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capitulo Odio las definiciones. ~ Benjamin Disraeli (1804-1881) éQué es la epidemiologia? La epidemiologé @Por qué una enfermedad aparece en unas personas y no en otras? La premisa que subyace a la epide- miologia es que las enfermedades, Jos trastornos y la mat: en una poblacién. En cambio, cada uno de nosotros tiene unas 10 's © nos protegen frente a ellas, Estas caracteristicas pueden tener un origen purslane 0 deberse a la exposicion a cier- tos riesgos ambientales. Quizés lo mas frecuente es que nos enfrentemos con una interaccién de factores SORES oto de la enfer- medad. Se ha aceptado ampliamente una definicién mas amplia de epidemiologia que la ofrecida antes. Se Lo que resalta de esta definiciém es que com- prende una descripcién del contenido de esta disci- plina y et objetivo o aplicacién para el que se llevan 4 cabo las investigaciones epidemiol6gicas. Objetivos de la epidemiologia {Cues son los objetivos especificos de la epidemio- logia? En primer lugar lecir, los factores que aumentan el riesgo de una persona de sufrir una enfermedad. Deseamos saber cémo se sl tare ds Introduccién tun ceservorio no humano a una poblacién humana. Nuestro objetivo ailtimo nal para los programas de crear una base ra Pr revel lemos est blecer una base para los programas de prevencidn. En ségundo lugar {Cual es el impacto de la enfermedad en la comuni- dad? La pregunta es critica para planificar los servi- ios e instalaciones sanitatias y para formar a los fucuros profesionales sanitarios. En tercer lugar, ta claro que unas enfer- medades son més graves que otras; algunas pueden ser mortales con rapidez pero otras pueden acompa- arse de supervivencias prolongadas. Nosotros que- que ientras of a, bien a través de tratamientos 0 de nuevas formas de con los datos basales con el fin de determinar si nues~ {tos nuevos abordajes han sido realmente eficaces. En cuarto lugar, it miento d gestionada y otros nuevos sistemas de asistencia sanitaria ha tenido algin impacto sobte los resultados de salud de sus pacientes ¥ sobre su calidad de vida?, zhacer un estudio de cri- bado del cancer de préstata en fos varones usando el antigeno especifico de la préstata (PSA) mejora la “ supervivencia de los pacientes que tienen este tipo de cincer? 4 ABORDAIE EPIDEMIOLOGICO DE LA ENFERMEDAD ¥ UA INTERVENCION . Por ejemplo, zes la radi see agnecar aaa lectromags emiten las mantas eléctricas, los calentadores y otros electrodomésticos un riesgo para la salud humana?, gson las concenceaciones altas de ozono y particulas atmosféricas una causa de efectos agudos © crdnicos sobre la salud?, ges el rad6n en las casas, un riesgo significativo para los seres humanos?, zqué teabajos se asocian a un mayor riesgo de enferme- dad en tos wabajadores y qué tipo de normativas son necesarias? Cambio de los patrones de los problemas sanitarios de la comunidad La principal funcién de la epidemiologi La figura 1-1 muestra un anuncio que habia en un cememterio de Dudley, Inglaterra, en 1839. En ese momento, el edleca era la puncipal-causa de muerte en Inglaterra; el cemente- rio de la iglesia estaba tan leno que no se permitian sepulturas de personas fallecidas de cOlera. E] anun- cio nos da una idea de la importancia del colera ea la conciencia piiblica y en ef espectro de problemas sanitarios piiblicos a principios del siglo xix. Esté claro que el célera no es un problema impor Estados Unidos hoy; pero en muchos pai mundo sigue siendo una amenaza seria, y muchos paises informan periddicamente sobre brotes de célera caracterizados por una mortatidad elevada. Comparemos las principales causas de muerte ‘en Estados Unidos en 1900 yen 2000 (figura 