Está en la página 1de 12

Presentación

Nombre:
cinthya Clarissa canelo lorenzo
Matrícula:
2022-0867
Carrera:
Imágenes médicas
Profesor:
Juan lulio Blanchard
Trabajo de:
Física
Tema:
Aportes de la física a la ciencia de la salud.
Fecha:
1/11/22
Aportes de la física a la
ciencia de la salud.
Introducción

En este trabajo titulado “Aportes de la física a la ciencia de la salud” fue escrito bajo la
necesidad de los estudiantes de saber que aportes ha hecho la Fisica en la rama de la
medicina.
Lo que aquí ofrezco es el resultado de una labor paciente, en una búsqueda de repuestas
inmediatas a los aportes que hemos tenidos de la fisica a la medicina.
La física lo es todo y ha venido aportando a nuestra ciencia de la salud desde ante de los
años 50.
Afortunadamente, los avances tecnológicos están proporcionando herramientas que,
apoyadas con servicios apropiados y políticos públicos, están contribuyendo a equilibrar
los niveles globales de salud e investigación en biomedicina.
La física se encarga de crear instrumentos y aparatos médicos.
Al examinar un paciente curiosamente lo primero que se hace es un examen “físico”
que consiste en medir la presión, el pulso, la temperatura y escuchar los latidos del
corazón y los pulmones.
Si recapacitamos un poco nos podemos dar cuenta de que todas estas cosas y
instrumentos son medidas físicas.
Los aportes de la Física a la investigación biomédica han sido igualmente importantes.
El más célebre de ellos es, tal vez, el esclarecimiento de la estructura del ADN realizado
por los científicos James Watson y Francis Crick a comienzos de los años 50, apoyados
en los hallazgos de cristalografía de rayos X obtenidos por Rosalind Franklin. Otras
metodologías, como la microscopía electrónica y de fuerza atómica, la RM, el
dicroismo circular, la difracción de rayos X y otras técnicas espectroscópicas, se
emplean actualmente para conocer la estructura molecular tridimensional de fármacos,
vacunas y moléculas biológicamente activas, con lo cual se contribuye a la comprensión
de los mecanismos mediante los cuales se cumplen tales actividades.
También debe destacarse la contribución de la biofísica al conocimiento de los canales
iónicos y de las membranas celulares y su comportamiento. El conocimiento del
mecanismo de apertura y cierre de estos canales, de los potenciales de membrana de las
células excitables -en particular, de las nerviosas y cardiacas- y de la conducción iónica
permite comprender el funcionamiento de nuestros sistemas nervioso y cardiaco. El
comportamiento biofísico de las membranas celulares y de las biopelículas constituyen
temas de gran actualidad en la investigación biomédica.
Es posible decir que la mayoría de los avances en salud y biomedicina están respaldados
por principios y aplicaciones emanados de la Física. Para resaltar sus alcances e
impactos en el conocimiento en física teórica y experimental, así como en sus crecientes
y rápidas aplicaciones, cada vez más cercanas al momento de su generación y
producción, es preciso recordar que para la época del descubrimiento de los rayos X y
del conocimiento de sus propiedades, nadie imaginaba su gran impacto en la Medicina.
Este ejemplo permite proponer que una mayor cercanía entre la Física, la Biología y la
Medicina propiciarían nuevos desarrollos, como los que prometen la nanotecnología y
la microelectrónica. Hoy, más que nunca, hay oportunidades para aprovechar el poder
de la sinergia entre la Medicina, la Biología y la Física para reducir problemas
frecuentes de salud, pobreza, sobrepoblación, cambio climático, energía, pérdida de
bosques y biodiversidad. El avance del conocimiento en Física, sus aplicaciones e
innovaciones, sin duda, continuarán contribuyendo y respondiendo a las necesidades
básicas del hombre. Afortunadamente, los avances tecnológicos están proporcionando
herramientas que, apoyadas con servicios apropiados y políticas públicas, están
contribuyendo a equilibrar los niveles globales de salud e investigación en biomedicina.
Einstein demostró una profunda convicción sobre las posibilidades de la Ciencia y de
los científicos para contribuir a resolver los problemas más apremiantes de la
humanidad. En 1950, en su mensaje a la Sociedad Italiana para el Progreso de la
Ciencia, incluyó la siguiente reflexión, aún vigente: "Si el hombre de ciencia de
nuestros días puede hallar el tiempo necesario, y el valor, para pensar con honestidad y
sentido crítico acerca de su situación y de las tareas que le competen, y si es capaz de
actuar de acuerdo con sus reflexiones, las posibilidades de hallar una solución sensata y
satisfactoria de la presente y peligrosa situación internacional aumentarán de forma
considerable" (2).
Aunque la mención de todas las contribuciones de la Física a la salud humana y a la
biomedicina sería muy difícil, la ocasión resulta propicia para resaltar algunas de ellas.
En 1895, Wilhem Conrad Roentgen asombró al mundo con el descubrimiento de los
rayos X. Por primera vez fue posible explorar el interior de los seres vivos sin hacer uso
de procedimientos invasivos. Hoy en día las radiografías convencionales continúan
empleándose como métodos diagnósticos de mucha utilidad y, en el último cuarto del
siglo XX, la investigación y la tecnología permitieron un avance extraordinario al
desarrollar las metodologías para la obtención de imágenes diagnósticas de los tejidos
blandos. La ecografía, la tomografía computarizada, la resonancia magnética (RM), la
gammagrafía y, más recientemente, la tomografía por emisión de positrones son hoy de
uso común como apoyo diagnóstico.
Entre las aplicaciones terapéuticas de la Física, la radioterapia para el tratamiento de
algunas formas de cáncer es, quizá, la que ha tenido mayor impacto. El efecto que
tienen las radiaciones ionizantes sobre las células en crecimiento rápido y desordenado,
permite mejorar el pronóstico, el tiempo de supervivencia y la calidad de vida de los
pacientes con ciertos tumores cancerosos.

