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3.1 ESCUELAS DEL DERECHO PENAL: ESCUELA CLASICA. Su nombre fue dado en “sentido peyorativo”, por los adversa- rios de esta Escuela, los Positivistas, queriendo significar con ello un tradicionalismo y hasta anquilosamiento, en las concepciones, puesto que argumentaban estar muy lejos de 1a realidad hist6rica ‘en que naci6, No obstante ello, hay que apuntar que clésico cierta- mente significa lo consagrado, lo ilustre, Io excelso. Para otros tratadistas, el nombre de esta Escuela fue dado por el positivista Enrico Ferri, respondiendo asi a su indole filos6fica, a la ideologfa liberal, la que se basa en un orden natural impuesto para los hombres y las sociedades. ‘A esta Escuela pertenecen: Carmignani, Filangieri, Rogma- nosi, Rossi, Pessina, Carrara, considerado este tiltimo como su méximo representante y primer sistematizador del Derecho Penal; sus principios son perfectamente vigorasos y definidos. Tales pre- Introduccién al Derecho Penal 45 representada por el agente corporal, que con el delito irroga dafio material; y, la fuerza fisica, encarnada por el agente inteligente del delito. Acorde con este autor, para que el delito exista es indispen- sable que, el sujeto sea moralmente imputable, el acto tenga un valor moral, de é1 provenga un dafio social y, se halle prohibido por una ley positiva, En definitiva, al delito le conceptiia como infracci6n a la Ley del Estado, la cual protege la seguridad de los ciudadanos; ademis, es resultante de un acto externo del hombre, considerado éste, positivo 0 negativo, y, en todo caso, moralmente imputable. Carrara concibe como de origen divino el derecho de castigar. ‘También, se fundamenta en la proteccién a los derechos que te- nemos los miembros de la sociedad, a Jo cual llama “necesidad de la tutela jurfdica”. Cabe destacar en el siglo pasado, la notable influencia de la Escuela Clésica, sobre toda la legislaciGn y orientacién penal. Romagnosi: Rechaza la teorfa contractualista y funda el Derecho Penal en una especie de voluntad inmutable, anterior a la humana, que le ha dado instinto defensivo. El hombre esté asisti- do por ese derecho de defensa junto al de conservar la felicidad y la igualdad. Las facultades represivas nacen directamente de las relaciones naturales y reales de los asociados. Este gran maestro italiano concibié a la pena como un contra- impulso delictivo, porque la amenaza de aquella debia ser andloga a la presunta indole del deseo criminal, y proporcionada al grado de energia de ese deseo. 4 __lntisGastals Ten ceptos representan una necesidad ontolégica de la idea del Derecho, Pelegrino Rossi: Opinaba que, un orden moral debe ser obli- ‘gatorio en todos los seres libres-inteligentes, de éste nace el orden social y de él provienen todos los derechos y deberes inherentes a la vida social del hombre. El Derecho Penal es consecuencia del orden moral, decia, y a pena, es el restablecimiento del orden social perturbado por el delito, pero, se la aplica con un sentido re- tribucionista. Carmignani: Fundamenté su doctrina en la necesidad politica de combatir el delito, con el fin de evitar que se perturbe la seguri- dad y la convivencia sociales; segtn afirma este autor, el castigo del delito se lo emplea como medio para contenerlo, puesto que, “ en el hoi jerte el miedo al dolor”, y por lo cual, las ‘como Dentro de la Escuela Penal Clésica se manifiestan distintos principios, algunos autores se basan, exclusivamente, en el senti- ros, tiene una finalidad puramente pre~ >) wentiva, cuya corriente tuvo a su favor el mayor nimero de juris- ~ tas de ese tiempo. Francisco Carrara: Que para algunos eriticos del Derecho, constituys “la expresién més noble y fecunda de toda una época.” Segiin este penalista, el delito es unl €nié juridico; piensa que el delito, ademas de la