78 anos de coloniaie hay en P. R. una nación
más solida que da propia yanki no empece la agresión y la opre­
sión qultural por parte de estos.
Como derrota es también el que ya no' puedan mantener la
explotación y la hegemonía en él mundo pbr Vnétodos convencio­
nales y racionales y tienen que recurrir a irreácionales como lo
son el miedo sistematizado, la tortura mental, y el terror espiri­
tual típicos de la edad media. Nó hay duda que esta alianza a nivel
mundial contra el socialismo y los países en desrrollo solo lo­
grará prolongar un poquito su extinción pero causará el mayor da­
ño posible a la humanidad, antes que se derrote militarmente.
Para eso hay que prepararse y de igual manqra que los explo­
tadores se han unido para combatirnos, nosotros contamos con
grandes reservas que juntas y unidas serán sin duda una fuer­
za inderrotable ¡Organízate militarmente para combatir los ene­
migos de la humanidad! La victoria será nuestra! El pasado ja­
más podrá derrotar el presente y construir para si un futuro.

F I N

30 DE NOVIEMBRE DE. 1976 — CIALES, PUERTO RICO

— 14 —
22 5 I Li < ha y i spai io ni. la 1-IlaS.x i ai kia Pui kiorriql i ña: 1962-1989

JUICIO DEL GRAN JURADO


Por Carlos NOYA

El gran jurado es la forma de terrorismo judicial que el


imperialismo utiliza para encarcelar militantes de la lucha por
la independencia por el simple deseo de hacerlo. El gran jurado,
coro bien lo ha descrito Corretjer, es la sala de recibimiento
del presidio, un mecanismo ilegal dentro de su ilegal legalidad.
Es el brazo del FBI, más específicamente del"Task For cecompue s to
principalmente por agentes de la CIA, el FBI y el servicio de
espionaje de la Marina de Guerra, para este propósito y otros
más :
-conseguir infornacion sobre militantes y organizaciones mediante
la intimidación,la amenaza del encarcelamiento.
-hostigar y/o amedrentar militantes y organizaciones mediante el
encarcelamiento o la amenaza de ésto,buscando llevar a alaunas
organizaciones a asumir posiciones cada vez mas reformistas.
-reclutar informantes para plantarlos en, o que estén ya dentro
de organizaciones, para sabotear el trabajo de dichas organizacio­
nes y ayudar a fabricar cargos contra su liderato.
-cono ya expresamos y ahora abundamos,encarcelar militantes cuyo
trabajo de organización,propaganda y agitación _etS e-fec.riyp y de
carácter antiimperialista.
- y,de importancia clave, tantear la actitud de militantes y orga­
nizaciones con respecto a este cuerpo, que es, en fin, un tanteo
a la actitud general de la lucha para propósitos que explicaremos
luego,casi al final de la exposición.

En los Estados Unidos, el gran jurado ha sido utilizado en


contra del movimiento independentista puertorriqueño, de lo que
hablaremos ampliamente más adelante, y en contra del noviriento
chicano-mexicano, el movimiento negro, el movimiento indio, el movi­
miento contra la guerra de Vietnar, el movimiento sindical y el
movimiento feminista. En el presente es utilizado contra el movi­
miento negro y el movimiento antinperialista blanco.

En Puerto Rico el gran jurado fue utilizado por primera vez


en contra del movimiento independentista cuando en abril de 1936
citaron a la totalidad de la dirección del Partido Nacionalista, a
su Junta Nacional y a sus Juntas Municipales, a comparecer y entre­
gar las actas del Partido. La información contenida en dichas actas
era de público conocimiento, pero entregarlas era someterse y así
lo entendieron Albizu y Corretjer. El día de la comparecencia,
según determinación de ambos, Corretjer, entonces Secretario General
del Partido, informó en corte que los documentos estaban en su ooder
Y que no los entregaría a la corte a la cual, por extranjera,no le
reconocía jurisdicción. Como era de esperar,Corretjer fue encarce­
lado , condenado a un año de prisión cor desacato.

El proceso que llevó al establecimiento de dicho eran jurado


fue el ajusticiarlento del coronel Rices en febrero de 1936 provocado
ésto tor la masacre de cuatro nacionalistas cuatro -"eses antes. Las
lecciones que se derivan de este hecho son dos- 1? rri~cra ¿e estas
Raymond Soto Dávii.a | 224

-3-
es que la resistencia al gran jurado es, en sí, una victoria. En este
caso específico, la posiciónasunida por Corretjer evitó cue en esos momen­
tos decenas de líderes del Partido Nacionalista fueran presos. La segunda
lección es la siguiente: el eran jurado surge como- instrumento de terro­
rismo judicial para castigar los castigos, en palabras claras, para
castigar la autodefensa del pueblo del terrorismo oficial, de los asesi­
natos de los militantes por la independencia cometidos cor órdenes del
gobierno imperialista de los Estados Unidos. Además de estas des lecciones
se estableció un precedente: la no-colaboración es un todo: no se puede
dividir entre testimonio y evidencia física que ellos tienen o pueden
conseguir por otros redios.

Ténganos todo ésto en cuenta cuando analizenos las otras experiencies.

1977 . un número de compañeros revolucionarios puertorriqueños,


En el 1977.
chicano-rexicanos y un? compañera venezolana fueron presos en los Estados
Unidos por negarse a colaborar ccn un gran jurado que investigaba a las
FALll específicamente el bombardeo de la Taberna Fraunces, hecho éste
provocado por una bombe que elementos de le gusanera bajo órdenes de 1*
CIA colocaron en un restaurante de ’layaguez el Día de Restos en el 1975,
horas antes de 1» celebración de un acto indepencientista ,y que causó la
muerte de dos obreros puertorriqueños e hirió a nuches más, incluyendo
a un niño. Los corpareros presos, once en total, entre los que estaban
José López hoy coordinador nacional del •imviriento de Liberación Nacional
organización hermana de la Liga Socialista Puertorriqueña, Pedro Archuletn,
chiceno-rexiceno,Ricardo Romero,hoy coordinador de la sección chicano-
.ocxicana del !1LN y los hermanos Julio,Luis y Andrés Rosado, de los cualc-
Julio es coordinador del área este de los Estados Unidos del í’LtJ , deci­
tieron convertir lo que parecía une. derrota, su encarcelamiento, en un»
victoria política y organizativa.

Efectivamente, manteniendo sus principios políticos de no-colabora-


;ión, y de apoyo to'.al a la independencia y el socialismo para Puerto
-.ico y reconociendo únicamente a la lucha, armada come el medio nara
lograrlo, les compañeros solidificaren en la práctica los lazos de soli­
daridad puertorriqueña-chiceno-rexicann y pasaron de ser un grupo de
.'ilitantes con una línea política revolucionaria, a crcaniza.r v organi­
zarse en un Comité Nacional Contra la Represión, partes del cual se
consolidaron en el !1Lt: y parte del cual existe aún er. su estado original
en el suroeste de Estados Unidos, be este periodo surgieron también
las semillas que 1-ego ce constituyeron en el Comité Nacional Pro
Libertad de los Prisioneros de Guerra Puertorriqueños.

