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D. Int. Publico Completo
D. Int. Publico Completo
Es también una sociedad de riesgos globales como causa directa del proceso de
mundialización y la interdependencia. Las barreras que han desaparecido con el
proceso de mundialización no sólo han permitido una circulación más libre de
los factores de producción, sino también de los criminales, de los grupos
terroristas o de la contaminación (ej: Atentados del 11 de septiembre de 2001
en Estados Unidos o el aumento del cáncer o de la temperatura de la tierra por
el deterioro de la capa de ozono).
Derecho Contemporáneo:
El DI clásico entró definitivamente en crisis tras la Segunda Guerra Mundial a causa de
diversos factores, dando lugar a un nuevo modelo histórico denominado
Contemporáneo.
El final del siglo XX va a verse caracterizado, por otra parte, por el denominado
proceso de globalización o mundialización. Este proceso tiene su origen en el ámbito
económico, pero va a trasladarse a otros ámbitos de la vida: social, cultural, etc. El
origen se encuentra en la revolución científica y tecnológica: la revolución en las
comunicaciones
que permite estar informado en tiempo real de lo que sucede en cualquier parte del
planeta; el abaratamiento de los medios de comunicación (teléfono, internet); el
abaratamiento de los medios de transporte; etc.
Todos estos avances tecnológicos van a unirse a la celebración de negociaciones entre
los Estados que, inspirados en concepciones de la economía de mercado, van a acordar
un sistema de comercio internacional. Este sistema de comercio global fomenta la libre
circulación de mercancías, servicios y capitales, eliminando las barreras arancelarias e
intentando ir creando un mercado global.
De esta forma, el DI contemporáneo, además de tener que acomodar sus reglas
relativas al comercio internacional, verá desestabilizadas algunas de sus reglas más
clásicas y tendrá que plantearse nuevos ámbitos de regulación y nuevos mecanismos
de cooperación.
CONCEPTO
Son muchas las definiciones que del DI se han dado. Un concepto del Derecho
Internacional General en sentido amplio: Por tal entendemos al sistema de normas y
principios que forman el Ordenamiento jurídico de la Sociedad internacional
contemporánea.
NATURALEZA
FUNCION
Tres son las funciones básicas que desempeña el ordenamiento internacional que se
encuentran en íntima relación:
Otra función de adaptación a las demandas que emanan del medio internacional
capaz de alcanzar objetivos de interés común para dicho grupo social, cuyo
principal postulado jurídico es la cooperación generalizada. Una SI compleja y
dinámica, universal y crecientemente interdependiente, pero heterogénea y
fragmentada, reclama una estructura jurídico formal de carácter institucional,
regida por el principio de cooperación pacífica.
CARACTERES
El carácter relativo del derecho convencional (el nacido de los tratados). Ello
supone que en una sociedad descentralizada, carente de un poder
institucionalizado que se imponga a los sujetos, los Estados están obligados
por aquellas normas convencionales a las que han dado su consentimiento,
de forma que lo que es norma para unos (los que han dado su
consentimiento), no lo es para otros (los que no lo han dado).
El problema del fundamento del Derecho internacional no es una discusión sobre sus
bases sociales, teóricas o políticas sino un debate sobre su naturaleza como Derecho y,
en consecuencia, sobre la juridicidad del sistema y la obligatoriedad de sus normas.
PRINCIPALES CORRIENTES DOCTRINARIAS
El positivismo voluntarista
Para la concepción voluntarista, el derecho se funda en la voluntad del Estado: la fuerza
obligatoria del Derecho Internacional reposa en la voluntad del Estado soberano.
Dentro de esta dirección existen tres posiciones:
El militantismo jurídico
Critican del positivismo su neutralidad ideológica, su radical separación entre Derecho
y valores, así como entre Derecho y política, para reivindicar precisamente lo contrario.
Desde orientaciones ideológicas distintas e incluso contradictorias, pretenden hacer del
Derecho Internacional (y de la doctrina del Derecho Internacional) un instrumento de
acción política.
Doctrina dualista
Para esta doctrina, el DI y el derecho interno son dos órdenes jurídicos radicalmente
diferentes y separados en cuanto al proceso de formación, al contenido material y a la
fuente de creación.
Las consecuencias prácticas de esta separación de los ordenamientos son dos:
Doctrina monista
Para esta doctrina, el DI y el derecho interno son un sólo sistema: hay una unidad en
el ordenamiento jurídico. Para Kelsen, las normas jurídicas encuentran su fundamento
en una norma superior. Las normas se escalonan y la validez de cada norma depende
de su conformidad con la norma de rango superior.
(Apuntes Clase)
CLASIFICACION
El criterio expositivo y enumerativo elegido es el mismo que emplea el art. 38 del
Estatuto del Tribunal Internacional de Justicia.
Enumerados
Los Tratados
La inexistencia de un poder legislativo institucionalizado en la Comunidad
internacional, ha conferido al Tratado internacional una importancia primordial como
medio de creación y de codificación tanto de las normas internacionales no escritas
como de las que adolecen de falta de precisión por encontrarse dispersas en varios
Tratados.
Según el art. 2.1 del Convenio de Viena de 1969: Se entiende por TRATADO un
acuerdo internacional celebrado por escrito entre Estados y regido por el Derecho
Internacional, ya conste en un instrumento único o en dos o en mas instrumentos
conexos y cualquiera que sea su denominación particular.
La Costumbre
Entendemos por costumbre internacional la expresión de una práctica seguida por los
sujetos internacionales y generalmente aceptada por éstos como derecho.
Concepto de Clases: Practica constante y uniforme realizada por los Estados, no
necesariamente desde tiempos inmemoriales, pero que cuando se practico, se hizo con
la convicción de que era jurídicamente obligatoria.
Características (falta)
Elementos
La costumbre está formada por dos elementos: el elemento material, de repetición de
actos o práctica constante y uniforme de los sujetos; y el llamado elemento espiritual,
es decir, la convicción por parte de los sujetos de DI de que se trata de una práctica
que obliga jurídicamente.
Desde la introducción de los mismos en las fuentes del DI por el art. 38 del Estatuto,
se vio el carácter problemático que tenían, poniéndose bien de manifiesto en las
discusiones de la Conferencia de La Haya en 1930. No obstante, y aunque ellos sean
objeto de discusión especialmente en cuanto a su contenido y delimitación, hoy no
cabe duda de que se trata de una fuente del DI muy importante después de su
reconocimiento por el propio Estatuto del T.I.J.
Principio: Son axiomas, puntos de partida de donde surge el conocimiento, que no tienen
que ser probados cada vez que se los invoque.
Los principios generales del derecho aplicables en el ordenamiento internacional tienen
dos procedencias.
En primer término -los más numerosos-, aquellos que han sido recogidos de los
ordenamientos internos; que son los siguientes: a) El de prohibición de abuso
de derecho; b) el de responsabilidad internacional nacida de actos ilícitos y la
restitución de lo adquirido por medio de un enriquecimiento injusto; c) la
excepción de prescripción liberatoria; d) la obligación de reparar los daños debe
abarcar no sólo al daño efectivamente sufrido. Todos los principios generales
anteriormente enumerados han sido recogidos en sentencias de tribunales
internacionales.
Apuntes Clase:
Principio de buena fe
No enumerados
No todas las resoluciones de las OI producen efectos jurídicos, de manera que sólo
aquellas que establecen una regla de derecho en el orden jurídico internacional van a
constituir una fuente autónoma del Derecho internacional.
La mayor parte de estas resoluciones no constituyen fuente autónoma del Derecho
internacional, puesto que no producen efectos jurídicos obligatorios al contener simples
recomendaciones de seguir una conducta determinada o una mera invitación o
exhortación en este sentido y, como tales, consiguientemente, no crean directamente
normas internacionales.
Concepto
Importancia
Su valor en el orden internacional
La labor codificadora de las Naciones Unidas
UNIDAD 2: “Los sujetos en el Derecho Internacional”
El hecho de que algunas entidades que actúan en la escena internacional, como las
empresas transnacionales o las organizaciones internacionales no gubernamentales,
cualquiera que pueda ser su relevancia como actores internacionales, carecen por lo
general de subjetividad internacional al no depender en cuanto a su estatuto jurídico
del DI, sino del Derecho de uno o varios Estados.
Apuntes de clase:
Todos los sujetos del DIP son actores internacionales, pero no todos los actores
internacionales son sujetos:
CONCEPTO
Por eso ha podido decirse que «la extensión de la personalidad jurídica internacional a
las entidades no estatales es obra de los Estados», y que «el que los Estados actúen en
este caso bajo la presión de las fuerzas sociales (nacionales o internacionales) y de sus
reivindicaciones es un dato de la sociología del Derecho internacional que no afecta a
ese papel decisorio que les corresponde en el plano formal».
Esa investidura que ciertos sujetos calificados realizan dotando de personalidad a otras
entidades se apoya, en la verificación de que en éstas concurren algunos de los
requisitos indispensables para la posesión de un cierto grado de capacidad
internacional. De ahí que se suela insistir en la necesidad de llevar a cabo, desde la
ciencia del Derecho, un análisis del Dº positivo a fin de determinar, caso por caso, la
concurrencia de uno o varios de esos requisitos.
Algunos de esos sujetos llegan a alcanzar, por sus propias características y por su
aceptación general, una personalidad internacional objetiva, esto es, no limitada al
círculo de los sujetos cualificados; que los reconocieron.
El otorgamiento de la subjetividad internacional lleva aparejadas una serie de
consecuencias, en la medida en que quien esté en posesión del estatuto de sujeto del
DI se convierte en destinatario de sus normas y queda sujeto a las obligaciones que
éstas le impongan, a la vez que queda revestido de una amplia esfera de libertad que,
no obstante, encuentra sus limitaciones en esas propias normas, dirigidas a respetar la
existencia y la libertad de los demás sujetos; resultando, por lo demás, posible que un
sujeto, precisamente en uso de su capacidad de obrar, se imponga por medio de un
acuerdo internacional limitaciones a su libertad de obrar (neutralización, participación
en ciertas organizaciones supranacionales, etc.).
Clasificación de los sujetos
{ El Estado no tiene sobre si ninguna otra autoridad, salvo la del Derecho internacional }
La soberanía se nos muestra como un principio constitucional del Derecho
internacional, símbolo del hecho de que este último opera sobre la base de
coordinación entre los Estados y no de subordinación entre los mismos, y su esencia
consiste en el derecho a ejercer las funciones de Estado en un plano de independencia
e igualdad respecto de otros Estados.
Tomando como referencia la soberanía territorial, existe una estrecha relación entre el
derecho exclusivo del Estado a ejercer las actividades estatales, y la obligación de
proteger, dentro del propio territorio, los derechos de los restantes Estados y los
derechos que éstos puedan recabar para sus nacionales en territorio extranjero.
Principio de igualdad soberana de los Estados: en virtud de dicho principio todos los
Estados tienen iguales derechos e iguales deberes y son por igual miembros de la
comunidad internacional, pese a las diferencias de orden económico, social, político o
de otra índole. Se trata de una igualdad jurídica, de una igualdad ante el DI, que
garantiza el respeto de la integridad territorial y la independencia política de cada
Estado.
Un rasgo fundamental de las OI, es su autonomía jurídica; esto es, el disfrute de una
personalidad jurídica internacional distinta de la de sus Estados miembros y necesaria
para el cumplimiento de los fines para los que fueron creadas.
A diferencia de los Estados (sujetos soberanos y jurídicamente iguales, que poseen una
personalidad jurídica plena y general), la personalidad de las OI va a estar afectada
por el principio de la especialidad que inspira todo su régimen jurídico. Es decir, que
esta personalidad va a estar limitada al logro de los objetivos y funciones que les
fueron confiados a la OI, tal y como aparecen expresamente enunciados en su Tratado
constitutivo o puedan deducirse del mismo.
Las competencias internacionales van a variar necesariamente de una a otra OI, lo que
exige descender a cada Organización en concreto para saber, en cada caso, qué
competencias internacionales es capaz de ejercer y cuál es el grado de efectividad que
ha alcanzado en la vida internacional.
LOS PUEBLOS
Junto a los Estados y a las Organizaciones internacionales, existen otros actores de las
relaciones internacionales de los que se puede predicar una subjetividad jurídica
internacional si bien ésta esté restringida, en el plano de la capacidad, al ejercicio de
unos derechos específicos y a la asunción de unas concretas obligaciones correlativas a
esos derechos.
La libre determinación de los pueblos:
El Derecho de los Pueblos Coloniales:
Según la Carta de las N.U, pueblo colonial, es considerando aquel que no ha alcanzado
aún la plenitud del gobierno propio pero se encuentra en progreso hacia este objetivo,
y habita en un territorio que está separado geográficamente del país que lo administra
y es distinto de éste en sus aspectos étnicos o culturales, sin perjuicio de poder tener
en cuenta otros elementos, de carácter administrativo, político, económico o histórico,
susceptibles de influir en las relaciones entre la Metrópoli y el territorio y reflejar que
éste se encuentra colocado arbitrariamente en una situación de subordinación.
La Resolución 2625 precisa que «el territorio de una colonia u otro territorio no
autónomo tiene, en virtud de la Carta de las Naciones Unidas, una condición jurídica
distinta y separada de la del territorio del Estado que lo administra», conservando
dicha condición hasta que el pueblo colonial haya ejercido su derecho de libre
determinación.
En lo que se refiere en concreto a los pueblos indígenas, parece oportuno advertir que,
al concurrir en ellos en diverso grado ciertas características vinculadas al concepto de
pueblo, entre ellas el mantenimiento de un particularismo cultural (lengua, religión,
tradiciones, instituciones diferenciadas del resto de la población), la vinculación
ancestral con las tierras que ocupan y la autoidentificación y conciencia de grupo,
vienen reclamando con insistencia, en el seno del Grupo de Trabajo sobre Poblaciones
Indígenas
de las Naciones Unidas, su derecho a la autodeterminación con un alcance limitado a
su vertiente interna.
Tal es asi que el Proyecto de Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de
las poblaciones indígenas reconocen a estas colectividades el derecho a la
autodeterminación, si bien en una forma matizada que se concreta en modelos
abiertos de autogobierno, autogestión y participación amplia y especial en todas las
decisiones del Estado que les conciernan en una u otra medida.
Por otro lado, en el terreno de los derechos humanos, se reconoce que la voluntad del
pueblo es la base de la autoridad del poder público, lo que se traduce en el derecho a
participar en elecciones libres y periódicas. En ese mismo terreno, el DI reconoce a los
pueblos el derecho a su propia supervivencia, bien condenando los actos que se
perpetren con la intención de destruir a grupos nacionales, étnicos, raciales o
religiosos, bien disponiendo la protección de ciertas minorías dentro de los Estados.
En el orden socioeconómico, el consenso de los Estados ha propiciado la exaltación del
derecho de los pueblos a la soberanía permanente sobre sus riquezas y recursos
naturales.
LA PERSONA HUMANA
Se discute en la doctrina si los individuos, son o no son sujetos del DI. Ya hemos
indicado, al hablar de la subjetividad internacional en general, que no basta, para ser
considerado sujeto del orden jurídico internacional, con ser beneficiario de un derecho
o estar afectado por una obligación, sino que se requiere una aptitud para hacer valer
el derecho ante instancias internacionales o para ser responsable en el plano
internacional en caso de violación de la obligación.
Desde esta perspectiva, que se refiere a la capacidad de actual, es preciso decir que el
individuo no puede ser reconocido, en el actual estadio de evolución de la sociedad y el
orden internacionales, como un sujeto del DI general.
Sin embargo, es posible encontrar algunas justificaciones para sostener la posibilidad
de llegar a una subjetividad internacional del individuo en sentido amplio, dependiendo
ello de la influencia que el Derecho de las organizaciones internacionales pueda tener
en la evolución del DI general. Entre tanto es posible sostener que, en ese contexto
restringido del DI particular de algunas organizaciones internacionales, al individuo ya
se le reconoce la titularidad de ciertos derechos y obligaciones de carácter
internacional y, excepcionalmente, una cierta capacidad para hacer valer esos
derechos ante órganos internacionales o para incurrir en responsabilidad internacional
por la violación de esas
obligaciones.
El DI ha sufrido a partir de principios del Siglo xx, con la irrupción de prácticas como la
intervención por causa de humanidad o la protección de las minorías, un proceso de
humanización y de socialización progresivo, añadiendo a sus funciones tradicionales la
de velar por los intereses de los individuos y de los pueblos.
Mediante acuerdos internacionales, los Estados han ido estableciendo diversas normas
dirigidas a la protección de intereses individuales o de grupo, y si bien el ser
beneficiario de esas normas no convierte al individuo en sujeto del DI, tampoco se le
puede reducir por ello a la condición de mero objeto de este orden jurídico.
Podemos identificar entre dichas normas aquellas que protegen al individuo en su vida
(Prohibición de la piratería, reglas del Derecho de la guerra, prohibición del uso de
gases tóxicos y asfixiantes, reglas para la prevención y sanción del genocidio), en su
libertad (abolición de la esclavitud, abolición del trabajo forzado, prohibición de la trata
de seres humanos), en su salud y moralidad (reglamentación de la producción y del
tráfico de estupefacientes, represión de la circulación de publicaciones obscenas).
Entonces los individuos como sujetos del DIP: (Internet)
Tienen al menos un derecho o una obligación internacional.
Swinarski señala como funciones del Derecho internacional humanitario, las siguientes:
Función organizadora. El Derecho internacional humanitario, busca someter al
domino de las leyes una situación de violencia actual. Cabe decir que sirve de
complemento internacional a las insuficiencias, carencias y falencias del derecho
interno del propio Estado, en caso de un conflicto bélico en su territorio. Por lo
tanto, organiza las relaciones entre los Estados o dentro de un Estado, entre las
partes en conflicto un una situación de lucha armada.
La personal, es decir las normas se aplican cuando exista una “víctima”, término
que se definiría para los fines del propio Derecho internacional humanitario
como la persona real o potencialmente afectada por un conflicto armado, ya sea
ella u8na persona civil o un combatiente “fuera de combate” por haber sido
herido, estado enfermo o hecho prisionero.
Para ver más:
http://unamfesadip.blogspot.com.ar/2011/04/derecho-internacional-humanitario.html.
Sujetos vinculados a otras actividades
SUJETOS VINCULADOS A LA ACTIVIDAD RELIGIOSA
La Santa Sede y la Iglesia Católica
Desde que en el año 380 Teodosio I hace del cristianismo la religión oficial del Imperio,
la Iglesia Católica viene participando activamente en las relaciones internacionales.
Dejando aparte ciertas doctrinas según las cuales las relaciones de la Iglesia Católica
con los Estados y con otras Iglesias están reguladas por un Derecho particular que no
es el Derecho de gentes, la práctica actual avala el hecho de que, en cuanto se refiere
al trato diplomático, la celebración de concordatos y la participación en las
organizaciones internacionales, la Iglesia Católica se rige por las normas del DI y en tal
sentido puede ser considerada como un sujeto de este orden jurídico.
Para algunos autores, la Iglesia Católica, por su naturaleza y por los fines que
persigue, no participa en las relaciones jurídicas internacionales, correspondiéndole a
la Santa Sede llevar a cabo esas relaciones.
Para otros autores, teniendo en cuenta la organización de la Iglesia y el contenido de
los concordatos y otros acuerdos (en los que unas veces figura como parte contratante
la Iglesia y otras la Santa Sede), resulta que la Iglesia aparece como una comunidad
cuyos órganos están constituidos por la Santa Sede: así como en los Estados existen
órganos de gobierno que actúan en representación suya, así también la Santa Sede
actuara como órgano de la Iglesia Católica, que sería el verdadero sujeto del DI.
La ciudad del Vaticano
En virtud del arto III del tratado político, “Italia reconoce a la Santa Sede la plena
propiedad, el poder exclusivo y la soberana jurisdicción sobre el Vaticano, tal como
actualmente está constituido con todas sus dependencias y dotaciones, creando de
este modo la Ciudad del Vaticano para los fines especiales y con las modalidades que
contiene el presente tratado”.
De acuerdo con el propio tratado político, la entidad que se crea es reconocida por
Italia como Estado (el Estado de la Ciudad del Vaticano) bajo la soberanía del Sumo
Pontífice.
Ello significa que, de acuerdo con los objetivos de este convenio bilateral (entre el
Reino de Italia y la Iglesia Católica), la Ciudad del Vaticano aparece como un medio
jurídico necesario para asegurar la libertad y la independencia de la Santa Sede en
todos los órdenes, en función de lo cual el art. XXIV, recogiendo la decisión de la Santa
Sede de permanecer extraña a los litigios temporales entre los demás Estados, declara
que la Ciudad del Vaticano será siempre y en todo caso considerada como territorio
neutral e inviolable.
Fueron dictadas por el Vaticano seis leyes orgánicas que constituyen las bases jurídicas
sobre las cuales se asienta el nuevo Estado. De entre ellas destaca la ley fundamental,
que en su artículo 1 dispone que el Sumo Pontífice es el soberano de la Ciudad del
Vaticano y posee la plenitud del poder legislativo, ejecutivo y judicial, y en sus
restantes artículos regula todo lo relativo a los diversos órganos constitucionales del
Estado y a las garantías jurídicas de los derechos e intereses de los particulares. Las
restantes leyes se refieren a las fuentes del derecho, la ciudadanía vaticana y la
residencia, el ordenamiento administrativo, el ordenamiento público, comercial y
profesional, y las prescripciones sobre la seguridad pública.
El elemento que resalta en la regulación de esas seis leyes orgánicas, es que el Estado
de la Ciudad del Vaticano posee un territorio propio, constituido por un espacio
geográfico bien definido en el tratado político de Letrán, sobre el cual no podrá
ejercerse ninguna autoridad que no sea la de la Santa Sede, y posee una población,
formada por los ciudadanos que tengan su residencia estable en la Ciudad del
Vaticano, derivando la residencia de la relación de dignidad, cargo, oficio o empleo,
siempre que se trate de dignidades eclesiásticas para las cuales está prescrita la
concesión de la ciudadanía.
La Ciudad del Vaticano se crea con el objeto de asegurar la libertad y la independencia
de la Santa Sede (en el gobierno pastoral de la diócesis de Roma y de la Iglesia
Católica en Italia y en el Mundo). El Estado de la Ciudad del Vaticano, es un ente con la
especial misión de servir de base territorial a otro, la Santa Sede, y en él se dan los
elementos que caracterizan al Estado y que el DI toma como base para la subjetividad
internacional de éste.
El Estado de la Ciudad del Vaticano ha sido reconocido por una gran cantidad de
Estados. Su representación exterior pertenece al Sumo Pontífice, quien se sirve para
ello de la Secretaria de Estado. El Estado de la Ciudad del Vaticano ha celebrado una
serie de tratados internacionales con Italia (sobre servicios públicos diversos,
transportes, moneda, exenciones fiscales, asistencia hospitalaria, etc.) y con otros
Estados. Es miembro de diversas organizaciones internacionales (entre ellas la Unión
Postal Universal, la Unión Internacional de Telecomunicaciones y la Organización
Mundial de la Propiedad Intelectual).
En el contexto de los conflictos armados internos, a veces los terceros Estados han
reconocido como beligerantes a los grupos o facciones organizados que, en el seno de
un Estado, se alzan contra el poder constituido a través de actos de hostilidad. Este
tipo de reconocimiento, tiene efectos limitados y temporales; su único objetivo es
reconocer a las fuerzas insurgentes los derechos necesarios para llevar a cabo su
esfuerzo bélico durante la contienda.
Si es el gobierno en el poder el que lleva a cabo el reconocimiento de beligerancia,
para él supone aceptar la aplicación integral de las normas del ius in bello en sus
relaciones con los rebeldes, y si son los terceros los que lo otorgan, ello les permitirá
exigir el ser considerados como neutrales por ambas partes beligerantes.
Por otro lado, siendo el reconocimiento de beligerancia un acto discrecional (lo que
significa entre otras cosas que en principio no supone un juicio valorativo sobre la
rebelión sino la pura aceptación de un hecho existente), rara vez se ha hecho uso de él
en la práctica, y ello en una fase avanzada del conflicto, por lo general una vez que
los
rebeldes se han asegurado el control de una parte del territorio nacional y que las dos
partes contendientes están en condiciones de ejercer los derechos de beligerancia en
alta mar.
En particular el control territorial ha sido considerado como una condición esencial de
este tipo de reconocimiento, a fin de que el mismo no sea tenido por un acto de
injerencia en los asuntos internos del Estado en el que el conflicto bélico se desarrolla.
Cruz Roja
Cruz Roja es el nombre común con que se conoce al Movimiento Internacional de la
Cruz Roja y de la Media Luna Roja. Fue fundada en 1863 por Henry Dunant y está
integrada por:
Manejo de desastres
Recuperación posterior de desastres
Tratamiento de salud (HIV, salud de emergencia, saneamiento de agua,
preparación para pandemia humana)
Ultimas misiones:
Terremoto de Chile 2010, Haití 2010, Perú 2007 y 2009, terremoto y tsunami
en Japón, inundación en Ecuador, ayuda humanitaria a Homs (Siria) 2012.
Reconocimiento
CONSIDERACIONES GENERALES
La aparición de un Estado en la escena internacional puede producirse: sin que otros
Estados se vean afectados (caso de la creación de un Estado sobre un territorio no
ocupado), o bien a partir de Estados preexistentes, ya sea resultas de su modificación
(caso de la secesión de una parte del conjunto estatal o de la integración de varios
Estados en uno solo) o de su extinción (caso de la desintegración del Estado originario
y la consiguiente creación a sus expensas de varios Estados nuevos). Muchos Estados,
en fin, han surgido a la vida internacional a consecuencia de los procesos de
descolonización
de territorios.
Una vez que un Estado creado por cualquiera de estas vías reúne de hecho los
elementos que lo caracterizan como tal, puede decirse que existe en tanto que sujeto
pleno del DI. Desde entonces, los otros Estados están en condiciones de verificar su
existencia real, prestándole su reconocimiento.
Parece más cierta la caracterización del reconocimiento como acto declarativo (el
Estado existe de iure desde que concurren en él los elementos básicos de la
estatalidad, limitándose el reconocimiento a verificar tal circunstancia) que como acto
constitutivo o atributivo de la subjetividad.
En este sentido, se lo define como «el acto libre por el cual uno o varios Estados
constatan la existencia sobre un territorio determinado de una sociedad humana
políticamente organizada, independiente de cualquier otro Estado existente, capaz de
observar las prescripciones del Derecho internacional, y manifiestan consiguientemente
su voluntad de considerarlo como miembro de la comunidad internacional».
Sin embargo, aunque el reconocimiento posee un indudable valor declarativo en
relación con la existencia del Estado, no hace sino constatarla, la capacidad de acción
del nuevo Estado en el plano internacional es muy restringida antes de su
reconocimiento formal, siendo éste indispensable para el pleno ejercicio de sus
competencias exteriores o para el pleno despliegue de los efectos de sus actos
jurídicos en el territorio de otro Estado.
Sólo el autor del reconocimiento queda vinculado por él, de modo que puede existir
legítimamente un hecho respecto de unos Estados y no respecto de otros, y puede, en
concreto, reconocerse sólo aspectos parciales de la existencia de tal hecho.