1-2). En 1900, la principal causa de muerte eca Ia neumonia, la siguiente la tuberculosis y la tercera la diarrea y 1a enteritis. En 2000, tas principales causas de muerte son las cardiopatias, el cdncer, la enfermedad cere- brovascular o el ictus y las enfermedades respirato- rias inferiores crénicas. Qué ha cambiado? A lo largo de un siglo ha habido un cambio espectacular cen las causas de muerte en este pais. En 1900 las tres rales causas de s la mayoria sisi ‘bles ni de origen infeccioss. En consecuencia, los patrén que se ve hoy en los paises en desarrollo es a menudo similar al visto en. Estados Unidos en 1900); fas enfermedades infeccio- sas son el problema mayor. Pero a medida que los paises se industtializan manifiestan los patrones de mortalidad que-e even en los paises desarrollados, debido a la aparicién del sindrome de la inmuno- deficiencia adquirida (sida) y de las infecciones por 1 virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y aumentado la incidencia de tuberculosis, las enfer- "CHOLERA! DUDLEY BOARD OF HEALTH, SRRUST GEVE WoTKoU, THAT iw CONSEQUENCE Cr TR Chureh-yards at Dudley Being so full, ac one who has died of the CHOLERA will be permitted to be buried after SUNDAY next,(‘To-morrow) of the Burial Grounds of St. Thomas’s, or St. Edmund’s, in this Town. {All Persons who die from CHOLERA, must for the fature be buried in the Church-yard at Netherton. either or re ape eee] eee capiruto 1 iiRODUCCION 5 2000 aps 7 eee : (7) ertemedesesrecpratoasinesoee cscs . (7) Aecintos testi no etenconad) = et ei reed de 8) 7) teste terse 7 ote atans TF ae 5 ex pneumonia 7 tnoacaces tots can, etiemect eater a cea C7 cremerndesreraas TF ai Ly seen > 9 Wo soot ‘Muertes por 100.000 ‘Muertes por 100.000 FIGURA 1-2¥ Las diez causas prindpales de muerte en Estados Unidos, 1900 2 2000, (Reproduce de Grove RD, Hetzel Ad: ‘Ata Statistics Rates ofthe United States, 1940-1960. Washington, DC, US Government Printing Office, 1968; y National Center for Health Star istics, National Vial Statistics Report, Vol 49, No.12, October 9, 2001) medades infecciosas se estan convirtiendo de nuevo en .un problema de salud pablica importante. Otra demostracién de los cambios que han te- ido lugar con el tiempo se ve en la figuta 1-3, que Estados Unidos en el momento del naciniento ya los 65 afios en los aiios 1900, 1950 y 2000 por raza y sexo. Los afios de vida que quedan en el momento 1. ° arenes "~ Nujows 7” Varnes Mujeres Marcos —baneas nage negas Enel nacimiento a I, mucho menos desde esta ultima fecha. Si miramos a los afios de vida que quedan a los 65 afios de edad, se ve muy poca mejoria de 1900 2 2000. Lo que es basica~ mente responsable del aumento de afios restantes de Vida desde el nacimiento son el descenso de la mor- talidad en menores de 1 afio de vida y de las enfer- medades de fa infancia, En cuanto a las enfermeda- ‘92600 ‘aromas tjors Varcnot " tajae Vancos areas egies nee ‘A108 65 afios de edad FIGURA 1-3 y Esperanza de vida en e nacimiento y a los 65 aftos de edad por raza y sexo, Estados Unidas, 1900, 1950 y 2000. (Reproducido del Naticnal Center for Health Statistics: Health, United States, 1987 DHHS publication No, 88-1232. Washington, DC, Public Health Service, March 1988. National Center for Health Sta- ‘ics National Vial Stat Rep 49, No. 12, Oetober 9, 2001.) 