Y nuy inportante, el MLN , es, de hecho, le organización que lleva


¡•delante le lucha pública por la independenci a y el socialismo para
Puerto Rico en les Estados Unidos, cosa oue el refor-ismo no tiene la
r.ás nínina oportunidad de llegar a disputarle, Y oso es nuy,nuy imper-
■ante y beneficióse.

f.denís es muy importante señalar que los compañeros desarrolaron


una extensa e intensa campaña para denunciar el terrorismo judicial que
representa el gran jurado y su carácter imperialista en contra de la
independencia de Puerto Rico. Esto determinó, de hecho, que se para­
lizara Le ecciór. represiva de dicho cuerpc y los compañeros salieran
libres al vencer sus respectivos gran jurados. El comañero que más tiempo
cumplió fue el compañero Archuleta que estuvo trece «ases preso.
225 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

La victoria de los compañeros fue tal que cuando otro grupo de


compañeros fue citado frente otro gran jurado por la impresionante
y estimulante fuga del corañero Prisionero de Guerra Hilllan Morales
en el 1979, la campaña que se generó paralizó la acción de dicho cuerpo
y nadie fue preso. Ya se había constituido una organización capaz de
movilizar masivamente en contra del gran jurado.

Y más importante aún, hace menos de un año, otro gran jurado citó a
cinco compañeros del MLK y del Comité Nacional Pro Libertad de los
Prisioneros de Guerra Puertorriqueños, cuatro de los cuales ,• María Cuete,
Andrés y Julio Rosado y Ricardo Remero, habían estado presos por el
gran jurado ya. La campaña que se generó a favor de los compañeros fue
.poderosa. En diciembre 16 de 1981, más de 5000 personas se movilizaron
e través délos Estados Unidos, Puerto Rico y el norte de .México (la parte
norte del territorio de México no ocupada por los Estados Unidos)/en
Ciudad Juárez, 2,000
3,000 personas se reunieron en militante protesta frente
A la embajada yanqui y quemaron una bandera imperialista cono advertencia,
Los compañeros fueron llevados frente al gran jurado, el cual todos des­
acataren, pero el gobierno, para evitarse una derrota peor a la que ya
había sufrido, optó por no encarcelarlos. La línea política se mantuvo,
principios se mantuvieren y las masas respondieron.

Volvemos ahora a Puerto Rico, al gran jurado que se encuentra en


función
--- ahora.
* «■. y, nara empezar por donde se debe, empozamos por Vieques.

La lucha ñor sacarla marina de vieques comenzó nilitsnteconta y


en esa dirección se desarrolló per ciertc tiempo. Empezó por los vale­
rosos piquetes marinos que detenían, de hecho, las prácticas de geno­
cidio ambiental, los bombardeos. La lógica de la lucha llevó el desafío
a- tierra, a terreno utilizado como blanco de bombardeos y/o desembarcos
anfibios. En ese, el más difícil de los desafíes, brilló Angel Rodríguez
Cristóbal coro ninguno. Angel defendió la tierra do Vieques a la altura
óel hombre que fue y ala altura de la Liga Socialista Puertorriqueña,
£ la altura que el enemigo teme, que lo aterroriza por el potencial de
contagio.

Lo demás es conocido. El enemigo lo asesine cobardemente en prisión,


en calabozo , y,como expresión genuina y sensitva do todo el pueblo decente
Y sensible. los combatientes de la Resi ster.cia, los Voluntarios y los
Macheteros castigaron su asesinato con la heroica emboscada de Sabana Seca.

Lo que resta también es conocido. El enemigo responde con el terro­


rismo, desde el asesinato hasta el terrorismo judicial, el eran jurado,
«ajo el manto enajenante de las elecciones coloniales del *80,Carlos
Rosario Panteja es reencarcelado y ye encarcelado. Bajo la excusa de
la emboscada de los marinos del Pensccola nuestro camarada Rlcarte Montes
es encarcelado. Y el caerse un caso fabricado en contra del compañero
í'orherto Cintrón, el enemigo se desquita encarcelándolo también. Todcs
Por gran jurede. j

Otras cosas han sucedido también pero limitaré mi exposición, el


final de ella• a dos puntos:
-la no-colaboración
-y elgo más sobre el eran jurado.

La nc-celaboración es un tc¿o,no puede dividirse entre dar testimonio


o soreter evidencia física. Al principie de 1* exposición mencionamos
coic un* de las razones de ser, de las intenciones, del gran jurado,
Raymond Soto Dávila | 226

as la de tantear la actitud de militantes y organizaciones con respecto


* este cuerpo que es, en fin, un tanteo a la actitud general de la lucha.

Cuando militantes y oroenizaciones se plantean colaborar, entregar


¡videncia física, "tenida ya o fácil de conseguir por el enemigo", o de
.'.echo colaboran con el gran jurado, entregando dicha evidencia, el impe­
rialismo utiliza esto como divisor en el incenendentismo , como deprimente
y coro justificación para el encarcelamiento de los que se niegan a
cooperar, cono fortalecimiento del estado y elemento propiciedor de repre­
sión, de terrorismo.

La lucha por la independencia y el socialismo,


socialismo, cuenta desde t’onte-
más específicamente, desde Fraunces Tavern para acá,
■’«> una serie consecuente de victorias, de victorias político-militares
.» de brotes impertan te c , aunque limitados, de lucha, de masas, como en
el caso de Visques, como en los casos de las grandes movilizaciones
contra el gran jurado en México y los Estados Unidos. El imperialismo
r., buscado y busca la manera, de limitar, do sabotear el apoyo de los
•elementos más conscientes de las masas a la revolución ensanchando el
■xpacio político del refornisne, aislando así a .'os elementos 'avanzados,
.-nsecventes, lo que facilita, permite golpearlos.

La nal llamada "tercera alternativa’, que no la hay, cae dentro


r este proyecto. La cooperación con ei gran jurado lo fortalece, pues
■".«a ante la opinión pública una imagen de efectividad, una justifica-
.•.ór. de ser, una justificación do su alegato de que no es punitivo sir.
• ir*-
. 1 tive, lo que es tarara mentira cue les colare -adores vienen a
.e-:¿_giar. El enemigo utiliza el ejemplo del colaborador para justifi-
.r le’ represión de compañeros luchadores, buscando crear el clima de
•■-e el que no se somate, el que no ent;-eg:i la evidencia física, es
r.o puede, nó porque no quiere.

Eso r.o se le puede permitir al enemigo, que logre oso.

Plantear que no se hace nada malo al entregar evidencia física,


* hacer eso, le que trae como consecuencia una nueva división en ol
. .icependontismn que resulta o.-. un ensanchamiento político del reformismo
- •'a su. correspondiente depresión en el estado do ánimo del movimiento
la apertura de La brecha por donde se le permitirá al enemigo cue
:.os golpee.