consiguiente alarma causada en la sociedad, es una verdadera injusticia, constituido por dos fuerzas: Ja moral Introduecién al Derecho Penal 47 la ley positiva; es un ente juridico, porque su esencia consiste, necesariamente, en la violacién del Derecho. De ahi que se afirma segin el pensamiento de esta Escuela que: “La condicién y la medida de la pena ¢s la libertad moral del hombre y el grado de esa libertad.” La Responsabilidad Penal. Esta Escuela se fundamenta en el “libre albedrio” de la persona, o sea, la facultad de autodetermi- narse frente al bien 0 al mal. Sin libre albedrio no es posible ningu- na incriminacién moral ni juridica, Carrara, distinguié el proceso lad penal, en tres clases de juicios de imputaci6n: ';b) La ejecu- cin del hecho con voluntad inteligente y libre o “imputacion -mofal”; y, ¢) La prohibicién del hecho por Ia ley penal o “impu- " De acuerdo con este planteamiento juridico-penal, quedan excluidos de responsabilidad, todos aquellos individuos que, por cualquier motivo, no tuvieren el pleno uso de sus facultades men- tales 0 estuvieren privados de la razén, como los enajenados men- tales, los anémalos siquicos, los sordomudos, los nis, los alco- hélicos o intoxicados por otras sustancias. Para esta Escuela, todas las causas que disminuyan la libertad en el obrar, incide a manera de atenuante en Ia responsabilidad penal, esto es, hace menos grave la infraccién penal cometida. De ahi que a menor libertad y conciencia en el hecho, corresponde menos grado de responsabilidad. Carrara, considera como circunstancias restrictivas de la responsabilidad, a las “pasiones”, que segtin este autor son la 46 La defensa social aparece, por primera vez, en la obra de Romagnosi, quien sostiene lo siguiente: “Hay un orden moral préctico constituido por el hombre que asegura la existencia de la comunidad”. El Método de la Escuela Clésica, es llamado método deducti- vo 0 especulativo, que consiste en afirmar leyes o premisas uni- versales, para descender luego a los casos particulares. Algunos de los principios generales aceptados por la Escuela Clisica son relativos a la existencia de una ley moral, de un Derecho Natural, el reconocimiento del principio de causalidad, la consideraci6n al delito como un fenémeno juridico y, al hombre, como un ser inteligente y libre. 1.- Concepeién del Derecho. Consideran como una cosa na- tural desde el nacimiento del hombre, el derecho a la vida, a la li- bertad, a la propiedad, etc. Y, le corresponde al Estado reconocer, sistematizar y ordenar tales derechos, para asegurar la coexisten- cia pacifica en la sociedad, reprimiendo a sus infractores. Ademiés, sostiene esta Escuela que el Derecho es congénito con el hombre y esto porque ha sido dado por Dios a la huma- nidad, desde la creacién del universo, para que pueda cumplir con sus deberes en la vida eterna, 2. Concepcién del Delito. Consiste necesariamente en la vio- lacién de un derecho. Es un fenémeno juridico que debe ser estu- diado por el Derecho Penal, examinando sus causas productoras y la manera de prevenirlo. El delito también es definido como un ente juridico que surge de la relacién entre un hecho del hombre y Derocho Penal 49 Crfrica A LA ESCUELA CLASICA 1) Sent6 las bases del Derecho Penal Cientifico. 2) Explicé filos6ficamente la razén de ser del derecho de castigar. 3) Fijé los limites del Estado para el ejercicio de esa potestad. 4) Reinvindicé Jos derechos y garantias individuales frente al Estado. 