Jonathan Lynn y Antony Jay
Si, MINISTRO _
I
e }
Ultramar Editores1
GOBIERNO ABIERTO
22 de octubre e
Bueno, quid sea en las primeras horas del viernes 23. Estoy
‘muy excitado, Birmingham East me acaba de llevar nueva
‘mente al parlamento. Y después de afios en la oposicion,
partido acaba de ganar las elecciones generaes y estamos de
‘vuelta en el gobierno,
‘Cuando se anuneié el resultado fui a la festa en case del
alealde Spotteswoode y vien la television a Robert MeKen-
ie que decia: «im Hacker regresa con una mayoria mucho
mas holgada en su distrito electoral. Después de muchos
aflos como ministro en la sombra, es casi seguro que tendrd
lun puesto en el Gabinete del nuevo gobierno.»
Robin Day no parecia tan seguro, sin embargo. Espero
‘que Bob MeKenzie tenga razon,
23 de octubre
Todavia estoy esperando; me péegunto si Robin’ Day sabe
algo que yo ignoro,
He estado sentado junto al teléfono desde el desayuno.
\Ningtin posible ministio de gobierno se aparta a ms de cin:
B
Oe Re a |co metros de efono durante las veinicuatro horas que si-
fen a la desigacion de un nuevo primer minis. St no
fis"olde nade dentro de as ventcatro horas, no sets
smiembro dl Gabinete.
"Annie me ha provisto constantes azas de café durante
toda ln manana’ ewando veya sillon junto al tfono,
esputs dela comida, me pidio que la ayudara a preparer
{es oles de Braselas para le cena si no tenia ota costae
hacer, Le expliqué que no podia poraue estabe esperando la
llamada.
EDs qui? A veees, Annie es realmente alg tots
Soné telefono. Lo cog. Era Frank Weisel, mi assor
police par desi que vei Selo e's Ansa
SWTyor au no viene a viv agu? -pregunt6 amarea-
mente
TA ces simplemente no Ia comprendo. Le expliaut pa-
cientemente que dependa de Franky mi assor plitieo, mis
ue de
“ -iEntonces por qué no te casas con é!? ~pregunté ella~.
s declar manao 9 asssor politico, Lo que fa politics hi
‘ido, no to separ fa espou. "
Ee 'may diel pare Anmi, lo 8 Ser fa mujer de un par-
lamentarig es ingrato, Pero ahora, si Heo @ ser ministo,
lla tend su ecompenst
El telofono sone fodo el di, El alalde Spotteswoode, la
Sunta del Gas, Franky oda clase de personas ines faiae
ron para liiarme
“iPr qué? ~le die a Annie~: {No comprendes que estoy
csperando la lamada?
Ela dij:
“Parece que fueras a entrar en el ministerio.
TgiSespondi-. Pero no sen cual ministeio, y ése es
todo el problema.
‘De pronto Annie grit. No pude creer a mis ofdos.
“ira una bromal rit, y empez6 a arrancarse el pelo
Deciai que debia de estar un poco nerviosa,
“UEMas un poco nerviosa? ~pregunté, Volvié a gritar y se
arrojé al suelo, Pensé en llamar una ambulancia, pero esta-
ba preocupado por la adversa publicidad que podia aectar a
4
Tae =
‘3 carrera en este momento crucial: ESPOSA DE NUEVO
NINIGTROEN CAMA BEPUERCA
“Est un poco nervcn? -pregun de nuevo. Con mi-
PR ayo N i
° No Bi. No, no, no. No ety nevis Slo soy la
esposa de un pole, Nose aos permite tone sentinienos
Soy slo a fel expose don poco,
1 Estoncese pent pr que abn aoa ben aaa
“Estoy buscando un cigarilo, No encuentro ninguno
Prucha ena ej de ou can “ie advert watando
de mantener aes
"Bet vata
Soman Valium ~
hase cota l Vain, por so buco i in
rill Sim no ees sia comprare pague=?
Levexpliqué'a Annie que smplemeite no me ato a
apararme de teléono. Annie demos su a foal de
cmprension
“Mira, la Primera Minsra quiere que formes pate
del maldito Gabinete, te volved lamar no te encuentra,
Ot puedes lamar
“Annie nunca comprender os aspectos ms dlicades de
tapoliie,
[Hacker tenia muchas dudas acerca de sus perspecivas
porque previamente haba acompanado a fark Welker en
Si eamata contra la nueva Primera intra por a dice
tin del para La cueston eras la Primera Minit ela
Sragane lente para lgnrar a James Hacker os pore ne
ters del untded para se sent obligaded occ
tin buen pueto}
Al nl del dao l rumor de au Bil Ie habian dado
Europa Pobre vil Europa, fill no puede hablar ancl nt
ateman. En realidad, apenas pucde hablar eh inglés A Mar
dine han dado Extevior, como se spetbe a Jack Sud ¢
Fred Ener
Informe «Annie de estos ombramientosy ella me pre
unio sa alguien le habla tocado Cerebro, Supuse gue Gus-
tia decir Educacion. ase ane a24 de octubre
Finalmente soy ministro del Gabinete
'Y hoy be tenido mi primer encuentro con los funciona-
rios de la. Administracion, y debo decir que estoy muy im.
resionado.