DOCTRINAS
El objeto del Reconocimiento es que uno o varios Estados constaten la existencia sobre
un territorio determinado de una sociedad humana políticamente organizada,
independiente de cualquier otro Estado existente y capaz de observar las
prescripciones del Derecho internacional, y manifestar consiguientemente su voluntad
de considerarlo como miembro de la comunidad internacional.
Es cierto que sin el reconocimiento de un gobierno así surgido podrán darse ciertos
tipos de relaciones entre dos Estados, pero en ningún caso plenas (relaciones
diplomáticas), de modo que el reconocimiento aparece como una actividad estatal
«que decide la existencia y la amplitud de las relaciones internacionales» entre quienes
se reconocen mutuamente.
El reconocimiento del nuevo gobierno de un Estado ya reconocido es el acto libre por el
que uno o varios Estados verifican que una persona o un grupo de personas están en
condiciones de obligar al Estado que pretenden representar y expresan su voluntad de
mantener relaciones con ellas.
De esta caracterización del reconocimiento de gobiernos como acto libre o voluntario
se desprende que se procederá o no a reconocer en función del tipo de relaciones que
se desee mantener con el equipo que pretende representar al Estado, tratándose en
este sentido de un acto de elección política y, como tal, discrecional: en efecto, ningún
sujeto de DI puede obligar a otro a entablar relaciones con él y, por tanto, menos aún,
aquellas que exijan reconocimiento, y no existe, claro está, norma alguna de DI que
así lo establezca; son, en definitiva, criterios de política exterior y no normas jurídico-
internacionales los que influyen en la decisión de reconocer o no.
Ello indica que el reconocimiento de gobiernos, más que el de Estados, está influido
por una serie de factores políticos que hacen difícil su aprehensión según pautas
jurídicas: así, no parece que pueda determinarse mediante normas de DI los requisitos
que debe reunir un gobierno de facto para ser reconocido.
En todo caso, teniendo en cuenta la relevancia del principio de efectividad en nuestra
disciplina así como la seguridad jurídica que debe presidir las relaciones
internacionales, es posible sostener que todo gobierno efectivo y estable (capaz de
ejercer con carácter continuo las funciones políticas del Estado), es un gobierno en el
sentido del DI, siendo irrelevante desde este punto de vista su origen irregular en la
perspectiva del Derecho interno. En otras palabras, del simple hecho de que haya
nacido por vías no constitucionales no se derivan límites jurídicos a su competencia
internacional para actuar en nombre del Estado.
Sin duda por ello se ha podido considerar como la más adecuada desde el punto de
vista del DI la doctrina de la efectividad, según la cual habría obligación de reconocer a
los gobiernos que ejercen un control efectivo sobre un territorio y la población que en
él se asienta.
Cátedra: Acuerdo de voluntades entre dos o más sujetos del DIP, que tienen por
objeto crear, modificar, transferir o extinguir derechos y obligaciones
internacionales.
CLASIFICACIÓN
Por el número de Partes contratantes:
-Generales: Universales
Por su grado de apertura a la participación:
Tratados abiertos: A los que se puede llegar a ser Parte aunque no se haya
tomado parte en su proceso de formación.
Por la materia objeto del Tratado: Los hay de carácter político, económico,
cultural, humanitario, consulares; de establecimiento, etc.
Por su función de creación de obligaciones (según una terminología
originada en la doctrina alemana del siglo XIX, de amplia repercusión y ya
superada):
Tratados-contrato: Los que prevén un intercambio de prestaciones entre los
contratantes.
Tratados-ley: Los que intentan crear una norma de carácter general aplicable a
toda la C.l. o a una parte de ella.
Por la naturaleza de los sujetos que participan:
Tratados entre Estados, entre Estados y otros sujetos del Derecho
Internacional.: Los concordatos de la Santa Sede con los Estados o los acuerdos
de sede entre una organización internacional y el Estado en que ésta tiene su
sede u oficina principal.
Tratados entre otros sujetos del D.I.: Acuerdos de las organizaciones entre si.
Por su duración:
Tratados con un plazo de duración determinado: Pasado el cual se extinguen
CONVENCIONES DE VIENA
1969: La mayoría de los gobiernos que participaron en la redacción de la carta de las
Naciones Unidas, se opuso a que se confiriesen a la ONU facultades para promulgar
normas obligatorias de D.I. También se rechazaron propuestas de conferir a la
Asamblea General, la facultad de imponer a los Estados ciertas convenciones
generales, mediante un voto mayoritario.
La Asamblea Gral. Hará estudios para los fines de: desarrollo progresivo del DIP y
su codificación.
Entró en rigor 11 años después.
Forma del proyecto: Por un lado se proponía que se realice en forma de
codificación y por el otro, en forma de Convención Internacional. Argumentos:
-A favor de la codificación: Resulta más adecuado que los artículos tengan
fundamento independiente. Además, resulta difícil la enunciación en forma de
convención, ya que la codificación tiene la ventaja de posibilitar la incorporación de
normas declarativas y explicativas, que facilitan el conocimiento de los conceptos y
las consideraciones jurídicas. Por otro lado, habría dificultades en caso de que fuera
una convención multilateral y algunos Estados no llegaban a ser partes en ella, o
luego de haberlo sido, denunciaban.
-A favor de la Convención: Es más eficaz que un código para la consolidación del
Derecho, sobre todo para los nuevos Estados que ingresan en la colectividad
internacional. Facilitará a la participación directa en la formulación del Derecho,
además de que esa participación podría brindar conocimientos más amplios y
firmes. (Se adopta esta postura).
Nulidad
Ius Cogens: La opinión de que en definitiva no hay ninguna norma de D.I. de
la cual no puedan prescindir a su arbitrio los Estados en sus acuerdos, resulta
cada vez más difícil de sostener. La Comisión de Derecho Internacional señaló
que las normas de la Carta por las que se prohíbe el uso de la fuerza, son
normas Ius Cogens. En fin, es una norma aceptada y reconocida por la
comunidad internacional de Estados en su conjunto como norma que no admite
acuerdo contrario y que solo puede ser modificada por una norma ulterior de
D.I. Gral. Que tenga el mismo carácter.
Fórmula de Viena: Trata acerca de cuáles Estados pueden formar parte de la
convención de Viena. Se plantearon fórmulas: Fórmula Moscú (no hay
limitaciones, todos los Estados pueden formar parte) y la Fórmula de Viena (Fue
la aprobada, determina que la convención está abierta a todos los Estados
miembros de la ONU, o de algún organismo especializado o la OIEA, la corte
Internacional de Justicia.
Sólo es aplicable a tratados entre Estados, sin embargo dispone que no afecta el
valor de otros acuerdos internacionales no regulados por la misma, por ejemplo los
celebrados entre Estados y Organizaciones Internacionales.
No tiene carácter retroactivo.
La capacidad para perfeccionar un tratado se basa únicamente en las normas de
las organizaciones o naciones implicadas.
Al igual que la Convención de Viena de 1968, ésta, está programada siguiendo los
puntos anteriormente nombrados como: Aplicación, irretroactividad, etc. Que en
muchos casos se comparte la misma información.
2. En una Conferencia diplomática convocada al efecto por un Estado, que invita a los
demás Estados interesados, o por una Organización internacional.
La fase de la negociación culmina con la adopción y la autenticación del texto, actos
que acreditan que el texto adoptado es el convenido, pero que no lo convierten en
obligatorio para los Estados.
2. En el caso especial de adopción del texto por una Conferencia internacional, ésta se
efectuará por mayoría de dos tercios de los Estados presentes y votantes, a menos que
los Estados decidan por igual mayoría una regla diferente.
B) Autenticación: Es un acto jurídico que da fe de la veracidad del texto adoptado, el
cual quedará establecido como auténtico y definitivo. El Estado que ha autenticado no
sólo pasa a tener obligaciones, sino también derechos en relación con el Tratado. En
un tratado multilateral por un número muy significativo de Estados puede llegar a
tener un efecto político y jurídico que vaya mucho más allá de la simple autenticación,
pudiendo incidir, por ejemplo, en la formación de normas consuetudinarias. Formas de
autenticar:
En los Tratados bilaterales, la entrada en vigor suele coincidir con la prestación del
consentimiento.
Convenciones multilaterales, la entrada en vigor suele hacerse depender de la
recepción de un determinado número de ratificaciones o adhesiones.
Irretroactividad: Las disposiciones de un Tratado, no obligarán a una parte respecto de
ningún acto o hecho que haya tenido lugar con anterioridad a la fecha de entrada en
vigor del Tratado para esa Parte, ni de ninguna situación que en esa fecha haya dejado
de existir, salvo que una intención diferente se desprenda del Tratado o conste de otro
modo. Excepciones:
NATURALEZA
Es una declaración unilateral de un Estado y se centra sobre todo en sus efectos
jurídicos: excluir del todo la aplicación de ciertas disposiciones al Estado que la formula
o bien modificar su alcance.
CLASES
EFECTOS:
a) Efectos entre los Estados que no han formulado reservas: Éstas no producen ningún
efecto jurídico entre ellos y no modificarán las relaciones entre los mismos.
b) Respecto a los efectos entre el Estado reservante y los que no han formulado
reservas hay que distinguir:
1. Si la reserva ha sido aceptada por todas las Partes: el Estado reservante es
Parte en el Tratado y sus obligaciones quedan modificadas respecto a los otros Estados
no reservantes, así como las obligaciones de estos últimos respecto de aquél quedan
también modificadas en la misma medida
FUNCIONAMIENTO
1. El de su formulación: la regla general es que el Estado puede realizar reservas al
Tratado en el momento de la firma, la ratificación, la aceptación, la aprobación o la
adhesión a un Tratado, salvo que:
a) La regla general es que tanto las reservas como las objeciones a las mismas pueden
ser retiradas en cualquier momento.
RESERVAS DE LA ARGENTINA EN LA CONVENCION DE VIENA DE 1969
Artículo 1° - Apruébese la "Convención de Viena sobre el derecho de los tratados",
cuyo texto forma parte de la presente ley, que ha sido adoptada por la Conferencia de
las Naciones Unidas sobre el derecho de los tratados y abierta a la firma el 23 de mayo
de 1969, fecha en que fue suscripta por la República Argentina.
3. Cuando, con arreglo a lo dispuesto en los párrafos precedentes, una de las partes
pueda alegar un cambio fundamental en las circunstancias como causa para dar por
terminado un tratado o para retirarse de él, podrá también alegar ese cambio como
causa para suspender la aplicación del tratado.
A) EFECTO GENERAL: Los acuerdos internacionales son una fuente del Derecho
Internacional mediante la cual se crean derechos y obligaciones que debido a su origen
se conocen como derecho convencional y que constituyen el efecto jurídico general del
tratado.
B) EFECTOS ESPECIFICOS:
Los Tratados producen plenos efectos entre las Partes. Solo las Partes pueden
limitar estos efectos mediante una estipulación en el propio Tratado o por medio
de las reservas.
Un problema especial es el relativo a si los Tratados pueden producir
obligaciones y derechos respecto a terceros Estados. Se entiende por tales
aquellos «que no son Partes en un Tratado». La regla general recoge una norma
consuetudinaria anterior a la misma. Se dice que «un Tratado no crea
obligaciones ni derechos para un tercer Estado sin su consentimiento».
Excepciones:
Tratados que establecen obligaciones para terceros Estados: Que las Partes en el
Tratado tengan la intención de crear una obligaciones para Tercer Estado y que el
Tercer Estado acepte de forma expresa y por escrito la obligación.
Tratados que creen derechos en favor de terceros Estados: pueden crearse
derechos a favor de terceros siempre que se cumplan determinados requisitos: l)
que exista la disposición en el Tratado. Se entiende que en su forma expresa; 2)
que los Estados Partes hayan tenido intención de conferir un derecho a un tercer
Estado, a un grupo o a todos los Estados; 3) que el tercer o terceros Estados
asientan al beneficio concedido. Su asentimiento no tiene que ser necesariamente
expreso y 4) que el Tercer Estado cumpla las condiciones que para el ejercicio del
derecho se estipulen en el Tratado o que posteriormente se establezcan sobre la
base del mismo.
Los Tratados como origen de la costumbre: Un efecto especial de los Tratados es la
posibilidad de que a través de ellos se creen costumbres internacionales.
Referencia a la cláusula de Nación más favorecida: Causa extrañeza en principio,
que habiéndose reglamentado las estipulaciones en favor de terceros Estados con
tanta amplitud en la Convención de Viena, no figure en la misma la menor
referencia a la cláusula de Nación más favorecida. Dicha cláusula es una institución
mediante la cual el Estado que la otorga se obliga a extender al Estado beneficiario
de la misma todas las ventajas que concedió o concederá en el futuro a un tercer
Estado, y sin que sea preciso ningún nuevo acuerdo para ello. Se emplea en una
serie de materias, principalmente las comerciales, aduaneras y fiscales, en lo
relativo al trato de extranjeros, a la propiedad industrial y literaria, cuestiones de
Derecho procesal internacional.
OBSERVANCIA
PACTA SUNT SERVANDA: Todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser cumplido
por ellas de buena fe. Una parte no podrá invocar las disposiciones de su derecho
interno como justificación del incumplimiento de un tratado.
b) Las reglas específicas sobre la enmienda de los Tratados multilaterales son las
siguientes:
iíi) Aquellos Estados que lleguen a ser Partes en el Acuerdo después de la entrada en
vigor de la enmienda se regirán por el Acuerdo en su forma enmendada, salvo en sus
relaciones con los Estados que no hayan aceptado la enmienda, con que se regirán por
el Acuerdo en su forma original.
MODIFICACIÓN: Dos o más Estados Partes en un Tratado multilateral podrán
modificarlo concluyendo otro que reglamente sus relaciones mutuas. Condiciones:
a) Que esté prevista en el propio Tratado
b) sin estar prohibida por él, que:
b) RELATIVA O ANULABILIDAD:
2. Cuando el representante del Estado tenía una restricción específica y notificada a los
demos en sus poderes para manifestar el consentimiento del Estado.
3. En caso de error sobre una situación que sea base esencial del consentimiento,
siempre que el Estado que lo alega no contribuyera con su conducta al error o las
circunstancias fueran tan evidentes que estuviera advertido de él.
4. En los casos de dolo, entendiéndose por tal el que deriva de una conducta
fraudulenta de otro Estado negociador
5. En los casos de corrupción del representante de un Estado, efectuada directa o
indirectamente por otro Estado negociador.
TERMINACIÓN
Principio de irretroactividad “el tratado deja de producir efectos desde su terminación”.
Causales de terminación:
Terminación o retiro: por voluntad de las partes, por disposiciones del tratado. Plazo,
condición resolutoria (hasta que se firme un tratado de seguridad), por
consentimiento de todas las partes, por tratado posterior.
a) En los casos que la suspensión se presenta como una alternativa junto con
la terminación:
1- Cuando haya habido una violación grave por una de las Partes. En estos casos se
puede pedir la suspensión total o parcial.
2- Por la imposibilidad temporal de cumplimiento.
3- En los casos de haber sobrevenido un cambio fundamental de circunstancias.
REGISTRO
La sucesión respecto de una parte del territorio de un Estado que tiene lugar
cuando una parte del territorio de un Estado es transferida por este a otro
Estado; también se denomina sucesión parcial.
En caso de un Estado de reciente independencia, es decir, un estado sucesor
cuyo territorio, inmediatamente antes de la fecha de la sucesión de Estados era
un territorio dependiente de cuyas relaciones internacionales era responsable el
Estado predecesor; algunos sectores doctrinales la identifican como sucesión
colonial. En este caso, las circunstancias de la descolonización obligaron a
revisar las reglas de la sucesión; de ahí que los dos convenios distingan la
sucesión colonial o de Estados de reciente independencia de las restantes
sucesiones.
La unificación de Estados es el supuesto de sucesión que tiene lugar cuando dos
o más estados se unen extinguiéndose la personalidad de ambos y forman, de
este modo, un nuevo sujeto de derecho Internacional, el Estado sucesor.
La separación de parte o de partes del territorio de un Estado dando lugar a la
formación de uno o varios Estados sucesores, continúe o no existiendo el Estado
predecesor.
La disolución, que tiene lugar cuando un Estado se disuelve y deja de existir,
formando las partes del territorio del estado predecesor dos o más estados
sucesores.
En cuanto a los efectos, la práctica de las Naciones Unidas, es muy variada. En los
casos de división, escisión o fraccionamiento de un Estado miembro, la practica ha sido
uniforme y consiste en que el nuevo Estado debe solicitar ser admitido como nuevo
miembro de la organización, continuando con su status de miembro el Estado objeto
de la escisión. Por ejemplo, Pakistán respecto a la India, Singapur escindido de la
Federación Malaya y de Blangadesh respecto Pakistan.
Si bien el convenio de Viena establece como norma Gral. el paso de los bienes a los
sucesores, el Convenio tiene en cuenta la posibilidad de una voluntad diferente por
parte de los Estados afectados y acoge el principio de la autonomía de la voluntad de
las partes y diferencia en función de los supuestos:
sucesión respecto de parte del territorio: ladeuda del Estado predecesor pasara
al sucesor en la medida acordada por ambas partes, y a falta de acuerdo las
deudas pasaran en una proporción equitativa, teniendo en cuenta en particular
los bienes, derechos e intereses que pasen al Estado sucesor en relación con
esa deuda del
Estado.
sucesión de un estado de reciente independencia, no pasara ninguna deuda del
estado predecesor al sucesor, salvo acuerdo entre ellos.
caso de unificación, la deuda del estado de los estados predecesores pasara al
estado sucesor.
en los supuestos de separación de partes o de partes del territorio de un estado
para formar un estado nuevo se atendrán al acuerdo entre predecesor y el
sucesor y, a falta de él, a la regla de la proporción equitativa teniendo en
cuenta los bienes, derechos e intereses que pasen al estado sucesor en relación
con esa deuda.
Cuando las Naciones Unidas firmaron la Convención de Viena previeron que era
importante hacer valer los derechos que contiene, por lo que en varios artículos difusos
(es decir que no hay un capítulo que los contenga en orden), establecen las acciones,
los recursos ante juez o árbitro.
Con referencia a la Comunidad Europea, hoy por hoy, la unión europea no es un sujeto
internacional, aunque la evolución desde el tratado de Ámsterdam de 1997, reconoce
la
personería implícitamente, a través de la afirmación de ciertas competencias
convencionales en el ámbito de la PESC y de la Cooperación Policial y judicial en
materia penal, el reconocimiento de una personalidad internacional implícita a la
misma.
Privilegios e inmunidades
ANTECEDENTES
Los principios están recogidos en el art. 2 de la Carta, y pueden ser resumidos en los
siguientes términos:
El principio de igualdad soberana de todos los miembros. (art. 2-1).
Artículo 5: En la Organización tendrá su lugar toda nueva entidad política que nazca de
la unión de varios de sus Estados miembros y que como tal ratifique esta Carta. El
ingreso de la nueva entidad política en la Organización producirá, para cada uno de los
Estados que la constituyen, la pérdida de la calidad de miembro de la Organización.
Artículo 6: Cualquier otro Estado americano independiente que quiera ser miembro de
la Organización, deberá manifestarlo mediante nota dirigida al Secretario General, en
la cual indique que está dispuesto a firmar y ratificar la Carta de la Organización así
como a aceptar todas las obligaciones que entraña la condición de miembro, en
especial las referentes a la seguridad colectiva, mencionadas expresamente en los
artículos 28 y 29 de la Carta.
Artículo 7: La Asamblea General, previa recomendación del Consejo Permanente de la
Organización, determinará si es procedente autorizar al Secretario General para que
permita al Estado solicitante firmar la Carta y para que acepte el depósito del
instrumento de ratificación correspondiente. Tanto la recomendación del Consejo
Permanente, como la decisión de la Asamblea General, requerirán el voto afirmativo de
los dos tercios de los Estados miembros.
Artículo 8: a condición de miembro de la Organización estará restringida a los Estados
independientes del Continente que al 10 de diciembre de 1985 fueran miembros de las
Naciones Unidas y a los territorios no autónomos mencionados en el documento
OEA/Ser.P, AG/doc.1939/85, del 5 de noviembre de 1985, cuando alcancen su
independencia.
COMPOSICIÓN Y FUNCIONES:
Asamblea General:
La Asamblea General es el órgano supremo de la Organización de los Estados
Americanos. Tiene como atribuciones principales, además de las otras que le señala la
Carta, las siguientes:
a) Decidir la acción y la política generales de la Organización, determinar la
estructura y funciones de sus órganos y considerar cualquier asunto relativo a la
convivencia de los Estados americanos;
b) Dictar disposiciones para la coordinación de las actividades de los órganos,
organismos y entidades de la Organización entre sí, y de estas actividades con las de
las otras instituciones del sistema interamericano;
c) Robustecer y armonizar la cooperación con las Naciones Unidas y sus
organismos especializados;
Artículo 81: La presidencia del Consejo Permanente será ejercida sucesivamente por
los representantes en el orden alfabético de los nombres en español de sus
respectivos países y la vicepresidencia en idéntica forma, siguiendo el orden
alfabético inverso. El presidente y el vicepresidente desempeñarán sus funciones por
un período no mayor de seis meses, que será determinado por el estatuto.
Artículo 82: El Consejo Permanente conoce, dentro de los límites de la Carta y de los
tratados y acuerdos interamericanos, de cualquier asunto que le encomienden la
Asamblea General o la Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores.
Artículo 87: El Consejo Permanente podrá, asimismo, por el medio que estime
conveniente, investigar los hechos relacionados con la controversia, inclusive en el
territorio de cualquiera de las Partes, previo consentimiento del Gobierno respectivo.
Artículo 88: Si el procedimiento de solución pacífica de controversias recomendado
por el Consejo Permanente, o sugerido por la respectiva comisión ad hoc dentro de
los términos de su mandato, no fuere aceptado por alguna de las Partes, o cualquiera
de éstas declarare que el procedimiento no ha resuelto la controversia, el
Consejo
Permanente informará a la Asamblea General, sin perjuicio de llevar a cabo gestiones
para el avenimiento entre las Partes o para la reanudación de las relaciones entre
ellas.
Artículo 95: Para realizar sus diversos fines, particularmente en el área específica de
la cooperación técnica, el Consejo Interamericano para el Desarrollo Integral deberá:
a) Formular y recomendar a la Asamblea General el plan estratégico que articule
las políticas, los programas y las medidas de acción en materia de cooperación para
el desarrollo integral, en el marco de la política general y las prioridades definidas por
la Asamblea General.
b) Formular directrices para elaborar el programa-presupuesto de cooperación
técnica, así como para las demás actividades del Consejo.
Artículo 99:El Comité Jurídico Interamericano tiene como finalidad servir de cuerpo
consultivo de la Organización en asuntos jurídicos; promover el desarrollo progresivo
y la codificación del derecho internacional, y estudiar los problemas jurídicos
referentes a la integración de los países en desarrollo del Continente y la posibilidad
de uniformar sus legislaciones en cuanto parezca conveniente.
LA SECRETARIA GENERAL:
Artículo 107: La Secretaría General es el órgano central y permanente de la
Organización de los Estados Americanos. Ejercerá las funciones que le atribuyan la
Carta, otros tratados y acuerdos interamericanos y la Asamblea General, y cumplirá
los encargos que le encomienden la Asamblea General, la Reunión de Consulta de
Ministros de Relaciones Exteriores y los consejos.
Artículo 108: El Secretario General de la Organización será elegido por la Asamblea
General para un período de cinco años y no podrá ser reelegido más de una vez ni
sucedido por una persona de la misma nacionalidad. En caso de que quedare vacante
el cargo de Secretario General, el Secretario General Adjunto asumirá las funciones
de aquél hasta que la Asamblea General elija un nuevo titular para un período
completo.
Artículo 109: El Secretario General dirige la Secretaría General, tiene la
representación legal de la misma y, sin perjuicio de lo establecido en el artículo 91,
inciso b), es responsable ante la Asamblea General del cumplimiento adecuado de las
obligaciones y funciones de la Secretaría General.
Artículo 110: El Secretario General, o su representante, podrá participar con voz pero
sin voto en todas las reuniones de la Organización.
El Secretario General podrá llevar a la atención de la Asamblea General o del Consejo
Permanente cualquier asunto que, en su opinión, pudiese afectar la paz y la
seguridad del Continente o el desarrollo de los Estados miembros. Las atribuciones a
que se refiere el párrafo anterior se ejercerán de conformidad con la presente Carta.
Artículo 111: En concordancia con la acción y la política decididas por la Asamblea
General y con las resoluciones pertinentes de los Consejos, la Secretaría General
promoverá las relaciones económicas, sociales, jurídicas, educativas, científicas y
culturales entre todos los Estados miembros de la Organización, con especial énfasis
en la cooperación para la eliminación de la pobreza crítica.
Artículo 114: El Secretario General Adjunto será elegido por la Asamblea General
para un período de cinco años y no podrá ser reelegido más de una vez ni sucedido
por una persona de la misma nacionalidad. En caso de que quedare vacante el cargo
de Secretario General Adjunto, el Consejo Permanente elegirá un sustituto que
ejercerá dicho cargo hasta que la Asamblea General elija un nuevo titular para un
período completo.
Artículo 115:El Secretario General Adjunto es el Secretario del Consejo Permanente.
Tiene el carácter de funcionario consultivo del Secretario General y actuará como
delegado suyo en todo aquello que le encomendare. Durante la ausencia temporal o
impedimento del Secretario General, desempeñará las funciones de éste. El
Secretario General y el Secretario General Adjunto deberán ser de distinta
nacionalidad.
Artículo 116:La Asamblea General, con el voto de los dos tercios de los Estados
miembros, puede remover al Secretario General o al Secretario General Adjunto, o a
ambos, cuando así lo exija el buen funcionamiento de la Organización.
Artículo 117: El Secretario General designará, con la aprobación del Consejo
Interamericano para el Desarrollo Integral, un Secretario Ejecutivo para el Desarrollo
Integral.
Artículo 118: En el cumplimiento de sus deberes, el Secretario General y el personal
de la Secretaría no solicitarán ni recibirán instrucciones de ningún Gobierno ni de
ninguna autoridad ajena a la Organización, y se abstendrán de actuar en forma
alguna que sea incompatible con su condición de funcionarios internacionales
responsables únicamente ante la Organización.
Artículo 119: Los Estados miembros se comprometen a respetar la naturaleza
exclusivamente internacional de las responsabilidades del Secretario General y del
personal de la Secretaría General y a no tratar de influir sobre ellos en el desempeño
de sus funciones.
Según el artículo 3.1 en caso de un ataque armado por cualquier Estado contra un
Estado Americano, será considerado como un ataque contra todos los Estados
Americanos, y en consecuencia, cada una de las Partes Contratantes se compromete a
ayudar a hacer frente al ataque en ejercicio del derecho inmanente de legítima defensa
individual o colectiva que reconoce el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas.