5) Combatié la barbarie de las penas y los abusos en la administracién de justi- cia Los principios de Ia Escuela Clasica son considerados maes- tros, dentro del pensamiento penal, cuya influencia continda hasta nuestros dias. Se critica a la Escuela Clasica por haber desplazado el estudio de los delincuentes hacia otras disciplinas. Ademés, se lo critica por haber fundado la responsabilidad penal en el “libre albedrio”, ‘concepcién abstracta, cuyo estudio debe alejarse de nuestro campo. ‘También, se ha objetado a esta Escuela el “cardcter purgatorio” que dio a las penas, como olvidando un fin rehabilitador de las, mismas. Por tiltimo, se critica a los Clsicos, por no haberse detenido en cl estudio de los factores individuales y sociales de la criminalidad y medidas preventivas, 48 _ luis Costales Terdn fuente de las acciones malvadas. Hay pasiones “ciegas”, cuando en forma excitada disminuyen el raciocinio y la libertad de obrar; ejemplos: la ira, el temor. Si se presentara algtin motivo aparente- mente justo, dice que, debe considerarse atenuante. Pasiones “razonadoras”, aquellas que abusan los célculos del raciocinio, Ejemplo, la codicia, En fin, segiin esta Escuela, la pena debe someterse a criterios juridicos que regulen la cantidad y calidad del dafio ocasionado, 0 tome en cuenta el peligro corrido por el sujeto pasivo, dentro de la sociedad. castigar el quebrantamiento de la Ley. La pena se justifica con el restablecimiento del orden juridico perturbado por la infraccién penal. La pena procura enmendar el dafio moral ocasionado en la tranquilidad ciudadana. Pero, la pena también actiia como ame- naza, como protectora del Derecho; es decir, tiene la validez de una “tutela juridica”. Y, probablemente en este punto es donde se halla depositada toda la esencia del clasicismo. 5. La Inmutabilidad del Derecho. Del cual con toda propiedad se afirma que: “EI Derecho crea leyesy el Derecho es “Bl Derecho es Ia eterna igualdad en la inmensa variedad de hombres; es la ecuacién perenne de todas las utili- dades de la vida.” 51 Sostiene este tratadista que la pena se debe aplicar de acuerdo con la peligrosidad del delincuente, siendo éste, de diversa indole: nato, por hébito adquirido, de ocasi6n, y, por pasién. Para los dos primeros grupos mencionados, la pena tiene una finalidad elimi- natoria; y, para los dos tiltimos, una finalidad represiva y reparado- ra. Rafael Garéfalo. Fue quien formulé la teorfa del “delito na- tural”. Este autor encontré la anomalfa, ausencia 0 desviacién moral, en el mismo delincuente. La eliminacién de los inadapta- bles al medio social y, 1a obligatoriedad de reparar los daios cometidos por el delito, son segiin el mismo tratadista, una reac~ cién social. Gar6falo fue acérrimo defensor de la pena de muerte. César Lombroso (1836-1909). Hombre revolucionario del pensamiento en materia penal. La Antropologia creada por Lombroso dio lugar a Ia existencia de “un tipo criminal”; su nom- bre, puede ser el “delincuente”, cuyas caracteristicas formuladas por Lombroso coincidfan con las medidas del eréineo, brazos, cara, contextura fisica, etc. En esta clase de seres —segtin Lombroso— ‘existe una predisposicién para el delito, ademés, admite la influen- cia de diversos factores de orden somético, entre otros, dando lugar @ la pluralidad del delincuente. Método. La esencia de esta Escuela Penal para sus maximos representantes, precisamente reside en el método cientifico 0 experimental que utiliza, puesto que, aprovecha ademés los conocimientos de las ciencias experimentales. Comienza por la observacién, de la cual asciende, inductivamente, hasta llegar a las causas de los diversos fenémenos. Ejemplo: el delito es tratado como un hecho individual y social, luego, se examina la persona- 50 Luis Costales Tern 3.2 ESCUELA PENAL POSITIVA Fue una concepcién distinta y en muchos casos opuesta a la corriente de la Escuela Penal Clisica, inicialmente llamada Escuela de Antropologfa Criminal; précticamente esta Escuela surgi en el aio 1876, con la obra “El Hombre Delincuente”, de César Lombroso, también, autor de: “Sociologia Criminal”, y, “Genio y Locura”. En el plano metafisico halla su base en la doctrina de Comte, y hasta el nombre