Recib cl llamado del Numero Diez mis 0 menos a las 9
de la maftana, después de una noche sin suefo,e inmediata-
mente Frank Weisel y yo cogimos el tren a Londres. Ful en
taxi al Nimero Diez, donde la Primera Ministra me pidié
due me hiciera cargo del Departamento de Asuntos Admi-
istrative. Es un puesto importante. Yo diria que el octavo
6 el noveno en la jerarquia del Gabinete. Por otra parte,
‘Martin me recordé (cuando telefoned para felictarme) que
el DAA es una tumba politica como Interior, que la Pri
‘mera Ministra bien pudiera haberme dado un cargo excesiva-
mente elevado, vensativamente. Estoy decidido a hacerme
fuerte en el DAA y a demostrarie ala Primera Ministra que
rng le ser tan fil deshacerse de mi
‘Yo esperaba ser ministro de Agricultura, porque alo lar.
0 de siete aflos he participado activamente en el trabajo de
‘ministero, tengo muchas ideas a propdsilo pero, por algu-
ha razén inexplicable, la Primera Ministra no ha querido.
{Heros encontrado un memo dé Sir Andrew Donnelly,
Seeretario Permanente de Agricultura, a Sir Arnold Robin-
Son, Secretario del Gabinete, que ruega a Sir Arnold asegu-
vrarse de que Hacker no reciba Agricultura por estar dema-
Sado wfamiliarizado» con dicho ministerio. Los documentos
del Gabinete demuesiran que Sir Arnold logrd transmitir a
la Primera Ministra la conveniencia de no enviar a Hacker
@ Agricultura porgue wha estado pensado acerca de es0 de~
‘masiado tiempo ) quizd se haya acostumbrado por demés a
leiden»)
Un coche oficial. me esperaba cuando sali del Nimero
Diez; me condujo ditectamente al DAA. Me recibié en [a
escalera del frente Bernard Woolley, quien ser mi secreta-
tio privado, con su asistente, Parece una persona bastante
agradable
‘Para ti sorpresa sabia quién era Frank Weisel apenas
16
bajamos del coche, aunque pronuncié su nombre «Wea-
sel’, lo que siempre irta a Frank.
Recorrimos kilometros de eorredores. Cuando Ilegemos
1 mi despacho, Frank habia desaparecido con el Sceretario
Privado Asistente. Bernard me asegur6 que se ocuparian de
Frank-Son may amablesy erviiles.
i despacho es enorme, con un gran escritorio, una
spesa de conferencias con muchas sillas alrededor, varios
Sillones dispuestos en torno de una mesa de café para formar
luna zona de conversacin. Aparte de esto, mis bien carece
de caricter. Bernard se dirigié inmediatamente al arma
to de las bebidas.
(Guero der os PMA) hacen fo mismo. Cuando se nau:
fais Acoma General de is Naciones Unidas, is pitas
{i eropuerto Kennedy estén repleas de acolincas fsa
{una oportunidad i prin ulin Not cio al dee, Bien
toy setado en la cama, en un depatament de pi-
ra ase, ‘escribiendo ete diario y temiendo lo que cldia de
matiana reserva pa
ero empeetnos por el principio, Roy me levé desde la
Ccimara hata King Gross. lege con mucho timpo, Bus
aut el coche corespondient, sub, odené ty bacochos
fara ia mafane, a ren empeeabs 2 sie de a enaipn y
Jo emperaba a guitamme los pantalones cuando of una:
Initio pipet en la puerta
“Qtien ete
“Bernardo a vor de Berard, Era Berard. Le abl la
3puerta, Estaba sin alien y transpiraba. Jams lo habia. visto
fen un estado semejante. Ahora que To pienso, jamds habla
Visto a ningun funcionario en un estado semejante. Pareoen
tan terriblemente serenos y controlados la mayor parte del
tiempo que es un consuelo verlos, a veces, aterrorizados
como el resto de la faza humana y constatar, cuando lo es-
tin, que se limitan a correr dando vueltas como gallinas
decapitadas.