Se trata del primer tratado de su especie después de la Segunda Guerra Mundial. La
firma del Tratado del Atlántico Norte corresponde a 1949. No todos los estados
miembros de la Organización de Estados Americanos lo han firmado. El Consejo
Permanente de la OEA actúa provisoriamente como organismo. Es el mecanismo de
consulta, pero sólo participan en la votación las partes contratantes del TIAR. El
Consejo es el encargado de evaluar si existen las condiciones para convocar una
Reunión de Consulta de los integrantes del TIAR o la aplicación de las medidas
correspondientes.
La firma del TIAR fue una de las razones por las que Costa Rica disolvió su ejército
en 1948, al considerar a las previsiones del Tratado como garantía suficiente para
asegurar su defensa nacional.
La aplicación interna del DC es una obligación de todos los poderes e instituciones del
estado, incluidas las comunidades autónomas, los municipios y la administración
institucional. En cuanto a la aplicación, corresponde a las Cortes Generales o al
Gobierno, según los casos, la garantía del cumplimiento de estos tratados y de las
resoluciones emanadas de los organismos internacionales.
UNIDAD 5: Órganos de Representación de las Personas Internacionales
5.1 Consideraciones Generales.
Las funciones pueden ser múltiples, relacionadas con las relaciones diplomáticas-
normalmente de paz, o también relaciones regidas por el derecho de guerra. En el
régimen jurídico tanto de los órganos centrales como de los órganos externos incide, el
Derecho Interno del Estado que los crea, configura y delimita sus competencias, por
otro lado, el Derecho Internacional que regula el régimen jurídico internacional de los
mismos, sus funciones, inmunidades, privilegios, etc., y, finalmente, el derecho del
Estado que los recibe que debe prever el reconocimiento de dichas inmunidades y
privilegios, así como su especial protección por las funciones que desempeñan.
Aunque los estados son libres de señalar en su Derecho Interno cuales son los órganos
competentes para gestionar sus relaciones internacionales, de hecho, y por influencias
incluso históricas, los órganos que cumplen funciones de especial relevancia
internacional suelen coincidir en la mayoría de los Estados. De ellos, los principales son
el
Jefe de Estado, el Jefe de Gobierno y el Ministro de Asuntos exteriores (o relaciones) y
los agentes diplomáticos y consulares.
Tales órganos del sujeto internacional tienen origen y carácter interno, pero no solo
ejercen funciones internas, sino también internacionales, por lo que se ha podido
hablar de la existencia de un desdoblamiento funcional. La cuestión es, hasta que
punto tales funciones están reglamentadas por el Derecho Interno o el internacional.
En principio corresponde al derecho interno determinar cuáles son los órganos y las
personas que, mediante una relación orgánica, tienen la facultad de actuar en su
nombre y cuáles son sus competencias respectivas, pero, por su parte, también el
derecho Internacional reconoce cuales son los individuos o los grupos de ellos que
tienen la condición de órganos de los sujetos internacionales y la facultad de hacer
manifestaciones de voluntad que le sean imputables y regula su condición
internacional.
Pero el derecho internacional tiene también en cuenta al Jefe del Estado y el Jefe de
Gobierno. En el artículo 7.2 de la Convención de Viena sobre el Derecho de los
Tratados de 1969 incluye al Jefe de Estado entre los órganos que, en virtud de sus
funciones, se consideran que vinculan a su Estado en materia de tratados sin tener
que presentar plenos poderes.
El artículo 13 del Reglamento del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas,
aunque exige que cada miembro del Consejo de Seguridad ha de estar representado
en las reuniones del mismo por un representante acreditado, añade que el Jefe de
Gobierno o el Ministro de Relaciones Exteriores de cada miembro del Consejo de
Seguridad sin presentar credenciales.
Cuando el jefe de estado o el jefe de gobierno que para el derecho Internacional, goza
de las mismas consideraciones- visita un Estado extranjero, goza internacionalmente
de un status privilegiado en virtud de la necesidad de otorgarle unos medios para
ejercer de forma independiente sus funciones, y no, como se afirmó en virtud de la
ficción de extraterritorialidad. Tales privilegios e inmunidades están contenidos
exclusivamente en normas consuetudinarias. Pues, como señalo el T.I.J en el mismo
asunto, aunque pueden extraerse ciertas enseñanzas útiles sobre uno u otro aspecto
de la cuestión de las inmunidades. Sin embargo, no contienen ninguna disposición
fijando de manera precisa las inmunidades de las que gozan- por tanto el tribunal
deberá resolver sobre la base del derecho internacional consuetudinario.
En relación con el contenido de las normas consuetudinarias internacional es sobre la
materia, los privilegios e inmunidades del Jefe de Estado o de Gobierno cuando visita
un estado extranjero, son en síntesis:
Inmunidad de jurisdicción civil: es la más discutida; hay que distinguir los actos
iuri imperii, realizados en el ejercicio de sus funciones, que quedan exentos, y los
actos privados, sobre los que se suele negar la inmunidad. No obstante, el jefe de
Estado, el jefe de Gobierno o el Ministro de Relaciones exteriores, gozan en los
otros Estados de inmunidades de jurisdicción, tanto civiles como penales. Por lo
que se concluye que las funciones que deben cumplir estas personas, durante toda
la duración de su mandato, se beneficia de una inmunidad de jurisdicción penal y
de una inviolabilidad total en el extranjero. Esta inmunidad y esta inviolabilidad
protegen al interesado contra todo acto de autoridad de parte de otro Estado que
suponga obstáculo al ejercicio de sus funciones.
Tanto este ocupando su cargo como haya dejado ya de hacerlo, estas personas
podrán ser objeto de persecución penal ante determinadas jurisdicciones
penales internacionales en la medida en que estas sean competentes.
La competencia de este tipo de tribunales para conocer de crímenes realizados por
Jefes de Estado o de Gobierno en ejercicio, que carecen de cualquier tipo de inmunidad
ante los mismos, ha sido claramente consagrada. El presente Estatuto será aplicable
por igual a todos sin distinción alguna basada en el cargo oficial. En particular, el cargo
oficial de una persona, sea Jefe de Estado o de Gobierno, miembro de un gobierno o
parlamento, representante elegido o funcionario de gobierno, en ningún caso la
eximirá de responsabilidad penal ni constituirá per se motivó para reducir la pena.
b) Ministro de relaciones Exteriores. Privilegios e inmunidades
Dependen del derecho interno y los regímenes políticos, bajo la dependencia del Jefe
del Estado o del Gobierno, dirige el Ministerio de A. Exteriores- que existe bajo
diversos nombres en todos los estados modernos. Y la rama administrativa que lleva a
cabo la política exterior y se encuentra al frente de la diplomacia de su país.
Corresponden al
derecho interno la reglamentación de sus funciones y la organización del Ministerio del
que es el jefe. Es normal que el Derecho interno le conceda competencia para hacer
declaraciones de voluntad en nombre del Estado en el campo de las relaciones
exteriores.
El art 1 del Real decreto establece: (ES DE ESPAÑA, PERO SIRVE COMO EJEMPLO PARA
LOS DEMAS ESTADOS, SE PUEDE CHAMUYAR)
Al ministerio de Asuntos Exteriores compete, de conformidad con las directrices del
Gobierno y en aplicación del principio de acción en el exterior, las funciones de:
por ser llamado el Agente por el Estado acreditante por distintos motivos-
jubilación, cambio de destino, destitución, para manifestar su descontento ante
el Estado receptor
El que se le preste ayuda por el Estado receptor para obtener, conforme a sus
propias leyes, los locales necesarios para la Misión y, en caso necesario, para
los miembros de la misma
La exención fiscal sobre los derechos y aranceles que percibe la Misión por
actos oficiales.
La exención del derecho de aduanas sobre objetos para uso oficial de la Misión
y los de uso personal del Agente diplomático y su familia, incluidos los de
instalación.
Como inmunidades el Convenio de Viena establece:
La inviolabilidad de los locales de la Mision. Es destacar que el Estado territorial
no solo tiene la obligación de no atentar contra dicha inviolabilidad de los
locales, sino también, como ha reiterado en varias ocasiones el TIJ, de impedir
que cualquier otra persona atente contra la misma
Para gozar de los referidos privilegios e inmunidades se requiere no ser nacional del
Estado receptor ni tener su residencia permanente en el. La propia convención,
extiende ciertos privilegios e inmunidades a los miembros de la familia del diplomático
que formen parte de su casa y no sean nacionales del Estado receptor, y, a los
miembros del personal de servicio de la Misión que tampoco sean nacionales del
Estado receptor ni tengan su residencia permanente en su territorio. A los criados
particulares de los miembros de la Misión que estén en las mismas circunstancias
anteriores se les concede la exención de impuestos y gravámenes sobre los salarios
que perciban por sus servicios.
Las inmunidades de las que gozan los miembros de la misión y los locales, se
mantienen, durante un tiempo razonable, caso de ruptura de relaciones diplomáticas e
incluso de conflicto armado entre el Estado acreditante y el Estado de sede. En
ocasiones, el reconocimiento de estos privilegios e inmunidades ha sido motivo de
abusos tanto por el Estado acreditante, como de los propios agentes. Partiendo de la
base sentada en el art 41 del Convenio de Viena según el cual todas las personas que
gocen de los privilegios e inmunidades deben respetar las leyes y reglamentos del
Estado receptor, este último encuentra en el propio derecho diplomático y consular
respuesta a aquellos abusos. Sin embargo, el particular lesionado por una acción del
agente diplomático, puede ver su pretensión de reparación obstaculizada por la
inmunidad que goza dicho agente.
(NO SE QUE ONDA LA COMPARACION CON EL CONVENIO DE NUEVA YORK, PORQUE
HABLA DE ESTUPEFACIENTES; NO SE SI EL PROFE QUERRA FUMARSE UN FASO O
QUE; NO LA PUSE, SOLO ESTA LA CONVENCION DE VIENE; ADIOS POR SIEMPRE!)
d) Agentes consulares. Nociones generales. Importancia de la Convención de
Viena de 1963. Diferencias entre Cónsul de carrera y Cónsul honorario.
Los agentes oficiales que un Estado establece en ciertas ciudades de otro Estado, con
el fin de proteger sus intereses y los de sus nacionales. Los cónsules son órganos del
Estado que actúan en el extranjero y realizan actos para cumplir su misión, con
exclusión generalmente de los de naturaleza política. En el Convenio de Viena sobre
relaciones consulares de 1963, entiende por funcionario consular a toda persona,
incluido el jefe de la Oficina Consular, encargada con ese carácter del ejercicio de
funciones consulares. Los cónsules NO SON AGENTES DIPLOMATICOS.
En cuanto a las funciones, son muy variadas; de carácter administrativo, de
colaboración con los tribunales de justicia y otras relativas al estado civil de las
personas y las sucesiones. El cónsul ejerce además otras funciones relacionadas con la
navegación marítima, el comercio y el ejercicio de las profesiones. Las funciones son:
a) proteger en el Estado receptor los intereses del Estado que envía y de sus nacionales, sean personas
naturales o jurídicas, dentro de los límites permitidos por el derecho internacional;
b) fomentar el desarrollo de las relaciones comerciales, económicas, culturales y científicas entre el Estado
que envía y el Estado receptor, y promover además las relaciones amistosas entre los mismos, de
conformidad con las disposiciones de la presente Convención;
c) informarse por todos los medios lícitos de las condiciones y de la evolución de la vida comercial,
económica, cultural y científica del Estado receptor, informar al respecto al gobierno del Estado que envía y
proporcionar datos a las personas interesadas;
d) extender pasaportes y documentos de viaje a los nacionales del Estado que envía, y visados o
documentos adecuados a las personas que deseen viajar a dicho Estado;
e) prestar ayuda y asistencia a los nacionales del Estado que envía, sean personas naturales o jurídicas;
f) actuar en calidad de notario, en la de funcionario de registro civil, y en funciones similares y ejercitar otras
de carácter administrativo, siempre que no se opongan las leyes y reglamentos del Estado receptor;
g) velar, de acuerdo con las leyes y reglamentos del Estado receptor, por los intereses de los nacionales del
Estado que envía, sean personas naturales o jurídicas, en los casos de sucesión por causa de muerte que se
produzcan en el territorio del Estado receptor;
h) velar, dentro de los límites que impongan las leyes y reglamentos del Estado receptor, por los intereses de
los menores y de otras personas que carezcan de capacidad plena y que sean nacionales del Estado que
envía, en particular cuando se requiera instituir para ellos una tutela o una curatela;
i) representar a los nacionales del Estado que envía o tomar las medidas convenientes para su
representación ante los tribunales y otras autoridades del Estado receptor, de conformidad con la práctica y
los procedimientos en vigor en este último, a fin de lograr que, de acuerdo con las leyes y reglamentos del
mismo, se adopten las medidas provisionales de preservación de los derechos e intereses de esos
nacionales, cuando, por estar ausentes o por cualquier otra causa, no puedan defenderlos oportunamente;
j) comunicar decisiones judiciales y extrajudiciales y diligenciar comisiones rogatorias de conformidad con
los acuerdos internacionales en vigor y, a falta de los mismos, de manera que sea compatible con las leyes y
reglamentos del Estado receptor;
k) ejercer, de conformidad con las leyes y reglamentos del Estado que envía, los derechos de control o
inspección de los buques que tengan la nacionalidad de dicho Estado, y de las aeronaves matriculadas en el
mismo y, también, de sus tripulaciones;
l) prestar ayuda a los buques y aeronaves a que se refiere el apartado k) de este artículo y, también, a sus
tripulaciones; recibir declaración sobre el viaje de esos buques, encaminar y refrendar los documentos de a
bordo y, sin perjuicio de las facultades de las autoridades del Estado receptor, efectuar encuestas sobre los
incidentes ocurridos en la travesía y resolver los litigios de todo orden que se planteen entre el capitán, los
oficiales, los marineros, siempre que lo autoricen las leyes y reglamentos del Estado que envía;
m) ejercer las demás funciones confiadas por el Estado que envía a la oficina consular que no estén
prohibidas por las leyes y reglamentos del Estado receptor o a las que éste no se oponga, o las que le sean
atribuidas por los acuerdos internacionales en vigor entre el Estado que envía y el receptor.
En cuanto a las clases, hay que distinguir entre:
Cónsules de carrera: son funcionarios públicos del Estado que los nombra y
poseen la nacionalidad de este. Son pagados por el Estado que los envía y no
ejercen, en general, otras funciones que las profesionales
Cónsules honorarios: pueden ser súbditos del Estado que los designa o
extranjeros, y ejercer el comercio u otras profesiones. su servicio es gratuito,
aunque pueden recibir una subvención para gastos de locales y de
representación. La convención de Viena sobre relaciones consulares distingue
muy claramente los privilegios e inmunidades de unos y otros y hace de los
mismos un tratamiento completamente separado.
- Misiones Especiales: es una misión temporal, que tenga carácter representativo del
Estado, enviada por un Estado ante todo con el consentimiento de este último para
tratar con él asuntos determinados o realizar ante él un cometido determinado.
5.3 Derechos y deberes de las personas internacionales. Consideraciones
generales.
(NO SE SI ES ESTO, PERO BUSQUE Y ENCONTRE LOS DERECHOS O EL CONTENIDO
JURIDICO DE LA PERSONALIDAD INTERNACIONAL DE LAS ORGANIZACIONES
INTERNACIONALES; PERO HABLA DE LOS DERECHOS; KISSES)
En cuanto nos referimos a los derechos son;
Por otro lado, Carré de Malberg, en su Teoría General del Estado, tras analizar y
descomponer el concepto de soberanía «en independencia en el exterior y superioridad
en el interior del Estado», manifiesta que el concepto parece doble, pero que, en
definitiva, «soberanía interna y soberanía externa no son sino los dos lados de una sola
y misma soberanía».
b) Restricciones a los derechos de los Estados;
c) Intervención y No intervención. Concepto. Doctrinas Monroe, Drago y
Porter.
Doctrina Monroe: Establecía que cualquier intervención de los estados europeos en América sería
visto como un acto de agresión que requeriría la intervención de Estados Unidos. Interpretar el
principio de la no intervención de los Estados europeos en los asuntos americanos de una manera
absoluta conduciría a que un Estado americano pudiera conculcar los principios de la justicia en
sus relaciones con los individuos extranjeros, violar la ley moral, negarse a tomar en consideración
las justas reclamaciones de los extranjeros perjudicados, crear de este modo un estado de cosas
anormal e ilícito según los principios de Derecho común y de la Moral internacional, y rechazar
después cualquier forma de injerencia para hacer cesar tales manifiestas violaciones de los
principios de la justicia, atrincherándose en el principio de su independencia y en la doctrina de
Monroe escribe Fiore.3 Cuando el presidente de Estados Unidos James Monroe, en 1823, formuló
esa primera doctrina global de su país, «América para los americanos», Diego Portales, un
ciudadano chileno que comerciaba en los puertos del Pacífico y años después sería ministro de
estado en su país, escribió a un amigo: "Si, pero hay que tener mucho cuidado: para los americanos
del norte, los únicos americanos son ellos mismos". Diego Portales : En el siglo XIX el enemigo
principal era la Marina Real Británica y los intereses estadounidenses eran sólo secundarios. 4 Por
otro lado, la Doctrina Monroe no recibió mucha atención en Europa al momento de formularse en
tanto la Santa Alianza estaba informada que la potencia naval estadounidense era bastante
inferior a la británica, y que los proyectos de restablecer el absolutismo en la América
española eran inviables debido a la oposición de Gran Bretaña a secundarlos, y no por desafíos
que Estados Unidos difícilmente podía sostener en esos años.
Doctrina Drago: La Doctrina Drago fue anunciada en 1902 por el ministro de Relaciones Exteriores
argentino, Luis María Drago, en respuesta a la renuncia de los Estados Unidos a ejecutar la
Doctrina Monroe durante el bloqueo naval contra Venezuela. Establece esta doctrina jurídica que
ningún Estado extranjero puede utilizar la fuerza contra una nación americana con la finalidad de
cobrar una deuda financiera. Tal doctrina provino de las ideas de Carlos Calvo, en Derecho
internacional teórico y práctico de Europa y América. La doctrina Calvo proponía prohibir la
intervención diplomática cuando hubiera pleitos entre partes de distintos países, hasta que no
estuvieran agotados los recursos locales. La doctrina Drago resultó ser una respuesta a las
acciones del Reino Unido, Alemania e Italia, quienes impusieron un Bloqueo Naval a Venezuela a
finales de 1902, en respuesta a la gran deuda externa de Venezuela que el recién llegado
presidente Cipriano Castro se negaba a pagar. Frente a este ataque combinado, Estados
Unidos replicó que, como país, no apoyaría a un estado americano que sufriese ataques bélicos
como respuesta a la negativa de pagar sus deudas, pretendiendo que la Doctrina Monroe sólo se
aplicaría cuando dicho país sufriese ataques de potencias europeas motivadas por la intención de
recuperar territorios americanos y colonizarlos. Así surge esta doctrina Drago, como una protesta
por parte de Luis María Drago frente a la actuación de Estados Unidos. Una versión modificada
por Horace Porter fue adoptada en la Haya en 1907. Esta añadió que el arbitraje y litigio deberá
usarse siempre como método de solución de conflictos internacionales antes que recurrir a la
fuerza militar.
FUNDAMENTO: Los derechos de la persona humana, tutelan al ser y las maneras de ser de la
persona en tanto “ontológicamente libre, auto constituyéndose en el tiempo según su proyecto
existencial, apoyada en la realidad de su cuerpo y de su circunstancia a partir del don de la vida”.
Los derechos humanos, se sustentan, “en la libertad ontológica del ser humano, la misma que
hace viable una valoración que se funda en una ideología estimativa que se ha dado en llamar
humanista”. En un mundo pluricultural y pluriideológico, corresponde al humanismo el mérito
de haber ideado una teoría de los derechos humanos que tiene como sólido basamento el
reconocimiento del hombre como fin en sí mismo y no como un medio o instrumento de otros
hombres.
Sin los derechos humanos el hombre no podría realizarse como persona dentro de la
sociedad, ni encaminarse al logro del bien común. En otros términos, sin la protección efectiva de
los “derechos humanos” la vida humana sería imposible, pues carecería de sentido ya que no es
dable vivir sin el reconocimiento y respeto de la libertad inherente al ser humano, del valor de su
vida y de su integridad psicosomática. Los derechos humanos pretenden asegurar el que los
hombres, que cada ser humano, pueda realizarse como persona. Es decir, pueda proyectar su vida
y pueda cumplir su proyecto existencial.
A LA VIDA: derecho que se reconoce a cualquier ser humano que le protege de ser privado
de la vida por terceros, el derecho usualmente se reconoce por el simple hecho de estar vivo, se
considera un derecho fundamental de la persona, y es recogido no sólo entre los derechos del
hombre sino la abrumadora mayoría de legislaciones en forma explícita. Jurídicamente la noción
de vida involucra varios aspectos; la vida humana en sus formas corporales y psíquicas, la vida
social de las personas por medio de la cual estos realizan obras en común y la vida de la naturaleza
que relaciona a los seres humanos con las demás especies vivientes. Entonces cuando este
derecho es regulado son tomados en cuenta estos tres aspectos que, aunque están divididos, se
toman como un todo al momento de ser reguladas, es decir, el correcto cumplimiento de estos
tres puntos dentro de lo que representa el respeto por este derecho hacen que el ser humano no
solo sobreviva (que tenga funciones vitales, sino que viva plenamente, que sugiera una
integridad). La protección a la vida no solo trata de impedir la muerte de una persona, sino toda
forma de mal trato, que haga su vida indigna, matándolo de a poco, o haciendo de su vida un
martirio. Así atentan contra la vida el genocidio (actos destructivos de un grupo por su
nacionalidad, religión, raza o etnia), la desaparición forzada de personas (práctica usual entre los
gobiernos que ejercen terrorismo de estado, para secuestrar a sus enemigos políticos, torturarlos
y muchas veces, matarlos), la esclavitud, las torturas, la fabricación de armas nucleares, y los
malos tratos.
A LA LIBERTAD: la ley toma a la libertad como un derecho que esta otorga. Lo correcto
sería decir que la libertad permite que existan derechos de la ley. La libertad es una facultad
natural de la humanidad. Contamos con ella desde nuestro nacimiento.
A LA FAMILIA: tienes el derecho a tener una familia, a vivir con uno o ambos padres.
A) LA NACIONALIDAD
Para algunos, se trata de un status civil otorgado a un individuo o persona jurídica por el
ordenamiento jurídico de un Estado.
Para otros, se considera como un vínculo que liga a un individuo con una determinada
organización política estatal, determinando la pertenencia jurídica de una persona a la
población de un Estado.
HISTÓRICA: el pueblo comparte características igualitarias que vienen desde hace mucho
tiempo.
Internacional ADQUISICIÓN
IUS SOLIS: nazco en tierra argentina y adquiero nacionalidad argentina. Es el derecho del
suelo en que se nace. La nacionalidad y el derecho de una persona se rigen por la
legislación del país donde ha nacido. Sin perjuicio del derecho de opción de nacionalidad
que pueda corresponderle al llegar a una determinada edad. En consecuencia es
nacional de un estado quien nace en el territorio del estado y por consiguiente igualmente
quien nace en buques o aeronaves del Pabellón del Estado, fuere del espacio marítimo,
aéreo o terrestre de otro Estado, en virtud al principio o ficción de la extraterritorialidad.
IUS DOMICILI: vivo en argentina y tengo mi domicilio real allí, y adquiero nacionalidad
argentina. La nacionalidad se adquiere por el lugar del domicilio, vecindad o residencia
legal, poniendo como requisitos determinados plazos o criterios de arraigo (propiedad,
trabajo, etc.)
IUS OPTANDI: opto por esa nacionalidad. Derecho de optar, es el poder de optar a una
nacionalidad distinta de la que se ostenta, tiene lugar cuando la persona puede escoger
entre dos o más nacionalidad originarias, o, lo que es lo mismo, cuando no concuerden el
derecho del suelo y el derecho de sangre (ius soli- ius sanguinis) y se puede escoger de
entre las nacionalidades a las que se tiene derecho.
PÉRDIDA:
Naturalización
Residencia en el país: por ejemplo, por haber estado dos años residiendo en argentina,
readquiero la nacionalidad.
Convencional: por voluntad de los estados que deciden de común acuerdo conceder a sus
nacionales tal personalidad.
APATRIDIA
No es considerado nacional por ningún Estado. Poseen estándar mínimo de derechos. No poseen
aquellos derechos inherentes a la condición de nacional en un país (ejem: protección diplomática).
Para determinar quiénes son extranjeros para un Estado en concreto existen dos criterios:
b) Restrictivo: según el cual se considera extranjeros a las personas físicas o jurídicas que no son
consideradas como nacionales por el país en que están domiciliadas o en el que son transeúntes o
– en el caso de personas jurídicas-, en cuyo territorio operan, pero son consideradas como
nacionales, suyos por un tercero estado o por varios, en el caso de nacionalidad múltiple. Por
ejemplo la llamada “doble nacionalidad” no convencional. En este supuesto no serían
considerados como extranjeros los apátridas, ya que no son nacionales de un tercer Estado.
NORMAS APLICABLES A LOS EXTRANJEROS: como los nacionales, los extranjeros y los apátridas
están en principio sometidos al derecho interno del Estado en cuyo territorio se encuentran
ocasional o permanentemente, y muy especialmente a las normas de aplicación territorial, de
seguridad pública, y, en general, a todas aquellas cubiertas por el concepto del orden público
interno e internacional. También les obligan las normas internas, especialmente administrativas,
que el Estado promulga para reglamentar el régimen de los extranjeros –como las obligaciones de
estar provistos de pasaporte, de inscribirse en registros especiales o de proveerse de
autorizaciones especiales de trabajo, etc.-. El estudio de todas esas disposiciones corresponde
generalmente en buena parte de países al derecho Internacional Privado. Lo que sí corresponde al
derecho Internacional Público es regular los límites que tiene el ejercicio de esa competencia
personal sobre los extranjeros, si bien respecto de sus nacionales el Estado se ve escasamente
limitado por el D.I. –fundamentalmente por medio de las normas relativas a los derechos
humanos-. Respecto de los extranjeros la soberanía del Estado no sólo se ve limitada por las
normas internas citadas sino por normas impuestas por el D.I. esas limitaciones pueden proceder
del:
Derecho internacional general: aquellas que están dirigidas a garantizar y a hacer respetar
el standard mínimo internacional (protección a la vida, derechos civiles básicos, derechos
de libertad, derecho a la integridad física).
Derecho internacional convencional: ya que los Estados procuran conseguir que los
tratados que celebran con otros Estados en cuyo territorio residen nacionales de los
primeros reconozcan derechos en beneficio de éstos. Estos tratados dan lugar a un
régimen particular para los nacionales de los Estados contratantes. En lo que se refiere
a los derechos individuales de los extranjeros, la fuerte emergencia del D.I. de los
derechos humanos ha provocado que se intente superar la dicotomía nacional-extranjero
al considerarse que los derechos que les amparan tienen su base, en unos y otros, en la
condición humana, y, por tanto, deben ser iguales. Igualmente, las normas relativas a los
derechos económicos también han evolucionado con el cambio de los valores económicos
y políticos que ha vivido la comunidad internacional tras el fin de la guerra fría.