de positivismo arranca de la “Filosofia Positivista”, que el famoso autor puso en boga. Los mas destacados representantes de la Escuela Positiva son: Lombroso, a quien se lo llama el Antrop6logo de la Escuela Positivista; a Gardfalo, se le decia el Jurista; y, Ferri, el Socidlogo. Acestos tres tratadistas se los ha calificado como los “Evangelistas del Derecho Penal”. Al Positivismo se adhirieron en Italia otros autores como: Pugila, Florin, De Luca de Marcico, Frosali y Grispigni; en Holanda: Vanhamel; en Espaita: Pedro Dorado Montero, De Quiroz, Saldaia y Jiménez de Asia; en Argentina: Juan Pablo Ramos, Gonzilez Roura y Eusebio Gomez; en Colombia: Carlos Lozano, Jorge Eliecer Gaitén. Enrico Ferri. Explicé los principios de la criminalidad me- diante el influjo de factores individuales, fisicos y sociales; neg6 el libre albedirfo y, represent6 al delincuente como un ser anormal ico 0 siquico. Segin la responsabilidad social, el hombre. es imputable y responsable por el hecho de vivir en sociedad. Introduecién al Derecho Penal 53 La Resposabilidad. Niega el Positivismo el libre albedrfo como fundamento de la responsabilidad penal y da paso a las ideas del determinismo; segiin esta tendencia, el hombre no puede evadirse de las leyes universales de causalidad, que forzosamente se cumplen en los aspectos fisico, biol6gico y sicolégico. De esta manera, el hombre esta sujeto o predestinado a la realizacién de determinados hechos. Proclama la responsabilidad social o legal, segiin la cual, el hombre es responsable porque vive en sociedad, y debe ser responsabilizado, penalmente, por todo hecho considerado como delito por la Ley Penal, a no ser que, de acuerdo a esta misma ley esté justificado; cuando actta, por ejemplo, en legitima defensa Dicha responsabilidad se justifica como proteccién al orden social. En consecuencia, cualquier persona puede ser destinataria de la Ley Penal. La acci6n siquica que puede acompafiar y dirigir a la accién fisica en el cometimiento del delito, reviste cuatro formas diversas de delinquir: 1) “Intencién delictiva”, con voluntad més o menos anormal; ejemplo: la impulsividad. Corresponde a delitos dolosos 6 voluntarios, 2) “Defectos de atencién”, corresponde a delitos culposos 0 involuntarios. 3) “Conciencia con voluntad no madu- rada o enferma”, corresponde a delitos cometidos por menores de edad, enfermos mentales, etc. 4) “Inconciencia”, delitos perpetra- dos por idiotas, en delirio, o en estado de enfermedad mental. La Pena. Mira ante todo un aspecto, la “seguridad social” o la “defensa social”, asi se conciben las medidas de seguridad, que deben sustituir a las penas, y para su aplicacién se toma en cuenta 52 Lule Costales Terdn lidad del reo y del medio ambiente, obteniendo por via de experi- mentacién, las conclusiones mas acordes con la defensa social La Escuela Positiva siempre bajo la dialéctica del materialis- mo, utiliza, gradualmente, un acento antropol6gico, somético, siquico y, sobre todo, sociol6gico. Ciertamente, el origen de la Criminologia se debe a esta corriente del Derecho Penal; su lema favorito fue que: “ no hay delito sino delincuente.” El triunfo del Positivismo en el aspecto cientifico fue al prin- cipio avasallador y, fue més reconocido en lo criminolégico y médico, que en Jo juridico. En todo caso, una de las tareas més fructiferas alcanzadas por esta Escuela, es de haber logrado que se reconsidere el problema penal desde otros puntos de vista, que los que hasta entonces dominaban, EI Delito, Para la Escuela Positiva, el delito es fenémeno na- tural; un simple hecho social, siendo més importante su estudio como ente juridico determinado por la violacién de la Ley penal. El delito se debe a factores endégenos o disposicién particular, y a factores exdgenos o sociales del medio fisico. Los dos factores deben ser objeto de examen para el Derecho Penal, segtin esta Escuela. Entre los factores end6genos se menciona: la herencia, edad, el sexo, las enfermedades, la constitucién somética o siquica del. delincuente, Como factores sociales se tienen: las condiciones econémicas de la familia, el alcoholismo, la ignorancia, ete. Para esta Escuela es mas importante la prevencién del delito, mediante medidas tendientes a contrarrestar las causas de la cri- minalidad. 