6 ADORDAKE EPIDEMIOLOGICO DE LA ENFERMEDAD Y LA INTTERVENCION a des que afectan a los adultos hemos tenido mucho menos éxito ampliando la esperanza de vida, y esto sigue siendo un desafio importante. Epidemiologia y prevencién estos grupos? En primer Jugar, si podemos identifi- car a estos geupos podremos dirigi esfuerzos pre- ventivos, como programas de cribado para una deteccién remprana de la enfermedad, a poblaciones que tienen una mayor probabilidad de beneficiarse de cualquier intervenciGn contra la enfermedad. En segundo lugar, si podemos identificar a estos grupos seremos capaces de identificar los Factores especificos 0 caracteristicas que les pongan en riesgo clevado y después intentar modificar es0s Factores. Es importante tener en mente que tales factores de riesgo pucden ser de dos tipos. Caracteristicas como la edad, dl xo y la raza, pr cemplopsonino odie aunque pacden permitirnos identificar tos grupos de riesgo alto. Por otra parte, caracteristicas como la obe- od, la dieta y otros factores de! estilo de vida puc- exposiciones especificas o factores de riesgo. ‘Al hablar sobre prevenci6n es til distinguir entre prevencién primaria y secundaria, La preven, cig primacig se vefiere a wna accién realizada para prevenir el desarrollo de una enfermedad en una persona que est bien y no tiene la enfermedad en cucstidn. Por ejemplo, podemos vacunar a.una per~ sona frente a ciertas enfermedades de forma que ésta nunca se produzca. O si una enfermedad esta producida por el ambiente, podemos prevenir a exposicion de una persona al factor ambiental implicado y por tanto prevenir el desarrollo de la enfermedad. La prevencién primatia ¢s; nuestro iiltimo objetivo. Sabemos, por ejemplo, que la mayoria de los canceres de pulmén son prevenibles. Si podemos hacer que la gente deje de'fumar pode- mos eliminar alrededor del 70-80% dé los cénceres de pulmén en los seres humanos. Pero aunque que- remos evitar que la enfermedad se produzca en las poblaciones humanas, carecemos dle [a informacion, necesaria para poner en marcha una prevencion pti maria eficaz en muchas enfermedades. A: menudo carecemos de los datos biolégicos, clinicos y epide- . hes tae nnn near nm nrarama de nre- «La prevencién secundaria se reficre a ta identi ‘cation de las personas que yx han suftido la enfer- medad, en un estadio anterior en la hissoria natural de la enfermedad, mediante estudios de cribado y fa intervencién precoz. Por ejemplo, 1a mayoria de los casos de céncer de mama en mujeres pueden detec tarse mediante una exploracioa de la mama reali zada por la propia paciente y una mamogratia. Varios estudids recientes indican que las pruebas hhabituales en heces en busca de sangre oculta pue den detectar un cdncer de colon watable en una fase més temprana de su historia natural. La raz6n de la prevencién secundaria € que si podemos identificar antes [a enfermedad en su historia natural, las medi: das de intervencién serin mas eficaces. Quizés al hacerlo asf podamos evitar la mortalidad o fas com- plicaciones de fa enfermedad y usar tratamientos menos ¢rventos 0 costosos. Dos posibles abordajes preventivos son un abor- daje sobre la poblacion o un abordaje sobre las per- sonas de riesgo alto”. En un abordaje sobre la pobla cidn se aplica una medida preventiva de forma ammplia a toda tna poblacion. Por ejemplo, sc pue den dar a toda una poblaciéa consejos dietéticos pradentes para evitar ta enfermedad coronaria. consejos contra el tabaco. Un abordaje alternative es dirigir fa medida preventiva a grupos de riesgo alto, Asi el cribado del colesterol en los nitios podria limitarse a aquellos procedentes de familia de riesgo alto. Est claro que una medida a aplicar a toda una poblacidn debera ser rclativamente barata ¢ incruenta. Una medida que se va a aplicar a un subgrupo de riesgo alto de la poblacién puede ser mas cara y a menudo mas cruenta o incémoda. Los abordajes s0- bre La poblacién pueden considerarse abordajes de salud publica, mientras que los de riesgo alto requie ren con mayor frecuencia una aceién clinica para identificar al grupo de riesgo alto al