Plantear que no se hace nada malo al entrenar evidencia física,


. cyectar desmoralización. es falt un rundan' r.to básico de la
: nscientización, «1 ejemplo. En fin, ¿qué siqnific-'. la palabra soce-
•’niento?

Y además, ¿qué garantías hay de que el enenicc, al ver que persone*


soreten a la requisición ce avidenci a física, n* extiendan las exi-
1 encías al testimonie? l’o las hay*

Lo que la nal llamada tercera alternativa ’ ha hecho. coro bien

he expresado, es "recoger y movilizar el apoyo de los sectores refor-

-stas de le independencia" y ayudar al imperialismo e '•lanzar una nueva

•. *m.paña do confusión y división en el sene de fuerzas patrióticas.1


227 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

-11-

En momentos en que un sector del independentismo ha sido sometido

al deprimente de darle prestigio al au tonomisr.o el soriterse a las

ordenes del Task Forcé ' nediantc el gran jurado es injertarse en el

proceso global do rendir la independencia al oportunista.

Termínenos ahora.

El gran jurado es un?. forma de terrorismo judicial que le peralte

al imperialismo yanqui hacer cosas parecidas a las oue se hacen en

Irlanda ocupada y Africa del Sur, encarcelar militantes orrcue les viene

en gana. El hecho de que ei gran jurado es el instrumento del espionaje

enemigo par? encarcelar militantes por voluntad. recibimiento

<?el presidio. y que no hay forma de evitarlo oue no sea con 1? lucha

de masas, llevó a nuestro valiente camarada Ricerte Montes a denunciarlos;

come se dehe , sin ahogado, sin el reconocimiento do 1? autoridad que

nc tienen pero sí de s u fuerza, que tienen, pero que algún di? n^ tendrán.

E1 carácter de tribunal político secreto del gran jurado queda probado

cuando , en la apelación del compañero Herbario Cintren, el gobierno


se niega e contestar preguntas tan básicas como: ¿cuándo empezó este

eran jurado? ¿Qué investiga?

El alcance y la densidad política del gran jurado en Puerto Rico


en estos momentos son evidentes.Preparémoseos a combatirlo ccn el ejemplo

de los que no colaboramos ni colaboraremos, con la experiencia de cono

combatirlc, ccn le movilización y los principios firmes, mor la indepen-

dencia y el socialismo.

ICerc colaboración con el gran jurado federal!

IA la calle contra él gran jurado federal!

Meta : El camarada Carlos Meya estuvo preso por negarse ? colaborar con

e 1 eran jurado federal desde el 30 de octubre de 1930 hasta el 28 de

cierzo <*e 1982 . Fue desterrado a la cárcel 'Metropolitan Corrección Canter'


de Mueva York.
Raymond Soto Dáviia | 228

Y© ESTABA ALLI
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Y SOCIALISTA i
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LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA?


/\ continuación se reproduce el documento para su lectura.
229 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña.- 1962-1989

YO ESTABA ALLÍ COMO PUERTORRIQUEÑO, COMO


INDEPENDENTISTA Y SOCIALISTA
Este es el texto com pleto de la posición político-militar de la LIGA SOCIALISTA
PUERTORRIQUEÑA respecto a la represión desatada contra los independencias
a partir de los actos de protesta patrióticos efectuados en Vieques el 19 e mayo
este año. Fue presentada ante la Corte Federal por el camarada Angel Rodríguez
Cristóbal a través de sus abogados. El original, en inglés obligatorio fue trai o en
español por nosotros. Dada la importancia del documento y el interés y e entusias
mo motivados por el gallardo comportamiento de Rodríguez Cristóba , acoJ 0 e
Comité Central de nuestra organización llevarlo a mayor conocimiento me iante
esta publicación. El camarada Rodríguez Cristóbal fue rápidamente arra"ca 0 e
nuestro país en un acto de secuestro oficial y encarcelado en el presi 10 e a a
hassee, Florida, Estados Unidos, sumándose así la pena de destierro a a e prisión.

JUAN ANTONIO CORRETJER


Secretario General
LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA

A LA HONORABLE CORTE:

Comparece el acusado y por la presente hace la moción para desestimar los cargos
tiene juris
contra él y la desestimación del caso en base a que esta Corte no tiene jurisdicción
iccion
sobre el acusado por las siguientes razones:

LA NULIDAD DEL TRATADO DE PARIS

Puerto Rico es una nación hispanoamericana bajo ocupación militar de Estados


Unidos desde el 1898. Esta intervención militar se lleva a cabo en violación del de­
recho natural de las naciones a su independencia. En su lucha por esta conquista
nuestra nación está en su derecho natural de enfrentarse a las fuerzas militares de
Estados Unidos con la fuerza. El derecho de Puerto Rico a la revolución parte de este
mismo origen.
En 1898 España y Estados Unidos fueron a la guerra. Fue la primera guerra de
la nueva era del imperialismo y como secuencia Puerto Rico fue ilegalmente cedida
por España a Estados Unidos y los Estados Unidos ilegalmente aceptó esta cesión
requerida. Fue una transacción internacional ilegal puesto que cuando se desarro­
lló, Puerto Rico era una nación autónoma relacionada con España mediante el Nexo
Raymond SotoDavilx | 230

Real solamente. Esta relación entre la metrópolis y la naciente nación fue similar,
pero más avanzada en términos de autonomía que el Estatuto de Westminster acor­
dado entre el Reino Unido y el Dominio de Canadá. Como Puerto Rico no era res ni
comercio, el Tratado de París que restableció la paz entre los poderes beligerantes,
negociado sin la intervención de delegados del Gobierno Autónomo de Puerto Rico,
es nulo en cuanto a Puerto Rico concierne.
El status político de Puerto Rico, establecido mediante este contrato ilegal es un
status de tratado. Mediante este mandato nuestra nación fue privada de su sobera­
nía y pasó a ser fideicomiso del Congreso de Estados Unidos. Este, desde luego, es
un lenguaje farisaico y una maniobra inmoral para dar a la intervención militar una
hipócrita apariencia de legitimidad.
En realidad Puerto Rico es hoy por hoy, base de maniobras para las fuerzas ar­
madas de Estados Unidos. En la organización de esta base las fuerzas militares han
expropiado para su beneficio el control directo de partes importantes de nuestro te­
rritorio nacional. La parte más importante de este complejo es Roosevelt Roads, en
la costa oriental de Puerto Rico, frente a la isla menor de Vieques y del cual Vieques
en sí es una parte.