2.- Delincuentes locos. 3.- Delincuentes habituales. 4,- Delincuentes ocasionales. 5.- Delincuentes pasionales. Como rasgos distintivos del “ delincuente nato” tenemos la impulsividad, irritabilidad, sensualidad, falta de arrepentimiento, la incorregibilidad; son sujetos temperamentalmente predispuestos al delito, Sus delitos preferidos son: contra la vida, la integridad personal y de carfcter sexual. El“ delincuente loco”, es una enajenado mental, victima de alucinaciones y delirios que los arrastran al delito en forma incons- ciente 0 semi-inconsciente; su enfermedad los hace impulsivos, peligrosos y acreedores a medidas de seguridad. El “delincuente habitual”, es producto del medio ambiente des- favorable y, propicio a la criminalidad, como ocurre con la infan- cia abandonada, originada en lugares de corrupcién y vicio; se ini- cia desde temprana edad, en atentados de poca cuantfa, siguen una carrera ascendente, hasta hacer del delito, medio de vida. Sus deli- tos predilectos son contra la propiedad. El “delincuente ocasional”, posee ciertas anormalidades con- génitas, pero, el delito se debe a una intensa influencia de circuns- tancias ambientales: necesidad familiar o personal, facilidad de cometer el delito, conmocién pablica, etc. Dichas circunstancias ¢jercen una notable influencia, sin las cuales, el individuo, no se hhubiera decidido a cometer el delito. 54 Luis Gostales Torin el grado de peligrosidad o temibilidad del delincuente, mas que la ‘gravedad objetiva del delito. La sancién penal tiene una raz6n emi- nentemente social, porque la sociedad necesita defenderse. Refiriéndose a esto, José Ingenieros, en su Criminologia dice: “La pena antes concebida como venganza social o castigo del culpable, pasa a considerarse como funcién de defensa o de reforma del individvo... la pena pasa a ser indeterminada y proporcional a la temibilidad del delincuente.” Desde el punto de vista individual, el fin de la pena es la ree- ducacién y Ja readaptacién del delincuente hacia la vida social honrada. Pero, la pena es, sobre todo, restauracién intima y moral del delincuente; es decir, restauracién de su personalidad a través del suftimiento. En cuanto a la cantidad de la pena, debe ser proporcionada, dice Ferri:”La pena como tiltima ratio de la defensa social represi- va, no debe proporcionarse sélo y en medida fija a la gravedad objetiva del delito, sino que debe adaptarse también, y en primer término, a la personalidad més o menos peligrosa del delincuente, con la segregacién por tiempo indeterminado...” EI Delincuente, para esta Escuela, es el protagonista de la jus- ticia penal. Con las enseftanzas de las Ciencias Auxiliares del Derecho Penal llegaron a la conclusién que, el delincuente es un hombre mas o menos “anormal”. Segtin la clasificacién de Ferri, existen cinco tipos de delin- cuentes: ‘L= Delincuentes natos, congénitos o instintivos. Luis Costales Torn 56 El “delincuente pasional”, es aquél que comete el delito en un estado emocional o pasional. Es el tipo criminal menos peligroso. Ejemplo, en Ia infidelidad conyugal. Esta clase de delitos se come- ten en forma franca y sincera; el arrepentimiento es frecuente; otra caracteristica es que tienden al suicidio. Sus delitos son comién- mente de sangre. Los PRINCIPIOS FUNDAMENTALES de la Escuela Positiva pueden resumirse asf: 1.» Independizacién de 1a justicia penal del criterio del libre albedrio. 