que van dirigi- das. En la mayoria de Jas situaciones, fo ideal es combinar los dos abordajes. Epidemiologia y practica clinica La.epidemiologia es critica no sdlo para la salud piblica sino para la practica clinica. La préctica de la medicina depende de datos poblacionales. Por ejemplo, si un médico escucha un soplo sistélico apical ge6mo sabe si hay 0 no una insuficiencia mitral?, ¢de dénde procede este conocimiento? FL diagndstico sc basa en la correlacién de la observa cién auscultatoria con la de la anatomia patol6y en {a cirugia o la necropsia y, dé forma ms reciente, 4 4 @eer } Asi, el proceso del diag: apitulo 5). Lo mismo ocurre para el prondstico. Un paciente pre- gunta a su médico «gCuanto voy a vivir, doctor?» y el médica contesta «De seis meses a un afior. ¢En qué se basa el médico para hacer este prondstico? Se basaen la e3 i ys de pacien- De nuevo el pro- ‘néstico se basa en datos poblacionales (Capitulo 6). Finalmente, la seleccién del tratamiento adecuado también se basa en la poblacin. Los ensayos clini- 0s con distribuci6n aleat {Capitulos 7 y 8). Luego concep- tos y datos basados en la poblacion subyacen a los rocesos criticos de la prictica clinicay = efecto, tn sg aplica un modelo de probabilidad al paciente que tiene tumbado en la camilla que esti basado en poblaciones. La figura 1-4 refleja un médico que demuestra que fa practica de la medicina clinica se apoya mucho en conceptos poblacionales. Lo que se re- trata con humor es ua comentario real sobre un as- pecto de la prictica pedidtrica: un pediatra hace a menudo un diagnéstico basado en los que el proge- nitor le dice por teléfono y las enfermedades, como las infecciones bacterianas y viricas, que el pediatra aunque no sea concluyente. FIGURA 1~4 y Usted tiene lo que quiera que sea que esta ppor ls altededores» (© The New Yorker Collecion 1975. Al Ross fom catoonbankcom. lights reserved) capiuio 1 inTRODUCCION 7 Porcentaje de nihos positives 2 25 ee on au waa” oe Edad en anos FIGURA 1-5 W Frecuencia de microorganismos por edad en los nifios con faringitis, 1964-1965. (Oe Denny FW: The replete pediatrician and the etiology of lower espitatory tied infec- tions, Pediat Res 3:464-470, 1969.) causa de los dolores faringeos en funcién de la edad del nifio son particularmente relevantes (figura 1-5). En un nifio mas mayor adquiere mas importancia Mycoplasma. Aunque estos datos no dan el diagnéstico, pueden propor- cionar al médico u otro profesional sanitario una buena pista sobre cl microorganismo 0 microorga- nismos sospechosos. Si Ia infeccién tiene lugar en fases tempranas de la “sa pleases dong i Sia po luce entre los 4 y los 7 afios, es probable que sea de Abordaje epidemiolégico @Cémo procede el epidemiélogo para identificar la causa de una enfermedad? El razonamiento epide- (p- ej. un agente ambiental) {p. ej. una mayor cos rol). Nosotros hacemos esto estudiando las caracteristi- cas de los grupos y de los individuos. : Si vemos que hay de hecho una asocisicién entre la exposicin y una enfermedad, éésta es necesaria~ mente,tina relacign causal? No todas las asociacio- -oleste- Guam 260 (n=9) Poo Rico 83 7 a Vigenes 355 FIGURA 1-6 ¥ Gonorres: casos comunicados por 100.000 habitantes, Estados Unidos ytentoris, 1999. ‘(GomonheaRates by State: United States ond outing areas, 1999. htp://wmecte pov/nchstp/od/program_ ‘riel_2001/Conorrhea Rates by sote United States and outing meas, 1999.htm, updated 6-50-01 ) nes son causales. El segundo paso es, por tanto, .. Estos pasos se exponen con detalle en capitulos posteriores. La epidemiologia comienza a menudo con datos des- tiptivos. Por ejemplo, la figura 1-6 muestra la fre- cuencia de gonorrea en Estados Unidos en 1999 Por