LA TOMA ILEGAL DE LA TIERRA Y SU USO PARA LA DESTRUCCION DE LA


INTEGRIDAD TERRITORIAL DE PUERTO RICO

En Vieques, en su esfuerzo por destruir la integridad territorial de Puerto Rico,


Estados Unidos ha llegado al extremo de genocidio. Genocidio no es Hiroshima y
Nagasaki solamente. Genocidio es la destrucción deliberada de una sociedad civil
por medio de los instrumentos del estado. El gobierno de Estados Unidos en su uso
brutal de las fuerzas de la Armada ha destruido la base económica de Vieques y
expropiado a los dueños legítimos privados de la propiedad agrícola, forzando a
más de la mitad de la población a abandonar su isla-hogar, ha acorralado aquellos
que aún se agarran a su herencia natural en un gran cercado; ha destruido sus po­
sibilidades de pesca; ha comenzado la destrucción de su ecología. Con el terrible
hostigamiento de sus bombardeos mantienen a la población al borde de un colapso
nervioso colectivo. Los tiranos se han enfrascado en un gigantesco ejercicio de dislo­
cación social. Eso es genocidio.
La agresión imperialista contra nuestra nación en Vieques es un ensayo para lo
que intentan hacer con Puerto Rico entero. El sueño americano sobre Puerto Rico
es pesadilla puertorriqueña de caos y destrucción. La garrulería de los políticos so­
bre la estadidad y el estado libre asociado encubre la anexión de Puerto Rico y la
transferencia de la colonia externa a la colonia interna dentro del estado federal,
con nuestro país transformado en un terraplén, en un complejo industrial militar,
su balance ecológico destruido mediante la explotación subterránea y submarina
de la riqueza mineral y petrolera; forzando la población a abandonarla como ya ha
231 | Lucha y espacio de la Liga Socialista PuertoRRJQUe ñ a : i 9 62 -19 8 9

ocurrido en Vieques, mientras que la población restante será usada como peones y
sirvientes de todas clases. Los planes ya están hechos y son conocidos para convertir
a Puerto Rico en un complejo de doce “parques comerciales para el 2020 y ec a
raciones poco conocidas han sido publicadas insinuando la relocalización e as
masas puertorriqueñas en los espacios vacíos de suroeste y medioeste de Estados

Para justificar este esfuerzo de desintegrar nuestro territorio nacional, el Pentá


gono alega que la defensa militar de los Estados Unidos se haría inuti si entregan
Vieques. Pero el carácter no defensivo sino agresivo de la Armada en Vieques se re
fleja en sus propias palabras, ya que presentan a Puerto Rico como la frontera de Es­
tados Unidos en el Caribe. La frivolidad criminal de su aventurensmo mternaciona
es autodenunciado. Es un término de arrogancia militar normal que ignora toda a
realidad: geográfica, histórica, social, cultural, política, relocalizándonos en sta o
Unidos como parte integral de su geografía, transfiriendo su dominio asta as p
yas de Puerto Rico, Puerto Rico en general, Roosevelt Roads en particular y Vieques
dentro del complejo de Roosevelt Roads es una plataforma para la agresión, es
chantaje contra la independencia y liberad de todas nuestras naciones erman
habla hispana, inglesa y francesa, desde Venezuela y Colombia hasta Cuba.

LAS ACCIONES DEL ACUSADO NO ESTAN SUJETAS A NINGUNA AUTORI­


DAD ILEGAL DE ESTADOS UNIDOS

El 19 de mayo de 1979 el acusado entró al Campamento García en Vieques para


protestar en contra de la Marina allí establecida sus ejercicios de desembarco y sus
prácticas de tiro al blanco. Estaba allí como puertorriqueño, como independentista
y socialista. Apoyaba las protestas de todos los puertorriqueños dentro y fuera del
Campamento García en la isla de Vieques.
Fue al Campamento García para hacer todo lo posible para deteriorar la posi­
ción de la Marina. Los criminales uniformados de la Marina lo inmovilizaron y lo
arrestaron. Cada vez que un miembro de las fuerzas armadas de los Estados Unidos
aparece en Puerto Rico se le debe hacer consciente que está en un territorio ocupa­
do y será tratado como un enemigo. En Vieques el 19 de mayo de ¡979 cumplió con
su deber y les recordó a algunos de ellos que están en territorio ocupado. Sus actos
fueron legales bajo el punto de vista de la legalidad puertorriqueña. Nuestro país
es nuestro y de nadie más. No hay poder en el mundo que legítimamente prohíba
a un puertorriqueño traspasar la tierra que es nuestra. Fue capturado por la fuerza.
Mantiene que esta corte no tiene jurisdicción para enjuiciarlo porque:
El gobierno de Estados Unidos es un interventor, transgresor ilegal de nuestra
tierra y no tiene derecho sobre nuestro pueblo. Como parte del sistema judicial de
Estados Unidos esta corte no tiene derecho a juzgarlo porque Estados Unidos ha
violado el derecho natural a la independencia de Puerto Rico.
RaymondSoio D Ávila | 232

El Tratado de París es nulo en lo que respecta a Puerto Rico.


Como defensor de la independencia de Puerto Rico fue capturado por fuerzas
militares de Estados Unidos dentro del terreno de uno de sus campamentos, en este
caso el Campamento García en el territorio ocupado de Vieques, y por tal razón
debe ser juzgado como prisionero de guerra no en esta corte sino en una corte mar­
cial.
Rehúsa defenderse ante esta corte y porque esta corte carece de jurisdicción so­
licita la desestimación de caso.

SOMETIDO RESPETUOSAMENTE:
En San Juan, de Puerto Rico el 26 de septiembre de 1979.
CERTIFICADO DE REPRESENTACION: al Fiscal de Estados Unidos este mismo
día.
LUIS F. CAMACHO
PEDRO J. VARELA
PEDRO J. SAADE
Abogados del Acusado
233 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña£1962-I989

PRESENTA Clon AL 'GRAN JURADO FEDERAL" HECHA POP. RICARÍE MONTES GARCIA,
DIRIGENTE DE LA LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA EN CIALES; 17 de JUNIO 1982.

Comparezco ante- ustedes pera no decirles na a. ' , de cc<jn3


gado como acto do oscilación en la denuncia de -a 1 ¿ , y jc est<.
las accicnes de esta institución llamada Gran Jura-o - aárechc a
Corte llamada Federal. Nc reconozco jurisdicción alguna dc mcaantcl
ningún gobierno extranjero en mi país. Ustedes tiene en”acata"i ence I
Fero el día llegará en la que no la tengan. No e«toy aquí en acataaien |
a su ilegal orden de Sub faena. Hago acto de presencia
denunciar la ilegalidad de todc este procedimiento y ene*
¿Patriota y como hombre, el abuso de poder de un gobierno extranjero,a.
que ustedes personalmente se prestan.
Si bien es cierto que comparezco aquí sin abogado, y ningún ebog..c..
guarda mis espaldas desde el zaguán a cuyo lugar .desf-reciativanante
ustedes lo colocarían, rae acompaña un Fiscal, "se Fiscal es ni f«21.. a A ....
blanc Angel Rodríguez Cristóbal, ni amigo de toda la vida y «
en las honrosas y valientes filas de la LIGA SOCIALISTA PUERTORRIQUEÑA.
Su egregia figura simbólicamente evocada fija en ustedes sui mirada acu-
sadora. De esta llamada Corte Federal salió Angel Rodríguez Cristcbal.
de este mismo Edificio, cono hace -hora cuarenta iseis anos :salió Pedro
Albizu Campos para el presidie y el destierro. Tanto anos
ejercidos dentro de estas mismas pareces se saldarán con a P ■
cía de mi Patria, que todo el peder de Estados Unidos no I'?-’- • nrasid'ñ
De este mismo edificio salió Angel Rodríguez Cristóbal para el F"’"-'
el destierro y la muerte. Pero su figura históricamente ina°^ ’ "
ahora a ni la¿o, cono terrible fiscal centra todo este erarat? curtís’
Ui presencia anuí en el día de hoy volverá a probar cuanto s™ ciert
las palabras de' nuestro Secretario General, compañero Juán
Corretjer, que afirman que cuando de un dirigente in ei ? bie-
trata, esta sala es la oficina de recibo del presidie. El lo saoe
?ues frente al abuso de poder emboscado en el latinajo . h ningún
la tradición de resistencia y nc colaboración que a
dirigente independentista ha viciado.

