1) Es cuando dos o más contratos autónomos se hallan vinculados entre sí por una finalidad
económica común previamente establecida, de modo que uno de ellos es determinante
para el logro del resultado perseguido. Sus características son: Están determinados por una finalidad económica común. Su interpretación es a través de uno por medio del otro, en forma grupal, función y resultado perseguido. La conexidad debe ser probada. Según el principio de conservación no se puede extinguir uno si frustra la finalidad común. 2) Se interpretan teniendo en cuenta la finalidad que persiguen y que dio unión a ambos contratos, teniendo que interpretarse, como dice el art. 1074 CCyC, unos por medios de los otros, es decir, indagar en la finalidad económico social que trasciende la individualidad de cada contrato y que constituye la razón de ser de su unión, por ello su desequilibrio conlleva al desajuste de todo el sistema y no de un solo contrato. 3)