Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Comprender lo monstruoso
Uno de los objetivos primordiales no sólo del cine sino de todas las artes es conmover al
espectador, es decir provocar una emoción en él. Los estudios psicológicos de distintas
universidades, (sin llegar a ningún consenso) se debaten sobre cuáles son las emociones
básicas del ser humano y cuáles se desprenden de éstas. La mayoría de las teorías
concluyen que hay seis emociones básicas:
1) Miedo
2) Sorpresa
3) Tristeza
4) Asco
5) Enfado
6) Alegría.
Los distintos géneros cinematográficos apuntan a generar una de estas emociones al final
de la película. En el caso del Terror, sería obvio que la emoción que pretende provocar es el
miedo, aunque en la mayoría de las películas éste es un miedo espontáneo provocado por
una sorpresa. Una secuencia clásica de terror es en la que un personaje se adentra en una
situación peligrosa, en donde van sucediendo falsas alarmas que juegan con el espectador
haciéndole pasar de la alerta a la tranquilidad varias veces y cuando éste se siente
completamente a salvo irrumpe súbitamente un elemento sorpresivo tradicionalmente
acompañado de efectos sonoros para hacer saltar al espectador de su asiento. El problema
de las películas taquilleras de terror es que se conforman con generar un pánico instantáneo
y no en dejar una emoción duradera.
En el caso de Voraz, la ópera prima de Julia Ducournau, a pesar de ser considerada una
película de Terror, no es el miedo la emoción que pretende generar. Su forma fílmica está
diseñada para mezclar emociones, erotismo con asco, comprensión con extrañeza, ternura
con incomodidad. El resultado no es miedo, es una sensación constante de incomodidad
provocada por imágenes ambivalentes que atraen y repelen al mismo tiempo.
Las películas más fuertes y memorables en la historia son aquellas que tienen varios niveles
de lectura. El primer nivel, siempre es anecdótico y a través de él se pueden diseñar muchos
otros conflictos y temas subyacentes. En otros muchos casos un tema “evidente” sirve para
hablar de otro de forma sutil.
Todos los seres humanos tenemos problemas y lados oscuros, todos somos potencialmente
asesinos, caníbales, violentos, depresivos, masoquistas etc. Sin embargo el amor familiar
tiene que trascender estos defectos, para llegar a amar de verdad a otra persona debemos de
comprender y aceptar sus defectos más grandes.