Termino.
IVIVA LA INDEPENDENCIA! IVIVA EL SOCIALISMO!
IVIVA PUERTO RICO LI3P.E , INDEPENDIENTE Y SOCIALISTA!

Firmado: RICARTE MONTES GARCIA


Kxy.mondSoto Dávila | 234
235 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

Apéndice IV
entrevistas:
Noemilda Vélez Mas
Ricarte Montes García
Raymond Soto Dáviia | 236

Noemilda Vélez Mas


Raymond (R.): ¿Cómo llegas a la LSP?
Noemilda (N.): Annie Velázquez (epd), una buena amiga y vecina, ya ella estaba con
la LSP, estudiábamos juntas en la Universidad Católica en Ponce y me habló de Juan
Antonio Corretjer, de la organización y de las reuniones en La Cantera, una barriada
muy humilde. Primero comienzo como “simpatizante” y luego me hago “miembro”.
Annie y yo comenzamos a constituir los Cuadros Universitarios de la LSP en la Uni­
versidad Católica. Duramos entre 1967 a 1970. Logramos reclutar otros dos simpati­
zantes pero no se quedaron todo el tiempo. Luego que nos graduamos nadie siguió
organizando los “Cuadros”.

R: ¿Qué estudiabas?
N: Educación con concentración en Español y varios otros estudios como concentra­
ciones menores, uno era Ciencias Políticas.

R: ¿Cuáles eran los temas o las luchas que trabajaban entonces desde los “Cuadros”?
N: Los temas principales eran impedir que se subiera la matrícula y la lucha inde-
pendentista. Atraíamos a los becados, yo también era becada, las condiciones eran
de mucha precariedad económica para algunos de nosotros aunque la mayoría del
estudiantado era de clase media y media alta.

R: ¿Qué actividades realizaban y cómo reaccionaba el estudiantado?


N: Repartíamos Correo de la Quincena y El Socialista. Ambos fueron aceptados y
muchos estudiantes intercambiaban opiniones con nosotras. Los que no estaban de
acuerdo con nosotros, siempre los hay, al menos eran respetuosos o indiferentes. So­
bre las actividades, las que recuerdo como más significativas son dos: cuando llevamos
a Pepe Marcano a ofrecer una interesante conferencia en el Anfiteatro de la Univer­
sidad Católica y al siguiente año, unidos al Club de Ciencias Políticas, presentamos a
Don Juan Antonio Corretjer.' En ambas ocasiones la asistencia fue excelente, inclu­
yendo además de estudiantes, profesores y público en general. Les demostraron gran
interés y empatia con lo que estaban escuchando. Con la literatura que distribuíamos
tratamos de organizar círculos de estudios en las áreas abiertas o verdes pero a veces
asistían uno o dos estudiantes (una vez a la semana) pero luego de dos o tres semanas
no regresaban. ¿Por qué? Muchas pueden ser las razones. Quizás el temor o tal vez la
represión que siempre ha existido y es por todos conocidos en nuestro país. Además
en esta universidad existe el agravante de que la clase social predominante es la clase
media y la media alta.
2J7 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puerwkmqi i ñ v 1962-1989

R: ¿Cómo reaccionó la institución, la cual se le percibe como conservadora, a la orga­


nización de los “Cuadros”?
N: En ese momento histórico no tuvimos contacto con altos funcionarios de la ins­
titución. Nosotras no hacíamos “ruido”, nuestro trabajo era más silencioso y perso­
nal. Recuerdo que para ese tiempo estaba bien activa la FUPI, ellos si hacían mítines
con bastante frecuencia. Asistían bastante, para ser en la Universidad Católica, a ve­
ces reunían hasta treinta alumnos. Aprovechábamos todo momento para distribuir
nuestra literatura y dialogar con los estudiantes. Quizás por esto, por ser un trabajo
más de persona a persona, excepto las conferencias que organizamos, la institución
nunca reaccionó en contra nuestra. Con el único de mayor rango que tuvimos con­
tacto fue con el entonces director del Departamento de Ciencias Políticas, el Profesor
Etienne Estremera. Éste, en un día de “casa abierta” de la Universidad Católica nos
dejó un espacio en su oficina pues ya no quedaban espacios disponibles cuando lo
solicitamos. Así que fue una muy buena experiencia. Claro, éste era un hombre de
una clara experiencia.
R: ¿A qué atribuyes que luego de que ustedes se graduaran no se continuara con los
“Cuadros”?
N: Alaciase social, era mayormente de clase media, muy conservadora.

R: ¿Qué trabajo realizaste con la LSP luego que te graduaste?


N: Pues coincide que poco después, desde enero de 1971» comienzo a trabajar de
maestra en una escuela de Adjuntas y ahí logro nuevos contactos esta vez con maes
tras que se interesan en el trabajo de la LSP. Hay una en particular que se integra
totalmente y trae a otras personas. Estos nuevos contactos son realmente del PIP, en
Adjuntas no había LSP. Se logra llevar a Don Juan Antonio al Local del PIP y reuní
mos a unas sesenta personas casi sin propaganda. Para entonces eso era muy buena
asistencia. A eso siguen otras conferencias con Doña Consuelo y Juan Antonio en
la casa del presidente del PIP. Trataban temas sobre la independencia, por ejemplo,
auto sustentabilidad dentro de la independencia y el socialismo. Ya para el 1972 co­
menzamos un pequeño grupo de la LSP. Éramos cuatro y varios simpatizantes que
no se quedaron todo el tiempo.

R: ¿Recuerdas alguna actividad en particular?


N: Logramos realizar una marcha por el pueblo para un primero ele mayo a la cual
asistió Corretjer y luego se presentó una actividad en la Plaza de Adjuntas.

R: ¿Qué me puedes decir del “Comité Anti Minero de la LSP?


N: Este comité se formó como para el 1976. El trabajo recaía en una compañera } un
compañero. Repartían literatura por el pueblo tratando diversos temas. El boletín se
Raymond Soto Dávila | 238

llamaba “Adjuntas”. Este comité existió mucho antes que llegaran Alexis Massol y su
esposa Tinti a Adjuntas.