LA ENTRADA DE LOS EXTRANJEROS: la doctrina ha discutido si los Estados están obligados por una
costumbre internacional a admitir a todos los extranjeros que deseen entrar con fines lícitos en su
territorio. A nuestro juicio, la práctica de los Estados es contraria a la existencia de tan norma y los
elementos de la costumbre no son constatables. En el estado actual del D.D., la admisión de los
extranjeros es una cuestión que puede ser apreciada en principio discrecionalmente por el Estado
receptor. La reglamentación en concreto queda a la competencia exclusiva del Estado, que la
regula generalmente mediante disposiciones administrativas.
Segundo, en muchas ocasiones el Estado exige un visado de entrada, que se facilita en los
consulados del país receptos en el extranjero. Este requisito había vivido, en la segunda
mitad del siglo XX, una tendencia hacia su supresión por vía de reciprocidad, sin embargo,
en los últimos años, ante el cada vez mayor número de movimientos de población desde
los países en desarrollo hacia los países desarrollados en búsqueda de mejores
condiciones de vida y la generalización de la inmigración ilegal, los Estados desarrollados
han vuelto a exigir cada vez más el requisito de la previa obtención de visado para entrar
en su país.
Derecho a poder ejercitar determinados derechos civiles básicos, como son los
relativos a las relaciones paterno-filiales y, en general, a los admitidos en la mayoría
de los estados como derechos de familia.
Para determinar el contenido en concreto del standard mínimun habrá que recurrir no
sólo a las normas del D.I. generales y particulares, sino también al derecho comparado, para
extraer del mismo los derechos que se consideran como básicos por la mayoría de las
legislaciones internas.
En los tratados más modernos, no se prevén ya determinados derechos por considerarse que hoy
forman parte del standard mínimun; pero se estipulan otros como la libertad en el ejercicio de
las profesiones liberales, la libertad de establecimiento, el goce de los beneficios de la seguridad
social, la protección contra la doble imposición fiscal, etc.
C) PROTECCIÓN DIPLOMÁTICA:
CONCEPTO
Consiste en la reclamación de un Estado frente a otro Estado que ha cometido un hecho ilícito
internacional, y como consecuencia del cual, ha causado daños a la persona, los derechos del
Estado que ejerce la protección diplomática. El presupuesto de hecho es, por tanto, la comisión de
un hecho ilícito internacional en perjuicio de un nacional o nacionales de otro Estado. Es un
derecho propio del estado y nunca puede ser ejercido por otro sujeto (con la excepción de alguna
organización internacional, en este caso la protección efectuada respecto de los agentes de dicha
organización se denomina protección funcional). Requisitos:
El agotamiento de los recursos internos del Estado causante del daño: la regla del
agotamiento es una regla del Derecho Internacional consuetudinario bien establecida,
confirmada por sentencias de la Corte Internacional de Justicia. El fundamento de la regla
se basaría en el respeto a la soberanía del estado, por lo que el sujeto debería emplear
primero los métodos jurídicos propios del Estado causante del daño antes de que se
pudiese proceder a la protección diplomática.
NATURALEZA JURÍDICA
Sobre estas afirmaciones está de acuerdo toda la doctrina: mediante la protección diplomática el
Estado ejercita un derecho propio y no un derecho del ciudadano o nacional suyo. Una vez que el
estado inicia la protección, la persona física o jurídica no está legitimada para renunciar a la
protección diplomática, o para hacer desistir al estado de una acción emprendida.
Por otra parte, el derecho a ejercer la protección diplomática lo tiene el estado con independencia
de que esté o no previsto en la regulación jurídica del derecho conculcado en la persona de su
nacional.
D) ASILO
CONCEPTO Y CLASES
Los estados están obligados a respetar los derechos humanos pero, desgraciadamente, hay
ocasiones en que las personas se encuentran en situaciones en las que ven amenazada su vida o
libertad por causas diversas. En esos casos, el estado puede –y en ocasiones debe- ejercer algunas
competencias para ayudar a dichas personas. Hay cuatro de esas posibles actuaciones, el asilo
territorial, la protección a los refugiados, el asilo diplomático, y la lucha contra las prácticas
odiosas.
Por ASILO se entiende a la protección que un estado ofrece a personas que no son nacionales
suyos y suya vida o libertad están en peligro por actos, amenazas o persecuciones de las
autoridades de otro Estado o incluso por personas o multitudes que hayan escapado al control de
dichas autoridades. Cabe distinguir dentro de esta institución dos grandes clases: el llamado asilo
territorial o interno y el asilo diplomático, en otros tiempos también denominado asilo
extraterritorial.
Finalmente encontramos incluso una tercera clase de asilo, cuyo verdadero encuadramiento está
dentro del derecho de guerra, y que se conoce por asilo neutral. Por tal se entiende la protección
que concede un estado neutral en tiempo de guerra a miembros de las fuerzas armadas de los
estados beligerantes que buscan refugio en su territorio.
CLASES:
ASILO TERRITORIAL: el asilo territorial es aquella protección que un estado presta en su territorio
al acoger en el mismo a determinadas personas que llegan a él perseguidas por motivos políticos y
cuya vida o libertad se encuentra en peligro en el estado de procedencia. Normalmente son
nacionales de este último o eventualmente pueden ser nacionales de un tercer estado. Este tipo
de asilo concedido a los perseguidos político ha sido una práctica constante por muchos estados,
que lo han hecho figurar incluso en sus constituciones. Por desgracia y vergüenza para el mundo,
la figura del asilo o refugiado político resulta habitual en nuestros días. Ello trae como
consecuencia que, así como para el estado la concesión de asilo es un derecho derivado de su
soberanía territorial, para el particular asilado no aparece como un derecho, sino como una
concesión graciosa del estado asilante.
Por lo que al estado se refiere, así se reconoce expresamente en la declaración sobre Asilo
Territorial aprobada por la asamblea general de las N.U. el 14 de diciembre de 1967, que habla
taxativamente de que el asilo lo concede el estado “en el ejercicio de su soberanía”. Para el
individuo, aunque no está configurado como un derecho personal, la tendencia es encuadrarlo en
la categoría de un verdadero derecho humano. Ello se advierte claramente en el Preámbulo de la
declaración de las N.U. de referencia, en la que se recuerdan expresamente los artículos de la
Declaración Universal de Derechos Humanos, que dice “en caso de persecución, toda persona
tiene derecho a buscar asilo y a disfrutar de él en cualquier país” (art. 14) y “toda persona tiene
derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país” (art. 13 p. 2). Lo que se
traduce en la práctica en el hecho de que, en ciertas ocasiones, el refugiado es protegido por los
estados en forma indirecta, a través de la protección de derechos humanos fundamentales como
la vida, la integridad física y la protección contra la tortura, o el derecho a la vida familiar.
El asilo debe ser respetado por todos los demás Estados (art. 1 de la declaración)
La situación de las personas que se beneficien del asilo interesa a toda la comunidad
internacional.
Quedan excluidos del asilo los que hayan cometidos delitos contra la paz, crímenes de
guerra o delitos contra la humanidad (art. 1.2), dichos delitos se consideran como
crímenes internacionales.
La calificación de las causas del asilo corresponden al estado territorial (art. 1.3). “las
personas comprendidas entre las citadas en el art. 14 de la declaración Universal de
Derechos Humanos y las que luchen contra el colonialismo tienen derecho a que no se les
niegue la entrada en el territorio de los estados y van a ser expulsadas o devueltas a
cualquier otro estado en que puedan ser objeto de persecución”. (art. 3.1)
El estado asilante no permitirá que los asilados se dediquen a actividades contrarias a los
propósitos y principios de las N.U. (art. 4)
Por otro lado, el concepto de refugiado se diferencia también del de asilado por el régimen
jurídico aplicable en una y en otra categoría. Y así, mientras que el asilado político es aquella
persona que recibe una efectiva protección territorial por parte del estado asilante, una persona
puede obtener el reconocimiento del estatuto de refugiado de acuerdo con la convención de 1951
sin que de tal reconocimiento se deduzca para el Estado que le otorga obligación alguna de
conceder al particular un permiso de residencia y de trabajo en su propio territorio. En cualquier
caso, en ambas categorías (refugiado y asilado) presentan un elemento común que se vincula con
dos caracteres básicos. En primer lugar, son categorías que se justifican exclusivamente por la
existencia de unas condiciones de persecución previa basadas en razones de conciencia, ideologías
o políticas; excluyéndose pues toda forma de asilo o refugio que se pretenda basar en la búsqueda
de protección frente a circunstancias adversas de carácter económico, social o de otro tipo que se
dan en el país de origen (pobreza generalizada, crisis social, guerra civil, etc.). Y, en segundo lugar,
se trata igualmente de categorías vinculadas con una persecución individualizada, por lo que el
sistema en ambos casos se establece para proteger a un solicitante individual del asilo o refugio.
Quedan fuera, pues, del régimen protector de ambas categorías las modernas formas de
refugiados económicos (inmigración enmascarada) y refugiados o desplazados en masa (la
mayoría de las veces por motivos económicos o de crisis socio-política profunda en sus países de
origen) a los que la comunidad internacional intenta hacer frente en los últimos años mediante
acuerdos y programas de socorro humanitario ad hoc.
ASILO DIPLOMÁTICO: El derecho de asilo diplomático es una institución típica de los países
latinoamericanos donde ha tenido un cierto desarrollo en la práctica y en el derecho convencional.
El derecho de asilo diplomático ha sido objeto e preocupación de los institutos científicos.
LUGARES EN QUE SE PUEDE CONCEDER ASILO: son las legaciones, los navíos de guerra, y los
campamentos y aeronaves militares.
Al definir las LEGACIONES se entiende por tales “toda sede de misión diplomática ordinaria, la
residencia de los jefes de misión, y los locales habilitados por ellos para habitación de los asilados,
cuando el número de éstos exceda a la capacidad normal de los edificios. Supone, por tanto, esta
prescripción una ampliación de los locales que pueden servir para acoger a los asilados.
Por el contrario encontramos dos supuestos restrictivos: el primero que dice que “las naves de
guerra o aeronaves militares que estuviesen provisionalmente en astilleros, arsenales o talleres
para su reparación no pueden constituir recinto de asilo” y la segunda restricción ha sido el no
haber recogido la sugerencia hecha por la doctrina de que se admita el asilo en los consulados.
Término final del asilo: ellos pueden ser sistematizados de la forma siguiente:
a) se parte del supuesto fundamental de que el asilo diplomático se concede por el tiempo
estrictamente indispensable para que el asilado salga del país con las seguridades otorgadas por el
gobierno del estado territorial, según se dice en el art. 5 de la Convención.
b) se considera una prerrogativa del estado territorial el pedir el fin del asilo, y así se recoge en el
art. 11 de la Convención. También puede pedir la terminación del asilo el estado asilante, como se
indica en el art. 12 de la Convención de Caracas, ya que le faculta para pedir la salida del asilado y
el estado territorial está obligado a dar inmediatamente, salvo caso de fuerza mayor, las garantías
a que se refiere el art. 5 y el correspondiente salvoconducto.
Inmunidad derivado del asilo de hecho: es una prescripción que demuestra bien claramente que
los beneficios del derecho de asilo diplomático van dirigidos a la salvaguarda de las personas
acusadas de delitos políticos, puesto que en el supuesto presente, ante la imposibilidad de
proteger a las personas que hubieran perpetrado delitos comunes, se intenta evitar las
consecuencias penales de los delitos políticos conexos que hubieran podido cometer. La
calificación jurídica de esta prescripción es de suyo difícil, si bien parece que se ha intentado
introducir a la manera de una causa de exención de ciertas responsabilidades penales.
ASILO NEUTRAL: les dan asilo a las fuerzas armadas de otro estado que están en conflicto con otro
estado. Es decir, se concede en tiempos de guerra, a naves y tropas de países en situación de
peligro.
En 1948, la declaración americana de los derechos y deberes del hombre, dispuso en su art. 27,
que todo ser humano posee el derecho de buscar y recibir asilo en territorio extranjero, si la
persecución se basa en delitos no comprendidos entre los de derecho común, basándose en la
legislación del país y en los tratados internacionales. 1969, la Convención Americana sobre
Derecho Humanos dispuso lo mismo, pero ampliando el ámbito de aplicación, a las
persecuciones por motivos políticos y por motivos comunes, pero conexos a los políticos.
Lo siguiente no está en el programa pero el profe lo dijo en clases muchas veces:
REFUGIADOS: aquella persona que debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de
raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opiniones políticas, se
encuentre fuera del país de su nacionalidad, a consecuencia de tales acontecimientos, no
pudiendo o no queriendo regresar a él a causa de dichos temores.
Debe conceder el mismo trato que otorgue a todos los extranjeros, después de 2 años de
residencia gozan de exención de reciprocidad legislativa (art. 7)
El refugiado:
Tiene el deber de acatar las leyes del estado concedente del refugio y medidas de
mantenimiento de orden público (art. 2)
El estatuto persona del refugiado se regirá por el país de su domicilio o residencia –incluso
de matrimonio (art. 12)
Gozan del trato más favorable posible y en ningún caso menos favorable que el concedido
en las mismas circunstancias a los extranjeros: para adquirir bienes inmuebles (art. 13),
para asociarse (art. 15), para adquirir trabajo remunerado (art. 17), para realizar trabajos
por cuenta propia (art. 18), para desarrollar profesiones liberales (art. 19), vivienda (art.
21), enseñanza distinta de la elemental (art. 22), libertad de circulación y de elegir el lugar
de residencia (art. 26)
Gozan de los mismos derechos que los nacionales para practicar su religión y libertad de
instrucción religiosa para sus hijos (art. 4,) los derechos de propiedad intelectual (art. 14),
acceso a los tribunales (art. 16), racionamiento de productos que escaseen (art. 20),
enseñanza elemental (art. 22), asistencia y socorros públicos (art. 23), derechos laborales
y sociales (art. 24).
ACNUR: alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. Fue establecida el 14
de diciembre de 1950 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. Su función: dirigir y
coordinar la acción internacional para la protección de los refugiados a nivel mundial (en la
actualidad 34.6 millones de desarraigados)
Garantizar el ejercicio del derecho a solicitar refugio en otro Estado y disfrutar de él.
DESPLAZADOS INTERNOS: son personas que huyen de las zonas de conflictos o persecuciones
civiles (como los refugiados) sin salir del Estado de su nacionalidad.
D) ESTRADICIÓN
CONCEPTO
Si bien existe una cooperación internacional muy activa para la represión de delitos, continúa
existiendo la regla de que un Estado está obligado a conceder la extradición de un delincuente
extranjero, solamente si existe tratado internacional con el Estado requirente o Convención
Internacional sobre extradición, de la que ambos estados sean firmantes. Cuando no hay tratado o
convención internacional, el estado requerido está facultado para acordar la extradición, pero no
está obligado a concederla.
Sin embargo, la obligación señalada no es absoluta pues siempre el estado requerido conserva la
facultad soberana de no conceder la extradición si de acuerdo a su legislación interna no se
cumplen los requisitos establecidos para tal efecto.
PROCEDIMIENTO
Si se resolviere dar curso al pedido se iniciará el trámite judicial a través del Ministerio
Público Fiscal, quien representará en esta etapa el interés por la extradición. Sin perjuicio
de ello, cabe destacar que el Estado requirente podrá intervenir como parte en el trámite
judicial por medio de apoderados. En cualquier estado del proceso, la persona requerida
podrá prestar su consentimiento libre y expreso a ser extraditada. En este caso, el juez
resolverá sin más trámite
Será competente para conocer en un caso de extradición el juez federal con competencia
penal que tenga jurisdicción territorial en el lugar de residencia de la persona requerida y
que esté en turno al momento de darse la intervención judicial. Recibido el pedido de
extradición, el juez federal librará orden de detención de la persona requerida si es que ya
no se encontrare privada se su liberad. Dentro de las 24 horas de producida la detención
se llevará a cabo una audiencia de identificación, informándose los detalles de la solicitud
de extradición.
Una vez cumplido dicho trámite, el juez dispondrá la citación a juicio de extradición. En el
juicio no se podrá discutir acerca de la existencia del hecho imputado o de la culpabilidad
del requerido, restringiéndose el debate a las condiciones exigidas por el tratado aplicable
o, ante su existencia, por la legislación interna.
Normas dedicadas a la protección internacional del individuo a las que, de modo convencional, se
agrupa bajo la categoría genérica de “derecho internacional de los derechos humanos”. Se
configura así un nuevo sector del ordenamiento internacional caracterizado por su progresividad y
su dimensión axiológica, en el que es posible identificar principios y estructuras comunes a los
distintos sistemas que lo integran. La gran innovación introducida por las normas del derecho
internacional de los derechos humanos radica en la presencia en todos los sistemas que lo
integran de un elemento esencial que se convierte en su principal rasgo distintivo, a saber: la
consideración del individuo y de su dignidad como un valor autónomo de la sociedad
internacional que, por tanto, se convierte en un bien jurídico protegible en si mismo por el
derecho internacional.
Este nuevo Derecho Internacional de los Derechos Humanos es, en lo esencial, el resultado de un
proceso evolutivo en el que se han relacionado, siempre en forma dialéctica, las competencias
estatales, por un lado, y el interés de la Sociedad Internacional, por otro. A lo largo del mismo se
ha producido la superación del viejo principio de la competencia exclusiva del Estado y su
sustitución por una nueva concepción que define a los derechos humanos como materia de
interés internacional. En virtud de esta nueva concepción se establece un modelo de cooperación
entre ordenamientos jurídicos que al tiempo que reconoce una competencia primigenia y directa
al Estado para establecer mecanismos propios de protección y promoción, define la competencia
de la comunidad internacional para adoptar normas en dicho ámbito e –incluso- para establecer
sistemas internacionales de control y fiscalización del comportamiento estatal. Así, si bien es al
estado a quien compete, en primer lugar, proteger los derechos de los individuos sometidos a su
jurisdicción, dicha competencia la ejerce en tanto que deriva de una obligación general que le
viene impuesta por el D.I. y, por consiguiente, sometida a control a través de mecanismos
internacionales.
Desde la perspectiva del D.I., el resultado de este proceso ha sido la adopción de normas
sustantivas que enuncian derechos, algunas de las cuales- como el derecho a la vida o la
prohibición de la tortura- han llegado a integrarse en el bloque cualificado de las normas de ius
cogens. Junto a ellas, las normas procesales han definido mecanismos de control que ofrecen al
particular protección frente al Estado en el plano internacional. Ambas categorías de normas
integran los denominados sistemas internacionales de protección de los derechos humanos,
autónomos respecto de los sistemas estatales, que pueden clasificarse en dos grandes bloques: los
sistemas universales, que se desarrollan en el ámbito del sistema de las Naciones Unidas,
especialmente la O.N.U. y los sistemas regionales, la organización de Estados Americanos y la
Unión Africana.
CARACTERÍSTICAS:
El ejercicio de estos derechos tan sólo podrá ser limitado por ley, para proteger los derechos de
terceros o para satisfacer “las justas exigencias de la moral, del orden público y del bienestar
general en una sociedad democrática”; no podrán ejercerse en contra de los propósitos y
principios de las Naciones Unidas y en ningún caso podrán interpretarse como base para la
supresión de cualquiera de los derechos y libertades contemplados en la declaración”. La
declaración de derechos se complementa con una declaración de deberes, al establecer que “toda
persona tiene deberes respecto a la comunidad, puesto que sólo en ella puede desarrollar libre y
plenamente su personalidad”. La Declaración Universal sienta las bases sustantivas de la ulterior
actividad de la ONU en materia de derechos humanos. Aunque su objetivo es definir un régimen
de derecho aplicable a los derechos humanos y hacerlo mediante la cooperación entre los Estados.
La declaración universal adopta la forma de una mera resolución de la asamblea general.
Los órganos de tratados: hay nueve órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos
que supervisan la aplicación de los principales tratados internacionales de derechos humanos:
Comité para la Protección de los Derechos de todos los Trabajadores Migratorios y de sus
Familiares (CMW)
Por su parte, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, también conocidos como Pactos de Nueva York,
fueron aprobados por la Resolución 2200 A (XXI) de la Asamblea General, de 16 de diciembre de
1966 y, entraron en vigor, respectivamente, el 3 de enero y el 23 de marzo de 1976.
Los pactos de Nueva York recogen la práctica totalidad de los derechos humanos enunciados en la
Declaración Universal, desarrollándolos y dotándolos de unidad mediante la inclusión en ambos
instrumentos de un artículo común que proclama la libre determinación de los pueblos como un
derecho humano. Al margen de este artículo común, cada uno de los Pactos regula por separado
una categoría de derechos, siguiendo un modelo que ya se ha consolidado en el derecho
Internacional de los Derechos Humanos.
Así, el Pacto de los derechos civiles y políticos, se ocupa de los derechos clásicos a la vida, la
integridad, la prohibición de la tortura, la libertad personal, la tutela judicial efectiva, las libertades
de pensamiento, opinión, asociación y reunión, el derecho a la intimidad y a la vida familiar, a la
personalidad jurídica o los derechos específicos de las minorías.
Por su parte, el Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales recoge el derecho al trabajo y
a que el mismo se desarrolle en condiciones dignas, los derechos sindicales, el derecho a la
seguridad social, a la protección de la familia, el derecho a un nivel de vida adecuado (incluyendo
la alimentación, el vestido y la vivienda) y en mejora constante, derecho a la educación y a la
cultura.
El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos ha sido completado desde una perspectiva
material, por el Protocolo Facultativo Segundo Destinado a abolir la pena de muerta, de 15 de
diciembre de 1989, que entró en vigor el 11 de julio de 1991.
La adopción de los dos pactos constituye un cambio cualitativo en el tratamiento de los derechos
humanos, ya que se trata de instrumentos convencionales que imponen obligaciones jurídicas
directamente vinculantes para los Estados partes. No obstante, ha de señalarse a este respecto la
diferencia existente entre ambos pactos por lo que se refiere al tipo de obligaciones impuestas,
como lógica consecuencia de la distinta naturaleza de los derechos reconocidos. Así mientras que
el pacto de derechos civiles y políticos define obligaciones automáticas, asumiendo el Estado el
deber de reconocimiento y garantía inmediata de los derechos enunciados en el mismo.
6.4) MINORÍAS
La declaración de las Naciones Unidas sobre las Minorías, aprobada por consenso en 1992, se
refiere en su artículo 1 a las minorías sobre la base de su identidad nacional o étnica, cultural,
religiosa y lingüística, y dispone que los Estados protejan su existencia. No hay ninguna definición
internacionalmente acordada sobre qué grupos constituyen minorías. Muchas veces se subraya
que la existencia de una minoría es una cuestión de hecho y que toda definición ha de incluir tanto
factores objetivos (como la existencia de una etnia, de una lenguaje o de una religión
compartidos) como factores subjetivos (en particular, que las personas de que se trate han de
identificarse a si mismas como miembros de una minoría).
El término “minoría”, como se utiliza en el sistema de las Naciones Unidas en relación con los
derechos humanos se refiere generalmente a las minorías nacionales o étnicas, religiosas y
lingüísticas, con arreglo a la Declaración de las Naciones Unidas sobre las Minorías. Todos los
Estados tienen en sus territorios nacionales uno o varios grupos minoritarios caracterizados por su
propia identidad nacional, étnica, lingüística o religiosa, que difiere de la identidad de la población
mayoritaria. Un grupo minoritario constituirá una minoría numérica, pero en otros una mayoría
numérica puede encontrarse en una posición similar a la de una minoría o en una posición no
dominante, como ocurrió con los negros en el régimen de apartheid en Sudáfrica. En algunas
situaciones, un grupo constituye una mayoría en el Estado en su conjunto puede encontrarse en
una posición no dominante dentro de una región dada del Estado de que se trate.
Se plantea frecuentemente la cuestión de si, por ejemplo, constituyen minorías las personas que
tienen discapacidades, las personas que pertenecen a ciertos grupos políticos o las personas que
tienen una orientación sexual o una identidad sexual particulares (lesbiana, gays, bisexuales,
transexuales o intersexuales). Si bien la Declaración de las Naciones Unidas sobre las Minorías se
refiere a las minorías nacionales, étnicas, religiosas y lingüísticas, es también importante luchar
contra las discriminaciones múltiples y hacer frente a las situaciones en que una persona
perteneciente a una minoría nacional o étnica, religioso y linguística es también objeto de
discriminación por otros motivos tales como su género, discapacidad u orientación sexual.
Análogamente, es importante tener presente que en muchos países las minorías se encuentran
frecuentemente entre los grupos más marginados de la sociedad, se ven gravemente afectadas,
por ejemplo por enfermedades pandémicas tales como el VIH/SIDA, y en general tienen un acceso
limitado a los servicios médicos.
PRINCIAPLES FUENTE DE LOS DERECHOS DE LAS MINORÍAS: en 1992 la Asamblea General aprobó
por consenso la Declaración de las Naciones Unidas sobre las Minorías (resolución 47/135). La
declaración, que es el principal documento de consulta en lo que se refiere a los derechos de las
minorías, concede a las personas pertenecientes a minorías lo siguiente:
La libertad de ejercer sus derechos, tanto individualmente como en comunidad con otros
miembros de su grupo, sin discriminación (art. 3)
Los estados han de proteger y promover los derechos de las personas pertenecientes a minorías
adoptando medidas para:
Garantizar que puedan ejercer plena y eficazmente todos sus derechos humanos y sus
libertades fundamentales sin discriminación aluna y en plena igualdad ante la ley. (art. 4,
pár. 1); 16
Crear condiciones favorables para que puedan expresar sus características y desarrollar
su cultura, su idioma, su religión, sus tradiciones y sus costumbres (art. 4, pár. 2)
Cooperar con otros Estados en las cuestiones relativas a las minorías, en particular
intercambiando información y experiencia, con el fin de promover la comprensión y la
confianza mutuas(art. 6)
Cumplir las obligaciones y los compromisos que los Estados han contraído en virtud de
los tratados y acuerdos internacionales en que sean partes (art. 8)
LA CONVENCIÓN PARA LA PREVENCIÓN Y LA SANCIÓN DEL DELITO DE GENOCIDIO:
Es una fuente del derecho a la que se hace referencia en la Declaración de las Naciones Unidas
sobre las Minorías para proteger los derechos de las minorías. Es una de las primeras
convenciones aprobadas por la Asamblea General (resolución 260 A (III), de 9 de diciembre de
1948) y trata de la protección de los grupos, incluidas las minorías, y de su derecho a la existencia
física. No se ha establecido ningún mecanismo para supervisar su aplicación. El tribunal penal
Internacional para la ex Yugoslavia 19 y el Tribunal Penal Internacional para Rwanda fueron los
primeros que aplicaron esa convención internacional. En su artículo II se define el genocidio como
“cualquiera de los actos mencionados a continuación, perpetrados con la intención de destruir,
total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal:
Convención sobre los Derechos del Niño: el protocolo relativo a la venta de niños, la
prostitución infantil y la utilización de los niños en la pornografía
Convención sobre la ecología
En su art. 5 se determinan los crímenes que juzgan: genocidio, lesa humanidad, guerra, agresión.
