a infinita grandeza te orientas y es tu nombre una imagen de luz. Mensajera, tal vez de los Andes, tu barranco se yergue ante el mar, para un cóndor audaz, cuyo vuelo te llamase a progreso inmortal. Avanzada de luz, blanca aurora, Fue tu antiguo, tu heroico fortín; tú quebraste la flecha del indio, humillando su hirsuta cerviz. Avanzada de vida es, ahora, en la patria, tu ingente labor; por la patria, tu impulso es un vuelo; por la patria, tu vida es amor. Coro Entre el mar infinito y la pampa, vas creciendo, animosa ciudad, y en la imagen de luz de tu nombre, se presiente tu gloria mundial.