Modelización y desarrollo de las vacunas frente al Covid-19: a través de la


modelización se genera un modelo de propagación de virus biológicos donde se
estudian los datos, se extraen parámetros para hacer un modelo físico, y
computacionalmente se simulan. Posteriormente, mediante el uso de modelos físicos en
3D y el análisis de la estructura física del virus, se han diseñado las moléculas que
intervienen en la solución a inocular. La vacuna de Oxford-AstraZeneca se ha
desarrollado a partir de la generación de ciertas moléculas usando un sincrotrón, es
decir, un acelerador de partículas.
Creación de gemelos digitales: con la ayuda de estos gemelos digitales (versiones
virtuales de objetos, procesos o personas), los médicos son capaces de conocer nuestro
estado de salud en cada momento, predecir enfermedades, incluso antes de que se
manifiesten, y por tanto, evitarlas. Además, también sirven de entrenamiento a los
cirujanos ya que les ayuda a realizar determinadas operaciones, sin la necesidad de tener
que utilizar un cadáver.
Diseño de nuevos fármacos: los métodos computacionales ayudan de forma
significativa al desarrollo de medicamentos que se encuentran actualmente en uso
clínico, ya que permiten codificar con precisión modelos teóricos y son capaces de
procesar grandes cantidades de información. Estas simulaciones contribuyen a entender
los mecanismos de acción de los principios activos de los medicamentos, así como a
mejorar las propiedades de los mismos.
Pero antes de la incorporación de la física computacional en la medicina, otras
aportaciones de la física nuclear ya llevan años presentes en nuestro sistema nacional de
salud, y seguro que todos hemos experimentado en primera persona sus aplicaciones,
estamos hablando de pruebas como la:
Radiografía: se utiliza normalmente para obtener una imagen de los huesos. Se basa en
la exposición del paciente a una fuente de radiación de alta energía, normalmente rayos
X.
Tomografía axial computerizada (TAC): se introduce al usuario en un tubo hueco que
permite que los rayos X roten alrededor del cuerpo y se obtengan una serie de imágenes
en 2D (radiografías) desde distintas perspectivas, de forma que se pueden apilar para
crear una imagen en tres dimensiones.

Tomografía por emisión de positrones (PET): es una técnica análoga al TAC, aunque
con la principal diferencia de que se inyecta el radiofármaco de forma intravenosa en la
persona, resultando una potente herramienta para estudiar la actividad metabólica.
Gammagrafía: consiste en la administración de un marcador radioactivo o trazador.
Según el marcador elegido, éste puede tender a fijarse en un determinado lugar del
cuerpo o en una zona concreta, sólo si está dañada o existe en ella alguna enfermedad.
Existen también otras pruebas diagnósticas en las que los fenómenos relacionados con
otras ramas de la física -distintas de la física nuclear- son esenciales:
Resonancia magnética: se basa en la aplicación de fundamentos electromagnéticos para
la obtención de imágenes detalladas de órganos y tejidos blandos. La unión de las
imágenes bidimensionales de las distintas capas permite crear una imagen
tridimensional de la zona.
Ecografía: esta técnica se basa en el empleo de ultrasonidos para crear imágenes
bidimensionales o tridimensionales. Un tipo particular de ecografía es la ecografía
Doppler, para estudiar el movimiento de fluidos como el de la sangre dentro de los
vasos sanguíneos.
Hoy en día, y especialmente en los países desarrollados, estamos acostumbrados a
disponer de los últimos avances técnicos en materia de salud, pero la pandemia ha
puesto de manifiesto, más si cabe, la importancia de apostar por la formación, la
investigación y el desarrollo en materia científica para hacer frente tanto a nuevas
enfermedades y patologías, como para lograr una cura definitiva frente a enfermedades
muy presentes en nuestras sociedades como el cáncer, la diabetes, la leucemia y las
enfermedades raras, entre muchas otras.