El consejo de seguridad debe acusar al tribunal y hacer la denuncia, o procede de oficio el fiscal.
Las penas que puede establecer la sentencia puede ser de prisión por un plazo no mayor de 30
años o (por la gravedad de los crímenes) cadena perpetua, además de una multa y el decomiso de
las especies que sean de propiedad del condenado. La pena se puede llevar a cabo en el país sede
de la Corte (Holanda) o en otro de acuerdo con los convenios que se puedan establecer entre la
Corte y otros países. El estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional dispone el enjuiciamiento
de actos que abarcan no sólo el crimen del genocidio sino también los crímenes de lesa
humanidad. Los actos que constituyen crímenes de lesa humanidad se enumeran en su art. 7,
párrafo 1. Es importante señalar, por ejemplo, que constituirían violaciones graves del Estatuto de
Roma los traslados forzosos de población que tengan por finalidad o por efecto expulsar a
minorías del territorio en que viven, así como las esterilizaciones forzadas. La CPI es un Tribunal
estable y permanente. Constituye la primera jurisdicción internacional con vocación y aspiración
de universalidad, competente para enjuiciar a personas físicas y, en su casi, depurar la
responsabilidad penal internacional del individuo por los crímenes más graves, de trascendencia
para la comunidad internacional.
Principios aplicables: el funcionamiento de la corte se rige por una serie de normas y principios
que lo transforman en un tribunal especial sólo para conocer casos realmente particulares. Los
principios aplicables son:
Complementariedad: la corte funciona solo cuando un país no juzga o no puede juzgar los
hechos de competencia del tribunal
Nullum crime sine lege: el crimen debe estar definido al momento de la comisión y que
sea competencia de la Corte
Nulla poena sine lege: un condenado por la Corte sólo puede ser pendo como ordena el
Estatuto
Irretroactividad ratione personae: nadie puede ser perseguido por la Corte por hecho o
delitos cometidos con anterioridad a su entrada en vigencia
Improcedencia de cargo oficial: todos son iguales ante la Corte, aunque el acusado sea,
por ejemplo, jefe de Estado.
Imprescripibilidad
Órganos de la Corte: la Corte Penal Internacional se encuentra formada por 4 órganos principales
La presidencia
Está compuesta por el presidente, el primer y el segundo Vicepresidente, quienes son electos por
mayoría absoluta de los jueves por un término renovable de 3 años. La presidencia es
responsabilidad por la administración de la propia Corte, con excepción de la Oficina del Fiscal,
aunque la presidencia coordinará y observará la concurrencia del Fiscal en todos los asuntos de
mutuo interés.
Actualmente, el Juez Phillippe Kirsch funge como presidente, mientras la juez Akua Kuenyehia es la
primera vicepresidente y la juez Elizabeth Odio Benito es segunda vicepresidente de la Corte.
Las Cámaras
División de apelaciones
División de juicio
División de pre-juicio
Cada división es responsable por llevar a cabo las funciones judiciales de la Corte. La división de
Apelaciones se compone por el presidente y otros cuatro jueces, mientras que la dimisión de juicio
y la de pre-juicio cuentan con no menos de seis jueces cada una. Estas dos últimas divisiones se
componen predominantemente de jueces con experiencia en juicios criminales. Los jueces son
asignados a estas divisiones por un período de 3 años y hasta el final de cualquier caso cuya
audiencia haya comenzado.
El mandato de esta oficina es conducir las investigaciones y persecución de crímenes que caen
dentro de la jurisdicción de la corte (crímenes de genocidio, de lesa humanidad y de guerra, en un
período posterior y una vez que los Estados hayan acordado una definición para el crimen de
agresión, la oficina podrá investigar y perseguir este crimen)
A través de las investigaciones y la persecución de tales crímenes, la oficina contribuirá a terminar
con la impunidad para los perpetradores de los más series crímenes de interés para la comunidad
internacional en su conjunto, y así contribuirá a la prevención de tales crímenes.
El fiscal actual es el Sr. Luis Moreno Ocampo quien entró en funciones el 16 de junio de 2003.
La secretaria
La secretaria es dirigida por un secretario elegido por los jueces por un período de 5 años y que
ejercerá funciones bajo la autoridad del presidente de la Corte. Un secretario Adjunto podrá ser
elegido para servir si es requerido.
JUECES
La corte está integrada por 18 jueces que son elegidos a partir de dos listas:
Lista A: consiste en candidatos con gran competencia en derecho penal y procesal, así
como la experiencia necesaria como juez, fiscal, abogado u otra labor similar en proceso
criminales
Son tribunales establecidos por el Consejo de Seguridad de Las Naciones Unidas para juzgar
crímenes cometidos en conflictos específicos, cuyas competencias están restringidas a un periodo
de tiempo y lugar determinados.
Los únicos tribunales ad hoc constituidos en la historia de las NACIONES UNIDAS, hasta la fecha,
son el tribunal para la Ex Yuoslavia (1993) y el Tribunal para Ruanda (1994). Previamente existieron
dos precedentes: los tribunales militares de Nuremberg y de Tokio, creados por los países
vencedores de la II Guerra Mundial para juzgar a los vencidos. Por el contrario, los de la ex
Yugoslavia y Ruanda fueron establecidos por el Consejo de Seguridad, interpretando que la
comisión en esos países de masacres y oras violaciones graves del DERECHO INTERNACIONAL
HUMANITARIO constituían una amenaza a la paz y a la seguridad internacionales, lo cual, en virtud
del capítulo VII de la Carta de Naciones Unidas, faculta al Consejo a intervenir en los asuntos
internos de un Estado.
Además, se estimaba que estos dos tribunales, creados durante bello (durante la guerra) – a
diferencia de los de Nuremberg y Tokio, constituidos post bellum (después de la guerra)-
contribuirán a frenar las violaciones del Derechos Internacional Humanitario que se venían
cometiendo ya restablecer la paz.
Dado que la Carta de las Naciones Unidas no prevé expresamente la constitución de tribunales ad
hoc, cabe interpretarse que el Consejo de Seguridad se extralimitó en el ejercicio de sus
competencias. Sin embargo, lo cierto es que se ha constatado una legitimación de los mismos, por
cuanto los estados han alcanzado un consenso generalizado sobre su admisión.
Según autores como Roberts (1999), la creación de los tribunales para la ex Yugoslavia y para
Ruanda fue un sustituto a otro tipo de intervenciones políticas o armadas por la comunidad
internacional. Ésta, en el marco del consejo de seguridad, no había conseguido un acuerdo
respecto a la política a seguir en ambas crisis, al tiempo que muchos países eran reacios a poner
en peligro la vida de sus soldados con el envío de tropas. Sin embargo, la cobertura de los medios
de comunicación sobre las atrocidades cometidas y la preocupación y movilización de la opinión
pública urgían a la adopción de medidas.
El DIH distingue entre conflicto armado internacional y conflicto armado sin carácter internacional.
En los conflictos armados internacionales se enfrentan, como mínimo, dos estados. En ellos se
deben observar muchas normas, incluidas las que figuran en los Convenios de Ginebra y en el
Protocolo adicional I. En los conflictos armados sin carácter internacional se enfrentan, en el
territorio de un mismo Estado, las fuerzas armadas regulares y grupos armados disidentes, o
grupos armados entre si. En ello se aplica una serie más limitada de normas, en particular las
disposiciones del art. 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra y el Protocolo adicional II.
Una serie de restricciones de los medios de guerra, especialmente las armas, y de los
métodos de guerra, como son ciertas tácticas militares (por ejemplo utilizar uniformes o
distintivos del ejército enemigo durante la batalla, táctica que por cierto, era utilizada por
los alemanes en ciertas ocasiones durante la Segunda Guerra Mundial).
El DIH prevé la obligación de los estados de “respetar” y “hacer respetar” sus normas (art. 1
común a los cuatro Convenios de Ginebra de 1949). La relación jurídica que se genera
convencionalmente, vincula a los estados entre sí. Cada estado parte en los convenios de Ginebra
de 1949 se obliga a respetar y a hacer respetar a los demás estados parte la plena vigencia de sus
enunciados normativos. En la práctica, los estados han sido renuentes a manifestar su intención de
cuestionar a los estados violadores del DIH. En este sentido la posición asumida por terceros
estados respecto de los conflictos armados ha sido generalmente la de impulsar la prevención de
nuevas o reiteradas violaciones.
Si el derecho humanitario tiene por objeto proteger a las víctimas procurando limitar los
sufrimientos provocados por la guerra, los derechos humanos protegen a la persona
humana y favorecen su completo desarrollo.
6.6) LA LABOR DEL CICR- ORIGEN- ANTECEDENTES, ACTUALIDAD- OBJETIVOS QUE PERSIGUE-
RESULTADOS (TODO LO SAQUÉ DE LA PÁGINA OFICIAL DE LA CRUZ ROJA)
Comité Internacional de la Cruz Roja: la acción del CICR se funda en los Convenios de Ginebra
de 1949 y sus protocolos adicionales, así como en los Estatutos de la Institución –y los del
movimiento internacional de la cruz roja y de la media luna roja- y las resoluciones de la
Conferencia Internacional de la Cruz Roja. El CICR es una organización independiente y neutral
que se esfuerza por prestar protección y asistencia humanitarias a las víctimas de los conflictos
armados y de otras situaciones de violencia. Toma medidas para responder a las emergencias
y promueve, al mismo tiempo, el respeto del derecho internacional humanitario y su
aplicación en la legislación nacional.
La dirección, integrada por cinco miembros, está presidida por el director general, señor Yves
Daccord.
DESAFÍOS:
Llegar hasta las personas necesitadas: creemos que es fundamental tener presencia sobre el
terreno y estar cerca de las personas que ayudamos. De este modo, comprendemos mejor sus
necesidades y nuestra respuesta es apropiada y eficiente. Nuestras asociaciones con las
sociedades nacionales de la cruz roja y de la media luna roja son esenciales para lograr esta
proximidad. En muchas partes del mundo, como Afganistán, Malí, la República Democrática
del Congo, Siria o Somalia, resulta sumamente difícil mantener la proximidad con las personas
que asistimos y, a la vez, garantizar la seguridad de nuestro personal. A menudo, los
enfrentamientos y la inseguridad impiden que los colaboradores humanitarios lleguen hasta
las personas afectadas por conflictos armados. En algunos casos, las autoridades o los
grupos rebeldes obstaculizan las actividades de ayuda o simplemente niegan el acceso a las
comunidades vulnerables. En ciertos casos, infrecuentes pero no por ello menos
perturbadores, hemos tenido que afrontar la difícil decisión de suspender nuestra vital labor
humanitaria debido a la inseguridad o problemas políticos. Para nosotros, el hecho de
asegurar que las partes en conflicto comprendan que no tomamos partido y que sólo nos
interesa asistir de manera imparcial a quienes sufren las consecuencias del conflicto o de la
violencia es la clave para llegar a las personas que necesitan ayuda con urgencia.
Promover la participación de las personas y comunidades: creemos que quienes sufren las
consecuencias de los conflictos y de la violencia armado deben desempeñar un papel central a
la hora de determinar la ayuda que necesitan. Conocen su entorno y lo que necesitan.
Después de todo, son las personas afectadas. Hoy, las personas pueden dar a conocer sus
necesidades y pedir ayuda gracias a las nuevas tecnologías. Por ejemplo, en ciertas
situaciones, los SMS o los medios sociales permiten a los beneficiarios comunicarse con las
organizaciones humanitarias desde cualquier lugar. La tecnología puede respaldar la respuesta
humanitaria permitiendo el diálogo entre las personas afectadas por conflictos y quienes
procuran ayudarlas. Sin embargo, la tecnología no debería reemplazar los contactos
personales. Al contar con información fiable y de primera mano, ajustamos nuestras
actividades a las necesidades y vulnerabilidades de las personas y procuramos fortalecer su
capacidad para reconstruir sus vidas y afrontar futuras crisis. Además, solicitamos que nos
informen si sus necesidades han sido satisfechas. Sin embargo, promover la participación de
las personas y comunidades es un objetivo más fácil de enunciar que de cumplir; requiere de
la capacidad de escuchar a todas las partes, comprender la cultura y las costumbres y analizar
cuidadosamente la dinámica local. Si logramos hacer esto, podremos realmente colaborar con
los beneficiarios y estar seguros de que nuestra ayuda proporcionará los beneficios más
amplios y duraderos.
velar por que el DIH cumpla con su finalidad de proteger: si se respetara más el D.I.
humanitario habría menos sufrimiento. Las normas son amplias, pero a menudo los
portadores de armas no las respetan, con consecuencias desastrosas para los civiles. Llegar
hasta la raíz de este problema es una de las prioridades de la CICR. El CICR ha realizado un
estudio exhaustivo del DIH. Los resultados han confirmado la pertinencia de esta rama del
derecho, pero también han identificado algunos puntos débiles importantes en la protección
que depara. Estamos encarando esos puntos débiles mediante nuestra iniciativa
Fortalecimiento del DIH, con miras a reforzar la protección de las personas detenidas en
conflictos armados no internacionales y la eficacia de los mecanismos que velan por el
respeto del DIH. Algunos de los conflictos armados contemporáneos se caracterizan por la
aparición de nuevos medios y métodos de guerra. Las armas de tecnología avanzada, en
particular los aviones no tripulados (drones), los robots o la guerra cibernética ponen a prueba
el actual marco jurídico especialmente formulado para proteger a personas civiles. Por otra
parte, en muchos otros conflictos, el uso de ciertas armas explosivas en zonas densamente
poblada y el acceso no reglamentado a las armas convencionales (como las armas pequeñas)
también son motivo de preocupación. En respuesta a estas situaciones, nos esforzamos por
asegurar que el DIH siga siendo pertinente para los conflictos contemporáneos y que proteja a
los más vulnerables. Sin embargo, la verdadera prueba de la eficacia del DIH reside en el grado
de respeto de sus normas por los combatientes y sus comandantes. Por consiguiente,
procuramos mejorar el respeto del DIH en todo el mundo dialogando con los combatientes y
con las partes que pueden influir en su conducta.
Aprovechar al máximo la ayuda humanitaria: durante los últimos años, el mundo de la ayuda
humanitaria ha registrado un crecimiento sustancial. El entorno humanitario se extiende por el
mundo y exhibe una gran diversidad geográfica, con la intervención de múltiples ONG,
empresas privadas, gobiernos y fuerzas armadas. A veces, estas organizaciones tienen
percepciones diferentes acerca de las necesidades y prioridades de las comunidades que
desean asistir y adoptan enfoques distintos. Como resultado de esta situación, en ciertas crisis
altamente mediáticas, la coordinación plantea grandes dificultades, mientras en que otras,
unas pocas organizaciones se esfuerzan para responder por si solas a ingentes necesidades
que no han llamado la atención de los medios. Nos asociamos con las sociedades nacionales
de la cruz roja y de la media luna roja y otras organizaciones locales, y procuramos mejorar
nuestra coordinación con todas las organizaciones que están presentes sobre el terreno
prestando ayuda de manera imparcial. Creemos que la diversidad de la respuesta humanitaria
facilita una mejor respuesta a las necesidades de las personas vulnerables. Debemos
aprovechar esta diversidad, celebrando acuerdos sobre nuestros valores y principios básicos
comunes y a la vez respetando los cometidos, enfoques y conocimientos de cada organización.
Este enfoque nos permitirá proporcionar la respuesta humanitaria más apropiada para las
personas necesitadas.
ACTIVIDADES ACTUALES:
Agua y hábitat
Mirantes
Salud
Violencia sexual
Seguridad económica
HISTORIA: desde su fundación en 1863, el objetivo único del CICR ha sido prestar protección y
asistencia a las víctimas de los conflictos y enfrentamientos armados. Lo hace mediante la
realización directa de actividades en todo el mundo, así como mediante el fomento del desarrollo
del derecho internacional humanitario y la promoción del respeto de esta rama del derecho por
parte de los gobiernos y de los portadores de armas. Su historia trata del desarrollo de la acción
humanitaria, de los convenios de Ginebra y del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la
Media Luna Roja.
INFORMES: describe el sufrimiento que los conflictos armados infligen en la población civil en todo
el mundo, así como las actividades que está llevando adelante la institución para prestarle
asistencia y protección. Pueden verse en la página oficial por año.
UNIDAD 7: “Los Espacios Marítimos, Fluviales y Polares”
Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho Del Mar (Convemar 1982).
Convenio Internacional para prevenir la Contaminación por los Buques
(Convenio Marpol).
Es necesario distinguir el concepto de DERECHO DEL MAR, del de CONVENCION DEL
MAR:
Derecho del Mar: Es aquel que se refiere al mar, permite resolver las
reclamaciones que efectúan las naciones, de acuerdo con sus intereses, sobre la
utilización de los recursos del océanos.
Protección,
Defensa de su integridad,
Preservación de sus características y elementos naturales y
La tercera conferencia de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar se abrió en
1973 en Jamaica, con un temario amplio y celebro 11 periodos de sesiones. Fue una
convención llamada a prevalecer sobre los convenios de Ginebra.
Se establece que cada Estado tendrá Soberanía más allá de su territorio y sus aguas
interiores, y en el caso de los Estados archipielágicos más allá de sus aguas
archipielágicas, a la franja de mar adyacente que se designa con el nombre de Mar
Territorial, la que se extenderá también al espacio aéreo sobre dicho Mar y al subsuelo
del mismo.
Dicho Mar Territorial se extenderá hasta una anchura de 12 millas marinas medidas a
partir de líneas de base, la que en condiciones normales es la línea de bajamar a lo
largo de la costa.
Organización por medio de la cual las naciones que integran la Convención organizan,
fiscalizan y administran las actividades en la zona
Tribunal Internacional del Derecho del Mar:
Entidad encargada de resolver a la interpretación y aplicación de los derechos y
obligaciones de los miembros de la Convención
Comisión de Límites de la Plataforma Continental:
Su función consiste en examinar los datos y cualquier otro material presentado por los
países relacionados con los límites exteriores de la plataforma continental
B) MAR TERRITORIAL
El Mar Territorial es la faja de agua situada entre las costas del territorio nacional, sean
continentales o insulares, y alta mar. Su anchura es de 12 millas náuticas, medidas a
partir de las líneas de base rectas, líneas de base normales o una combinación de las
mismas.
ZONA CONTIGUA
(TEORICO)
Es el área adyacente al mar territorial del Estado ribereño, y su límite no podrá
exceder las 24 millas náuticas desde las líneas de base a partir de las cuales se mide la
anchura del mar territorial; tiene propósitos de fiscalización aduaneros, de inmigración
o sanitarios.
Es una zona contigua al mar territorial, con finalidades de fiscalización necesarias para
prevenir infracciones a sus leyes y reglamentos aduaneros, fiscales, de inmigración o
sanitarios que se cometan en su territorio o en su mar territorial, o sancionar las
infracciones de esas leyes y reglamentos cometidas en su territorio o en su mar
territorial.
Se extiende hasta las 24 millas marinas a contar desde las líneas de base.
(LIBRO)
La zona contigua se configura así como un nuevo espacio para la protección de ciertos
intereses del ribereño en una extensión de mar más amplia, que mantiene la
naturaleza jurídica de las aguas de la zona como alta mar evitando que el ribereño
recurriera en defensa de sus intereses a expansiones unilaterales de su mar territorial.
La Convención de 1982, respecto a su extensión, el art 33.1 prevé que “la zona
contigua no podrá extenderse más allá de veinticuatro millas marinas contadas desde
las líneas de base, a partir de las cuales se mide la anchura del mar territorial”.
ZONA ECONOMICA EXCLUSIVA
(TEORICO)
Es una zona situada más allá del mar territorial y adyacente a éste; su anchura no se
extenderá más allá de 200 millas náuticas contadas desde las líneas de base a partir
de las cuales se mide la anchura del mar territorial en las que el Estado ribereño tiene:
Derechos de soberanía para los fines de exploración y explotación de todos los
recursos existentes
Jurisdicción con respecto a la instalación y utilización de estructuras hechas por
el hombre y expediciones de investigación.
Otros derechos y deberes
Está sujeta al régimen jurídico específico establecido en esta parte, de acuerdo con el
cual los derechos y la jurisdicción del Estado ribereño y los derechos y libertades de los
demás Estados se rigen por la Convención de 1982.
En dicha Zona, el Estado ribereño tiene derechos de soberanía para exploración y
explotación, conservación y administración de los recursos naturales, vivos o no vivos
(piedras por ej.), de las aguas suprayacentes al lecho y del lecho y subsuelo del mar,
así como la exploración y explotación económica de la zona, tal como la producción de
energía derivada del agua, las corriente y los vientos.
(LIBRO)
Para la Convención de 1982 (art. 55), la zona económica exclusiva se caracteriza:
por ser un área situada fuera del mar territorial y adyacente a éste;
Para una mejor delimitación del concepto, conviene distinguir la zona económica de
otras nociones propias del Derecho del Mar.
Hay que distinguirla del mar territorial, ya que los derechos que el Estado ribereño
ejerce sobre uno y otro no son evidentemente iguales. No obstante, para la medición
de la anchura de la zona económica se parte también de las líneas de base a partir de
las cuales
se mide la anchura del mar territorial (art. 57 de la Convención). Las 200 millas
marinas, anchura máxima aceptada, comprenden tanto el mar territorial como la zona
económica. Pero se habla generalmente de “zona adyacente al mar territorial” y, por
tanto, situada fuera de éste. Por otro lado, los derechos del Estado costero en su zona
económica no provienen del ejercicio de la soberanía territorial; y existen una serie de
limitaciones del Estado ribereño en la zona económica, paralelas a los derechos
reconocidos a los demás Estados, que diferencian de forma clara, pese a las
ambigüedades señaladas, la zona económica del mar territorial. Los derechos que el
Estado ejerce sobre su mar territorial son análogos a los que ejerce sobre su territorio
y aguas interiores con la limitación relativa al «paso inocente». Sin embargo, en la
zona económica los derechos del Estado ribereño están en conexión con la exploración,
explotación, conservación y administración de los recursos naturales de la referida
zona; y los derechos de terceros, especialmente el relativo a las libertades de
comunicación -marítima y aérea-, son prácticamente asimilables a los ejercidos en alta
mar.
Por otro lado, la zona económica, no puede ser considerada como una parcela de alta
mar con características especiales. El régimen de libertades en materia de
comunicaciones en la zona económica no difiere, en líneas generales, del relativo a alta
mar; la Convención hace una remisión expresa al régimen de libertades del alta mar
(art. 58). No obstante, el régimen previsto para la zona económica en la Convención
difiere del relativo al alta mar especialmente en:
la posibilidad de adoptar las medidas necesarias, para hacer cumplir sus leyes y
reglamentos nacionales que pueden llegar al ejercicio del derecho de visita,
inspección, apresamiento y la iniciación de procedimientos judiciales (art 73),
medidas claramente incompatibles con el régimen del alta mar.
La zona económica, sin embargo, no está concebida como un espacio tan «exclusivo»
como para que los terceros Estados queden privados del disfrute de ciertos derechos
en ella:
Derechos de los terceros Estados en general: derecho al ejercicio de las
libertades de navegación, sobrevuelo, tendido de cables y tuberías submarinas
y de otros usos del mar internacionalmente legítimos relacionados con dichas
libertades, tales como los vinculados al funcionamiento de buques, aeronaves y
cables y tuberías submarinos.
Comprende el lecho y el subsuelo de las áreas submarinas que se extienden más allá
del mar territorial de un Estado ribereño y a todo lo largo de la prolongación natural de
su territorio hasta el borde exterior del margen continental.
Posibles casos:
Su anchura se limita a una distancia de 200 millas náuticas contadas desde las
líneas de base a partir de las cuales se mide la amplitud del mar territorial
El borde exterior del margen continental se extiende más allá de 200 millas
náuticas, contadas de las líneas de base desde las cuales se mide la anchura del
mar territorial y la amplitud de esa zona no excederá de 350 millas náuticas ni
se alargará después de las 100 millas náuticas, a partir de la isóbara de 2500
metros.
No comprende el fondo oceánico profundo con sus crestas ni su subsuelo.
Salvo prueba en contrario, el talud continental se determinará como el punto de
máximo cambio de gradiente en su base.
Los derechos del Estado ribereño le permiten ejercer derechos de soberanía a los
efectos de exploración y explotación de sus recursos naturales, y nadie podrá hacerlo
sin su consentimiento, independientemente de su ocupación real o ficticia. Los recursos
naturales mencionados son los minerales y los no vivos del lecho del mar y su
subsuelo,
así como los vivos de especies sedentarias que se encuentren inmóviles en el lecho del
mar o en su subsuelo.
(LIBRO)
DELIMITACION DE LA PLATAFORMA
El Convenio de 1958 distingue los casos de Estados que estén frente a frente y los que
sean limítrofes para la delimitación de la plataforma continental. En ambos casos, la
regla general es que se delimite mediante acuerdo entre ellos; sin embargo, a falta de
acuerdo (y salvo que circunstancias especiales justifiquen otra delimitación) esta se
determinará por la línea media cuyos puntos sean todos equidistantes de los puntos
más próximos de las líneas de base desde donde se mide la extensión del mar
territorial de cada Estado.
La delimitación de la plataforma entre Estados vecinos plantea graves dificultades,
especialmente en presencia de islotes, islas o archipiélagos, cuando la línea de base
sea sumamente dentada por los accidentes de la costa o cuando exista desacuerdo
sobre el sistema de líneas de base rectas seguido por uno u otro Estado al fijar el límite
interior de su mar territorial.
C) EXTENSION
El desacuerdo sobre la anchura del mar territorial constituyó una de las principales
razones de discusión en las reiteradas Convenciones ya mencionadas. Finalmente, en
la Tercera Conferencia se acordó una extensión máxima de doce millas (algo más de
veintidós kilómetros) para el mar territorial, con independencia de la extensión de la
zona contigua (art. 3 de la Convención).
La anchura de doce millas constituye ya una regla consuetudinaria en virtud de la
práctica estatal concordante incluso de los Estados más opuestos en su origen a dicha
extensión. Pero caben excepciones; por ejemplo, salvo acuerdo en contrario, los
Estados adyacentes o con costas situadas frente a frente no podrán extender su mar
territorial más allá de una línea media determinada de forma tal que todos sus puntos
equidisten de los puntos del mar territorial de cada Estado.
LIMITES
¿Desde dónde se mide exactamente dicha anchura? Hay que saber con exactitud cuáles
son la línea de base o límite interior del mar territorial y la línea o límite exterior de
dicho mar:
En cuanto al límite exterior del mar territorial, debe correr paralelo y a una
distancia de esa línea de base que sea siempre igual a la anchura del mar
territorial; pero no se especifica ni aconseja método alguno para el trazado de
ese límite exterior (art. 6 del Convenio de 1958).
De acuerdo con los arts. 4 del Convenio de 1958 y 7 de la Convención de 1982, podrá
utilIzarse excepcionalmente este nuevo sistema consistente en el trazado de líneas
rectas que unan los puntos de referencia apropiados de la costa, cuando ésta tenga
profundas aberturas y escotaduras, o haya una franja de islas a lo largo de ella
situadas en su proximidad inmediata, pudiendo tenerse en cuenta sólo para el trazado
de determinadas líneas los intereses económicos de la región si su realidad e
Ín1portancia es tan demostradas por un prolongado uso de las aguas.