2. La defensa social como raz6n de la justicia punitiva. 3.- Los tres érdenes de factores del delito. 4 Las cinco categorfas de delincuentes, 5.- Los sustitutivos penales, como actuacién de la defensa pre- ventiva-indirecta. 6. El criterio de los motivos determinantes, inclusive, en la interpretaci6n de las leyes vigentes. 7 Las colonias agricolas sustitutivas del aislamiento celular diurno. 8.- La segregacién por tiempo indeterminado, sustitutivo de la dosimetria penal con término fijo. Introdueeién al Dorecho Penal 57 9.- La necesidad de los manicomios criminales. 10,- La oposicién al jurado. 11. Para el cientifico, legislador y Juez, la necesidad de con- siderar el delito, en el delincuente. ACIERTOS DEL PosrrtvisMo 1. Haber desplazado la atencién del jurista y del legislador hacia el estudio del delincuente, completando asi, la labor dog- mética que cumple el Derecho. 2. La lucha por la implantacién de manicomios criminales, colonias agricolas y la intemporalidad de las penas. 3.- La defensa del resarcimiento del dafio causado por el deli- to, como accién piiblica, que tiene los alcances de la persecucién penolégica. 4.= Atac6 el formalismo excesivo de las normas del Derecho, lenandolas de realidad. ERRORES DEL PostrivisMo 1.= La tesis de la anormalidad del infractor olvida que los cri- minales cometen los delitos con un alto grado de conciencia y, va- liéndose de medios sutiles. 2 La aventurada clasificaci6n de los delincuentes; niega al criminal nato su readaptacién y lo conduce a un determinismo incompatible con la realidad humana. 58 nt Costales Terén 3. El Jurado es una conquista democratica, la técnica judicial se complementa asi, para atenuar el dogmatismo, 4.- Los sustitutivos penales, cuya implementacién se considera Conveniente, pero, depende de que exista una nueva sociedad, cimentada en principios del trabajo y sus beneficios, 3.3 LA TERCERA ESCUELA 0 “TERZA SCUOLA” También se [o llama del “Positivismo Critico”, Surgié en Italia, como sistema ecléctico tra de conciliar los principios clisicos y Positivistas, a la vez. El iniciador de esta Escuela fue Camevale, con su estudio: “Una Tercera Escuela de Derecho Penal en Italia”: 2 este autor se sumaron otros como Impallomeni, Alimena, Pu. glia. Impallomeni. Débese a este tratadista la introduccién del con- cepto de voluntariedad, como base de la responsabilidad; Ia pena deja de tener cardcter expiatorio y retributivo, para convertirse en un medio de intimidabilidad, Alimena. Combate la anormalidad del delincuente. Afirma, de acuerdo con el crterio de la Escuela Positivista que, la imputabi- lidad es un fenémeno de conciencia, y de dirigibilidad de la con- ducta humana, Carnevale. Destaca el elemento ético de la enmienda y como tal, de la defensa social, lo que le corresponde al Estado. La Tercera Escuela afirma la autonomia del Derecho Penal frente a la Sociologia Criminal, en oposicién con las ideas de la Introduccién al Derocho Penal Escuela Positivista; acepta los orfgenes naturales de la delincuen- ia, determinado por causas sociales y predisposiciones del delin- fuente, aunque niega Ia existencia del llamado delincuente nato. ‘Acoge la distinci6n de la Escuela Clésica entre delincuentes utables y no imputables, pero sostiene que la Ley Penal debe = también de los inimputables, dictando para el efecto las. correspondientes medidas de seguridad. La Responsabilidad Penal, segiin esta Escuela, se fundamen- tse peligrosiday nega la exstencia dl libre albedo, Destace la jmportancia del estudio aniropogio y sealgico del dein cuente y el deber del Estado de velar por todas los medios, pat conservacién de la sociedad. “ ‘ica Criminal” como una parte Esta Escuela considera a “la Politica 5. del Derecho Penal y la ha definido como el conjunto de medidas de ataque a la delincuencia. Como Escuela trata de poner