‘Bernard tra varios grandes sobres de papel oscuro.
~Pase, Bernard -dije para tranguilizarlo-. Que ocurre?
Lea tsio, Ministro ~dijo trigicamente mientras me en-
‘regaba uno de los sobres,
"Yo estaba profundamente irsitado, Bernard no cesa de
ceubrirme de papeles. Yo tenia ya sobre mi litera cuatro cajas|
rojas.
Te devolvi el sobre
No, Me niego die
“Debe leerlo dio. ¥ el sobre volvié como si estvi
mos jugando~ Es de absoluta prioridad.
“Usted dice eso de todo ~observé, y segui quitindome fos
pantalones,
‘Bernard me informé que lo que me daba era un ejemplar
el discurso del Presidente Selim para mafana (es decir,
hhoy, Dios mio) que habia enviado la embajada de Buranda.
"No me interesaba. Esos diseursos son siempre lo mismo:
me siento muy feliz de estar aqui, gracias por esta maravi-
Tosa bienvenida, los lazos entre nuestros pases, a experien
ia compartida, una fructifera colaboracion para el futuro, y
‘demas banalidades,
Bernard concordé en que el discurso contenia todas esas
banalidades, pero insisté en que leyera de inmediato las fra-
ses importantes, que él habia subrayado con tinta roa. Lue-
0 dijo que estaba distribuyendo copias en todo el tren. (Por
todo el tren? Pensé que se habia vuelto completamente loco;
pero me explicd que Sir Humphrey y el Ministro del Exte-
For y el Seeretario Permanente del Ministro del Exterior y
nuestro Jefe de Prensa y varios otros dignatarios venian en
tren con nosotros. Yo no To sabia,
“Abr el sobre y vi algo espantoso, Un discurso imposible.
No podiamos permitir que ese diseuso fuera pronunciado.
60
Eniones llegé Sir Humphrey, que wsaba, ncidental-
smente una sorprendente bata de Seda dorada cn un dragon
Chino sao por todas partes. Quzd yo no tenia ta buen as.
ecto, con solo mi camsay mis cals es
“Bus bien, Minto -emper® Sir flumphney, y lag
area que no le gusta deerme que el me fo habia dich,
pero melo habla dicho.
“Vainos a quedareubieros de oprobio dij.
De oprobio imperialsa, Miisto aprego suavement
Le pregunté si eo le diverta, Porque ceramente ono
‘eia nada divertidoen la situacign,
Rept qe em ner Macer alu, Tes secon
complementaras escoceas en peligioy sin hablar eos
efectos sobre el Ulster. pela
ES una eatistofe -susure
Sir Humphrey no parecié preocuparse demasiado por di-
simula la gravedad dela situacion,
“Verdaderamente es ina eatsirofe concord solemne-
‘mente, agregando agonia~ Una tagedia Una. calamidad
Catacismica, apocaliptica, monumental. Se interumpis
‘ar respira yIuego agreg®- Yes obra eateramente suya,
‘Noma exaclamente una ayuda,
“Humphrey le reproché™ Le paean para que me acon-
eee epondé Sir Hump de dar
“Eso ~respondié Sir Humphrey es como tratar de dale
tn buen conejo alcapitén el Tronic despues del choaue
‘contr el eebet,
6-Vamos-ie-, debe haber algo que podamos hacer.
Pedinge tar um Rinna eto,
Hubo ms goipes en la puerta apareci6 Bemard,
FMfinstto, el Ministzo del Extror queria hablar una
palabra con ste,
Eno Marin,
EA el Minitro del Exterior. ~Ahora Sir Humphrey se
rostaba obseauos0.
Sta Martin, El ya sabia quign era. (Has leido et
‘legis de que yo puiera contests, Sir Humphrey inte-
Si Minto te qe pbiro scuba de op
bio, De oprobio eso
ie sty casando de ts bromas epias de Hum,
heey. Le pregunté a Martin por qué Selim Mohammed
{ucré pronunciar agui temejante diseurso. Martin suponia,
{Queer para el consumo iatemo, para demontar alo lecto-
‘Watticanos que era un viorose antcolonaisia
Bernard metig la eabera por la puerta y sui que pre-
pariremos una declaacign de respuesta al diseurso, Me pa-
Fas une buena idea, Entonces anuneio que habia traldo
‘onsigo Bill Pritchard. dela Oficina de Prensa
‘Enel camarote edbamos Humphvey, Martin, Bemard y
yo. Bll Pritchard, como se comprobo, tenia ot tamafo de
iim jugador de rugby de primera eategora.
2 ay sto para un pajarfo? ~pregunt6 alegrement, y