R: He observado que varios de los artículos se reprodujeron en las publicaciones ma­


yores de la LSP, en particular en el Correo de la Quincena.2 Uno de estos artículos
fue sobre el tema antimilitarista y la resistencia al SMO, en una escuela de Adjuntas.
¿Qué me puedes decir de esto?
N: Se trata de la Escuela Rafael Aparicio Jiménez, donde yo trabajé. Ese boletín al
cual te refieres lo trabajaron mayormente los dos compañeros que también formaron
el Comité Anti-minero cerca del 1976. Ellos hicieron una valiente y fuerte campaña
contra el orientador vocacional y todo el andamiaje colonial que permite usar nues­
tras escuelas para reclutar a nuestros jóvenes. Pero su firme y consecuente denuncia,
luchando siempre para evitar el reclutamiento de la juventud puertorriqueña y el
SMO contribuyó grandemente a desarrollar conciencia sobre lo que esto significaba.

R: Se tiene entendido que hubo una publicación llamada “El Centro en Marcha” ¿la
recuerdas?
N: No, no la recuerdo.

R: ¿Recuerdas a “Cíales Histórico” y a Ángel Rodríguez Cristóbal?


N: Sé de “Ciales Histórico” a través de Ángel y de Juan Manuel Delgado; por cierto,
tengo un ejemplar. Lo conservo con mucho cariño y es de gran calidad histórico-li-
teraria. Sobre Ángel Rodríguez te diré que además de su gesta heroica en su corta
vida, nos deja un ejemplo, un modelo que si lo imitamos, Puerto Rico se libera. Lo
considero uno de los más firmes, valientes y disciplinados soldados de nuestra Patria.
Me parece verlo sentado en la sala de mi casa; conversábamos sobre diversos temas
en forma amena y sencilla. Lo recuerdo siempre sereno, sonriente, proyectando una
inmensa paz, de mirada profunda y transparente. Hombre de gran inteligencia, ana­
lítico, sensible, justo, honesto. En resumen poseía todas las cualidades que lo identi­
fican como un genuino revolucionario.

R: Se tiene entendido que en un momento dado va a ser otro comité el cual va a dar
la batalla y desde el cual la LSP se inserta. ¿Cuál era la posición de la LSP sobre el
“Plan 2020” y cómo se mantuvo esa posición luego de constituirse el “Taller de Arte
y Cultura”?
N: La LSP mantuvo desde el inicio de la lucha anti minera su posición de cero minas
por el daño terrible que la minería provocaría a nuestros recursos naturales y a la sa­
lud del pueblo. Es inaceptable. Hubo problemas con otros grupos porque sostenían
que las minas podían darse como “minas puertorriqueñas”. A la larga prevalecimos.
El Taller de Arte y Cultura surge de un grupo de compañeros de la LSP ya organiza­
dos en Adjuntas al cual se unen Alexis Massol y Tinti Deyá quienes regresaban a su
239 I Lucha y espacio de la Liga Socialista Puertorriqueña: 1962-1989

pueblo natal y habían conocido a Corretjer en Guaynabo. La organización mantuvo


y defendió siempre esa posición de cero minas. Luego de varias reuniones, inc uso
algunas con Corretjer, de quien nace esta idea, decidimos invitar otras personas,
davía no nos llamábamos “Taller de Arte y Cultura” (TAC). De ese proceso de dialogo
entre miembros de la LSP y otros adjunteños(as) interesados en combatir a exp o
tación de las minas en la zona central, nace el TAC con la consigna de “cero minas .

R: ¿Por qué ese nombre para el comité?


N: Era realmente un taller de arte y cultura donde nos convertíamos en obreros del
arte para intercambiarlo con niños, jóvenes y adultos, creando o compartiendo o
creado por otros. Fue una manera de desarrollar conciencia al pueblo a través e
diversas expresiones culturales. Un ejemplo fue el Concierto Patria Adentro . Así
cada componente de nuestra cultura florecía en nuestro taller. Pero se fomentaba e
desarrollo de una cultura como arma de lucha para la defensa del territorio naciona
amenazado por una explotación minera y un “Plan 2020 . Mucha gente se envolvió.
Fue muy efectivo.’
R: La LSP se disuelve un tiempo después del deceso de Corretjer. ¿Seguiste activa con
el Comité “Taller de Arte y Cultura”?
N: Sí, hasta que se transformó en “Casa Pueblo . Me explico. Inicialmente Casa
Pueblo” era un proyecto de la organización “Taller de Arte y Cultura, como o era
también “Madre Isla”. Hoy TAC es historia pasada. Y con “Casa Pueblo” surge nueva
filosofía, mejor dicho, nuevas metas. Poco a poco desaparece el TAC y surge como
organización “Casa Pueblo”. Aunque fui una de las fundadoras del TAC y de Casa
Pueblo, creo que fui la última de este grupo inicial en retirarme de la junta.

R: ¿Qué cosas recuerdas como las más positivas de la LSP?


N: El compañerismo. Nadie llegaba solo a su casa. La sensibilidad a los problemas
personales. Don Juan era de los que sabía lo que pasaba la gente a su alrededor, como
por darte un ejemplo, comprarle zapatos a alguien que se notaba lo roto que los tema.
Daba ese ejemplo. Ahora eso siempre que se viera que la persona si tenía intenciones
de trabajar.

R: ¿Cómo consideras su reglamento?


N: Era estricto pero era necesario. La única organización más estricta era el Partido
Nacionalista de Puerto Rico.

R: Si pudieras cambiar algo de la LSP, ¿qué sería?


N: En Puerto Rico todavía existe un mal que permea también en las organizacio­
nes independentistas. Para los años de lucha de la LSP éste era más fuerte aún
(1960S-1980S). Me refiero al machismo. Unas (organizaciones) lo padecen más fuertes
Raymond Soto Dávil-x | 240

que otras. La LSP no fue una excepción. No todos los compañeros lo eran pero varios
sí lo eran como la mayor parte de los hombres en nuestro país, por más adelantados
que estén políticamente hablando. Debían seguir el ejemplo de Corretjer a quien
jamás lo vi mostrar actitudes machistas. Recuerdo verlo haciendo café y llevarle una
aromática taza a su esposa Doña Consuelo.

R: Noemilda, gracias por tu valiosa aportación al libro y por tu ejemplo de compro­


miso patriótico. Ha sido un honor.