estados. Resulta evidente una clara variaci6n regional en los casos comunicados de gonorrea. La primera pregunta a plantearse cuando vemos tales diferencias entre dos grupos 0 regiones 0 a lo largo del tiempo es «son reales estas diferencias?». En otras palabras, son los datos de cada area compa- tables? Antes de que intentemos interpretar los Silas diferencias son reales entonces nos p: guntamos «gpor,qué se han producido?». ¢Hay dife- rencias ambientales entre reas de riesgo bajo y alto © estn estas diferencias en las personas que viven en ‘sas dreas? Aqut es donde la epidemiologia comienza ‘su investigacién. Hace muchos aiios se observé que las comunida- des con diferencias en las concentraciones naturales Las comunidades ue tenfan concentraciones naturales bajas de fliior flor en su agua (figura ta observacién indicé que Se.realiz6 entonces un ensayo para comprobar esta hiporesis. Aunque Jo ideal hubiera sido distribuir de forma aleatoria a un grupo para que recibicra fléor 0 no, esto no fue posible con el agua de bebida. porque ) a [Ror eaca 100 nifos examinados Caries dental on alentes permanentes) o 05 1 15 2 25 3 Contenido de fhior ene! suministro puibico de agua (partes por milién) FIGURA 17 W Relacion entre la frecuencia de caries dental en los dientes permanentes y el contenido de flior en los suministros. pablicos de agua. (Adaptado de Dean HT, Arnold £4, Elvove E: Domestic water and dental cares: W Additional sty- AE the toltinn of hide in demectcwnteve tm antl rier | > > > » » , , » » , » | | ~~~ 1200 Eto. ' 2 4400. 3 § | taco EE 000. FE co Seco 3 a : 69 we | ts44 | 15-16 Etta (afios) FIGURA 1-8 W Los indices DMF tras 10 anos de fluoracién, 1954-1955. DMF: dientes con cares, perddos y.con empas” tes. (Adaptado de Ast DB, Schlesinger ER: The conclusion of a 10- ‘yeer study of woter fluoridation. Am J Public Health 46:265-275, 1956. © 1956 por la American Pubic Heath Assocation. Adaptado «on autovizacion) cada comunidad comparte generalmente un sumi- Riend deseunceingt consecuencia, se eligieron para el ensayo do: nidades similares del inte rior de Nueva York, Kingston y Newburgh. Se usé el indice DME, un recuento de los dientes con caries, perdidos y con empastes. Se recogieron datos basa. les en Jas dos ciudades y, al principio del estudio, los indices DMF eran comparables en cada grupo de las dos comunidades. Entonces se fluord el agua de Newburgh y se volvié a estudiar a los iifos. La figura 1-8 muestra que en cada grupo el indice DMF en Newburgh habia descendido de forma significa tiva permaneciendo bajo en tos siguientes 10 afios o mas, mientras.que en Kingston no h Esta es una Fue posible ir un poco més allé en el intento de demostrar la relacidn causal entee la ingestion de flor y la frecuencia menor, de caries. El asunto de fluorar los suministros de agua ha sido muy. discutido, y en ciertas comunidades en que el agua se ha fluorado ha habido que dejar de hacerlo por referéndum. Luego fue posible mirar el indice DMF en comu- nidades como Antigo, Wisconsin, a cuyo suministro de agua se afiadié el flior y después, tras un referén- dum, se dej6 de aiiadir. Como se ve en la figura 1-9, después de retirar el flios, el indice DMF uments. Esto proporcioné una mayor solidez a la prueba de ue el flor evitaba Ia caries dental. cAPTULO 1 MTRODUCCION 9 ‘ al od Hi na F ee : E im BZ 42 grado 2 grado. 