orden en sus postulados y ao venta ms bien dento del Positivismo, ademds, hace uso de las concepciones de las dos escuelas fundamentales: la Clésica y la Positivista E it iene la formula Emplea el METODO experimental. Mantiene la for extrsjuridica de la imputabilidad, pero también acepta la del “esta- do peligroso”. Considera que el delito es tanto fenémeno natural como un cente juridico, y, que las penas y las respectivas medidas preventi- vas se deben aplicar. Luls Costales Torin tr cotate red Esta Escuela propugna las penas de corta duracién, como con- secueneia de lo cual aparecié la institucién juridica llamada, la “condena condicional”, En resumen los Principios Fundamentales de esta Escuela son: 1. El delito es un fenémeno complejo, particularmente deter- iminaddo por causas sociales; de él se preocupa el Derecho Pena, Gamo acto jurfdico, no obstante ser un fendmeno de tipo natural, Re surge on la vida por causas ex6genas y endégenas, subrayén dose el factor econémico en la produccién del crimen, 2. El libre albedrio no es el fundamento de la punicién y debe Ser reemplazado por la doctrina determinista. Reconoce la imputabilidad de los delincuentes normales. 3. Propugna la reforma social como deber del Estado. La Penalidad es una forma de defensa educativa, aplicada mediante la coaccién sicolégica. Hay sujetos capaces de sentir ese cons- trehimiento, estos son los “dirigibles”, Pero, existen también, los “incorregibles”, ellos son los peligrosos 4 Proclama la necesidad de utilizar un método juridico para indagar el contenido del Derecho Positivo, mientras que en el na, bajo criminolégico sea indispensable el método experimental, Critica a La Tercera Escueta: 1~ Los principios en los cuales se fundamenta esta Escuela, Som Intermedios entre los Clsicos y los Positivistas, Alga critica 1 Iniyoduecién al Derecho Penal 6 aie jeron encontrar ta ima respecto de esta Escuela, que no supi a racionciléctica entre la metafisica y los imperativos sic Peiales del hombre, y le restaron posbilidad a la enmienda que sociales puede tener el delincuente. 2.- No rechazaron la hipétesis del “hombre delincuente”, a quien Ilamaron “delincuente incorregible 0 de naturaleza”. Segtin Carlos Pérez, el eclecticismo es cobardia cientifica, las gi ismo es contradicciones no se resuelven uniendo lo que mutuamente se opone. 3.4 ESCUELA TECNICO-JURIDICO 0 NEOCLASICA Enire los principales exponentes de esta Escuela ee a los autores siguientes: Arturo Roco, Manzini, Massari, B eg, Petrocell, EL.que més se destacé fue este Gime autor, avien expo s0 una critica acerba a la Escuela Clsica y Posiiva; re endo ala primera manifest6 su criterio absoluto e inmutable ia Derecho Penal. Con relacién a Ia Escuela Positiva, expres que reduce el campo del Derecho Penal a un capitulo de la Sociologt Criminal La Doetrina de Rocco se orient6 y sustent6 en el Derecho Penal Positivo, para ello, “técnicamente” elabor6 sus principios fundamentals y los interpret6. Segiin esta Escuela el objeto del Derecho Penal debe ser su estudio objetivo, realizado con especial rigorismo Hei a guiendo un método puramente juridico, con total prescindenci 62 Luis Costales Terén las cuestiones filos6ficas y social6gicas, pues, esta Escuela se ca- racteriza por ser rabiosamente “antifilos6fica”, y asevera que el jurista ha de resolver sus asuntos con técnica propia. El delito debe ser tratado, segin esta Escuela, dentro de una relaci6n pura de Derecho, considerando independientemente a los factores antropol6gicos y sociales. Mantiene la distincién entre delitos imputables ¢ inimputables. La responsabilidad debe basarse en la distincién entre personas normales y anormales, sometiéndolas a las primeras, en razén de sus delitos a la represién penal; y, aplicando en las segundas, las medidas necesarias de cardcter administrativo o policiaco. El tecnicismo juridico afirma la importancia del Derecho Penal, s6lo en cuanto al estudio de la Ley Positiva y al delito como relaci6n juridica, se refiere, Por todo ello, sus adeptos son Hamados: “juristas puros” En sintesis los fundamentos de esta Escuela Penal son: 1.