1 Ver José Marcano, “El Grito de Lares en la Guerra por la Independencia de nuestra Amé­
rica", Correo de la Quincena, Volumen VII, Núm. 116-122, 15 de agosto ai iro. de octubre de
1970, pág. 26-34. Se reproduce el discurso de Pepito Marcano en dicha actividad .Ver foto
de portada, la cual recoge el momento de la actividad en la Universidad Católica con Juan
Antonio Corretjer.
2 Ver “Militarismo en las escuelas”, Adjuntas, Volumen 24, Año 5, septiembre de 1982. Re­
producido en Correo de la Quincena, Volumen XIX, Núm. 402-406, iro. de marzo ai 15 de
septiembre de 1982, pág. 22-23.
3 Ver “Meet “Las Marianas”, Puerto Rican women build new organizations”, Newsletter of
the New Movement in Solidarity with Puerto Rican Independence and Socialism, Novem-
ber, 1986. En este boletín circulado en las comunidades de migrantes boricuas en Estados
Unidos, se entrevista a cuatro mujeres puertorriqueñas, entre las cuales se encuentran Noe­
milda Vélez y Tinti Deyá, éstas explican el racional para expresar el mensaje a través de
expresiones culturales. Esto fue una forma de circunvalar el mote de comunista que se apli­
caba a todo grupo disidente en Puerto Rico. Igualmente este grupo que se autodenominaban
“Las Marianas” comenzaron a exaltar figuras históricas de mujeres como Mariana Bracetti y
Julia de Burgos. En la entrevista se expresa que hay una intención de levantar conciencia del
papel de la mujer en la lucha y de su rol de supeditación en la relación de pareja el cual se
entiende debe ser superado. (Las otras entrevistadas fueron Evelyn Pérez y “Bechi” Torres.)
241 I 1.1 ( HA'i I Sl’Aí IODI I \ LiGaSíX I \l isr.\ I’l F.RTORRIQl ! ÑA: 1962-1989

Ricarte Montes García


Raymond (Ra): ¿Cómo llegas a la LSP?
Ricarte (Ri): Conocí a Don Juan Antonio Corretjer cuando Manuel Padilla me llevó
a conocerlo. Es entonces que Don Juan y yo nos damos cuenta que somos parientes.
Manuel y yo estudiábamos en la UPR en el Recinto de Río Piedras. Le hice una con­
sulta académica a Don Juan Antonio, fui a su casa y de ahí en adelante estrechamos
la relación.
Ra: ¿Qué estudiabas?
Ri: Yo estudiaba Historia y Economía para 1968. A Manuel lo conocía de antes. El era
ciego y yo lo acompañaba a muchas cosas. Yo para entonces era pipiólo. Lo conocí en
el local del PIP pero Manuel no era “electoral” ya era de la LSP. A Ángel Rodríguez
Cristóbal me lo presentó Manuel. El había llegado del Ejército antes del 1970, como
para el 1968. Manuel se convirtió en su maestro y Ángel acompañaba a Manuel para
ayudarlo en su condición y se convirtió en su visión. Ángel le leía a Manuel muchas
lecturas políticas y luego discutían fraternalmente. En ocasiones yo también estuve
en esas discusiones.
Ra: ¿Cómo se da la transición a la LSP?
Ri: En el 1972 di mi primer y único voto al PIP. Fue el año que más votos sacó el
PIP en Cíales, luego bajó y no volvió a subir. Poco tiempo después empiezo a es­
cuchar los planteamientos de los “Terceristas”, se intensificó el cuestionamiento
que ya yo tenía. Comencé a leer más literatura de la que me pasaba Manuel y otras
que se conseguían entonces. Ahí fue que leí “La Patria Radical’ de Juan Antonio
Corretjer. Hice el análisis y poco después nos empezamos a reunir Ángel, Manuel
y yo. También habían otras personas, algunas ya miembros de la LSP y otros cer­
canos. Ahí me voy integrando. Empecé a ir a las reuniones de la LSP. Viajaba al
local con Ángel. Podíamos trabajar con la lucha de Vieques, con la de los obreros
porque había el espacio. Las consignas más utilizadas eran: “Obrero desarmado,
obrero explotado” y “Organízate y lucha”. Ya para 1973 estoy participando en círcu­
los de estudios locales como los de la local principal. Hubo varias circunstancias
de infiltrados entre los cercanos que no eran miembros pero parecían muy amigos.
Conocimos a Pablo Bibiloni que se enteraba de nuestras actividades en la plaza y
a otro de nombre Enrique Pagán pero no lo confundan con un compañero de la
LSP que no es de este pueblo.
Ra: ¿Cuándo te haces miembro de la LSP?
Ri: Ya para 1975 me hice miembro oficial de la LSP. En esos dos años hice mucho tra­
bajo para la LSP. Una de las cosas fueron las muchas lecturas como por ejemplo, el
Ray.monp Soto Dávii.a | 242

libro de Politzer, y otro cuyo título es “Lo que todo revolucionario debe saber sobre
la represión”. Ayuda a establecer prioridades, establecer jerarquías e inclusive me
cuestioné ciertas cosas sobre la religión.
Ra: ¿Qué me puedes decir de la publicación “El centro en marcha”?
Ri: Esa era una publicación que se inicia para informar lo local y lo regional, de
la montaña, además de Cíales cubría, Orocovis, Barranquitas, Manatí y Florida.
La publicación del boletín es del Comité Regional del Centro de la LSP. La publi­
cación la comienza Ángel y otros compañeros pero poco después asesinan a Ángel.
Yo seguí trabajándola y publicándola por varios años. Nosotros nos envolvimos
también en el trabajo de Juan Manuel Delgado, y con esa publicación, “Levanta­
miento de Cíales”. Ángel trabajó mucho en la recopilación de data. Se investigaba
las tradiciones, costumbres y sucesos históricos. Ya para 1980 y 1981 había mucho
trabajo hecho. El trabajo de Juan Manuel Delgado se refiere al levantamiento de
Ciales del 13 de agosto de 1898. Hicimos un mural conmemorativo en el pueblo con
dos compañeros que ambos se llamaban Eduardo Torres. Duró mucho tiempo.
Ra: ¿Qué me puedes decir de la citación en tu contra del Gran Jurado en el 1982?
Ri: Sobre la citación del Gran Jurado, creo que se debió en parte a la influencia de
Don Juan en el pueblo. Era la época de gran represión. De la Cerda, Alejo Maído-
nado, Rafael Moreno, González Malavé, estaban ansiosos de mostrarse, intimidar.
Era una exhibición de poder. Ponían a personas del vecindario a velarte. A la sal­
ida de las reuniones nos seguían, con cierta frecuencia nos vaciaban las gomas.
A la salida, nos hablaban, a mi me decían: “Vas lejos, para Ciales.”Cosas así. Una
vez estoy llevando a Don Juan a una diligencia, me detengo, es de noche, pasa un
carro y del interior me enseñan un arma y me dicen “Mira lo que tenemos para ti”.
El FBI llega a la escuela donde trabajo, Segunda Unidad de Pesas. Era casi la hora
de almuerzo, ocupan la oficina de la directora, se sientan en su escritorio y hacen
que ella me vaya a buscar al salón. Yo no voy hasta que termino la clase. Cuando
voy apenas entro, ella se queda fuera. Ellos se presentan, eran tres, yo les digo mi
nombre y dirección todas las veces que me hablan. Me preguntan cuánto dinero
necesito para hablar. Me retiré. El sábado de esa semana se presentan en el ne­
gocio de mi papá donde yo trabajo los sábados y me entregan una citación. Ya yo
había avisado a la LSP desde la visita. Voy preparando a mi familia de lo que va a
venir. Para que entiendan. La cita era para el jueves. Ese día vuelven a citarme para
el martes de la otra semana para que yo supuestamente lo piense. Ya ese martes al
no responder preguntas me arrestan y me llevan al Oso Blanco.' Estaba reciente