0 grado FiGuRA 1-9 W Efecto de la suspension de la fluoracién en ‘Antigo, Wisconsin, naviembre de 1960. DME, dientes con ca ties, perdidos y con empastes; FI. +, durante la fuoracién, FL, después de suprimiria fluoracién: (Adgpiado de Lemke CW, Dhesty i, fara MC: Contioled fluoridation: The dental effects of ds- continuation in Antigo, Weconsin. J Am Dental Assoc 80.782-786, 1970. Reproducio con autoszacién de ADA Publishing Co, toc) Desde los datos observacionales a la accién preventiva Edward Jenner (figura 1-10) nacié en 1749 y se inte +es6 mucho por el problema de la viruela, que eta un. azote mundial. Por ejemplo, a finales del siglo xvi morian 400.000 personas de viruela todos los aiios yuna tercera parte de los supervivientes quedaban ciegos debido a infecciones corneales*. Se sabia que FIGURA 1~10 ¥ Fotogiaia de Edward Jenner. (Del Welcome Hisiotical Medical Museum and library, Coleién Mansel, London) 10 ABORDAIE EPIDENIOLOGICO DE LA ENFERMEDAD Y LA INTERVENCION : de los pacientes infectados, una intervencién Ha- Pero éste no cra un método timo: algunos sujetos variolizados fallecieron de viruela, infectaron a otros de virucla o presentaron otras infecciones. Jenner se inteces6 en encontrar una forma mas segura y mejor de prevenir la viruela. Observé, como otros antes que él, que las ordeiiadoras, fas mujeres jovenes cuyo trabajo era ordefiar las vacas, presemtaban una enfermedad llamada viruela de las vacas. Después parecia que durante los broves de viruela estas mujeres jévenes no padecian ta enfer- medad. En 1768 Jenner escuch6 a una ordeiadora decir no puedo coger ta viruela porque tengo la virucla vacunan. Estos datos eran observacionales, no se basaban en ninguna distribucién aleatoria Jenner se convenc La figura 1-11 muestra una pintura de fa prime- Fa vacunacién. (EI témino «vacunacién» deriva de vaca, la patabra latina que designa a la «vaca»). En esta pintura, una ordeiadora, Sarah Neimes, a la que le acababan de extraer material de la viruela de Ja mano, se fa esté vendando. Jenner esta adminis- trando el material de la viruela a un «voluntariow de 8 afios, James Phipps. Jenner estaba tan convencido de que la viruela vacuna seria protectora que 6 se- manas mas tarde, para comprobae su conviccién, inoculé al nifio material de una plistula de viruela El nifio no contrajo la enfermedad. No vamos a tra tar en este capitulo los aspectos e implicaciones 6ti cas de este experimento, (jEsta claro que Jenner no tuvo que justificar su estudio ante un comité de éticat) En cualquier caso, esté clato que los resulta- dos de la primera vacunacién y de las que la siguie- on salvaron literalmente a millones de seres huma- nos de la incapacidad y fa muerte causadas por el azote de la viruela. El punto importante es que Jen- ner no sabfa nada sobre virus y nada sobre Ja biolo- fa de la enfermedad, En 1967, la Organizacion Mundial de Ja Salud (OMS) inicié una serie de iniciativas internacionales pata ercadicar Ia viruela utilizando: vacunas con el virus de la vacuna (vituelx vacuna). Se calcula que; hhasta ese momento, la visuéla afectaba 15 millones de personas al afio en tod6 el mundo, de los cuales 2 millones fallecian y millones de otros quedaban FIGURA 1-11 ¥ Binur de [a primers vacunacidn, (Roses DF: From Hunter and the great pox to Jenner and smallgex. Suxg Gmecol Obstet 175:365-372, 1992, Con avonzacion de Suen, ‘Gynecology & Obstetics, ahora conocido come Journal ofthe marican College of Surgeons ) erradicaci6n de la viruela dirigido por el Dr. D. A. Henderson fue uno de los mayores logros preveativos dela historia de la humanidad. La OMS estimé que se habian evitado 350 millones de casos nuevos durante los 20 afios previos. Tras el ataque terro- rista que mat6 casi 3000 personas en el World Trade Center en Nueva York el 11 de septiembre de 2001, el mundo ha empezado a preocupatse por un posible terrorismo biolégico. El que el virus de la Virucla pudiera usarse para un propésito de este tipo reabrié irdnicamente aspectos relacionados con la viruela y su vacunacién que muchos conside- taban