La física médica es una rama de la física que se ocupa del estudio y desarrollo de sus
aplicaciones en el campo de las ciencias de la salud. Proporciona una base metodológica
para utilizar las nuevas tecnologías de diagnóstico y terapia, establecer criterios para el
empleo correcto de los agentes físicos en medicina, generar lineamientos y guías para la
protección radiológica de los trabajadores y de los pacientes, participar en el diseño de
instrumentación especial y establecer normas para la medición de variables biológicas.
Se diferencia de la biofísica en que esta última es el estudio interdisciplinario de los
problemas y fenómenos biológicos que se producen en toda la materia viva -esto es,
seres humanos, otros animales y plantas-, que incluye áreas como la biometría.
La física médica como concepto no es nueva. De hecho, artistas como Da Vinci y
Rembrandt, o escritores de ciencia-ficción, como H. G. Wells, manejaron en sus obras
conceptos que hoy serían asociables a los de la física aplicada a la medicina.
La física médica cobró verdadero auge a comienzos del siglo XX, con el trabajo de
personas como Wilhelm Roentgen, Henri Becquerel y Marie Curie, quienes
descubrieron los rayos X y varias sustancias radiactivas. Al principio, un mundo
esperanzado (como suele suceder con tecnologías de reciente desarrollo y de impacto
impresionante) soñó con detectar todas las enfermedades y eliminarlas, particularmente
el cáncer. Luego de la primera guerra mundial aparecieron fármacos basados en radio,
así como centros hospitalarios (base de los modernos centros de oncología), que se
denominaron "institutos del radium".
Desgraciadamente, se hicieron célebres sucesos tales como la comprobación de la
acción de los rayos X para evaluar el esqueleto de una rata, que resultaba lesionado en
el proceso; las quemaduras que sufrió Becquerel al manipular muestras del elemento
radio; la anemia perniciosa de Curie, luego de exponerse por largos años al uranio y
otros compuestos, o el cáncer de pulmón de las "iluminadoras", operarias que pintaban
los números de los relojes de pulsera con mezclas de sustancias fluorescentes, a su vez
radiactivas.

Después de la segunda guerra mundial, luego de la hecatombe de Hiroshima y


Nagasaki, y de accidentes fatales ocurridos en Estados Unidos, el congreso de ese país
promulgó la Ley McMahon, denominada oficialmente "Ley de Energía Nuclear", en
1946. A partir de ésta surgieron varias instituciones, entre ellas la Comisión de Energía
Atómica, que regularían tanto el desarrollo de armas nucleares como el uso y las
aplicaciones de diferentes equipos radiológicos. Los científicos mostraron interés por
aplicar principios de la física nuclear a los sistemas biológicos, y la ulterior cooperación
con biólogos y médicos dio origen al desarrollo de dos ramas, la biofísica (más general)
y la física médica (más específica).
En el Congreso Internacional de Radiología celebrado en Munich en 1959, se discutió
por primera vez la necesidad de formar una organización internacional dedicada a la
física médica, hecho que se concretó después de la reunión de Montreal en 1963.
Actualmente, los practicantes de la física médica cuentan con un ente representativo a
nivel internacional: la Organización Internacional para la Física Médica (IOMP,
International Organization for Medical Physics).
La física médica, en un comienzo dedicada al estudio del fenómeno específico de la
radiación ionizante en humanos, en la actualidad tiene una gama de aplicaciones
inmensa, que abarca prácticamente todo el espectro de radiaciones e inventos afines. No
obstante, pueden resumirse en cuatro aspectos, todos ellos interrelacionados: a) garantía
y control de calidad; b) seguridad radiológica; c) docencia e investigación; d) gerencia y
administración.
En física médica, las áreas de interés más usuales en la investigación de vanguardia y en
la práctica hospitalaria suelen ser las siguientes:
El estudio de las emisiones bioeléctricas de órganos como el corazón y el cerebro
(electroencefalografía y electrocardiografía).
Investigaciones biomagnéticas del cerebro (rastreo de posibles fuentes magnéticas).
Investigaciones sobre usos médicos de la radiación infrarroja (termografía).