1 Se ha anejado la declaración de Ricarte Montes ante el Gran Jurado en otro apéndice de la


obra.
243 | Lucha y espacio de l\ Liga Soc iaiisia Pi eriorriql i ñv 1962-1989

el asesinato de Carlos La Sombra y se notaba. Salgo al otro día en primera plana


en El Vocero y para los presos que me vieron eso fue un acontecimiento. Recuerdo
que en esos días había salido un preso de “Las Malvinas”, así le llaman al calabozo.
Estaba acusado como asesino a sueldo. Una noche entra a mi celda y me dice que
no sabe escribir y que le escriba una carta. Se la hice y se la contestaron. Estaba
muy agradecido. A los once días llega el Marshall de la Corte Federal y me sacan
a las nueve de la mañana y me llevan al Metropolitan Correction Center de Nueva
York. Años después vi al preso en la prensa. Lo habían asesinado.
Ra: ¿Cómo fue el proceso en la cárcel en Nueva York?
Ri: Al yo llegar me ponen en el noveno piso sur, máxima seguridad. Estaban allí
presos Norberto Cintrón Fiallo y los hermanos Julio Rosado y Andrés Rosado.
Había un problema con un carcelero que parecía que le tenía inquina a los puertor­
riqueños. Hubo varias experiencias con él. Yo tenía tres discos herniados y me que­
do paralítico. Me llevaron al hospital de la prisión y me dejaron allí y nadie venía a
verme. El frió era terrible. Un empleado norteamericano que estaba casado con una
puertorriqueña me vio y me sacó de allí. Yo ya lo había ayudado con la traducción de
un documento del español al inglés. Pero ese problema me lo arregló el Dr. Fergu-
son con dos tratamientos de acupuntura. El problema se me fue. Era un afroamer­
icano acusado por motivos políticos? Todo el tratamiento se hacía a escondidas. El
FBI usaba informantes. Un supuesto preso, de nombre David Falcón Luna, en una
ocasión en que el carcelero convenientemente no cierra una puerta, el individuo se
acerca y se pone a hablarme de temas políticos y averiguo que el tipo había partici­
pado en un asalto donde murió mi tío, Enrique Montes Reyes.
Ra: ¿Cómo fue tu experiencia como miembro del Comité Central de la LSP?
Ri: Fui miembro del Comité Central desde el 1975 hasta que finaliza la LSP. La ex­
periencia cambia al morir Don Juan en el 1985. En una asamblea celebrada en casa
de una compañera se me hace Secretario General Interino. Luego de mi elección
se presentan dificultades. Algunas personas por la razón que fuera no estaban de
acuerdo con mi nombramiento. Un tiempo después, para 1989, no se pudo seguir.
Hubo cosas dolorosas pero eso ya quedo atrás y no deseo abundar.
Ra: ¿Cómo evalúas el Reglamento de la LSP?
Ri: Lo más importante de ese reglamento es que se pasaba un cedazo. Ningún
miembro de la LSP resultó ser informante. Todos se quedaron en la periferia.
Ra: ¿Qué piensas ahora sobre la LSP?

2 Ver “Six more people subpoenaed to New York RICO Grand Jury”, QUASH: Newsletter
of the Grand Jury Project, Inc., Vol. 7, Number 2, March/April, 1982. Chui Cecilio R. Fergu-
RaymondSow Daviia | 244

Ri: La Liga tiene derecho a la continuidad. La Liga vive mientras haya un miembro
vivo aunque no esté organizada ni trabajando. Ese espacio existe y ahora mismo
está desierto.
Ra: Gracias, Ricarte por tu valiosa aportación al libro y por tu ejemplo de compro­
miso patriótico. Ha sido un honor.

son y su esposa, Nakawe Luisette Cuebas-Ferguson eran luchadores por los derechos de los
afroamericanos y formaban parte de una clínica vanguardista de acupuntura en la Ciudad
de Nueva York, en la cual daban servicios alternativos pues se temía por los efectos tóxicos de
la quimioterapia sobre los afroamericanos Ellos y otros empleados de la clínica habían sido
acusados por un gran jurado en Nueva York con relación a un robo de un camión blindado
de transporte de dinero de la Brinks.
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RmmonpSoio Dávíi \ | 252
253 I Lucha y espacio de la Liga Socialista PuertorriqueñaJ962'>989
Raymond Soto D/\viijx | 254
255 | Lucha y espacio de la Liga Socialista Puektorriqui^^J9^29^9
Raymond Soto Dávila nació en Brooklyn, Ciu­
dad de Nueva York, en 1948. Se mudó a Puerto
Rico con sus padres y su hermano y hermana
en 1957. Se graduó de escuela superior en la
Francisco Oller de Cataño. Obtuvo bachille­
!
rato en Estudios Generales con concentración
en historia y luego maestría en administración
pública (1978), ambos en el recinto de Rio
Piedras de la UPR. Trabajó en varias agencias
del gobierno e instituciones privadas. Soto Dá­
vila se unió a las luchas patrióticas desde sus
primeros años universitarios ingresando a los
Cuadros Universitarios de la Liga Socialista
Puertorriqueña (LSP) a inicios de la década
del 1970, época en que conoció personalmen­
te a Juan Antonio Corretjer, a Consuelo Lee y
a muchos militantes de la LSP. Estuvo activo
entre otras luchas, en la lucha antimilitarista y
contra la Guerra de Vietnam, la lucha de Vie-
ques en sus diversas jornadas donde hizo des-
¿["X"; obediencia civil y contra el uso del Gran Jura-
do por el gobierno de Estados Unidos como
arma represiva esgrimida contra el indepen-
dentismo. Esto último le representó cárcel y
pérdida de empleo. Ha contribuido con artí­
culos en medios de resistencia como la otrora
Correo de la Quincena de la LSP, Pensamiento
Crítico y Claridad.
El libro Lucha y espacios de la Liga Socialista
Puertorriqueña: 1962-1989, recorre tres déca-
das tanto de propuestas políticas como de la
1’ $ articulación de esas propuestas, nacidas de
los supuestos básicos que inspiraron y dieron
fundamento a la organización: la lucha por
la independencia y la construcción del so­
cialismo con una estructura de partido mar-
xista leninista. Esta historia recorre también
el liderato intelectual de sus fundadores Juan
Antonio Corretjer y Consuelo Lee y la dedi­
cación y valentía de su militancia. Recoge en
una medida más limitada las luchas de otras
organizaciones políticas patrióticas en medio
de encuentros y desencuentros con la LSP. Es
sobre todo un recorrido histórico de la tarea
inconclusa de liberar a Puerto Rico de las ga­
rras del imperialismo de Estados Unidos con
la pretensión de esbozar un análisis político
del mismo desde el punto de vista de alguien
que tanto lo pensó como lo asumió.

lililí
qh01r?33,lDSlBOb11

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