- El delito es un acto tipico, antijuridico y culpable, de donde surgen las tres nociones correspondienté idad, anti y culpabilidad. 2.- La sancién es una consecuencia del delito y se impone porque es un suftimiento creado por el Estado, a fin de precaute- lar el orden social. 3.- La responsabilidad legal es inadmisible para el delincuente, porque le conduce a la responsabilidad objetiva. Introduccién af Derecho Penal 63 4,- Las normas penales tienen que ser claras, directas y su interpretacién sencilla, para que las entienda el mayor niimero de gentes. Critica a LA Escurta Técnico-Juripica El interés que demuestra tener esta corriente, no merece criti cca, puesto que, espera constituirse en una ciencia juridica-forma- lista, de dimensiones universales. Lo que si debe sefialarse es, su marcada tendencia a la abstraccién. 3.5 OTRAS ESCUELAS Que bien se las puede llamar secundarias, por cuanto s6lo tocan algunos aspectos del Derecho Penal. EscunLa CoRRECCIONALISTA DE ROEDER Considera enfermo al delincuente y reclama para él una medi- da correctiva, en lugar de la sancién. Esta Escuela tiene o- rientaci6n sociolégica y dirige su atencién especialmente hacia el delincuente y la pena. El delito —sostiene— es una concepeién artificial, que responde a los intereses perseguidos por el ordenador del Derecho: “No hay delito como tampoco hay Derecho, sino porque los hom- bres lo hacen”, El tratadista espaiiol Pedro Dorado Montero al respecto emite el pensamiento siguiente: “Las cosas, los hombres y sus respectivas conductas ocupan el lugar en que cada constructor mental de un orden las pone, y tienen el aprecio que 6! les atribuye, no otro.” Esta Escuela considera al delincuente como individuo, a quien no le han ensefiado debidamente las nociones convencionales que crea el delito, y que, por ello, demuestra: “ser incapaz para regir racionalmente su conducta.” Por lo que necesita ser sacado del estado de inferioridad en que se halla con relacién a los demés, del grupo en que vive, de los que se Ilaman “honrados”; segin Pedro Dorado Montero, autor del “Derecho Protector de los Criminales”. Los correccionalistas sostienen que el delincuente tiene dere- cho @ la pena, pero ésta debe tener un tratamiento racional, desti- nado a enseftarle aquello que no sabe y es causa de su incapacidad de conducta. La Escueta UNITARIA Sus principales representantes son: Sabatini y Sylvio Longehi, De acuerdo con los principios de esta Escuela, tienden a unificar los conceptos de pena y medida de seguridad, mediante la identi- ficaci6n del tratamiento a los imputables e irresponsables, en fun= ci6n de la defensa social S. Longehi, destaca la diferencia entre pena y medida de seguridad, propugnando para ésta un cédigo independiente. Introduccion a! Derecho Penal EscuELA HUMANISTA Su principal exponente fue Vicente Lanza, quien aplica un principio de tipo correccionalist, con motivacién sicolégica més amplia, Esta corriente es de mucha fuerza ética, pues, en ocasiones llega a confundir la moral con el Derecho. EScurLa SOCIOLOGICA CRIMINAL ALEMANA Representada por Von Liszt. Da especial importancia a los fac- tores ambientales de la delincuencia, también a la predisposicion natural hacia el delito. Considera al delito como producto de las desfavorables relaciones exteriores de su medio y, a factores de ‘orden endégeno, EscurLA FRANCESA DE LYON 0 DEL MEDIO AMBIENTE, Representada por Lacassagne, para quien el delito es produci- do, exclusivamente, por factores ambientales adversos para el agente.

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