relegados a la historia por los esfuerzos efica- ces realizados para su erradicacién. La magnitud de a amenaza del terrorismo biolégico con la viruela junto a los riesgos de la vacunacién, tanto para los vacunados como para los que entran en contacto con las vacunas, especialmente en el ambiente hos- pitalario, son algunos de fos muchos aspectos con- siderados. Pero a menudo s6lo contamos con datos limitados 0 equivocos sobre estos aspectos para guiar el desarrollo de una politica publica cele- Otro ejemplo del traslado de las observaciones epidemiolégicas a la politica pablica lo inmortalizé John Snow, cuyo retrato aparece en Ia figura 1-12. Snow vivid en el siglo xix y era bien conocido por ser el anestesista que administrd cloroformo a la reina Victoria durante an parto, Pero la verdadera a mediados del siglo xix. Sélo en la pri- mera semana de septiembre de 1854 unas 600 per- sonas que vivian a unos pocos bloques de la bomba de Broad Street en Londres fallecieron de célera. En ese momento, el Registrador General era William Fare. Snow y Farr tenfan un desacuerdo importante sobre la causa del célera. Fare era partidario de la De acuerdo con esta teoria, que era comiin en aque: esto fuera asi, seria de esperar que una persona que viviera a una altitud menor tuviera tun mayor riesgo de contraer una enfermedad trans mitida por esta nube. FIGURA 1-12 w Fotografia de John Snow. (Del Welcome Historical Medical Museum and Library London.) CAPITULO 1 INTRODUCCION 11 Snow no estaba de acuerdo; 41 crefa que el c6lera se transmitia a través del agua contaminada (figura 1-13). En Londres, en ese mo- mento, una persona conseguia el agua haciendo un contrato con una de las compainas de suministro de agua. La captacién de las compafifas de agua se ha- cia en una parte muy contaminada del rio Tamesis. En um momento, una de las compafias, la Larbeth Company, cambié su captacién en la parte alta del rio a una parte menos contaminada del rio; Ias otras, ‘compaiifas no movieron la localizacién de su capta- ci6n de agua. Snow razon6, . El hizo lo que hoy en dia lamamos «epidemiologia de a yendo casa por casa, contando todas las. muertes or célera en cada casa y determinando qué compa- iifa suministraba el agua a cada casa. Las observaciones de Snow se muestran en la tabla 1-2. La tabla muestra ef nimero de casas, el niimero de muertes por célera y las muertes por 10.000 casas. Aunque ésta no es una tasa ideal, porque una casa puede contener un mimero dife- rente de personas, no es una mala aproximacién. ‘Vemos que en las casas a las que suministcaban las compaiias Southwark y Vauxhall, que obtenian el agua de una parte contaminada del Tamesis, la mor- talidad era de 315 muestes por cada 10.000 casas. En las casas suministradas por Lambeth Company, la (asa fue slo de 38 muertes por 10.000 casas. Sus datos fueron tan convincentes que Hevaron a Farr, el TABLA 1-1 Muertes por célera por 10.000 habitantes en funcién de la elevacién de la residencia por encima del nivel del mar, Londres, 1848-1849 Elevacién por encima Muertes por cada del nivel del mar (pies) 10.000 habitantes <20 120 ~ 20-40 65 40-60 34 2 60-80 a 20-100 2 100-120 v7 320-360 8 Datos de Far W: Vital Statistics: A Memorial Volume of Selections fiom the Reports and Wings of Wiliam Fart (editade para el Sari- tary lnstitte of Great Britain por Noel A. Humphreys) London, The Sanitary stitute, ¥885, 12. ABORDIKE EPIDEMIOLOGICO DE LA ENFERIMEDAD Y LA INTERVENCION 7 UNA GOTA DE AGUA DE LONDRES Registrador General, a exigir al registrador de cada distrito del sur de Londres a consignar qué compa- ‘ia suministraba el agua a cada casa en la que una persona muriese de célera. Recuerde que en los . No se sabia nada sobre