El diagnóstico imaginológico, con diferentes longitudes de onda, del espectro


electromagnético (rayos X, ultrasonido, resonancia magnética, asociados con la
radiología diagnóstica).
Investigaciones para tratamientos contra el cáncer, mediante calor (hipertermia).
El estudio de los riesgos de las radiaciones y la forma de protegerse contra ellos
(bioseguridad - protección radiológica).
El diagnóstico mediante el uso de imágenes a partir de la emisión de radioisótopos
(medicina nuclear).
El tratamiento del cáncer a través de radiación ionizante (radiooncología).
La intervención quirúrgica mediante uso de láser (cirugía con láser).
La física se puede encontrar también en otras áreas de la medicina. Por ejemplo, muchos
sistemas de ventilación asistida no serían posibles sin el conocimiento sobre la presión
del fluido de modo que la presión aplicada sea el apropiado. De hecho, se podría
argumentar que cualquier tecnología avanzada o electrónico utilizado en la medicina no
existiría sin el conocimiento del universo que hemos adquirido a través de la física.
Física médica: Radiología diagnóstica
Radiología de diagnóstico es esencialmente una forma de imagen médica. Todos los
métodos de imagen médica que utilizamos, incluyendo rayos X, mamografía,
tomografía computarizada, ultrasonido y resonancia magnética (MRI), entre otras
tecnologías, requieren la presencia de un físico en la consulta. Estas tecnologías son
complejas y sólo pueden ser reparadass por quienes los entienden.
• Los escáneres MRI utilizan los principios de magnetismo
para tomar imágenes de alta calidad del interior del cuerpo humano, especialmente el
cerebro. Estos aparatos trabajan básicamente mediante la observación del espín nuclear
y la distribución de las moléculas de hidrógeno. Dado que los humanos son alrededor de
70% de agua, tenemos un montón de moléculas de hidrógeno que pueden darnos
información sobre la estructura de un órgano.
• Los rayos X son una forma de tomar imágenes de la
estructura esquelética del cuerpo.
• El ultrasonido utiliza ondas sonoras de alta frecuencia que
los seres humanos pueden tolerar. Estos ultrasonidos crean imágenes de los tejidos
blandos sin dañarlos, por lo que se utilizan sobre todo para crear imágenes de bebés
dentro del vientre materno.
Física Médica: Medicina Nuclear
La medicina nuclear es una parte de la medicina que usa radiación tanto para tratar una
enfermedad como para proporcionar imágenes e información sobre lo que está
sucediendo dentro del cuerpo de una persona. La radiación puede usarse para destruir
las células cancerosas y tratar órganos enfermos. Sin embargo, existe un cierto
solapamiento entre la medicina nuclear y radiodiagnóstico porque la medicina nuclear
también se puede utilizar para diagnosticar. Los trazadores radiactivos se utilizan para
crear imágenes de los sistemas corporales. Incluso podemos crear fotografías regulares
del interior del cuerpo usando radiación a través de la tomografía axial computarizada
(TAC) o escáneres de tomografía por emisión de positrones (PET).
Bibliografía
Bibliografía
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0120-41572005000300001

https://www.elhospital.com/es/noticias/la-importancia-de-la-fisica-medica-en-la-atencion-
hospitalaria

https://www.immedicohospitalario.es/noticia/26419/las-9-aportaciones-de-la-fisica-que-han-
revolucionado-la-sanidad.html
Conclusión
La física es muy importante en todas las ciencias, pero más en la ciencia de la salud
porque en ella aplicamos los principios de la física a la medicina y a la atención
hospitalaria.
Es como usar conocimientos de la física para desarrollar experimentos, herramientas, y
tratamientos que ayudan a que vivamos más tiempos y hacer más saludables al poder
detectar a tiempo cualquier eventualidad en el área de la medicina.
La física de encarga de diagnosticar enfermedades y lesiones por medio de los agentes
físicos.
Con la física entendemos cómo funciona nuestro cuerpo y así poder detectar cualquier
daño en él.
En fin la física lo es todo en la ciencia de la salud

También podría gustarte