EL ARCOIRIS DEL CORONAVIRUS

En un lugar del cielo, Dios, convoca a los arcángeles como guardianes de la energía de los
colores y mensajeros del arcoíris de los seres humanos ; ya que estaban pensando en
¿cómo tocar los corazones de cada ser humano del planeta tierra?, su misión era
recordarles el significado del amor, aprender amar y amarse los unos a los otros, disfrutar
de las cosas simples de la vida como disfrutar la familia, darse un abrazo y un beso , decir
adiós antes de morir, perdonarse mutuamente, reconciliarse con los otros, entender que la
vida es el tesoro más preciado, hacerse responsables de si mismos, entender que no todo
gira en torno al consumismo y la adquisición de poder; ser solidarios , pero sobre todo,
entender que sus vidas pueden cambiar debido a la fragilidad humana y la falta de
espiritualidad. Así que, los arcángeles propusieron utilizar los colores, creando una
estrategia viral como un juego de colores para armar, con una única solución el amor,
cuando aprendieran los seres humanos interiorizar los colores, descifrarían el mensaje,
porque cada ser iría descubriendo cada color, en la competencia por la vida. En ese
propósito, se unieron todas las jerarquías espirituales, los guías espirituales de cada ser
humano del planeta, se sumaron los seres de luz que canalizan, junto a los maestros
ascendidos, los ángeles y los querubines.

La estrategia consistía en dejar unos colores visibles como pistas, y otros camuflados, para
que los descubran. Los colores visibles el rojo, azul y rosado; el color de la sangre el rojo,
en honor a la sangre de cristo, le dieron forma de corona para encriptar el mensaje del amor
que dejó Jesucristo, solo para aquellos que vean con los ojos del corazón , el color azul del
arcángel Miguel para dar la tranquilidad, para aquellos que puedan calmarse y confiar , que
valoren el agua que permite limpiarse y sanarse , con aquel liquido que recorre y pasa por
cada ser, donde confluyen las energías de todos , como también , ver el cielo desde su
pequeño espacio y sentirse parte de todo y poderse conectar con otros mirándolo , el
arcángel chamuel o samuel con el color rosado para recordar la empatía, la dulzura, la
ternura, invitándolos a valorar el amor desde sus padres y familia, para aquellos que
puedan disfrutar pasar tiempo en familia y se permitan desde la cotidianidad volver a reír y
disfrutasen cada instante del día.
Los colores camuflados distribuidos de esta manera: el arcángel Rafael colocó el verde
para aquellos que valoren y cuiden su salud, que se alimenten sanamente con verduras,
frutas, que extraen caminar por los bosques, abrazar arboles, recuerden los diferentes
verdes entre prados las montañas; el arcángel Jofiel colocó el traje color amarillo para
quienes se alimenten de la energía del sol y valoren recibir un poco de luz , esa caricia
suave del calorcito así sea desde una claraboya o desde su ventana , que extrañen salir y
abrir los brazos para alimentarse de él ;el arcángel Zadquiel con su color violeta tiño los
atardeceres para transmutar las emociones del día y aquellos que disfruten verlos sentirían
como se desvanecerán los miedos; el arcángel Gabriel puso el traje blanco , para quienes
mediten y coloquen su mente en blanco en honor a la niebla, que une a todos los seres que
se conectan con la energía , esa nada y el todo , un unisonó que invita agradecer el aire; el
arcángel Uriel coloco el traje dorado para aquellos que despiertan su conexión espiritual y
puedan visualizar su propia realidad, aquella que puede transcender cualquier situación
como cocreadores del universo , que simplemente les recuerde el libre albedrio eligiendo el
amor y no el miedo y desde esa energía envíen luz dorada conectando los hilos del mundo,
como ese mapa del coronavirus donde la unión hace la fuerza , transformando el dolor en
alegría y el miedo en amor.

Fue así, como llego al planeta tierra esta oportunidad de crecer y cambiar el chip, esta
sociedad, empezó a descifrar cada color y activaron los hilos de luz, entendieron que cada
color del arcoíris tenía algo que ver con su existencia , tanto desde el interior como en el
exterior. Y los seres humanos, aprendieron a comunicarse con el corazón, telepáticamente
con cada ser, empleando la energía del amor, deseando lo mejor, pensando positivamente,
desde la distancia y sintieron esa energía que los unía y así incorporaron cada color en sus
vidas pintaron el arcoíris en cada corazón y transformaron ese planeta, que ascendió a la
quinta (5) dimensión, aprovechando el tiempo propicio, la estación de la primavera, tiempo
para cultivar de nuevo los sentimientos más puros y hermosos, y decidieron sembrar y ver
florecer de nuevo la alegría y la esperanza.

Marisella Ríos García

Licenciada en Etnoeducación y Desarrollo Comunitario
Correo: marisellarg326@gmail.com