la causa de Ia enfer- medad. iz EI asunto es que, aunque es extremadamente importante para nosotros maximizar nuestco cono- cimiento sobre la biologia y la patogenia dela enfer- medad, ‘or ejemplo, nosotros sabemos que casi todos fos casos de ficbre reumatica y cardiopa- tia reumética siguen a una infeccién estreptocécica. TABLA 1~2 Ed Mucrtes por clera por cada 10,000 casas, pot oigett del suministro de agua, tondies) 1854 FIGURA 1-15 ¥ Una gota de agua del Tamesis dibujada por Punch en 1850. (De Bxracts fom ‘Appendix (A) to the Report ofthe General Board of Health on the Epidemic Cholera of 1848 and 1849, publicado por HMSO, Londres, 1850. nt J pide 31:900-907, 2002) Streptococcus es probablemente la bacteria que se hha estudiado y analizado de manera mas extensa, Ee que teas una infeccién cestreptocécica grave, como la que se ve en reclutas militares, la fiebre reumatica no aparece en 97 de cada.100 personas infectadas. En las poblaciones civiles, como Los nitios de colegios, en las que la infeecién es més leve, la fiebre reumdtica aparece slo en 3 de cada 1000 escolares inféctados, pero no ri los restantes 9971. Por qué la enfermedad no se produce en los 97 reclutas ni en fos 997 escolares si ‘estan expuesto o mieroorganismo? No lo Suministro de agua Ne de casas Muertes Bor c6lera._“~.. Mugités por edd: 10.006 casas ‘Southwark and Vauxhall Co. 40046 W265 aS Lambeth Co. 26.107 8 “ee Otros distritos londinenses, 256.423, 1422. 36 Botos edeptados de Snow J: On the mode of communication of cholera. En Snow on Cholera: A Reprint of Two Papers by John Snow, MD. "Nueva York The Commonwealth Fund. 1956, liales. Lo que sabemos es que, incluso sin compren- der completamente la cadena patogénica desde la infeccién por Streptococcus a la ficbre reumstica, ‘conocimiento biol6gico sobre 1a patogenia no debe Considere el humo del tabaco y el cancer de pul- mén. No sabemos qué componente especifico de los cigarrillos produce el céncer, pero sabemos que el 75-80% de los casos de cancer de pulmén se deben - al tabaco. Esto no significa que no debamos realizar estudios de laboratorio para conocer mejor cémo los cigarrillos producen el cancer. Pero de nuevo, de forma paralela 2 esa investigacién, debemos montar s La figura 1-14 muestra la mortalidad del cincer de mama y el cancer de pulmén en las mujeres de a de pulnn chr mors a sencdS co mente. Desde 1987 mas mujeres han fallecido cada Frecuendia po 100.00 2 ~ 25 CAPITULO INTRODUCCION 13, afio de céncer de pulmén que de cdncer de mama. Luego nos enfrentamos a yn cuadro trégico de una forma prevenible de cancer, ef céncer de pulmén, ‘como causa principal actual en las mujeres estadounidenses. Ademés, la Environmental Protection Agency cla* sificé en 1993 el humo del tabaco ambiental del tabaco de otras muerte por cdncer ido a su presencia en el ambiente. ‘Aunque parece que las cifras de fumadores en mayores de 18 aiios se estan reduciendo en los tlti- ‘mos afios en Estados Unidos, una observaci6n pro- blematica es que desde 1991 a 1997 la prevalencia de tabaquismo en los estudiantes de instituro ha aumentado un 32%. Luego el azote del tabaco sigu: ‘Conclusién A la prevencidn y el tratamiento se les ve demasiado a menudo como actividades mutuamente excluyen- tes, como se muestra en la figura 1-15. Pero estd claro que la prevenciéanb 6a ea ple argrall | zigey EL DOCTOR ESTA ESPECIALIZADO EN MEDICINA PREVENTIVA.... DE MANERA QUE SI USTED ESTA YA ENFERMO EL NO ESTA INTERESADO. ° A979. 1975 1977 1970 1961 1969 1985° 1967" 1969 1991 1089 "1995 ‘Afto de la muérte + Pulménblanea + Pumén-negra * Mamacbienca’ & Mama-negra FIGURA 1-14 wMortalidad por cincer de mama frente a

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