Pero la validez jurídica de este trazado depende de que se cumplan los siguientes
requisitos:
Las líneas rectas no deben apartarse de forma apreciable de la dirección general
de la costa.
Las zonas de mar encerradas por esas líneas, situadas entre éstas y la tierra
firme, deben estar suficientemente vinculadas al dominio terrestre para
someterlas al régimen de las aguas interiores.
Las líneas rectas no pueden trazarse hacia o desde elevaciones que emerjan en
la bajamar, a menos que se hayan construido sobre ellas faros o instalaciones
análogas que se encuentren constantemente sobre el nivel del agua.
El trazado de líneas rectas no puede aislar del alta mar o zona económica
exclusiva el mar territorial de otro Estado.
La delimitación deberá publicarse en cartas marinas y el ribereño les dará
adecuada publicidad, en particular depositando ejemplares de las mismas en la
Secretaria General de la O.N.U.; esta obligación se amplía a toda delimitación
prevista para fijar la anchura del mar territorial (art. 16 de la Convención).
Las elevaciones o fondos que emergen en la bajamar para quedar sumergidos en
pleamar no tendrán mar territorial propio, salvo que se encuentren total o
parcialmente dentro del mar territorial de un continente o isla, en cuyo caso podrán
utilizarse para medir dicho mar territorial (arts. 11 del Convenio de 1958 y 13 de la
Convención).
En ellos, todos los buques y aeronaves gozarán del derecho de “paso en tránsito”, el
que será rápido e ininterrumpido por el estrecho entre una parte de la alta mar o de
una zona económica exclusiva y otra parte de la alta mar o de una zona económica
exclusiva.
Al igual que en el paso inocente, deberán respetar las leyes del Estado ribereño y
abstenerse de amenazas y conductas reñidas con el Derecho Internacional Público.
(LIBRO)
Concepto
Elemento jurídico: que las aguas del estrecho formen parte del mar territorial de
uno o varios Estados. Es decir, a efectos jurídicos sólo puede considerarse como
estrecho aquél donde el mar territorial de uno o más Estados ribereños no deja
extensión alguna de alta mar para la libre navegación a través de dicha vía. En
caso contrario, habría un canal de alta mar a lo largo del estrecho que haría
desaparecer la peculiaridad de esas aguas.
Régimen Jurídico
Los arts. 39, 40, 42 Y 44 de la Convención tratan fundamentalmente tanto sobre los
deberes reciprocas de los buques y aeronaves y de los Estados ribereños durante el
paso por los estrechos, como sobre las leyes y reglamentos, relativos al mismo que los
ribereños pueden dictar.
Son tales los que están constituidos totalmente por uno o varios archipiélagos y que
podrá incluir otras islas.
Por “archipiélago” se entiende un grupo de islas, incluidas partes de islas, las aguas
que las conectan y otros elementos naturales, que estén tan estrechamente
relacionados entre sí que tales islas, aguas y elementos naturales formen una entidad
geográfica, económica y política intrínseca o que históricamente hayan sido
considerados tales.
Los Estados archipielágicos podrán trazar líneas de base rectas que unan los
puntos extremos de las islas y los arrecifes emergentes más alejados del
archipiélago, a condición de que dentro de tales líneas de base queden
comprendidas las principales islas y un área en la que la relación entre la
superficie marítima y la superficie terrestre, incluidos los atolones, sea entre 1 a
1 y 9 a 1 (art. 47.1 de la Convención); es decir, tanto si hay menos de una
parte de agua por una de tierra como si hay más de nueve partes de agua por
una sola de tierra, el trazado no es válido.
Se exige que el trazado de las líneas rectas siga la configuración general del
archipiélago (art. 47.3), que comprenda las principales islas (art. 47.1), y que no se
utilicen elevaciones secas sólo en bajamar, salvo que se hayan construido en ellas
instalaciones que permanezcan siempre sobre el nivel del mar o que esten situadas
dentro del mar territorial de una isla (art. 47.4).
Las anchuras del mar territorial, zona contigua, zona económica exclusiva y plataforma
continental del Estado archipelágico se medirán desde las líneas de base rectas
trazadas tal como queda anteriormente recogido en el art 47 (art. 48 de la
Convención).
Régimen Jurídico
La soberanía del Estado archipielágico se extiende a las aguas encerradas por las líneas
de base archipielágicas trazadas, y se denominan “aguas archipelágicas”. No obstante,
debe permitir el derecho de paso inocente, pero puede establecer las rutas marítimas
previamente establecidas por el Estado archipielágico.
Al igual que en los estrechos internacionales, el Estado archipelágico podrá fijar vías
marítimas y dispositivos de separación del tráfico» siempre de acuerdo con la
Organización internacional competente (la O.M.L) y nunca a propia discreción (art.
53.6 a 11). En estas vías marítimas, se ejerce el derecho de libre paso en tránsito.
Asimismo, el Estado archipelágico puede establecer también rutas aéreas (art. 53.1).
(TEORICO)
Los buques de todos los Estados, sean ribereños o sin litoral, gozan del derecho de
paso inocente a través del mar territorial.
Se entiende por tal el hecho de navegar por el mar territorial con el fin de atravesarlo
sin penetrar en las aguas interiores ni hacer escala en una rada o una instalación
portuaria fuera de las aguas interiores, o dirigirse hacia las aguas interiores o salir de
ellas, o hacer escala en una de esas radas o instalaciones portuarias o salir de ella.
Dicho paso será rápido e ininterrumpido, aunque podrá detenerse y fondear pero sólo
en la medida en que constituyan incidentes normales de la navegación o sean
impuestos al buque por fuerza mayor o dificultad grave o para prestar auxilio.
El paso es inocente mientras no sea perjudicial para la paz, el buen orden o la
seguridad del Estado ribereño.
Se considerará que no es inocente cuando:
El principio general es que por las aguas archipelágicas en general, los buques de
todos los Estados gozan del derecho de paso inocente, en términos idénticos al definido
para el mar territorial.
Por las vías marítimas y rutas aéreas archipelágicas utilizadas normalmente para la
navegación internacional, el régimen de paso es similar al derecho de paso en tránsito,
previsto para los estrechos principales o estratégicos. Entonces, por las rutas
marítimas y aéreas que atraviesen las aguas archipelágicas y el mar territorial
adyacente, todos los buques y aeronaves gozan de los derechos de navegación y
sobrevuelo en el modo normal, exclusivamente a los fines de un tránsito
ininterrumpido, rápido y sin trabas, entre una parte de la alta mar o zona económica
exclusiva, y otra parte de la alta mar o zona económica exclusiva.
E) ALTA MAR
Existen espacios que no están sujetos a la competencia de ningún Estado en concreto,
aunque son susceptibles de utilización por los nacionales de todos los Estados por
diferentes medios, preferentemente mecánicos, como son los navíos abanderados en
los Estados o las naves espaciales matriculadas en ellos.
Esta parte de la Convención se aplica a todas las partes del mar no incluidas en la zona
económica exclusiva, en el mar territorial o en las aguas interiores de un Estado, ni en
las aguas archipielágicas de un Estado archipielágico.
La Alta Mar está abierta a todos los Estados, sean ribereños o sin litoral.
La utilización de la Alta Mar será con fines pacíficos exclusivamente.
LA “ZONA”
El espacio considerado son los abismos marinos y oceánicos y su subsuelo, fuera de los
límites de la jurisdicción nacional, es decir, de las plataformas continentales de los
Estados, rico en nódulos polimetálicos -prioritariamente manganeso, cobre, níquel,
cobalto y molibdeno, sulfuros polimetálicos -cobre, zinc, plata, oro y platino; cortezas
de hierro y manganeso depositadas en las laderas de los volcanes submarinos inactivos
con alto contenido de cobalto; y unos nuevos microbios descubiertos, frente de nuevos
compuestos para aplicaciones industriales y químicas, que, siguiendo la Convención de
las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982, en adelante se designará como
«la Zona» (art. 1.1).
Todos los Estados tienen derecho a que sus nacionales se dediquen a la pesca en Alta
Mar, pero deben adoptar medidas de conservación de los recursos vivos. Para ello, a
partir del Art. 133 se establece “La Zona”, espacio delimitado a partir del límite
exterior de la plataforma continental y para patrimonio común de la Humanidad.
Los recursos que allí existan pueden aprovecharse, pero debe ser en beneficio de la
Humanidad.
Para su control y administración se crea la Autoridad, con una Empresa y normas para
su mantenimiento y sostén.
Las necesidades del comercio internacional han originado que determinadas vías de
agua navegables, en principio sometidas a la competencia territorial de los Estados,
hayan sido objeto de un régimen de internacionalización con el fin de asegurar la
libertad de navegación por las mismas.
Esta última postura es quizás la más sugerente. La cuenca hidrográfica puede definirse
como una zona en la que todas las corrientes de agua se alimentan en una vertiente
común y afluyen por una o más vías comunes a un mar, a un lago o a algún lugar
interior sin visible salida al mar; incluye por tanto los ríos, lagos, afluentes, aguas
subterráneas e incluso capas freáticas a condición de que todas estas aguas estén
unidas en un mismo sistema hidrológico. Desde el punto de vista de su utilización la
cuenca hidrográfica también constituye una unidad económica.
Cuando una cuenca hidrográfica está dividida por fronteras políticas su uso y
aprovechamiento por los distintos Estados debe tener en cuenta tanto la unidad
geográfica como económica de la zona. Es esta realidad la que un amplio sector
doctrinal y de la práctica de los Estados quiere expresar con el concepto de «cursos de
agua internacionales»; para ellos, la expresión más que hacer referencia al concepto
jurídico de frontera política ha de apoyarse preferentemente en una noción física y
económica: la cuenca hidrográfica y sus aprovechamientos.
REGIMEN JURIDICO
Con la expresión derecho de los cursos de agua internacionales nos referimos al
conjunto de normas internacionales que establecen los derechos y obligaciones de los
Estados en orden al uso, conservación y aprovechamiento de dichas aguas.
La primera cuestión que esta regulación plantea es la de la soberanía de los Estados
ribereños sobre la parte del curso de agua internacional que está en su territorio.
La aplicabilidad del concepto de soberanía a los usos de los cursos de agua, entraña
ciertas peculiaridades en función de las características físicas del agua, y de la
situación
geográfica del Estado en relación a dichas aguas. Así, de nada servirla a un Estado
situado aguas abajo prohibir determinados usos para evitar la contaminación de sus
aguas, si los Estados situados aguas arriba los permiten; ni tampoco serán eficaces las
medidas que adopte pata mantener el nivel de las aguas de un rio o lago fronterizo, si
el Estado ribereño de la otra orilla autoriza rebajar dicho nivel.
El principio de soberanía no hará que en una orilla el nivel siga alto cuando disminuye
en la otra. Es decir, la conservación, utilización y aprovechamiento de los cursos de
agua internacionales lleva implícita la idea de la cooperación entre los Estados
ribereños o, cuando menos, la necesidad de establecer unos determinados límites al
ejercicio de su soberanía sobre las aguas que pasan por su territorio.
La obligación general que tienen los Estados del curso de agua de cooperar
entre sí a fin de lograr una utilización óptima, y una protección adecuada del
curso de agua internacional; cooperación que deberá realizarse teniendo en
cuenta los
principios de igualdad soberana de todos los Estados, el respeto a su integridad
territorial, y el provecho mutuo.
El intercambio regular entre los Estados del curso de agua, de los datos e
informaciones de que puedan disponer sobre el estado de los cursos de agua y
las previsiones correspondientes (datos y previsiones de carácter hidrológico,
meteorológico, ecológico, etc.).
Los principales usos de los cursos de agua para fines distintos de la navegación pueden
agruparse en las siguientes categorías: usos agrícolas, usos económicos y comerciales,
y usos domésticos y sociales; dentro de estas categorías (establecidas por la C.D.l.) se
incluyen usos tan variados como la irrigación, producción de energía, industrias
extractivas, transportes de maderas, o la pesca.
Se trata de los espacios comprendidos entre los dos polos y los 66° Y 33º de latitud
norte y los 60° de latitud sur, respectivamente. El primero se conoce por Región Ártica,
y el segundo, como región o Continente Antártico.
Una distinción se impone entre la Zona Ártica y el territorio Antártico; viene dada por
las condiciones geofísicas, pues mientras el Ártico es preferentemente una región
marítima helada, la Antártida es una tierra cubierta por una gruesa capa de hielo.
A) EL ARTICO
Para la Región Ártica se ha empleado el denominado «principio de los sectores», que
consiste en atribuir a cada Estado con litoral en el Océano Glacial Ártico la soberanía
sobre todas las tierras comprendidas en un triángulo cuya base está formada por las
costas de los Estados el vértice es el Polo Norte y los lados los meridianos que pasan
por los dos extremos del litoral de cada Estado.
Mediante esta teoría, se proyecta la soberanía de los ribereños sobre todas las tierras e
Islas Situadas dentro de su sector, pero en ningún caso sobre las aguas y hielos del
mismo.
En la actualidad, el desarrollo técnico y el interés de los ribereños han posibilitado que
todos los territorios de esta región estén sometidos a la soberanía de los distintos
Estados árticos no existiendo conflictos al respecto.
En cuanto a los espacios marinos y las formaciones de hielo del Ártico más allá del mar
territorial, zona contigua, plataforma continental y zona económica exclusiva de los
ribereños, quedan sujetos al régimen propio de los espacios comunes o de interés
internacional, formando parte concretamente del alta mar y de la Zona internacional
de los fondos marinos y oceánicos de acuerdo con la Convención de 1982 sobre El
Derecho del Mar y la práctica de los Estados al respecto.
La creación, por una Declaración Conjunta de 1996, del Consejo Ártico, formado en
origen por Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, Rusia, Finlandia, Islandia, Noruega y
Suecia, con el objetivo de propiciar la cooperación entre sus miembros para el
desarrollo y la protección del medio ártico, no parece que vaya a ejercer ninguna
influencia en el estatuto internacional de la región ártica.
B) EL ANTARTICO: EL TRATADO ANTARTICO Y EL SISTEMA ANTARTICO
Para la Antártida se han buscado por diversos países varios presuntos títulos tales
como el “descubrimiento” (Francia, Gran Bretaña, Noruega) y el de la “ocupación
simbólica”.
Junto a ellas se ha aducido la “teoría del control”, consistente en ejercitar el poder
administrativo sobre zonas desérticas desde una posesión alejada de dichas zonas.
También encontramos la “teoría de los sectores” sobre cuya base se pretende el
reparto entre los Estados que se encuentren en la vecindad de las tierras polares en
condiciones geográficas determinadas.
El sector corresponde a un triángulo esférico, cuyo vértice es el Polo y los lados son los
meridianos y paralelos geográficos que toquen idealmente extremos de la costa de
territorios o dependencias de los Estados que reclaman territorios polares.
g) Las Partes estarán obligadas a informarse sobre las expediciones que se organicen o
partan de su territorio, así como de las estaciones ocupadas por sus nacionales y del
personal o equipos militares que se proyecta introducir en la Antártida (art. VII.5).
h) Se prevén reuniones periódicas de representantes de las Partes para consultas y
recomendaciones de medidas relativas al uso, facilidades para la investigación y
cooperación científica y ejercicio de los derechos de inspección y las relacionadas con
el ejercicio de la jurisdicción, la protección y conservación de los recursos vivos de la
Antártida (art. IX).
i) Se prevé que las controversias se arreglarán por medios pacíficos, a elección de las
Partes, y, si no se arreglaran por dichos medios, se diferirá el asunto al T.I.J. (art. 'Xl).
Finalmente, se estipula que ninguna disposición del Tratado se interpretará como
renuncia a los derechos de soberanía territorial o de reclamaciones territoriales, como
menoscabo de los fundamentos de dichas reclamaciones territoriales o como
perjudicial a las posiciones de las Partes para lo relativo al reconocimiento o no del
derecho de soberanía.
Por el contrario, ningún acto o actividad realizada en virtud del Tratado constituirá
fundamento para las reclamaciones territoriales ni para crear derechos de soberanía en
la región.
El Espacio Ultraterrestre
CONCEPTO
Ni el Tratado de 1967 ni los demás instrumentos internacionales que conforman el
Derecho del espacio ultraterrestre aportan una definición de este espacio, ni tampoco
facilitan una determinación de sus límites con relación al espacio aéreo.
Se considera al espacio ultraterrestre como el área situada sobre todo lo que
comprende el territorio propiamente dicho de un Estado, y que abarca más allá de la
Tierra; esto no debe confundirse con el espacio aéreo. El espacio ultraterrestre se
aprovecha con fines tecnológicos de comunicación, educación y científicos. (INTERNET)
REGIMEN JURIDICO
Los grandes principios que rigen el Derecho del espacio ultraterrestre vienen definidos
en el Tratado General del Espacio de 1967.
La exploración y utilización del espacio ultraterrestre deberá hacerse «en provecho y
en interés de todos los países», sea cual fuere su grado de desarrollo económico y
científico,
«e incumben a toda la humanidad», tal como se dispone en el art 1, párrafo primero,
del Tratado de 1967.
Se trata de una proclamación en la que se percibe el mismo valor y significado que
encierra el actual concepto de Patrimonio Común de la Humanidad aplicado a otros
espacios, y que resulta de extraordinario interés en la medida en que esta referencia a
la
«humanidad» como sujeto al que incumbe la exploración y utilización de dicho espacio
va a condicionar directamente el contenido de todos los demás principios que rigen el
Derecho del espacio ultraterrestre.
Sobre esta base, los grandes principios recogidos en el Tratado de 1967 son los
siguientes:
1° El de libertad de exploración y utilización del espacio ultraterrestre a todos los
Estados sin discriminación (art. 1).
2° El de igualdad en la exploración y utilización (art. 1). Como es obvio, la referida
igualdad es más teórica que real; pero el propio Tratado impone, como vimos, su
correctivo a la desigualdad de hecho al prescribir que "deben hacerse en provecho y en
interés de todos los países, sea cual fuere el grado de desarrollo económico y
científico”.
Los Estados partes tienen derecho a explorar y utilizar la Luna sin discriminación de
ninguna clase, y sobre una base de igualdad (art. 11.4); a cuyo efecto se declara que
la Luna y sus recursos naturales son Patrimonio Común de la Humanidad (art. 11.1),
no pudiendo ser objeto de apropiación nacional mediante reclamaciones de soberanía,
por medio del uso o la ocupación, ni por ningún otro medio (art. 11.2); apuntándose
también que ni la superficie ni la subsuperficie de la Luna, ni ninguna de sus partes o
recursos naturales podrán ser propiedad de ningún Estado, organización internacional
intergubernamental o no gubernamental, organización nacional o entidad no
gubernamental, ni de ninguna persona física (art. 11.3).
Sin embargo, la televisión directa por satélite también plantea problemas específicos
de índole política y jurídica, en la medida en que las emisiones pueden ser captadas
directamente desde el territorio de otros Estados. La difusión debe quedar subordinada
al consentimiento previo del Estado receptor.
La AGNU adopto finalmente, respecto de los principios que han de regir la utilización
por los Estados de satélites artificiales para transmisiones internacionales directas de
televisión. Dispone que un Estado que se proponga establecer un servicio de
transmisión de ésta naturaleza deberá notificar sin demora su intención al Estado o
Estados receptores y, si lo solicitan, iniciar consultas con ellos.
COMERCIALIZACION DE LAS ACTIVIDADES ESPACIALES (No encontré nadaaa!!!!)
UNIDAD 8: “Responsabilidad Internacional”
Responsabilidad Internacional
NOCIONES GENERALES
Los comportamientos de los sujetos del D.I. pueden ser valorados desde el punto de
vista de su conformidad o contrariedad con dicho ordenamiento jurídico: en este último
caso se habla comúnmente de los hechos ilícitos, generadores de ciertas consecuencias
jurídicas negativas para el propio sujeto a quien le son atribuibles, entre las cuales la
más característica -junto a otras posibles, como la inoponibilidad o la nulidad del
hecho- es la responsabilidad internacional.
Las relaciones jurídicas resultantes de la comisión de hechos internacionalmente
ilícitos, a las que llamaremos relaciones de responsabilidad, se configuraban
tradicionalmente como relaciones de Estado a Estado.
La relación originada por el hecho internacionalmente ilícito viene a configurarse, como
una relación interestatal de naturaleza bilateral, en función de la lesión, inferida por el
sujeto al que es atribuible el acto, de un derecho subjetivo del que es titular el otro
sujeto de la relación: el Estado perjudicado.
El hecho de un Estado generador de responsabilidad internacional puede representar
tanto una lesión directa de los derechos de otro Estado como un perjuicio causado a un
particular extranjero.
En relación con el Estado como sujeto del D.I, la C.D.I. se refiere, en concreto, a la
posibilidad de atribuir un comportamiento, no a la persona o grupo de personas que lo
ha tenido materialmente, sino al propio Estado.
El comportamiento atribuible al sujeto puede consistir, como acabamos de advertir, en
una acción o en una omisión. No son pocos los hechos internacionalmente ilícitos de los
que los Estados resultan responsables constituyen conductas pasivas (Ej: no sancionar
una ley cuya adopción venía exigida por un tratado, faltar a la diligencia debida no
protegiendo los locales de una misión diplomática extranjera frente a actos dañosos
realizados por terceros).
Es un principio básico el de que, por regla general, se atribuyen al Estado los hechos de
sus órganos o agentes en tanto que son integrantes de la organización estatal. Dada la
capacidad del Estado para autoorganizarse, se entiende que «órgano» incluye toda
persona o entidad que tenga esa condición según el Derecho interno del Estado.
Sólo se consideran hechos del Estado desde el punto de vista del D.I. los realizados por
personas o entidades que actúan en calidad de tales órganos, sin que quepa atribuirle
los realizados por esas personas o entidades a título puramente privado.
Igual que hemos advertido en relación con el origen de la obligación, debemos advertir
que el distinto contenido u objeto de la obligación es irrelevante al efecto de calificar
de internacionalmente ilícito un determinado hecho.
Pese a que todo hecho estatal constitutivo de una violación de una obligación
internacional es un hecho internacionalmente ilícito cualquiera que sea la naturaleza de
la obligación violada (art. 12 del proyecto de artículos de la C.D.l.), hay hechos que,
por contradecir ciertas reglas básicas de la convivencia internacional y ciertas
exigencias éticas de carácter esencial, dan lugar a un régimen de responsabilidad
internacional particularmente severo (es el caso de los crímenes internacionales).
El «crimen internacional» se define (Según la C.D.I) como un hecho
internacionalmente ilícito resultante de una violación por un Estado de una obligación
internacional tan esencial para la salvaguardia de intereses fundamentales de la
comunidad internacional que su violación está reconocida como crimen por esa
comunidad en su conjunto.
LA REPARACION: MODALIDADES
La consecuencia normal del hecho internacionalmente ilícito es, la responsabilidad
internacional de su autor. Esta consecuencia, a diferencia de otras posibles como la
nulidad del hecho, se conecta visiblemente con el derecho subjetivo lesionado (se es
responsable frente a alguien) y en este sentido hace entrar en juego la noción del daño
o perjuicio resultante para uno o varios sujetos de Derecho de la transgresión por otro
sujeto de una obligación jurídica a su cargo. Ese daño causado a un sujeto de Derecho
con la comisión del hecho ilícito es el que en general da lugar a la obligación de
reparar.
Esta obligación de reparar en sentido lato cubre en realidad dos aspectos distintos en
el DI. En efecto, el hecho internacionalmente ilícito causa un daño o perjuicio que es
preciso reparar, pero puede, además, estar en el origen de una situación ilícita que
persiste o se prolonga en el tiempo, en cuyo caso lo que está en juego es una vuelta a
la legalidad.
Por un lado, el art 30 establece que, tratándose de hechos ilícitos de carácter continuo
y sin perjuicio de la responsabilidad en que haya incurrido el Estado autor, éste está
obligado a poner fin al hecho. Por otro lado, el art 31 dispone que el Estado
responsable esté obligado a reparar íntegramente el perjuicio causado por el hecho
internacionalmente ilícito.
La reparación del perjuicio:
El Estado responsable está obligado, no sólo a hacer cesar el hecho ilícito -y, sí las
circunstancias lo exigen, a ofrecer seguridades y garantías de no repetición-, sino
también a reparar íntegramente el perjuicio causado por ese hecho, entendiendo que
el perjuicio «comprende todo daño, tanto material como moral, causado» por el
mismo.
El daño que en la realidad hace de resorte de la responsabilidad internacional y, en
concreto, de la obligación de reparar, puede consistir o bien en una lesión directa de
los derechos de otro Estado, o bien en un perjuicio ocasionado a un particular
extranjero. Pero, desde el punto de vista jurídico internacional, sólo el daño sufrido por
el Estado es relevante.
«Las normas jurídicas que rigen la reparación son las normas de Derecho internacional
vigentes entre los dos Estados interesados y no las leyes que rigen las relaciones entre
el Estado que ha cometido el hecho ilícito y la persona que ha sufrido el daño. Los
derechos o intereses de un particular a quien se ha infligido un daño a resultas de su
vulneración, están siempre en un plano distinto al de los derechos del Estado, que
también pueden haber sido vulnerados por el mismo hecho. Por tanto, el daño sufrido
por un particular no es nunca de la misma clase que el daño sufrido por un Estado y
puede tan sólo proporcionar una escala adecuada para el cálculo de la reparación
debida al Estado»
(ANTECEDENTE JURISPRUDENCIAL)
Si se trata de un perjuicio de carácter no patrimonial (ofensa al pabellón del Estado
hecho de autoridad realizado en el territorio del Estado y sin su consentimiento por
otro Estado), surgirá un tipo de responsabilidad especial, que podrá traducirse en la
llamada
«satisfacción».
Modalidades de reparación:
La obligación de reparar alude a los diversos medios con que cuenta el Estado para
liberarse de la responsabilidad derivada del hecho internacionalmente ilícito, y que
podrían básicamente resumirse en las tres modalidades de la satisfacción, la
restitución y la indemnización o resarcimiento:
Satisfacción
Es una forma particularmente adecuada para enjugar los daños «morales» ocasionados
al Estado (ofensa al honor o la dignidad), aunque puede concurrir con otras formas de
compensación en relación con violaciones de diversa especie, ya que, aun en caso de
no mediar un ataque expreso a la dignidad del Estado, la simple tolerancia de una
violación del D.I. es adecuada para disminuir el prestigio del Estado ofendido.
La indemnización
PRESUPUESTOS
En su 48º periodo de sesiones (1996) la C.D.I. aprobó el texto definitivo del proyecto
de Código, restringiendo la relación de supuestos que integran el ámbito de aplicación
ratione materiae de dicho proyecto a: la agresión, el genocidio, los crímenes contra la
humanidad y los crímenes de guerra, con el añadido de los crímenes contra el personal
de las Naciones Unidas y el personal asociado.
