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dad wenes Aires” Facultad de Psicol IEE PSICOLOGIA EDUCACIONAL<) Catedra: BAQUERO myrmcag ENSAYOS SOBRE LA ESCUELA. SE TRILLA £, 41-1-04 ( | \ JAUME TRILLA ‘ ENSAYOS- SOBRE LA ESCUELA El espacio social y material de la escuela LAERTES S.A. DE EDICI E LA ESCUELA El discurso sobre ta escuela podria ser inacabable: la giado. Sin de tendencias, metodologias y teorias 10s interesa ahora es Gnicamente ver far sescuelar, sin forzar demasiado 3a , de entrada, qué Se propone; a qué aspecto —o as. educative general atiende preferen: A pesar de incién pedagézica més di- educacion ela creemes’ que esta en otra ue verdaderamente a la escuela no son ‘alt Tor Es por esto que mas nos escuela tal y como formalmente se nos presenta, sentrafier las funciones que cumpic# ues, partiondo de considerar 2 la escuela como entes tipos, modelos y v= oe as una de las mejores definiciones de escuela, en que proponemos, sea aun la de nso Xe] Sabio en sus Partidas: «Estudio e to de maesives et de escolares gue ex {echo an afgent loger con voiuntad et con 10 de aprender los seberesn? En esta definisién estén, implicitos o explictos, asi todes los aspectos 2 partir d¢ los cuales caracteriza- mos a la escuela, a saber: , «Espartax, «Acrép nombre de «Germanias, dada a la més pequ incémoda, parecia ser la advertencia de que existian sobrados motivos para despreciar el presente germéni Go 5 ensalar, en eamblo, el ensuebo jane ee sado grecorromano.!! ata ne y mas Esta serfa Ja pedag. stay de valores ab- solutes. Otra, en este caso modern: 7 3 lerna y progresista, por compartir el rechazo de lo coetaneo, encuentra tambien lamiento en el ai medio idéneo para su actuacion. No «Gran Cultura» y en lat Grandes Conqus scion, mas bie en se contracio: la «Naturaleza», El presente ¢s igualmente ne- gado con la espectative de un pasado atin més remoto a as relaciones del ho: iadas por fa cul haciendo tabla es, también se va de la se hace internado y se organiza de social que deberé lacionista retrégrada y cul pedagogia aislaci seat la escribe, y en sus tercero de los treinta puntos formulados por Ferriere que debian cumplir las sescuelas nuevas» dicen que la es- cuela debia ser un internado situado en el campo. La mds famosa escuela de los altimos tiempos, Sum- , €s también la que mayor vocacin aislacionista tiene y asume. Explica A. S. Neill ‘Un norteamericano, profesor de psicologfa, criticd nuestra escuela funddndose’ ta ‘que es uns isle nee Hesse, H., Bajo fa rueda, Cérdoba tina) 975, pigs, 4142 y 43. Sree a del nifo a tendria que ee le a isla, x paratigma asacionsta = puts neeesari siempre queso renege den realidad presets sea cul sl 7 ue crea un mundo rte que Sheds propsesto se crea an mun spare oie i Feproduetr sigo que pertenece 3! P Tavimagen de uy fut. Escolarizar la realidad algunas de las escuelas pesar de la escueia; o lo que es I ser precisamente lo que ¢s, conctacto}* Podemos suponer dos realidad: uns, haciendo que la real troduzca en Econdmica, 1978, 13. Hour, 3, El ica educativa— de las metodologias activas, ha exigido la vinculacién del aprendizaje con sus objetos Propios. Los métodos intuitivos ya suponfan la nece: de ver, tocar, sentir..., lo que se habia de aprende artir de las scosas» mismas. Las propuestas metodol cas activas exigen atin mas: exigen hacer, practicar, ex: mentar, descubrir. Por tanto, el aprendizaje ya no puede fundarse 0 iniciarse solo y exclusivamente en representa: ciones, simbolos 0 signos: si, de alguna manera, aprender es dar significacién a les 9, al menos, ya no lo eran tanto. cuela bastante Vale Ja pena mencionar dos a unas tras casas se convirtieron en adi fen especial Jas de Gloria y Mabel. cerca invariablemente estaba encantados cuando nos excontraban en la calle, Muchas veces, cuando iba de compras, subia por la calle de Michael Hasty taba mi nombre y dejaba de jugar a la pelota, y a menudo con un compasero més chico, caminaba con- migo una calle 0 dos, charlando animadamente, Asi- mismo veia a José en la calle y durante parte del aio, 1978, pag. 14. Scary Hees re ney XII, El modelo «pané; Aula tradicional modelica XV. El paradigms del activismo Este sf que ya c= un paradigma ds coal a yaad qe eicolares debersn referentes de los aprend 25 wt. Bata tler XVII. El aula es jardin, huerto, corral. 2. Escuela municipal montessoriana en Barcelona 2. Trabajo de taller en la -Excola de! Teeballe de Barcelona, ‘ea0 ty Escuela en New Jersey, FE UU, XVI. El aula es laboratorio XIX. El aila es el aire libre reds de Tease al puch fm la foto aparecen memorables Dedagogos de la rencvacign escolar en Catalunya como A. Galil Llomgueras y A Martorel XX. La clase-paseo. La vocacién centrifuga de la En su momento algo fan sencilo como lag excursiones, los fas muscos ey fueron une ite ie se0 —escribié Freinet— fue te para aceptarlo sin critica sino pa viéndolo, cuestionarlo. desde dentro y vi De chijo» a «escolar» La parcelacién del espacio social y Ja segmentacién del tiempo global que establece cierta pedagogia en forma de escuela, implica un status especifico para sus usuarios. ‘Tales usuarios propios y legitimos son los nifios™ y el rol 2B. Dewasox, G, Las vidas de los nifios, México, Siglo 2001, 1972, pag. 38.” 24, “Aunque Ja evidencia cuantitativa justifique ya de por sf tal afirmaciOn, valdré la pena matizarla més. Existen, cer- tamente, escuelas para adultos. De hecho, sin embargo, la sescuela de adultos es en realidad uma escuela para lo que de nifios tienen ciertos adultos: «la ignorancias, Para la peda goss adiconal, ja infancia ‘sf empo del aprendizale ‘adultez el momento de aplicar Jo aprendido. La «escuela de adultos» sera asi un mecanismo corrector 0 compensa Para nos adultos que nd lo san dl todo, fruto de una i ia 0, realiza, , Ha 48 Les antrovoiogos paso» y observanl que se componen de

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