Por otra parte, ante las atrocidades cometidas en ciertos conflictos recientes, se ha
llegado a tomar en el seno de las N.U la iniciativa de crear tribunales penales
internacionales ad hoc encargados de juzgar conductas individuales que constituyan
violaciones graves y flagrantes de principios y reglas internacionales de carácter
taxativo. (Se creó por ejemplo un tribunal para la ex Yugoslavia por violaciones graves
del derecho internacional humanitario cometidas en su territorio).
Dejando aparte estos supuestos excepcionales de la creación de órganos y
procedimientos internacionales ante los cuales se puede hacer exigible la
responsabilidad del individuo en el plano del D.I., lo normal es que sea el Derecho
interno, a través de órganos y procedimientos estatales, el que se encargue de
dilucidar las consecuencias de la comisión por el individuo de delitos internacionales.
Así, los cuatro Convenios de Ginebra de 12 de agosto de 1949 relativos a la protección
de las víctimas de los conflictos armados, reenvían al Derecho interno al incorporar una
cláusula según la cual los Estados partes «se comprometen a tomar todas las medidas
legislativas necesarias para fijar las sanciones penales adecuadas que hayan de
aplicarse a las personas que cometieren o dieren orden de cometer cualquiera de las
infracciones graves» de las disposiciones de esos Convenios, y al establecer la
obligación alternativa de juzgar a dichas personas a través de sus propios tribunales o
de entregarlas para su enjuiciamiento a otro Estado parte interesado en el proceso.
Todo ello, sin perjuicio de la responsabilidad internacional en que pueda incurrir el
Estado por la realización, a él atribuible, de esas infracciones graves contra el Derecho
internacional humanitario, responsabilidad que, como ya sabemos, se sitúa en un
contexto distinto del de la responsabilidad individual con la que eventualmente puede
coexistir.
EL TERRORISMO IINTERNACIONAL
Con frecuencia se manifiestan en el mundo ciertas formas de violencia que ponen en
peligro o causan la pérdida de vidas inocentes o comprometen la libertad de las
personas. Dichos actos, cuando se proyectan internacionalmente, suelen englobarse
genéricamente en la expresión terrorismo internacional.
Tales implicaciones no dejan de influir, ante todo, en la propia definición del terrorismo
a los efectos de aislar los actos susceptibles de represión en el plano internacional.
3. Los plazos mencionados en los párrs. 1 y 2 de este artículo se aplicarán aun cuando
no se conozca toda la magnitud de los daños. En este caso, no obstante, el Estado
demandante tendrá derecho a revisar la reclamación y a presentar documentación
adicional una vez expirado ese plazo, hasta un año después de conocida toda la
magnitud de los daños.
UNIDAD 9
-16000-13000 Ac: rápida retirada de los hielos hacia los polos. El hombre de
Cromagnon aparece en Europa.
-11000-9000 ac: el periodo comienza con frío en Europa y sequías en SE asiático, para
entrar en el periodo Holoceno con un calentamiento generalizado y condiciones más
húmedas. Vuelve a funcionar a circulación del Atlántico. Desarrollo de la agricultura en
el SE asiático.
Antecedentes:
-El Principio número 24 de la Declaración de Río establece: «La guerra es, por
definición, enemiga del desarrollo sostenible. En consecuencia los Estados deberán
respetar el Derecho internacional proporcionando protección al medio ambiente en
épocas de conflicto armado, y cooperar para su ulterior mejoramiento, según sea
necesario.»
-Están prohibidos los ataques contra el medio ambiente natural que causen daños
extensos, graves y permanentes, y se prohíbe las represalias contra el medio ambiente
natural. La importancia de estas normas se ha visto realzada por los ataques al medio
ambiente realizado recientemente durante la guerra del Golfo (enero-abril de 1991)
por el régimen de Irak.
-El propio Tribunal de La Haya ha señalado que: Existe una obligación de llevar a cabo
de buena fe y concluir negociaciones que conduzcan ni desarme nuclear en todos sus
aspectos bajo un control internacional estricto y efectivo
-El Tratado, además de alentar a las Partes a compartir tecnología y a cooperar por
otros medios a fin de limitar las emanaciones de los gases termoactivos, exige que se
lleve a cabo una labor de investigación, observación y recopilación de datos sobre el
clima y crea un órgano subsidiario de «asesoramiento científico y técnico» para ayudar
a los gobiernos a decidir sus acciones futuras.
-Cada Estado Parte debe además presentar un «inventario» de las fuentes nacionales
de las emisiones de gases y de los «sumideros» nacionales que absorben dichos gases.
Esos inventarios deben actualizarse periódicamente y hacerse públicos.
LA PROTECCIÓN DE LA BIODIVERSIDAD
-El convenio impone a las Partes obligaciones de adoptar medidas para la identificación
y el seguimiento de los componentes de la diversidad biológica, la conservación in situ
y ex situ y la evaluacióndel impacto ambiental de sus proyectos así como para la
reducción al mínimo de todo impacto adverso.
-El serio problema del avance de la desertización fue examinado, en perspectiva global
por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre desertificación de 1977: elaboró al
respecto un primer Plan de Acción. En esa línea de esfuerzos se inscriben por derecho
propio las resoluciones y decisiones de la Conferencia de Río.
Los Estados deben actuar de tal modo que, por ellos o por personas bajo su
jurisdicción o control, no se realicen actividades que causen daños «sensibles»,
medioambientales u otros, por encima de las fronteras a terceros Estados, bien
directamente, indirectamente en la persona o bienes de sus súbditos. Se ha
ampliado su contenido prohibiendo los actos de contaminación trasfronteriza
cuando causen
daños «sensibles», no sólo a terceros Estados sino más en general a áreas
«comunes» situadas,más allá de toda jurisdicción nacional.
En ciertos casos, algunos Estados han aceptado reparar globalmente los daños
causados a terceros por accidentes resultado de actividades «peligrosas», pero lo
han hecho en general afirmando que era una reparación no obligatoria o ex gratia.
Por otro lado, sólo existe un caso en que por medio de tratado multilateral los
Estados han aceptado un régimen de responsabilidad internacional «absoluta», que
les impone la obligación de reparar daños materiales al margen de la violación de
una obligación internacional: el art. 2 del convenio sobre responsabilidad
internacional por daños causados por objetos espaciales de 29 de marzo de 1972.
Queda por analizar si el protocolo de Kioto es suficiente para "mandar una señal" a la
industria y a los gobiernos para que comiencen a cambiar el sistema energético actual
hacia otro basado en la eficiencia energética y en las fuentes renovables de energía.
Por desgracia, tampoco parece que vaya a ser así.
En efecto, un examen detenido del protocolo revela que los negociadores han
conseguido introducir en el mismo numerosas "vías de escape", que, de no atajarse,
van a convertir los ya mínimos avances del acuerdo en mera apariencia. Si los países
ricos hubieran demostrado tanta voluntad e ingenio para encontrar soluciones para el
cambio climático como para encontrar vías de escape, que permiten simular una
reducción de emisiones sin cambiar sustancialmente el modelo energético (que es de
lo que se trata), Kioto hubiera sido realmente un hito histórico. Tal y como está, el
protocolo de Kioto es, principalmente, el resultado de una operación de imagen de los
gobiernos. A destacar también el papel obstruccionista de las grandes multinacionales
de la energía y el automóvil, que, organizadas en grupos de presión como la Coalición
Global del Clima (GCC) en EE.UU. y la Mesa Europea de Industriales (ERT) en Europa,
se oponen a cualquier reducción obligatoria de emisiones, y a los cuales hay que
atribuirles en buena medida el resultado final de la cumbre.
Como aspecto positivo de dicha cumbre se puede señalar que ha servido para poner en
un plano destacado de la actualidad el problema del cambio climático y la poca
voluntad de los países ricos para hacerle frente.
El protocolo y sus trampas: La solución del problema del cambio climático requiere
un cambio radical en el actual sistema energético, basado en energías no renovables y
contaminantes (petróleo, carbón y gas), que se usan de forma no igualitaria, excesiva
y despilfarradora. El nuevo sistema debería tener como base las energías renovables
de menor impacto ambiental y un menor consumo energético, con un aprovechamiento
mucho más eficaz de la energía, que permita la satisfacción de las necesidades básicas
de todos los habitantes del mundo. Hay que señalar que el cambio climático es una
razón más, si bien muy importante, para realizar esta transformación, pero que hay
numerosas otras razones, ambientales, sociales y económicas, que empujan en esta
dirección; en este sentido, los ecologistas hemos defendido la necesidad de este
cambio en el modelo energético desde antes de que se empezara a reconocer el
problema del cambio climático.
Los objetivos de reducción de emisiones se deberían hacer gas por gas, a fin de evitar
todos estos problemas.
Hay, además de las cuatro vías de escape anteriores, una serie de cuestiones
importantes que el protocolo no aborda. Una de ellas es el control de emisiones de los
depósitos de combustible para el transporte aéreo y marítimo internacional, conocidos
como búnkeres. Estas emisiones podrán representar, con el crecimiento previsto del
transporte mundial, un aumento en las emisiones totales de gases de invernadero de
entre un 5 y un 10% para el 2010. El protocolo no asigna estas emisiones a ningún
país, y solo pide a los países desarrollados que tomen medidas para limitarlas o
reducirlas, sin objetivos ni calendario (Art. 2.2).
Aunque el protocolo tiene un carácter legalmente vinculante, aún no se han definido
las medidas que se tomarán en los casos de no cumplimiento del mismo, que se dejan
para la primera reunión de las partes del protocolo (Art. 17).
¿Después de Kioto, qué?: Cada año se celebrará una conferencia de las partes del
Convenio sobre Cambio Climático.
Muchas veces se renuncia a hacer campaña sobre el cambio climático porque se piensa
que, al ser un problema planetario, hay poco que hacer localmente al respecto. Sin
embargo, es precisamente desde "más abajo" (personas, pequeños grupos, Concejos
Deliberantes...) desde donde se debe y se puede empezar a actuar, dado el desinterés
manifiesto de los gobiernos por hacer algo al respecto.
También las acciones voluntarias generaron basuras. La MIR rusa, como ejemplo de
negligencia, lanzó al espacio cientos de residuos durante sus 10 años de vida. No es
descabellado pensar que, metafóricamente, "el cielo puede caer sobre nuestras
cabezas".
Aunque en general todos esos fragmentos y residuos que viajan sin rumbo, se
desintegrarían si entrasen en nuestra atmósfera, existen antecedentes de la caída a la
Tierra sin control de varios de ellos; al menos han sido detectados 60 casos, algunos
muy llamativos, como las 20 toneladas de chatarras procedentes del Skylab, que se
dispersaron por Australia y el Índico en 1979. Otro caso significativo ocurrió en 1997,
cuando el cohete Delta se estrelló en una granja de Texas a solo 50 metros de sus
habitantes.
Miles y miles de pedazos de satélites y otros objetos que se salieron de control pululan
alrededor de la tierra. Según promedio, un pedazo de desecho reingresa todos los días
a la atmósfera terrestre y mientras la mayoría se incendia o entra en la atmósfera, un
gran número sobrevive y puede aterrizar, amenazando la vida y propiedad de las
personas.
Se dice que existiría un 30% de posibilidades de que un objeto golpee la tierra, y es
más remota aún la posibilidad de que aterrice en área poblada, pero como dice mi
estimado colega el Prof. DOO Hwan KIM, no estamos en el ámbito de la teoría sino en
el de la realidad y, a medida que el número de objetos espaciales crece, también crece
el número de pedazos o partículas, contaminando el espacio y constituyendo una seria
amenaza presente y futura para la humanidad.
En noviembre de 1960, partes de un satélite norteamericano cayeron
sobre Cuba causando daños a propiedades y la muerte de una vaca. También el 5 de
junio de 1969, navegantes japoneses fueron lastimados al ser golpeados por
fragmentos de un satélite soviético. Rusia lanzó su satélite de poder nuclear Cosmos
954 para vigilancia naval, el 18 de setiembre de 1977; este satélite se desintegró
sobre Canadá en 1978, resultando una polución radiactiva sobre un área del tamaño
de Austria. Canadá pidió a Rusia que se le proveyera información sobre
especificaciones del Cosmos 954. Rusia respondió, ofreciéndose a limpiar los restos de
su Satélite Cosmos 954. Canadá declinó la oferta soviética. La unión de Estados Unidos
y Canadá para limpiar, fue lo que se llamó "operación luz de la mañana". Canadá
facturó a Rusia por seis millones de dólares en 1979, pero no buscó que se le
reintegraran los gastos norteamericanos que habían ascendido hasta los 25 millones de
dólares.
El incidente del Cosmos 954 en 1978, dio pautas sobre cómo deben comportarse los
Estados con respecto a los accidentes de satélites; esas pautas se relacionan con
las obligaciones de: a) el deber de poner sobreaviso; b) el deber de proveer
información;
c) el deber de limpiar; d) el deber de compensar los daños.
En 1989 la NASA reportó que un satélite norteamericano estaba fuera de control y que
se desintegraría sobre parte de Africa; Sudamérica; India; el Sudeste Asiático y
Australia, a menos que una operación de rescate fallara al querer regresar el satélite
sano a la tierra. En 1991 cayeron sobre Argentina sin causar milagrosamente ningún
daño, las 40 toneladas de la estación espacial Salyut. De acuerdo al Informe del grupo
de Estudios de desechos espaciales del Japón de marzo de 1993, nosotros deberíamos
observar uno s7.000 desechos de más de 10 cm. De diámetro menores a una altura de
5.000 km. en la órbita espacial. Dicho grupo de estudios concluyó que el promedio de
colisión entre desechos espaciales crecerá alrededor de tres veces en el año 2005.
La NASA ha informado que entre 20.000 y 70.000 desechos espaciales dentro de una
altura de 800 a 1.000 km., se encuentran girando alrededor de la tierra. La conclusión
es que existen miles de pedazos de satélites y otros objetos que salieron de control, no
funcionan y están en órbita alrededor de la tierra.
Objetivo: persuadir a los que hacen la guerra para que la hagan eticamente,
exhortando a que efectuen control sobre sus actividades restringiendolas con normas
de carácter ético.
Las causas que están en el origen de las crisis internacionales, como ocurre en el
interior de los Estados, pueden estar influidas por diversos factores de índole
económico, social, político, territorial, etc.; pero la investigación de las causas y la
importancia de las situaciones de crisis no son objeto de la investigación propiamente
jurídica sino de la sociología internacional. En las crisis internacionales, que se crean
por las acciones u omisiones de los propios sujetos del Ordenamiento internacional,
cabe distinguir tres momentos principales:
-Conflicto: que supone una discrepancia entre sujetos de D.I. que ha inducido o puede
inducir a uno de ellos a actuar contra otro.
-Controversia o diferencia: Ésta surge cuando un sujeto internacional hace valer ante
otro una reclamación concreta basada en un incumplimiento de una obligación y la
parte a la que va dirigida la rechaza. Para llegar a este momento ha sido necesario un
periodo más o menos largo, en que se haya ido delimitando la diferencia que, por otro
lado, generalmente apareció bajo la forma de una situación. Para establecer la
existencia de una diferencia hay que demostrar que la reclamación de una de las
partes se enfrenta al rechazo manifiesto de la otra parte y, además, que la existencia
de dicha controversia se determine de forma objetiva y que la reclamación de una
parte se vea tajantemente rechazada por la otra. Clasificación:
POLÍTICAS: son aquellas basadas en una pretensión cuya solución requiere una
modificación del derecho vigente.
Cabe decir que salvo casos excepcionales, la inmensa mayoría de las diferencias entre
Estados tienen un carácter mixto, predominando, según los casos, el político o el
jurídico.
Tanto los casos de buenos oficios como los de mediación no son muy frecuentes. No
obstante, esta última institución se ha contemplado en el ámbito de algunas
Organizaciones Internacionales en el sentido de que no sea la Organización la
mediadora, sino personas particulares o funcionarios de las mismas, los que ejerzan la
función de mediador. La mediación puede surgir de la iniciativa de una tercera parte
que propone interponerse y cuya oferta es aceptada por las partes en la controversia, o
bien puede ser convenida directamente por las propias partes (tal y como ocurrió con
el acuerdo firmado en Montevideo el 8 de enero de 1979 por el que Chile y Argentina,
que aceptaron solucionar, a través de la mediación del Cardenal Antonio Samoré, la
controversia que les oponía relativa a la aplicación de la sentencia arbitral de 1977
sobre el Canal de Beagle.
El informe de la Comisión será firmado por todos sus miembros (art. 33) y leído en
sesión pública, en presencia de los consejeros yagentes de las partes
Una controversia surgida entre sujetos internacionales puede ser sometida por éstos a un
tercero independiente para que adopte, después de un procedimiento contradictorio,
una decisión fundada en derecho obligatoria para las partes por la que se ponga a la
misma. Estaremos en estos casos ante los denominados medios jurídicos de solución
pacífica de diferencias, que son dos: el arbitraje internacional y el arreglo Judicial
Órgano arbitral: La designación de los árbitros es uno de los derechos de las Partes en
el Arbitraje, salvo que hayan convenido otra cosa al respecto. A veces, en el acuerdo
de compromiso de arbitraje se especifica que los miembros del Tribunal deben ser
obligatoriamente nacionales de terceros Estados. Lo normal es que cada Parte nombre
uno o dos árbitros, según que el tribunal se componga de tres o cinco miembros, y que
el Presidente, llamado en la termino logia de las Convenciones de La Haya de 1899 y
1907 superárbitro, se designa por Un tercer Estado.
-COMISIONES MIXTAS: constituido por comisarios designados por las Partes entre sus
nacionales, soliendo contar con la presencia de un superárbitro llamado a intervenir tan
sólo en caso de desacuerdo de los miembros designados por las partes.
-TRIBUNAL ARBITRAL: formado generalmente por tres Miembros uno designado por
cada parte y el tercero de común acuerdo entre ellos y buscado entre nacionales de
terceros países, o por cinco jueces. Cuando el órgano arbitral está formado por un
colegio de árbitros uno de ellos asume las funciones del Presidente, tal designación
puede estar prevista en el propio compromiso de arbitraje, o bien puede ser fijada por
el propio tribunal con ocasión de su constitución. Al Presidente le corresponde dirigir
los debates y velar por el respeto del procedimiento. El tribunal se verá asistido por un
órgano administrativo cuya importancia va a variar en razón de la propia entidad del
litigio o grupo de litigios que se deban arbitrar. El tribunal suele establecer su sede en
un país tercero a la controversia frecuentemente se ha utilizado Ginebra y La Haya, y
más recientemente Nueva York.
Tiene como objetivo facilitar el recurso inmediato al arbitraje (art. 41); es decir,
hace más fáciles los trámites para llegar a constituir el órgano arbitral.
Para la constitución del tribunal cada parte nombrará a dos árbitros, uno solo de los
cuales podrá ser nacional suyo. Estos cuatro eligen de común acuerdo un
superárbitro. En caso de desacuerdo, esta última designación se confía a una
tercera potencia, y si tampoco se llega a un acuerdo, se designarán dos Estados
para que realicen este cometido. Si, finalmente, no se pusieran de acuerdo,
designarán cada una de ellas dos candidatos que serán sorteados, nombrándose de
superárbitro aquel que hubiera designado la suerte (art. 45). El Tribunal
Permanente de Arbitraje, cuyo
Convenio de constitución está aún vigente y abierto a todos los Estados, continúa
con sus servicios en funcionamiento en su sede de La Haya. Por otro lado, el
Tribunal Permanente de Arbitraje adoptó, el 19 de junio de 2001, un Reglamento
Facultativo para el Arbitraje de las controversias relativas a los recursos naturales
y/o al medio ambiente, completado con la adopción, el 16 de abril de 2002, del
Reglamento de conciliación relativa al medio ambiente. Desde entonces el Tribunal
Permanente de Arbitraje ha conocido una importante actividad, incrementándose
considerable los asuntos en los que va a actuar como secretaria de Comisiones y
Tribunales que arbitran diferencias internacionales y litigios transnacionales.
El art. 33 de la Carta de las Naciones Unidas incluye entre los medios pacíficos de
soluciones el arreglo judicial como figura autónoma diferenciada del arbitraje. Se trata
de un medio de solución de naturaleza jurídica, caracterizado por la intervención de
organismos compuestos por jueces plenamente independientes de las partes en la
controversia, que ejercen sus competencias, normalmente de forma permanente, a
través de un procedimiento judicial de carácter contradictorio y que no resuelven la
diferencia que les es sometida mediante sentencias que tienen siempre carácter
obligatorio para las partes en el litigio.
Así definido el arreglo judicial, es evidente que el medio que se analiza se asemeja al
mecanismo básico de solución de controversias empleado en los ordenamientos
jurídicos estatales, que no es otro que el recurso a los tribunales de justicia. Esta
similitud está cargada, de consecuencias para el Derecho Internacional. En primer
lugar, permite introducir en este ordenamiento el criterio de objetivación y de
alejamiento de las partes
en la solución de las controversias, al tiempo que atribuye un papel esencial en este
ámbito a la comunidad Internacional, general o restringida, en cuyo nombre actúa
siempre el Tribunal Internacional, lo que contribuye a minorar la incidencia del
relativismo característico de nuestro ordenamiento.
El arreglo judicial, presenta claras diferencias con los sistemas judiciales estatales,
tanto por lo que se refiere a la estructura de la propia jurisdicción internacional, a la
forma de atribución de competencia a los tribunales que forman parte de la misma, a
la naturaleza de las sentencias dictadas por los órganos judiciales, como al peso y
lugar que al arreglo judicial corresponde en el sistema global de aplicación del Derecho
Internacional. En efecto, los tribunales internacionales presentan una gran autonomía
entre sí y no se insertan en un sistema único y jerarquizado en términos
jurisdiccionales que permita una relación formalizada entre ellos. En segundo lugar, su
competencia tras su creación precisan de declaraciones expresas de voluntad de los
Estados por las que se les reconoce la competencia de resolver litigios en los que dicho
Estado sea parte y, en tercer lugar, sus sentencias son meramente declarativas y
carecen de efecto ejecutivo, por lo que el destinatario de la misma goza de un amplio
margen de discrecionalidad a la hora de elegir la forma en que da cumplimiento a las
sentencias.
De los seis órganos principales de las Naciones Unidas (Asamblea General, Consejo
de Seguridad, Consejo Económico y Social, Consejo de Administración Fiduciaria y
Corte Internacional de Justicia) es el único que no se sitúa en Nueva York (Estados
Unidos).
Comités:
La Corte desempeña una doble misión: el arreglo de las controversias de orden jurídico
entre los Estados que le sean sometidas por estos (procedimiento contencioso) y la
emisión de dictámenes consultivos sobre cuestiones jurídicas que le sometan los
órganos u organismos de las Naciones Unidas (procedimiento consultivo).
-Procedimiento contencioso:Solo los Estados pueden ser partes en el procedimiento
contencioso (los Estados Miembros de las Naciones Unidas y otros Estados que sean
partes en el Estatuto de la Corte o que hayan aceptado su jurisdicción bajo ciertas
condiciones).
La Corte solo tendrá competencia para conocer de un asunto si los Estados implicados
han aceptado su jurisdicción de alguna de las siguientes maneras:
en virtud de un acuerdo especial concluido entre los Estados con el propósito de
someter su controversia a la Corte;
en virtud de una cláusula jurisdiccional. Este es el caso en que los Estados son
partes de un tratado en el que una de sus cláusulas prevé que, en caso de que
surja en el futuro una controversia acerca de la interpretación o la aplicación de
dicho tratado, uno de ellos la someta a la Corte;
por el efecto recíproco de declaraciones hechas por ellos bajo los términos del
Estatuto, mediante las cuales cada uno de ellos ha aceptado la jurisdicción de la
Corte como obligatoria en caso de controversia con cualquier otro Estado que
acepte la misma obligación. Cierto número de estas declaraciones, que deben
depositarse en poder del Secretario General de las Naciones Unidas, contienen
reservas que excluyen determinadas categorías de controversias.
La fecha de incoación de los procedimientos, que será la de recepción, por parte del
Secretario, del acuerdo especial o la solicitud, indica la apertura de dichos
procedimientos ante la Corte. Los procedimientos contenciosos tienen una fase escrita,
en la que las partes presentan e intercambian los alegatos, que contienen una
exposición detallada de los hechos y fundamentos de Derecho en los que se basa cada
parte, y una fase oral, que consiste en audiencias públicas en las que los agentes y los
consejeros se dirigen a la Corte. Como la Corte tiene dos idiomas oficiales (inglés y
francés), todo lo escrito o dicho en una de dichas lenguas se traduce a la otra. Los
alegatos escritos no se pondrán a disposición de la prensa, ni se harán públicos, hasta
la apertura de la fase oral y, entonces, solo se hará si las partes no se oponen a ello.
La Corte desempeñará sus funciones en pleno, pero, si las partes lo solicitan, también
podrá establecer salas ad hoc para estudiar casos concretos. La Corte elegirá cada año
una Sala de Procedimiento Sumario de conformidad con su Estatuto.
Las fuentes de derecho que puede aplicar la Corte son: los tratados y las convenciones
internacionales en vigor; el derecho consuetudinario internacional; los principios
generales del Derecho; así como las decisiones judiciales y la doctrina de los
publicistas de mayor competencia. Además, si las partes están de acuerdo, la Corte
podrá decidir un asunto ex aequo et bono, por ejemplo, sin limitarse a los reglamentos
de derecho internacional existentes.
Cuando recibe una solicitud de dictamen consultivo y para que este se base en el pleno
conocimiento de los hechos, la Corte podrá llevar a cabo procedimientos escritos y
orales, que se asemejan en algunos aspectos a los procedimientos contenciosos. En
teoría, la Corte puede no servirse de dichos procedimientos, pero nunca ha prescindido
de ellos por completo.
Algunos días después de que se presente la solicitud, la Corte elaborará una lista de
los Estados y organizaciones internacionales que puedan aportar información sobre el
asunto. Dichos Estados no se encuentran en la misma situación que las partes de los
procedimientos contenciosos: sus representantes ante la Corte no se denominan
agentes y su participación en el procedimiento consultivo, en caso de darse, no hace
que el dictamen de la Corte sea vinculante para ellos. En general, los Estados que
aparecen en la lista suelen ser Estados Miembros de la organización que solicita el
dictamen. Los Estados podrán solicitar su participación en caso de que la Corte no les
consulte.
Sin embargo, no es frecuente que la CIJ permita que las organizaciones internacionales
que no han solicitado el dictamen participen en los procedimientos consultivos. En lo
que respecta a las organizaciones no gubernamentales internacionales, la única a la
que la CIJ autorizó para proporcionar información decidió no hacerlo (Situación jurídica
internacional del África Sudoccidental). La Corte ha rechazado todas las solicitudes de
este tipo por parte de entidades privadas.
Los procedimientos escritos son de menor duración, pero igual de flexibles que en los
procedimientos contenciosos entre Estados. Los participantes pueden presentar
declaraciones escritas, que a veces reciben comentarios escritos por parte de otros
participantes. Dichos comentarios y declaraciones tienen carácter confidencial, aunque
suelen hacerse públicos cuando comienzan los procedimientos orales. Entonces, suele
invitarse a los Estados a presentar declaraciones orales en las audiencias públicas.
Estos medios coactivos deben evitar que los conflictos lleguen a una guerra, estos se
producen en un ámbito político, la fuerza utilizada es limitada dentro de lo que permite
el derecho internacional.
El Estado que comete actos inamistosos no debe incurrir en violación a las normas
jurídicas del Derecho Internacional.
El Estado que es víctima de los actos inamistosos no debe violar las normas
jurídicas del Derecho Internacional al usar la retorsión.
La afectación del Estado puede ser material o moral, en sus intereses pecuniarios o
patrimoniales, o en su prestigio o dignidad.
-REPRESALIAS: Son los actos que implican respuesta a ciertos actos que se consideran
contrarios al Derecho Internacional y su objetivo pretendido es obtener una
satisfacción frente a los intereses morales o materiales afectados.
-ULTIMATUM:es una resolución definitiva que establece un periodo específico para que
se cumplan unas exigencias determinadas y que viene respaldada por una advertencia
que será cumplida en caso de que las exigencias no se satisfagan. Un ultimátum es
generalmente la demanda final de una serie de peticiones. Como tal, el tiempo
asignado suele ser poco, y se sobreentiende que no se abrirá ninguna negociación
posterior. La amenaza que respalde el ultimátum puede variar dependiendo de la
demanda en cuestión y de otras circunstancias. En diplomacia, la amenaza es para
declarar la guerra, para llevar a cabo otras acciones militares o para imponer sanciones
tales como restricciones comerciales o embargos.
-RUPTURA DE LAS RELACIONES DIPLOMÁTICAS:
-EMBARGO:
-IUS IN BELLUM: Se centra en los medios que se emplean para hacer la guerra
Características:
-Exige que las partes enfrentadas sostengan que el esfuerzo realizado por la otra parte es
completamente injusto.
-El objetivo de los discursos y de la lucha en estas guerras, es ganar la ARGUMENTACION.
-Ninguna de las partes tiene una probabilidad cierta de ganar en algún sentido
convencional.
-El juego no se decide a través de una victoria militar, sino más bien en sentido
EL USO DE LA VIOLENCIA:
La guerra:
“No habrá inicio de hostilidades sin previo aviso e inequívoco, bajo forma de una
declaración de guerra motivada o de un ultimátum con declaración de guerra
condicional”. EN LA ACTUALIDAD PERDIO RAZON DE SER. LA GUERRA ES UN
DELITO.
ESTA PROHIBIDO:
MÉTODOS PERMITIDOS:
-LAS ESTRATAGEMAS.
-LOS ATAQUES A TROPAS AERO-TRASNPORTDAS.
La neutralidad termina:
-unión económica: se suma la adopción de una nueva moneda y política única para
todos los Estados miembros. Tienen un banco central, una moneda única, igual tasa de
interés.
Integración y soberanía: El Estado construye voluntariamente un proceso de
integración resignando espacios de soberanía, entendida en términos clásicos. Se pasa
de un concepto estático de soberanía (clásico) a uno dinámico (la soberanía deja de
ser individual y pasa a ser colectiva. Los estados dejan de lado la individualidad para
actuar como ente más amplio.
Derecho de la integración:
-derecho comunitario: es un ordenamiento jurídico propio que regula las competencias
y funcionamientos de una comunidad determinada entre países. Solo se aplica a los
estados partes, porque es supranacional. Es desarrollado por las normativas de sus
instituciones que ejercen una potestad legislativa.
-derecho de integración: son las normas del derecho internacional público que sirven
para coordinar el proceso de integración. Es codificado y estático y de cooperación.
-derecho comunitario vs. Derecho interno: principios de autonomía (es autónomo del
derecho interno. Este se adapta al derecho comunitario); primacía del derecho
comunitario; eficacia directa (el ordenamiento cuyos destinatarios no son
exclusivamente los estados miembros sino además sus nacionales les generan
derechos y obligaciones.
Fuentes del derecho comunitario:
-obligatorias: derecho originario (dip), derecho derivado (reglamentos, directivas y
decisiones), actos convencionales (convenios y tratados ligados a la persecución de un
objetivo comunitario), y principios generales del derecho comunitario (son elaborados
por el tribunal de justicia de la UE,o el tribunal de revisión del Mercosur).
-no obligatorias: dictámenes y recomendaciones, reglamentos internos de las
instituciones, decisiones de los representantes de los estados miembros, resoluciones
declaraciones y programas de acción común.
Unión Europea: 27 estados miembros, 23 idiomas, consta de 3 poderes: L, E Y J.
posee instituciones independientes y un sistema competencial.
-Comunidad europea del carbón y el acero: 1950. Belgica, francia, Italia, Luxemburgo,
países bajos. (tratado de la CECA)
-Comunidad europea de energía atómica
Instituciones de la UE:
-parlamento europeo: primera institución supranacional elegida por el voto directo de
los ciudadanos. Posee 785 parlament1arios. Esta encargado de legislar a la UE y
aprobar el presupuesto anual. Se comporta como el parlamento interno de cada Estado
y los propios parlamentos internos pierden el control de sus decisiones.
Mercosur: es una unión aduanera imperfecta. Proceso de integración regional cada una
impronta económica formada por cinco estados partes (Brasil, argentina, uruguay,
paraguay, Venezuela). Brasil representa el ochenta por ciento del pbi del mercosur, y
el ochenta de su población. Mundialmente representa el tres por ciento del pbi.
Antecedentes:
-ALALC: Asociacion latinoamericana de libre comercio. Tiene objetivos ambiciosos,
multilterismo, proteccionismo de estado, dificultad para la inserción mundial. Tratado
de Montevideo de 1960.
-ALADI: Asociacion latinoamericana de integración, mecanismos básicos: preferencia
arancelaria regional, acuerdo de alcance regional, acuerdo de alcance parcial. Menos
liberal, más crítico, abierto. Tratado de Montevideo de 1980.
Antecedentes inmediatos:
-Declaración de foz Iguazú: firmado por Alfonsín y Sarney. Querían un proceso de
integración porque estaban sofocados por deuda externa, políticas proteccionistas en
comercio internacional, deterioro de intercambio comercial, restablecimiento
democrático.
*1986: programa de integración argentina y Brasil, fue un espacio economico común
que busca la apertura de mercado y la complementación de sectores empresariales.
*1988: tratado de integración, cooperación y desarrollo, se eliminan obstáculos
tarifarios y no tarifarios del comercio.
*1989: acta de alborada: se suma uruguay.
*1990: acta de bsas, se suma paraguay
*1990-91, modelo restringido a lo comercial e intergubernamental.
Relaciones externas: america latina: países asociados son Bolivia y chile. Y tienen zona
de libre comercio con Colombia, ecuador, peru y Bolivia.
IBSA:Integracion en bloque. Foro trilateral, creado en 2003 como fracaso de las
negociaciones de la organización del comercio en Cancún. Su objetivo es promover la
cooperación de comercio, inversión, diplomacia económica entre tres principales polos
políticos y económicos de los países en vías de desarrollo.
-sudafrica: tiene como condiciones que es un país estable, posee desarrollo industrial,
mayor PBI, y recursos naturales importantes como el litio. El problema es el SIDA.
-India: tiene como condiciones que es el mas consolidado, mas democrático, recurso
de poder duro porque es potencia nuclear, peso demográfico, capacidad económica y
comercial, y es el principal promotor de integración en el sudeste asiático. Su problema
es la pobreza.
Unidad 12
1816: argentina tiene pocos criterios en los que podía basarse para establecer los
límites entre vecinos. En ese entonces argentina heredo todo lo que era propiedad de
España en América. Se firmó un acuerdo de Tordesillas que se firmó el 7 de junio de
1494, y se compone de una serie de acuerdos entre el rey Fernando II de Aragón y la
reina Isabel I de Castilla, por una parte, y el rey Juan II de Portugal por otra, en virtud
de los cuales se establece una nueva línea de demarcación entre las dos coronas, que
corre de uno a otro polo, 370 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde. La
modificación de la línea de demarcación que dividía el mundo entre España y Portugal
dio origen al Brasil, cuya extremidad oriental quedó situada dentro de la zona
portuguesa.
Luego se produce un desmembramiento del virreinato del Rio de la Plata, donde pasa
la potestad del Alto Perú a BsAs por riesgo de invasión portuguesa. El país llegaba
hasta Río Cuarto. Si BsAs llegaba a caer se iba a traer la capital a Rosario o Río Cuarto.
Luego del paso del tiempo, queda el continente como lo vemos hoy, con 145000 km de
línea fronteriza en el caso de Argentina, de los cuales unos 9.400 lindan con los países
vecinos de Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia y Chile, y los 5.100 restantes, con el
estuario del Río de la Plata y el mar Argentino, que forma parte del océano Atlántico;
Para la delimitación de la Argentina se utilizaron diferentes tipos de límites:
-Orográfico (en las montañas), en donde se puede tomar la división por medio de las
más altas cumbres, o por las cumbres que dividen aguas;
-Fluvial: que puede ser, línea media en donde se divide el río en dos, sin tomar en
cuenta su profundidad o Thalweg o Vaguada en donde se divide la parte más profunda
en dos;
-Marítimo: Geométrico, línea recta; Geodésico, donde se utilizan para dividir los
paralelos o los meridianos;
Límites con Chile:
Son 5.308Kms de límite, y se tomaron dos elementos:
-orográfico en la Cordillera de las Andes, siendo en los tramos Norte y Central el de las
más altas cumbres, y en los Andes Patagónicos fueguinos las cumbres que son
divisorias de aguas;
-El límite geodésico se estableció en Santa Cruz 52° S y en Tierra del Fuego 68° O;
1.-La Cordillera de los Andes se extiende casi paralela a la costa del Pacífico, desde el
cabo de Hornos hasta las proximidades de Panamá. Es uno de los sistemas
montañosos más grandes del mundo. La cadena tiene 7.200 km de longitud, 240 km
de ancho y un promedio de 3.660 m de altura. La elevación y plegamiento de las rocas
sedimentarias se originó durante el periodo cretácico, cuando la corteza terrestre de la
placa del Pacífico inició la subducción de la placa sudamericana en el proceso conocido
como tectónica de placas. Las fuerzas tectónicas que se generaron por esta colisión
desencadenaron erupciones volcánicas y terremotos, que en algunas partes elevaron
los Andes por encima de los 1.500 m durante más de 28 millones de años.
2.-Los ríos que desembocan en el océano Pacífico son cortos en recorrido y pequeños
en caudaldebido a que en la región montañosa andina las lluvias son estacionales.
-Los ríos del este son largos y suministran agua en abundancia traída por los vientos
alisios, que producen precipitaciones en cuanto las nubes se aproximan a la cordillera
andina.
-Los ríos del norte de los Andes colombianos desembocan en el mar Caribe a través de
los ríos Magdalena, Cauca y Atrato; en las mismas aguas caribeñas, pero hacia el este,
por el río Orinoco; y en el Atlántico por los ríos Negro y Japurá, que son afluentes del
río Amazonas.
3. Por un acuerdo de 1899 quedó definido el límite en el sector de la Puna, que Bolivia
le había cedido a la Argentina y que estaba ocupado por Chile luego de la Guerra del
Pacífico. El Tratado de Límites de 1881 intentó deslindar las soberanías en el tramo de
la cordillera de los Andes al sur de la Puna, estableciendo que el límite pasaría por las
altas cumbres que son divisorias de aguas. En el sector de los Andes centrales o áridos
dicho criterio pudo aplicarse por la coincidencia de ambas líneas. En cambio, en los
Andes patagónicos surgieron discrepancias por existir divisorias de aguas al oriente de
las altas cumbres.
4. La técnica de delimitar según las “Más Altas Cumbres”, se encuentra con el riesgo
de que, en sus valles, existan cursos de agua que obliguen a alterar las líneas; es lo
que sucedió al agregar “Que Dividan Aguas”, particularmente en la Patagonia.
-Principio bioceánico: Argentina en el Atlántico y Chile en el Pacífico.
5. El arbitraje del rey de Inglaterra en 1902 estableció una línea que en parte
conformaba a la Argentina y en parte a Chile.Aunasí la comisión demarcadora encontró
inconvenientes como en el caso del río Encuentro, que fue sometido al arbitraje
británico y solucionado en 1966;
6. En 1984 firmaron el Tratado de Paz y amistad que puso fin a la cuestión sobre el
canal de Beagle;
7. En 1991, en un encuentro entre los presidentes de ambos países, se resolvieron 22
diferendos menores, quedando pendientes dos: el de Lago del Desierto, en el que el
Tribunal Arbitral de Río de Janeiro reconoció la soberanía Argentina en 1994, y el de
los llamados Hielos Continentales, cuya resolución dependió de la aceptación de ambos
Congresos de la línea demarcatoria poligonal propuesta.
“El 2 de agosto de 1991 los presidentes Menem y Aylwin firmaron un acuerdo para
trazar una línea poligonal para dividir equitativamente el territorio en disputa desde el
cerro Fitz Roy hasta el monte Stokes, dejando de lado lo acordado en 1881 y 1893.La
poligonal comenzaba en el Fitz Roy, seguía en línea recta hacia el oeste hasta un punto
innominado (2584 m de altura), luego atravesaba el glaciar Viedma hasta el cerro
Puntudo y continuaba por los cerros Torino, Roma, Inmaculado, Dos Picos, Teniente
Feilberg, Gemelo, Stokes y Daudet. Todos los puntos quedaban unidos por líneas
rectas.En su presentación al congreso del 27 de febrero de 1992, el ministro argentino
Guido Di Tella argumentó que la poligonal se había acordado por la imposibilidad
geofísica para determinar dónde están las altas cumbres que dividen aguas.La
poligonal no fue aceptada por los Congresos de los dos países. En la Argentina se alegó
la pérdida de 1057 km² del Parque Nacional los Glaciares y en Chile se alegó la pérdida
de 1238 km² en caso de aprobarse la línea”
8. En 1998 se aprobó un nuevo acuerdo en la zona. Las largas conversaciones y
diferentes Tratados con Chile produjeron un desgaste tal que casi desemboca en una
guerra en 1978.
Peligros de Guerra: La falta de satisfacciones, por parte de Chile, a las reclamaciones
argentinas sobre los caminos abiertos por aquel país en zonas disputadas por el
nuestro,
abre una etapa de incidentes diplomáticos en Noviembre de 1901. Una supuesta
invasión argentina al seno de la Ultima Esperanza origina manifestaciones en Santiago
de Chile, que culminan en agresiones a un monumento argentino. En Diciembre se
acentúan los preparativos bélicos por ambas partes, con el anuncio de nuevas compras
de naves de guerra y de armamento. El lº de ese mes, el Congreso argentino sanciona
la Ley Orgánica del Ejército, que establece por primera vez el servicio militar
obligatorio, después de un debate en el Senado durante el cual el Ministro de Guerra,
General Pablo Ricchieri, manifiesta que el país posee armamentos para 300.000
hombres.
El 12 de Diciembre el Gobierno argentino convoca a las clases 1878 y 1879, y el
Congreso en sesión secreta autoriza al P.E. a disponer de fondos de conversión para
afrontar los gastos militares. Roque Sáenz Peña, por su parte, ofrece al General
Ricchieri un regimiento de voluntarios que había concurrido bajo su mando a las
maniobras de 1892. El 4 de Enero de 1902 se dispone la formación de tres divisiones
de marina, integradas por acorazados, cruceros, transportes y avisos, y otras cuatro
destinadas a la defensa del Río de la Plata. La reacción popular se manifiesta en la
calle, en declaraciones y en la concurrencia a los polígonos de tiro, en las principales
ciudades argentinas.
El 21 de Diciembre el canciller argentino Alcorta envía al Ministro argentino en
Santiago, Epifanio Portela, un telegrama en que ordena interrumpir las negociaciones
si no surgen nuevas bases para buscar la solución al problema. Como el Canciller
chileno Eleodoro Yáñez sostiene tenazmente puntos de vista inaceptables para la
Argentina, Portela da por finalizada su gestión y decide volver a Buenos Aires;
El retiro de Portela, si bien no es una ruptura de relaciones, es una medida grave, pero
finalmente no llega a producirse ningún hecho de violencia. El 24 el representante
argentino concurre a despedirse del Presidente Germán Riesco, que ha sucedido a
Errázuriz. Surge entonces una última iniciativa para evitar que la tensión culmine en un
rompimiento;
Problemas por el canal de Beagle:
La disputa comienza por el art 3 del tratado de 1881. El primer problema surge con la
frase “hasta tocar el agua del canal de Beagle”, Chile argumenta que siguiendo esa
frase el canal era de su soberanía, y Ushuaia tiene costa seca por lo que tocamos agua
chilena. El segundo problema era por donde pasa el canal de Beagle. Cuando Argentina
se da cuenta de que si eso es el Canal de Beagle, las islas son chilenas y habría que
permitirle los derechos marítimos y tendrían derecho de reclamar las Malvinas. Chile,
basándose en el tratado de Paz de 1802, renunciaron a cualquier forma de violencia
entre ellos. Chile pide un arbitraje británico para por fin solucionar los problemas y
lleva el mapa que Argentina presentó en 1971.
Durante la última dictadura de Videla se declara nulo el arbitraje de la reina Isabel. En
1978, el Papa Pablo II ofreció una mediación en donde inventa un mar de la paz.
Luego, con Alfonsín en el poder, este presiona a Chile y reconoce el principio
bioceánico y le pide a Chile que le va a reconocer que el canal de Beagle era lo que
ellos alegaban pero propuso hacer un cajón a Chile para que su soberanía no opera al
pacífico.
Estrecho de Magallanes: Es el más peligroso del mundo, une al Atlántico y al Pacífico,
el problemas es que hay 7 mt de altura entre uno y otro y eso es lo que produce los
hundimientos.
Fue un desacuerdo entrela Argentina y Chile centrado en la diferencia de posiciones de
ambos países respecto a si la punta Dungeness marca el punto de encuentro
del estrecho de Magallanes con el océano Atlántico (posición chilena) o el encuentro de
ambos se da en el cabo Vírgenes(posición argentina). Ambos accidentes geográficos se
hallan en la costa norte del estrecho, en la Patagonia, siendo la punta Dungeness el
punto en donde comienza el límite continental entre ambos países. En base a su tesis,
Argentina reclamaba derechos de co-regulación, junto a Chile, de la navegación del
estrecho de Magallanes de acuerdo a lo establecido en el Tratado de Límites firmado el
23 de julio de 1881. El desarrollo del derecho marítimo durante el siglo XXI agregó a la
disputa la proyección marítima de las costas chilenas del estrecho hacia el Atlántico,
que contradice la posición argentina respecto del Principio Bioceánico u Oceánico.
El límite fue fijado de acuerdo a la posición que mantenía Chile: la línea recta que una
el “Hito Ex-Baliza Dungenes”, situado en el extremo de dicho accidente geográfico, y el
“Hito I Cabo del Espíritu Santo” en Tierra del Fuego. La línea recta de hito a hito corta
la punta Dungeness al Este de su punto geográfico extremo y en el cabo Espíritu Santo
alcanza la costa al Este del meridiano limítrofe. La línea puede verse en la carta anexa
N° 2 del tratado. Ernesto Videla expresó en la entrevista del 2 de mayo de 1985
quefijaron el límite de la boca oriental del Estrecho de Magallanes en la unión del Hito
Ex Baliza Punta Dungeness-Hito 1 Cabo Espíritu Santo manteniéndose de esa manera
el Estrecho en su integridad bajo soberanía de Chile.
El 6 de septiembre de 1996 Chile, mediante nota verbal en las Naciones Unidas, expresó:
(h) Argentina no tiene frontera con el Estrecho de Magallanes. En el marco del Tratado
de Límites de 1881, la totalidad del Estrecho de Magallanes - incluyendo, por supuesto,
las tierras que lo bordean por ambos lados - está bajo soberanía chilena. Por lo tanto,
no corresponde a la Argentina dar publicidad a las leyes y reglamentos sobre los
estrechos que no se encuentran bajo su soberanía.
Argentina respondió por otra nota verbal el 14 de mayo de 1997 expresando sus
derechos y no cuestionó la expresión de la nota chilena respecto de que Argentina no
tiene frontera con el Estrecho de Magallanes, confirmando así que en el tratado
abandonó su posición respecto de la cuña argentina en la boca oriental.
El Artículo 11° establece que: Las Partes se reconocen mutuamente las líneas de base
rectas que han trazado en sus respectivos territorios. De esa manera Argentina
abandonó también su opinión sobre la existencia de un delta en la boca occidental del
estrecho, reconociendo que los canales son aguas internas de Chile y no sujetas al
régimen de neutralización del estrecho
En cuanto al Principio Bioceánico, el 19 de octubre de 1984 el canciller argentino Dante
Caputo expresó: Hemos logrado la preservación del principio bioceánico que tiene
vigencia efectiva en la concepción y aplicación concreta de este Tratado
La Superposición de Reclamos en el Sector Antártico: Es un continente que se usa por
el bien de la humanidad, el personal que se encuentra allí es de carácter científico. La
Argentina tiene bases de la armada allí. La idea de Argentina es proyectar los puntos
de su territorio. El punto de base es el polo sur, uno de los extremos es la Isla
Sandwich del Sur (reclamo Argentino), y el otro extremo sin los hilos continentales
patagónicos (reclamo chileno) conformando un triángulo invertido. La parte Argentina
esta comprendida entre los meridianos 74°O y 25°O, el paralelo 60°S y el Polo
Sur.para la Argentina el área forma parte de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida
e Islas del Atlántico Sur, integrando casi totalmente el departamento Antártida
Argentina de dicha provincia.
Acuerdo Menem – Aylwin: el problema ahora son los hielos continentales. En realidad,
ellos no eran hielos continentales si no glaciares ya que eran ríos congelados y se
movían y eran superiores a 22 km2. Corta 3 glaciares y al cortarlos en 2, una parte va
al lago argentino, al Vietma, surgiendo asi el Río Santa Cruz que va también al mar
argentino. Todo era favorable para Argentina.
Zona de la Laguna del Desierto: ellos lo llaman laguna del Desierto, si esta en un valle
es una laguna y solo recibe agua, cuando se trata de un lago, solo dan agua. Los
peritos determinaron que era un lago y que debía quedar para argentina.
El 31 de octubre de 1991 los presidentes Patricio Aylwin de Chile y Carlos Saúl Menem
de la Argentina habían acordado, en base al Tratado de Paz y Amistad de 1984, acudir
a un arbitraje internacional sobre la disputa.
El 15 de diciembre de 1991 se constituyó en Río de Janeiro el Tribunal Arbitral con
juristas latinoamericanos encabezados por el colombiano Rafael Nieto Navia que fue
elegido presidente del tribunal por los demás jueces. Los demás jueces eran el
salvadoreño Reynaldo Galindo Pohl, el venezolano Pedro Nikken, el argentino Julio
Barberis y el chileno Santiago Benadava.
La presunción de cosa juzgada (res judicata) por el laudo de 1902 no sería tomada en
cuenta, reconociendo ambas partes que las disposiciones del tribunal serían
jurídicamente vinculantes para ellas. Se dispuso que el tribunal debía decidir
interpretando y aplicando el laudo de 1902 conforme al derecho internacional vigente
para ambas partes.
Ambos países discreparon sobre que instrumentos formaban parte del laudo de 1902,
para la Argentina eran el laudo propiamente dicho, el informe del tribunal al rey y el
mapa del árbitro, Chile quería agregar además la demarcación en el terreno. El tribunal
tuvo en cuenta que el laudo arbitral de 1966 sobre el caso de Palena decidió que
formaban parte del laudo de 1902 los instrumentos mencionados por la Argentina,
excluyendo así como parte del laudo el mapa del demarcador británico.
El 11 de abril de 1994 comenzaron los alegatos de las partes. La Argentina sostuvo en
su Memoria y en su Contramemoria que el límite era de acuerdo al laudo de 1902, la
divisoria local de aguas, sostuvo que Chile pretendía un límite más al este del que
había reclamado al someterse al arbitraje de 1898 que era la divisoria continental de
aguas y por lo tanto el laudo de 1902 no podría haberle adjudicado más de lo que
había pedido (non ultra petitapartium), una cuenca atlántica (la del río de las Vueltas)
no podía adjudicarsele sin cometer un exceso de poder viciado de nulidad, el límite se
había fijado entre las pretensiones extremas de cada parte hidrográfico/orográfico.
Chile en cambio sostuvo en su Memoria una línea que cortaba dos cursos de agua que
iban hacia el Atlántico. En su contramemoria sostuvo que sus pretensiones de máxima
en 1898 eran las líneas trazadas en los mapas, que en la zona estaba más al este, ya
que no se conocía entonces la divisoria de aguas en la zona lo único que importaba era
lo dibujado en los mapas y no debía interpretarse de acuerdo a los conocimientos
geográficos actuales. Dada la discrepancia sobre cuál era la pretensión de máxima de
Chile en 1898, el tribunal decidió tener en cuenta lo que Chile sostuvo entonces en sus
presentaciones al árbitro británico concluyendo que había sido el divortiumaquarum
continental rechazando la tesis chilena fundamentada en la precedencia de los mapas
ya que ese país había considerado la facilidad de la demarcación por la divisoria de
aguas en los casos en que no se conociera el terreno.
Surgió también la controversia sobre qué era la divisoria local de aguas, para la
Argentina se trataba de una línea contínua entre dos puntos determinados que sin
cruzar ríos ni lagos separa en cada uno de sus puntos cuencas fluviales, considerando
que lo esencial era que dividiera aguas entre los dos puntos. Para Chile la divisoria
local separa aguas que van hacia un mismo océano. El tribunal rechazó el argumento
chileno en base a argumentaciones sostenidas por Chile en el arbitraje de 1898
concordantes con la posición argentina, coincidiendo que una divisoria de aguas no
puede cortar ríos ni lagos.
La Memoria chilena sostuvo una línea que a partir del cerro de 1.767 msnm sigue hacia
el sur por la divisoria local de aguas hacia el valle de la Laguna del Desierto, cruzando
el Río de las Vueltas o Gatica hasta un punto señalado por coordenadas. Desde ese
punto sigue la divisoria local de aguas hasta cruzar el río Eléctrico y alcanzar otro
punto señalado por coordenadas. Desde ese punto ascenderá por la estribación noreste
del Monte Fitz Roy por la divisoria local de aguas hasta su cumbre.
Las dos demandas uruguayas fueron desestimadas por los tribunales respectivos.
Sobre la demanda argentina, la Corte Internacional de Justicia dictó fallo definitivo el
20 de abril de 2010, resolviendo que Uruguay violó sus obligaciones procesales
establecidas por el Estatuto del Río Uruguay de notificar e informar de buena fe pero,
si bien Argentina pudo demostrar que algunos parámetros de contaminación de las
aguas del río se habían
elevado desde la puesta en marcha de la pastera, falló en probar que la planta de
celulosa era la causante y no otros factores ajenos a ella, por lo que la Corte entendió
que Uruguay no violó sus obligaciones para evitar la contaminación ambiental, por lo
que consideró que resultaba desproporcionado ordenar el cierre de la planta de Botnia,
pero instruyó a ambos países a realizar un monitoreo en conjunto del río, a través de
la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) y aplicando el Estatuto del Río
Uruguay.